La resurrección

¡Cristo resucitó!, ¿cómo esa verdad afecta mi vida espiritual, mi vida cotidiana y mi predicación?

Hombres buenoshombres muertos  hombres resucitados

En los tiempos antiguos existían ciertas ideas de resurrección, pero ninguna comparable al concepto
cristiano (Bruce, Marshall, Millard, Packer, & Wiseman, 2003, pág. 1147). Los griegos, por ejemplo,
creían que el cuerpo era una prisión y que al morir se liberaban, por lo que lo único que vivía después
de la muerte era su espíritu, rechazando así toda idea de resurrección (Bruce et al, 2003, pág. 1147).
Por su parte los judíos, valoraban en gran manera el cuerpo, por lo que, si bien esperaban una
resurrección corporal, confiaban en que sería el mismo cuerpo que murió, con las mismas
características (Bruce et al, 2003, pág. 1147). El cristianismo en cambio abraza la idea de una
resurrección en cuerpo, pero este glorificado.

20 Mas nuestra ciudadanía está en los cielos, de donde también esperamos al Salvador, al
Señor Jesucristo; 21 el cual transformará el cuerpo de la humillación nuestra, para que sea
semejante al cuerpo de la gloria suya, por el poder con el cual puede también sujetar a sí
mismo todas las cosas.
Filipenses 3:20-21, Reina Valera 1960.

Nuestra idea de resurrección entonces es completamente diferente a la de otras culturas o

religiones, porque además no la presenta como mito, sino como una realidad. Cristo, un hombre
real, sufrió una muerte real y resucitó realmente de manera que miles de testigos reales pudieron
dar fe de esto. Si desean, pueden leer más acerca de las pruebas científicas de este hecho en el libro
“El Caso de Cristo” de Lee Strobel. Pero ¿por qué es tan importante esto? Pablo mismo dijo:

Y si Cristo no resucitó, vana es entonces nuestra predicación, vana es también vuestra fe.
1° Corintios 15:14, Reina Valera 1960

La resurrección parece ser central en el evangelio, por lo que la verdad de ésta afecta
profundamente nuestra vida espiritual.

Si Cristo no resucitó, nuestra fe es vacía. Ya, pero Cristo nació de una virgen, hizo milagros, resucitó
personas, hasta cumplió profecías que se decían de Él desde hace muchos años, ¿por qué eso no es
suficiente?

Primero, la resurrección de Cristo prueba la verdad de la biblia

“Con todo eso, Jehová quiso quebrantarlo, sujetándole a padecimiento. Cuando haya
puesto su vida en expiación por el pecado, verá linaje, vivirá por largos días, y la voluntad
de Jehová será en su mano prosperada.
Verá el fruto de la aflicción de su alma, y quedará satisfecho; por su conocimiento justificará
mi siervo justo a muchos, y llevará las iniquidades de ellos.
Por tanto, yo le daré parte con los grandes, y con los fuertes repartirá despojos; por cuanto
derramó su vida hasta la muerte, y fue contado con los pecadores, habiendo él llevado el
pecado de muchos, y orado por los transgresores”
Isaías 53:10-12, Reina Valera 1960

1
 “Porque no dejarás mi alma en el Seol,
Ni permitirás que tu santo vea corrupción.
Me mostrarás la senda de la vida;
En tu presencia hay plenitud de gozo;
Delicias a tu diestra para siempre”
Salmos 16:10-11, Reina Valera 1960

Ambos textos apuntan a la resurrección. Si creemos que Jesús es el Cristo, es decir el rey esperado
que viene a resolver el problema del pecado y a reinar con autoridad, pero este no cumple a
cabalidad lo que la misma biblia afirma de él, nos deja con que, o Jesús no es el Cristo, o la Biblia no
es confiable. Por otro lado, esto también nos habla acerca de la verdad de las palabras del propio
Jesús, quien dijo en distintas oportunidades que resucitaría.

