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Chowk¡ Azouri

EL PSICOANALISIS
Traducción de Milogros y Piedod Cregui
Adsptoción de Ricardo Topio

ACEilfO
IDITORTAL
iunrcr

I5TRÜÜUCCIC}:{ 9

i. PRE}TISTüRIA DEL FSIÜÜ;T¡;ÁUS¡S 13


Las eiii'ere¡rtes rupt*ra$ cün el saber cc'¡istitrii-
f l.n

do 15
R$ptura eon la psicrlagia 3' ia fihs*fía h]
L* r'uplura riln la hipnrsis 16
La ru¡:tur¿i cün i¿¡ rneCicina 1?
EI reencnentrs eon Chal.rot: la hipnosis 19
Sl trabaja con Sreuer Zü

II. EL }iACIh{IgNTÜ }EL PSICOAUÁUS¡S 2*


El eiicuentra con Fliess 27
La interpretación de los sueños 3ü
C*ntenida rnanifie*lü-cuntsnida latente 3i
Hl sueú*: la realización cle un des** inc*irsciente 31
La cen-*ura: defrrnrar:iqln dei sueno 32
ta eiabüración del suenu: despla¿amientq;, cnnd*n-
sacitin ¡'figu¡acién 32
Primera *dicisn: febrera lggs Lin suena iie niñ* 33
$egunda edición: diciembre I ggs La puesta en escena rJei suena 3$
Tbnera edici*n: octubre f g9# .,Fsieepatalogía de la vida cotidia¡ia,' 34
Cuarta edición: juti* tg97
Quinta edicion: diciembre lgg1
La palabra de ia verdacl ton:a 1a clelantera a la *tra ,34
EI espíritu, el incanseienten la risa 35

ITI. L,\, ÜONÜfiPCIÓ]{


*T^^
FREUNIA}üA }EL APAIIA.T{i
Diseño de cubierta; ,A/fanso fruana / César Escolar n^T^T
rbt{.{ L ILU É1

LIJ
5

L,n lugar psíquico $eparáclo rle Ia ci:nsriencia 3$


I-a abreaccién -v el mét*d* calárquicr:
q Marabout {Betgique}, 1992 La represión
39
4rl
€l Acento Editorial, 19gS I!s .: nrirl'rÉ¡'n
y¡ ¡ ¡¡¡ vÍ u
trirrir.r
a uiiil + 4A
Joaquín Turina, 39 - 28044 Madrid
Ei inconsciente 4i)
El precr:r:scientc 4ü
El c*nsciente 40
Csrnerciali¿a; GE$MA, SA - Aguacats, 4A - Zg*44 Madrid La cen-qura 41
l-,1legisti'r¡ durámrcu 4t
l$BN: 84-483-0l,87-4
El regisrro ec*nón:ico .{1

Depésito legal: M-39408-1 gg8


EnergÍa libre 3, *nergía ligada 42
Fataccmposicién: Grafilia, SL t*s prcces*s primar"ios v k;s pr*{:e-s*s ser:undarics .43

lmpreso en EspañaiPrinted in Spain La r:r:fsión se,.:ual 44


Huertas lndustrias Gráficas, SA El impuls*- el fin, la fu*nte v ei *bjet¡-i de la pulsian 45
Camino Viejo de Getafe, 55 - Fuentabrada {Madrid} l,a fase oral *CI
Necesidad, den:anda ,o desccr 46
La fa-.s anal 4i
La iase fáiica v genit ai 4ó
f$* está permitida la reprcducción total o parcial de este libro, ni su trala- El perínd* cle lat*ncia 51
rniento informático, ni la transmisión de ninguna fcrma o por cuafquier medio, La misis de la pubert*d ,5i
ya ssa electrÓnico. r¡resánítCI, por fotacopia, por registro u otros métodos, sin
Pr"rlsiones sexuales y p*lsiones de autc¡c*nser','aeién 5i
sl permíso previc y por escrito de los titufares del capyright.
Prir:cipic' de prlacer r' ¡:rint:ipin drl r.p¿llidad 52
ri]
El narcisismr,l 'JlJ

q
Libido del yo y libido del objeto 53
u. Lo$ APORTES TEORICOS DB JACSUES
L TACAN 85
Pulsianes de vida y puisiones de muerte b1
La segundn tópica: yo, ella y superyó 54 ta teoría del sujeto 87
88
La identificación 55 !o imagi4.ario 90
El ideal del yo y el yo ideal 5S Lo simbólieo
Angustia y represién 0b La secuencia ausencia'pre$encia de la madre 91
La metáfora 92
fv. EL ENFOQUE, PSICOANATÍITCO DE tAS La metáfora paterna 92
NAUROSIS, tAS PSICOSffi Y LAS $,s1,s2ya 9S
PERVENSIOiqES 5V ta rnetonirnia del deseo 94
g4
La represién y eI retorno de lo reprimido 59 Lo real
El fantasrna 95
El síntonna ñ9
La negación de la realidad, la ausencía de represión, El objeto {a} 95
La forclusión {repudio) del nombre del padre 95
el rechazs a la exclusión 6S
La represión original 61 g1
La histeria 61
Vil. LA PRÁÜTICA NEL ANALISI$
La escucha 9g
Dora 61
eq El sileneis 9g
La vertiente defensiva vtu
La neutr*lidad del analista 9g
La vertiente ofensiva 6s
La atención {lotante 100
La histériea y el amor 63
La asociaeión libre de ideas 100
La histérica y ei analista 84
La interpretación 100
La maternidad, principal rnisterio de la ferninidad 64
El diván 101
Ln neurosis obsesivn bü
102
El caráctEr anal 6S El pago
La duración del análisis 102
El síntorna obsesivn s6
10s
ta fanta*ía del obsesivs 66 Las sesiones de duraeión variable
La curación 1ü4
El obsesivo y el analísta 67
Los fines de un análisis 104
La neurosis fóbica s la histerla de angustia 67
105
Las fobias 6? La necesidad de un análisis
La estrategia fébica en la neurosis fdbiea SB
vlil. tA FORMACIÓN DEL A}{ALI$TA 10?
La paranoia 69
109
El presidente $chreber y los alunrnos de Freud 69 El análisís Beisonal del analista
La interpretación de Freud 70
Análisis terapéutico y análisis didáctico 109
..El analista no se apoya más que en sí mismo (se
EI delirio de persecución ?0
110
Ln erotomanía ?0
autoriza Por si mismo)"
La teorÍa de Lacan sobre el fin del análisis 110
¡

El deliria de los celos, de la envidia 70


La rnegalornanía 7A
El analista se autoriza por sí n'rismo y por algunos
otros 111
El punto de vista de Laean ?1
111
La esquizofrenia ?1
El control o la supervisión
11c}
I l&¿
El detirio: una tentativa de curación 7z
Sl pase
La melancolia 73 La institucién psicaanalítica y la identidad impo-
La introyección 73 sible del analista tla
"Yo te perdono del dano que te haya podidn hacer" 74 IX. PROBTEMAS Y PER$PECTIVAS 115
El pemeffio y el analista 74
Sl eneuentro entre Bsicoanalistn y psicosnali- El analista y la EuroPa de 1992 TT7
La falta de diploma del analisia 11?
nsíi'a 75
y la
Las asociaciones psicoanalíticas, la gamntía
V. LA TRANSMISIéN NEt PSICOANÁIIS$ forrnación l1?
POB LA IT{STITUCIÓN 77
La IPA 7s
X. EL PSICOA}IALTSIS EN ESPANA 119

La estrustura de la iFA 1s BIBLIO&RAFiA 123


Las dos nsasas organizadas: la lglesia y el Ejército 80
La reproduceión de los analistas 80
La teoría del fin del análisis en la IPA: la iden-
tifreación con el analista B1
La críticn por parte de L*ean úe la inflación
imagfnnria en el p*icoanálisis 82
rL PSICOANALISIS
hipno-ris para separar o aislar el sultar ser el método psicoanáli-
eiernento amoroso que se agi- tico de investigación dei incons-
iaba detrás. Pero comCI la irip- ciente. Freud conservó de la hip-
ncsis proporcionaba Eandes nosis ia posición del "paciente
servicios en la investigación psÍ- estirado sobre una cama de re-
qtrica de pacientes, ,.poniendo a poso cletrás clel cual se sentaba.
su disposición un saber del que lo que le permitía ver sin -{er
eilos no disponían en el estado lristo',.
de COnScienCiA", l'pAra preve- La investigación de ios re-
nirse frente a las dificultades cuerdos oividados cle ios pacien-
que irían surgiendo, Freud re- les era posihle, por tanto, sin
cordó que, en l';anc1', Bernheini hipnosis, Fero gracias, sin etn-
estaba persuadido de que el sa- bargo. a aquello qlre había po-
ber obtenida bajo la hipnosis era dido ser descutrierto desde el
de hecho conocido par sus pa- ernpleo de este métado pür
cientes. En efecto, _Ya que, des- Breuer: la asociación libre de
ideas que ei paciente se debía de-
pués de las sesiones de hipnosis,
cir a propósito de todo k: que n
Bernheim empujaba a sus pa-
cientes a recordar, persuadién- concernía a su sintoma.
En cuantu al amoi' de ti'ans-
doies de que eilos estaban en po-
sesión de estos recuerdos. Fara
ferencia, llegar"ia a ser a lc larga [L NACIJITIIENTO Dil PSTCOANÁuS|5
de ia historia dei psicoanálisis el
ayudarles les colocal:a la mano elemento motor y el principal
sobre ia frente, Y .,los recuerdos obstáculo en esta investigación
olvidados reaknente volvían,,. del saber oividaclo. Porque lemía
Freud decidió hacer let mismo. las desbnrdamiento_c pasi*na_
Pasando él mismcl por esta etapa ies de Anna O, y retrocedía de-
de la imposieión de las manos trás de es¿e fenóme¡ra capitai,
ssbre la frente, abandonó la hip- Breuer', a su rnarlera) hai:ía
nosis por aquello que iba a re- puesto a Freud sobre esta pista.

24
fif encuenfro con Fliess

Flies*, ese ,,nr*dicucho,,. €de


,,acariciad*r rle nariz',. como le
llamaba Lacan, era el más in-
dicada pai"e aparecer ante ios
ojcs de Freud cümü Lrn supue$tü
sabeclc¡r sobre sexo. algo que
Fre¡,rcl planteaba, püro qr-te aún
11ü e*taba preparlldo pal'a ad-
rnitir. Salro *c0t1 sorpresa, in-
creduliclad. incluso avei'siérl.,"
cúIno el mismo dijo.
Freud rec*n*cié ulteriormen-
ts estos sentimientos cüm* el
testimsnia de su propia resis-
tencia a la cunsideración de este
saher sobre el sexo.3, la avc.rsion
c$nto el indicador más segurr: de
utl cleseo sexual inccn.sciente
qlle rlo puede explicarse cle nin-
guna otra manera que no se¿r
b4ic una forma inr.ersa.
Fero, csntrariamente a Char-
cat f, sq:bre trd*, a Breu*r,
Fliess iba a escn*har a Freud.
Iba a escucharie de-oarroilar sus
ideas e hi¡:óte;is más atrevirlas
I' asadas, pernritiénd*le plügre-
sir,amente trunsfbrir sus prapias
representaciones inconsciellte$.
su$ pr*pia* palahras. su$ pro-
pios siErificacloseie nn lugar que
le era inaccesible. el lugar del
Otro, el inr:anscienle. hacia un
lugar donde aqueila se v*h'ía ac-
cesibie. subjetirable.
Ca¡trc deberían ser los ar:alis-
tas a la hora de escnchar a .:us
paeientes. Fiies* no üpCInía a la
imaginación de Freud más que
una resistencia ínfilns. encar-
nanclo" **gun ia expresi*n de
D. An¿ieu, *i .pcln de la mini-
nra i'esistencia.,.
la se- Perr¡ iqr"rién er"a e¡rtoncer
Fliessl)
Otrrrinolaringólaga, 11 ilheim
Fliess estaba instalaclo en Berlín
-v conoció a Freud en sus prác-
ticas de 1887. L,:s dos rnéclicos
estal:an ai marg*n de la mecli-
cina oficial. La* ideas de Fliess,
su interes por la sexualidad -Y su
vafu:r para def'el:dei' sll$ hipóte-

27
r_L
fsl:rcANAfllf rL NACIMITNTÜ DTL PSICÜANALISIS
sis incitaron a Freucl a revelarle 3, Flie,{s t*nía turl¡rs las carac- Fl;.***: '.A peñar de t*cia, rne l*s perí*d*s que hs separaban _y
las su.yas plopias sin mndera- terí-qticas ¿1e ia relar.ión anaiíti- , **::;jr *!u)' aislado, rientÍfica- que é1 calificaba de '.pürÍürios cle
cirin. ca. Id*ntiücacla como paciente ,;:,*=:* e:ltumeeictro, apáticr: 5 re- abstinencia,,. Hncantramüs i:quf
Flie-qs abardal:a ia s*xr"relidad de Fiiess" sufriencl* por no ha- ::r:+.::ls:*¡-;, lüfiestra üünversación, de nuevo el testinoni* ¿le una
a traves de los cicir:s bialógiccs, ber sielo nurlr*. ente¡rdido en la , .¿ o*':ir:na *pinión qu€ de¡nues- depende*cia transferencial tal y
la p*riodieidad .r, la nariz, Pen- expr*sién de sus ideas rsferen- ,:,-.: :*n*l' de mí, me d*vueive Ia c0rn0 aparece regul*rmente en
saba que al lad* de las períaclo-t les a la elislngia sexual de ias i.i¡
=: x:i ::rism$. El ¡:ensamientc las curas p*ic*analíticas. L*s pa-
{'emeniiros de veintioch* días, a neur*si* "*ciue el'an tanto el i* :; r¿¡nfiacla energía nn ha rle- c.ientes esperan las sesiane,$ c*rl
l*s que sc¡¡g-opünde la me&$- frut* de sus investigacinnes s*- ,',;#,.: i* impresionü.flrl€,,. Seis une grar: iinpaciencia ,v hallan a
truación, ütrü perí*da de vein- bre sus p*cientes cümü de ias L,r,:,: ;nás tarcie, el I de enero de menuclo rin senlin:ientr cl* par
titrés dias cleterminal:a, t¿inl* que mant*nia sabre sí rnis*ra-* ]iY*" i.r:ivió a e-ocribirie. ,.Seres despues r{e ha}:er }rabiado a
en e1 hombre ccm* en ia mlljc'r, ]' supüniendo a Flie¡s un c$nfi- ,r*;:-r l* no deberían desapare- quien puede r¡ sabe entendelles.
muchas cle los fbno:uenos ¡:eriú- cirnie¡rtr: sobre ei sex# mueho ,:r:i j*":nás. Bchamas de illsuo$, ,,ilespnés cle cads unü cle nue*-
dicos. El desarrolir del arganis- más arnplia que el .su_vo, Freud iL;':*:hr*S de tU eSpeCie. iQué tros ccngTesüs Freucl
rno estal:a rielerminad* pür e${is se iha a encontrar inffier*g) e,n la ,¡,*,x,**cimientas n* te deb* _v* a Fiiess*, nre -escrii:ió
sient* recon{{¡r-
perí*dos, h mismü que el rlía del primera relación d* tip* analí- +:r *i **nsuelo, tra t:omprensión. lcs siguient** me*s$.
tadr:¡ pal"a
nacirnienta dsl individu*, inclu- ticn. r{ue se in*talri sin darse iÉ ::ggn1ía que n:e aportas en mi nusvils ideas han l:rr¡tad*. mi
so el ile su muert*, Fliess p*rl- crienta erltre l*s el*s protag*nis- +t:i.=jsdl; me has hech* asir ei durr trabaj* *:e ha prr:p*rci*-
saba rambién que estus períaelos tas. La relación se mantuvtr *ox:id* de la existencia y' pür naelo una nilelra aiegría, y mi es-
determinaban los cararteres se- *descle 188? a 19ü4*. v marcó ,;i:*:*, me has devuelto la sa- psranza intermitente tie trazar-
xuales de la¡ huinanrs. SLr in- a l're¿rd d* f.orma duradera. .,:.,*" aigo que ningúr: otro lru- fi:e un can:in* en la jungla se ha
{luencia sobre Frer"id era tal que L* más sorprendente fue qrie ',l ::*. pr:dido hacer. Es antes que pu*sto a brillar...". I-,a impor-
este úitirno cre3.'cl qu* ru muert¿i esta relacií"ln se desarrnlló sr:bre :a;áe tu ejempia el que me ha tancia de Fiie*s es tal que equi-
Le sobrevenclría a Ia edad de cin- tnd* p{}r cürrespilndencia. Las .;xr::itido adquirir Ia fuerza in- v*ie para Freud a tr:ricl un pii-
cuenta y ru1 anus LtB 'i ?31. cartas de Freud a Fliess se hu- ::.**iuai de {iarme de mi propia l:lico: ,,Sin púl:liea sr:y incapar
Freud trató también de intra- bieran sin rluda destruirls, cüfflo -,:.;:=i:"..". Estos ejemplns
$olt su- d* escribir, perr: me sient{} per-
ducir esta teoría de ios perír:dus lo lueron las de Fiie-cs a Frenel, ji.,-,r*::iss para mostrar cuánto f*ctarnentE *atisf*cho ile ¡tr-r es-
para la diferenciación que esta- sin la val*ntía .f ia perspicacia '=*,*i¿aba Freurt a Fliess" cuán- cribir más quü para ti"..,'. \¡e,
biecia enlre ia neurnsis de an- ds una. de las primeras alunrnas -:.i **-hrestimaba sus capecide- müs" a través de aigunas de es-
gustia .1' la neurastenia" francesas rle Freucl, fularie B*- ,,:'¡,* Fliess: por su pai"te, iba a ta* crartas, la c*njuncir:n dr. est*s
For otra pitrte, otra cie las teo- naparte. Hn efecm. ella sup{r ::,*;i:i$*cer el valor" de las hipó- d*s *-jes esenciales que v¿rn a d*-
rías cle Fliess, la ,,neurasis nasal piantarle rara a Freud, que qu€- r;Í,,*r* de Freud. terminar ei nacir*ielrt* elel psi-
refleja,,, de la que Freud con- ria recornprárselas Fara des- i;ic reccnocimiento perrniti- c*análisis en l*s d*s senlicl*s del
servó rsstcs en el m*delc de des- truirlas. I)*spu.és de la rRuerte T':rr'e Fr*ud darse cuenta d* que t*rmin*: eJ nacimientr¡ del pri"
plazamienta simbóiiea, reagru- de Freud, estas carta$ ftieron .*:.*s hipótesís no eran -k:cu- mer psic*ar:áiisis y el nacin:ien-
paba los sínlor]l¡ts .,i'unciCIna- een;uraclas púr su prapia hija, :"?i'. dadc que encüntraban en tt de ia teüría psicoanalítir:a, el
le$,,, digestivas, cardíacos y tes- Anna" -r p'Jr Ernst Ki"iss, ]t pu- 5i:**s nna respuesta, un I'eci]- primera sienclo la c*ndicién ne-
piratarios. Freud acercd esia blicadas en El rzaúmimta r{et :::.¡.::¡::iento. Si el *qaber anaiítica, cesaria de la aparicién del sü-
neurosis nasal refleja a 1* que psicaunalis¿s'.
*:i:"d¿ado en la cuhura de hov guncl*.
entonces llan:aba neurast*nia. ile la segunria carta que e$- *i tiia, permite al paciente ex- El primer ¡:sic*análisis, o aná-
CCImo se cansideralia a sí misrnn cribin a Fliess {entre actruella-r
nenrastenico, tr¡clas las condicio- que han sido publicadari. p{}- ,ri:rer sus ídeas más desc,abella- lisis originai. -{8 parará cün
j*-., í:*denr*s medir ia impnr- Flie**, sn e1 nr*menlo cie su rup-
nes l;ü habían reunido para lra- dem$* re*eñar la sr:bresfima-
ce¡ de él :o::*ia de Ia escucha .v Ia com- tura cnn Frcurl. Fero recom€n-
etr en.t'brma cle Fiiess. ción que Freud le iiene: ,,N* sé
,,É1 *ospecha que Fliess le e*- tociavía cóm* he p*didn i*p'ar' ;i."*::*i*n de Fliess en la crln- zará cuand* Fr*ud encüntrri
conde Ia enfermedad mcrtal que interesarte... escuchn a veces ha- *¡**ración de Freucl en un tno- otrcs ders púl:lic*s: un i,.*rdadera
f
está esperanclo',, ie cl*n:uesti:a hlar de ti, ;r, naturalmente a pro- '' r*lo en el qlie no sniamente públicc, con tra llegada eie su pri-
su I'ecünocimiento por l:aherle pósito d* celsas pl'*digios¿l$,'. Hra s* i*maba a Freud con:o un teó- meros alumn*s sn 19ü1"tr9t]3; y
,qanado de sns seud*prablemas ei 2S de cli*iernbi"e cie 188?. :ltü *.qtrandalaso, sina que tam- otrr con Jr.rng y Ferenczi- un pú-
:ir*n se le acusaba de chariata" biict¡ similar al que hal:ía rcpre-
cardíacos. üalificado de verda- Fr*gresir.¡alnente, Freud sr
clera ,'goipe f'uin:inante', p{ir instala en el atnür de transfe^ ,:isn:r¡. sentaclo Fliess, es deeir, $ila re-
ü. h{annoni, de,.hechi¿o. por rencia, Dcs afir¡s rnás tarde, el I 3nt* la importancia clel au- Iación transfbrencial, epist*lar
1l{. Robert, la re}ariiin de Freud de ago$tü de 189ü, esmibié a +:t ri* r{ue para Freud sól* re- sobre tsd*, que p*rmitió a Freud
:*,r*s*ntaba Fliess" sri$ encugn- continuar',,8r118nd0 .v rlclianclcl'.
,:r*¡ {iiero¡r llamados c*ngr?sos. a una mislna per$ona. en el te-
t [r-r 1985 se han pr-rlilicadLr cr.rrnpietas. *:r Esracl*s Lnidr;s, r*cr:piladr¿s pr:r" Frsud esperaba estos congres{Js rreno en ei clue ellunciará.1'eia-
J, ¡'f. l,{ass¡-;rr. ¡N. ciai A^¡ d';n gyan avidez, s*pc:taba mai b*rará su teoría.

