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Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

BOLETÍN DE JURISPRUDENCIA (1er. Semestre de 2015)

Elaborado por la Secretaría de Jurisprudencia y Biblioteca de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo


Criminal y Correccional de la Capital Federal.

Dra. Valeria Rebagliati


Secretaria de Cámara

ABOGADO.

- Llamado de atención al letrado de la querella para que se comporte en el Tribunal de acuerdo a las formas y
corrección. Apelación. Imposición que ha afectado el derecho de defensa y debido proceso al no escuchar al
profesional antes de decidir (art. 213 del Reglamento para la Jurisdicción en lo Criminal y Correccional).
Nulidad. ................................................................................................................................................................... 1
- Actuaciones en las que se investiga un impedimento de contacto. Imputada que designa para la menor al
mismo letrado que la asiste. Menoscabo a las garantías del menor. Violación a la Convención sobre los
derechos del niño. Necesidad de garantizar la intervención de un abogado para la menor con posición
diferente y autónoma de aquella sostenida por sus padres. Revocación.................................................................. 1

ABUSO DE AUTORIDAD.
- 1) Procesamiento. Imputado: Jefe de la Policía Metropolitana. Operativo policial montado en ocasión del
inicio de la demolición de un hospital. Abuso de autoridad al ordenar responder en exceso a las acciones del
grupo de manifestantes que intentaba evitar las tareas, provocando ello que varios resultaran lesionados.
Elementos de prueba que permiten afirmar que la respuesta por el imputado ordenada fue la adecuada para
repeler las agresiones y proceder a la aprehensión de sus autores ante la flagrante comisión de delitos de
acción pública. Actuación dentro del marco de sus atribuciones y en cumplimiento de un deber legal.
Revocación. Sobreseimiento (art. 336 inc. 4 del C.P.P.N.). 2) Sobreseimiento. Imputados: Jefe de Gobierno,
Subjefe de gobierno, Jefe de Gabinete y Ministro de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Eventual
responsabilidad que cabría asignarles con motivo de la represión emprendida por los miembros de la Policía
Metropolitana. Ausencia de responsabilidad penal de los funcionarios de las áreas inferiores de la estructura
estatal. Cadena de responsabilidades seccionada. Inexistencia de elementos de prueba que permitan sostener
la toma de decisiones abusivas dolosas para abortar la protesta de los manifestantes. Confirmación. ................... 2

ABUSO SEXUAL
- Procesamiento. Imputado acusado de haber abusado sexualmente de un menor por la madre de éste en
ocasión en que viajaran en un vagón de subtes. Aviso dado por la madre al personal policial del lugar en
forma inmediata. Relato brindado por el menor en la entrevista llevada a cabo en los términos de art. 250
bis del C.P.P.N. que impresionó como verosímil a los profesionales. Actitud intimidatoria asumida por el
imputado cuando la víctima le relataba lo sucedido a su madre. Elementos de prueba suficientes para
agravar la situación procesal. Confirmación............................................................................................................ 6
- Simple. Falta de mérito. Imputado que manoseó el glúteo a una niña mientras caminaba por la vía pública.
Elementos suficientes para agravar la situación procesal. Relato de la víctima en ocasión de la entrevista en
los términos del art. 250 bis del C.P.P.N. que impresiono verosímil. Especialistas que precisaron la
existencia de indicadores compatibles con vivencia traumáticas. Elementos suficientes para agravar la
situación procesal del imputado. Revocación. Procesamiento por abuso sexual. ................................................... 7
- Procesamiento. Imputado que en la calle mientras la damnificada se dirigía a su lugar de trabajo se le acercó
para decirle frases de contenido sexual y luego le realizo tocamientos sobre los glúteos. Elementos de
prueba suficientes para concluir que los tocamientos fueron con intención sexual. Confirmación. ....................... 8
- Procesamiento. Imputado: tío de la víctima. Lesiones constatadas. Informe que da cuenta que el discurso de
la menor fue espontáneo, con elaboración inestructurada, conservando lógica y coherencia, con
reconocimiento de interacciones físicas de valor inapropiado y sexual. Verosimilitud del relato. Elementos
suficientes para convalidar el resolutorio. Confirmación. ....................................................................................... 8
- Con acceso carnal, agravado por haber sido cometido por el encargado de la guarda del menor.
Procesamiento. Importancia del relato brindado en cámara Gesell y la coherencia de éste con las
conclusiones a las que arribaron los psicólogos. Hechos imputados que podrían tener entidad potencial
suficiente para alterar el normal desarrollo psicosexual del joven. Confirmación. ................................................. 9
- 1) Con acceso carnal agravado por tratarse de una víctima menor de 18 años y por aprovechar la situación
de convivencia. Procesamiento. Hechos que tuvieron lugar cuando era menor y con posterioridad a que la
damnificada cumpliera los 18 años. Descripción de los hechos sucedidos cuando era mayor que no revisten
relevancia penal. Situaciones en las que no habría habido violencia. Confirmación parcial respecto de los
hechos ocurridos cuando la damnificada era menor de edad. 2) Corrupción de una menor de 18 años
agravado por tratarse de una persona conviviente y encargada de la guarda de la víctima. Procesamiento.
Delito cuya comisión no pudo extenderse más allá de la fecha en la que la damnificada cumplió 18 años.
Necesidad de tener en cuenta la fecha del llamado a prestar declaración indagatoria. Suspensión del
tratamiento del recurso a los efectos de examinar la vigencia de la acción penal. ................................................ 10

I
- Agravado por haber mediado acceso carnal. Agravio de la defensa: solitarios dichos de la víctima vivencia
un alto grado de vulnerabilidad psicosocial. Damnificada que fue conteste en su versión en las cuatro
oportunidades que declaró. Relato que impresionó a los peritos como verosímil. Confirmación. ........................14
- Agravado por resultar el imputado ascendiente de la víctima. Procesamiento. Tocamientos corporales
impúdicos efectuados por el padre a su hija menor de edad. Actos dotados de connotaciones sexuales.
Conocimiento del significado sexual del acto que se ejecuta y su carácter abusivo. Confirmación......................14
- Sobreseimiento. Fiscal que recurre. Denuncia efectuada por la Directora General de una Fundación, ante la
Procuraduría de Trata y Explotación de Personas del Ministerio Público de la Nación debido a que se
presentó una madre que refirió que su hija sufrió varios hechos de abuso sexual. Causa conexa en donde se
denunciaron mas hechos de explotación de menores respecto del mismo imputado. Agravios expuestos por
la fiscalía que merecen ser atendidos. Necesidad de llevar a cabo medidas de prueba. Revocación.....................15
- Agravado por haber mediado acceso carnal. Procesamiento. Hecho denunciado que no se ha podido
corroborar por ningún elemento de prueba. Revocación. Sobreseimiento.............................................................16

AMENAZAS.
- Sobreseimiento. Expresiones proferidas a través de un mensaje de texto. Relación conflictiva entre las
partes. Elementos de prueba que no demostrarían que las frases fueron enviadas en el marco de una
discusión. Necesidad de profundizar la investigación. Revocación.......................................................................16

APROPIACIÓN DE COSA PERDIDA.


- En concurso real con encubrimiento agravado por el ánimo de lucro. Procesamiento. Imputados que tenían
en su poder un teléfono celular sustraído y otro extraviado. Actitud elusiva frente al personal policial.
Elementos de prueba suficientes para afirmar que tenían conocimiento de la procedencia ilícita de los
aparatos en cuestión. Confirmación. ......................................................................................................................17

ARCHIVO
- Por imposibilidad de proceder debido a que las maniobras defraudatorias se habrían cometido fuera del país.
Teoría de la ubicuidad. Posible perjuicio económico en territorio nacional. Revocación. ....................................17
- Por imposibilidad de proceder. Resolución impugnada que no resulta una derivación razonada del derecho
vigente aplicable al caso. Proceso en el que existen personas imputadas. Nulidad. ..............................................18
- Por imposibilidad de proceder. Lesiones leves causadas por accidente de tránsito. Delito dependiente de
instancia privada. Damnificada que en sede judicial especificó que desconocía el alcance de "instar la
acción penal" y que no deseaba promoverla. Fiscalía que no ha invocado razones de seguridad o interés
público. Confirmación. ..........................................................................................................................................18
- Por imposibilidad de proceder. Hecho denunciado: Lesiones leves provocadas por la mordedura de un perro
sin el bozal reglamentario en la vía pública, no instadas por el damnificado. Fiscal que había solicitado la
declaración indagatoria del propietario por entender que el evento es de interés público en los términos del
art. 72, inciso 2° del CP. Hecho que no revistió características de entidad suficiente en cuanto al resultado
lesivo para que se proyecte a una afectación del interés público de modo que justifique el impulso de la
acción de manera oficiosa. Confirmación..............................................................................................................19

ARMA.
- Tenencia ilegal de arma de fuego. Sobreseimiento. Imputado procesado por robo con armas. Agravio del
fiscal: Posible limitación al eventual juicio oral. Rechazo. Superposición temporal de los tipos penales que
no hace que pierdan su autonomía. Acciones físicas y jurídicamente separables e independientes.
Confirmación. Disidencia: Superposición de acciones típicas durante el suceso. Hecho dependiente con el
robo. Concurso ideal. Revocación. ........................................................................................................................20
- Tenencia ilegítima de arma de guerra. Procesamiento. Imputado con credencial vencida de legítimo usuario
que tenía el arma en su domicilio. Afectación al bien jurídico protegido: seguridad pública. Hecho típico.
Confirmación. Disidencia: Atipicidad. Credencial vencida: infracción administrativa a la Ley Nacional de
Armas. Revocación. Sobreseimiento. ....................................................................................................................21
- Procesamiento. Tentativa de robo agravado por el uso de un arma, en concurso ideal con el de resistencia a
la autoridad. Utilización de una botella para sustraer el arma reglamentaria de la víctima y posterior
utilización para lograr su impunidad. Confirmación..............................................................................................21
- Tenencia y acopio de municiones. Procesamiento. Reforma de la ley 25.886 que no tipificó como delito la
tenencia. Acopio: definición. Escasa cantidad de material para considerar típico el hecho. Revocación.
Sobreseimiento.......................................................................................................................................................22

AUDIENCIA ORAL.
- Reforma procesal (Ley 26.374). Procedimiento en Cámara. Letrado patrocinante que asiste sin el
querellante a la audiencia. Cuestionamiento planteado por la defensa. Informe que constituye una actividad
técnica. Validez......................................................................................................................................................23

CALUMNIAS E INJURIAS.
- Desestimación por inexistencia de delito. Agravio de la querella: Denuncia por desobediencia desestimada.
Prueba suficiente para afirmar que hubo calumnias e injurias. Rechazo. Elementos de prueba que no indican
necesariamente una falsedad en la atribución de la desobediencia. Confirmación................................................23
- Sobreseimiento, extracción de testimonios para investigar desobediencia e imposición de costas en el orden
causado. Agravio de la querella: sobreseimiento prematuro, necesidad de imponer astreintes y revocación en
la imposición de costas. Temperamento desvinculatorio correcto debido a que arribaron a un acuerdo,

II
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

homologado por el magistrado, que en el cual el imputado se retracto y se comprometió a publicar la


retractación. Validez de la extracción de testimonios debido a la no publicación de la retractación.
Confirmación parcial. Revocación e imposición de costas al querellado.............................................................. 24

CAUCIÓN.
- Pedido de restitución de la caución rechazada. Imputado que fue involucrado en un nuevo proceso y por ello
le revocaron la excarcelación. Caución cancelada y restitución de la garantía (art. 327, inc 1º del C.P.P.N.).
Revocación. Restitución. ....................................................................................................................................... 25
- Real. Agravio: monto fijado no acorde con las posibilidades del imputado. Depósito que al hacerse efectivo
demostró que fue proporcional a la situación. Confirmación................................................................................ 25
- Real. Tiempo transcurrido sin satisfacerse, imposibilidad de cumplimiento. Confirmación, modificación del
monto. .................................................................................................................................................................... 25
- Real. Agravio de la defensa: sustitución y, subsidiariamente, reducción del monto. Imposición a efectos de
garantizar la sujeción al proceso. Imputado que, puesto en libertad, no compareció a las citaciones, a pesar
de estar debidamente notificado. Depósito a realizar al día hábil siguiente de la concesión. Confirmación. ....... 25

CIRCUNVENCIÓN DE INCAPAZ.
- Procesamiento. Imputados que aprovechándose de la situación de vulnerabilidad de la víctima lo indujeron
a firmar varias hipotecas con el fin de enajenar el inmueble de su propiedad, en el cual se domicilia.
Perjuicio patrimonial. Informe pericial del C.M.F., diagnosticó:"retraso mental leve, con detrimento en su
capacidad para realizar actos de cierta complejidad y limitación en su comprensión y discernimiento frente a
actos jurídicos como los que llevara a cabo". Disposición de nuevas medidas tendientes al esclarecimiento
del hecho. Revocación. Falta de mérito................................................................................................................. 26
- Procesamiento. Imputados que se aprovecharon de la incapacidad mental de la damnificada para que
efectuara actos jurídicos que resultaron perjudiciales para su patrimonio. Finalidad de adueñarse de sus
bienes. Confirmación............................................................................................................................................. 26
- Legitimación para querellar rechazada. Sobrina de la víctima respecto de la cual no se encuentra acreditado
que haya sido instituida como heredera por disposición judicial. Confirmación. ................................................. 27

COMPETENCIA
- Denuncia contra el Jefe y funcionarios del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires y funcionarios
nacionales. Hechos investigados vinculados al ejercicio de sus funciones. Diputados del Gobierno de la
Ciudad y de la Nación que resultaron agredidos en ocasión de ejercer sus funciones. Justicia Federal. .............. 28
- Sustracción de efectos embargados asignados en custodia y vendidos en el exterior incumpliendo las
normas aduaneras. Infracción Arts. 261 y 263 del C.P. y 864 inc. "a" del Código Aduanero. Hecho único
abarcado por dos figuras penales. Justicia en lo Penal Económico. ...................................................................... 28
- Cheque de pago diferido. Instrumento de crédito. Ausencia de la tipicidad objetiva del delito de estafa.
Justicia en lo Penal Económico. ............................................................................................................................ 29
- Falsificación de licencia de conducir expedida por municipio. Agencia Nacional de Seguridad Vial que
autoriza a los organismos competentes de cada jurisdicción a expedirlos. Justicia de Instrucción....................... 29
- Obtención de servicio de señal de cable mediante conexión clandestina. Actividad por parte del imputado
que supera la resistencia opuesta por la cosa. Robo. Justicia de Instrucción......................................................... 30
- Sustracción de libros por parte un empleado de una librería por la entrega voluntaria por parte de un tercero.
Imputado procesado por administración fraudulenta. Justicia de instrucción. ...................................................... 30
- Sustracción de un bien a un paciente internado con síndrome de Guillain-Barré. Aprovechamiento del
infortunio. Hurto agravado (art. 163 inc. 2 del C.P.). Justicia de Instrucción. ...................................................... 31
- Imputados que habrían utilizado una llave falsa y otra llave verdadera extraída de una caja fuerte sin
consentimiento de su propietario para ingresar a la habitación del damnificado para materializar la
sustracción. Figura agravada (art. 163 inc. 3º del C.P.) Justicia de Instrucción. ................................................... 31
- Magistrado que se declara incompetente y remite la causa al fuero penal económico para que investigue la
figura prevista por el art. 302 del C.P. Decisión prematura. Necesidad de determinar las circunstancias en
las que se produjo el rechazo de los cheques de pago diferido y cotejar la autenticidad de las firmas.
Revocación. ........................................................................................................................................................... 31
- Fiscal que plantea la incompetencia. Empleador que toma una fotografía de los glúteos de la denunciante,
colocando la cámara fotográfica por debajo de su vestido. Posible hostigamiento contemplado en el artículo
52 del Código Contravencional de la ciudad de Buenos Aires Revocación. Justicia Contravencional de la
Ciudad de Buenos Aires. ....................................................................................................................................... 32
- Ley de marca y designaciones (Ley 22.362). Marca no registrada en el país. Justicia de Instrucción.................. 32

CONCURSO DE DELITOS.
- Robo doblemente agravado por su comisión con armas de fuego y en lugar poblado y en banda. Concurso
ideal. Procesamiento. Ausencia de motivos para que ambas agravantes se excluyan entre sí. Confirmación.
Disidencia parcial: Caso en el que debe regir el principio de especialidad. Aplicación del tipo calificado de
mayor gravedad. Robo con arma de fuego. ........................................................................................................... 33

III
CONSERVACION DE LA FAUNA (Ley 22.421)
- Procesamiento. Infracción art. 27 de la Ley 22.421 y su dec. Reglamentario nro. 666/97. Comercialización
de animales autóctonos de diferentes especies. Pruebas suficientes para acreditar el hecho.
Confirmación. ........................................................................................................................................................34
- Sobreseimiento. Secuestro en poder de los imputados, de especies no amenazadas, cuya tenencia y
comercialización no está prohibida. Tipo penal que exige que los objetos provengan de actos de caza furtiva
o depredación -extremo no acreditado- y que el agente actúe "a sabiendas" de que las piezas
comercializadas provienen de esa actividad ilícita. Elementos de prueba que no acreditan el tipo penal.
Atipicidad. Confirmación.......................................................................................................................................34

CONTIENDA ENTRE JUZGADO CORRECCIONAL Y JUZGADO FEDERAL.


- Ingreso ilegítimo de ex pareja a la cuenta de Facebook. Equiparación de cuenta privada de Facebook a
'comunicación electrónica' o de 'dato informático de acceso restringido. Justicia federal.....................................34
- Cuenta de Facebook. Violación de correspondencia. Justicia Federal...................................................................35

CONTIENDA ENTRE JUZGADO CORRECCIONAL Y JUZGADO DE INSTRUCCIÓN.


- Resistencia a la autoridad/Apremios ilegales. Unificación de la investigación. Imputaciones recíprocas
referidas a conductas asumidas bajo mismas circunstancias de tiempo y lugar. Justicia de Instrucción...............35

CONTIENDA ENTRE JUZGADO DE INSTRUCCIÓN Y JUZGADO CORRECCIONAL.


- Amenaza coactiva. Infracción a la ley 24.270. Expresiones que, en realidad, se dirigen a mantener la falta de
contacto entre el niño y su progenitora Justicia Correccional. ..............................................................................36
- Sustracción de bicicleta apoyada en la puerta de un local sin ningún tipo de seguro o candado. Tenedor que
no resignó su vigilancia. No aplicación de la agravante. Hurto simple. Justicia Correccional..............................36
- Mercadería sustraída de un depósito, no en tránsito sino guardada para ser oportunamente transportada.
Hurto simple. Justicia Correccional. ......................................................................................................................37
- Imputado que sustrae objetos de un local comercial con la copia de la llave que poseía por desarrollar allí
tareas de limpieza. Hurto simple. Justicia Correccional. .......................................................................................37
- Posibilidad de que el hecho denunciado encuadre en los arts. 125 bis y 127 del C.P.N. Necesidad de
profundizar la investigación y de que sea el magistrado con mayor competencia quien siga a cargo. Justicia
de Instrucción.........................................................................................................................................................38
- Sustracción de una bicicleta que estaba asegurada con candado y fue hallada al día siguiente cuando el
damnificado la reconoció y estaba siendo conducida por el imputado. Tenedor que resignó su vigilancia.
Legislador que ha agravado la figura debido a la condición de mayor vulnerabilidad. Justicia de instrucción. ...38
- Lesiones culposas y daño agravado. Chofer de colectivo que arrolla a una persona y ésta produce daños en
la unidad. Daño agravado: competencia de la justicia contravencional. Lesiones culposas: competencia del
magistrado correccional. Imposibilidad de escindir las actuaciones. Estrecha vinculación de los sucesos y
comunidad probatoria que aconsejan el análisis en conjunto. Fallo de la C.S.J.N. "Longhi". Conveniencia de
que intervenga la justicia de instrucción aún cuando no tenga establecida expresamente su competencia...........39

CONTIENDA ENTRE JUZGADO DE INSTRUCCIÓN Y JUZGADO DE MENORES.


- Denuncia de abuso sexual efectuada por una madre respecto de su hija menor de 8 años. Autor del hecho
que tendría 5 años. Imposibilidad de descartar la acción de algún adulto en el hecho. Justicia de Instrucción.....40

CONTIENDA ENTRE JUZGADO DE INSTRUCCIÓN Y JUZGADO FEDERAL


- Investigación en la que no puede descartarse que las mujeres estén trabajando sin estar de acuerdo con ello.
Posible trata de personas. Justicia Federal. ............................................................................................................40
- Investigación en la que no puede descartarse de plano una posible trata de personas. Acciones típicas
previstas en la ley 26.842. Justicia Federal. ...........................................................................................................41
- Comercialización de un producto médico sin la autorización ni el contralor público debido. Justicia Federal. ...41
- Defraudación llevada a cabo mediante la utilización del Documento Nacional de Identidad que el
damnificado había extraviado. Justicia Federal. ....................................................................................................42
- Alteración en la numeración de un arma de guerra. Justicia Federal.....................................................................42
- Denuncia del titular de los derechos de un film por el ofrecimiento de la película en www.cuevana3.com.ar,
sin la debida autorización. Obra protegida que nunca fue exhibida. Imposibilidad de descartar el uso del
nombre y la imagen de la marca. Infracción a la ley 22.362. Justicia Federal.......................................................43
- Comercialización clandestina de fármacos, afectación a la salud pública. Hipótesis delictiva que podría
subsumirse en el artículo 201 y en las previsiones de la ley 16.463. Hechos inescindibles y uno de ellos de
competencia federal. Juzgado Federal. ..................................................................................................................43
- Apremios ilegales. Personal del Servicio Penitenciario Federal en ejercicio de función local dentro de la
Ciudad de Buenos Aires. Agentes que no cumplen funciones específicamente federales. Justicia de
Instrucción..............................................................................................................................................................44
- Imputado que habría recibido con conocimiento de su origen espurio y con ánimo de lucro un revolver cuya
numeración identificatoria se encontraba suprimida. Afectación a la garantía constitucional "ne bis in idem".
Violación directa a la garantía constitucional (art. 1 C.P.P.N). Testimonios extraídos respecto del mismo
acontecimiento real que sucedió en un lugar y en un momento determinado y, luego de ser juzgado y
condenado, fue subsumido en un concepto jurídico diferente bajo una valoración distinta a la anterior.
Nulidad...................................................................................................................................................................45

IV
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

- Empresa particular que desconecta en forma intencional los fusibles de los buzones de Edesur,
interrumpiendo el suministro eléctrico de algunas viviendas, cobrando para reestablecer el servicio. Justicia
de Instrucción. ....................................................................................................................................................... 46
- Denuncia por ejercicio de la prostitución en un edificio. Tareas investigativas y allanamiento llevado a cabo
que determinó la existencia de varias mujeres que ejercen la prostitución. Necesidad de profundizar la
investigación para determinar si las mujeres han sido captadas, trasladadas, o privadas de su libertad, para
ser sometidas a la explotación sexual. Justicia de instrucción............................................................................... 46
- Utilización fraudulenta de una clave fiscal para incorporar empleados en los registros de la empresa que en
realidad no eran tales, ocasionando ello una deuda fiscal y su consecuente ejecución Entorpecimiento del
normal funcionamiento del sistema de la AFIP y del buen servicio de sus empleados. Justicia federal............... 47
- Infracción a la ley 24.051 de Residuos Peligrosos. Presidente de una empresa que habría autorizado el
vertido de desechos químicos no autorizados. Justicia de instrucción. Disidencia: Legislación vigente que
no ha introducido un cambio en la atribución de la competencia. Justicia Federal. ............................................. 48
- Taller que realiza instalaciones y/o reparaciones de cilindros de gas comprimido en vehículos sin
habilitación. Secuestro de obleas apócrifas y cilindros reguladores y cañerías de procedencia ilícita.
Sustancia -gas- que se encuentra comprendida en la enunciación de materiales peligrosos que contiene el
art. 189 bis en su primer párrafo -cuya mera tenencia aparece tipificada en el tercero- Distribución que es un
servicio público nacional (Ley 24.076). Obstrucción o entorpecimiento del funcionamiento del Ente
Regulador del Gas en su carácter de contralor. Justicia Federal............................................................................ 48
- Investigación iniciada en virtud de una denuncia anónima que alertó respecto de la existencia de un
prostíbulo en donde se explotaban mujeres. Comunicación posterior de la denunciante señalando que había
sido explotada sexualmente en aquél domicilio. Informe del "Programa Nacional de Rescate y
Acompañamiento a las Personas damnificadas por el delito de trata" que da cuenta que, al momento del
allanamiento, la situación de las mujeres allí identificadas, no daría cuenta de una elección voluntaria o
actividad elegida. Justicia Federal. ........................................................................................................................ 49
- Cheques de pago diferido puestos en circulación por un tercero luego que el titular cerrara la cuenta
corriente con el objetivo de abonar deudas preexistentes, o a modo de préstamo. Ausencia de ardid que
determinara la disposición patrimonial. Art. 302 del C.P. Justicia Penal Económica. .......................................... 50
- Favorecimiento de la prostitución. Necesidad de profundizar a fin de determinar si los hechos configuran el
delito de trata de personas de competencia de la justicia de excepción. Justicia Federal...................................... 50
- Conflicto entre particulares. Acceso a la cuenta personal de Facebook sin autorización. No hay violación al
servicio postal, seguridad o intereses federales. Justicia de menores. ................................................................... 51

CONTIENDA ENTRE JUZGADO DE INSTRUCCIÓN Y JUZGADO FEDERAL DE PROVINCIA


- Llamados telefónicos de carácter extorsivo desde una unidad carcelaria de la Pcia. de Buenos Aires.
Asignación de competencia atendiendo el lugar donde se llevó a cabo el delito. Justicia Federal de la Pcia.
de Buenos Aires..................................................................................................................................................... 51
- Estafa. Compras desconocidas con tarjeta de crédito. Operaciones que imponen la obligación de exhibir
documento de identidad para concretarlas (art. 37 inc. B de la Ley 25.065). Compras realizadas en
comercios ubicados en extraña jurisdicción. Justicia Federal de la Provincia de Buenos Aires. .......................... 52

CONTIENDA ENTRE JUZGADO DE INSTRUCCIÓN Y JUZGADO PENAL ECONÓMICO.


