Universidad de Montemorelos

Universidad de Montemorelos

EL SELLO DE DIOS EN LA QUINTA TROMPETA

Investigación
presentada en cumplimiento parcial de los
requisitos de la clase de principios de hermenéutica

Por

Audelino Castellanos Sánchez

Marzo de 2019
 CONTENIDO

INTRODUCCION GENERAL ..................................................................................... 3

Declaración del problema ......................................................................................... 3

Pregunta de investigación ......................................................................................... 3

Propósito.................................................................................................................. 4

Palabras claves ......................................................................................................... 4

MARCO HISTORICO ............................................................................................... 5

Autor........................................................................................................................ 5

Lugar y fecha ............................................................................................................ 6

Destinatarios ............................................................................................................ 7

Contexto geográfico.................................................................................................. 7

Contexto canónico .................................................................................................... 7

EXÉGESIS DE APOCALIPSIS 9:4 ............................................................................... 9

El texto en español ................................................................................................... 9

El texto original ........................................................................................................ 9

Gramática y sintaxis .................................................................................................. 9

Significado del texto ............................................................................................... 12

ASPECTOS TEOLOGICOS DEL TEXTO ..................................................................... 19

PRINCIPIOS HERMENEUTICOS ............................................................................. 20
Hermenéutica bíblica .............................................................................................. 20

Método exegético ................................................................................................... 20

Principios hermenéuticos ........................................................................................ 21

i
CONCLUSIONES ................................................................................................... 23
LISTA DE REFERENCIAS ........................................................................................ 24

ii
 INTRODUCCION GENERAL

Declaración del problema

La sección del capítulo 8:2 al 11:18 del libro del Apocalipsis constituye una

de las secuencias proféticas más difíciles de interpretar. Entre los eruditos

adventistas podemos encontrar siete posturas diferentes en cuanto a la

interpretación, especialmente de la quinta y sexta trompeta; hoy en día la

aplicación tradicional realizada por Urías Smith ya no es apoyado plenamente por

muchos intérpretes.1 En la quinta trompeta se encuentra la referencia al sello de

Dios, es interesante notar que el sello de Dios está relacionado con el sábado y

los eventos finales. Elena White comenta que “la prueba actual acerca del sábado

no podía producirse antes que terminase la mediación de Cristo en el Lugar Santo

y él hubiese pasado al interior del segundo velo. Por lo tanto, los cristianos que

durmieron antes que se abriese la puerta de acceso al santísimo cuando terminó

el clamor de medianoche, el séptimo mes, en 1844, sin haber guardado el

verdadero día de reposo, descansan ahora en esperanza; porque no tuvieron la

luz ni la prueba acerca del sábado que tenemos ahora desde que la puerta se

abrió.”2

Pregunta de investigación

¿Sera que la quinta trompeta inicia después de 1844 d.C.?

1 Derek Morris. «Las siete trompetas», abril de 2013.

2 De White, E. G. (2009). Primeros escritos (Primera edición, pp. 42–43). Buenos Aires:
Asociación Casa Editora Sudamericana.

3
 Propósito

Por medio del presente trabajo se intentará dilucidar el significado de la

orden de no hacer daño a los que tienen el sello de Dios en sus frentes y ubicarlo

en el contexto histórico.

Palabras claves

Dañar, sello de Dios, hierba verde, árbol, frentes

4
 MARCO HISTORICO

Autor

El autor del libro se llama Juan1 y es judío. Su nombre es ʾIoannes, del heb.

Yōhānãn: «Jehová ha hecho gracia»2. Posiblemente Juan sea el discípulo amado

de Jesús de hecho “desde el primer siglo hasta el presente, los cristianos

conservadores han aceptado casi unánimemente que se refiere al apóstol Juan”.3

Elena White enseñó que el escritor del Apocalipsis fue el último de los discípulos;

a saber, Juan, el hijo del Zebedeo. El Apocalipsis fue escrito en el tiempo del

emperador Domiciano, quien convocó a Juan a Roma para ser juzgado por su fe,

lo arrojó dentro de una caldera de aceite hirviendo, y luego lo desterró a la isla de

Patmos, un lugar comúnmente conocido para el destierro de criminales.4

Juan se presenta y es evidente que era conocido en las iglesias, y con su

nombre bastaba para identificarlo y que creyeran en “de todas las cosas que ha

visto” (Apoc. 1:2). El libro Apocalipsis es uno de los cinco libros del NT escritos por

Juan.5 Dionisio fue el primero en dudar de la autoría juanina.6

1 Es mencionado en Apoc. 1:1, 4, 9; 22:8

2 Ventura, S. V. (1985). En Nuevo diccionario biblico ilustrado (p. 622). TERRASSA

(Barcelona): Editorial CLIE.

