Sei sulla pagina 1di 3

EL TEST DE COOPER

Qué es el Test de Cooper y qué mide


Como ya hemos comentado, para el Test de Cooper tan solo necesitamos ropa deportiva cómoda, una zona libre
donde correr (un campo de fútbol de colegio o instituto es lo más típico, pero también puede ser un parque o
cualquier zona libre), un reloj que nos mida 12 minutos y alguna forma de medir el recorrido.
Antiguamente se necesitaba saber qué distancia aproximada medía una vuelta total a una de estas zonas, pero hoy
en día con los relojes GPS es mucho más fácil hacer este tipo de test: podemos mirar rápidamente qué tiempo y
distancia llevamos, o directamente indicarle que nos avise al haber completado los 12 minutos, sin más. La
tecnología al rescate. Pero vamos, que si no tenéis un reloj inteligente tampoco es el fin del mundo, basta con que
podáis controlar tiempo y distancia (incluso si es necesario se puede medir a posteriori en Google Maps sabiendo
desde dónde habéis empezado y dónde habéis acabado).
Con tan solo 12 minutos, el Test de Cooper es capaz de darnos una aproximación de nuestra capacidad aeróbica
(además de poder medir nuestra evolución realizando sucesivos test en el tiempo), estimar nuestra VO2 máx (como
explicaremos a continuación) y además puede ayudarnos a ir adaptando nuestro entrenamiento.

El origen del Test de Cooper


El origen del Test de Cooper se lo debemos a Kenneth H. Cooper, el cual lo presentó por primera vez en el año 1968
en un artículo publicado en el Journal of the American Medical Association (JAMA, para los amigos).
Cooper en aquella época era coronel y médico, y se le ocurrió que sería buena idea crear un test lo más sencillo
posible para evaluar a sus soldados de forma barata. Y de hecho, lo consiguió, pues tan solo necesitaba una zona
plana donde correr y 12 minutos de tiempo. Asimismo, ideó tablas con los valores aproximados o baremos que se
correlacionarían con el 90% del VO2 máx (uno de los indicadores más usados para medir la capacidad aeróbica hoy
en día).
Su test no solo tuvo un gran éxito por poder aplicarse a cualquier persona y de forma masiva, sino que aún hoy en
día se sigue usando en los colegios y en otros ámbitos, como pruebas de acceso a determinados trabajos como
agentes de seguridad, bomberos, policías y un largo etcétera.
Los resultados o baremos del Test de Cooper
Como podemos ver en las tabla ideadas por
Cooper bajo estas líneas, existen valores
diferentes según la edad y sexo
. Por poner un ejemplo, en mi caso, actualmente
con 27 años debería mirar la zona de “menos de
30 años”, y poder completar entre 2,4 y 2,8
kilómetros para que en la prueba de Cooper
obtuviese una valoración “buena”.

En el caso de las mujeres, con mi misma edad,


una valoración “buena” equivaldría a completar
entre 2,2 y 2,7 km. Por su lado, para llegar a
“excelente”, una mujer debería completar más de
2,7 kilómetros. Estos son los valores de la Prueba
de Cooper en mujeres según su edad:

Test de Cooper y el VO2Máx: su relación


Aunque, como ya comentamos en su día, la forma más directa, objetiva y realista de calcular el VO2 máx ( el
volumen máximo de oxígeno que puede procesar el organismo durante un ejercicio) de un individuo es realizar una
espirometría y una prueba de esfuerzo, el Test de Cooper suele ser una de las pruebas indirectas más utilizadas
para calcular este parámetro en deportistas (y es mucho más barato).
Aunque más inespecífico, el Test de Cooper no solo puede ser una buena forma de aproximar el VO2Max, sino que
también puede servirnos para calcular nuestra progresión en los entrenamientos.
Una vez finalicemos el test de Cooper, aplicaremos la siguiente fórmula:
VO2 Max = 22,351 x Distancia recorrida (en kilómetros) – 11,288
De nuevo, cabe recordar que esto tan solo es una estimación indirecta, y no debe tomarse como un dato específico
e inamovible, volvemos a recordar que la manera más precisa de calcular el V02 Max es mediante una prueba de
esfuerzo específica.

‘Otros’ Test de Cooper y pruebas físicas

Por si el Test de Cooper no os gustase, o os parece demasiado sencillo, existen otras pruebas de rendimiento
alternativas para calcular el VO2 máx bastante usadas hoy en día. Las más utilizadas son el Test de Rockport y la
Course Navette.
Test de Rockport
Este test es incluso más sencillo que el Test de Cooper, ya que se ideó para aquellos individuos que no pudiesen
aguantar 12 minutos de carrera continua. En este caso no hace falta correr, sino simplemente caminar rápido, hasta
completar una milla (1.609 metros en el sistema internacional).
Durante la prueba se tendrán en cuenta diversos parámetros, como la frecuencia cardíaca y el tiempo total, además
de el peso corporal y el género del individuo.
Una vez tengamos todas las variables, la fórmula será la siguiente:
VO2 Max = 132,6 – (0,17 x PC) – (0,39 x Edad) + (6,31 x S) – (3,27 x T) – (0,156 x FC)
PC: Peso corporal.
S: Sexo (0: mujeres, 1: hombres).
T: Tiempo en minutos.
FC: Frecuencia cardiaca.
Test de Course Navette
Finalmente, tenemos la prueba o test Course Navette, un test donde el individuo debe desplazarse de un punto a otro
situado a 20 metros de distancia realizando un cambio de ritmo marcado por una grabación de audio (o al ritmo del
profesor de Educación Física, ya que este test también es típico en la edad escolar).
La señal irá acelerándose de forma progresiva, por lo que el objetivo es que el individuo realice la prueba hasta que
no logre completar la distancia en el tiempo marcado.
Cuando se realice la última serie completa, se medirá la velocidad usada en la misma y se aplicará la siguiente
fórmula:
VO2 Max = 5,857 x Velocidad (Km/h) – 19,45

Potrebbero piacerti anche