2B 29
jiÉíi¿::: ':
ljftiiiii,.'
,*é-i:i. ,,.

if,r,i:.,.., .

FL PStcoANÁr¡srs tir¡ri:
,.,, EL NACI¡\4IENTO DTL PSICOANALISIS
''i .,,.-

Incluso si Frer-rd habló de su adelante cómo, pero -cerialemos r,i:?$fiiil'


::t:i¡
Confenido m$n¡f¡€sfo-
"J:*¡*;a?:ie para abordar
, 1. .,: '

análisis como cle un autoanáli- ahora que el destino reservaclo ii{:fu.r',

i:I,Í;-,i *it*i:cs, ES pOSible


conlenido lslente
sis. no hubo autoanálisis en el a Fliess y a slls ideas da para ,liitilr'
.+'
sentido correcto ciel termino: muchc. :+;l::r
:11l1,.,.'
:
:r-* ; i":sl'tir de ese mü- Pero, a partir elel ccntenido ma-
'.81 autoanálisis es realmente En efecto, como nos 1o ha en- .;:V.: ,.
;:!¡,;7¡';':: = ir.c*análisis tamó cli- nifiesto, aparente, del sueñr:, los
imposible,,, esc¡ibió a Fliess ei señacio 0. $,fan¡roni, antes que
':.?¡¿r
irii=,:'l I
':li:é1]::ri ,
,.
:
:, ;,,*bilca. De hecho. gra- pacientes desernbacaban en sus
14 de novientbre de 1897. Yo aceptar la iilea de que Fiiess hu- :,:4)t.;'.
'
*+;* iibro. poco leído al asaciaciones sobre elernentos
.ii.5,
puedo analizarme irnicame¡rte biera podida ocupar el lugar de ii¡lii;,:':i,;,, ,t-'s prittleros alumnos que se les escapaban al princi-
por rnedio de lo que aprenelo cle analista cle Freud los anaiistas i::fagt'npar0n en tor- pio" perr: {lue ss rerreiaban en-
'i,ili '"'

fuera {como si vo fuera otro}. Si prefirielon imaginar Lrn autc¡-


r í;-'::::':,-
,.:ljí]:,'¡,'', seguida llenos de sentido. Pro-
fuera de otra illanera. no habría análisis pa1'a Freud, haciendo de
..,ii.,,,i ." '
gt'esir,ametlle, estos contenidos
ilii=
enfermedad". él un padre autaengendrado. ' latentes del sueúo aparecieron
Esta precisión sobre la im- Fliess fue calificado de paranoi- ,-fÍi.,' , , ;* -,ori,,,'s qrie han hecho la comc) el elemento más impor-
posibilidad del autaanálisis es co en la historia oficial del mo- '1#.::,:,
,,ftiiür}f;.T¡:í;.,1-*'je ia garantía Cle qUe fante, del cual el contenido ma-
i¿'- *=, ,i* ;.*r.:: u*a ciencia ocuita. nifiesto no sería más que una
v srls ideas
':i:::u-1.

muy importante en clos senti- vimiento analítico.


clos. lüos permite camprender fueron clescalificadas como si
,il'l,.5,'
llr *:=,.. s.ti sueúos, Freud
lt1ti. :..,,

defbrmación, una fachada. Hace


que: incluso para Frend, el lugar fueran delirantes. Sin embargo,
1¡1F:!i= j
l
li¡ 5* ;: .É::tástico ejemplo de falta tener en cuenta que estos
,,,r',.'.[,,iu*:. i,,j,i*,¡i. ]lur:tro más en esa contenidcs latentes eran pen-
del Otro, el inconsciente, es di- la bisexualidacl dio cuerpo a la
rectarnente inaccesible. ..Si no, idea cle la horno-qexualidad, la
,'trii=!,;i.r,..,,,': r;¡iiiíx ¿*ita también Stl- sanientos inconscientes. es de-
,,X*,*- ;. ;.¡-rpr"ecio del mundo cir, finalmente, un acto psíquico
n0 habrÍa enfbrmedad,', anade periodicidad a la repetición,
Freud, testimoniando qr,re éi re-
"v
Freud gr.rardé cle Fliess su ob-
,,llrg ,;.::.:,:,. ;*g r:O pOflia dediCaf
-y no un accidente apareciclo du-
conocía la inaccesil:ilidaci de ese seryación prirnordial -*obre el pe-
jüi!3T¡.1
:
::- ::, ii : i:l c; il: teré s al suetio. rante el sueñ0.
11

lugar que ie deterrnina .v que ríodo de iatencia que ctngeia la "f¡ibjjlr*ir;:,i iÉir,, l]o"u poi'
-inclilso
'*.::
puede investigar únicamente sexualidad del nilio clesde los ,,.;i1,,ü;.!,-* ,:'".:i-. "sob¡'gsalto 0 un
$::É,*¡1t; ,i= ia ricla psíquica, por El sueño: lE reElizoción
porqLle se refiere a Lln Otro, Las cinco afios hasta la pubertacl.
palabras vienen a Ft'ericl, al su- Podem*s decir que sin la re-
,,,¡:,
.:
.*;i*rmgcida',. Dado su
;;::'T,.:.; de un deseo
,i.ll:.,::{:= i,'-,1- iüs suenos. Freud inconsciente
jeto Freud que habla desde oti'ú lación de Freud con Fliess ei psi-
Iugar, el i¡rconsciente. La trans- coanálisi*{ no hubiera nacido.
,r*i.:.&i.,,j,,,::.1¡*, Íá J L:.n ia S
-c rei aC i On gS CO

-,ii:l',,: :,,;,: .,1.*i AnfigtiA$, aUIlqUe Pero ipor qué el sneiro? iQué es
fereneia de estas palahras de un Durante los quince anos que -';;ff ;;,j,; :.,,.'i + ;'* i: i i n te lo que le justifica? iPor qué un
lugar a otro es la conclición del duró su historia, Ia flnctuación a r¡rret aC i ó n
i;i;"¡ +j:i: ¿iaban: la predicción texto tan sin sentido err ei nircl
análisis, pero esta transferencia de la transferencia de Freud,, sn
del conteniclo manifiesto _v tan
es sólo posibie porque Otro está trabajo cr¡n los pacientes, su de- ,,,.!*¡ir l¿:=,,*ll;.
: 1i;,-,¡; :- :ii.rL0llla. gl SU€ñO gS
lleno de sentidCI en los conteni-
a la escucha: Fiiess. Jnng ¡,- cles- seü de saber .y su interés por el
illfÍ*: ;:r.:r:"I3xri+n ciel inconsciente. dos latentes sobre los cuales de-
pués, Ferenczi. inconsciente a través cle su ex- ,

i*¡
Frsud por el slteño
.d* sembocanos?
Esto aciara los inrpa.sse.s tlue presión en la cultnra de diversas "l;r.';t,*
,..,r :,,.-.-,',:--, +:r nritnera Tratando de responder a estas
ha conocido el mr¡r,imiento ana- civilizaciones permitieron a s ilrstancia.
¿r¡u !s^^v¡l
preguntas. Freud descubrió la
1ítico alrededor de cuestione-q Freud lier,al a cabo esta empre- :1j":::9 .:-: ;.;ii:.i' qlle OCUpaba en laS
que él no tarcló en lLamar "la r¡ía
esenciales de 1a transmisién del sa extraordinaria que ha sido el ,,:i$$i+'t,, .'.n*= iibres de los pacien-
':;¡**, Í,. E:*iudü. lto\tedosamgntg
regia del psicr:análisis,., Regia
psicoanálisis _l' de la ftrrnacion análisis original 3' ia proclttcción porque iba a desembocar direc-
de los analista-c. Veremos má-* progresiva de la teoría analítica. ,.jiiji;-:it;,-' iltll Bfettef )' Ffe¡-lCi
,r::.:::i. r !i¡L.iv¡ tlgdio dg accgdgr tamente. después del análisis del
".- -lpirlr" ¡
sueño. sobre lo que le constituÍa.
,l ::.,.,, l*t-el'dos oh'idados. lle- es deu.ir, sobre el deseo infon-*-
':'jr3¡], :='.-::'iablemente a los pa-
La interpretución de los sueños ,i.t,f:t l'r: ¿ i:abiar de sus suetios.
ciente. Ei sueno *cei'ía, por tanto,
la realización de este deseo.
..l.jnl.i:, ,-*i;l;ilAl' a -cUS paCtente;t SO- El análisis de la"s asociaciones
'!- ' ,.",,-. .,r'o .,Se IeS impOnia,,
::
El anáiisis original cle Freud con la present'ia incontesiabie del in- del soliante rnuestra invariable-
* *--.. :. ]1":iSll1OS en SUS aSOClaClO- mente la presencia de un pen-
Fliess se hizo según tres ejes consciente. Freud anotaba sus
sueños. los clescribía, ics inter-
:::: ..,:,:+-. Freud Se etlcont.ró en -iamiento que atrar.iesa cornple-
fundamentales sobre las cuales '"' -"r*"iii*cl, como elios, de res-
l'r'eud recogia. con la tna"1'or de pretaba, ¡'la mayol'ía de ello*o se tamente los otros, aunqlle tam-
las paciencias. las formaciones las enviaha a Fliess cono único ..
i:r{:;il' =: *aiuino que ieS indica-
,.?ríi,;:: *;¡ .trsüclaciones.
bién se separa de éstos. Estas
ntras pensamientos son cr-rnoci-
de su prapio inconscieute: sus destinataric capa¿ de entencler-
y actos falli- 1*s. Publicando, en 1900, La in-
F.;' asi como el sueño comen- rlos por el paciente: le son com-
sueño*r, sus lapsu.s
:,1:., .i: :-:l:alü.f pfOgf eSir,amgnte la prensibles, aceptables están li-
dos -v, en fin, sris chistes. Ha}' ttrpreturión rle /os s¿¿e¡ioo-, obra !:r::i i*:portancia "v
que ic** sín- gadas a los i'estos cle su r.ida cc-
aqui, sobre todo en sus sueúos primera clue ha llegado a ser cé-
,;.;r*;¡ neurciticas. Es tambíén tidiana de vigilia. sienda los más
)'suscitados por su relación con iebre en el urunclo entero cono
Fiiess. el testinlonio nrás fiel de el libro esencial del psicoarráli- r:.* :.r-':"nlación deJ inconscieute, cornunes ias trigarlüs a los acon-
a1
JI
30
rL PSICÜANAL|SI5 li NAC¡M|f NTO DIL PSICüAi\ALISiS
tecimientos dei final de la jor- un deses inconscíente, que in- +.:-, ',,j.ld ,i*¡*¡: de ilna rg- ü1i-{mi} chica le va a buscar al
:l;¡i
nada qus precedió a la noche del crntinuafilente en ser re-
-qiste .-frYl:--r:,: - .-l¿ colegio 3,', sobi'e ur: plato tie pla-
sueño. Srn los ¡"estos diun:os. conoüido pCIr el sujeto. ).una ins' il i.,ri ; r,l - C'ilj ilgs plle- .1 ta, le rf}ece lricl: LlIt rTtli*$trari*
Estcs restos diur"nas yan a ser- tancia represüra, rensllrante, al -,¡;b;'#¡é*,'
=..;i.@,,*ii-,*'11l,, i:ii¿:i1 S¿?I'.ce Cntfg
yir de material, cümü ulr tram-
:1,i cl* ¡:anes cie chccclate.
servicio de las exigencias ideaiss ,iti.*gil$**..,,;¡l::'i.¡;, .:---:i,É l-:,.i*dg EStAi' in- Los suen*-o de niñori de este
pdín s*bre el que el pensarnien- del durmiente, que impclnen srl
tipo s*n mu'r,'fiec*entes. clan f'e
to inconsciente rlel sueñr) va a clesea de callarse. Ahora bi*n. *i ..'€,. . :t*j,::,*r:,::. fi* t*dgS la* cle la ftie¡za dsl desea ,',' cle nna
apü)¡arss pera. impulsarse ha-"ta sn$n{r, por la retirada riel i¡rterés ,tti;1F'ff i.-;r :,,::iii*'::SaCi*n eS el cen$ura aún ir:alcar:zs.c1a" El de-
nuestra consciencia''. pcr el mundo exterior y su luei- ,.-,iffffi,, ,,f.,,:, -. iil.:: i:g* ei ftrnciA-
se* insatisf'ech*- de hecho inte-
Este pensamiento aislado con- ta *ohre el durmiente, p*rque Ia .:-;:.iffi¡X.S¡::lr#iq.,
-i;.. jiiü¡llf f- qUe fla
l:
:"-
rrumpiC* la t'íspera. *oe realiza
tiene un deseo chocante, inacep- matricidad y, por tantc, la nrc- .r,:.;;:..' t,,,'
j
i.*i=i::,::.:,,,.-i= l:r,* ::i i * f f: . a i t gXt A
:,'l"l.

tabl* 5'exlraño para el sanante, vilidaci eslán en $uspensü, fa- :,r,".',,:¡¡,:


