FECHA: 02/05/19 TRABAJO DE: INTRODUCCION A LA CIENCIA POLITICA
INVESTIGACCION DE FRANCIA SIGLO XVI
INSTITUCIONES POLITICAS DE FRANCIA
El Consejo constitucional: Compuesto de nueve miembros, vela, en particular, por la regularidad de las elecciones y a la constitucionalidad de las leyes orgánicas así como de las leyes que se le someten. El Presidente de la República: Se elige al jefe del Estado por cinco años por sufragio universal directo (instauración del quinquenio a la consecuencia del referéndum del 24 de septiembre de 2000).Jacques Chirac, se eligió por cinco años, Presidente del V República, el 7 de mayo de 1995 luego reelegido el 5 de mayo de 2002.El Presidente de la República nombra al Primer Ministro y, sobre propuesta de éste, a los miembros del Gobierno (artículo 8 de la Constitución).Preside al Consejo de los Ministros, promulga las leyes y es el jefe de los ejércitos. Puede disolver la Asamblea Nacional y, en caso de grave crisis, ejercer poderes excepcionales (artículo 16). El Primer Ministro y el Gobierno: Bajo la dirección del Primer Ministro, el Gobierno determina y conducido la política de la Nación. Es responsable en el Parlamento (artículo 20).Se nombró al Primer Ministro dirige al acción del Gobierno y garantiza el aplicación de las leyes (artículo 21). Jean-Pierre Raffarin es el Primer Ministro desde el 6 de mayo de 2002. El Parlamento: Está formado por dos asambleas: • El Senado se elige por nueve años por sufragio universal indirecto y renovable por tercero cada tres años. La última elección tuvo lugar en septiembre de 2001. • La asamblea nacional, cuyos diputados se eligen por sufragio universal directo por cinco años. La última elección tuvo lugar en junio de 2002. Las dos asambleas, además de su función de control del Gobierno, elaboran y votan las leyes. En este aspecto y en caso de desacuerdo, la asamblea nacional resuelve definitivamente. El Senado: El Senado comprende a 321 senadores que se distribuye así a raíz de las elecciones de septiembre de 2001: • Grupo Unión para la Mayoría Presidencial: 95 • Grupo socialista: 83 • Grupo del Unión central: 53 • Grupo de los Republicanos e Independientes: 41 • Grupo de la Reunión democrática y social europea: 20 • Grupo comunista, republicano y ciudadano: 23 • No inscritos: 6 La Asamblea Nacional: La asamblea nacional incluye a 577 diputados, distribuyéndose así a raíz de las elecciones del 09 y 16 de junio de 2002 • Grupo Unión para la Mayoría Presidencial: 356 (+ 9 emparentados) • Grupo socialista: 140 (+ 1 emparentado) • Grupo Unión para la Democracia francesa: 27 (+ 2 emparentados) • Grupo diputadas comunistas y republicanas: 22 • Diputados de ningún grupo: 20 La justicia: Guardiana de la libertad individual (artículo 66 de la Constitución), la autoridad judicial de Francia se organizan según una distinción fundamental entre, de un lado los órganos jurisdiccionales judiciales encargados regular los litigios entre las personas, y de otro los órganos jurisdiccionales administrativos para los litigios entre los ciudadanos y las autoridades públicas. Himno y divisa: Compuesto en Estrasburgo en 1792, el canto de guerra para el ejército del Rin se volvió la Marsellesa y se publicó himno nacional el 14 de julio de 1795. La bandera francesa: En 1789, el Fayette añade el blanco, emblema de los derechos, a la escarapela azul y roja del Guardia Nacional de París. La bandera tricolor es el emblema oficial de la República Francesa. La Defensa Nacional: En 2000, el presupuesto de la Defensa es de 28,66 mil millones de euros, lo que representa un 2,05% del producto interior bruto (PIB) y un 11,29% del presupuesto del estado. Con el fin de construir una defensa europea creíble, el Presidente de la República Francesa, jefe de los ejércitos por la Constitución, anunció en febrero de 1996 importantes reformas en el sector de la defensa: • Profesionalización progresiva de los ejércitos, cuyo personal pasará a 350.000 hombres en 2002, • Adaptación del potencial industrial y tecnológico francés, que deberá en gran medida en adelante se inscribir en un contexto europeo, • Supresión del servicio nacional sustituido por un voluntariado, • La disuasión nuclear, que sigue siendo el elemento fundamental de la estrategia de defensa francesa, en adelante debe revestir una mayor dimensión europea, • Confirmación de Francia en el seno del Cuerpo europeo de