Sei sulla pagina 1di 4

Mi Mayor Responsabilidad, mi Mayor Necesidad

Hablando de unidad y la responsabilidad que tenemos de ser uno en el Señor ha surgido


también el tema de la oración, ya que sin oración no podré ser uno con El Señor, creo que
una de las excusas más utilizadas por los creyentes para no orar es la falta de tiempo, es
hacer ver que son tantas las ocupaciones que a la postre es casi que imposible el poder
practicar una vida de oración.

hoy deseo mostrarle por la palabra algunas cosas que. van a deshacer dicha excusa,
pareciera que hubiese un pensamiento en medio de los creyentes, a es que ustedes si
pueden orar porque tienen tiempo, es decir que muchos creen que la oración es para
desocupados.

vamos a mirar varios textos y vamos a permitir que el propio Jesús con su ejemplo nos
enseñe, al fin y al cabo, él es nuestra mayor referencia para imitar, amén.

Lucas 5:12-16.

Podemos concluir de este pasaje que Jesucristo estaba muy ocupado con todas estas
multitudes que venían a él, y de seguro estaría mucho más ocupado que muchos de
nosotros. En serio, bajo tales condiciones, ¿cuántos de nosotros habríamos tomado
tiempo para orar? Pero veamos lo que Jesucristo hizo:

Lucas 5:16

“MAS ÉL SE APARTABA a lugares desiertos y ORABA”

Cuando la palabra “mas” aparece, siempre compara lo que precede con lo que sigue. En
este caso, lo que precede es la descripción de un Jesucristo muy ocupado. Lo que sigue,
nos dice que a pesar del hecho de que estaba muy ocupado, se apartaba a lugares
desiertos y oraba.

la oración era un HÁBITO de Jesucristo, algo a lo que le daba prioridad número uno, aún
cuando estaba muy ocupado. Por consiguiente, esto nos enseña la importancia de la
oración. La importancia de esto es tan grande que Jesucristo, el Hijo de Dios,
acostumbraba distribuir parte de su tiempo para la oración, incluso cuando estaba muy
ocupado en otras actividades de Dios.

Marcos 1:21-35

Así como en el registro anterior aquí tenemos la descripción de otro muy ocupado día de
Jesús. Además, puesto que iba a estar en Galilea el siguiente día también y debido a que
su fama se había extendido alrededor de la región, cualquiera de nosotros podríamos
esperar que el siguiente día iba a ser igual de ocupado, sino es que aún más. Esto es lo que
exactamente sucedió al día siguiente como en los versos 36 y 37 dicen refiriéndose al día
siguiente:

Marcos 1:36-37

“Y le buscó Simón, y los que con él estaban; y hallándole, le dijeron: Todos te buscan.”

Todos lo estaban buscando, esto significa que el día que apenas acababa de empezar iba a
ser muy ocupado. En realidad, habiendo terminado un día muy ocupado y sabiendo que
el siguiente iba a ser igual, ¿quién de nosotros se habría levantado temprano para orar? Y
si alguien lo hizo, ¿acaso no sería que esa persona considera la oración como algo
extremadamente importante y no sería también que es la principal prioridad en su vida?
Bueno, vamos a ver quién hizo de la oración su prioridad. ¿Quién es? Jesucristo:

Marcos 1:35

“Levantándose muy de mañana, siendo aún muy oscuro, salió y se fue a un lugar desierto,
y allí oraba.”

Jesús sabía que iba a ser un día muy ocupado el cual probablemente no le dejaría mucho
tiempo para orar. ¿Qué hizo? Se levanto MUY TEMPRANO a orar.

Jesús no se levantaba solo porque de repente así le sucedía, sino que Él determinaba
levantarse a orar porque reconocía la prioridad de la oración y la importancia en su vida.
Por lo cual, es cuestión de prioridad y no de tiempo.

Mateo 14:12-23

El hecho de que se apartara a un lugar desierto no era algo planeado, porque sucedió
“CUANDO Jesús se enteró de lo que pasó”. Obviamente, Jesús quería tener un
tiempo tranquilo después del golpe de las malas noticias. Sin embargo, no se quedó
ahí para siempre. Algún tiempo después partió de ese solitario lugar y vio una
multitud esperándole; cuando los vio, “tuvo compasión por ellos y sanó a sus
enfermos” (verso 14). De hecho, no solo sanó a los enfermos sino que también los
alimentó milagrosamente (versos 15-21). Entonces, el versículo 22 nos dice lo que
pasó al respecto: Las palabras “en seguida” están conectadas con la alimentación de
las multitudes y significa que tan pronto las multitudes fueron alimentadas Jesús
hizo que sus discípulos entraran en la barca, es decir que Jesús los obligó a que se
subieran a la barca. deseaba estar solo para orar.
La razón por la cual no les permitió a sus discípulos quedarse, sino que los obligó a subir
a la barca e irse era porque quería estar solo y ORAR. Observa qué tan importante era la
oración para Jesucristo. Estaba dispuesto a levantarse muy temprano, a alejarse de la
multitud, a obligar a sus discípulos a irse, solo para orar. ¿A caso esto no indica que la
oración era la prioridad más importante en su vida? Ciertamente lo es. Nosotros también
podemos tomar en cuenta estos registros y creer lo que la Palabra de Dios dice sobre la
importancia de la oración, así como hacerla la prioridad más importante en nuestras
vidas también.