S
tal cual durante el **urnc,
i', 1ie;;¡¡¡:i'. i i-: : I i :::¡i :'e SLl lllida, I-os silenos de 1o-. adt¿ltos srlll
El io acoge a rnenudo con de- vür?ce el retor¡rc¡ del desea in- =.'i*te *:tr ::r,:: :.eSi:**iit it k:S
negacién. ssrpr€sff e indigna- ccnseiente. La censura es m€nsr cornplicad*s e inran:prer:sibles
-di: ,"!t:,::,.¡ .:i:.i*:jtf$ qug se
:.'.-'g..@
ción, nos dice Freud. -y es una {¿ue en estado de vigitriar pero, s .',':;Í*{ i.:.. en su *ontenicl* manifi*$tü pür-
t:t, ¿*áiisis dei
constatacian muy frecuente que pe-car de ella, Gperati!?. Esto es i,:'::tF¡:111-_Eilj=. = +: que la eiaboración detr sueno im-
puede resumirse así: ',No vayas *uficiente para que el dese* in- ,,,...''.,..,, :it. ,* :j¿ul,*t:i¿j¡i da a püne ai eieseo inc*n**cientc iln
k-¡s
rlisfi'az para p*eler Faser a ravés
a meer
-dics el sonante*
que consciente vuelva al duryniente,
esa persüna que yo asesinü en pero desdibujado, pam poder
'tl:.,¡ffiffi.,:+. .li*l:sri*ntes dgtr
filtrr:s de la {:ensura. que
cle ]r:.s
'..'=:9'1?. :,:l ;'.Ji.Lilitiad de volver
mi sueño es mi madre to mi pa- traspasar la barrera cle la cen- r:r'i;i:,iiw:ji+: r.f :ai.' :",.,; -:;:::*ia t* mandO el
ternrina p{ir *ier cotrp}etarnenle
dre)", sura. Es la elaboración del sue- -.t tifH#t:::,,1',, ,;';' :-; ::lla$engS ViSUale*.
in'ec:nn*ril:ie.
no, -'':-fu,',.,¡;:i - :**,,;r- lTl ::*i*r gl f ugn* ccn
[s
l: ,

.,rr'i,g¡ii;:a;=.., :t,;i: ji.;::cig e] serftido se


: rl ,.:..

cen$urd: La puesis en es(enc


deformsción del sueñs La elsborsción '3,1.'"*' ,l: ".--". áS :i1lágelie3.
del sueño
Incluso cuando ** llega e s*pa- del sueño:
áffis s*$#nü de niño Sin en:barg*. el s*enc.r es tan ex-
rar el deseo incansriente del sue- desploz0m¡enlo,
trañ¿: para el soñante qus, muy
ño. el sonante no puede más que condenssción il inenud*, ltl ¡:u*sta sn escena
recibirlo con rlenegacidn, indig- y figursción ciei sr-reño escapa al stijetr). que
nación ü $orpresa. Esto fbe 1o
qrre puso a Frend sobre la pista
n{i *ntienrl-e córna puede ser rle
Este trabajo eorl,siste, por tanto,
*cli creación. El sonante cuel:ta
de la deibrmación del sueíla. en una serie cle operaciones que
la escena cümü si le hubiera sid*
Si el cüntenido nranifiesfa del re-rponden a io que Freud llama
irnpuest,a. L'{.}fir{} una realidad clel
sueña es tan ineomprensible es los prüce$*s prirnarias QUs,
porque el deseo incnnsciente na extet'ir¡r.
csmü l¡eremüs más adelante, ca-
puede llegar a nuestra conscien- raclerizan el sistema incons- Así. circula en lcs mcdiCIs an&-
cia tal cual. Está defbrmado par- ciente que Freud va a mt¡strar iítico.r la hist*r'ia de un sueñr:
que está censurad*. La clef*r- progresivamente, y esto gracias qlle ss cuer:la pare mostrar que
macién dei srieno se explica, por al análisis de ios suenos, ei suelio e$ en l'e¿lliclacl una crea"
tanfo, por la censura que trans- El desplazamiento perrnite al ción. la puesta en ei;cena clel so-
forma ei sueño en ,.realización deseo inconsciente transferirse narir¡r. {-Ina ninjer suena {iue un
clisf'razada de un desec repri- de una representacidn a otra con bello irünrbre negrü 1* persigue
midi)". la mayor de las mot'ilidade*. dentro cle sn apartameirto, En el
El sÍntoma, es, par tanto, una Hace falta pare ell* urr eslabón m*rnentü en que }a tira sal¡r* la
felrmación de compromiso entre as*ciativo qrre permita la /lb¡z c¿1m4, $e ilara, inmóvii: .,iQu* es
püI. la rna- k: que haces?", llre$lnta la rnu-
jer. ,.Yn no sé nacla. .$eñoi'¿r... tes-
" Flsta imagen sugi*re que el firctnr dinámic*" hr fuerza qrr* posihiiit¿r ln
prnpr-rlsii:n cle hr-c p*ns*miento** inci:n-ccie*te$ en l¿l cnnsciencia. se encuelltra
en el tran:polin, r:n los rest*s diurnos. sie¡rdo rnás hien a ]a inversa. Son : *clar¿lt'i:r'*r,efil*ntÉ [.luti. pai'ir ]:'r*ucl, l,-¡s illstllttu.: t¡irs¡¡¡-¡/¡f I et"l
-'.',-"',.:r::á:
precisamer:te los pensamient$-c in*ün*cientes reprirnidos, lr,!*. ¿iesec¡s incons- '+ :,i,::,,;::t::-:¡.
ija;:radcs prilsion*r r/¡'ieb¡ pür sus peruiiare.o c¿rettsr'í*.rtir:i¡s ¡-r*n
cientes iigad*s a ell*s hablanda propiar"cente, h:s que dispcnen de la fuerza y .:.*,ir*ii;pi{:.i-, a li"t.: c1*1 ¿rninial. -{* rüp¡'e.5e¡:til1l *n l¡r esfi:t'a i:sír¡rtictr. r'á qlt{} É}t sil
ir"tchan prir nianif'*stsrse. A estr:s d*secs Fr*ud hs comparó can el suc.ir¡ ca- :.;:,:'i4r-i:t *:tá ei fnconti'*r'sr.
'-!::,.,E'
"t cüli&Jk¡ entr* Jr: :c¡nátic* ¡,' ir) ¡:;íqliir:i:. tilnlr,r
pi.talista. r¡r-re dis¡rrine de] rapital, de la energi*. rnientras que los restas diurna* jrsil:::',:1 ,:: ":+pr*s*ntr:¿:irin rl ifiL,a cl,:.rl'] pür'un ;:f'ectc¡. .\mi:*s pl"i*clcn ir jut'rt*+.
stln ruerüs elern.*ntos ssitre i*s qu* se apü::á *l de*eo para hacerse expreso. A :.+'*.. ¡,,",:ti-iit$rante e¡r }a nlr;vilida*J clsl ¿rfi:ct* )" i:1i sn capacidad pala i:rve;trl
estos restos ciirtr¡r*s I'rertcl las c*rnparri can rl so¿,ir¡ r:niprcscri{). que aporta las :,, ..:¡-.;ljr'1" em¿-:citl:laln:enle un*s jdt:a*c u {}tl'¿]-(. súr oncilentra }¡r ha.re cle lOs
ideas. El cleser¡ inccnsciente es el verdacl**r r¡?.Gl.r)r^ del s¡¡eiio que lo pone en :.,i.:r,:' :ir,:'r;::]iü; Ll {:iptat¿rcin¡res qu{:r;* describen ¿}qui {{.}}t1$ pl'cpiils ciel pt'Üt*sü

march¿r. tN. clel A.i ,:ta:.:;':'!Í.1': :.¡ , N . Cl*l ¡\" i

2r)
LJ ¿.-
JJ
iL ryrc()AlA!1sis rL NACIMIENTO DEL PSICCANALISIS
poncle el hombre" *€s
En fin, par.e terrninar esta ¡.s_
nO... .'. ;:: l*ii¿: cle lenguaje. Se
+.ger.,., discursa dei psiccanálisis, s€
pida e inconpieta presentaciii:: *e' .r.;; *+uir.ocación in la
La historia de este suen* cla
adrnite el lapsu** enrojecienrla
fe de la inadinisibiliclad clel deseo 9*l *uefia. resallarnos que Jt;,. iijl*isif,rji',; i;*- i.ñil*8.*fiü.' .V Si Se CO- co¡nü si ncs lrubieran pillad* en
inconsciente en el cantpo de la ha¡' nna interpretacion ünir.*:.- :L\,¡,; . ,,1;,.Iii''i:: S*A Ul] p$CO, gl una faita.
c,rnsciencia. E incluso cüa¡lcln el ias elernentos qu-
sai del -qusño.
suerio nr.¡ está defilrlnado, el so- constituven el contenido mani-
riante conti¡rúa lrablando cotno {ie,<to no tienen siprificacir,:
-ci -se tratara del ;ueñ* de cual- com{} tales. Su senticlo nc ss en-
ffi m#$ritu, el inconsciente, ls rlss
quier otl'a pe].sona, testin:anjar:- tiencie más que sn su artj.c*-
do de esta nranera que el cieseo lacióii _*a tiavés del trabai,;
,,:.H$ii1:',:,.J,ril.S AnO$, en UnA IeU- gesta de *n in&no. Para mi sa¡:-
incsnsciente aparere conto cx- asccialivo del sanante- *o,,
traño porque s-e trala del cleseo ,-..+,i: ..: .iii:i::'{is. UnO dg e}lOS fne presa. con la scnrisa en ia boca
los pensarnientcs latentes de:
clel Oti'o. ';ffi.': **ir':?a ¡ púbiicamente v repitiendo de forn:a caricatu-
sueri*. ..r*¿:, , :,.: il.SitilEnrg per.:tstente re$ca su ge;t*. otro anrigo le res-
* * ,ri,:ii+ *erecha" lo que ie pr:ndió bruscamente: .,No hacen
.:*.: , .,,*-.i*'; r,al'ias vece$ a vi- falta años de estudio para saber
nPsicopatología de ls vidg cot¡dionon - i: j,i ::*""ró1ogo. Este ca- clue te masturbabas cuando eras
',;*ffiú= .:"+ ¡::i¡iestaha

en ei ftrs- pequeñn ".
,r
,T-r*,1-:. :.: :-i-itbir hasta tal pull- La risa general coll qu€ se aco-
Cuando pui:iicó Psrcap*f olagia
- síutoma, elios dan fb de ia pre- , ¡*;i. :Í,'-i =l*.Itr: defeChe l'A nO gié esta intei'r'encicn fue inal-
rle la uids r:*tirlia¡¡a, dei Que en- -qenciA de ese li_rgar psÍquico se.
l:r::::1.r-.:-., :r. i.r:::,.::i:;*r

,,;1.; ""r'.:
;ri >:

""''"*. vidable. El arnigo que hiz* esta


vió un eiernplar a Fliess,-Fr.eutt garailo de la consciencia que """.';;i{i¡¡.¡;.;:r;,i
:t
rl* c*nffiba estc. vo interpretücian salua¡e nü tiene
le escribió en agosto cle 1gü1: rj $¿lüntbre d,el es-
:,

Freucl, con la interpretctrión dr


.i.giirf:.+: 'r..:.
=:; ningun conocimiento ile la lire-
"Ha,v en este iibrr"¡ un nrontón Í*s suenos, iba a p*del caracte- :,::' L..;:".;:-:.,. i. i::Si*tía en el planA t'atura analítir-:a. Per'ü p{isee una
cle c{rsas que te c*nciunen, cfi* rizar mejor" '.iff;.:-
I:

?'*-f, *rOstrarme cÓm* fuerte d*si* cie selrtidn comun v.


sas rnanifie-*tas lldra las cuales .,:i,,,i,:.r,;. :,-, r* iii*qrigaba, 1o que me sobre todo, de buen humor. Ha-
me has pr*r'isto cle material. r,, ,':: * :,:,.y-a',:,::.f ai:n tffgs gf: Ia in- lrituarlas a sus golpes desp**s de
cosas escondidas cli].a nro¡iva- Lo pulabrs de lo ¿1:,::,.-:*:.;,, ,;-,ii
_'-, f¡ti*
.d * da FfgUd Sübfg mucho tiemp*. tndo ei mrindc
cién se debe a ti,,. verdsd toms la ;ri:,'.'g:,,:::i
:¡t
*r ct'ibi e n t
g. P ara :* ¿i * i g reía de buena gane ], compren-
.;* *l :*;l*
-

Esta última fiase da fb del Iu- delsnlers u lu clra ::r:,.,.= cle escribir está clia al prapio interesado.
gar que acupó Fliess par¿r Freud, :r*g;;-,¡",':.:j.**l-r l]1'U-rcAmente y fe- De esta histol'ia.yü no nle que-
aquei del sujeto siipuesto conc¡- Dejarrclo escapar una palabra en l"',,,':l: *igniÍ]carlo inconscien' ¡; daría más qtte con un aspecln
cedor. doncle el saber supuesto lugar de otla. et sujeto seso- .= ;* t:=;:*r'i:aciqn, |a prohibi- que me parece propicia .v que
fue a cau-{ar e} amor de Freud. br*coge cie asombroi incluso a ',:;;:::': ';o :o :::ASiUfbaCiOn. nos indica la presencia del in-
Camo {,a interpretctción rie i*s \reces de una sorrla inquietud. , ji,,:,='i,i-:rifilo {iue n0 di tal gx- consciente o riel Otrei qr"re hal:ia
s¿tstios. el librn sstá llerrr¡ de Camu si cualquier otro Lubiera ,r:¡t:.j ....;.::, á SU pfgg1tnta, máXifng a tral-é-{ de nr:s*tros. Como etl
hablado en sri lugar. fln efecto, ',.:,iJihi,;,,5, gl SUeñO, gi
ejeinplos pr.opios de Ia historia :¡-i:]-iü pAl'A cualquier otra situacién el1 la
de Freud .r.'' Fliess. Lapsus ira- es Otro quien ha habiado en el **.$3 :i.,;:,,i; d* ult sínloma 11ü qr"reaignien crrenta un chiste "'
lugar del sr"ijeto. es el incons- j; 2'urin,gi1¡1 SinlbOliS:nO ia alusiún a la c$mpara-
blados o a menucio escritos. ac. :'a::ir-*ii.r.:,.:::::ri

cienfe. Y la sabidur'ía papular no


];-'9

;::;i ¡:;;+ tgffdfia SU Sifili-


::r':.i.r"ir:l1l',:,
-aquí
ción *spiritual que *{e apo,rr sü-
tos fallidos u olvido de nonlbres, + . :, -. ..j -r-- d +L

es io que Freud califica ss erluirroca cuando da a este f'a- .;;!:l;H:;,,: *3 *: Illisllfü 1'. pOt" tan- bre la proximidacl ge-tticular en-
cü¡110
psiropatoh:gía cie la vicla coticiia- llo aparente r¿n nayor val*r' que .:,::i- -t::,1, pl;*i3* sgr interpretado tr* la mafto blnqueacla .v el gesto
na" qu€ aünque concierne a t*clo a lo que nü se ha dicho, Un pro- ,: :, r..*. :i u*ntexto de las asc- de la nrasturbación*. la risa cle
verbiu libanés cla la urejor defi- ,;i ;r",,1::: ii*i SU;etO. l1
un terrero da fe cte que alguna
el_mundo, nü tiene nada de pa. ' l';:i:,*r*,: p*r ia insistsncia de
nicién del lapsus: ,.L8 palabra Ce cüsa" in*consciente !ras{a ESe
talógico,
la r-e¡'ciad roma Ia delantera a la :rfj::,=r;::':r*-'. :ltre atfef.í a tleCif ifni- momento, dei hecho de la r¿¡-
Recibir a rln arnigo cor)fun-
diéndose de nomhre o a un pa-
ütra',. r:;1,:::,.+r'r:,:* *i ciagncstica:,.Del:e presion. acaba de ser revelaria a
riente can i:alabras de aCiós o
Ctiando no $e tienen ganas cie ;i'1:.:.:J,i* *l Un Calafnbfe de eS-
l

los *.1entes.
equir'*car-ce elr el día de visita ai
recibir a nadie v c'uando se le ., ,r:::* , ,,,Y4 sel. i1,'a sé1,,, re.g- De hecho. en 1905" Fre¡"rd ha-
ac*ge con palabras de adiós, es- Fi.,:¡i:,,., *1. ..el neuról*go va nle bía va señaiado, y es una práe-
dentista son realnente equír.o-
tas palabrfts son las que dicen la ';:. !.:r:::::E*. Fera *qrié es ese di- tica habitual en todos ls-r psi-
eos de ia vida co{idiana {¿ue sün verdarl. Pero es una verdad que ;t#:*. r*i*n:bre dei escribien- cr:anali-*tas. que durante uná se-
finalmente triunlbs para el de- se impone cümü un errrlr"Ce len- :j::,' . ,:.s.¡iía é1, acentuanclo el ;sión el paciente se ríe s*guida-
seo inconsciente, F-r.eucl lcs tir- guaje, dadn que, cieshaciéndase
dena dentnr d*l canrpo que él en exclrsas, se llega a decir que
llana ,.las formaciones clel in- la r.erdad de nuestro deseo no " ,l-: .'.:'sii:n lrigrnal iite.a c¡¡-¡ l¿ exprt:sión .palabra der espilitu t¡¡¿ol ¿ili:¡-
co¡rsciente". Cnmo el sueñcl o ei ela nás que un accidente. un :;-,:.', j: i* ¡:i*rde:rl tracluci]'pol chiste. lN. del A.i
,::

