Documenti di Didattica
Documenti di Professioni
Documenti di Cultura
- Howard Hendricks
DISCIPULADO
PERSONAL
Una Guía para Llevar
Al Cristiano de Nacimiento Hasta la Madurez.
Christopher B. Adsit
© 2003 Disciplemakers International
PO Box 2212
Eugene OR 97402-0044
USA
1-541-345-3458
ISBN 0-9671227-5-9
A menos que se indicare en forma diferente, todas las referencias de Scripture se toman del La Santa Biblia, Reina
Valera 1960, Sociedades Bíblicas Unidas
Lo que los líderes cristianos están diciendo acerca de este libro...
“Esto es lo que yo recomendaría. Discipulado Personal es el “Un proceso discipulador cabal, fácil de usar que provee
método más viable para hacer discípulos que he visto.” una completa flexibilidad para un exitoso discipulado
Jay Carty, Asesór Eclesiástico uno a uno. No estoy en conocimiento de ningún otro
YES Ministries sistema efectivo.”
John Klein, Director Nacional Asociado
“Es el procéso mas amplio y práctico que he visto hasta aho-
Atletas en Acción
ra. Si el lector aplíca fielmente los principios contenidos en
este libro, él o ella se convertirán en discipuladores efecti- ¡El más práctico y bien organizado proceso del
vos.” discipulado disponible! No sólo es de lectura placentera,
Howard Hendricks sino que lo he usado personalmente con buenos resulta-
Presidente del Centro para Líderes Cristianos dos.”
Seminario Teológico Dallas Herb Evans, Pastor Maestro
Grace Community Fellowship
“¡Al fin! Un recurso accesible para el discipulador serio. En-
Eugene, OR
teramente bíblico y de uso amigable, este libro se merece un
lugar en el estante de cada pastor y trabajador cristiano.” ¡Bíblico, claro, práctico, probado! Si esta visión es cap-
Mark McCloskey tada y sus principios aplicados, hombres y mujeres en
Director de Entrenamiento, Ministerio Estudiantil todo el mundo serán levantados y tendrán una tremenda
Cruzada Estudiantil para Cristo oportunidad de caminar cerca de Cristo y ser equipados
para el ministerio.”
“¡Por fin, nos podemos poner serios en cuanto al
Tinker Melonuk
discipulado!”
Representante de los Navegantes, UCLA
Ross Gunn III, Pastor Juvenil
Freemont Community Church “¡Un banco de ayuda para los discipuladores! Los pasto-
Freemont, CA. res y otros trabajadores cristianos están en deuda con
Christopher Adsit por este libro.”
“Muchas veces los cristianos sienten la necesidad de
Jeff Wells, Pastor Gobernante
discipular a otros, pero encuentran dos problemas principales.
Redeemer’s Bible Fellowship
No saber cómo ayudar a otra persona a crecer en su relación
Roseburg, OR
con Cristo, y/o sentirse inadecuados espiritualmente.
Discipulado Personal apunta a resolver ambos problemas.” “Uno de los trabajos más prácticos y comprensibles ja-
Dick Katz más publicados en el proceso del discipulado.”
Director Nacional, Ministerio Carcelario Alan Heller, Director de Entrenamiento
Cruzada Estudiantil para Cristo Neues Leben International
“Mientras leía Discipulado Personal, me encontré haciendo la ”¿Quién dijo que el discipulado tiene que ser aburrido?
pregunta, en casi 2000 años, ¿por qué hasta ahora a nadie se En un estilo fresco, leíble y algunas veces humorístico,
le había ocurrido desarrollar este sistema? Recomiendo alta- Adsit ha diseñado un plan para el discipulado con base
mente este trabajo.” bíblica que va mas allá de la teoría. Una herramienta
Heather Goodenough, Presidente completa y práctica.”
Centro de Conferencia Cannon Beach Jonathan B. Edwards, Pastor
Pulpit Rock Church
“El estilo ameno en la cual escribe Christopher Adsit nos cap-
Colorado Springs, CO
tura en cada página. Es un trabajo agradable y de gran ayu-
da.” “Al seguir estos principios, usted tendrá la estructura
Jay Wheeler, Director Phoenix Metro donde el discipulado efectivo llega a ser una realidad.”
Comité Cristiano de Hombres de Negocios Don Richardson,
Pastor Asociado de Evangelismo y Discipulado
“Christopher B. Adsit ha dado ánimo a Testigos Laicos para
Calvary Church of Santa Ana, CA.
Cristo como muy pocas personas lo han podido hacer. Ahora
Dios lo ha guiado a suplirnos con la herramienta mas comple-
ta para discipular a la gente alrededor del mundo.”
Sam Mings, Fundador y Presidente
Testigos Laicos para Cristo
A mi joya indescriptible, mi esposa,
Rahnella,
sin la cual la vida sería tremendamente aburrida
que casi no valdría la pena mencionarla.
¡Te amo!
5
6 DISCIPULADO PERSONAL
Capítulo 10: Objetivo de Entrenamiento #2:
Alcance y Significado de la Salvación . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 81
Capítulo 11: Objetivo de Entrenamiento #3:
Llenura del Espíritu Santo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 91
Capítulo 12: Objetivo de Entrenamiento #4:
Identidad en Cristo. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 100
Capítulo 13: Objetivo de Entrenamiento #5:
Principios Básicos de Crecimiento . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 108
Capítulo 14: Objetivo de Entrenamiento #6:
Compañerismo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 117
Capítulo 15: Objetivo de Entrenamiento #7:
La Palabra . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 123
Capítulo 16: Objetivo de Entrenamiento #8:
Oración . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 133
Capítulo 17: Objetivo de Entrenamiento #9:
Testificando . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 146
Capítulo 18: Objetivo de Entrenamiento #10:
Guerra Espiritual . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 158
Capítulo 19: Objetivo de Entrenamiento #11:
Manejo del Tiempo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 166
Capítulo 20: Objetivo de Entrenamiento #12:
Visión . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 176
TERCERA SECCIÓN Haciendo Discípulos: Moviéndose hacia La Madurez
Capítulo 21: Discipulado a Largo Plazo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 189
Estrategias para supervisar el desarrollo de un discípulo a largo plazo
• Objetivos de entrenamiento para un proceso de crecimiento espiritual completo • Eva-
luando el “Perfil de Crecimiento” del discípulo Desarrollando un currículo • Evaluación
del crecimiento
La Caja de Herramientas de Discipulado Personal . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 195
• Como Usar Los Principios de la Caja de Herramientas del Discipulado Personal ..... 196
• Cuestionarios de Autoevaluacíon ................................................................................ 197
• Tabla de Crecimiento del Discipulado ........................................................................ 218
• Diagrama del Crecimiento del Discípulo (11x17) ...................................................... 236
Notas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 239
PREFACIO
“DISCIPULADO” – una palabra mal entendida en el vocabulario cristiano de nuestros días, pero Chris Adsit ha
quitado la neblina de los términos confusos y de las aplicaciones débiles. Este es un manual excelente en todo el asunto
de hacer discípulos. Le describe los niveles de crecimiento en la vida de los creyentes y muestra lo que se necesita en
cada nivel. Se presentan muchos recursos, conocimiento e ideas para ayudar al discipulador serio y dispuesto a saber
cuándo y por qué sus metas en el discipulado se han cumplido.
Nunca en la historia del discipulado del siglo XX ha sido desarrollado un manual tan comprensivo y organizado
y que vaya a la experiencia práctica. El material ha sido probado de múltiples maneras. Chris ha consultado con mu-
chos líderes cristianos, y es obvio que ha puesto mucho tiempo y esfuerzo en este sobresaliente volumen.
Usted ya puede usar este libro. Iglesias, misiones, agencias paraeclesiásticas, etc., encontrarán a este manual
como la respuesta a preguntas que han existido por mucho tiempo: ¿cómo podemos hacer discípulos en todas las nacio-
nes? y ¿cómo saber cuando la tarea está completa?
Recomiendo altamente este volumen a todo discipulador que anhela ver el trabajo terminado. También reco-
miendo que todo creyente en Cristo Jesús le eche una mirada a este libro y se pregunte, “¿He sido alguna vez
discipulado?” Después de examinar el material detenidamente, estoy convencido que todo creyente puede beneficiarse
grandemente por seguir el diagrama y el material presente.
A Chris Adsit, nuestro agradecimiento especial por parte de los discipuladores de todas partes, y de los creyen-
tes en desesperada necesidad de discipulado. Nos has hecho un tremendo favor. Tu libro es una bendición; ¡todo tu es-
fuerzo y tiempo estuvieron bien empleados! ¡Gracias por hacer y compartir tu trabajo!
David Hocking
Expositor, La Hora Biola
Pastor de Calvary Church of Santa Ana
7
RECONOCIMIENTOS
Si no hubiera sido por la increíble fidelidad, consistencia y generosidad de nuestro Equipo de Apoyo, nunca
hubiera tenido la libertad de investigar y escribir este libro. Estas personas son el grupo más grande de animadores de
este lado de la luna. ¡Gracias, gran Equipo! ¡Estamos en esto juntos!
Muchas gracias también a cuatro hombres que tomaron tiempo de su ya muy ocupado horario para leer este
Behemot y darme una tremenda, invaluable y profunda retroalimentación: Herb Evans; Dick Katz; John Klein; Mark
McCloskey.
Alabo al Señor por David Hocking, pastor de mi iglesia madre – Calvary Church of Santa Ana, California – por
su ministerio estratégico en mi persona a través de los años y por el rol crucial que jugó en empujarme para que los con-
ceptos de este libro fueran alcanzables al cuerpo. Él me ayudó grandemente en la primera conceptualizaciòn de la Tabla
del Crecimiento del Discipulador, dando valiosas sugerencias respecto a la estructura general de este libro, y dirigiéndo-
me a través de muchos de los campos minados que por primera vez autores enfrentan. ¡Significas mucho para mí, her-
mano!
Gracias, también a Jean Bryant, quien hizo un tremendo trabajo editando este tomo y poniéndolo en su forma
final. Los editores raramente reciben el crédito que se merecen por el difícil servicio que ellos dan, pero ¡yo estoy aquí
para velar que ella lo obtenga! (¡No edítes esto, Jean!)
También tengo que extender mi gratitud a Leroy Eims por introducirme por primera vez al concepto del
discipulado a través del uso de objetivos de entrenamiento en su libro clásico, The Lost Art of Disciplemaking, (A Arte
Perdida de Fazer Discipilos1).
A ciento setenta y un discipuladores de todo el mundo que se tomaron el tiempo para responder a un extenso
cuestionario que les envié, y un gran número de sus comentarios los encontraran en este volumen. Desearía poder nom-
brar a cada uno de ellos aquí, ya que la mayoría fueron muy diligentes en responder, así de grande es el compromiso de
ellos con el discipulado.
Finalmente, y con eterna gratitud, debo agradecer y alabar al Señor Jesucristo por Su fidelidad para conmigo y
para mi familia – especialmente durante los años que se necesitó para juntar este libro. No fue suficiente con librarme
del dominio de las tinieblas y trasferirme a Su Reino, concediéndome vida eterna, el privilegio de ser hijo y el gozo de
Su eterna Presencia – sinó que también Él ha hecho que Su gracia, misericordia y supernatural ayuda se extiendan aquí y
ahora en el planeta Tierra . . . aun cuando usted esté escribiendo un libro.
Mayo 2003
Muchos gracias a Guiselle Kladensky y a Chris Swanson por su gran trabajo en la traducción y corrigen de este
libro.
8
INTRODUCCIÓN
¿Hacer discípulos? No es tan difícil. Aquí hay unas cuantas ideas prácticas.
Primero, llegar a ser omnisciente. Teniendo “todo-conocimiento” usted puede identificar fácilmente donde está
el cristiano en su peregrinar hacia la madurez espiritual.
En segundo lugar, hágase maestro de la predestinación para que usted pueda trazar un eficiente camino para él.
Claro, su propia “agencia moral gratis” puede darle problemas, pero si él se dedica a usted en cuerpo, alma y espíritu,
sus dificultades serán mínimas.
Después, llegue a ser omnipresente. Si usted está con él cada momento de cada día, usted puede ayudarlo a tra-
vés de la variedad de experiencias. De hecho, el mejor plan sería enviarlo directamente al cielo, a un ambiente perfecta-
mente adecuado para el crecimiento espiritual.
Ah, y no se olvide tener una provisión infinita de amor, paciencia, tiempo y energía.
Se está dando cuenta qué tan difíciles de obtener son estos atributos– en ninguna parte los encontramos sólo en
la Trinidad. Y para aquellos de nosotros que no los tenemos, ayudar a otra persona a crecer espiritualmente puede ser un
poco complicado. Muchos de nosotros vemos las necesidades de los cristianos que están a nuestro alrededor y deseamos
extenderles una mano de ayuda para que maduren espiritualmente. Pero cuando viene el tiempo de lanzarnos, tropeza-
mos. Debemos, identificar las necesidades específicas de un cristiano joven, decifrar cómo ayudarlo a que reconozca
esas necesidades, lidiar con una variedad de personalidades y niveles de compromiso, determinar exactamente qué decir
y hacer (como encenderlo, no apagarlo), tratar de escoger los materiales que debemos usar y reconocer cuánto de esto es
mi trabajo y cuánto el del Espíritu Santo . . . con razón dudamos.
La mayoría de nosotros podemos pensar en unas cuantas estrategias – tal como: ”Llevarlo a la iglesia”; “Intro-
ducirlo a la Biblia”; “Enseñarle sobre la oración.” ¿Pero, qué hago para llevarlo a lo específico? ¿Qué debo hacer cuan-
do nos reunamos el próximo martes a las 11:45? Y después de que comience a ir a la iglesia, lea la Biblia y ore, ¿qué
más se supone que debería hacer? ¿Puedo motivarlo a que profundíce y amplíe su relación con Dios, para que continúe
con Él por largo tiempo?
Preguntas como estas son las que este libro busca contestar. Usted descubrirá las primeras doce cosas para ha-
cer con un nuevo cristiano. En lugar de confiar en un proceso “orientado en los materiales”, usted aprenderá cómo
crearle a una persona un perfil espiritual y un programa hecho a la medida que le calce a su modo de ser y a sus necesi-
dades. Usted verá qué es lo que la Biblia tiene que decir acerca de un proceso espiritual de crecimiento a largo plazo, y
cómo puede usted calzar en él. Usted aprenderá cuales son los roles importantes del Espíritu Santo y del cuerpo de Cris-
to en el proceso discipulador. Usted se beneficiará de un conocimiento práctico de los discipuladores alrededor del
mundo. Y tendremos un poco de diversión a lo largo del camino.
Antes de que demos inicio, quisiera encender algunas llamas para captar su atención y aclarar su camino.
Primero, este libro no es “superficial”. He tratado de mantenerlo interesante y fácil, pero no es una lectura li-
viana. Es un manual de sobrevivencia. Usted lo lee una vez, cuando está en su casa en su silla preferida, para obtener el
panorama completo, después se regresa y lee otra vez las partes pertinentes cuando se siente perdido en el bosque. Tam-
bién encontrará instrucciones paso a paso para usar las herramientas que usted tiene a su disposición.
Segundo, me estaré refiriendo a las personas que usted está tratando de ayudar como “su discípulo,” pero usted
debe reconocer desde el principio que él o ella no es realmente su discípulo. Nuestro objetivo es ayudar a que esa perso-
na llegue a ser discípulo de Jesucristo, no suyo o mío. ¡Qué estancado y confuso estaría este mundo si sólo hiciéramos
9
10 DISCIPULADO PERSONAL
duplicaciones de nosotros mismos! Este planeta no necesita otro yo, pero de seguro podría aceptar a unas cuantas perso-
nas como Jesús, y eso es lo que aspiramos producir.
Aún esta frase es incorrecta. Nosotros no producimos nada. En 1 Corintios 3:7 leemos: “Así que no cuenta ni
el que siembra ni el que riega, sino sólo Dios, quien es el que hace crecer.” Dios es el que dirige el espectáculo. Noso-
tros somos herramientas en Sus manos – nada más, nada menos. Algunos que han sido discipuladores se les ha escapa-
do este punto y han tratado de imponerse como gurús, esperando el compromiso y la obediencia que está reservada sólo
al Señor Jesucristo. Esté atento a esa trampa – servimos a un Dios celoso.
Tercero, donde quiera que me refiera en este libro al discípulo, usaré el género masculino. Usted puede notar
que este libro es ya suficientemente largo sin aumentarle más volumen escribiendo constantemente “él o ella”. Por favor
entiendan que estoy usando el pronombre genérico “él” e interprételo de esa manera.
Tan útiles como pueden ser, la omnisciencia y la omnipresencia son herramientas que nunca usaremos en el
discipulado. Pero no deje que eso lo desanime. Dios ha provisto a Su Iglesia con “todo lo que pertenece a la vida y a la
verdad”1 para que cada uno de nosotros podamos ser efectivos en el involucramiento del “equipar a los santos en el tra-
bajo del servicio, para la edificación del cuerpo de Cristo; hasta que todos lleguemos a la unidad de la fe y del conoci-
miento del Hijo de Dios, a un varón perfecto, a la medida de la estatura de la plenitud de Cristo.”2 Desde que Dios se
propuso hacer esto, nos capacitó para hacerlo.
Mi oración es que este libro sea una herramienta útil en sus manos mientras Él le equipa a usted para que usted
equipe a otros.
PRIMERA SECCIÓN
CONVIRTIÉNDOSE EN UN
DISCIPULADOR
12 DISCIPULADO PERSONAL
1
LA PRIORIDAD
De pie mirando una lápida en aquel polvoriento cementerio de Wyoming, las palabras de Jerry me cautivaron.
“Dios, la Palabra de Dios, y las almas de hombres . . . ”
Jerry White – en aquel entonces era un instructor de la Academia de la Fuerza Aérea, ahora es presidente de los
Navegantes – había hablado despacio y deliberadamente. “De acuerdo con la Biblia, estas son las únicas cosas que dura-
rán eternamente. A medida que usted se involucra en estas tres cosas, usted se está involucrando en la eternidad.”
Unas semanas antes cuando asistí a una reunión de los Navegantes en la Universidad de Colorado había escu-
chado a Jerry decir esas palabras, pero no se interiorizaron. Yo era un cristiano de tan sólo un mes, y tan elevados pen-
samientos no habían encontrado un lugar en mi mundo. Claro las palabras de Jerry aparentemente sí habían dejado caer
una semilla ya que volaban por mi mente. Esa semilla había caído en tierra fértil, y ahora empezaba a crecer.
“Dios, la Palabra de Dios, y el espíritu del hombre. . . ” Le di vuelta y vuelta a estas palabras en mi mente una y
otra vez, reflejando en el significado. “Eternidad. . . se alcanza desde este lado de la muerte. . . en sólo tres formas. . . ”
Tales nociones cósmicas nunca se me habrían ocurrido en la confusa, difusa, turbulenta y turbada primavera de
1970 en mi universidad. Con toda la bulla de las protestas de guerra, un concierto de los Stones, fiestas, y la vertiginosa
libertad de los estudiantes de primer año. . . ¿quién podía escuchar una apacible y pequeña voz?
Así que el Señor se las arregló enviándome en el verano a los campos petroleros cerca de Gillette, Wyoming, a
un trabajo de obrero. Ahí, la vida fue reducida a lo básico, ¿cómo puedo ajustar este tubo?, ¿dónde comería hasta que
me dieran mi primer cheque?, ¿cómo lidiaría con la terrible soledad?, ¿hacia dónde se dirige mi vida? Cuando usted
está en esta clase de situación sus valores y convicciones rápidamente se cristalizan. El cuidado cercano de Dios en el
proceso de esa etapa crucial fue particularmente evidente, ese día comencé a pensar en la eternidad.
Había estacionado mi viejo Ford en la pradera a unas pocas millas fuera del pueblo y había estado viviendo
en él. Esa mañana en particular me había despertado con el peor dolor de garganta de la historia. El doctor al que
fui contribuyó con mi miseria poniéndome una inyección en la parte de atrás, y me dijo que me fuera a casa y me
acostara. Carente de ambos, casa y cama, decidí ir al viejo cementerio de la ciudad donde podía descansar en paz
(por así decirlo.) Busqué la sombra de un buen arbusto para tirarme debajo, y me cruce con una lápida, que decía:
Cyrus Calderson
Nació: 3 de marzo de 1883
Murió: 8 de abril de 1925
No conocía nada acerca del viejo Cyrus – quién fue, que había hecho en su vida, como había muerto – pero un
pequeño asunto aritmético en cuanto a las fechas generó una cadena de pensamientos perturbadores.
Cyrus Calderson había estado muerto más tiempo que lo que había vivido.
Tal vez esta no le parece a usted una observación alarmante, pero a mí si me escalofrió. Pensé en todas las acti-
vidades en que Cyrus pudo haber estado involucrado durante toda su existencia – trabajo, juegos, aprendizaje, cortejos,
matrimonio, paternidad, conversaciones, comida, dormir – pero ahora había pasado más tiempo descomponiéndose que
todas las otras cosas juntas. Y continuaría haciéndolo, y por mucho tiempo más. Por primera vez fui golpeado con la
brevedad de la vida y la enorme finalidad de la muerte. Mi siguiente pensamiento fue, algún día, eso será una realidad
en mi también.
Miles de pensamientos y preguntas comenzaron a golpearme. ¡Un momento! Cyrus en realidad no está aquí
en su tumba – es sólo su cuerpo. El verdadero Cyrus esta. . . ¿dónde? ¿En el cielo? ¿En el infierno? Si él no ha esta-
do acostado aquí debajo de esta tierra, ¿qué ha estado haciendo todos estos años? ¿Sabría él a donde iba? Cuarenta y
13
14 DISCIPULADO PERSONAL
dos años viviendo de este lado de la tumba, y ahora cuarenta y cinco en el otro. . .¡con miles – no, millones – de años
por delante! ¡Este lado no era nada en comparación! Un tic del reloj. Un parpadeo del ojo. ¿Qué haría él para estar
listo? ¿Qué podía hacer yo? ¿Qué puede hacer cualquiera? ¿Lo que hacemos de este lado de la muerte tiene algo que
ver con lo que suceda en el otro lado? ¿Qué tiene que ver este tonto trabajo mío en el campo petrolero con la eterni-
dad?
Es aquí donde las palabras de Jerry White comenzaron a dar fruto en mi mente. Dios, la Palabra de Dios y las
almas de los hombres . . .
Muy despacio, la oscuridad comenzó a desvanecerse. No sólo comencé a ver el amanecer de las prioridades
eternas de Dios, sinó que se comenzó a iluminar todo lo demás, del mismo modo como el amanecer hace que el horizon-
te del campo sea visible después de una noche sin luna. Entre más pensaba en eso, más claramente podía ver. En un
momento, Dios había ordenado mis prioridades de la vida. Por primera vez entendí que yo podía hacer algo con signifi-
cado eterno, algo que daría un verdadero sentido a mi corta vida sobre la tierra.
En ese momento no estaba muy seguro qué hacer con la parte del “alma del hombre”, pero tenía algunas ideas
en cuanto a las otras dos cosas. Yo sabía que necesitaba una relación más fuerte con Jesucristo, así que el resto del vera-
no me encontré levantándome temprano cada día para pasar tiempo en oración y leyendo la Biblia antes de enfrentar el
“crudo camino.” Comenzé a memorizar versículos. La vida tiraba una barrera tras otra, y yo observaba con admiración
como el Señor hizo estallar cada una de ellas en pedazos, sosteniendo mi creciente fe. Mi relación con Cristo creció mu-
cho más allá de “un simple conocimiento” intelectual. Lo que había experimentado hasta ese momento, se volvió en un
dinámico romance de amor. Para mí, ese verano en el campo de petróleo puso a la vida eterna en una marcha mucho
más fuerte.
En los siguientes años mi “compromiso del cementerio” se profundizó y se amplió. Muchos factores facilitaron
ese proceso, pero ninguno tan intenso como la fiel contribución de tres hombres – Dick, Wayne y Jay – quienes accedie-
ron a discipularme. Estos hombres tomaron un tiempo significativo fuera de sus estudios o sus familias – algunas veces
de los dos – para poder “explicarme con diligencia el camino de Dios,” y plantaron valores eternos en mi vida. Traba-
jando en armonía con el Espíritu Santo, ellos edificaron un sentido de propósito en mi alma que hizo de cada día una
aventura. Bajo su guianza, vi a Dios comenzar a usar este vaso roto y permeable en maneras poderosas fomentando Su
Reino.
En poco tiempo yo reconocí que el mejor uso estratégico de mis pocos “parpadeos” aquí en la tierra sería repro-
ducir en otros lo que el Espíritu Santo – a través del esfuerzo de estos tres hombres – había producido en mi vida.
Tambien comencé a entender la parte del “alma del hombre”. Deseaba llegar a ser una parte integral del gran diseño de
Dios llevando a la madurez espiritual a gente para que le dieran gloria y así estar en primera fila en Su reconquista del
planeta Tierra. Así que, me comprometí a hacer discípulos.
Uno de las primeras personas con quien trabajé fue un compañero de atletismo, Bob Parry. Un excelente corre-
dor de doscientos metros planos de Maryland, él fue uno de los mejores del país en su último año en la secundaria. El
entrenador de atletismo sabía que yo era cristiano, y había escuchado que Bob también lo era, así que me pidió a mí que
tratara de persuadir a Bob a enrolarse en la Universidad Estatal de California. Yo también estaba interesado en que él se
uniera al equipo, pero por razones diferentes a las del entrenador.
Llamé a Bob y le conté que teníamos un equipo bastante decente de atletismo, una gran comunión cristiana, y –
¡claro, la universidad era buena también! Le dije que él haría un buen papel atléticamente hablando en cualquier univer-
sidad que escogiera, pero a la larga, el gancho de los deportes se terminaría, y él tendría poco que mostrar en compara-
ción con el tiempo invertido. Pero si venía a UEC, pasaría un tiempo significativo, en un entrenamiento profundo en los
tres aspectos que tienen significado eterno – Dios, la Palabra de Dios, y el alma humano. Y que yo se lo garantizaba,
porque yo lo haría personalmente. Si Bob hubiese sabido en ese momento que tan pobre era mi conocimiento y expe-
riencia en esa última área, él habría firmado con UCLA (Universidad de California en Los Angeles.)
Después de orar por eso, Bob se dirigió a las montanas “Rockies”. ¡Yo estaba tan emocionado! ¡Iba a
discipular a alguien! Él tenía que llegar en el otoño – por lo tanto, tenía tres meses para estar listo. ¿Pero, cómo? Vaga-
mente recordaba como Dick, Wayne y Jay me habían discipulado, y ahora ¿dónde comenzar con este muchacho? Cono-
cía casi nada de él. Aunque no le había contado a nadie de eso, yo estaba aterrorizado. Esto se convirtió en beneficio
para mí, porque me llevó a una desesperada oración.
Bob había sido cristiano por unos pocos años, y en la secundaria se había involucrado con Young Life. Su rela-
ción con el Señor era importante para él, pero se podía notar que no había tenido mucho entrenamiento espiritual prácti-
co. En mis oraciones por Bob, le pedía al Señor específicamente por lo que Bob necesitaba aprender, y que me guiara
LA PRIORIDAD 15
en el cómo ayudarlo. Comenzamos a estudiar la Biblia juntos. Oramos juntos. Le enseñé como compartir su fe. Testifi-
camos juntos. Le enseñé como dirigir un estudio bíblico. Nuestra camaradería crecía mientras agonizábamos, sudába-
mos, nos dolíamos, vivíamos y moríamos juntos en el entrenamiento de la pista. Nos pullabamos uno al otro con la me-
morización de la Escritura. Al pasar del tiempo me dí cuenta, que más allá de la relación discípulo/discipulador, nos es-
tábamos convertiendo en los mejores amigos.
Nos hicimos compañeros de cuarto en el dormitorio de la universidad y nuestro pequeño cubículo llegó a ser la
Gran Estación Central para muchos de los corredores de UEC y la población cristiana en general. Organizábamos ahí
noches de oración, algunas veces metimos veinticinco personas en nuestro cuarto 14’ x 14’. Dirigimos estudios bíblicos.
Trabajamos en estrategias para ganar al equipo de atletismo para Cristo. Nos introducimos en la vida del otro, lloramos
juntos en los infortunos amorosos, nos mantuvimos a raya en cuanto a las tareas. Cuando nuestros cuerpos eran destrui-
dos por el ejercicio y aparecía el rigor mortis, juntos renegábamos del día cuando escogimos la pista en vez de baseball,
pero nuestros gritos de regocijo fueron grandes y fuertes cuando uno de los dos ganaba una carrera. Nos edificábamos
uno al otro cuando era necesario edificarse, nos corregíamos uno al otro cuando era necesario corregirnos. Eventual-
mente, Bob llegó a ser el mejor amigo en mi boda y un insondable depósito de retos y ánimo para mí.
A su tiempo, mi amigo comenzó a multiplicar la vida de Cristo en la vida de otros. Uno de sus discípulos
terminó siendo un mago de la computadora en la NASA, ministrando en Houston a miembros del programa
espacial shuttle. Uno pasó de ser un jugador estrella del equipo de basketball de UEC a influenciar con Cristo a los
niveles altos dentro de una corporación internacional. Otro llegó a ser un cabildero para una organización cristiana
con base en Washington, DC. Otro es un policía en un suburbio de Denver y efectivamente representa a Cristo ahí.
Bob invirtió gran parte de su tiempo en Chuck Kovac, el fullback del equipo de football en UEC. Ellos
crecieron hasta llegar a ser buenos amigos y se casaron con dos jóvenes compañeras de cuarto que también fueron
buenas amigas. Los cuatro se ministraron los unos a los otros, y juntos ministraron a otros de la misma manera.
Cuando Chuck se graduó, se fue a trabajar a una operación comercial significatíva en Denver, y comenzó a
influenciar a mucha gente para Cristo. A través de su iglesia inició varios estudios bíblicos en casas y un estudio de
los Navegantes “Colosenses 2:7.” Unos pocos años más tarde, tomó un trabajo como ingeniero con una compañía
eléctrica y abrió una nueva oficina en San Diego.
En ese ambiente acelerado y chocante, Chuck conoció a Brian Roble, un cínico, agnóstico hombre de
negocios quien estaba luchando con la adicción a las drogas y al alcohol. Brian se acababa de enrolar con un
programa de dependencia química, y por primera vez en su vida sabía que necesitaba la ayuda de “un poder
superior.” Chuck y Brian comenzaron a estudiar la Biblia y a orar juntos, y a su debido tiempo Chuck estaba listo
para guiar a Brian a una relación personal con Jesucristo. Ellos y sus esposas llegaron a ser amigos verdaderos, y
dedicaron muchas horas felices para edificarse mutuamente en la fe. Brian está limpio ahora, está enseñando
doctrina bíblica a los niños de su iglesia, y es un facilitador en los 12 pasos del programa de recuperación
alcohólica, compartiendo con otros lo que ahora él sabe es verdad acerca de “un poder superior”. Los cuales a su
vez comparten estas verdades, y así calmando a otros.
El apóstol Juan escribió en 3 Juan 4: “No tengo yo mayor gozo que este, el oir que mis hijos andan en la
verdad.” He comenzado a entender de lo que Juan estaba hablando. De regreso a Gillette, de pie en la lápida de
Cyrus, mi corazón clamó por una vida con significado. En los años que han pasado desde entonces, he tenido un
vislumbre de lo que significa llegar a ser una unión en la cadena eterna de multiplicación espiritual. A esta cadena,
que inició con Jesús, se han ido agregando uniones a través de Dick, Wayne y Jay, a través de mí, a través de Bob, a
través de Chuck, y a través de Brian, y continúan añadiéndose uniones a través de otros. Al mirar hacia atrás al
fruto que ha quedado, mi corazón desea reventar con ¡Su eterno gozo!
MOTIVACIÓN CONTINUADA
Al pasar del tiempo, he aprendido cinco factores que confirman mi compromiso inicial para discipular. Si
usted todavía no se siente listo para la multiplicación a través de este proceso, yo espero que estas cinco
observaciones lo enganchen para seguir en esa dirección.
DEFINICIÓN DE “DISCÍPULO”
Cuando usted está buscando el significado correcto de una palabra usada en la Escritura, usted debe tomar en
cuenta dos pasos importantes: (1) ir al griego, arameo o hebreo para encontrar la definición literal; y (2) ver como se usa
la palabra en el contexto. Al aplicar estos dos principios a la palabra discípulo, el paso #1 nos indica que un discípulo
bíblico tiene una determinada actitud, y el paso #2 nos demuestra que dicha actitud se manifiesta en acciones. Primero,
echemos un vistazo a la definición – y al “actitud.” El griego bíblico para la palabra “discípulo” es mathetes, que viene
de la palabra manthano que significa sencillamente “aprendiz.”1 Así que, un mathates es “un aprendiz,” ej., un pupilo.2
Pero ¿de qué clase de “aprendizaje” estamos hablando? ¿Teórico? ¿Intelectual? ¿O será la clase de aprendizaje donde
se escucha a un maestro, se toman notas, se estudia para el examen final, se vierte el contenido del curso en un pedazo
de papel y después se olvida todo?
J.H. Thayer hace esto claro en su estudio de la palabra manthano (aprender), un mathetes es una clase especial
de aprendiz – uno que aprende “por el uso y la práctica.”3 ¡Ajá! Así que estamos hablando de una persona que no sólo
piensa, sino que también hace. Le pone zapatos de cuero a sus convicciones. Arndt y Gingrich en su Léxico Griego-
20
EL PRODUCTO 21
Inglés del Nuevo Testamento explican que esta clase de aprendizaje no está, bajo ninguna circunstancia, confinado a una
clase académica. Usted encontrará bajo la explicación de manthano:
“aprender apropiadamente uno mismo, menos por la instrucción y más a través de la experiencia o
la práctica (Hebreos 5:8; 1 Timoteo 5:4, 13; Tito 3:14).4
Pero, ¿qué efecto puede tener este aprendizaje? Harold K. Moulton lo dice por nosotros: “Aprender por prácti-
ca o por experiencia, requiere un costumbre o hábito”5 (el énfasis es mío). ¿Claro? El enfoque no está en el mero ad-
quirir nueva información, aunque eso es parte, sino en la adquisición de una nueva “costumbre o hábito;” – ¡un cambio
de vida! Esta clase de aprendizaje es adquirido, practicado e incorporado dentro de un estilo de vida transformado. El
concepto de “conocimiento con esfuerzo”6 (como lo pusiera un escritor) sobresale a través de toda la Biblia en contrapo-
sición a la simple adquisición de un conocimiento intelectual:
Dios (a través de Moisés): “... y lo tendrá (la Palabra) consigo, y leerá en él todos los días de su
vida, para que aprenda a temer a Jehová su Dios, para guardar todas las palabras de esta ley y estos
estatutos, para ponerlos por obra” (Deuteronomio 17:19).
Esdras: “... había preparado su corazón para inquirir la ley de Jehová y para cumplirla... “ (Esdras
7:10ª).
David: “En mi corazón he guardado tus dichos para no pecar contra ti” (Salmo 119:11).
Juan: “El que dice: Yo le conozco, y no guarda sus mandamientos, el tal es un mentiroso, y la ver-
dad no está en él” (1 Juan 2:4).
Santiago: “Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solamente oidores, engañándoos a vosotros
mismos” (Santiago 1:22).
Pablo: “porque no son los oidores de la ley los justos ante Dios, sino los hacedores de la ley serán
justificados” (Romanos 2:13).
Jesús: “Todo aquel que viene a mí, y oye mis palabras y las hace, os indicaré a quién es semejante.
Semejante es al hombre que al edificar una casa, cavó y ahondó y puso el fundamento sobre la roca”
(Lucas 6:47-49).
“Mi madre y mis hermanos son los que oyen la palabra de Dios y la hacen” (Lucas 8:21).
“Y él dijo: Antes bienaventurados los que oyen la palabra de Dios, y la guardan” (Lucas 11:28).
Podríamos seguir y seguir. Mantengamos nuestros ojos abiertos buscando esa actitud de “aprendiz” – aquel
que toma y aplica la nueva información que viene de Dios. Pero, ¿cómo podemos darnos cuenta si eso está sucediendo?
Nos daremos cuenta por las acciones de discípulo que tengamos. Jesús dijo, “Así que, por sus frutos los conoceréis”
(Mateo 7:20).
Dios le dijo al profeta Samuel: “... pues el hombre mira lo que está delante de sus ojos, pero Jehová mira el co-
razón” (1 Samuel 16:7). ¡Ay, cuánto nos gustaría poder ver el corazón como Dios lo ve y tener una visión 100% perfec-
ta del ser humano! Desafortunadamente, todo lo que podemos ver es lo externo. Sin embargo, Jesús nos dijo que la
apariencia exterior – o las acciones del hombre – en última instancia reflejan el corazón humano (Marcos 7:20-23).
Aunque la apariencia externa puede ocultarse y a propósito no demostrar lo que hay por dentro, sigue ahí y todos noso-
tros los seres humanos debemos superarla. Y con la ayuda interna del Espíritu Santo, eventualmente deberíamos ser ca-
paces de darnos cuenta si el cambio de estilo de vida proviene de un verdadero corazón transformado.
Bueno, pero ¿qué clase de acciones buscamos? Vayamos al paso #2 y verifiquemos el uso de la palabra en el
contexto de la Escritura.
“DISCÍPULO” EN CONTEXTO
Mientras examinamos el uso de la palabra discípulo en el Nuevo Testamento, encontraremos algunos aspectos
confusos. Por un lado, leemos que Jesús puso estándares muy altos para las personas que deseaban ser llamados Sus dis-
cípulos – cosas como: tomar la cruz, seguirlo a Él, y aceptar toda la crítica y la persecución que Él soportó (Mateo
10:24-38); renunciar a todas las posesiones (Lucas 14:33); estar tan enamorado de Él que pareciera, si las comparamos,
que debemos aborrecer las relaciones con la familia (Lucas 14:26); y estar dispuesto a morir por Él (Mateo 10:39).
22 DISCIPULADO PERSONAL
Por otro lado, algunas veces la gente que la Biblia llama discípulos se comportaron en maneras “no dignas de
un discípulo.” Ellos parecen ser: espiritualmente lentos (Mateo 13:36; 16:6-11; Juan 14:5-10; 16:16-20); espiritualmente
impotentes y faltos de fe (Mateo 17:15-20); usados por Satanás como tropiezo (Mateo 16:21-23; 26:14-16); llenos de
orgullo espiritual (Marcos 10:35-45; Juan 13:36-38); sin compromiso (Juan 6:66); faltos de compasión para otros (Mar-
cos 10:13-14); violentos y coléricos (Lucas 9:54-55; Juan 18:10-11); guardan en secreto su devoción por Jesús (Juan
19:38); opuestos a las intensiones de Jesús (Juan 13:5-11); dejan a Jesús solo en el momento de mayor necesidad (Mateo
26:69-75; Marcos 14:43-46, 50).
Entonces ¿qué es un discípulo? ¿Un superhombre espiritual o un inútil espiritual? La respuesta correcta es:
ambos. Un discípulo es una persona en proceso. El proceso inicia cuando la persona reconoce a Cristo como Señor y se
convierte en un aprendiz, y continuará mientras la persona siga aprendiendo. La persona inicia como un bebé, o sea no
llena en ningún momento el criterio de un discípulo maduro, ni se debe tener esa espectativa de él. Así como discípulo
que viaja con Jesús, cometerá errores torpes de vez en cuando. Pero mientras aprenda y se mantenga en progreso, no
debemos ponernos nerviosos.
De vez en cuando, Jesús apresuraba a Sus apréndices en este proceso. Este es el caso en Juan 6 cuando Jesús
insta a un buen grupo de Sus discípulos a confiar plenamente en Él en las partes más significativas de sus vidas. Pero
muchos de estos “apréndices” se sintieron ofendidos y decidieron dejar de aprender, y no caminar más con Jesús (versí-
culo 66). Ellos no podían llamarse más Sus discípulos porque dejaron de crecer. Entonces Jesús se volvió a los doce y
les enfrentó con una pregunta muy directa: “¿También ustedes quieren marcharse?” Pero la respuesta que salió desde
sus adentros fue: “Señor... ¿a quién iremos? Tú tienes palabras de vida eterna” (versículos 67-68). Ellos sí aceptaron el
reto, ellos querían seguir madurando.
Al discípulo de hoy, que está creciendo, Él les diría, “Lo han estado haciendo bien; han estado demostrando que
son apréndices. Pero ya es tiempo de graduarse y pasar a la siguiente clase. Ahora las expectativas serán mayores. ¿Es-
tán dispuestos a aceptar el nuevo reto?” Si el discípulo dice si, seguirá aprendiendo, continuará madurando, continuará
siendo usado en el trabajo del Reino – seguirá siendo un discípulo. Pero si no está dispuesto a seguir, Jesús dirá, “Enton-
ces no puede ser mi discípulo. Tu destino eterno está en juego, y puedes arrepentirte en cualquier momento y regresar a
clases. Pero mientras mantenga esa posición, no eres Mi aprendiz.”
Siendo este el caso, usted encontrará que muchos de los cristianos nuevos son discípulos, porque ellos tienen
una intensión enorme de aprender más a cerca de su relación con Dios y no han tenido todavía mucha oportunidad de
renunciar.
Por otro lado, usted encontrará un personaje que ha pastoreado una iglesia por 25 años; que tiene un doctorado
de seminario, se ha memorizado la mitad de la Biblia, ha guiado a cientos de personas al Señor, y todavía no es un discí-
pulo, porque ha llegado el tiempo donde dice, “No. No estoy dispuesto a ir más allá. No haré tal sacrificio. No estoy
interesado en aprender nada más.”
Jesús le dice a esta persona, “No puedes ser Mi discípulo.”
¿CUÁNDO TERMINAMOS?
Si el discípulo nunca llega, ¿vamos a tener en algún momento un “producto terminado” como hablabamos en el
primer párrafo de este capítulo? La mejor instrucción de Jesús fue: “Hagan apréndices.” ¿Qué tan serio tomamos ésto?
Hace unas pocas páginas atrás veíamos que un nuevo cristiano se le puede calificar de aprendiz, entonces si estamos se-
guros de que es una persona cristiana con actitud de aprender, ¿está bien decirle “adiós” para que vaya y haga otro discí-
pulo?
Para contestar esas preguntas, es una buena idea pensar en dos analogías: un tallo de maíz y un niño.
Supongamos que alguien nos pide que vayamos a sembrar maíz. Para hacerlo debemos preparar la tierra pri-
mero, echarle algún fertilizante y ver que nuestro sistema de irrigación esté funcionando. Después, ponemos la semilla
de maíz en la tierra y la mojamos. Espantamos los pájaros, la regamos y esperamos. A su tiempo, un tallo aparece. En
ese momento podemos decir con certeza, “¡Ahí está su maíz!” Un análisis científico de eso puede probar que nuestra
aseveración está en lo correcto. Pero ¿terminaría nuestra labor ahí,? ¿lo haríamos? Dentro de ese tallo de tres pulgadas
de alto se encuentra, a su tiempo, la capacidad de crecer, madurar y producir fruto. Pero sabemos que nuestro trabajo no
está terminado hasta que veamos las mazorcas en el plato de la cena. Es lo mismo con un discípulo. Dentro del nuevo
cristiano está la habilidad para crecer, madurar y llevar fruto. El es un aprendiz verdadero. Pero nuestro trabajo no ter-
mina hasta que el discípulo alcance ese punto, llegue a ser estable y comience a producir fruto espiritual.
¿Cuánto tiempo dura este proceso? ¿Cuánto tiempo y energía debo planificar en invertir en este “tallo de maíz”
hasta que esté maduro y dando fruto? Aquí es donde dejamos el tallo de maíz y brincamos a la analogía del niño.
Toma mucho tiempo en convertir niños en adultos, pero la intensidad de nuestro trabajo y la necesidad de su-
pervisión disminuye conforme maduran. Durante los primeros años, hacemos casi todo por ellos. Mientras crecen, ellos
pueden manejarse mejor, por si mismos, las complejidades de la vida y requieren menos dirección y regulación de nues-
tra parte. Cuando alcanzan la indistinta edad de la “adultez,” les damos las botas – nuestro trabajo ha terminado. Es el
tiempo para que ellos actúen por su cuenta. Pero aun ahí, nuestro consejo no cesa – nada más ha cambiado de ropa. An-
tes, el ropaje estaba adornado con el entrenamiento paternal, ahora se parece más al buen consejo de un amigo cercano.
El asunto es que aunque la relación en el discipulado es a largo plazo, el tiempo y la energía comprometida en
esa relación disminuye conforme el discípulo madura. Pero nunca se debería detener por completo. Pablo encontró a
Timoteo más o menos en el año 53 d.C., tiempo cuando comenzó a discipularlo. Catorce años después su buen consejo
todavía tenía su lugar en el corazón de Timoteo (2 Timoteo). Yo no tengo una diaria comunicación con mis primeros
tres discípuladores. Pero cuando estoy peleando con algo duro, sus consejos y ánimo siempre presentes a través de los
años han sido una tremenda posesión para mi.
DESCRIPCIÓN DE UN DISCÍPULO
“¿Nos podríamos meter un poco más en los detalles? “ se estará preguntado usted. “Después de todo lo que ha
dicho, no tengo todavía una idea clara del cómo se verá el producto terminado. ¿Puede darme una descripción, una lista
de características, una foto, o algo?
Para producir esa foto se necesitará una cámara muy complicada porque un discípulo maduro es una criatura
muy complicada. Es como si estuviera pidiendo una foto de un copo de nieve. Un copo de nieve puede tener cierta for-
ma, pero ningún otro es igual a él. Debido a la variedad de dones, habilidades, destrezas, trasfondos, educación, capaci-
dades, gustos y disgustos con los que cada uno de nosotros hemos sido bendecidos, los discípulos maduros son tan úni-
cos como lo es un copo de nieve.
Alguno puede ser muy bueno en la predicación de la Palabra; otro puede ser un poderoso guerrero de oración;
otro puede ser una máquina para testificar. Y sí, cada uno puede ser un discípulo maduro. Esa es la escencia de ser
miembros diferentes del mismo Cuerpo.
24 DISCIPULADO PERSONAL
Existen algunas características que a todo aquel que camina con Cristo se le requiere que tenga, y para cuando
este libro llegue a su fin, es mi esperanza que usted tenga bien claro cuáles son y también del cómo participar en el pro-
ceso que las incorpora en su vida de discípulo. Pero usted debería estar conciente de las cualidades especiales, convic-
ciones y hábitos que caracteriza a su discípulo de manera única – también necesita conocer cómo ayudarlo a desarrollar-
las. En este capítulo hemos echado un vistazo panorámico. La persona aprende de Jesús y aplica lo que aprende. Nos
enfocaremos más en los detalles conforme avancemos.
25
26 DISCIPULADO PERSONAL
Para estar seguros de que tenemos una buena comprensión del “por qué” del discipulado, vamos a concentrar-
nos en este capítulo en el significado de la Gran Comisión. En el capítulo 4 veremos más de cerca el papel respectivo de
las primeras agencias involucradas en el proceso.
LA GRAN COMISIÓN:
MANDATO DIVINO
Cuando Jesús dio la Gran Comisión en Mateo 28:19-20, exactamente ¿qué fue lo que nos estaba pidiendo que
hicieramos?
En la Nueva Versión Internacional el pasaje dice:
Por tanto, vayan y hagan discípulos de todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre y
del Hijo y del Espíritu Santo, enseñándoles a obedecer todo lo que les he mandado a ustedes. Y les
aseguro que estaré con ustedes siempre hasta el fin del mundo.
Aunque en español no parece, si conocieramos el griego nos daríamos cuenta que existen tres participios
adverbiales en esta larga oración que al traducirlos en español se convierten en gerundios (“yendo,” “bautizando,” y “en-
señando”), todos modifican el imperativo “hacer discípulos.” ¿Recuerda la gramática del colegio? Un pequeño curso
de refrescamiento: un gerundio es una forma verbal que expresa que la acción se efectúa en el presente. Por ejemplo:
“Él irrumpió en el cuarto gritando ‘fuego.’ “Gritando” es el gerundio que nos indica lo que estaba haciendo al “irrum-
pir” (verbo) en el cuarto. Lo que tenemos en el pasaje de Mateo son tres palabras que parecen verbos y todos están mo-
dificando al verbo principal de la oración “hacer discípulos” (una sola palabra en griego) que resulta ser un imperativo o
una orden. “Vayan” estaría mejor traducido “yendo,” por lo tanto no es una orden.
A primera vista “yendo,” “bautizando” y “enseñando” parecen verbos, por lo tanto pensamos: “¡Ah, ya entien-
do – Jesús nos ordenó que fueramos, bautizáramos y enseñáramos!” Cerca, pero no correcto. Esas son cosas importante
que debemos hacer, pero lo que Jesús realmente y gramaticalmente nos ordena es “hacer discípulos.” Los verbos “ir,
bautizar y enseñar” nos indican el cómo lo debemos hacer. Pero el hacer discipulos es el fin, el foco, el mandamiento.
Ir, bautizar y enseñar son los medios, el método y la actividad.
Tenemos un buen paralelo, imagínese al jefe de Paul Revere instruyéndolo antes de su famosa cabalgata. Los
tres participios han sido italizados y el verbo principal esta en negritas:
“Al cabalgar a través de los pueblos, grita, ‘¡Los ingleses vienen!’ – despierta a cualquiera que
esté dormido y para en cada taberna donde los patriotas puedan congregarse.”
Lo que el Jefe de Paul quería es que él gritara. Pero el tenía que hacerlo en el contexto de cabalgar, despertar a
la gente y parar en las tabernas. Si él hubiera hecho esto sin gritar sobre el avance de los ingléses, no sólo hubiera des-
obedecido la orden, sino que toda su cabalgata hubiera sido en vano. A la inversa, si el hubiera gritado parado frente a
su granero solamente y no se hubiera molestado en cabalgar por los pueblos, despertar a los dormidos y parar en las ta-
bernas, los inquilinos de su granero estarían bien preparados para la invasión, pero los estadounidenses estarían comien-
do mucho más pescado y hojuelas al estilo inglés en estos días.
Es lo mismo con las instrucciones de Jesús. Si todo lo que la iglesia hace es ir, bautizar y enseñar, sin un movi-
miento concreto hacia el hacer discípulos, no está siguiendo sus órdenes. Ahora démosle vuelta a la moneda, si trata de
hacer discípulos fuera del mandato divino en el proceso de ir, bautizar y enseñar, estará destinado a fracasar. Entonces
¿cómo unimos el ir, bautizar y enseñar para hacer discípulos? Veámoslos uno por uno.
Yendo
Tome en cuenta el lugar de esta palabra en la construcción de la oración del griego original, una traducción más
precisa sería, “Al ir...” Esto presupone que los oyentes ya están yendo. Y se relaciona con el discipulado de dos mane-
ras:
Primero, alude al concepto de evangelismo. Es muy difícil hacer discípulos de personas no cristianizadas, en-
tonces el primer paso hacia la madurez espiritual de una persona es guiarlos al nuevo nacimiento dentro del grupo espiri-
tual. Jesús está diciendo: “Hagan discípulos ganando personas para el Reino.”
Segundo, nos lleva a nosotros a tomar la iniciativa. El trabajo no se haría si nos quedamos sólo en el ir. Son
ambas cosas, testificar y discipular, necesitamos salir, movilizarnos, quitarnos el pacifismo y convertirnos en activistas.
EL PROCESO 27
Esto puede significar cruzar el océano e ir a un continente desconocido, o puede significar cruzar la calle e ir donde un
vecino. Lo que está diciendo Jesús es ¡hagan discípulos tomando la iniciativa! ¡No esperen a que se acerquen a ustedes
– vayan a ellos primero!
Bautizando
El participio en griego “baptízantes” utilizado aquí viene de “baptizo” que quiere decir “bañar, inmersión, su-
mergir.”1
La idea es que uno está introduciendo un objeto en un ambiente nuevo, que afectará al objeto de alguna manera.
Si bautizas una taza sucia en un río limpio, la introduces en un nuevo ambiente de agua limpia, el nuevo ambiente tendrá
el efecto de limpiarlo. Cuando un pecador arrepentido es bautizado por el Espíritu Santo al convertirse, es introducido
en un nuevo ambiente de naturaleza espiritual, el cual tendrá efectos eternos en él (ella). El tipo de bautismo del que
habla el pasaje de la Gran Comisión se refiere al bautismo en agua que los discipuladores están llamados a efectuar a los
que creen. Se relaciona con el proceso de discipulado de dos maneras:
Primero, cuando la persona pasa por el bautismo en agua, abiertamente se está identificando con el Reino de
Dios. Sin ninguna vergüenza está proclamando al mundo que es seguidor de Jesucristo. Al ser introducido al ambiente
del agua bautismal, sumergido y levantado, se identifica con la muerte, entierro y resurrección de Su Señor. Le dice al
mundo que ha sido introducido en el nuevo ambiente espiritual.
En los primeros días de la iglesia este acto abarcaba todo, desde azotes hasta muerte por parte de familiares y
amigos del creyente – y en muchas partes del mundo esto sucede aun hasta hoy. Se pagaba un alto precio por el bautis-
mo público, sólo por decir, “Soy discípulo de Jesucristo.” Esta identificación abierta con Jesús y Su Reino es una de las
primeras y más importantes condiciones que requiere Jesús en una persona para continuar llamándose Su discípulo
(Lucas 9:26; Romanos 10:9-10). Aquí nos está diciendo, “Hagan discípulos ayudando a la gente a identificarse abierta-
mente como Míos.”
Segundo, cuando una persona pasa por el bautismo público en agua, se está identificando también con el pueblo
de Dios. Le está diciendo al mundo, “Estoy juntando mi propiedad con esta gente. Cuando se ponga difícil, voy a estar
de su lado.” Y este compromiso es de doble vía. Después del bautismo, el recien identificado creyente necesita que los
miembros de la Iglesia hagan mucho más que estrecharle la mano, darle una palmadita en la espalda y decir, “que tenga
una larga vida y prospere”, pero dejan que se defienda por sí mismo. Ahora tiene la responsabilidad de incorporarlo al
cuerpo local con el propósito de protegerlo, instruirlo y ministrarlo. Entonces lo que Jesús también está diciendo es,
“Hagan discípulos ayudando a la gente a que se integren a Mi cuerpo.”
Enseñando
Si un discípulo es identificado como un “aprendiz” uno lógicamente supone que hay algo que debe ser “ense-
ñado.” Sabemos, a raíz de nuestra conversación en el capítulo 2, que la enseñanza no debe terminar en la bodega sim-
plemente como un “conocimiento teórico.” El conocimiento teórico es un conocimiento muerto. En cambio, debe ser
aplicada para traer consigo una vida cambiada.
Espero que hayan notado en esta parte de la guía de Cristo las frases cruciales. El no dijo, “Enseñándoles a sa-
ber todo lo que yo les he mandado.” Él lo hizo muy claro, “enseñándoles a obedecer todo lo que yo les he mandado.”
Nuestro trabajo no ha terminado cuando nuestro discípulo simplemente conoce Sus mandamientos, sin importar que tan
vastos sean sus conocimientos. Habremos hecho lo que Él pidió cuando nuestros discípulos estén haciendo Sus manda-
mientos.
David Dawson, fundador y director de “Equipando a los Santos” y veterano de 30 años con los Navegantes, ha
resumido este pensamiento en lo que algunos nos gusta llamar “la ley de Dawson”:
Los principios bíblicos requieren aplicación, lo que resulta es una metodología que permite la pro-
ducción de vida y reproducción en otros. Pero los principios bíblicos que no se aplican resultan en
actividad sin productividad, la cual imposibilita tanto la producción de vida como la reproducción en
otros.
Aprender los principios que enseñó Jesús sin ponerlos en práctica produce mucho calor y humo, pero nada de
luz. ¿Cómo enseñamos a otro a obedecer algo? Es un proceso de tres pasos básicos:
28 DISCIPULADO PERSONAL
1. Aprender. Primero viene la simple transferencia de información, lo que yo llamaría conocimiento teórico –
pero en el buen sentido de la palabra. Este es en primer lugar el uso de la palabra griega “enseñando” – didaskontes
(forma lexical: didasko) lo que usó Jesús en Su Gran Comisión. Tiene que ver con el intelecto. Pero no es sólo un tipo
de enseñanza de “tome, lea ésto”; es consciente, responsable, “enséñelo hasta que se lo aprenda.” De acuerdo con el Dr.
Klaus Wegenast, comentando la palabra didasko dice, “Lo que se enseña puede ser conocimiento, opiniones o hechos,
pero también habilidades artísticas y técnicas, todas deben ser sistemáticas y completamente absorbidas por el aprendiz
como resultado de la actividad repetida de ambos, maestro y pupilo.”2
2. Amar. Lamentablemente la mayoría de los maestros se detienen en el punto uno – si es que llegan tan largo.
Debemos continuar al siguiente estado, a la convicción, o lo que yo llamaría “conocimiento de corazón.” Esto tiene que
ver con las emociones. El maestro tiene que ayudar al aprendiz a llegar al punto donde personalmente se apropia del
conocimiento que ha adquirido. Los 40 centímetros entre la cabeza y el corazón son en realidad un largo camino y si el
maestro no hace su mejor esfuerzo para ver que la información enseñada haga esa trayectoria, el discípulo nunca será un
observante de los mandamientos de Jesús. El discípulo debe llegar al punto de decir, “¡Esto no sólo es un montón de
teoría, esto es realidad! ¡Esto es verdad! ¡Esto es vida! ¡Esto es para mi!” El discípulo debe llegar a amarlo.
3. Vivir. Si una convicción verdadera ha sido desarrollada, no se detendrá en el amarlo. Se trasladará al si-
guiente estado, que es la aplicación a la vida, o lo que yo llamo “conocimiento práctico.” Tiene que ver con la volición
o la voluntad propia. Este viaje desde el corazón hasta la práctica es aun más largo, pero si realmente está en el cora-
zón, eventualmente se pondrá en práctica. El trabajo principal del discipulador es ayudar al discípulo a poner en práctica
la convicción en forma de acción. Los discípulos deben vivirlo.
A través de este libro me propongo darles maneras prácticas para ayudar a su discípulo a llegar a “aprender,
amar y vivir.” Puede que ahora parezca nublado y teórico, pero al continuar juntos la foto se aclarará.
Contiene:
z cuatro cassettes VHS con 24 sesiones de media hora (también disponible en formato PAL)
z Guía para las Discusiones del Líder, que incluye preguntas para discutir en grupo y notas reproducibles para
cada sesión para ser entregadas a los estudiantes.
z El uso de Discipulado Personal como recurso adicional
z El vídeo de alta calidad incluye la clase, discusiones en grupos, ilustraciones, gráficas, demostraciones, cam-
bio de roles (representaciones), etc.
“Esta serie de vídeos de entrenamiento de Discipuladores Internacionales le ayudará a equiparse para un maravilloso minis-
terio en la vida de otros. Pondrá el fundamento para una vida mucho más efectiva para Dios”.
Steve Douglass, Presidente de Crusada Estudiantil y Profesional para Cristo Internacional.
“Christ Adsit ha producido una herramienta para el entrenamiento dentro del discipulado. Lo conozco a él y su corazón
para discipular desde sus días de estudiante en nuestro ministerio de los Navegantes. Esta serie de vídeos provee el “cómo”
del proceso del discipulado.
Jerry E. White, PhD; Presidente de los Navegantes.