3
Walvoord, J. F., & Zuck, R. B. (2006). El conocimiento bíblico, un comentario expositivo:
Nuevo Testamento, tomo 4: Hebreos-Apocalipsis (p. 195). Puebla, México: Ediciones Las
Américas, A.C.
4 De White, E. G. (2009). Los hechos de los apóstoles. (A. D. Orrego, Ed.) (Cuarta edición,
p. 470). Buenos Aires: Asociación Casa Editora Sudamericana.
5 Autor del evangelio de según San Juan; 1, 2 y 3 carta de Juan; y el Apocalipsis.
6 Erasmo, Lutero y Zwinglio cuestionaron la autoría juanina porque enseña que Cristo

reinará literalmente por mil años. Ver Walvoord, J. F., & Zuck, R. B. (2006). El conocimiento bíblico,
un comentario expositivo: Nuevo Testamento, tomo 4: Hebreos-Apocalipsis (p. 195). Puebla,

5
 Lugar y fecha

Juan afirma que escribe desde la isla de Patmos1 en el mar Egeo, donde se

encontraba exiliado por causa de las persecuciones que sufría por causa de la

palabra de Dios y por dar testimonio de Jesús. La mayoría de eruditos evangélicos

afirma que Apocalipsis se escribió en el año 95 o 96 d.C. Esto se basa en los

relatos hechos por los padres de la iglesia primitiva en el sentido de que el apóstol

Juan vivió exiliado en la isla de Patmos durante el gobierno de Domiciano, quien

murió en el año 96 d.C. Hasta entonces, se permitió a Juan regresar a Éfeso.2

Mueller por su parte comenta que “Juan escribió el libro a mediados del año 90

d.C. Los sufrimientos de los cristianos que Juan menciona corresponden a la

persecución que se llevó a cabo durante el gobierno del emperador romano

Domiciano.”3 La mayoría de los eruditos comentan que fue durante la época del

emperador Domiciano (81-96 d.C) que Juan escribió el Apocalipsis, a finales del

siglo I.

México: Ediciones Las Américas, A.C; También se ha cuestionado la autoría juanina debido a la
declaración de Papías, padre de la iglesia primitiva, en el sentido de que el apóstol Juan fue
martirizado antes del año 70 d.C. No obstante, la exactitud de la cita de Papías ha sido seriamente
desafiada por las declaraciones de Clemente de Alejandría y Eusebio, quienes afirman que el libro
fue escrito por Juan en Patmos en 95 o 96 d.C. Ver Walvoord, J. F., & Zuck, R. B. (2006). El
conocimiento bíblico, un comentario expositivo: Nuevo Testamento, tomo 4: Hebreos-Apocalipsis
(p. 195). Puebla, México: Ediciones Las Américas, A.C.
1
Ventura, S. V. (1985). En Nuevo diccionario biblico ilustrado (p. 896). TERRASSA
(Barcelona): Editorial CLIE.
2 Walvoord, 195
3
Mueller, W. D. (2002). Apocalipsis. (J. A. Braun, A. J. Panning, & R. J. Koester, Eds.) (p.
2). Milwaukee, WI: Editorial Northwestern.

6
 Destinatarios

El relato bíblico afirma que fue dirigido a las siete iglesias que están en

Asia, eso es, el Asia Proconsular. La razón de Juan para elegir el número siete

(pues había más de siete iglesias en la región indicada, por ejemplo, las de

Magnesia y Tralles), fue sin duda porque siete es el número sagrado que expresa

totalidad y universalidad: de modo que está implícito que Juan, por medio de las

siete iglesias, se dirige en el Espíritu, a la Iglesia de todos los lugares y edades.1

Contexto geográfico

Patmos era la Isla a la que fue desterrado el apóstol Juan a causa de la

palabra de Dios y del testimonio dado de Jesucristo. En Patmos el Señor dio a

Juan las visiones relatadas en Apocalipsis (Ap. 1:9). Esta pequeña isla del mar de

Archipel forma parte de las Esporadas, y en la actualidad recibe el nombre de

Patino. Se encuentra a lo largo de la costa suroccidental de Asia Menor, a unos 48

km. al sur de Samos, y mide poco más de 16 km. de largo por 9 de ancho. La

mayor parte de la isla está sin cultivo.2 Fue en ese lugar donde Juan, el discípulo

amado, tuvo la revelación de Jesucristo y escribió el Apocalipsis.

