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alimenticios
“AÑO DEL DIALOGO Y LA RECONCILIACIÓN NACIONAL”
TEMA:
Desordenes alimenticios
PROFESOR:
Nestor Atarama
INTEGRANTES:
2018-II
I. Introducción
1.1
I. INTRODUCCIÓN
Señales psico-sociales
Las personas con trastornos alimenticios se aíslan socialmente, se
vuelven irritables, se sienten culpables o están malhumoradas. La
ansiedad, la impulsividad y la inestabilidad emocional son rasgos
predominantes en quienes padecen bulimia. A veces estas sensaciones
se exacerban cerca de las horas de comida. La permanente
preocupación por el peso y la delgadez de quienes sufren estos
padecimientos, por un lado, se extiende al entorno social, de tal modo
que critican incisivamente la gordura y, por otro, preguntan
constantemente a los demás cómo se ven y se comparan
insistentemente con otras personas. Como la percepción de sí mismos
es distorsionada, recurren a los otros en busca de aseguramiento y
corroboración. Las personas con trastorno alimentario no pueden
experimentarse a sí mismas como individuos unificados o
autocontrolados, capaces de dirigir su vida. Cuando la anorexia se
desarrolla, sienten que la enfermedad está causada por una fuerza
misteriosa que las invade. Otras relatan que se sienten divididas, como
segmentadas en dos personas. Al mismo tiempo, las personas con
trastornos alimenticios presentan, tanto alto rendimiento estudiantil como
desempeño escolar o profesional, en contraposición con desajustes en
lo social, sexual y, en su caso, marital.
1.5 ¿Cómo se hace el diagnostico de trastorno alimenticio?
El personal médico puede utilizar una serie de exámenes clínicos que le
permitan no sólo realizar el diagnóstico de un trastorno alimenticio y
corroborarlo, sino también medir el alcance de sus efectos. Sin embargo, la
divulgación de estas patologías, la expansión de la preocupación por las
mismas a nivel social y la circulación de información no confiable al respecto
han derivado, tanto en una promoción de la sintomatología como en un
sobrediagnóstico. Así sucede, por ejemplo, con algunos desórdenes
transitorios de la adolescencia -como la falta de regularidad menstrual- o con
conductas de riesgo que no derivan necesariamente en un cuadro de trastorno
alimenticio. De igual modo, puede haber desnutrición como consecuencia de
otros trastornos psicológicos, tales como depresión y algunas patologías de
tipo esquizoide. A su vez, la desnutrición provocada por anorexia puede tener
como consecuencia trastornos psicológicos secundarios importantes. De ahí
que establecer el diagnóstico no debe reducirse a una serie de exámenes de
laboratorio; debe llevarse a cabo con calma y teniendo en cuenta la variedad
de factores que influyen en la aparición de un trastorno alimenticio y su
desarrollo.
Entrevista psicológica.
Mediciones de peso y estatura de acuerdo con la edad y el sexo del
paciente.
Peso relativo, masa corporal, reservas grasas.
Proteinograma electroforético.
Valoración del estado nutricio y de reservas grasas.
Biometría hemática.
Perfil hormonal y valoración ginecológica.
Mediciones de presión arterial y pulso.
Examen cardiovascular y electrocardiograma.
Hepatograma, perfil hepático y tiroideo.
Examen general de orina.
Glucemia, uremia, colesterolemia.
Calcemia, fosforemia, magnesemia.
Tomografía computarizada.
Eritrosedimentación.
Ionograma: En busca de hipokalemia y alcalosis metabólica
hipoclorémica, en vomitadores.
2.2 Síntomas
Los síntomas pueden ser muy variados, así como sus causas. Cabe
destacar los siguientes:
Causas socioculturales
Vivimos en una sociedad en las que la imagen tiene una
importancia desmesurada. La publicidad, los cánones de belleza
han establecido la delgadez como valor que confirma tanto la
identidad de las personas como de su éxito. El mensaje de que sin
ser delgado no se puede ser feliz ni tener relaciones sociales
satisfactorias es omnipresente. Esta presión lleva a muchos
pacientes a desarrollar trastornos alimentarios como la anorexia,
entre otros.