- Presentación de facturas apócrifas con el objeto de ocultar relaciones laborales o documentar egresos de
dinero no justificados. Acción denunciada que no habría afectado las arcas públicas, debido a que las obras
sociales y los sindicatos se encuentran exentos del pago del impuesto al valor agregado. Figura de evasión
descartada. Hecho encuadrable en los art. 172 y 173 C.P. Justicia de Instrucción................................................ 53
- Entrega de cheques de pago diferido: instrumento de crédito y no de pago. Art. 302 CP inc. 3°. Justicia en lo
Penal Económico. .................................................................................................................................................. 53

CORRUPCION DE MENORES.
- En calidad de partícipe necesaria en comisión por omisión de la madre por no haberlo evitado, en concurso
real con lesiones leves reiteradas agravadas por el vínculo en calidad de autora. Elementos de prueba
suficientes para agravar la situación procesal. Confirmación................................................................................ 54
- Sobreseimiento. Agravio del fiscal: decisión prematura. Audiencia en cámara Gesell que fracasó debido a
que el menor no logró expresarse. Resultado que no puede ser concluyente para el cierre definitivo de la
causa. Necesidad de optimizar un contexto de confianza entre el menor y el Ministerio Público de Menores
e Incapaces para garantizar su derecho a ser oído y a participar en el proceso (art. 12 de la Convención de
Derechos del Niño) Revocación. Falta de mérito para procesar o sobreseer......................................................... 55

COSTAS PROCESALES.
- Impuestas a la querella. Proceso en el que el fiscal formuló requerimiento, la cámara revocó un
sobreseimiento, se dispuso la indagatoria del imputado y luego las actuaciones fueron sobreseidas. Querella
que ha tenido razones plausibles para litigar. Revocatoria. Costas en el orden causado....................................... 55

DECLARACIÓN INDAGATORIA.
- Nulidad rechazada respecto del llamado a prestar declaración indagatoria. Actuaciones originadas en la
extracción de testimonios de una causa en la cual el imputado se encuentra sometido a proceso por robo

V
doblemente agravado y en la cual habría inducido a varios testigos a pronunciarse falsamente y declarar en
su favor. Convocatoria que no tiene vinculación con el robo investigado. Atribución al imputado de un
injusto distinto y escindible a aquél por el que hizo el descargo. Ausencia de violación a la garantía de que
nadie puede ser obligado a declarar contra sí mismo. (art. 18 de la CN y art. 184 del CPPN).
Confirmación. ........................................................................................................................................................56
- Nulidad rechazada respecto del decreto que dispuso la citación. Medida discrecional del juez. Decisión no
objetable por vía de apelación ni incidental. Confirmación...................................................................................57

DEFRAUDACIÓN
- Retención indebida. Sobreseimiento. Persona que no restituye la bicicleta dada en comodato por el
Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires. Lugar y tiempo de entrega que estaban determinados en el
documento suscripto al recibir el vehículo. Innecesariedad de que sea constituido en mora. Revocación............58
- Por administración fraudulenta en concurso ideal con uso de documento privado falso en tentativa.
Procesamiento. Presentación de un certificado médico apócrifo para justificar inasistencia en el trabajo.
Confirmación. ........................................................................................................................................................58
- En la sustancia, calidad o cantidad de las cosas entregadas. Sobreseimiento. Imputado que ocultó, al
suscribir el contrato de alquiler del inmueble, que el bien estaba sujeto a una hipoteca. Ausencia de ardid o
engaño. Ausencia de perjuicio patrimonial. Atipicidad. Confirmación.................................................................59
- Mediante uso no autorizado de los datos de una tarjeta de crédito. Procesamiento. Compras realizadas por
Internet desde una dirección de correo electrónico que corresponde al imputado. Elementos de prueba
suficientes. Tipicidad. Confirmación. ....................................................................................................................59
- Por retención indebida. Procesamiento. Locación de inmueble con entrega de mobiliario que fue detallado
en el contrato. Locataria desalojada. Mobiliario ausente. No restitución. Contrato ya finalizado. Tipicidad.
Confirmación. ........................................................................................................................................................60

DENUNCIA.
- Nulidad rechazada. Denuncia realizada por haber compulsado, la dueña de un comercio, el contenido de un
celular olvidado advirtiendo así que tenía imágenes de contenido delictivo. Violación el derecho a la
intimidad o privacidad. Revisión de buena fé del aparato con el objetivo de ubicar al titular. Denuncia
realizada dentro de las 24 hs. Intromisión por parte de un particular que no es funcionario ni representa al
estado. Validez. Confirmación...............................................................................................................................60

DESESTIMACIÓN
- Por inexistencia de delito. Imputado: empleado de una empresa que al serle comunicado su cese de la
relación laboral, envió información sensible desde el mail corporativo a su casilla de correo personal.
Ausencia de perjuicio alguno. Análisis de las posibles figuras penales en las que podría encuadrar el hecho.
Atipicidad. Confirmación.......................................................................................................................................63
- 1) Rechazo de legitimación activa. Necesidad de analizar la viabilidad de la solicitud a la luz de la hipótesis
delictiva por la que se acciona en forma independiente a la decisión que se adopte sobre el fondo.
Pretensión que cumple con lo previsto por los arts. 82 y 83 del C.P.P.N. Revocatoria. Legitimación activa.
2) Privación del uso y goce del automóvil de la pareja adquirido en condominio. Conflicto que surgió a raíz
de las desavenencias. Ausencia de la secuencia que requiere el tipo penal del art. 172 del C.P. Atipicidad.
Confirmación. ........................................................................................................................................................64

DESOBEDIENCIA
- En concurso real con lesiones. Procesamiento. Imputado que tenía conocimiento de la prohibición de
acercamiento emitida en sede civil y se presentó en el club donde estaba su hijo al que agredió físicamente.
Violación a la restricción. Lesiones acreditadas. Pruebas que dan sustento a la versión brindada por el
damnificado. Confirmación. ..................................................................................................................................65
- Procesamiento. Conocimiento por parte de la imputada de la medida cautelar de prohibición de contacto
dictada por el juzgado civil. Confirmación. ...........................................................................................................65

DETENCIÓN DOMICILIARIA.
- Rechazada. Detenido que tiene setenta años de edad. Condición necesaria pero no suficiente para el
otorgamiento del beneficio. Prerrogativa del juzgador. Otorgamiento no automático. Balance entre los
riesgos procesales y el adecuado resguardo y protección de los derechos que asisten al imputado que impide
conceder el beneficio solicitado. Condena anterior. Riesgo de fuga. Características violentas del hecho.
Domicilio aportado por el imputado donde podría residir es lindero al lugar donde se cometió el delito.
Confirmación. ........................................................................................................................................................66

DETENCIÓN SIN ORDEN JUDICIAL


- Nulidad rechazada. Acta realizada por personal policial sin la presencia de testigos de actuación. Actuación
policial válida, prudente y razonable, teniendo en cuenta la actitud asumida por el imputado. Persecución
que culminó con la detención del imputado. Validez. Confirmación. ...................................................................67

DETENCIÓN Y REQUISA SIN ORDEN JUDICIAL.


- Nulidad rechazada. Comportamiento del imputado que habilitó la interceptación policial. Estado de
sospecha razonable. Personal preventor que atiende un llamado al celular que tenía el imputado entre sus
ropas, oportunidad en la que toma conocimiento que el mismo había sido sustraído momentos antes.
Indicios vehementes de culpabilidad. Validez. Confirmación...............................................................................67

VI
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

DETENIDOS.
- Traslado. Rechazado. Detenido que solicita estar presente en el Hospital o Clínica donde va a nacer su hijo
sin individualizar el lugar y la fecha del posible parto. Posible riesgo de fuga y características violentas del
hecho. Necesidad de que se realice un amplio informe socio ambiental; que el detenido aporte constancia de
la fecha aproximada de parto, la identidad de la madre y la acreditación del vínculo entre ellos.
Confirmación. ........................................................................................................................................................ 68
- Sanción disciplinaria impuesta por el Servicio Penitenciario Federal. 1) Planteo de inconstitucionalidad
rechazado. Decreto 18/97 reglamentado por Ley 24.660. Infracción consistente en no haber acatado una
directiva del personal penitenciario. Legitimidad no cuestionada. Ausencia de colisión entre la normativa
que regula el procedimiento sancionador y la Constitución Nacional. Derivación legislativa que no ha
derivado en una normativa reglamentaria irrazonable. Confirmación. 2) Nulidad rechazada. Imputado que
no tuvo posibilidad de contar con el asesoramiento de un letrado. Vulneración del derecho de defensa.
Silencio o indeterminación de la asistencia letrada. Sistema penal que debe complementar las disposiciones
de la Ley 24.660. Aplicación de las reglas de procesamiento del proceso penal. Revocatoria. Nulidad de lo
actuado a partir del acta de notificación y descargo del interno............................................................................ 69
- Nulidad rechazada. Sanción disciplinaria impuesta por el Servicio Penitenciario Federal. Agravio:
afectación al derecho de defensa de su asistido por no haber contado el imputado con asistencia técnica al
momento de realizar su descargo. Rechazo. Ministerio Público de la Defensa que fue notificada de la
formación del incidente y de la audiencia por la sanción que se iba a llevar a cabo con dos semanas de
anticipación. Derecho de defensa en juicio garantizado. Confirmación................................................................ 71
- Sanción disciplinaria impuesta por el Servicio Penitenciario Federal. Defensa que planteó la
inconstitucionalidad del decreto PEN 18/97, la nulidad de la sanción y, en subsidio, recurrió la imposición
por considerar que la infracción no estaba acreditada. Magistrado que rechazó todos los planteos y concedió
la apelación respecto de la sanción. Magistrado que tenía competencia jurisdiccional para resolver al recurso
de apelación. Nulidad parcial. ............................................................................................................................... 71

EMBARGO
- Rechazo. Imputado que es accionista de una sociedad y ofrece un bien del acervo societario. Bien que no
pertenece al patrimonio personal del imputado. Confirmación. ............................................................................ 72

ENCUBRIMIENTO.
- Procesamiento. Imputada que no denunció el abuso sexual del cual fue víctima su hija e intentó neutralizar
la averiguación de la verdad al influir sobre ella para que narrara otro mecanismo de producción de las
lesiones para lograr desvincular a su pareja. Accionar dirigido a lograr una alteración en las pruebas del
delito investigado (testimonio de la menor). Exención de responsabilidad no aplicable (art. 277 inc. 4 del
C.P.). Vínculo consanguíneo entre imputada y víctima menor de 5 años. Protección de la Convención de los
Derechos del Niño. Omisión de denunciar. Delito dependiente de instancia privada. Reserva a las partes o
representantes de la posibilidad de instar la acción penal. Confirmación parcial. Encubrimiento en la
modalidad prevista en el art. 277, inciso 1, apartado "b", agravado por la circunstancia prevista en el inciso
3, apartado "a", del Código Penal". ....................................................................................................................... 72
- Agravado por el ánimo de lucro. Imputado a bordo de motocicleta sustraída, sin documentación relativa a la
titularidad y con patente sustituida por una correspondiente a otro rodado. Receptación o adquisición de la
moto bajo el conocimiento que provenía de un delito. Ánimo de lucro: posibilidad de uso o cambio de los
objetos receptados satisface el fin lucrativo exigido. Confirmación. Disidencia parcial: tenencia que no
basta para sostener que fue recibido con un propósito lucrativo. Figura no agravada. Encubrimiento
simple..................................................................................................................................................................... 78
- Procesamiento. Imputados que fueron condenados por ser miembros de una asociación ilícita. Ausencia de
afectación al principio ne bis in idem. Actual procesamiento por hechos que habrían cometido en el marco
de la asociación criminal. Asociación ilícita: delito autónomo de los delitos que a través de ella cometan sus
integrantes. Confirmación. Disidencia parcial: Afectación del ne bis in idem respecto de dos hechos que
efectivamente importaron concreción del específico objetivo perseguido por la organización criminal.
Exclusión. Confirmación parcial. .......................................................................................................................... 79

ENTREGA DE RODADO.
- Rechazada. Bien pasible de decomiso. Titular registral del vehículo que no reviste la calidad de imputado
(art. 23 del C.P.). Revocación. Procedencia en el mismo carácter que lo detentaba con anterioridad. ................. 81

ESTAFA
- En concurso real con uso de documento privado falso. Procesamiento. Vendedor de un local de telefonía
que utilizaba los datos personales de los clientes para simular ventas y así obtener ganancias en su
beneficio. Perjuicio patrimonial para la empresa. Elementos de prueba suficientes. Confirmación..................... 82
- 1) Procesamiento. Estafas reiteradas (10 hechos). Imputación dirigida a cuatro personas. Turistas que no
pudieron ingresar a un estadio de fútbol pese haber pagado por el servicio a una imputada, representante de
una empresa de turismo. Elementos de prueba suficientes para sostener que actuaron en el hecho tres de los
imputados. Despliegue engañoso. Perjuicio patrimonial. Confirmación. 2) Imputada representante técnica

VII
de la empresa: Necesidad de profundizar la investigación para determinar si intervino en los hechos.
Revocatoria. Falta de mérito. .................................................................................................................................82
- En concurso real con amenazas coactivas. Procesamiento. Imputados que engañaron a la víctima logrando
que ésta les entregara sumas de dinero a cambio de interceder para lograr que obtuviera la ciudadanía
italiana. Elementos de prueba suficientes. Expresiones vertidas con posterioridad aptas para amedrentar.
Tipicidad. Confirmación. .......................................................................................................................................83
- Desestimación por inexistencia de delito. Compraventa en un comercio a la calle, con adelanto del total del
importe, sin entrega del bien comprado. Comercio que cerró al poco tiempo. Titular del comercio
mencionado en la factura entregada fallecido. Imposibilidad de descartar una posible estafa. Necesidad de
profundizar la investigación. Revocación. .............................................................................................................84
- Sobreseimiento. Compra formalizada en "Mercadolibre" por clientes que sabían que no estaban autorizados
a ingresar a un espectáculo y que pagaron un precio superior al oficial por los tickets que resultaron ser
apócrifos. Hecho típico. Revocación. ....................................................................................................................84
- Tentativa inidonea. Procesamiento. Imputado que, en el marco de un proceso concursal, utilizó un
documento para presionar y lograr un acuerdo económico, no logrando su cometido pero en virtud de lo
resuelto luego por el magistrado. Documento que analizado ex ante aparentaba idoneidad, pero ex post, con
el procedimiento concursal finalizado, hubiera resultado inútil para logar el fin esperado debido a que no
cumplía con el estatuto social. Ausencia de idoneidad que no excluye la punibilidad. Confirmación..................85

ESTAFA PROCESAL.
- Desestimación por inexistencia de delito. Presentación en un juicio comercial de documentación auténtica
para hacerla valer con otro sentido. Ausencia de la secuencia que requiere el tipo penal del art. 172.
Conducta ardidosa del demandado no dirigida a obtener disposición patrimonial alguna. Atipicidad.
Confirmación. ........................................................................................................................................................86

ESTUPRO.
- Procesamiento. Agravio: Error de prohibición. Rechazo. Invalidez del consentimiento prestado por el menor
de 13 años. Figura que tipifica el aprovechamiento de la inexperiencia e inmadurez sexual del pasivo.
Confirmación. ........................................................................................................................................................87

EVASIÓN.
- Culposa (Art. 281, 2° párrafo, C.P.). Procesamiento. Detenido que escapó de una comisaría por la terraza,
previo traspaso de la reja en cuestión que permitía el acceso a la escalera. Omisión atribuida al policía de
guardia de colocar el candado en la reja de la celda. Omisión que posibilitó el acceso a la terraza y la vía de
escape. Confirmación.............................................................................................................................................88

EXACCIONES ILEGALES.
- Procesamiento. Funcionarios policiales que abusándose de sus cargos en marco de un procedimiento,
exigen dinero a cambio de no secuestrar el vehiculo. Confirmación.....................................................................89

EXCARCELACIÓN
- Rechazada. Penalidad del delito imputado que autoriza a conceder la excarcelación. Ausencia de
antecedentes condenatorios y de riesgo de entorpecimiento de la investigación. Revocación. Procedencia.
Concesión bajo caución real más la obligación de comparecer quincenalmente ante el tribunal. Disidencia:
Existencia de peligros procesales: Riesgo de fuga y entorpecimiento de la investigación. Imputada
extranjera con situación migratoria no regularizada. Falta de arraigo. Tiempo proporcionado de detención.
Confirmación. ........................................................................................................................................................89
- Rechazada. Existencia de riesgos procesales. Posibilidad que se entorpezca la investigación. Valoración de
las características violentas del hecho, excesiva violencia ejercida contra la víctima. Tiempo proporcionado
de detención. Confirmación. ..................................................................................................................................90
- Rechazada. Procesamiento firme por robo agravado por su comisión en poblado y en banda y con la
intervención de menores de edad. Inexistencia de peligros procesales. Imputado en situación de calle que
aportó el teléfono celular de su hermana. Precarias condiciones de vida que le impedirían eludir con éxito la
persecución penal o entorpecer esta investigación. Domicilio procesal en la Defensoría Oficial.
Investigación en la que ya se ha recabado la prueba por lo que no hay riesgo de entorpecimiento.
Revocación. Imposición de caución más la obligación de comparecer ante en el juzgado mensualmente.
Disidencia: Imputación que impide la aplicación de alguna de las hipótesis previstas en los artículos 316 y
317, inciso 1°, C.P.P.N. Máximo de la escala penal prevista para los delitos imputados y antecedentes
condenatorios que impedirían la aplicación de una pena en suspenso. Riesgo de peligro de fuga debido al
precario arraigo y a que se encuentra identificado con diversos nombres ante el Registro Nacional de
Reincidencia. Confirmación...................................................................................................................................91
- Rechazada. Imputado que por su penalidad máxima permitiría la concesión del beneficio. Existencia de
riesgo de elusión debido al incumplimiento del compromiso asumido al serle concedida anteriormente la
excarcelación. Revocación. Concesión bajo caución real más la obligación de presentarse mensualmente
ante el tribunal........................................................................................................................................................92
- Rechazada. Imputado procesado por lesiones graves a su pareja. Hecho de violencia doméstica. Violencia
desproporcionada en el hecho. Causas actuales en trámite y reanudación de juicio por la probation obtenida
en una causa anterior. Riesgo de entorpecimiento en la investigación. Obligación del Estado de proteger y
garantizar la integridad física y psíquica de las mujeres sometidas a situaciones de violencia ("Convención

VIII
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

de Belén Do Para", Leyes n° 12.569 y 26.485 y la Declaración sobre la eliminación de la violencia contra la
mujer). Confirmación. Disidencia: Situación procesal incluida en los términos del artículo 316, párrafo
segundo, en función del artículo 317, inciso 1°, C.P.P.N. Imputado que no registra condenas anteriores ni
rebeldías. Prueba recabada que neutraliza el riesgo de entorpecimiento en la investigación. Revocación.
Procedencia. Imposición de caución personal, prohibición de acercamiento y comparecencia en el tribunal...... 93
- Rechazada. Imputada procesada con prisión preventiva por lesiones leves agravadas por el vínculo, tres
hechos en concurso real entre sí. Inexistencia de peligros procesales. Ausencia de antecedentes.
Domicilio constatado. Revocación. Concesión bajo caución real más la obligación de presentarse ante el
tribunal................................................................................................................................................................... 94
- Rechazada. Imputado procesado por encubrimiento agravado con ánimo de lucro. Probabilidad de no
acceder a una sanción de cumplimiento suspensivo, en caso de ser condenado. Domicilio constatado.
Ausencia de rebeldías. Revocación. Concesión con la imposición de una caución real y comparecencia
periódica en el juzgado. Necesidad de dar intervención a la Dirección Nacional de Migraciones por su
condición de extranjero. Disidencia: Pena que no podrá ser fijada en su mínimo y será efectiva, en caso de
recaer condena. Arraigo que no se encuentra claramente demostrado. Aporte de datos personales no
certeros. Confirmar................................................................................................................................................ 94
- Rechazada. Imputado procesado por robo en grado de tentativa. Fiscal que no se opuso a la concesión del
beneficio. Revocación. Concesión bajo caución real y la obligación de comparecer mensualmente. ................. 95
- Rechazada. Robo doblemente agravado en poblado y en banda con armas de fuego. Proceso en trámite.
Antecedentes condenatorios. Dudas acerca del arraigo. Registra ante la Dirección nacional de Migraciones
una condición de ingreso "irregular". Peligro de fuga. Confirmación................................................................... 96
- Rechazada. Imputado procesado por robo en tentativa, que registra una suspensión de juicio a prueba y es
extranjero no documentado con situación migratoria irregular y arraigo incierto. Confirmación......................... 96
- Rechazada. Robo agravado en poblado y en banda y con arma de fuego en concurso real con hurto agravado
por escalamiento. Situación migratoria irregular en el país, visa de turista vencida. Arraigo dudoso. Causa
en trámite acumulada a la investigación. Confirmación........................................................................................ 97
- Rechazada. Imputado procesado con prisión preventiva por robo agravado por el uso de armas. Registro de
causa en trámite con averiguación de paradero para recibirle declaración indagatoria. Actitud temeraria
adoptada durante la persecución policial. Medidas pendientes para identificar a los restantes intervinientes.
Confirmación. ........................................................................................................................................................ 97
- Rechazada. Imputado procesado por robo simple en grado de tentativa. Antecedente condenatorio. No
registra rebeldías. Domicilio constatado. Revocación. Concesión bajo caución real más la obligación de
comparecer al tribunal cada treinta días. ............................................................................................................... 98
- Rechazada. Homicidio en grado de tentativa. Improcedencia de la soltura desde la perspectiva de lo
dispuesto en el art. 317 inc 1º del C.P.P.N. Registro de condena anterior. Imposibilidad de que en caso de
recaer nueva sanción sea de ficto cumplimiento. Indicador de riesgo de elusión: Imputado registrado con
diferentes filiaciones. Damnificado que a raíz de la agresión sufrida fue internado en terapia intensiva, coma
farmacológico, riesgo corrido. Riesgo de entorpecimiento de la investigación: imputado que vive en casa
lindera a los padres de la víctima. Confirmación................................................................................................... 98
- Caución real. Fiscalía que solicita se revoque. Defensa recurrió el rechazo a la sustitución de la caución
económica por una juratoria. Delito imputado que posee una pena menor a 8 años. Cumplimiento en
detención del mínimo que podría corresponderle por el delito. Imputado que no registra antecedentes
condenatorios. Eventual sanción a imponer de ejecución condicional. Ausencia de peligros procesales.
Imputado con situación económica que, a pesar de una eventual reducción de la caución, no podría
afrontarla. Sustitución. Confirmación. Modificación por Caución Juratoria más la obligación de comparecer
quincenalmente. Disidencia: condiciones impedientes a título de riesgo de elusión. Rebeldía. Imputado que
se tomó a golpes de puño con una persona y es docente en disciplina de taekwondo. Víctima que resultó
lesionada. Revocación. .......................................................................................................................................... 99
- Rechazada. Registro de condenas y causa en trámite. Eventual condena que no podrá ser dejada en
suspenso. Posible sustracción al accionar de la justicia. Imputado involucrado en varios procesos penales.
Declaración de rebeldía en causas anteriores. Aportación de domicilio y nombre falsos. Confirmación........... 100
- Rechazada. Imputación que permitiría la concesión del beneficio solicitado. Imposibilidad de,
eventualmente, dejar en suspenso la condena a dictar por registrar varias condenas. Existencia de riesgo de
entorpecimiento. Imputado que amedrentó a la víctima. Tiempo en detención que no se advierte
desproporcionado ante la eventual forma de cumplimiento de sanción. Confirmación. ..................................... 101
- Rechazada. Registro de causas en trámite en etapa de debate. Riesgo de elusión. Imputado que al ser
detenido fue mendaz al proporcionar sus datos personales e indicó ser menor de edad. Ocultamiento de la
verdadera identidad: serio indicador sobre la existencia de riesgo de elusión. Extranjero indocumentado.
Voto del Dr. Scotto: Antecedentes ante la justicia de menores que no deben ser valoradas por su condición
de menor al momento de la comisión de esos sucesos. Existencia de indicadores de riesgo de elusión que
impiden igualmente conceder el beneficio. Confirmación. ................................................................................. 101
- Rechazada. Imputado procesado con prisión preventiva por robo en poblado y en banda tentado, en
concurso real con el de alteración de la numeración de un objeto registrado de acuerdo con la ley.
Calificación que lo habilitaría a transitar el proceso en libertad. Exceso de violencia en la ejecución de
hecho. Indicadores de riesgo de elusión: Irregular situación migratoria y dudoso arraigo. Confirmación. ........ 102
- Rechazada. Elementos que permiten presumir que el imputado puede fugarse. Imputado que registra
antecedentes condenatorios y ha sido declarado reincidente. Dudoso arraigo. Confirmación. ........................... 103

IX
- Rechazada. Hurto. Posible riesgo de fuga. Registro de condenas, falta de arraigo, identificado con diferentes
nombres lo que torna confusa su identidad. Declarado rebelde en tres oportunidades. Imputado habido por
haber sido aprehendido ante la presunta comisión de un delito. Confirmación...................................................103
- Rechazada. Imputado procesado por (artículos 45 y 164 del Código Penal). Existencia de riesgos
procesales: intento de darse a la fuga; registro de antecedentes condenatorios que implicarían, ante la
eventualidad de una condena, su imposición de efectivo. Empleo de violencia en el hecho. Confirmación.......104
- Rechazada. Imputado procesado por robo agravado por su comisión mediante escalamiento, en grado de
tentativa, en concurso real con hurto agravado por su comisión con escalamiento, en grado de conato.
Ausencia de condenas anteriores, de peligros procesales y de entorpecimiento en la investigación. Anuencia
del fiscal respecto la postura liberatoria. Revocación. Procedencia bajo caución juratoria y comparecencia
mensual en el juzgado. .........................................................................................................................................104
- Rechazada. Encubrimiento agravado por haberse cometido con ánimo de lucro. Imputado que, en caso de
recaer condena, debería ser de cumplimiento efectivo porque registra tres condenas y una causa en trámite
en la etapa de juicio. Identificado con diferentes nombres. Arraigo dudoso. Confirmación. ..............................105
- Rechazada. Robo con fractura de puerta de un lugar habitado. Imputado con antecedente condenatorio y que
mintió al aportar los datos de su identidad. Forma en que se dio a la fuga con su consorte de causa
(conduciendo un rodado a gran velocidad y en sentido contrario a la circulación vehicular) que muestran un
desapego a las normas básicas de convivencia. Irregular situación migratoria. Confirmación. ..........................105

EXCEPCIÓN DE FALTA DE ACCIÓN.


- Rechazada. Querellante que no contesta la vista concedida a los fines del art. 346 del C.P.P.N. Omisión que
no implica desistimiento. Conservación de las facultades para proseguir actuando en el eventual debate.
Confirmación. ......................................................................................................................................................106
- Rechazada. Planteo anterior rechazado. Preclusión de la posibilidad de las partes de replantear la cuestión
sin variación de las circunstancias fácticas o jurídicas. Confirmación. ...............................................................106
- Rechazada. Investigación en la cual el fiscal ha solicitado que se convoque al imputado a prestar
declaración indagatoria. Planteo improcedente. Confirmación. ..........................................................................107
- Rechazada. Pretensión de apartar a la empresa querellante de su rol con el argumento de que con
posterioridad a la legitimación, la parte transfirió en forma onerosa el crédito a un tercero. Acción que sólo
se tiene por renunciada en caso de convenio entre el imputado y el damnificado. Confirmación.......................107

EXENCIÓN DE PRISIÓN.
- Rechazada. Imputado procesado por robo con armas. Circunstancias que no han variado desde el momento
en que fue anteriormente rechazado el pedido de excarcelación. Existencia de riesgos procesales.
Confirmación. ......................................................................................................................................................108
- Rechazada. Peligros procesales advertidos en la anterior intervención de la Cámara que han perdido
virtualidad. Imputada que pese a encontrarse en conocimiento de la imputación que se le efectuara, no se
hizo presente a prestar declaración indagatoria. Revocatoria. Concesión bajo caución real. ..............................109

EXPLOTACIÓN DEL EJERCICIO DE LA PROSTITUCIÓN.