EL ESPÍRITU SANTO:
INFLUENCIA DIVINA
Mark Twain una vez dijo algo acerca del tiempo que se aplica a muchas cosas inclusive al discipulado. “El
trueno es bueno; el trueno es impresionante; pero es el relámpago el que hace el trabajo.”1
Muy a menudo encontramos discipuladores dejándose impresionar por las cosas equivocadas. Vemos iglesias
grandes, programas inmensos, oradores de pico de oro, congregaciones grandes, toda clase de alborotos, calor y humo, y
exclamamos, “¡De seguro el Señor está en este lugar!” No hay nada malo con ninguna de esas cosas pero debemos dar-
nos cuenta que las grandes ideas tienen el mismo efecto en el mundo que el trueno, a menos que estén recibiendo la
energía del relámpago del Espíritu Santo.
El apóstol Pablo lo puso de esta manera: “Así que ni el que planta es algo, ni el que riega, sino Dios, que da el
crecimiento” (1 Corintios 3:7). Podemos ser ministros del Evangelio impresiónantes, por lo menos a nuestros propios
ojos. Podemos ser la décima generación de cristianos en nuestra casa, graduados de una universidad bíblica, genios de
seminario y totalmente entrenados en todas las áreas ministeriales por una variedad de organizaciones, pero somos de
poca utilidad para el extendimiento del Reino de Dios si no estamos debidamente conectados en el poder y el programa
del Espíritu Santo. Como dijera Stephen Bly, pastor, autor y conferencista, “No importan que tan auto-suficientes crea-
mos que nos hemos convertido, sólo Dios puede darnos crecimiento, madurez y la cosecha.”2 El Dr. Ron Jenson,
exdirector de la Escuela Internacional de Teología, lo puso de la siguiente manera, “Necesitamos estar convencidos de
que nosotros no podemos producir crecimiento así como no podemos producir conversión.”3
Jesús no exageró cuando dijo en Juan 15:5, “ . . . porque separados de mi NADA podéis hacer” (el énfasis es
mío, pero ¡probablemente de Él también!). Podemos tratar de hacerlo sin Él. Podemos juntar nuestros grandes planes y
los objetivos bien elaborados, reclutar a los trabajadores, levantar los fondos necesarios, redactar el proyecto, sacar la
publicidad, llamar a los medios de comunicación y orar, “Señor, por favor bendice nuestros esfuerzos, Amén,” y no en-
tendemos el porqué toda la operación no resulta. Nos hemos olvidado de que es Su operación. Él es el Dueño, nosotros
somos sus trabajadores. Este es Su mundo que necesita salvación, no el nuestro. ¡Dejemos que Dios sea Dios, y usted
sea usted!
E.M. Bounds, el gran hombre de oración del último siglo, lamenta los falsos ministerios sin unción:
30
LOS ACTORES PRINCIPALES 31
La verdad sin la vivencia del Espíritu de Dios apaga de la misma forma, o más que, el error. Puede
ser la verdad sin aditivos, pero sin el Espíritu su sombra y toque está muerta, es puro error, es una luz
oscura . . . El predicador puede sentir el fuego desde sus propias chispas, ser elocuente sobre su pro-
pia exégesis, serio en entregar el producto de su propio cerebro; el profesor puede usurpar el lugar e
imitar el fuego del apóstol; cerebros y nervios pueden servir al lugar y simular el trabajo del Espíritu
de Dios, y a través de esas fuerzas la letra puede dar luz y centellar como un texto iluminado, pero la
luz y el centelleo será infructuoso como el campo sembrado de perlas.4
Es fácil ver la desesperanza de un ministerio sin el poder del Espíritu Santo dando un rápido vistazo a las vidas
de los primeros discípulos:
Nunca olvide la necesidad absoluta del poder del Espíritu Santo. Después de años de ser
discipulados personalmente por Jesús, la mayoría de los discípulos lo abandonaron ante la cruz y uno
lo traicionó. ¡Fue Pentecostés lo que hizo la diferencia! ¡Llenos del Espíritu Santo, estos discípulos
salieron a cambiar el mundo!5
Cuando usted comienza a discipular a alguien, se encontrará pensando cosas como, ¿Qué debo hacer para ayu-
dar a esta persona a ponerse en forma? Obviamente me necesita para iniciar su proceso de madurez. ¡Ahora que estoy
en escena, esta persona realmente comenzará a crecer! Veamos, lo primero que creo que necesita es tal cosa. Luego
creo . . . . Y luego creo . . .
Mientras tanto el Espíritu Santo está diciendo, “¡Deténgase, amigo! ¡Eres el nuevo aquí! ¡Yo he estado traba-
jando en la vida de esta persona desde antes de que naciera! ¡Conozco lo que hay dentro y tengo planes para él! ¿No
crees que deberías consultar Conmigo antes de comenzar a juguetear con Mi programa?
Podemos meternos en los planes del Espíritu Santo como un gorrión se introduce en el motor de un avión – y
quemarnos en el proceso – o podemos cooperar con Él en el plan perfecto que tiene en mente. Es Espíritu de Dios nos
dice, “Me encanta tenerte en el equipo que he escogido para ayudar a este hijo Mío ha crecer, pero no toleraré el orgullo
del que mira las cosas desde las graderías.”
Es vital que cuando pensemos sobre este proceso de discipuladado, nos veamos a nosotros mismos como ins-
trumentos en las manos de Dios. Él está mucho mas preocupado y activo en el crecimiento del discípulo de lo que noso-
tros nos podemos imaginar. El apóstol Pablo, uno de los grandes discipuladores de todos los tiempos, sabía quién estaba
acargo del proceso:
• 1 Corintios 3:5-6 – ¿Qué pues, es Pablo, y qué es Apolos? Servidores por medio de los cuales habéis
creído; y eso según lo que a cada uno concedió el Señor. Yo planté, Apolos regó; pero el crecimiento lo
ha dado Dios.
• 2 Corintios 3:18 – Por tanto, nosotros todos, mirando a cara descubierta como en un espejo la gloria del
Señor, somos transformados de gloria en gloria en la misma imagen, como por el Espíritu del Señor.
• Gálatas 3:2-3 – Esto sólo quiero saber de vosostros: ¿recibisteis el Espíritu por las obras de la ley, o por el
oir con fe? ¿Tan necios sois? ¿Habiendo comenzado por el Espíritu, ahora vais a acabar por la carne?
• Filipenses 1:6 – estando persuadido de esto, que el que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccio-
nará hasta el día de Jesucristo.
• Filipenses 2:13 – porque Dios es el que en vosotros produce así el querer como el hacer, por su buena vo-
luntad.
• 1 Tesalonicenses 5:23-24 – Y el mismo Dios de paz os santifique por completo . . . Fiel es el que os lla-
ma, el cual también lo hará.
Además de permitirle al Espíritu Santo manejar Su propio espectáculo, haríamos bien en estar atentos a Su
liderazgo en la disciplina. Es lo más inteligente para hacer. Piense en la relación que Jesús y Pedro tenían. Siendo un
pescador profesional, probablemente Pedro le enseñó a Jesús mucho sobre como pescar.6 Pero un día Jesús le dijo a Pe-
dro (Lucas 5), “Ve a pescar allá.”
Pedro pudo haber dicho algo como, “Mira, Jesús. Tu eres un carpintero. No sabes nada sobre pesca. Esta no
es la hora del día apropiada para ello, y no es el lugar apropiado tampoco. Así que, sientate y permíteme encargarme de
la pesca.” Pero Pedro entendía la autoridad de Jesús, así que bajo sus redes en el lugar que Jesús le indicó, y pescó sufi-
ciente pescado como para repoblar Sea World. ¡En ningún momento sería más fácil pescar que cuando un amigo puede
32 DISCIPULADO PERSONAL
decirle a los peces a donde ir! De la misma manera, es más fácil ser un evangelista efectivo si camina con el que puede
decirle a la gente a donde ir. Es más fácil ser un discipulador efectivo si usted camina con el inventor y director de la
vida y el crecimiento. Todos nuestros programas, dedicación, celo y sacrificio no valen la pena si no estamos completa-
mente unidos con Aquel que está a cargo.
LA IGLESIA LOCAL:
ENCUBADORA DIVINA
La Biblia compara a la iglesia con un cuerpo físico, y por una justa razón. Así como cada célula individual de
nuestro cuerpo necesita una variedad de células a su alrededor para funcionar apropiadamente, cada cristiano necesita
una variedad de otros cristianos que esten cerca para poder crecer y realizar todas las funciones que Dios tiene en mente
para él. Las células en nuestros cuerpos saben sin lugar a dudas que ellas se necesitan desesperadamente unas a las otras,
y no serían capaces de existir sin la pequeña ayuda de sus amigas. Es lo mismo dentro del Cuerpo de Cristo. Nunca crea
que usted es el único “vaso de sangre” que su discípulo necesita. ¿Quién ha escuchado que una célula tiene contacto
sólo con otra célula? En la única ocación que vemos esa condición es cuando buscamos la forma de vida más elemental,
y su discípulo ciertamente no califica en esa etapa.
Me duele el simple hecho de sacarlo, pero la verdad debe ser conocida: Todos nosotros tenemos debilidades y
puntos ciegos. Todos enfatizamos algunas cosas y subestimamos otras. Somos inmaduros en muchas áreas. Así que
hagámonos a nosotros mismos una pregunta: ¿Deseamos transmitir esas mismas deficiencias a nuestros discípulos?
Eso es lo que pasaría exactamente si tratamos de ser su único y solo “vaso de sangre.” ¡Copias al carbón de mi
mismo definitivamente no quiero! Ralph Waldo Emerson dijo, “Nunca intente que alguien llegue a ser como usted.
Dios sabe y usted sabe que uno como usted es suficiente.”7
Esta es una de las razones principales por las que Jesucristo instituyó la iglesia. Pablo dijo en Efesios 4:11-13:
Y el mismo constituyó a unos, apóstoles; a otros, profetas; a otros, evangelistas; a otros, pastores y
maestros . . .
¿Con qué propósito?
. . . a fin de perfeccionar a los santos . . .
¿Perfeccionarlos para qué?
. . . para la obra del ministerio, para la edificación del cuerpo de Cristo . . .
¿Con qué meta en mente?
. . . hasta que todos lleguemos a la unidad de la fe y del conocimiento del Hijo de Dios, a un varón
perfecto, a la medida de la estatura de la plenitud de Cristo.
El ambiente ideal donde el discipulado toma lugar es dentro del contexto de la iglesia local. Ahí su discípulo
tiene contacto con una amplia variedad de gente – incluso con algunos que tienen fuerzas para contrarestar sus debilida-
des, dones que usted no tiene, talentos que usted carece y habilidades que usted no tiene. Como discipulador, usted es
responsable de supervisar y guiar el desarrollo de este discípulo en crecimiento mientras depende del Espíritu Santo,
pero cuando se sorprenda a sí mismo patinando en terreno delicado, en el contexto de la iglesia siempre podrá pedirle a
alguien más que le indique dónde está el terreno delicado.
Puede ser que en este punto alguien este diciendo, “Pero usted no conoce mi iglesia. Es bastante buena, pero la
gente no tiene la más mínima idea del discipulado. Nuestra iglesia es más una guardería espiritual que un proveedor del
ejército de Dios.” Yo se a lo que se refiere. Es un asunto que entristece, pero pareciera que la gran mayoría de las igle-
sias están más preocupadas por mantener a los santos “sentados en las premisas” que “de pie en las promesas.” Las igle-
sias de hoy, grandes y pequeñas, se han convertido en grande lugares para la educación cristiana, pero no muy populares
para el entrenamiento cristiano. El director de la Escuela Bíblica Multnomah, Joe Aldrich expresa que la mayoría de los
cristianos han sido educados más allá de sus anhelos de obedecer. Hoy en día muchas iglesias le enseñarían a usted lo
que Jesús mandó, pero a usted no le gustaría ser enseñado a cumplir lo que Él mandó. Tampoco podemos poner la cul-
pabilidad completamente en las manos del pastor, porque muy a menudo ellos están sirviendo más de lo que la congre-
gación está dispuesta a tragarse.
Así que usted tiene dos opciones: Irse a otra iglesia diferente donde se sienta cómodo guiando a su discípulo a
otros para un efectivo entrenamiento cruzado, o convertirse en un catalizador en su propia iglesia para que la gente se
LOS ACTORES PRINCIPALES 33
convierta en discipuladores. Esa segunda opción es mucho más fácil expresarla que hacerla, lo sé, pero con la ayuda del
Señor es realizable si usted está dispuesto en hacerlo.
Una palabra para ustedes los que están involucrados en el trabajo con organizaciones para-eclesiásticas – espe-
cialmente aquellas involucrados con estudiantes colegiales y universitarios: Muchos de ustedes tienen la tendencia de
involucrar a sus disciípulos en sus ministerios en el campus y excluir a la iglesia local. Usted tiene muchas cosas funcio-
nando – gente testificando, dirigiendo a los estudiantes al Señor, disciplina, crecimiento, compañerismo, oración, lectura
de la Palabra. ¿Quién necesita a una institución? Pero si usted es negligente en enseñarle a sus discípulos el cómo ellos
pueden integrarse efectivamente en el ministerio de la iglesia local, está cometiendo un gran error.
A través de los años he visto a muchas personas que han obtenido la fe salvadora de Jesús en la universidad, se
han involucrado en movimientos universitarios, han tenido un verdadero ministerio efectivo, se gradúan, se van y olvi-
dan. ¿Por qué? Porque el único contexto en el cual fueron enseñados para prosperar espiritualmente fue en el ministerio
universitario con orientación para-eclesiástica. Nunca aprendieron como ministrar (o ser ministrados) en el contexto del
cuerpo de una iglesia local – que es lo más parecido a lo que estarán involucrados por el resto de sus vidas. Por esta ra-
zón, tal vez más que cualquier otra, usted debe hacer todo lo posible de enchufar esos discípulos dentro del ministerio de
la iglesia local.
EL DISCIPULADOR:
INSTRUMENTO DIVINO
¡Sigamos! El Espíritu Santo es el que hace los movimientos en este proceso y la iglesia local es la que provee
el ambiente apropiado para crecer. ¿Dónde encajamos los discipuladores?
Como lo mencionara anteriormente, necesitamos, primeramente, vernos a nosotros mismos como “instrumentos
terrenales” que Dios usa para facilitar el proceso de madurez en Sus hijos. Existen diferentes analogías que podemos
usar para describir nuestro rol, pero la mejor es aquella del siervo-pastor que supervisaba el rebaño de su dueño. Ya que
esta analogía lleva en si misma el concepto de oveja (discípulo) que pertenece a alguien más, hace claro que el pastor
tiene ciertas responsabilidades también, y por lo tanto necesita entregarse a sí mismo concientemente a la protección y
desarrollo de su cargo. La Escritura hace esto muy claro, mientras el Espíritu Santo es la influencia primaria del discípu-
lo, Él lo hace en compañía del discipulador:
• Hechos 20:28 – Por tanto, mirad por vosotros, y por todo el rebaño en que el Espíritu Santo os ha puesto
por obispos, para apacentar la iglesia del Señor, la cual él ganó por su propia sangre. (A Dios le pertenece
el rebaño, pero nosotros lo supervisamos.)
• 1 Corintios 4:1-2 – Así, pues, téngannos los hombres por servidores de Cristo, y administradores de los
misterios de Dios. Ahora bien, se requiere de los administradores, que cada uno sea hallado fiel. (Noso-
tros somos los mayordomos de grandes misterios, pero somos responsables ante Cristo.)
• Gálatas 4:19 – Hijitos míos, por quienes vuelvo a sufrir dolores de parto, hasta que Cristo sea formado en
vosotros . . . (Nosotros trabajamos, para que Cristo sea formado)
• Colosenses 1:28-29 – a quién anunciamos, amonestando a todo hombre en toda sabiduría, a fin de presen-
tar perfecto en Cristo Jesús a todo hombre; para lo cual también trabajo luchando según la potencia de él,
la cual actúa poderosamente en mí. (Nosotros anunciamos, amonestamos, trabajamos y luchamos, pero lo
hacemos energizados por Su poder que opera dentro de nosotros.)
• 2 Timoteo 2:1-2 – Tú, pues, hijo mío, esfuerzate en la gracia que es en Cristo Jesús. Lo que has oído de
mí ante muchos testigos, esto encarga a hombres fieles que sean idónios para enseñar también a otros.
(Nuestro deseo es que nuestros discípulos puedan seguir nuestro ejemplo, pero eso lo hacen ellos en las
fuerzas de la gracia del Señor.)
Este mismo sentimiento es evidente también en nuestra clásico pasaje de la Gran Comisión, Mateo 28:18-20:
“Toda potestad me ha sido dada, por tanto, hagan discípulos . . . y yo estaré con ustedes” (la paráfrasis es mía).
El discípulo también necesita una perspectiva apropiada de la cooperación entre su discipulador y el Espíritu
Santo. Es necesario un compromiso de ambas partes, el cual se encuentra frecuentemente en aquellos que Pablo
discipuló:
• 2 Corintios 8:5 – Y no como lo esperábamos, sino que a sí mismos se dieron primeramente al Señor, y
luego a nosotros por la voluntad de Dios.
34 DISCIPULADO PERSONAL
• Gálatas 4:14 – . . . antes bien me recibisteis como a un ángel de Dios, como a Cristo Jesús.
• 1 Tesalonisenses 1:6 – Y vosotros vinisteis a ser imitadores de nosotros y del Señor, recibiendo la palabra
en medio de gran tribulación, con gozo del Espíritu Santo.
37
38 DISCIPULADO PERSONAL
re que mamita te dé un besito para que se mejore?” ¡Y funciona de maravilla! Intente esa misma terapia cuando tenga
16 y probablemente se sentirá mortalmente ofendido. Así mismo, nosotros los discipuladores debemos ajustar nuestras
tácticas, nuestras expectativas y los temas de nuestra relación con nuestro discípulo cuando van creciendo.
NIVELES DE CRECIMIENTO
Mencioné anteriormente que el apóstol Juan categorizó a los cristianos en diferentes niveles de crecimiento.
Cuando se leen la mayoría de las traducciones en español de 1 Juan 2:12-14, usted verá sólo tres categorías, pero en el
griego hace una clara distinción entre los hijitos del versículo 12 (teknia o infantes) y los hijitos del versículo 13 (paidia
o “niños respecto a la edad”), dándonos cuatro niveles. Veamos lo que podemos aprender de ellos.
Bebé
Os escribo a vosotros, hijitos (infantes), porque vuestros pecados os han sido perdonados, por su
nombre.” 1 Juan 2:12
El Nuevo Testamento traduce tres palabras griegas para “bebé”: teknía1, bréphos2 y népio3. Al estudiar los lu-
gares donde estas tres palabras aparecen en la Escritura, uno puede aprender mucho acerca de las características de los
bebés – tanto físicas como espirituales – y como podemos relacionarnos con ellos. A continuación tenemos un listado
de ellas. Las cuales le darán una buena idea de cómo relacionarse con un nuevo cristiano.
• Son impotentes y necesitan mucho cuidado y protección (Lucas 2:12,16; Hechos 7:19)
• Añoran alimento (1 Pedro 2:2)
• No pueden comer carne ni comida sólida (1 Corintios 3:1-3; Hebreos 5:11-14)
• El habla, pensamientos y procesos mentales son inadecuados y deben ser transformados (1 Corintios
13:11)
• Son presa fácil del engaño (Efesios 4:14)
• Deben recibir el sustento adecuado, tanto físico (Hechos 7:20) como intelectual (Hechos 7:21)4
• Deben ser gentilmente valorados5 por sus padres (1 Tesalonisenses 2:7)
• Aun a su corta edad, deben recibir información (¡Timoteo lo hizo! 2 Timoteo 3:15)
• Sus padres están ansiosos de que Cristo se forme en ellos (Gálatas 4:19)
• Deben ser encomendados por sus padres a Jesucristo (Lucas 18:15)
• No tienen autoridad, pero están bajo guardianes y administradores hasta que maduren (Gálatas 4:1-2)
• Dios les revela cosas especiales en lugar de los (supuestamente) sabios y entendidos (Mateo 11:25)
• Son inocentes respecto a lo malo (1 Corintios 14:20)
• Su pecado les ha sido perdonado (1 Juan 2:12)
• Dios en ellos es más grande que el que está en este mundo (1 Juan 4:4)
Niño
“Os escribo a vosotros, hijitos, porque habéis conocido al Padre.” (1 Juan 2:14c)
El Nuevo Testamento traduce cuatro palabras griegas para la palabra “niño” pero sólo tres de ellas son relevan-
tes a este estudio: téknon6, páis7 y paidíon8.
Tres cosas acerca de la palabra “páis” que le interesarán:
Primero, además de “Niño” esta palabra puede también significar “joven sirviente” o “esclavo,”9 indentificando
el papel del niño espiritual con un sirviente en lugar de alguien lanzado a una posición de liderazgo y autoridad. Des-
pués de que Samuel ungió al joven David, Dios le asignó al niño una posición de sirviente. David no se convirtió inme-
diatamente en el centro de atención evangélica como sucede a menudo en estos días con los grandes atletas o estrellas
que se hacen cristianos.
Segundo, paidéuo, que proviene de la misma raíz que pais, es la palabra griega para “castigo” o “disciplina.”
Como lo saben los que tienen hijos, el castigo es una buena parte de cómo nos relacionamos con nuestros hijos. ¡Lo ne-
cesitan! Salomón lo recomienda altamente varias veces en el libro de Proverbios. En ese mismo espíritu, no debemos
EL MODELO 39
sentirnos mal al tener que “castigar” a los que estamos discipulando y están en el nivel de niño. Es difícil hacerlo, yo sé,
pero la Biblia caracteriza un niño espiritual como indefenso, inexperto, y necio10, y Salomón dice que “la vara de la co-
rrección la alejará (la necedad) de él” (Proverbios 22:15). Si amamos a nuestros hijos espirituales, les dejaremos saber
no de manera incierta que están viajando por el camino erróneo. Ellos lo pueden manejar. Como dijo Salomón, “no van
a morir” (Proverbios 23:13).
Tercero, paidéia (otra vez la misma raíz) es la palabra griega para “entrenamiento” o “instrucción”11 Así como
nuestros hijos en el siglo XX, los niños en los tiempos de la Biblia pasaban mucho de su tiempo siendo entrenados. Esto
debe caracterizar el mayor empeño de un niño espiritual. Durante esta fase, necesita estar “en la escuela,” aprendiendo
los fundamentos del caminar con el Señor. Pueden que estén acumulando mucha información en la cabeza que no pare-
ce que se filtre al corazón ni a las manos, pero con tiempo lo hará. Vimos ese mismo fenómeno en nosotros cuando cre-
cíamos ¿no es cierto?
Cuando estaba en quinto grado, no tenía respeto por las reglas para tener un buen estilo literario o gramatical.
No me importaba que tan importante era que no se dividieran los diptongos, que hay que evitar como una plaga los
clichés, que exagerar es dos millones de veces peor que sólo citar los hechos, que una observación entre paréntesis (sin
importar que tan relevante) no es necesaria, y que uno nunca, nunca, nunca generaliza12. ¡Pero hoy en día todas esas re-
glas son mi pan diaario! Las manejo completamente, pueden ver, y han calado en mi corazón y mi mano. Pero tomó su
tiempo que llegaran ahí. La infancia es predominantemente un tiempo de aprendizaje. El amor y el vivir vienen luego
mientras la persona madura.
Otras cosas que la Biblia dice que caracteriza (o debe caracterizar) al niño físico y la relación entre él y sus pa-
dres. Observe el paralelo con el niño espiritual.
• Es relativamente indefenso y necesita de la protección (Mateo 2:13-16) y provisión (2 Corintios 12:14)
de sus padres.
• Deben crecer mentalmente, físicamente, socialmente y espiritualmente (Lucas 2:52)
• Jesús usó a un niño para demostrar el tipo de humildad espiritual necesaria para heredar al Reino de Dios
(Mateo 18:1-4)
• Los niños están ansiosos por llegar a Jesús, el cual tenía mucho cariño por ellos (Marcos 10:13-16)
• El niño debe obedecer a sus padres (Efesios 6:1)
• Debe respetar a sus padres y la disciplina que le imparten (Hebreos 12:9-10)
• La actitud de servicio es una de las mejores cualidades que debe poseer13 (Filipenses 2:22)
• Puede reconocer la majestad del Señor – abiertamente y sin vergüenza glorificarlo (Mateo 21:15, 1 Juan
2:13)
• El niño es capaz de aprender y se le debe permitir sentarse con el adulto en sesiones de enseñanza pesa-
das (Hechos 20:7-12)
• A veces es capaz de hacer contribuciones estratégicas (Juan 6:9)
• Es visto como deficiente en su entendimiento espiritual (1 Corintios 14:20)
• Dios no tomó livianamente a aquellos que hacen que un niño tropiece (Mateo 18:6)
Adolecente
“Os escribo a vosotros, jóvenes, porque sois fuertes, y la palabra de Dios permanece en vosotros,
y habéis vencido al maligno.” (1 Juan 2:14b)
El Nuevo Testamento utiliza varias palabras para referirse a un adolescente, todas tienen la misma raíz neos que
significa “nuevo, que previamente no existía, apareciendo ahora, en breve: nuevo, joven.”14 Neos es “... comúnmente
utilizado prioritariamente en comparaciones para disignar las edades de los jóvenes desde 12 a 30 años, pero también, de
vez en cuando, como un sustantivo para denotar una persona con poca experiencia, un novato.”15
Una de las principales características de un adolescente es que está comenzando a tomar responsabilidad. Los
adolescentes comienzan a tomar su lugar como los hacedores en una sociedad – unos buenos resultados y otros no tan
buenos. Neos, en una de sus formas, es utilizado para describir a las siguientes personas:
• El joven rico que vino a Jesús preguntando el como alcanzar la vida eterna (Mateo 19:16-22)
• El joven Saulo, ante quien los asesinos de Esteban colocaron sus túnicas (Hechos 7:58)
40 DISCIPULADO PERSONAL
• El joven escritor del Evangelio de Marcos (la mayoría de los estudiosos asumen que fue Marcos), quien
huyó desnudo durante el disturbio cuando Jesús fue arrestado (Marcos 14:51-52)
• Los jóvenes que se llevaron a Ananías y Safira después de que le mintieron al Espíritu Santo (Hechos
5:6-10)
• El hijo pródigo quien exigió su parte de la herencia y después la despilfarró en una vida libertina (Lucas
15:11-24)
• El sobrino de Pablo que escuchó la conspiración contra la vida de Pablo y persuadió al centurión a to-
mar mayores medidas de seguridad para Pablo (Hechos 23:16-20)
• El pobre dormilón de “Eutico” quien se cayó de la ventana cuando escuchaba la larga exposición del
apóstol Pablo (Hechos 20:9-12)
• Timoteo, a quien Pablo le pedía que diera buen ejemplo al rebaño a pesar de su juventud (1 Timoteo
4:12)
• La mujeres jóvenes a quienes las mujeres adultas deben enseñarles como amar a sus esposos e hijos y a
ser buenas esposas (Tito 2:4)
En cada caso, la Escritura habla de jóvenes que comienzan a tomar papeles de adultos. En el mismo sentido,
necesitamos ayudar a nuestros discípulos en el nivel de adolescentes para que comiencen a tomar responsabilidad y auto-
ridad. No mucho todavía, pero si lo suficiente como para probar sus alas. Si no comenzamos a delegarles algo de res-
ponsabilidad, no sólo dejarán de desarrollarse sino que probablemente entrarán en frustraciones y enojos – igual que
nuestros adolescentes de carne y hueso que hacen berrinches cuando son “tratados como niños.”
A continuación tenemos otras cualidades que deberíamos ver en los adolescentes y también alguna guianza para
ellos:
• Continuar mostrando un corazón servicial, pero no por encima sin hacer el “trabajo sucio” (Lucas 22:26;
Hechos 5:6-10)
• Se les anima a que mantengan la humildad y el respeto apropiado por sus mayores (1 Pedro 5:5-6)
• Se les anima a que mantengan sus deseos y pasiones bajo control (2 Timoteo 2:22; Tito 2:4-6)
• Están ganando fuerza y experimentado la victoria espiritual (1 Juan 2:14)
• Están tomando más decisiones por ellos mismos (Juan 21:18)
Adultos
“Os escribo a vosotros, padres, porque habéis conocido al que es desde el principio.” (1Juan
2:14a)
Existen varias pistas en la Biblia en cuanto a lo que debe caracterizar a un adulto.16 La adultez es nuestra meta
final – no sólo para nuestros discípulos, sino para nosotros mismos. Pero igual que en la vida real adulta, cuando uno
llega a este nivel no significa que deja de madurar. Sólo significa que está calificado para tomar ciertas responsabilida-
des y privilegios, muchos de los cuales aumentarán o acelerarán el crecimiento continuo. Puede imaginarse a una perso-
na que dice al llegar a la edad de 21 años, “¡Hasta aquí! ¡Lo logré! Ya llegué al pináculo de la madurez, así que déjen-
me sentarme aquí en esta mecedora y dejen que el mundo venga a mí y se sumerja en las profundidades de mi vasta sa-
biduría y conocimiento.” Probablemente le informaríamos al joven mequetrefe que, a pesar de que es un adulto, todavía
tiene mucho que aprender y crecer.
Existen tres razones para estar bien informado de las características de un cristiano adulto. Primero, si sabemos
como se ve un adulto, podemos reconocer cuando nuestros discípulos han alcanzado ese nivel, podemos relacionarnos
con ellos apropiadamente. Segundo, podemos ver lo que le hace falta a nuestro discípulo en camino a la madurez y ser
más eficientes en ayudarlo a crecer. Tercero, si fueramos ignorantes de cómo debe comportarse un adulto, sería virtual-
mente imposible para nosotros comportarnos como uno, por ende astillamos nuestras esperanzas de modelar
eficientemente la vida cristiana para beneficio de nuestros discípulos. Veamos unas características más del “adulto”:
Crece: Un adulto espiritual hace de su relación con Dios su prioridad, la cual resulta en su propio crecimiento
continuo. Como Juan describió a los padres como los que conocen “al que es desde el principio,” Pablo también ve el
crecimiento como la meta final: “Hasta que todos lleguemos a la unidad de la fe y del conocimiento del Hijo de Dios, a
un varón perfecto, a la medida de la estatura de la plenitud de Cristo; ... de quien todo el cuerpo, bien concertado y unido
EL MODELO 41
entre sí por todas las coyunturas que se ayudan mutuamente, según la actividad propia de cada miembro, recibe su creci-
miento para ir edificándose en amor.” (Efesios 4:13,16).
Nutre y aprecia: Un adulto espiritual se preocupa por los bebés espirituales. Un autor observa que pater (pa-
dre) viene de la “raíz que significa nutridor, protector, defensor.”17 ¡Las mismas cosas que necesitan los bebés espiritua-
les! ¡Qué coincidencia! Lea Isaías 49:15a; 66:12-13; 1 Tesalonisenses 2:7-8.
Protector y proveedor: La Biblia muestra a menudo a los adultos involucrados en el negocio de proteger y pro-
veer a sus hijos. Los adultos deben desempeñar ese papel, por supuesto, porque los jóvenes, en diferente grado, son in-
capaces de proteger y proveer para si mismos. Fíjese por un momento en el pájaro pechocolorado, o en una vaca, o en
un león, o hasta en una hormiga. Si estos seres asumen su papel como protectores y proveedores de manera diligente,
¿cuánto más los adultos espirituales deben deseosos desempeñar estos papeles por los cristianos en crecimiento? No ha-
blo de hacerlo de forma indefinida, porque toda cosa en crecimiento eventualmente necesita crecer y proveer para sí
mismo. Pero cuando son jóvenes, nos necesitan. Vea Mateo 2:13-16; 2 Corintios 12:14.
Intercesor: Los padres en la Biblia llegaron muy lejos en cuanto a lo que tiene que ver con la intercesión por
sus hijos (2 Reyes 4:18-37; Marcos 5:21-23; 9:24; Juan 4:49). Como adultos espirituales, podemos interceder por nues-
tros “hijos” de dos maneras: en oración y en lo natural. Ya se ha dicho y hemos hablado de que la oración por nuestros
discípulos es de alta prioridad, pero en ciertas situaciones también podemos interceder físicamente por ellos. Esto es
parte del involucramiento que debemos tener en todas las áreas de sus vidas. Si su discípulo expresa ansiedad porque
tiene que ir al juzgado a pagar un parte de tránsito, que buena oportunidad para acompañarlo. O si ella ha sido abando-
nada por su marido, tiene un niño en brazos y tiene dificultad para obtener el dinero de la pensión alimenticia, ayúdela a
encontrar la forma.
Maestros: Un adulto espiritual le enseña a un cristiano más joven lo que necesita saber para disfrutar una rela-
ción viable con Dios. Claramente este era uno de los mayores trabajos en el Antiguo Testamento. En esos días, la ense-
ñanza de un niño era responsabilidad de los padres, no del maestro de escuela dominical, y esto sostiene una verdad para
nosotros los padres espirituales de hoy. El escritor de Hebreos explota contra los cristianos en el capítulo 5:12 con la
siguiente acusación: “Porque debiendo ser ya maestros, después de tanto tiempo, tenéis necesidad de que se os vuelva a
enseñar cuáles son los primeros rudimentos de las palabras de Dios; y habéis llegado a ser tales que tenéis necesidad de
leche, y no de alimento sólido.”
En este pasaje, el opuesto de un bebé es el maestro. Lo opuesto de la entrada es la salida. La entrada de infor-
mación está bien para los bebés; la salida de información es la meta para los adultos. Lea también Deuteronomio 4:9;
6:6-9, 20-25; 11:18-21; 32:45-47; 1 Crónicas 28:9; Proverbios 4:1-5.
Entrenador: Un adulto espiritual va más allá de la mera educación con los cristianos más jóvenes. Toma tanto
interés por su hijo espiritual como un verdadero padre lo haría con sus propios hijos. Pablo dijo: “No escribo esto para
avergonzaros, sino para amonestaros como a hijos míos amados. Porque aunque tengáis diez mil ayos (paidagogos =
instructores) en Cristo, no tendráis muchos padres; pues en Cristo Jesús yo os engendré por medio del evangelio” (1
Corintios 4:14-15). El entrenamiento que un padre dá es mucho más profundo y sale más del corazón que el de un tutor.
Vea también Efesios 6:4; 1 Tesalonisenses 2:10-12; Filemón 10.
Disciplinador: Pero a un adulto, así como nuestro padre y madre terrenal no dudarían en agregar un poco de
fuerza al entrenamiento. La iglesia cristiana en Estados Unidos está llena de “debiluchos” espirituales principalmente
porque es dirigida por muchos “padres” debiluchos espiritualmente – líderes que no están dispuestos a llamar a cuentas a
los cristianos en crecimiento, amonestarlos cuando pecan, es decir lo que es necesario hacer a pesar de la retroalimenta-
ción negativa. Los adultos espirituales disciplinan a sus “hijos” porque los aman, y no porque sea un abuso de poder
demente. Vea Proverbios 3:12; 13:24; 23:13-14; Hebreos 12:4-13.
Simpatizante: Por otro lado, los padres cristianos, físicos o espirituales, no son tiranos en su disciplina. Cono-
cen la diferencia entre la mano firme del amante padre, y la del opresor o atormentador. Así como dijo Dios en 2
Samuel 7:14-16 que haría con Salomón, los padres físicos y espirituales necesitan encontrar el balance entre el amor y la
disciplina. Lean Salmo 103:13-14; Proverbios 12:18; Lucas 15:20; Gálatas 14:19; Efesios 6:4.
Animador: Pareciera que algunos padres, tanto físicos como espirituales,la única razón por la cual abren sus
bocas es para gritarles a sus hijos por los errores cometidos. Los cristianos en crecimiento necesitan mucho ánimo. El
adulto espiritual anima para que lo hagan bien y anima cuando lo hacen bien. Necesitamos ser discipuladores de “Hogar
de Rancho” – tu sabes, “donde rara vez se escucha una palabra de desánimo.” Ver Deutoronomio 3:28; Proverbios
12:18; 1 Corintios 1:3-7; 7:4; Efesios 4:29; 1 Tesalonisenses 2:11-12; 2 Timoteo 2:1; Hebreos 10:25.
Trabajador Responsable: Cuando una persona se convierte en adulto, toma una gran variedad de papeles y res-
ponsabilidades adultas. Aunque los especialistas son importantes en el área de la medicina, “especialistas espirituales”
42 DISCIPULADO PERSONAL
no son tan útiles. Entre más amplio sea nuestro alcance de habilidades y experiencias, y entre más responsables seamos
con ellos, más valorables seremos para nuestra familia espiritual. Ver Génesis 2:24; Isaías 22:20-24; Hebreos 5:12a, 14.
Administrador: Pablo dijo que un anciano espiritual es el “que gobierne bien su casa, que tenga a sus hijos en
sujeción con toda honestidad (pues el que no sabe gobernar su propia casa, ¿cómo cuidará de la iglesia de Dios?)” (1
Timoteo 3:4-5). También debe ser capaz de administrarse a sí mismo (Efesios 5:16). Uno de los primeros factores de
éxito o fracaso en el discipulador será su habilidad de administrar su tiempo. Recientemente hice una encuesta a 160
discipuladores de todo el mundo – pastores, misioneros, personal de organizaciones para-eclesiásticas, educadores y lai-
cos tanto mujeres como hombres, preguntándoles cuál es el impedimento más grande para ser eficientes. Y por mucho,
la administración inadecuada del tiempo fue el #1. ¡Tome nota!
Consejero: En Génesis 45:8, José, revelándose a sus hermanos, dijo, “Dios, que me ha puesto por padre de Fa-
raón...” Con eso lo que quiso decir es que era uno de los que el Faraón buscaba para que le diera consejo – alguien con
sabiduría. Un padre es visto como una persona de conocimiento y autoridad – el hombre con las respuestas. Vea Jueces
17:10; 18:19.
Proveedor: Una de las razones por las que Dios creó a los padres es porque los hijos tienen muchas necesida-
des. Ellos necesitan tener a alguien que los ame lo suficiente como para querer satisfacer sus necesidades. ¿Cuántas
veces ha visto la placa que dice, “Dios no puede estar en todo lado al mismo tiempo; así que inventó a las madres”?
Aunque la teología está errada, el sentido es bien recibido. Dios puso en los padres el fuerte deseo de velar y continua-
mente proveer por las necesidades de sus hijos. Lo mismo se aplica a los adultos espirituales – ver un ministerio en
“proveer por las necesidades de otras personas” como razón primordial de su existencia. Vea Mateo 7:9-11; Marcos
10:45 y 3 Juan 4.
Sirviente: “¡Un momento! Yo pensé que era el niño y el adolescente quienes tenían que trabajar para tener un
corazón de siervo. ¿Cuándo le va a tocar a una persona que le sirvan?
Nunca.
Jesús lo dejó claro que si queremos ser el “mayor” (meízon, traducido como “mayor” en Romanos 9:12), tene-
mos que ser siervos de todos (Mateo 20:25-28). Sólo mire a su alrededor y encontrará la verdad. Cuando estoy con
gente que ha conocido personalmente a nuestro grandes líderes cristianos como Billy Graham, Bill y Vanette Bright,
Dawson Trotman, Lorne Sanny, Jerry White o Ralph Winter, inevitablemente mi acompañante comienza a intercambiar
historias. Es interesante que casi sin error, no hablan de su estructura física, de su apariencia, su elocuencia, su
intelegencia o aun de su santidad. Aunque quizás no hayan pasado más que 60 segundos con alguna de esas personas,
es la humildad y el corazón de sirviente en ese líder lo que causa la impresión más grande. Si existe una cosa que Dios
ama y recompensa, es la humildad (Santiago 4:6,10; 1 Pedro 5:5-6).
El que corta el cordón ombilical: Un buen padre es aquel que ha entrenado a sus hijos para ser independientes.
Un padre egoísta es aquel que pretende mantener a sus hijos atados al delantal. El crecimiento natural involucra a nues-
tros hijos eventualmente dejando el nido. Conociendo esto, lo mejor que podemos hacer es prepararlos para esa separa-
ción, y aun más animarlos hacia eso cuando sea el tiempo justo.
De la misma manera, necesitamos mantenernos al día con la independencia de nuestros discípulos como un ob-
jetivo a largo plazo. Entrenarlo para que coma solo, que cave su propio pozo, que tome sus propias decisiones. Jesús
dijo que sus discípulos serían altamente compenzados si dejaban a su padre y madre por su causa. El padre o la madre
pueden hacer que esta decisión sea fácil o difícil para su hijo. Vea también Génesis 2:24; Mateo 10:29; Lucas 15:12 (el
padre del hijo pródigo sabía que su hijo no estaba listo para la independencia pero también sabía que no debía detenerlo;
por lo tanto voluntariamente lo envió a estudiar a la Escuela de Golpes Duros).
45
46 DISCIPULADO PERSONAL
permanecer en Él cuando dijo que Él era la vid y nosotros los pámpanos. Si nosotros los pámpanos estamos conectados
a la vid, produciremos fruto - y el fruto es de lo que se trata el discipulado ¿no es así?
Donde sea que el fluido es interrumpido entre el árbol y una de las ramas, lo primero que la rama deja de produ-
cir es el fruto. Lo siguiente es cualquier nuevo crecimiento. Luego pierde inmediatamente las hojas existentes, y final-
mente la rama misma se seca y muere. ¿Puede imaginarse el paralelo humano espiritual de cada una de estas etapas de
muerte? Si usted se ha determinado a producir fruto, y permanecer lejos de la leña para quemar, debe tomar cualquier
paso que sea necesario para mantener una constante y consistente relación con Dios. Su relación con Él debe ser su
prioridad número uno (Mateo 6:33). ¡Sin Él, usted no puede hacer NADA!
55
56 DISCIPULADO PERSONAL
En el año 1977, cuando estaba compitiendo en el equipo de carreras de Atletas en Acción, éramos uno de los
pocos equipos no universitarios que tenía fondos suficientes para dar transporte y equipo a los atletas. Por esta razón,
muchos atletas querían unirse a nosotros – tanto cristianos como no cristianos. Pero como nuestro propósito como equi-
po era ser testigos de Cristo a otros a través de nuestro testimonio, era importante mantener un alto nivel de espirituali-
dad entre los atletas. Así que, decidimos que los atletas tenían que terminar un folleto de estudio bíblico como requisito
para ser aceptados oficialmente.
Les cuento, ¡estabamos muy emocionados de que todos esos atletas de calibre nacional e internacional comple-
taran los estudios y se unieran al equipo! Campeones nacionales, ganadores de medallas olímpicas, personas con
records mundiales… estabamos muy orgullosos del impacto que estabamos teniendo en el mundo deportivo,
¡”discipulando” a todos estos atletas de influencia!
Sólo habia un problema: Ellos pasaron por el material, pero para la mayoría el material también pasó por ellos –
como el agua pasa a través de un cernidor. Por un tiempo, permitimos a estos atletas estar en nuestro equipo y represen-
tar a Cristo Jesús en el mundo atlético simplemente por haber completado un material y una entrevista personal. Pero
poco después cambiamos nuestro sistema cuando nos dimos cuenta que muchos que llamábamos embajadores estaban
viviendo en forma no grata a Cristo.
Sólo porque alguien leé un artículo, busca unos versículos bíblicos y responde a un par de preguntas, eso no
necesariamente significa que está adquiriendo madurez espiritual. Como mencionó en capítulo 3, el proceso implica que
el discípulo “lo aprenda” (obtención de infomación), “lo ame” (obtención de convicciones), y “lo viva” (manifieste la
información y la convicción en su estio de vida). Como discipuladores deberíamos usar este proceso y no el de materia-
les completados.
Sería relativamente fácil para mi tomar los temas que la Biblia dice que son importantes para el crecimiento del
cristiano y hacer una linda serie de estudios bíblicos para tratar con el discípulo y dejarlo allí. Pero existen dos razones
por lo cual no lo hago: (1) Ya hay montones de maravillosos estudios bíblicos a dispocisión. (2) Mi deseo es ayudarle a
ser un discipulador no un distribuidor de estudios bíblicos. Existe una gran diferencia entre los dos. Para ser un
discipulador se requiere de discernimiento en cuanto a las necesidades específicas del discípulo en crecimiento para po-
der diseñar un programa que llene esas necesidades. Es necesario tener flexibilidad con las variantes de la vida del discí-
pulo. Es importantísimo estar ahí para contestar las preguntas que no se encuentran en los libros, sanar las heridas que lo
hacen sufrir, retarlo a ir más allá de lo que normalmente iría. El que distribuye estudios bíblicos y no sabe nada de esto,
sus discípulos terminan siendo unas superficiales copias de plástico.
CUESTIONARIO DE AUTO-EVALUACIÓN
DE LOS FUNDAMENTOS CRISTIANOS
Direcciones: Conteste cada pregunta haciendo un círculo en la respuesta más apropiada. No caiga
en la tentación de responder no siendo sincero sólo para ponerse usted mismo bajo una luz más positi-
63
64 DISCIPULADO PERSONAL
va, o sólo para decir lo que usted cree que la gente quiere oír – conteste honestamente. Si pareciera
que ninguna de las opciones presentadas son apropiadas, escoja la que esté más cerca a lo que descri-
be, y ponga un signo de pregunta en el margen a la par de ella.
1. Estoy (no seguro, bastante seguro, completamente seguro) que si muriera hoy iría inmediatamente al cie-
lo.
2. Estoy (no seguro, batante seguro, completamente seguro) que, antes de conocer a Cristo y le invitara a
mi vida, yo era un pecador listo para el infierno.
3. Tengo un conocimiento (mínimo, promedio, completo) de lo que la Biblia dice en cuanto a que soy “una
nueva criatura.”
4. Estoy (no seguro, bastante seguro, completamente seguro) que todos mis pecados han sido perdonados.
5. Estoy (no seguro, bastante seguro, completamente seguro) que mi salvación es permanente, y que nunca
más seré separado de Dios.
6. Tengo un conocimiento (mínimo, promedio, completo) sobre muchos de los cambios importantes que
sucedieron en mi después de pedirle a Cristo que viniera a mi vida.
7. Tengo un entendimiento (mínimo, promedio, completo) de cómo ser lleno del Espíritu Santo.
8. Tengo un conocimiento (mínimo, promedio, completo) de la tensión que existe entre mi nueva naturale-
za y mi vieja naturaleza y del por qué aun lucho con la tentación aun cuando ya soy una “nueva crea-
ción.”
9. Tengo un conocimiento (mínimo, promedio, completo) de las actividades que puedo intentar que me
ayudarán a crecer espiritualmente balanceado, en forma juiciosa.
10. Tengo un entendimiento (mínimo, promedio, completo) del por qué es importante para mi estar
involucrado activamente en la comunión con otros cristianos.
11. Asisto a la iglesia (nunca, rara vez, algunas veces, semanalmente, dos veces por semana).
12. Leo la Biblia (nunca, rara vez, algunas veces, frecuentemente).
13. Yo (no entiendo, tengo una idea, sé muy bien) lo que la gente quiere decir cuando llaman a la Biblia la
“Palabra de Dios.”
14. Yo sé que la oración es hablar con Dios, y no tengo ninguna dificultad real para no hacerlo. (de acuer-
do, en desacuerdo).
15. En promedio, tengo un período concentrado en la oración personal de _______ días a la semana, cada
sesión dura más o menos _______ minutos.
16. En este momento si se me presentara la oportunidad, puedo hacer un trabajo (malo, justo, bueno, perfec-
to) contándole a otra persona en cómo llegar a ser un cristiano.
17. Me siento (petrificado, indeciso, dispuesto, fuertemente motivado) en contarles a otros sobre cómo pue-
den obtener un conocimiento salvífico de Cristo.
18. Estoy (no seguro, bastante seguro, completamente seguro) que la adversidad es una parte normal de la
vida cristiana; cuando experimento afliciones, yo (nunca, rara vez, algunas veces, a menudo) me enojo
con Dios y (nunca, rara vez, algunas veces, a menudo) voy a Él por ayuda.
19. Sé que Satanás es real (si, no), que busca mi caída (si, no), y tengo (ningún, algún, mucho) conocimiento
del como puedo resistirlo.
20. Tengo un conocimiento (mínimo, promedio, completo) de que hacer cuando peco y así poder restaurar
mi relación con Dios.
21. Estoy (terrible, bastante, más o menos bien, muy bien) en el manejo de mi tiempo, las metas y las priori-
dades de mi vida.
22. Tengo (ninguna, vaga, bastante clara, muy clara) idea de lo que quiero alcanzar en mi vida.
23. Tengo un método funcional que me ayuda a establecer y alcanzar las metas personales con éxito y admi-
nistrar mis actividades diarias. (de acuerdo, en desacuerdo, “más o menos”)
24. Me veo a mi mismo teniendo el potencial para ser (mínimamente, un poco, bastante, extremadamente)
significativo en el avance del Reino de Dios.
PERSONALIZANDO EL PROGRAMA 65
25. Puedo decir que a estas alturas estoy (mínimamente, un poco, bastante, extremadamente) motivado para
perseguir activamente mi desarrollo espiritual y mi relación con Dios.
Cuando el discípulo haya terminado con el cuestionario, repase pregunta por pregunta junto con él. Anímelo a
que amplíe las respuestas. Por ejemplo, digamos que contestó la pregunta 2 de la siguiente manera, estoy (positivo) que
antes de conocer a Cristo e invitarlo a mi vida, yo era un pecador, listo para el infierno. Usted debería preguntarle,
¿por qué está tan seguro de eso?
Tal vez conteste, “Porque la Biblia dice en Isaías 53:6, ‘Todos nosotros nos descarriamos como ovejas’ y Ro-
manos 3:23 dice, ‘por cuanto todos pecaron y están destituidos de la gloria de Dios.’”
Estaríamos perdiendo tiempo si creyeramos que él necesita recibir más información sobre esa pregunta. Pero si
su respuesta fuera, “Bueno, como yo tomaba drogas hace cinco años, eso es lo que me hace pecador,” usted sabrá que
tiene una grieta en cuanto al pecado y la naturaleza humana, y necesita aprender más.
En la pregunta 3 pudiera ser que contestara, Tengo un conocimiento (promedio) de lo que la Biblia está hablan-
do cuando dice que yo soy una “nueva criatura.” Usted debería decirle, “Me doy cuenta que hiciste un círculo en pro-
medio. ¿Cuénteme lo que sabe de lo que significa ser una nueva criatura?”
O en la pregunta 11 sobre la asitencia a una iglesia, usted podría hacerle una serie de preguntas como, “¿a dón-
de asiste? ¿Qué tan a menudo va? ¿Le gusta? ¿Cuánto tiempo lleva asistiendo ahí? ¿Cómo es el pastor? ¿La Biblia es
central en ese lugar? ¿Qué lo hizo decidirse en asistir a ese lugar? ¿Qué es lo que más le gusta de esa iglesia?
No estoy hablando de hacerlo pasar un mal rato, pero esas son la clase de preguntas que deberían salir en con-
versaciones normales cuando dos personas comparten sobre sus congregaciones.
Después de su discusión – lo más pronto posible – pase algún tiempo a solas con Dios pidiéndole discernimien-
to mientras evalúa el actual estatus espiritual de su discípulo. Fíjese en cada uno de los Objetivos para el Cuidadoso En-
trenamiento del Recién Nacido dados en el capítulo 7, lea de nuevo las respuestas del cuestionario de auto-evaluación
del discípulo y cualquier nota que usted hizo durante la discusión, y determine cuáles objetivos de entrenamiento están
operando ya en la vida del discípulo. Después decida con cuál de todos deberían comenzar cuando esten juntos.
No puedo enfatizar suficiente cuan importante es que usted se rinda al Espíritu durante este ejercicio, confiando
en que Él guiará su pensamiento. Si nosotros sólo confiamos en nuestros torcidos poderes de discerminiento, estaremos
fuera de condición en nuestra evaluación. Por otro lado, el Espíritu está vitalmente preocupado de que este nuevo bebé
en Cristo tenga un buen seguimiento, así que meterá Sus manos en el proceso tanto como usted se lo permita.
Diario
Haga una línea vertical en la mitad de la hoja rayada. Póngale al lado izquierdo el título: Planificado, y al otro
lado: Hecho. Esto llegará a ser invalorable para usted en el seguimiento que emprenda con su discípulo, cómo ha res-
pondido, y en el cómo él (y usted) hayan progresado. En el lado de Planificado, escriba la fecha y el plan exacto de lo
que desea hacer en la siguiente reunión. Escriba los temas que desea cubrir, las preguntas que quiere hacer, versículos,
ilustraciones, citas que desea compartir, todo lo que le parezca relevante. Después de la reunión, escriba en el lado de
Hecho lo que cubrió realmente, cualquier impresión que tuvo mientras estaban juntos, preguntas que hiciera su discípu-
lo, problemas que tenga, las victorias que haya experimentado, peticiones de oración, etc. Después haga una raya a tra-
vés de la página debajo de los datos escritos ese día.
Lo que se ha planificado y lo que se hizo a menudo no concuerdan. Tal vez usted a preparado una cosa, y su
discípulo puede que salga con una pregunta de peso en un asunto diferente, la cual les toma toda la reunión para mane-
jarla. Eso está bien. En lo posible, manténganse en el plan, así tendrá progreso en alcanzar su meta; pero siempre esté
abierto para permitirle al Espíritu Santo que cambie sus planes. Usted está aquí para llenar las necesidades de su discí-
pulo; él no está ahí para meterlo en su agenda.
¿DÓNDE SE REUNIRÁN?
A mucha gente le gusta tener su discipulado alrededor de una comida en un restaurante, reunirse para almorzar,
o al desayuno o el café. A mi no. Cuando se a separado noventa minutos para reuinirse con una persona, y se come du-
rante ese tiempo, esté conciente que desperdiciará sus buenos treinta o cuarenta y cinco minutos en la comida. Por otro
lado, no se puede realizar verdaderamente un estudio de la Palabra en la mesa de un restaurante. Es difícil la concentra-
ción, es realmente imposible tener un rato de oración significativa cuando su Biblia se pringa de café, además si usted o
su discípulo quisiera discutir algo personal, habrá algo de vacilación en hacerlo en un lugar público. La mejor opción es
reunirse en una casa, u oficina donde la secretaria ha sido instruida para que tome los recados, un parque, la iglesia –
cualquier lugar quieto y privado, con lo mínimo de distracción.
Si el único tiempo que usted o su discípulo pueden reunirse es a la hora del almuerzo, pónganse de acuerdo
para encontrarse en algún lugar con algo para comer. Coman rápido, ¡y al negocio!
Cuando se está empezando, compartir una comida juntos es una buena y no amenazante manera de iniciar su
relación, pero una vez que se han reunido por un par de semanas, haga los arreglos respectivos para reunirse en otra par-
te a todo costa.
¡HÁGALO!
¡Ahora sí! Usted tiene toda la materia prima, tiene la foto completa, tiene al Espíritu Santo como el arquitecto
y el contratista general. ¡Es hora de edificar al discípulo! Para su propia educación, sugiero que lea los siguientes doce
capítulos aunque no esté discipulando a nadie en este momento. De esta manera, estará preparado con anticipación,
además familiarícese con cada paso del proceso, usted se sentirá más cómodo cuando comience a discipular a alguien.
¡Qué se divierta!
HACIENDO DISCÍPULOS:
SEGUIMIENTO INICIAL
70 DISCIPULADO PERSONAL
9 OBJETIVO DE ENTRENAMIENTO #1
SEGURIDAD
DE LA SALVACIÓN
OBJETIVO
El discípulo está seguro de que sí le ha pedido honestamente a Cristo que entre a su vida:
a. Cristo realmente lo ha hecho;
b. Ha vuelto a nacer como una creación completamente nueva;
c. Sus pecados – pasados, presentes y futuros – han sido perdonados;
d. Una nueva relación ha sido establecida entre Dios y él;
e. Nunca más será separado de Dios.
DEFINICIONES APLICABLES
Seguridad de la Salvación: Es la convicción de que, a pesar de que se estuvo previamente perdido y separado
de Dios, ahora es redimido por la muerte sacrificial de Cristo en la cruz y es salvo por toda la eternidad. Se puede o no
tener una experiencia dramática en la conversión y puede o no sentirse alguna diferencia, pero sí hay una completa con-
fidencia de que Cristo ha entrado a su vida, lo ha salvado, lo ha re-creado, y nunca lo dejará o lo rechazará.
71
72 DISCIPULADO PERSONAL
Y por cierto, mientras el cristiano nacido de nuevo levanta sus expectantes ojos haciendo la “oración del peca-
dor,” he oído a ganadores de almas respondiendo a este evento increíblemente triunfante con un “Bueno, José, qué gran-
dioso. Ahora sos un cristiano. ¿No estuvo mal, verdad? Pero ahora, terminenos la lectura de este tratado...”
¿Se podría aplicar aquí el término “anticlimático”? Ésto no es una firma de póliza de seguro. ¡Acaba de entrar
a la eternidad! ¡Demuestre el valor que tiene! ¡Muestre un poco de emoción! ¡Regocíjese con esa persona! ¡Dele por
lo menos algo de sentido de magnitud a la decisión que acaba de hacer! Si entiende desde el principio de que lo que
hizo al pedirle a Cristo entrar a su vida es más que unirse a un club social, cuando las dudas y la adversidad vengan (y
ellas vendrán), estará mucho más preparado para resistirlas, y no dirá, “¿Quién necesita pasar por toda esta disputa sólo
por honrar una decisión insignificante?”
Ahora algo en cuanto a esas dudas y adversidades. En este punto, su discípulo ha estado disfrutando la relativa
calma del puerto de Satanás. No ha sido necesario que experimente el duro mar y el naufragio que el mal puede prepa-
rar cuando lo desee. Ésto no quiere decir que los no cristianos no experimenten dificultades; las tienen. Y ellos las en-
frentan sin el beneficio del residente Dios del universo, la cual es una circunstancia sin esperanza. Pero ahora, encima
de lo normal, los por menores y desastres de la vida diaria, el nuevo cristiano se ha ganado a al principe de las tinieblas
como su enemigo jurado.
El nuevo cristiano está en un estado terriblemente vulnerable. El objetivo principal de Satanás en este momento
es el de convencerlo que “orar esa oración” fue algo insignificante. Si Satanás puede hacer eso, ha matado la semilla
antes de que germinara. Habrá infectado exitosamente para adquirir la “enfermedad real.” La próxima vez que este su-
jeto tenga un acercamiento con el Evangelio dirá, “A sí, yo traté una vez y no funcionó. Está bien para usted, pero no es
para mi... “
Puede que usted se pregunte, “¿Será salva esa persona?” Nadie a parte de Dios puede decirlo con seguridad.
Sin embargo existen varios argumentos:
• Pudo haber “hecho la oración,” pero no con sinceridad, en tal caso nunca fue salvo.
• Pudo hacer la oración y creer verdaderamente, pero después rechazó el estilo de vida y ministerio que
Dios tenía guardado para él – en tal caso es salvo, pero acumulará una vida de madera, heno u hojarasca la
cual se quemará ante el tribunal de Cristo (pag. 127) (1 Corintios 3:11-15).
• Puede ser salvo; aunque haya rechazado el estilo de vida y ministerio de Dios, y pase por un período de
gran frustración y adversidad, para luego volver en sí, terminando su vida en victoria y llena de fruto (Ej.
el hijo prodigo: Lucas 15:11-32).
Pero esa no es la pregunta que usted debe hacerse en cuanto al nuevo “bebé en Cristo” que está sentado al fren-
te suyo. ¡Su trabajo es hacer todo lo posible para evitar que suceda cualquiera de las cosas que mencioné anteriormente!
A lo largo de esta sección de seguimiento, como lo mencioné en el capítulo anterior, mi plan es darles más
ideas y materiales que puedan usar. Su tarea será llegar a familiarizarse con cada capítulo y tomar las herramientas que
usted pueda usar con facilidad y destreza. ¡Si no le parece que debe usar el formato que damos, ¡no hay problema! Mi
meta es estimular su pensamiento de tal manera que pueda formular su propia presentación.