Causas individuales:
Aunque no existe un perfil único de pacientes de anorexia,
existe una serie de rasgos que se repiten con cierta frecuencia:
Falta de independencia
Miedo a madurar
Autoestima bajo
Perfeccionismo y autocontrol extremos
Anorexia restrictiva
En este tipo de anorexia no se producen purgas. En su lugar, tiene
lugar una resistencia constante al acto de comer. Esto último es una
posibilidad que en muchas ocasiones se ve como algo repugnante, ya
que se asocia al proceso de engordarse.
Así pues, este tipo de anorexia es más propio de personas metódicas y
perfeccionistas, rígidas con las normas y capaces de un autocontrol
extremo, y no presentan el perfil impulsivo de los pacientes de anorexia
purgativa. Sin embargo, tanto el sexo como la franja típica de edad es la
misma que en el otro tipo de anorexia nerviosa.
2.5 Consecuencias
Por lo tanto, los síntomas más visibles y comunes de estas pacientes son los
siguientes:
- Rechazo de su embarazo y de su cuerpo
- Realización de ejercicio excesivo
- Obsesión con el peso y con las comidas
- Reducción de la ingesta de calorías
- Peso por debajo de lo normal durante el embarazo
- Negación de un posible problema
Esta patología implica el efecto contrario que la anorexia, por lo que también recibe
el nombre de anorexia inversa, además de dismorfia muscular.
La vigorexia es, por tanto, un tipo de trastorno dismórfico corporal que se
relaciona con el trastorno obsesivo compulsivo y que implica que la persona se
obsesione con sus imperfecciones, lo que hace que perciba una imagen
distorsionada de sí misma.
Este tipo de afecciones repercute negativamente en las relaciones personales del
paciente y a su salud mental y física.
5.6 Causas
Las características más frecuentes en personas que sufren este trastorno son las
siguientes:
Mirarse constantemente en el espejo y aun así sentir que no se alcanzan las
características estéticas que establece como necesarias la propia persona.
Pesarse varias veces al día y hacer comparaciones con otras personas que
hacen fisicoculturismo.
5.8 Prevención
Las pautas principales para prevenir la vigorexia implican las siguientes
recomendaciones:
A la hora de llevar a cabo un programa de ejercicios, es necesario que estén
supervisados por un entrenador profesional.
5.10 Tratamientos
Si bien se ha comprobado la existencia de trastornos en los niveles de
diversas hormonas y mediadores presentes en la transmisión nerviosa, los
principales factores desencadenantes involucrados son de tipo cultural, social y
educativo, a los que estas personas están expuestas continuamente.
Por ello, el tratamiento debe enfocarse a modificar la conducta y la perspectiva
que tienen sobre su cuerpo.
El entorno afectivo cumple una función muy importante en su recuperación, al
brindarle apoyo cuando intentan disminuir su programa de ejercicios a rutinas más
razonables.
Es necesario disminuir el entusiasmo y la ansiedad por la práctica deportiva
intensa, logrando que se interesen por otras actividades menos nocivas para su
cuerpo.
El hecho de desear la imagen corporal ideal no implica necesariamente que la
persona padezca algún trastorno psicológico, pero sí es necesario controlar el
desarrollo de sus actividades físicas, ya que es más propensa a padecer vigorexia.
VI. BULIMIA
6.1 ¿Qué es?
6.4 Prevención
La prevención de la bulimia tiene que realizarse con un enfoque multidisciplinar.
Los especialistas destacan la importancia que tiene la prevención social y la
colaboración de modelos, diseñadores, presentadores de televisión, publicistas y
deportistas, entre otras profesiones para reducir los mensajes que se lanzan a la
población que inciden en la pérdida de peso de forma no responsable y engañosa y
en las tallas de la ropa.