- Procesamiento. Imputados que se aprovechaban de las ganancias que surgían del ejercicio de la prostitución
de un grupo de mujeres, en inmuebles regenteados por varias personas. Explotación económica. Elementos
de prueba suficientes. Confirmación....................................................................................................................109

EXTORSIÓN.
- Sobreseimiento. Análisis del tipo penal. Magistrado civil que ha ordenado que el querellante restituya una
suma de dinero. Deuda que se intenta cobrar que resulta ser legítima. Ausencia de exigencia indebida.
Hecho denunciado que no constituye un delito de acción pública pero que podría configurar un delito contra
el honor cuya acción debe ser ejercida de conformidad con lo dispuesto por el artículo 7 del C.P.P.N.
Revocatoria. Archivo. ..........................................................................................................................................110

EXTRADICIÓN.
- Rechazada por el magistrado y solicitada por el fiscal para ser presentada en España, además de un pedido
de informe de registro de antecedentes penales. Imputado que se encuentra acusado de abuso sexual simple
reiterado en dos oportunidades y no fue formalmente notificado de la denuncia, por lo que su salida del país
no puede traducirse como una conducta elusiva. Posibilidad de convocar al imputado en los términos del
art. 294 del C.P. al domicilio que se establezca, tal como lo prevee el art. 35 del Tratado de Extradición y
Asistencia Judicial en Materia Penal celebrado entre la República Argentina y el Reino de España.
Procedencia del pedido de antecedentes a los fines de establecer eventualmente la vigencia de la acción
seguida contra el imputado (art. 67 del C.P.). Confirmación del rechazo al pedido de extradición y
revocación de la negativa a solicitar antecedentes...............................................................................................111

FALSIFICACIÓN DE DOCUMENTO.
- Publico y uso. Procesamiento. Presentación de un certificado médico para justificar una inasistencia laboral.
Documento que poseía irregularidades en su redacción y la firma del médico adulterada. Afectación al
patrimonio del organismo para el cual presta funciones el imputado toda vez que percibió su salario a pesar
de no haber concurrido a cumplir su tarea. Confirmación. ..................................................................................112
- Público. Procesamiento. Licencia de conducir exhibida por el imputado a un funcionario del G.C.B.A. en
control vehicular. Apariencia de lo verdadero. Documento idóneo para inducir a error. Confirmación.............113

X
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

FALSO TESTIMONIO
- Procesamiento. Demandado en expediente laboral que fue citado a absolver posiciones y luego fue
propuesto como testigo en el mismo proceso. Hecho típico. Conducta justificada debido a que fue obligado
a declarar contra sí mismo. Revocación. Sobreseimiento (art. 336 inc. 5º del C.P.P.N.) Disidencia parcial:
Imputado que reviste la calidad de parte interesada. Imposibilidad de ser sujeto activo. Atipicidad.
Revocación. Sobreseimiento (art. 336 inc. 3º del C.P.P.N.)............................................................................... 113
- Sobreseimiento. Perito que fue imputado por el denunciante de falso testimonio por haber presentado un
informe en un expediente civil que, a su criterio, sería falso. Pruebas incorporadas que dan cuenta que el
informe fue llevado a cabo conforme las normas y técnicas que rigen su profesión. Confirmación................... 114
- Sobreseimiento. Expediente civil en donde se habrían volcado los testimonios falsos en trámite.
Investigación que igualmente puede llevarse adelante. Posibilidad de llevar a cabo medidas. Revocación.
Falta de mérito. .................................................................................................................................................... 115
- Sobreseimiento. Imputado que habría mentido al responder sobre las generales de la ley. Preguntas que
tienen como fin individualizar a la persona y no forman parte de la declaración. Atipicidad. Confirmación..... 116
- Desestimación por inexistencia de delito. Tipo penal. Manifestación falsa vertida al ser preguntado por las
generales de la ley. Declaración que no tuvo incidencia en el resultado del proceso pero ha tenido la
potencialidad de generar en el juzgador un error acerca de mérito de tal exposición. Hecho típico.
Revocación. Disidencia: Ausencia de perjuicio por no haber influido en el resultado. Atipicidad.
Confirmación. ...................................................................................................................................................... 117

HABEAS CORPUS
- Rechazado. Orden de detención emanada de juez competente. Juzgado Federal de Nueva York que solicita
la detención del imputado a los fines de la extradición. Juzgado federal de esta ciudad que ha librado orden
de detención con fines de extradición. No configuración de alguno de los supuestos previstos en la ley
23.098. Confirmación. ......................................................................................................................................... 118
- Rechazado. Ciudadano que ve restringida su libertad debido a que personas de civil se presentaron en varias
oportunidades en su domicilio y preguntaron por él. Inexistencia de órdenes de restricción. Improcedencia
de la acción. Confirmación.................................................................................................................................. 118
- Rechazado. Imputado que al cumplir la mayoría de edad fue trasladado desde el Centro de Régimen
Cerrado Manuel Belgrano al Complejo de Jóvenes Adultos de Marcos Paz. Agravio: Agravamiento de las
condiciones de detención porque el traslado ha sido en desmedro de los estudios que venía cursando, de la
asistencia psicológica que recibía y de las visitas de sus familiares. Imputado que posee una condena no
firme por un hecho cometido cuando era menor de edad que impone tomar en consideración la Convención
sobre los Derechos del Niño, en tanto prevé un trato específico y diferenciado para tales supuestos que,
sobre todo, han de procurar evitar que la pena privativa de la libertad tenga efectos negativos para la
reintegración social del condenado. Revocación. Hacer lugar a la acción y ordenar el inmediato traslado........ 118
- Rechazado. Detenido que alega agravamiento de las condiciones de detención debido a que a pesar de haber
solicitado ser incorporado al régimen laboral para poder dar sustento económico de sus hijos, no logró su
cometido. Acción que no se advierte como agravante de las condiciones de detención en los términos
previstos por la norma. Confirmación. ................................................................................................................ 120

HOMICIDIO
- Culposo. Procesamiento. Imputado: Encargado de la inspección mensual del ascensor de un edificio. Menor
de edad que cayó por el hueco del ascensor al abrir sin ninguna dificultad la puerta. Violación al deber de
cuidado al no detectar unos días antes del hecho el defecto, que resultaba evidente y que podría haber
advertido de haber revisado en esa ocasión las puertas de todos los pisos del edificio, infringiendo así la
ordenanza n° 49.308 del 22 de junio de 1995, en su artículo 8.10.3.2. Confirmación. ....................................... 120
- Culposo. Sobreseimiento. Médicos tratantes que omitieron los cuidados necesarios para resguardar la vida
de un paciente internado por quemaduras en su cuerpo, generando ello una infección en las heridas.
Desatención y abandono que provocaron su muerte. Posición de garante del Coordinador del Área de
Pediatría y de la Pediatra. Revocación. Procesamiento por abandono de persona seguido de muerte................ 122
- Culposo. Procesamiento. Menor internado en un establecimiento bajo tratamiento por abuso de drogas que
se quitó la vida en su habitación. Imputados: directores administrativos, médicos y psicólogos tratantes del
establecimiento que no habrían advertido la situación de riesgo en que se encontraba la víctima. Inexistencia
de conductas previas de auto puesta en peligro por parte del menor. Recaída propia del trastorno por
drogadicción que padecía. Ausencia de accionar negligente por parte de los profesionales de la institución.
Revocación. Sobreseimiento................................................................................................................................ 124
- Culposo. Procesamiento. Imputado: encargado del taller mecánico que intempestivamente y sin cerciorarse
de que el trabajo de reparación habría finalizado, ascendió a la unidad y movió la dirección provocando que
se movieran los criquets y cayera el vehículo arriba de la cabeza de uno de los mecánicos, provocándole la
muerte. Actividad no reglada pero que genera ciertos riesgos que implican que quienes cumplen allí tareas
deban extremar los cuidados. Imputado que tuvo una conducta negligente que provocó el deceso de la
víctima. Infracción al deber objetivo de cuidado. Confirmación......................................................................... 125
- Culposo por la conducción imprudente de un vehículo. Procesamiento. Violación al deber objetivo de
cuidado al no haber respetado la prioridad de paso que le correspondía a la víctima por su condición de
peatón cuando estaba cruzando la avenida. Confirmación. ................................................................................. 125

XI
- I-Reiterado en dos oportunidades, en concurso real entre sí, con lesiones leves cometido en dos ocasiones,
todo ello agravado por el uso de un arma de fuego de uso civil condicional, en concurso real con su
portación ilegítima (arts. 41 bis, 55, 79, 89, 189 bis inc. 2° -párrafo cuarto, C.P. y art. 306,
C.P.P.N.).Procesamiento. Triángulo delictivo originado por un enfrentamiento de bandas contrarias.
Agravio de una de las defensas: legítima defensa de un tercero. Imputado que adujo que disparó el arma de
fuego a la espalda de un sujeto porque éste con un arma blanca, perseguía a un menor -tercero defendido-.
Versión que no encuentra apoyatura en otros elementos de prueba. Arma disparada seis veces.
Irracionalidad del medio usado que descarta la eximente del art. 34, inciso 6°, ap. b) del Código Penal. II-
Deceso una mujer que permaneció en la línea de fuego, junto a varias personas. Representación del accionar
doloso. Aplicación de la agravante genérica del art. 41 bis del C.P. III- Nulidad parcial rechazada.
Investigación que puede avanzar a pesar de que dos damnificados por lesiones leves no instaron la acción.
Validez. IV- Modificación del concurso real aplicado entre la figura prevista en el art. 189 bis inc. 2° -
párrafo cuarto- y los restantes delitos. Concurso ideal (art. 54, C.P.). Fundamentación. Confirmación.
Modificación de la calificación legal por la de homicidio reiterado en dos oportunidades, en concurso real
entre sí, los que a su vez concursan de modo material con lesiones leves cometido en dos ocasiones, todo
ello agravado por el uso de un arma de fuego, en concurso ideal con portación ilegítima de un arma de
guerra. ..................................................................................................................................................................126
- Culposo. Procesamiento. Médicos que se demoraron en la realización de estudios, en el diagnostico y en el
tratamiento adecuado, circunstancias que hubieran que aumentado las posibilidades de sobrevida.
Confirmación. ......................................................................................................................................................128
- Culposo. Procesamiento. Médica que omitió el debido deber de cuidado al no realizar estudios médicos
previos y extender varias recetas de comprimidos con el objetivo que la paciente baje de peso, provocando
su conducta un repentino descenso de peso, efectos adversos y cambios en el comportamiento que
determinaron a la persona a tomar la decisión que quitarse la vida. Elementos de prueba suficientes que
demuestran el nexo causal entre la omisión y el resultado típico. Confirmación. ...............................................129
- Culposo. Sobreseimiento. Detención imprudente del rodado sobre una avenida sin colocar las balizas
reglamentarias. Fallecimiento de un motociclista debido a las lesiones sufridas cuando se cayó por una
maniobra de desvío al esquivar el rodado que circulaba inmediatamente detrás del vehículo de la imputada.
Infracción art. 59, de la Ley de Tránsito que determinó el resultado fatal. Revocación. Procesamiento por
homicidio culposo agravado por haber sido ocasionado por la conducción negligente, imprudente y
antirreglamentaria de un vehículo automotor en calidad de autora......................................................................130

HONORARIOS.
- Letrados que ejercen la defensa en forma conjunta. Magistrado que reguló un monto a cada uno por
separado. Improcedencia. Forma de disponer la regulación: fijación de honorarios como si fuera una sola
representación (Ley 24.432). Nulidad. ................................................................................................................131
- Letrado defensor que cuestiona el importe estipulado por ser bajo debido a la devaluación de moneda y el
proceso inflacionario. Actualización monetaria: no prevista en la normativa legal. Confirmación. ...................131
- Letrado que pretende elevarlos y querella que solicita que se reduzcan. Elementos que deben ser tenidos en
cuenta para su fijación. Elevación del monto.......................................................................................................132

HURTO
- Procesamiento. Sustracción de energía eléctrica mediante conexiones clandestinas. Elementos de prueba
suficiente para agravar la situación procesal. Confirmación................................................................................132
- Procesamiento. Imputados: Arquitecta y constructor que se apoderaron de bienes muebles para cobrarse lo
adeudado luego que finalizara la locación de obra y se entregara el bien. Bienes que estaban en poder del
propietario del inmueble y ya no les pertenecía. Hecho típico. Confirmación. ...................................................133
- Agravado por el uso de llave igual o ganzúa. Sobreseimiento. Sustracción de elementos del interior de la
habitación de un hotel en la que habría ingresado el imputado. Testimonio del encargado del hotel que
permite dar por cierta la versión del damnificado. Estado de sospecha requerido para convocarlo a prestar
declaración indagatoria. Revocación. ..................................................................................................................133
- En grado de tentativa. Procesamiento. Defensa que alega la atipicidad del hecho por aplicación del principio
de insignificancia y el estado de necesidad justificante que llevó al imputado a cometer el hecho. Bien
jurídico protegido, derecho a la propiedad, vulnerado. Estado de necesidad: ausencia de las condiciones para
su aplicación. Confirmación. ...............................................................................................................................134
- En tentativa. Sobreseimiento. Imputado que sustrajo alimentos básicos de un supermercado aduciendo tener
hambre. Imputado en situación de calle. Acción justificada en la necesidad alimentaria apremiante para su
salud (artículo 34, inciso 3° del C.P.). Confirmación. Modificación de la causal (art. 336 inc. 5º del
C.P.P.N.) ..............................................................................................................................................................135
- En tentativa. Procesamiento. Sustracción de tester de perfume en un comercio. Objeto destinado a
promocionar el producto, sin valor comercial. No afectación al bien jurídico protegido. Atipicidad.
Revocación. Sobreseimiento................................................................................................................................135
- I-En tentativa. Arrebato de teléfono móvil. Procesamiento. II-Declinación de competencia al magistrado
correccional. Fiscal que recurre la calificación legal y, en consecuencia, la incompetencia dispuesta.
Existencia de violencia o fuerza en el acto de arrebatar. Confirmación del procesamiento con modificación
de la calificación legal por robo en tentativa. Revocación de la incompetencia. Disidencia: Ausencia de
violencia en el arrebato. Confirmación. ...............................................................................................................136
- Agravado por haber sido cometido por personal policial. Damnificado que denunció que nunca recupero
una de las computadoras que le habían sustraído de su comercio. Fotos y filmaciones de las cámaras de
seguridad aportadas que dan cuenta del hecho cometido por el funcionario. Confirmación. ..............................136

XII
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

- En grado de tentativa. Procesamiento. Agravio de la defensa: estado de necesidad justificante y, de manera


subsidiaria, principio de insignificancia. Estado de necesidad justificante: Presupuestos para considerarlo.
Rechazo. Principio de insignificancia: Afectación al bien jurídico protegido “propiedad” más allá del valor
económico que la cosa en sí posea. Rechazo. Confirmación............................................................................... 137

IMPUTABILIDAD.
- Procesamiento. Agravio: alteración de las facultades producto de la ingesta de estupefacientes. Imputado
con comportamiento normal al identificarse con el personal policial y que desarrolló varias actividades:
conducción de motocicleta, intento de arrebato y forcejeo que impiden suponer una perturbación de la
conciencia. Confirmación.................................................................................................................................... 138

IMPUTACION ALTERNATIVA.
- Procesamiento por robo y, alternativamente, por encubrimiento. Agravio: Sobreseimiento por robo.
Imposibilidad de adoptar resoluciones de mérito sobre ambas hipótesis delictivas. Objeto procesal único.
Relación de alternatividad ente las figuras y, por consiguiente, de exclusión. Confirmación............................. 138

INJURIAS
- Inadmisibilidad. Escrito promotor del que se desprenden las frases que serían injuriosas, el momento y el
lugar en que se exteriorizaron, como también quién las habría proferido. Suceso debidamente descripto.
Defensa en juicio garantizada. Revocación. ........................................................................................................ 139

INSTIGACIÓN AL SUICIDIO.
- Sobreseimiento. Elementos de prueba que no permiten afirmar que el proceder de quien podría ser el sujeto
activo estuvo dirigido a convencer al otro de que cumpla acabadamente con la acción. Imputado que, al
tomar conocimiento de lo sucedido, adoptó las medidas necesarias para permitir mantener con vida a la
persona. Confirmación. Modificación de la causal de sobreseimiento (inc. 3 del art. 336 del C.P.P.N.). .......... 139

INSTRUCCIÓN DELEGADA (art. 196 del C.P.P.N.).


- Fiscal que devuelve las actuaciones pidiendo el archivo de las actuaciones respecto de las lesiones por las
cuales la damnificada no instara la acción y que el magistrado se declare incompetente para entender en las
amenazas simples. Magistrado que no esta de acuerdo. Titular de la acción penal que ha emitido su opinión
de forma favorable. Revocación. Declinar la competencia en favor de la Justicia Penal, Contravencional y
de faltas de esta ciudad. ....................................................................................................................................... 140
- Fiscal que pidió sobreseimiento. Magistrada que sobreseyó con el argumento que, ante el pedido de
desvinculación, sólo podía realizar un control de legalidad y expedirse. Querella que recurre. Magistrada
habilitada a reasumir la investigación debido al impulso inicial llevado a cabo por el fiscal. Actuaciones en
las que igualmente corresponde confirmar el temperamento adoptado............................................................... 141
- Recurso de apelación contra el auto que dispuso delegar la investigación. Fiscal que señala que el
magistrado ha ordenado y recibido una declaración testimonial. Inexistencia de agravio. Acto discrecional
del magistrado. Mal Concedido........................................................................................................................... 141

INSTRUCCIÓN SUMARIA. FLAGRANCIA (Art. 353 bis del C.P.P.N.)


- Fiscal que recurre la resolución por la cual el magistrado no hizo lugar a su pedido de que se declare rebelde
al imputado en virtud de las incomparencias a las citaciones cursadas y, una vez habido, se le reciba
indagatoria y continúe el trámite del sumario según las normas comunes. Trámite que acredita que, pese a
estar notificado personalmente, no se presentó en la fiscalía. Magistrado que debe proceder de acuerdo a lo
normado por el art. 289 del C.P.P.N. Revocación............................................................................................... 141
- Nulidad rechazada respecto de las audiencias recibidas en los terminos del art. 353bis C.P.P.N. Agravio:
violación al derecho de defensa por haberse presentado a la audiencias sin asistencia letrada. Rechazo.
Defensora e imputados que estaban debidamente anoticiados tanto por escrito como personalmente de la
posibilidad de presentarse con asistencia letrada o si ella. Confirmación. .......................................................... 142

LESIONES
- Culposas. Leves. Procesamiento. Colectivero que atropella a un peatón y causa lesiones a una pasajera al
frenar. Instancia de la acción por parte de una sóla de las damnificadas. Hecho único e inescindible.
Imputación de acciones múltiples. Lesiones acreditadas. Violación al deber objetivo de cuidado.
Confirmación. ...................................................................................................................................................... 142
- Culposas graves y leves en concurso ideal. Procesamiento. Paciente que se sometió a una cirugía estética.
Accionar negligente por parte del médico que provoco en la paciente graves daños corporales.
Confirmación. ...................................................................................................................................................... 143
- Leves. Procesamiento. Imputada que habría agredido a la víctima golpeándola en la cara con un elemento
contundente. Versión brindada por el damnificado y pruebas que dan sustento. Lesiones acreditadas.
Confirmación. ...................................................................................................................................................... 144
- Culposas. Procesamiento. Conductor de motocicleta que circulaba indebidamente por el carril exclusivo del
"Metrobus" y realiza una maniobra imprudente que determinó que colisionara con la parte posterior de un
ómnibus provocando que su acompañante cayera y sufriera lesiones graves. Proceder que aumentó

XIII
imprudentemente el riesgo propio de la conducción. Encausado con posición de garante respecto de su
acompañante. Confirmación. ...............................................................................................................................144
- Culposas. Graves. Procesamiento. Desempeño negligente de parte de los médicos cirujanos que operaron a
la paciente aparatándose de las reglas del buen arte de curar. Confirmación. .....................................................145
- Procesamiento (art. 89, en función de los arts. 92 y 80, inc. 9, del C.P.). Agente policial que lanzó gas
pimienta a pasajeros a bordo de un tren, en ocasión de una pelea suscitada en el interior del vagón. Ausencia
de agresión ilegítima. Reacción posterior de los pasajeros al lanzamiento del agente químico.
Confirmación. ......................................................................................................................................................146
- Culposas. Sobreseimiento. Complicaciones surgidas a raíz de intervención quirúrgica de cataratas. Pérdida
total de la visión de un ojo. Imposibilidad de garantizar el éxito terapéutico. Actuación según lex artis.
Paciente informado de los peligros que podrían sobrevenir con motivo de la intervención y aceptación.
Ausencia de violación al deber objetivo de cuidado. Confirmación....................................................................147
- Culposas. Procesamiento. Imputado que no respeta la prioridad de paso peatonal de la victima y su hijo y
los embiste provocándoles lesiones. Elementos de prueba suficientes para gravar la situación procesal.
Confirmación. ......................................................................................................................................................148
- Culposas. Procesamiento. Ambulancia que circulaba con sirena y balizas y embistió a una persona al
trasponer un semáforo en rojo. Vehículo que no tenía una emergencia asignada. Violación al deber objetivo
de cuidado. Confirmación. ...................................................................................................................................148
- Culposas. Procesamiento. Docente auxiliar de una sala maternal que omitió el deber de cuidado al no
prestar la debida asistencia a un niño de dos años y medio cuando se encontraba en el baño ya que tenía
dificultad en el control de esfínteres, provocando su omisión que éste se accidentara y sufriera heridas
graves en su cara. Lesiones acreditadas. Cuaderno de comunicaciones en el cual la madre había informado
en reiteradas oportunidades el problema específico del control de esfinteres. Verificación del nexo causal
entre la omisión y el resultado típico. Posición de garante. Confirmación. ........................................................149
- Sobreseimiento. Hecho que se inicia por prevención policial. Menor de edad que resulta lesionada cuando
cae por un techo de fibra de vidrio que cedió en un salón de fiestas donde se festejaba un cumpleaños.
Fiscal que recurre porque entiende que deben llevarse a cabo medidas de prueba. Revocación.........................150
- Culposas graves. Procesamiento de cirujanos y asistentes. Responsabilidad médica de los cirujanos.
Intervención quirúrgica a paciente en el hombro derecho cuando el destinado era el izquierdo. Ausencia de
supervisión de los estudios previos. Perjuicio en la funcionalidad del hombro. Negligencia e imprudencia.
Prueba suficiente. Asistente que no tenía el deber de controlar los antecedentes del paciente sino que
cumplió el rol de asistir y ejecutar las órdenes del cirujano. Principio de confianza. Confirmación respecto
de los cirujanos y revocación y sobreseimiento respecto del asistente. ...............................................................151

MALVERSACIÓN DE CAUDALES PÚBLICOS.


- Procesamiento por malversación de caudales públicos por equiparación. Imputada que en calidad de
depositaria judicial, no restituyó los objetos embargados, pese a la intimación cursada por parte del juez
comercial. Informe del oficial de justicia que corrobora lo sucedido. Elementos de prueba suficientes.
Confirmación. ......................................................................................................................................................153

MEDIDAS CAUTELARES.
- Inhabilitación provisoria para conducir todo tipo de automotores por el término de un año. Prudente y
razonable restricción para quien, en principio, ha sido imprudente en el uso del automotor y se comporta sin
tener en cuenta los valores salud y vida. Medida de carácter preventivo ante el resultado luctuoso.
Confirmación. ......................................................................................................................................................154
- Defensa que apela la inhibición general de bienes dispuesta. Imputado respecto del cual se ha dispuesto su
paradero y posterior comparendo hace un año y medio. Posible perjuicio o daño inminente que transformará
en tardío el eventual reconocimiento del derecho invocado como fundamento de la pretensión. Medida que
puede ser impuesta antes del procesamiento. Imputado que fue convocado en indagatoria. Confirmación........154
- Anotación de litis. Imputadas que ya han sido indagadas. Momento procesal oportuno. Verosimilitud del
derecho pretendido por la querella y el peligro en la demora acreditado. Confirmación. ...................................155
- Inhabilitación provisoria para conducir impuesta junto con el procesamiento por homicidio culposo. Planteo
de Inconstitucionalidad. Análisis que sólo debe ser abordado si corresponde aplicar la imposición. Situación
en la que no es necesario limitar el derecho a conducir.Revocación. ..................................................................155
- Imposición, en el auto de procesamiento, de abstenerse a ejecutar funciones en la P.F.A. con el empleo o
portación de armas. Normativa que resulta ser facultativa (art. 310 del C.P.P.N.). Necesidad de aplicarla en
forma restrictiva. Caso en el que no se justifica su aplicación. Revocación........................................................156
MEDIDAS DE PRUEBA.
- Magistrado que delegó en la querella la inspección de archivos de correo electrónico del imputado para
determinar si tenían determinados vocablos. Correo electrónico equiparable al epistolar. Correspondencia
privada. Tarea que incumbe sólo al juez. Vulneración al derecho de intimidad del imputado y al secreto de
las comunicaciones. Nulidad................................................................................................................................157
- Nulidad rechazada. Obtención de fotografías al imputado luego de recibirle declaración indagatoria pese a
su oposición. Imputado que es objeto de prueba. Ausencia de violación al derecho de defensa en juicio y a
la garantía constitucional que prohíbe la autoincriminación compulsiva. Validez. Confirmación......................158
- Nulidad rechazada. Reconocimiento fotográfico efectuado durante la declaración del damnificado.
Reconocimiento impropio. Manifestación informal de conocimiento. Confirmación.........................................159

XIV
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

MENOR
- Externación rechazada. Constancias incorporadas al expediente que desaconsejan la internación ya que el
menor cuenta con un proyecto de vida y un círculo familiar que le brindará contención (Ley 26.061 y
artículo 3.1 de la Convención sobre los Derechos del Niño). Revocación. Externación..................................... 160
- Víctima que denuncia en solitario un hecho de violencia familiar en la comisaría, pero luego no concurre a
la Oficina de Violencia Doméstica y a la fiscalía. Magistrado que omitió dar intervención a la Defensora de
Menores e Incapaces (Infracción al Art. 54 de la Ley Orgánica del Ministerio Público). Notificación
posterior al sobreseimiento de los imputados. Violación a las previsiones de los artículos 24 y 27 de la ley
26.061 y 17 de la ley 114 de la Ciudad de Buenos Aires. Nulidad del procedimiento desde que el
magistrado recibió la causa y no dio oportuna intervención a la Defensoría de Menores e Incapaces. .............. 160
- Externación rechazada. Agravio de la defensa: Menor que no se encuentra en situación de desamparo con
contención materna. No registro de intervenciones institucionales previas ni antecedentes penales. Núcleo
familiar de contención. Escolarización regular y acreditación de práctica deportiva. Inexistencia de situación
de vulnerabilidad que imponga la necesidad de su internación en salvaguarda de su interés superior (arts. 3
y 37 de la Convención sobre los Derechos del Niño). Revocación. Egreso. Disposición de que se le brinde
un tratamiento para evitar el consumo de sustancias psicoactivas, con la colaboración del equipo
interdisciplinario del juzgado interviniente. ........................................................................................................ 161

MUERTE POR CAUSA DUDOSA


- Archivo. Querella que recurre. Resolución prematura. Necesidad de ordenar una pericia médica tendiente a
determinar si el tratamiento posterior al acto quirúrgico fue o no el adecuado. Revocación. ............................. 162

NOTIFICACIONES ELECTRÓNICAS.
- Planteo de inconstitucionalidad rechazado por parte del querellante respecto de la Acordada de la CSJN nro.
38/13. Legitimación a la CSJN a reglamentar el uso de comunicaciones y domicilios electrónicos (ley
26.685). Cuestionamiento que no señala el perjuicio concreto y actual. Confirmación...................................... 162

