• II. Primera aparición del “patrimonialismo” en la obra de Weber: (1) Ética económica de las religiones universales y (2) Elementos de economía social. Aquí, Weber ve un perfeccionamiento del patriarcalismo que es presentado como la forma más importante de dominación que se asenta sobre la “autoridad tradicionalista”. Surge de la descentralización de la comunidad doméstica en la que un patriarca distribuye tierra y bienes entre los miembros de su casa para que ellos los administren. Si el aparato surgido de este modo puede garantizar el sometimiento de otros patriarcas, la dominación patrimonial puede convertirse en la base de una asociación política, esto es, de un Estado patrimonial. Vínculo entre patrimonialismo y patriarcalismo. Distinción entre “patrimonialismo patriarcal” y “patrimonialismo estamental”. • Oscilación cíclica entre patrimonialismo y patriarcalismo. • Modificación de esta concepción tras la primera guerra mundial a raíz de la obra de von Below. La crítica de von Below a Haller lo obligó a Weber a abandonar la equiparación entre Estado patrimonial y patriarcalismo y acentuar la “absoluta separación entre el poder señorial sobre la casa, los cuerpos y las tierras y la dominación política”. Así, el patriarcalismo termina ligado a la asociación doméstica mientras que el patrimonialismo aparece como forma de dominación política. • Por regla general, el patrimonialismo se mueve en un espectro que se determina a través de la tradición. Si el señor logra organizar un cuadro administrativo amplio y vinculado estrechamente a su persona, es posible ensanchar la esfera de arbitrariedad libre e independiente de la tradición hasta llegar al “sultanismo”. Si el cuadro administrativo escapa al control del señor, Weber lo denomina “patrimonialismo estamental”. Si se asignan derechos económicos a los miembros del cuadro administrativo, “prebendalismo”. Si además se otorgan derechos de dominación, se trata de “feudalismo”. • III. Si bien Weber aplicaba el concepto de patrimonialismo a una enorme cantidad de casos, en la actualidad hay tendencias que conciben este espectro de un modo más estrecho. Argumentos: (1) Grado pequeño de diferenciación. (2) Criterios de EyS solo utilizables en sociedades más desarrolladas. Estratificación que conduce a (a) la organización y (b) la legitimidad. Con la estratificación, el punto clave cultural se traslada de los ritos, monumentos o imágenes a los textos en que dominan discursos generalizados. • IV. Patrimonialismo en fenómenos políticos de la época contemporánea. (1) Interpretaciones del nacionalsocialismo. (2) Investigaciones sobre países en vías de desarrollo. De estas, se llega al halalzgo de que el patrimonialismo “sería un fenómeno que se encontraría en todas las burocracias y que resultaría imprescindible para su funcionamiento, puesto que requieren de un contrapeso personales contra las orientaciones puramente objetivas, con su efecto potencialmente alienante” (259). (3) Órdenes que tuvieron que recurrir, ante la caída de la tradición, a incentivos materiales y recompensas. Diferenciación entre patrimonialismo tradicional y “neopatrimonialismo”. Sin embargo, esto último caería por fuera de la dominación legítima. Dependencia del patrón y del cliente en la corrupción. El clientelismo podría generar apoyo pero no legitimidad.