BOLSA DE VALORES

El mundo vive en una época de confusión, promesas incumplidas y falta

de horizontes que desembocan en desencantos y decepciones. Es el
momento de recuperar todas aquellas cosas que caracterizan al ser
humano y lo hacen distinto a todos los demás seres de la creación. El
diseño de Dios consistió en dotar a su obra maestra “El hombre” de
elementos sorprendentes que harían de este planeta un verdadero
paraíso. Hoy en día, no solo son suficientes las capacidades y
habilidades, ni los conocimientos adquiridos a través de todos los
medios educativos, HACE FALTA ALGO MAS. El mundo necesita
“PERSONAS” hombres y mujeres capaces de dar lo mejor de sí para
brindar a parte de su rendimiento laboral un aporte mucho más
profundo, basado en principios y valores firmes que sobresalgan y hagan
de la vida algo realmente valiosa y hermosa. Dicen que todo ser humano
tiene un precio, pero solo Dios conoce su real valor, que es incalculable
ante la perspectiva humana. Son todas aquellas cosas de las cuales
Dios capacitó al ser humano para llevarlo a la extensión de su
hermosura y grandeza, las que lo hacen tan valioso. Veamos algunos
que valen la pena cultivar:

1. SOLIDARIDAD (Responsabilidad, generosidad,

desprendimiento, cooperación, participación)
Procede de la voz latina “soldus” que designaba una “moneda de oro
sólida”, consolidada no variable. Alude una realidad firme, solidez,
potente, valiosa, lograda mediante el ensamble (soldadura) de seres
diversos. Un edificio inmenso, si está bien estructurado no pesa se hace
acogedor, Una sinfonía muy amplia, si está bien configurada tiene un
dinamismo interno que la hace mantenerse viva en todo el tiempo y
capaz de suscitar entusiasmo, no tedio.

La solidaridad solo es posible entre personas que en su conciencia “en

su interior” sienten la apelación de algo que vale la pena y apuestan por
ello, es posible entre personas concientes y se unen por si mismas a
algo valioso. (libro de Nehemías 2:17-18 cuando el pueblo se unió a
reconstruir el templo) Cuando se es solidario se crea un campo de juego
común, un ámbito de libertad, de intercambio, comprensión, sentido,
entusiasmo. “soy hombre: nada humano me es ajeno” Terencio. La
solidaridad tiene que ver con dos aspectos muy importantes:

 Trabajo en equipo, no hay triunfo mejor que crear modos valiosos

de unidad
 Amor desinteresado

Aspectos que evitan la solidaridad en los seres humanos:

 El egoísmo: Inspira la actitud ambiciosa, y la ambición nos paraliza

en torno a nuestros propios intereses, nos enceguece para la
necesidad de los demás
 Falta de amor por el prójimo
 Las ocupaciones y el tiempo. Lucas 10:25-37

La solidaridad nos hace pensar en dar y en no esperar nada a cambio.

2. AUTENTICIDAD (Aceptación de sí mismo, veracidad,

integridad, autoestima honradez, identidad personal)
Procede de la voz griega “auténticos” (el que tiene autoridad) derivado
de “authentes” (dueño absoluto) Auténtico según la etimología, es pues,
el que tiene las riendas de su ser, posee iniciativa y no nos falla, sino
que es coherente y nos enriquece con su modo de ser estable y sincero.
Para poseer este tipo de firmeza es necesario aceptarnos así mismo con
todo cuanto esto implica. Toda persona tiene una imagen buena o mala
de sí misma y ésta afectará su comportamiento actitudes y
productividad y en última instancia, su éxito en la vida. Es importante
para tener un equilibrio emocional, sentirnos cómodos con nosotros
mismos y disfrutar de una paz interior. Cuando se tiene una autoimagen
adecuada se enfrentan los problemas de la vida y hay dedicación para
resolverlos.