NULIDAD
- Rechazada de la clausura de la instrucción y de la elevación a juicio. Posible violación a la garantía del
proceso. Defensa que había planteado la incapacidad sobreviniente (art. 77 del C.P.P.N.) del imputado.
Informe médico que da cuenta que las facultades mentales del imputado no encuadran dentro de la
normalidad. Necesidad de que el magistrado se expida. Revocación. Nulidad................................................... 163
- Rechazada. Contra el requerimiento de elevación a juicio por haberse omitido el pedido por parte del
imputado de ser oído en declaración indagatoria. Afectación a la intervención del imputado en el proceso
(art. 167 inciso 3°, C.P.P.N.). Revocación. Nulidad............................................................................................ 164
- Rechazada. Registro domiciliario. Orden de registro correctamente diligenciada. Imputada intentado ocultar
o deshacerse de papeles en otra vivienda, colaborando su morador para que el personal policial ingrese.
Validez del procedimiento, en los términos del artículo 184, inciso 5º, del Código Procesal Penal, máxime
teniendo en cuenta la orden de registro. Confirmación. ...................................................................................... 164
- Rechazada contra la resolución que no hizo lugar al pedido de la Defensa oficial de que se notifique
personalmente al imputado que su abogado de confianza esta inhabilitada y que tiene derecho a designar
otro defensor. Notificación que no fue cumplida con los recaudos del artículo 149 del C.P.P.N. Perjuicio
concreto. Afectación del derecho de defensa en juicio: posibilidad de designar letrado defensor de
confianza. Nulidad............................................................................................................................................... 165
- Rechazada. Respecto del decreto que corrió vista al fiscal para que se expida a los fines del art. 346 y del
requerimiento de elevación a juicio formulado en ése sentido. Actos procesales que tuvieron lugar cuando el
procesamiento no estaba firme y fue revisado por la Cámara. Invalidez. Revocatoria. Nulidad del decreto y
del requerimiento de elevación a juicio. Disidencia: Ausencia de lesión a la garantía de defensa en juicio.
Proceder que no se encuentra sancionado con la nulidad. Confirmación............................................................ 166
- Rechazada. 1) Requisa de rodado. Actuación prudente y razonable de los preventores en ejercicio de
funciones específicas. Detención efectuada con posterioridad a la comunicación con el Juzgado
interviniente. 2) Manifestación espontánea de los detenidos. Simple diálogo del prevenido con el preventor
no implica recibirle declaración. 3) Actas de detención y notificación de derechos. Cumplimiento de los
requisitos legales establecidos. Confirmación. .................................................................................................... 167
- Rechazada. Pericia psicológica llevada a cabo sobre el imputado con notificación cursada el mismo día de
su realización. Violación al derecho de defensa en juicio y a la garantía constitucional que prohíbe la
autoincriminación compulsiva. Discrecionalidad jurisdiccional que tiene límite en el derecho constitucional
que proscribe la autoincriminación. Revocación. Nulidad. ................................................................................. 168
- Rechazada. 1) Defensa que alega que el auto de clausura de la instrucción tiene como única prueba
declaraciones testimoniales viciadas de nulidad por las que se encuentra pendiente resolución de recurso de
queja ante la C.S.J.N. Alzada que efectuó control de legalidad de la prueba al confirmar el procesamiento y
homologar rechazo de nulidad respecto de las declaraciones testimoniales. La existencia de recursos
pendientes ante la C.S.J.N. no impide la elevación a juicio de las actuaciones. Confirmación. 2) Costas.
Letrados pertenecientes al Departamento de Práctica Profesional de la Facultad de Derecho de la U.B.A.
Equiparación a miembros del Ministerio Público de la Defensa. Exceptuados del pago de la costas.
Revocatoria.......................................................................................................................................................... 169

XV
- Rechazada. 1) Defensa a la que se le negó el acceso al expediente que corre por cuerda por no resultar en él
imputado. Proceso que conforma una unidad común a todos los imputados. Secreto sumarial finalizado.
Violación a la garantía de defensa en juicio. Revocatoria. Nulidad. 2) Inobservancia de principios legales en
el procedimiento. Apartamiento del juez. ............................................................................................................170
- Rechazada. Defensa que plantea la nulidad respecto del estudio psicológico y psiquiátrico realizado sobre el
estado de salud mental de su asistido toda vez que fue notificada una vez que la pericia fue llevada a cabo.
Violación al derecho de defensa garantizado (art.18 de la CN). Experticia inválida en los términos del (art.
167, inc. 3 del CPPN). Revocación. Nulidad.......................................................................................................171
- Rechazada “in limine” y recurrida por la defensa, respecto del requerimiento de elevación a juicio del Fiscal
que fuera presentado fuera de término. Termino ordenatorio para el Ministerio Público por no poder
prescindirse de su opinión. Confirmación............................................................................................................172
- Rechazada. Agravio de la defensa: 1) Ausencia de autopsia. Omisión que no conduce a invalidar lo actuado.
2) Falta de intervención de peritos de la defensa en diligencia. Medida ordenada cuando el imputado aún no
había sido convocado a prestar declaración indagatoria ni notificado de la existencia de la causa.
Confirmación. ......................................................................................................................................................173

PRESCRIPCIÓN DE LA ACCIÓN PENAL.


- Rechazada. Defraudacion por administración fraudulenta. Concepto jurídico indivisible. Hecho único con
distintas acciones de infidelidad o abuso. Unidad de designio. Cómputo a realizar a partir de la fecha del
perjuicio patrimonial. No transcurso del máximo de la pena prevista para el delito imputado desde la fecha
de rendición en que el imputado rindiera cuentas y el primer llamado a prestar declaración indagatoria.
Confirmación. ......................................................................................................................................................173
- Sobreseimiento. Quiebra fraudulenta. Acto de fraude atribuido que sería posterior a la declaración de
quiebra -sustracción de un rodado perteneciente al proceso falencial y enajenación-. Regla general: Término
que debe correr desde que queda firme el auto declarativo de quiebra. Caso en el que corresponde que el
plazo comience a ser contabilizado a partir del acto de fraude. Revocación. ......................................................175
- Rechazada. Uso de documento privado falso en concurso ideal con estafa en tentativa, en concurso real con
falsificación de documento privado. 1) Último acto positivo ejecutado en expediente civil: presentación de
escrito con firmas falsas. Fecha desde la que no transcurrió el plazo para que opere el instituto de la
prescripción. 2) Concurso ideal de delitos. Debe estarse al que establece la pena mayor. Único suceso.
Término de la prescripción que se rige por la unidad de hecho. Tesis del paralelismo: aplicación en
supuestos de concurso material de delitos. Confirmación. ..................................................................................176
- Procedencia. Co-imputado que es funcionario público. Suspensión del plazo que alcanza a todos los que
participan del suceso, mientras cualquiera se encuentre desempeñando un cargo público. Revocatoria. ...........176
- Procedencia. Agravio del fiscal: Aplicación de la doctrina del plenario "Prinzo". Rechazo. Postura que
dificulta la compatibilización del principio de inocencia con el derecho a ser juzgado dentro de un plazo
razonable. Rechazo por parte de la C.S.J.N. Caso en el que ha transcurrido desde el llamado a prestar
declaración indagatoria el máximo de la pena prevista para el delito imputado sin que se produzcan actos
con carácter interruptivo. Confirmación. Disidencia: Caso en particular en que sí puede aplicarse la doctrina
del plenario "Prinzo". Necesidad de aplicar un criterio de razonabilidad. Hecho que interrumpiría que
resulta ser un suceso que forma parte del objeto procesal de la causa en la que deben resolver el recurso y no
el de una investigación totalmente ajena a la aquí sustanciada. Paralización del trámite que no importa un
avasallamiento de la garantía de defensa en juicio. Revocatoria. ........................................................................177
- Extinción de la acción y sobreseimiento. Damnificada nacida en 1986 que alcanzó la mayoría de edad en el
2004 y denuncia, en el año 2014, por abuso sexual, al concubino de su madre x hechos ocurridos entre el
año 1993 y 2000. Fiscalía que se agravia debido a que la acción penal no estaría prescripta ya que
corresponde contar el término a partir de que la menor alcanzó la mayoría de edad, ello de conformidad con
lo establecido por la ley 26.705. Rechazo. Imposibilidad de aplicar la normativa aludida a sucesos ocurridos
cuando la norma no se encontraba vigente. Afectación al principio de irretroactividad de la ley penal que
sólo admite excepción en el supuesto de ser la norma posterior más benigna. Caso al que no corresponde
aplicar la excepción. Confirmación......................................................................................................................177
- Extinción de la acción y sobreseimiento. Lesiones dolosas leves en concurso ideal con amenazas simples.
Agravio del fiscal: Aplicación de la agravante por la intervención en el hecho de un menor de edad.
Rechazo. Elementos que no permiten demostrar que la imputada mayor tuvo intención de deslindar la
responsabilidad en la menor. Transcurso del plazo del artículo 62, inciso 2° del CP, sin interrupciones.
Confirmación. Disidencia: Agravante que se aplica por la sóla intervención del menor de edad. No
transcurso del máximo de la pena prevista. Revocación......................................................................................178
- Extinción de la acción penal por prescripción y sobreseimiento del imputado. Falso testimonio. Fiscal que
recurre. Imputado que prestó declaración varias veces. Momento de consumación del falso testimonio:
Individualización. Transcurso en exceso del plazo previsto por el inc. 2 del art. 62 del C.P. Confirmación. .....179

PRISIÓN PREVENTIVA
- Rechazada. Escala punitiva que no admite la excarcelación. Inexistencia de peligros procesales. Imputado
que no registra condenas ni excarcelaciones anteriores ni rebeldías. Confirmación. Imposición de una
prohibición de acercamiento respecto de la víctima y de mantener cualquier tipo de contacto con ella.............180

PROCEDIMIENTO POLICIAL
- Nulidad rechazada. Acta que da cuenta que el accionar policial tuvo su motivo en el anoticiamiento que
diera una persona que no fuera identificada. Personal policial que debuto la marcha del vehículo señalado
para identificar a sus ocupantes y, al palparlos a uno de ellos, determinó que estaba armado. "Notitia

XVI
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

criminis" que habilitó el accionar policial y que se justifica teniendo en cuenta en el lugar se estaba llevando
a cabo un clásico de futbol. Confirmación. ......................................................................................................... 181

PROCESAMIENTO.
- Coimputados por desobediencia a la autoridad y, uno de ellos, en concurso real con cohecho. I-
Desobediencia: Atipicidad. Falta de acatamiento a la orden propia de detención. Imputados que no
emplearon fuerza o intimidación contra la autoridad pública. IICohecho: Elementos de prueba insuficientes.
Revocación. Sobreseimiento (art. 336, inciso 2°, del CPPN). Disidencia parcial: Elementos de prueba
suficientes para tener por probado el cohecho. Confirmación parcial................................................................. 182
- Abuso sexual agravado por acceso carnal. Nulidad introducida como agravio de la apelación. Imputado que
manifestó en la indagatoria ser menor de edad. Necesidad de que las actuaciones tramiten ante la Justicia de
menores en razón de la especialidad. Decisión que debe extenderse al co-imputado para que sea el
magistrado competente quien valore todos los elementos reunidos y adopte las resoluciones
correspondientes. Nulidad. .................................................................................................................................. 183

PROPIEDAD INTELECTUAL (LEY 11.723).


- Procesamiento. CDs secuestrados, reproducciones ilegales, con láminas apócrifas. Afectación al bien
jurídico protegido. Agravio de la defensa: error de prohibición invencible. Imputado extranjero con pocos
años de residencia que desconocía que su accionar era ilícito. Rechazo. Error vencible. Tipicidad.
Confirmación. ...................................................................................................................................................... 184

QUERELLANTE
- Rechazo de legitimación de la Procuración Penitenciaria de la Nación. Incendio ocurrido en un instituto de
menores provocado por quien fuera sobreseído por extinción de la acción penal por fallecimiento.
Actuaciones en donde se investiga la eventual responsabilidad de los funcionarios y empleados del Centro
"Luis Agote" en relación a la muerte. Madre del menor que ha sido legitimada. Petición que no encuentra
lineamiento en lo contemplado por los artículos 82 y 82 bis del Código Penal. No afectación a intereses que
aparezcan comprendidos en el grupo de derechos de incidencia colectiva. Confirmación. ................................ 185
- Rechazo de legitimación activa. Imputaciones recíprocas por un mismo hecho o por hechos conexos.
Incompatibilidad de roles. Improcedencia a pesar que aún no se ordenó la indagatoria de quien pretende ser
legitimado. Confirmación.................................................................................................................................... 186
- Rechazo de legitimación. Damnificada: persona jurídica. Acción "ut singuli": procede excepcionalmente en
casos de lesión o perjuicio directo sobre alguno de los socios. Conductas dentro de una sociedad comercial
atribuidas a su presidente con consecuencias patrimoniales que perjudicarían al otro socio. Revocatoria.
Procedencia.......................................................................................................................................................... 187
- Rechazo de legitimación activa. Copropietario, por derecho propio, que solicita ser legitimado en la
eventual administración fraudulenta del administrador del consorcio. Caso en el que no se configura la
excepción para hacerlo sin el respaldo de los copropietarios. Confirmación. ..................................................... 187
- Rechazo de legitimación activa. 1) Presentación que adolece de defectos formales. Ausencia de indicación
de las personas imputadas ni descripción somera del hecho. 2) Coordinador de seguridad en espectáculos
futbolísticos del Ministerio de Seguridad de la Nación. Falta de demostración de la condición de particular
ofendido. Intereses aludidos garantizados por la actuación del Ministerio Público Fiscal. Confirmación. ........ 188
- Rechazo de legitimación. Víctima que desde el siniestro se encuentra en estado de inconciencia, coma
farmacológico, asistida por respiración mecánica, pronostico reservado y riesgo de vida. Damnificada no
declarada aún incapaz en sede civil.Imposibilidad física y mental de actuar que permite asignarle un
tratamiento similar a la incapacidad. Revocación. Legitimación a los padres. ................................................... 189

QUIEBRA FRAUDULENTA
- Procesamiento. Tipo penal. Ausencia de elementos para tipificar los hechos como una quiebra fraudulenta.
Conducta que debe ser calificada como insolvencia fraudulenta. Confirmación. Cambio de calificación:
Insolvencia fraudulenta........................................................................................................................................ 189
- Sobreseimiento. Enajenación de bienes con anterioridad al período de sospecha. Imposibilidad de descartar
una conducta típica debido a que habría elementos para afirmar que el imputado tenía conocimiento de la
situación de insolvencia y, a pesar de ello, realizó la venta. Revocación............................................................ 190
- Incompetencia. Domicilio legal en esta ciudad "ficticio". Sede de los negocios y administración de los
bienes que se desarrolla desde el inicio en la Provincia de Buenos Aires. Juzgado de Garantías de la Pcia. de
Buenos Aires........................................................................................................................................................ 191

REBELDÍA.
- Orden de captura. Agravio de la defensa: Constatación de domicilio no realizada y notificación no cursada
al domicilio informado. Imposibilidad de afirmar que el imputado se ausentó voluntariamente. Rechazo.
Imputado notificado inicialmente de los derechos y garantías, del inicio de la investigación, el juzgado
interviniente, la defensoría que lo asistiría y de la prohibición de cambiar su domicilio y ausentarse del país
sin previo aviso y la obligación de presentarse a la primera citación que recibiere. Constatación que no se
realizó debido a la presentación en el expediente de la cuñada que informó el domicilio correcto en donde se
llevó a cabo el informe socio-ambiental. Imputado habido en ocasión de realizar trámites ante el Registro
Nacional de Reincidencia, ocasión en la que aportó otro domicilio en donde luego tampoco se lo halló.

XVII
Elementos que permiten sostener que hubo voluntad de sustraerse del accionar de la justicia. Confirmación.
Disidencia parcial: Imputado notificado de la existencia de la causa y sus derechos y obligaciones pero sin
informarle cuál sería la fecha de la citación. Domicilio no constatado. Necesidad de adoptar una medida
menos gravosa. Revocación.................................................................................................................................192
- Declaración de contumacia realizada sin que el imputado haya tomado conocimiento, en algún momento, de
la existencia del sumario. Citación por edictos. Improcedencia. Imposibilidad de afirmar que el imputado se
ha sustraído del accionar de la justicia. Revocación. ...........................................................................................193
- Pedido de captura. Imputado que no fue puesto en conocimiento de la nueva radicación de la causa y de la
designación de nuevo defensor. Ausencia de los requisitos habilitantes para disponer la rebeldía (Art. 288,
C.P.P.N.). Medidas alternativas menos gravosas. Revocación. ...........................................................................193

RECURSO DE APELACIÓN.
- Contra el auto que procesó al imputado por incendio culposo. Argumentos vertidos por la defensa que no
son una crítica negativa válida. Afirmaciones de las que no explica sus premisas. Falta de motivación. Art.
438, C.P.P.N. Mal concedido...............................................................................................................................193
- Contra el auto por el que el magistrado rechazó el planteo de nulidad introducido por la fiscalía.
Argumentos vertidos en el escrito de apelación que no indican el perjuicio que habilite la intervención de la
cámara. Mal concedido. .......................................................................................................................................194
- Contra el procesamiento sin prisión preventiva, por lesiones leves en concurso real con coacción. Defensa
que impugna la resolución luego de cuatro horas del plazo de gracia, sin haber aducido razones de fuerza
mayor. Extemporáneo. Mal concedido. ...............................................................................................................195
- Presentado sin la firma del querellante y sólo con la del letrado patrocinante. Imposibilidad de actuar en
forma autónoma por parte del patrocinante. Mal concedido................................................................................195
- Respecto de decisiones adoptadas por el magistrado correccional en la etapa de juicio oral. Competencia de
la Cámara Nacional de Casación Penal. Mal concedido......................................................................................196
- Contra la resolución que rechazo " in limine" el pedido de nulidad presentado por la defensa. Recurrente
que no refuta las argumentaciones del magistrado. Falta de motivación (art.438 C.P.P.N.). Mal concedido. ....196

RECURSO DE CASACIÓN.
- Contra la resolución que confirmó el rechazo al pedido de excarcelación. Equiparación a sentencia
definitiva. Perjuicio de imposible reparación ulterior. Concesión. ......................................................................196
- Interpuesto por la querella contra la resolución confirmó el sobreseimiento. Concesión. Disidencia: Doble
instancia satisfecha. Discrepancias a cuestiones ya analizadas por la cámara y limitadas exclusivamente al
modo en que se valoraron los hechos y la prueba. Opinión diversa que no resulta novedosa. Decisión
jurisdiccional válida. Rechazo. ............................................................................................................................197
- Contra la resolución que rechazó la excarcelación. Resolución equiparable con una sentencia definitiva por
causar un gravamen de imposible o tardía reparación. Concesión. .....................................................................198
- Contra la resolución que rechaza el planteo de nulidad de la notificación del auto de procesamiento.
Resolución que no es definitiva ni equivalente sino que implica la continuación del proceso. Rechazo. ...........198
- Contra la resolución dictada por el tribunal, en cuanto se resolvió no hacer lugar al pedido de postergación
planteado por la defensa. Planteo en cuanto a una confusa nulidad, no encuadra en la hipótesis del art. 446 y
457 del C.P.P.N., Improcedente...........................................................................................................................198
- Contra el auto que revoca la falta de mérito, dispone el procesamiento sin prisión preventiva y medida de
cautela real. Improcedencia. Carácter no definitivo del auto de procesamiento. Rechazo. .................................199
- Rechazo al pedido de que el recurso de casación interpuesto respecto de la revocatoria de la excarcelación
dictada por la Cámara tenga efecto suspensivo. Imputado que fue inmediatamente detenido. Caso en el que
no se aplica el efecto suspensivo por estar así previsto como excepción en la normativa procesal (art. 332
del C.P.P.N.) Existencia de riesgos procesales. Confirmación. Disidencia: Excepción prevista en el art. 332
del C.P.P.N que sólo se aplica para los recursos de apelación. Aplicación de una interpretación pro homine
y pro libertatis. Necesidad de contar con un doble conforme para restringir nuevamente la libertad.
Revocación. Libertad del imputado. ....................................................................................................................199

RECURSO DE QUEJA.
- Por denegación y retardo de justicia interpuesto por el pretenso querellante. Letrado que escoge un
procedimiento que no se ajusta a las previsiones legales. Ausencia de pedido de pronto despacho.
Inexistencia de planteo pendiente de respuesta jurisdiccional. Actuaciones que se encuentran a estudio ante
la Cámara Federal de Casación Penal en virtud de los recursos extraordinarios deducidos por el propio
incidentista. Rechazo. ..........................................................................................................................................200
- Contra el auto que no hizo lugar al recurso de apelación interpuesto respecto de la resolución por la cual el
magistrado señaló que no había mérito para procesar o sobreseer al imputado y que debían llevarse a cabo
medidas de prueba. 1) Impugnación que no esta prevista para el imputado. Ausencia de gravamen.
Resolución que es provisoria. 2) Principio de imparcialidad no violentado. Fiscal que evaluará,
eventualmente, si en el marco de la investigación que tiene delegada, considera que son útiles y pertinentes
las medidas sugeridas por el juez. Rechazo. ........................................................................................................201
- Contra el auto que declaró inadmisible el recurso de apelación interpuesto respecto del llamado a prestar
indagatoria. Medida discrecional para el juez. Ausencia de gravamen. Improcedencia. Rechazo. .....................201
- Contra el recurso de apelación rechazado presentado respecto de la negativa al pedido formulado por el
fiscal para que se reciba declaración indagatoria a quienes fueran imputados en el marco de una
investigación cuya instrucción le fuera delegada. Ausencia de agravio. Acto discrecional del juez y no
encuadrado en los supuestos del art. 449, del C.P.P.N. Rechazo.........................................................................202

XVIII
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

RECUSACIÓN.
- Querella que solicita la recusación del magistrado por haber resuelto con anterioridad en las actuaciones el
sobreseimiento del imputado. Planteo que no encuentra adecuación en ninguna de las causales previstas en
el art. 55 del C.P.P.N. Opiniones vertidas dentro de las obligaciones funcionales de los magistrados.
Improcedencia. Rechazo...................................................................................................................................... 202

REQUISA.
- Nulidad rechazada. Imputados que al notar la presencia policial aceleraron la marcha. Interceptación con
objeto de identificación. Visualización de arma dentro del vehículo. Justificación de la detención y requisa.
Confirmación. ...................................................................................................................................................... 203

RESISTENCIA A LA AUTORIDAD.
- Procesamiento. Agravio: Atipicidad porque desobedeció la orden de su propia detención y su accionar sólo
configura una infracción de tránsito. Hecho típico. Imputado que continuó su marcha y dirigió su vehículo
contra el personal policial, quien debió retroceder para no ser embestido. Confirmación sin perjuicio de la
calificación que en definitiva corresponda. ......................................................................................................... 204
- Procesamiento. Huída a bordo de motocicleta. Atipicidad. Falta de acatamiento de la propia orden de
detención sin ejercicio de violencia. No configuración de actuar delictivo en términos del art. 239 del C.P.
Revocatoria. Sobreseimiento. .............................................................................................................................. 204

RETENCIÓN INDEBIDA.
- Procesamiento. Administrador que no restituyó los libros relativos al manejo del Consorcio de Propietarios
pese a los diversos reclamos. Notificación fehaciente de su remoción del cargo e intimación de restitución
de la documentación. Confirmación. Modificación del monto del embargo....................................................... 205

ROBO
- En tentativa. Procesamiento. Agravio de una de las defensas: No participación en el hecho e
inimputabilidad debido al estado de intoxicación en el que estaba por el consumo de drogas y alcohol.
Elementos de prueba suficientes para afirmar que participó en el hecho. Coautoría. Accionar que da cuenta
que podía dirigir sus acciones. Informe médico que da cuenta que no tenía sus facultades mentales
afectadas. Confirmación. Disidencia: Necesidad de profundizar la investigación. Revocación. Falta de
mérito................................................................................................................................................................... 205
- Agravado por su comisión con armas de fuego, en concurso real con abuso de armas y tentativa de
homicidio criminis cuasae, agravado a su vez por su comisión con un arma de fuego, e idealmente con el de
aborto sin consentimiento de la mujer, que a su vez concursa realmente con el delito de tenencia de un arma
de fuego de uso civil, sin la debida autorización legal y bajo la misma regla con el de portación ilegítima de
arma de fuego de uso civil. 1) Procesamiento: Elementos de prueba suficientes para imputar los hechos a la
totalidad de los imputados. Ingreso al inmueble con fines de robo con armas de fuego cargadas y aptas para
disparar, que permite presumir que existió acuerdo entre los imputados de usarlas para lograr la impunidad.
Confirmación. 2) Prisión preventiva: Admisible y acertadamente impuesta. Confirmación. Disidencia
parcial: No apelable. Erróneamente concedida.................................................................................................... 206
- En poblado y en banda. Procesamiento. Sustracción de dinero a la víctima cuando salía del banco.
Elementos de prueba suficientes que permiten tener por sí solos por probada su autoría. Imputada, a su vez,
condenada por similares hechos en los que se utilizó un similar modus operandi. Confirmación...................... 208
- Simple en grado de tentativa. Procesamiento. Defensa que alega que el imputado no comprendió la
criminalidad de sus actos debido a que se encontraba alcoholizado. Imputado que se negó a la extracción de
sangre y a la entrega de orina. Acta de detención que da cuenta del estado normal del inculpado.
Confirmación. Disidencia: Fotografías agregadas en las que se observa al imputado en una posición que
permite dudar de su estado. Informe sociambiental que da cuenta de su adicción al alcohol. Ausencia de
certeza apodíctica. Revocatoria. Sobreseimiento. ............................................................................................... 208
- Agravado por el empleo de un arma de fuego. Procesamiento. Imputado indagado por el robo y en forma
alternativa por encubrimiento. Elementos insuficientes para considerarlo autor del robo. Prueba suficiente
para procesarlo por encubrimiento simple. Imposibilidad de imputarle la figura agravada "ánimo de lucro"
debido a que se requiere la comprobación de la finalidad lucrativa adicional al mero propósito de uso.
Confirmación pero por encubrimiento (Art. 277, inciso 2,C.P. ). Disidencia parcial: Elementos suficientes
para procesarlo por encubrimiento agravado toda vez que el uso efectivo del bien constituye el plus
configurativo del ánimo de lucro. Confirmación pero por encubrimiento agravado por ánimo de lucro............ 209
- Agravado por el uso de arma. Procesamiento. Agravio de la defensa: utilización del arma no demostrada.
Dichos del damnificando que dan cuenta del empleo de un cuchillo. Informe médico que demuestra que la
víctima presentó un corte en el cuello. Confirmación. ........................................................................................ 211
- Agravado. Procesamiento. Bicicleta asegurada con una liga metálica en la vía pública. Víctima no
individualizada: Hecho demostrado a través de varios elementos de prueba. Confirmación. Disidencia
parcial: figura no agravada. Objeto sustraído que no es considerado vehículo. Robo simple............................. 211
- En grado de tentativa en concurso real con homicidio en tentativa. Agravio de la defensa: cambio de
calificación por ausencia de dolo homicida. Rechazo. Confirmación. ................................................................ 212

XIX
- En grado de tentativa. Procesamiento. Agravio: Aplicación del principio de insignificancia. Intento de
sustracción de tres envases de shampoo de un supermercado. Hecho en el que hubo violencia que ocasionó
lesiones al vigilador del local. Acción que no resulta insignificante desde la perspectiva jurídico penal.
Confirmación. ......................................................................................................................................................213
- Procesamiento. Imputado que fue detenido al ser reconocido por personal policial a través de una filmación
y de fotografías plasmadas en Facebook. Agravio: Elementos de prueba insuficientes. Procedencia del
agravio. Necesidad de tomar declaración a las victimas del hecho, de llevar a cabo ruedas de
reconocimiento. Revocación. Falta de mérito......................................................................................................213
- Con arma. Procesamiento. 1) Alegada legítima defensa por parte de la imputada. Imputada que no actuó en
legítima defensa sino que atacó al damnificado para impedir que la detuviera utilizando una botella. 2)
Arma impropia. Utilización de botella para intentar golpear en el cuerpo al damnificado. Mayor poder
ofensivo logrado y peligro corrido por la víctima inmediatamente después de cometido el
desapoderamiento. 3) Cuestionamiento de la calificación legal. Imposibilidad de escindir el robo y la
supuesta resistencia. Violencia ejercida que forma parte de la modalidad típica del art. 164 del C.P. e integra
el desapoderamiento agravado. Confirmación.....................................................................................................214
- Agravado en poblado y en banda. Procesamiento. Robo de cables de servicio telefónico y de Internet.
Elementos de prueba suficientes para agravar la situación procesal. Calificación que no requiere los
presupuestos de la asociación ilícita sino sólo una "coautoría funcional" para ser aplicada. Intervención de
tres o más personas en el codominio del hecho, división de roles y decisión previa y conjunta.
Confirmación. Disidencia parcial: Exclusión de la agravante. Concepto de banda: Necesidad de que los
intervinientes integren una asociación ilícita. Confirmación. Modificación de la calificación por la de robo
simple...................................................................................................................................................................215
- Agravado con escalamiento. Procesamiento. Omisión de describir en la declaración indagatoria de qué
manera y sobre qué cosa se ejerció violencia para calificar el hecho como robo. Confirmación. Modificación
legal por la de hurto con escalamiento en tentativa .............................................................................................217
- Simple en tentativa. Procesamiento. Imputado que abrió la ventanilla trasera de una camioneta para intentar
ejecutar un apoderamiento. Cese del accionar ante la presencia del móvil policial. Ausencia del elemento
típico "fuerza en las cosas". Confirmación. Modificación de la calificación legal por la de hurto simple en
tentativa................................................................................................................................................................217
- Agravado por uso de arma en tentativa (arts. 42, 166 inciso 2°, C.P.P.N.). Agravio de la defensa: Elementos
insuficientes para considerar que se utilizó un arma. Víctima que dio una descripción detallada del elemento
que se habría utilizado. Imputado que pudo descartarse del arma en el intento de huída. Confirmación.
Disidencia: Elemento no secuestrado. Testimonio de la damnificada insuficiente para dar por cierta su
existencia. Exclusión de la agravante. Confirmación parcial. Robo....................................................................218

SECRETO PROFESIONAL.