Defensa. El personal de las fuerzas armadas francesas es, en 2001, 516.112 personas militares y civiles, distribuyéndose así: • 219.538 en el ejército de tierra • 70.802 en el ejército de aire • 59.450 en la marina • 100.358 en la gendarmería • 65.964 en los servicios comunes (salud, acción social...). GUERRAS DE RELIGION EN FRANCIA SIGLO XVI Las Guerras de religión de Francia fueron una serie de enfrentamientos civiles que se desarrollaron en el Reino de Francia y en el Reino de Navarra durante la segunda mitad del siglo XVI. Se distinguen hasta ocho guerras distintas acontecidas entre 1562 y 1598, si bien la violencia fue constante durante todo el período. El detonante de las Guerras de Religión fueron las disputas religiosas entre católicos y protestantes calvinistas, conocidos como hugonotes, exacerbadas por las disputas entre las casas nobiliarias que abanderaron estas facciones religiosas, en especial los Borbón y los Guisa. Por añadidura, la guerra civil francesa tuvo dimensiones internacionales, implicando en la lucha a la potencia protestante del momento, la Inglaterra de Isabel I, con la máxima defensora del catolicismo y mayor potencia de la época, la España de Felipe II. Debido a ello, el conflicto influyó de manera determinante en el éxito de la rebelión de las Provincias Unidas contra el dominio español y en la expansión de las confesiones protestantes en el Sacro Imperio Romano Germánico, regido por el tío de Felipe II, el emperador Fernando I de Habsburgo. El conflicto acabó con la extinción de la dinastía Valois-Angulema y el ascenso al poder de Enrique IV de Borbón, que tras su conversión al catolicismo promulgó el Edicto de Nantes en 1598, garantizando una cierta tolerancia religiosa hacia los protestantes. Sin embargo, los conflictos entre la Corona y los hugonotes se reavivaron periódicamente, hasta que el nieto de Enrique IV, Luis XIV, revocó tal tolerancia con el Edicto de Fontainebleau de 1685, proscribiendo toda religión excepto la católica, lo que provocó el exilio de más de 200.000 hugonotes. COLONIZACION FRANCESA DE AMERICA SIGLO XVI El Siglo XVI comenzó el 1 de enero de 1501 y terminó el 31 de diciembre de 1600. Es llamado el «Siglo de las Colonias». La colonización francesa de las Américas se inició en el siglo XVI por Samuel de Champlain y prosiguió hasta el siglo XVIII. Francia construyó su primer imperio colonial en América del Norte, denominado Nueva Francia, el cual se extendía desde el golfo de San Lorenzo hasta las Montañas Rocosas al oeste y hasta el golfo de México por el sur. Los franceses colonizaron igualmente las Antillas: Saint-Domingue, Santa Lucía y la Dominica, así como Guadalupe y Martinica. En América del Sur, los franceses intentaron establecer tres colonias, de las cuales solo una sobrevivió hasta nuestros días: la Guayana Francesa- Durante este período de colonización, los franceses fundaron, a partir de 1608 en Quebec, la Nueva Francia en sus «provincias» de Acadia, Canadá (Nueva Francia), el Pays d'en Haut (Grandes Lagos) y de Luisiana, Montréal y Bâton-Rouge, Detroit, Mobile, La Nouvelle-Orléans o Saint-Louis, actualmente ubicados en los Estados Unidos; pero también en otras partes de Norteamérica, incluyendo Puerto Príncipe y Cap Haitien, en Haití; San Luis de Maragnan en Brasil. LA FORMACION DE LA MONARQUIA AUTORITARIA Tras la muerte de Carlos VII en 1461, su hijo Luis XI prosiguió la política de su padre de limitar el poder de la nobleza, por ello se inició una revuelta feudal contra la autoridad real, la Liga del Bien público en 1465. A pesar de no obtener un triunfo sobre los rebeldes, emprendió acciones para recuperar su poder, lo que vino a chocar con las ambiciones expansionistas del duque de Borgoña Carlos el Temerario. A la muerte de este último en la Batalla de Nancy de 1477, Luis se apropió de gran parte de los territorios borgoñones ya que al agotarse la descendencia masculina revertía la apanage al dominio real, la paz llegó con el Tratado de Arrás (1482), que permitió al rey francés permanecer en las tierras borgoñonas ya ocupadas y dejar los señoríos de los Países Bajos al archiduque Felipe de Habsburgo. La Corona llevó a cabo un esfuerzo para someter a la nobleza militar con cargos al servicio del rey, mejorar el sistema de tributación, lo que permitió contar con unos ingresos para crear un ejército permanente con artillería, lo que a su