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LA PRUEBA
Prueba en su sentido amplio, cabe decir que es lo que confirma o desvirtúa una
hipótesis o afirmación precedente.
- Literal. Esta locución, que algunos procesalistas y otros que no son sino malos
traductores emplean como sinónima de prueba escrita o documental, debe
rechazarse, pese a contar con autoridades como la de Escriche; por cuanto el
adjetivo literal no significa escrito en nuestro idioma, sino “al pie de la letra” con
relación a un texto.
- Pericial. La que surge del dictamen ante un tribunal por razón de sus conocimientos
especiales y siempre que sea necesario tal asesoramiento técnico o práctico del
juzgador sobre los hechos litigiosos.
- Testifical. La que se hace por medio de testigos (v.), o sea, a través del
interrogatorio y declaración verbal o escrita de personas que han presenciado los
hecho litigiosos o han oído su relato a otros.
Prueba. Aquella actividad que desarrollan las partes con el tribunal para que éste
adquiera el convencimiento de la verdad o certeza de un hecho o afirmación fáctica o para
fijarlos como criterios a los efectos de un proceso. Diccionario Jurídico Espasa.
Medios de prueba. Se trata de todas aquellas cosas, hechos o abstenciones que puedan
conducir en el ánimo del juez, certeza sobre los puntos litigiosos, es decir, es todo aquel
instrumento, procedimiento o mecanismo que puede originar motivos de prueba y generar los
razonamientos, los argumentos o las intuiciones que permitan al juez llegar a la certeza o al
conocimiento de determinado hecho invocado por las partes como fundamento de sus
pretensiones o de sus defensas. Diccionario de Derecho Procesal, Colegio de Profesores de
Derecho Procesal de la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional Autónoma de México.
Los hechos y los actos jurídicos son objetos de afirmación o negación en el proceso.
Pero como el juez es normalmente ajeno a esos hechos sobre los cuales debe pronunciarse,
no puede pasar por las simples manifestaciones de las partes, y debe disponer de medios para
verificar la exactitud de esas proposiciones. Es menester comprobar la verdad o falsedad de
ella, con el objeto de formarse mayor convicción a su respeto.
La prueba es, además, una forma de crear la convicción del juzgador (juez o
magistrado). El régimen vigente insta a las partes (demandante o demandado) a agotar los
recursos dados por la ley para formar en el espíritu del titular del órgano jurisdiccional un
estado de convencimiento acerca de la existencia de las circunstancias del juicio, para emitir
una sentencia conforme a derecho o apegada a derecho.
Couture, razona en el sentido, que entre los medios de prueba, unos tienen carácter
directo, por cuanto suponen contacto inmediato del titular del órgano o del magistrado con los
medios de la prueba; en otros a falta de ese contacto directo, se acude a una especie de
reconstrucciones o representación de los motivos de la prueba, y otros finalmente, se apoyan,
en la facultad de comprobación directa o representación, en su sistema lógico de deducción e
inducción.
Existen tres formas de producirse la prueba, para poder comprender con mayor facilidad
la ordenación lógica de los medios de la prueba.
1. La prueba directa por percepción: Directa e inmediata que tiene el juez con los
objetos o hechos que habrá de demostrarse en el juicio.
La prueba más directa y eficaz es la que se realiza sin intermediarios, y desde el punto
de vista de su eficacia, idónea es el reconocimiento judicial, porque hay presencia directa del
juzgador.
b.2. El relato prestado por terceros: Este se produce cuando la representación del
suceso es proporcionada por terceros, a quienes no les mueven ningún interés personal.
La representación, en este caso, es la prueba de testigos o el dictamen de expertos o
peritos.
Menos eficaz es la representación mediante relatos, ya que los relatos, los realizan las
partes, son de especial interés de ahí que los relatos, de los sujetos procesales solamente son
creíbles en cuanto sea contrario a sus intereses y nunca corran por su misma dirección.
El tema del objeto de la prueba, es buscar una respuesta para la pregunta, con el
propósito que revista características de confiabilidad.
Nuestros cuerpos legales (códigos) han distinguido los juicios de hecho con los de
derecho: Los primeros dan lugar a prueba, los segundos no. Agotada la etapa de
substanciación de la prueba, directamente se cita para sentencia.
Esta división elemental suministra una primera noción para el tema en estudio,
regularmente, el derecho no es objeto de prueba, ya que está plasmado en las disposiciones
legales, sólo las partes en el juicio.