¿Cuál es la expectativa de la mayoría de los nuevos cristianos? Tal vez la única influencia que muchos de ellos
han tenido en cuanto a lo espiritual o sobrenatural ha venido de Hollywood, así que ellos buscan “La Fuerza” que los
convertirá en Caballeros Jedi. Ellos esperan que Dios tome la forma de George Burns y camine junto a ellos y se haga
visible. Tal vez ¡terremotos! ¡Señales y milagros en los cielos! ¡El Coro Aleluya en un perfecto sonido Dolby
esterofónico! ¡Ángeles rebotando en las paredes! En vez de eso, hicieron una oración... y... nada. Debo decir que algu-
nas personas experimentan un gran sentido de alivio, o de gozo, o una profunda satisfacción de que lo que hicieron estu-
vo “bien.” Una persona que recibió a Cristo conmigo me dijo, “¡Se siente como si el gran hueco que tenía en mi pecho
se acabara de llenar!” Conozco muchas experiencias de conversiones que han sido bastante dramáticas; sin embargo,
para muchos no existe ninguna experiencia física ni emocional del todo.
Entonces Satanás aparece: “Mi amigo, esto no ‘funciona’ con usted. Y nunca lo hará, porque es una farsa.
¿Dónde está el cambio? ¿Siente alguna diferencia respecto a lo que sentía antes de hacer esa tonta oración?”
Por esa razón, lo primero que se debe hacer es descartar la “experiencia sensacional.” El nuevo cristiano sólo
necesita saber que en el momento de su conversión no tiene que sentir de inmediato ningún cambio dramático. Ésto tal
vez rompa sus ilusiones en cuanto a la mala interpretación de lo espiritual, pero sus pies estarán en tierra firme. Asegú-
rele que los cambios están sucediendo, pero no son del tipo que necesariamente puede sentir.
SEGURIDAD DE LA SALVACIÓN 73
Luego, necesita apoderarse de la verdad de lo que acaba de suceder. Si usted logra revisar junto con él los
cinco conceptos mencionados en el objetivo, tendrá suficiente para resistir los furiosos dardos de Satanás.
El Objetivo de la Seguridad de la Salvación es tan importante que debería hacerlo su meta tratándolo tan pronto
como pueda después de la conversión del nuevo cristiano. No lo postergue para la próxima reunión – ¡puede que no
exista una! Si simplemente no tiene tiempo, asegúrese de hacer planes para estar juntos lo más rápido que se pueda, in-
clusive ese mismo día. Si usted lo conoció como cuando “dos barcos se topan en la noche” (en un avión, vacacionando,
o durante una erupción volcánica), esté completamente seguro que tiene con usted el nombre y la dirección y siéntese
esa misma noche y escríbale una carta larga sobre el asunto de la seguridad de salvación.
Déjeme enfatizar algo que apenas mencioné antes. Una persona no se salva por “hacer una oración.” La “ora-
ción del pecador” no es una clase de encantamiento mágico que, cuando se pronuncia, automáticamente lo introduce en
el Reino de Dios. Es una expresión correcta de la actitud del corazón. Puede que usted acaba de darle a una persona una
presentación del Evangelio fenomenal, y que ella haya pronunciado algunas palabras en cuanto a que Cristo entre a su
vida, pero si las palabras no vinieron del corazón, eso es sólo lo que son: palabras. Efesios 2:8-9 dice que nosotros so-
mos salvos por gracia a través de la fe. Romanos 10:10 nos cuenta que es con el corazón que se cree y se es justificado.
Si en algún momento usted quisiera hacer un pequeño estudio interesante, compare Juan 8:31 con 8:44. Jesús describió
a “los judíos que habían creído en él” (versículo 31) como propiedad de “su padre el diablo” (versículo 44). Y Santiago
2:19 dice, “Tu crees que Dios es uno, bien haces. También los demonios creen, y tiemblan.” Una cosa es “creer” en
Jesús, pero otra completamente diferente es tener “fe” en Jesús. Creer es pura aceptación intelectual. Fe, involucra vo-
luntad y compromiso. La fe salva; creer no.
Ahora, la persona que “ora,” puede o no volverse cristiana. En este caso, ¿cómo puede darse cuenta que es lo
verdadero? No hay manera. Solamente Dios conoce que es lo verdadero en el corazón de las personas. Entonces
¿cómo debo continuar? ¡Tómele la palabra al nuevo cristiano! Asuma que él lo hizo de corazón, y desde ese momento
relaciónese con él como un nuevo cristiano que no engaña. Si tan sólo murmulló algunas palabras que no salían real-
mente de su corazón, es porque no estaba realmente listo para someter su vida a Cristo todavía – había algo todavía en su
camino. Pero hay una buena oportunidad que, mientras usted lo trata como un cristiano y revisen los materiales de se-
guimiento, esa barrera sea removida y en algún momento durante el proceso pueda tomar un paso genuíno de fe.
INTRODUZCA EL TEMA
Inmediatamente después de terminar la oración (o tan pronto como escuche que le ha pedido a Cristo entrar en
su vida), debería de decir algo como, “José, deseo ser el primero en darte la bienvenida a la ¡Por Siempre Familia de
Dios! Lo que acabas de hacer, si en realidad lo sientes, ¡será la decisión más significativa y de mayor alcance de tu vida!
¡Estás como a dos segundos del camino de la aventura que va ha durar millones de años! Puede que en este momento no
sientas nada diferente, pero me gustaría tomar unos pocos minutos para darte un pequeño indicio de las cosas increíbles
que dice la Biblia están sucediendo en tu vida.”
O, después de expresar la emoción por la decesión que hizo, podría preguntarle, “¿Qué pasa por tu mente aho-
ra?” o, ¿qué siente en este momento? Si respondiera, “¡Acabo de ver ángeles subiendo y bajando!” o algo parecido,
¡regocíjese con él o ella! Pero necesitará saber lo más pronto posible que no puede basar su fe en emociones o senti-
mientos, sino en los hechos que se encuentran en la Biblia.
Explique que la máquina “Hechos,” representa lo que sabemos es la verdad que se basa en la Palabra de Dios.
El carro que transporta el carbón “Fe,” representa nuestras creencias, nuestra confianza en ciertas verdades, las cuales
nos llevan ha opinar y ha tomar acción. Cuando decimos que tenemos fe en alguna cosa, estamos diciendo que creemos
que eso es absolutamente verdad, y que estamos dispuestos a actuar basándonos en esa creencia. Si yo digo que tengo fe
en que una silla en particular me aguanta, no vacilaría en sentarme en ella.
El cabús, “Sentimientos,” representa nuestras suposiciones, sensibilidades e impresiones emocionales. El tren
podrá rodar con o sin el cabús, pero no irá a ninguna parte sin la máquina. También, el tren se mueve solamente si se le
hecha el carbón que está en el carro del carbón. De la misma manera, nuestra vida cristiana se moverá sólo si colocamos
nuestra fe en los hechos de la Palabra de Dios.
Ahora, como el ingeniero, usted puede saltar al cabús y comenzar a gritar, “¡Ahora sí! ¡Hagamos que este tren
se mueva! ¡Comiencen a palear ese carbón aquí! ¡Ahora prendan fuego a este cabús y estaremos rodando! ¡Vamos,
gente, a PALEAR!” Así como el cabús no tiene la habilidad de impulsar al tren, de la misma manera sus sentimientos
no tienen la capacidad para facultar o dirigir su vida como cristiano. No importa que tanta fe ponga en sus sentimientos,
ellos no lo llevaran a usted a ninguna parte. Los hechos sí lo harán. Jesús dijo en Juan 8:32, “y conoceréis la verdad, y
la verdad os hará libres.” David dijo en el Salmo 119:105 “Lámpara es a mis pies tu palabra, y lumbrera a mi camino.”
no son mis presentimientos, ni mi intuición, ni mis sentimientos.
Usted (y él) puede que este preocupado por la parte del “futuro” del Objetivo: Sus pecados, pasados, presentes
y futuros, han sido perdonados. Este asunto es solucionado por simple lógica: No es lógico que Dios perdone sólo los
pecados que hayamos cometido hasta el momento de la conversión, y luego impute todos los consecuentes pecados a
nuestra cuenta. Ninguno de nosotros lo lograría, si ese fuera el caso. Su perdón no tiene tiempo (Hebreos 10:12). Él ve
todo el panorama de nuestros pecados con una sóla mirada, y coloca todas nuestras iniquidades en Cristo (Isaías 53:6; 1
Pedro3:18). Si Él no hubiera muerto por todos nuestro pecados – pasados, presentes y futuros – nunca nos habría “traí-
do a Dios.” (Es probable que no se tenga que pasar por todo esto con el nuevo convertido. Lo comparto sólo por su be-
neficio y por si acaso le pregunta.)
OTROS RECURSOS
“Cómo estar seguro de que se es cristiano,” Concepto Transferible #1 escrito por Bill Bright, distribuido por
Here´s Life Publishers. Es un excelente tratado para entregar al nuevo creyente porque toca el tema de que convertirse
en un cristiano involucra tres compromisos entrelazados como son: el intelectual, el emocional y el volitivo. Muestra
varias razones del por qué la gente titubea para hacer estos compromisos, y dá el por qué sí debemos hacerlos. Termina
con algunos pensamientos claros de cómo una persona puede estar segura que es salva.
Más que un Carpintero escrito por Josh McDowell (Tyndale House Publishers) es excelente para alguien que
todavía no está muy seguro de la historicidad del cristianismo, o de la validez de la aseveración de Jesús al decir que era
Dios. Por cierto, si la persona a la cual le está dando seguimiento es de una cultura que ha tenido poco contacto con el
cristianismo o con Jesucristo, este sería el libro ideal para ponerlo al tanto. En primer lugar el libro cubre al “Embustero,
Lunático o el Señor Trilemma” expresado primeramente por C.S. Lewis en Mere Christianity (Cristianismo y nada
más).
“La Singularidad de Jesús,” el cuál es el folleto introductorio de la serie de Estudios Bíblicos “Los Diez Grados
Básicos del Desarrollo Cristiano” de Crusada Estudiantil para Cristo. Es un estudio bíblico evangelístico pero tambien
contiene una buena cantidad de información que ayudará a cualquiera que desee tener un conocimiento más firme de lo
que hizo cuando invitó a Cristo a su vida. Es un tratado de diecinueve páginas sobre el personaje particular que fue Je-
sús en la historia, de sus aseveraciones y su trabajo redentor. A esa sección la sigue seis estudios bíblicos cortos (del
tipo de llenar espacios en blanco) de dieciseis páginas.
“La Aventura Cristiana,” Grado 1 de la serie de “Los Diez Grados Básicos,” puede ser otro gran folleto para
enviar a casa con el nuevo cristiano. La lección 1 “La Certeza Cristiana,” es nuestro caminito en cuanto a la seguridad
de la salvación. La lección 2, se titula “La Persona de Jesucristo,” en el cual el nuevo convertido tendrá un conocimien-
to más amplio de quién es Jesucristo. Los “grados” restantes los dejaremos para más adelante.
“La Nueva Vida en Cristo,” el cuál es el libro #1 de la Serie El Diseño del Discipulado diseñado por los Nave-
gantes, le dará a su nuevo discípulo un buen y amplio conocimiento de algunos de los conceptos más importantes en
cuanto a Dios, la salvación y la seguridad de salvación. Los cuatro estudios bíblicos de llenar los espacios en blanco son
perfectos para el nuevo cristiano.
TERMINANDO LA SESIÓN
Lo que sea que haga, asegurese de obtener el nombre y el número de teléfono de su nuevo amigo y déle el
suyo. Es importante que ahora se mantenga en contacto, lo cual no podrá hacer si usted no sabe como encontrarlo. De-
berían acordar encontrarse en algún lado para una cita de seguimiento, pero aun así obtenga su nombre completo y el
número de teléfono de todas maneras. Si se complica, o alguno de ustedes no puede asistir por alguna razón, necesitan
notificarse uno al otro del cambio de planes.
Sea sensible con el poco tiempo que pueda tener el nuevo cristiano. Recuerde, existe una buena probabilidad
que él no puso en su agenda el nacer de nuevo ese día, así que si parece que va a llegar tarde a la cita o a la clase, no tra-
te de monopolizar su tiempo. Pase la mayor cantidad de tiempo que pueda con él, pero no se abuse de su hospitalidad.
SEGURIDAD DE LA SALVACIÓN 79
Hagan una cita como parte del seguimiento a su decisión. Al hacer esa cita, usted le estará diciendo al nuevo
cristiano:
• eres importante para mi; me interesas.
• Lo que acabas de hacer es extremadamente significativo y de largo alcance; pero hay más que necesitas
conocer, y estoy ansioso para enseñarte.
• Lo que acabas de hacer seguramente ha levantado un montón de preguntas en tu mente; me gustaría estar
ahí para ayudarte a encontrar respuestas.
• Has emprendido un increíble viaje; eres de alta prioridad para mi y estoy dispuesto a incluirte en mi vida
para ayudarte a que inicies tu caminata de la manera correcta.
Antes de despedirse, pónganse de acuerdo en un lugar y una hora para reunirse de nuevo. ¿Qué tan pronto?
¡Entre más pronto mejor! Mañana sería bueno; ya que cualquier cosa después de tres días puede ser peligroso.
Aquí le doy una idea de cómo puede usted concretar una cita de forma elegante. Al final del tiempo juntos,
compártale 2 Corintios 5:17: “De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí
todas son hechas nuevas.” Entonces diga algo como esto: “Juan, dice aquí que cuando uno le pide a Cristo que venga a
su vida, Dios te hace una criatura completamente nueva. Dice que los viejo se ha ido y que lo nuevo ha venido. ¿Sabes
de lo que está hablando? [Probablemente dira que no.] Bueno, he invertido un poco de tiempo tratando de entenderlo, y
he descubierto algunas cosas asombrosas. No tenemos mucho tiempo ahora, así que ¿te gustaría que nos volvieramos a
reunir el miércoles después del trabajo por unos 45 minutos? Creo que lo que tengo para compartir realmente puede
ayudarte a crecer en tu nueva relación con Dios.”
Si usted prefiere, en lugar de usar 2 Corintios 5:17, puede usar 1 Corintios 2:6-10a o el versículo 12 como el
pasaje de partida.
EVALUACIÓN
Seguidamente encontrarán algunas preguntas que puede hacerle al nuevo convertido, cuando tenga algo de in-
formación, determine si él o ella tiene certeza de la seguridad de su salvación. No las haga todas sólo dos o tres de las
que usted crea convenientes:
1. Si murieras esta noche y te presentaras ante Dios, y Él te preguntara, “¿Porqué debería dejarte entrar en
Mi cielo?” ¿Qué le contestarías?
2. Si alguien te preguntara, “¿Cómo puedes estar seguro que eres cristiano?” ¿Qué contestarías?
3. ¿Cuáles son algunas cosas que te pueden hacer digno del amor de Dios? (Es una pregunta con trampa.
“Nada específico” es la respuesta correcta.)
4. ¿Realmente crees que sos suficientemente bueno como para que Dios te dé salvación? (Otra pregunta con
trampa. “No” es la respuesta correcta. Nunca seremos suficientemente buenos para merecer la salvación.
Somos salvos solamente basados en la gracia de Dios (Efesios 2:8-9; Tito 3:5.) Bueno, ¿qué tan bueno
deberías ser? (No somos salvos por ser buenos; lo somos basados en la gracia de Dios. Esto debe de estar
interiorizado firmemente en el nuevo cristiano, así que ¡siga enfatizándolo!)
5. Trace una línea con 0% en un extremo y 100% en el otro, como ésta:
0%_____________________________________________________100%
Pídale que coloque una X en la línea donde crea que indica qué tan seguro está de que si muriera esta noche,
iría al cielo.
Si puede captar que todavía no está muy seguro de su salvación, trate de indagar que es lo que obstaculiza dicha
convicción y ayúdele a superar esa barrera específica. A continuación hay unas pocas razones por lo cual la gente no
tiene esta seguridad:
1. No entienden las bases de la salvación: gracia, mérito inmerecido. Jesús pagó nuestra deuda por nuestros
pecados, y Dios nos perdonó. No hay nada que podamos hacer para merecerla o para perderla.
2. Nunca ha recibido a Cristo personalmente (o no está seguro).
3. Está buscando una experiencia emocional.
4. Confía en los sentimiento de día a día.
5. Le falta el entendimiento de que es Dios quien nos sostiene.
10 OBJETIVO DE ENTRENAMIENTO #2
ALCANCE Y SIGNIFICADO
DE LA SALVACIÓN
OBJETIVO
Que el discípulo entienda en detalle el alcance y el significado de lo que ocurrió cuando invitó a Cristo a su
vida, lo cual produce un compromiso profundo y una gran motivación para continuar con Cristo.
81
82 DISCIPULADO PERSONAL
césped vieja, si ponía suficiente fuerza al halar el cordón, la podía encender. Cuando miro para atrás, a ese período de
mi vida, y recuerdo la desesperación que sentía, los pecados que cometí y el jalón que el mundo me daba, puedo ver que
fue ¡sólo la gracia de Dios la que me ayudó a pasar!
Pero su amigo no tiene que pasar por eso, ¿cierto? Al tener – con su ayuda – un panorama claro de lo que suce-
dió, él se dará cuenta de que es parte de un movimiento de Dios increíble y eterno, y que ha sido re-creado y abundante-
mente equipado para ser una parte significativa en ese movimiento.
INTRODUZCA EL TEMA
No se meta en la lección de una sola vez. Pasen tiempo conociéndose. Desmuestre interés personal en él.
Ayúdele a que lo vea como a un amigo, no como un profesor de universidad o un gurú. Aquí expreso algunas ideas en
cuanto a lo que se debería cubrir lo más pronto posible en esta importante reunión. Probablemente no desee tocar todos
estos puntos, pero tal vez algunos que lo hagan sentirse cómodo.
1. ¿Cuál es el trasfondo familiar? ¿Hermanos? ¿Hermanas? ¿Casado? ¿Hijos?
2. ¿De dónde es originalmente y que lo trajo a este lugar?
3. ¿Dónde vive? (No necesariamente se busca la dirección exacta – sino en qué parte de la ciudad. Puede que
sean vecinos).
4. ¿Qué le gusta hacer en el tiempo libre? ¿Pasatiempos? ¿Deportes?
5. ¿En que universidad o colegio estudió (o estudia)? ¿Carrera?
6. ¿Está trabajando? ¿Qué hace? ¿Desde cuándo lo hace?
7. Hasta ahora, ¿cuál ha sido su trasfondo religioso?
No dispare estas preguntas una tras otra como si lo estuviera entrevistando para un trabajo. Éstas son cosas que
pueden surgir en una conversación casual. También trate de compartir sobre su vida, pero sea breve. No es que deba ser
retraído sobre su trasfondo, pero ya que se está tratando de que el nuevo creyente se sienta cómodo, permítale hablar a
él, normalmente a la gente le gusta hablar de sí mismos.
Después deslícese a temas más espirituales y pregúntele algo así, “¿cómo han estado las cosas desde el martes
pasado (tiempo cuando hizo la decisión por Cristo)? ¿Ha notado cambios? ¿Tiene algunas preguntas?
¡No se olvide de escuchar! ¡No esté tan ansioso de esponer su plan de lecciones preparadas ya que le puede
pasar por encima a un frágil espíritu en desarrollo! Puede ser que el nuevo creyente quiera hacer algunas preguntas im-
portantes que lo han estado asechando durante los últimos días (o años). En este punto de su crecimiento es como un
bebé recién nacido, si no se atienden sus necesidades inmediatas primero, no entenderá nada más. ¿Alguna vez ha trata-
do de tomarle una foto contento y sonriente a un infante que necesita que se le cambie el pañal? Resultaría mejor inten-
tar darle un abrazo al agua. Si no le cambia el pañal nunca tendrá su foto. El mismo principio aplica a los nuevos cris-
tianos. Primero atienda sus necesidades inmediatas, luego puede pasar a temas más importantes.
Podría comenzar diciendo algo como, “Bueno, Carlos, la última vez que estuvimos juntos tomaste el paso más
importante de tu vida. ¿Se acuerda del versículo que compartí contigo en cuanto a ser “una nueva criatura” (2 Corintios
5:17)? Ahora quisiera mostrarte lo que la Biblia dice en cuanto a ese “Nuevo usted.” Estos pasajes hablan de lo que su-
cedió cuando le pediste a Cristo que viniera a tu vida.”
Ahora, quisiera compartir con usted 17 puntos que deben ser cubiertos en este Objetivo de Entrenamiento. Se
que son muchos, pero recuerde no tiene que dar una disertación doctoral para cada uno. Solamente toque los puntos im-
portantes que ayuden a obtener el panorama completo en cuanto a las cosas increíbles que le han sucedido a nuestro nue-
vo hermano.
11. Se convirtió en un hijo adoptado por Dios, con todos los deberes y derechos que conlleva
ésto – Romanos 8:15-17
“Mucha gente habla de ‘la paternidad de Dios y de la hermandad del ser humano’ aplicado a todos. Es un lindo
pensamiento y realmente espero que un día todos en el mundo funcionen como una gran familia feliz, pero la Biblia dice
que Dios no era nuestro Padre sinó hasta que invitamos a Cristo a nuestras vidas. Él es nuestro creador, pero no pode-
mos distrutar de su paternidad hasta no nacer de nuevo.”
“No fue que Dios simplemente dijo, ‘Bueno, ahora puedes estar en mi equipo,’ ó, ‘Ahora puedes vivir en mi
Reino.’ Sinó que dijo, ‘Yo quiero hacerte mi hijo. Quiero darte un lugar en Mi casa. Quiero hacerte heredero de Mi
Reino. Quiero poner todos Mis recursos a tu disposición. Quiero nutrirte, cuidarte, estar ahí para ti. Quiero que me lla-
mes Papito (que es lo que significa la palabra Abba del pasaje anterior).”
“Nos tomaría mucho tiempo repasar todas las cosas que hemos adquirido como co-herederos con Cristo.
¡Ganarse el premio mayor de la ‘Rueda de la Fortuna’ no le llegaría ni a los tobillos!”
“En la última oración de este pasaje, la de padecer juntamente con Él, ¿qué cree que signifique eso? [Dele
tiempo para responder.] Me parece que lo que está diciendo es que caminar con Cristo no va a ser como una tarde en
ALCANCE Y SIGNIFICADO DE LA SALVACIÓN 87
Disneylandia. Mientras Jesús estuvo en la tierra, pasó por tiempos muy difíciles. ¡Aun el Hijo de Dios experimentó la
adversidad! Este versículo nos dice que ser hijo de Dios, hermano de Cristo, no garantiza que no vamos a pasar por
tiempos de dificultad mientras estemos aquí en la tierra.”
“Pero mire lo que dice: si padecemos juntamente con Él, también compartiremos su gloria. Podemos tener
tiempos muy duros como cristianos, pero al final ¡todo valdrá la pena! Alguna gente le gusta criticar al cristianismo di-
ciendo, ‘Yo no estoy interesado en cualquier pastel en el cielo hecho por la religión.’ Los cristianos se avengüenzan por
eso. Pero la verdad es que, para el hijo de Dios, ¡sí hay un pastel en el cielo! Por supuesto que Dios nos ayuda mientras
estemos aquí en la tierra – tenemos ventajas que el no cristiano ni siquiera sueña. Sin embargo, no todo será como un
plato de uvas - ¡puede ser que le toque algunas de las semillas! Pero el versículo nos dice que eventualmente tomaremo
parte de la gloria de Jesús, y nuestra ‘luz, leve tribulación momentánea’ (como la llama el apóstol Pablo a nuestro tiempo
en la tierra en 2 Corintios 4:17) ¡nos parecerá nada en comparación!”
12. Una pared de protección sobrenatural fue puesta alrededor – Salmo 34:7
“Como niño, probablemente escuchó hablar sobre el ‘Ángel Guardián.’ Bueno, ¡aquí lo tenemos! Cualquier
cosa que llegue a usted primero tiene que pasar por Él, y la Biblia describe que eso es algo muy poderoso.”
“Otra vez, no está diciendo que ahora que pertenece a Dios nada negativo va a suceder. Lo único que dice es
que tiene una fuente de protección sobrenatural que no tenía antes, y que cualquier influencia externa que se presente
debe recibir primero la aprobación del ‘Ángel del Señor.’ Algunas veces permitirá que la adversidad y el sufrimiento
físico se presenten en su vida porque Él está en todo momento en comunicación directa con el Padre, y Dios sabe que
algunas pruebas y tribulaciones a la larga serán buenas para usted. Además Él conoce exactamente cuanto puede usted
manejar. Dios nunca lo dejará pasar por más de lo que pueda resistir (1 Corintios 10:13).”
13. Todos los ángles del cielo lo conocen y están regocijándose – Lucas 15:10
“¡Qué alegría hubo en el cielo el día en que invitó a Cristo a su vida! Varios versículos de la Biblia muestran el
interés de los ángeles en cada detalle de lo que sucede aquí en la tierra (Salmo 91:11; 1 Corintios 11:10; Hebreos 12:1, 1
Pedro 1:12). Mientras observan su vida, ellos aprenderán sobre los efectos de la gracia de Dios, como lo cuida y como
usted responde. Puede estar seguro que nunca estará solo, aunque en algún momento se sienta aislado.”
OTROS RECURSOS
Para un buen estudio del tipo “llene los espacios vacios” en cuanto al alcance y significado de lo que sucede en
la salvación, tome en cuenta las siguientes series de estudios bíblicos. Puede usarlos como material para su propio
aprendizaje o para que se lleve a casa el nuevo cristiano para su estudio individual, por su puesto, debe conocer su cami-
no en la Biblia.
“Los Diez Grados Básicos del Desarrollo Cristiano”3 Es una serie desarrollada por Cruzada Estudiantil y Pro-
fesional para Cristo:
• Introducción: “La Singularidad de Jesus ” [Todas las lecciones aplican].
• Grado 1, Lección 1: “La Certeza Cristiana”
Lección 2: “La Persona de Cristo”
El Diseño del Discipulado4 - Es una serie desarrollada por Navegantes:
• Libro 1, Capítulo 1: “Dios cuida de ti”
Capítulo 2: “La Persona de Jesucristo”
Capítulo 3: “La obra de Cristo”
• Libro 5, Capítulo 1: “¿Quién es Dios?
TERMINANDO LA SESIÓN
Haga una recapitulación de lo que hablaron, insite su apetito, y establezca la siguiente cita (asegúrese de hacer-
lo). Puede ser a la misma hora la siguiente semana, pero sería mejor si se pueden ver en tres o cuatro días. Tal vez po-
dría decir algo como:
“Bueno Juan, ¿qué te pareció lo que vimos hoy? [Esperamos que lo encontrara interesante y estimulante como
para estar motivado para aprender más.] Espero que una de las cosas que quedó clara hoy es que hay mucho más del
cristianismo que sólo sentarse en duras bancas de madera y poner atención a un montón de sí y no. La vida cristiana se
trata de una relación con una persona. Justo antes de que crucificaran a Jesús, Él les dijo a sus discípulos que Él se iba
pero que enviaría al Espíritu Santo en su lugar para ser nuestro ‘Paracleto’ o ayuda. Como vimos hoy, cuando uno se
hace cristiano, el Espíritu Santo entra a nuestra vida. Uno de los conceptos más importantes que necesitas interiorizar es
quién es el Espíritu Santo y cómo uno puede apropiarse completamente del poder que Él ha puesto a nuestra disposi-
ción.”
“Si tiene tiempo el próximo viernes [o la próxima semana], me gustaría que nos volvieramos a reunir para mos-
trarte lo que la Biblia dice al respecto. ¿Qué te parece?”
Él responderá, “¡Por supuesto amigo! ¡Hagámoslo!”
Pero si no lo hiciera, o pareciera que vacila en poner una fecha para la próxima reunión, mejor desista. Dile,
“Juan, no quiero presionarlo con ésto. Piénselo y me avisa si está interesado en aprender más. ¡Sólo quiero que sepa
que estoy a su disposición, y que voy ha estar orando por usted!” Luego, siga las sugerencias dadas en “Terminando la
Sesión” del Objetivo #1 en la parte titulada: ¿Y qué si dice que no?
Terminar con una oración, ¿en un lugar público? ¡Tal vez! Usted tiene que ser el juez de eso. Existen pros y
contras. Puede ser que avergüense al nuevo cristiano hasta que desee meterse debajo de la mesa y luego tenga temor de
reunirse nuevamente con usted creyendo que se pueda repetir la misma humillación. O tal vez, puede que sea un buen
momento para que tenga la primera experiencia de ser identificado abiertamente con Cristo. Puede que en ese momento
se aumente el compromiso con Dios y con usted. Usted tendrá que pesar las opciones y decidir.
Si se encuentran en un lugar privado como su casa, un parque o una mina abandonada, yo recomendaría una
pequeña oración. Nuevamente, la decisión depende de usted. Las primeras veces que se reúnan, es mejor que usted
haga todas las oraciones, “no lo eche al agua.” Escuchándolo a usted, entenderá más fácilmente la sencillez de la ora-
ción.
ALCANCE Y SIGNIFICADO DE LA SALVACIÓN 89
TAREA PARA LA PRÓXIMA VEZ
El siguiente tema que se debe cubrir con el discípulo es la llenura del Espíritu Santo. Sería bueno que se le die-
ra algo para leer sobre el tema para que su apetito sea abierto antes de la próxima reunión. Nunca es demasiado tempra-
no para comenzar a entender este importante ministerio. Esto podría hacer la diferencia entre el mantenerse firme o caer
en los primeros días del caminar con Cristo, por no decir después.
El Dr. Bill Bright, fundador y presidente de Cruzada Estudiantil y Profesional para Cristo, ha dicho en muchas
ocasiones que si estuviera sentado en una silla, y tuviera a un no-cristiano a su derecha y a un cristiano que no conoce el
ministerio del Espíritu Santo a su izquierda, y tuviera que tomar la decisión con quién pasar 10 minutos de su tiempo,
escogería al cristiano. Así de vital cree él que es el entender el ministerio del Espíritu Santo.
Un cristiano que no esté familiarizado con el ministerio del Espíritu Santo está destinado a una vida de derrota,
desesperación y sin fruto, mientras que un cristiano controlado y facultado por el Espíritu puede potencialmente ganar,
construir y enviar a cientos de cristianos en su vida. Por esta razón, tenemos que asegurarnos que el nuevo cristiano
comprenda este concepto.
Dele de tarea uno de los siguientes ejemplares:
“¿Has hecho el maravilloso descubrimiento de la vida llena del Espíritu?” Escrito por Cruzada Estudiantil y
Profesional para Cristo, disponible a través de Publicaciones “Here’s Life,” este panfleto de 16 páginas describe tres ti-
pos de personas – las naturales, las espirituales y las carnales (1 Corintios 2:14-3:3) – además como apropiarse del poder
del Espíritu para convertirse en un ser humano espiritual. También habla de la “respiración espiritual” – lo que se debe
hacer cuando se peca. La confesión se describe como la exhalación y el volver a rendir la vida a Cristo en términos de
inhalación.
“¿Cómo experimentar el amor y el perdón de Dios? Conceptos Transferibles #2 de Bill Bright, también dispo-
nible a través de Publicaciones “Here’s Life.” Es la continuación del panfleto mencionado anteriormente, al final inclu-
ye un pequeño estudio bíblico.
Si va a pasar mucho tiempo antes de que se vuelvan a ver (por ej. dos semanas), tal vez debería de darle tam-
bién “Conceptos Transferibles #3”, titulado “¿Cómo ser lleno del Espíritu?” Este panfleto entra en mayor detalle respec-
to quién es el Espíritu Santo, por qué vino, qué significa ser controlado y facultado por el Espíritu Santo, y cómo vivir
bajo Su constante guía.
EVALUACIÓN
Si el nuevo cristiano tuvo alguna dificultad contestando alguna de las preguntas de la evaluación del Objetivo
de Entrenamiento #1, ahora sería un buen momento para volvérselas a preguntar. Después de esta sesión, no debería
tener ninguna duda en cuanto a su destino eterno. Debería poder contestar apropiadamente esas preguntas sin titubeos.
Hágale preguntas adicionales para ver si entendió los 17 puntos que vieron en este Objetivo de Entrenamiento.
A continuación encontrará algunos ejemplos, utilice una o dos preguntas por cada punto discutido:
1. ¿Es suficiente con tratar fuertemente de ser una buena persona? ¿Se le puede considerar como cristiana a
esa persona?
2. ¿Por qué cree que Dios le parecía callado antes de que usted fuera cristiano?
3. ¿Envía Dios a la gente al infierno, o son ellos mismos los que lo hacen?
4. ¿Podemos llegar al cielo si nuestro bien sobrepasa a nuestro mal?
5. ¿Qué necesitaba que sucediera para que usted fuera salvo? [Ser libre de pecado]
6. ¿Qué pasó con su pecado?
7. En relación a usted, ¿dónde está el Espíritu Santo?
8. ¿Qué significa el término “nacido de nuevo”?
9. Al recibir a Jesucristo, ¿qué más recibió según 1 Juan 5:11-12?
10. ¿Cuál es la diferencia entre el “nuevo y el viejo” usted?
90 DISCIPULADO PERSONAL
11. ¿Qué cree usted que signifique que hemos sido reconciliados con Dios? ¿En qué sentido estábamos eno-
jados con Dios?
12. ¿Qué sabe usted sobre la rebelión de Satanás en contra de Dios? ¿En qué forma cooperamos con Satanás
en esta rebelión antes de convertirnos al cristianismo?
13. ¿Qué cree usted que signifique ser redimido?
14. ¿Qué diferencia ha notado en usted o a su alrededor ahora que pertenece al Reino de Dios en lugar que al
reino de maldad?
15. ¿Qué piensa de la frase: “la Paternidad de Dios y la hermandad del hombre”? ¿Cómo se aplica a usted?
¿De qué manera es Dios su Padre?
16. ¿Qué protección adicional tiene usted ahora como hijo de Dios?
17. ¿Qué tienen que ver los ángeles con su salvación?
No sienta que tiene que hacer todas estas preguntas, o interrogar sin misericordia en cuanto a ésto. Use sólo
unas pocas, o algunas similares de su propia cosecha, sólo para cabar un poquito más profundo en áreas donde usted
cree que se necesite. Usted puede hacer estas preguntar durante una sesión de discipulado, cuando han terminado y van
caminando hacia el carro o en una conversación casual más tarde en la semana. Empleelas en varios contextos. ¡Sea
flexible, espontáneo y sensible a la guía del Espíritu Santo!
11 OBJETIVO DE ENTRENAMIENTO #3
LLENURA DEL ESPÍRITU
SANTO
OBJETIVO
Que el discípulo tenga un entendimiento básico de lo que es la llenura y se beneficie del ministerio del Espíritu
Santo.
DEFINICIONES APLICABLES
La Morada del Espíritu Santo: cuando se es salvo, el Espíritu Santo entra en la vida del pecador arrepentido;
vive permanentemente dentro de aquellos que han nacido de nuevo. Esto ocurre en la vida de todo creyente en el mo-
mento de su salvación (Juan 14:16-18; Juan 16:7; Romanos 8:9-11; 1 Corintios 6:19). Esto también es conocido como
el “bautismo del Espíritu Santo.” En griego, la palabra bautizar significa “sumergir,” y conlleva la idea de “ser
submergido dentro de un nuevo ambiente.” Cuando somos “bautizados en el Espíritu,” hemos sido traídos al ambiente o
esfera de influencia del Espíritu (1 Corintios 12:13).
La Llenura del Espíritu Santo: Es la influencia directiva y controladora del Espíritu Santo en la vida del cre-
yente que ha sometido su voluntad a la voluntad de Dios. La llenura puede ocurrir con frecuencia, diariamente o cada
hora, en la vida del creyente. La llenura depende de la iniciativa y la obediencia del creyente.
91
92 DISCIPULADO PERSONAL
PALABRAS DE ÁNIMO PARA EL DISCIPULADOR
Como mencioné en el capítulo anterior, entender el ministerio del Espíritu Santo podría ser uno de los concep-
tos más importantes que el nuevo creyente debe aprender.
Billy Graham dijo recientemente que el 90% de los cristianos estadounidenses son cristianos carnarles, gente
que viven vidas de fracaso e impotencia porque tal vez no quieren o no saben como permitirle al Espíritu Santo controlar
o facultar sus vidas. Una encuesta Galup hecha en los años ’80 nos mostró que más de la mitad de la gente en los Esta-
dos Unidos se consideran a sí mismos cristianos nacidos de nuevo. Entonces ¿dónde están escondidos? ¿Dónde está su
influencia? ¿Dónde están sus voces en nuestra legislatura, nuestras universidades, nuestros medios de comunicación,
nuestras calles? En la mayoría de los casos, ellos han estado desconectados de la fuente de poder: el Espíritu Santo. Por
la razón que sea, ellos han permitido que sus mentes se conformen a lo que su naturaleza pecaminosa decida, en lugar de
lo que el Espíritu decida (Romanos 8:5-6). Como resultado, es increíblemente difícil para el Espíritu Santo encontrar
conductos abiertos por medio de los cuales influenciar al mundo.
A no ser que le demos autoridad completa al Espíritu Santo en nuestras vidas, Él nunca disfrutará de libre auto-
ridad en nuestro país (al menos, no antes de la Segunda Venida de Cristo). Su discípulo necesita conocer lo más pronto
posible que el Espíritu Santo, desea dirigirlo y facultarlo para hacer la voluntad de Dios.
Cuando se toca el tema de querer hacer la voluntad de Dios, la mayoría de los nuevos cristianos nos pueden
avergonzar a nosotros los veteranos. Ellos generalmente están tan frescos, deseosos y comprometidos en hacer lo que
sea que Dios les mande, que usted no tendrá ningún problema para motivarlos. Lo único que tienen en su contra es la
falta de conocimiento en cuanto a cómo alcanzarla efectivamente.
Por cierto, ¿cómo está usted, mi amigo discipulador? ¿Le ha dado la libertad al Espíritu Santo para reinar en su
vida? ¿O todavía quedan áreas donde no le permite a Dios accesar? ¿Le ha mostrado algo para hacer, que usted se ha
tardado en realizar? ¿Su vida se caracteriza por la falta de poder o por la falta de fruto? Si es así, tal vez sería bueno
voltear el estetoscopio hacia su persona, “doctor.” Recuerde, le será posible llevar a su discípulo tan largo como usted
está en su propia vida espiritual.
La controversia.
Existe una controversia en cuanto al alcance del rol del Espíritu Santo en nuestra madurez. Algunos dicen que
la madurez cristiana viene sólo como un resultado directo de la obra del Espíritu Santo en nuestras vidas. Si usted no
está creciendo, o no pasa tiempo en oración y en la Palabra, o no testifica del Señor, es porque, en algún punto de la lí-
nea, usted le arrebató el control de su vida al Espíritu Santo y ha estado tratando de dirigirla usted mismo. Esta gente
sostiene que si usted simplemente toma un minuto y lo re-entrona a través de la oración, usted volverá a experimentar Su
poder en su vida y las cosas volverán a estar en su lugar.
El otro lado dice que la madurez vendrá sólo como resultado de un caminar fiel y obediente con el Señor. El
Espíritu Santo está siempre ahí, pero Él facilita su vida y lo hace crecer gradualmente a través de la “renovación de su
mente” mientras usted se disciplina para estudiar la Biblia, en la oración, etc. Mientras más tiempo pase en Su Palabra,
por ende, usted verá en su vida más de Su poder y dirección.
Pero, hay una tercera posición (la que más me gusta) que hace una combinación de estos dos conceptos, la cual
sostiene que elementos de ambas contribuyen a dar poder y crecimiento en la vida cristiana. Si pensamos sólo en el Es-
píritu Santo, sin molestarnos en obedecer a Dios en cosas como estudios bíblicos, oraciones, compañerismo, etc., estaría-
mos atados emocionalmente a Dios, pero seríamos de poco uso en cuanto a muchas de las cosas de profundidad de nues-
tras vidas. Por lo contrario, si estamos intensamente disciplinados en adquirir la mecánica de la vida cristiana excluyen-
do el desarrollo de una genuina relación con Dios a través del Espíritu Santo, estaríamos muy bien informado e impre-
sionaríamos, pero aun así seríamos inútiles en cuanto a donde Él nos quiere. Ambos componentes – dependencia de la
sobrenatural facultación del Espíritu, y el desarrollo personal de obediencia y disciplina – son requeridos.
Esto es cíclo: Nos volvemos a Él para obtener poder, dirección y motiviación – la cual nos la dá, y luego se
vuelve a nosotros para recibir una respuesta en obediencia, compromiso y disciplina. Mientras hacemos eso, somos mo-
vidos hacia un grandísimo amor y dependencia en Él, y nos sumergimos más profundamente en Su poder. Él nos da
más, capacitándonos para perseguir grandes profundidades de obediencia y compromiso. Las ruedas ruedan y ruedan. . .
Nuestra meta es producir discípulos balanceados. Así que tal éxito en la vida cristiana se encuentra en el balan-
ce entre la disciplina y el compañerismo; la decisión difícil es decir no a nuestra vieja naturaleza, y a la vez correr emo-
cionado a los brazos de nuestro “Papito” para protección. Necesitamos una buena porción de la voluntad poderosa de
antaño que nos haga salir de la cama a las 6 de la mañana para tener un tiempo devocional (disciplina), la cual resulta en
LLENURA DEL ESPÍRITU SANTO 93
la belleza de dar y recibir la comunión con el Amor de nuestras almas (relación). Algunas veces se necesita una determi-
nación inflexible para memorizar la Escritura, pero existe un deleite infinito cuando nuestro Padre toma esa Palabra, so-
pla vida en ella y nos dice, “¡Esto es lo que quería decirte!”
Es un círculo, pero nosotros podemos causar un corto-circuito en cualquier momento. Nunca deberíamos decir-
les a nuestros discípulos que, si ellos sólo dicen las palabras mágicas, volverán a ser unos “¡super-cristianos!” De la
misma manera, ellos deben de saber que la disciplina pura tampoco es un pasaje a la madurez, sino los Fariseos, en los
días de Jesús, hubiesen sido unos gigantes espirituales.
INTRODUZCA EL TEMA
Su discípulo probablemente ha tenido algunos altos y bajos desde la última reunión, y sin lugar a dudas tiene
algunas preguntas. Déjelo hablar. Hágale preguntas de su propia cosecha. Sáquelo de sí mismo. Pregúntele sobre lo
que le compartió la reunión anterior. Por ejemplo, supongamos que le había contado que hizo una oferta para una casa
nueva. Pregúntele si lo logró. O tal vez estaba un poco ansioso en cuanto a un examen que iba a tener en la escuela.
Pregúntele como le fue. Si usted ha comenzado un diario uno a uno de sus reuniones con él, probablemente usted escri-
bió esta clase de información después de cada reunión. Esto no sólo le provee información para su rato de oración, sino
que también significará mucho para su discípulo cuando vea que usted está interesado lo suficiente por él como para es-
cuchar y recordar lo que comparte con usted. Por otro lado, su silencio en asuntos que son importantes para él puede ser
ensordecedor.
Usted puede hacer la transición entre el asunto de la llenura del Espíritu Santo diciendo algo así, “¿Recuerdas la
última vez que estuvimos juntos, yo te compartí que cuando invitaste a Cristo a tu vida, el Espíritu Santo hizo morada en
tu corazón? Me he estado preguntando. . . ¿has notado algún cambio desde que Él entró a tu vida? [Puede ser que diga
que sí, y comparta algo con usted, o diga no. En verdad, la respuesta no importa.] Sabes, Juan, entre mayor madurez
obtengas en tu nueva vida con Cristo, la influencia del Espíritu llegará a ser más obvia.
No es triste que la gran mayoría de cristianos en este país no ven al Espíritu trabajando en sus vidas. Puede ser
que ellos no quieren permitírselo, o tal vez no saben cómo hacerlo. Por lo tanto, ¿por qué no dedicamos un poco de
tiempo a este asunto de cómo experimentar los beneficios del Espíritu Santo?”
Otra manera de introducir el tema podría ser, “¿Qué le pareció el pequeño panfleto que le dí la última vez?
¿Tuvo tiempo para leerlo? ¿Tuvo sentido para usted?”
O tal vez podría compartir la siguiente ilustración con él. Ponga como un centímetro o dos de agua en un vaso,
y luego pregúntele a su discípulo, “¿Podría decirse que este vaso tiene agua? [“Sí.”] ¿Diría que está lleno de agua?
[“No, sólo tienen un poco.”] Así sucede con la mayoría de los cristianos con respecto al Espíritu Santo. Todos los cris-
tianos son automáticamente morada del Espíritu Santo, así como este vaso es ‘morada’ del agua, pero no todos están
‘llenos’ con el Espíritu Santo. Existe una importante diferencia.”
Ahora, llene el vaso hasta arriba con agua. “¿Está el vaso lleno ahora? [“Sí.”] Correcto. Se necesitan una se-
rie de circunstancias especiales para decir que este vaso está lleno. Lo mismo ocurre con el Espíritu Santo; no sucede
automáticamente. Pero cuando nuestras vidas están llenas con el Espíritu Santo, significa que le hemos pedido a Él que
nos dirija, controle y faculte para hacer Su Voluntad. No es lo mismo que ‘el vaciarse uno mismo’ como enseñan mu-
chas religiones orientales, donde la total destrucción de uno mismo es la meta suprema, donde los dioses son el todo y
nosotros somos nada. En cambio, esto simplemente es llegar a la decisión de que usted desea hacer las cosas que Dios
quiere que usted haga, por lo tanto le da permiso para facultarlo y llevar a cabo esa decisión. En cierta manera, usted le
pide a Cristo que viva Su vida a través suyo.”
Golpee el vaso y permita que se riegue un poquito en la mesa o en el piso. “Pero no siempre hay una navega-
ción tranquila en la vida cristiana. De vez en cuando nuestras vidas se ponen un poco enredadas; nos frustramos como
andan las cosas, o no nos gusta la forma en que Dios está dirigiendo nuestras vidas, entonces tomamos el control. Esto
es el pecado. Antes de venir a Cristo, lo que decíamos básicamente era, ‘¡Dios, no quiero que gobiernes sobre mi!’ lo
mismo que dijo Satanás. De manera que cuando llegamos a ser cristianos, le pedimos a Dios que fuera nuestro Rey, y
llegamos a ser Sus súbditos leales. Cuando pecamos, regresamos a nuestra vieja actitud y le decimos a Dios, ‘¡Bájese de
ese trono! No me gustan Sus planes. Yo quiero hacerme cargo otra vez.’ De manera que nos volvemos a unir a la rebe-
lión de Satanás. Cuando esto sucede, es como si regáramos algo de esta agua. El vaso todavía está con agua, pero ya no
está lleno. Él no nos está dirigiendo, controlando o facultando. Pero esa no debería de ser una condición permanente.
Así como puedo volver a llenar este vaso [póngale agua de nuevo], usted puede volver a llenarse del Espíritu Santo.
Hoy vamos a hablar sobre lo que la Biblia dice sobre todo esto.”
94 DISCIPULADO PERSONAL
SUGERENCIAS PARA CRECER
Como lo mencioné en el capítulo 7, Cruzada Estudiantil y Profesional para Cristo ha desarrollado algunos exce-
lentes materiales que proveen un fundamento útil para alcanzar este objetivo de entrenamiento de seguimiento inicial
(“Cuidado del Recién Nacido”). Especialmente pertinente para el Objetivo que nos atañe es el tratado, “¿Ha Hecho Us-
ted el Maravilloso Descubrimiento de la Vida Llena del Espíritu?” y una serie de tres Conceptos Transferibles:
C.T. #2, “Cómo Puede Usted Experimentar el Amor y el Perdón de Dios”
C.T. #3, “Cómo Puede Usted Ser Lleno del Espíritu Santo”
C.T. #4, “Cómo Puede Usted Caminar en el Espíritu Santo”
Seguidamente encontrará algunas maneras de cómo podría usar estos materiales para ayudar a su discípulo al-
canzar este importante objetivo.
Páginas 2 y 3:
1. ¿Entendió estos tres diagramas circulares?
2. ¿A cuál de ellos está representando el vaso que llené y luego golpeé?
3. Este versículo, 1 Corintios 2:14, dice que las cosas del Espíritu de Dios son locura para el hombre natu-
ral. ¿Puede pensar en algunos ejemplos de los que estaban en su vida antes de conocer a Cristo, o están
en la vida de otros que usted conoce?
4. ¿Cuál sería la primer diferencia que usted observa aquí entre el hombre natural y el hombre espiritual?
¿Cuál entre el hombre espiritual y el carnal?
5. Si estuviera estudiando el comportamiento del hombre natural y lo comparara con el comportamiento
del hombre carnal, ¿cree que podría encontrar alguna diferencia?
6. ¿ Puede ser salvo el hombre carnal?
Páginas 4 y 5:
1. ¿Qué cree que quiso decir Jesús en Juan 10:10 con que debemos tener una “vida abundante”? ¿Cree que
dijo que no deberíamos tener más problemas?
2. En este segundo versículo, Juan 15:5, ¡qué cree usted que quiso decir Jesús cuando dijo “él que perma-
nece en mi”? ¿Qué significa “permanecer”? [Significa estar en constante relación con.] ¿De qué mane-
ra diría usted que nuestra relación con Dios es como la relación de la vid y los pámpanos? [Si no pudie-
ra pensar en ninguna forma, dele alguna de sus ideas.]
3. En este tercer versículo (Gálatas 5:22), ¿no le parece que ellos usaron mal la gramática aquí? Usaron el
término fruto en singular, pero luego continúan y exponen una pluralidad de frutos: amor, gozo, paz, etc.
¿Pensaría usted que esto fue un error, o tal vez cree usted que Dios nos trata de decir algo? [Puede que
esto pase sobre su cabeza, así que comparta con él que cuando el Espíritu comienza a producir fruto en
la vida del cristiano, Él produce todas estas cosas. Amor, gozo, paz, etc. Y que son todos componentes
del fruto singular del Espíritu. Si sólo algunas de estas cosas están siendo producidas en la vida de una
persona, entonces algo no anda bien; algo está impidiendo la obra del Espíritu, por lo tanto es tiempo
para un auto-examen.]
4. Observe todos estos rasgos de carácter enumerados en la página 5. ¿Diría usted que cada uno de ellos
están en su vida en este momento? [Probablemente él dirá que no.] ¿Por qué no? Usted tiene al Espíri-
tu viviendo dentro de usted, ¿no es cierto? Lo dice aquí mismo que Él producirá esta clase de fruto en
LLENURA DEL ESPÍRITU SANTO 95
su vida. [“Um, bueno . . . um . . .”] ¿Le importaría si comparto con usted lo que pienso? Como dice
aquí mismo debajo del diagrama, “Quien está comenzando a entender el ministerio del Espíritu Santo
no debería de desanimarse si no es tan fructífero como la mayoría de los cristianos maduros que ha co-
nocido y han experimentado esta verdad por un largo tiempo.” Una planta recién plantada de manza-
nas no comienza a producir fruto la mañana siguiente, tampoco el Espíritu Santo lo hará un verdadero
cristiano fructífero de inmediato. Toma su tiempo. No deje de buscar el fruto, pero tendrá que ser un
poco paciente al comienzo.
Espero haberle dado algunas ideas en cuanto a cómo hacer preguntas mientras repasan el panfleto.
Otra cosa que debería hacer es escribir con anticipación algunos versículos de referencia para algunos de los
puntos, para luego revisarlos con su discípulo. En algún momento, necesitará revisar y discutir algunos pocos versículos
que se enumeran en las páginas 5 y 6 que se refieren al ser humano carnal.
Cuando llegue a la página 12 del folleto, asegúrese de preguntarle a su discípulo (asumiendo que él leyó el pan-
fleto antes de la reunión) si ha orado pidiéndole a Dios que lo llene con el Espíritu. Si dice que sí lo hizo, ¡regocíjese
con él! Pregúntele si está convencido de que todavía está lleno del Espíritu. Si dice otra vez que sí, diga “grandioso”, y
continúe con el estudio. Si dijera que no, debería preguntarle por qué no, y pregúntele si le gustaría detenerse en ese
momento y pedir ser lleno del Espíritu otra vez. Si contestara que no, no lo presione. Probablemente le dé vergüenza de
hacerlo en público o enfrente de usted. Nada más anímelo a hacerlo lo más pronto posible.
2. Si no ha leído el panfleto de Cruzada Estudiantil y Profesional para Cristo “¿Ha hecho Us-
ted el Maravilloso Descubrimiento de la Vida Espíritu Santo?” y le gustaría usarlo . . .
Es muy sencillo: Lean juntos el folleto. Yo sugeriría parar ocasionalmente para hacerle preguntas, y así obtener
retroalimentación, ampliar o personalizar un punto, y asegurarse de que está despierto, etc. Esto eliminará el acerca-
miento “enlatado” y mantendrá la sesión más interesante para él.
Comience con un comentario como: “La manera más fácil y clara que conozco para explicar el ministerio del
Espíritu Santo es a través del uso de este pequeño panfleto. Tal vez parezca muy simple para usted, pero las verdades
contenidas aquí son de las más profundas y hasta pueden cambiar vidas. Lo que me gustaría hacer es leerlo junto con
usted, y mientras lo hacemos, si hay alguna cosa que no entiende o desea preguntar, sólo deténgame y hablaremos de
ello.”
3. Si ya leyó el folleto de Cruzada Estudiantil y Profesional para Cristo “Cómo Puede Usted
Experimentar el Amor y el Perdón de Dios” (Concepto Transferible #2) . . .
Opción #1. Repase con su discípulo la sección “Preguntas para Pensar” que se encuentran en la parte de atrás
del panfleto. Ellos hicieron un gran trabajo ampliando con estas preguntas el material del folleto. Podría utilizar las
mismas preguntas, o hacerlas en otros términos sí su interlocutor no las entiende como están. Donde quiera que la pre-
gunta mencione un versículo bíblico, deténgase y repáselo con el discípulo. Usted debe llevarlo a usar la Palabra de
Dios para encontrar respuestas. Cuando una pregunta hace referencia a una página específica del panfleto, búsquela, de
esta manera el discípulo podrá familiarizarse con el tema.
Asegúrese de revisar las preguntas con anterioridad antes de encontrarse con su discípulo. ¡Algunas son difíci-
les! Piense en ellas por su cuenta y esté preparado para dar su aporte inteligente. Tal vez usted pueda pensar en ilustra-
ciones suplementarias o experiencias personales que puedan arrojar luz adicional a las preguntas.
Opción #2. Revise el “Estudio Bíblico” que está al final del panfleto. Mientras que las preguntas para pensar
amplía y edifica el material del panfleto, el Estudio Bíblico trata de cubrir terreno nuevo, proveyendo hechos adicionales
sobre el ministerio del Espíritu Santo.
Opción #3. Si tiene el tiempo, revise ambas secciones, Preguntas para Pensar y el Estudio Bíblico.
Opción #4. Ya que los Conceptos Transferibles #2, #3 y #4 tratan con el ministerio del Espíritu Santo, debería
de pasar tres sesiones en este tema. Envíe a su discípulo a la casa después de cada sesión con un nuevo Concepto Trans-
ferible para que lo lea en preparación para la próxima reunión. El Concepto Transferible #2 en sí mismo no es comple-
tamente adecuado para cubrir todo el tema, ya que termina con la “exhalación” (confesión) y no explica el concepto de
“inhalación” (llenura). Una persona se puede ¡asfixiar! espiritualmente. Después de darle el #2, también debería de dar-
le el #3 y continuar con el #4. Le puede asignar cada semana las preguntas del estudio bíblico para que las conteste por
sí mismo, dependiendo de su nivel de motivación y su limitación de tiempo. Esto puede retrazar el pasar a otras áreas
96 DISCIPULADO PERSONAL
que necesita tocar en el “Cuidado del Recién Nacido,” pero estará más firme en el terreno de la obra del Espíritu, lo cual
será muy sano. Usted decide.
Déjeme recordarle otra vez que éste es uno de los distintivos primarios de este disciplinado programa: “Usted
decide.” Mi función es sólo darle ideas, estimular su pensamiento, y presentarle opciones. Pero las áreas que cubra y la
velocidad con que lo haga está en usted, basado en su trasfondo, su evaluación del estado del discípulo y en la dirección
que reciba del Espíritu Santo.
Opción #5. Si desea usar los conceptos incluidos en los materiales de Cruzada Estudiantil y Profesional para
Cristo en cuanto al ministerio del Espíritu Santo en las sesiones de seguimiento, una alternativa sería, adquirir los mate-
riales y formular desde ellos su propia presentación del ministerio del Espíritu Santo. No conozco ninguna otra colec-
ción de doctrina que sea sucinta y de ayuda en este tema, como estos pequeños panfletos. Realmente hicieron un gran
trabajo cubriendo las siguientes áreas:
• Quién es el Espíritu Santo
• Cuál es Su función
• Por qué los cristianos pecan todavía
• Uno de los primeros problemas del cristiano: la carencia del control del Espíritu Santo en su vida
• Tres tipos de personas: natural, espiritual, carnal
• Lo básico para ser lleno del Espíritu
• Qué hacer para ser lleno del Espíritu Santo
– Confesión de pecado
– Reapropiarse de la llenura del Espíritu
• Conflicto espiritual
• Viviendo una vida de fe
OTROS RECURSOS
Si a usted le gustaría usar, en el tema del Espíritu Santo, el tipo de estudio bíblico “llene los espacios en blan-
co”, aquí tenemos algunos para escoger:
“Los Diez Grados Básicos hacia la Madurez Cristiana” una serie de estudios bíblicos de Cruzada Estudiantil y
Profesional para Cristo:
• Grado 1, Lección 3: “La Vida Controlada por Cristo”
• Grado 2, Lección 4: “La Vida Permanente”
Lección 5: “Una Vida Limpia”
• Grado 3, “El Cristiano y el Espíritu Santo” (La introducción y 6 lecciones completas)
• Grado 7, Lección 6: “Testificar y el Espíritu Santo”
El Diseño del Discipulado - Es una serie desarrollada por Navegantes:
• Libro 1, Capítulo 4: “El Espíritu que está en Usted”
• Libro 5, Capítulo 3: “El Espíritu Santo”
ILUSTRACIONES EXTRAS
1. La Marca del Pájaro. Esta es buena para el nuevo cristiano que se pregunta, “¿Qué pasaría si no puedo re-
cordar todos mis pecados? ¿Qué pasaría si me olvido de confesar alguno? ¿Seguirían estando en mi contra?” La si-
guiente ilustración la relaciono con 1 Juan 1:9: “Si confesamos nuestros pecados, Él es fiel y justo para perdonar nues-
tros pecados y limpiarnos de toda maldad.”
Usted está manejando su carro. De pronto, ahí mismo en el parabrisas – ¡PA! Una paloma dio en el blanco de-
jando su marca. Está ahí en el área de visibilidad. Mientras maneja, usted está consciente de ello, y después de un rato
le comienza a molestar tanto que busca un lugar de lavado de carros. Paga lo que tenga que pagar, entra en el lavado de
carros, sale por el otro lado y – sin lugar a dudas – lo que le molestaba, el premio del pájaro, se ha ido. Pero mientras
observa su carro, usted nota algo más: Todo el carro está limpio. No hay barro en las llantas, la suciedad que estaba en
los guardabarros se ha ido, el techo no tiene la capa de polvo, lo cromado está brillante, todas las ventanas están real-
mente limpias y la mancha que el pájaro dejo en la joroba y que usted no lo sabía, ¡también se ha ido!
