0 valutazioniIl 0% ha trovato utile questo documento (0 voti)
19 visualizzazioni2 pagine
El documento discute el papel de la mujer en el ejercicio de la ciudadanía. Históricamente, la ciudadanía se entendía como participación activa y plural en la democracia, pero las mujeres se les dejaba en un segundo plano y se les excluía de temas económicos y de alto gobierno. Aunque se ganó la ciudadanía participativa, la mujer aún se debate entre ser parte del modelo social existente o implementar ideales que contrarresten el desequilibrio general. La noción histórica de ciudadanía y igualdad era restrictiva e excluía
Descrizione originale:
presenta las opciones que tiene la mujer y su papel en el ejercicio de la ciudadanía
El documento discute el papel de la mujer en el ejercicio de la ciudadanía. Históricamente, la ciudadanía se entendía como participación activa y plural en la democracia, pero las mujeres se les dejaba en un segundo plano y se les excluía de temas económicos y de alto gobierno. Aunque se ganó la ciudadanía participativa, la mujer aún se debate entre ser parte del modelo social existente o implementar ideales que contrarresten el desequilibrio general. La noción histórica de ciudadanía y igualdad era restrictiva e excluía
El documento discute el papel de la mujer en el ejercicio de la ciudadanía. Históricamente, la ciudadanía se entendía como participación activa y plural en la democracia, pero las mujeres se les dejaba en un segundo plano y se les excluía de temas económicos y de alto gobierno. Aunque se ganó la ciudadanía participativa, la mujer aún se debate entre ser parte del modelo social existente o implementar ideales que contrarresten el desequilibrio general. La noción histórica de ciudadanía y igualdad era restrictiva e excluía
EL PAPEL DE LA MUJER EN EL EJERCICIO DE LA CIUDADANÍA
Mauricio Rodriguez Riaño
Históricamente se fue construyendo y afianzando un concepto de
ciudadanía entendida como todo lo que define a una democracia participativa o los demos políticos, tal como la concibe Ralf Dahrendorf, o sea, participación activa y plural.
Pero ¿a qué llamamos activa y plural?. a que se tiene la
oportunidad de ejercer los derechos y de tomar parte en los procesos de decisión que resuelven la producción y distribución de los recursos materiales y simbólicos, pero no los recursos económicos; quiere decir que a la mujer se continuará dejándola en un segundo plano, no protagónico principalmente en temas económicos y de alto gobierno. (“la mujer no es para esto”) Lo que indica que si bien estos procesos son participativos y deben incluir tanto a todos hombres y mujeres donde estos serían los actores, las condiciones actuales requieren papeles más frenteros y más centrados en la mujer; no solo quedarse en ser actor no se quiere repetir lo de épocas pasadas donde se excluyó a las mujeres, se legalizo y reforzó la desigualdad del poder social entre los sexos. Y al final para justificar dicha exclusión, se toma como referente el espacio de lo privado-doméstico para la mujer, la educación, los hijos, el hogar, y para el hombre lo económico, los social y las grandes decisiones. Si bien se ganó la ciudadanía participativa el tema de la ciudadanía vuelve a adquirir relevancia, coincidiendo con los diferentes movimientos feministas inspirados en los ideólogos del Iluminismo o Ilustración y sus planteos igualitarios y racionalistas. La ciudadanía está ya marcada dentro de los parámetros sociales y la mujer se debate entre si quiere ser superior y competente a ese modelo, quiere hacerse participe o por el contrario define la implementación de ideales que contrarresten el desequilibrio general de las cosas y social de la comunidad , logrado a través de las pequeñas fuerzas que con compromiso y dedicación se logra en proceso cortos y pequeños como el reducir la corrupción, general el empleo necesario La noción de igualdad, restrictiva, estaba estrechamente relacionada al principio fundante del Estado democrático y con el concepto de ciudadanía de Rousseau.
Como se ve hablar de ciudadanía en esta época no supone referirse
a todos los seres humanos, ni siquiera a todos los hombres-varones. No estaban incluidos los esclavos, los mulatos, los que carecían de un patrimonio, ni los homosexuales, los niños y por supuesto…..las mujeres. Ahora se intercala y amplia la participación con las comunidades LGTB; afrodescendientes y se incluye a las mujeres ya que al sustentar el derecho a la igualdad, y de manera menos restringida a la libertad, se accede a la ciudadanía.