J4 35
rL PStcoAirÁllsis
mente de una inlen'encion del devolverle sri ¡:alahra. Es la i;l-
analista" La risa nos indi{a que terpretación.
se ha l}egatl* a $i. ,,r*r'elado con El ciriste " es aquí, clesde tc¡d*
exactitud ei inconsciente irasta ¡;unl* de vista, cüntparabie a i¡i
ac¡uí *cult*,', Perc rr1 esta si- interpretaciéil. P*demos añaciii
tilación nr: ira¡"Lina trii.cei'a pet'- {ius es la que nos Fei'mite tan:-
srlnil. l{* e'xisien más persünas bién comprender Für riué ij*
que ei anaiista 3' cl anaiizacl*. puecl* haber autoanáliiis. Ei
Ahara bien, I r*ud ir:sistió nru- análisis necesita, en efectc¡. cte i*
e;cucha de un telcei'o c¡tre es e.
ch.o snbre el heci:* de que el *s-
píritu necesita ia anaiista, c¡.rien permitá atr pe-
pre**encia rle
ciente dar la r:redida del tercer*.
un tsrcero qu* cliera fb, c*n su d*1. Otro quer habla *n éi,
risa, c{e r¡ue se habia placlucid* f,ste f'ue cl ¡:a¡rei de un Fli*ss
un ler.ai¡talnientr: ele ia repre- qlle permititi a Freud realizar *i
sión. En este sentidc. la co¡n- prirner análisis, peri; tambié::
paración c*n ci ;ueño perr:lite a d¡rrse cuellta de la necesiclad d*
Freud eiecir que este últimCI es
un .,praducto psíquico pcrf'ec-
transmisión del ¡"rsicaanáiisb.
far"a esfr-r. I'rerid debfa pasar pnr
lil
tarxeilee as*ciai 3r qlie nCI ha;r' la inrerpretación de sn" propias
nada que comunicar al praji- sueñüs, de s¡-rs propi*s actr.r* fa-
nlo,', püI'que pal'a empezar es in- ilidas: par ia intel'preracid;n dei f;üNtEPClÓN TBEUD|ANA DEL
l:unr*r y del espíritu cle su c*"
conrprensible pera el ¡:r*pic so-
ñadar. lríos encontramcs en con- rnunid.ld ]r sn cultura con el r¡b-
APARATO PSIQUICO
diciones de decir c{Lle: si el ana- j*tivo cte c*nvertir todc esta en
lizado se ríe c*n la inlervencirin trans¡uisible, Esta transmisión
Cel analista es pCIrclrle. en ef"ecta,
nü -\e pridía hacer máx que des-
p*jando, tenienda en cuenta
éste ha tccad* ur: lercer. Iugai.,
c¡rda casa. los invariantes que
ei inco¡rsciente dei sujeto. *l
Olrr:" corno le llana Lacan, Y es ¡:*rmitirían f'unclai' pi'cg.e.=iia-
ments Lrna te¡.¡ría clel apai'ata
pürque e-qte ütrn ha hablad* a psíquico. La qrie nüsfitrüs iia-
trar'ás del sujeto pül' la que el mamü$, e*n F'rettd, la tnelapsi-
analista ha p*dido *ntenderle',' n.'l n ."! n
Lrir\J¡irü..

Ver l:,rrt ¡,r ¿rrttelit-ri.,


iii.&:.j. :¡+*=;if#;;r :f de**enVgh,ía Sft consclencla se clebía a un oivirio
¡ ;':'¡.,i P]¡.-iii \. se desarr,:- activo por parte del sujetu, ol"
ig**:.r,; ¡ i.li :*::' acionu* clínicas vido que el iba a llamai' r.epre-
,t@- ,, i ds su clientela sión; )', For otro lado, que los
=_1#iü
u;j.; ,lr*.;,i i* exlcc'tltró con pensamientr:s inconscientes
t,.:*::ia:'** ,=ti: :¿:^rie se ha llamaClO consignados en ese lugar eran
.:.ii ,i :';,ii.iit.{ del inrcnsden- pensamientos sexuales"
:.,,-,-l;9¡ ,,..=:::i*1.,,;, iü5 pl"üpi0$ SUgnS$
r:.:¡,1:,;;: *-;'.
"'''ift- Para resumir el desarroiio de
,-'.,á¡, +* s*s pacíentes' $us Ía elabaración freudiana, pade-
.r..i:W$.. r:ür 3{iüs fallidos y las müs considerar que las prirneras
i.j...tg*gi+r"=:;**, de los cuales observaciones clínicas permitie-
=g';i:cts
.:"¡ ,,,=:,* i* i:rpnasi* y ctros rCIn a Freud constatar la di*qo-
;o@t .f¡*::*:?* s*b¡"e la pinta cle ciacién de la consciencia ¡' su.
'-'.i*Hl-t ":* ;-f, Freud construyó püner la existencia de un lugar
psíquico inconsciente que padía
:
a::'r.':il: ::': i :¡+:.1
.''.,,''jfr.ig¡:
i:* le $erá jamás r,üh'er*e parcialmente cqlnscien-
=*ni:¡
Fi,:;v- día inclusa se te bajo hipnasis.
,, ,gáu;*'=:*.i:n-*uii¡ de eseándalo 3t
püfque gi pSiCA-
,,;**-:'r"'fi:ir}t:,,,É-:¿a
[s sbrescción y el
**;*: -: :-; irlnostl'fldO qUe la mélodo rctúrqulco
.'l'..¡#*'*:f*ru;,ñ ruit'* tro normal 3' lo
.-,''n i. ** más cuantitativa El segundo paso fue canstatar
i;':.@,.;:;;:,;:¿r,ir'* Porque ei-psi- que ia rememoración de los re-
'.','''*iÍ;f r,:;,*:: ,;* ha eigscubiertc gl ca- cuerdos *lvidadas prsvocaba
:l:r.,':r:'.::.:,:
¡:-,,* n .
'riJr-='..*rs&i dei
: r J :
inconsciente una descarga effisci*nal: Ia
.t,-'l!*,j ,-,1- * i:*mbre sftt¿o üo¡no abreaccién,
'r'.,,,,'::=,.irl,: ::t*:: i r* n gtt r ót iCq
_V
p0rqu e ilr.rrante un ciert* tiempo. el
..¡t.r,.: ;.i',,:i* ,*,;** ci* aquellO qUe eS objetivo terapéutica buscada fue
- ;11¡[¡;rr"::iÍi*":;,,:'#
.'.. a*:, il.ain g ntg gn g St g i n - esxa abreaccién por la cuai el pa-
- "'s*:**l=::i* rsiá iigado al sexo ciente se liberaba del recuerda
.v
5r

.''T' -""''*
' ¡:a .\
traunálic* cle un slrcesr: delante
..,,,,,,*.
del cual no había p*dido reac-
ci*nar, Era el método eatárquico
@ ${$scr psíquico de Breuer y- Freud, qlre duró
r*Ws*do de la quince añüs, desde 188ü a 1895.
retesciencic
i ri- ;: r:.
Esta purga o purificación que
er& Ia catarsis fue progresiva-
::,:.

'=,, :
:l:::';;.::,:

=:*
-i:fn1üs
visto, la hip- mente rfejando su lugar al tra-
¡' '=
'.'.r:.:¡¿,1.'..r1; i:isteria permilieron a ba.¡r, de elabrracién llevado a
.,',i¡.r-l;'¡':,,, :r:r:peCl:af la gXiglgnCia caba en la cura clei paciente, tra-
, '-, ., ;::s*iente bajo la forina de ba-ir: por ei cual ios elementcs
,::,r { ,;:$á1" p*íquieo separadc de reprimidos retomaban su lugar
Pgro si, para Pie-
,.",',,i€r,t:in,::-rp:i*¡::*ia. en la virta psíquica consciente
I,,,,,'.==,J.=:+t. ¡'$s esff¡f&rs' iegu ridos isenalemeis aquí que muchas
'-: j . .. :: ¿11 a UnA COnCepClO"'n cie psicoterapeutas rnodernüs vuel'
' ,'ii.' i:,*:*:ia i:asada s*bre una ven implícitamende a la caiarsis
' ' 'r; '-,,n3 Ce la insuflciencia. r'si al tcmar ia des*arga erltoci*nal
*e:=u:J *n lugar psíqui*o ití*o- como itnico objelir.o o {in de la
,,,,,,.i;'drig:+ ''** ia c*nsciencia ese lugar lerapiai.
,, ;,:r:":x *r*l'n:ai
, ):' 11ü Se encüntfaba Este cambia en la técnica, que
',,' , fli*:! *u* entre los enfermas. desembacó en el psicoanáiisis"
;'l:.¡;;g í*.e progresir.amente de- estaba ligado a los *bstácuias
,- ,i,-: i¿xds c{ue ese f*gar era enc*nti'ados entances par Freud
'' **:';+:-s*1. - no abreacción en algunos ca-
'l:=*,r:d sr separó de Breuer sos, resiste¡rcias inrportantes al
,:. '::,," ,*-rir:, por un lado, que- este reeuerda _y reacciones transfe-
,
,,,,qr.r psiquic* disaciado de ia renciales algunas Yeces violen-
20
,*lj:,'
",iY "

rL PStcoANÁlrsrs iffi,'
{+"itriit::ti,:tli,:,'i:.'
|,:.ir.t¿a-::r_.; :..i
.:
: i:r:
CCNCf; PCIÓhJ TRTUDIAI.JA
las- .1' a las per*pectívas teé- existencia ele un grupo psíqu.ii.; ,-;'_ ,

'mm-':tm i-" ::"ir:r:::aciones. Lns zar la cellsura en ei nir,el de una


ricas nuevas qne rle aquélics ca- ri" .. ,¿':
aparle. tamblén hubo de ar":.. ,*i.. , .,"-+m^q"..ffi.i*,;:.,,
u,., r¡s¡rii4+..: .,,
-
l+,il, * *.* i iengn clgl i n- especie de mur* imaginari* que
bía inf.erir'. cular una hipótesis sobre un ,;" j,,. .;';i*,IT¡* impediría a lt¡s jugadares mirar
¿q,sT,''* lLr :' dgl mUnda
gai'dnnde eran crnfinadü$ ssr¡trr ,;-" ,#ffi,:*I* . i,,,i;;l; l*rCii:idaS pOr ia de forma itmediata hacia el larJc
t'' :l
[o represión pensamieníos ir:conscient*s ,ry"F¡o-1* I ,i,,1- ,:..ie *;iá hahitr¡ai- de las dedcs de ia m&n{i elCIncle

El tercer pas{i teéricu dada p*r


E.ste lugar fne llamaclo el i::-
i*liii:i* * :':- ' i; para Freud cr¡n podemns iocaliuar ei incr:nscien-
can*ciente. Pern icsmo t{i*ti;:" iiiil''.i¡*i$s -ii,'::" ir*cira, sncün- -,*s te" mientras que el prec*nscien-
F"reud fire supriner la existencia guir los pensarnientos inccns- ..:{$iit.;'¡***'w*ib: :,.,:'*{,: :ii*:nenle en sus te-ccnsciente eslaría en el 1ad*
de un n:ecanisrnq] de lucha para cientes inae:cesibles a la cüni- ,ffi,'i'i:. '*;- -:li**tr]lü perf,üpcién" de las ceriilas.
oh'idar aquellr.r que f'uera ,,p8- ciencia de los recuerdos y i*s c,.-
.: ,.r

: :i: :i::i:
Coma "1"a hen:as tnencicnada,
'
1l::i:::::.:

nosü, harrcraso. doir¡rasc s ver- nocimientos que el sujet* pued, *r , -:,--:--.'lct 5e gllCügntt'a, este aparatc psíquictl fue c*n'
'l
günzüsü" en la consicleración ds traer al 1:resente unican:eui, ,.I ,:),Er,E' "..:1. ,. *:r ia peril'eria dei cebidc p*r Fr*ud para ciar cuen'
ia personalirlad: este nlecanis¡na c{}n un g-qfuerz* de mem*ri*t #ffiR*;r; : *i';i;i*i: treudianü- ell- ta de las eiiferentes manifgi;ia-
rle lucha ñs cürloüía cnmo rfipre- iCrirna distinguir un lugar ¿lnn" ,1. fi**,,. : *:,'*l;, *.qteri*r y l*s do* ciones clínicas que ss le impu-
sión, de l*s pen*"amientns son inc*ns- 1ffit.,*#+a*x ' , que sein r,l sierun erl $u pl'áctica e*n h:s Pa-
Suhra3teffifii que con el ci)11'
=i:*sic*s
i*=:;x- -u'sl ini*nscietrte. cientes, de 1o que llarnó la
r:ientes, porque .q*n activsmeni* ffit't psicopat*l*gía de la vicia ct¡tiriia-
cepto de represión, la teoría psi- slviclados por el s"ujet*, quien-kis ;¡i:ii..t'ii*:a*il j,Éüi;,*. ilr'*t#nsciente
nu -v, *¡r fin. cle los sueñtts, lq:s
"Y
coanalítir:a acababa cie rlarer. reprime ¡, se resiste a recorday- iliLH,¡+:liiu*t* :j 'j,*1i. así, i*s tr*es lu*
Como decía Fl'cricl. ,,la teoría de Ios, de un lugar donde ]s*c per]- gl aparaio su,yüs 3' las de sus pacientes.
,t,..,.
' .@=- ,r.** i=-*]ii?Fünen
la repre*rion es la pi*dra angular sarnientos, si snn inconscientei, , n*.f;r*:i,::. :*: "t' C*InO Ffe,U{ 1O
sobre la qu* repilsa toda el edi- e¡r el sentido d*scriptivo del tér- ;:i .-'r¡t¿l¡l ,fi::: :ti -:'ii liffnl*fa tOplCa. El registro dinómico
ficiCI ciel psicaanálisis", mino, están iguaimente al aica*-
P*demas, €fl ef'ect*, senaiar r,ffi,. üesde el principia, esta diferen-
ce del sujeta, quien puede re- ftt ciación entre los lugares p$í-
que con la extracción rlel con- cordarlos y traerl*s cle n*ev* fá-
cepto de represión, las tres glan- cil¡nente a la consciencia? quico,r está ligada a uila c.ütt'
des registros ds la metapsic*lu- ';,1,+ .',.::3r$l* psíqnico, Con- cepci*n dinámica, El inc*ns-
gía fi"eudiana clcupsn su lugar: :iE- , ;;.5'-, *StfeCtfamente aI de ciente no es una incapacidad,
EI preconscienle :,
..,., : tlf

'.:":iridl *-::. dcl que la cünsul'a una inEuficiencia innata que se


es clecir, los registrcs tópicü, Elcü-
nómico y' dinámicr. ,++..,,''.:1. .,iriii,fir.
censura tiene ia cünstata únican:ente entre lns
Fre¡ud fue llevarl* así ü $Lrp$ne]'
,,$t n, :t;:l:o-;*:: impedir el accesa histéricos, corno quisiera Janet.
la existencia atro lugar eníre
cle
ei incCInsciente 3" el c*nscients: ¿É,;, l,rr.ii¡-i':':**ia de las deseos in- Hl inconscietrte se eonsfituYe
Lo primers lópico .-:._; | ¡
...r -.:r.--r- -,ll p*rqiie surgü un cotrflicto entre
ei precr:nsciente. Generalm*nte.
.