LLENURA DEL ESPÍRITU SANTO 97
En cierto sentido, esto es lo que nos pasa cuando confesamos nuestros pecados conscientes. Si Dios nos hiciera
enfrentarnos con todos nuestro pecados, probablemente estaríamos sobre cargados por nuestra pecaminosidad. En Su
sabiduría, nos hace conscientes de sólo unos pocos a la vez, en cantidades que podemos manejar. Pero entonces algo
maravilloso sucede: Mientras obedientemente confesamos los que nos ha recordado, nos pasa por Su “Santo Lavado de
Carros” y como dice el versículo, “nos limpia de toda maldad.”1
2. El Borracho. Cuando una persona toma mucho, le deja el control de su cuerpo a los efectos del alcohol y
termina haciendo cosas que nunca haría en lo natural. Cuando se toma, gente dócil se vuelve agresiva algunas veces, el
tímido se vuelve combativo, el penoso se vuelve un actor, el desafinado se convierte en cantante. ¡Comúnmente ellos
nunca actuarían de esa manera! Pero, el alcohol se interpuso.
El Apóstol Pablo en Efesios 5:18 nos advierte que no dejemos al alcohol tomar control de nuestras vidas. En
cambio, debemos permitir que el Espíritu Santo nos controle. De la misma manera como el alcohol nos anima a que ha-
gamos cosas diferentes cuando toma el control, el Espíritu – cuando está en control – nos anima a actuar en maneras que
normalmente no haríamos. Él causa que amemos al no amado, nos hace estar gozosos en tiempos de dolor, pacíficos
cuando nuestro mundo explota, pacientes con aquellos que merecen ser flagelados, dulces con los insoportables, buenos
con los desviados y gentiles con los brutos. Esto no es natural.
3. El Carro Arreglado. Supongamos que fui a visitar a un amigo. Cuando abre la puerta me recibe con una
sonrisa de oreja a oreja y pronto descubro el por qué. Acaba de comprar ¡una flamante Spitz Beardog XK 2000 Turbo
Maxi Road Cruiser nueva! ¡Está tan orgulloso de eso!
“¡Hecha un vistazo al capó! Tiene 16 cilindros y 128 válvulas, cams inferiores y superiores, tiene un carbura-
dor de 20 barriles, inyección de combustible computarizada, tornillos de radiador de alta compresión, y sobre marcha de
energía nuclear para cuando ¡necesite un poquito más de potencia! ¿Qué te parece?”
“¡Es fanTÁStico!” Digo entusiasmado. “Vamos a darnos un pequeño paseo. ¿Te molestaría si yo conduzco?”
“De ninguna manera. ¡Móntate!”
Así que salto detrás del volante, pero en lugar de que mi amigo se siente en el asiento del pasajero, da una vuel-
ta y se pone atrás del Spitz, se agacha, coloca su hombro con firmeza contra el bellísimo parachoques cromado, agarra
impulso y comienza a empujar.
“¿Qué estás haciendo?” Le grito.
“¿Por qué? Te estoy llevando a dar un paseo. ¿Qué crees que estoy haciendo?”
“A un pa . . . ¿Por qué no ponemos la llave, encendemos la máquina y manejamos?
“¿Llave? ¿Máquina? ¿Qué quieres decir con ‘encender’? ¿No se supone que esta es la manera como funcio-
na?”
Desafortunadamente muchos cristianos son como mi amigo ficticio. Cuando invitaron a Cristo a entrar en sus
vidas, se les entregó la llave de acceso al poder más efectivo de la tierra, el amoroso Espíritu de Dios. Muchos están
completamente desapercibidos de la ayuda que está a disposición de ellos, y tratan de vivir la vida cristiana por sus pro-
pias fuerzas. En lugar de sentarse y manejar, ellos están afuera empujando.
4. El Tractor de Oruga. Una vez fui de voluntario a trabajar en mi iglesia, la cual estaba construida contra una
colina, y casi no había espacio para construir una acera entre la esquina trasera de la iglesia y la colina. Pero, queríamos
hacer un camino en esa hendidura para tener acceso al parqueo adicional que estaba en la parte de atrás. Bueno, me pre-
senté a las 8:00 de la mañana un sábado con pala en mano, esperando que una docena de otras personas estuvieran ahí
también. Tres más aparecieron. A pesar de eso, empezamos a cavar. Lo hicimos por cuatro horas, y no parecía que ha-
bíamos hecho mella a esa colina. Mis manos estaban destrozadas; me dolía mi espalda; estaba quemado. Fue una expe-
riencia fatal.
Cuando paramos para almorzar, me di cuenta que media cuadra más abajo, algunos hombres estaban excavando
con un tractor de oruga. Mientras comíamos, vimos al tractor inesperadamente avanzando con un gran ruido hacia la
calle de nuestra iglesia. Se detuvo justo al frente de nosotros y el chofer gritó sobre el estruendo de la máquina, “Los he
estado observando. ¿Les sería útil un poco de ayuda?”
Se pueden imaginar la respuesta entusiasta.
El chofer me invitó a estar con él en la cabina y en poco tiempo habíamos cavado una sección de esa colina su-
ficientemente grande como para medio pasar. ¡Yupi! Ese día logré hacer mucho – el chofer, el tractor y yo.
98 DISCIPULADO PERSONAL
En el Reino de Dios, el trabajo fuerte se hace cuando usted se sienta y maneja, no cuando trata de hacerlo con
su propia fuerza. Cuando el Espíritu Santo entra en escena, nuestra acción más sabia es dejarlo a Él hacer lo que necesi-
te lograr. Cuando nos apropiamos de Su poder, la tarea que tenemos por delante será muchísimo más fácil.2
TERMINANDO LA SESIÓN
Si usted estudia los tres Conceptos Transferibles con su discípulo, este seguro de terminar cada sesión dándole
el folleto que sigue, luego hágale saber bien claro que a usted le gustaría que lo tenga hecho para cuando se vuelvan a
reunir.
Por otro lado, sin importar el tema, asegúrese de dejarlo hacer cualquier pregunta que tenga antes de separarse.
Es una buena manera de exponer los “baches.” Usted puede estar enseñándole sobre la llenura del Espíritu Santo y él
puede estar diciéndose a sí mismo, “¿El Espíritu Santo? Ahora, ¿cuál de los tres Dioses será? ¿El que adoran los Hare
Krishnas?”
Sería apropiado terminar cada sesión con una oración, agradeciendo a Dios por enviar el Espíritu Santo y pi-
diéndole que les ayude a ustedes dos a experimentar Su poder y guianza cada vez más. Para entonces, su discípulo de-
berá estar capacitado para hacer parte de la oración. Anímelo a que lo haga, pero no lo empuje si todavía se siente inde-
ciso.
EVALUACIÓN
Las siguientes son preguntas que le puede hacer a su discípulo para determinar si entiende verdaderamente el
ministerio del Espíritu Santo:
1. ¿Dónde se encuentra el Espíritu Santo ahora en relación con usted?
2. ¿Qué significa ser “habitado por el Espíritu Santo”?
3. ¿En qué momento se llega a ser morada del Espíritu Santo?
4. ¿Qué significa “ser lleno del Espíritu Santo”?
5. Si una persona le preguntara, “¿cómo puedo ser lleno del Espíritu Santo?” ¿qué le contestarías?
6. ¿Qué es “respiración espiritual”? ¿Cuándo llega ser necesaria?
7. ¿Diría usted que la llenura del Espíritu Santo es un acontecimiento de una vez, o puede suceder muchas
veces?
8. (Si está pregunta no se vuelve muy personal . . .) ¿Cuándo fue la última vez que usted tomó un “respiro
espiritual”? ¿Notó algún cambio?
9. ¿Por qué es importante confesar nuestros pecados a Dios? ¿Cómo lo debemos hacer?
10. ¿Cuál diría usted es ahora el trabajo principal del Espíritu Santo aquí en la tierra?
Cuando el Espíritu Santo está controlando la vida de una persona, debería de existir evidencias de eso en la for-
ma del fruto del Espíritu escrito en Gálatas 5:22-23: amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre,
y templanza. Sin embargo puede que este fruto no se vea crecer inmediatamente, pero si usted no comienza a ver algu-
nos despuntes en pocas semanas, algo anda mal. Tal vez es que su discípulo ha adquirido el conocimiento en cuanto a la
llenura, pero no la ha puesto en práctica. Hable abiertamente sobre ello con él. Entre más esté el tema en sus labios,
más estará en su mente. Sin embargo, lo más importante de todo es su ejemplo. Asegúrese de que usted está caminando
en el Espíritu en todo tiempo.
DEFINICIONES APLICABLES
Identidad en Cristo: Quienes somos en Cristo; las características notables de un cristiano recién convertido en
su naturaleza básica o esencia; lo que es verdad sobre la naturaleza básica del cristiano como resultado de llegar hacer
morada del Espíritu Santo después de la conversión.
100
IDENTIDAD EN CRISTO 101
PALABRAS DE ÁNIMO PARA EL DISCIPULADOR
En las sesiones #1, #2, y #3 de seguimiento le ha dicho a su discípulo que ahora él es una nueva criatura, lleno
del Espíritu Santo quién le da a los que le pertenecen el poder para vivir en abundancia y victoria.
Inmediatamente después de la salvación, algunos cristianos experimentan un radical y positivo cambio de com-
portamiento. Para otros, los cambios no son tan dramáticos. Ellos empiezan a preguntarse si realmente ha existido al-
gún tipo de cambio. Se dicen a sí mismos, Si yo soy una nueva criatura, y el poder para vivir una vida como Dios man-
da esta en mi. ¿Por qué todavía tengo malos deseos? ¿Por qué todavía tengo codicia? ¿Por qué pierdo los estribos con
la más mínima provocación? Y vean a todos estos otros cristianos... muchos son unos hipócritas. Conozco mucha gen-
te que son mejores personas que estos cristianos. La Biblia dice que a habido un cambio en mi interior, pero la verdad
es que no veo mucha evidencia de eso.
¿Qué se le puede decir? Estaría sorprendido si muchos de ustedes no han experimentado la misma desilusión
de vez en cuando. Se nos ha dicho que hemos recibido una nueva naturaleza altamente renovada, un poder sobrenatural
nuevo. Entonces ¿por qué no hacemos las cosas que sabemos son correctas y dejamos de hacer las cosas que son malas?
Nosotros queremos cambiar. Queremos ser obedientes a Cristo pero parece que carecemos del poder.
El Espíritu Santo es nuestra fuente de poder. Si Él esta en control de nuestras vidas, experimentaremos poder,
victoria y una vida abundante (Gálatas 5:22-23). El truco está en el destronar nuestro viejo yo en nuestro diario vivir, en
el momento a momento, y regresar al Espíritu Santo al trono, y dejarlo allí.
Cuándo se piensa en esto, salta la pregunta ¿porqué tenemos que hacerlo? Antes de conocer a Cristo, dieciocho
años de mi vida los mal gasté a la sombra de Satanás y me acostumbre bastante a eso. Me encantaba pecar y aunque no
me gusta admitirlo, todavía me gusta. Y para ser honor a la verdad, a usted probablemente también le gusta. Si no nos
gustara, no lo haríamos. Lo que odiamos son las consecuencias. Odiamos como nos hace sentir, odiamos como hace
que Dios se lamente, odiamos el daño que le hace al crecimiento del Reino de Dios y odiamos como Satanás es exaltado
con esas acciones. Así que, ¿por qué toleramos esta tendencia en nosotros? ¿Por qué no aprendemos de nuestros erro-
res?
Deberíamos ser capaces de descifrarlo. ¿Recuerda como trabaja el pecado? Primero viene la tentación. Se ve
bien, pero el Espíritu que está dentro de nosotros nos advierte que nos alejemos. Sin embargo, si nuestra mente no esta
puesta en las cosas del Espíritu (Gálatas 5:16-17), en vez de obedecer de inmediato, empezamos a analizar otras alterna-
tivas. Empezamos a procesar una lista de “pros y contras” en cuanto al pecado sugerido, y, siendo optimistas, sacamos
los “pros” primero. Después de pasar un buen tiempo estableciendo los beneficios del acto, ya no estamos de humor
como para pensar en las consecuencias. El análisis termina y nos dirigimos por el camino del pecado, sólo para damos
cuenta más tarde que de nuevo metimos la pata.
Cada vez que somos tentados, tenemos la opción de escoger la manera de Dios o la de Satanás. Estamos tan
acostumbrados a seguir el camino de Satanás y (sin pensarlo mucho) nos encanta ir por ahí, así que... ¿para qué arruinar
la diversión buscando la llenura del Espíritu?
En medio de la tentación, encontramos al Espíritu armado y listo para venir en nuestra ayuda, listo para entrar
en batalla contra nuestro enemigo y rescatarnos. Pero nosotros no le damos la oportunidad. ÉL tomaría el trono inme-
diatamente si se lo permitiéramos, pero la realidad es que, el “tan sólo por esta vez,” lo aparta rápidamente y nosotros
ejercemos nuestra propia voluntad. Obviamente, después siempre nos sentiremos mal. Nos confesamos hasta más no
poder y prometemos estar más atentos en la batalla la próxima vez – pero ¿por qué la próxima vez va a ser diferente?
Estas preguntas tal vez te han molestado por muchos años, y su nuevo discípulo definitivamente va a pensar en
ellas. La respuesta no es simple, ni tampoco lo es el proceso que culmina en victoria sobre el pecado habitual. La victo-
ria usualmente no se completa a lo largo de la vida. La tentación y el pecado será una plaga que nos atacará el resto de
nuestras vidas aquí en la tierra. Sin embargo, la gran victoria puede ser nuestra – con ocasionales señales de resistencia
que todavía están en nuestra carne – si conocemos algunas cosas y hacemos otras pocas.
Este objetivo de entrenamiento va a lidiar primeramente con lo que tenemos que conocer, mientras que el Obje-
tivo de Entrenamiento #5 tocará lo que tenemos que hacer.
Lo primero que su nuevo discípulo tiene que comprender es que aunque tiene una nueva naturaleza, también
posee en sí mismo su vieja naturaleza pecaminosa. Ambas son igualmente accesibles. Es más, la vieja naturaleza es
probablemente más accesible por la simple razón de que es lo que conocemos desde antes de nuestra conversión.
Cuando exhibimos un comportamiento carnal, lo que sucede es que estamos echando mano de nuestra vieja naturaleza.
Un comportamiento como el de Cristo sólo puede ser manifestado si lo sacamos de nuestra nueva naturaleza. Para que
102 DISCIPULADO PERSONAL
esta verdad se entienda mejor, voy a darle una ilustración que pueda usar. Su discípulo podrá recordar esta verdad fácil-
mente, aplicarla y luego pasarla a otros.
INTRODUZCA EL TEMA
Empiece la conversación con algo como esto:
USTED: Bueno Francisco, has estado caminado con el Señor como por un mes ya. Imagínate, ¡un mes en algo
que va a durar trillones de años! ¡Un mes como “nueva criatura”! ¿Cómo te sientes al respecto?
DISCÍPULO: Bastante bien. He tenido algunos altos y bajos, pero estoy convencido que estoy haciendo lo
correcto.
USTED: ¡Grandioso! ¿Cómo te ha ido en el asunto de actuar como lo haría Cristo? Es decir, la semana pasada
hablamos de ser llenos del Espíritu Santo y como Él nos ayudaría a vivir vidas más rectas. ¿Ha provocado
eso alguna diferencia en tu vida en la última semana?
DISCÍPULO: Me ha ayudado, pero tengo que confesar que... bueno... he metido la pata varias veces. Yo sabía
que estaba haciendo mal y quería obedecer al Señor, pero no fui lo suficiente fuerte como para resistir la
tentación.
USTED: Francisco, no dejes que eso te desanime. La verdad es que todos los Cristianos metemos la pata de
vez en cuando. Nuestra meta es que cada vez lo hagamos menos. De este lado del cielo nunca seremos
perfectos, pero es posible continuar en un progreso constante hacia la perfección mientras crecemos en el
Señor.
DISCÍPULO: ¿Pero por qué sucede? Usted dijo que yo tengo una nueva naturaleza, y que el Espíritu Santo
vive dentro de mí y que me ayuda a vivir la vida que agrada a Dios. Pero aún quiero hacer las mismas
cosas que hacía antes de que fuera cristiano.
USTED: Yo sé que lo dije, y es la verdad. El Espíritu Santo es la fuente de poder de la vida cristiana. El pro-
blema es que Él no es la única fuente a la cual podemos recurrir. Déjame mostrarte una ilustración que te
puede ayudar a entender esto.
Otras Ilustraciones
1. La Ilustración de los Dos Perros. Un hombre viejo y sabio, que había caminado con el Señor por muchos
años, estaba hablando con su nieto adolescente que recientemente se había hecho cristiano.
“Abuelito, no he podido encontrar realmente la forma correcta de aplicar la vida cristiana. Algunas veces me
siento cerca de Dios y no tengo ninguna dificultad en obedecerlo, pero en otros momentos tengo ganas de hacer y decir
toda clase de basura que sé que estaría mal. ¡No me parece justo! ¿Por qué no puedo ser bueno todo el tiempo?”
“Bueno, hijo, te voy a decir algo que me di cuenta hace mucho tiempo atrás. Ser cristiano es como tener dos
perros viviendo dentro de uno, uno bueno y otro malo, y ellos siempre están peleando.”
“¡Así me siento yo! ¡Y me parece que el malo gana más a menudo de lo que desearía! Abuelo, ¿cuál de los
dos gana en ti?”
“El que alimento.”
2. La Ilustración del Viejo Capitán de Barco. Un barco fue enviado a un viaje trasatlántico. Tres días más tar-
de se descubrió que el viejo capitán se había vuelto loco. Comenzó a racionarles la comida a la tripulación y les aumen-
tó el trabajo. Los acosaba y les pegaba. Unos cuantos de los tripulantes se escabulleron en el cuarto de radio e infor-
maron al dueño del barco lo que estaba sucediendo, quién a su vez les pidió que destituyeran al viejo capitán de sus res-
ponsabilidades e instalaran al primer oficial el cual todos conocían por ser honesto y confiable.
106 DISCIPULADO PERSONAL
Ellos lo hicieron, pero ya que el barco no tenía una prisión, y como el viejo capitán era bastante inofensivo, le
permitieron que vagara por el barco a su antojo. Muy a menudo daba órdenes gritadas a la tripulación, tratando de que
lo obedecieran. Algunos de ellos lo hacían de vez en cuando, pero cuando lo hacían, era por una de las siguientes razo-
nes:
A. Estaban tan acostumbrados a obedecerle que lo hacían por una reacción automática.
B. Tenían miedo de que, a pesar de lo que el nuevo capitán dijera, el viejo capitán tuviera algún tipo de auto-
ridad sobre ellos.
C. No se habían dado cuenta de que había sido relevado de su mando.
Muchos cristianos continúan obedeciendo las demandas de su vieja naturaleza por razones parecidas:
A. Hábito: El patrón de los viejos hábitos pecaminosos no ha sido trasformado todavía de acuerdo a su nueva
naturaleza.
B. Miedo o resignación: “No puedo cambiar. He tratado pero no me puedo deshacer de los viejos hábitos.
Están en mí tan arraigados.”
C. Ignorancia de quienes son en Cristo y del hecho de que la vieja naturaleza pecaminosa está “relevada de la
autoridad” sobre ellos, y no necesitan obedecerle más.1
OTROS RECURSOS
Si a usted le gusta usar el tipo de estudio bíblico “llene los espacios en blanco” en el tema de nuestra identidad
en Cristo, tenga en cuenta lo siguiente:
“Los Diez Grados Básicos del Desarrollo Cristiano” una serie de estudios bíblicos de Cruzada Estudiantil y Pro-
fesional para Cristo:
- Grado 2, Lección 1: “¿Qué es la Vida Cristiana?”
Lección 2: “Una Evaluación de su propia Vida Espiritual”
- Grado 6, Lección 1, “La Obediencia y el Resultado de Hacer la Voluntad de Dios”
TERMINANDO LA SESIÓN
Como siempre, dele a su discípulo el bosquejo para que lo lleve a casa para que lo estudie por su cuenta previa-
mente.
Anímelo a sacar tiempo durante la siguiente semana para analizar de cuál de los pozos ha estado sacando la ma-
yor cantidad “de agua”. Si se da cuenta que ha estado yendo al viejo pozo, necesita confesar su pecado, arrepentirse y
una vez más apropiarse de la llenura del Espíritu Santo. Adviértale que usted lo estará llamando durante la semana para
saber cómo le va, y para ver si le puede ayudar en algo. (Asegúrese de hacerlo.)
EVALUACIÓN
Hágase usted mismo las siguientes preguntas:
1. ¿Conoce mi discípulo lo que la Biblia está diciendo cuando habla de “la nueva criatura” en Cristo?
2. ¿Entiende por qué tiene todavía deseos pecaminosos a pesar de haber nacido de nuevo?
3. ¿Entiende que es su decisión si sigue el consejo de su vieja naturaleza o la nueva?
4. ¿Entiende que mientras más saque de su nuevo pozo, se volverá más fácil ir a él, y será más difícil encon-
trar el camino hacia el viejo?
Si usted puede contestar estas preguntas de forma afirmativa, usted y su discípulo han alcanzado este objetivo
de entrenamiento. Si necesita un poco más de información de parte del discípulo para contestar, las siguientes preguntas
le ayudarán:
1. Ahora que eres cristiano, ¿de qué manera eres diferente?
2. A parte de la salvación, ¿qué fue lo que Dios te dio que no tenías antes? (“Una nueva naturaleza”)
3. ¿Cómo explicas el hecho de que, a pesar de ser una nueva criatura, aun tienes la tendencia a pecar algunas
veces, como lo hacía la vieja naturaleza? (Todavía tenemos la vieja naturaleza en nosotros.)
4. ¿Cómo podemos cuidarnos de actuar como la vieja naturaleza?
5. Digamos que iniciaste una relación especial con una nueva amiga (o amigo), y ella (él) quiere conocerte
un poquito mejor. Ella (él) te pregunta, “¿Cómo es tu verdadero yo?” ¿Cómo le contestarías? (Espero
que su discípulo diga algo sobre su nueva naturaleza dada por la misericordia de Dios, aunque el viejo
hombre aparece de vez en cuando.)
6. ¿Qué cosas hacen que te olvides del nuevo pozo y saques “agua” del viejo?
De vez en cuando usted verá a su discípulo actuando de maneras no muy santas. Si lo nota, debería preguntar-
le, “Simón, ¿de cuál pozo estás dragando ahora?” Por un rato usted necesitará recordarle a su discípulo la ilustración, o
por lo menos los conceptos, hasta que se afirmen en su corazón finalmente.
13 OBJETIVO DE ENTRENAMIENTO #5
PRINCIPIOS BÁSICOS DE
CRECIMIENTO
OBJETIVO
El discípulo tiene un entendimiento de los principios básico del crecimiento espiritual y está consciente de la
beneficiosa influencia del tiempo, de la adversidad y la soberanía de Dios.
108
PRINCIPIOS BÁSICOS DE CRECIMIENTO 109
Isaías 58:10-12 Juan 4:32-34* 1 Pedro 3:15
*[Después de testificarle a la mujer en el pozo]
6. Crecer toma tiempo
• Lucas 3:23: Jesús supo siempre que Él era el salvador, el Hijo de Dios (Lucas 2:49), aunque Dios lo retu-
vo del ministerio hasta que tenía treinta años; para poder entrenarlo apropiadamente (Hebreos 5:8).
• Hechos 7:23-24: Dios tuvo a Moisés en un programa de entrenamiento de cuarenta años en la corte de
Faraón, luego otro programa de entrenamiento de cuarenta años en el desierto de Madian, luego decidió
que estaba listo para comenzar su ministerio.
• Gálatas 1:15-2:1: Después de la dramática conversión de Pablo en el camino a Damasco, Dios lo puso en
un programa de entrenamiento de diecisiete años antes de que le permitiera entrar a su ministerio público.
2 Corintios 3:18 Efesios 4:11-13 1 Timoteo 5:22
Gálatas 4:19 Filipenses 2:22
7. La adversidad facilita el crecimiento
Salmo 119:71 Hebreos 12:5-11 1 Pedro 5:10
Romanos 5:3-5 Hebreos 5:8 Apocalipsis 3:19
Santiago 1:2-4 1 Pedro 1:7
8. Dios supervisa soberanamente nuestro crecimiento
• Salmo 71:20: Aun en el tiempo más difícil, Dios está en control.
• Salmo 119:75: Algunas veces las aflicciones que experimentamos nos vienen como acción directa de
Dios, pero siempre para nuestro bien, y siempre motivadas por Su fidelidad.
Salmo 127:1 Romanos 8:28 1 Corintios 10:13
INTRODUZCA EL TEMA
Debería de comenzar la conversación con algo así:
USTED: ¿De cuál de los pozos sacó el agua esta semana? ¿En cuál de las partes ha estado trabajando?
DISCÍPULO: Principalmente en la nueva. Hubo momentos donde se me olvidó y caí en la vieja manera de
pensar. Como dijera usted, los viejos hábitos son difíciles de romper.
USTED: Créame, ¡sé de lo que me está hablando! Espero que hoy le pueda dar algunos consejos que hagan
que ese camino hacia la nueva vida sea más suave, un poco menos desgastante. Eventualmente, si usted
aplica fielmente estos principios, ese camino será como una autopista moderna con diez líneas de ancho, y
la vieja manera desaparecerá prácticamente por falta de uso.
DISCÍPULO: ¿Me está diciendo que no voy a pecar más?
USTED: Yo no iría tan lejos. Teóricamente, supongo que es posible, pero no contaría con eso. La naturaleza
pecaminosa siempre estará ahí, y el adversario el diablo siempre estará buscando nuevas y creativas mane-
ras para hacerlo caer. Pero su vida estará caracterizada por la victoria, el poder y un caminar cercano a
Dios. Y los momentos donde tambalea y cae serán cada vez menos.
La Ilustración de la Rueda1
El ya fallecido fundador de los Navegantes, Dawson Trotman, expuso en cierto momento esta ilustración y
continúa siendo una de las favoritas. En todos mis años de ministerio no he encontrado una manera mejor para describir
los principios básicos del crecimiento en la vida cristiana, no sólo para saber cuales son, sino para saber también como
interactúan entre sí en un balance perfecto manteniendo a la persona
en continuo movimiento hacia la madurez espiritual. No quiero limi-
tar sus opciones en cuanto al entrenamiento de su discípulo, pero esta
ilustración ha funcionado muy bien en diferentes oportunidades, por
lo tanto la recomiendo fuertemente.
Cuando su discípulo halla captado este concepto en su men-
te, estará más motivado en las santas disciplinas del cristianismo, no
sólo porque usted se lo dijo, sino porque verá como funcionan juntas
para acelerar su crecimiento y mejorar su relación con Dios. Además,
pondrá un excelente fundamento para los próximos cuatro objetivos
de entrenamiento.
La primer cosa que debe hacer es tomar una hoja de papel de
8 ½” x 11” y dibujar una rueda que se parezca a la siguiente: Î
PRINCIPIOS BÁSICOS DE CRECIMIENTO 111
Dibuje la rueda abarcando casi la mitad de la hoja, dejando espacio para escribir versículos sobre y debajo de
ella. Luego comience a compartir la ilustración diciendo algo así:
USTED: Esta rueda representa su vida. La rueda recibe su poder o su fuerza del movimiento de su eje. Ahora
que es cristiano, ¿cuál diría usted que es la fuente de poder en su vida?
DISCÍPULO: No sé. . . ¿Jesús?
USTED: ¡Exacto! Cuando usted le pidió a Jesús que viniera a su vida, Él entró en forma del Espíritu Santo, e
hizo morada en su corazón.
Escriba Cristo en el eje de la rueda. Después comparta con su discípulo dos versículos que ilustren que tan im-
portante es que Cristo sea el centro de nuestras vidas. Para obtener algunas ideas en cuanto a los versículos, vaya a la
sección de la Base Bíblica para este Objetivo bajo el punto #1, “Crecemos mientras le damos alta prioridad a Cristo en
nuestra vida”, escoja dos de los versículos que tengan mayor significado para usted. Escriba (a la par de la rueda) esas
referencias y dos o tres resúmenes para cada uno. Enfatice que, así como sucede con la rueda del carro o la bicicleta, ¡si
no hay eje la rueda no tendrá poder, y por lo tanto, el vehículo no irá a ninguna parte! Para el cristiano, si Cristo no está
en el centro de su vida, o si el Espíritu Santo no está en el trono (si prefiere esta frase), el cristiano no experimentará el
Poder de Dios en su vida y, ¡no irá a ninguna parte tampoco!
En este momento usted deberá hacerle a su discípulo una de las siguientes preguntas, dependiendo de su ten-
dencia (positiva o negativa):
• ¿Cuáles son algunas de las cosas que usted podría hacer para estar seguro de que Cristo está siempre en el
centro de su vida? (Tal vez le gustaría hacer un repaso rápido de la llenura del Espíritu Santo, Objetivo de
Entrenamiento #3. Este sería el momento ideal).
• ¿Cuáles son algunas de las cosas que lo harán mantener a Cristo como centro de su vida? Ó ¿Cómo cree
usted que se vería su vida si Cristo no estuviera en el centro? (Si usted quisiera profundizar un poquito
más en esto, llévelo a Gálatas 5:19-21, las obras de la carne.
Luego, continúe con los rayos.
USTED: Así como sucede con la rueda normal, el poder se transfiere del eje al aro a través de los rayos. Exis-
ten cuatro actividades principales en el mundo espiritual por medio de las cuales el poder es transmitido
desde Cristo a nuestras vidas diarias.
Uno por uno, comparta lo que representan los cuatro rayos y añada dos versículos para cada uno (otra vez, eche
un vistazo a la sección de la Base Bíblica para sugerencia de versículos). Los dos rayos verticales representan nuestra
relación “vertical” con Dios a través de la Oración y la Palabra. Dios nos habla desde Su Palabra y nosotros responde-
mos a través de la oración. Los dos rayos horizontales representan nuestras relaciones “horizontales” con otras personas
a través del Compañerismo y el Testimonio. Nos relacionamos con los cristianos y le testificamos a los no-cristianos.
Comparta con su discípulo que, mientras nos involucramos en estas cuatro actividades, el poder de Cristo llegará a ser
operacional en nuestras vidas. Para usar una analogía diferente: abrimos un canal por medio del cual Su poder y presen-
cia puede fluir.
El aro externo representa “El Cristiano Obediente en Acción”, escriba estas palabras en el aro.
USTED: ¿Recuerda que en la ilustración de los pozos el granjero tenía un pozo bueno y otro malo y que podía
escoger entre los dos? Todo hubiera ido bien si decidía ignorar el pozo malo y escogía el bueno ¿no es
cierto? De la misma manera. Los cuatro rayos representan cuatro maneras que el poder de Cristo puede
estar accesible a los cristianos, pero no sirven de nada si el cristiano no escoge obedecer lo que Dios le ha
dicho que haga a través de estos rayos. La desobediencia hará que su rueda tenga un reventón (Juan
14:21; Juan 15:5-6).
Vea lo que dice aquí, “El Cristiano Obediente en Acción.” Para experimentar el poder de Dios, usted
debe de estar en acción. No hay razón de que Dios le envíe Su poder si usted no va a ninguna parte. Así
como no sería sabio llenar el tanque de gasolina del bote si se va a quedar en el muelle todo el año, ¿no es
cierto? Dios trabaja en nosotros y a través de nosotros mientras estamos en acción.
112 DISCIPULADO PERSONAL
Cuando termine su rueda deberá verse parecida a ésta:
Juan 15:5-7
Vid y Pámpanos
Filipenses 4:6-7
Mateo 6:33
Orar por todo
Buscar Su Reino
Juan 14:13-14
primero
Que el Hijo sea
glorificado
Hebreos 3:13
Mateo 5:16 Ánimo; para
Deja que tu luz brille protección
Romanos 1:16 Proverbios 27:17
El hierro se afina
No-vergüenza,
con hierro
PODER
2 Timoteo 3:16
Inspirada por Dios
Juan 14:21
Salmo 37:31
Obediencia = Amor
La Palabra en el
“Yo me manifestaré”
corazón, los pies no
resbalan
Ahora viene la clave de toda la ilustración. Frecuentemente, es en este momento donde la mente se aclara por-
que encuentra el balance de los principios básicos del crecimiento:
USTED: ¿Qué cree usted que pasaría si yo elimino uno de estos rayos? O ¿qué si uno de los rayos fuera dos
pulgadas más corto que el resto?
DISCÍPULO: Bueno, me imagino que no rodaría con suavidad. Sería un viaje irregular, y la rueda no tendría
balance.
USTED: ¡Está en lo correcto, como siempre! Es por esta razón que los corredores de bicicleta siempre se ase-
guran que los rayos sean fuertes y estén ajustados. Es lo mismo en la vida cristiana. Si uno de nuestros
rayos no está o es más corto o está torcido, nuestras vidas no correrán con suavidad. Digamos que leo mi
Biblia todos los días, soy bastante fiel compartiendo mi fe con otros, voy a la iglesia cada domingo, pero
sólo oro unos minutos a la semana. ¿Cómo cree que andaría mi vida?
DISCÍPULO: ¡No muy suave!
USTED: ¿Por qué no?
DISCÍPULO: Bueno me parece a mí que si usted no habla con Dios, no puede mantener mucha relación con
Él. Y si no hay relación, eso podría mantener a Cristo fuera del trono de su vida, y lo privaría del poder
que necesita para funcionar apropiadamente.
USTED: ¡Un seminarista graduado no lo hubiera podido poner mejor! (Debería considerar hacerle la misma
pregunta por cada uno de los otros tres rayos, dándole la oportunidad de pensar en cómo se vería su vida
si uno o más faltaran.) Por eso es que necesitamos hacer todo lo que podemos para mantener siempre un
buen balance en estas cuatro actividades. Si usted siente que su vida está un poco descuadrada de tiempo
en tiempo, haga un pequeño inventario e inspeccione sus rayos. Puede que le dé una buena pista en cómo
mantener su balance.
El Factor TIEMPO
1. No existen atajos. Tanto el crecimiento físico como el espiritual toman tiempo.
2. Dios se toma su tiempo. Cuando Dios quiere hacer algo grande, el tiempo siempre es un factor importante.
A Noé le tomó 120 años construir el arca; Dios puso a Moisés en 80 años de entrenamiento para prepararlo para guiar a
Su pueblo; Jesús, el Hijo de Dios, estuvo confinado a la disciplina de la carpintería por 30 años antes de que Dios lo sol-
tara porque estaba listo para iniciar Su ministerio; nada significativo sucedió en la vida de Abraham hasta que él estuvo
bien entrado en sus 80 años. Le tomó a Dios 40 años en introducir a los israelitas en la Tierra Prometida, una travesía
que tomaba no más de dos semanas.
3. La calidad requiere tiempo. Un celoso estudiante de seminario preguntó una vez al Dr. A. H. Strong que si
podía tomar un programa corto que lo capacitara y así obtener su entrenamiento teológico rápidamente y poder salir
pronto al campo misionero. Dr. Strong le contestó, “Claro que sí, pero, todo depende de lo que quiere ser. Le toma cien
años al roble para ser un árbol decente, pero una calabaza necesita sólo tres meses.
4. La complejidad requiere tiempo. En el reino animal, entre más pequeña es la forma de vida, más rápido al-
canza la madurez. Un ratón se considera completamente maduro después de pocos meses; un perro requiere sólo un par
de años; pero un humano le toma de dieciséis a veinte años – más que cualquier otro animal en la tierra. Calidad requie-
re tiempo, tanto en el mundo espiritual como en lo físico.
5. Sea paciente; el tiempo pasará. No espere llegar a ser “el Súper Cristiano” en un par de semanas. Necesita
ser paciente con usted mismo, conmigo, con Dios, y con el programa que Él tiene para usted. Algunas veces pareciera
que toma mucho tiempo crecer espiritualmente, y algunas veces usted se preguntará si existe algún tipo de progreso.
Pero usted ya ha pasado por esto antes, ¿no es cierto? Recuerda cuando tenía catorce años, y se preguntaba ¿llegaré al-
gún día a los dieciocho, la mágica edad para manejar? Bueno, llegó, ¿no es así? Y ningún tipo de lloriqueo ni de queja
hizo que el tiempo fuera más rápido, ¿cierto? Sólo tuvo que ver pasar el tiempo, ser paciente con el calendario, y el día
finalmente llegó. Es la misma cosa con el crecimiento espiritual. Le va a llevar tiempo.
El Factor de la Adversidad
1. La adversidad fortalece el crecimiento. ¿Alguna vez ha visto los anillos de un árbol bajo el microscopio? Si
lo ha hecho, habrá notado tanto los anillos oscuros como los claros. Los anillos claros son el crecimiento del verano.
Bajo el microscopio, usted observará que las celdas acostadas son grandes y gordas, porque fueron formadas cuando es-
taba caliente, habían suficientes nutrientes, la luz del sol y agua accesible. Muchos árboles crecen más en un solo mes
que en once meses combinados. Ahora, cuando mueve el microscopio hacia la madera oscura, notará que las celdas son
más pequeñas, arrugadas y duras. Esas celdas se formaron en el invierno – frío, oscuro, con menos acceso a comida y
agua. Así es, durante el invierno, cuando es inhóspito, un proceso llamado “solidificación” continúa. Si el árbol no pasa
por ese proceso, sería demasiado débil para mantenerse de pie durante las tormentas que vendrán de todas maneras. Su-
cede lo mismo con nuestro crecimiento espiritual. Dios nos permite pasar por la adversidad, no porque no nos pueda
ayudar, sino porque Él sabe que ese proceso nos hará más fuertes y además nos preparará para las cosas grandes que vie-
nen.
2. Espere tanto lo bueno como lo malo. Ni el crecimiento físico ni el espiritual son uniformes. Siempre existi-
rán altos y bajos, y usted debe esperarlos. Habrá experiencias que lo harán sentirse en la cima de la montaña como tam-
bién valles de desesperación; demolición antes de construir; espinacas y también pastel de fresas. Habrá momentos de
crecimiento cuando se siente cerca de Dios, y experimente victoria tras victoria. En otros momentos, se sentirá rancio y
estancado. Eso está bien – todos pasamos por tiempos de sequedad ahora o después. Pero, le puedo garantizar que si
usted mantiene a Cristo en el trono de su vida, esos tiempos secos no durarán.
3. No hay progreso sin esfuerzo. Observemos el mundo atlético. Cuando un atleta decide que quiere competir
en las Olimpiadas, él sabe que está entrando a tiempos duros – y lo acepta con disposición. Su entrenador le hace correr
hasta que su cuerpo le duele de la fatiga. Le hace levantar mucho peso. Le obliga a comer una variedad de comida insí-
pida. Le hace ir a la cama temprano y levantarse temprano. Y cuando el atleta dice que está cansado, el entrenador ni
114 DISCIPULADO PERSONAL
siquiera lo escucha; ¡sólo pone más dolor! El entrenador no hace todas estas cosas poco placenteras porque el atleta no
le cae bien – lo hace porque él sabe que esas disciplinas son las que le ayudarán al atleta a entrar en las Olimpiadas. Él
sabe que no hay atajos. Sin la adversidad, no hay victoria (1 Corintios 9:24-27). Piense en Dios como su “Entrenador
Celestial” que lo está entrenando para situaciones mucho más importantes y significativas que las Olimpiadas. Usted
necesita darse cuenta que vendrán tiempos duros en el programa de entrenamiento de Dios (2 Timoteo 3:12; Hebreos
12:5-11).
OTROS RECURSOS
Si a usted le gusta usar el tipo de estudio bíblico de “llenar los espacios en blanco” al estudiar los Principios
Básicos de Crecimiento ( o para algunos de los componentes individuales mencionados), aquí tienen algunos de donde
puede escoger:
“Los Diez Grados Básicos del Desarrollo Cristiana” una serie de estudios bíblicos de Cruzada Estudiantil y Pro-
fesional para Cristo:
• Grado 1, Lección 4: “Principios de Crecimiento”
• Grado 2, Lección 2: “Una Evaluación de su Propia Vida Espiritual”
Lección 5: “Una Vida Limpia”
• Grado 6, “El Cristiano y la Obediencia” (6 lecciones completas)
El Diseño del Discipulado - Es una serie desarrollada por Navegantes:
• Libro 2, Capítulo 1: “El Cristiano Obediente”
• Libro 3, Capítulo 1: “Madurez en Cristo”
Capítulo 2: “El Señorío de Cristo”
Capítulo 3: “La Fe y las Promesas de Dios”
TERMINANDO LA SESIÓN
Para cuando esta sesión termine, su discípulo deberá tener una idea general concerniente a lo que necesita saber
y hacer para facilitar su propio crecimiento espiritual. Pero no es realista pretender que este nuevo bebé en el Señor pue-
da comenzar mañana por la mañana una aplicación perfectamente balanceada de estos principios.
Hágale saber que por las próximas cuatro (o más) semanas ustedes dos estarán revisando en detalle cada uno de
los cuatro rayos de la Ilustración de la Rueda para que los pueda integrar mejor en su vida. Si su discípulo tiene cierto
trasfondo “religioso”, y sabe algo sobre la oración, del estudio de la Biblia, el compañerismo y del testimonio, existen
una gran probabilidad que por él mismo ya haya practicado algo de esto. Y presumo que se ha metido en la Palabra en
algún momento, por lo tanto recomiendo darle una lista de pasajes de la Escritura para que los estudie. También existe
una gran posibilidad de que ha orado y tal vez hasta ha hablando con otros de su fe. Si es así, ¡alabado sea el Señor!
PRINCIPIOS BÁSICOS DE CRECIMIENTO 115
Anímelo – pero hágale saber que usted estará cubriendo estas cosas básicas de una forma más profunda durante las
próximas cuatro sesiones juntos.
EVALUACIÓN
Aquí tiene una serie de preguntas que puede hacerle a su discípulo para ayudarle a determinar si él ha alcanzado
este objetivo de entrenamiento:
1. ¿Cuáles son las cosas que usted planifica hacer para que le ayuden a crecer espiritualmente?
2. Si Cristo no está en el trono de su vida, ¿cree que sería de ayuda permanecer involucrado en la oración, el
estudio bíblico, la relación y el testimonio? (Nuestra primera tendencia es contestar que “si” a esta pre-
116 DISCIPULADO PERSONAL
gunta, pero la respuesta que buscamos es “no”. Si Cristo no es el eje de nuestra rueda, no hay poder que
pueda ser transferido a través de los rayos. Como resultado, tratamos de vivir la vida cristiana con nues-
tras propias fuerzas, lo cual es imposible. Permanecer involucrado con los cuatro rayos puede que ayude a
su discípulo a regresar a Cristo al trono, lo cual será de tremendo beneficio, pero lo que queremos apuntar
aquí es que si Cristo no es primeramente Señor de su vida, es inservible para él tratar de crecer en las dis-
ciplinas cristianas.)
3. Si yo fuera un nuevo cristiano, ¿podría explicarme cómo puedo crecer en mi relación con Dios? ¿Podría
usar la ilustración de la rueda para hacerlo?
4. Si varias cosas comienzan a estar mal en su vida, y usted sabe que está haciendo lo mejor que puede para
obedecer y caminar con el Señor, ¿usted diría que esto es una buena o mala señal, en cuanto al crecimien-
to espiritual?
5. ¿Cuál debería ser nuestra actitud cuando enfrentamos tiempos duros en nuestra vida? (Un buen pasaje de
seguimiento para esta pregunta sería Romanos 5:3-4 o Santiago 1:2-4.)
6. Si estamos teniendo tiempos difíciles en varias áreas, ¿significa eso que Dios ha perdido temporalmente el
control de nuestras vidas?
7. ¿Por qué diría usted que el estudio bíblico (o la oración, o la relación, o el testimonio) es tan importante
para su crecimiento espiritual? ¿Por qué es tan importante la obediencia?
8. ¿Hay algo que usted pueda hacer para acercarse a la madurez espiritual, digamos, en seis meses? ¿Cuánto
cree usted que le tomaría llegar a ser espiritualmente maduro? (Es una pregunta bastante abierta para ter-
minar, pero ese es el punto. No tenemos la menor idea de cuanto va a durar el proceso. De hecho, el pro-
ceso de la madurez espiritual se extenderá por el resto de nuestras vidas.)
14 OBJETIVO DE ENTRENAMIENTO #6
COMPAÑERISMO
OBJETIVO
El discípulo tiene un entendimiento básico de la importancia del compañerismo cristiano y está comenzando a
manejar las funciones cristianas.
DEFINICIONES APLICABLES
Compañerismo: edificación, motivación y entrenamiento del cuerpo de Cristo por el cuerpo de Cristo.
117
118 DISCIPULADO PERSONAL
quier demanda del cerebro en perfecta coordinación. Claro, esto es suficiente para anonadar al más materialista de los
ateos.
¡Ay si el cuerpo de Cristo pudiera funcionar tan efectivamente como nuestros cuerpos físicos! Algún día, en la
eternidad, ésta será la realidad. Sin embargo, como lo vemos ahora es a través de un espejo ahumado. Pero esto no es
razón para que usted, su discípulo y yo no nos pongamos las mochilas al hombro y comencemos el ascenso hacia la
cumbre celestial. Con la ayuda del Espíritu, un poquito de conocimiento y un poco de disciplina y determinación perso-
nal, podemos llegar muy lejos ayudando al cuerpo de Cristo a nuestro alrededor a estar más cerca de esa idea celestial.
¿Cuál cree que será la reacción de su discípulo al ser expuesto por primera vez al compañerismo cristiano ge-
nuino? Si el grupo al cual lo lleva está funcionando como debería, lo que primero le llamará la atención será el amor
que vea, tanto entre los miembros del grupo como con él. Así debería de ser. Jesús dijo que la primera característica
que diferencia al cristianismo debe ser el amor (Juan 13:35). Su discípulo debe quedar agradablemente sorprendido que
la gente le preste atención, al querer conocerlo, y de cómo se alegran de su reciente decisión de confiar en Cristo.
Pero si no ha tenido mucho contacto con la iglesia antes, existe una gran probabilidad de que se sienta fuera de
lugar al principio. Aun si HA asistido a la iglesia en el pasado, puede que se sienta un poco incómodo, pensando, Esta
gente está cantado a cerca de Jesús y orando, qué locura. . . pero parece que lo hacen porque quieren, y no sólo por-
que es parte de la liturgia.
Mis primeras reuniones cristianas fueron un poco atemorizantes. Realmente amaba al Señor, pero, ¿teníamos
que cantar tanto para expresarlo? Fervientemente deseaba que ninguno de mis amigos se asomara por la ventana y me
viera con esos fanáticos. Pero con el paso del tiempo, y al observar la camaradería, los lazos de amistad y el amor incon-
dicional que tenían el uno por el otro y por mí, me atraparon – y no me importó quién lo supiera.
¿Qué tan cariñoso y amable es tu cuerpo local? Si llevaras a un nuevo creyente, ¿se sentiría bienvenido? ¿La
gente muestra amor e interés genuinos? ¿Deseará regresar? ¿O se sentirá como un forastero? ¿Acaso los miembros de
su grupo se mantendrían en sus argollas, le darían un saludo diplomático y luego regresarían a sus pequeñas sociedades
de interés mutuo? Ese tipo de compañerismo enquistado no es sano, al menos no para el recién llegado, ni tampoco para
los viejos. Si esto es lo que tiene para llevar a su discípulo, debería intentar cambiar al grupo, o irse a otro, o llamar a
varios miembros maduros y pedirles que hagan un esfuerzo especial para que el nuevo discípulo se sienta en casa. En
nuestra sociedad egocéntrica, extremadamente cambiante y desechable, ya es bastante complicado establecer relaciones
con personas decentes, como para que los cristianos con sus actuaciones las hagan aun más difíciles.
¿Qué debería incluir su primera reunión cristiana? La respuesta es obvia: un culto cristiano. Ahí puede cono-
cer muchos otros cristianos; puede ser favorablemente impresionado por la música y el gran piano; ser alimentado por la
Palabra de Dios durante el sermón del pastor; el bello edificio puede servirle de inspiración; etc. Muchas cosas se pue-
den decir del culto cristiano.
Por el otro lado, puede ser un poco abrumador. Su discípulo puede sentirse perdido en la multitud, en especial
si usted está encargado de una iglesia grande. O tal vez, como en una iglesia grande es difícil saber quién es nuevo y
quién no, puede que no sienta el amor y el calor que la gente le expresa al visitante, especialmente uno que acaba de co-
nocer al Señor. No digo que esto pasa en toda iglesia grande, pero es algo que definitivamente se debe tomar en cuenta.
Tal vez prefiera llevarlo a la reunión de un grupo pequeño, como un grupo familiar, un estudio bíblico, un reti-
ro, un desayuno o cena de la iglesia, o aun una reunión informal con varios amigos cristianos cercanos. Como lo men-
cioné antes, la primera reunión a la que me llevó mi discipulador fue en un pueblo vecino. Fuimos con diez personas
más de su iglesia a ver una película de Billy Graham. Durante aquella noche, fui impresionado por el lazo especial de
amor que habían entre ellos, y yo lo quería. Y sentí que ellos también lo querían.
Pero déjenme volver a enfatizar, “usted decide.” Usted y el Espíritu Santo conocen lo que pasa alrededor de su
iglesia en particular, por lo tanto puede anticipar cuales pueden ser las necesidades de su discípulo.
INTRODUZCA EL TEMA
No sólo es difícil para mí aconsejarle especialmente en lo que su discípulo debería experimentar en su primera
reunión cristiana, y es aun más difícil decir cuando. Usted puede invitarlo a que se una inmediatamente después de que
haya aceptado a Cristo, o puede que prefiera esperar una semana o dos. No puedo pensar en ninguna razón para esperar
más de tres semanas, pero bueno. Depende de usted y del Espíritu Santo determinar el tiempo.
Si tiene un grupo dinamita, con hermanos y hermanas que realmente caminan con el Señor y le darían la bien-
venida a su discípulo inmediatamente, ¡para qué esperar! Si tiene algún tipo de recelo sobre su grupo, y piensa que pue-
COMPAÑERISMO 119
de que tenga una experiencia negativa, atráselo por un tiempo. Tómese el tiempo necesario para construir una relación
fuerte con el discípulo y busque la oportunidad para contarle la triste realidad de que los cristianos también son pecado-
res.
La Invitación
La mayoría de la gente entiende que ir a la iglesia es parte del ser “religioso.” Por esta razón, el nuevo creyente
rara vez se pondrá renuente a involucrarse en la comunión con otros creyentes. Ellos esperan ser invitados. General-
mente, lo que debería de decir es algo como, “María, ¿te gustaría ir conmigo a la iglesia el próximo domingo?” O tal
vez, “Juanito, algunos de nosotros nos reunimos el jueves en la noche para un estudio bíblico, ¿quisieras acompañarnos
esta semana?”
Por otro lado, usted podría escoger ser más creativo y decir algo como:
USTED: Hm. Me pregunto qué eres.
DISCÍPULO: ¿Perdón?
USTED: ¿Cree que seas más del tipo “pie” o “mano”? ¿O tal vez tipo ojo?
DISCÍPULO: No sé de que me está hablando.
USTED: Tal vez eres un corazón. . . o hígado . . . o bilis . . .
DISCÍPULO: ¿Me puede explicar lo que está diciendo?
USTED: Claro, a través del Nuevo Testamento, se habla de los cristianos como partes del cuerpo de Cristo, y
me estaba preguntando dónde calzarías. ¿Tobillo?
DISCÍPULO: Yo sé donde calzaría usted – en las axilas (ja, ja). ¿Qué es lo que quiere decir con “partes del
cuerpo de Cristo”?
USTED: Mira aquí en 1Corintios 12:12-27 (o cualquier otro pasaje que desee usar, léalo o pídale que lo lea).
Te das cuenta, todos los cristianos son como un gran cuerpo sobrenatural, con Cristo a la cabeza. Así
como las distintas partes del cuerpo tienen diferentes funciones, cada uno de nosotros tenemos diferente
función en el cuerpo de Cristo, por eso somos importantes. Además, cuando una parte del cuerpo está do-
lida, el cuerpo entero se detiene para ayudarla. Así es como se supone que debe suceder en el grupo local
o iglesia. Oreja – tal vez seas oreja. ¿Le gustaría conocer a tu codo, dedo grande del pie y a la ceja iz-
quierda?
DISCÍPULO: ¿Cómo?
USTED: Ya sabes de lo que estoy hablando. ¿Te gustaría ir a la iglesia la próxima semana y conocer a los otros
miembros del cuerpo? Nunca es muy pronto para comenzar a aprender donde calzas.
INTRODUZCA EL TEMA
Su discípulo necesita entender que, contrario a lo que observe en la mayoría de las iglesias de hoy, el compañe-
rismo cristiano es más que decir, “Hola, ¿cómo está?” a un montón de conocidos casuales en la iglesia el domingo de
mañana, almorzar con un amigo cristiano para tejer o hablar de football. El centro del compañerismo es el amor. No un
amor superficial, casual o inconstante, sino dinámico, constante, decidido, no egoísta, aceptable, que pide cuentas, y pro-
vocativo (en el sentido bíblico). El tipo de amor sacrificial que Jesús tuvo por nosotros. El tipo de amor que causa que
los de afuera vuelvan a ver y digan, “¡Eso viene de Dios!” (Juan 17:23).
Por esta razón, creo que sería una buena idea ayudar a su discípulo a familiarizarse con el tema a través de ha-
cerlo leer el Concepto Transferible #8, “Cómo Puede Usted Amar por Fe”1 antes de que se vuelvan a reunir. Puede pe-
dirle que complete las preguntas de reflexión o de estudio bíblico antes de la reunión, o lo hagan juntos durante la prime-
ra parte de la sesión. Si su discípulo no tiene un buen entendimiento de lo que significa el verdadero amor cristiano, el
resto de lo que diga sobre el compañerismo no tendrá significado.
Otra manera potencialmente significativa para iniciar la conversación es pedirle que si él pudiese expresar, o si
ha escuchado, una buena definición de amor. O busquen la palabra en el diccionario, y vean si ustedes dos están de
acuerdo con esa definición, tal vez la podrían mejorar.
OTROS RECURSOS
Para obtener unos folletos buenos, básicos, del estilo de estudio bíblico de “llenar los espacios en blanco” sobre
los temas de compañerismo y amor, investigue los siguientes:
122 DISCIPULADO PERSONAL
“Los Diez Grados Básicos del Desarrollo Cristiano” una serie de estudios bíblicos de Cruzada Estudiantil y
2
TERMINANDO LA SESIÓN
Un concepto que es importante y que se debe enfatizar – no sólo al final, sino que a través de toda la sesión – es
que el compañerismo no tiene porque suceder solamente en una reunión formal, como es el culto dominical, un retiro, o
un estudio bíblico. Los principios de comunión gobiernan nuestras relaciones con otros cristianos todo el tiempo. Debe-
mos tomar la iniciativa para “hacer el bien . . . a los hermanos en la fe” no sólo en medio del culto, sino que también
durante la semana.
EVALUACIÓN
El mojón principal que está buscando esta vez es, obviamente, si está asistiendo regularmente a la iglesia. ¿Qué
sería regularmente? A la larga, usted no termina hasta que su discípulo esté asistiendo semanalmente. No pretendo de-
cirle a nadie cuantas veces a la semana debe ir a la iglesia. Algunos creen que una vez, el domingo, es suficiente, otros
votan por “cada vez que las puertas de la iglesia estén abiertas. Otra vez, usted y el Espíritu Santo necesitan hablar al
respecto y llegar a una decisión. Mi convicción personal es que un cristiano activo y en crecimiento debe estar
involucrado por lo menos una vez a la semana en tres dinámicas de grupo: uno a uno, grupos pequeños y grupos gran-
des.
Si está interesado en un poco más de evaluación para su discípulo para darse cuenta si ha entendido bien el con-
cepto del compañerismo cristiano o no, aquí hay algunas preguntas que le puede hacer:
1. ¿De todos los componentes del fruto de Espíritu Santo, cuál diría usted que debe ser el más evidente en su
relación con otros creyentes?
2. ¿Qué tanto se asemeja el compañerismo cristiano con ser parte de un cuerpo físico?
3. ¿Le incomoda estar cerca de otros cristianos? (Si es así . . . ) ¿Por qué?
4. ¿Qué debería hacer si usted sabe que un amigo cristiano tiene algo en contra suya?
5. ¿Puede pensar en alguien con quién tenga algún desacuerdo? (Si es así . . . ) ¿Qué sería lo correcto para
hacer?
6. ¿Es posible amar a Dios y al mismo tiempo no amar a nuestro hermano?
7. ¿Por qué cree que Jesús estaba tan interesado de que sus discípulos estuvieran unidos y en un mismo sen-
tir?
8. ¿De qué manera la comunión con otros cristianos nos prevé de ser “endurecidos” por el engaño del peca-
do?
15 OBJETIVO DE ENTRENAMIENTO #7
LA PALABRA
OBJETIVO
El discípulo tiene un entendimiento básico de la importancia del potencial bíblico, está familiarizado con el
plan físico de la Biblia, y ha comenzado a leerla por sí solo.
123
124 DISCIPULADO PERSONAL
necesita aprender a caminar, comunicarse, comer por sí mismo, ir al baño y pagar los impuestos por si mismo, en el Rei-
no de Dios, ningún ser humano es una isla, ni tierra sin costas. A mi parecer creo que son más bien una península.
Cuando nuestra hija Jessica era sólo un bebé, le dábamos todas sus comidas con cuchara. Mucho de eso alcan-
zaba el destino proyectado, mientras que el resto alcanzaba un trágico destino al estrellarse en la mesita de la silla de co-
mer. Lo más increíble de esto es que parecía que Jessica se sentía más satisfecha recogiendo lo que se caía y
comiéndoselo, que tomar lo que nosotros teníamos en su bonita y perfecta cuchara. Así que decidimos dejarla buscar su
propia manera. No fue una experta instantánea, y a menudo confundía su boca con las fosas nasales, los ojos, las orejas,
y las mejillas. Yo podía haberla alimentado con muchísima más eficiencia. Mi rama universitaria fue las ciencias bioló-
gicas, yo podía distinguir cada orificio craneal sin casi nada de dificultad. ¿Impresioné con eso a Jessica? De ninguna
manera. Ella estaba determinada a continuar con su tontería, a pesar de su bajo porcentaje de aciertos. Pero el tiempo
pasó, su puntería mejoró hasta el punto donde ella puede ahora alimentarse por sí misma completamente.
Espero que me estén entendiendo. Nuestro discípulo necesita aprender pronto como alimentarse por sí mismo.
Necesita meterse en la Biblia y descubrir las verdades que hay ahí para él. Tal vez no sea muy bueno al principio, pero
obtendrá mucho más satisfacción y emoción al experimentar por sí mismo lo que se siente cuando el Espíritu Santo ilu-
mina la Escritura, que lo que experimenta de segunda mano. Lo que descubra permanecerá en él por más tiempo. Pero
por un rato, necesitará el alimento de su cuchara para nutrirse, pero rápidamente anímelo a “comer” por sí mismo.
Mientras usted anima a su discípulo a meterse por sí mismo en la Palabra, recuerde que las cosas que Dios le
enseñe y las cosas que reportará, serán cosas de niños. Planifique con anticipación como va a reaccionar. Un brillante
mañana, su discípulo puede venir a decirle:
“¡Mira Carlos! ¡Escucha esto! Estaba leyendo la Biblia esta mañana y ¡BUM! ¡Me pegó como un rayo que
aparece de la nada! Aquí en Juan 1:12 dice que tenemos el derecho – ahora escuche esto – el derecho de ¡ser llamados
hijos de Dios¡ ¿Podrías creerlo? ¡Hijos de DIOS! ¿A caso esto no te sorprende? ¡HIJOS DE DIOS!”
“Hay Juan. Todo el mundo sabe eso. Yo mismo ya te lo había dicho hace como un mes. ¿Me estás diciendo
que te tomó todo este tiempo para entenderlo?”