Por el contrario, vivir de las apariencias nos empuja a comportarnos

como no somos, hace que optemos por ponernos un disfraz o muchas
mascaras, cambiándolas de acuerdo a la ocasión o a la persona con
quien nos encontremos, al final solo tendremos cansancio y la sensación
de un gran vacío existencial.
Vivir con honestidad en cambio implica:
 Aceptar y asumir su identidad para expresarla o mejorarla si fuera
necesario
 Ser uno mismo, con la seguridad y la confianza de dar lo mejor de
sí sin aparentar lo que no es, sin el deseo de ser aprobado o
recompensado para sentirse bien
 Ofrecer la posibilidad de vivir el presente sin tener que cuidar de lo
que se dijo o hizo diferente en otro momento
 Vivir con la verdad, hará que podemos recuperar la confianza en le
ser humano

¿Cómo ser yo mismo?

 Reconcíliese consigo mismo, aprenda amarse, aceptarse con sus
defectos y virtudes. Tenga una perspectiva clara de usted, véase
desde el punto de vista de Dios
  Siendo genuino, expresando sin temor lo que piensa, con suavidad
y sin agresión, buscando las palabras adecuadas
 Reúnase con personas que lo quieren por lo que es y no por lo que
tiene
 Desarrolle sus habilidades y cualidades
 Realice una evaluación de usted mismo y de sus actuaciones, y
descubra si ha fingido alguna vez
 Haga una lista de todos los aspectos positivos en su vida y de lo
que hará para desarrollarlos

3. FIDELIDAD (Lealtad, adhesión personal)

Procede de la voz latina “FIDES” (fe) emparentada con fidere (fiar) de
donde se deriva confiar, confianza, confidente. Se es fiel a alguien a
quien se ha prometido algo en virtud de la fe que se tiene en él por ser
fiable. Ser fiel no significa estar “encadenado” a, muchos malentienden
este término como “aguantar” o “dejarse dominar”, La fidelidad no se
reduce a un mero resistir del paso del tiempo, es cuestión de la calidad
de la unión, uno es fiel porque se siente unido a algo que perdura, que
es valioso, que no es fútil, pasajero, sino que merece inmenso respeto.
Ser fiel supone el ejercicio de la memoria, recordar es volver a pasar por
el corazón, recordar lo prometido y cumplirlo.

3.1 A quién se debe ser fiel

 DIOS, Como Padre, salvador y creador. Porque él es fiel
independiente de todas cosas. Lamentaciones 3:21-26
 NOSOTROS MISMOS, a nuestros principios y valores, a nuestros
sueños, metas planes y objetivos
 NUESTRA FAMILIA BIOLÓGICA, porque fue el lugar donde crecimos,
y recibimos lo que somos, e independientemente de los
problemas, no podemos negar nuestros genes
 NUESTRO TRABAJO, como lugar de provisión, desarrollo, etc.
  NUESTRA PATRIA, porque en ella crecimos, recibimos nuestra
formación, están nuestros recuerdos, etc.
 LA FAMILIA EN LA FE, como parte de nuestra identidad en ese
lugar

3.2 La fidelidad tiene que ver con 2 aspectos

 AMOR: es quien lo impulsa, lo inspira y sostiene
 IDENTIDAD: sentirse parte de ello, involucrado, acorde con los
ideales, objetivos y siguiendo el mismo rumbo

Existe solo un ser en todo el universo totalmente fiel, capaz de recordar

todas sus promesas y cumplirlas, solo por amor, que ha prometido no
dejarnos, y ese es el Señor Génesis 28:15.

Uno de los problemas de hoy en día es la falta de fidelidad en todos los

aspectos, el mundo necesita hombres leales, que luchen por la identidad
que se tiene, y permanezcan, aunque otros huyan, que amen a pesar de
los errores y las debilidades que encuentran, que trabajen para que
unidos restauren lo que este deteriorado.

4. BONDAD (amabilidad, comprensión, compasión)

Procede del latín bonitas, derivado de “bonus”, “bueno”. Se siente una
inclinación a hacer el bien, la persona bondadosa crea con ellos un
ambiente en su entorno de paz, que genera a su vez confianza. La
amabilidad (voz derivada del verbo latino amare, amar) es una actitud
de acogimiento inspirada por el amor, el amor suscita respeto. Este
comportamiento implica un valor porque facilita el logro del ideal de la
unidad. Se puede ser compasivo y amable sin dejar de ser enérgico y
exigente. Bondad no equivale a bonachonería blanda, permisividad
dulzona, indiferencia respecto del bien y el mal. Es una aceptación del
ser humano, visto como una realidad finita llamada a progresar hacia la
plenitud.