Contexto canónico

Apocalipsis 9:4 forma parte de las siete trompetas que se dividen en tres

capítulos. El 8 describe cuatro, el 9 dos y la séptima trompeta no aparece sino

hasta 11:15. Del mismo modo que el séptimo sello aparece después de un

1 Jamieson, R., Fausset, A. R., & Brown, D. (2002). Comentario exegético y explicativo de

la Biblia - tomo 2: El Nuevo Testamento (p. 760). El Paso, TX: Casa Bautista de Publicaciones.
2 Ventura, 896.

7
interludio (7:1–17), así la séptima trompeta está separada de las trompetas

anteriores por un intermedio que toca los temas del ángel con el pequeño rollo y

los dos testigos (10:1–11:13). Las últimas tres trompetas tienen una estructura

literaria interesante con el prólogo de los 3 ay (8:13), y un epilogo (11:18). Pero

primariamente en su división más básica, el versículo es parte de la sección del

capítulo 9 que comprende del versículo 1 al 12, donde encontramos la descripción

del primer ay, es decir, el límite natural del texto. Para fines de esta investigación,

los límites del pasaje serán los versículos 1–14 del capítulo 9, siendo el versículo 4

la perícopa estudiada.

8
 EXÉGESIS DE APOCALIPSIS 9:4

El texto en español

“Y se les mandó que no dañasen a la hierba de la tierra, ni a cosa verde

alguna, ni a ningún árbol, sino solamente a los hombres que no tuviesen el sello

de Dios en sus frentes.”1

El texto original

“καὶ ἐρρέθη αὐταῖς ἵνα μὴ ἀδικήσουσιν τὸν χόρτον τῆς γῆς οὐδὲ πᾶν χλωρὸν

οὐδὲ πᾶν δένδρον, εἰ μὴ τοὺς ἀνθρώπους οἵτινες οὐκ ἔχουσι τὴν σφραγῖδα τοῦ

θεοῦ ἐπὶ τῶν μετώπων.”2

Gramática y sintaxis

Aquí se analizará la gramática, sintaxis del texto, para intentar acercarse al

significado original del mismo. Para poder comprender de una manera correcta el

pasaje, se debe analizar el texto incluyendo una investigación de su estructura, de

su forma literaria, de las palabras individuales, de expresiones, frases y de

unidades mayores. A continuación, se expondrá el análisis gramatical.

καὶ es una conjunción lógico conectivo y signific2a: y, también, y por cierto.3

1
́ licas Unidas.
Reina Valera Revisada (1960). (1998). (Ap 9.4). Miami: Sociedades Bıb
2 Holmes, M. W. (Ed.). (2014). El aparato crítico del Nuevo Testamento griego: Edición SBL

(Ap 9.4). Bellingham, WA: Lexham Press; Society of Biblical Literature.

3Ortiz, P., V. (2000). Concordancia manual y diccionario Griego-Espanol del Nuevo
Testamento. Miami: Sociedades Bı́blicas Unidas.

9
 ἐρρέθη es un aoristo pasivo indicativo de la tercera persona del singular de

εἶπον y significa: se les dijo, se les mandó, fue mandado, fue dicho.

αὐταῖς es un pronombre personal dativo femenino de la tercera persona del

plural y significa: a ellas.

ἵνα es una conjunción, sustantival contenido y significa: para que, a fin de

que; de modo que; que.

μὴ adverbio negativo y significa: no

ἀδικήσουσιν1 (“ἀδικήσωσιν”2) es un futuro activo indicativo de la tercera

persona del plural de ἀδικέω y significa: actuarán mal, injuriarán, agraviarán,

dañarán. ἵνα μὴ ἀδικτήσουσιν—esta construcción sirve como sujeto del verbo

ἐρρέθη (fue διχηο [a ellos que]). Después de la conjunción ἱνα se utiliza el futuro

de indicativo (véase v. 5 donde ἵνα va seguido de futuro en pasiva

βασανισθήσονται), que varía poco respecto al subjuntivo aoristo. Esta hace que

escriba οὑδέ (dos veces) en lugar de μηδε, que exige el subjuntivo.3

τὸν articulo acusativo de la tercera persona singular y significa: el, a el.

