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Pecados Respetables

Clase 3

Repaso
¿Qué es el pecado?¿Que son pecados respetables?

Pecados respetables son pecados con los que no nos incomoda vivir. Porque no los
consideramos graves o escandalosos.

Es más, muchas veces pasamos por cosas en nuestra vida que las consideramos como pruebas,
ya que no estamos pecando en algo grave. Pero ¿te has puesto a pensar si realmente no es por
causa de tu pecado?
Talvés te va mal en el trabajo por ser perezoso. O estas enfermo constantemente por comer
insanamente. Talvés padeces de dolores por tu ansiedad. O gente se enoja contigo y lo que
realmente pasa es que eres un orgulloso. O pierdes amistades, talvés eres un chismoso.
Merecemos mucho de lo que nos pasa y no nos damos cuenta pues pensamos que no estamos
tan mal.

Pero el pecado es una transgresión y desobediencia directa a Dios y siempre trae dolor con el.

Intro
A medida que avancemos en estas siguientes clases vamos a ver algunos de los pecados que
llamamos respetables.
Antes que nada quiero aclarar que de todos los pecados aquí mencionados soy culpable y me
extrañaría que una persona no sea culpable de alguno. Y hay algunos que todos cometemos,
aunque no lo aceptes.

Actividad
Has un horario de un día común en tu vida. No tiene que tener hora, pero se lo más detallado
posible (despertarse, bañarse, revisar el celular, comer, devocional, trabajo, descanso, siesta,
etc.) Escríbelo en un papel y guárdalo. Tienes 3 minutos.

Impiedad
El “pecado raíz”.
Ilustración de un árbol: La raíz es la impiedad, el tronco el orgullo y las ramas son todos los demás
pecados.

¿Qué es la impiedad?

Opcional
ἀνόσιος. Impiedad: Esta palabra se refiere 1. a actos «impíos» que transgreden leyes antiguas, y 2. a personas
«impías». Figura dos veces en el NT para personas impías, que de modo impío rechazan las obligaciones sagradas.
En 1 Timoteo 1:9 el sentido podría ser «malvado», pero en 2 Timoteo 3:2 obviamente quiere decir «carente de
devoción» (cf. la secuencia).
Para entender mejor la impiedad veamos su contrario, la piedad.
ὁσιότης. Piedad: Esta palabra denota la «piedad» o «devoción» personal, ya sea respecto a Dios o a los padres, como
una disposición que tiene consideración por las ordenanzas externas. En el NT figura dos veces en la expresión «en
santidad y justicia». En Lucas 1:75 se refiere a la vida de los creyentes en la era de la salvación, y en Efesios 4:24 a la
nueva naturaleza que es fruto del nuevo nacimiento.
[F. Hauck, V, 489–493]
Romanos 8:1
Muestra la impiedad como un acto de rebelión contra Dios. Pero ¿Somos rebeldes a Dios?
Si romanos 8 describe la impiedad como rebeldía, entonces la impiedad es una actitud hacia Dios.
La impiedad la podemos describir de otra manera como un estilo de vida que no toma en cuenta a
Dios, ni su voluntad, ni su gloria, ni dependencia de él.

Una persona impía es una persona que no considera a Dios. Proverbios nos describe al impío
como alguien que constantemente ignora el consejo, no busca la sabiduría, y sobre todo no teme
a Dios. Dios no es el centro de su vida. El impío es alguien que no tiene una relación con Dios.

¿Pero, ignoramos nosotros a Dios? ¿Es Dios el centro de nuestras vidas?

Impiedad es que Dios sea irrelevante en nuestra vida. No es importante o no es tan importante.

Impiedad es
No involucrar a Dios.
No pensar en Dios.
No hacer el tiempo para Dios.
No ponerlo en nuestras decisiones.
No sacarlo en nuestras conversaciones.
No orar.
No recordarle.
No escucharlo.
No leer la Biblia.
No hacerlo personal.
Ignorarlo en la tentación.
Etc.

Lo triste es que esto es parte de la mayoría de cristianos, y en cierta medida, es parte de todos los
cristianos.

Actividad
Veamos nuestro horario, ¿Cuáles son los tiempos que pasamos con Dios?
Obviamente el devocional. Pero, el trabajo es el trabajo, no puedo pensar en Dios…

Colosenses 3:22-24
22 Siervos, obedeced en todo a vuestros amos terrenales, no sirviendo al ojo, como los que
quieren agradar a los hombres, sino con corazón sincero, temiendo a Dios. 23 Y todo lo que
hagáis, hacedlo de corazón, como para el Señor y no para los hombres; 24 sabiendo que del
Señor recibiréis la recompensa de la herencia, porque a Cristo el Señor servís.