“Los Juicios de hecho son objeto de la prueba; los juicios de derecho no. El derecho es
el objeto de la prueba, únicamente se prueban los hechos alegados por las partes”
Existen hechos que no son objeto de prueba o materia de la misma, entre los que se
dictan a continuación:
a) Los hechos admitidos expresamente: Los hechos no impugnados por las partes,
se tienen por admitidos, la lógica aconseja el ahorro de esfuerzos innecesarios,
porque los hechos aceptados por el adversario no merecen exigencia para pedir se
convaliden. Lo fundamental es que la prueba debe recaer únicamente sobre hechos
controvertidos no aceptados.
b) Los hechos admitidos tácitamente: Los hechos que el actor debe producir
totalmente de prueba, son basados en el principio de que sobre de él recae la carga
de probar sus afirmaciones de hechos. En el caso del demandado fuera declarado
rebelde, el objeto de la prueba son todos los extremos que el actor invoca en su
beneficio e interés, aunque el juez pueda aplicar menor rigor en la apreciación de lo
mismo. Así existe aceptación tácita en la expresiones escritas de una o ambas
partes, la contraria puede pedir se ratifiquen y reconozcan para convalidar la
exposición, pero la rebeldía no significa ni una ni otra situaciones.
c) Los hechos presumidos por la ley o presunciones legales: De acuerdo con esta
situación, no es necesario probar los hechos sobre los cuales recae una presunción
legal, es una proposición normativa que se encuentra expresamente contenido en la
ley acerca de la verdad de un hecho.
e) Los hechos normales: Tanto la doctrina como la jurisprudencia aceptan que la falta
de la prueba, los hechos deben suponerse conforme a la normal y regular ocurrencia
de las cosas. Frecuentemente en los tribunales de justicia se suplen las faltas de
prueba de las partes admitiendo que los hechos deben haber ocurrido como suceden
naturalmente en la misma o en forma extravagante o excepcional, aquel quien la
noción de normalidad le beneficia es relevado de probar, siendo su adversario el
obligado de probar lo contrario.
La regla general, es que los hechos normales no son objeto de prueba; el conocimiento
de los hechos es parte del saber privado y pueden invocarse en los fundamentos considerados
en la sentencia.
f) Los hechos notorios: Tampoco son objeto de probanza, aunque no sea regla
general, los hechos notorios porque un hecho puede ser notorio sin ser conocido por
todos.
Pero cuando el interprete a, fijado con mayor exactitud posible los puntos que quedan
dentro de la actividad probatoria y los que quedan fuera de ella, encuentra a su paso una regla
de carácter general cuyo sentido requiere una nueva apreciación.
Se entiende por “prueba pertinente” a aquella que versa sobre las proposiciones y los
hechos que son objeto de prueba. La prueba que no versa sobre las proposiciones o hechos
que son objeto de demostración se denominada Impertinentes.
En estos dos casos lo que esta en juego es la idoneidad de la prueba, o sea el medio
utilizado para que se produzca válidamente, ya que el momento de dictarse sentencia, el juez
lo que apreciaría es la pertinente de la prueba.
También puede darse el suceso de los testigos que no llenan los requisitos legales o
que sus declaraciones no fueron recibidas conforme las disposiciones legales, lo que puede
ser motivo suficiente para tacharlos, produciéndose una prueba impertinente.
LA CARGA DE LA PRUEBA
Delimitado con arreglo a los principios expuestos en el campo del objeto de la prueba
abordada, el tema de la carga de la prueba, supone un paso más adelante tendiente a saber
quién prueba; cual de los sujetos o partes que actúa en el juicio debe producirse la prueba de
los hechos que han sido materia de debate.
La carga de probar las afirmaciones de hechos supone saber de las partes, el actor
(sujeto activo) o el demandado (sujeto pasivo) les toca hacerlo. En el ámbito procesal, la carga
de la prueba significa la conducta impuesta al litigante para acreditar de los hechos enunciados
en la demanda o su contestación en la demanda o su contestación, e incluso, cuando se
procede la contrademanda, y toca indistintamente al demandante o al demandado.
EL PROCEDIMIENTO PROBATORIO
Se concibe, en un sentido lógico, que toda actividad que se desarrollará en el juicio por
las partes y el juez se realice de manera libre, es decir, como una aportación de pruebas
absolutamente abierta en cuanto a su forma y desenvolvimiento. Pero también concibe por el
contrario, la prueba reglamentada otorgando un solo valor a aquellos elementos de convicción
que sigue al juicio mediante un procedimiento ajustado al régimen legal.
Corresponde a cada parte elegir los medios idóneos para producir la prueba que
conviene dentro de los procedimientos señalados por la ley, aquellos que se elijan tienen que
ser contundentes y congruentes con los hechos expresados en la demanda y su contestación
si fuera el caso, y el juez decide acceder o no a los petitorios que se le hagan las partes,
efectuando la fiscalización sobre la regulación del procedimiento elegido para la producción de
la prueba.
7. Valoración de la prueba: Este, busca una respuesta para la pregunta: ¿Qué eficacia
tienen los medios de prueba establecidos en el derecho positivo?
Ya no se trata de saber qué es en sí misma la prueba, ni sobre que debe recaer, ni por
quién o como debe ser producida, se trata de señalar, con la mayor exactitud posible, como
gravitan y que influencia ejercen los diversos medios de prueba, sobre la decisión que el
magistrado debe expedir.