El sonido que acaba de oír es el globo que se acaba de reventar. ¿Puede recordar cuando por fin usted pudo
entender algunas verdades básicas de la vida cristiana? ¿No es cierto que se sintió con deseos de brincar y dar volteretas
y salir volando a través de la ventana de su cuarto? Por favor, mostremos un poco de emoción y entusiasmo cuando
nuestros discípulos lleguen a ese mismo lugar. Carlos debió de responder algo así:
“Juan, creo que has puntualizado la verdad más increíble de toda la Biblia. Hasta me da escalofríos en sólo
pensarlo. ¡Hijos de DIOS! Aquí estamos, en rebelión contra Dios, y Él nos buscó, nos redimió, y ¡decidió hacernos sus
hijos! ¡Wow! Uno se asombra de lo vasto del amor de Dios para nosotros, ¡no es cierto!
La gente que ha editado la mayoría de los tratados y los panfletos han puesto por escrito muchos años de expe-
riencia, sabiduría y conocimiento, y saben exactamente lo que un nuevo cristiano necesita. Pero los tratados y panfletos
no son suficientes. No los desechen, pero tampoco se apoyen en ellos totalmente. Entre más pronto su discípulo se meta
en la Palabra de Dios – ahí es donde la comida que nutre puede ser encontrada.
INTRODUZCA EL TEMA
Una vez más en este objetivo de entrenamiento tenemos dos objetivos: (1) Queremos que nuestros discípulos
obtengan un entendimiento básico de lo que es la Biblia y del por qué es tan importante que la estudie; y (2) Queremos
ver a nuestros discípulos en la Palabra, obteniendo su nutrición de ella. Al igual que en el objetivo del Compañerismo
(Objetivo de Entrenamiento #6; capítulo 14), la idea aquí es introducir al discípulo en la lectura de la Palabra por sí mis-
mo dentro de la primera semana o algo así de nuestro primer contacto, y más tarde, mientras hablamos de la Ilustración
de la Rueda, toquemos en detalle lo vital que es la Palabra para él. Si usted ha estado siguiendo los objetivos de entrena-
miento en secuencia y ha seguido mis sugerencias en cuanto a las tareas para su discípulo, puedo asegurar que para este
momento él ya está pasando un buen tiempo escudriñando la Escritura. Estoy asumiendo, que usted en los primeros días
del caminar de su discípulo con Dios tocó algunos de estos conceptos que se mencionan en este objetivo de entrena-
miento. Otros los ha estado guardando para tratarlos con más profundidad en otro momento, el cual puede ser ahora.
No soy dogmático con el cuándo se debería comenzar a animar al discípulo a leer la Biblia por sí mismo. Algu-
nos discipuladores sentirán la convicción de llevar al nuevo cristiano a la Palabra inmediatamente después de la conver-
sión (muchos nuevos cristianos lo hacen se lo digan o no). Otros prefieren alimentarlos a cucharaditas por unos pocos
días o semanas antes de empujarlos a leer por sí mismos, quieren estar seguros de que el discípulo entiende unas cuantas
reglas de estudio bíblico antes de sumergirlo. Una vez más, tengo que decir que usted es el que decide.
LA PALABRA 125
Lo siguiente es una idea de cómo introducir a su discípulo en la lectura de la Biblia:
USTED: Ana, si usted quisiera aprender más en cuanto al Príncipe Carlos, ¿cómo lo haría?
DISCÍPULO: Bueno, me parece que la mejor manera de hacerlo sería ir a Inglaterra, y tratar de tener una cita
con él y hacerle un montón de preguntas.
USTED: Espera un momento. ¿Cómo pagarías el viaje a Gran Bretaña sí a penas puedes pagar tus mensualida-
des en la universidad?
DISCÍPULO: Hmmm. Creo que tienes razón. Me imagino que puedo leer algunos libros sobre él.
USTED: Eso parece muchísimo más fácil – y no tan caro. Pero, ¿cómo sabrías que libros comprar? Algunos
podrían darte buena información, pero otros pudieron ser escritos por charlatanes que en realidad no saben
nada del Príncipe.
DISCÍPULO: Buscaría las referencias del autor; trataría de encontrar uno que fue escrito por alguien que dedicó
mucho tiempo estudiando al Príncipe, o mejor aun, alguien que lo conoció personalmente.
USTED: Ese lo compraría yo. Bueno, ¿y qué si quisieras aprender sobre Dios? ¿Dónde podrías encontrar más
sobre Él?
DISCÍPULO: Supongo que debería buscar algunos libros sobre Dios.
USTED: Te hago la misma pregunta otra vez: ¿Cuáles? ¿Cómo sabrías cuáles son los correctos, y cuáles pue-
den estar tratando de tomarte el pelo?
DISCÍPULO: Bue-e-e-no . . .
USTED: Tengo una sugerencia. Solamente hay un libro que es la fuente de todos los libros que escriben sobre
Dios, y es la Biblia. Fue escrito por personas que estuvieron muy cerca de Dios, y por cierto, 2 Timoteo
3:16 dice que cada uno de los escritores de la Biblia escribieron cosas que fueron dirigidas directamente
por el mismo Dios. Si quisieras averiguar cosas sobre Dios, deberías de ir al libro que reclama ser la reve-
lación directa de Dios al hombre. ¿Ya has comenzado a leer la Biblia por tu propia cuenta?
DISCÍPULO: No he sabido donde empezar. Unos poco años atrás intenté leerla, pero me desanimé con todos
esos “si haces” o “si no haces” del libro de “Flevíticos”, o como quiera que se llame.
USTED: Sé a lo que te refieres. El Antiguo Testamento tiene muchas leyes que fueron hechas para la nación de
Israel, y páginas y páginas de pasajes importantes están ahí para nosotros hoy, pero a veces son difíciles
de encontrar entre toda esa teología pesada. Entre más aprendas sobre Dios y la Biblia, esos pasajes serán
más fáciles de encontrar y comenzarán a ser mucho más interesantes. Serás capaz de entenderlos. Pero
para cuando se comienza, es mejor iniciar con el Nuevo Testamento. ¿Te molestaría si te doy algunas su-
gerencias donde podrías comenzar a leer?
DISCÍPULO: Bueno, esta bien. Pero, ¿por qué necesito comenzar a leer la Biblia? Estoy aprendiendo todo lo
que puedo manejar por ahora en nuestras reuniones.
USTED: Me alegra que estás aprendiendo bastante – para eso estoy aquí. Pero la Biblia es como “comida” para
tu espíritu. Mira lo que dice Mateo 4:4: “Jesús contestó, Escrito está: No sólo de pan vive el hombre, sino
de toda palabra que sale de la boca de Dios.” Desde ahora en adelante, como cristiano, necesitas alimen-
tarte continuamente por ti mismo con esta comida espiritual y así permanecer saludable y crecer. De la
misma manera como un bebé necesita aprender a alimentarse por sí mismo, necesitamos aprender a ali-
mentarnos como seres espirituales que somos. Además, por este camino, vas directamente a la fuente, la
Biblia.
Estudio fuertemente para asegurarme que las cosas que te esté pasando sean adecuadas, pero siempre existe la
probabilidad de que cometa algún error. Si adquieres el hábito de depender de la Biblia como tu única fuente, y no en
mi o en otra persona, habrá menos probabilidad de que en algún momento te desvíes.
Aquí están los puntos más importantes para cubrir en el intercambio:
1. El conocimiento que recibe (en cualquier tema) es sólo tan bueno como lo es su fuente, así que revise su
fuente primero.
2. La única fuente para conocer acerca de Dios y de Cristo es la Biblia.
126 DISCIPULADO PERSONAL
3. Aunque los libros que hablan de Dios son útiles, no son sustitutos de la Biblia.
4. Las fuentes de la Biblia no son censurables, fueron hombres que conocieron a Dios muy bien – y entre
ellos, Dios mismo, ya que Él supervisó su redacción.
5. Algunas partes de la Biblia son difíciles de entender y de cierto modo no son interesantes para el nuevo
creyente. Pero otras partes captarán su atención y serán de gran ayuda. El nuevo creyente debería de con-
centrarse en esos pasajes primero.
6. Toda la Biblia es esencial para crecer.
7. Cada cristiano debe ser capaz de estudiar la Biblia por sí mismo, y no debe depender en otros para su
completa alimentación espiritual.
D. La Estructura de la Biblia
Conduzca a su discípulo a la tabla de contenido de la Biblia y muéstrele como está constituida. Tal vez debería
dibujar líneas y cuadrados ahí mismo en la Biblia para que pueda recordar. Pero sería bueno pedir permiso antes.
Antiguo Testamento
1. La Ley:
Génesis; Éxodo; Levítico; Números; Deuteronomio.
2. Históricos:
Josué; Jueces; Ruth; 1 y 2 Samuel; 1 y 2 Reyes; 1 y 2 Crónicas; Esdras; Nehemías; Ester.
3 Los Poéticos:
Job; Salmos; Proverbios; Eclesiastés; Cantares.
4. Los Profetas:
a. Profetas Mayores: Isaías; Jeremías; Lamentaciones; Ezequiel; Daniel.
b. Profetas Menores: Oseas; Joel; Amós; Abdías; Jonás; Miqueas; Nahum; Habacuc; Sofonías; Hageo;
Zacarías; Malaquías.
Nuevo Testamento
1. Históricos:
a. Los Evangelios – se refieren a la vida de Jesús: Mateo; Marcos; Lucas; Juan.
b. Hechos de los Apóstoles – se refiere a la Iglesia en sus comienzos después de la resurrección de Jesús.
2. Las Epístolas – “cartas” escritas por diferentes apóstoles a iglesias, grupos de personas o individuos: Ro-
manos; 1 y 2 Corintios; Gálatas; Efesios; Filipenses; Colosenses; 1 y 2 Tesalonicenses; 1 y 2 Timoteo;
Tito; Filemón; Hebreos; Santiago; 1 y 2 Pedro; 1, 2 y 3 Juan; Judas.
3. El Apocalipsis – profecía concerniente al final de los tiempos – Revelanción
Como se puede ver en la ilustración anterior, existen cinco maneras que podemos usar para obtener asirnos con
firmeza de la Palabra de Dios: oir, leer, estudiar, memorizar y meditar. Una buena manera de demostrar esto gráfica-
mente es trazar el contorno de su mano en una hoja de papel demarcando cada dedo apropiadamente. Asegúrese de
identificar cada dedo de la misma manera como está en el dibujo – hay razón para esto, como lo veremos pronto.
Después, recorra los dedos uno a uno, busque el versículo que se aplica a cada método y escriba la referencia a
la par de su correspondiente dedo. Escójalos de la siguiente lista:
Oír: Romanos 10:17; Lucas 6:46-49; Lucas 11:28
Leer: Deuteronomio 17:19; Apocalipsis 1:3
Estudiar: Hechos 17:11; 2 Timoteo 2:15
Memorizar: Salmo 37:31; Salmo 119:9-11
Meditar: Josué 1:8; Salmo 1:2-3
Finalmente, explíquele que, si deseamos agarrar fuertemente un objeto, necesitamos todos los dedos de la
mano. Si tratamos de sostener algo con sólo dos o tres dedos, el objeto es fácilmente arrebatado (demuéstrelo mientras
habla de ello.) De la misma manera, debemos usar cada uno de estos métodos de acercamiento bíblico si deseamos ob-
tener un agarre firme de la Palabra de Dios. Necesitamos oír, leer, estudiar y memorizar. Después, al igual que nuestro
dedo pulgar se contrapone a los otros dedos (puede tocar fácilmente a cada uno de nuestros dedos), la meditación debe
LA PALABRA 131
tocar cada una de las otras áreas: debemos meditar en lo que oímos, meditar en lo que leemos, meditar en lo que estudia-
mos y meditar en lo que memorizamos. No es bueno que la Palabra de Dios entre por un oído y salga por el otro. Nece-
sitamos que se asiente en nuestros corazones a través de la meditación.
Notará que, en la ilustración, entre más grande es el dedo, la actividad correspondiente es más fuerte. Es más
sencillo escuchar que leer, leer que estudiar, etc. Por otro lado, también es cierto que entre más grande es el dedo, la ac-
tividad es más efectiva. Los expertos nos dicen que después de un período de 24 horas, podemos recordar sólo un 5%
de lo que oímos, un 15% de lo que leemos, un 35% de lo que estudiamos, y un 100% de lo que memorizamos. Ya que
esto es cierto, deberíamos ser sabios y darle una atención especial a la actividad más efectiva.
OTROS RECURSOS
Si a usted le gusta que su discípulo trabaje con estudios del tipo “llenar los espacios en blanco” considere usar
algunos de los que recomiendo a continuación:
“Los Diez Grados Básicos del Desarrollo Cristiano3” de Cruzada Estudiantil y Profesional para Cristo:
• Grado 1, Lección 5: “La Autoridad Cristiana”
• Grado 5: “El Cristiano y la Biblia” (aplican las siete lecciones)
• Grado 7, Lección 4: “El Testimonio y la Palabra de Dios”
• Grado 9: “Explorando el Antiguo Testamento”
• Grado 10: “Explorando el Nuevo Testamento”
El Diseño del Discipulado - Es una serie desarrollada por Navegantes:4
• Libro 2, Capítulo 2: “La Palabra de Dios en su Vida”
• Libro 5, Capítulo 2: “La Autoridad de la Palabra de Dios”
• Libro 7: “Nuestra Esperanza en Cristo” (Capítulo de análisis del estudio de 1 Tesalonicenses)
TERMINANDO LA SESIÓN
Todo esto puede ser mucho material para cubrirlo en una sola sesión, especialmente si usted decide echarle un
vistazo a todos los versículos que di. Si pudiera ser de ayuda, tómese dos sesiones para cubrirlo todo.
Cuando halla terminado, sin embargo, el objetivo primario es que su discípulo se comience a interesar por sí
mismo en la Palabra. En este momento converse con él de la importancia de tener un tiempo de quietud, o devocional,
un tiempo que él pueda apartar cada día para comunicarse con Dios a través de la oración y el estudio bíblico. A estas
alturas, usted tal vez quiera introducir el tema formalmente diciendo algo como lo siguiente, “Déjame contarte sobre lo
que es tener un tiempo de quietud”, o tal vez preferirá mantener la informalidad, “¿Por qué no inicias mañana a hacerte
el hábito de leer un capítulo de la Biblia cada mañana?” Lo que a usted le parezca mejor. Personalmente, prefiero espe-
rar hasta después que he tenido un tiempo de conversación extensa con mi discípulo sobre la oración antes de sugerir el
tema de un tiempo formal de quietud, pero decida usted. Daré más detalles en el cómo hacer para que su discípulo co-
mience un tiempo de quietud al final del Objetivo de Entrenamiento #8 La Oración (capítulo 16), si usted lo necesitara.
EVALUACIÓN
Hágase usted mismo estas preguntas:
1. ¿Entiende mi discípulo lo importante que es que se involucre en una adquisición bíblica regular?
2. ¿Ve la Escritura como un nutriente espiritual indispensable para el crecimiento?
3. ¿Tiene un entendimiento básico del contenido de la Biblia? ¿Conoce el significado de cada una de las sec-
ciones grandes?
4. ¿Ha empezado a leer la Biblia por sí mismo?
Si usted puede contestar cada una de esas preguntas afirmativamente, entonces este objetivo de entrenamiento
ha sido alcanzado. Si necesita un poquito más de información de parte de su discípulo para determinar su respuesta,
aquí tiene algunas preguntas que puede hacerle:
1. Si un budista te preguntara, “¿Quién escribió la Biblia?”, ¿cómo le contestarías?
2. ¿Crees que la Biblia es la verdad? ¿Toda ella?
3. ¿Crees que es importante leer la Biblia? ¿Por qué sí o por qué no?
4. ¿Cuánto tiempo crees que un cristiano debería dedicar a la lectura de la Biblia? ¿Cada día? ¿Cuánto
tiempo por día? ¿Así de largo (o tan poquito)?
5. ¿Cuáles son los beneficios que recibes de la lectura de la Biblia? ¿Existen algunos beneficios que usted
ha escuchado que todavía no has experimentado?
6. ¿Has estado leyendo la Biblia últimamente? (Si es así) ¿Qué es lo que has estado leyendo? ¿Qué has
aprendido? ¿Qué fue lo más maravilloso o la cosa más emocionante que has aprendido recientemente de
la Biblia?
7. Si usted ha tenido una opinión personal sobre algo por mucho tiempo, y luego descubres que la Biblia
contradice esa opinión, ¿cómo responderías a eso?
8. Si usted lee algún escrito de el líder de una gran religión mundial, digamos un budista, y pareciera que
contradice lo que sabes que está en la Biblia, ¿cómo reaccionarías a eso?
9. ¿Cómo sabes que lo que está en la Biblia es realmente la verdad?
10. ¿Por qué existe un “Antiguo” y “Nuevo” Testamento?
11. ¿Qué cosas podrías hacer para asimilar la Palabra de Dios?
16 OBJETIVO DE ENTRENAMIENTO #8
LA ORACIÓN
OBJETIVO
El discípulo tiene un entendimiento básico de la importancia de la oración, conoce los fundamentos de la ora-
ción, y ha comenzado a orar por su propia cuenta.
DEFINICIONES APLICABLES
A continuación encontrará varias definiciones de oración dadas por gente que sabe de lo que está hablando.
Pensé que podría encontrarlas interesantes:
Rosaline Rinker: “La oración es el diálogo entre dos personas que se aman.”1
William R. Bright: “La oración es simplemente hablar con Dios.”2
S.D. Gordon: “La oración es la palabra comúnmente usada para definir todo trato con Dios.”3
Dick Eastman: “Orar es verbalizar nuestra completa dependencia en Dios concerniente a todos nuestros esfuer-
zos.”4
Andrew Murray: “La oración es la relación con el Invisible y Más Santo. Los poderes del mundo espiritual
están puestos a nuestra disposición. Es la propia esencia de la verdadera religión, el canal de toda bendición, el secreto
de poder y de vida.”5
Robert A. Cook: “La oración es un llanto. El médico espera que el recién nacido llore, como primera evidencia
de vida. Si no llora, lo sacude o le pega para producir el llanto. Si continua en silencio, pronto estará muerto.”6
133
134 DISCIPULADO PERSONAL
Dr. Jack Taylor: “La oración es debilidad conectada a una fuerza. La oración es decir, ‘yo no puedo, pero Tu si
puedes,’ y conectarse al ‘Yo lo haré’ de Dios.”7
INTRODUZCA EL TEMA
El “cómo” usted entra al tema de la oración dependerá de cuanta experiencia “pre-cristiana” tenga su discípulo,
como lo mencionara antes. Puede que usted comience haciéndole algunas preguntas que lo intriguen en cuanto a la ora-
ción y así aumentar el interés, y también para descubrir donde está en su vida espiritual. Aquí hay unas cuantas sugeren-
cias (no tiene que utilizarlas todas):
• ¿Cuál ha sido su trasfondo en cuanto a la oración? ¿La practica a menudo?
• ¿Ha visto a Dios contestando alguna oración suya? ¿Qué en cuanto a otros?
• ¿Realmente crees que Dios oye y contesta nuestras oraciones?
• ¿Por qué oras? ¿Sólo por las cosas grandes, u oras por cualquier cosa que se te venga a la mente?
• ¿Por qué crees que oran los cristianos? ¿Por qué crees que Dios quiere que oremos?
• ¿Crees que a Dios le importa si estamos de pie, sentados o arrodillados cuando oramos? ¿Es necesario
cerrar los ojos?
• ¿Has orado en voz alta ante un grupo de gente? ¿Estabas nervioso?
1 Crónicas 4:10 (por bendición) Mateo 6:11 (por las necesidades diarias)
2 Crónicas 7:14 (por la paz nacional) Marcos 11:22-23 (por lo imposible)
2 Crónicas 14:11 (por ayuda en momento de cri- Marcos 11:24 (por tus anhelos)
sis)
Lucas 18:13 (por misericordia)
Salmo 18:1 (para expresarle amor a Dios)
Lucas 22:31-32 (por los amigos)
Salmo 22:1-2 (en angustia)
Juan 15:16 (por su ministerio)
Salmo 52:9 (para expresar gracias a Dios)
Romanos 10:1 (por la salvación de otros)
Salmo 143:8 (por dirección)
Filipenses 4:6-7 (por TODO)
Salmo 143:9 (por protección)
Santiago 1:5 (por sabiduría)
Salmo 143:10 (por instrucción)
Santiago 5:16 (por sanidad física)
Salmo 145:1-2 (en alabanza)
1 Juan 1:9 (por perdón)
Proverbios 3:5-6 (por guía)
1 Juan 5:4 (por CUALQUIER COSA)
Mateo 5:44 (por los enemigos)
LA ORACIÓN 137
• Cualquier momento:
Éxodo 15:11-12 (cuando se está “arriba”) Salmo 88:1 (día y noche)
2 Samuel 12:15 (cuando se está “abajo”) Marcos 1:35 (antes del amanecer)
1 Reyes 18:36 (en la batalla espiritual) Lucas 10:21 (espontáneamente)
Salmo 5:3 (en la mañana) Hechos 16:25 (en pruebas)
Salmo 51:3-4 (cuando hemos pecado) 2 Timoteo 1:3 (de noche y de día)
Salmo 55:17 (en la noche, mañana, mediodía)
• Cualquier lugar:
1 Samuel 1:9-10 (en la casa de Dios) Mateo 18:19-20 (con otros)
Mateo 6:6 (en el cuarto) Marcos 1:35 (solo)
Mateo 14:23 (en las montañas)
8. No podemos esperar que Dios conceda nuestras peticiones si no estamos dispuestos en con-
cederle las suyas (la importancia de la obediencia).
Un padre habló con su hijo un domingo al desayuno:
“Rogelio, hoy es el día que me prometiste cortar el césped. Me gustaría que lo hicieras antes del medio día,
porque los Ramos vienen a almorzar.”
“De ninguna manera papá. Eso es mucho trabajo para alguien como yo. Tendrás que buscar a alguien más
para que lo haga. Por cierto, no para cambiar el tema, pero Pablo y yo queremos ir a la playa esta tarde. ¡La mar está
perfecta hoy! ¿Podrías llevarnos para no tener que caminar con nuestras tablas?
¿Cuál creería usted que será la respuesta del papá? Obviamente, si Rogelio no está dispuesto a obedecer a su
padre, el papá no estará muy emocionado en hacerle favores a Rogelio. El papá de Rogelio le gustaría ver a Rogelio dis-
frutando del sol y del mar, pero si es un buen padre, sabrá que aprender responsabilidad y respeto por la autoridad es
más importante que un bronceado y buenas olas.
Nuestro Padre Celestial tiene los mismos sentimientos. ¿Cómo podemos esperar que Dios vea favorablemente
nuestra petición cuando nos dice por medio de la Biblia y de su Espíritu Santo, “Hijo mío, esto es lo que quiero que ha-
gas,” y nosotros respondemos con un “No. Pero aquí está lo que yo quiero que Tu hagas”? Por lo tanto, una cosa para
tomar en cuenta sería que: nuestra disposición para obedecer a Dios va a influenciar la efectividad de nuestra vida de
oración.
Salmo 37:4 Proverbios 28:9 1 Juan 3:22
Proverbios 15:8 Mateo 6:14-15
9. Debemos tratar con cualquier pecado conocido en nuestra vida antes de esperar que Dios
oiga y actúe con relación a nuestras oraciones
Sería tonto pensar que usted y yo nunca le vamos a desobedecer a Dios. Somos humanos; por ende, vamos a
fallar de vez en cuando. Nuestra meta es, mientras maduramos en el Señor, equivocarnos menos y menos. Por lo tanto,
cuando estamos conscientes de que estamos desobedeciendo a Dios, arreglemos las cosas con Él lo más pronto posible.
Si no, nuestra conversación con Dios será muy parecida a esta conversación entre estos amigos:
“¡Hola Miguel! ¿Cómo estás? ¿Quería preguntarte si me puedes prestar tu camión la próxima semana? Tengo
que ayudarle a un amigo a cambiarse de casa y . . .”
“Ay, Daniel, ¿sabes que estás sangrando?
“¿Cómo? ¿Dónde? ¿Ah, esto? No es nada. Como iba diciendo, tienes un camión ideal para mudanzas, y yo
estaba pensando . . .”
“Daniel, ¡eso realmente te está sangrando mucho! De hecho, creo que te cortaste una arteria. ¿No crees que
debes cuidártela?
“¡No! No es gran cosa. Estoy bastante seguro que dejará de sangrar pronto. Ahora, sobre el camión. Me en-
canta como maneja esas grandes cargas y . . . “
140 DISCIPULADO PERSONAL
“Mira querido amigo, no creo que deberíamos estar hablando aquí de camiones cuando tu brazo está por caerse.
¡Has perdido como un litro de sangre sólo estando aquí de pie! ¡Fíjate!
¡Estoy seguro que no hay nada de que preocuparse! ¡Si realmente estás interesado en mi, me prestarías el ca-
mión!”
“¡No señor! ¡No voy a escuchar ni una palabra más hasta que no me dejes llevarte a un hospital para que te cui-
den ese chorro!”
Lo que pesaba en el corazón de Daniel era conseguir el camión para ayudar a otro amigo. Una noble causa,
pero Miguel sabía que si Daniel no se cuidaba su herida pronto, no viviría para ayudar con la mudanza. Nosotros tam-
bién tenemos un montón de cosas importantes en nuestro corazón cuando venimos a Dios en oración, pero nuestro Padre
no se va a tomar el tiempo de escucharlas si ve pecado en nuestras vidas que nos está haciendo añicos.
Salmo 22:3-5 Salmo 139:23-24 Isaías 59:2
Salmo 66:18 Proverbios 28:13 1 Juan 1:9
11. Debemos acercarnos a Dios en humildad, recordando con quién estamos conversando
¿Has escuchado alguna vez a alguien refiriéndose a Dios como “el Hombre de arriba”, o “el Jefe”? Esto puede
indicar que no tiene una genuina relación con el Señor. Aunque Dios nos ama mucho, y desea una relación íntima con
nosotros, no es nuestro “gran amigote”. Es muy importante que recordemos que Él es el Todopoderoso, el Soberano, el
Dueño del universo, y que es digno de nuestro mayor respeto y reverencia. Al leer la Biblia, encontrará que a Dios le
agrada cuando venimos a Él en humildad, pero tiene el efecto contrario cuando mostramos orgullo.
2 Reyes 22:10-13 Salmo 10:17 Santiago 4:10
2 Crónicas 7:14 Salmo 51:16-17 1 Pedro 5:5-6
1 Crónicas 34:27 Lucas 18:9-14
LA ORACIÓN 141
12. Podemos sentirnos valientes y confiados al acercarnos a Él en oración, porque nos acepta
completamente como sus hijos
Puede que sea difícil balancear este concepto (acercarnos confiadamente) con el anterior (acercarnos con hu-
mildad), pero cuando uno lo medita, no es tan difícil. Es como un sirviente huérfano que fue adoptado por un rey bene-
volente. Hasta donde tiene memoria, el niño ha reverenciado al rey. Ha visto al rey como la personificación de la sabi-
duría, poder, valentía, y amor. Después del impresionante día en que el rey lo adoptó, los sentimientos del niño con res-
pecto al rey no se devaluaron. Es más, su opinión del rey se elevó aun más que nunca. Sólo que ahora no tenía que es-
perar del otro lado de la puerta, temiendo por su vida si es que el rey se enojaba. Ahora él puede acercarse al rey cuando
quiera, porque ahora también es su “papito”. No va ha llegar saltando como un escolar descontrolado en su último día
de clases, ni aullando, ni gritando, ni tampoco meciéndose en los candelabros por el respeto que le tiene al rey y a su ofi-
cina. Por el otro lado, tampoco llegará tímido, sobresaltado, ni con miedo de perder la cabeza, porque sabe que este
hombre lo ama suficiente como para hacerlo su hijo.
La analogía se aplica a nuestra relación con nuestro Padre Celestial. Nos acercamos en oración con un corazón
humilde, por su posición de Creador, Salvador, Rey de reyes y Señor del universo, pero también nos acercamos valiente
y confiadamente porque nos ama lo suficiente como para morir por nosotros, adoptarnos y exaltarnos. Además, ¡Él dijo
que podíamos hacerlo!
Efesios 3:12 Hebreos 4:15-16 Hebreos 10:19-22
13. Cuando ore en voz alta, no trate de impresionar a quién lo pueda estar escuchando; sólo
concéntrese en hablar con Dios
Es una lástima que alguna gente, cuando ora en voz alta y en público, intentan hacer un discurso en beneficio
de los escuchas. No están hablando con Dios del todo. Lo que les interesa es que cuando terminen se diga, “Vaya, no
fue esa una oración bonita. Que elocuente que es usted. Alguien con esa facilidad debe ser un hombre justo.” La ora-
ción es un ejercicio donde se habla con Dios, y Dios oye. Si está interesado en hablar con la gente, está bien, pero eso
no es oración. Eso es un sermón.
Esto no significa que la oración en público debe ser evitada. Todo lo contrario, Jesús nos animó a orar en voz
alta junto con otros creyentes. Hay algo especial y poderoso en la oración en grupo. Es sólo que debemos tener cuidado
con nuestra motivación durante la oración pública. Si estamos intentando impresionar a la gente con nuestra oración,
puede que lo logremos, pero Dios no lo estará. ¡Y habremos perdido nuestra audiencia meta!
Mateo 6:6 Lucas 20:46-47
OTROS RECURSOS
Como lo mencioné al final del capítulo 13, el Concepto Transferible #9, “Cómo Orar,” puede ser un excelente
material para que su discípulo lea antes de la reunión, o puede dárselo para que se lo lleve a la casa como tarea. Si no,
usted debiese leerlo para su edificación y educación.
Para unos buenos estudios bíblicos del tipo “llenar los espacios en blanco” sobre el tema de la oración puede
revisar las siguientes lecciones:
“Los Diez Grados Básicos del Desarrollo Cristiano” de Cruzada Estudiantil y Profesional para Cristo:
• Grado 4, “El Cristiano y la Oración” (las 6 lecciones)
• Grado 7, Lección 5: “El Testificar y la Oración”
El Diseño del Discipulado - Es una serie desarrollada por Navegantes
• Libro 2, Capítulo 3: “Conversando con Dios”
• Libro 3, Capítulo 3: “La Fe y las Promesas de Dios”
TERMINANDO LA SESIÓN
Tiempo a solas. Como ha pasado mucho tiempo hablando con su discípulo sobre la importancia de la comuni-
cación en su relación con Dios durante este objetivo de entrenamiento, ahora sería un buen momento para presentarle la
idea de un tiempo diario a solas con Dios, si es que todavía no lo sabe.
Existen dos aspectos muy importantes en el tiempo a solas: (1) educación y (2) comunicación. Tienen varias
facetas. Puede verlas como el desarrollo de la cabeza y del corazón; como un acto de disciplina personal y un acto de
amor; enfocado en el crecimiento y en Dios; como un estudio bíblico y la oración. Ambos son necesarios. Si el tiempo
a solas de una persona es sólo educación, sin comunicación, terminará con una fuerte teología pero sin corazón o fuego,
sin una relación verdadera. Si es sólo comunicación y no-educación, el resultado es un “bebé” compasivo quemado, sin
sustancia o profundidad en su caminar con Cristo. Como en muchas otras cosas de la vida cristiana, lo que buscamos es
un balance. Comparta esto con su discípulo.
Aquí tiene otros aspectos vitales para discutir con su discípulo:
¿Qué del contenido? Manteniendo la idea de educación / comunicación, sugiérale a su discípulo que pase la
mitad del tiempo leyendo y la otra mitad orando.
Lectura de la Biblia. Regrésese al capítulo 15 (Objetivo de entrenamiento #7) sobre la Palabra y lea la sección
con el título “Después Dígale a su Discípulo donde comenzar a Leer” en la parte de Sugerencias para Crecer. Podría
escogerle un libro de la Biblia para que empiece a leer, le puede asignar pasajes semanales o podría combinar ambos. Si
va a comenzar a leer un libro, recomiéndele que sea un capítulo a la vez para que lo asimile apropiadamente.
Oración. Ayúdele a comenzar una lista de oración. Su lista no sólo deberá contener súplicas, sino también ac-
ciones de gracias y algo por lo cual pueda adorar y alabar a Dios. En realidad puede animarlo a mantener un diario de
oración, donde escriba lo que se le ocurra por lo cual quiera alabar y agradecerle a Dios. Enséñele a “orar a través” de
un Salmo. En la parte de súplica, ayúdelo a pensar en cosas que le gustaría ver a Dios actuando en su vida, en la vida de
sus amigos, un familiar y en el mundo.
¿Cuánto tiempo? Cuando uno está intentando establecer un hábito – ya sea trotar, pintar, lecciones de piano, o
cirugía cerebral – es mejor comenzar despacio. Una buena meta para muchos cristianos son 10 minutos. La mayoría de
la gente puede sobrevivir sacando un cuarto de hora al día para comunicarse con su Señor y Maestro. Para algunos, pue-
de que no sea siquiera suficiente tiempo. Genial. Que sean 20 minutos. Pero es mejor comenzar con un tiempo corto
que pueda estirar y no al revés. Diez minutos, le dará cinco minutos para leer la Palabra y cinco para orar. Se asombrará
lo rápido que se le fue el tiempo, y les motivará a sacar más tiempo.
¿Qué tan a menudo? Desde el puro comienzo, necesita inculcarle a su discípulo que el tiempo a solas es vital
para su crecimiento. Hacemos las cosas vitales todos los días. Respiramos, comemos, dormimos, nos lavamos los dien-
tes, leemos las tiras cómicas (espera un momento . . .) Pasar tiempo con Dios regularmente es importante para nuestra
salud y desarrollo espiritual y consecuentemente para toda nuestra vida. Por eso, ayúdele a su discípulo a comprender
que si su nueva vida en Cristo es en serio, su tiempo a solas debe convertirse en un hábito diario.
Necesita saber que habrán días que no tendrá ganas de pasar tiempo con Dios. Está BIEN; a todos nos ha pasa-
do. Pero anímelo a que lo haga de todas maneras. ¿Qué le pasaría a sus dientes si no se los lava cuando no tiene ganas,
o cuando no es conveniente?
144 DISCIPULADO PERSONAL
Explíquele, que cuando esto venga, nuestra vida privada con Dios nos hará mucho bien cuando somos consis-
tentes. Los tiempos largos a solas son excelentes; los tiempos de cosquilleo de columna donde tiembla la tierra son me-
morables; pero si debemos escoger entre consistencia, calidad y cantidad al buscar un tiempo efectivo a solas, escoja la
consistencia siempre. Una cena suntuosa de doce platos lujosos y bien balanceada, no producirá un cuerpo sano. Sin
embargo, tres comidas, humildes pero adecuadas lo llevará a través de la vida.
Los estudiosos del comportamiento nos dicen que si una persona quiere introducir un hábito a su vida, debe
practicarlo sin fallar todos los días por veintiún días, y en la mayoría de los casos el nuevo comportamiento quedará esta-
blecido. Rete a su discípulo con eso. Pregúntele si está dispuesto a comprometerse con esa disciplina por veintiún días,
y luego puede evaluar el asunto al final del período de prueba. Nueve de diez, será el comienzo de una exitosa vida de
tiempo a solas.
“¿Aún los domingos? Pero si voy a la iglesia de todas maneras . . . “ Si su discípulo le hace esta pregunta, no
ha entendido la función del tiempo a solas. Se supone que es un momento de íntima comunicación uno a uno con el Pa-
dre. Puede recibir un montón de cosas importantes en la iglesia, pero no la comunión cercana, privada y libre de distrac-
ciones. Nosotros comemos los domingos, dormimos, ¿dónde está la excusa para no pasar tiempo el domingo con la
Vid?
Aunque lo haya retado a tener un tiempo a solas todos los días, no se sorprenda si en realidad le toma varias
semanas para que lo haga los siete días. Cuándo se reúnan la próxima semana, ¡no sea negativo! si sólo lo logró por dos
o tres días. ¡Déjele saber que es un buen comienzo! A la mayoría de nosotros nos tomó tiempo también.
Toda la semana que tiene por delante, asegúrese en orar diligentemente por el éxito de su discípulo con su tiem-
po a solas. Sus oraciones pueden ser la contribución más importante y estratégica en todo este asunto.
¿Cuándo? Recomiéndele a su discípulo que tome su tiempo a solas como primera cosa en la mañana si es posi-
ble. A esa hora del día la mente está más receptiva a nueva información. Las cosas por lo general están más calladas.
No está cargando las preocupaciones del día como lo haría si está al final del día. Su tiempo a solas no tendrá ninguna
oportunidad de escaparse del itinerario. Puede prepararse espiritualmente para cualquier evento importante del día. Es
una manera de “presentarse ante nuestro Comandante en Jefe” para que le dé las instrucciones diarias de marcha. Tener-
lo como primero, dándole al Señor la mejor parte de nuestro día, pondrá la tónica para el resto del día. El momento
oportuno para afinar un instrumento es antes del concierto.
Alguna gente dice, “Pero no soy mañanero. Pienso más claro en la noche.” Está bien. Haga su estudio bíblico
y oración en la noche. Pero sigue siendo importante empezar el día pasando tiempo con el Padre. ¿Puede tomar cinco
minutos para leer un Salmo o una selección de un libro devocional y tener una pequeña conversación con tu Maestro?
Permítale al Señor darse cuenta que, con sueño o no, usted quiere que Él sea la más alta prioridad en su día. Si una per-
sona puede comenzar el día aunque sea con un pequeño momento a solas se asombraría de los resultados a largo plazo.
El secreto del éxito en los tiempos a solas de la mañana es acostarse temprano la noche anterior. Satanás nos
tratará de mantener viendo la televisión, leyendo revistas, haciendo crucigramas – o un sin fin de cosas. Pero si estable-
cemos una hora inalterable para apagar la luz, nuestros cuerpos entrarán en un ritmo de acostarse / levantarse que nos
hará dormirnos cinco minutos después de tocar la almohada, y nos despertaremos a la misma hora todos los días, frescos
y listos para el día. El variar la hora de dormir todos los días mantiene al cuerpo confundido, logra menos sueño eficien-
te y hace más complicado vencer las cobijas por la mañana. Se convertirá en un religioso y los ratos a solas estarán muy
callados.
¿Dónde? Algún lugar callado y recluido, si es posible. Estar libre de distracciones es importante. Satanás tra-
baja para que sea difícil la concentración y agrega otras variantes. Alguna gente diría, “¡Imposible! ¡Usted no tiene ni
idea del ajetreo de la mañana en mi casa!” Vamos. ¡Piense en alternativas creativas! ¿Qué tal sería afuera en el carro?
¿Tal vez el patio? ¿El ático? ¿El baño? ¿El sótano? ¿El garaje? ¿Qué tal si se levanta antes de que comience el aje-
treo? ¿Qué tal si le pide al ajetreo que le den diez minutos a solas? O mejor aun, ¿enseñarle al ajetreo a tener sus pro-
pios tiempos a solas?
EVALUACIÓN
Pregúntese lo siguiente:
1. ¿Entiende mi discípulo lo importante que es la oración para su crecimiento?
2. ¿Ve la oración como un ritual? ¿Está dando un discurso en beneficio de los que oyen, o se está
comunicándo con Dios?
3. ¿Los principios de la oración están firmes en él / ella?
4. ¿Ora por su propia cuenta?
5. ¿Sus oraciones reflejan un buen balance entre Adoración, Confesión, Acción de Gracias y Súplica?
6. ¿Está orando por cosas importantes o sus oraciones son superficiales y poco sustanciales?
7. ¿Está tratando de tener tiempo a solas todos los días?
Si usted puede contestar a cada una de estas preguntas de forma afirmativa, entonces su discípulo ha logrado la
meta del objetivo de entrenamiento. Si puede contestar las preguntas anteriores, seguidamente encontrará unas pregun-
tas para hacerle a su discípulo y obtener esa información:
1. ¿Por qué oras?
2. ¿Por qué crees que Dios inventó la oración?
3. ¿Oras diferente cuando estás en grupo que cuando estás a solas? (Si es afirmativa) ¿Por qué crees que
sucede eso?
4. ¿Has tenido un tiempo a solas últimamente?
5. ¿Por qué tipo de cosas oras?
6. ¿Cómo puedo orar por ti?
7. ¿Te da miedo orar por algunas cosas? (De ser así . . .) ¿Te importaría compartirlas conmigo? ¿Por qué
estás renuente?
8. Cuando Dios no te contesta una de tus oraciones, ¿qué cree que está pasando?
9. ¿Cuál crees es el rol de la fe en la oración?
10. ¿Es la oración divertida para ti o es más bien un trabajo? (Si es un trabajo . . .) ¿Te impide eso orar las
veces que quisieras?
17 OBJETIVO DE ENTRENAMIENTO #9
TESTIMONIO
OBJETIVO
El discípulo tiene un entendimiento básico de la importancia de testificar, conoce los elementos primarios del
Evangelio y puede contarle a otra persona cómo llegar a ser cristiano.
DEFINICIONES APLICABLES
Testificar: “Compartir el evangelio de Jesucristo en el poder del Espíritu Santo y dejar los resultados a Dios.”1
Evangelio: Todo hombre es culpable ante Dios de pecado. La condena por el pecado es la muerte – separación
eterna de Dios. Pero debido a Su gran amor por nosotros, Dios envió a Su Hijo, Jesucristo, para tomar la condena por
nuestros pecados en sí mismo cuando murió en la cruz. Tres días después resucitó de la muerte y hoy y por siempre
vive. Si una persona se arrepiente de su estilo de vida pecaminosa, y tiene fe de que Jesucristo es el Hijo de Dios y es
capaz de salvarlo de la muerte eterna, será salvo.
“Mini resúmenes” escriturales del Evangelio:
Juan 3:16 Hechos 20:21 1 Corintios 2:1-2
Lucas 24:46-48 Romanos 6:23 1 Corintios 15:3-4
Hechos 16:30-31
146
TESTIMONIO 147
mentos más emocionantes que hemos tenido como cristianos fueron cuando testificábamos, especialmente cuando Dios
nos da el privilegio de estar ahí cuando alguien recibe a Cristo. Por otro lado, muchos de nosotros hemos estado un poco
quisquillosos de poner nuestros egos en la tabla de picar junto con el tratado de las Cuatro Leyes Espirituales, arriesgán-
donos a que nos caiga el hacha del desprecio. Cuando sacamos toda la racionalización y las excusas – y nosotros pode-
mos manufacturarlas por montones – la primer razón por la cual los cristianos no comparten su fe es porque tienen mie-
do de que la gente reaccione negativamente. Y ese temor no es infundado. Algunas personas rechazarán el Evangelio –
si le sucedió a Jesús y a Pablo, de seguro nos pasará a nosotros.
Dos cosas se deben decir en cuanto a esto. Primero: Nadie ha dicho que los cristianos tengan que ganar un
concurso de popularidad. De hecho, Pablo dijo en 2 Timoteo 3:12, “Y también todos los que quieren vivir piadosamen-
te en Cristo Jesús padecerán persecución” [el énfasis es mío]. Podemos garantizar que no habrá siempre luz de luna y
rosas, especialmente cuando se comparte a Cristo.
Entonces ¿cómo debemos responder? Ese es el segundo punto: Tenemos que decidir a quién queremos agra-
dar. Cuando compartimos nuestra fe, puede ser que no complazcamos al ser humano, pero definitivamente agradamos a
Dios. Cuando permanecemos callados en cuanto a nuestra fe, puede que esquivemos la mofa del ser humano, pero no
complaceremos a Dios. ¿Qué prefiere? Pablo lo puso de la siguiente manera: “Pues, ¿busco ahora el favor de los hom-
bres, o el de Dios? ¿O trato de agradar a los hombres? Pero si todavía agradara a los hombres, no sería siervo de Cristo”
(Gálatas 1:10). Juan describe a los pusilánimes gobernantes de Jerusalén que no confesaban abiertamente a Cristo por
causa de los fariseos de la siguiente manera: “Amaban más la gloria de los hombres que la gloria de Dios” (Juan 12:43).
La aprobación del ser humano desaparece rápidamente – la aprobación de Dios, nunca.
Hacer discípulos, no fue placentero para mí, pero acabo de dispararles con una escopeta de dos cañones – y con
razón justa. Si usted es como la mayoría de los cristianos de hoy día en los Estados Unidos, que comparten su fe muy
rara vez. Habrá guiado máximo a dos personas al Señor. Y su opinión en cuanto a testificar en un futuro es que mejor
sería ser azotado con un látigo porque aunque duele mucho, el dolor dura poco. Si esta es su descripción, lo que necesita
es ser sacudido de su sueño. El Dr. Walter Martin del Instituto Cristiano de Investigaciones ha dicho, “En lo que tiene
que ver con Satanás, la mejor cosa que le sigue a una alma condenada es un cristiano silencioso.” El diablo esta traba-
jando sobre tiempo para mantener a los cristianos callados en cuanto a las Buenas Noticias. Él falló en el Gólgota, pero
tiene un aire de victoria si pudiera mantener todo acallado. Espero que usted no esté colaborando con él. Si es uno de
los silenciosos, le imploro que despierte, y hable – no permita que su mal infecte a otra generación de discípulos.
Si los cristianos abrieran sus bocas un poquito más, descubrirían que mucha gente está ansiosa de experimentar
una relación cercana con Dios si supieran cómo. Bill Bright ha escrito, “Uno de los grandes malos entendidos de los
siglos, en mi opinión, es la idea que prevalece entre los cristianos de que el ser humano no quiere a Dios. Donde quiera
que voy – en Estados Unidos o en otros países – encuentro pruebas que la realidad es todo lo contrario. El Espíritu San-
to ha puesto hambre por Dios en los corazones de las multitudes.”2
Anhelamos que nuestros discípulos sean testigos fructíferos por dos razones: (1) que puedan experimentar el
gozo del Señor mientras comparten su fe de todo corazón y obedientemente; (2) que sean soldados activos en el ejército
de Cristo, botando las fortificaciones de Satanás y trabajando con Cristo para liberar a los cautivos, de manera que el
Reino de Dios avance.
Usted puede ayudar a su discípulo a comenzar correctamente para alcanzar esa meta. Muchos de los nuevos
cristianos todavía están tratando de decifrar lo que es la vida cristiana. ¡Antes de que tenga la oportunidad de probar el
estándar anormal en el testificar que la mayoría de la cristiandad ha adoptado, usted le puede dar el estándar normal que
se presenta en la Biblia!
¿Cómo motivarlo hacia la dirección apropiada? Dos cosas: Primero, sobre todo, si su relación con Cristo es una
de vital intimidad, amor y obediencia, el testificar fluirá naturalmente por un estilo de vida controlado por el Espíritu.
Eso es lo que buscamos – llenura, no demasiado trabajo. La eficiencia de sus relaciones “horizontales” depende de la
vitalidad en su relación “vertical”.
Segundo, cuando lo vea a usted abiertamente identificado con Cristo y compartiendo su fe, y después contándo-
le las emociones y las agonías asociadas con el testificar, esto lo motivará también. Él realmente desea ser como usted;
las cosas que usted hace él estará dispuesto hacerlas, y las cosas que usted no hace él estará listo a dejarlas de lado.
INTRODUZCA EL TEMA
Una buena manera de entrar en el tema de testificar es haciéndole dos simples preguntas a su discípulo. Una,
“¿Qué es lo más grande, la cosa más significativa que jamás le haya sucedido?”
148 DISCIPULADO PERSONAL
Si él ha estado escuchando por las últimas semanas, y verdaderamente ha entendido las consecuencias de su
salvación, contestará algo así, “Recibir a Jesucristo como mi Salvador.”
En ese momento hágale la pregunta número dos, “¿Entonces, qué es lo más grande, la cosa más significativa
que un cristiano puede hacer por otra persona?
Lógicamente, su respuesta debería ser, “Ayudarle a conocer a Cristo también.”
Entonces usted puede decirle, “De eso es lo que vamos ha conversar hoy – ayudar a otros a entrar en una rela-
ción personal con Cristo. ¿Qué has pensado en cuanto al tema de testificar de Cristo?” A mí me gusta hacer esta pre-
gunta siempre para ver que reacciones y conceptos tiene antes de lanzarnos. Yo quiero darme cuenta si el testificar lo ve
con miedo y ansiedad tremenda, o tal vez tiene pánico de que lo lleven a vender flores en la calle y a pegarle a la gente
en la cabeza con una Biblia de diez libras, o quizás esté abierto e interesado y todavía no está infectado de la principal
aberración que la mayoría de los cristianos tienen a testificar. Esto es lo que hace la diferencia en la presentación.
En el primer caso, usted necesita hacer algunas demoliciones antes de que pueda construir – deshacerse de las
nociones equivocadas de lo que significa testificar de Cristo. Es importante que usted apacigüe los temores de su discí-
pulo lo más rápido posible. Hágale saber que usted no tiene ninguna intención de pedirle que haga algo que él realmente
no quiere hacer.
En el segundo caso podemos proseguir con la demolición y continuar de inmediato la superestructura.
I. ¿Qué es Testificar?
Testificar, en su sentido más amplio, es simplemente contar lo que conoce. Como dijeron Pedro y Juan al Sane-
drín (los cuales trataban de detenerlos de que testificaran), “no podemos dejar de decir lo que hemos visto y oído” (He-
chos 4:20). ¿Qué ha visto y oído usted sobre Cristo? Cuando usted habla estas cosas con otros, usted está testificando.
Piense en términos de ser un testigo en la corte de justicia. Si usted es un testigo, no tiene que tratar de ser el
abogado fiscal, o el abogado defensor, ni el juez, ni el jurado, o el alguacil. Todo lo que usted tiene que hacer es contar
lo que ha “visto y oído.” Cuando está en el estrado del testigo, usted será instruido en “decir la verdad, toda la verdad, y
nada más que la verdad.” Sería deshonesto, como testigo de Cristo, presentarse falsamente usted mismo al exagerar o
minimizar lo que ha sucedido en su vida. Retener la verdad también lo sería. Debe estar preparado para dejar que su
vida sea un libro abierto para ser leído por todos aquellos que lo deseen. No es su trabajo convencer a nadie de nada.
Todo lo que usted hace es contar lo que sabe.
V. ¿Qué digo?
Hay tanto que decir sobre Jesús que podemos pasar horas sin fin para ello. Pero usualmente, en una situación
de testimonio, la persona con la que hablamos no tiene esa clase de tiempo. Así que lo mejor que podemos hacer es te-
ner bien claro en la mente lo básico del Evangelio, y luego ampliarlo según la oportunidad se presente. Además, es de
mucha ayuda compartir su historia personal, su “testimonio,” lo que sucedió cuando usted conoció a Jesucristo.
A. Lo Básico del Evangelio. En su más básica expresión, el Evangelio puede ser resumido en cuatro puntos
muy simples.4 Los cuales son:
1. Dios ama a cada individuo y creó a cada cual para tener compañerismo eterno con Él.
Jeremías 29:11 Juan 3:16 Juan 10:10
Jeremías 31:3 Juan 4:13-14
2. Cada individuo ha pecado, cortando su compañerismo con Dios, dando como resultado la separación eter-
na finalmente.
Salmo 14:2-3 Romanos 3:10-12 Romanos 6:23
Isaías 53:6 Romanos 3:23 Hebreos 9:27
3. Dios envió a su Hijo, Jesucristo, a recibir la condena de nuestros pecados en Sí Mismo, haciendo posible
la unión con Dios.
Juan 3:17 Efesios 1:6-7 1 Pedro 3:18
Romanos 5:8 Tito 2:14 1 Juan 4:9-10
4. El sacrificio de Jesús es aplicable a nosotros individualmente mientras nosotros, haciendo uso de nuestra
voluntad, recibimos a Cristo a través de la fe.
Juan 1:12 Hechos 16:31 Efesios 2:8-9
Juan 3:1-8 Romanos 10:9-10 1 Juan 5:11-13
Juan 5:24 Gálatas 2:16 Apocalipsis 3:20
Nota para el discipulador: Me doy cuenta que esto puede ser un poco engorroso para algunas personas.
“¿Cómo puede alguien ‘recibir a Cristo’?” “¿Tener fe exactamente en qué?” “¿Dónde entra la gracia?” “¿Dónde entra
el arrepentimiento?” “¿Dónde entra el ‘nacer de nuevo’?” “¿Qué necesidad hay de la confesión pública?” Usted puede
meterse en los detalles de estas cosas después, pero lo que su discípulo debe entender ahora es que la salvación viene por
gracia , a través de la fe (Efesios 2:8-9). Si la persona abraza una fe personal que Jesucristo es el Hijo de Dios, que fue
sacrificado en la cruz en nuestro lugar, resucitó de los muertos, y que es capaz de atraernos a Dios, está en terreno segu-
ro. La evidencia (o resultado) de esta fe es la decisión de arrepentirse del pecado (Hechos 3:19; Romanos 2:4) y comen-
zar a buscar un estilo de vida con buenas obras (Efesios 2:10; 1 Juan 2:4-6). Si la persona “le pide a Cristo que venga a
su vida” o “recibe a Cristo,” y un correspondiente cambio de comportamiento es visto, es un indicador fuerte de que ha
adquirido “una fe salvífica.”
Existen dos caminos que se pueden tomar a la luz de los cuatro puntos básicos del Evangelio que mencioné:
(1) Usarlos como guía al enseñarle a su discípulo un método específico para compartir su fe (“Ahora, permíteme mos-
trarte como podemos usar estos cuatro puntos en un interesante y fácil método para compartir el Evangelio . . . “); o (2)
dejarlos a un lado del todo e ir directamente a compartir su método favorito. Ayude a su discípulo a entender que gente
diferente necesitará que se les hable de diferente maneras de cosas diferentes cuando se trata de una presentación del
Evangelio, pero si alguien conoce una presentación básica, puede adaptar y personalizarla según se necesite.
Si usted no conoce un método específico de presentación del Evangelio, le sugiero obtener Testificando sin Te-
mor de Bill Bright, o pregúntele a su pastor o a alguien más que ha sido entrenado que le sugiera uno.
152 DISCIPULADO PERSONAL
B. Su Testimonio. Puede ser fácil para el no cristiano discutir con nuestra teología u opiniones, pero no puede
discutir con nuestra experiencia personal. Se parece mucho al hombre ciego que Jesús sanó en Juan 9. Los fariseos
cuestionaron su conversión teológicamente de un lado para otro, pero todos sus argumentos se vinieron abajo cuando el
hombre habló finalmente, “Si es pecador, no sé; una cosa sé, que habiendo sido ciego, ahora veo.”
Nota para el Discipulador: La manera mejor para ayudar a alguien a trabajar con su testimonio involucra tres
pasos. Primero, comparta con el discípulo su propio testimonio. Mientras lo escucha, se dará una buena idea de cómo
se supone debe sonar. Segundo, hable con el discípulo del testimonio de él. Use un formato de entrevista, hágale las
siguientes tres preguntas divisorias:
1. ¿cómo era tu vida antes de conocer a Cristo?
2. ¿Cuáles fueron las circunstancias que rodearon tu conversión?
3. ¿Cuáles son los cambios que has visto en su vida desde que te encontraste con Cristo?
Guíelo a ampliarse en sus respuestas como sea necesario, para que usted y él puedan percibir el fluir de su ex-
periencia de conversión. Mientras comparte sus respuestas, usted debería de escribir algunas notas para recordar lo que
dijo, o mejor aún, grabe la conversación en un cassette.
Tercero, haga que vaya a casa y escriba el testimonio. La disciplina de pensar y ponerlo en papel le dará la
oportunidad de meditar realmente en lo que sucedió el día en que fue salvo, y cuál sería la mejor manera para relacionar-
lo con otra persona. Haga que escriba las tres preguntas divisorias, cada una en tres hojas de papel, y después que escri-
ba su respuesta debajo de cada una. Infórmele que le debe tomar de tres a cinco minutos leer su testimonio.
He aquí unas pocas cosas que debería evitar cuando escribe:
1. Exagerar.
2. Generalidades rutilantes (“Mi vida es maravillosa ahora, totalmente llena de gozo y paz, y todos mis pro-
blemas se han ido”).
3. Hablar mal de una congregación o denominación en particular.
4. Frases religiosas (“Yo nací de nuevo inmediatamente y transformado en una nueva creación por ejercitar
mi fe en la propiciación substitutoria de Cristo”).
5. Mucho detalle.
6. Material irrelevante.
Ahora, algunos elementos que debería incluir:
1. Las tres divisiones: Antes, Cómo, Después.
2. Exactamente como recibió a Cristo; de esa manera cuando termine de compartir, el escucha tendrá una
buena idea de cómo podría recibir a Cristo también.
3. Uno o dos versículos bíblicos.
Después de que su discípulo haya escrito su testimonio, revíselo y determine si necesita algunos ajustes, cam-
bios o afinación. Cuando todas las revisiones han tomado lugar, haga que se familiarice bien con él, hasta que escriba
un bosquejo y lo comparta oralmente con un grupo pequeño, o se lo memorice.
Si a usted le gustase estudiar un buen ejemplo bíblico de alguien compartiendo su testimonio, busque a Pablo
en Hechos 22:3-21 o 26:4-23.
OTROS RECURSOS
Para unos buenos estudios bíblicos del tipo “llenar los espacios en blanco” sobre el tema del testimonio, consi-
dere usar uno o más de las siguientes selecciones:
“Los Diez Grados Básicos del Desarrollo Cristiano” de Cruzada Estudiantil y Profesional para Cristo:
• Grado 7, “El Cristiano y el Testimonio“ (todas las lecciones)
El Diseño del Discipulado - Es una serie desarrollada por Navegantess:
• Libro 2, Capítulo 5: “Testificando Para Cristo”
• Libro 6, Capítulo 3: “Ayudando a Otros a Encontrar a Cristo”
Capítulo 4: “El Seguimiento”
TERMINANDO LA SESIÓN
Cambio de roles. Después de pasar dos o tres semanas en este asunto, haga un pequeño cambio de roles. Haga
usted de no cristiano y deje que su discípulo le haga la presentación del Evangelio. Haga preguntas apropiadas y tírele
algunas bombas de humo, pero no sea muy duro con él. Dele tiempo para que se familiarice con el material y se llene de
confianza.
Oraciones de Transición. Otra pizca de información útil que usted puede pasarle a su discípulo tiene que ver
con las “oraciones de transición.” Estas pueden ser usadas para dirigir una conversación hacia el Evangelio. He aquí
algunas ideas:
1. Lleve a un amigo no cristiano a una función cristiana como un concierto, una celebración eclesiástica o ha
oír un predicador especial. Cuando termine, incluya estas cuatro preguntas en su conversación:
a. ¿Qué te pareció la [función, el mensaje]?
b. ¿Lo que dijeron tiene sentido para ti?
c. ¿Alguna vez hiciste el descubrimiento de conocer a Cristo personalmente?
d. ¿Te gustaría hacerlo ahora?
Si su amigo reacciona negativamente, recuerde Proverbios 15:1: “La blanda respuesta quita la ira.” Usted debe-
rá responder con gentiliza, tal vez algo como esto: “Parece que en algún momento tuviste una experiencia no muy buena
con el cristianismo. Me encantaría saber por qué te sentís de esa manera.”5
2. Comience por hacer las siguientes preguntas que hace Evangelismo Explosivo presentado por el Dr.
James Kennedy:6
a. En tu vida espiritual, ¿has llegado al punto donde estas seguro de tener vida eterna; lo que significa
que tienes seguridad de que si mueres hoy irás al cielo?
TESTIMONIO 155
b. Si fueras a morir hoy y presentarte ante Dios, y te dijera, “¿Porqué debería dejarte entrar en Mi cie-
lo? “ ¿Qué le contestarías?