La bondad desde el punto de vista espiritual

Es la capacidad que Dios da a través del Espíritu Santo, para dotar al ser
humano a trasmitir afecto, ternura, etc. El es el único que puede
transformar nuestro carácter. Tito 3:4-8 La bondad nos mueve ha querer
hacer el bien en todo momento, a actuar de manera compasiva, a dar de
lo que hemos recibido de parte de Dios. Mateo 10:5-8, 12:33-37

5. AGRADECIMIENTO
Procede de las voces latinas “gratis” “agradable”, “agradecido”, y
“gratan” agradecimiento. La gratitud es una forma de salir al mundo con
amor, seguridad y sin prejuicios. Hay quienes dirigen su tensión hacia lo
que se espera recibir o alcanzar, esto impide disfrutar de lo que se tiene.
Cuando solo nos preocupamos por lo que no hemos alcanzado
detenemos lo que está por venir.

¿Cómo sentirme agradecido?

 Gratitud eterna a Dios, por la vida, por el hecho de respirar,
porque es un regalo estar vivos, por todo lo que él nos ha dado
 No centremos la atención en lo que falta, muchas veces nosotros
mismo hacemos que la limitación nos acompañe por más tiempo,
a veces tenemos más de lo que podemos disfrutar
 No lamentarse por lo que parece no llegar, ¿No ha pensado que las
cosas que no ocurren, evitan que sucedan desastres? Agradecer lo
que llega es descubrir con el tiempo que fue lo mejor
 Mírese interiormente y observe los dones y habilidades que Dios le
ha provisto, se dará cuenta que no ha utilizado todo su potencial
 Agradecer a otros por cada pequeña o gran cosa que recibas por
ellos
  Gratitud en los momentos difíciles, aunque parezca imposible, con
el tiempo y la comprensión de que nada sucede por casualidad,
reconoceremos el significado de muchos de los eventos de nuestra
vida y a partir de ellos poder decir gracias Dios “por crecer y ser
quien soy”
 La gratitud nos mantiene humildes, libres y en todo momento nos
permite disfrutar de las cosas más simples de la vida

6. RESPONSABILIDAD (autocontrol, autodisciplina, reflexión)

Procede de la voz latina” responderé” (responder) Es tomar las riendas
de nuestra vida y responder de la marcha de la misma, de su sentido o
su sinsentido de sus logros o fallas. Esta decisión nos confiere
independencia personal, pero no autoabastecimiento, alejamiento
altanero respecto a los valores. Cuando vinculamos por decisión propia
la autonomía y la obligación, adquirimos nuestra máxima dignidad y
madurez personal. Si pensamos que ser independientes consiste en
rechazar toda norma de conducta que no haya sido formulada por
nosotros mismos, nos hallamos todavía en la fase de la adolescencia,
para superarla y adquirir la madurez propia de la edad adulta, debemos
pensar que toda obligación supone una forma de obediencia y ésta
significa oír con atención, prestar oídos a la llamada de los valores a fin
de asumirlos en la propia vida y conceder a ésta su pleno desarrollo.

“Este es un cuento sobre gente llamados: Todos, Alguien, Cualquiera y Nadie. Había que hacer
un trabajo importante y Todos estaban seguros de que Alguien lo iba a hacer, Cualquiera lo
podría haber hecho, pero Nadie lo hizo. Alguien se enojó por esto, porque era el trabajo de
Todos, cada uno pensó que Cualquiera lo podía hacer, pero Nadie se enteró de que Todos no lo
iban a hacer. Todos culparon a Alguien, cuando Nadie hizo lo que Cualquiera podría haber
hecho.” (Libro de los valores, Gustavo Villa palos)
La responsabilidad nos hace cumplidores de las obligaciones por encima
de las circunstancias. Y debe ir acorde con nuestras capacidades y
alcance. Ser responsable y obedecer, no implica dejarse dominar por
quien dispone de mando sobre nosotros. La responsabilidad implica:
Compromiso, participación activa en la realización de valores, no
sumisión a fuerzas coactivas que arrastran, pero no atraen. No debe
olvidarse que los valores incentivan la libertad creativa del hombre,
porque lo atraen hacía múltiples formas de encuentro, pero no lo
coaccionan nunca. Si la responsabilidad implica siempre una respuesta
positiva a un valor, tenemos una clave certera para discernir cuándo
somos en verdad responsables. El hombre se hace responsable a
medida que va asumiendo responsabilidades, asumir las
responsabilidades no implica sólo ponerse a la obra, asumir los
correspondientes derechos y deberes, implica descubrir que su
importancia arranca de ciertos valores y captar el sentido de la
revelación de los mismos.