vez redundó en la reducción de la dependencia de las levas feudales, y además, la centralización administrativa requería que los militares apoyaran la labor de los oficiales de la administración y de justicia. A la muerte de Luis XI, le sucedió su hijo Carlos VIII bajo la regencia de su hija Ana de Beaujeu, momento aprovechado por la nobleza para promover otra revuelta dirigida por Luis II de Orleans en contra de la regente, conocida como la Guerra Loca (1485-1488). Su conclusión produjo el matrimonio de Carlos con la duquesa Ana de Bretaña en 1491, los que trajo al ducado en la órbita francesa, y supuso en la práctica, la extinción del último principado territorial autónomo a escapar del control de la Corona francesa REVOLUCION FRANCESA La Revolución francesa fue un conflicto social y político, con diversos periodos de violencia, que convulsionó Francia y, por extensión de sus implicaciones, a otras naciones de Europa que enfrentaban a partidarios y opositores del sistema conocido como el Antiguo Régimen. Se inició con la autoproclamación del Tercer Estado como Asamblea Nacional en 1789 y finalizó con el golpe de estado de Napoleón Bonaparte en 1799. Si bien, después de que la Primera República cayera tras el golpe de Estado de Napoleón Bonaparte, la organización política de Francia durante el siglo XIX osciló entre república, imperio y monarquía constitucional, lo cierto es que la revolución marcó el final definitivo del feudalismo y del absolutismo en ese país,1 y dio a luz a un nuevo régimen donde la burguesía, apoyada en ocasiones por las masas populares, se convirtió en la fuerza política dominante en el país. La revolución socavó las bases del sistema monárquico como tal, más allá de sus estertores, en la medida en que lo derrocó con un discurso e iniciativas capaces de volverlo ilegítimo. Según la historiografía clásica, la Revolución francesa marca el inicio de la Edad Contemporánea al sentar las bases de la democracia moderna, lo que la sitúa en el corazón del siglo XIX. Abrió nuevos horizontes políticos basados en el principio de la soberanía popular, que será el motor de las revoluciones de 1830, de 1848 y de 1871. UNIVERSIDAD CENTRAL DEL ECUADOR NOMBRE: Jonathan Hipo
FECHA: 02/05/19 TRABAJO DE: INTRODUCCION A LA CIENCIA POLITICA
INVESTIGACCION DE FRANCIA SIGLO XVI
INSTITUCIONES POLITICAS DE FRANCIA
El Consejo constitucional: Compuesto de nueve miembros, vela, en particular, por la regularidad de las elecciones y a la constitucionalidad de las leyes orgánicas así como de las leyes que se le someten. El Presidente de la República: Se elige al jefe del Estado por cinco años por sufragio universal directo (instauración del quinquenio a la consecuencia del referéndum del 24 de septiembre de 2000).Jacques Chirac, se eligió por cinco años, Presidente del V República, el 7 de mayo de 1995 luego reelegido el 5 de mayo de 2002.El Presidente de la República nombra al Primer Ministro y, sobre propuesta de éste, a los miembros del Gobierno (artículo 8 de la Constitución).Preside al Consejo de los Ministros, promulga las leyes y es el jefe de los ejércitos. Puede disolver la Asamblea Nacional y, en caso de grave crisis, ejercer poderes excepcionales (artículo 16). El Primer Ministro y el Gobierno: Bajo la dirección del Primer Ministro, el Gobierno determina y conducido la política de la Nación. Es responsable en el Parlamento (artículo 20).Se nombró al Primer Ministro dirige al acción del Gobierno y garantiza el aplicación de las leyes (artículo 21). Jean-Pierre Raffarin es el Primer Ministro desde el 6 de mayo de 2002. El Parlamento: Está formado por dos asambleas: • El Senado se elige por nueve años por sufragio universal indirecto y renovable por tercero cada tres años. La última elección tuvo lugar en septiembre de 2001. • La asamblea nacional, cuyos diputados se eligen por sufragio universal directo por cinco años. La última elección tuvo lugar en junio de 2002. Las dos asambleas, además de su función de control del Gobierno, elaboran y votan las leyes. En este aspecto y en caso de desacuerdo, la asamblea nacional resuelve definitivamente. El Senado: El Senado comprende a 321 senadores que se distribuye así a raíz de las elecciones de septiembre de 2001: • Grupo Unión para la Mayoría Presidencial: 95 • Grupo socialista: 83 • Grupo del Unión central: 53 • Grupo de los Republicanos e Independientes: 