Después de que la persona dé su respuesta (y si es un no cristiano, tal vez existan evidencias de falta de infor-
mación en sus respuestas), así que diga algo así, “Eso es interesante. Mucha gente siente lo mismo al calificarse para
entrar en el cielo. ¿Puedo compartir contigo lo que he aprendido de la Biblia en cuanto a la vida eterna?”
3. Si usted conoce a alguien que no es cristiano, pero lleva puesto algún tipo de símbolo religioso, trate esta
transición: “Vi tu cruz [o cualquier otra cosa]. ¿Significa que eres cristiano?” Si la respuesta es que no, o
que no está seguro, usted debería decirle algo como, “Es interesante para mí que un símbolo cristiano tan
obvio pueda llegar a perder su significado. ¿Sabes lo que significó originalmente?” Después, un poquito
más tarde en la conversación, “¿Alguien se ha tomado el tiempo para explicarte lo que es el verdadero
cristianismo?
4. Donde quiera que usted tenga la oportunidad de desviarse de su camino para hacer algo especialmente
tierno o de ayuda para alguien, será una gran oportunidad para “permitir que su luz brille.” Cuando esa
persona le esté agradeciendo, usted puede decir algo así, “Unos pocos años atrás probablemente nunca
hubiera hecho eso. Pero algo me sucedió hace poco que cambió mi vida. Eso me dio el deseo de ayudar a
la gente cada vez que puedo. Tal vez te puedas identificar conmigo . . .” Luego comparta su testimonio.
Cuándo termine, pregúntele, “¿Alguna vez has hecho algo así, pedirle a Cristo que venga a tu vida?”
5. “Si alguien fuera a preguntarte lo que es ser un verdadero cristiano, ¿qué le contestarías? ¿Puedo
compartirte unos cuantos versículos de la Biblia que me han aclarado verdaderamente el asunto?”
6. “Dime Juan, ¿conoces a Cristo personalmente, o dirías que estás en el camino todavía?”
7. Si tuviera un tratado del Evangelio le diría: “¿Alguien se ha tomado el tiempo de compartir este pequeño
panfleto contigo?”
8. Si tuviera una copia de las Cuatro Leyes Espirituales diría, “¿Alguna vez has escuchado sobre las Cuatro
Leyes Espirituales?”
9. “He estado realmente interesado en los últimos años en las cosas espirituales, y estoy curioso sobre las
convicciones espirituales [o religiosas] de la gente. ¿Cuáles son las tuyas? ¿Te molestaría compartirlas
conmigo?”
Proyecto de oración. Ayude a su discípulo a preparar una lista con ocho a diez nombres de miembros de su
familia o amigos que no son cristianos por los cuales puede comenzar a orar, algo así como la lista de “Los Diez más
Buscados.” Asegúrese que los escriba, y usted hágalo en la suya también. Pregúntele a su discípulo de vez en cuando
para estar seguro que continúa orando por ellos y para saber si el Señor le ha dado alguna oportunidad para compartir el
Evangelio. Recuérdele a menudo que debe tener los ojos abiertos para “las citas divinas.”
Involúcrelo. Si hay algo que estimulará el deseo de su discípulo por testificar es estar involucrado realmente en
situaciones de testimonio en la vida real. Hágalo en dos etapas. Etapa uno, llévelo a testificar con usted, con el entendi-
do de que usted hará todo lo que es hablar y que él sólo deberá observar y orar. Etapa dos, después de que hayan hecho
esto varias veces, déjelo que tome la iniciativa – que comparta y usted observa y ora. Algunos lugares donde se puede
hacer esto son: predios universitarios, centros comerciales, parques, playas.
EVALUACIÓN
Hágase usted mismo las siguientes preguntas:
1. ¿Entiende mi discípulo por qué testificar es tan importante?
2. ¿Mi discípulo podría repetirme los elementos básicos del Evangelio?
3. ¿Mi discípulo puede decirle a otra persona como ser salva?
Si usted puede contestar cada una de estas preguntas afirmativamente, su discípulo ha completado este objetivo
de entrenamiento. Pero si necesita más información para poder contestar, seguidamente encontrará algunas preguntas
que le puede hacer:
1. ¿Por qué es importante para los cristianos testificar?
2. ¿Por qué compartiría su fe con otros? ¿Qué es lo que lo motiva?
3. ¿Cómo definirías “testificar”?
4. ¿Cuáles son las cosas que lo ponen indeciso al testificar?
5. ¿Qué es lo que pasa por su mente cuando, después de haber compartido el Evangelio con alguien, lo re-
chaza?
6. ¿Cuáles son los componentes básicos del Evangelio?
7. ¿Qué preferiría, compartir su fe o ser flagelado?
8. (Si prefiere ser flagelado) ¿Qué es lo que más té molesta de testificar?
9. ¿Qué es lo que hace a un cristiano un buen testigo?
10. ¿Crees que podrías hacer un buen trabajo contándole a otra persona cómo llegar a ser cristiana? Vamos a
ver.
11. ¿Cómo te beneficiaría testificar?
12. ¿De qué manera testificar es solamente un resultado natural de ser honesto?
13. ¿A quiénes deben testificar los cristianos?
14. ¿Cuál es la diferencia entre testificar con su vida y testificar con sus palabras? ¿Por qué son importantes
las dos?
15. ¿Cuál es el trabajo del Espíritu Santo en el proceso de testificar?
16. ¿Qué papel juega la oración cuando se testifica?
TESTIMONIO 157
158
GUERRA ESPIRITUAL 159
En esta sesión, usted querrá pasarle a su discípulo algunos puntos fundamentales en cuanto a la adversidad, Sa-
tanás, las tentaciones y el pecado. Es un enfoque negativo, pero como Thoreau escribió en 1849, la vida real no es “un
paseo por la playa.” Lo que escribió cinco años después es una apreciación más certera: “La mayoría de los hombres
llevan una vida de silenciosa desesperación” 2. Si no lidiamos con estas orillas ásperas en la vida de nuestro discípulo, no
estamos llenando las necesidades de aquellos que Dios nos ha confiado. Esta sesión está diseñada para ayudar a que
nuestro discípulo entienda que la vida cristiana no es Disneylandia, pero que puede experimentar una vida abundante y
fructífera a pesar de ese hecho.
Dos palabras de cautela para usted al abordar esta sesión: Esté alerta. Cuando tengo que preparar un estudio o
hablar sobre este tema, la batalla arrecia. A Satanás no le gusta estar bajo el reflector, y cuando lo alumbro, experimento
su resistencia. Mi procesador de palabras ya se dañó una vez y tanto mi esposa como yo nos hemos enfermado seria-
mente en los pocos días que me ha tomado pasar este objetivo a mi computadora. Algunos dirán que es una coinciden-
cia, pero lo he visto suceder demasiadas veces como para estar de acuerdo con eso. Así que, espere el mismo trato, mi
amigo. No se extrañe si su discípulo no aparece a la cita. Puede que se le olvido, o que su compañero de cuarto lo per-
suadió a que fueran a pescar, o alguna visita de fuera de la ciudad llegó inesperadamente, o un OMNI chocó contra su
casa. Lo que sea puede suceder, sólo continúen reprogramando la reunión. Entonces, no se le olvide a usted, o se quede
sin gas, pierda su Biblia, no se pelee con su cónyuge. Batalla esto con oración.
INTRODUZCA EL TEMA
El discípulo ha estado escuchando algo del tema a través suyo, así que está algo familiarizado. Ya sabe que
Satanás existe, que la adversidad es una parte normal de la vida cristiana (vea el Objetivo de Entrenamiento #5) y que
cuando peca, la confesión y el arrepentimiento restaurarán su comunión con Dios (vea el Objetivo de Entrenamiento
#3). Usted podrá introducir el tema con algo así: “Sé que ya hemos hablado un poco sobre las pruebas y Satanás, pero
pensé que hoy podríamos pasar un buen tiempo profundizando el teje y maneje de estos temas. Estoy interesado en co-
nocer cual era el concepto pre-cristiano que tenías de Satanás.”
En realidad no es tan importante lo que conteste; sólo es una manera de romper el hielo y entrar en el tema.
Su respuesta: “Eso es interesante. La Biblia habla mucho sobre Satanás y como trabaja para oponerse al trabajo
de Dios. No hay forma de agotar el tema hoy, pero me gustaría dejarte siete Puntos Fundamentales sobre la adversidad,
Satanás, la tentación y el pecado.”
La mejor manera de proceder desde aquí es leer las Sugerencias para el Crecimiento en la sección que sigue,
escoger algunos versículos claves de cada uno de los siete Puntos Fundamentales, y luego escribir en un papel los “P.F.”
y sus respectivos versículos. El papel puede ser el punto de enfoque en la conversación de ustedes y también sería bue-
no que su discípulo se lo lleve a su casa para estudiarlos. Compártale algunas experiencias por las cuales haya atravesa-
do y pensamientos en cuanto a los Puntos Fundamentales o los versículos, pero tenga cuidado de no monopolizar la con-
versación. Su discípulo puede esperar hasta el domingo para escuchar el sermón, así como todos nosotros. Mantenga su
tono tan conversacional como pueda.
B. La tentación de Satanás
La actividad número uno del día y de todos los días de Satanás es intentar inducir a que se le desobedezca a
Dios. 1 Juan 2:15-16 nos dice que estas persuasiones vendrán en una de tres direcciones:
(1) El deseo de la carne – el mal uso de nuestros apetitos naturales por comida, sexo, comodidad, placer, etc.
2 Samuel 11:2-4 Mateo 4:2-3
(2) El deseo de los ojos – el deseo compulsivo de poseer cosas; el materialismo; querer todo lo que uno ve.
Mateo 4:8 2 Timoteo 4:10
(3) El orgullo de la vida – la persecución compulsiva de fama, poder, reconocimiento, ser exaltado a los ojos de
otros; cualquier cosa que pueda suplantar la posición de prioridad de Dios en nuestras vidas; búsqueda de cosas que pue-
dan quitar a Dios del trono y ponerlo a usted.
Mateo 4:5-6 Abdías 3-4
Vayan a Génesis 3 y traten, usted y su discípulo, de sacar estos tres elementos en la tentación de la serpiente a
Eva. Pueden buscarlos también en la tentación de Jesús en Mateo 4.
Ejemplos Bíblicos:
José – Génesis 37, 39-50. Definitivamente no fue algo maravilloso cuando los hermanos de José lo intentaron
matar (37:18-24), ni cuando lo obligaron a ser esclavo en Egipto (37:28), ni cuando fue falsamente acusado por la espo-
sa de Potifar y encarcelado (39:11-20) o cuando el copero del rey le dio la espalda y dejándolo en la prisión para que se
pudriera (40:20-23). Pero todo era parte del plan de Dios, para exaltar a José hasta posición del segundo hombre más
poderoso del mundo y salvar así a la semilla de Abraham de la extinción (45:4-8; 50:19-20)
Moisés – Éxodo 2:11-3:10. No fue maravilloso cuando Moisés tuvo que huir de Egipto para escapar de la ira
del Faraón. Pero a raíz de su huída a las tierras de Madián, no sólo conoció a la mujer que Dios le tenía preparada para
ser su esposa (2:21), sino que recibió una de los mejores entrenamientos del mundo para el ministerio que Dios tenía
para él. Cuarenta años atendiendo un montón de ovejas testarudas y egoístas resultó tener un gran valor transferible
cuando llegó el tiempo de pasar cuarenta años atendiendo a un montón de Israelitas cabezas duras y egoístas.
Noé – Génesis 6:9-7:16. No estaba en la lista de cosas divertidas de Noé el pasar 120 años siendo el hazme-reír
del pueblo, cuando él y sus hijos construían un enorme barco en el patio de atrás, a millas de cualquier cuerpo de agua.
Por su paciencia y obediencia al Señor en medio de circunstancias adversas, Dios lo rescató a él y a su familia del Gran
Diluvio y lo utilizó para lograr la limpieza del mundo.
Jesús. Colgando de la cruz, soportó el dolor inimaginable de la separación con Su amado Padre, aceptando la
vergüenza, los azotes, la humillación, y experimentó el horror de nuestros pecados en Su cuerpo santo – estoy seguro
que Jesús no consideró ninguna de estas cosas como algo maravilloso. Pero sabía que todo era parte del plan perfecto
del Padre para la compra de nuestra salvación, y gustosamente se sometió a ello. Hebreos 12:2: “el cual por el gozo
puesto delante de él sufrió la cruz, menospreciando el oprobio, y se sentó a la diestra del trono de Dios”
Punto Fundamental #4
Los cristianos deben huir de la tentación y resistir al diablo.
De vez en cuando la gente habla de “resistir la tentación” y de “huir del diablo”, ¡estas acciones son el opuesto
de lo que nos dice la Biblia que hagamos!
La tentación no ha de ser resistida, hay que huir de ella. Si usted sabe que tiene problemas con el alcohol, no
pase tiempo en bares. Si el pecado sexual es un problema para usted, no vaya al centro de la cuidad donde están las
prostitutas. Si no ha podido vencer la glotonería, no compre un montón de chocolates, que coloca en su refrigeradora
para luego pedirle a Dios que lo ayude a abstenerse de comerlos.3
Proverbios 4:14-15 Romanos 13:14 2 Timoteo 2:22
Mateo 26:41 1 Timoteo 6:10-11
Por otro lado, Satanás no es para huirle, pero sí para ser activamente resistido. Aunque Satanás es nuestro ene-
migo número uno, y uno muy poderoso, la Biblia claramente dice que la única manera para lidiar con él es quedarse y
pelear.
Mateo 4:1-11 Efectos 6:10-18 1 Pedro 5:8-9
2 Corintios 10:3-5 Santiago 4:7-8 Apocalipsis 12:11
162 DISCIPULADO PERSONAL
Nota para el discipulador: Lea Santiago 4:7-8 con su discípulo – es un excelente formato para resistir a Sata-
nás. Piense tratar con Satanás en los términos con que trataría a un ladrón en su casa 4:
Ladrón Satanás
Paso 1: “¡Creo que hay un ladrón en la casa!” “¡Creo que Satanás está intentando hacerme
Detectar pecar!” (2 Corintios 2:11)
¡Tenga un “ecualizador”, como una es-
Paso 2: copeta! “Sométanse, pues, a Dios.” Pídale a Dios que
Facultar le ayude a resistir a Satanás. Solo, no puede
enfrentársele – tiene que tener la ayuda de Dios.
(Salmos 59:9)
“¡Te tenemos rodeado! ¡Manos arriba o
Paso 3: disparo!” “Resistid al diablo, y huirá de vosotros.” Dirí-
La Trampa jase a él directamente, como lo hiciera Jesús.
Tu arma: La Palabra. (Efesios 6:13-17)
¡Llame a la policía! “Acercaos Dios y él se acercará a vosotros.”
Paso 4: Después de la pelea, pase un corto tiempo en
Refuerzos oración o leyendo la Biblia, para sellar la victo-
ria y fortalecerse. (Santiago 4:8)
Asegúrese que su discípulo entienda que la Biblia no dice que debemos darle a Satanás una golpiza para dejarlo
medio muerto. Eso es bueno, ya que no tenemos en nosotros mismos, ni el conocimiento, ni las fuerzas, ni la técnica
para batallar con alguien tan magnífico en el arte de la guerra como Lucifer. ¡Nos pulverizaría! Todo lo que tenemos
que hacer es resistirlo, y él huirá de nosotros como un tonto derrotado. Eso es todo lo que se requiere – un poquito de
resistencia.
Para el paso 3, “La Trampa”: lea Mateo 4 y vea como Jesús se dirigió a Satanás durante Su tentación. Se dará
cuenta de tres principios que Jesús utilizó (versículo 10) que nosotros deberíamos usar:
1. Dirigirnos a él directamente.
2. Ordenarle que se vaya (o que cese su actividad en esa área).
3. Recordarle la autoridad con la cual le ordenamos: La Palabra de Dios.
La manera que Jesús usó para la tercera parte de este formato fue citar las Escrituras. En esencia, lo que Jesús
estaba diciendo fue: “No me puedes obligar a hacer lo que has sugerido porque Dios ya trató el asunto en Su Palabra, y
Él dice que no, así que yo no tengo que hacerlo. Estás trabajando contrario a la voluntad de Dios. Estás equivocado;
yo estoy bien, por lo tanto, tengo la autoridad del mismo Dios para ordenarte que te vayas. ¡Largo!
La mayoría de los cristianos nuevos no conocen suficiente de la Biblia como para citar la Escritura textualmen-
te, como lo hiciera Jesús, pero yo no creo que hay que hacerlo de esa manera. La verdad sigue siendo la verdad sea en
versión Dios Habla Hoy, Reina Valera, Francés, Watusi o en sus propias palabras. (Esto no es para minimizar el inmen-
so valor de memorizar las Escrituras palabra por palabra; todo lo contrario.) Si una persona simplemente le informa a
Satanás que ya no pertenece a su reino, que ha sido comprado por la sangre derramada de Jesucristo y que ya no tiene
que seguir la dictadura de Satanás, y que está seguro que la Palabra de Dios le ordena obedecer sólo al Señor, Satanás
deberá huir. Creo que esto es de lo que habla Apocalipsis 12:11 cuando dice que “Y ellos le han vencido por medio de
la sangre del Cordero y de la palabra del testimonio de ellos” (el énfasis es mío).
Punto Fundamental #5
La salvación no nos da licencia para pecar; el pecado interrumpe la comunión con Dios y le hace un corto cir-
cuito al poder que Dios ha puesto a nuestra disposición.
Isaías 59:2 1 Corintios 6:12 1 Pedro 4:1-2
Juan 15:6 Gálatas 5:13 1 Juan 2:3-6
Romanos 6:1-6 Tito 1:16 1 Juan 4:20
Romanos 6:16 Santiago 2:19-20 Judas 4
GUERRA ESPIRITUAL 163
Punto Fundamental #6
Cuando pecamos, la confesión, el arrepentimiento humilde y reapropiarse la llenura del Espíritu Santo lo res-
taurará a la correcta relación con Dios.
Nota para el discipulador: Probablemente ya han tratado la llenura de Espíritu Santo cuando vieron el Objetivo
de Entrenamiento #3 en el capítulo 11, sin embargo, este sería un buen momento para un rápido repaso. A continuación
hay una serie de pautas que quizás quiera tocar. Probablemente no se tomará el tiempo para ver cada versículo con su
discípulo, pero usted debe leer cada uno, escribir, en el comúnmente recomendado cuaderno, un resumen y escoger uno
o 2 versículos para cada punto.
1. Todos vamos a resbalar y pecar de vez en cuando
Salmos 14:3 Romanos 3:23
Isaías 53:6a 1 Juan 1:3
2. Jesús ya pagó por nuestros pecados
Isaías 53:6b Colosenses 1:13-14 1 Pedro 3:18
3. Dios está en el negocio de perdonar y olvidar los pecados
Salmos 103:12 Isaías 1:18
Salmos 130:3-4 Isaías 43:25
4. Para experimentar la limpieza y por ende la restauración a la comunión con Dios, confiésele su pecado,
así es, póngase de acuerdo con Dios de que lo que hizo estuvo mal y vuelva a apropiarse de la llenura del
Espíritu Santo.
Salmos 66:18 Proverbios 28:13 1 Juan 1:9
5. Pronunciar palabras no es suficiente; debe existir una genuina humildad y arrepentimiento (“arrepentirse”
significa “dar la vuelta e ir hacia el otro lado”)
2 Crónicas 7:14 Salmos 34:14,17-18 Santiago 4:9-10
Job 11:13-15 Salmos 51:17
Punto Fundamental #7
Por encima de todo, no importa que tanto mal hayamos hecho, usted puede saber que Dios todavía lo ama, to-
davía es “completamente aceptado en el Amado”, y Dios todavía quiere ayudarle a vencer los problemas y para llegar a
ser más como Jesús.
1. Dios lo sigue amando.
Romanos 5:8 Romanos 8:38-39
2. Todavía eres aceptado en sus ojos.
Efesios 1:6-7 1 Juan 2:1-2
3. Dios todavía quiere ayudarle a vencer sus problemas y llegar a ser más como Jesús.
Romanos 8:28-29 II Corintios 3:18
OTROS RECURSOS
Para unos buenos estudios bíblicos sobre el tema de guerra espiritual del tipo “de llenar los espacios vacíos”,
elija algunas selecciones de lo siguiente:
“Los Diez Grados Básicos del Desarrollo Cristiano” de Cruzada Estudiantil y Profesional para Cristo:
• Grado 2, Lección 6: “La Armadura del Cristiano y la Guerra”
Lección 7: “Actitud”
El Diseño del Discipulado - Es una serie desarrollada por Navegantes
• Libro 2, Capítulo 1: “El Cristiano Obediente”
164 DISCIPULADO PERSONAL
• Libro 4, Capítulo 3: “La Pureza de la Vida”
Capítulo 4: “Integridad para Vivir”
Capítulo 5: “Carácter en Acción”
• Libro 5, Capítulo 4: “Guerra Espiritual”
TERMINANDO LA SESIÓN
Practiquen juntos algunos “juegos de guerra.” Utilizando los cuatro pasos para resistir a Satanás bajo el Punto
Fundamental #4 (Detectar, Facultar, La Trampa, Refuerzos) desarrolle escenarios de tentación y formule planes de reac-
ción. Una persona puede crear la escena, mientras que la otra busca la manera de huir de la tentación, el versículo que
utilizaría para resistir a Satanás, lo que le diría, etc.
Si son bastante amigos, y se pueden compartir cosas tranquilamente, cuéntense una o dos áreas de tentación en
las que han tenido dificultades para obtener una victoria constante. Pasen tiempo orando por ello, y continúen orando el
uno por el otro durante la semana.
EVALUACIÓN
Pregúntese lo siguiente:
1. Adversidad. ¿Entiende su discípulo que la adversidad es una parte normal de la vida cristiana, y que Dios
utilizará las pruebas a las que él se enfrente para ayudarlo a crecer espiritualmente?
2. Satanás. ¿Entiende que Satanás es un ser personal, y que, con sus demonios, está constantemente buscan-
do como utilizar al mundo y nuestra naturaleza humana para instarnos a rebelarnos contra la autoridad de
Dios?
3. Tentación. ¿Entiende que tiene que huir de la tentación y resistir a Satanás? ¿Ha compartido con usted
alguna experiencia personal que demuestra su entendimiento?
4. Pecado. ¿Está convencido de que, aunque el pecado interrumpe su comunión con Dios y que Dios se en-
tristece por su pecado, Dios todavía lo ama y lo acepta totalmente como su hijo? ¿Sabe como restaurar su
comunión con Dios a través de la confesión, humilde arrepentimiento y reapropiarse de la llenura de Espí-
ritu Santo? ¿Ha compartido alguna experiencia personal que demuestra su entendimiento?
Si puede contestar afirmativamente a todas estas preguntas, entonces su discípulo ha llegado a la meta de este
objetivo de entrenamiento. Si usted necesita más información de él para completar sus respuestas, aquí hay algunas pre-
guntas que puede hacerle:
1. Cuándo te hiciste cristiano, ¿te pareció que todos tus problemas se acabaron y se fueron? (Probablemente
dirá que no) Bueno, si eres hijo de Dios ahora, ¿por qué crees que Él permite que continúes teniendo pro-
blemas?
GUERRA ESPIRITUAL 165
2. ¿Usualmente, cuál es tu primera reacción cuando algo sale mal? ¿Cuál sería la actitud que un cristiano
debería tener?
3. ¿Crees que llegará el momento cuando no experimentemos más adversidad en nuestra vida?
4. ¿De dónde crees que vienen las adversidades en la vida? ¿Las causamos nosotros, las causa el diablo, las
consecuencias de nuestro pecado o las ocasiona Dios? (La respuesta correcta, por supuesto es: “todas las
anteriores”)
5. ¿Cuál dirías que es el objetivo de todas las tentaciones de Satanás? (Él intenta que nos rebelemos contra la
autoridad de Dios y ponernos bajo su autoridad una vez más.)
6. ¿Puedes pensar en algún momento en tu vida cuando Dios cambió una mala situación en una buena?
7. ¿Cuál es nuestro mejor plan de acción cuando nos topamos con una tentación? (Huir)
8. ¿ Cuál es nuestro mejor plan de acción cuando nos topamos con Satanás? (Resistirlo)
9. ¿Cómo resistirías al diablo en una situación específica? (Produzca un escenario para que conteste)
10. ¿Cuál es el papel de la Palabra de Dios en la guerra espiritual?
11. Como Jesús ya pagó la pena por nuestros pecados, y como ya nos es dada la vida eterna, ¿estaría bien
ahora salir y pecar hasta la saciedad? ¿Por qué no? ¿Qué mal vendría de eso?
12. ¿Qué efecto causa nuestro pecado en Dios? ¿Qué le sucede a tu relación con Él? ¿Causará esto que te
odie?
13. Cuándo pecas, ¿qué haces para restaurar tu relación con Dios?
14. ¿Qué tan importante es el “arrepentimiento” para restaurar tu relación con Dios?
19 OBJETIVO DE ENTRENAMIENTO #11
MANEJO DEL TIEMPO
OBJETIVO
El discípulo tiene un entendimiento básico de los principios del manejo del tiempo y ha iniciado una estrategia
para utilizarlo mejor.
166
MANEJO DEL TIEMPO 167
Algunos lo intercambian por nada. Mientras escribo esto, el promedio de los estadounidenses pasa un quinto de
sus horas productivas frente al televisor. Así que cada año, han pasado cada precioso momento desde el 1 de enero al 13
de marzo haciendo nada salvo mirar el tubo de rayos catódicos. Algunos lo intercambian por basura. Quizás ha visto
una calcomanía o en una camiseta pregonando en intrigante triunfo “¡Aquel que muere con más juguetes gana!” Ese es
realmente el credo motivador para millones de personas hoy día, se den cuenta o no. Pero al final, todos los juguetes no
tienen valor. Se rompen, se los roban, se gastan o son dejados en este mundo cuando su dueño pasa al siguiente.
Por el otro lado, otros intercambian su tiempo por oro, plata y joyas preciosas, del tipo que menciona 1
Corintios 3:11-14. . . del tipo eterno.
Queremos gastar nuestro botín en este último grupo, y esperamos que nuestro discípulo también lo haga. Pero
no podemos decirle a una ocupada ama de casa lo importante que es que saque una hora para un estudio bíblico, si no le
decimos de dónde tomar esa hora. No podemos sugerirle a un atareado ejecutivo de cuentas que encuentre veinte minu-
tos al día para orar cuando está corriendo desde el amanecer hasta el anochecer. Tenemos que ayudarles a organizar lo
secular para que haya el suficiente tiempo para lo sagrado.
En realidad, discipulador, este objetivo de entrenamiento es tanto para su discípulo como para usted. Si lucha
con esta área, un inadecuado manejo del tiempo está limitando su ministerio, y le anímo a asimilar estos principios junto
con su discípulo.
INDRODUZCA EL TEMA
Primero, investigue dónde está su discípulo en cuanto al tiempo. ¡Puede que esté mejor que usted! Hágale
unas cuantas de las siguientes preguntas.
1. ¿Haz pensado en tu propósito específico o misión en vida? No me refiero “como cristiano” o “como hu-
mano”, sino “TU”. ¿Qué es lo que quisieras hacer en los setenta y cinco o más años que te han dado en
este mundo? (Si puede contestar. . .) ¿Sientes que estás alcanzando ese propósito?
2. ¿Cuáles son algunas de tus principales metas en la vida? ¿Crees que esas metas se alinean con las metas
que Dios tiene en mente para ti? (O, ¿cómo calza Dios en esas metas?) ¿Qué pasos específicos estás to-
mando para alcanzar esas metas?
3. ¿Cuáles son tus primeras cinco prioridades en la vida? ¿En orden de importancia cómo las ordenarías?
¿Cómo las clasificarías respecto a la cantidad de tiempo que inviertes en ellas cada día? ¿Cómo se alinean
estas prioridades con tus metas o tu propósito en la vida?
4. ¿A menudo sientes que el día no tiene suficientes horas para hacer todo lo que te gustaría?
5. ¿Hay algunas actividades que están minando tu tiempo, y deseas deshacerte de ellas? (De ser así. . .)
¿Cuáles son?
6. ¿Tienes un sistema de manejo del tiempo con el cual estás satisfecho? (De ser así . . .) ¿Te molestaría
compartirlo conmigo?
7. ¿Llevas a cabo tus quehaceres con la ayuda de un calendario personal o una lista de ‘cosas por hacer’?
Siempre encontramos tiempo para hacer las cosas que consideramos importantes, este ejercicio le ayudará a su
discípulo a darse cuenta donde están sus prioridades actuales. Alguien podría decir que ir a la iglesia es importante para
él, pero si va de vez en nunca, tenemos razones para dudar.
Haga que su discípulo sume las horas. La diferencia que exista entre el total de horas y las 168 horas semanales
debe considerarse “tiempo perdido”. Para muchas personas la diferencia no será mucha, pero para otras la diferencia
puede ser significativa. Este último grupo sentirá que se le está llamado la atención, y comenzaran de inmediato a bus-
car las inexplicables “fugas de tiempo”.
Ahora regrese y vea la lista de actividades generales y especificas que acaban de escribir. ¿Cómo calzan el ac-
tual uso del tiempo con la lista idealizada y Cristo-céntrica de actividades de su discípulo? ¿Cuánto de lo que hace ac-
tualmente calzaría en algún punto de las primeras dos listas? Lo más importante, ¿cuáles de las actividades especificas
calzan en la lista de actividades actuales de su discípulo? ¿Se deberían de agregar actividades a las primeras dos listas?
170 DISCIPULADO PERSONAL
A menos que su discípulo sea excepcionalmente maduro espiritualmente, se percatará de una gran diferencia
entre las primeras dos listas y la tercera. Esto debería motivarlo a comenzar el cambio. Asegúrese que entienda que
todos los cristianos comienzan con las prioridades al revés. Una de las razones primordiales por lo cual Dios nos dio al
Espíritu Santo es para alinear la lista 3 con las listas 1 y 2. No sucede de la noche a la mañana, no es prácticamente fácil,
pero si cooperamos con Dios, Él hará que suceda.
II. Determine la Declaración de Misión para la Vida que Refleje esas Prioridades
Una declaración personal de misión simplemente expresa lo que uno está realizando o espera realizar. Proba-
blemente incluirá una respuesta a las necesidades ante las cuales se siente particularmente calificado y profundamente
identificado para enfrentar. Bobb Biehl pregunta en su “Masterplanning Arrow”2 (Flecha de Panificación Maestra,)
¿Cuáles son las necesidades que nos hacen llorar o golpear la mesa?”
Por encima de todo, la declaración de misión debe reflejar las prioridades personales del discípulo mencionadas
anteriormente. Biehl establece que esta declaración está compuesta por tres características muy importantes:
“direccional” (lleva a algún lugar; se logra algo), “sombrilla” (agrupa todo lo que se hace), y “para toda la vida” (conti-
nuo, nunca se logra por completo; nunca necesita cambiarse).
Aquí hay algunos ejemplos de declaraciones personales de misiones:
Mía: “Cooperar con Dios en Su programa de conformarme a la imagen de Jesucristo, utilizando todos mis re-
cursos disponibles para servirle a Él, a mi familia y a la humanidad principalmente a través de un fructífero ministerio de
discipulado, escribiendo y dando conferencias.”
David Dawson, fundador y director del Ministerio Equipando a los Santos: “Caminar en comunión diaria con
Dios y ordenar mi vida y mi familia de acuerdo con la Palabra de Dios para que diariamente estemos intercambiando
nuestras vidas por el cumplimiento de la Gran Comisión de Cristo.”3
John Klein, director nacional asociado de Atletas en Acción: “Amar al Señor con todo mi corazón, alma y men-
te y a mi prójimo como a mí mismo, y ser un buen mayordomo de los recursos que Dios me ha dado, glorificándolo en
todo lo que hago.”
Bobb Biehl, fundador y director del Grupo Internacional “Masterplanning”: “ Amar a Dios y a mis semejantes y
mostrar ese amor al ayudar a personas a ver la vida con mayor claridad y a conocer como lidiar con las presiones y retos
de la vida.”
Terry Valentine, director de admisiones asociado de “Spring Arbor College”: “Hacer discípulos en todas las
áreas y entre toda la gente en cumplimiento de la Gran Comisión, proveyendo visión, estrategia, y entrenamiento en la
oración, el evangelismo y el discipulado, trabajando a través de la iglesia donde sea posible y dirigido a la sociedad en
general.”
Esto sería una buena manera de finalizar esta sesión, dele la tarea de dedicar la semana siguiente en la formula-
ción de su propia declaración de misión. Usted tal vez tendrá que llamarlo una o dos veces durante la semana para re-
cordárselo, especialmente para que no lo haga cinco minutos antes de la próxima reunión. Anímelo a pasar bastante
tiempo, una hora completa trabajando en ella – necesitará ese tipo de concentración.
III. Determinar las Metas a Largo Plazo que combinadas harán que la
Declaración de Misión sea Funcional
Los siguientes tres pasos, establecer las metas a largo, mediano y corto plazo, son estrategias bien conocidas y
ampliamente utilizadas en la administración del tiempo. Me gusta la manera en que Richard Furman, M.D., habla de
ellas en Reaching Your Full Potential (Alcanzando su Potencial Completo 4). Su exposición en forma sucinta y con los
pies en la tierra de los principios de peso, sobresale. En cuanto a la meta a largo plazo dice, “Establézcala y nunca la
cambie.” Estos son los grandes sueños que pasamos meses, años o décadas persiguiéndolos. Todas sus metas a largo
plazo mezcladas harán que se cumpla su declaración de misión. La declaración de misión es el carro y las metas a largo
plazo son las ruedas que permiten que el carro se desplace.
La primera meta a largo plazo del Dr. Furman fue convertirse en cirujano. Esa no es una tarea fácil. Una de
mis metas a largo plazo es convertirme en escritor. Entre más específica la meta, mejor es, sin embargo, en el ámbito de
las metas a largo plazo ser específico no es crucial. El día que el Dr. Furman completó su residencia pudo decir, “Hoy
completé mi meta.”
MANEJO DEL TIEMPO 171
Algunas metas son de esa forma, bastante específicas. La mía, sin embargo, no lo es. Cuando era un atleta uni-
versitario, podía decir, “Me gustaría ser un escritor”, y mi meta fue hecha con claridad pero contrastaba con lo que esta-
ba haciendo en ese momento. El camino del “escritor” era muy diferente al del “atleta profesional”, “mecánico”, o
“agente de seguros”. Al pasar del tiempo y convertirme en el administrador de Atletas en Acción, la meta se comenzó a
poner borrosa – los contrastes ya no eran tan evidentes. Es cierto que escribí algunas cosas, pero eran utilitaristas, cosas
como presentaciones de diapositivas, memos, reportes, propuestas. Realmente no representaron mi primera visión de
“un escritor”. Por esa razón, necesitaba metas a mediano plazo. Pero hablaremos de eso en un momento. El primer
paso es tener algunas metas a largo plazo en papel, sean específicas o no.
Haga que su discípulo exprese algunas metas propias. Estas metas pueden tratar con algunas o todas las áreas
de su vida:
1. Espiritual 5. Financiero
2. Física 6. Familiar
3. Personal 7. Social
4. Vocacional 8. Política
¿Qué le gustaría que sucediera en su vida en los próximos 20 o 30 años? ¿Cuándo tenga 70, que le gustaría ha-
ber hecho? ¿Qué es lo que necesita para poder decir al final de su vida, “No tengo remordimientos”? ¿Tener una fami-
lia? ¿Convertirse en piloto comercial? ¿Ir a Francia a vivir? ¿Ganarse un millón de dólares? ¿Competir en las
Olimpiadas? Deben existir algunas especificaciones – no serviría, por ejemplo, tener una meta tal como “Ser Feliz”.
Con una meta así, uno debería preguntarse, “¿Qué es lo que me haría feliz?”
Después de enumerar sus metas principales (pueden ser de dos a diez) vea si calzan en su declaración de mi-
sión. Si no, las metas o la declaración de misión deben cambiar. Por cierto, está correcto que el discípulo cambie la de-
claración de misión, especialmente en estos días cuando apenas está intentando descubrir lo que es importante en su
vida. Frecuentemente, cuando uno comienza a pensar en términos de metas específicas, el panorama de las metas de la
vida se aclara considerablemente. Tal vez querrá revísalas mientras madura en Cristo y obtiene un panorama más claro
de la misión de Dios para él.
IV. Determinar Metas a Mediano Plazo que ayudarán a alcanzar las de Largo Plazo
Las metas intermedias son claves para las de largo plazo. Todas las metas intermedias juntas equivalen a una
de largo plazo. ¿Recuerda al Dr. Furman? Su primera meta a mediano plazo fue ser aceptado en la escuela de medicina.
Eso le daba algo bastante específico – y bastante imperativo. Era su primer clave. Si no podía cumplir con eso, podría
olvidarse de ser cirujano.
Mi primera meta a mediano plazo para convertirme en escritor fue, “ver si tenía algún tipo de talento.” Si no lo
tenía, debía olvidarme de mi meta a largo plazo o asegurarme de conseguirlo. La siguiente meta era, “Publicar un artí-
culo o un libro.” Luego, “Publicar cinco artículos o libros.” Y finalmente, “Publicar un best-seller.” Mi deseo era ser-
virle a Cristo a través de un fructífero ministerio a través de escribir, como lo menciono en mi declaración de misión.
Me imaginé que si existe cantidad (cinco artículos o libros) y calidad ( un best-seller), estos serían fuertes indicadores de
que en verdad he alcanzado un “fructífero ministerio como escritor.” ¡Todavía no he alcanzado esas metas - pero estoy
trabajando en ellas!
Haga que su discípulo examine cada una de sus metas a largo plazo y formúle las metas a mediano plazo que
necesitará para alcanzarlas a la luz del uso sabio del tiempo. Si él quiere ser un piloto comercial, primero debe obtener
la licencia de piloto privado, luego la licencia de piloto comercial, y después obtener un trabajo. Si quiere ganarse un
millón de dólares, quizás lo primero que tiene que hacer es pagar sus deudas. Después tal vez necesitará un título en fi-
nanzas. Si quiere criar una familia, su primera meta debe ser casarse. Luego tener el bebé. Muy importante.
V. Determinar Metas a Corto Plazo que ayudarán a alcanzar las Metas a Mediano Plazo
La siguiente pregunta que debe hacerse alguien que está estableciendo metas es, “¿Qué puedo hacer en este mo-
mento para que la bola comience a rodar hacia la primera meta intermedia?” Su respuesta será una lista de metas a Cor-
to Plazo. Durante su segunda noche en clases de química en el ámbito universitario, el Dr. Furman se dio cuenta que
toda su estructura de metas dependería de lo que él hiciera esa noche. Si no estudiaba esa noche, reprobaría el examen,
si reprobaba el examen, obtendría una baja nota en el curso, si sus calificaciones eran bajas, no habría escuela de medici-
na, y sin escuela de medicina, no habría cirujano. Al contrario, si estudiaba, las puertas comenzaban a abrirse cada vez
172 DISCIPULADO PERSONAL
más hasta llegar a quedar de par en par en su camino a ser un cirujano. Todo dependía de cómo utilizara su tiempo in-
mediato, y eso era: “Estudiando ese momento.” Tuvo que decirles que no a unos amigos que querían reunirse para ver
fútbol y comer pizza. Nada hay de malo con el fútbol y la pizza, pero había determinado su misión, sus metas a largo y
mediano plazo, toda la operación dependía en lo que él hiciera, no la próxima semana, ni en la mañana, ni más tarde,
sino en ese momento. Su primera meta a corto plazo: “apartar tiempo para estudiar todos los días y nunca apartarse de
eso.”
Para averiguar si tenía talento para escribir, me propuse como meta a corto plazo hablar con alguna gente en
particular que sabía que serían honestos conmigo. Ellos habían leído bastante de lo que yo había producido, y sin poner-
los en un aprieto, pude obtener su cándida opinión. No sé lo que usted piensa, pero ellos creyeron que tenía potencial.
Mi próxima meta a corto plazo fue plantearle una idea a una editorial adjunto les envié un pedazo del escrito, para ver
que pensaban de la prosa. La logré, además me dieron luz verde, ¡en forma de un contrato firmado! Esto significó para
mí que en realidad tenía algo de talento como escritor. No que no necesitara una buena afinada, pero había talento. El
horizonte estaba claro para seguir con mi próxima meta a mediano plazo: Publicar un artículo o un libro. ¡Usted tiene en
sus manos el cumplimiento de esa meta! ¡Así que se han cumplido dos, falta una!
Haga que su discípulo examine sus metas a mediano plazo una por una y que escriba las claves requeridos para
alcanzar cada uno. Estos deben incluir actividades específicas en términos claros, concisos y establecidas en un marco
de tiempo. Puede que mencione 20 o 30 de ellos, de manera que debe revisar la lista y escoger aquellos que puede ma-
nejar en un futuro cercano. Esos serán las metas a corto plazo.
Esta lista puede parecerse sospechosamente a una lista de tareas, pero tienen un gran propósito – guiarlo hacia
las metas que Dios ha puesto delante de él. Es una lista de actividades específicas que tienen sus raíces profundas en su
misión en la vida.
OTROS RECURSOS
Si usted quisiera que su discípulo complete algunos estudios bíblicos sobre la administración del tiempo, consi-
dere lo siguiente:
“Los Diez Grados Básicos del Desarrollo Cristiano” Serie de estudios bíblicos de Cruzada Estudiantil.
• Grado 8, Lección 1: “La Pertenencia de Dios nuestro Padre”
Lección 2: “La Mayordomía de nuestro Tiempo”
El Diseño del Discipulado - Es una serie desarrollada por Navegantes:
• Libro 6, Capítulo 2: “El Mayordomo Responsable”
TERMINANDO LA SESIÓN
Haga una cita con su discípulo, ambos deben apuntarla en la agenda, para reunirse y re-evaluar su misión, me-
tas a largo, mediano y corto plazo más o menos en tres meses. Le tomará por lo menos ese tiempo para darse cuenta sí
su actual inventario esta correcto.
Entren en un pacto mutuo de rendirse cuentas. Comprométanse a orar el uno por el otro cada día sobre el uso
del tiempo. Chequéense y anímense para mantener la mayoría de las actividades diarias en línea con sus metas. Asegú-
rese que escriba la misión y las metas a largo y mediano plazo y que las ponga en un lugar donde las pueda ver frecuen-
temente. En la pared al frente del servicio sanitario es un buen lugar...
EVALUACIÓN
Hágase estas preguntas:
1. ¿Tiene mi discípulo en sus prioridades personalas una perspectiva centrada en Dios?
2. ¿Tiene mi discípulo una misión que refleje el Señorío de Cristo? ¿Alcanza el criterio de una buena decla-
ración de misión?
3. ¿Tiene metas a largo y mediano plazo que calzan con su declaración de misión y prioridades?
4. ¿Ha formulado metas válidas a corto plazo que ayudarán a cumplir sus metas más grandes?
5. ¿Está utilizando listas de quehaceres y una agenda personal?
6. ¿Está al tanto de las ideas prácticas mencionadas en la sub.-sección VI de la sección Sugerencias para
Crecer?
Si las respuestas a cada una de estas preguntas es positiva, entonces su discípulo ha alcanzado este objetivo de
entrenamiento. Si necesita un poco más de información para obtener sus respuestas, hágale las siguientes preguntas:
1. Según Dios, ¿cuáles deberían ser nuestras dos prioridades principales?
2. En este momento, ¿cuál es tu idea acerca de una misión de vida?
3. ¿Sientes que Dios tiene una posición central en tu declaración de misión?
4. ¿Cuáles son algunas de tus metas a largo plazo? ¿Qué te gustaría que pase en tu vida dentro de los si-
guientes 25 años? Describe como ves un día de tu vida en el año 2013.
5. ¿Todavía se te hace difícil decir que “no” a una petición de dar tiempo que entrará en conflicto con tus
prioridades? (De ser así...) ¿Qué has pensado hacer al respecto?
6. ¿Qué harías si alguien te pide que seas parte de un prestigioso comité en tu iglesia cuando tengas tiempo,
pero sabes que no calza con tu estructura de prioridades?
7. ¿Hay algunas actividades innecesariamente consumiendo tu tiempo? (De ser así...) ¿Cuáles son? ¿Qué
has pensado hacer al respecto?
8. ¿Estás manteniendo una agenda personal y una lista diaria con prioridades?
9. ¿Cómo te va con tu horario diario? ¿Te puedes apegar a él?
10. ¿Qué tan importante es pedirle a Dios que diariamente esté en control de nuestros horarios?
11. ¿Cómo te va con multiplicar tu tiempo y utilizar el tiempo muerto?
20 OBJETIVO DE ENTRENAMIENTO #12
VISIÓN
OBJETIVO
El discípulo entiende que tan significativo es él para el avance del Reino de Dios, tiene un panorama claro de
algunos de los amplios planes que Dios tiene en mente para él, y está motivado para buscar activamente su desarrollo
espiritual y su relación con Dios.
176
VISIÓN 177
El joven contestó, “No, pero tuve problemas con su perro lazarillo.”
Sin visión física, la gente es a veces engañada. Sin visión espiritual, la gente es peor que engañada. Salomón
dice en Proverbios 29:18, “Sin profecía el pueblo se desenfrena” (Reina Valera) Salomón se refería a las “revelaciones
de Dios” del presente y del futuro. En aquellos días, antes de que la Biblia fuera escrita en su totalidad, Dios le hablaba
al ser humano primordialmente a través de profetas que tenían visiones. Sin ellas, la gente no habría conocido lo que
Dios tenía en mente, o lo que estaba preparado para ellos más adelante en el camino. Sin ese conocimiento, ellos recha-
zarían a Dios o eventualmente se olvidarían de todo. Pero ahora que tenemos tanto el Antiguo como el Nuevo Testa-
mento, Dios nos habla principalmente a través de Su Palabra. Podemos leer los pensamientos de Dios en el momento
que lo deseemos.
Dios tiene planes para su discípulo. Grandes planes. Pero si su discípulo no tiene ni idea de cuáles serían esos
planes, existe la gran posibilidad de que pierda la motivación y se rinda. Él “perecerá” – como una semilla que cae en el
concreto, incapaz de crecer y reproducirse. Obviamente, no estamos hablando de perecer eternamente, pero en cuanto a
la vida victoriosa y el tener un impacto en este mundo, es como si estuviera muerto.
Si su discípulo tiene visión, estará mucho más motivado a engancharse para todo el viaje. Necesita entender el
hecho que personalmente tiene el potencial para ser usado de forma significativa por Dios para que Su Reino avance
aquí en la Tierra. Necesita ver el valor a largo plazo y el beneficio personal en esto. Tiene que enfocarse en las cosas de
arriba, valorar lo eterno sobre lo temporal. Necesita, como dijera Dawson Trotman, “Ponga en su corazón lo que está en
el corazón de Dios – el mundo.”1
Por otro lado, en realidad no estamos interesados en invertir nuestra vida en gente que caminaría con el Señor
por cuatro meses y luego caen en neutro por el resto de sus vidas en la tierra. Esta práctica ha llevado al cuerpo de Cris-
to a una condición de sobrepeso y desnutrición. Nunca antes el Evangelio había hecho tan sorprendente mella en la po-
blación mundial con tan poco efecto. El terreno en el que la mayoría de las iglesias de hoy parecen haber sembrado es el
segundo tipo descrito en Mateo 13:5-6
“Parte cayó en pedregales, donde no había mucha tierra; y brotó pronto, porque no tenía profundi-
dad de tierra; pero salido el sol, se quemó; y porque no tenía raíz, se secó.”
Nosotros estamos interesados en invertir nuestro bien obtenido tiempo en semilla que caiga en terreno bueno –
el tipo que produce 30, 60 o 100 veces. El que germina y sigue creciendo. Como dijo Pablo en 2 Corintios 8:11, “Aho-
ra, pues, llevad también a cabo el hacerlo, para que como estuvisteis prontos a querer, así también lo estéis en cumplir
conforme a lo que tengáis.” O como Salomón escribiera en Eclesiastés 7:8, “Mejor es el fin del negocio que su princi-
pio; mejor es el sufrido de espíritu que el altivo de espíritu.” No es que no amemos, nos preocupemos y oremos por los
que se han echado atrás, pero en cuanto a nuestras actividades que deseamos realizar, probablemente muy rápidamente
invertiríamos nuestro tiempo en aquellos que siguen al Señor. Es normal desear ver el fruto de nuestra labor.
Hay cosas que como discipuladores podemos hacer para “preparar el terreno” que recibe la semilla. De eso se
trata el discipulado, ¿no es cierto? Se planta, se riega, se fertiliza, se deshierba – para facilitar el crecimiento máximo.
No podemos hacerlos crecer – ese es el trabajo de Dios – pero podemos crear un ambiente que facilite el crecimiento.
De hecho, hemos venido haciéndolo. Y podemos agregarle un último fertilizante de alta potencia: visión.
No existe ninguna manera de instalar en una persona el compromiso a largo plazo, pero la visión sí puede llevar
al compromiso. Impartimos visión al enseñar sobre ella, al modelarla, y orar esto sobre nuestros discípulos, como
aprendimos en el Capítulo 4 con los tres pilares del discipulado: Contentamiento, Relaciones y Oración. Usted debe ser
responsable en la parte de modelar y orar, pero yo puedo darle algunas ideas en cuanto a que enseñar.
INTRODUZCA EL TEMA
Supongamos que le pidió a su discípulo que leyera ya sea Born to Reproduce (Nacido para Reproducirse) o
¿Cómo Ayudar a Cumplir la Gran Comisión?, como fue sugerido en la sección Tarea para la Próxima Vez del Objetivo
de Entrenamiento #11, úselo para iniciar la discusión. Aquí hay unas pocas preguntas como para despegar si se leyó
Born to Reproduce (Nacido para Reproducirse):
1. ¿Qué piensas del artículo?
2. ¿Qué fue lo que más te impresionó?
3. ¿Dirías que estás listo para ser un “reproductor espiritual”? (Si no, continúe con la pregunta 4; si lo está,
vaya a la pregunta 5.)
178 DISCIPULADO PERSONAL
4. ¿Qué crees que hace falta para que estés listo? ¿Qué crees que involucra ser un reproductor espiritual?
5. ¿Quieres ser un reproductor espiritual?
6. ¿Por qué sí? o ¿por qué no?
Si se leyó ¿Cómo Ayudar a Cumplir la Gran Comisión? utilice algunas de las siguientes preguntas:
1. ¿Qué pensaste?
2. ¿Qué fue lo que más te impresionó?
3. ¿Recuerdas de lo que se trata la Gran Comisión?
4. ¿A quién se le dio la Gran Comisión?
5. ¿Qué crees que debemos hacer para ayudar a cumplir la Gran Comisión?
6. ¿Estás personalmente interesado en ayudar a cumplir la Gran Comisión?
7. ¿Por qué sí? o ¿por qué no?
Después de discutir un poco las repuestas, yo entraría en materia diciendo algo como lo siguiente:
Samuel, hemos recorrido mucho territorio en los últimos meses. Has aprendido como ser lleno del
Espíritu Santo, la importancia de “sacar el agua del nuevo pozo en lugar del viejo”. Has aprendido
algunas cosas prácticas que te ayudarán a madurar en tu caminar con Cristo, tal como orar, estudiar la
Biblia, la comunión y el testificar, como defenderte en la guerra espiritual y como aprovechar al máxi-
mo tus días a través de la administración efectiva del tiempo.
Me impresionó algunas de las grandes metas que expresaste la semana pasada, especialmente el
de... (Esperemos que tenga 1 o 2 metas que demuestren un compromiso a largo plazo con Cristo y / o
tener un ministerio. Resáltelas.) No sé si tienes idea de cómo alcanzar esas metas. ¡Creo que Dios
está más interesado en ayudarte a alcanzar tus metas que tu mismo!
A los ojos de Dios eres una persona extremadamente importante, y tienes el potencial de ser utili-
zado tremendamente por Él para extender Su Reino aquí en la tierra. No estoy hablando de convertirte
en otro Billy Graham o algo por el estilo, pero donde quiera que estés, Dios quiere usarte para extender
Su Reino, a través de cualquier don o talento que Él haya puesto en ti.
Tomemos el resto del tiempo que nos queda conversando sobre lo que hay guardado para ti más
adelante.
Juntos, busquen cuantos versículos deseen de la lista siguiente y escriban el requisito y el beneficio correspon-
diente. Si no ve su promesa favorita en esta lista, ¡por favor inclúyala!
Salmos 37:3-5 Daniel 11:32 2 Corintios 5:10
Salmos 37:23-24 Mateo 5:3-12 Filipenses 4:6-7
Salmos 55:22 Mateo 6:33 2 Timoteo 2:20-21
Salmos 81:10 Mateo 10:32 2 Timoteo 4:8
Salmos 84:11 Mateo 10:28-30 Santiago 1:12
Salmos 91:11-16 Lucas 6:22-23 1 Pedro 5:2-4
Proverbios 3:5-6 Lucas 6:38 1 Pedro 5:6
Proverbios 16:7 Juan 12:24 1 Juan 1:9
Isaías 1:19-20 Juan 14:21 Apocalipsis 2:10
Isaías 40:31 Romanos 8:28
Isaías 58:10-12 1 Corintios 9:24-27
VISIÓN 183
OTROS RECURSOS
Si desea algún material del tipo de “completar” con asuntos que le puedan ayudar a su discípulo a obtener vi-
sión, seleccione alguno de los siguientes:
El Diseño del Discipulado - Es una serie desarrollada por Navegantes
• Libro 3, Capítulo 1: “Madurando en Cristo”
• Libro 4, Capítulo 1: “El llamado a una Vida Fructífera”
• Libro 5, Capítulo 5: “El Regreso de Cristo”
• Libro 6, Capítulo 1: “¿Qué es un Discípulo?”
Capítulo 5: “Visión Mundial”
También puede compartir el panfleto de Dawson Trotman llamado La Necesidad de la Hora3 En él, Trotman
expone la necesidad de ser parte de un ejército de hombres y mujeres “que quieren lo que Jesucristo quiere y creen que
Él desea darles el poder para hacer lo que les ha pedido.”
Por supuesto, si no lo ha hecho todavía debe pasarle una copia de Born to Reproduce (Nacido para Reproducir-
se)4 también de Trotman, ó el Concepto Transferible #7: “Cómo Puede Usted Ayudar a Cumplir la Gran Comisión”5 de
Bill Bright. O dele ambos – ambos tocan el tema del compromiso a largo plazo desde dos perspectivas diferentes.
TERMINANDO LA SESIÓN
El propósito principal detrás de esta sesión es que su discípulo sea motivado a mantener o profundizar su com-
promiso con el Señor y con el ministerio que Él lo ha llamado a completar. La mejor manera para demostrar este com-
promiso es el entusiasmo que muestre para continuar reuniéndose con usted para ser discipulado.
Recuerde que en el capítulo 8, cuando hablamos sobre incitar a una persona a este proceso de discipulado, reco-
miendo que se le pida comprometerse con un bloque de 5 meses, en el cual verían 12 temas que son vitales para su salud
y crecimiento espiritual futuro. También recomendé que le diga al final de cada periodo que tiene la opción de seguir
con el programa o posponerlo indefinidamente. Hoy es el día de recordárselo. Podrías abordarlo con algo así:
USTED: Bueno Samuel, ¡lo logramos! Hemos completado los doce temas de los que te hablé hace unos pocos
meses atrás que te ayudarían a afirmar y crecer en tu caminar con Dios. ¿Crees que te han ayudado?
DISCÍPULO: ¡Sí! ¡Por supuesto! ¡Tremendo! ¡Maravilloso! ¡Fantástico! ¡Increíble! ¡Al Máximo! (Estoy
intentando ser un poco optimista con su respuesta, ¿lo notó?).
USTED: ¡Me alegra escuchar eso! Has recorrido un largo trecho en estos últimos meses; ¡no hay duda! Pero
me pregunto, ¿te faltará todavía camino por cubrir? Especialmente después de la sesión de hoy y todo lo
que hemos visto sobre las cosas que Dios tiene para ti. ¿Crees que todavía exista algo más que puedes
aprender?
DISCÍPULO: Por supuesto. No hay duda. Ni siquiera sé por donde comenzar. . . (todavía optimista.)
USTED: Creo que ninguno de nosotros llegará jamás al punto de decir, “Ahora lo sé todo. No necesito apren-
der más.” Siempre hay más que el Señor quiere que aprendamos. De todas maneras esa es la definición
de discípulo, “aprendiz.” Cuando dejamos de ser aprendices, dejamos de ser discípulos. ¿Recuerdas que
al inicio de esta serie, te dije que te daría la opción de continuar con tu entrenamiento cuando terminára-
mos los doce temas? Bueno, ahora es tiempo de decidir. ¿Has pensado si te gustaría que nos siguiéramos
reuniendo como hasta ahora?
DISCÍPULO: Lo he estado pensando, pero tengo algunas preguntas. Si continuáramos, ¿sería por otros 5 me-
ses o qué?
USTED: Si continuamos, creo que estaríamos hablando de un compromiso de un año. Por supuesto podemos
ser flexibles en cuanto a tiempo debido a los viajes de negocios, las vacaciones, etc. Pero, creo que sería
correcto si consideramos un año.
DISCÍPULO: ¿Estaré listo al final de ese año?
184 DISCIPULADO PERSONAL
USTED: En realidad nadie estará “listo” nunca. Pero estarás mucho más preparado que ahora. Al final del año,
si podemos ser bastante constantes con nuestras sesiones y si tu nivel de compromiso sigue alto, puedo
verte firmemente establecido en tu caminar con el Señor, con hábitos en tu vida como el estudio bíblico, la
oración y el compañerismo. Te veo sacando provecho de las muchas oportunidades que Dios te dé para
compartir tu fe, y haciéndolo con soltura y confianza. Te veo descubriendo tus dones espirituales y co-
menzando a utilizarlos para el bienestar del Cuerpo de Cristo. Te veo personalmente ayudando a otros a
madurar así como yo te he ayudado. No tengo ninguna duda de que si las cosas siguen como van, ¡me
estarás ayudando y motivando en mi caminar con el Señor! Pero, aun así, habrá más que aprender. Por
eso, al final de ese año podemos hacer lo que estamos haciendo hoy, re-evaluando si quieres o no conti-
nuar reuniéndote conmigo. Si quisieras proseguir, eventualmente pasaremos menos y menos tiempo jun-
tos y más tiempo con cristianos jóvenes que necesitan entrenamiento. ¡No es que estás destinado por el
resto de tu vida a reunirte una hora y media cada semana conmigo! Pero este lazo y relación estará siem-
pre allí.
DISCÍPULO: Este año que viene, ¿me requerirá la misma cantidad de tiempo?
USTED: Para serte honesto, el compromiso del tiempo aumentará. Mi objetivo es ayudarte no sólo a madurar
en tu caminar y en tu fe, sino ayudarte también en tu ministerio, y que comiences a hacer con otros lo que
he hecho contigo. Esto involucrará no sólo el tiempo que te tome aprender, sino también el tiempo que se
requiera para enseñar a otros. Esto no sucederá todo a la vez, pero en el transcurso del próximo año el
tiempo que inviertas en tu discipulado gradualmente se duplicará – o aun hasta triplicará. Depende de ti y
de cuanto tiempo le puedas dar a esto.
DISCÍPULO: Bueno, ¡no me imagino que quisiera hacer otra cosa! ¿Dónde firmo? ¿Cuándo comenzamos?
(Allí está el optimista otra vez . . .)
EVALUACIÓN
Pregúntese lo siguiente:
1. ¿Entiende mi discípulo que personalmente es muy importante para Dios?
2. ¿Entiende que dentro del plan de Dios está usarlo de una manera significativa para extender Su Reino?
3. ¿Comprende alguno de los amplios planes que Dios ha determinado para todos Sus hijos?