,,
.-:: +,;';i:*itatil
t,'*.1
}a c*n*ciencia -y u.n grupü cle re-
Estos tres registrcs caracterizan se q:onsidera qile aquella que es ';!.:o1,i;
*¿=.tl;*:::;
.s$enü, t
SU debilidAd
dütfCle la Cen- pre*entaciones inconciliat¡1es
el aparato psiquics tal ]¡ cnlno prec*nsciente está presente de
cr]r1 esta cünsriencia. La ruP-
f'ue concebido pr:r Freud: luga- ,;l*:'* .:*r::l-uaba, a Fesal" cic
fiirma implícita en la artividad jli 1 , Sitxi**a*do, l* que tura de la vida psíquica es, Pür
ex-
res diferente-c lrópicai, en cün- rne::tal sin s*r sienrpre objeto de -
lantc, el resultadn de un cün'
flieto entre ellcs {din¡imica} y una toma rfe consriencia. Oesde
.pt*¿; r* i*s dlflerent*s defor-
:, ;,,. ::.'.:',.:*s ti.l* sufl"Ía aqUéI. LA flicta en el interi*r del propio
utilizanrlo una energía especial este punto rie vista. Freud asi- '':. ,, - '-:: --lllciona plellattrente psiquisma. La idea del contliclo
f económica). En 1g?0, Frer-rd mila el precCInscienle a ¡i¡,¡esfrü ,:fáT. .;e ,*+ *,vigilia, donde jue' es es*ncial en ei psie*análisis,
formulará otra lripótesi* sobre *ficisl. Fue cle hecho una de El c*nf1icto es constitutivo dei
3:o ,;:; ,'= :.,*.i**l de ur: guardian vi-
las lugares del aparato psíquico. ias raeones quü ler ilevaran a ha- .=..= tffi*. rpiCe ser huurano. )t'as lo encontra'
,,.
.Lr*;-*.i ;t;: a los.pen-
Ss habla comúnrnente de düs biar" cle} sistema preconsciente- *¡*lr=i:ll'." ine*nscientes inad' rsm*s entre los diferentes si*-
tópicas freudianas: la primera, consriente por op*sición al sis- ,g.*:*+¡, :r¡:riinadas en $na üñ.- terna$ dei aparato psíquicn,
con ia clistinción del inconscien, terca incr¡nsciente. ri l33ü*l1üCienie, p8$ñf A
.1,;1:,,::':...l.:'i.".r- tanto en la primera tóPica c0m0
te clel prsrün.cciente :' del csn$- , r!;;ii": '** recepciÓn de dande en la s*gunda.
ciente, y ia segrrnda, qu* c{istin- El consciente ;,j6¡j;";¿,* F*I'ffianetcr apartadcs,
gue el ello. el .yo ]'etr supervó. .'::'';:;,rii:**cia.
;,

l En la plinrera El regi$lro e(onórnico


El con*ciente será, p*r t*ntc, e} .::;r;: ,i";, i.*. ü*n5¡itra s8 sitúa entre
$ inconsciente terrrer lugar dei aparato psíquico ;*r''';:,:,:r::;ciente y el precüns' ,3e deduce en primer lugar cle la
frEudiana. .;':rry+, :" pr*dibuja lo que será experiencia clínica ett ia que
La primera tópica {de frpos, lu- $fuy pronto, en sus indaga- j: ;--:,*:"¡'ó lconsciencia moraiJ Freud -v Breuer se enf¡:entarun
gari se decluce ele l*s primerc-* ciones, Freud cnmenzó por dis- 1.,
:, i,:, .*gunda tópica. con histérico*. Hace mención a
avances teóric*s, Si E acias a la tinguir la c*nsciencia pür üpo- :=, I '¿
',1.r :,*l,a*ictn a lrueslr* juego de las nociones de energía e
hipn*six Freud c*nstató un e$- sicii:n a las huellas
{traz*s} **'.-Jri ihinas, podemos lacali- inl'ersión'- {desinversión v con-
taelo psíqui** cliferente del e*- mu$micas, ¡? la memoria, Ln
tado de c*nseiencia _v del des- misn:o sistema nü puede, al ., ;,-¡du¡:*ién cle i¡¿¿'¿¡sfrsssrner¿t. qlle prclced* de .&*scl:aitg en Freud Flste
pertar hahitual. v *{rrpusü la mi-qmo tiempo, p*rci}:ir y al- ii.:-,,*;..;1 hac* ref'el'encia a ia acupacirin d* lina ir.le¿l r) reprsselllatititr F{}r llnff

40 41
rL PstcoANÁtrsls g-?Y!Tr}ggN ryr?D]iTA
trainr,'er-qióni. Reposa soirre ei cura por abreacción. que iib*:"* tada está, por tant*, ligada al
principin de la constancia. segirn ia energía psíqriica ebnr"etti,j;, objeto que la ha provocado. el
el cual el aparata psíquico rieide en el cuerpo' 1o qr-re prür,oca ;¿, seno. Cuando, d¿: nuevc, el ham-
a manterler en el ni',,el más bajo desaparición del síntonra. bre pr*voca un estado de ten-
posibie la cantidad dE exciracién
-qión, ¡'antes de que sea saciada,
que contiene,
Energis lihre el niúo reaetiva, reinviste las
De las primeras er¡reriencias
clínicas de Freuel .\' Breuer $e
y energis ligadu huellas mnemónicas dejadas por
el abjetc. Esta reactivación pro-
desprende la iclea de una fuerza Corelativamente a la idea rie :.,, duce un fenómeno cercans a la
ligada al -cíutonra neurótico. nl separación entre la represÉft{n- percepcién prirlrera: es la aluci-
síntorna *se resi$te. en algunos ción 3' la cantidad cie energia q'_,= nación.
ca$os. a la curación. En oti'os_ la la inviste, Freucl cnnstata cii * Progresir:ainente, el niño hace
curación se acam¡:aria de una estaclos diferenles rle ia energl,l la prueba de la realidad que le
de-ccarga energética. la abreac- psíquicar caraeterizando ca*= permite distinguir entre }as ex-
ción. Además, en las asociaci*- uno cle ello¡ nnn de los clc* sl*. cifaciones r{¡}e le llegan desde el
nes de ideas que Breuer 3'Freud t*¡xas psíquicos: la energia lihi. mrindo exterior v las que pro-
pedían a su$ paeientes que hi- sn el incansciente- v Ia energ:, ;W,.ry {*sos primcrios ceden de su interior. Empieza
cieran, ciertos ac*ntecirnientos ligada en el .qistema preccln$-
importantec cle la hi*qloria del ciellte-consciente.
:::r

.w
rlt:fi::

F {gsos así a diferenciar entre la percep-


cién 3' la alucinación de un mis-
sujeto eran evccados dp manera En el inconscienle, la en*rgi* rios ma objetc.
indiferente, mienfras que acon- cc¡l-l'e libremente de una repr*- p:'i ¡narias están ca- Esla experiencia es absoluta-
teeirnientas ancdinos tonrnban ';;¡e.¡lry.ri*;
seniación a otra. Puede despla. ;l. a:s+*.r,':.,.*-..adglnás. de ptr la mente fundamental, puesto que
lintes af'ectivos demasiad* im- z&r$e entre do-r repl"e*entacionei r*s¡*¡i -= ;ibre cle la energia s*stá en el origen del deseo hu-
portante-r, ligadas entre elia* psr un e-*ia^ Inarro que se distingrre. desde el
.i"g'.r,Í , :..--+*,,j,,,t :*i,Í¿A \¡ se candgnsa.
Freud extrajo la ielea de una bén asaciatir.r¡. La energra de r-a- ;.= ,,*-,i*nrü de esta *r*r- principi*, de la necesidad, Esta
separación entre la representa- rias rspreseníaciones puede '",',,.,. . ',*::,-'= *. :"*inr.estir hugilas experiencia fundamenta la dis-
ción -v la canridad de aferto can tarnbién condensarse scbrb una -'::H¡l;
tinción esencial entre el objeto
'',
-'"t..*ai3,:.,.11;:i.**i. a* rep res gn t aci *. I
la que está inve*tícla ''t. La rrlra sola que representa. de heeha, a ,:,.n:i,Jas s*bie experien- real y el imaginario. Fermite
es, por tanto. c*ncebicla comc el todas las derrrás. El desplaza-
restablecimiento de una cone-
"-' :j¡¡ **::-o,iaeción originales o comprender el necanismc de la
n:iento 5' ia candensacién cons- 1!*Á l#r "
alnci¡ración en el sueño 3: en el
xión alvidada entre el recuerdn, titu.l.en io.; dns mecanism*s r¡, *i,-ri:;? tado a través dgl
.'.'.''',r--,'1 delirir.
la representaeian de un ültce*o esenciales para la e*mprensi{rn .-i.r1#lht***= ,5'*i *:ieno cCImCI Freud La búsqueda de la identidacl
traiimática,v el afe*ta que Ie ha- del sueno, rlel lapsus ¡r del sín- '.,"';¡it+:: ,i. ::$is. $educción: la bús- de ests objeto primero, que ha
bía acr¡mpanado. tr:ma. Lcs encontramcs tanrl:ién .','::' r:,
',, ,,¡f.i:'1
,;,

** i:q idsntidad de pgrcep- satisfecho la necesidad y crearlo


El clestino de la cantirlad cie en ia ,bas* de d*s figuras lin- tt ,'::*J;:r:i*:'izñ lc,* procesos pri- el deseo, guiará al sujeto en l*-
afbcto separada de ia represen- güísticas principales como son la r-.',,ffi¡ff,r,r.¡+ .;* *spiica la satisfacción das srrs búsquedas pasteriores
tacion es diferente en las tres metáfara .v la metoninria. a la*. -'-¡ai*'t:-:*.ri,:'it del deseo
tai.y como del abjeto. ta identidad de
neurosis entCInces estudiadas que Lacan dará tcda su impar- : :,ir.¡¡ ',=, *:: percepcién '* con este primer ob-
por Freud. Si tomamos el ejern- =i -iueno. Sin ernbargo,
tancia comg t eremüs más ade- ''':süÉ ¡,:,::;;;ii¿tcio¡¡ ttlucittc,taria. jeto caracteriza, por tanto, los
Flo de la lristeria. el síntoma procesos primarios por la bús-
f*ndorzal . es decir, el que nü
iante.
En cambio, en el sistema pr€- , ': .
, .r,,r,* ,:Í,;5:,,,,,: *Stá ya presente gn gl
:
:.'iri1ir :. : :fu psitologí* científira queda de una *oatisfacción in-
respondc a ninguna lesión {}r- conrciente-consciente. }a ener.- ',,,, |*.i" 1" sü. importancia me- mediata "v pcr una descarga
gánica, nbtiene su fuerza de la pa va a ligarse de manera es- t,'',
,.+¡¡,::l!l
"
.t;:; *i*:'la atención. Aq$é- "
energétisa total, propia del in"
energía p**íquica que e,i contr:er- table a las
reprefrsntaciones* ,i :: - ,:.prende por la hipótesis eonsciente.
tida en enervación ccrpnrai. La Freud psne como eiempio la ac- ',, ,,=.,,.' ;bs*rvaci.*¡rgs acerca Por el contrario, l*s prcce$os
.:
de
cu,rctcion clel sÍntama se rEaliza tividad de pensar, que necesita ',
1.,:n
xt *r qu* el niño dq pecho secundarios ligan la energía ;'
por la ccnexién entre la repre- una inversión de tono más ele. -' ,
*:, i:¡t estado original de controlan su traspaso en una in-
se¡rtación reprimida y ei af"ecto vad* sobre la* ideas en juego
que le corresponclía en origen, ". ,=l=i*::io. Ei han:hre, por ver*ión estable de repre*enta,
adenlás un mínimr: de despla-"v fi'eü un estado ¡de ten-
':'r*.,r¡9:r:.:.L:,,-r. ciones. La satisfaeción inmedia-
Ello e.r lo que se constata en la eamiento. La atención,se explica -.j,¡; i**i:p,*rtable que no cede ta que caracteriza los prücss**q

cantidad de energíii psíquica et: la frrr¡-¡ra de nn n"lc¡rtante r) r¿rie¡:tum de a{'ect*.


:.-;-;: ;;t' tsn la intervención de
...r-; :*::iliia del exteri*r, la ma*
primarios está aquí aplazada, lc
que psrmite eI funeionamiento
La exl:r'esir:n ir¡trrsi.r;ir: sr:bra"va erl as¡:ectr: ecr¡nrimic*" cnautitativa, energética :;I: *: : - -+i^f
,ieIiSiACClOn expeflmen" del sistema preconsciente-cons-
elel concepto; i¿r expresión t.nt'estitÍu¡u da nás {ácihnÉnts cüenta detr }aclo cua-
Iitativo dill cancept*. de la dig:ridaci ¡. el senridr,r c¡ne el ¡rfbrt* ie confÍere a la
representacion ccup;rdir. {N. clei A.l ' '''r :,i;i,* *"*::cept*s de fufenfi¿fad d.e percepririr¡ e ids¡rfi¿Jael d*r ¡:enscmien.fo, de
r:.
\:'p|' nota iintel"irif. g'i:,'.¡ ;;;;:'*1 de ahstracción. pl'esupünen en el futrr-rionamjentr: mental ia preexis-

42 4J
rL T5¡COANAL'S¡S c{}ilicrPcloN TREUD|ANA
ciente. Ei juici*, ia atención, el Conviene, en primer lugar. , :.:*Ilü:la era cünsiderAda Ccnto l:rin:"er a$pectn d* ia pulsidn, eI
rauonamientü y el contral de }a di*tinguir enlre la pulsión l' el ,;'l' iljslinlo de ia especie, que te. impi"rls*. Purqrie eierr:e un im,
acción sünj p*r fant*, posibles. instinfo, que rletermina un Lrom- , :ii+ *e::' objeto la pareja d*l s*Xü pulr* e*nsiante, totla pulsiirn es
Ya no es más la identidacl de per- pr:rtamienta animal que la hc- *slü 3, Fot"fin, 1* rinión, en
,:,i,,ii
activa. incluso *qi su fin es cl de
cepción 1o que se busca csn el r*ncia ha fijadr:.I $ue caracte- *i.:'*iic. de k:s drganns ganitaies. s¿llisfacerse ün la pasividad.
objeto. sin* la identidad detr psn- riea a una e$pecie dada" ;1.,'r; *i desuui.¡¡'irnieiitei cl* la se- {ür}1$ en sl e;qhibíci*i:ismo o el
sarnienia. Antes de 19il5, Freud presün- ;,;.xi*¿qri infantil. Freurt di* un mas*quismü.
Yemos bien cóm* la c4:asición tal:a ia existencia rne la pulsiói: ;r:ss:i iÍe gigante, Ia que le valió El fin es sl segundr: aspectc
entre lc* d** mod*s de firncig- bajn la farnia de la excitaeión in- 1,,.*, ;**¡ r,'ariadcis insrilt*s. dad* de ia pulsiúr:. El fin cle ia pulsiún
nanrient* dei apai"aíii psíquic* tti-na iiur inva$ía al siljcto, i. ;i;n $8 c*nsideraba ideológica- es la s¡rtisfhcción, ia solucion a
ller'ó a Frnricl a enunciar, €ll ccntt'a ia cual nCI hal"lía huida que la infancia era pul.a ia tensióli interna pravacada por
=*,;::*
1911, cl*s principios que rigen pr,rsihle, cüms en ei ca$* de una ,i, .:,,*i hahía que dejarl*, 3' que }a el impul** pui*i*nal. El niñ* de
este funcionarnienta; ei prir:ci- exci¡ación ¡:rccedente elel mun- -*=,:r,":*iidgd n* a¡:arecía má*q ciue pecha qur sigue chripando des-
pi* d*l piar:er 3'el de la realidad. cl* ext*ri*r. Frend veía en estas
.,¿::r,* ia pubertad. pués de haher satisfbcho $rl
I-in p$cü antes, en 19*5, exci{aci*nes internas la fuente
l" :::ii* busea. en efectü. riil hambre biisca disminui¡' la len-
Freud había hc¿:ho ia hipí:te*is er:ergótica del pensalnientei psí-
:.',, :*i. ;:*rticular e indcpencii*n- sión pr*v*cada pür la pulsidn
de las pulsicrnes, *specifiesnd{} qr:ic*.
,:¡t ** ia ;iatisfacción de la r1cüe- aral" En las prir,reras apr*xi-
,,'i., *. gl ninn de p*cho, pür rnaciones freudia¡ras ai üüncüptr]
ttno cie ios datos esenciales riei Fue estu¿iiand* las pe,rr,ersio- -¡.i*':,*i*.
&:: bu*cca un placer ligaclo de fin pulsi*nal, e$te iiitimo *stá
psicoanálisis, v prontn opuso ias n€s sexlraies cuanci* l'reud l'eer]- ''.S.1'r':