1 Para los evangelios, el libro de Hechos, las cartas paulinas y Apocalipsis, el texto de la

NA28 continúa siendo el mismo que el de las ediciones NA26–27–28/UBS3–4 (todas estas
ediciones tienen el mismo texto griego impreso). En el caso de las cartas católicas, el texto de la
NA28 es idéntico al de la segunda edición de Editio Critica Maior. Ver Holmes, M. W. (Ed.). (2014).
El aparato crítico del Nuevo Testamento griego: Edición SBL. Bellingham, WA: Lexham Press;
Society of Biblical Literature. Ver Brooke Foss Westcott y Fenton John Anthony Hort, The New
Testament in the Original Greek, vol. 1: Text; vol. 2: Introduction [y] Appendix (Cambridge:
Macmillan, 1881).
2 Samuel Prideaux Tregelles, The Greek New Testament, Edited from Ancient Authorities,
with their Various Readings in Full, and the Latin Version of Jerome (London: Bagster; Stewart,
1857–1879). Ver The New Testament in the Original Greek: Byzantine Textform 2005, compilado y
organizado por Maurice A. Robinson y William G. Pierpont (Southborough, Mass.: Chilton, 2005).
3Kistemaker, S. J. (2004). Comentario al Nuevo Testamento: Apocalipsis (p. 319). Grand
Rapids, MI: Libros Desafío.

10
 χόρτον es un sustantivo acusativo singular masculino y significa: hierba,

pasto, heno.

τῆς es un artículo genitivo singular femenino y significa: la, de la.

γῆς es un sustantivo acusativo singular femenino y significa: tierra.

οὐδὲ es una particula negativa conjunción lógico disyuntivo y significa: ni,

tampoco.

πᾶν es un adjetivo acusativo singular neutro y significa: todos.

χλωρὸν es un sustantivo acusativo singular neutro y significa: verde, verde

claro, amarillo.

δένδρον es un sustantivo acusativo singular neutro y significa: árbol.

εἰ es una conjunción adverbial condicional y significa: si, si es que.

τοὺς es un artículo acusativo plural masculino y significa: los, a los.

ἀνθρώπους es un sustantivo acusativo plural masculino y significa:

hombres, seres humanos.

οἵτινες es un pronombre relativo nominativo plural masculino y significa:

quien, quienes

οὐκ adverbio negativo y significa: no

ἔχουσι es un presente activo indicativo de la tercera del plural de ἔχω y

significa: tienen.

τὴν es un artículo acusativo singular femenino y significa: la, a la.

σφραγῖδα sustantivo acusativo singular femenino y significa: sello, marca,

inscripción.

τοῦ es un articulo genitivo singular masculino y significa: de, del

θεοῦ es un sustantivo genitivo singular masculino y significa: Dios

11
 ἐπὶ es una preposición y significa: sobre, en, hacia, a, encima.

τῶν es un artículo genitivo plural neutro y significa: la, en la.

μετώπων es un sustantivo genitivo plural neutro y significa: frente.

Lo expresado arriba en el análisis gramatical de esta sección explica la

conformidad con las traducciones tradicionales al castellano, pues no se

encuentran problemas en la construcción de las oraciones ni ideas difíciles de

seguir.

Significado del texto

Y se les mando. A las langostas se les manda que no dañen a la

vegetación de la tierra sino solo1 a los que no tienen el sello de Dios. Juan no

brinda información en cuanto a quien pronuncia el mandato de negación. El uso de

la voz pasiva cuando se habla de la excarcelación de las langostas (v. 1, lit. «le fue

dada») del poder que se les concede (v. 3, lit «fue dado el poder»), y de los límites

que se les imponen (v. 5, lit. «no les fue permitido dar muerte») sugiere que esta

plaga, aunque diabólica, está bajo el control soberano.2 En Apoc. 6:11 las almas

que clamaban se les manda que descansen todavía un poco de tiempo, otra vez

vemos la forma pasiva lo cual sugiere la acción de alguien más.

Que no dañasen. Las langostas destruyen la vegetación, no a las

personas; pero a estas langostas se les ordena que no hagan daño a ninguna

1 Kilpatrick menciona el 2053 pc vg arm TR entre los que añaden μόνους tras ἀνθρώπους
2 Mounce, Robert H. (2007). Comentario al libro de Apocalipsis (p. 266). Barcelona:
Editorial Clie.