4. ¿Comprende que algunas promesas de Dios son “incondicionales” y que otras son ‘condicionales’?
5. ¿Entiende que si deseamos experimentar todo los privilegios que Dios tiene en mente para nosotros, tene-
mos una cantidad de responsabilidades personales?
6. ¿Parece motivado a proseguir con su desarrollo espiritual y su relación con Dios?
7. ¿Está motivado a desarrollar eventualmente un ministerio por sí sólo?
Si puede contestar que si a cada una de las preguntas, su discípulo ha alcanzado este objetivo de entrenamiento.
Si necesita más información para determinar sus respuestas, aquí hay algunas preguntas que puede hacerle:
1. ¿Cuándo piensas en como te ve Dios, te ves como una cara más entre la multitud o te ves cara a cara ante
Él, de amigo a amigo?
2. ¿Cuál crees que es tu ministerio potencial? Quiero decir si todo saliera perfecto para ti, ¿cuánto impacto
crees que puedes tener en el mundo para Cristo?
3. Si pudieras expresarlo, ¿en qué cosa te gustaría que Dios te usara en este mundo?
4. De todos los planes generales que sabes que Dios tiene para ti, ¿cuál te emociona más?
5. ¿Cuáles crees que pueden ser algunos planes específicos que Dios tiene para ti?
6. En la escala del uno al diez, siendo uno un recién convertido y diez un cristiano maduro, ¿qué tan cerca
crees “haber llegado” espiritualmente?
7. En la escala del uno al diez, ¿qué tan motivado estas para continuar tu desarrollo espiritual?
8. ¿Dónde calza tu relación con Dios en tu lista de las prioridades de la vida?
9. La Biblia dice que “Dios da el crecimiento” (1 Corintios 3:7), ¿tenemos alguna responsabilidad en ese
proceso? O ¿Dios realiza lo que quiere sin importar nuestra participación?
10. ¿Cómo te afecta la idea de tener algún día tu propio ministerio? ¿Te pone nervioso? ¿Confiado? ¿Ansio-
so de comenzar con eso?
186 DISCIPULADO PERSONAL
SECCIÓN TRES
HACIENDO DISCÍPULOS:
CAMINANDO HACIA
LA MADUREZ
188 DISCIPULADO PERSONAL
21
DISCIPULADO
A LARGO PLAZO
Ya ha terminado. Realmente usted puso toda su alma en esto. Ha ayudado a alguien a establecer las bases de
su fe, y, junto con el Espíritu Santo, usted lo ha motivado para caminar con el Señor. Ahora él lo estará buscando para
que le dé dirección. ¿No es esto maravilloso?
Así que, ¿por dónde continuamos ahora? Bueno, me temo que esta es mi parada – es hora de que yo me baje
del bus. Pero no los dejaría sin un plan.
Usted puede continuar indefinidamente con la estrategia “discípulo-sensibilidad, entrenamiento-orientación ob-
jetiva” que vimos en el capítulo 7. Para hacerlo, usted debe:
1. Determinar el nivel actual de crecimiento espiritual de su discípulo (fortalezas, debilidades, entrenamiento
previo, etc.)
2. Determinar su siguiente paso crucial de crecimiento.
3. Formular un objetivo de entrenamiento relacionado con ese paso.
4. Diseñar un currículo que le ayude a alcanzar ese objetivo de entrenamiento.
5. Desarrollar una evaluación que le ayude a darse cuenta cuando el discípulo ha alcanzado el objetivo de
entrenamiento.
Este procedimiento pareciera bastante simple, pero cuando verdaderamente tratamos de aplicarlo a la vida, a
seres humanos, se convierte en algo bien complicado, porque ¡la gente es complicada! Pero, si se pudo poner un hombre
en la luna, entonces, podemos trabajar en un procedimiento para lanzar a una persona a través de la madurez espiritual.
La primera cosa que tenemos que hacer es encontrar el punto de inicio. Si usted fue el que llevó a su discípulo al Señor,
y si ya lo ha guiado a través de los doce Objetivos de Entrenamiento del Cuidado del Nuevo Convertido, usted ya tiene
un buen entendimiento de donde se encuentra él. Pero si ha heredado un discípulo que ha sido cristiano por un tiempo
ya, usted tal vez necesitará un período de valoración para determinar su actual estado espiritual.
Para hacer una evaluación de alguien, usted necesita algo para medirlo. Yo mido 1.85 m. – la mayoría de la
gente diría que soy alto. Dicen eso porque cuando miden 1.85 m. en una pared, generalmente tienen que levantar la ca-
beza un poquito para hacer la marca. El sistema para evaluar la altura es eficiente. ¿Existe un sistema para evaluar la
madurez espiritual?
El único que conozco es la Biblia. Ahí es donde encontramos cientos de ejemplos específicos. Dios dijo una y
otra vez, “En esto es en lo que quiero que te conviertas. Esto es lo que quiero que hagas. Estas son las cosas que me
complacen.” Pero al mismo tiempo también dice, “Si haces esto, necesitas cambiar, crecer, madurar. Ese no es un com-
portamiento aceptable. Crece.”
El problema es que, estas declaraciones están todas mezcladas. No existe un orden organizado de alguna mane-
ra. La Biblia fue escrita en forma de narraciones históricas, poesía, mensajes proféticos de Dios, y cartas individuales o
grupales, no fue escrita en una secuencia para motivar o mostrar el comportamiento de la infancia a la madurez espiri-
tual. Las “leyes” espirituales son difíciles de encontrar. En cierta forma la Biblia está arreglada de acuerdo a eventos
cronológicos. El Génesis trata de lo que Dios hizo al principio, y Apocalipsis trata de lo que hará al final – todo lo de-
más en la mitad es lo que Dios está haciendo. Como Sus siervos, necesitamos estar concientes de lo que Dios está ha-
ciendo ahora y ser parte de Su programa. Necesitamos meternos de lleno en la Palabra y hurgar ahí hasta que salgamos
con principio de crecimiento que podemos usar.
189
190 DISCIPULADO PERSONAL
Esto puede que nos tome un buen tiempo. Así que para ahorrar tiempo, he tratado de hacerlo por usted. Como
ya sabe, la Biblia es bastante clara en cuanto a los cuatro estados de crecimiento: bebé (Hebreos 5:12-13); niño (Efesios
4:14-15); adolescente ((1 Juan 2:14b); y adulto (Efesios 4:13).
Escribí esos cuatro “Niveles de Crecimiento,” junto con sus versículos claves a lo largo de una hoja de papel.
Entonces quise ver si el crecimiento cristiano se podía categorizar. Y sí se puede – dentro de estas siete áreas:
1. Oración – El acto de comunicarse o conversar con Dios (Lucas 11:1).
2. La Palabra – Actividades que se realizan para absorber y aplicar la Biblia a la vida cotidiana de alguien
(Juan 8:31).
3. Testificar – Actitudes y acciones que llevarán al no cristiano hacia la salvación (Juan 15:8).
4. Compañerismo – Actitudes y acciones que mejoran las relaciones con otros cristianos y edifica el Cuerpo
de Cristo (Juan 13:35).
5. Crecimiento Personal – Actitudes y acciones que ayudan a desarrollar una relación cercana con Dios y un
estilo de vida más parecido a Cristo (Mateo 10:25). (Incluye formación de carácter; vida devocional; ha-
bilidad para tratar con la adversidad, Satanás, la tentación y el pecado; discernimiento de la voluntad de
Dios; ejercicio y dieta.)
6. Ministerio – Actividades especializadas y concentradas en grupos específicos o individuos utilizando los
dones de Dios, talentos naturales y adquisición de destrezas para:
a. servirle a aquellos que están en necesidad;
b. llevar a los no cristianos hacia la salvación;
c. animar a los cristianos a continuar hacia la madurez espiritual (Mateo 28:19-20).
7. Familia – Actitudes y acciones que mejoran la relación con la familia y lo capacitan para llevar a cabo el
rol particular y las responsabilidades dentro de la familia (Josué 24:15).
Escribí cada una de las “Áreas de Crecimiento,” junto con sus versículos claves, al lado izquierdo de mi gran
hoja de papel. Con los niveles de crecimiento formando una coordenada horizontal en la parte de arriba, y las áreas de
crecimiento formando una coordenada vertical al lado izquierdo, mi papel se veía como un “gráfico de espacio y se-
cuencia.” Dibujé líneas verticales separando cada nivel, y horizontales separando cada área. Así nació la “Cuadrícula
del Crecimiento del Discipulado.” Solamente había un problema – con excepción de las coordenadas, la cuadrícula es-
taba en blanco.
Ahora venía lo bueno. Quería saber si la Biblia podía decirnos como debía lucir un discípulo maduro en cada
una de las áreas, de cada nivel. Esta información podía poner algo de contenido a las casillas vacías. De manera que
tomé la cuadrícula, un área a la vez.
Primero, hice un estudio exhaustivo de la oración, buscando cada versículo que pudiera encontrar en la Biblia
que tratara el tema. Encontré más de 160 pasajes que tenía algo que decir en cuanto a la oración (no conté los pasajes
paralelos de los Evangelios ni el montón de pasajes similares de alabanza y acción de gracias en los salmos, los cuales
agrupé.) Examiné cada versículo y traté de discernir lo que decía para caracterizar a alguien que es maduro en el área de
oración, terminé con más o menos setenta características.
Después, uní las características duplicadas, luego las enumeré y las agrupé. Cuando hubo humo blanco, las
comprimí todas en estas cinco “afirmaciones para un perfil”:
1. Está siendo más consciente y sensitivo en cuanto a las prioridades y preocupaciones de Dios, las cuales
forman la columna vertebral de su vida de oración.
2. Ve a Dios como el agente primario que afecta el entorno de cualquier situación que lo preocupa y cree
firmemente que Dios considerará y actuará en cuanto a su petición.
3. Ora regular y frecuentemente por largos períodos de tiempo, algunas veces acompañados con ayuno.
4. Toma regularmente un rol activo en los grupos de oración.
5. Su tiempo de oración está impregnado de adoración.
Estas afirmaciones fueron a la casilla bajo el título “Adulto,” al otro lado de “Oración.” Entonces trabajé de
atrás para adelante, adolescente, niño, bebé, encontrando los pasos lógicos que se necesitan para alcanzar el nivel de
DISCIPULADO A LARGO PLAZO 191
adulto. Constantemente me devolvía a los 160 pasajes bíblicos y a las 70 características, tomando en consideración la
característica que tenía en cada nivel un cristiano en crecimiento junto con la importancia de incluir los tres elementos
del crecimiento: conocimiento de cabeza (información), conocimiento de corazón (convicciones y motivaciones), y co-
nocimiento de mano (acción).
Cuando había terminado la línea de oración en la cuadrícula, comencé la de la Palabra y seguí el mismo proce-
dimiento. Y continué haciéndolo a través de las siete áreas. Al cabo de ocho meses, salí de mi oficina con la Cuadrícula
de Crecimiento del Discipulado, y cada casilla contenía de tres a diez afirmaciones. Esto me dio un perfil extenso, y
bastante detallado de cómo debe lucir un discípulo en crecimiento en cada área de cada nivel.
En las siguientes páginas estaré compartiendo con usted el fruto de ese estudio. Pero primero una explicación
en cuanto al sistema de numeración. Cada perfil de afirmaciones (las cuales más tarde usted las convertirá en objetivos
de entrenamiento) está identificado con un número de tres dígitos. El primer número (la centena) indica el nivel de cre-
cimiento. Así que, todas las afirmaciones del perfil de bebé estarán en los 100. Las afirmaciones del perfil de niño esta-
rán en los 200, el de adolescente en los 300 y adulto en los 400, así como la numeración de los créditos de la universi-
dad. El segundo dígito (la decena) se refiere al área de crecimiento. Oración = 10, la Palabra = 20, testimonio = 30, re-
laciones = 40, crecimiento personal 50, ministerio 60 y familia = 70. El tercer dígito (la unidad) se refiere al número de
la declaración del perfil dentro de la casilla de un área / nivel específico. Por ejemplo, existen nueve afirmaciones del
perfil para un discípulo en el nivel de niño (200) en el área de testimonio (30), y ellos están numerados así 230, 231,
232, 233 . . . 238.
¡Bueno! Es tiempo de continuar con el perfil de afirmaciones. Todas las afirmaciones juntas suman 211. (Al-
gunas afirmaciones con número pueden tener varios sub-puntos, que podrían tomarse como una afirmación aparte, por
lo tanto las conté como una afirmación del perfil con su propia numeración.) Revise las páginas 269-287.
¡Bienvenido de nuevo! Unos cuantos comentarios en cuanto a las afirmaciones del perfil:
(1) A pesar que la minuciosidad fue mi objetivo, estoy lejos de la omnisciencia, de manera que debo presentar
este material – no como un grupo de absolutos, ni completo ni entero, que no le falta nada, no como perfecto, y ni si-
quiera cercano a fomentar un refinamiento – pero si como un buen comienzo. Mientras usted y yo aprendemos más so-
bre el proceso del discipulado, estoy seguro que vamos a modificar el contenido de la cuadrícula. Si no hay otra cosa,
esto nos dará un buen proyecto para comparar y decir, “¿Se ve eso correcto? ¿Qué si ajustamos un poquito por aquí?”
Si usted tiene sugerencias, estaré más que anuente a recibirlas. Mi dirección está en la nota de referencia para este capí-
tulo.1 Si su observación es válida, la incluiremos en impresiones subsiguientes de este libro. ¿Trato hecho?
(2) No todas las afirmaciones del perfil son precisamente bíblicas. Por ejemplo, en ninguna parte en la Biblia
dice que un bebé cristiano tiene que llegar eventualmente al punto de tener “un tiempo de oración personal tres o cuatro
veces a la semana, y que cada sesión dure de 4 a 8 minutos” (#112). No obstante, aquellos que son presentados como
maduros en el área de la oración, “oran regular y frecuentemente por largos períodos de tiempo, algunas veces acompa-
ñados con ayuno” (#412). La Afirmación del perfil #112 es solamente una medida, arbitraria pero lógica, es el escalón
designado para llevar al nuevo discípulo hacia la madurez que está en la Afirmación del Perfil #412. Sabemos que si él
no lograra llegar al #112 (el cual es una meta bastante subjetiva abierta a discusión), nunca logrará llegar al #412 (el
cual es un objetivo que manifiesta una meta bíblica). Si usted cree que debe de alguna forma alterar las metas lógica,
culturales o pragmáticas generadas, siéntase en libertad.
(3) Existen varias afirmaciones del perfil similares al comparar las diferentes áreas de crecimiento. Eso es por-
que cada área está entrelazada con las otras. Una vida de oración afectará grandemente el tiempo en la Palabra y vice-
versa. El tiempo en la Palabra afectará grandemente las relaciones y el testificar. Sus habilidades en esas áreas afectarán
su ministerio, el cual afectará su vida de oración otra vez, la cual afectará su crecimiento personal y la familia, la cual . . .
y la canción sigue. Es imposible aislar una cierta cualidad de carácter, convicción o actividad y decir, “Esto se relaciona
exclusivamente con el compañerismo.” Es por eso que aparecen en algunas áreas.
(4) Dentro de cada grupo de afirmaciones del perfil en el área / nivel, existirá siempre por lo menos una decla-
ración por cada uno de los tres elementos de crecimiento de conocimiento de cabeza, corazón y manos. Por ejemplo, en
el área de la oración en el nivel de bebé esto sería:
110. conocimiento intelectual
111. conocimiento emocional
112. conocimiento de acción
192 DISCIPULADO PERSONAL
En el nivel de niño, esta sería la distribución:
210, 211. conocimiento intelectual
212. conocimiento emocional
213, 214, 215, 216, 217. conocimiento de acción
Mientras usted revisa las afirmaciones del perfil, debería ser capaz de reconocer cual es cual en la mayoría de
los casos.
Sí usted está interesado en los Gráficos del Perfil del Crecimiento que ya están elaborados también están inclui-
dos en las herramientas mencionadas anteriormente.
Cuando usted haya terminado con todas las siete áreas de crecimiento, usted podrá ver una gran tendencia de
fortalezas y debilidades en el gráfico. Nadie tiene una línea perfecta en el perfil. Una persona puede ser un niño en el
área de la oración, un bebé en el testificar, y un adolescente en la Palabra. Aun dentro de una misma área, puede consi-
derar tener marcas de chequeo y blancos en todos los cuatro niveles. El perfil de cada uno es único, con algunos baches
del entrenamiento previo.
DISCIPULADO A LARGO PLAZO 193
Paso 2. Determine el Siguiente Paso Crucial de Crecimiento de su Discípulo
Observe de cerca las afirmaciones del perfil en el nivel del bebé en el Gráfico de Perfil de Crecimiento que su
discípulo no ha completado todavía. Esas son a las primeras a las que se debe apuntar. ¡Pero tal vez sean ocho, diez, tal
vez sean treinta de ellas! ¿Dónde se debería empezar? Eso debe ser decidido entre usted y el Espíritu Santo. Pase tiem-
po en oración, pídale al Señor la perspicacia para saber cual afirmación del perfil del nivel 100 refleja el siguiente y
crucial paso de crecimiento de su discípulo. Si continúa sin saber que hacer, trate de preguntarle a su discípulo lo que
piensa. ¡Probablemente él tenga algunas buenas ideas donde yace su más grande necesidad!
Usted deberá enfocarse en el nivel del bebé como una prioridad. Trabaje para alcanzar todas estas afirmaciones
del perfil en cada área antes de continuar con los niveles más altos. Esto proveerá un crecimiento balanceado. Sin em-
bargo, no se estanque sólo en las áreas de debilidades. Busque los puntos fuertes, de vez en cuando, y ayúdele a sobre-
salir ahí también.
197
CUESTIONARIO DE AUTO-EVALUACIÓN
Nombre ______________________________________________ Fecha _________________
FUNDAMENTOS CRISTIANOS
Nota: Contesta cada pregunta redondeando la respuesta más adecuada. No caigas
en el error de no contestar con la verdad para ponerte en la posición mejor o para de-
cir lo que la gente quiere oír; contesta honestamente. Si ninguna de las opciones es
correcta, elige la que esté más cerca y pon un signo de interrogación en el margen
junta a ella.
1. Estoy (inseguro, bastante seguro, muy seguro, sin duda) que si muero hoy, me voy al cielo.
2. Tengo (mínimo, parcial, promedio, bastante bueno, entero) conocimiento de lo que la Biblia ex-
presa cuando dice que “soy una nueva criatura”.
3. Estoy (inseguro, bastante seguro, muy seguro, sin duda) que mis pecados han sido perdonados.
4. Estoy (inseguro, bastante seguro, muy seguro, sin duda) que antes de conocer a Cristo e invitar-
lo a mi vida, era un pecador destinado al infierno.
5. Estoy (inseguro, bastante seguro, sin duda) que mi salvación es permanente, y que nunca más
estaré separado de Dios.
6. Tengo (mínimo, parcial, promedio, bastante bueno, entero) conocimiento a cerca de los muchos
cambios importantes que han ocurrido en mi después de pedirle a Cristo que entrara en mi vida.
7. Tengo (mínimo, parcial, promedio, bastante bueno, entero) entendimiento sobre como ser lleno
del Espíritu Santo.
8. Tengo (mínimo, parcial, promedio, bastante bueno, entero) conocimiento de la tensión que
existe entre la vieja y la nueva naturaleza, y que todavía lucho con la tentación a pesar de que
soy una “nueva criatura”.
9. Tengo (mínimo, parcial, promedio, bastante bueno, entero) conocimiento de las actividades que
puedo hacer, las cuales me ayudarán a crecer espiritualmente de manera balanceada y continua.
10. Tengo (mínimo, parcial, promedio, bastante bueno, entero) entendimiento de por qué es impor-
tante para mí estar involucrado en actividades de compañerismo con otros cristianos.
11. Yo (nunca, rara vez, algunas veces, semanalmente, dos veces a la semana) voy a la iglesia.
12. Yo (nunca, rara vez, algunas veces, frecuentemente) leo la Biblia.
13. Yo (no entiendo, tengo alguna idea, tengo bastante buena idea, conozco muy bien) lo que la
gente quiere decir cuando llaman a la Biblia la “Palabra de Dios.”
14. Yo sé que la oración es simplemente hablar con Dios, y no tengo ninguna dificultad real para
hacerlo. (de acuerdo, desacuerdo, no muy seguro)
15. En promedio, tengo un tiempo personal, concentrado en la oración de ______días a la semana,
cada sesión dura más o menos ________ minutos.
16. Ahora mismo, si la oportunidad se presentara, podría realizar un (pobre, regular, bueno, fabulo-
so) trabajo explicándole a otra persona como puede llegar a ser cristiana.
17. Me siento (petrificado, vacilante, dispuesto, extremadamente motivado) en contarles a otros el
cómo pueden llegar a un conocimiento salvadora de Cristo.
Discipulado Personal
18. Estoy (inseguro, bastante seguro, mayormente seguro, positivo) que la adversidad es una parte
normal de la vida Cristiana. Cuando experimento pruebas, yo (nunca, rara vez, algunas veces, a
menudo) me enojo con Dios y (nunca, rara vez, algunas veces, a menudo) voy a Él por ayuda.
19. Yo (no creo, no estoy seguro, sé) que Satanás es real y que busca mi ruina, y tengo (ningún, al-
gún, gran) conocimiento a cerca de cómo puedo resistirlo.
20. Tengo (nada, algo, promedio, bastante bueno, completo) conocimiento de qué hacer para res-
taurar la relación entre Dios y mi persona cuando he pecado.
21. Soy (terrible, regular, bastante bueno, muy bueno) en el manejo de mis finanzas, incluyendo
manejo de deudas, plan de ahorros y dar para el trabajo del Señor.
22. Soy (terrible, regular, bastante bueno, muy bueno) en el manejo del tiempo, metas y prioridades
en mi vida.
23. Tengo (ninguna, vaga, bastante clara, muy clara) idea sobre lo que quiero lograr en la vida.
24. Tengo un programa factible que me ayuda a establecer y alcanzar con éxito las metas persona-
les mientras manejo mis actividades diarias efectivamente. (de acuerdo, en desacuerdo, “más o
menos”)
25. Yo (no veo, no estoy seguro, pienso que tal vez, sé) que tengo talentos, habilidades y dones que
puedan ser usados en el avance del Reino de Dios.
26. Me veo a mí mismo con potencial de ser (mínimamente, de alguna forma, muy, extremadamen-
te) importante para el avance del Reino de Dios.
27. Podría decir en este momento que estoy (mínimamente, de alguna forma, muy, extremadamen-
te) motivado para continuar activamente mi desarrollo espiritual y mi relación con Dios.
Fundamentos Cristianos-2
CUESTIONARIO DE AUTO-EVALUACIÓN
Nombre ______________________________________________ Fecha _________________
ORACIÓN
Instrucciones: Contesta cada pregunta haciendo un círculo en la respuesta apropia-
da. No caigas en la tentación de responder sin honestidad, colocándote a ti mismo en
una posición mejor, o de responder con lo que otros quieren oír, contesta con sinceri-
dad. Si ninguna de las opciones es exacta, escoge la más cerca y pon un signo de pre-
gunta al margen al lado de la pregunta.
1. Sé que la oración es simplemente hablar con Dios y no tengo ninguna dificultad al hacerlo
(cierto, falso.)
2. Cuando oro, no enumero peticiones a Dios, sino que uso al acrónimo de oración C.A.S.A. (o
algo similar) (cierto, falso.)
3. Tengo un (mínimo, medio, completo) conocimiento de cuáles deben ser mis motivaciones en la
oración. Mi principal motivación parece ser ______________________________________.
4. Siento que orar con otros es (no mucho, algo, muy importante.)
5. Yo (tengo gran dificultad, tengo alguna dificultad, disfruto, me encanta) orar en voz alta con
otros.
6. Sé que Dios contesta cada oración que oro con la fe (sí, no, inseguro.)
7. Dios contesta las oraciones en una de estas tres formas: _________, _________, __________.
8. Para mí orar a Dios es como hablar con un amigo (si, no) y yo (no, un poco, fuertemente) creo
que Él se goza al oírme orar.
9. Sin contar las cortas y espontáneas oraciones que hago a lo largo del día, tengo un tiempo de
concentrada oración _____días a la semana. Cada sesión dura ______minutos.
10. Tengo un (mínimo, medio, completo) entendimiento de los principios involucrados en las res-
puestas afirmativas a mis peticiones.
11. Pienso que la oración es (poca, muy, extremadamente) importante para el éxito en mi ministerio
y para mi crecimiento personal.
12. Tengo (ninguna, alguna, mucha) dificultad para orar en voz alta en grupo; yo (nunca, raramen-
te, algunas veces, frecuentemente) tomo parte en grupos de oración.
13. Vengo a Dios en oración espontáneamente (nunca, raramente, a veces, frecuentemente) a lo lar-
go del día.
14. Yo (nunca, raramente, a veces, frecuentemente) oro por más que mis necesidades físicas y las
de mis amigos.
15. Mis oraciones indican que estoy (no muy, medianamente, muy) atento a las necesidades espiri-
tuales y otros asuntos no físicas que están en el corazón de Dios.
16. Mis momentos de oración (carecen del, están creciendo en el, son saturados del) arte de alabar
a Dios.
17. Entiendo y uso muchas formas diferentes de oración, incluyendo las siguientes: (1= mínimo;
2= medio; 3= extensamente)
Discipulado Personal
FORMA DE ORACIÓN ENTENDIMIENTO USO
Adoración ____________________ _______
Confesión ____________________ _______
Agradecimiento ____________________ _______
Súplica ____________________ _______
Intercesión ____________________ _______
Petición ____________________ _______
Espera en Dios ____________________ _______
Comunión con Dios ____________________ _______
Orando frente a las escrituras ____________________ _______
Oración que prepara a oradores ____________________ _______
Auto-examen ante Dios ____________________ _______
Oración sin palabras ____________________ _______
Otras ___________________________ ____________________ _______
Oración-2
CUESTIONARIO DE AUTO-EVALUACIÓN
Nombre ______________________________________________ Fecha _________________
LA PALABRA
Instrucciones: Contesta cada pregunta haciendo un círculo en la respuesta apropia-
da. No caigas en la tentación de responder sin honestidad, colocándote a ti mismo en
una posición mejor, o de responder con lo que otros quieren oír, contesta con sinceri-
dad. Si ninguna de las opciones es exacta, escoge la más cerca y pon un signo de pre-
gunta al margen al lado de la pregunta.
1. Hay varias maneras por las cuales una persona se puede ingerir la Palabra de Dios, y son:
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
2. Estoy (no muy seguro, bastante seguro, completamente seguro) de que la Biblia es la Palabra
de Dios.
3. Yo creo que la Biblia es (no, a veces, por la mayoría parte, absolutamente) verdadera y autorita-
ria.
4. Veo la Biblia como un “alimento espiritual” que me ayudará a crecer espiritualmente y estoy
deseoso de aprender más de ella (de acuerdo, en desacuerdo, muy de acuerdo.)
5. Yo asimilo la Palabra de Dios al oír los sermones cada semana en la iglesia (cierto, falso.)
6. Por lo general leo la Biblia por mí mismo ________ veces a la semana. Dura ______ minutos
cada sesión.
7. Yo (nunca he participado en, he terminado parcialmente, he cumplido) una serie de estudios
bíblicos preparados.
(Título: ___________________________________________________________________ .)
8. Estoy (no muy, algo, muy) familiarizado con la estructura de la Biblia - no me pierdo en ella.
9. He memorizado aproximadamente __________versículos de la Biblia, y sigo haciéndolo con
una velocidad de ________ al mes.
10. Tengo un (pequeño, mediano, extensivo) conocimiento de los principios de la meditación en la
escritura y he meditado activamente en la Palabra de Dios (nunca, raramente, a veces, frecuen-
temente.)
11. Sé cómo usar las siguientes ayudas para el estudio de la Biblia:
_____ Concordancias _____ Mapas y atlas
_____ Referencias cruzadas _____ Biblia Interlineal
_____ Comentarios _____ Diccionario griego
_____ Biblia de los tópicos de Nave _____ Diccionario hebreo
_____ Diccionario bíblico _____ Diccionario de teología del Nuevo Testamento
_____ Libros de estudio de palabras bíblicas
12. Tengo un sistema de archivo para mis notas de sermones y otras informaciones interesantes que
adquiero sobre cosas espirituales (cierto, falso.)
13. Creo que un conocimiento completo de la Biblia es (no muy, moderadamente, extremadamente)
importante para un efectivo ministerio y crecimiento personal.
14. Tengo (ninguna, alguna, considerable) dificultad para hablar abiertamente sobre la Biblia.
Discipulado Personal
15. Entiendo las siguientes descripciones bíblicas y estoy de acuerdo con ellas:
_____ Inerrante _____ Completa
_____ Infalible _____ Verbalmente inspirada
_____ Autoritaria _____ Transmisión supervisada
16. Soy (no muy, algo, extremadamente) adepto a usar la Palabra de Dios cuando ministro, doy tes-
timonio, encuentro problemas y para resistir a Satanás, huir la tentación y buscar el consejo de
Dios.
17. Por lo general, escucho ______ cintas Cristianas de enseñanza al mes y escucho ______ progra-
mas de enseñanza Cristiana en la radio.
18. He usado los siguientes métodos de estudio bíblico:
_____ Análisis verso por verso _____ Estudio de un tema
_____ Estudio de un capítulo _____ Estudio de un personaje
_____ Estudio de un libro
19. Tengo un (superficial, medio, completo) conocimiento de los principios básicos de la Herme-
néutica bíblica.
20. Puedo recitar los libros de la Biblia en orden (sí, no)
21. Estoy (no muy, algo, muy) satisfecho de la magnitud con la que he experimentado la realidad
bíblica en mi vida, y de cómo mis convicciones acerca de la Palabra están profundizando como
resultado.
22. Yo (nunca, raramente, a veces, frecuentemente) tengo oportunidades para enseñar la Biblia a
otros. Oportunidades usuales: __________________________________________________ .
23. Cuando escucho a un orador cristiano, tomo notas (nunca, raramente, a veces, frecuentemente.)
24. He leído toda la Biblia _____ veces.
25. He desarrollado un hábito (no muy, algo, muy) consistente y por toda la vida de asimilar la Pa-
labra de Dios usando las cinco maneras (escuchar, leer, estudiar, memorizar, meditar) y estoy
(no muy, algo, muy) satisfecho de cómo estoy ganando un conocimiento de los temas y doctri-
nas de la Biblia.
26. Mantengo la Biblia como el estándar y autoridad para todo lo que pienso, digo y hago. (en des-
acuerdo, moderadamente de acuerdo, fuerte acuerdo)
27. Estoy convencido de que la Biblia está viva, activa, y poderosa, y que está trabajando en mi
vida y que me causa hacer todo lo que puedo hacer para obedecerla (desacuerdo, moderada-
mente de acuerdo, de acuerdo.)
28. (No he participado en, he terminado parcialmente, he cumplido) un estudio profundo y comple-
to de las doctrinas principales de la Biblia. Esas doctrinas incluyen: _____________________
__________________________________________________________________________ .
La Palabra-2
CUESTIONARIO DE AUTO-EVALUACIÓN
Nombre ______________________________________________ Fecha _________________
TESTIMONIO
Instrucciones: Contesta cada pregunta haciendo un círculo en la respuesta apropia-
da. No caigas en la tentación de responder sin honestidad, colocándote a ti mismo en
una posición mejor, o de responder con lo que otros quieren oír, contesta con sinceri-
dad. Si ninguna de las opciones es exacta, escoge la más cerca y pon un signo de pre-
gunta al margen al lado de la pregunta.
1. Tengo un (mínimo, medio, total) conocimiento de los elementos básicos del Evangelio y puedo
decir a otras personas cómo ser salvadas.
2. Siento fuertemente que una responsabilidad primordial (mía, de Dios) como testigo a otros es
“convertir” gente para Cristo
3. Estoy (no muy seguro, bastante seguro, convencido) de que los no cristianos están perdidos y
se dirigen hacia el infierno, y tengo un (débil, moderado, fuerte) deseo de ayudarles a alcanzar
la salvación.
4. He hecho confesión pública de mi fe en Jesucristo (sí, no.) (Si la hiciste, ¿Dónde y Cuándo?
_________________________________________________________________________ .)
5. Conozco al menos dos formas de compartir el mensaje del Evangelio, una de ellas sin usar un
folleto (cierto, falso.)
6. Me siento (no muy, algo, bastante) seguro de que podría contra la historia de mi salvación per-
sonal claramente y de forma eficaz en un tiempo de 3 a 5 minutos.
7. Me siento (no muy, algo, bastante) confiado en saber la mayoría de los cómo, qué hacer y qué
no hacer en una presentación del Evangelio.
8. Podrías contestar correctamente a las siguientes objeciones al Evangelio:
__________No creo que Dios exista.
__________No creo que Jesús sea el “único camino”
__________Si sólo los cristianos van al cielo, ¿qué ocurre con aquellos que mueren sin oír el
Evangelio?
__________No creo que la Biblia sea la Palabra de Dios.
__________Si Dios es tan bueno, ¿por qué hay tanto pena y sufrimiento en el mundo?
9. Creo que la participación de Dios en mis deberes en el testimonio es (no muy importante, algo
importante, bastante importante, absolutamente crucial.)
10. Sé que la gente a veces reacciona negativamente o de forma indiferente a una presentación del
Evangelio (sí, no.) Eso:
__________me causaría vacilar al testificar en mi próxima oportunidad.
__________tendría poco efecto en mí.
__________me estimularía y me motivaría más que nunca para testificar.
11. Tengo (ningún, algún, gran) temor de ser abiertamente identificado con Cristo.
12. Estoy orando (no muy, un poco, muy) diligentemente por oportunidades para compartir el men-
saje del Evangelio a amigos específicos míos.
13. He presentado el mensaje del Evangelio a aproximadamente ________ personas durante el pa-
sado año.
14. Tengo un (mínimo, medio, total) conocimiento de la doctrina de la Salvación.
Discipulado Personal
15. Mi conocimiento de la apologética Cristiana es (no muy, algo, muy) amplio y extensivo.
16. Estoy familiarizado con las siguientes religiones y cultos no cristianos y sé cómo testificar a sus
discípulos:
__________Testigos de Jehová __________Iglesia de la Unificación
__________Mormones __________El Camino Internacional
__________Meditación Trascendental __________La Iglesia Mundial de Dios
__________Ciencia Cristiana __________Unidad
__________Hare Krishna __________Movimiento de la Nueva Edad
__________Teosofía __________Satanismo
__________est __________Astrología
__________Espiritismo __________Bahai
__________Islam __________Niños de Dios
__________Budismo / Zen __________Rosicrucianos
__________Hinduismo __________Scentología
__________Otra:___________________
17. Estoy (no muy, algo, muy) satisfecho con la fuerza de mis convicciones acerca de la importan-
cia del testimonio.
18. Veo el testimonio como un privilegio, no como una carga (en desacuerdo, moderado acuerdo,
fuerte acuerdo)
19. Comienzo conversaciones sobre Cristo (nunca, raramente, a veces, frecuentemente.)
20. Me siento (no muy, algo, muy) destacado relacionándome y ministrando a los no cristianos
“donde viven”, siendo sensible a sus necesidades físicas, sociales y emocionales.
21. Tengo una (débil, media, fuerte) “carga” por los perdidos; encuentro que mi deseo para ver a
gente llegar a Cristo es una (pequeña, media, gran) fuerza en mi vida, y (raramente, a veces,
usualmente) se sobrepone mi deseo natural de buscar la aprobación de los hombres (a lo que me
arriesgo cuando testifico) en vez de la aprobación de Dios.
22. Testificaré activamente para Cristo por el resto de mi vida, sin considerar las dificultades y re-
acciones negativas, yo lucharé (lo dudo, espero que sea cierto, estoy seguro de que es cierto,
estoy convencido de que es cierto.)
Testimonio-2
CUESTIONARIO DE AUTO-EVALUACIÓN
Nombre ______________________________________________ Fecha _________________
COMPAÑERISMO
Instrucciones: Contesta cada pregunta haciendo un círculo en la respuesta apropia-
da. No caigas en la tentación de responder sin honestidad, colocándote a ti mismo en
una posición mejor, o de responder con lo que otros quieren oír, contesta con sinceri-
dad. Si ninguna de las opciones es exacta, escoge la más cerca y pon un signo de pre-
gunta al margen al lado de la pregunta.
1. Tengo una (mínima, media, total) comprensión acerca de lo que Cristo quiso decir cuando des-
cribió la iglesia como un cuerpo o un edificio, y soy (mínimamente, moderadamente, muy)
consciente de mis derechos y responsabilidades en esos contextos.
2. Estoy (no muy, algo, muy) convencido de que el compañerismo regular con otros creyentes es
esencial para mi crecimiento y protección.
3. Asisto la iglesia y / o otras funciones cristianas (raramente, a veces, semanalmente, dos veces o
más en semana.)
4. He sido bautizado (sí, no.) Si tu respuesta es afirmativa, ¿dónde y cuándo?
5. Tengo un (mínimo, medio, total) entendimiento de lo que significa el servicio de la Comunión,
y yo (raramente, a veces, regularmente) participo de ella.
6. Desde que llegué a ser cristiano, he pasado (menos, más, la misma cantidad de) tiempo con mis
amigos no cristianos y (menos, más, la misma cantidad de) tiempo con amigos Cristianos.
7. No quiero decir que ya haya “llegado,” pero en el área de la comunión o compañerismo, son ca-
racterísticos de mí los siguientes atributos:
(Asigna un número según el valor de cada uno: 1 = Fuerte, 2 = Medio, 3 = Débil.)
_______ Amor _______ Honestidad
_______ Paciencia _______ Hospitalidad
_______ Bondad _______ Pacificación
_______ Fe _______ Generoso con el tiempo, talento, ri-
_______ Gentil quezas
_______ Dominio Propio _______ Sensible y atento a las necesidades
_______ Humildad de otros
_______ Actitud de siervo _______ Buscando edificar a otros
_______ Aceptando la reprensión _______ Dispuesto a identificar, confrontar, y
ayudar a corregir errores en el
_______ Dispuesto a sufrir dificultades por Cuerpo
otros
_______ Reconocimiento, respetando, y apre-
_______ Conversaciones llenas de gracia ciando los liderazgos
_______ Misericordia _______ Reconociendo, respetando, y apre-
_______ Compasión ciando los dones, talentos, habili-
_______ Perdón dades, y ministerios de otros
_______ Dispuesto a sufrir _______ Deseo de estar en compañía de otros
_______ Devolviendo bien por mal cristianos
Discipulado Personal
8. Tengo conciencia de los distintos dones espirituales (sí, no.) He empezado el proceso de descu-
brir los míos (sí, no.) He descubierto mi(s) don(es) y es(son): __________________________
9. Me veo como (no muy, posiblemente, definitivamente) valioso para el Cuerpo de Cristo y estoy
(no muy, moderadamente, totalmente) convencido de que realmente seré usado por Dios para
ministrar las necesidades de otros creyentes.
10. Yo (soy, no soy) un miembro formal de una iglesia.
11. Además de las reuniones de los domingos por la mañana,, me involucro en actividades relacio-
nadas con la iglesia y tengo responsabilidades tales como: ____________________________ .
12. Yo (nunca, raramente, a veces, frecuentemente) salgo de mi camino para servir, animar y edifi-
car a otros creyentes.
13. Yo (nunca, raramente, a veces, frecuentemente) busco fortalecer y ensanchar mis habilidades
para relacionarme a través del estudio de libros y artículos acerca de varios aspectos de la co-
munión bíblica.
14. Tengo un conocimiento (mínimo, medio, total) de cuales son mis fuerzas y debilidades en cuan-
to a la comunión bíblica.
15. Yo (nunca, raramente, a veces, frecuentemente) busco ayudar a desarrollar y aumentar los do-
nes, talentos, y ministerios de otros.
16. Soy miembro de un pequeño grupo de creyentes (3-8 personas) que se han comprometido a ani-
marse, edificarse, y comunicarse y ser responsables unos con otros en una “comunión de apo-
yo”. (cierto, falso)
17. Estoy (no muy, algo, completamente) convencido de que sin una asociación cercana, una
interacción frecuente y armoniosa con otros creyentes, no crecería, no estaría protegido y no
funcionaría como cristiano.
18. Ejercito mis dones espirituales de las siguientes formas: (Estima tu nivel de habilidad en cada
entrada de esta forma: “aprendiendo”, “bastante bien”, “mejorando cada día”, “bien desarrolla-
do” etcétera.)
DON COMO YO LA EJERCÍTO NIVEL DE HABILIDAD
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
19. Estoy (no muy, moderadamente, completamente) satisfecho con la fidelidad y la destreza con la
que estoy ejercitando mi(s) don(es) espiritual(es.)
Compañerismo-2
CUESTIONARIO DE AUTO-EVALUACIÓN
Nombre ______________________________________________ Fecha _________________
CRECIMIENTO PERSONAL
Instrucciones: Contesta cada pregunta haciendo un círculo en la respuesta apropia-
da. No caigas en la tentación de responder sin honestidad, colocándote a ti mismo en
una posición mejor, o de responder con lo que otros quieren oír, contesta con sinceri-
dad. Si ninguna de las opciones es exacta, escoge la más cerca y pon un signo de pre-
gunta al margen al lado de la pregunta.
1. Tengo un deseo (débil, medio, fuerte) de cooperar con Dios en sus planes de desarrollar caracte-
rísticos cristianos en mí. Para hacerlo, he adoptado un estilo de vida de disciplina personal y
consistente obediencia a Dios; también estoy dependiendo de la acción directa del Espíritu San-
to. (En una escala del 1 al 10, 10 = exactamente, como de real es esta premisa para ti.) Escribe
tu respuesta aquí. ________.
2. Creo que tengo un entendimiento (débil, medio, fuerte) de las funciones de un tiempo tranquil
cotidiano y de qué debería hacer durante él.
3. Me siento (no muy, algo, muy) seguro de mi habilidad para luchar la adversidad, Satanás, la
tentación, y el pecado.
4. Para mí, el cristianismo (señala la premisa que mejor refleje tu opinión):
_______ Es como una “organización” muy noble y positiva de la que formo parte, uno de mu-
chos objetivos importantes a los cuales me entrego.
_______ Es el mayor sistema de creencias éticas que haya encontrado, un sistema al que puedo
ser devoto.
_______ Provee un ambiente donde me puedo sentir amado y aceptado y al creer y aplicar sus
principios en mi vida, puedo desarrollarme a mi mayor potencial.
_______ Es una relación activa y personal con un Ser Viviente que requiere aprendizaje a tra-
vés de atención concentrada.
5. Por lo general, tengo un tiempo de tranquilidad ______ veces a la semana. Cada sesión dura
unos ______ minutos.
6. No digo que haya “llegado”, pero diría que estoy bastante centrado en las siguientes áreas:
(Asigno uno de estos números de valor a cada uno: 1 = Débil; 2 = Medio; 3 = Fuerte.)
_______ Amor _______ Activismo social _______ Perdonador
_______ Alegría _______ Sabiduría _______ Sumisión
_______ Paz _______ Diligencia _______ Fiel mayordomía
_______ Paciencia _______ Valentía _______ Orden
_______ Benevolencia _______ Enseñable _______ Sinceridad
_______ Bondad _______ Honestidad _______ Trato justo de otros
_______ Fidelidad _______ Agradecimiento _______ Contentamiento (no
_______ Gentilidad _______ Compasivo materialista)
_______ Dominio propio _______ Concepto positivo _______ Sacrificio personal
_______ Tolerancia de mí mismo _______ Sobrepasar mi pasado
_______ Corazón Sirviente _______ Comportamiento so- _______ Pureza
_______ Obediencia a Dios cial correcto _______ Humildad
_______ Fe
Discipulado Personal
7. Cuando Dios revela un pecado en mi vida, encuentro (bastante difícil, algo penoso, bastante
fácil, muy fácil) tomar pasos inmediatos para arrepentirme y desechar ese pecado.
8. Tengo un (débil, medio, fuerte) entendimiento de los fundamentos de discernir la voluntad de
Dios en asuntos específicos.
9. Sé lo que la gente quiere decir cuando habla de nuestros cuerpos como “templo de Dios” (sí,
no, no muy seguro.)
10. No estoy atado a actividades que son dañinas para mi cuerpo, tales como fumar, excesivo con-
sumo de alcohol, drogas no prescritas, sobrecargo de trabajo, carencia de ejercicio, etc. (cierto,
falso, no estoy seguro.) Si es falso, ¿qué áreas? ______________________________________
___________________________________________________________________________
Sin embargo, en el pasado tenía problemas en estas áreas: ____________________________
___________________________________________________________________________
11. Creo que mi estilo de vida y camino con el Señor tiene (poco, algún, mucho) efecto en el fruto
de mi oración, testimonio, comunión y ministerio.
12. El actual estado de mi programa personal de mi ejercicio físico y dieta saludable podría ser des-
crita con esta palabra: _________________________________.
13. Tengo (ningún, mal, algo de, buen) control financiero y yo estoy (ahogándome en, controlan-
do, minimizando, eliminando) mi deuda y tengo un presupuesto financiero (que no existe, teo-
rético, que funciona) y ahorro (nada, un poco, regularmente) y doy _____ por ciento de mis in-
gresos al trabajo del Señor (por ejemplo a la iglesia, a agencias de misiones, etc.)
14. Yo (no, intento, exitosamente) manejo el uso de mi tiempo. Mi método de manejar el tiempo
podría ser descrito como: _______________________________________________.
15. En mis tiempos de tranquilidad (nunca, raramente, a veces, frecuentemente) varío lo que hago.
16. Estoy (no muy, algo, muy) seguro de que puedo dar una firme, confiada y bien informada res-
puesta a la pregunta: Si Dios nos ama, ¿por qué hay tanto dolor y sufrimiento en el mundo?
17. El tiempo de tranquilidad es (nunca, raramente, a veces, frecuentemente) una de mis primeras
prioridades diarias.
18. Yo (nunca, raramente, a veces, a menudo, siempre) veo las pruebas que encuentro como opor-
tunidades beneficiosas para mi crecimiento.
19. A pesar del hecho de que a veces encuentro difícil o desagradable hacer la voluntad de Dios, yo
(nunca, raramente, a veces, frecuentemente, siempre) estoy dispuesto a subordinar mi voluntad
a la Suya.
20. Uso (ninguno, poco, algún, mucho) tiempo estudiando los factores involucrados en el creci-
miento personal. Estoy (no muy, algo, completamente) convencido de que nunca “llegaré” to-
talmente a la madurez espiritual. Sin embargo, estoy (no del todo, algo, fuertemente, completa-
mente) comprometido con una vida de progreso hacia la semejanza con Cristo.
21. Además de mi tiempo de tranquilidad, yo (nunca, raramente, a veces, a menudo) busco otros
breves (o no tan breves) períodos de comunión con Dios espontáneamente a través del día y la
noche.
22. Yo (nunca, raramente, a veces, frecuentemente) mantengo una actitud de respeto y sumisión a
la voluntad de Dios en decisiones menores diarias y (nunca, raramente, a veces, frecuentemen-
te) busco activamente la voluntad de Dios en mis decisiones mayores importantes.
Crecimiento Personal-2
CUESTIONARIO DE AUTO-EVALUACIÓN
Nombre ______________________________________________ Fecha _________________
MINISTERIO
Instrucciones: Contesta cada pregunta haciendo un círculo en la respuesta apropia-
da. No caigas en la tentación de responder sin honestidad, colocándote a ti mismo en
una posición mejor, o de responder con lo que otros quieren oír, contesta con sinceri-
dad. Si ninguna de las opciones es exacta, escoge la más cerca y pon un signo de pre-
gunta al margen al lado de la pregunta.
1. Estoy (no muy, moderadamente, totalmente) convencido de que Dios me ha dado dones para
ministrar a otros. Estoy (no muy, moderadamente, totalmente) convencido de que Él me man-
tiene responsable para desarrollar y usar esos dones.
2. Yo (no me preocupo de, estoy interesado en, estoy totalmente comprometido a) descubrir y de-
sarrollar mis dones espirituales, talentos naturales, y habilidades adquiridas para el bien del
Cuerpo de Cristo y la expansión del Reino de Dios.
3. Yo (he, no he) comenzado a usar mis talentos naturales y / o habilidades adquiridas para
ministrar las necesidades de otros.
4. Tengo conocimiento de cuáles son los dones espirituales distintos(sí, no.) He comenzado el
proceso de descubrir los míos (sí, no.) He descubierto mi(s) don(es) espiritual(es) y es(son):
___________________________________________________________________________
__________________________________________________________________________ .
5. Soy (no muy, algo, muy) bien informado de los diferentes tipos de ministerio disponibles para
mí, y yo (he, no he) comenzado a evaluar cuáles corresponden mejor a mis habilidades.
6. Sé que lo que significa “cristiano mundial” (sí, no, no estoy seguro.) En esta escala del 1 al 10
diría que estoy en este punto en la jornada de llegar a ser un cristiano mundial:
1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 Cristiano Mundial
7. Creo que tengo un conocimiento (superficial, medio, completo) de lo que es involucrado en el
discipulado inicial de un nuevo cristiano, y actualmente he discipulado a __________ personas.
8. Tengo un (débil, medio, fuerte) deseo y tendencia a poner a otros primero y a actuar como su
siervo.
9. Veo mi trabajo (marca la premisa que mejor te describa):
_______ Simplemente como algo por lo que gano dinero para mantener mi familia. No tiene
nada que ver con mi ministerio actual.
_______ Por la mayoría parte como un medio de ganar dinero para mantener a mi familia, pero
ocasionalmente tengo la oportunidad de ministrar allí.
_______ Como el soporte para mi familia, pero también donde realizar gran parte de mi ministe-
rio.
_______ Como uno de los contextos principales de mi ministerio personal, y la forma por la cual
apoyo a mí mismo y a mi familia.
10. Estoy (no muy, algo, fuertemente, totalmente) convencido de que mi ministerio sería
infructífero sin la plena participación de Dios en él, y este hecho se refleja (no mucho, algo,
fuertemente, totalmente) en el tiempo que yo dedico a la oración por mi ministerio, cómo me
preparo para mi ministerio y mi actitud al ministrar.
Discipulado Personal
11. Soy (no muy, algo, fuertemente, totalmente) diligente y responsable con Dios por la fiel ejecu-
ción de mi ministerio.
12. Me estoy involucrando (para nada, un poco, cada vez más, mucho) en una amplia variedad de
ministerios y proyectos de servicio, con la intención específica de adquirir un corazón de siervo
y evaluar más precisamente mis propias áreas de talento.
13. Creo que los siguientes términos describen las actitudes que poseo en el ministerio y el servicio
a otros: (Asigna un número según el valor de cada uno: 1= no muy descriptivo, 2= algo descrip-
tivo, 3= muy descriptivo)
________ Humilde
________ Diligente
________ Fiel
________ Obediente (a Dios y la autoridad humana.)
________ Honesto
________ Con alegría
________ Compasivo
________ Imparcial
________ Bondadoso
14. Tengo un conocimiento (mínimo, medio, total) de los principios básicos del discipulado, y ac-
tualmente yo estoy discipulando ______ personas.
15. Tengo un (mínimo, medio, sobre la media, total) conocimiento de los principios del liderazgo, y
los estoy empleando en la esfera de mi ministerio (para nada, no mucho, algo, un poco, en
cada momento.)
16. Estoy (nunca, raramente, a veces, frecuentemente) trabajando duramente, de forma no egoísta,
y estoy dispuesto a experimentar dificultades y aun peligros por causa de mi ministerio.
17. Teniendo en cuenta las áreas de mis habilidades, talentos, y dones espirituales, creo que el(los)
tipo(s) de ministerio en lo(s) cual(es) yo seré lo más eficaz es(son): _____________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
18. Yo tengo conocimiento (ninguno, poco, medio, sobre la media, completo) de los principios bá-
sicos de cómo ser el líder de un estudio bíblico eficaz para un grupo pequeño.
19. (No he dirigido, He ayudado dirigir, He dirigido en el pasado, Dirijo con frecuencia, Estoy di-
rigiendo actualmente) un estudio bíblico para un grupo pequeño. Si lo has hecho (o si estás ha-
ciéndolo) ¿qué tipos de estudios has dirigido? _______________________________________
___________________________________________________________________________
20. Mi primera motivación en el ministerio es (raramente, a veces, normalmente, siempre) el amor.
(Si a veces no lo es, ¿cuáles son las otras cosas que te motivan en el ministerio?) ___________
_________________________________________________________________________ .)
21. Mientras realizo los deberes de mi ministerio, sean los que sean, mi deseo principal es (rara-
mente, a veces, frecuentemente, siempre) ayudar a aquellos que ministro a acercarse a la seme-
janza de Cristo.
22. Tengo (ningunas, casi ningunas, algunas, muchas) reservaciones acerca de cristianos más jóve-
nes que yo mirando a mi vida como un ejemplo del comportamiento de Cristo.
23. Asumo el papel de líder en mi ministerio (nunca, raramente, a veces, frecuentemente,
consistentemente.)
Ministerio-2
CUESTIONARIO DE AUTO-EVALUACIÓN
Nombre ______________________________________________ Fecha _________________
FAMILIA
Instrucciones: Contesta cada pregunta haciendo un círculo en la respuesta apropia-
da. No caigas en la tentación de responder sin honestidad, colocándote a ti mismo en
una posición mejor, o de responder con lo que otros quieren oír, contesta con sinceri-
dad. Si ninguna de las opciones es exacta, escoge la más cerca y pon un signo de pre-
gunta al margen al lado de la pregunta.
1. Tengo un entendimiento (mínimo, medio, total) de lo que la Biblia dice acerca de cuáles son
mis papeles y responsabilidades específicos en cuanto a mi familia.
2. Veo a mi familia como la manera principal por la cual Dios me provee el amor, el confort, apo-
yo, compañerismo y obligación de dar cuentas (en desacuerdo, no muy seguro, de acuerdo.)
Mis acciones y prioridades apoyan esta convicción (muy claramente, algo, no mucho, para
nada.)
3. Teniendo una idea bastante buena de cuáles son mis papeles y responsabilidades en mi familia,
siento que estoy haciendo un trabajo (no eficaz, mediocre, bueno, extremadamente bueno) en
asumir esos papeles y responsabilidades.
4. Oro por cada miembro de mi familia más cercana _______ veces a la semana. Oro por mis pro-
pias responsabilidades frente a la familia ______ veces a la semana.
5. Oro por la mayoría parte de (o todos) mis parientes ______ veces a la semana.
6. Tengo un conocimiento (mínimo, medio, total) de cómo relacionarme con los otros miembros
de mi familia como lo haría Cristo, y yo me daría una nota de (10, 8, 6, 4, 2) por mi éxito en
aplicar ese conocimiento en la vida diaria.
7. He obtenido fuertes convicciones en cuanto a lo siguiente, y puedo defender mi posición en
cada una inteligentemente y bíblicamente (pon una cruz donde lo estimes cierto.)
CONVICCION PUEDO DEFENDERLA
El sexo extra-matrimonial ________ _______
El divorcio ________ _______
La homosexualidad ________ _______
El aborto ________ _______
8. Me he comprometido a mantener una unidad duradera con mi familia (incluso a los padres, her-
manos e hijos), aunque eventualmente nos mudaremos (o ya hemos mudado) unos de los otros
(sí, no, no estoy seguro.) Hasta este punto, en la práctica, estoy haciendo un trabajo (terrible,
mediocre, bueno, gran) en esta área.
Si eres un JOVEN que aún vive en casa bajo la autoridad de tus padres, comple-
ta estas oraciones:
10. Estoy preparado y dispuesto a participar en por lo menos una actividad “sólo para la familia”
cada mes (sí, no, indeciso.)
11. Mi relación con - y mi ministerio a - mi familia es una prioridad (muy baja, media, alta, muy
alta) para mí.
12. Tengo una idea (mínima, algo borrosa, media, clara, muy clara) de cómo nuestra familia puede
funcionar unida como un “equipo” de ministerio.
Discipulado Personal
12. Veo a mis padres como la provisión principal de Dios para las necesidades de mi educación in-
telectual, física, espiritual y social (totalmente de desacuerdo, más o menos de desacuerdo, más
o menos de acuerdo, totalmente de acuerdo.)
13. Yo puedo aprender cosas importantes de mis padres, y hago un esfuerzo para
hacerlo(totalmente de desacuerdo, más o menos de desacuerdo, más o menos de acuerdo, total-
mente de acuerdo.)
14. Es (para nada, no mucho, algo, muy) importante para mí obedecer a mis padres en todas las co-
sas, y que ellos se agraden conmigo. En la práctica, yo me daría una puntuación de (10, 8, 6, 4,
2) por cuanto los obedezco.
15. Estoy preparado y dispuesto a ser discipulado por mis padres (sí, no, no estoy seguro.) Mis pa-
dres ya me han involucrado en un programa especifico de discipulado (sí, no, no estoy seguro.)
16. Hay responsabilidades y concesiones domésticas establecidas en mi casa (sí, no.) La mejor pa-
labra para describir cómo yo realizo mis responsabilidades domésticas es: ________________
___________________________________________________________________________
17. Cuando son planeadas actividades ministeriales para la familia, yo participo (para nada, con
reservaciones, voluntariamente, con entusiasmo.)
18. He aprendido como relacionarme con el sexo opuesto en pureza, con discreción y con amor fra-
ternal (sí, no, aún necesito aprender más.)
19. Soy (para nada, no mucho, algo, fuertemente, totalmente) convencido de que el matrimonio
con un no-cristiano(a) sería un error grave. Por tanto, yo (nunca, raramente, a veces, a menudo)
salgo con no-cristianos(as.)
Si eres un SOLTERO, que no vive bajo la autoridad de tus padres, o si eres DI-
VORCIADO o SEPARADO, completa estas oraciones:
20. He aprendido a relacionarme con el sexo opuesto en pureza, con discreción y en amor fraternal
(sí, no, aún necesito aprender más.)
21. Soy (para nada, no mucho, algo, fuertemente, totalmente) convencido de que el matrimonio
con un no-cristiano(a) sería un error grave. Por tanto, yo (nunca, raramente, a veces, a menudo)
salgo con no-cristianos(as.)
22. Tengo un entendimiento (mínimo, medio, total) de qué buscar en una pareja, y tengo un enten-
dimiento (mínimo, medio, total) de cómo determinar si fuera o no fuera la voluntad de Dios que
yo me casaría con cierto individuo.
23. Estoy (muy ansioso y deprimido, algo deprimido, okay, satisfecho, muy satisfecho) de estar sol-
tero ahora, y yo veo (para nada, sin gusto, con gusto, con entusiasmo) mi soltería como un re-
galo temporal (o permanente) de Dios.
24. Ahora estoy (completamente, algo, un poco, para nada) dependiente de mis padres en mi vida
cotidiana, para hacer decisiones, para compañerismo, etcétera y dependo(más, menos) de ellos
en cada momento.
25. Estoy usando mi soltería como ventaja (ninguna, pequeña, media, grande) para ensanchar mi
ministerio.
26. Para los SOLTEROS que aún viven en la casa de sus padres: Mientras esté viviendo bajo el
techo de mis padres, he decidido obedecer sus deseos con toda mi capacidad. (no es cierto, ape-
nas cierto, más o menos cierto, muy cierto)
Familia-2
Nombre ______________________________________________ Fecha _________________
Si estás DIVORCIADO o SEPARADO, completa estas oraciones:
27. Tengo un (mínimo, medio, total) conocimiento de lo que la Biblia enseña acerca del divorcio y
las segundas nupcias.
28. Tengo un entendimiento (mínimo, medio, total) de cómo relacionarme con mis hijos y cónyuge
anterior en una manera responsable y cristiana. En la práctica, yo me daría una puntuación de
(10, 8, 6, 4, 2) por la forma en que me relaciono con ellos.