2. La sana crítica: Este sistema está ubicado en una categoría intermedia entre la
prueba legal o tasada y la prueba de libre convicción.
La sana crítica es, ante todo, la regla del correcto entender humano. En ella participa la
regla de la lógica y la experiencia del juez. Unas y otros atribuyen de igual manera a que el
juez pueda analizar la prueba con arreglo a la razón y al conocimiento experimental de las
cosas. Es la unión de la lógica y la experiencia, sin excesivas atracciones de orden intelectual
pero, sin olvidar los procedimientos legales y una higiene mental que tiendan a aseguran el
más certero y el eficaz razonamiento. El sistema permite que el juez sea libre de razonar a
voluntad discrecional o arbitrariamente.
Por otro lado, cabe aludir, que permite al juez adquirir el conocimiento de la verdad con
la prueba que se encuentra en el proceso, fuera de la prueba incorporada al proceso y aún
más, en contra de la prueba que está aportada al proceso. La falta de prueba existente en la
causa y aún en contra de lo que se haya podido escoger, faculta al juez declarar como
probados algunos hechos porque así es su convicción moral y así se lo dicta su conciencia.
CLASES DE PRUEBA
Si bien es cierto que se demostró la clasificación de Manuel Ossorio, también lo es, que
existen varias clasificaciones de la prueba, para el efecto entraremos a conocer de estas, la de
Guillermo Cabanellas:
a) Por su confesión: Es aquella que surge por declaración que sobre lo sabido o hecho
por él, hace voluntariamente o preguntado por otro. En nuestra legislación es el
resultado de la prueba denominada Declaración de Parte: siendo un medio de prueba
tasado, puesto que produce plena prueba. La confesión puede ser:
5. Simple: Lo que se ha afirmando lisa y llanamente la verdad del hecho sobre el cual se le
pregunta.
Juras et de jure: Que es aquella suposición legal que no admite prueba en contrario.
Artículo 3 de la Ley del Organismo Judicial, estipula, Primicia de la ley. Contra la observancia
de la ley, no puede alegarse ignorancia, desuso, costumbre o práctica en contrario; por lo
tanto, es un típico ejemplo de esta clase de presunción legal.
Juras tantum: Que es aquella presunción que si admite prueba en contrario, o sea que
es aquella establecida en la ley, que puede ser destruida por prueba en contra.
la prueba confesional.
la prueba documental en su doble aspecto, tanto pública como privada, y en este
apartado se agrega también la prueba instrumental de actuaciones, que viene a
significar todas y cada una de las distintas constancias que obran en el
expediente mismo.
los dictámenes periciales.
el reconocimiento o inspección judicial.
la prueba testimonial.
la prueba presuncional.
lo que actualmente se conoce con el nombre de la prueba técnica, o sea, todos
aquellos elementos aportados por los descubrimientos de la ciencia y que por
naturaleza no requieran de perfeccionamiento.
Como ejemplo el artículo 128 del Código Procesal Civil y Mercantil señala. Medios de
prueba. Son medios de prueba:
El Código Procesal Penal, en el artículo 181 describe. Objetividad. Salvo que la ley
penal disponga lo contrario, el Ministerio Público y los tribunales tienen en deber de procurar,
por sí, la averiguación de la verdad mediante los medios de prueba permitidos y de cumplir
estrictamente con los preceptos de este Código.
El artículo 182 norma. Libertad de la prueba. Se podrán probar todos los hechos y
circunstancias de interés para la correcta solución del caso por cualquier medio de prueba
permitido. Regirán, en especial, las limitaciones de la ley relativas al estado civil de las
personas.
El artículo 183 indica. Prueba inadmisible. Un medio de prueba, para ser admitido, debe
referirse directa o indirectamente, al objeto de la averiguación y ser útil para el descubrimiento
de la verdad. Los tribunales podrán limitar los medios de prueba ofrecidos para demostrar un
hecho o una circunstancia, cuando resulten manifiestamente abundantes. Son inadmisibles, en
especial, los elementos de prueba obtenidos por un medio prohibido, tales como la tortura, la
indebida intromisión de la intimidad del domicilio o residencia la correspondencia, las
comunicaciones, los papeles y los archivos privados.
El mismo cuerpo legal, en el capitulo séptimo, regula la prueba, del artículo 344 al 357, y
se establece que los medios de convicción de este Código, son: documentos; declaración
testimonial; dictamen de expertos; exhibición de documentos o libros de contabilidad, de
salarios o de planillas; confesión de parte; y, reconocimiento de documentos.
Bibliografía
Diccionario Jurídico Elemental de Guillermo Cabanellas de Torres.
Diccionario Jurídico Espasa.
Diccionario de Derecho Procesal, Colegio de Profesores de Derecho Procesal de la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional
Autónoma de México.
Leyes
Código Procesal Civil y Mercantil.
Código Procesal Penal.
Código de Trabajo.