- Procesamiento. Perito de parte que infringe su obligación de guardar secreto, al poner en conocimiento de
medios periodísticos precisiones sobre lo debatido en la deliberación y su posición científica sobre el tema,
ventilando información confidencial por televisión. Perito designado por resolución judicial o propuestos
por las partes: equiparación a funcionarios públicos con las obligaciones previstas en los arts. (arts.262, 266
y cc. del Código Procesal Penal). Confirmación..................................................................................................219

SOBRESEIMIENTO.
- Lesiones leves ocasionadas a su pareja. Inexistencia de elementos de juicio. Estado de duda en la
reconstrucción histórica del hecho y falta de prueba. Confirmación. ..................................................................219
- Por inimputabilidad. Legítima defensa de un tercero, por parte de personal policial (art. 34, inc. 7, en
función de los puntos a) y b) del inc.6 del C.P.). Muerte del imputado que no depuso su acción de tomar de
rehén a su ex pareja, la roció con alcohol, amenazó con darle muerte apuntándola con un arma. Personal
policial que actuó conforme el protocolo previsto para "Situación de crisis con rehenes o atrincheramiento
de personas armadas que generen situaciones de peligro contra la seguridad pública". Exclusión de la
irracionalidad del medio empleado. Confirmación..............................................................................................220
- Magistrado que se limita a citar extractos del informe médico y refiere coincidir con el temperamento
liberatorio propiciado por el Ministerio Público. Resolución no fundamentada. Acto jurisdiccional inválido.
Nulidad.................................................................................................................................................................221
- Por atipicidad (inc. 3 del art. 336. del C.P.P.N). Magistrado que advirtió que la acción estaría prescripta
pero dispuso la desvinculación por atipicidad. Decisión que no se ajustó al orden de prelación dispuesto por
el art. 337 del C.P.P.N. Causal de extinción de la acción penal: de orden público y debe ser declarara de
oficio. Transcurso del máximo de la pena prevista para el delito imputado. Confirmación, con la salvedad
de que lo será en los términos del inc. 1 del art. 336. C.P.P.N. Revocar e imponer costas en el
orden causado.......................................................................................................................................................221

SUSPENSIÓN DE JUICIO A PRUEBA.


- Rechazada. Magistrado que no dió cumplimiento con la audiencia prevista en el art. 293 del C.P.P.N.
Obligatoriedad. Caso en el cual no se advierte una improcedencia manifiesta del beneficio solicitado.
Nulidad.................................................................................................................................................................223
- Rechazada por considerar el magistrado que debe ser solicitada luego del requerimiento de elevación a
juicio. Oportunidad para solicitarla: cualquier momento del proceso a partir de la formulación de la
imputación en la declaración indagatoria.Revocación.........................................................................................224

XX
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

- Rechazada. Requerimiento de elevación a juicio por dos hechos, uno de los cuales, el monto de punibilidad
previsto en la calificación impediría la concesión del beneficio solicitado (Art. 76 bis, del C.P.). Oposición
fundada del fiscal. Doctrina "Góngora". Necesidad de no contrariar las obligaciones que asumió el Estado al
aprobar la "Convención de Belem Do Pará" por resultar los hechos calificados como de violencia contra la
mujer. Confirmación............................................................................................................................................ 224
- Revocada. Agravio de la defensa: decisión perjudicial tomada sin oír argumentos y aplicando rigorismo
formal. Imputado que no se presentó en varias oportunidades a pesar de estar legalmente notificado.
Incumplimiento a las previsiones del art. 27 C.P.N. Confirmación. ................................................................... 225
- Revocada. Imputado que habría incumplido las reglas de conducta fijadas por el Tribunal Oral, no
asistiendo al "Programa de Atención a Hombres Violentos", al "Patronato de Liberados", ni a las audiencias
fijadas en los términos del art. 515 C.P.P.N. a pesar de estar personalmente notificado en varias
oportunidades. Confirmación. ............................................................................................................................. 225
- Rechazo. Negativa por haber sido presentada durante la etapa de instrucción y por no tener la firma del
imputado. Actuaciones en las que se ha procesado al imputado por robo en tentativa. Ausencia de norma
que ponga un límite al momento procesal oportuno para solicitarla. Revocación. Necesidad de llevar a cabo
la audiencia establecida en el Art. 293, C.P.P.N. ................................................................................................ 225
- Rechazada. Lesiones culposas. Fiscal que se opuso debido a que el imputado no ofreció autoinhabilitarse.
Dictamen que no supera el control de logicidad y fundamentación. Apartamiento de la doctrina "Acosta" y
"Norverto" de la C.S.J.N. Magistrado que fundó su rechazo en base a lo dictaminado por el fiscal.
Revocación. ......................................................................................................................................................... 226
- Rechazada. Violencia de género. Oposición del fiscal a la concesión. Correcta evaluación de los
lineamientos previstos por la "Convención Interamericana para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia
contra la Mujer - Convención de Belém do Pará" por parte del magistrado. Imputación de tres hechos,
desobediencia del imputado a la prohibición de acercamiento impuesta y situación descripta por la OVD
como de riesgo para la víctima. Inviabilidad del instituto. Confirmación........................................................... 226
- Revocación. Imputado que incumplió las obligaciones asumidas en una primera oportunidad. Defensa que
solicitó el reinicio de la supervisión y magistrado que hizo lugar a su pedido. Informe negativo respecto del
cumplimiento de lo impuesto. Fiscal que solicitó la revocación, no presentándose el imputado a la audiencia
fijada para escucharlo a pesar de haber sido notificado personalmente. Temperamento ajustado a derecho.
Confirmación. ...................................................................................................................................................... 227
- Rechazada por el magistrado por no tener la solicitud la firma del imputado. Escrito firmado por el defensor
en calidad de representante del imputado con ofrecimiento de reparación del daño y alegando que no fue
suscripta por cuestiones de salud del imputado. Revocatoria. Disidencia: petición que debe formularse una
vez que la instrucción se encuentre completa y después del auto o decreto de elevación a juicio.
Confirmación. ...................................................................................................................................................... 227

TRÁFICO DE MEDICAMENTOS O MERCADERÍAS PELIGROSAS.


- Procesamiento. Publicación de producto en revista. Circunstancia que demuestra la comercialización para la
venta y asignación de efectos terapéuticos a una sustancia sin certificación ni aprobación. Ausencia de
defectos de fundamentación. Auto debidamente motivado. No vulneración de la garantía de defensa en
juicio por no haberse ampliado la indagatoria para hacerle conocer las nuevas pruebas incorporadas. Base
fáctica que ha permanecido incólume. Confirmación. ........................................................................................ 228

USO DE DOCUMENTO PÚBLICO FALSO.


- Procesamiento. Imputado que exhibió en un control policial una licencia de conducir apócrifa. Agravio de
la defensa: Atipicidad. Documento no idóneo para inducir a error a sujetos capacitados especialmente para
detectar la validez o invalidez. Revocación. Sobreseimiento. Disidencia: Afectación al bien jurídico fe
pública. Pericia que determinó que se intentó imitar un documento verdadero. Confirmación. ......................... 229

USURPACIÓN.
- Sobreseimiento. Resolución inválida por no ser el resultado de una derivación razonada de la prueba.
Hechos que involucrarían una situación de violencia de género a través del ejercicio de violencia
económica. Nulidad. ............................................................................................................................................ 230

VIOLENCIA DE GÉNERO.
- Violencia doméstica. Privación ilegal de la libertad agravada en concurso ideal con el de lesiones leves.
Procesamiento. Hijo impide que su madre salga de su vivienda durante varios meses y la golpea. Informe
elaborado por la Oficina de Violencia Doméstica que calificó la situación como de Alto riesgo sugiriendo la
expulsión del hijo de la vivienda. Elementos para agravar la situación procesal. Confirmación........................ 231
- Violencia domestica. Lesiones graves agravadas. Amenazas coactivas. Procesamiento. Imputado que habría
amenazado de muerte, tomado del cabello y propinado golpes de puño y patadas a su madre. Informe
médico practicado, el cual da cuenta de la existencia de lesiones compatibles con la mecánica del suceso
denunciado. Elementos de prueba suficientes. Confirmación. ............................................................................ 231
- Violencia doméstica. Amenazas agravadas por su comisión con armas, en concurso real con lesiones
agravadas. Procesamiento. Situación de violencia familiar. Testimonios suficientes para agravar la situación
personal del imputado. Informe que refiere que la damnificada se encuentra en una situación de "altísimo
riesgo". Necesidad de tener en cuenta las pautas establecidas por las leyes 26.485 (Protección Integral de las

XXI
Mujeres) y 25.417 (Protección contra la Violencia Familiar) y, la Convención de Belem do Pará
(Convención Interamericana para prevenir, sancionar y erradicar la violencia contra la mujer).
Confirmación. ......................................................................................................................................................232
- Violencia doméstica. Procesamiento por abuso sexual y coacción. Aplicación de las pautas establecidas en
el artículo 16 de la ley n° 26485 de Protección integral a las mujeres y de los compromisos internacionales
asumidos. Informe emitido por la O.V.D. que refiere que la damnificada se encuentra en situación de riesgo
alto. Elementos de prueba suficientes para confirmar el procesamiento. Confirmación. ....................................233
- Violencia doméstica. Lesiones dolosas leves agravadas por el vínculo. Procesamiento. Derecho de
corrección de los padres sobre sus hijos menores contemplado en el art. 278 del Código Civil que ha sido
ejercido en forma desproporcionada provocando daños en el cuerpo o en la salud. Confirmación. ...................233
- Violencia doméstica. Procesamiento por lesiones leves (tres hechos), amenazas (dos hechos) y
desobediencia (dos hechos) y sobreseimiento por hurto y sustracción de menores. Agravio de la defensa:
Violación al principio ne bis inidem por tratarse de un único hecho con multiplicidad de conductas.
Rechazo. No superposición de conductas de acuerdo a los tipos penales imputados. Desobediencia:
Atipicidad. Imputado que no fue notificado de la prórroga de la orden de prohibición de acercamiento.
Confirmación parcial. Procesamiento por lesiones y amenazas...........................................................................234
- Violencia doméstica. Lesiones graves agravadas por el vínculo. Procesamiento. Conducta de la imputada
que excede el derecho de corrección que el artículo 278 del Código Civil otorga en ejercicio de la patria
potestad. Confirmación. .......................................................................................................................................236
- Lesiones leves dolosas agravadas por haber sido cometidas contra una mujer. Procesamiento. Lesiones
producidas en el marco de un altercado por una supuesta deficiente atención de un paciente en un control de
salud. Elementos de prueba suficiente para confirmar el procesamiento. Necesidad de tratar la calificación
legal asignada al hecho en virtud de que, ante un eventual pedido de suspensión de juicio a prueba, el
beneficio podría ser denegado por aplicación de la doctrina de la C.S.J.N. Violencia de género: concepto.
Caso en el que la violencia no está motivada en la condición femenina de la damnificada. Confirmación
parcial. Lesiones...................................................................................................................................................237
- Violencia doméstica. Lesiones y amenazas coactivas. Procesamiento. Lesiones provocadas a ex pareja.
Informe del medico legista que acredita las lesiones. Relevancia de los dichos de la damnificada ante la
O.V.D. Confirmación...........................................................................................................................................237
- Violencia doméstica. Lesiones calificadas por ser la víctima ex pareja del imputado. Agravios de la defensa:
ausencia de dolo en el accionar. Imputado que adujo defenderse por la agresión recibida por el hijo de la
damnificada. Testigos presenciales que avalan la versión del imputado. Revocación. Sobreseimiento..............238
- Violencia doméstica. Lesiones leves. Procesamiento. Lesiones no acreditadas. Elementos de prueba
insuficientes para agravar la situación procesal del imputado. Revocación. Sobreseimiento..............................239
- Violencia doméstica. Excarcelación rechazada. Lesiones leves agravadas por haber mantenido una relación
de pareja y mediando violencia de género, en concurso ideal con desobediencia y en concurso real con
hurto. Incumplimientos de medidas impuestas con anterioridad. Causa en trámite acumulada al expediente.
Registro de antecedentes condenatorios. Posible entorpecimiento de la investigación. Confirmación...............239
- Violencia doméstica. Lesiones. Fiscal que solicitó la indagatoria del imputado. Actuaciones delegadas (art.
196 del C.P.P.N.) Magistrado que rechazó la solicitud, no formó causa y dispuso su archivo. Fiscal que
apela. Imputado que golpeó a su concubina en una visita que tuviera lugar en el Complejo Penitenciario
Federal de la CABA donde se encuentra detenido. Acción que se encuentra debidamente promovida ante las
autoridades de dicho complejo penitenciario. Revocación. .................................................................................239
- Violencia doméstica. Amenazas coactivas. Procesamiento. Elementos de prueba suficientes. Confirmación. ..241
- Violencia doméstica. Lesiones agravadas por el vínculo. Procesamiento. Denunciante que en sede judicial
precisó que no deseaba continuar con el proceso. Acción promovida en la seccional y ante la Oficina de
Violencia Domestica. Indisponibilidad de la acción para la parte (artículo 72 del Código Penal). Descargo
desvirtuado frente al cuadro de elementos reunidos. Confirmación. ...................................................................241
- Sobreseimiento. Amenazas y lesiones no verificadas. Elementos de prueba insuficientes para avalar los
hechos denunciados. Damnificada que no concurrió a examinarse en el cuerpo médico forenses. Relación
conflictiva entre las partes ajena a la órbita del derecho penal. Confirmación. ...................................................242
- Violencia doméstica. Amenazas coactivas agravadas por el empleo de un arma. Sobreseimiento. Acción
instada inicialmente por la víctima. Desistimiento inoficioso. Delito de acción pública. Elementos de prueba
suficientes para agravar la situación procesal del imputado. Revocación. Procesamiento. Medidas cautelares
a definir en la instancia de origen. Disidencia parcial: Pautas e imposición del monto del embargo..................243
- Desobediencia. Procesamiento. Incumplimiento a la prohibición de acercamiento. Padre que al ser
requerido por la autoridad policial para que se retirara de la reunión escolar debido a la prohibición de
acercamiento vigente respecto de su exmujer, se niega a hacerlo. Delito que se consuma instantáneamente
con la negativa de acatar con plena conciencia del acto, o al hacer caso omiso a la orden dispuesta por
funcionario público. Confirmación. Disidencia: Falta de dolo en la acción. Elementos de prueba que apoyan
la versión del imputado quien negó haber querido incumplir la orden explicando que concurrió a la reunión
para velar por la correcta escolaridad de su hijo. Testimonios que dan cuenta que siempre fue el padre quien
lo llevaba y traía de la escuela, concurría a las reuniones, firmaba los cuadernos de comunicaciones.
Sobreseimiento.....................................................................................................................................................244
- Violencia doméstica. Amenazas coactivas reiteradas -tres hechos, uno de los cuales concurre idealmente
con lesiones leves y otro con desobedienciay abuso sexual con acceso carnal en concurso real.
Procesamiento. Imputado que amenazó, agredió sexual y físicamente a su pareja y violó la prohibición de
acercamiento y contacto impuesta en la justicia civil. Hechos de violencia doméstica. Lesiones acreditadas.
Pormenorizado relato de la víctima. Informe de la O.V.D. de la C.S.J.N. que considera la situación de la
damnificada de alto riesgo. Confirmación. ..........................................................................................................247

XXII
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

- Amenazas coactivas. Procesamiento. Imputado que instó a la víctima a que finalizara la relación con su
actual pareja o de lo contrario la mataría. Frases con entidad vulnerante e intimidante. Expresiones aptas
para amedrentar. Prueba suficiente. Informe de la Oficina de Violencia Doméstica que da cuenta que la
situación de la víctima es de alto riesgo. Confirmación. ..................................................................................... 247
- Procesamiento por lesiones leves agravadas por el vínculo en concurso ideal con amenazas. Damnificada
que no instó la acción penal respecto de las lesiones. Imposibilidad de incluir las lesiones. Concurso ideal
entre un delito de acción pública y otro de instancia privada. Excepción al principio de la única persecución
penal. Nulidad parcial del dictamen fiscal. (Arts. 166 y 168, del C.P.P.N.), la declaración indagatoria y el
auto de procesamiento en lo que respecta a la inclusión en el objeto procesal de las lesiones. Elementos
suficientes para agravar la situación procesal del imputado por las amenazas. Confirmación parcial.
Disidencia parcial: Validez. Imposibilidad de escindir la investigación debido a la existencia de un concurso
ideal entre un delito dependiente de instancia privada y un delito de acción pública. Separación que
implicaría una afectación a la garantía constitucional que prohíbe la persecución penal múltiple. Eventual
juicio de reproche que, al momento de merituar la sanción aplicable solo podrá abarcar el delito de acción
pública. Confirmación. ........................................................................................................................................ 248

XXIII
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

ABOGADO.

Llamado de atención al letrado de la querella para que se comporte en el Tribunal de acuerdo a las
formas y corrección. Apelación. Imposición que ha afectado el derecho de defensa y debido proceso al
no escuchar al profesional antes de decidir (art. 213 del Reglamento para la Jurisdicción en lo Criminal
y Correccional). Nulidad.

Fallo: "(…) II.- Hemos sostenido (1) que mediante la Acordada N° 26 del 21 de octubre de 2008, la
Corte Suprema de Justicia de la Nación ponderó que en el marco que confieren los artículos 18 y 19 del
Decreto Ley 1285/58 ratificado por la ley 14.467, resultaba necesario "adecuar su aplicación en los
casos concretos en que corresponde el ejercicio de facultades disciplinarias a las exigencias contenidas
por la Convención Americana sobre Derechos Humanos" y que "la imposición de una sanción
disciplinaria a una persona, en las circunstancias y por las causas señaladas, importa la determinación
concreta de sus derechos y obligaciones y que el artículo 8°, inc. 1° de la mencionada convención,
contiene garantías relacionadas con el debido proceso adjetivo que son de inexcusable cumplimiento,
en cuanto aseguran el derecho de toda persona '…a ser oída, con las debidas garantías y dentro de un
plazo razonable, por un juez o tribunal competente, independiente e imparcial'…" (2).
También que para que se cumpla con ello encomendó a la Cámara Nacional de Casación Penal y a las
Cámaras Nacionales y Federales la adopción de las "previsiones reglamentarias necesarias a fin de
poder ejercer las facultades disciplinarias que la ley confiere a los tribunales, en armonía con el respeto
al debido proceso adjetivo…".
En ese orden, el Reglamento para la Jurisdicción en lo Criminal y Correccional de la Capital Federal en
su artículo 213 establece que "Cuando el magistrado considere pasible de sanción a una parte, letrado,
procurador o perito por conducta procesal deshonesta, deberá formar incidencia y, previa toda
resolución, oír al interesado, en el término de tres días".
De ahí que es ineludible escuchar a quien pudiera ser pasible de sanción antes de decidir. Su aplicación
inaudita parte vulnera el derecho de defensa y debido proceso reconocidas constitucionalmente,
falencia que no puede ser conjurada con la posibilidad de articular una ulterior vía recursiva, también
contemplada.
En consecuencia, el Tribunal RESUELVE: I.-DECLARAR la nulidad del auto de fs. (…) que efectuó
un llamado de atención al Dr. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini, Filozof. (Sec.: Williams).


c. 21.829/12, MACAGNO, Betina.
Rta.: 13/02/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correcc., Sala VI, c. 41686-1, "Geraci, Salvador Horacio Marcelo u otros",
rta.: 21/06/11; (2) C.N.Crim. y Correcc., Sala VII, c. 37.006, "Romagnoli, Gerardo y otro", rta.:
14/08/09.

ABOGADO.

Actuaciones en las que se investiga un impedimento de contacto. Imputada que designa para la menor
al mismo letrado que la asiste. Menoscabo a las garantías del menor. Violación a la Convención sobre
los derechos del niño. Necesidad de garantizar la intervención de un abogado para la menor con
posición diferente y autónoma de aquella sostenida por sus padres. Revocación.

Fallo: "(…) II. Conforme se desprende de la lectura de la causa, ambos padres solicitaron que se
designe un abogado, en los términos del inciso c) del art. 27 de la ley 26.061, que asista a la menor W.
V. P. (ver fs. …). Empero, a diferencia del querellante, la imputada se presentó de manera conjunta con
la menor proponiendo a la Dra. L.F. como patrocinante de su hija, finalmente designada a fs. (…).
(…) viene al caso destacar que el artículo 12.1 de la Convención sobre los Derechos del Niño reconoce
a los menores el derecho de expresar su opinión libremente en todos los asuntos que los afecten.
En el mismo sentido, el art. 27, inciso c) de la ley 26.061 establece que, a tal efecto, un niño puede ser
asistido por un letrado preferentemente especializado en niñez y adolescencia desde el inicio del
procedimiento judicial o administrativo que lo incluya.
(…) no se encuentra discutida en autos la designación de un abogado de la niña sino la circunstancia de
que haya sido designada una letrada propuesta por la niña pero de manera conjunta con su madre que,
en el caso concreto, reviste además la condición de imputada.
No puede soslayarse, por otra parte, la complejidad del asunto que se debate en el sumario y la
supuesta negativa a vincularse con su padre ensayada por la menor en reiteradas oportunidades.
(…) no se ha convocado a la menor a efectos de que manifieste si es su deseo ser asistida en los
términos del art. 27 de la ley 26.061, estimamos apropiado que en caso de que así lo requiera, se dé
intervención a la Defensoría Oficial y se designe un letrado que no pertenezca a la órbita de influencia
de sus padres, de manera tal de asegurar el desempeño autónomo de aquél.
Ello así pues la intervención del abogado del niño tiene por finalidad que su posición se considere de
manera distinta y autónoma de aquella sostenida por sus padres, de lo contrario, su admisión como
parte en el proceso resultaría improductiva si no puede hacer oír su voz de modo útil y eficaz.

1
En razón de lo expuesto, corresponde revocar el auto de fs. (…) de este legajo (fs…del principal), a
efectos de que sea la jueza de grado quien proceda a designarle a W. V. P. un letrado -si es posible,
especializado en la materia- para que la patrocine, a fin de garantizar en lo sucesivo (ante posibles
modificaciones del régimen de visitas vigente o planteos que se susciten), su derecho a participar en el
proceso.
(…) el tribunal RESUELVE: Revocar el auto de fs. (…) de este legajo".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, López González, Divito. (Prosec. Cám.: Daray).


c. 32.887/14/1, " C., S. s/inf. Ley 24.270".
Rta.: 30/04/2015

ABUSO DE AUTORIDAD.

1) Procesamiento. Imputado: Jefe de la Policía Metropolitana. Operativo policial montado en ocasión


del inicio de la demolición de un hospital. Abuso de autoridad al ordenar responder en exceso a las
acciones del grupo de manifestantes que intentaba evitar las tareas, provocando ello que varios
resultaran lesionados. Elementos de prueba que permiten afirmar que la respuesta por el imputado
ordenada fue la adecuada para repeler las agresiones y proceder a la aprehensión de sus autores ante la
flagrante comisión de delitos de acción pública. Actuación dentro del marco de sus atribuciones y en
cumplimiento de un deber legal. Revocación. Sobreseimiento (art. 336 inc. 4 del C.P.P.N.). 2)
Sobreseimiento. Imputados: Jefe de Gobierno, Subjefe de gobierno, Jefe de Gabinete y Ministro de la
Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Eventual responsabilidad que cabría asignarles con motivo de la
represión emprendida por los miembros de la Policía Metropolitana. Ausencia de responsabilidad penal
de los funcionarios de las áreas inferiores de la estructura estatal. Cadena de responsabilidades
seccionada. Inexistencia de elementos de prueba que permitan sostener la toma de decisiones abusivas
dolosas para abortar la protesta de los manifestantes. Confirmación.