Dios le dio grandes responsabilidades al ser humano: (1 Corintios 4:2)

Cuidar la tierra (Génesis 2:4-25) Ser administrador de todas las cosas
que hemos recibido, la familia, etc. Pero cuantas de las cosas que hoy
tenemos las ejecutamos por obediencia o porque realmente somos
consientes de lo que implica hacer y lo asumimos con madurez.

El camino hacia la responsabilidad:

 Pregúntese de todas las cosas que hace, que sentido tiene para su
vida
 Evalúe la manera como responde a sus obligaciones
 Analice en las que no ha cumplido, que ha generado este hecho,
para hacer correctivos
 No se comprometa a cosas en las cuales usted no se siente seguro
de hacer
7. LIBERTAD (atenencia a normas, obediencia)
Derivado del término latino “libre”. Este término de libertad es
confundido con libertinaje o con la ausencia total de responsabilidades.
Cuando en realidad ser libre, significa vivir cada momento de manera
conciente, atento y responsable. Es poder ser uno mismo en cada
situación sin apariencias o conveniencias.

7.1 ¿Dónde inicia la esclavitud humana?

Desde adentro. Estamos sujetos a través de algunas creencias y
condicionamientos mentales, apegos, esquemas, dependencias y
recuerdos. Si recordamos la historia del pueblo de Israel, y nos
remontamos al momento de la salida de Egipto, podemos observar
durante todo el recorrido que para ellos fue más difícil romper con la
esclavitud mental, que con la física. Dios nos ha dado todo para ser
libres, pero de nosotros depende disfrutar de ella. Hay quienes prefieren
ser esclavos, porque viven pegados a cosas que le generan un bien
superficial, pero que en el fondo lo sumergen más en la esclavitud.

“Había una vez, un lobo que caminaba buscando comida, éste se encontraba muy deteriorado,
flaco, cansado, pues no tenía que comer. En ese momento apareció un Mastín Napolitano, un
hermoso perro que andaba por esos rumbos extraviado; pensó en comerlo, pero éste se
encontraba robusto, fuerte y dijo para sí, sería una dura faena que no podré ganar, entonces
decidió hacerse amigo de él.
_Cómo haces para estar tan bien? Preguntó el Lobo, alabando su hermosa carne
_Es muy fácil, donde yo vivo, me tratan súper bien, tengo comida a la mano, galletas, huesos, de
vez en cuando algo de leche, y algunas caricias también.
_ ¿qué lugar es, pues, me gustaría conocerlo, ¿pero que das a cambio? Replicó el lobo
_Solo tienes que ladrar, cuidar a tu amo, espantar algunos mendigos y vigilar que nada ocurra,
jugar con el amo, y hacer una que otra estupidez para hacerlo reír.
_suena fácil, me gustaría hacerlo.
_vamos, te llevaré para que sepas lo que es vivir bueno; mientas caminaban, el lobo alcanzó a
ver unas marcas en su cuello. A lo cual preguntó
_que tienes en el cuello? Él dijo han de ser las marcas del collar.
- ¿Cómo no puedes ir a donde quieres? El le dijo, no, solo de vez en cuando, si logro soltarme
como ahora. Pero por un buen plato de comida vale la pena. El Lobo echo a correr… todavía está
corriendo” (Jean De La Font aine, Fábulas escogidas, Busca, Madrid, 1984)

El ser humano está condicionado por todo aquello adquirido en el

recorrido de su vida, la cual va generando una cadena de eslabones que
aprisionan su alma, manteniéndolo preso en él mismo.