A nivel familiar conviene insistir en que las familias sigan una dieta equilibrada,
como la mediterránea, y que se evite la obsesión por la dieta, el peso o la imagen
corporal.
Por otro lado, es recomendable que no hay una protección excesiva de los padres
sobre los hijos. Esto facilitará la autonomía del adolescente y que éste sea capaz de
resolver problemas y tomar sus propias decisiones.
Por último, desde la escuela se puede educar a los niños sobre alimentación y
nutrición, así como fomentar la autoestima, las habilidades sociales y
comunicativas.
VII. ORTOREXIA
7.1 ¿Qué es?
7.2 Causas
Suele manifestarse en personas con comportamientos obsesivo-
compulsivos y predispuestas genéticamente a ello.
Se ha observado también, que muchos pacientes que han
sufrido anorexia nerviosa, al recuperarse, optan por introducir en su dieta sólo
alimentos de origen natural, probiótico, cultivados ecológicamente, sin grasa o
sin sustancias artificiales que puedan causarles algún daño.
“Paradójicamente, este comportamiento en vez de evitar la enfermedad, llega a
provocarla", apunta la especialista.
7.3 Síntomas
El síntoma principal que caracteriza a esta enfermedad es la preocupación
excesiva por todo lo que se ingiere.
Los pacientes invierten un gran número de horas al día planificando y preparando
las comidas.
Suelen ser tan estrictos que incluso se sienten culpables cuando lo incumplen y
se castigan con dietas y ayunos aún más rígidos. Del mismo modo, eliminan por
completo determinados alimentos en su dieta, no sólo carnes y grasas, sino también
otras sustancias como el azúcar.
A diferencia de otros trastornos alimenticios, los ortoréxicos son personas muy
abiertas con sus reglas de alimentación y no se abstienen en mostrarse orgullosos
de ellas frente a otras personas.
Del mismo modo, menosprecian a aquellas que no siguen reglas dietéticas, por lo
que el paciente puede verse abocado al aislamiento social.
La ortorexia nerviosa suele comenzar con hábitos de vida saludables que se
convierten en obsesión y puede provocar en los pacientes grandes pérdidas de
peso. Además, pueden perder la capacidad de comer intuitivamente, es decir, dejan
de saber cuándo tienen hambre o cuándo se encuentran saciados.
7.4 Prevención
Para evitar llegar a la obsesión por la alimentación sana, los especialistas
recomiendan seguir los siguientes consejos:
Regirse por una comida sana que incluya la cantidad y variedad de alimentos que
el organismo necesita para funcionar correctamente.
7.5 Diagnóstico
Debido a que existe una fina línea entre la comida sana y la obsesión por la misma,
se debe recordar que la clave para el diagnóstico de cualquier enfermedad de tipo
mental es que el trastorno cause daño al paciente, tanto físico, social, como
emocional.
Para detectar la ortorexia, los especialistas han establecido una serie de preguntas:
¿Se preocupa más por las características saludables de lo que come que por el
placer de comerlo?
¿Se siente superior respecto a otras personas que no comen como usted?
7.6 Tratamientos
El tratamiento de las personas que sufren ortorexia debe combinar la
terapia psiquiátrica con la farmacológica, a través de medicamentos que puedan
volver a incorporar a la dieta los nutrientes de los que carece.
El especialista suele aconsejar que el paciente vuelva a recurrir a la “intuición”:
debe comer cuando tenga hambre y dejar de hacerlo cuando se sienta satisfecho.
Se recomienda que se incorporen poco a poco todos los nutrientes que fueron
descartados y que, aunque se prosiga con una alimentación saludable, se ingieran
cantidades suficientes de todos los alimentos.
VIII. POTOMANÍA
8.1 Síntomas
8.2 Causas
8.3 Consecuencias
8.4 Tratamiento