Fallo: "(…) I. Acerca de los sucesos investigados: Constituyen objeto de esta investigación los
incidentes acaecidos el 26 de abril de 2013 en las inmediaciones de la avenida Amancio Alcorta y la
calle Perdriel de esta ciudad, donde funcionaba el "Taller Protegido N° 19" dependiente del "Hospital
de Salud Mental José Tiburcio Borda". Dichos acontecimientos se relacionan con el desempeño de
efectivos de la Policía Metropolitana que fueran destinados al lugar a fin de resguardar la seguridad de
quienes habían sido encomendados por el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires para proceder a la
demolición del inmueble aludido, conforme al plan denominado "Construcción de los Edificios del
Nuevo Distrito Gubernamental". En tales circunstancias, los agentes allí destacados mantuvieron
enfrentamientos con manifestantes que se hicieran presentes en el lugar para oponerse al desguace
dispuesto, resultando lesionados en la refriega pacientes, médicos y enfermeros del nosocomio, así
como también periodistas, legisladores y agentes gremiales, siendo que varias de estas personas
integraban el grupo de protesta referido anteriormente.
(…) II. Reseña de la intervención anterior que le cupo al Tribunal: A "(fs. …)" la Sala señaló que las
constancias incorporadas a la pesquisa autorizaban a sostener que la actuación en dicho evento del ya
procesado M. J. R., en su calidad de jefe del grupo táctico de la "D.O.E.M." ("División de Operaciones
Especiales Metropolitanas"), se apartó de los principios de oportunidad y razonabilidad previstos en el
art. 27 de la ley 2894 de Seguridad Pública, al ordenar a los efectivos a su cargo una respuesta excesiva
e indiscriminada para conjurar los incidentes acaecidos en el predio del hospital, que produjo
resultados lesivos para las personas que allí se manifestaban contra la demolición.
Al respecto, se dijo que la abusiva actuación del Comisionado R. y su grupo táctico había quedado en
evidencia tomando en cuenta que resultaron lesionados indistintamente legisladores de la Ciudad de
Buenos Aires, personal médico y pacientes del nosocomio, gremialistas y periodistas, que los disparos
fueron efectuados a muy corta distancia y que las heridas de bala de goma que presentaban los
damnificados se ubicaron en gran medida por encima de su cintura y en la parte posterior de su cuerpo.
En cuanto a H. A. G. y E. P., se dio por sentado que estuvieron presentes en el sitio desde la hora 7:00
del día de los acontecimientos y que recorrieron la zona del conflicto a una distancia aproximada a los
50 metros, por detrás del cordón policial, acercándose en algunas oportunidades hasta el sector donde
se hallaban los manifestantes y manteniendo también diversas conversaciones con los legisladores que
se hallaban en el lugar. No obstante esa presencia, se estableció que la utilización del armamento que
portaban en la ocasión las fuerzas especiales intervinientes ("División de Operaciones Especiales
Metropolitanas", "División de Intervenciones Complejas" y "Brigada Rápida de Intervención")
respondía a una decisión exclusiva de sus respectivos jefes.
Más allá de esa conclusión, consideramos en ese momento que no se había alcanzado el grado de
certeza negativa para homologar la decisión liberatoria como la que el juez de grado adoptara en
aquella oportunidad con relación a ambos encausados, por cuanto durante el transcurso de la audiencia
oral celebrada el 4 de abril pasado, la letrada del querellante G. R. P. adujo haber aportado pruebas que
sustentarían la imputación que se les dirigía, resultando por ende conducente que el juez de grado
analizara tal documentación, acompañada a "(fs. …)", lo que así se dispuso.
También se le encomendó profundizar la encuesta respecto al sindicado P., para establecer si
efectivamente había sido uno de los efectivos de seguridad que disparara contra las personas allí

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Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

presentes, tal como lo afirmara E. C. A. M. "(cfr. …)". A tal fin, aparecía pertinente llevar a cabo las
medidas sugeridas por el representante del Ministerio Público Fiscal "(ver fs. …)".
En el contexto de dicha revisión, se estimó también que resultaba prematuro desvincular a D. G. Ch.
sobre la base de un presunto error de prohibición invencible generado a partir de la nota que le
remitiera D. L. el 25 de abril de 2013 al informarle que "a la fecha no existen medidas cautelares
vigentes que afecten la obra 'Nuevo Distrito Gubernamental' ni al 'Taller Protegido 19" "(ver fs. ...)".
Ello así, por cuanto no se habían determinado las circunstancias que motivaran al consultado a brindar
dicho asesoramiento en la forma que lo hizo, en tanto L. había sido uno de los concurrentes a la
inspección ocular llevada a cabo en el "Taller Protegido N°19" dos días antes a los desórdenes por
parte de los vocales de la Sala II de la de la Cámara de Apelaciones en lo Contencioso, Administrativo
y Tributario.
En tal sentido, la Sala destacó la ausencia de una explicación atendible sobre la omisión de hacer
constatar en dicho dictamen aquella inspección, en la que también intervinieron otros funcionarios del
Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires.
Finalmente, al disponerse la revocatoria de los sobreseimientos de los oficiales de la Policía
Metropolitana, así como del Ministro de Desarrollo Urbano, D. G. Ch., se entendió prematura la
desvinculación de las máximas autoridades del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires que fueran
imputadas.
III. Acerca del procesamiento de H. A. G.: Adelantamos que las críticas esgrimidas por la defensa
contra el auto en revisión van a ser admitidas, en tanto las pruebas incorporadas a la encuesta no
autorizan a agravar su situación procesal en los términos del art. 306 de la ley adjetiva.
En efecto, la compulsa de la información contenida en la unidad de memoria extraíble aportada por el
querellante G. R. P. y que esa parte estimara relevante para apuntalar la imputación dirigida contra el
Jefe de la Policía Metropolitana, no surte el resultado que se le intenta adjudicar. Los datos allí
consultados consisten en archivos de video, audios, fotografías y un informe técnico que ilustran acerca
de los episodios suscitados en el predio del nosocomio, algunos registrados u obtenidos por la
"Asociación Trabajadores del Estado" y otros difundidos por diversos medios de comunicación que
nada novedoso aportan a lo ya conocido con anterioridad en esta misma causa.
Es más, en los individualizados con los títulos "Cosa de Locos Represión en el Hospital Borda 26 Abril
de 2013", "290_5296_01.MP4" y "290_5296_01.MP4" puede verse al jefe policial manteniendo
conversaciones con legisladores, pidiendo calma a los manifestantes y ordenando el repliegue de los
efectivos policiales, lejos de mostrarlo en alguna actitud de incitación a una represión desmesurada, y
por tanto ilegítima, de la protesta o dando órdenes funcionales abusivas a su subalternos.
Surge en cambio de estas probanzas su actitud conciliadora, tratando de apaciguar la tensa situación
que se generara en el lugar, percepción que encuentra su apoyatura en diversos testimonios colectados
en esta causa como en su conexa nro. 20.209/13, cuyos tramos esenciales corroboran lo así apreciado
en los registros fílmicos de referencia.
En tal sentido y merced al extracto de las versiones atinentes a A. B. "(fs. …)", F. M. N. "(fs. …)", A.
I. "(fs. …)", L. S. G. T. "(fs. …)", G. P. A. "(fs. …)" y R. A. G. "(fs. … de la causa que corre por
cuerda)" -todos ellos diputados de la legislatura porteña-, P. C. T. "(fs. …)" -fotógrafo de la emisora
local "FM La Tribu"- y M. S. B. "(fs. ...)" -integrante de la Defensoría del Pueblo de la Ciudad
Autónoma de Buenos Aires- éstas pueden condensarse en que el Jefe de la Policía Metropolitana se
encontraba en el hospital con las fuerzas bajo su competencia, cumpliendo órdenes expresas de los
ministros Ch. y M. para "proteger a la empresa encargada de la demolición" (textual declaración del
testigo B., corroborada en este aspecto por la de su colega A.). También y en general, que ante los
reclamos para que retirara a las tropas allí destacadas, luego de una consulta telefónica con sus
superiores, procedió a hacer cesar el trabajo de las máquinas demoledoras y a ejecutar una orden de
aquéllos de replegar a los policías varios metros detrás de las vallas de contención instaladas en el
predio, sin poder disponer, a raíz de estas directivas, el alejamiento total de las divisiones policiales que
fueran emplazadas a dichos efectos ni arribar por ende a un acuerdo con quienes pretendían el total
abandono por aquéllas del predio custodiado "(conf. declaración de J. J. A., delegado general del
sindicato "ATE" en la Defensoría del Pueblo de la Ciudad de Buenos Aires, obrante a fs. …)".
Estas testificaciones no sólo demuestran la disposición moderadora del imputado G., sino que además
evidencian -aun cuando ya se haya corroborado un actuar desmedido del grupo táctico comandado por
el comisionado M. J. R., cuya responsabilidad por tal exceso condujera a su procesamiento "(cfr. fs.
…)"- que la intervención de los efectivos policiales no obedeció a una orden arbitraria y generalizada
de reprimir emitida por las autoridades superiores de la fuerza u otros funcionarios gubernamentales tal
como lo sostienen las querellas, pues consistió en una respuesta a las agresiones que con diversos
objetos contundentes emprendieron contra ellos algunos sectores de los manifestantes.
Basta repasar las versiones de los testigos antes reseñados.
Así, P. C. T. dijo que "…cerca de las 14 hs. un grupo de cinco jóvenes que tenían sus caras tapadas
empezaron a tirar la parte del vallado que estaba pegado a la Unidad Penitenciaria, y entonces la
policía hizo un cordón en ese lugar…atrás de donde estaba el vallado y comenzó a tirar con pintura,
gases y creo que también con balas de goma, mientras los jóvenes les tiraban piedras" "(fs. …)"; L. S.
G. T. expresó que en principio "…un grupo de trabajadores se acercó al cordón sin intentar traspasarlo
y los policías los golpeaban con los escudos y se armó una bataola de empujones y me alejé de ese
sector", que más tarde "…nuevamente hubo empujones la gente estaba muy exaltada y los policías
también le gritaban a la gente…" y por último que cuando iban a retirar el personal policial ya había

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mucha gente en el lugar y "…había llegado un grupito de pibes jovencitos con mochilas que no eran
reconocidos por nadie…Eran 6 o 7 jóvenes que se empezaron a tapar las caras, ya eran cerca de las 12.
En el momento en que los manifestantes retroceden y la policía hace lo mismo, esa bandita se fueron al
borde de la empalizada… y yo vi que estaban tirando la empalizada y tiraban piedras contra la policía
que se estaba retirando, entonces nuevamente la policía empezó a reprimir". Es de destacar que esta
legisladora sitúa, luego de haber parlamentado junto a otros colegas con el Jefe de la Policía
Metropolitana, a"…algunos policías (que) empiezan a disparar, mientras el cordón retrocedía",
expresando haber escuchado disparos, ver caer gente corriendo cayendo al piso, "…algunos golpeados
por la policía y otros por los disparos" y que esta situación se mantuvo durante unos minutos para
luego calmarse, a la par que "el cordón (retrocedía) por orden de G." "(fs. …)".
Vale aquí hacer remisión a lo decidido por esta Sala en la causa n° 20.760/13 caratulada "B. S. y otros
s/resistencia o desobediencia a funcionario público", homologando el pasado 22 de abril los
procesamientos de seis imputados por haber agredido a efectivos de la Policía Metropolitana en el
mismo contexto de tiempo, modo y lugar. En dicha oportunidad se destacó que ningún derecho podía
ser ejercido abusivamente, dado que la ley no los considera absolutos ni tampoco ampara su uso
excesivo (artículo 1071, segundo párrafo, Código Civil), motivo por el cual el derecho a manifestarse
no podía ser esgrimido para excepcionarse de responsabilidad cuando, como en el caso, se había
afectado la integridad física de terceros.
Se citaron, en tal sentido, los precedentes "Alais" y "Armentano" de la Sala III de la Cámara Federal de
Casación Penal, en cuanto "corresponde que en un estado democrático de derecho todos los actores
sociales adecuen sus conductas al debido respeto que merecen los derechos de los demás, demostrando
ejemplaridad y un adecuado compromiso con los altos valores que regulan la vida social…en muchos
casos, la 'protesta social' se canaliza por medio de delitos que afectan la integridad física, la salud o la
vida (v.gr.: agresiones contra particulares y funcionarios policiales, cortes del tránsito que afectan el
acceso de personas y ambulancias a lugares donde se atienden urgencias de salud, etc.), o el patrimonio
público o privado…situación que determina descartar -ante las graves connotaciones y consecuencias
que evidencian las conductas reseñadas- que sus autores pudieran creer que ese despliegue de su obrar
quede enmarcado dentro de lo normativamente permitido".
Como se advierte, fue el ataque generalizado de un grupo de manifestantes contra los efectivos
policiales lo que motivó la respuesta de estos últimos en determinadas y concretas oportunidades, para
repeler tales agresiones y proceder a la aprehensión de sus autores ante la flagrante comisión de delitos
de acción pública. Puede agregarse ahora que todos los efectivos que actuaron dentro del marco de sus
atribuciones sin excesos abusivos -a diferencia de lo que ocurriera en el caso del funcionario policial
cuyo procesamiento fuera confirmado en la alzada precedente- lo hicieron obrando en cumplimiento de
un deber legal. No se ha comprobado que algún otro efectivo de aquellos comandados por el jefe o
subjefe de la fuerza, a excepción de los citados, haya sido expresamente imputado por llevar a cabo
alguna acción descomedida y extraña a la naturaleza propia de su función específica.
Además, no pueden soslayarse las circunstancias que precedieron a los incidentes, en tanto la fuerza de
seguridad no se hizo presente en el lugar para controlar una manifestación en curso, sino que había sido
comisionada para dar resguardo a las tareas de demolición que en esa fecha se emprendieron, siendo
posterior el ingreso al predio de grupos que intentaban oponerse férreamente a dicha labor, la que
incluso para ese momento ya había finalizado.
A su vez, se encuentra acreditado que G. durante la mañana, ordenó la formación de un cordón policial
frente a la zona donde se llevaría a cabo el derribo edilicio, así como la instalación de un vallado
metálico a efectos de proteger la integridad de física de los operarios y otras personas presentes en el
lugar "(cfr. fs. …)".
Cabe concluir entonces que las constancias incorporadas, que en nuestra opinión satisfacen ahora la
integridad del desarrollo investigativo, no se dirigen a apuntalar las hipótesis delictivas por las que
fuera intimado G., como la de haber dado órdenes contrarias al ordenamiento jurídico a sus subalternos
para golpear y disparar balas de gomas en forma excesiva e indiscriminada contra los manifestantes o,
alternativamente, el no adoptar las medidas pertinentes a los efectos de que se evitara la represión "(ver
acta de fs. ...)". Tanto una conducta como otra (activa u omisiva) no se reflejan en la prueba acumulada
y, como ya se reseñara precedentemente, nada indica que G. se haya apartado del regular cumplimiento
de su función, siendo vedada por nuestro sistema legal la atribución de una responsabilidad meramente
objetiva y especialmente en lo que atañe al caso, sobre eventuales desbordes funcionales de sus
subordinados en el contexto del confuso tumulto al que dieran comienzo quienes se constituyeran en el
lugar cuando la demolición estaba consumada, lo que desbarata la excusa de la preservación del
inmueble invocando el interés público.
En fin, no se advierte, como lo sostuvo en la audiencia oral alguna de las querellas, el dolo requerido
por la figura principal que el juez de grado ha hecho concurrir con delitos contra la integridad física de
las personas al individualizar la calificación, pues aquél exige "En el supuesto comisivo de ejecutar una
resolución o una orden, la voluntad del sujeto de violar la Constitución o la ley ejecutando una
resolución u orden que sabe que implica una facultad que la Constitución o la ley no confieren
expresamente o prohíben, o el conocimiento de que no se presentan las circunstancias fácticas en que la
Constitución o la ley autorizan el dictado de la resolución o la orden que ejecuta" (1), requisitos que no
se avizoran en el caso que estamos tratando. Tampoco, como hemos adelantado, puede endilgársele
esta infracción penal a título de omisión, dado que ésta "Se caracteriza por la circunstancia de que el
funcionario prescinde de la ley, como si ella no existiera. Son supuestos en los que no se hace ni se

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Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

ejecuta o cumple lo que la ley manda expresamente hacer al funcionario dentro de su órbita
funcional…" (2). Descartada entonces la figura del artículo 248 del código sustantivo, las
consideraciones precedentes pueden extenderse a la imputación de las lesiones leves a múltiples
víctimas que concurren idealmente con la anterior e integran igualmente la intimación que se
desprende del acta obrante a "(fs. …)", desde que la sola presencia del sindicado funcionario en el
lugar de los hechos no puede ser admitida como indicio suficiente para considerar que emitiera órdenes
de reprimir discrecionalmente y con el dolo requerido por el tipo penal respectivo (artículo 89, CP)
para producir los resultados lesivos verificados en autos, o bien a título de culpa (artículo 94, CP).
Párrafo aparte merecen las apreciaciones del señor juez de grado en lo que atañe a lo dispuesto por esta
Sala el 22 de abril ppdo. pues, si bien se admitió la presencia del encausado G. en el predio del hospital
desde horas tempranas y su recorrido por la zona del conflicto detrás de la línea conformada por sus
efectivos, la elucidación de su responsabilidad quedó supeditada a una cuestión de prueba pendiente
que ahora se ha visto satisfecha y no a otros aspectos descriptos por el magistrado.
Con esa salvedad, nos remitimos a lo asentado en el actual considerando para dejar aclarada finalmente
nuestra postura frente a la situación procesal del Jefe de la fuerza involucrada.
Todo conduce, en síntesis, a disponer el sobreseimiento del imputado, conforme lo normado en el art.
336, inc. 4°, del Código Procesal Penal, al no vislumbrarse la producción de otras diligencias que
permitan arribar a un pronunciamiento diferente.
(…) VI. Acerca de los sobreseimientos dispuestos respecto de M. M., M. E. V., H. R. L., G. M. y G. R:
Como cuestión preliminar, corresponde señalar que todos los recurrentes en esta alzada, al momento de
expresar agravios en torno a estos funcionarios, centraron exclusivamente su imputación en la eventual
responsabilidad que cabría asignarles con motivo de la represión emprendida por los miembros de la
Policía Metropolitana, mas ninguno de ellos los vinculó con la conducta que se le atribuye al Ministro
de Desarrollo Urbano D. G. Ch. Circunscripto así el límite de actuación de la Sala (art. 445, CPPN),
habrá de confirmarse el auto en crisis en lo que concierne a este punto, por cuanto el magistrado
instructor ha efectuado un pormenorizado análisis de las pruebas colectadas en el legajo para concluir
en la inexistencia de elementos mínimos objetivos, concretos y directos que conlleven a atribuirles
algún tipo de participación en el suceso. La tacha de arbitrariedad que esgrimen las querellas para
descalificar tal decisión no puede prosperar, en tanto sus argumentaciones sólo evidencian una clara
discrepancia sobre la valoración efectuada.
Si bien en el precedente "Galmarini" de la Cámara Federal de Casación Penal -citado por esta Sala en
su anterior intervención y aludido reiteradamente por las partes en la audiencia- se sostuvo que la
Jefatura de Gobierno debe actuar en forma directa en el ejercicio de su poder jerárquico si conoce que
sus inferiores incumplen con sus obligaciones específicas o deberes a su cargo, pues de no hacerlo
podría incurrir en una conducta con significación jurídico penal, también allí se destaca que en caso de
no advertirse una responsabilidad penal de los funcionarios de las áreas inferiores de la estructura
estatal, mal puede elevarse el reproche a sus superiores jerárquicos (3).
En tal sentido, es de tomar en cuenta que en el considerando relativo al Jefe de la Policía
Metropolitana, se ha descartado ya la comisión de conductas penalmente reprochables por parte del
jefe y el subjefe de la fuerza de seguridad que interviniera en la ocasión y con motivo de su desempeño
en el operativo de custodia dispuesto y luego por la respuesta abusiva que se les achacara. Esta
ausencia de ilicitud en la actuación funcional de ambos sindicados secciona la cadena de
responsabilidades que pudieran incumbir a las esferas jerárquicas graduales y ascendentes hasta llegar
a su expresión máxima -el Jefe de Gobierno- salvo que a alguno de los representantes de estas
jerarquías pudiera dirigírseles individualmente alguna imputación relacionada con la toma de
decisiones abusivas dolosas para abortar la protesta de los manifestantes. Esta supuesta hipótesis
tampoco ha sido acreditada.
Es así que la mera comprobación de contactos telefónicos entablados entre el jefe policial y
determinadas autoridades a las que se encontraba subordinado durante la jornada de los episodios
investigados, no basta para sustentar la responsabilidad penal a este respecto, atribuible a los
funcionarios eventualmente consultados. Ello, porque no sólo se desconoce el tenor de tales
conversaciones, y además porque las comunicaciones por ese medio responden a la propia naturaleza
de la gestión administrativa inherente a cada cargo de los involucrados en dichas consultas.
En lo concerniente a la conferencia de prensa informativa brindada por el Jefe de Gobierno M. M.,
donde se encontraban presentes también la Vice-Jefa V., el Jefe de Gabinete R. L. y el Ministro M.,
cabe señalar que aquello que allí se expresara no conmueve ni altera los recientes argumentos, desde
que aun cuando estos funcionarios estuvieran al tanto de los acontecimientos, ello no los vincula o
compromete con los excesos de un efectivo policial en el operativo, al punto de considerarlos
ejecutores de órdenes abusivas o aquiescentes con el comportamiento desviado de algún subalterno
como el que evidenciara el ya sujeto a proceso.
Otro aspecto que podría comprometer a los aquí denunciados podría ser su hipotética presencia en el
lugar de los sucesos mientras éstos se desarrollaban. De tal modo se ha pretendido ligar a la Vice-Jefa
de Gobierno, al sostenerse su concurrencia al lugar y consecuentemente haber tenido algún tipo de
intervención sobre el operativo policial programado para custodiar el sitio. Sin embargo, los
testimonios de J. C. Y., R. L. R. y D. H. E. "(fs. ...)" no han permitido corroborar su presencia, por lo
que la pretensión mayoritaria de los acusadores particulares carece de andamiaje para ser admitida.
Por otra parte, ante la dispuesta exoneración de culpabilidad de sus subordinados G. y P., debería
acreditarse un desempeño doloso independiente de éstos y acorde con las conductas típicas que

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pudieran achacársele en razón de su calidad funcional o bien por el encubrimiento de algún accionar
delictivo inherente a los grados jerárquicos inferiores, por lo que aun cuando se insista en suponer que
se encontraba en el nosocomio durante los incidentes, esta circunstancia sólo podría ser evaluada del
mismo modo en que se lo hizo respecto de la situación de los jefes policiales de mención anterior.
En cuanto al caso particular de la Ministro de Salud del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, G. R.,
empero las querellas ejercidas por E. M. C. y J. T. pretenden ahora dudar de la veracidad de los datos
que surgen de la nota obrante a "(fs. …)" de la causa aneja n° 20.209/13, lo cierto es que no aportaron
elementos concretos que ameriten colocar sospechas sobre lo allí informado y conduzcan a reconducir
la pesquisa en este sentido, máxime cuando las circunstancias expuestas en dicho documento
encuentran correlato con lo manifestado por el director del nosocomio, Dr. R. M. P. "(fs. ...)" y el
Subsecretario de Atención Integrada de Salud dependiente de la misma cartera a cargo de la
funcionaria, Dr. C. D. R. "(fs. … de la cn° 20.760/13 conexa a la presente).
En este marco, cabe señalar que "no resulta prudente extender indefinidamente la cadena de
responsabilidades, avanzando sin limitación de ninguna naturaleza en las estructuras jerárquicas, y de
esta forma incorporando al elenco de imputados a todo aquél que de alguna forma u otra hubiera
contado con facultades para influir en el esquema de toma de decisiones. Concluir de manera contraria,
insistimos, importaría apartarse del principio de responsabilidad por el hecho que necesariamente debe
primar en el estado democrático de derecho, incurriéndose así en un supuesto de responsabilidad
objetiva ajena al derecho penal liberal" (4).
En síntesis, y en virtud de lo expuesto, vamos a inclinarnos por la homologación de lo resuelto por el
juez de grado en lo que concierne a los imputados referidos en el epígrafe de este considerando.
(…) Por el mérito que ofrece el acuerdo precedente, el tribunal RESUELVE: I.- Revocar el punto I de
la resolución de "(fs. ...)" y disponer el sobreseimiento de H. A. G. en orden a los sucesos por los que
fuera formalmente indagado, dejándose constancia de que la formación de este proceso no afecta el
buen nombre y honor del que gozaba e imponiéndose las costas en el orden causado (arts. 336, inc. 4°
y 531, segunda parte, del Código Procesal Penal). (…) IV.- Confirmar el punto IV en cuanto decreta
los sobreseimientos de M. M., M. E. V., H. R. L., G. M. y G. R., con la aclaración de que la formación
de esta causa no afecta el buen nombre y honor del que gozaban (art. 336, inc. 4 del CPP), fijando el
pago de las costas en el orden causado.
(…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala IV, González, Seijas. (Prosec. Cám.: Pereyra).


c. 27.116/13/0, MACRI, Mauricio y otros.
Rta.: 05/02/2015

Se citó: (1) D'Alessio, Andrés J. (dir) y Divito, Mauro A. (coord.) "Código Penal de la Nación
Comentado y Anotado", 2da. Edición Actualizada y Ampliada, T. II, p. 1231/1232. (2) D´Alessio-
Divito, "Código Penal de la Nación Comentado y Anotado", 2da. Edición Actualizada y Ampliada, T.
II, pág. 1231/1232. (3) C.F.C.P., Sala III, c. 11.012 "Galmarini, Martín s/rec. de casación", rta. 11/6/10,
voto de los Dres. Eduardo Rafael Riggi y Liliana Catucci. (4) C.F.C.P., Sala III, c. 7.558 "Ibarra,
Aníbal s/recurso de casación", rta. 15/8/07. (5) Navarro, Guillermo Rafael y Daray, Roberto Raúl,
"Código Procesal Penal de la Nación. Análisis doctrinal y jurisprudencial", Ed. Hammurabi, 2013, t. 3,
pág. 544. (6) C.N.Crim. y Correc., Sala IV, c. 580/12 "Quesada", rta. 22/5/12 y c. 4.668/13 "Yanzón
Camargo", rta. 30/10/13.

ABUSO SEXUAL

Procesamiento. Imputado acusado de haber abusado sexualmente de un menor por la madre de éste en
ocasión en que viajaran en un vagón de subtes. Aviso dado por la madre al personal policial del lugar
en forma inmediata. Relato brindado por el menor en la entrevista llevada a cabo en los términos de art.
250 bis del C.P.P.N. que impresionó como verosímil a los profesionales. Actitud intimidatoria asumida
por el imputado cuando la víctima le relataba lo sucedido a su madre. Elementos de prueba suficientes
para agravar la situación procesal. Confirmación.

Fallo: "(...) La imputación se sustenta en la denuncia formulada por la madre del damnificado, M. P.
A., quien convocó al personal policial presente en el andén de la estación "T." de la línea de subtes "x"
inmediatamente después de haber tomado conocimiento de lo ocurrido por los dichos de su hijo y que
éste le indicara al autor. A ello se aduna la declaración del niño, cuyos detalles surgen de la entrevista
llevada a cabo en los términos del art. 250 bis del ordenamiento adjetivo, ocasión en la cual efectuó
una clara descripción del ataque al que fue sometido (ver fs. ...).
De las conclusiones de la licenciada S. P. C., psicóloga del Cuerpo Médico Forense, se desprende que
el relato de la víctima se estima verosímil.
Esta información profesional refuerza la credibilidad de los dichos del menor, respecto de quien no se
advierte que existan razones de interés, odio o animadversión en contra de G. Por otro lado, el
contundente señalamiento del imputado por parte del joven conduce a desechar la versión exculpatoria
en cuanto a que el niño pudo haber confundido al autor debido a la cantidad de gente presente en el
vagón en el que viajaban.