7.2 Disfrutando de una personalidad libre

La palabra de Dios menciona, “Y conoceréis la verdad y la verdad os
hará libres, Juan 8:32” y “Yo soy el camino, la verdad y la vida… Juan
14:6, es decir solo Jesús puede darnos esa libertad, él vino para dar
libertad en todos los aspectos, es importante analizar los siguientes
puntos:

 Evaluar nuestra vida y descubrir a cuantas cosas estamos

ligados que detienen nuestro desarrollo integral
 Aceptar el ofrecimiento que Jesús hace de liberarnos,
entregando nuestra vida por completo a El
 Asumir cada compromiso grande o pequeño con convicción,
conciencia y responsabilidad
 Antes de tomar una decisión, siempre proyecta sus
consecuencias
 Encuentra tu lugar o misión en la vida, tenga un contacto con
su identidad y viva sin apariencias

La libertad no consiste en estar exento de penalidades y riesgos, sino en

disponer de tenacidad para superarlos.

8. LA AMISTAD
La palabra amistad procede de la voz del latín vulgar amibitas, derivada
a su vez de añicos (amigo) y amare (amar). Es uno de los regalos más
especiales que podemos disfrutar de la vida producto del amor y de la
afinidad de 2 o más personas que se encuentran para compartir y
acompañarse a experimentar y caminar el sendero de la vida. Proverbios
17:17. Sin que esto signifique en algún momento dejar de ser tú mismo
para parecerte a tu amigo o que él desee hacerte cambiar. Muchas
veces los amigos se convierten en una extensión de nuestra familia
cuando somos adultos. Proverbios 17:20. La amistad implica: (Ejemplo
de David y Jonathan 1 Samuel 13-31 y 2 Samuel 1-9)

 Adoptar una actitud de generosidad, disponibilidad, entrega

 Abrirse al otro y vibrar con él, sintonizar con sus deseos y
proyectos, alegrías y penas
 Manifestarse de forma veraz, sincera, franca
 Guardar fidelidad
 Relacionarse de modo paciente
 Comportarse de forma cordial, Ser comprensivo con los demás,
brindar afecto
 Ser honesto en las apreciaciones, pero con suavidad
 Evitar posturas cómodas en la relación de amistad

Una amistad incondicional

Sólo en el mundo existe un ejemplo de amistad, entrega y amor, Juan
15:13-14, Jesús expresa la amistad como “dar la vida por el otro” un
amor incondicional y profundo que mueve a dar lo mejor de sí. Dios en
su palabra nos invita a reconciliarnos y volver en amistad incondicional
con él y fruto de ello obtendremos paz interior, al ponernos de acuerdo
con nuestro creador. Job 22:21

9. PAZ (Calma, sosiego, mansedumbre, mesura)

Proviene del término latino pax y da origen a pacificar. Podemos
distinguir una paz interior y una paz exterior, la cual puede entenderse
como ausencia de conflictos, pero también puede verse como creación
de hábitos de concordia, de relaciones cálidas, armonía, etc. La interior
genera la exterior.

9.1 Paz exterior

Depende de muchos factores, entre ellos la tolerancia, que no es una
mera permisividad “aceptación de cualquier tipo de conducta” no
implica indiferencia ante la verdad y los valores, supone respeto en
sentido de estima. Y en definitiva es directamente influenciada por la
paz interior.

9.2 Paz interior

Es el equilibrio que existe entre la mente, las emociones y la voluntad,
fruto de una armonía y encuentro con Dios, quien es el único capaz de
proporcionarla. Se desarrolla, cuando los individuos se reconcilian con
Dios, consigo mismo y con los demás.

La paz se va logrando a medida que se cultiva la mansedumbre (procede

del latín mansuescere “acostumbrarse a la mano del dueño”, es decir
amansarse) El hombre manso es confiado, pero no necesariamente
ingenuo, es bondadoso, mas no débil. Esta actitud pacifica, va unida a
la paciencia, cuando se pierde la armonía de la conducta, se despoja de
belleza nuestra vida. Estamos rodeados de situaciones que a menudo
nos hacen perder la paz: el tráfico, la presión del trabajo, las malas
noticias, obligaciones familiares, etc. Es importante descubrir la manera
de mantenernos tranquilos independiente de todas las cosas.