41 • Grupo de la Reunión democrática y social europea: 20 • Grupo comunista, republicano y ciudadano: 23 • No inscritos: 6 La Asamblea Nacional: La asamblea nacional incluye a 577 diputados, distribuyéndose así a raíz de las elecciones del 09 y 16 de junio de 2002 • Grupo Unión para la Mayoría Presidencial: 356 (+ 9 emparentados) • Grupo socialista: 140 (+ 1 emparentado) • Grupo Unión para la Democracia francesa: 27 (+ 2 emparentados) • Grupo diputadas comunistas y republicanas: 22 • Diputados de ningún grupo: 20 La justicia: Guardiana de la libertad individual (artículo 66 de la Constitución), la autoridad judicial de Francia se organizan según una distinción fundamental entre, de un lado los órganos jurisdiccionales judiciales encargados regular los litigios entre las personas, y de otro los órganos jurisdiccionales administrativos para los litigios entre los ciudadanos y las autoridades públicas. Himno y divisa: Compuesto en Estrasburgo en 1792, el canto de guerra para el ejército del Rin se volvió la Marsellesa y se publicó himno nacional el 14 de julio de 1795. La bandera francesa: En 1789, el Fayette añade el blanco, emblema de los derechos, a la escarapela azul y roja del Guardia Nacional de París. La bandera tricolor es el emblema oficial de la República Francesa. La Defensa Nacional: En 2000, el presupuesto de la Defensa es de 28,66 mil millones de euros, lo que representa un 2,05% del producto interior bruto (PIB) y un 11,29% del presupuesto del estado. Con el fin de construir una defensa europea creíble, el Presidente de la República Francesa, jefe de los ejércitos por la Constitución, anunció en febrero de 1996 importantes reformas en el sector de la defensa: • Profesionalización progresiva de los ejércitos, cuyo personal pasará a 350.000 hombres en 2002, • Adaptación del potencial industrial y tecnológico francés, que deberá en gran medida en adelante se inscribir en un contexto europeo, • Supresión del servicio nacional sustituido por un voluntariado, • La disuasión nuclear, que sigue siendo el elemento fundamental de la estrategia de defensa francesa, en adelante debe revestir una mayor dimensión europea, • Confirmación de Francia en el seno del Cuerpo europeo de Defensa. El personal de las fuerzas armadas francesas es, en 2001, 516.112 personas militares y civiles, distribuyéndose así: • 219.538 en el ejército de tierra • 70.802 en el ejército de aire • 59.450 en la marina • 100.358 en la gendarmería • 65.964 en los servicios comunes (salud, acción social...). GUERRAS DE RELIGION EN FRANCIA SIGLO XVI Las Guerras de religión de Francia fueron una serie de enfrentamientos civiles que se desarrollaron en el Reino de Francia y en el Reino de Navarra durante la segunda mitad del siglo XVI. Se distinguen hasta ocho guerras distintas acontecidas entre 1562 y 1598, si bien la violencia fue constante durante todo el período. El detonante de las Guerras de Religión fueron las disputas religiosas entre católicos y protestantes calvinistas, conocidos como hugonotes, exacerbadas por las disputas entre las casas nobiliarias que abanderaron estas facciones religiosas, en especial los Borbón y los Guisa. Por añadidura, la guerra civil francesa tuvo dimensiones internacionales, implicando en la lucha a la potencia protestante del momento, la Inglaterra de Isabel I, con la máxima defensora del catolicismo y mayor potencia de la época, la España de Felipe II. Debido a ello, el conflicto influyó de manera determinante en el éxito de la rebelión de las Provincias Unidas contra el dominio español y en la expansión de las confesiones protestantes en el Sacro Imperio Romano Germánico, regido por el tío de Felipe II, el emperador Fernando I de Habsburgo. El conflicto acabó con la extinción de la dinastía Valois-Angulema y el ascenso al poder de Enrique IV de Borbón, que tras su conversión al catolicismo promulgó el Edicto de Nantes en 1598, garantizando una cierta tolerancia religiosa hacia los protestantes. Sin embargo, los conflictos entre la Corona y los hugonotes se reavivaron periódicamente, hasta que el nieto de Enrique IV, Luis XIV, revocó tal tolerancia con el Edicto de Fontainebleau de 1685, proscribiendo toda religión excepto la católica, lo que provocó el exilio de más de 200.000 hugonotes. COLONIZACION FRANCESA DE AMERICA SIGLO XVI El Siglo XVI comenzó el 1 de enero de 1501 y terminó el 31 de diciembre