12
cosa verde.1 Si no que se les dio el poder de atormentar a los hombres por cinco

meses (cf. Ap. 9:5, 10). En la plaga egipcia (así como también en la profecía de

Joel) los campos y los árboles quedaron arrasados por las langostas (Ex 10:15;

Joel 2:3). Las langostas de la visión de Juan tienen una misión diferente.2 Aquí

podemos observar como el pueblo de Dios no puede ser dañado, ya que son

protegidos por Dios (1 Jn. 5:18; Jn.16:33; 2 Ti. 2:19).3 Es interesante observar que

la preocupación para la protección de los dos testigos (Apoc. 11:5) aparece antes

que den su testimonio (v. 7) y que la bestia que sube del abismo les haga guerra.

Pero es más interesante si consideramos que las langostas que tienen por rey al

ángel de abismo (Apoc. 9.11; ver 11:7; 17:8), también se les restringió su poder.

Sin duda, Dios protegerá a su pueblo de cualquier daño hasta que éste haya

finalizado su testimonio.

Los árboles y hierba de la tierra. En el Antiguo Testamento, los símbolos

de los árboles (Sal. 1:3; 52.:8; 92.:12-14; Isa. 61:3; Jer. 11:15-17; 17:7-8; Eze.

20:46-48) y la hierba verde (Sal. 72.:16; Isa. 40:6-8; 44:2.-4) se usan

figuradamente con referencia a Israel como el pueblo del pacto de Dios. Los

escritores del Nuevo Testamento confirman la asociación. Por ejemplo, Juan el

Bautista comparó a los líderes apóstatas del pueblo judío a árboles que no daban

buenos frutos (Mat. 3:10). Del mismo modo, Jesús usó el simbolismo de los

1 Nichol, F. D., & Peverini, T. N. (Eds.). (1996). Filipenses a Apocalipsis. (N. W. de

Vyhmeister & V. E. A. Matta, Trads.) (Vol. 7, p. 807). Buenos Aires: Asociación Casa Editora
Sudamericana.
2 Mounse, 266.
3 Alvarenga, Willie A. (2015). Comentario del libro de Apocalipsis: Una explicación verso
por verso del texto del libro de Apocalipsis (p. 142). Bedford: Alvarenga Publications.

13
árboles al referirse al pueblo judío como un árbol verde (Luc. 2.3:2.8-31) y como

una higuera que no da fruto (Luc. 13:6-9; cf. Mat. 7:17-19; 2.1:18-19).1

Que no tuviesen. Aunque no dañaban la vegetación natural ni los árboles,

sí se les permitió atacar a los hombres que no tuviesen el sello de Dios en sus

frentes.2 Por lo tanto el tiempo en que se da la orden para no dañar a los que no

tienen el sello de Dios en sus frentes debe ocurrir cuando haya personas que

tienen el sello de Dios.

El sello de Dios. Las langostas dañan a los incrédulos; pero se les prohíbe

hacer daño a los ciento cuarenta y cuatro mil (7:3–4).3 El sellamiento de

Apocalipsis 7 es claramente el cierre del final del sellamiento sobre la tierra,4

después de lo cual la predicación del evangelio se habrá completado y la gracia ya

no estará disponible.5 En el Apocalipsis el sellamiento de los 144.000 “en sus

frentes” (7:1–4) significa su aprobación por el cielo (14:1, 2).6 La gracia distintiva y

todopoderosa de Dios resguardará a su pueblo de la apostasía total y final.7 De

hecho Elena White comenta que “en este tiempo de sellamiento Satanás está

1 Stefanovic, Ranko (2013). La Revelación de Jesucristo, comentarios sobre el libro de

Juan (P. 294). Michigan: Andrew University Press. Además ver Job. 5:25; Amos 7:2.
2 Walvoord, J. F., & Zuck, R. B. (2006). El conocimiento bíblico, un comentario expositivo:

Nuevo Testamento, tomo 4: Hebreos-Apocalipsis (p. 226). Puebla, México: Ediciones Las
Américas, A.C.
3
Hernández, E. A., Lockman Foundation. (2003). Biblia de estudio: LBLA. (Ap 9.4). La
Habra, CA: Editorial Funacion, Casa Editoral para La Fundacion Biblica Lockman.
4 Paulien, "Seals and Trumpets", 198.
5 Stefanovic, 285.
6Horn, S. H. (1995). En A. D. Orrego (Ed.), R. A. Itin & G. Clouzet (Trads.), Diccionario
Bíblico Adventista (Primera Edición, p. 1073). Buenos Aires: Asociación Casa Editora
Sudamericana.
7Henry, M. (2003). Comentario de la Biblia Matthew Henry en un tomo (pp. 1050–1051).
Miami: Editorial Unilit.