1.,:.:
*,;cción, que lobr:epasa la
".*, estrechamente ligada ¿r la fuente
prtlsior:*s sexuaies a ias pul-oio- c*ntró el cartrinü que le llei.ó al
nes de atttccmlsen'"acién. clescubrimiento de Ia s*xualidad
¡*'.,*i,**r:i$n clel harnbre, pue*to dr i* pul-tiór:" Ile firrn:a inme-
, ;.;y'*':*pués de alimentarse c*r;- diata, apat'ece en eslrecha liga-
La srlfr,,sfbr:ridn u.luúnctt*r"in infantii y a la hipéte*is de ias :i¡ji,,^,:" *i:llpiindü$e su dedn pui- ¿én c*n el ol:jeto de la pui,:ión.
Cd dcse{i *s ul1 dato erencial pulsi*ncs sexual*s. Entre i*s La firente t1*: la pulsirin cs cl
r:*.. ,:- riiiiü iOUr'S üi üi'ii-¡iii üLl.i-
para comprendrr el dualisn:* p*:l"versü*q, la errltización irnpul- ,;" r,;i;:l*igiamente un
place¡: li- lugar donde apar*ce la excita-
freudianc, el iluaiisma pulsi*nai sada de las rüRas erdgenas ex- ,#¡:i,,L,.'. * :¿e excitación de la zona cian" la zona er*gena, el prc'pir:
qüe üpone el in*onsciente al pr*- tr"agenitaisu, coma }a zana rlral ;*,i:*-" ;rCepencli*ntemente de la órgano o nparato. En este úi¿i-
c*nsciente-consciente. o la zana anal. en las que la ex- ,*:i;,i ,;tii,n de la necesidad cie de- Ir1{f rasü, ns la musculatura fr:da
citación prerl*rnina sobre o in- snter$ la qtte ¡:riec{e $er? pür
clus* rlispensa clel placer ligada : 'l* *n:bargo, $$tr piacer su. ejempir. i¿r f'uente dc la quc
La pulsión sexuol
a k:s propio-t órganos genitaies, ::1r*'=Y*t¡l¡:io eS püsihle gi'aciaS a Freud ilama la pul*i*n dE do-
Pademos recaicar que con el llsva a Freud a fbrmular la hi- i;;t,. : ;n':i*nes vitales de aritar:on- rniniü. En r:uanto a ias dif'erer:-
*':-r*. j.- . funcii:ngs *alisfecl:as
concepto de pulsión, Freuii din pótesis de puisinne* parciales -,-rif tes runas er'ógerras del cu*i'ilr.¡.
url pas$ filnrlamental er: la ela- para cüruprencler la sexuaiiclad ';i:¡rr'=. riliür'n$. Per* si l* pulsiri:r éstas cr:ndu3*ran pranü* a Freud
,pe.5:;.'. T* A apuntalal'se, es dg-
b*ración de la t**ría p-ricoana- infsntil ". a ia coneepcidn de difurentes es-
lílica. Antes de Freud, la sexualiriad
,:=., á:,1.-i"r-¿11'se. tn Un pfinCipiO, tark:s de ia er'{rlüción sexual d*
s.=:* funciones de autacan-
i¿as
trns ninas, bien c*nocicl*s baj* el
, r-:*;i{iu, se lii:*rará casi de fr¡r-
non:br"e de *stadas ai'*l. anatr, fá-
tencia de una imagen {i rEpresentaerién clel r:bj*:tr.i qr.re satisfiuü en {}tro rn{r}trentG ri::.i, :::*i*qliaia, 3" pr"tntn la pul-
iico v genital. ',
la ner-'esiclacl" [,n *stacln de cle*ecl. e] snjetc i:usca dB nnrvc *l clrjr:ti.r qu* satis{izo ¡;¡;.ri **:riial e*trará en c*nflict*
tal inqr-ri*trrri ecu es;r intag*n inte¡:i¡.rr" del mislno" cligarnün {r}} es* r'ecu*ld*. ,,:. *:;:*i*ione*cdeautq:conssr- i. El cuartc r' últim* eleinent*
'' de ia pul*ión es el *bjet*. Pur el
Fen:i ixtcdü rniisi;'arse irnpacir:ntr ]' d***ilt';;*l' l¡l lensi*:t {iue ¡le lalrilac*r:3 ;,. !g '
ltreva ¿r *sa ilr-isqueda en rltant{; a}c¡i¡r¿a €$É r'ecuts¡:cic. rl*tán¿l*ll¡ de Llnas c¿i-
":-'-:: *-r piii$iones ilcl vc¡. c*illü oi:.jeto. ia piiisio¡r trata cic iiegar"
ri.::: .n,::t'l ruáS Adglantg.
r:a*terísti*a:,i cr¡a"*i-alucinatr¡rias. hl que rül'resp*ncle a t¿ irlt¡.'¡fir¡i¡d ¿l¡¡ Í]er.r:ep & su fin" Fara Frsud, c*ntraria-
tión. o agrrantar esá t*nsián intern* y toi*rar clne la h*squeda *er prolongu*. mente a lasi funci*nes de autc,
par medir: de di-*tint*$ p*nsarrientos ligack:s a I¡r fbri:¡n dr: 'u'r-¡Jr,*r ¡r enront.r¡tr #'€ $,r*pufso, el fin" cünservación cl*ndE el objet*
ese ub j*:tl rl,.'**eilrlo en Ia realiriad, i¡fglll i;lrttl i',j-¡{,¡¡st¡¡ltienf¡. Etrtrlr}ü**. s* ptt*d*
perinitir la descarga tr:t;rl. :'¿ que el *bjeto estii irresentü para sati*cfacer el l' . $enÍu" f .el ebieto a;:tá Ceterminad* i' l:i*lógica-
desto, perrr et1 le r*aliciart. Quizá io aclare ur"l ejenrplo clínica. Ants tr¡ia exci- ** pulsión mente especificado lla aiimen.
ta*ién s*xua}, el srijett puerle *rit*rizar la desca.rg* ele la excitacié¡r por medin ta*iér: sncia el hambre" pür
de una nrastr:rbaci*n slrnplement* t:r-¿*.si.-t¿lu.t:í.n.r¡nrfr¡ imlig*n*s erctícas. t pu*iie *:;- f.,il lñnt{i, e p*$Af ile la SA- ejempl*i. *1 abjet* cle la ¡:utrsión
llensñr rltidr tienr qu* hilcer pare tsnseguil' conclnist;il" Lllla pare_ja sexual rlue #:+:;:"ri+]n del hainhre, el niñr: rte $exual puede sei.varial:le, dada
le acom¡:aue a !a c:¡tlrla e:¡a nr;ch*, o L]sa tarde, perr-r rtescle li,r*go no r¿h*ra mis¡nr:. ,:, i,':,, *igue chupand* su priigar', que, pür unff, part*, en ei origen,
ihi. d*l A.i na está farzc*amenle ligada al
+={ .;,;.: un* fuerua interna, a la
"-' f;l ¿:ancepf* cie pulsión parcial es clave sn tanto da crienla d* *na sexualicl¡rd
que na r-'r¡inciel* c*n ]c genital. l"as pul*i*¡1q¡** parcia-les i:usc¿r¡r su. *aii*faccid¡r ,; :i* pr-rede sustraers*. le em- objela y- pür üttrff" ,'n* llega a
ele firocl,-¡ independiente inici¡rimente. *l des*o *r*i en *l chupet**, r. s*lc rfespués a. Esta idea rlel impuls* in- dispone:"se de éi más que En fiin-
si todo se rleEa¡'ro1la sir: dificrultsd. s* integran Lr{-illr{} ej be*e-r ¿in unii aspiracian i,l'*É3:;,. Sres*nte en Freud ciesrie crión cle su apiiturl pnrn per':rriiir:
gl*bal *nl:ordj.r"raCa a }a pulsiót"r genital, tN, cl*l ,\.t +i,:;.:':-{ipi*., nr:s da unn idea del l¿L -*nt,i -*facción'. .

44 r+3
FL PSICOANAL}SiS
CCNCIPCIÓN FREUD¡ANA
La. ccmplejiclaet del .-ifflf¡¿s elei tt'u-t'e el nhjet* duraltte $u in- :**: i* anorexia
: ¡=*:licto entre msntal
como r:n etal anal se desnarca netamente
gbjeto en generai, y del objefo de corporación,
la puisión en particular, es mu], las dos deman- de la necesidad de defecar. Po-
il'Iéianie Kiein clesarinliará ':,*"s,. Rechazando ser alimenla- riemas obse¡r'arlo en ei niüo que
glande en el pensarniento freu- nociones importantes siguiend* '..= *i niño da fe de sri negafiva se diuierfs retenien(io o expul-
diano. Sin embtr$o, es la nocién a Abraham. La aposición entre ' ¡.iir.isr desaparecer su deseo en sando su materia fecal, indepen-
dei abjetc parciai ia que rieiimira iri bueno y io mai*, objeia es- , -r*i* de que su demaneta estó dientemenre de su neresidad.
de fol'ma más estrecha la cue*- pecífico de este estaclio oral, le .=*.::i'rcha. Para Lacan. Ia de- El fin pulsi*nal cambia según
tión del cbjeto de Ia pulsién, en pennitirá explicar diferentss as, : ,:.l::::,ia oral no es la satisfacción que la materia fecal sea expui-
tanto en cuant* la pul-rión eso en pertüs de la parte clínica de las
priruer lugar, la purlsión parcial. ', i:a¡nbre: es una clemanda ss- sada o retenida.
La pulsion parcial enfoca Lin
FSIüO$Iü. ' i",i,r. ta pulsion *extta! par:eial Freucl m*stré córns el apren-
En cuanto a D. !tr¡. *'innicott, *rlr;racia par Frend, la pr"rlsión diraje de la limpieza por e} (ron-
cbjeto parcial cu3'a impor-iancia desarrolla el concepta de cQ¡efo '',,,.-:',:'"=;- retctna t*dos
teórica irá en aumenta, Encon- sus derechas trol *ei esfínter anai iba a ser ia
traftsicionuf para explicar la ' * ;,:"*dr¡minar s*bre Ia necesi- fuente de los resgüs cle carácter
trarnas un desarrallo detallada trarrsición entre el nrundei in- :,:sj ** nutrieión. que aparecería¡r posteriarmente
en ivíéianie Kiein, que rorna ei iericr dei nino, que nü disringue , Ll xina es empujacio
térrnino de Karl Abraham, Jac- a aii- en ia per$*na ai:sesiva. en iu que
aún el ssnc com{} un cbjeto eli- **:,tarse del cuerp$ clel ctro que c*múnmente se ilama ei
ques Lacan da el concepta dei cai-ác-
terior a sí mismo, y el mund* ,'" *ix:enta, -t' es precisa**nt* ter ana]. El oiden" la lirnpieza,
objeto lal. Lo encontramcs, sin exterior dande los objeto$ pue-
embargu. ]'a en Freud cumo el '*=.:" **nde interviene el desec la meticulosidad v ia terqnedad,
den distingtirse como no für" ,-;¡*,;r'i1g Qtt'n, la nradre, QHe acep- por eriemplc.
objeto al que tienden por ias pul- encuentran sils
n:ando parte rlel üuerpo del i
;.i 3* clejarse comer por ei pla- fuentes pulsionaies en este mo-
sicnes parriales. Este objeto par- nino. La abservación camún ',';ii|,li El canibalismo descubierto ¡nent* del desarrollo de la se-
cial se refiere al seno. las heces, permite senalar el valar de este
,;,': *'eud toma aquí tcda
i.

su xuaiidad infantil.
el falo, 3r también la voz, Ia rni- objetc transicianal: el bürde de
rada y irlritl lu que r;e desgaja ¿{e , *;:ip,iiiud de *ur'.,*u der",cración El niña descubre durante la
*na sáliaüa, ia alrrr*ltada a ui¡ :*rx;ai dei crierpo ciei oiro. íaue anai ias prinieras ¡r*ci¡:nes
la relaeión madre-hijo. Et im- tro¿s de tela es chupado par ei
pulso, la fuente. el fin ¡, el cbjeta del piacer de la pr*piedad, ei do-
nino reemplazando de fbrma '::;:::; Iitl* pefnfite ApO)¡aInüS Sü- minio o e1 p*der. Freud descri-
de la pulsión se distinguirán se- progresiva un seno que se aleja, 'tr=, *::a nue!'a tr.ilogía. La ne- bió una pui-*ión de dnminio, que
gún cuatro liempo* importantes Sin embarsü: es de Jacques La- ,.;-*+..i*.ci. la demanda -v el deseo se desaruollaba en el aprendiza.ie
de la erniución de la sexualidad can de quien '-'endrá la apnr[a-
infhntil: la fa-oe oral. la fhse ffid,
+*:. :**cn tanto el desarrolla de de la muscuiatura clel niño,
ción firndamental que purificará ;ú **r{r-i&tidad infantil, a}rededor
la fase falica y, en fin, ia fase ' exactamente en el misma perí*-
la teoría freudiana de la pulsión ,,j¡¡ ;=* pul*iones parciales dife-
genital. clo que la fase anal ienfre 1cs d*s
nral. .::*¿,;i*tias por Freud- ccmo la v tres añr:si.
;=;,:j*a ¿te la cura anaiíiica, Camo para ei esraciia orai,
Ls fEsa ürul Neresidad, demando . ,,::ri* *1 firr es el permitir al su- Karl Ahraham ha descrit* do*
Determina ei tiempo en qr_re tra y deseo ,i:r,::l ;i€i¡cubrir la causa
de su de- fases que comprencien el estadio
evolución del ni¡:a se organiea Partiendo de la experiencia clí- *r. * ¡¡'arés de ias dernandas su- anal: la fase expulsiva v la fa*ce
alrededor de una zona erotica, ;.**::';a:i que el sujeto necesitará de r"etención. Mueh*s antnres.
nica de ia anc¡rexia mentai, La-
de una fuente pulsionai liamada :**=:itir a su analish. Par atra siguiend{r su estela, }ran estu"
{an se cues¡iona cóma un nino
z$na arai. El objeto oral en sen- cle pecho rechaza el mamar. Si
,i;*rl*. esta aportacién iaeaniatra diaclo el estadio anal I' su irn-
tido estl'icto es el seno. EI fin ::=¡* intervenir una dirnensión p*rtancia para ia comprensión
el bebé sacrifica así su necesidad
pnlslcrnal aral rad.it:aen ia *qatis- de alimentacién, hssra el punt*
;r;::*ipa], la del deseo del Otra
del earácter anal._v de la neurosis
facción que procura la succión, ,:'::i¡zlai, ia madre.
de poner su r,ida en peligr"o, es obsesiva. Pera cle nuer"o ha sido
pero también en la inc*rpüra- que existe aiguna co$a más fun- Jacques Lacan quien nüs ha
ción del seno. danental que la necesidad: el &* fuse snsl dada una aportación de gr.an va-
Karl Abraharn subdivide, si- dese¡r. Adenrás, la necesidad Iol'para la comprensión de este
guienda a Freuri, este estadic e¡r debe pa.;ar por ia demancia, por
';; s*gunda fase del clesarrollo
.j'* i* sexuaiidad infantil se ar- estariio a¡1al. inii'rdr¡cieii'Jo la
dos partes. Hasta las seis meses. ',1*s de*qíiladeros de la demanda,.
:;:*iiua alrededor de una zona terna neeesidad-dem anda-placer
Abraham cansidera qlle este crjl?lü decía Lacan, para hacerse
tiempo nü cümporta ambivalen- *r:gül:'a, 0 fuente puisional. -v el papel que
juega la demanda
ellte*Cer por $u madre. de la madre. Lo que e*pecifica
eia, es elecir, una. opüsiciór entre
;:,":;iituid& por la zCIna anal.
Ahrra Lrien, a la demanda aral :":i pi'ecisamentc pcr el arificio }a f-asg anal ,v la pulsión parcial
el amor ¡'el odio" A partir de 1**r si*l ni:ls de ser alinrentadc, la
seis meses _v hasta el des¡efe, ia
*xl" que la crganiza está ligad*, de
¡::edre taml:icn 1.ra a respander
aparición de l*s dientes r$ar** c*n *ira cie$:anda remitida ei
tl objeto de la fase anal e-* el nuevs atra vez,. ala madre. dado
i;,:li* f'ecal ü heees que se $eparen que es la madre la que pide al
un períoclo, calificado de -cá*i** bebé: . *éjate alimentar". **i *uerpo del nino. Este objeto niño que retenga sus excrsmsn-
crai, durante ei cuai apareü* Ht:e Y *s precisanente en
este ;u:isional provoca la excitación tos qr"re ios expuise a una hora
pulsión canibaiista" Ei niilo des- F:.tr:t* **n¿ie p*demos compren-
-v
:i* ia z$na anal. La pulsión par- precisa. La espera de la nlarire
46
47
üL PSICOANALISIS CüN¡CTPCION TREUDIANA
.y de su enlornCI, a ]a vez que la có¡no Freud hallla de la nociolr ,=ipai:le. eoüx| _y$, ijor tener ele- En un s*gunclo tiempo, la vi-
aprobacién general que acom- de un primad* fálic*: la zorla .t*ii$ prohibidos respecto a rni sión clel pclre le iieva a di{bren-
paúa los movin:ientq:s de expui- er$gena prinerpal en las niñas :l;:'iÍe. ,.NO deb* clesear nunc& ciar enlre i*s cir:s érganr:s. C*mc
sién del nino scbre el orinai, dan cürre-nponde al clít$ris. hnmóio- ::;.G* a mi madre; si lo hagr:1, cn, diee Freud, el gryan psnf, es ult¿l
a la necesidad de defecar la di- go clel pet:e en el ninc. i:" sL riesgo de sufrir la ñisnia réptrit:a *nperior rie su pequena
mensión rie un d*n, de iln re- L*s términ*s falo v castraeicrr t;*r'te,'" pien.sa el niüo ilequeno. _t, acrrlto r:lírr:ris. La niúa es víc-
galn, nrganizan un estadio fálic* de .-",,=:"icliltivamente a eslos dese*s tirna d* la eirvidia hacia el pene.
Freud habia ya diseñad* e.c[a una rnanera dif'eretlt* en las ni- .::rfsturlsas hacia la madre, ha- Aquí se rnarca la primera di-
ecuación simi:ólica. bien cCInü- no* que en las ninas, mientras .:,r i*x que se mue*tra contl'ari* ferencia {undamenta} entre ei
cida por los analistas, en la que haeta aquí acrbas har: atrar,e- É, r**unciar, aparece el adio por nino -y la niúa en su acerca-
materia fecai es igual a dr¡n, sado los estaclios cral _r,' anal de *; ¡:adre, ai que considera su miento a la castración. Si delan-
igual a diner*, igual a regalo, a forma anáicga. Tarnbién pocle- ;,:":::ripal rivai, *dio que e¡;tá ie de ia a*sencia clel pÉrlc en la
partir clel análisis de la neurasis mr¡s decir que este estadio lálico :,*nthién s*metid* a is repr*si*n. niña, el niño pien**a: .'.vny a ser
nh,sesiva, Lasan insistirá sobre va a intr*ducir al nirir: en la La angustia de la ca*traciór: castracl* cümo ella", dela¡lte cle
el estreehn margen que se deja cusrtión fundamentai de Ia di- ;rij:,:*üa en el niñ* ia re¡:resién la visión del pene detr ninc¡, la
aquí al deseü. al sujet*. En la fbrencia de sexr¡s. ,,:'. i¡],'i senlimientcs *dípicos, que niña piensa; .'he sid.* castrada,,.
medida en qne es la maelre qr"rien Para el niúo pequen*. el des- ::, i:an dejad* de realizarse du- La angustia cle la castracií:n dei
pide al nin* que le elé su maieria cubrimiento de} psn* conl{) :ii::* t*d* este períodr ilamado niño se cürr€sp*nde, en la nina.
fecai, nc le quecla más renredi* fuenle de salisfacción erirtica _v :ái:**. ?iene, por tanto, Llna fun- ü0r1 una envidia intensa por te-
al niño, pare salvaguardar su como sími:oio de valoración le .:.:r* esfructurante, y su apari- nel' Lrn pene. La ¡riüa pequena
desea, que $poner$e a la madle liet'a a s*brsvalorar el pene y a ;.;,::ri 11* e$ en abs*luto pat*ló- va a tratar cl* crerr durante un
reteniendn sus heces hasta el da- cansiclerar que' flüm$ é1, toda el ür*. ila fb de que el niúo r*- tiempn que su rnadre no sstá
lcr, después de identificarse ca- mundn tiene uno. ;,:::eia a püseer ¿t $u nradre .v castrada, pürü muy rápidarnente
ririosamente ccrn $u$ excremell- El descubrimienlo de la au- ilr:"pie la 1ey del padre que plan- va a cle*r:ubrir que, cixlln ella, sn
fos, que s*n evacuados por el vá- sencia de pene en la ni¡i* nü e$ :+* ssta prohibicir:n. Al rnismr: madre tarnbién ha sido castrada.
ier para burlar a la madre. ac*prado r:i recanscido coffic; :;*ffrpü r{ue renuncia a su ma- !h *ntonees a menc¡spreciarla y
Esta identlficacian del sr"rjett una evidencia. Se fcrrna así nna *rt. ei nino pequena se identi- & vrr e su padre cünlo nuevo ob-
can los exclernentcs, identifira- especie de ficción: esto les cre- :i,:,a e*:r su padre,v asulne igual- jetn cle $ü amür.
ción del sujeto c*n el objetn ial cerá un rlía cual.quiera. El pene ::l*nt* su identidad ma-qculina. l,Iientras qr¡c la caslración
para Lac'an. ]1CIs permite com- de la niria es todar'ía pÉqlle- Sin *rnbargo, Freud dEscribía, inaugura la represión detr csm-
prender cóma se constiru.ve el úo, pero acabará p*r hacerse ;i 1e** de este compl*jo de Edipo ple¡o de Edipo en el nin*, la *ina
fantasma sad*masaquista -y n0;$ grande. ;:;*;:*citir:fi. rtn cflrnpl*jo rle Edipo se intr*dlrce en el cleseo edípicr:
da una idea de l0 que pueds $sr {-ina vez que el nin* *e rinde :riativ*. El pequeno varÓn de- de su padrc'' pr:r la castración.
la estructura de este fantasma. a ia eviclencia de que las clife- ¡*re iguaimente a su paclre, )' Esla diferencia es fundamen-
Que ia demanda dei ütrc dis- rente* ninas que é1 ha paclido ,..,::':ridera
a sil madre cotn* $u tal para cümprsrlder lo que dis-
cipline l¿rs necesidades dei su;'eto sbserl,ar están efeclivamente Y es taml:iÉn a estos de-
::r-*1, tingue Ia sexuatidad urasculina
.y organice de esa farma la f"a-se clespr*vistas de pene .,-v que en reü; a los que debe l'enunciar. tle ia femenina. Tr:da su vida, la
anal nüs pernite c*mpreincler ninguna de elias ei pene }:a cre- [:: *asc contrario, se abcna el mujer queda así a&¡.erfa a} deseo
igualmente cóino ei estaciio anal cidr, se enÉlancha a una ílltirna :*r'r'{}rlrl de una homosexualidad incestnaso, que está acompana-
es el crigen de ]a disciplina, cie
ficcién: sólo rni madre e,Etá prr:- ;=r da fe de que el nin* no ha d* dei rnás grande cle las recha-
la rib*diencia y de ia si-rn:isión vi*ta de pene, cor110 y-o. La idea- :' id* relrunciar definit ivamen- zos en el hombre,
en i:eneficio dei ütrn. lizacién de una madre tcil*pa- :.* & üna actitud femsnina *nte Esta apcrtura al dese* del pa*
der*sa permilirá aún ai niúo ne- ,,.* *j*s de su padre. Para la dre llevará a la nine a ütril caffi-
Ls fsse fúlico y genitsl gar la diferencia de $exo,!, l¡asta :.ina, las c*sas pa*an cle manera bio: el de ia z*na erógena. Hl
A pr*ar cl* que Ia J'ase fálica, en el n:oment* en que se rinda de- ,,:ii'*:'ente, pgro nü de f*rn:a in- clít*rk, mu]' r'alcl'ad* iniciai-
tanto que estatlio pr*piamente tinitivanente a ia evidencia de ::*diata. rnente, cederá pr*gresir'&rnenie
dicho de la evolución de la se- }a ausencia de pene entre las en efecto, ia nina inicia ia fase su lugar a la vagina, prodr:cien-
xualidad infal:til. n0 aparece en nr{eres. de la que surgirá la an- í*ii*a con una vak¡racién inten- dase esto a ia larga de tr:da la
la obra de Freud hasta 1,?23, fi¡e #istia de castraciún. :,*. de suclít*ris. que se presenla adr¡lescencia. La p*quena nina
en 19ü8, ú$n el análisis de una Esta angustia nece cle ia fea. **t* ella como una gran f'uente $e prepara para recibir el pene
fobia de un nino pequen*, Jus- rírr que el nin* construye, de la ** satisfacción. Y, com* el niñr:. en $u r:agina.
nito, cuando dio con lgc,ce-i*-n id':* que éi ntism* se hace del :* nina vff a cclmen¡ar danda a La enr.idia por tener un pene
esencial dei complejo de castr&- *nig::a que le plantea la dife- ¡;; *lítoris el mismü gran valor niñ* da pa*o al cteseo
crxnc! e1 clel
ción. üe hechCI. e¡l 1905, en l*E re;:cia de s*xo. Si la niña r:a tie- *,rie al pene. considerando que d* disfruíar dei pene duranle el
Tres rnsr¿-yos s*&¡u fa fe*ric *e F*trr] *$ que le ha sido arran- i*dc el mund{r está datado de un caito.
de lu sexu*lidr¿t{. enc*ntran:**q qlad¡:. **rcrnadü, porque ella es p.*ne-c}ít*ris" E¡r fin, las ganas de ssr madre