¿Trabajas para el Señor? ¿Consideras a Dios en tu trabajo? ¿Es Dios el propósito de tu trabajo?
El problema es que hacemos distincioness entre “cosas de Dios” y “cosas humanas”.

¿Y que tal con las decisiones?

Santiago 4:13-15
13 !!Vamos ahora! los que decís: Hoy y mañana iremos a tal ciudad, y estaremos allá un año, y
traficaremos, y ganaremos; 14 cuando no sabéis lo que será mañana. Porque ¿qué es vuestra
vida? Ciertamente es neblina que se aparece por un poco de tiempo, y luego se desvanece. 15 En
lugar de lo cual deberíais decir: Si el Señor quiere, viviremos y haremos esto o aquello.

1 Corintios 10:31
31 Si, pues, coméis o bebéis, o hacéis otra cosa, hacedlo todo para la gloria de Dios.

Todo debe ser para Dios. Y cuando dice todo se refiere a absolutamente todo. No es una
hipérbole, no es una exageración. Es completamente literal.
Eso no significa que en tu trabajo o cuando comes debes estar hablando de Dios. Aunque nunca
faltan oportunidades. Más bien es que tengas la meta de que todo lo que harás lo harás con un
objetivo: glorificar a Dios.

Pecamos constantemente en no darle la gloria a Dios.

Mira nuevamente tu calendario…


¿Le das gloria a Dios en tu trabajo? ¿Tus compañeros de trabajo dirían que si?
¿Le das gloria a Dios en la forma que tratas a tu esposa? ¿Qué diría ella? ¿Y tus hijos?
¿En tu tiempo a solas? ¿En tus ratos de diversión?
¿Tus amistades lo dirían?

Ilustración
Lavarse los dientes. ¿Cuántas veces te lavas los dientes? ¿2, 3, 4? ¿Es importante? ¿Cuánto de
tu día piensas en eso?

¿Cuántas veces en el día buscas a Dios o le recuerdas? ¿2, 3, 4? ¿Es importante? ¿Cuánto de tu
día piensas en él?

A veces hacemos lo mismo. No negamos que sea importante. Creemos que es un hábito vital y
sagrado. Pero no es para todo el día, es solo para los momentos que los planeé.

¿Qué hacer?
Hay algunos pasos que podemos seguir para poder vencer este pecado.
1. Necesitamos humildad: debemos reconocer nuestro pecado. La forma en que vemos
nuestro pecado es a través de la Biblia y a través del consejo de otros. Así que aprende a
escuchar a tus hermanos, ellos ven cosas que tu no.
2. Necesitamos el Evangelio: Siempre debemos recordar que Dios ha perdonado nuestros
pecados. Que en cuando Cristo murió, todo el sufrimiento que el tuvo en la cruz, fue por tu
impiedad. Cristo te amó tanto, que antes que nacieras, sabiendo que ibas a ignorarlo la
mayor parte de tu vida hasta este momento, aun así murió por ti para que vivas con el por
la eternidad.
3. Necesitas depender del Espíritu Santo: No vas a poder reconocer tu pecado, mucho
menos luchar contra el si no dependes del Espíritu. Y la mejor forma de hacer esto es a
través de la oración.
4. Necesitas esforzarte: Aunque toda tu vida dependa de Dios, Él te demanda la
responsabilidad de luchar con el pecado, y para eso necesitas esforzarte. Hacer morir las
obras de la carne es doloroso. Significa humillare, sacrificar deseos y renunciar a ciertas
cosas.
5. Necesitas aplicar Su Palabra: No hay mejor forma de combatir el pecado que con la
mismas herramientas que Dios nos dio. Cuando Cristo venció la tentación lo hizo siempre
mediante su misma Palabra. Si Cristo, el autor de las Escrituras, acudió a Su Palabra
¿Qué hacemos nosotros tratando de vencer el pecado con métodos humanos?

Una forma de usar las escrituras es memorizando versículos. Aquí algunas opciones ante
la impiedad:
• 1 Timoteo 10:31
• Colosenses 1:9-10
• Colosenses 3:23
• Filipenses 4:8

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