14
valiéndose de todo artificio para desviar de la verdad presente el pensamiento del

pueblo de Dios y para hacerlo vacilar. Vi una cubierta que Dios extendía sobre su

pueblo para protegerlo en tiempo de aflicción; y toda alma que se hubiese decidido

por la verdad y fuese de corazón puro había de ser cobijada por la cubierta del

Todopoderoso.1 Algunos han sugerido que como la observancia del sábado será

finalmente la señal externa de la obra interior de sellamiento realizada por el

Espíritu Santo (ver com. Eze. 9:4), los atacados aquí por las “langostas” son los

que no observan el verdadero día de reposo, el sábado.2 El texto es una

referencia intertextual de Ez. 9.4, El sellamiento se efectuó en visión, y es posible

que la manera específica de hacerse no tenga importancia. La antigua

interpretación que consideraba que esa marca era una prefiguración de la cruz es

mera fantasía. En la visión, la señal era sin duda literal, pero su significado atañía

plenamente al carácter. El mensajero no debía prestar atención a la alcurnia o

posición, sino sólo debía poner la señal a quienes gimieran por la pecaminosidad

que prevalecía y se mantuvieran alejados de ella.

La visión se refería en primer lugar a la destrucción de Jerusalén ordenada

por Nabucodonosor. Tendrá otro cumplimiento cuando transcurran las escenas

finales de la historia de este mundo. Es muy similar a las visiones de Apoc. 7; 15;

16. En el Apocalipsis la señal distintiva es el “sello de Dios”, y al igual que la señal

de Ezequiel, es colocada sobre quienes están en condiciones de recibirlo. Dios

1 De White, E. G. (2009). Primeros escritos (Primera edición, p. 43). Buenos Aires:

Asociación Casa Editora Sudamericana.
2Nichol, F. D., & Peverini, T. N. (Eds.). (1996). Filipenses a Apocalipsis. (N. W. de
Vyhmeister & V. E. A. Matta, Trads.) (Vol. 7, p. 807). Buenos Aires: Asociación Casa Editora
Sudamericana.

15
coloca su señal de aprobación sobre todos los que, por medio del poder del

Espíritu Santo, reflejan la imagen de Jesús (ver PVGM 51). Se ha comparado esta

señal con la marca que indica que Dios es dueño, como si Dios inscribiera sobre

los que están en condiciones de ser ciudadanos de su reino, su nombre y

dirección: “Dios, Nueva Jerusalén” (TM 446).

La señal externa y visible de que la obra de gracia se ha completado en el

alma será la observancia del sábado bíblico (3JT 232). Esto transcurrirá de la

siguiente manera: El día sábado siempre ha sido el día designado por Dios para el

descanso del hombre. Establecido en la creación (Gén. 2:1–3), debía ser una

obligación perpetua. La orden de observarlo fue colocada en el corazón de la ley

moral (Exo. 20:8–11). Ni Cristo ni sus apóstoles abrogaron el sábado. La gran

apostasía que siguió a la muerte de los apóstoles pretendió ponerlo de lado para

colocar en su lugar otro día de reposo, el primero de la semana. Pero la Palabra

de Dios predice que una gran obra de reforma con respecto al sábado precederá a

la segunda venida de Cristo (Isa. 56:1–2, 6–8; 58:12–13; Apoc. 14:6–12; ver CS

504–513). También predice que al mismo tiempo Satanás, el gran caudillo

apóstata, ensalzará su propio fraudulento sistema de religión que ostenta un falso

día de reposo, el día domingo, como día de culto (Apoc. 13; 14:9–12; cf. Dan.

7:25). Logrará éxito hasta el punto de que podrá unir a todo el mundo en un gran

movimiento a favor del domingo (Apoc. 13:8; 14:8; 16:14; 18:3; ver CS cap. 36–

41). Como resultado de sus esfuerzos, el mundo se dividirá en dos sectores, los

que son fieles a Dios y guardan su sábado, y los que se unen al falso movimiento

religioso universal y guardan el falso día de reposo. De este modo la observancia

del sábado se convertirá en una señal distintiva del verdadero adorador de Dios.
16
 Sin embargo, no es la observancia visible del sábado lo que constituye la

señal. El sello representa la aprobación divina que deberán recibir todos los que

han de ser ciudadanos del reino de gloria que está a punto de ser establecido.