29. Estoy buscando (para nada, posiblemente, pasivamente, activamente) un nuevo cónyuge.
Título(s) ___________________________________________________________________ .
34. En una escala del 1 al 10 (10 = absolutamente cierto), ¿cómo puntuarías esta oración para tu
vida? “Acepto incondicionalmente a mi cónyuge como la provisión principal de Dios para mis
necesidades interpersonales y como la única provisión para mis necesidades sexuales. No tengo
ninguna inclinación para buscar a otra persona”. _______.
35. Estoy (no muy, algo, muy, salvajemente) dispuesto a recomprometerme a mantenerme fiel a mi
esposo(a.)
36. En una escala del 1 al 10, ¿cuán seguro estás de que esta oración sea cierto? “Diez años después
de hoy yo todavía habré sido totalmente fiel a mi esposo(a)”_______.
37. Tengo convicciones (inexistentes, débiles, medias, fuertes, muy fuertes) de que el matrimonio
forma una unidad inquebrantable y que el divorcio no es una opción para mi cónyuge y yo.
38. Veo el ministerio a mi cónyuge (y a mi grupo familiar) como una prioridad (baja, media, alta),
y en la práctica, mis actitudes y acciones demuestran ese nivel de prioridad (no muy bien,
mediocremente bien, bien, exactamente.)
39. Mi cónyuge y yo nos reunimos _________ veces a la semana para orar y / o estudiar la Biblia
juntos.
40. Aparto momentos específicos para pasarlos bien con mi esposo(a), concentrándome en la co-
municación: (Marca todos los espacios que te aplican.)
_______ Diariamente ______ Mensualmente _____ Semanalmente ____ Anualmente
41. Mi esposo(a) y yo (hemos, no hemos) establecido un presupuesto familiar, y hemos tenido (no
mucho, algo de, mucho) éxito al seguirlo.
42. Estoy haciendo un (mínimo, medio, buen, extensivo) esfuerzo para convertirme en “estudiante”
de mi cónyuge - para ser el experto más grande sobre él(ella) en la faz de la tierra.
Familia-4
Nombre ______________________________________________ Fecha _________________
53. Mi cónyuge y yo hacemos un trabajo (horrible, mediocre, bastante bueno, excelente) en
discipular a nuestros hijos y comunicarlos cuáles son, y mantenerlos responsable en, sus debe-
res.
54. Uno de nuestros objetivos principales en el discipulado de nuestros hijos es integrarlos en el
equipo ministerial único de nuestra familia. (No es cierto, más o menos cierto, muy cierto,
exactamente correcto) Hasta este punto, diría que hemos tenido (ningún, un poco de, bastante,
muchísimo) éxito en eso.
55. Hago un esfuerzo (mínimo, medio, bueno, extensivo) para llegar a ser un estudiante de mis hijos
– a ser el experto más grande sobre ellos en la faz de la tierra.
56. En una escala de 1 a 10, ¿cuán cierta es la siguiente oración para ti? “Yo busco continuamente
la unidad, la armonía, y el entendimiento con mis hijos por medio de la comunicación honesta y
sensible.” _______
57. Usualmente, yo paso ________ minutos, _________ días cada semana orando exclusivamente
por mi familia y sobre mis papeles y responsabilidades dentro de la familia.
217
218 DISCIPULADO PERSONAL
CUIDADO DEL RECIÉN NACIDO
CÓMO CUIDAR A UN NUEVO CRISTIANO
1. Seguridad de la salvación – El discípulo está seguro de que si ha pedido honestamente que Cristo entre en su vida:
a. Cristo ha entrado su vida de verdad;
b. Ha nacido de nuevo y es toda una nueva creación;
c. Sus pecados (pasados, presentes, y futuros) han sido perdonados;
d. Ha establecida una nueva relación entre él y Dios;
e. Nunca volverá a estar separado de Dios.
2. Alcance y significado de la salvación – El discípulo entiende más completamente el alcance y significado de lo ocurrió al invi-
tar a Cristo a entrar en su vida. Eso produce un compromiso más profundo y una mayor motivación a crecer Cristo.
3. Llenura del Espíritu Santo – El discípulo comprende lo más básico sobre el ministerio del Espíritu Santo y le saca provecho.
4. Identidad en Cristo – El discípulo comprende lo más básico sobre su nueva identidad en Cristo y sobre la lucha que existe entre
su vieja naturaleza y la nueva.
5. Principios básicos de crecimiento – El discípulo conoce lo más básico de los principios de crecimiento espiritual y es conscien-
te de la ventajosa influencia del tiempo, las adversidades y la soberanía de Dios.
6. Compañerismo – El discípulo comprende lo más básico sobre la importancia del compañerismo cristiano y ya empieza a asistir
a reuniones cristianas.
7. La Palabra – El discípulo conoce lo más básico sobre la importancia de la Biblia, lo que nos aporta, su estructura, y ya ha empe-
zado a leerla por sí solo.
8. La Oración – El discípulo sabe lo más básico sobre la oración, conoce lo más fundamental y ya ora solo.
9. Testimonio – El discípulo sabe lo más básico sobre el testimonio, conoce los elementos primarios del evangelio y puede explicar
a otro el cómo se llega a ser cristiano.
10. Batalla Espiritual – El discípulo conoce lo más básico sobre la adversidad, Satanás, la tentación y el pecado.
11. Mayordomía – El discípulo tiene conocimientos básicos de los principios bíblicos de la buena mayordomía que incluye el ma-
nejo de su tiempo, talentos, y tesoro.
12. Visión – El discípulo entiende lo importante que él es para el avance del Reino de Dios, tiene una idea clara de los amplios pla-
nes que Dios tiene para él, y está motivado a perseguir de forma activa su desarrollo espiritual y su relación con Dios.
TABLA DE CRECIMIENTO DEL DISCIPULADO 219
REFERNCIAS
Algunas de las descripciones del perfil hacen referencia a unas listas de temas. A continuación los tenemos:
(#221) (#250, 357, 455)
Inspiración de la Biblia: Áreas del Desarrollo del Carácter
1. Inerrante: No contiene errores 1. Frutos del Espíritu 12. Pureza
2. Infalible: No te guiará mal: síguela y no Te equivocarás a. Amor 13. Gratitud
3. Autoritaria: Absolutamente cierta: Dios es la fuente. b. Gozo 14. Constancia
4. Completa: Toda ella está inspirada, no sólo una parte. c. Paz 15. Perdonar a otros
5. Verbalmente inspirada: Cada palabra escrita por autores d. Paciencia 16. Sumisión a la autoridad
originales fue inspirada por Dios e. Benignidad 17. Fidelidad en la mayordo-
6. Transmisión Supervisada: Transmisión a través de los f. Bondad mía
siglos supervisada por Dios. g. Fe 18. Disciplina
(#233): h. Gentileza 19. Sinceridad
Las cinco objeciones más frecuentes al Cristianismo i. Dominio Propio 20. Sensibilidad social
1. No creo que Dios exista. 2. Fe 21. Contentamiento
2. No creo que Cristo sea el único camino. 3. Humildad 22. Imparcialidad
3. ¿Qué de aquellos que han muerto y nunca oyeron nada del 4. Corazón de siervo 23. Compasión
Evangelio? 5. Obediencia a Dios 24. Imagen positiva de sí mis-
4. No creo que la Biblia es la Palabra de Dios. 6. Activismo social mo
5. Si Dios es bueno, ¿cómo es que hay tanta maldad en el 7. Sabiduría 25. Superación del pasado
mundo? 8. Diligencia 26. Dispuesto a sacrificarse
(#240, 344, 433) 9. Valor 27. Misericordioso
26 Atributos del Compañerismo Maduro 10. Actitud enseñable 28. Santo
1. Amor 11. Honestidad
2. Paciencia (* 241, 260, 343, 360, 440, 442, 460)
3. Bondad Dones Espirituales:
4. Fidelidad 1. Dones del lenguaje: para explicar la verdad de Dios
5. Gentiliza a. Profecía
6. Domino Propio b. Enseñaza
7. Humildad c. Exhortación
8. Actitud de siervo d. Palabra de sabiduría
9. Acepta corrección y reprensión e. Palabra de discernimiento
10. Dispuesto a sufrir penalidades por los demás 2. Dones de servicio: para hacer posible la obra de Dios
11. Habla con gracia a. Servicio
12. Misericordia b. Dar
13. Compasión c. Liderazgo
14. Perdón d. Administración
15. Dispuesto a sufrir e. Misericordia
16. Devuelve bien por mal f. Fe
17. Honesto g. Discernimiento de espíritus
18. Hospedador h. Ayuda
19. Pacificador i. Hospitalidad
20. Generoso con el tiempo, talento y tesoro 3. Dones palpables: para establecer la autoridad de Dios
21. Sensitivo y consciente de las necesidades de otros a. Lenguas
22. Busca edificar a otros b. Interpretación
23. Dispuesto a identificar, confrontar y ayudar a corregir los c. Milagros
errores en el Cuerpo d. Sanidad
24. Reconoce, respeta y aprecia a líderes espirituales 4. Dones especiales: para equipar a la gente de Dios
25. Reconoce, respeta y aprecia los dones, talentos y ministerios a. Apóstoles
en otros b. Profetas
26. Desea la compañía de otros cristianos c. Evangelistas
d. Pastor-Maestros
220 DISCIPULADO PERSONAL
AREA DEL CRECIMIENTO: ORACIÓN
LO QUE HACES CON DIOS
. . . Y cuando terminó, uno de sus discípulos le dijo: “Señor, enséñanos a orar, . . . —Lucas 11:1
Definición del área: El acto de adorar, tener comunión y conversar con Dios.
110. Entiende lo básico sobre la oración, incluyendo: 210. Entiende el principio involucrado en obtener respuestas posi-
a. Tipos de oración (Adoración, Confesión, Acción de Gra- tivas a la oración
(conocimiento
cias, Súplica) 211. Tiene una buena comprensión de los sub-tipos de oración,
intelectual)
Conoce
111. Está convencido de que Dios es un Dios personal, y que en- 212. Está convencido de que la oración ES un ministerio, y que
(conocimiento
del corazón)
cuentra placer en nuestra comunicación con Él su vida de oración afectará grandemente el fruto en todas las
Siente
otras áreas.
112. Tiene un tiempo de oración personal de tres a cuatro veces 213. Tiene un tiempo de oración diaria de 7 a 10 minutos
(conocimiento manual)
por semana; cada sesión dura de 4 a 8 minutos 214. Es capaz de orar en voz alta en el ambiente de grupo pe-
queño
215. Ora espontáneamente durante el día
Vive
216. Está comenzando a orar por algo más que necesidades físi-
cas y muestra una creciente preocupación por las cosas que
hay en el corazón de Dios
217. Está creciendo en el arte de adorar a Dios
TABLA DE CRECIMIENTO DEL DISCIPLULADO 221
NECESIDAD PRINCIPAL DEL DISCÍPULO: Fuerza, expe- NECESIDAD PRINCIPAL: Habilidades de liderazgo: una
riencia, responsabilidad. autodisciplina consistente.
MOTIVACIÓN CLAVE: El mismo. MOTIVACIÓN CLAVE: Dios, el ministerio.
MI PAPEL: Entrenador. MI PAPEL: Colega.
MI TRABAJO: Desarrollar la fuerza, la experiencia, la respon- MI TRABAJO: Motivar para el largo viaje; animarle a una ma-
sabilidad, hacerle trabajar. yor responsabilidad y a dar más fruto.
310. Es retado a profundizar su vida de oración cada vez más al 410. Está siendo más consciente y sensitivo en cuanto a las priori-
ser expuesto a las vidas de algunos de los “guerreros de ora- dades y preocupaciones de Dios, las cuales forman la colum-
ción” de la historia (biografías) y también con la lectura de na vertebral de su vida de oración.
algunos de los grandes clásicos que hablan de la oración
311. Sus convicciones en cuanto a la eficacia de la oración son 411. Ve a Dios como el agente primario que afecta la salida de
cada vez más profundas al quebrantarse las barreras de fe cualquier situación que lo preocupa y cree firmemente que
sustanciales Dios considerará y actuará en sus peticiones.
312. Conoce que Dios desea seriamente tener comunión con él y
está anhela cooperar.
313. Está aumentando su tiempo de oración diaria a 20 o 30 mi- 412. Ora regular y frecuentemente por largos períodos de tiempo,
nutos algunas veces acompañados con el ayuno.
314. Es capaz de orar por una hora completa 413. Toma regularmente un rol activo en los grupos de oración.
315. Es capaz de para ayunar por 24 horas 414. Su tiempo de oración está impregnado de adoración.
316. Alaba y agradece a Dios naturalmente y frecuentemente,
tanto en el tiempo de oración formal como espontáneo.
222 DISCIPULADO PERSONAL
ÁREA DE CRECIMIENTO: LA PALABRA
LO QUE SE HACE CON LA BIBLIA
Si vosotros permaneciereis en mi palabra, series verdaderamente mis discípulos. —Juan 8:31
Definición del área: Actividades hechas para absorber y aplicar la Biblia a la vida diaria.
120. Entiende todas las cinco formas de asimilación de la Palabra 220. Está creciendo en su habilidad de asimilar la Palabra de Dios
(conocimiento intelectual)
121. Está convencido de que la Biblia es la Palabra de Dios y por 221. Cree que la Biblia es inerrante, infalible, autoritativa, plena y
lo tanto es la verdad y autoridad absoluta. verbalmente inspirada y que Dios ha supervisado su transmi-
(conocimiento
del corazón)
122. Ve la Palabra de Dios como el alimento espiritual que le sión a través de los siglos
Siente
ayudará a crecer y expresa un deseo de aprender más sobre 222. Está convencido de que tener un entendimiento completo de
ella. la Palabra es vital para testificar, ministrar con eficacia y
crecer personalmente
123. Comienza a recibir una ingestión balanceada de la Biblia a 223. Habla abiertamente sobre la Palabra y está obteniendo habili-
través de: dad en el uso de ella cuando:
a. escuchar semanalmente la Palabra en el culto de una igle- a. se enfrenta con pruebas
sia local b. lucha contra Satanás y el pecado
b. leer la Palabra por su cuenta tres o cuatro veces por sema- c. busca dirección
na 224. Está alcanzando profundidad en la Palabra al:
(conocimiento manual)
c. terminar unos pocos estudios bíblicos asignados por el a. escuchar varias veces a la semana enseñanzas cristianas
discipulador y llegar a familiarizarse con la estructura grabadas
Vive
NECESIDAD PRINCIPAL DEL DISCÍPULO: Fuerza, expe- NECESIDAD PRINCIPAL: Habilidades de liderazgo: una
riencia, responsabilidad. autodisciplina consistente.
MOTIVACIÓN CLAVE: El mismo. MOTIVACIÓN CLAVE: Dios, el ministerio.
MI PAPEL: Entrenador. MI PAPEL: Colega.
MI TRABAJO: Desarrollar la fuerza, la experiencia, la respon- MI TRABAJO: Motivar para el largo viaje; animarle a una ma-
sabilidad, hacerle trabajar. yor responsabilidad y a dar más fruto.
320. Continúa en su crecimiento de la habilidad de asimilar la 420. Ha desarrollado un hábito consistente y por vida de asimilar
Palabra de Dios al: la Palabra de Dios a través de las cinco maneras, lo cual re-
a. aprender a estudiar la Biblia a través de varios métodos sulta en un fortalecimiento constante de su entendimiento de
(analizar versículo por versículo, capítulos / libros, temas, las doctrinas y temas principales de la Biblia.
y personajes)
b. aprender los principios básicos de la hermenéutica
c. llegar a familiarizarse con ayudas de estudio bíblico más
avanzadas
d. memorizar el orden de los libros de la Biblia
321. Sus convicciones con relación a la Palabra están siendo 421. Sostiene la Palabra en alta estima como el estándar y la auto-
profundizadas debido a que ha experimentado fiabilidad en ridad para todo lo que hace
ella en los eventos de la vida diaria
322. Está enseñando la Palabra a otros a través del discipulado, 422. Demuestra una convicción personal que la Palabra de Dios
dirigir un estudio bíblico, enseñar una clase de escuela domi- es viva, activa, poderosa y eficaz en su vida, resultando en
nical, o exhortar y aconsejar espontáneamente aplicación personal y obediencia completa
323. Está adquiriendo habilidad en el uso de la Palabra cuando
testifica y ministra a otros
324. Está obteniendo profundidad en la Palabra de Dios al:
a. escuchar la Palabra de Dios a través de varios medios y
tomando notas cuando es posible
b. leer toda la Biblia cada año
c. ampliar sus métodos de estudio bíblico a incluir el análi-
sis versículo por versículo, y estudios de capítulos, libros,
temas, y personajes
d. memorizar dos versículos (o tarjetas de versículos) por
semana y / o porciones más largas de la Escritura como
capítulos o libros
325. Ha terminado un estudio detallado de las doctrinas principa-
les de la Biblia
224 DISCIPULADO PERSONAL
AREA DE CRECIMIENTO: TESTIMONIO
LO QUE SE HACE CON LOS INCRÉDULOS.
En esto es glorificado mi Padre, en que llevéis mucho fruto, seáis así mis discípulos. —Juan 15:8
Definición del área: Actitudes y acciones que influyen a los no cristianos hacia la Salvación.
130. Tiene un entendimiento básico del papel de Dios en el 230. Ha aprendido dos métodos para compartir el Evangelio uno
evangelismo y sabe que, a pesar de que tiene la responsabili- a uno; con y sin la ayuda de un folleto
dad de testificar no es su responsabilidad “convertir a la gen- 231. Puede contar su testimonio personal en tres a cinco minutos
Conoce
131. Está convencido de que los no cristianos están perdidos, y 234. Está convencido de que sería inútil intentar testificar sin la
(conocimiento
del corazón)
expresa su decisión de ayudarlos hacia la salvación participación completo de Dios en ese proceso
Siente
132. Ha hecho una confesión pública de su fe en Cristo 236. Se ha identificado abiertamente como cristiano donde vive y
133. Ha aprendido un método de presentar el Evangelio uno-a- trabaja
uno 237. Está orando por oportunidades para presentar el Evangelio a
Vive
NECESIDAD PRINCIPAL DEL DISCÍPULO: Fuerza, expe- NECESIDAD PRINCIPAL: Habilidades de liderazgo: una
riencia, responsabilidad. autodisciplina consistente.
MOTIVACIÓN CLAVE: El mismo. MOTIVACIÓN CLAVE: Dios, el ministerio.
MI PAPEL: Entrenador. MI PAPEL: Colega.
MI TRABAJO: Desarrollar la fuerza, la experiencia, la respon- MI TRABAJO: Motivar para el largo viaje; animarle a una ma-
sabilidad, hacerle trabajar. yor responsabilidad y a dar más fruto.
330. Tiene un buen entendimiento de la doctrina de la salvación 430. Sigue obteniendo conocimiento de la apologética de la fe
(soteriología) cristiana
331. Está ampliamente familiarizado con la apología cristiana
332. Sabe los principales cultos, religiones y sistemas de creen-
cias no cristianos , y está bien preparado para testificar a sus
seguidores
333. Están creciendo sus convicciones en cuanto a la importancia, 431. Tiene una creciente carga por los perdidos
el privilegio y la responsabilidad de testificar, pero al mismo 432. Está comprometido de por vida con testificar a pesar de las
tiempo está creciendo su confianza en el Espíritu Santo para injusticias y las reacciones negativas
lograr el trabajo de conversión
334. Está tomando ventaja de más y más oportunidades para com- 433. Busca activamente las oportunidades para compartir el Evan-
partir su fe, y toma la iniciativa con más frecuencia para gelio de maneras creativas, y lo hace con denuedo y claridad,
iniciar conversaciones sobre Cristo de forma amable y atractiva
335. Está creciendo en la habilidad de relacionarse y ministrar a
los no cristianos “donde viven,” siendo sensitivo a sus nece-
sidades físicas, sociales y emocionales
226 DISCIPULADO PERSONAL
AREA DE CRECIMIENTO: COMPAÑERISMO
LO QUE SE HACE CON OTROS CRISTIANOS.
En esto conocerán todos que sois mis discípulos, si tuviereis amor los unos con los otros. —Juan 13:35
Definición del área: Actitudes y acciones que mejoran las relaciones de uno con otros cristianos y edifican el cuerpo de
Cristo.
140. Entiende la analogía de Cristo acerca de ser parte del cuerpo 240. Ha hecho un estudio de unas selecciones apropiadas de los
(conocimiento
intelectual)
o edificio, y reconoce sus ventajas y responsabilidades en 26 Atributos del Compañerismo Maduro* y muestra un de-
Conoce
141. Siente que es importante tener compañerismo regular con 242. Está convencido de que él es importante para el Cuerpo de
(conocimiento
del corazón)
otros creyentes para que crezca y sea protegido Cristo y que de veras puede ser usado por Dios para
Siente
142. Asiste regularmente a la iglesia 243. Se ha unido formalmente a una congregación y está comen-
(conocimiento manual)
con los amigos cristianos 244. Hace un esfuerzo a servir, animar y edificar a otros creyen-
tes con más frecuencia
NECESIDAD PRINCIPAL DEL DISCÍPULO: Fuerza, expe- NECESIDAD PRINCIPAL: Habilidades de liderazgo: una
riencia, responsabilidad. autodisciplina consistente.
MOTIVACIÓN CLAVE: El mismo. MOTIVACIÓN CLAVE: Dios, el ministerio.
MI PAPEL: Entrenador. MI PAPEL: Colega.
MI TRABAJO: Desarrollar la fuerza, la experiencia, la respon- MI TRABAJO: Motivar para el largo viaje; animarle a una ma-
sabilidad, hacerle trabajar. yor responsabilidad y a dar más fruto.
340. Ha comenzado a ampliar y profundizar su conocimiento de 440. Obtiene continuamente más sabiduría, sensibilidad y habili-
varios aspectos del compañerismo bíblico a través del estu- dad en las áreas de consejería, ánimo, comunicación, relacio-
dio de libros y artículos y por aplicar lo que aprende, y por nes interpersonales, relaciones familiares y el uso de sus do-
actuar en el criticismo constructivo nes espirituales*
341. Ha logrado una evaluación preciso y humilde de sus propias 441. Mantiene la convicción de que una relación cercana e
fortalezas y debilidades en el compañerismo y está determi- interacción frecuente y armonía con otros creyentes es indis-
nado desarrollarlas por el bien del Cuerpo pensable para el crecimiento, protección y funcionamiento
342. Reconoce, respecta y busca aumentar los dones, talentos y apropiado de cada cristiano y del Cuerpo en su totalidad
ministerios de los demás en el Cuerpo
343. Ha descubierto sus dones espirituales* y está tomando pasos 442. Ejercita sus dones espirituales fielmente y hábilmente
para desarrollarlos y ejercitarlos 443. Su vida se caracteriza por una consistente, y profundizando
344. Los 26 Atributos del Compañerismo Maduro* han llegado a demostración de los 26 Atributos del Compañerismo Madu-
ser más y más evidentes en su vida ro*
345. Está comprometido con un grupo pequeño de creyentes que 444. Es un líder en su iglesia local en el área de sus dones
se han unido para animarse, edificarse, sostenerse, y rendirse
cuentas unos a los otros
346. Es asistente consistente y fiel de una iglesia, y comienza te-
ner papeles de liderazgo
150. Sabe que Dios desea desarrollar el carácter de Cristo en él, a 250. Ha hecho un estudio de selecciones apropiadas en las Áreas
(conocimiento intelectual)
través de una combinación de disciplina personal, obediencia de Desarrollo de Carácter* y demuestra el deseo de verlos
consistente a Dios y la acción directa del Espíritu Santo incorporados en su vida
251. Entiende los factores fundamentales de la voluntad de Dios y
Conoce
151. Entiende las dos principales funciones del tiempo devoto, 253. Se da cuenta de que su estilo de vida y su camino con el Se-
como son: el desarrollo de la relación y el desarrollo de la ñor afectará en gran manera su fidelidad en las áreas de ora-
madurez a través de la oración, la alabanza, la Palabra y la ción, testimonio, compañerismo, ministerio, y otras áreas de
(conocimiento
del corazón)
152. Ha llevado a cabo un estudio más profundo en cuanto a 254. Tiene un tiempo devoto de por lo menos 15 minutos casi
como superar la adversidad, Satanás, la tentación, y el peca- todos los días
do, ampliando lo que aprendió en el “Cuidado del Recién 255. Está adquiriendo eficacia en resistir a Satanás y al pecado y
Nacido” toma pasos para “separarse del mundo”
153. Comprende el concepto de que el cristianismo no es un mero 256. Se ha enfrentado con por lo menos un dilema que ha solucio-
código de comportamiento o un club social, sino una rela- nado por buscar activamente y descubrir la voluntad de Dios
(conocimiento manual)
ción personal activa con un Ser Viviente que requiere desa- en el asunto
rrollo a través de la atención concentrada 257. Ha completado todas las “aplicaciones de alta prioridad” en
154. Tiene un tiempo devoto de 8 a 10 minutos, tres o cuatro ve- relación con el desarrollo del carácter
Vive
ces a la semana, preferiblemente en la mañana y en un lugar 258. Ha iniciado un programa regular de ejercicios físicos y una
solitario. dieta sana
155. Busca obedecer la “voluntad moral de Dios,” por tomar pa-
sos alejarse de los pecados mientras Dios se los revela en su
vida
156. Aplica los principios bíblicos de mayordomía financiero
aprendidos en “Cuidado del Recién Nacido”
157. Ha implementado exitosamente una estrategia para el manejo
de tiempo
NECESIDAD PRINCIPAL DEL DISCÍPULO: Fuerza, expe- NECESIDAD PRINCIPAL: Habilidades de liderazgo: una
riencia, responsabilidad. autodisciplina consistente.
MOTIVACIÓN CLAVE: El mismo. MOTIVACIÓN CLAVE: Dios, el ministerio.
MI PAPEL: Entrenador. MI PAPEL: Colega.
MI TRABAJO: Desarrollar la fuerza, la experiencia, la respon- MI TRABAJO: Motivar para el largo viaje; animarle a una ma-
sabilidad, hacerle trabajar. yor responsabilidad y a dar más fruto.
350. Ha aprendido a variar el contenido de su tiempo devoto para 450. Continuamente adquiere, a través del estudio personal, más
mantenerlo fresco y retador discernimiento con relación a los factores involucrados en el
351. Ha hecho un estudio profundo de la pregunta: “Si Dios es crecimiento personal, poniendo mucha atención a los ele-
amable, ¿por qué hay sufrimiento en el mundo? mentos que pueden mejorar su jornada hacia la madurez
352. Tiene la convicción de que su tiempo devoto debe ser una 451. Tiene la convicción de que nunca “completará” su madurez
actividad prioritaria cada día, lo ve no como una obligación espiritual y está comprometido, para toda la vida, con el pro-
sino como el encuentro entre dos amigos greso activo de su crecimiento personal
353. Está adquiriendo una actitud positiva hacia las pruebas, mi-
rándolas como oportunidades beneficias para crecimiento
354. Sabe que la voluntad de Dios no siempre será placentera o
fácil, pero a pesar de eso está dispuesto a subordinar su pro-
pia voluntad a la de Dios
355. Ha incrementado su tiempo devoto a un mínimo de 30 minu- 452. Persigue activamente su relación con Dios y pone su tiempo
tos diarios y rara vez se lo pierde, sin importar horario de devoto en alta prioridad cada día, pero también busca mo-
trabajo, responsabilidades de liderazgo o pruebas personales, mentos espontáneos breves (o no tan breves) de comunión
356. Está mostrando más y más inclinación a y eficacia en resistir con Dios a través del día y la noche
a Satanás y al pecado 453. Obtiene la victoria sobre la adversidad y resiste efectivamen-
357. No muestra mayor deficiencia en cualquier Área de Desarro- te a Satanás y al pecado con gran consistencia, pero cuando
llo de Carácter* tropieza, restaura rápidamente su relación con Dios a través
358. Ha vencido todos los hábitos personales dañinos de la confesión y el arrepentimiento
359. Ha establecido una consistencia a largo plazo en las áreas de 454. Busca activamente la voluntad de Dios en todas las decisio-
ejercicios y dieta, estableciendo y logrando metas apropiados nes importantes, mientras constantemente mantiene una acti-
tud de acatamiento y sujeción a la voluntad de Dios en deci-
siones cotidianas menores
455. Proyecta una vida caracterizada por demostraciones consis-
tentes en todas las Áreas de Desarrollo de Carácter*
160. Sabe que, como hijo de Dios, ha sido equipado personalmen- 260. Está consciente de la variedad de dones espirituales* y co-
te por Dios para ministrar a otros, y que es responsable por mienza a descubrir los suyos
(conocimiento intelectual)
el uso y el desarrollo de esos dones 261.Está consciente de los diferentes tipos de ministerios disponi-
bles y está comenzando a evaluar en cuales de ellos sería
Conoce
mejor para él
161. Tiene el deseo de descubrir y usar sus dones espirituales y 262. Sabe lo que significa ser “un cristiano global”
talentos naturales para el bien del Cuerpo de Cristo y la ex- 263.Conoce lo que involucra el seguimiento inicial del nuevo
(conocimiento del corazón)
162. Está comenzando a usar sus talentos naturales y / o habilida- 267. Está comenzando a enrolarse en una amplia variedad de mi-
des adquiridas en el servicio a otros nisterios y proyectos de servicio a razón de adquirir un cora-
(conocimiento manual)
NECESIDAD PRINCIPAL DEL DISCÍPULO: Fuerza, expe- NECESIDAD PRINCIPAL: Habilidades de liderazgo: una
riencia, responsabilidad. autodisciplina consistente.
MOTIVACIÓN CLAVE: El mismo. MOTIVACIÓN CLAVE: Dios, el ministerio.
MI PAPEL: Entrenador. MI PAPEL: Colega.
MI TRABAJO: Desarrollar la fuerza, la experiencia, la respon- MI TRABAJO: Motivar para el largo viaje; animarle a una ma-
sabilidad, hacerle trabajar. yor responsabilidad y a dar más fruto.
360. Está definiendo sus opciones en cuanto a los ministerios 460. Tiene un entendimiento claro de cómo Dios lo ha equipado
donde estaría mejor ubicado con base en sus dones, talentos excepcionalmente para el ministerio y está aumentando su
y habilidades, y donde existe la mayor necesidad, (localmen- discernimiento de cómo desarrollar y ejecutar mejor su mi-
te y mundialmente) nisterio
361. Sabe los principios básicos del discipulado y se le ha enseña-
do como usar este programa
362. Está desarrollando un entendimiento en cuanto a los princi-
pios básicos del liderazgo
363. Sabe los principios básicos de dirigir un estudio de la Biblia
en un grupo pequeño
364. Llega a ser menos egoísta y está dispuesto a sufrir dificulta- 461. Se da cuenta que el ministerio a menudo involucra trabajo
des por la causa del ministerio duro, y está dispuesto a sacrificarse, soportar dificultades y
enfrentar peligros por la causa del ministerio
462. Su motivación principal en el ministerio es el amor
463. Su objetivo final en el ministerio es influenciar a otros hacia
semejanza con Cristo
365. A guiado a un nuevo cristiano a través del cuidado inicial 464. Con su comportamiento da ejemplo de portarse como Cristo
(Cuidado del Recién Nacido)* y ha comenzado a y así anima a otros a imitarlo
discipularlo 465. Está activamente involucrado en lo que Dios lo ha equipado
366. Está tomando los pasos necesarios para desarrollarse en las y desarrolla habilidades de liderazgo ministerial
áreas de ministerio donde ha sentido que Dios lo ha equipa- 466. Demuestra constantemente humildad, diligencia, fidelidad,
do obediencia a Dios, gozo, honestidad, amabilidad, compasión
367. Está ministrando eficientemente donde trabaja con su ejem- e imparcialidad cuando ejecuta su ministerio para otros
plo y palabra 467. Está activamente involucrado en el proceso de crear discípu-
368. Dirige un estudio de la Biblia para un grupo pequeño los y discipuladores
170. Tiene un entendimiento básico de lo que la Biblia dice es su 270. Sabe lo básico de cómo relacionarse con otros de la familia a
papel particular como un miembro de la familia y cuáles son la manera de Cristo
sus responsabilidades hacia ella 271. Casados:
171. Casados: Reconoce las diferencias entre el plan del mundo a. Ha asistido a un Congreso de Matrimonio de fin de sema-
para el matrimonio y el plan de Dios para el matrimonio na con su cónyuge
b. Ha examinado su papel particular y las responsabilidades
con su familia, completando un estudio a fondo (con el
(conocimiento intelectual)
NECESIDAD PRINCIPAL DEL DISCÍPULO: Fuerza, expe- NECESIDAD PRINCIPAL: Habilidades de liderazgo: una
riencia, responsabilidad. autodisciplina consistente.
MOTIVACIÓN CLAVE: El mismo. MOTIVACIÓN CLAVE: Dios, el ministerio.
MI PAPEL: Entrenador. MI PAPEL: Colega.
MI TRABAJO: Desarrollar la fuerza, la experiencia, la respon- MI TRABAJO: Motivar para el largo viaje; animarle a una ma-
sabilidad, hacerle trabajar. yor responsabilidad y a dar más fruto.
370. Casados: Ha completado el estudio de un segundo libro o 470. Casados: Ha llegado a ser un “estudiante” de su cónyuge e
serie de casetes sobre el tema del matrimonio hijos – la autoridad más grande del mundo en cuanto a como
371. Padres: Ha completado el estudio de un segundo libro o serie funcionan
de casetes sobre el tema de la paternidad
372. Solteros: Conoce las características básicas de un
compañero(a) matrimonial y sabe como descubrir si estaría
dentro de la voluntad de Dios casarse con cierta persona
234 DISCIPULADO PERSONAL
ÁREA DE CRECIMIENTO: FAMILIA
174. Está orando diariamente por los demás miembros de su fami- 277. Casados:
lia inmediata y por sus propias responsabilidades a. Aparta tiempos específicos (diario, semanal, mensual,
175. Padres e hijos: Está involucrado en una actividad exclusiva- anual) para pasar tiempo de calidad con su familia (indi-
mente familiar por lo menos una vez al mes vidualmente y como grupo) con un énfasis en la comuni-
176. Padres: cación intra familiar
a. Se asegura que la familia comience a recibir una ingestión b. Ha establecido un presupuesto familiar funcional y está
(conocimiento manual)
espiritual eficaz por medio de la asistencia consistente a haciendo un gran esfuerzo para apegarse al mismo
una iglesia local 278. Padre:
b. Ha establecido tiempos devotos familiares regulares a. Está comenzando un programa específico para co-
Vive
NECESIDAD PRINCIPAL DEL DISCÍPULO: Fuerza, expe- NECESIDAD PRINCIPAL: Habilidades de liderazgo: una
riencia, responsabilidad. autodisciplina consistente.
MOTIVACIÓN CLAVE: El mismo. MOTIVACIÓN CLAVE: Dios, el ministerio.
MI PAPEL: Entrenador. MI PAPEL: Colega.
MI TRABAJO: Desarrollar la fuerza, la experiencia, la respon- MI TRABAJO: Motivar para el largo viaje; animarle a una ma-
sabilidad, hacerle trabajar. yor responsabilidad y a dar más fruto.
373. Ha adquirido fuertes convicciones con relación al sexo 471. Comprometido a mantener una unión a largo plazo con su
extramarital, el divorcio, la homosexualidad y el aborto, y familia, aun cuando todos hayan alcanzado la etapa adulta
puede defender su posición inteligentemente y bíblicamente 472. Casados: Ve a su cónyuge como la provisión primaria de
374. Casados: Ve su ministerio a su familia como una de sus más Dios para sus necesidades interpersonales y la única provi-
altas prioridades sión para las necesidades sexuales, y no busca en otras partes
375. Solteros: 473. Padres e hijos: Ve a su familia como su prioridad más alta,
a. Ha tomado una decisión mental de apartarse de la idea de secundaria solamente en su reilación con Dios
citarse o casarse con una persona no-cristiana 474. Solteros e hijos: Ha decidido obedecer a sus padres en todas
b. Ve su soltería como una ventaja y como un regalo (tem- las cosas (al grado que dicte su edad y dependencia de ellos)
poral o permanente) de Dios
475. Padres:
a. Co-discipula a sus hijos en un programa discipulador a
376. Está orando diariamente por la mayoría o todos los miem- largo plazo consistente y consciente, involucrándolos en
bros de su familia extendida un tiempo regular familiar de alabanza, oración y ministe-
377. Padres: Co-discipula a sus hijos con énfasis en el entrena- rio
miento para ser integrados a un equipo ministerial familiar b. Busca continuamente la armonía, unidad y el entendi-
único miento con su cónyuge e hijos a través de una comunica-
378. Hijos: Toma parte en las actividades ministeriales familiares ción honesta y sensible
con entusiasmo 476. Esposo:
379. Solteros: a. Maneja efectivamente su hogar socialmente, en cuanto al
a. Dependiendo de la edad y situación laboral, llega a ser comportamiento y lo financieramente
más y más independiente de sus padres b. Es el líder espiritual y el que determina el paso espiritual
b. Toma completa ventaja de su soltería para maximizar su de su hogar
ministerio c. Ama, honra, respeta, entiende, anima y cuida su esposa
como Cristo lo hace con la Iglesia
477. Esposa:
a. Es efectiva y laboriosa en su papel de ayuda y compañera
de su esposo y una líder / sierva de sus hijos
b. Ama, honra, respeta, entiende, anima, obedece y se some-
te a su esposo
DIAGRAMA
DEL CRECIMIENTO
DEL DISCÍPULO
236
NOTAS
Reconocimientos
1. «A Arte Perdida de Fazer Discípulos» disponible por www.teologico.com.br.
Introducción
1. 1 Pedro 1:3
2. Efesios 4:12-13
Capítulo 2: El Producto
1. Muller, Dietrich, The New International Dictionary of the New Testament Theology, 3 vols., editor Colin Brown
(Grand Rapids, MI: Zondervan, 1975), Vol.1, p. 486.
2. Strong, James, appendix: “Greek Dictionary of the New Testament,” Strong’s Exhaustive Concordance (Grand
Rapids, MI: Associated Publishers and Authors, Inc.), p. 45.
3. Thayer, Joseph Henry, Greek-English Lexicon of the New Testament (New York,NY: Harper Brothers
Publishers, 1899), p. 389.
4. Arndt, William F. and F. Wilbur Gingrich, A Greek-English Lexicon of the New Testament (Chicago, IL:
University of Chicago Press, 1957), p. 491.
5. Moulton, Harold K., editor, The Analytical Greek Lexicon Revised (Grand Rapids,MI: Zondervan, 1981), p.
257.
6. Vine, W.E., An Expository Dictionary of New Testament Words (Old Tappan, NJ: Fleming H. Revell Co.,
1966), p. 316. [Diccionario Expositivo De Palabras Del Nuevo Y Antiguo Testamento De Vine’s (Caribe
Betania, 1998) ISBN: 0899224954]
7. Lewis, C.S., Letters to Malcolm: Chiefly on Prayer (Glasgow, Scotland: Fount Paperbacks, 1979), p. 34.
Capítulo 3: El Proceso
1. Beasley-Murray, Dr. G.R. in Dictionary of New Testament Theology, 3 vols., editor Colin Brown (Grand
Rapids,MI: Zondervan, 1975), Vol. I, p. 144.
2. Wegenast, Dr. Klaus in ibid, Vol. III, pp. 759-60.
Capítulo 4: Los Actores Principales
1. Twain, Mark [Samuel Langhorne Clemens], Letter to an Unidentified Person [1908], quoted en John Bartlett,
Familiar Quotations, editor en jefe, Emily Morison Beck (Boston, MA: Little, Brown and Co., 1980), p. 626.
2. Bly, Stephen A., Radical Discipleship (Chicago, IL: Moody Press, 1981), p. 45.
3. Jenson, Dr. Ron, Dynamics of Church Growth (Grand Rapids, MI: Baker Book House, 1981), p. 23.
4. Bounds, Dr. E.M., Power Through Prayer (Grand Rapids, MI: Baker Book House, 1984), pp. 17-18.
5. Campus Crusade for Christ, How to Make Your Mark (San Bernardino, CA: Campus Crusade for Christ, 1983),
p. 366.
6. Una ilustración del sermón de Herb Evans, Pastor Maestro de Grace Community Fellowship, Eugene, Oregon.
7. Cita del Dr. Gordon Kirk, Pastor Maestro de Rolling Hills Covenant Church, Rolling Hills Estates, California,
hablando sobre “La Soberanía de Dios.”
Capítulo 5: El Modelo
1. teknia: forma diminutiva de teknon (un niño, con respecto a ascendencia o posteridad), se deriva de tikto (dar a
luz o traer hijos). [Harold K. Moulton, ed., The Analytical Greek Lexicon Revised (Grand Rapids, MI:
Zondervan, 1981), pp. 399-400, 404] Su primer significado es “un infante.” [James Strong, Strong’s
Exhaustive Concordance (Grand Rapids, MI: Associated Publishers and Authors, Inc.), p. 71 of “Greek
239
240 DISCIPULADO PERSONAL
Dictionary of the New Testament.”] Teknon, en algunos contextos puede denotar también “infante” (Hechos
21:21; 1 Tesalonicenses 2:7; Apocalipsis 12:4-5)
2. brephos: un niño; puede ser no nacido . . . o acabado de nacer, un infante [Moulton, Lexicon, p.73]
3. nepios: infante que no habla [Moulton, Lexicon, p. 277]
4. Nutrir = anatrepho que significa “dar de lactar, tal como a un infante (Hechos 7:20); traer, educar (Hechos
7:21; 22:3)” De Moulton, Lexicon, p. 26.
5. Abrigar = thalpo que significa “primeramente calentar, suavizar por calor; mantener caliente, como los pájaros
cubren a sus polluelos con sus plumas. Metafóricamente, abrigar con amor tierno, criar con tierno cuidado.”
[W.E. Vine, An Expository Dictionary of New Testament Words, 4 vols. en un solo libro (Old Tappan, NJ:
Fleming H. Revell Co., 1966), Vol. I: p. 184] “Abrigar” (thalpo) también se usa para describir cómo cuidamos
de nuestro propio cuerpo, y cómo cuida Cristo de su propia Iglesia (Efesios 5:29).
6. teknon: “un niño, con respecto ascendencia o posteridad.” [Moulton, Lexicon, pp. 399-400, 404.] Esto quiere
decir que la definición técnica no especifica necesariamente a un niño con base a su edad. En ocasiones, yo soy
un teknon (ascendencia) de mi padre, aunque ya soy un adulto. A menudo, sin embargo, el contexto hará obvio
que el teknon del que se habla es un niño refiriéndose a su edad.
7. pais: “un niño entre los 7 y 14 años de edad” [G. Braumann in The New International Dictionary of the New
Testament Theology, 3 Volúmenes, ed. Colin Brown (Grand Rapids: Zondervan, 1975), Vol. I: pp. 282-83]
8. paidion: “un diminutivo neutro de pais; un pequeñín . . . un niño o una niña a medio crecer” [Strong,
Concordance, p. 54 of Greek Dictionary.] En algunos contextos, paidion puede significar desde un infante has-
ta un niño y pais puede denotar un niño, un adolescente, o un hombre maduro. Como en todas las interpreta-
ciones de la Escritura, fíjese en el contexto.
9. Braumann en Brown’s N. T. Dictionary, Vol. I: p. 281. Refiérase también a Mateo 8:6; 12:18; Lucas 1:69;
12:45; 15:26.
10. Ibíd. Vea 1 Corintios 3:13; Hebreos 5:11-14.
11. Consulte especialmente Efesios 6:4; 2 Timoteo 3:16.
12. Style and grammar “observations” inspired by Frank L. Visco, “How to Write Good,” Writer’s Digest (June
1986), p. 48.
13. paidion como niño y siervo están inseparablemente entrelazados; por ejemplo, Hechos 4:27-30 se refiere a Je-
sús como Hijo y siervo de Dios. En la Versión Popular y en la Nueva Versión Internacional la palabra se tradu-
ce “siervo,” en la Reina Valera es “Hijo.”
14. H. Haarbeck in N. T. Dictionary, Vol. 2; p. 674.
15. Ibid. El uso más frecuente de la forma neos correspondiente a adolescente es esta [todo del Moulton, Lexicon,
p. 276]:
neanias: un joven adulto, juventud, usado para alguien que está en la flor y el vigor de la vida
neaniskos: un joven adulto, juventud, usado para alguien en la flor de la vida
neoteros: (comparable con neos) joven, de aspecto joven
neotes: joven (figurativamente; “joven” como un opuesto de “adulto”)
Como lo mencionara antes, existen instancias donde teknon (un niño con respecto a ascendencia) y pais (hijo /
siervo), usadas en ciertos contextos, se pueden referir también a un adolescente.
16. Existen varias palabras usadas para describir características de adulto:
pater: un padre . . . un anciano, padre espiritual . . . [Moulton, Lexicon, p.312].
meter: una madre [Moulton, Lexicon, p. 269]
gonus: un padre; plural padres [Moulton, Lexicon, p. 79]
ab: [Hebreo para] padre [O. Hofius in Brown’s N. T. Dictionary, Vol. 1; p. 617]
em: [Hebreo para] madre [E. Berreuther en Brown’s N. T. Dictionary, Vol. 1; p. 198]
presbyteros: un anciano, viejo, avanzado en edad [Moulton, Lexicon, p. 340]. “En la parte central de Hechos,
las Epístolas Pastorales, en Santiago 5:14, y en la salutación de 2 y 3 Juan, se refiere al anciano cristiano.” [L.
Coenen en Brown’s N. T. Dictionary, Vol. 1; p. 198]. En otras palabras, no sólo se refiere al que tiene el oficio
de presbítero u obispo.
17. Vine, Expository Dictionary, p.81.
18. Shakespeare, William, Sonetos (1609), 15, 1.1, citado en John Bartlett, Familiar Quotations, chief ed. Emily
Morrison Beck (Boston, MA: Little, Brown and Co., 1980), p 244,4.
Capítulo 6: Los Preceptos
1. Aurelio, Marco [Antonio], Meditaciones, II, 2, citado en John Bartlett, Familiar Quotations, chief ed. Emily
Morrison Beck (Boston, MA: Little, Brown and Co., 1980), p. 124:24
2. Moulton, Harold K., ed., The Analytical Greek Lixocon Revised (Grand Rapids, MI: Zondervan, 1981), p. 263.
NOTAS 241
3. “No permita que el mundo alrededor de él lo meta dentro de su molde, sino permítale a Dios hacerlo de nuevo y
así su actitud mental completa cambiará” [J.B. Phillips, The New Testament in Modern English (New York,
NY: MacMillan Publishing Co., 1972), p. 332].
4. Bounds, E.M., Power Through Prayer (Grand Rapids, MI: Baker Book House, 1984), p. 7.
5. Taylor, Dr. y Sra. Howard, Hudson Taylor’s Spiritual Secret (Chicago, IL: Moody Press, n.d.), p. 32.
Capítulo 7: El Panorama
1. Eims, Leroy, The Lost Art of Disciple Making (Grand Rapids, MI: Zondervan and Colorado Springs: NavPress,
1978), p. 73. [A Arte Perdida de Fazer Discípulos disponible por www.teologico.com.br]
2. Tozer, A. W., The Knowledge of the Holy (New York, NY, Evanston, IL, and London: Harper & Row, c. 1961),
p.9
3. Bright, William R., Ten Basic Steps Toward Christian Maturity (San Bernardino, CA: Campus Crusade for
Christ, 1986, revisado en 1983). [Los Diez Grados Básicos del Desarrollo Cristiano. Disponible por New Life
Resources, 75 Highway 74 S Suite A, Peachtree City GA 30269-2058, 1-770-631-9940, 1-800-729-4351.]
4. Design For Discipleship (Colorado Springs, CO: NavPress, 1973, revisado en 1980). Pídalo en inglés a
NavPress, P.O. Box 6000, Colorado Springs, CO 80934. También disponible en la mayoría de las librerías cris-
tianas locales. [Diseñado para el Discipulado, Disponible por Casa Bautista de Publicaciones, PO Box 4255, El
Paso, TX 79914. 1-800-755-5958, 1-915-565-9008 www.casabautista.org.]
5. Bright, William R., Transferable Concepts ((San Bernardino, CA: Campus Crusade For Christ, 1972). [Los
Conceptos Transferibles Disponible por New Life Resources, 101 TDK Blvd Suite B, Peachtree City GA
30269-2057, 1-770-631-9940 1-800-729-4351.]
Capítulo 9: Objetivo de Entrenamiento #1: Seguridad de la Salvación
1. Bright, William R., Have You Heard Of The Four Spiritual Laws? (San Bernardino, CA: Cruzada Estudiantil y
Profesional para Cristo, 1965). [¿Ha Oído Usted Las Cuatro Leyes Espirituales? Disponible por New Life
Resources, 75 Highway 74 S Suite A, Peachtree City GA 30269-2058, 1-770-631-9940, 1-800-729-4351.]
2. Moulton, Harold K., The Analytical Greek Lixocon Revised (Grand Rapids, MI: Zondervan Publishing House,
1978), p. 11.
3. Guhrt, Joachim en The New International Dictionary of New Testament Theology, 3 vols., ed. Colin Brown
(Grand Rapids, MI: Zondervan Publishing House, 1975), Vol. III, p. 832.
Capítulo 10: Objetivo de Entrenamiento #2: Alcance y Significado de la Salvación
1. Barnes, Albert, Notes on the New Testament (Grand Rapids, MI, Kregel Publications, 1970), p. 1014.
2. Ver Ezequiel 28:11-19; Isaías 14:1-2, 17; Apocalipsis 12:3-9.
3. Bright, William R., Ten Basic Steps Toward Christian Maturity (San Bernardino, CA: Campus Crusade for
Christ, 1986, revisado en 1983). [Los Diez Grados Básicos del Desarrollo Cristiano. Disponible por New Life
Resources, 75 Highway 74 S Suite A, Peachtree City GA 30269-2058, 1-770-631-9940, 1-800-729-4351]
4. Design For Discipleship (Colorado Springs, CO: NavPress, 1973, revisado en 1980). Pídalo en inglés a
NavPress, P.O. Box 6000, Colorado Springs, CO 80934. También disponible en la mayoría de las librerías cris-
tianas locales. [El Diseño del Discipulado, disponible por Casa Bautista de Publicaciones, PO Box 4255, El
Paso, TX 79914. 1-800-755-5958, 1-915-565-9008 www.casabautista.org.]
Capítulo 11: Objetivo de Entrenamiento #3: Llenura del Espíritu Santo
1. Ilustración por Jay Wheeler, Navigator Community Ministry Representative [Representante del Ministerio de la
Comunidad de los Navegantes] en Phoenix, Arizona.
2. Ilustración por el Dr. Robert Frederich, pastor de Galilee Baptist Church en Denver, Colorado.
Capítulo 12: Objetivo de Entrenamiento #4: Identidad en Cristo
1. Ilustración por Robert T. Price, Fundador del Athletes In Action Track Team [Equipo de Atletismo de Atletas
en Acción], actualmente experto en computación en el sur de California.
Capítulo 13: Objetivo de Entrenamiento #5: Principios Básicos de Crecimiento
1. “La ilustración de la Rueda,” ã por los Navegantes. Usado con permiso de NavPress. Todos los Derechos Re-
servados.
Capítulo 14: Objetivo de Entrenamiento #6: Compañerismo
1. Bright, William R., Transferable Concepts ((San Bernardino, CA: Campus Crusade For Christ, 1972). [Los
Conceptos Transferibles Disponible por New Life Resources, 375 Highway 74 S Suite A, Peachtree City GA
30269-2058, 1-770-631-9940 1-800-729-4351.]
242 DISCIPULADO PERSONAL
2. Bright, William R., Ten Basic Steps Toward Christian Maturity (San Bernardino, CA: Campus Crusade for
Christ, 1986, revisado en 1983). [Los Diez Grados Básicos del Desarrollo Cristiano. Disponible por New Life
Resources, 75 Highway 74 S Suite A, Peachtree City GA 30269-2058, 1-770-631-9940, 1-800-729-4351]
3. Design For Discipleship (Colorado Springs, CO: NavPress, 1973, revisado en 1980). Pídalo en inglés a
NavPress, P.O. Box 6000, Colorado Springs, CO 80934. También disponible en la mayoría de las librerías cris-
tianas locales. [El Diseño del Discipulado, disponible por Casa Bautista de Publicaciones, PO Box 4255, El
Paso, TX 79914. 1-800-755-5958, 1-915-565-9008 www.casabautista.org.]
Capítulo 15: Objetivo de Entrenamiento #7: La Palabra
1. KJV “educar” = “nutrir.” George V. Wigram, The Englishman’s Concordance of the New Testament (Grand
Rapids: Zondervan, 1980), p. 264.
2. “La ilustración de la Mano Palabra,” ã 1976, Los Navegantes. Usado con permiso de NavPress, Colorado
Springs, CO. Todos los Derechos Reservados.
3. Bright, William R., Ten Basic Steps Toward Christian Maturity (San Bernardino, CA: Campus Crusade for
Christ, 1986, revisado en 1983). [Los Diez Grados Básicos del Desarrollo Cristiano. Disponible por New Life
Resources, 75 Highway 74 S Suite A, Peachtree City GA 30269-2058, 1-770-631-9940, 1-800-729-4351.]
4. Design For Discipleship (Colorado Springs, CO: NavPress, 1973, revisado en 1980). Pídalo en inglés a
NavPress, P.O. Box 6000, Colorado Springs, CO 80934. También disponible en la mayoría de las librerías cris-
tianas locales. [El Diseño del Discipulado, disponible por Casa Bautista de Publicaciones, PO Box 4255, El
Paso, TX 79914. 1-800-755-5958, 1-915-565-9008 www.casabautista.org.]
Capítulo 16: Objetivo de Entrenamiento #8: La Oración
1. Rinker, Rosiland, Prayer: Conversing with God (Grand Rapids, MI: Zondervan, 1959), p. 23.
2. Bright, William R., Have You Heard Of The Four Spiritual Laws? (San Bernardino, CA: Cruzada Estudiantil y
Profesional para Cristo, 1965), p. 10. [¿Ha Oído Usted Las Cuatro Leyes Espirituales? Disponible por Publica-
ciones Vida Nueva.]
3. Gordon, S.D., Quiet Talks on Prayer (Grand Rapids, MI: Baker Book House, 1980), p. 37
4. Eastman, Dick, Change the World School of Prayer Seminary Notebook (Studio City, CA: World Literature
Crusade, 1976), p. A-15.
5. Murray, Andrew, With Christ in the School of Prayer (Old Tappan, NJ: Fleming H. Revell Co., 1977), p. 14.
6. Cook, Robert A., Now That I Believe (Chicago: Moody Press, 1947, edición 1985), p.81.
7. Taylor, Jack, hablando al personal de Cruzada Estudiantil y Profesional para Cristo durante el verano de 1983.
Conferencia de Verano para los Directores de Departamentos.
Capítulo 17: Objetivo de Entrenamiento #9: Testimonio
1. Definición adaptada de William R. Bright “How to Witness In the Spirit,” Transferable Concept #5, (San
Bernardino, CA: Campus Crusade for Christ, 1972), p. 31. [Los Conceptos Transferibles Disponible por New
Life Resources, 75 Highway 74 S Suite A, Peachtree City GA 30269-2058, 1-770-631-9940 1-800-729-4351.]
2. Bright, William R., “Cómo Presentarles a Cristo a Otros,” Concepto Transferible #6 (San Bernardino, CA: Cru-
zada Estudiantil y Profesional para Cristo, 1972), p.6.
3. Ilustración del Pastor Erhardt G. von Trutzschler, Pastor-at-Large en Clairemont Emmanuel Baptist Church en
San Diego, California. También es director de “Spectrum Ministries.”
4. Los cuatro puntos son adaptados del folleto ¿Ha Oído Usted Las Cuatro Leyes Espirituales? de William R.
Bright (San Bernardino, CA: Campus Crusade for Christ, 1965).
5. McCloskey, Mark, Tell It Well (San Bernardino, CA: Here’s Life Publishers, 1985), p. 248.
6. Kennedy, Dr. James, Evangelism Explosion (Wheaton, IL: Tyndale House Publishers, 1977), anexo A.
Capítulo 18: Objetivo de Entrenamiento #10: Guerra Espiritual
1. Wilkerson, David, Jesus Person Maturity Manual (Glendale, CA: Regal Books Division, G/L Publications,
1971), p.v.
2. Thoreau, Henry David, Walden, I, Economy, citado en John Bartlett, Familiar Quotations, jefe de edición Emily
Morrison Beck (Boston: Little, Brown and Co., 1980), p. 559.4.
3. Ilustración de Jay Carty, fundador, director y, en mi opinión, el mejor conferencista de “Yes! Ministries,”
Corvallis, Oregon,
4. La idea para esta ilustración es adaptada del excelente pequeño libro de C.S. Lovett, Dealing with the Devil
(Baldwin Park, CA: Personal Christianity Chapel, 1981), p. 92ff, y usada con permiso. Cambié unas pocas pa-
labras y algo de la estructura, no para mejorarla necesariamente, sino para hacerla más a mi estilo.
NOTAS 243
Capítulo 19: Objetivo de Entrenamiento #11: Manejo del Tiempo
1. Dawson, David, Equipping The Saints Notebook, 4 vols. (Greenville, TX: ETS Ministry, 1982), Volumen 1,
Lección 4: “A Biblical Perspective On Time,” p. 1.
2. Información acerca del Plan Maestro Flecha está disponible a través de Masterplanning Group International,
Box 61281, Laguna Niguel, CA 92677-6128.
3. Dawson, Equipping The Saints, Volumen 2, Lección2: “How to Write Good Objectives,” p.8.
4. Furman, M.D., Richard, Reaching Your Full Potential (Eugene, OR: Harvest House Publishers, 1984).
5. MacDonald, Gordon, Ordering Your Private World (1st Impresión, Moody Press, 1984; 2nd Impresión,
Nashville,TN: Thomas Nelson, Inc., 1985), p. 9.
6. Trotman, Dawson, Born to Reproduce (Colorado Springs, CO: NavPress, s. f.).
7. Bright, William R., How To Help Fulfill The Great Commission, Transferable Concept #7, (San Bernardino,
CA: Campus Crusade for Christ, 1972). [Los Conceptos Transferibles Disponible por New Life Resources, 75
Highway 74 S Suite A, Peachtree City GA 30269-2058, 1-770-631-9940 1-800-729-4351.]
Capítulo 20: Objetivo de Entrenamiento #12: Visión
1. Design For Discipleship (Colorado Springs, CO: NavPress, 1973, revisado en 1980). Pídalo en inglés a
NavPress, P.O. Box 6000, Colorado Springs, CO 80934. También disponible en la mayoría de las librerías cris-
tianas locales. [El Diseño del Discipulado, disponible por Casa Bautista de Publicaciones, PO Box 4255, El
Paso, TX 79914. 1-800-755-5958, 1-915-565-9008 www.casabautista.org.]
2. Cathy Guisewite en su tira cómica diaria “Cathy,” copyrighted por Universal Press Sindícate, publicada el 30
de agosto de 1987.]
3. Trotman, Dawson, The Need of The Hour (Colorado Springs: NavPress, s. f.).
4. Trotman, Dawson, Born to Reproduce (Colorado Springs: NavPress, s. f.).
5. Bright, William R., How To Help Fulfill The Great Commission, Transferable Concept #7, (San Bernardino,
CA: Campus Crusade for Christ, 1972). [Los Conceptos Transferibles Disponible por New Life Resources, 75
Highway 74 S Suite A, Peachtree City GA 30269-2058, 1-770-631-9940 1-800-729-4351.]
244 DISCIPULADO PERSONAL