Lucas 6:12-13

Oró TODA LA NOCHE. Aunque la Biblia no especifica por lo que oraba, dice que por la
mañana hizo una de las decisiones más cruciales de su ministerio: escoger a los doce. Por
lo cual, lo más probable es que el tema central de su oración esa noche era esa decisión.
Ahora la pregunta es: si Jesús necesitaba orar antes de tomar decisiones, ¿no crees que
nosotros también tenemos que orar antes de tomarlas? ¿Por qué tomar decisiones usando
nuestras pequeñas mentes y la información de nuestros cinco sentidos? ¿por qué no mejor
acudir a Dios y pedirle instrucción y que nos muestre cuál es la mejor opción que
debemos de tomar? Él sabe cuál es la mejor opción, está dispuesto a mostrárnosla y tiene
los medios, su espíritu en nosotros, para anunciárnosla. La cuestión no es si está
dispuesto y quiere ayudarnos o no, porque puede y quiere; la verdadera cuestión es: ¿ lo
escogemos nosotros a Él como nuestro consejero y vamos a Él a preguntarle en oración?

Mateo 26:36-38

“Entonces llegó Jesús con ellos a un lugar que se llama Getsemaní, y dijo a sus discípulos:
Sentaos aquí, entre tanto que voy allí y oro. Y tomando a Pedro, y a los dos hijos de
Zebedeo, comenzó a entristecerse y a angustiarse en gran manera. Entonces Jesús les dijo:
Mi alma está muy triste, hasta la muerte; quedaos aquí, y velad conmigo.”

La razón por la cual Jesús estaba muy triste y angustiado era porque sabía lo que iba a
pasar. En verdad, era un tiempo muy difícil para él y al mismo tiempo crucial para todos
nosotros, puesto que el plan de nuestra salvación estaba basado en su sacrificio personal
y su resurrección. Pero ¿cómo decidió enfrentar esta crisis? Los versos siguientes nos dan
la respuesta:

Mateo 26: 39-44


“Yendo un poco adelante, se postró sobre su rostro, orando y diciendo: Padre mío, si es
posible, pase de mí esta copa; pero no sea como yo quiero, sino como tú. Vino luego a sus
discípulos, y los halló durmiendo, y dijo a Pedro: ¿Así que no habéis podido velar conmigo
una hora? Velad y orad, para que no entréis en tentación; el espíritu a la verdad está
dispuesto, pero la carne es débil. Otra vez fue, y oró por segunda vez, diciendo: Padre mío,
si no puede pasar de mí esta copa sin que yo la beba, hágase tu voluntad. Vino otra vez y
los halló durmiendo, porque los ojos de ellos estaban cargados de sueño. Y dejándolos, se
fue de nuevo, y oró por tercera vez, diciendo las mismas palabras.”

Estaba preguntando al Padre si había otra forma en la que pudiera lograr la salvación para
la humanidad sin tener que pasar por esa terrible experiencia. Oró por eso. De hecho, oró
tres veces. Es muy edificante poner atención a la actitud de su oración. Como vemos, él
expresó su deseo a Dios (“si es posible pase de mi esta copa”) PERO al mismo tiempo
pidió que se hiciera la voluntad de Dios (“hágase tu voluntad”). Esto es muy importante,
ya que algunas veces pensamos que porque le pedimos a Dios por algo está obligado a
hacerlo y no solo eso, sino que también en el momento que nosotros queremos. Dios está
obligado a hacer cualquier cosa que le pidamos solo si eso va de acuerdo a su voluntad.

No es cuestión de tiempo, es cuestión de prioridad.

Después de todo lo anterior, y aunque hay más registros que puedes estudiar por ti
mismo; queda claro, que la oración era algo muy importante en la vida de Jesucristo, algo
de lo que tuvo gran cuidado. Por causa de la oración, esta listo para levantarse temprano
en la mañana, a obligar a sus discípulos a irse, a alejarse de las multitudes. Mediante la
oración, tomó decisiones y venció situaciones difíciles.

es nuestra mayor responsabilidad el sacar tiempo para orar, no hay excusas, aquellos que
dicen vivo muy ocupado a la verdad no creo que estén más ocupados que Jesús y el con su
ejemplo nos muestra que si se puede tener una vida de oración.

mil Bendiciones.

Potrebbero piacerti anche