Sólo aquellos cuyas almas hayan sido purificadas se aferrarán al sábado en aquel

terrible tiempo de angustia que precederá al retorno de Jesús. Los guardadores

del sábado que no sean sinceros abandonarán las filas del pueblo de Dios y se

unirán con Satanás en contra del cielo, en la batalla contra el Rey del universo

(TM 473). Así sólo los verdaderamente leales quedarán como únicos defensores

del santo sábado de Dios. A ellos se les unirán otros de los verdaderos hijos de

Dios, los cuales hasta entonces habrán estado esparcidos en las diferentes

iglesias cristianas. Ellos, ante la creciente luz del fuerte clamor, se decidirán por la

observancia del sábado y, pese a cualquier oposición, se unirán al pueblo

remanente de Dios (CS 669–670).

Se coloca la señal sobre todos los “que gimen y que claman a causa de

todas las abominaciones que se hacen”. Quienes pertenecen a este grupo se

caracterizan por la profunda angustia que sienten debido a las divisiones que

existen entre los que afirman que son seguidores de Dios. Se lamentan y afligen

sus almas porque en la iglesia hay todo tipo de avaricia, egoísmo y engaños. Se

sienten incapaces de detener la marea de iniquidad y se llenan de dolor y de

alarma (2JT 65–66). Los que pertenecen al otro sector procuran encubrir los males

que existen y disculpar la gran impiedad que prevalece por doquiera. Afirman que

Dios es demasiado bueno y demasiado misericordioso como para castigar el mal.

Dicen que el Señor no hará ni bien, ni mal. Aseveran que Dios no espera que el

hombre alcance una norma tan elevada, y que se satisfará con que el hombre
17
tenga un mero deseo de hacer el bien. Pero el Señor no puede modificar su

norma. Hacer eso equivaldría a cambiarse él mismo. Al contrario, proporciona

gracia para el logro de toda virtud y la corrección de todo defecto. Pide de todo

cristiano que aproveche al máximo lo que Dios le concede. No exige nada menos

que la perfección. Si no está en perfecta relación con Cristo, el alma no podrá

recibir el sello de Dios cuando concluya el tiempo de gracia.1 Y que todo el mundo,

menos los que estén protegidos por el poder de Dios a través de la fe en su

Palabra, serán incorporados a las filas de los engañados. La gente se está

dejando adormecer en una seguridad fatal, y sólo despertará cuando la ira de Dios

se derrame sobre la Tierra.2

En las frentes. En el AT encontramos que la obediencia y conocimiento de

los mandamientos de Dios es como una señal en la mano y en la frente (Dt. 6:8).

Una interpretación simbólica se sostiene por Dt. 11:8–20 y Ex 13:9, 16; estos

mandamientos quieren decir que hay que pensar siempre en la Palabra de Dios y

obrar según ella.3

1 Nichol, F. D., & Rasi, H. M. (Eds.). (1995). Isaías a Malaquías. (V. E. A. Matta & N. W. de

Vyhmeister, Trads.) (Vol. 4, pp. 635–636). Buenos Aires: Asociación Casa Editora Sudamericana.
2 De White, E. G. (1993). El conflicto de los siglos. (A. D. Orrego, Ed.) (Cuarta edición, p.

618). Buenos Aires: Asociación Casa Editora Sudamericana.

3
Hernández, E. A., Lockman Foundation. (2003). Biblia de estudio: LBLA. (Dt 6.8). La
Habra, CA: Editorial Funacion, Casa Editoral para La Fundacion Biblica Lockman.

18
 ASPECTOS TEOLOGICOS DEL TEXTO

Evidentemente la quinta trompeta tiene relación con un evento que se le

denomina “sellamiento”, el sellamiento al pueblo de Dios y eso es evidente por los

textos, el contexto del Apocalipsis, la gramática. Podemos encontrar su relación

directa con el sábado y podemos ver que el día de reposo bíblico se constituye

una prueba para el pueblo de Dios en los últimos días. De acuerdo a Apocalipsis

al concluir el sellamiento también se acaba la gracia, por lo tanto estamos viviendo

antes del fin de la gracia, y para esa época es la orden de no dañar a “la hierba

verde” esa época es la quinta trompeta.