4B
rL PSrcoANÁitsts !I ryc-!P-? g-ry lS!!-1A N¡
por parte de ia niña tcman sus madre: el falo. La relación ima- puisiones sexuales del niño, traduce en angustiaü ,Y *cettti-
raíces en el clesplazamient* en- ginaria entre el infante ¡' tra ma- t0noclerün su apügeo cÜn mientos de extralieza iigarlos
dre se cansnlida con esta iden- ilese*s eciípicas. juslarnente a la vacilacié¡r iden-
tre la envidia poI' un pene ,v la
envidia por tener nn bebé, ta tificación quü pernite al nirio tifirat,oria. Para mrichts psictl-
creer -"er €l falo de la n:adre ¡' a analistas, es aitn ésta la acasiÓn
renuncia a los sentimientos edí' rT
lrl perÍodo de lslenciq del joverr adal*scente para apl'o'
picc-< lro se llet'ará a cabo jarnás ésta creer estar d*tada del fuio
vechar esta crisis de la pui:ertad
de fbrma toral en la nina" que le fulta. : partir ¿le l*s citrca añcs co-
v reharu" de alguna manera las
Corna 1o habíamoü 3'a señala- La castraciót:, tal .v rom* La- ,::*nza un p*rí*rlo que Freud ha
csn la explica, no se n:anifiesla ;'"*iliicado á* perí*rl* de lutenrkt. identificaciones {¿ue no le hübie-
do para las estadios oral .Y anal,
la aportación de Jacqnes Lacan, únicamente scbre el niñn, colllCI ]urará hasta la pubertad. La la' rall permitido saftr" de f'orrna
conpleta clel complejo cle Edipo'
cün la introduccidn dei Otro Freud nos enseúa. La rastraciÓn i*-c'ia nc, es total, 3- Ia sexuali-
A partir cie ia pubertad, F&-
como elemento determinante c{e se manifiesta también en la ma- :i;n* del nino se rrranifie$ta a tra-
rece {iue lus autecede¡rtes dados
la evolución lil:idinosa del niño, drE. m¿is precisametrte en el vín- ','*s Ce la masfurbacién, lc¡s de-
se fijarán definitivame¡rte,v, s8'
nos perrnite entender mejor la culn madre-nino. La prohibicicn sr*s edípic*s o los fantasrnas
gún la imagen célebre que to*
diaiéctica del deseo a la que es- del incestei encarnada por el ¡:a- ;,;* satisfacen las pul-*iones par-
maba Freud del cristal que se
tán sontetieios el niñc¡ Y 1a niña clre se dirige al niño, a quien se ;tai*s. Pera son expresiones mí-
quebraría siexrpi'e según las lí'
durante la fase fálica. Por olra }e prohíbe pcseer a la madre. r:rca$. ,v la energía de las Pul-
Pero iprahnente se refiere a la
neas que previamente ha ían
parte, Ia nsción del faio t*tna ¡ii-]:ies sexuales se canaliza aho-
conslituido su estructtlra inter-
uua impcrtancia decisiva y se di' rnaclre, a quien el paelre prohíbe ::.t hacia la* actividades sociales
reintegrar el producta de su na. la desronipansacldn cle rin
fereneia ladiealmente de la no- ,;-":s ei niño empieza a encontrar
sujeto se realizará sienrpre *ce-
eión del pene, habiendo sido am- vientre. -i i:"*vés de los juegas y de la virla
a esta intel'r'ención ,*¡**lar. gun la estructura Psíqr.rica que
bos concepto* empleados Por Gr"arias
le determina. \¡erem*s est* más
Freud indistintarnente, del paclre. e} Otro malentai, la ill inicio de ia socialización del
adelante, cün las n*cione* cle es-
Ei interés que demuestra la madre, resulta castrarla en su ;:* üorresponde. Por tanto, a tructuras neurÓticas Y Psicóti-
madre por el pene clel pequeño pretensió* de tener un falc¡ v el :; renuncia cle los deseos edíPi-
CAS,
nino se sitúa para él c*nra Ia niño en su desso de serlo. Esta ,,-¡i )'a la puesta de la sexualidad
,i:f: E]üI11entáneü canrpás de es- Perr¡ r.oivantcs al lugar que
consecuencia ldgica del interes renuncia mutua permite al niño
$cupa ia teor'ía freudiana cle ia,¡
que ella tenía por sus excrefilen- renunc:iar a ser el falo para abor- ^é r'il
pulsiones sexuales en el marco
tns. Solamente aquí esle interés dar Ia problemática cle tenerlo.
de ia que se llaura el prinrer dua-
contrasta cün el rechazo que la De f*rrna distiirta- ronro .va ire-
nlos r,isto, si se trata de u¡r niño
*.,s crisis lismo pulsional freudiano.
madre opone al ninr¡ ruatrdo ve
Ifa{iet- er rI¡Ler'esl¡e'esLu ¡;ur €*ia. u ttc-urr.r-^tiñto. ** ls puberlud
Según la expresian de Lacan, ,.el Este paso del seria ai tenerlo Pulsiones sexuules
,i*::,:i:*i+riad se corre$Ponde a un
nino *s apreüiado üomü objeto- es el período nrás impnrtante de
pero despreciadc comü desü*,,, la clialéctica edípica. Implica . de crisis. Por uüa par- y pulsiones
es decir, despreciado camo su- juegci cle las identi{icaeiones se-
el
i, =*:t'.:
o¡ ;i**uce un despertar bru- té tluro€onsenrgción
jeto. gún *1 cual ei niñr"r renuncia al .= :*s pulsiones; Pür_ütra'
a:;* ;i*$la en cuestiÓn cle las Una vez qu€ Freud tlescubre la
'.iQué quiere ella?" es ia pre- desen de su madre {a su propio
:,,i t-':i:*tianeg parentales que sexualicad infantii ¡' nombra las
gunta que se plantea el niñ* pe- deseo de ser el faio y también a
:x*=:¡ p*nnitida justamente .14 pnisiones sexuaies" se acaba de
queño. Es aquÍ donde el padre su partic¡-ilar deseo lracia la ma-
.,1i:::: ,.;I.i'1f;. A üSAS pUltiOnes. El dar una gran pasCI para ia com'
aparere c*mo aquel que posee lo dre) identificándose con üqu pa-
,=l;,i.rfi{ i** edípica reprirnido des- prensión de la psieología hu-
que la madrE quiere, es ttecir', el dre, portador de aquello que fi-
anos feaparece.Y se mana, tanto para el desarroils
fatrn. nalmente hace ries*ar a la ma- =;r ';i*co
En un primer nr*m*nto- ei in-
i:;:**;ir en una crisis identifi- psíquico del nino comü Para el
dre, r,=i,:
rrs" de hecho más a4l{4, funcionamiento {idult* de la psi-
fante, lanto el nino como la t't
El ',sepultarniento dei com- ,.;;;:r :* acompaña de Cambios colagía, que puede funcionar
niña, se identiüea con aquello plejo de Edipo,, marca el fin de
o prcducir lletl-
que le faita ilaril satisfacer a la r,::rlt?]1"*iÉs que inscriben aún nor"rns.l.mente
los cinco primelos años v acalla
al sujeto en su propia iden'
;i.i:,::,: rasis.
-.exual. Aparecen las ca- Como -va hemos meneionado,
=i*il
,,:: ;i:stes sexuales secundarios. las pulsiones sexuales se desa-
"' J'¡'adlrcción rle r|.édtn: eue rorresponde al Uniergcng rle Freud. E*te trár-
mino -oe emplea en &lercátr para ei hundimient* o naufragio de un barco. El .lii:r:* ei veilo" ei canrhio de t'{tz, riulian al princiPio sobre las
cünc€ptü r.i*ne ¿r expresar para Freud Lrna dif'erenr:ia en el resnl¿ado final al .v:,,+;:*i*ra" y tantc el j*ver: ado- funcianes de autoconservación.
qu* Éeven abotadas las emnci{in*s de amor'3'cdi* enco¡rt¡¿das. re{'eridas a l*s :,*Fi*11t8 comü la jetven ad*les- Aunque Freud da a las funcio-
dns ¡:rierubl'as de ia pareja parrntal; una c]istillción üün rÉspect¿; a *tros cor:- ';,*i:;,* están aq*ejadot Por esos nes del ya el nombre de Pulsir:-
tenido; dei incon-"ciente. l'a que itr.s que *e refier"en al c*mplqjü de Edip* sr-r- nes, nü parece que ptdamüs con'
.:*:::bioS.
cnrnben, sin clejar rastro. como englobad*s p{rl' las agrias. mientra* que otros
contenid*; insanseielltes st: vcn strnreticl<ls lr la represión, y lnch*rn aun ¿lerde : is¿a crisis de la pubertad, a siderarlas cümo verdaderas pu1-
el inctnsciente poi'ret{irt}ar }"l:ac*rse exprebü.} en la conseienci.q. {N" de} A.i : :*:'de ner del tadu natural, se niones. Sin embargü, en su Preo-

