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ANALISIS CRÍTICO DE LAS APROXIMACIONES DEL CONCEPTO DE

COMPETENCIA

PRESENTADO

POR:

DEISY JELHANY AZA

PROFESORA:

CLAUDIA BENAVIDES

UNICATOLICA

LICENCIATURA EN EDUCACION ARTISTICA

14 DE ABRIL DEL 2016


ANALISIS CRÍTICO DE LAS APROXIMACIONES DEL CONCEPTO DE
COMPETENCIA

El concepto de competencia tiene su origen filosófico en la Grecia clásica. Para


Aristóteles la reflexión fundamental de la filosofía tenía que ver con el sentido y la
naturaleza del ser, la filosofía deberá concentrarse en el estudio de las primeras
causas y principios y esto la debería diferenciar de las demás ciencias. Esta
reflexión sobre el ser y su naturaleza lo conducen a la pregunta por la
transformación y el cambio. “hay dos clases de ser: el ser en potencia y el ser en
acto; todo cambio se realiza pasando de uno a otro…todo proviene del ser, pero sin
duda, del ser en potencia, es decir del no-ser en acto”.
En 1965 Chomsky precisa la distinción entre competencia y actuación lingüística en
una clara alusión a lo formulado veinticinco años atrás por Aristóteles. Para él la
teoría lingüística le deben preocupar las competencias de los hablantes – oyentes
ideales y no las múltiples, diversas y confusas actuaciones. Para desarrollar su
teoría siguió un método centrado en la abstracción e idealización lo cual lo llamo
galileano.
Según lo anterior la competencia es por tanto una capacidad ideal que describe la
potencialidad de una lengua mediante la elaboración de una gramática, en sí las
expresiones posibles que puede generar el hablante ideal; el hablante produce y el
oyente comprende. En si la competencia lingüística en la perspectiva de Chomsky
podría entenderse como los saberes genéticamente transmitidos que tiene el ser
humano de las reglas o principios abstractos y universales que regulan el sistema
lingüístico, el cual supone que está de manera innata en la mente de los hablantes.
Para Chomsky el niño viene al mundo con un dispositivo de adquisición del lenguaje
o facultad del lenguaje heredado e innato, este dispositivo acompañado por los
intercambios lingüísticos dados desde la primera edad, salvo casos excepcionales,
y que no exista ninguna dificultad para que un niño aprenda su lengua natural y para
que en tiempos breves alcance el dominio de una lengua. Este mecanismo de
adquisición del lenguaje el cual es información genética y por tanto es común a
todas las lenguas y a todas las personas.
Surge entonces en su tesis la existencia de una gramática generativa universal.
Por otra parte para Piaget la inteligencia es una capacidad formal, universal e
independiente del contenido y del contexto. Chomsky comparte con Piaget tres
elementos comunes; el formalismo, el sustrato biológico de nuestros
comportamientos y el universalismo. Piaget y Chomsky postulan: “que el lenguaje
es producto de la inteligencia y no de un aprendizaje conductista, reconocer el
carácter universal de la gramática y destacar el papel activo de los sujetos en las
gramáticas transformacionales”. A ambos, en consecuencia, el predominio de lo
universal los conduce a subvalorar el papel del contexto y de los factores sociales,
culturales e históricos en el desarrollo humano.
Se cree que en efecto las competencias son contextuales en su origen y en su uso;
es decir que los seres humanos desarrollamos competencias diferentes en
contextos diferentes y saber cuáles usar en uno u otro momento nos hace ser más
competentes.

Las competencias no deben verse como capacidades formales


Asignarle un carácter formal a las competencias implica necesariamente que se
desconoce el papel esencial que cumplen los contenidos y el contexto en los
procesos de pensamiento. Uno de los aportes más importante es la caracterización
del desarrollo humano en un momento dado.
Shardakov señala, es erróneo concebir el desarrollo del pensamiento bajo el
aspecto de estructuras formales puras e independientes del contenido. Esta
afirmación supone equivocadamente que el desarrollo de la mente infantil transcurre
espontáneamente, como consecuencia de la maduración biológica y que, debido a
ello, la enseñanza no hace más que “amoldarse” a las leyes biológicamente
predeterminadas del pensamiento.
Algunos autores han postulado que la inteligencia se construye en la interacción
social y otros que concluyeron que el pensamiento se realiza en conjunto y
asociación con otros y en las cogniciones distribuidas, ya que en la actualidad es
evidente el papel central del contenido en el procesamiento intelectual.
Uno de los mayores aportes de Piaget y el constructivismo fue el postular el papel
activo del sujeto en el proceso de interpretación, y el reconocer la existencia de
elementos personales, matices y acepciones en la representación individual.
Las posturas piagetianas y chomskiana son excesivamente racionalistas, ya que
entienden las competencias como un proceso exclusivamente cognitivo, lo cual se
consideran importantes la dimensión cognitiva, el socio afectivo, la ética y la estética
del ser humano.

Las competencias no deben entenderse como aprendizajes procedimental


Las competencias son aquellos aprendizajes ligados no con lo cognitivo, sino con
el saber hacer, con la acción, con los procedimientos, con la aplicabilidad de los
conocimientos, como aprendizaje procedimental.
En sentido estricto la educación tiene muy poco que ver con lo procedimental porque
es demasiado reducido para que sea esencial en la formación del ser humano.
La escuela tiene que dotar de “herramientas para la vida” a los estudiantes.
Competencias y habilidades: dos términos que no quieren decir lo mismo.
Las competencias desde el desarrollo humano son integrales; es decir involucran la
dimensión cognitiva, la valorativa y la práxica y las habilidades son específicas y
vinculan únicamente a una dimensión bien sea cognitiva, valorativa o práctica,
incluso las habilidades y las destrezas pueden llegar a ser contradictorias, de hecho
las habilidades son mucho más específicas que las competencias.
Y al contrario las competencias son más generales ya que permiten alcanzar
aprehendizajes mas contextuales y flexibles.

Las competencias no deben entenderse como una preparación para el trabajo.


Sin dudarlo es la acepción que mayor resistencia ha generado entre los maestros,
es una preocupación comprensible de los educandos frente a la visión de una
escuela al servicio de unos intereses económicos y no del desarrollo humano.
La idea de trabajar por competencias es una forma de volver más ágiles a las
personas, mas productibles y rentables, para esta acepción ser competente es ser
eficiente y productivo.
Nussbaum tiene la razón de que las competencias ligadas a la formación
empresarial limita sensiblemente los fines esenciales de la educación y asume una
visión excesivamente pragmática del ser humano, quienes ligan competencias
exclusivamente con el mundo laboral reducen al ser humano al trabajo, la
producción y la rentabilidad, desconociendo su dimensión afectiva y cognitiva.
Zuleta (1987) decía: “todo hombre racional es un hombre desadaptado porque es
un ser que pregunta”.
Diversas acepciones del concepto de competencia:
. Comprenderlas como capacidades formales y universales como hicieron Piaget y
Chomsky.
. Las competencias como sinónimo de habilidades y capacidades.
. Aprendizaje procedimental (maestros).
. Saber hacer en contextos (Ministerios de Educación).
. Verlas como formación exclusiva para el trabajo.

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