19
 PRINCIPIOS HERMENEUTICOS

Hermenéutica bíblica

La metodología que fue usada en este trabajo de investigación el método

histórico-bíblico se denomina a veces el enfoque bíblico gramatical de las

Escrituras, método histórico-gramatical o método gramatical-histórico. No hay que

confundirlo con el método histórico-crítico predominante, con su crítica de fuentes,

su crítica de formas, su crítica redaccional, su historia de las tradiciones y su

crítica socio-científica. A continuación, se presentan las premisas fundamentales

del mismo y los pasos exegéticos para la interpretación del texto.

Método exegético

[Del gr. exegesis, narrativa, traducción, interpretación]. En teología se

refiere al proceso de interpretar un texto.1 Es la práctica de la hermenéutica

sagrada que procura la verdadera interpretación de los textos que forman, en este

caso, el Antiguo y el Nuevo Testamento. La exégesis sagrada se vale de los

idiomas originales: hebreo, arameo y griego; de la comparación de los diversos

textos bíblicos y de las técnicas aplicadas en la lingüística y la filología.2

1 Pablo Alberto Deiros, Diccionario hispanaoamericano de la misión (Argentina: COMIBAM

Internacional, 1997).
2 Claudionor Corrêa de Andrade, Diccionario teológico: Con un suplemento biográfico de
los grandes teólogos y pensadores (Miami: Patmos, 2002), 153.

20
 Principios hermenéuticos

Premisas fundamentales del método histórico-bíblico.1

La Biblia sola es el criterio final y más elevado de la verdad (lsa. 8: 20; 66:

2). Deben rechazarse los principios ajenos de interpretación impuestos sobre la

Biblia desde el exterior que no respeten el testimonio que da de sí misma. Los

principios derivados de la filosofía, la psicología y la sociología no pueden

controlar la interpretación del texto. La tradición y la ciencia no determinan las

cuestiones de la fe, aunque tengan su lugar legítimo en la vida humana.

Una segunda premisa tiene que ver con la totalidad de las Escrituras. La

Biblia es la Palabra escrita de Dios en su conjunto, no sencillamente aquí y allí (2

Tim. 3: 16). El mensaje de los profetas y de los apóstoles es la Palabra

proposicional de Dios (2 Crón. 36: 15-16; Rom. 3: 2; 1 Tes. 2: 13). Los aspectos

humano y divino de las Escrituras están vinculados de forma inseparable (2 Ped.

1:19-21).

La analogía o armonía de las Escrituras se ve en tres puntos: (a) Las

Escrituras son su propio expositor (Luc. 24: 27). Es preciso reunir y estudiar todos

los textos que abordan un asunto para presentar correctamente la doctrina bíblica.

Esto no es usar "textos prueba", sistema en el que los textos se conectan entre sí

sin atender a su contexto. (b) Hay un acuerdo o unidad fundamental dentro de las

Escrituras (Juan 10: 35). (c) En las Escrituras también hay claridad. Esta claridad

1 George W. Reid y SC. Cantábriga, Entender las sagradas escríturas : el enfoque

Adventista (Doral, Fla.; 260 Benito Juárez, México, D.F.: Asociación Publicadora Interamericana ;
GEMA Editores, 2009), 137–38.

21
no solo significa que la Biblia puede ser entendida, sino también que los textos

claros arrojan luz sobre los textos difíciles (1 Ped. 1: 10-12).

Las cosas espirituales deben discernirse espiritualmente (1 Cor. 2: 11, 14):

(a) Quien desee entender las Escrituras precisa la iluminación del Espíritu Santo

(Juan 14: 26). No obstante, el Espíritu Santo no obra en contra de las Escrituras

que ha inspirado. (b) Por otra parte, quien interprete las Escrituras ha de tener fe y

una actitud espiritual (2 Crón. 20: 20).

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 CONCLUSIONES

Todos los argumentos exegéticos, históricos y gramaticales apuntan de que

la señal externa es el sábado colocado conscientemente en la mente de los hijos

de Dios, y se ve reflejado en la observancia genuina del día sábado. Por lo tanto,

la orden tiene que ser dada en un momento de la historia cuando el sábado sea

una prueba. Elena de White es clara al declarar que ese tiempo ocurre después de

1844. El estudio necesita más profundidad y analizar texto por texto, pero sin lugar

a dudas la orden tiene relación directa con Apoc. 7, el sellamiento y los 144000.

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