6
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

No puede soslayarse lo expuesto por la víctima en cuanto a la actitud asumida por su agresor luego del
acontecimiento, en tanto refirió que era observado de manera intimidatoria mientras le contaba lo
sucedido a su madre. La secuencia se reconstruye con los dichos de A., pues ésta manifestó que
mientras escuchaba a su hijo dirigió la mirada al encausado, quien se mostró nervioso en ese instante e
intentó escabullirse entre la gente.
Asimismo, la persecución desarrollada sobre el andén y la posterior detención se encuentra reflejada en
la declaración del preventor N. C. de (fs. ... y en el acta de fs. ...).
La ausencia de otros testigos aún cuando se señalara que en el vagón había un número importante de
pasajeros, no enerva la prueba referida, pues este tipo de tocamiento suele estar fuera de la vista de
terceros.
En consecuencia, el Tribunal RESUELVE: I CONFIRMAR el punto (...) del auto de (fs. ...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala IV, Seijas, González Palazzo, González. (Sec.: Morillo Guglielmi).
c. 2.015/13, G., F. D.
Rta.: 05/03/2015

ABUSO SEXUAL

Simple. Falta de mérito. Imputado que manoseó el glúteo a una niña mientras caminaba por la vía
pública. Elementos suficientes para agravar la situación procesal. Relato de la víctima en ocasión de la
entrevista en los términos del art. 250 bis del C.P.P.N. que impresiono verosímil. Especialistas que
precisaron la existencia de indicadores compatibles con vivencia traumáticas. Elementos suficientes
para agravar la situación procesal del imputado. Revocación. Procesamiento por abuso sexual.

Fallo: "(...) I. La evaluación conjunta de los elementos aunados a la causa acreditan, con la
provisoriedad que requiere esta etapa (Art. 306 del CPP), la materialidad del hecho y la responsabilidad
que en éste cabe atribuirle F. J. O.
En efecto, se cuenta con la denuncia formulada por el padre de la víctima, H. D. V. B., luego de haber
tomado conocimiento de lo ocurrido por los dichos de su hija. A ello se aduna la contundente
declaración de L. A. B., cuyos detalles surgen de la entrevista llevada a cabo en los términos del
artículo 250 bis del ordenamiento adjetivo, ocasión en la cual efectuó una clara descripción del
episodio abusivo al que fuera sometida el 29 de mayo de 2014, cuando caminaba por la calle P. a
metros de su intersección con la Avda. P. y fue interceptada por el prevenido, junto a otro sujeto aún no
identificado, quien la sujetó por el brazo y mientras le decía "…vos te venís conmigo…" a la par de
manosearle su glúteo derecho (cfr. informe de fs....).
Cabe resaltar que inmediatamente después de ocurrido el suceso, la niña sindicó al encausado como su
atacante, primero frente a las autoridades del establecimiento educativo y luego ante el personal
policial que concretó la detención de O. (ver fs. ...).
Asimismo, se cuenta con el testimonio de P. G. quien si bien no pudo percibir el hecho dio cuenta del
llanto y el estado angustiante de la niña al tiempo de ingresar corriendo al establecimiento, lo cual
coadyuva a la credibilidad de su relato (fs. ...).
Se aduna a lo expuesto, la conclusión de la licenciada en psicología del Cuerpo Médico Forense,
Gimena Sozzi Uboldi, quien entrevistara a la menor en cuanto determinó la verosimilitud de la versión
que le brindara la víctima (fs. ...).
No es posible soslayar que en los casos de abuso sexual cobra especial relevancia el relato de la
víctima, el cual debe ser analizado por los especialistas para determinar su veracidad (1), circunstancia
que aquí aparece prima facie comprobada.
Lo expuesto, coadyuva a reforzar la versión esgrimida por la niña y conduce a desechar el endeble
descargo del imputado (fs....) por lo que, encontrándose reunidos los extremos previstos en el artículo
306 del código objetivo, corresponde revocar el auto traído a estudio y disponer el procesamiento de F.
J. O. en orden al delito de abuso sexual simple (artículo 119, primer párrafo, del Código Penal).
II. En base a lo que habrá de decidirse, el agravio en torno a la devolución de las actuaciones a la
fiscalía fin de practicar las medidas señaladas en el resolutorio en crisis, deviene abstracto.
En consecuencia, el tribunal RESUELVE: I Revocar el punto I de la resolución de (fs. ...) y dictar el
procesamiento de F. J. O. de las demás condiciones personales obrantes en autos, por considerarlo
prima facie autor penalmente responsable del delito de abuso sexual (artículos 45 y 119, primer
párrafo, del Código Penal y 306 del Código Procesal Penal), debiendo la jueza de grado expedirse
respecto de las medidas cautelares pertinentes. (...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala IV, González, Pociello Argerich. (Prosec.Cám.: Pereyra).


c. 33.453/14/0, O., F. J.
Rta.: 10/04/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correc., Sala IV, c. 31.934/12 "C.", rta. 27/8/14.

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ABUSO SEXUAL

Procesamiento. Imputado que en la calle mientras la damnificada se dirigía a su lugar de trabajo se le


acercó para decirle frases de contenido sexual y luego le realizo tocamientos sobre los glúteos.
Elementos de prueba suficientes para concluir que los tocamientos fueron con intención sexual.
Confirmación.

Fallo: "(…) Los elementos probatorios recabados son suficientes para tener por acreditadas la
existencia del hecho y la responsabilidad que cabe asignarle a P. en su comisión, conforme las
exigencias del artículo 306 del código adjetivo.
La imputación encuentra aval principalmente en las manifestaciones de M. P. R. I. (fs. …), quien
refirió que el 3 de diciembre de 2014, alrededor de las 12:00, mientras caminaba por la calle M. en
dirección a la sucursal del "B. C." sita en la intersección de esa arteria con la Avda. L. H. donde se
desempeña laboralmente, el encausado se le había acercado espetándole frases de contenido sexual,
para luego realizarle tocamientos sobre sus glúteos.
A tal testimonio se adunan los vertidos por V. G., A. L. y F. F. ante el personal preventor que se
constituyó en el lugar por el llamado efectuado por la damnificada al "911" (fs. …). Si bien las
nombradas no presenciaron el suceso, relacionaron la agresión que la víctima sufriera con otros
episodios anteriores de acoso verbal de contenido libidinoso protagonizados por P., relatos que otorgan
mayor credibilidad a los dichos de R. I.
El cuadro probatorio reunido permite, entonces, sostener que el contacto físico abusivo señalado por la
agredida no se trató de un episodio accidental, como lo alegó el imputado en su descargo (cfr. fs. …),
sino de una maniobra intencional con connotación sexual.
En consecuencia, y sin perjuicio de que se lleve a cabo el estudio médico solicitado por la defensa en
su escrito de (fs. ...), el tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el auto de (fs. …) en cuanto fuera materia
de recurso. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala IV, Seijas, González Palazzo, González. (Prosec.Cám.: Pereyra).
c. 73.579/14, P., V. J.
Rta.: 03/06/2015

ABUSO SEXUAL.

Procesamiento. Imputado: tío de la víctima. Lesiones constatadas. Informe que da cuenta que el
discurso de la menor fue espontáneo, con elaboración inestructurada, conservando lógica y coherencia,
con reconocimiento de interacciones físicas de valor inapropiado y sexual. Verosimilitud del relato.
Elementos suficientes para convalidar el resolutorio. Confirmación.

Fallo: "(…) II.- (…), en la entrevista practicada en los términos del artículo 250 bis del citado texto
legal relató el suceso ocurrido en el interior de la vivienda del tío de su madre, (…) y cometido por el
hijo de aquél.
En tal ocasión dijo "Yo fui a la casa de mi tío para visitarlo porque tenía mal el dedo (…) Cuando
llegue, (…) no estaba (…) Me preguntó si quería ir a comprar cerveza con él (…) Fuimos y cuando
veníamos subimos la escalera y yo siento que me agarra de atrás. Y no tuve tiempo de decir 'soltame'
que ya me había dado un beso en la boca." (…).
Agregó que luego y mientras estaban mirando una película en la habitación de "De la nada viene y me
hizo un chupón", explicando a su vez que "(…) tenía morado y me dolía (…)" (sic).
A preguntas formuladas por el profesional interviniente, la menor indicó que "A parte que me hizo el
chupón, también me dio un beso en la boca y después me hizo que yo le de un beso a él, me obligó.
Después me dio besos acá, en el cuello (…) Me chuponeo todo (…) era como que él quería tener
relaciones sexuales conmigo" (textual).Finalmente la niña expresó que el imputado toco sus pechos y
la zona inferior de la cintura (…).
Se suma a ello que la madre de la víctima, (…), luego de tomar conocimiento de lo acontecido
concurrió a la Seccional 8va. de la Policía de la Argentina a radicar la denuncia, explicando que (…)
luego de besar a su hija en el cuello también "(…) la toco en su partes íntimas, concretamente en su
vagina" (sic).
Del informe médico de fs. (…) se desprende que al momento del examen la damnificada presentaba
"(…) sugilación en lateral derecho de cuello, data aproximadamente mayor a 48 horas".
Además el Licenciado (…) del Cuerpo Médico Forense concluyó que su discurso fue espontáneo, con
elaboración inestructurada, conservando lógica y coherencia, que reconoció interacciones físicas de
valor inapropiado y sexual y que era compatible con la categoría de verosimilitud.
Por lo tanto, los elementos reseñados analizados de manera armónica permiten convalidar el
resolutorio.
A la contundente imputación se agrega que se constató la lesión en el cuello, cuyo modo de producción
se condice con lo relatado por la víctima.
Por otro lado lo dictaminado por el licenciado (…) permite descartar que la niña hubiera sido inducida
por un tercero.

8
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

El ámbito de privacidad en el que suelen cometerse este tipo de delitos impone que sus antecedentes
sean valorados de acuerdo a la sana crítica y de forma amplia. En este caso el estudio realizado por el
profesional interviniente, evaluado en conjunto con el resto de la prueba, da certeza al decisorio.
Dicho ello, consideramos que la menor posee capacidad para transmitir episodios de esta naturaleza, lo
que constituye un aporte especialmente valorable, máxime si el examen practicado sustenta la
veracidad de la imputación.
Hemos sostenido en supuestos análogos que "(…) delitos como los aquí investigados se definen
justamente desde la persona del abusado, es decir, desde la víctima (…) circunstancia que adquiere
sobrada trascendencia en tanto, conforme lo demuestra la experiencia, por sus características propias
este tipo de sucesos se desarrollan habitualmente en un ámbito de absoluta intimidad y sin la presencia
de otros testigos (…)" (1).
En definitiva, los elementos reseñados en los párrafos que anteceden son suficientes para acreditar la
materialidad del evento como así también la intervención de (…).
En consecuencia, no logrando la defensa conmover el pronunciamiento impugnado, el Tribunal
RESUELVE: CONFIRMAR el punto I del auto de fs. (…), en cuanto fuera materia de recurso de
apelación. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini, Pinto. (Sec.: Carande).


c. 32727/14, Y., H. D.
Rta.: 18/02/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correcc., Sala VI, c. 6755/2013, "Rubín, Eduardo Mario s/procesamiento",
rta: 13/12/2012.

ABUSO SEXUAL.

Con acceso carnal, agravado por haber sido cometido por el encargado de la guarda del menor.
Procesamiento. Importancia del relato brindado en cámara Gesell y la coherencia de éste con las
conclusiones a las que arribaron los psicólogos. Hechos imputados que podrían tener entidad potencial
suficiente para alterar el normal desarrollo psicosexual del joven. Confirmación.

Fallo. "(...) contra el punto I el auto de (fs. ...) a través del cual se dispuso procesar a B. por
considerarlo autor penalmente responsable del delito de abuso sexual con acceso carnal en función del
delito de abuso sexual simple agravado por haberse cometido los hechos por el encargado de la guarda
del menor (arts. 42, 44, 45, 55, 119 -primer y tercer párrafo inciso "b" del Código Penal de la Nación).
(...).
Al imputado se le endilgan los sucesos que denunciara A. G. E. en perjuicio de su hijo. Del auto de
procesamiento que luce a (fs. ...) surge que: "El nombrado contó que su hijo C., cuando tenía 13 años
de edad, conoció a J. B., de 78 años de edad, con domicilio en la calle F. XX, piso 4 "E", de esta
Ciudad, en la Plaza Irlanda -ubicada entre la avenida G. y N., y la calle S. y D. Á. de esta Ciudad-, con
quien conversaba y jugaba. A partir de entonces C. comenzó a ausentarse más de su casa - sito sobre la
calle B.-, poniendo como excusa que se iba a jugar con sus amigos. Además notó cambios en la
conducta (...), a fines del año 2011 mantuvo una discusión con C. que ocasionó que éste se fuera de su
domicilio. Luego de ello recibió un llamado telefónico de parte de J. B., quien le manifestó que C.
estaba viviendo con él, ante lo cual el testigo le advirtió que si le pasaba algo a su hijo lo denunciaría.
En ese entonces C. tenía 15 años de edad. (...). Luego a mediados del mes octubre de 2012, el testigo
volvió, a mantener una discusión con su hijo, quien nuevamente se refugió en lo de B.. (...). A fines del
mes de octubre recibió un llamado de la policía por lo cual se constituyó en la casa de J. B. ocasión en
que su hijo le comentó que aquél lo obligaba a mantener relaciones sexuales, mientras que en algunas
oportunidades le ofrecía dinero a fin que accediera a dichas prácticas. Además le comentó que dormían
en la misma cama, y que aquél mantendría relaciones sexuales con otros chicos. Finalmente instó la
acción penal contra J. B. Así, a (fs. ...), se mantuvo una entrevista psicológica de declaración con C. E.
E. -siguiendo los lineamentos establecidos en el art. 250 bis del CPPN-, en dicha oportunidad el menor
relató "(...) Él era distinto me trataba de otra forma. Él se quiso hacer amigo mío .Me invito a su casa.
Me empezó a contar cosas...que le gustaban los chicos, me empezó a contar las cosas que hacía, eso fue
después, porque primero se propasó conmigo, (...). Cambio "porque me tocaba... no me gustaba que me
toque", "(...)", "comíamos, mirábamos tele, yo estaba en la computadora, o hacíamos la limpieza y el
me daba $ 10" Tocaba "la cola", "(...)". "Él siempre me mostraba la pastilla viagra para que tengamos
eso". "Se enojaba él quería que hagamos eso, y yo le decía que no. A veces se calentaba mucho y casi
me pegaba". "Decía que tenía relaciones con otros chicos . . .yo era muy chico, no quería que me haga
eso". "(...)"; "Estuve como dos meses con él, mi papá no estaba muy de acuerdo con que yo me quede,
eso provocaba discusiones"; "yo no era muy consciente. A veces me pegaba. . .me pechaba. . ."(...)". .
."(...)". Los hechos imputados, de haber ocurrido efectivamente, podrían tener entidad potencial
suficiente para alterar el normal desarrollo psicosexual del joven. Luego del debate producido en la
audiencia y analizado el legajo, consideramos que la decisión de la jueza de grado debe ser
homologada. (...). En este sentido, contamos con la firme imputación de C. E. E., quien manifestó su
versión de lo ocurrido en ocasión de llevarse a cabo la entrevista en Cámara Gessell, relato que fue
ponderado por el profesional interviniente como verosímil (ver informe de (fs. ...). Se aduna la pericia

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realizada por especialistas del Cuerpo Médico Forense que concluye que el damnificado "…no
presenta en su procesamiento psíquico propensión a la sobrecarga imaginativa patológica, ni tendencia
a la fabulación. No presenta al momento del examen sensoperceptiva, ni ideación de índole psicótica.
Presenta sintomatología al maltrato y victimización sexual…" (ver informe de fs. ...). Sentado lo
expuesto, lo informado por los profesionales intervinientes tornan verosímil la denuncia.
Dable es señalar también que la convivencia entre B. y E. no es una cuestión controvertida. Nótese que
el departamento en que cohabitaban, de pequeñas dimensiones, contaba con un comedor y una
habitación con una única cama, la cual presumiblemente compartían, dado que el inmueble carecía de
sillones y/o colchones donde el menor podría haber pernoctado (declaración del Subinspector Gastón
Darío Vallejos (fs. ...) y vistas fotográficas de fs. ...), extremo que otorga aún más credibilidad a los
hechos en estudio. Otra cuestión que tampoco entra en disputa es que la relación entre aquellos tuvo su
inicio a los 12 años de E. Sobre ello, nótese que en tal extremo de la vida, un niño se encuentra
virtualmente privado para consentir una relación de tal naturaleza (pernoctar en la misma cama junto a
otro hombre, con el que no lo unen lazos de sangre, y de mas de 70 años de edad), atendiendo a la falta
de desarrollo de sus facultades intelectuales y volitivas, por considerarlo inmaduro para ejercitar esa
libertad, sumado a la particular situación en que B. se encontraba respecto al aquel, en razón de los
deberes particulares inherentes a las obligaciones asumidas. Todo ello, da cuenta de la situación de
vulnerabilidad del menor al inicio de la relación, extremo que puede delimitar la dinámica de la
relación entre ambos. Bajo esta línea de análisis, no se puede atender al planteo efectuado por el
Defensor Público Oficial en cuanto a que la denuncia surge, casualmente, en un período en que la
convivencia entre ambos estaba desgastada por el supuesto abuso de confianza perpetrado por parte de
E. en perjuicio de B. Por otra parte, el recurrente sostuvo que los dichos del denunciante, en cuanto a la
práctica de penetración anal a la que fue sometido como sujeto pasivo, se contradicen con los informe
médicos los cuales darían cuenta que el imputado se encuentra impedido de realizar tal práctica sexual,
por haber sido sometido a dos cirugías prostáticas. (...). De este modo, nótese que el informe no es
definitorio en relación al impedimento alegado por la defensa.
Asimismo, el damnificado manifestó que el imputado era usuario de comprimidos a fin de llevar a cabo
la erección "el compraba esa pastilla y teníamos [relaciones sexuales]". Por otro lado, el recurrente se
agravió por cuanto no fue valorado el allanamiento dispuesto en la morada de B., a fin de dar con el
material pornográfico que E. dijo existía en la computadora de aquel. Si bien asiste razón a la defensa
en ese punto, lo cierto es que no es por si solo motivo para desvincularlo del proceso, pues no excluye
las pruebas de cargo que se presentan en su contra. De este modo, la firme imputación por parte del
damnificado, sumado a la incorporación de indicios relevantes, resultan suficientes para sospechar que
el imputado participó en la comisión del hecho que se le atribuye. (...). Por lo expuesto, el Tribunal
RESUELVE: CONFIRMAR el punto I el auto de (fs. ...) en cuanto ha sido materia de recurso (art. 455,
CPPN). (...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala I, Bunge Campos, Rimondi. (Prosec. Cám.: Castrillón).


c. 42091/12, B., J.
Rta.: 13/02/2015

ABUSO SEXUAL.

1) Con acceso carnal agravado por tratarse de una víctima menor de 18 años y por aprovechar la
situación de convivencia. Procesamiento. Hechos que tuvieron lugar cuando era menor y con
posterioridad a que la damnificada cumpliera los 18 años. Descripción de los hechos sucedidos cuando
era mayor que no revisten relevancia penal. Situaciones en las que no habría habido violencia.
Confirmación parcial respecto de los hechos ocurridos cuando la damnificada era menor de edad. 2)
Corrupción de una menor de 18 años agravado por tratarse de una persona conviviente y encargada de
la guarda de la víctima. Procesamiento. Delito cuya comisión no pudo extenderse más allá de la fecha
en la que la damnificada cumplió 18 años. Necesidad de tener en cuenta la fecha del llamado a prestar
declaración indagatoria. Suspensión del tratamiento del recurso a los efectos de examinar la vigencia
de la acción penal.

Fallo: "(…) I. (…), convoca al Tribunal el recurso de apelación interpuesto por la defensa contra el
auto documentado a fs. (…), en cuanto se dispuso el procesamiento de G. E. F. y se mandó a trabar
embargo sobre sus bienes por la suma de un millón siete mil sesenta y siete pesos con sesenta y nueve
centavos ($ 1.007.067,69).
Se atribuye al nombrado haber promovido la corrupción y abusado sexualmente de A. L. P. -nacida el
19 de septiembre de 1984-, mientras convivían bajo el mismo techo y él era encargado de su guarda
por ser su padrastro.
En lo sustancial, las prácticas abusivas tuvieron lugar en reiteradas ocasiones, desde fines del año 1991
y comienzos de 1992, época en la que vivían en la provincia de Entre Ríos y ella contaba con siete años
de edad.
Por entonces, F., que se había casado con la madre de la nombrada, comenzó a realizarle tocamientos
en su vagina, y luego empezó a introducirle los dedos, a lo cual la damnificada accedía por temor. En
1998 el imputado se mudó a esta ciudad y empezó a vivir con L. P. -hermana de la denunciante-, de
modo que las situaciones de abuso se interrumpieron. A fines de 1999 la víctima también vino a

10
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

Buenos Aires y, en un momento dado, quedó viviendo sola con el encausado, quien aprovechó para
introducirle los dedos en la vagina mientras se encontraba en la vivienda y en una oficina en donde
ambos trabajaban. Finalmente, cuando A. L. tenía diecisiete años de edad, el imputado la llevó a un
departamento sito en L. XX, y ella -por no tener a quién recurrir- accedió a que tuvieran relaciones
sexuales, lo que posteriormente ocurrió en muchas oportunidades, en algunas de las cuales también la
obligó a que le practicara sexo oral y él hizo lo propio con ella, situación que se extendió hasta el año
2009, en que la víctima -que tenía 25 años- se fue a vivir a la ciudad de N. Por otra parte, se le imputa
haber promovido la corrupción de L. P. -nacida el 9 de diciembre de 1979- al abusar sexualmente de
ella en reiteradas oportunidades, desde que tenía doce o trece años de edad y aprovechando la situación
de convivencia, eventos que habrían ocurrido en la provincia de E., en los E. U. d. N. -pues cuando L.
cumplió quince años viajó a Disney World junto a F. y allí se concretó la relación sexual-, y finalmente
en la ciudad de Buenos Aires, donde la víctima y el imputado empezaron a convivir cuando ella
contaba con diecisiete o dieciocho años de edad, relación de pareja que subsiste hasta la actualidad
(…).
Luego de haber tenido por acreditados los hechos descriptos, el señor juez de instrucción procesó a F.
como autor de los delitos de abuso sexual con acceso carnal agravado por tratarse la víctima de una
menor de 18 años y por aprovechar el imputado la situación de convivencia en concurso ideal con
corrupción de una menor de 13 años, ambas figuras legales mediante violencia psicológica que generó
un sometimiento que impidió a la víctima consentir libremente y por tratarse el imputado del encargado
de su guarda y educación y persona conviviente, en relación con A. L. P. (arts. 119, tercer párrafo y
último párrafo, incs. "b" y "f", y 125, segundo y tercer párrafo, del Código Penal) en concurso real con
corrupción de menor de 18 años agravada por tratarse de persona conviviente y encargada de la guarda
de la víctima, en relación con L. P. (art. 125, segundo y tercer párrafo, del Código Penal).
II. Luego de escuchar tanto los agravios expuestos por la defensa como las réplicas de la parte
querellante y del Ministerio Público Fiscal, el Tribunal -de acuerdo con cuanto sostuvo en una ocasión
anterior (causa nro. 935/2012, "F. G." del 30 de diciembre de 2014)- entiende que el tenor de los
planteos traídos a su consideración torna conveniente separar el tratamiento de tres cuestiones distintas.
Por un lado, se abordarán los hechos que damnificaron a A. L. P., respecto de los cuales -como se verá-
la prueba reunida se estima suficiente para sustentar el procesamiento de F., mas no con los alcances
dispuestos en la instancia anterior.
Por otro lado, en torno del accionar que damnificaría a L. P., habrá de suspenderse el tratamiento de la
apelación, a la espera de que se examine la vigencia de la acción penal. Finalmente, se abordará el
recurso interpuesto contra el monto del embargo.
III. Hechos que damnificaron a A. L. P. Respecto de estos sucesos, las particularidades del caso y las
diferenciaciones que establece la ley en torno de los sujetos pasivos de los delitos contra la integridad
sexual imponen -ante todo- trazar una distinción, dentro del extenso lapso durante el que se
desarrollaron, entre los hechos que habrían acaecido mientras la damnificada era menor de dieciocho
años de edad y los que habrían ocurrido posteriormente.
III. a) En lo que atañe al primer tramo, puede decirse que las evidencias colectadas, valoradas según las
reglas de la sana crítica, conducen a tener por suficientemente acreditados los hechos denunciados,
cuya relevancia penal no aparece discutida.
Se cuenta, en tal sentido, con el relato de la querellante, quien describió los actos abusivos que sufrió
desde que tenía siete u ocho años de edad -consistentes en tocamientos y en la introducción de dedos
en su vagina- y puntualizó, además, la ocasión en que, cuando contaba con diecisiete años, F. la llevó
"…al cuarto, y yo, que no tenía ni a dónde ir, ni a quién recurrir, no tuve más remedio que acceder a
sus intenciones. Se puso en la cama, se sacó la ropa, me bajó el pantalón, me sacó la ropa interior, me
quedé desnuda y me introdujo su pene en mi vagina, pero como era mi primera vez, costó bastante, por
lo que primero lo introdujo sin nada, y luego se colocó un preservativo y comenzó a moverse con su
pene introducido en mi vagina…" (….).
Por otro lado, el informe de la licenciada Claudia Egle Fortich, del Cuerpo Médico Forense, concluyó
en que el relato de la damnificada tuvo una estructura lógica adecuada, con aporte de detalles,
descripción de interacciones y correlativo compromiso emocional, todo lo cual condujo a la profesional
a catalogar su discurso como verosímil. Consignó además que, al momento del examen, A. L. P.
presentaba un trastorno de angustia concomitante a situaciones de abuso que han impactado de manera
traumática en su psiquismo, compatible con abuso sexual (…).
A ello se aduna que, al prestar declaración, luego de la peritación psicológica de todo el grupo familiar
(…), la licenciada Fortich ratificó que el relato de A. L. es verosímil; precisó que halló indicios de
abuso; indicó que "teniendo en cuenta la situación familiar… que todos hablaban de que había una
vinculación laboral porque trabajaban en la empresa de F., más teniendo en cuenta que es una
vinculación que viene desde chicos, se puede inferir que hay una situación de sumisión…"; y
finalmente aclaró, de adverso a lo argumentado por la defensa en la audiencia oral, que la cuestión
económica "no parece ser importante …no se advierte ninguna motivación económica" para formular
la denuncia (…).
Por otra parte, en el informe pericial psiquiátrico se determinó que A. L. presentó un cuadro de
síndrome de estrés postraumático que requería asistencia psicológica y eventualmente apoyatura
psicofarmacológica; que los hechos denunciados tenían la entidad necesaria para ser generadores del
cuadro que la afectaba; y que las conductas a las que habría sido sometida tendrían entidad suficiente
para generar dificultades en su vida de relación íntima (…).