de 1600. Es llamado el «Siglo de las Colonias». La colonización francesa de las Américas se inició en el siglo XVI por Samuel de Champlain y prosiguió hasta el siglo XVIII. Francia construyó su primer imperio colonial en América del Norte, denominado Nueva Francia, el cual se extendía desde el golfo de San Lorenzo hasta las Montañas Rocosas al oeste y hasta el golfo de México por el sur. Los franceses colonizaron igualmente las Antillas: Saint-Domingue, Santa Lucía y la Dominica, así como Guadalupe y Martinica. En América del Sur, los franceses intentaron establecer tres colonias, de las cuales solo una sobrevivió hasta nuestros días: la Guayana Francesa- Durante este período de colonización, los franceses fundaron, a partir de 1608 en Quebec, la Nueva Francia en sus «provincias» de Acadia, Canadá (Nueva Francia), el Pays d'en Haut (Grandes Lagos) y de Luisiana, Montréal y Bâton-Rouge, Detroit, Mobile, La Nouvelle-Orléans o Saint-Louis, actualmente ubicados en los Estados Unidos; pero también en otras partes de Norteamérica, incluyendo Puerto Príncipe y Cap Haitien, en Haití; San Luis de Maragnan en Brasil. LA FORMACION DE LA MONARQUIA AUTORITARIA Tras la muerte de Carlos VII en 1461, su hijo Luis XI prosiguió la política de su padre de limitar el poder de la nobleza, por ello se inició una revuelta feudal contra la autoridad real, la Liga del Bien público en 1465. A pesar de no obtener un triunfo sobre los rebeldes, emprendió acciones para recuperar su poder, lo que vino a chocar con las ambiciones expansionistas del duque de Borgoña Carlos el Temerario. A la muerte de este último en la Batalla de Nancy de 1477, Luis se apropió de gran parte de los territorios borgoñones ya que al agotarse la descendencia masculina revertía la apanage al dominio real, la paz llegó con el Tratado de Arrás (1482), que permitió al rey francés permanecer en las tierras borgoñonas ya ocupadas y dejar los señoríos de los Países Bajos al archiduque Felipe de Habsburgo. La Corona llevó a cabo un esfuerzo para someter a la nobleza militar con cargos al servicio del rey, mejorar el sistema de tributación, lo que permitió contar con unos ingresos para crear un ejército permanente con artillería, lo que a su vez redundó en la reducción de la dependencia de las levas feudales, y además, la centralización administrativa requería que los militares apoyaran la labor de los oficiales de la administración y de justicia. A la muerte de Luis XI, le sucedió su hijo Carlos VIII bajo la regencia de su hija Ana de Beaujeu, momento aprovechado por la nobleza para promover otra revuelta dirigida por Luis II de Orleans en contra de la regente, conocida como la Guerra Loca (1485-1488). Su conclusión produjo el matrimonio de Carlos con la duquesa Ana de Bretaña en 1491, los que trajo al ducado en la órbita francesa, y supuso en la práctica, la extinción del último principado territorial autónomo a escapar del control de la Corona francesa REVOLUCION FRANCESA La Revolución francesa fue un conflicto social y político, con diversos periodos de violencia, que convulsionó Francia y, por extensión de sus implicaciones, a otras naciones de Europa que enfrentaban a partidarios y opositores del sistema conocido como el Antiguo Régimen. Se inició con la autoproclamación del Tercer Estado como Asamblea Nacional en 1789 y finalizó con el golpe de estado de Napoleón Bonaparte en 1799. Si bien, después de que la Primera República cayera tras el golpe de Estado de Napoleón Bonaparte, la organización política de Francia durante el siglo XIX osciló entre república, imperio y monarquía constitucional, lo cierto es que la revolución marcó el final definitivo del feudalismo y del absolutismo en ese país,1 y dio a luz a un nuevo régimen donde la burguesía, apoyada en ocasiones por las masas populares, se convirtió en la fuerza política dominante en el país. La revolución socavó las bases del sistema monárquico como tal, más allá de sus estertores, en la medida en que lo derrocó con un discurso e iniciativas capaces de volverlo ilegítimo. Según la historiografía clásica, la Revolución francesa marca el inicio de la Edad Contemporánea al sentar las bases de la democracia moderna, lo que la sitúa en el corazón del siglo XIX. Abrió nuevos horizontes políticos basados en el principio de la soberanía popular, que será el motor de las revoluciones de 1830, de 1848 y de 1871.