ACTIVOS INTANGIBLES

Los activos intangibles son bienes que posee la entidad y que no puede ser
percibido físicamente. Sin embargo, se consideran activos porque ayudan a que
la empresa produzca un rendimiento económico, por lo que el activo intangible
es de naturaleza inmaterial como un ejemplo, el valor de una marca, que no
puede ser medido de manera física.

En definitiva, son bienes de uso que se caracterizan por carecer de su sustancia

susceptible de valoración económica.

Los recursos intangibles pueden considerarse, respecto a los activos tangibles,

una fuente superior de ventaja competitiva para la empresa, aunque los activos
de producción son tangibles, los procesos necesarios para utilizar estos activos
son intangibles.

Los recursos intangibles pueden considerarse, respecto a los activos tangibles,

una fuente superior de ventaja competitiva para la empresa. Los recursos
intangibles están enraizados en la organización de los fundadores.

Los activos intangibles se clasifican de acuerdo al siguiente detalle:

1. Según su posibilidad de tener identidad propia.

 Identificables: como es marcas, derechos de autor, licencias de uso
entre otros.
 No identificables: puede ser publicidad, gastos de organización.
2. Según su forma de incorporación
 Adquiridos: concesión, franquicia
 Desarrollados por la propia entidad: gastos de desarrollo
3. Según su posibilidad de vendedor por separado.
 Vendibles por separado
 No vendibles por separado
4. Según su plazo de vida legal:
 Limitada por ley o contrato: patentes o concesiones.
 Perpetua: marca renovable
5. Según su posibilidad de reconocerlos contablemente:
 Registrables contablemente
 No Registrables contablemente

CONCLUSIONES

La ventaja de los recursos intangibles respecto a los tangibles es que,

a diferencia de estos, su uso no es excluyente, por lo que los activos
intangibles es una fuente superior de ventaja competitiva.

Los activos intangibles son uno de los elementos de mayor

importancia en las empresas. Influyen en el día a día de la empresa,
en sus procesos, pero también en su valoración económica.

Los activos intangibles pueden permitir abrir nuevas líneas de negocio

en las que puede obtener nueva demanda, como ejemplo de ello son
las patentes.

Los activos intangibles presentan algunas dificultades especificas a la

hora de ser gestionados, la valoración de estos activos y por tanto
cualquier medida de su rentabilidad puede resultar especialmente
complicada.