9.3 ¿Cómo recuperar la paz?

Jesús proporciona la paz verdadera. Juan 14:27 Podemos desesperarnos,
vivir ansiosos, comernos las uñas, enfermarnos, o tomar la decisión de
descansar en Dios. Mateo 11:28
  Cuando este agobiado, deténgase, y pregúntese, si vale la pena
desesperarse tanto, y cambie su atención a otra cosa, salga, de
una vuelta, cambie de ambiente por un instante
 Una respiración acelerada y entrecortada provocada por el estrés,
agita la mente. Es bueno relajarse y respirar suave y
profundamente, para que entre aire a los pulmones y su cuerpo
descanse, por un instante
 La música ayuda a desprendernos por un momento de las cosas,
cante, alabe al Señor, recuerde que la alabanza genera libertad
 Quédese quieto, busque un lugar tranquilo para orar, para pensar
en su reacción, pedirle a Dios la sabiduría para resolverlo de
manera correcta

10. LABORIOSIDAD (coraje, valentía, ánimo, entusiasmo)

Procede del término latino “labor” (trabajo, tarea, fatiga) Implica
tenacidad en el esfuerzo, y ésta requiere en casos, cierta dosis de
valentía y coraje. El hombre tenaz retiene la dirección tomada, se
mantiene fiel a la tarea emprendida, a la verdad encontrada, a la
promesa dada. La laboriosidad requiere colaboración, participación en la
valiosa tarea de tejer la trama de la vida social, Implica diligencia, y ésta
se logra cuando se siente predilección por algo. La laboriosidad lleva
implícita la paciencia, porque un ser limitado, como el hombre, nada
consigue sin tenacidad, ser paciente no significa “tener aguante” sino
ajustarse a los ritmos naturales. Sin esfuerzo ningún escalador alcanza
una cumbre, por bien dotado que este. Solo la tenacidad nos permite
lograr grandes metas profesionales. 2 Timoteo 2:3-7

El trabajo, un regalo del cielo

Eclesiastés 3:9-13 El trabajo encierra un gran valor para nosotros, no
sólo porque nos facilita bienes materiales, sino porque nos permite
poner en forma diversas cualidades que son indispensables para nuestro
desarrollo personal. El trabajo se convierte en nuestro segundo lugar
donde pasamos la mayor parte del tiempo, por esto es mejor, pasarla
bien, para hacer de nuestro diario vivir, algo cómodo, satisfactorio y
agradable. Cuando no se tiene un sentido de vida, una meta, un rumbo,
el trabajo se convierte simplemente en una rutina, en un cumplimiento
de un orden lógico del ser humano. Si tenemos coraje para superar
debidamente las pruebas, podemos alcanzar planos superiores de vida y
realización personal. El trabajo bien concebido y realizado, ofrece
posibilidades al hombre para desarrollar su personalidad.

APLICACIÓN TERÁPICA

Cada uno de estos valores, tiene como fuente una relación e intima con
el Señor, él creo al ser humano para que viviera, se desarrollara hasta el
fin de sus días, pero que, a su vez, dejará una herencia, y tuviera calidad
de vida. Es decisión de cada uno como quiere vivir, si decidimos el
camino de Dios, alcanzaremos la máxima expresión de libertad del ser
humano, la cual está dirigida por el Espíritu Santo. Deuteronomio 30:15-
20

Todos podemos cultivar y desarrollar valores que mejoren nuestra

personalidad, es importante evaluarnos y darnos cuenta cuantas cosas
estamos proyectando que no muestran una vida de éxito, Dios ofrece
trasformar nuestro ser, llevándonos a descubrir en nuestro interior todo
lo que él ha sembrado que por motivos diversos no dejamos florecer,
pero que él hará que retoñe, con su poder y su amor. Job 11:13-20,
Jeremías 15:15-21