Y comenzó a enseñarles que le era necesario al Hijo del Hombre padecer mucho, y ser
desechado por los ancianos, por los principales sacerdotes y por los escribas, y ser muerto,
y resucitar después de tres días.
Marcos 8:31, Reina Valera 1960

Porque enseñaba a sus discípulos, y les decía: El Hijo del Hombre será entregado en manos
de hombres, y le matarán; pero después de muerto, resucitará al tercer día.
Marcos 9:31, Reina Valera 1960

He aquí subimos a Jerusalén, y el Hijo del Hombre será entregado a los principales
sacerdotes y a los escribas, y le condenarán a muerte, y le entregarán a los gentiles;
y le escarnecerán, le azotarán, y escupirán en él, y le matarán; mas al tercer día resucitará.
Marcos 10:33-34

Pero, además, la verdad de la resurrección implica, espiritualmente, que somos beneficiarios de lo

siguiente:

Justificados ante Dios: “el cual fue entregado por nuestras transgresiones, y resucitado para nuestra
justificación”. Romanos 4:25, Reina Valera 1960

La resurrección de Cristo confirma tanto su humanidad como su deidad, por lo que lo hace el
sustituto perfecto para pagar nuestra deuda eterna con Dios. Al morir por nosotros carga con
nuestro pecado, y al resucitar, exaltando su deidad e incorrupción, logra que seamos efectivamente
justificados ante Dios Padre.

Unidos con Cristo: “Y si morimos con Cristo, creemos que también viviremos con él” Romanos 6:8,
Reina Valera 1960

Gracias a Su resurrección es posible que tengamos vida. Tanto una vida eterna futura, como una
vida “resucitada” hoy. Desde ya podemos disfrutar de que tenemos vida en Cristo y que estamos
unidos a Dios con él. Esto es maravilloso pues nos habla de una victoria ganada y posible de ser
disfrutada en este mundo, mientras esperamos su gloriosa venida.

Esperanza viva: “Bendito el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que según su grande
misericordia nos hizo renacer para una esperanza viva, por la resurrección de Jesucristo de los
muertos, para una herencia incorruptible, incontaminada e inmarcesible, reservada en los cielos
para vosotros” 1° Pedro 1:3-4, Reina Valera 1960

2
Como estábamos muertos en nuestros delitos y pecados (Efesios 2:1), necesitábamos que alguien
nos resucitara. Al ser Cristo las primicias de la resurrección (1 Corintios 15:20), y como veíamos
recién, al estar nosotros unidos con él, somos también resucitados para tener una esperanza viva
de la herencia que nos espera. Todo lo que anhelamos, lo que celebramos y lo que nos sostiene es
gracias a que Jesús resucitó de entre los muertos. Y asimismo, tenemos la esperanza de que
resucitaremos juntamente con él.

Entonces, hasta acá vemos algunas de las tremendas implicancias espirituales que tiene para
nosotros la resurrección de Cristo, cabe preguntarse entonces ¿cómo esto impacta mi vida
cotidiana? Comencemos con el servicio en la iglesia. Pablo en el capítulo 15 de 1° Corintios señala:

Porque si no hay resurrección de muertos, tampoco Cristo resucitó. Y si Cristo no resucitó,

vana es entonces nuestra predicación, vana es también vuestra fe. Y somos hallados falsos
testigos de Dios; porque hemos testificado de Dios que él resucitó a Cristo, al cual no
resucitó, si en verdad los muertos no resucitan. Porque si los muertos no resucitan, tampoco
Cristo resucitó; y si Cristo no resucitó, vuestra fe es vana; aún estáis en vuestros pecados.
Entonces también los que durmieron en Cristo perecieron. Si en esta vida solamente
esperamos en Cristo, somos los más dignos de conmiseración de todos los hombres.
1° Corintios 15:13-19, Reina Valera 1960

Sin resurrección, nuestra vida, esta vida, no tendría sentido. Pablo mismo se aventura a decir que
sin la resurrección de Cristo somos “los más dignos de conmiseración1 de todos los hombres”. Estar
acá, venir cada semana, esforzarnos por llevar una vida buena, una vida santa, perdonar, orar,
confiar en Dios y en el prójimo, intentar hacer bien el trabajo, NO TIENE NINGÚN SENTIDO, es más,
es digno de que la gente nos mire con lástima. La resurrección es el pegamento que sostiene cada
parte del evangelio (Alloran, 2014), y el evangelio es la hoja de ruta de nuestra vida. Por lo tanto,
nuestra vida de servicio es real y posible por la innegable verdad de la resurrección de Cristo. Es por
esto mismo que Pablo termina el capítulo de la siguiente forma:

Así que, hermanos míos amados, estad firmes y constantes, creciendo en la obra del Señor
siempre, sabiendo que vuestro trabajo en el Señor no es en vano.
1° Corintios 15:58, Reina Valera 1960

Sabemos que no es vano porque sabemos también la recompensa que nos espera. Sabemos que
todo sufrimiento, dolor, cansancio, decepción, pena, tiene su fin y que luego de esta vida,
resucitaremos y reinaremos juntamente con Cristo, por lo que, gozosamente, podemos poner
nuestras vidas al servicio de Aquél que es fiel, y que tiene el poder sobre la muerte y que finalmente
restaurará todas las cosas.