so
5l
5! P:icoAi\tlrsrs CONCEPCION FREUDIANA
cupación por explicar el confiict{) plica para Freud, como le recor-
defensivo contra las pulsiones Eu* procuraron su s¿rtisfac- serrrar ai vo cle representacinnes
daban Laplanche y pontalis, que .,'lCIn t?, incancebibles coll su ideal moral
sexuale**.Freud ias opone a las ,1!na parte esencial de la pre- a e*tética que está en la
puisiones de autocoliscn ación. dispo-sicirin psíquica a ia neur*- -lo
base de las neurosis*, hacía fal-
o pulsiones del I'o. sis pr"oviene clel retraso de la fil nsrcisismo
ia dar Lln nue\¡o paso teórico su-
pulsión sexual a tener en cuenta 5i el primer dualisrno pulsional, ¡rlernentario para explicar las
Principio de plocer y ja lealidad,,. psicosis. De ahí surge ei concep-
üpone según Freud las pul-
Al principio rodo se rige por =:ie
principio de reslidsd . :.r¡nes sexuales a las pul*tiones to de narcisismo.
el prrncipia del placer, coniebido ,,i*i .1'o, permite comprenrler el
Aquellu e,q h qus se llama el pri- por Freuci para explicar la t;en- :,;¡:cionamiento del aparato psi- Libido del yo y libido
mer dualisnlo pulsirnal ell dencia del psiquismo a qllerer ;r,ric* y la constitución de ias del obieto
Freud. P¿lra que el .vo pueda cle- descargar de forma inmediata ::*urosis- Freud se plantea un
fencierse contra ias pulsirlnes se- toda tensión clesagradable. Has- ;van enigrna para la cornpren- Freud lo introdujo en el análisis
xuales .i' repriniirlas. Freucl ne- [a $Ll segunria tópica" introdu- ::*n de las psicosis, conto Yere- deleaso Schreber. en 191ü. para
cesita explicar de dqinde obtiene cicia en 192ü, Freud consideraba
=:its
en el próximo capÍtulo. mostrar que existe una fase de
la energ:a para hacerlo. Este pri- el placer ligada a Ia reducción de Dado que la experiencia con desarrollo de la sexualidad don-
mer duali*nio pulsional es cc- une excitación. ,v el displacer. ii¡ pacientes era limitada, de ,,el sujeto comienza por tc-
r:'elativo de otro dualismo: e] de pro*edente de una acunulación Íreud esperaba eneontrar en mar-{e a sí mismo. por tomar su
la oposicién entre el principir: de esüas excitaciones. En esta Jiing, la experiencia clínica ne- propio euerpo üümo objela de
del placer v el prinr:ipio de rea- per-rpectiva. y a pesar de los nia- s-qaria pare exptricar ias psicosis &nlCIr,,, Este estadier intermedit¡
iidad; a saher, ¿.i hambre o el t¡qrs que aportará, ei principio e ia iuz de su descubrimiento de entre el autoeratismo de pulsio-
anlor. del place'r es. antes qrle nada. un ;a sexuaiidad infantil. Fue de he- nes parciales y el arnor de objeto,
Ei amor puede satisfacerse cle prir:cipio econónico. Caracteri- ;h* Kari Abrahanr quíen le dio permitió a Freucl rechazar las
un objeto irnaginario. fanras- za eífunci*namienta clel sistema ,u::a prirnera respuesta positiva tesis de Jung y mostrar qlle, en
rnal, como nos .lo nruüstra la ex- inconsciente. es decir,, los pr.*- * afirmar que en ia esquizafre- la esquizofrenia. la iihido regre-
periencia de Ia satisfacción alu- cs,ios primarios, Las ¡:nisiones ::ia. llamada entc¡ncss dentendu saba hacia el auüoerotismo,
cinatoria dej deseo. El hambre. tienen tendenciu u **i satisf'e- :;rrcúz" el enf'ermo mental hacía mientras que en la paranoia del
en contraposición, sólo priede ch¿is de forma inmediata. a des.
:*fluir sobre sÍ mismo. transfe- presidente Schrel:er, Ia libido re"
ria sobre su toda ta libido que gresaba ai narcisiiimo.
hacerlo, satisfacerse. drirente cargarse por ias t:kts mds corfris. "vo
un instante, aquel en el que el cümü e¡r el ejempio del b*bé que
:abía antes dirigido sobre el Gracias a este concept* cle
exterior. narci*qismo. o amor dirig"id* a ia
bebé alucina el sen* esper:anda husca la satlsf'acción pnr la vía =undo
Ahora bien, cclmo el primer propia imagen corno en el mito
tenerlo rcalmeRte en la boca. alucinataria.
'i*aiisrno freudiano enfrentaha de Narciso. Freud consen'aba ia
Cuandr¡ hace .'., ;^e¡:i{e la *xprr- En lo refe¡"ente ai principio cle
",*r pulsiúnes sexuales a las pul" unidacl cle sr¿ terons. Este cün-
riencia dc la satisfacri,:in re.ai, ei la realidad. este interviene c0m0
:ir:nrs del yc, e¡ funciones de au- ceptn ie permitía también com-
bebé aprende a distinguirla cle reguladar del principio del pla- ;*conservación, el -1'o estaba, por prender atras diferentes tenden-
ia salisfacciírn aiucinatoria. crin cer. La birsqueela de Ia _qatisÍac- i*nto, clesexr¡alizado. Para C. G. cias atribuidas ai ¡,'o v desexua-
la que no ¡:uecle ]'¿r contentarse ción no se efectúa por una cles- ulung" que rechazaba considerar lizadas en liempos anteri*res.
para saciar ,qu ir¿rmbre. üicilo cle carge inrnediata de la energra ia iihido como el origen de t*elos La fatiga, ei sueno. el dol:r' la
otra n:¿rlloi'&. el bebé aprer:cle pulsir:nal, sino por una trans- j¡:s afectos y que tenía tendencia enfermedad son las consecrien-
lulu) cierprisa a c{isting:i.lir enrre fbrmación cle esta energía libre a diluir este concepto freudiano cias cle una retiracla cle la libido
aiucinacióli .r' pci'cr:pción, en energ:a iigada. La satisfac- *-.*ncial para el psic*análisis en del mundo exterior hacia el pra-
Si la*o pr:isicne¡ iilte- cir-¡n se difiere. La capacidacl del *n concep[o más vagü cle energÍa pio yo. Por eson la libid* del ya
"cexuaiss
den satisf'acei'se en la *ir.rCina- psiquismCI para esperar sü con- psÍquica global, la dernencia pre- es clifÍcil de distinguir de ias fun-
ció¡r, las irincione-* cie antrici:n- vierte en Ia garar:tía de esta j:t'z se perfilaba como la ocasión ciones del 3'a. A partir de 1914.
servación o ¡:ul-sión del va nr: in irar:s{brrnación, Las caracterís" Ce demostrar a Freucl ere, con- cuando Freud introduja el nar'-
pue,den l*g-r'ar nrás c¿ne cnrt iii iicas del sistenta preüonsciente- lrariamente a las neurosis, la cisismo, aparece un nue\¡o dua"
pei'cepciciir dei objetr.r r*ai. f,_{ta r""*ltsr:ienie se desarrollan: la *nfermedad mental no se expli- lisrno: la lihiclo dei 3'o y la libido
es 1o que r'¿i a penniiil"is_* pa;ar aiención, el juicioy el razona- ':aba con refet'encia a la libido. dei objeto. tVeremas más ade-
mu.y deprisa ciel principi* del n:ie¡:io dibujan ias cualidades a ia energía sexual. lante cónro Lacan retoma esta
placer: ai principic cle reaiidari, pr'l'lns cuaies el psiquisrno tien- Si. hasta aquí, ias pulsianes euestión c*n el estadio clel es-
del que el}a-* van a re:uiia¡ ri* ri* e¡: cuaiquier caso a buscar, *el yo servían para la represión pejo..i Si este nuevo dualismo en-
alguna nlatlera el ag*nie. de ias puisiones sexuales al pre- tre libido narcisista 1'libido ah-
t'arff. iograr satisfacerse, una
En co¡rtraposiciór:. las ¡:illsi*- r*s.r:t:Cad cle pensamient* y no
ne$ se"xnales se engenchan ai n:ás unn idenridad de per*epción
principic rlel piiecer. io que ex- '; I.os c{}nceptos de idenfi¿far/ r.fe prnscuriier¿tr} e idenfidud dr ¡-:rrer,:¡:rltj¡r sr¡¡'t
r*:1 ias pri*:eras experiencias aclarados en una notir anterior- lli, clel A.i

52 53
rLlsLc?nryAls_ls
jefal no rc¡rr,'iel.te en conrpletei-
den. por el contrs¡'io. a consti-
lorycFPsI?I |t5g?_rAry4
mente caduco ei prinrer clualis- tuir unidades cada \¡ez más
'='- ruede ser el objeto depuirio- por unir interiorización de las
mo enlre funciolies de autocon_ :;.*: de vida -v de muerfe, que prchihiciones parentales. En úi"
grancles. ,:rjnntamen_te cCImpünen el tir:ra instancia, se puede desen-
sen ación. r: pulsioüe$ del vo. r, üescle este punto de vi.sta. el
pulsinnes sexuales, inicia, ;; .:.':. cr:ncebidc por Frerrd carno cadenar contta ei _l:ir cümo en ia
propic análisis. en tantü que
cualquiei' casü, un nlovimiento üFcra pnr clesligami*nto fi.ac. '',':iepósito de la enerEa pulsio- x:elancclia. _v ell* perurite com-
rle elabaración teérica que cün- .1,
ciona¡niento, ,sería obra* de la
t.,j,::.. pl'ender que eX nrÁhncólico lle-
dujo a Freud a ün ilitimr lrerid cümpal'a el 3'o a un po- gre a sriiciciar-*e, La noción es-
dua- pulsión de nluerte. C*mpren- .-:i** adulador'J' corrupto que se taba va presente en el pensa-
li,rmo pulsional. que enfrentaba demas así la resistencia i'eroz
las pulsiünes de *'ida con las de ,:':::i,'ierte en el agente de adap- mientn de Freud tras los c*n-
qire golpeo a lo* analistas cuan_
muerte, al igual que a Ia segtrn- dr¡ Freud elaboró este concepto.
-;*l,n entre ias exigencias pul- ceptos de censura o de lt].c
da tcpica del aparato psíqüicc: *::i:ales irreductibles del ellu, sentimientos cl* culpabilidad in-
Al conti'ai'io. el arnor
el ello. ei vo v el supori'O '
upui.u** .*i *xigencias morales y crÍticas conscientes.
cnlitü un obstáculo para el aná- :,*i supcryó, al igual que aque- Hemc¡s vislo cénio *e arra*tra
lisis, lo que refieja- la prin:era
Pulsiones de vids v ":as de la realidacl exterior. Es ia al nino a renunciar a sus de*eos
aportacion freudiana de la ;** ie especifica desde el punta edípicos. En iugar de c*ntinuar
pulsiones de muerie transfere¡rcia c0m0 un fensme- ;* r'i*ta topica, deseando a ¡qus padres, de con-
n* de resistencia. t*¡rie el punto de vista di- tinuar invistiéncioles pulsi*nal-
Lo que llevó a Freud a este rlue-
vo _v últirna dualis¡rro pulsianal
Sn este nlle\,ü dualismo pul- .;;:: l*c. cantinúa repre$entanda mente. se identifica con ellas e
sional, tadas las pulsiones ñe-
que opone las puisiones de l.ida
xuales descritas anterir¡rmente =.,:i:'*io clefensiva. Es el agente inrerioriza sus prr:hibicianes.
con las de nruerte, fue la nece- ,j* la represicn :' cle ütr{¡*q me- En este sentido, Fieud decía qge
se encuentran reagrupadas en .;i;ri:;,nlss cle defensa. Oe esta ,,el esfablecinliento del supei3'd
sidad de dar cuelrta de ciertos
Ias pulsiones de la vida, inclui-
hechos abservados elínicamente :',-l¡::a es- sn parte. inconscienle. puede ser considerado cümo un
das Jas lutciones de autocon- Ii eilo es un término r{ue caso de irJe*tificación lcgrada,,
que el dualisn* pr*cedente na
servacién que estaban atribui- lr*url toma prestado de G. con lcs paclres,
podía explicar.
das al _vo. Ahora bi*n, esta na-
óC*mo conrprender ia cünt- *r*ddeck. Dstermin* las fuer-
pulsión de repetir situaciones ns
cii¡n del _vo, presente desele el o::*'ff::Íff "';Jl"i?1iiul3 La identificusién
principia de la elaboración fieu-
placer:teras, desagradables a cia-
cliana, iba a sufrir urorlificacio-
A
larosas? ¿Cóino comprencler Ia {,:rresp.onde .a las expresianes Es un proceso importante para
ne$ propesivas y dasembocar.en
importancia de las auforuepro-
ei ccncepta del yo $plle-qt* al eilo 1*e utiliean los paciente* $,lo ü-.;;jitu*iun J* tu pers*nali-
ches en una afbccién corrró h *:t;:iicar r-us prablemas. ,'Eilo d-J. El sujeto se viste con un
al superS'ó, en la segunda tó-
meiancolía? iCémo cünlprender .v.
plea. =* ilegó bru-ccanlente" es má* ñfñe que pertenece a ütr* l.
ul..
ryrygquism* primario y ei Í:*rte que .\¡ü" se transforlna. a veces talaimen-
"ese
odio? El principio del piacer;, ral Constituve el polo pulsionai ;;.-;;d;t;;;-i;;- orr.,r.
I üomo lo hemss preséntadt¡ rá- !H i*gnda
rópicai fo, ,i*i aparata psíquico tal l' cümü port*áó* destacar que
este pro-
pidamente, no pcdía _r,a, a los
ello y superro l:"*ud ir¡ c*nribe nuer.'amente. **_-o *ru, p*, eiemplo, a la edart
ojos de Freud, dar cuenta de di- Freud necesitaba de esta seeun- r: el único en el oligen. l- iu? j- -i.r-*ánor, ó,, iá quá ,rn p*-
chos fenómenas. De hecho. en Ia ii"¡s otras instancia:-, ei .-r'o 3' el q;*;;;*l*nrá
cla tópica para dar cuenta dé las á rog*ilos ,*is-
cura. ia reacción terapéutica ne- defensas inconscientes, incom- =iipei1,"ó, *ce desarrollan cliferen- ,i i" ir¿Uitrru qun.,-,
gativa.l'el recirazo a sanarse na ;iándase progresivamente ciei S.lr*. euie-
podían ser inrerpretadas & Ia
patibles eon la idea previa de un
:iic. Es caótico. sin arganiración
;;;.;;*o *ii padre, realizar el
]ü que se confunclía con el si_q- *i--i- Can eila demues-
soia luz de la opoiieión entre el tema preconseiente-eonsciente. "ncio.
principi* del piacer y el de rea.
]idad.
)' que sería. pür tanto, tatai- ;::.d**utru J:, t-:T i*
il?,ift ,,í''ff :Hfrl'1J;:,:li:11i3
:iü se suprimirán ias unas a las ,"lr,áf
*rsnte cansciente, tal S, corno lo d;i* ui puJre {u iclenti_
ril'a$. En esle sentido, está re- n---i*- iu p*rniite esta renuncia
."
Freud p*stuló entonces la pr*sentaba la prirnera topica.
existencia de pulsi*nes de muer- -inr.estidura *idc p*r los proce*os primari*s ; i;- d-;-ii* **ipr*o*, I, consti-
Ader::ás, Ja libi-
te, a Iry que üpone las pulsiüne$ dinosa del _vo con la intrarlucción {lis caracterizan el {'uncicna tuir
- ---- lg.rui**nre
-o--*-- un l*eát del .vo.
de vida. La aposición entre el ciel c*nc*pto del narcisismo, la :::iento del inconsciente elt ia
amCIr y el hambre se c*nvierte hipdtesis de Ruevas instancias ,*rimera tépica.
en la cposición entre el amcr.v ciei:ieia: a ias diferentes identi- En *uunto ai superya. Freud tl ideql del yo
la muerte. Las prrlsir:nes df firaci***s ciims el ideal dei vo. l* definía comü el hei.edera del y el yo ideal
Hruerte tienden a lievar al ür- ir n:isr::* que I$s sentirnienios **mplej* de Edipo cuyCI r*l sería
ganismo vil'* a un estad* in*1.- *1 dá un juez respecía al y'a, de Si el superyó se constituye por
is ruipahiliilad ], i*s autorre- ia ¡nisma manera que ios padres la interiorie*tión de ias exigen-
gánicc. anterial'a la ri¿1a. Sil fi* prirrl:** pr*s*ntes en la nrelan-
et ei disolver I** engra**.jes en l:abian representadri la concien- cias .1' de la* prchibitiones pa-
r*iia. ii*r.arE:n a Freud a descen-
uriidades cada vez ¡:rás *efius- tra¡ el 3.* Cei poio extremo
cia maral. la censnre que el r:iño rentales, el ideal de} 3'o se cüns-
ñas. Las pulsiones de Eirih ri*n- crilnai:a e;: la pr.imera tópica.'El
que n* tenía al principio. En este titu-ve como una identificación
sentido, el superyo se constilu-ve cou las paclres rürno m*dela. El
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EL PSICOANALISIS
ideal clel yo se farma con un: cüncsptrls prinrordiales de la an-
"Tú debes $er A*oí,, cflmo tu pa- gustia ¡' la represión.
dre, mientras que el super]¡ó se Si, en su primera teoría, la an-
caracteriza par un: ,"'Iil na dehes gustia f'ue cansiderada com* el
$gr así'', eomCI tr-r padre. resutrtaelo de una tension libidi-
La función dei ideal dei 3'o nos& que no se pudc de:*cargar,
pernritié a Frerrd comprender ia posterior aportación de
muchas cle los fenómen*s rela- Freud, en 1326. en Inkibicia¡t,
tivos a la farmación de }as ma- sí¡¡fo¡ric¡ ]¡ &r¡gff.,Sfl#, es prirnor*
sas, tales cümci la sumisión hacia etial. La *ngustia es ahsra con-
un líder que ücup&, para 1os di- Eiderada csmü una señal de an-
ferentes indivicluas de la masa, gustia que señaia al -vo una si-
el lugar del ideal dei ,vc. Mana tuacién análoga antigua, que
entre ellcs; ics miembrcs de la había c*nstituido un peligr"c, 3t
masa se identifican en su yo, de la que el )¡ü $e va & rlefender
Esta ruptura entre ei 3ro y el cün un mecanismo de defensa
ideai dei yo explica ias aberra-
ciones del comportamiento cle
propio de cada estrueturñ neu-
róNica, Ha"u* que preci*ar que la
lv
ias masas, fascinadas por el lider angustia n0 es ei rniedo" Lo que
¡'dependientes totalmente de é1, les distinsue es el peligro reai
La distinción del ideal dei .1'o qlle prüv*ca el rniedo, miEntras EL TNFOQUE P$ICOANALÍTICO DT
en relacién al superyó y al yc que la allgu;tia se pcne en ¡nar-
LA$ NtUROsls, LAS PSICOSIS
permite también cornpl'€nder la cha por la percepcién de un pe-
esencia rnisrna del fenómsno ligro interno, sin causa aparente Y tAS PERVERSIONES
arnoroso, clonde el *bjetn de "y suseitado
por una exigencia
amcr está idsalizado hasta el ex- pulsional del ello en ccnflicto
tremo. Oe esta fortna, Freud c*n una prohibición del *uperyó.
puede explicar Ia nalriraleza de Lo qlie en un principi* era
la hipnosis, donde el sometido conflict* entre las exigencias
está sujetn de forma extrenr.a a pulsionaies del nin* y lae pra^
su hipnotizador. Era lo que ya hibicinnes de ios pacires se in-
había captado. aunque de fcrma tsrioriza pcr el sujeto y se cün-
intuitiva, cuando s* decidió a, vierte en ccnflict* entre las ins-
abanclonar ia hipnosis. ¿ancias del pr*pic psiquismo.
En cuant* al ln ideal que rnu- Este confiicto prov*ca angustia,
chos rechazan distinguir del motor de la r-epresión, fll pas*
ideal del 3'o. argumentandr que decisivo dado por Freud está
Freud nc las separaba de I'ornia aquí: al principio. él concebía la
sistemática, Lacan nüs ensena a angu*lia cüitlo ei resultado de Ja
distinguir el registro simbóiico, represión cle las pulsiones se-
propio del ideal dei yn, y el re- xuales )', por tanto, coruü el pro-
gistro imaginario dsnde se fnr- ducto de una insatisfaccian.
ma el yo ideal, a lravés del es- Ahor-a. es la represión quien in-
üadio del espejc, 1o que le da uira terviene para aliviar ai sujet* de
dimensién esencialmenle narci- la angustia.
sista. E*ta repre-rión ten*rfi un &es-
tins üifmente según se trate de
Anguslis y represión una histeria, de una neuro*is
obsesil'a o de una neuro*is fó-
Antes de cerrar este capítul*, hica, perü en los tres caso$ se
hace falta ahordar las observa- habla de la angustia de la cas-
ciones que Freud hies sobre las tración"

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