Documenti di Didattica
Documenti di Professioni
Documenti di Cultura
2. Introducción
Desde la perspectiva de la psicomotricidad, hay 2 tipos de motricidad
en el niño: fina y gruesa
La motricidad fina se refiere a las acciones que implican pequeños
grupos musculares de cara, manos y pies, concretamente, a las
palmas de las manos, los ojos, dedos y músculos que rodean la boca.
Es la coordinación entre lo que el ojo ve y las manos tocan.
Estos músculos son los que posibilitan: la coordinación ojo-mano,
abrir, cerrar y mover los ojos, mover la lengua, sonreír, soplar, hacer
nudos en los cordones, agarrar un objeto, recortar una figura…etc.
La motricidad gruesa es aquella relativa a todas las acciones que
implican grandes grupos musculares, en general, se refiere a
movimientos de partes grandes del cuerpo del niño o de todo el
cuerpo.
Así pues, la motricidad gruesa incluye movimientos musculares de:
piernas, brazos, cabeza, abdomen y espalda. Permitiendo de este
modo: subir la cabeza, gatear, incorporarse, voltear, andar, mantener
el equilibrio…etc.
La motricidad también abarca las habilidades de los niños para
moverse y desplazarse, explorar y conocer el mundo que le rodea y
experimentar con todos sus sentidos (olfato, vista, gusto y tacto) para
procesar y guardar la información del entorno que le rodea.
Así pues, el ámbito de la motricidad está relacionado, mayormente,
con todos los movimientos que de manera coordinada realiza el niño
con pequeños y grandes grupos musculares, los cuales, son
realmente importantes porque permiten expresar la destreza adquirida
en las otras áreas y constituyen la base fundamental para el desarrollo
del área cognitiva y del lenguaje.
3. Justificación
Desde que nacemos todos los seres vivos tenemos motricidad pero
con el tiempo o medida que vamos creciendo desarrollamos la
motricidad fina y la motricidad gruesa, cuando somos pequemos se
nos dificultan algunas cosas pero estas se deben tener cuidado ya que
más adelante podemos presentar dificultades.
4. Objetivos
Conocer nuestro cuerpo realizando ejercicios de motricidad
fina y gruesa
Prevenir enfermedades por malas posiciones
Realizar rutinas de ejercicios
5. Realiza el paralelo donde relacione actividades que desarrolla a
diario en su trabajo que requieran coordinación fina y coordinación
gruesa:
Mi trabajo consiste en cuidar de mi hija de cuatro años y por lo general
en su colegio le dejan tareas relacionadas con estas actividades las
cuales son:
Motricidad fina Motricidad gruesa
pintar Saltar
tocar correr
Moldear plastilina Caminar
Colorear Subir escaleras
Recortar Gimnasio
6. Plantea dos rutinas diarias para cada actividad de coordinación
gruesa y coordinación fina que fue detectada (puede graficar las
rutinas)
Primera rutina coordinación fina:
1. Manos: abrir y cerrar las manos
2. Cortar papel: ayuda a desestresar y con los movimientos
de las manos cortar en líneas rectas o triángulos.
3. Coordinación de brazos y pies derechos, izquierdos: una
persona va gritando brazo izquierdo y todos levantan el brazo
izquierdo y así con las extremidades de cuerpo.
4. Coordinación de ojos: se hacen movimiento de ojos de
arriba debajo de un lado a otro por cuatro segundos.
Segunda rutina coordinación gruesa:
1. Pies: asemos movimientos circulares a la derecha y luego
a la izquierda por unos 5 segundos luego en el otro pie.
2. Piernas y concentración: nos sentamos y nos paramos.
3. Saltamos hacia adelante luego hacia atrás a un lado y al
otro lado
4. Bailamos cualquier ritmo por 1 minuto