Esto en relación con nuestro servicio en el reino de Dios. El asunto es que a veces, consideramos
que el reino de Dios o las cosas de Su reino son exclusivamente las cosas “de iglesia”, no
entendiendo que nuestra vida completa es de Él, y somos esclavos del rey en todos nuestros
contextos, en toda nuestra vida. Por lo tanto, la resurrección del Señor debiese afectar todo lo que
pensamos, decimos y hacemos.

1
Sentimiento de pena y dolor por la desgracia o sufrimiento de alguien.

3
El ser justificados ante Dios, el estar unidos con Cristo y el tener una esperanza viva debe verse
reflejado en el diario vivir.

Si Cristo resucitó, somos justificados (declarados justos) ante Dios, y eso debiese llevarnos a vivir
vidas justas: conocemos a una persona que es todo lo que alguna vez soñamos. Nos interesemos
en ella y milagrosamente, también se interesa en nosotros. Comenzamos una amistad, pero con
claras evidencias de querer convertirse en algo más. El detalle, la persona no es cristiana. Podemos
entonces: seguir la relación y ver en qué termina, confiando en que nada escapa a la voluntad de
Dios y que, si él quiere, se puede convertir a través de nuestro amor o decidimos seguir una senda
de justicia, obedeciendo a Dios y a su palabra, no involucrándonos con un hijo o hija del diablo y
viviendo la justicia en integridad.

Si Cristo resucitó, estamos unidos con él, y eso debiese llevarnos a darnos cuenta de que está
presente en todo lo que hacemos: tenemos un compañero o compañera de trabajo difícil. Durante
mucho tiempo ha sido especialmente desagradable con nosotros, hasta que llega el día en que
podemos “vengarnos” de todo lo que nos ha hecho, pues no entregó un documento importante que
era su responsabilidad. Nosotros sabemos esto y podemos hacer dos cosas: no entregarlo y que
pase lo que tenga que pasar, o perdonar, hacernos cargo de su error, tomar la cruz y seguir a Cristo
¿qué hacemos?

Si Cristo resucitó, tenemos una esperanza viva, y eso debiese llevarnos a enfrentar el sufrimiento
con un enfoque eterno: nos avisan que un familiar muy cercano tiene una enfermedad muy
compleja, que además es muy cara. Nuestro familiar es creyente. No sabemos lo que va a pasar pero
podemos tomar dos caminos: sufrir, lamentarnos, quejarnos y pasar en pena esperando lo peor,
despotricando contra el sistema de salud o sufrir y penar, con la esperanza de que, si no en esta
vida, en la próxima, nuestro familiar tendrá una recuperación total sin sufrimiento ni dolor.

Entender lo anterior nos permite confiar en una predicación segura, pues la palabra de Dios es
verdadera y poderosa, y que esta misma tiene poder suficiente para transformar vidas

Y si el Espíritu de aquel que levantó de los muertos a Jesús mora en vosotros, el que levantó
de los muertos a Cristo Jesús vivificará también vuestros cuerpos mortales por su Espíritu
que mora en vosotros.
Romanos 8:11, Reina Valera 1960

Entender la resurrección nos debe llevar a agradecer, a vivir vidas santas y a predicar el evangelio.

En conclusión:

 La resurrección de Cristo prueba la verdad de la biblia y de las palabras de Cristo

 La resurrección de Cristo nos hace beneficiarios, entre otras cosas, de:
o Ser justificados ante Dios
o Estar unidos con Cristo
o Tener una esperanza viva
 La resurrección de Cristo afecta nuestra manera de servir/vivir
 La resurrección de Cristo nos permite confiar en una predicación segura

4
Referencias
Alloran, K. (19 de Abril de 2014). Coalición por el evangelio. Obtenido de
https://www.coalicionporelevangelio.org/articulo/10-razones-de-por-que-la-resurreccion-
de-cristo-es-importante/

Bruce, F. F., Marshall, I. H., Millard, A. R., Packer, J. I., & Wiseman, D. J. (2003). Nuevo Diccionario
Bíblico Certeza. Buenos Aires: Ediciones Certeza Unida.

Got Questions Ministries. (s.f.). Got Questions. Obtenido de

https://www.gotquestions.org/Espanol/importancia-resurreccion-Cristo.html