11
Similares conclusiones se extraen del testimonio de la licenciada Ana María Churruarín, quien atendió
a A. L. P. desde mayo de 2010 hasta enero de 2011, al sostener que ella le relató "episodios que le
generaron un sometimiento, una vida con mucho sufrimiento … debido a una relación de agresión y
violencia verbal, física y sexual" por parte de F. Precisó que se trató de un sometimiento gradual, que
alteró su normal desarrollo.
Refirió además que la paciente presentó un cuadro depresivo severo, con un estado de confusión,
debido a que, por un lado, se sentía liberada del sometimiento vivido y, por otro, sufría el desarraigo
familiar, a lo que se sumaron trastornos en el sueño, sentimientos de culpa y la necesidad de ser
protegida y amparada por alguien (…).
Además destacó "el total dominio y asimetría entre la víctima y victimario", quien "ejerce un poder que
permite por un lado fomentar conductas tales como, negocios de emprendimiento, ubicando en este
caso a A. L. 'como si fuese una empresaria' pero permaneciendo el poder en el manejo afectivo a través
de actos violentos, generando miedo y represalias más severas cuando aparece desobediencia. En esta
relación perversa, el sujeto víctima queda devenido en objeto de goce de un adulto...
El victimario representaba en esta joven un padre al que llamaba 'papá'. La función paternal debe
entenderse como la posibilidad de renunciar a ser propietarios de los hijos, es por eso que A. L. recusa
ese lugar, deja de ubicarse en el lugar de víctima y lucha por romper el sometimiento con el victimario.
Rompe el secreto" (...).
Finalmente, refuerzan la credibilidad de la versión de la aquí querellante los testimonios de E. H.T.
(…), M. C. M. -tía de aquélla- (…) y C. M. M. -hija de M. C. y prima de A. L.- (…).
Las evidencias reseñadas, adecuadamente valoradas en su conjunto, conducen a tener por
suficientemente acreditado ese lapso de los sucesos denunciados, sin que los agravios expuestos por la
defensa alcancen para desmerecer la conclusión apuntada.
En consecuencia, la Sala estima que, respecto de este primer tramo de los hechos que denunció A. L.
P., sin perjuicio de la calificación legal que en definitiva pudiere corresponder, debe homologarse el
procesamiento decretado.
III. b) En cambio, en relación con los episodios acaecidos a partir del 19 de septiembre de 2002, fecha
en la que A. L. P. cumplió los dieciocho años de edad, el Tribunal considera que las pruebas recogidas
no avalan la conclusión de que las conductas atribuidas a F. revisten relevancia penal.
La circunstancia de que, con posterioridad a esa fecha, el imputado y la víctima hubieran mantenido
relaciones sexuales, en modo alguno permite prescindir de la distinción que la ley traza -al precisar los
sujetos pasivos de los delitos contra la integridad sexual- entre las personas menores y mayores de
edad.
Sobre este punto, en líneas generales puede decirse que la sistemática del Código Penal se atiene al
criterio de que, cuanto menor es la víctima, las afectaciones a ese bien jurídico presuponen un injusto
más grave, y que -en cambio- el círculo de las acciones típicas se reduce en relación con las personas
mayores de edad, a medida que se reconoce alguna relevancia al consentimiento que pueden prestar
para un acto de acercamiento sexual.
Tal entendimiento se compadece, en particular, con el agregado que se efectuara al art. 63 del CP,
según el cual "En los delitos previstos en los artículos 119, 120, 124, 125, 125 bis, 128, 129 -in fine-, y
130 -párrafos segundo y tercero- del Código Penal, cuando la víctima fuere menor de edad la
prescripción de la acción comenzará a correr desde la medianoche del día en que éste haya alcanzado la
mayoría de edad" (incorporado por el art. 1° de la ley 26.705 B.O. 5/10/2011).
Y puesto que en el caso se encuentra fuera de discusión que el art. 125 del Código Penal solamente
puede aplicarse al tramo de los hechos que tuvo lugar con anterioridad al 19 de septiembre de 2002,
pues el delito de corrupción contempla como sujetos pasivos a las personas menores de dieciocho años
de edad, resta examinar -en función de lo que sostuvo el señor juez de grado el posible encuadre de los
episodios ulteriores en las previsiones del art. 119, tercer párrafo, del ordenamiento sustantivo.
Como es sabido, cuando la víctima es mayor de trece años, la configuración del delito de abuso sexual
con acceso carnal allí previsto depende de que medie alguna de las modalidades contempladas en la
ley, es decir, "violencia, amenaza, abuso coactivo o intimidatorio de una relación de dependencia, de
autoridad, o de poder, o aprovechándose de que la víctima por cualquier causa no haya podido
consentir libremente la acción".
En esa inteligencia, la Sala no advierte que la prueba avale la hipótesis de que la damnificada, en el
tramo que aquí interesa -es decir, cuando ya era mayor de dieciocho años de edad hubiera sido objeto
de violencia, bajo la modalidad que en la instancia anterior se catalogó como una "violencia
psicológica".
Cabe recordar que, en este punto, el señor juez de grado se ha basado en la bibliografía que consultó
sobre el tema y destacó que el imputado había manipulado a la denunciante, de modo que el
consentimiento que ella prestó no sería válido.
De adverso, se pondera -ante todo- que A. L. P., al narrar lo sucedido cuando era mayor de edad, no ha
descripto situaciones que puedan ser calificadas como el ejercicio de violencia que tipifica el art. 119
del Código Penal.
En particular, las repetidas agresiones mencionadas a fs. (…), más allá de que no lucen corroboradas
por otras constancias, en el propio relato de la víctima no aparecen vinculadas con los episodios en los
que medió acceso carnal.

12
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

Principalmente, se destaca que -más allá de lo vertido en el escrito de inicio- de la declaración de la


nombrada no se extrae que F. le hubiera exhibido un cuchillo para obligarla a mantener relaciones
sexuales.
Ello, pese a que se menciona en la denuncia (...), en el requerimiento agregado a fs. (…) y en la reseña
de los dichos de la denunciante efectuada en la resolución apelada (...), no consta en el acta que
documentó la declaración respectiva (…).
Y puesto que, al exponer ante el juzgado instructor, más allá de la genérica ratificación de la pieza
inicial que se consignó a fs. (…), la denunciante realizó menciones que difieren de lo allí vertido
(véanse, por caso, las referencias a la edad que tenía cuando se produjo el primer acceso carnal -…: "no
tenía entonces más de 15 años"; y a fs. (…): "tendría 17 años"-), se entiende que ello aconseja atenerse
a lo que declaró en sede judicial.
Desde esa perspectiva, se advierte puntualmente que la alusión a que "una de las veces que me
amenazó lo hizo exhibiendo un cuchillo" no remite -siquiera implícitamente- a un episodio de agresión
sexual (…).
Por otra parte, si bien hay pasajes de su declaración de los que surge que fue obligada a concurrir a
diversos hoteles, donde además de mantener relaciones sexuales, debió practicarle sexo oral a F. y él
hizo lo propio con ella, ninguna mención puntual se advierte acerca del modo concreto en que habría
sido compelida para actuar así en tales ocasiones.
Al contrario, cuando A. L. P. brindó precisiones sobre las circunstancias bajo las que se sintió obligada
a realizar el acto sexual con el imputado, expuso que éste "se ponía a llorar, se hacía la víctima, me
decía que quería tener una hija conmigo y continuaba obligándome a mantener relaciones sexuales…"
(...).
Actitudes como las descriptas, sin embargo, aunque evidencian el propósito de convencer a la
denunciante para el concúbito, no exhiben aristas que avalen la mención de que fue obligada y,
consecuentemente, no se adecuan a las previsiones de la figura típica en cuestión.
En esta ponderación, por lo demás, se estima que no es dable prescindir de cuanto relataron C. y A. A.
P., hermanos de la querellante, quienes aludieron a un mail en el que ésta, en relación con el imputado,
"decía que lo amaba…" (...).
Así, si bien no es posible descartar la posibilidad de que los tempranos abusos que padeció la
denunciante hubieran incidido en el consentimiento que, siendo ya adulta, prestó para mantener
relaciones sexuales con F., no avalan la hipótesis de que, por entonces, estuviera sometida a forma
alguna de violencia o no pudiera consentir dichos actos.
En síntesis, los elementos de convicción reunidos -al menos de momento- no sustentan la hipótesis
esbozada en el auto recurrido en torno de que A. L. P. continuó siendo víctima de abusos sexuales por
parte del imputado F. luego de alcanzar la mayoría de edad, razón por la que este aspecto de los hechos
habrá de ser excluido del procesamiento que aquí se confirma.
IV. Hechos que damnificaron a L. P. En la instancia anterior se ha procesado a F. como autor del delito
de corrupción de una menor de dieciocho años, agravado por tratarse de una persona conviviente y
encargada de la guarda de la víctima (artículo 125, segundo y tercer párrafo, del Código Penal), en
relación con la nombrada L. P. Al respecto, la simple lectura de la imputación permite advertir que en
el caso, de haberse perpetrado este delito, su comisión no pudo extenderse más allá del 9 de diciembre
de 1997 -fecha en la que la nombrada cumplió los dieciocho años de edad-.
Desde esa perspectiva, puesto que el primer llamado a prestar declaración indagatoria en relación con
este hecho se dispuso el 12 de mayo de 2014 (…), la Sala estima que, en función de las previsiones de
los arts. 62 y ss. del Código Penal, se impone, con carácter previo a cualquier decisión sobre el fondo
del asunto, examinar la vigencia de la acción penal.
En consecuencia, habrá de suspenderse el tratamiento de la apelación deducida al respecto.
V. Finalmente, la defensa ha cuestionado el monto del embargo que se ordenó, por considerarlo
excesivo.
Al respecto, en atención al modo en que será resuelto el asunto y puesto que el procesamiento
decretado sólo habrá de ser confirmado, parcialmente, respecto de una de las imputaciones que se
formularon contra F., teniendo asimismo en cuenta que A. L. P. reviste el carácter de querellante y que
un abogado particular ejerce la defensa del nombrado, se estima que, a los fines previstos por el
artículo 518 del canon ritual, resulta suficiente la suma de doscientos cincuenta mil pesos ($ 250.000).
Por ello, esta Sala RESUELVE: I. CONFIRMAR el pronunciamiento documentado a fs. (…), punto 1,
en relación con los hechos que damnificaron a A. L. P., y solamente en lo que atañe al lapso
comprendido hasta que la nombrada alcanzó la mayoría de edad.
II. SUSPENDER el tratamiento del recurso contra dicho auto, en relación con los hechos que
damnificaron a L. P., a fin de que se examine la vigencia de la acción penal. III. REDUCIR el monto
del embargo trabado en el punto 3 de la citada resolución a la suma de doscientos cincuenta mil pesos
($ 250.000)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Divito, Cicciaro, Scotto. (Sec.: Besansón).


c. 22.265/13, F., G. E.
Rta.: 10/02/2015

13
ABUSO SEXUAL.

Agravado por haber mediado acceso carnal. Agravio de la defensa: solitarios dichos de la víctima
vivencia un alto grado de vulnerabilidad psicosocial. Damnificada que fue conteste en su versión en las
cuatro oportunidades que declaró. Relato que impresionó a los peritos como verosímil. Confirmación.

Fallo. "(…) por la defensa oficial de A. M. C. contra la resolución de (fs. …) en cuanto lo procesa por
considerarlo autor del delito de abuso sexual agravado por su comisión mediante acceso carnal (art.
119, tercer párrafo, CP). (…).
El agravio central del recurrente se circunscribe a la falta de elementos probatorios que puedan sostener
el auto de mérito atacado, porque sólo se cuenta con el testimonio de la víctima, quien vivencia un alto
grado de vulnerabilidad psicosocial, que influye en la acusación que dirige hacia el imputado en autos.
(…), la situación de vulnerabilidad señalada en el informe psicológico de (fs. …) es la que le permite el
avance de la causa a la etapa siguiente al contextualizar sus dichos en las conclusiones arribadas por los
profesionales que la asistieron.
La joven T. E. ha sido conteste en las cuatro oportunidades a las que fue requerida su versión de los
hechos: relató el hecho a las autoridades del colegio al que asiste, a su madre, a la perito psicóloga del
CMF que confeccionó el informe reseñado y a la licenciada que mantuvo la entrevista en los términos
del art. 250 bis, CPPN (cfr. fs. …). Su relato, de acuerdo a las percepciones glosadas a (fs. …),
impresionó como verosímil, presentando indicadores psicológicos compatibles con los hechos
denunciados. (…). Así, el tribunal RESUELVE: CONFIRMAR la resolución de (fs. …) en todo cuanto
ha sido materia de recurso (art. 455, CPPN). (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala I, López González, Pociello Argerich. (Sec.: Biuso).


c. 63526/13, C., A. M.
Rta.: 12/03/2015

ABUSO SEXUAL.

Agravado por resultar el imputado ascendiente de la víctima. Procesamiento. Tocamientos corporales


impúdicos efectuados por el padre a su hija menor de edad. Actos dotados de connotaciones sexuales.
Conocimiento del significado sexual del acto que se ejecuta y su carácter abusivo. Confirmación.

Fallo: "(…) III.) La imputación de (…), se ve corroborada con las conclusiones de la Cámara Gesell en
donde si bien la menor no se refirió al tema y al ser preguntada sobre la relación con su padre dijo no
querer verlo, no recordar nada y se mostró ansiosa -moviéndose en la silla y tapándose la cara con un
libro-, esta reacción situación según la entrevistadora podía atribuirse a una modalidad defensiva (…).
Además destacó que no responder a interrogantes de la profesional respecto a su progenitor no
implicaba que las situaciones abusivas no hubiesen sucedido, máxime cuando antes de terminar el
encuentro la niña refirió que podía consultar a su terapeuta las que cosas que no recordaba, lo que
evidencia que ya se las había narrado con anterioridad (…).
Resulta fundamental el estudio de fs. (…), donde (…) expresó que "se encuentra aquí por lo de (…) (a
quien no nombra como padre) y que no desea verlo por tres razones, te las voy diciendo de más
importancia a menos: nos daba besos en la boca, nos bañaba, dormíamos con él en la misma cama. Al
ser consultada si esas conductas eran inapropiadas: la niña refiere si, besos en la boca es algo que los
grandes no deben hacer a los niños y no es lindo; respecto del baño indica: nos tocaba en todo el
cuerpo; respecto del dormir juntos dice sin pijama. Al ser preguntada sobre sus sentimientos frente a
tales conductas la niña dice: mal, no eran cosas agradables, ni nada lindo. Respecto a cuando ocurría
esto manifiesta: desde hace un montón de tiempo, eso era antes y después de que se separaron me
parece, cuando él nos buscaba y nos llevaba el fin de semana, dos veces por mes. Se le consulta
respecto de si le manifestó esto a su madre y por qué y respondiendo: si, luego de que se separaran que
empezó a llevarnos porque eran cosas que él me hacía que no me gustaban y le había preguntado si
estaba bien (…)" (sic.).
Ese informe destacó que: "El relato de la niña resultó espontáneo e inestructurado, observándose un
aumento de la ansiedad al narrar los mismos (...). En la evaluación conjunta del material obtenido en el
presente estudio, se registró en (…) una personalidad en formación, observándose tensión emocional y
ansiedad, así como un rechazo específico respecto de la figura paterna. (…) presenta en sus
producciones indicadores emocionales, físicos, sociales y conductuales compatibles con situaciones de
violencia familiar y/o maltrato infantil. Estos son: enuresis y la interferencia de esa dolencia en su vida
social, produciendo un deterioro de la misma; alteraciones en el sueño; conductas de autoagresión;
conductas regresivas; ambivalencia afectiva; tensión emocional y ansiedad. Todo ello, implica un
sufrimiento psíquico significativo, que repercute en su desarrollo psicoemocional y proceso de
individuación" (sic).
Se suman los estudios de fs. (…) del Cuerpo Interdisciplinario de Protección contra la Violencia
Familiar, el de la Licenciada (…) y de los médicos que dan cuenta de la enuresis padecida por la menor
(…).

14
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

Resultan también plausibles las conclusiones de la perito de la querella (…), en cuanto a que el cuadro
de estrés post traumático que presenta la damnificada se vincula a los hechos denunciados y a que el
abuso sexual es una de las formas más severas de maltrato infantil.
(…) Los agravios del apelante sobre la atipicidad de la conducta, no son compartidos ya que lo que se
preserva en estos delitos "es el derecho de toda persona a la reserva sexual de su propio cuerpo,
entendida ésta como el derecho a la incolumnidad del consciente y voluntario comportamiento sexual y
al desarrollo pleno de la propia personalidad que se alcanza cuando se puede ejercitar aquel derecho"
(…) (1). "Es el derecho a la disponibilidad del propio cuerpo en cuanto a su sexualidad y eso es lo que
se quiebra cuando se produce una agresión sexual. Es decir, la libertad de hacer o dejar que nos hagan,
que debe ser entendida en su aspecto negativo, o de reserva, como el derecho a decir "no" a diversas
expresiones de contenido sexual" (2).
Un tocamiento puede o no ser un abuso sexual según el significado que tenga la acción en el contexto
en el que se ha realizado, y para ello son relevantes las condiciones en el que se produzca.
El proceder del imputado al efectuar tocamientos corporales impúdicos a su hija mientras la bañaba o
dormían juntos en ropa interior o cuando la besaba en la boca diciéndole que era su novia, supera
claramente el trato que un padre le puede dispensar a un hijo (…), es inequívoco y objetivamente
impúdico y así permite probar el dolo que exige la figura penal, el que debe abarcar: conocimiento del
significado sexual del acto que se ejecuta y su carácter abusivo.
En consecuencia se advierte el dolo requerido por la figura de abuso sexual (artículo 119, primer
párrafo, del Código Penal) pues los actos estuvieron dotados de connotaciones sexuales (3).
Se ha dicho que comete este delito "el que efectuó tocamientos genitales y beso con libidinosidad a una
niña" (4).
Recordamos que "la acción típica comprende en la genérica denominación de abuso sexual a todo
acercamiento o contacto con el cuerpo del sujeto pasivo, con sentido sexual, acciones que son abusivas
por no mediar para los acercamientos o contactos el consentimiento del sujeto pasivo, lo que surge de
la enunciación de los procedimientos típicos que puede haber empleado el autor (…). El tipo abarca los
tocamientos corporales de carácter inequívocamente sexual que no constituyan un sometimiento
gravemente ultrajante (párr. 2°, ni importen consumación o intento de acceso carnal (párr. 3°).
En cuanto a los actos constitutivos de abuso sexual, existen dos criterios bien diferenciados. Por un
lado, el criterio que sigue la doctrina objetivista, según la cual no se requiere la exteriorización de una
finalidad libidinosa por parte del autor, sino tan sólo que los actos sean objetivamente impúdicos,
bastando para la configuración del tipo el dolo o la intención del autor de efectuar el tocamiento. Y, por
otro, aquel que sigue la doctrina subjetivista, que exige que el autor haya obrado con ánimo libidinoso.
Sobre el punto, la solución acertada parece ser aquella que propone que sólo frente a actos que resulten
sexualmente equívocos (v.gr., beso, masaje, caricia, abrazo o palpación), cabe considerarse si se
realizaron o no con el fin de satisfacer un impulso erótico (…).
(…), el Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el punto I del auto de fs. (…), en cuanto ha sido materia
de recurso. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini, Filozof. (Sec.: Oberlander).


c. 50.085/11, C., S. M.
Rta.: 09/03/2015

Se citó: (1) Daray, María Florencia en Código Penal. Comentado y Anotado. Parte Especial. Dirigido
por Arce Aggeo-Báez. Cáthedra Jurídica 2013. Tomo 2., pág. 266/7; (2) De Luca-López Casariego,
"Delitos Contra la integridad sexual", Hammurabi 2009, p. 28; (3) Donna, Edgardo A. "Derecho Penal.
Parte especial", Rubinzal-Culzoni, 2ª edición, 2005, p. 511/512; (4) Romero Villanueva, Horacio,
Código Penal de la Nación y Legislación Complementaria. Anotado con jurisprudencia, Abeledo
Perrot, 4°ed. 2010, pág. 471.

ABUSO SEXUAL.

Sobreseimiento. Fiscal que recurre. Denuncia efectuada por la Directora General de una Fundación,
ante la Procuraduría de Trata y Explotación de Personas del Ministerio Público de la Nación debido a
que se presentó una madre que refirió que su hija sufrió varios hechos de abuso sexual. Causa conexa
en donde se denunciaron mas hechos de explotación de menores respecto del mismo imputado.
Agravios expuestos por la fiscalía que merecen ser atendidos. Necesidad de llevar a cabo medidas de
prueba. Revocación.

Fallo. "(...) recurso de apelación deducido por el agente fiscal contra el auto de (fs. ...) que sobreseyó a
E. C. A. (art. 336, inc. 2° del CPPN).
"(...) denuncia efectuada por la Sra. Directora General de la Fundación (...), ante la Procuraduría de
Trata y Explotación de Personas del Ministerio Público de la Nación. Ello, en razón de la presentación
que realizara en esa Fundación la Sra. M. B. S. R., quien denunció los hechos de abuso sexual de los
que habría sido víctima su hija L. de parte del imputado E. C. A. (que se investigan en la causa conexa
XX/2014), agregando en esa oportunidad que en el domicilio del enjuiciado, donde funcionaría un bar,
trabajarían empleadas menores de edad a quienes C. A. hace vestir en forma provocativa con la

15
finalidad de atraer clientes (ver fs. ...)". (...) estimamos que los agravios expuestos por la fiscalía en la
audiencia merecen ser atendidos, por lo que habremos de revocar la decisión en crisis.
En ese sentido corresponde valorar en primer término que en autos aún no se cuenta con el testimonio
de L. S., hija de la denunciante, quien habría permanecido en el lugar de los hechos durante algún
tiempo, suficiente como para dar cuenta de lo que presuntamente allí ocurría y brindar detalles
vinculados al objeto de la presente pesquisa. Tal aporte podría resultar útil a fin de proseguir la
pesquisa y en definitiva dilucidar los extremos de la imputación, (...). En virtud de lo expuesto el
tribunal RESUELVE: REVOCAR el auto de (fs. ...) y DISPONER se dé cumplimiento a lo ordenado
en los considerandos (art. 455 a contrario sensu del CPPN). (...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala I, Bunge Campos, Rimondi. (Sec.: Sosa).


c. 63325/14, C. A., E.
Rta.: 05/06/2015

ABUSO SEXUAL.

Agravado por haber mediado acceso carnal. Procesamiento. Hecho denunciado que no se ha podido
corroborar por ningún elemento de prueba. Revocación. Sobreseimiento.

Fallo. "(...), contra la decisión de (fs. ...), que resolvió dictar el procesamiento del nombrado por
considerarlo autor del delito de abuso sexual agravado por haber mediado acceso carnal -hecho II- (art.
119, párrafos 1 y 3, del Código Penal de la Nación).
Conforme se desprende del acto de indagatoria obrante a (fs. ...), se imputa a J. M. O. haber abusado
sexualmente de T. D. C. V., mediando acceso carnal, siendo la víctima menor de 16 años de edad. Para
ello, mientras la víctima se encontraba acostada durmiendo, se le aproximó el imputado se colocó
detrás, para luego introducirle sus dedos en la vagina, causándole dolor (hecho II). (...) Ello así, pues a
esta altura de la investigación no contamos con elementos objetivos suficientes que avalen los dichos
de la joven T. D. C. V., en cuanto al tocamiento -con acceso carnal- que habría realizado el imputado,
en contra de su voluntad (cfr. fs. ...). En este sentido, no se puede dejar de valorar lo manifestado por
M. J. C. V. -hermana de T. y cuñada del imputado-, quien habría estado presente al momento del hecho
y nada aportó al respeto. Indicó, entre otras cosas, cómo era la relación del imputado con la víctima y
el resto de sus hermanas, lo pudorosa que era T., sin precisar detalle alguno del hecho en sí, (...). A lo
expuesto, se suma la conclusión a la que arribó el Licenciado en Psicología Carlos Carini del CMF, al
estudiar a T. D. C. V. Sobre el punto, sostuvo que: "el análisis del material de estudio obtenido no
presenta indicadores de victimización sexual", "Si bien no presentó indicadores francos asociados a
exacerbación patológica de la imaginación -fabulación-, puede informarse que la peritada denota cierto
aumento en la capacidad de fantasear y proyectar sobre la realidad su mundo interno", "Del análisis
integral del material de estudio peritado no surgen indicadores genuinos de victimización sexual,
compatibles con los hechos denunciados que puedan brindar credibilidad integral al relato de la menor"
(cfr. fs. ...). (...). (...) el hecho denunciado por su progenitora, L. M. V. R. (fs. ...), no ha podido ser
corroborado por ningún elemento de prueba, sumado a que la testigo presencial del suceso -M.- nada
dijo al respecto. (...) Por todo lo expuesto, el tribunal RESUELVE: I. REVOCAR la resolución de (fs.
...), en cuanto ha sido materia de recurso (art. 455 a contrario sensu del CPPN). II. DECRETAR EL
SOBRESEIMIENTO de J. M. O., (...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala I, Bunge Campos, Rimondi. (Sec.: Biuso).


c. 28744/12, O., J. M..
Rta.: 11/06/2015

AMENAZAS.

Sobreseimiento. Expresiones proferidas a través de un mensaje de texto. Relación conflictiva entre las
partes. Elementos de prueba que no demostrarían que las frases fueron enviadas en el marco de una
discusión. Necesidad de profundizar la investigación. Revocación.

Fallo: "(...) I La defensa al momento de exponer la replica realizó un planteo sobre la admisibilidad del
recurso, entendiendo que los argumentos expuestos por el agente fiscal no refutan los motivos en que
se sustenta la decisión impugnada. La Sala entiende que la fundamentación exigida por el artículo 438
del Código Procesal Penal de la Nación es adecuada pues se dirige a rebatir el razonamiento del juez de
grado que considera a las frases como meros exabruptos en medio de un altercado.
II Contrariamente a lo que sostiene el magistrado a quo, del relato de la denunciante de (fs. ...) y lo
dicho por el encartado a (fs. ...), no surge que los mensajes con contenido amenazantes hayan sido
enviados en el marco de una discusión.
Es que no cualquier altercado lleva a considerar atípicas las expresiones amedrentadoras que puedan
proferirse en ese contexto, sino tan sólo y eventualmente una disputa encendida que permita
considerarlas como un mero exabrupto derivado del acaloramiento de un intercambio de palabras (1),
lo que no se advierte en la caso. La ira, fruto de una desgastada relación entre las partes, es insuficiente

16
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

para excluir la tipicidad, más si se tiene en cuenta que las expresiones fueron emitidas por mensaje de
texto.
Por otro lado, es preciso convocar a D. y establecer fehacientemente los motivos por los que no se
hiciera presente ni aportara la documentación que dijo tener en su poder a (fs. ...), en tanto lo
informado a (fs. ...), donde se asentó la existencia de una situación de violencia doméstica con alto
riesgo para la denunciante, podría tener relación con ello.
Por lo expuesto, toda vez que el sobreseimiento dispuesto luce prematuro, el tribunal RESUELVE:
REVOCAR el auto de (fs. ...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala IV, Seijas, González. (Sec.: Morillo Guglielmi).


c. 47.095/14, N., D. O.
Rta.: 06/02/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correc., Sala IV, c. 56759/13, "V.", rta. 31/3/14, c. 33559/12, "F.", rta.: 7/7/14
y c. 69451/13, "R.", rta.: 28/4/14.

APROPIACIÓN DE COSA PERDIDA.

En concurso real con encubrimiento agravado por el ánimo de lucro. Procesamiento. Imputados que
tenían en su poder un teléfono celular sustraído y otro extraviado. Actitud elusiva frente al personal
policial. Elementos de prueba suficientes para afirmar que tenían conocimiento de la procedencia ilícita
de los aparatos en cuestión. Confirmación.

Fallo. "(...)., contra los puntos I y IV del auto de (fs. ...), mediante los que se los procesó en orden al
delito de apropiación de cosa perdida en concurso real con encubrimiento agravado por el ánimo de
lucro. (...).
En efecto, la circunstancia de haberse hallado en poder de los imputados el teléfono celular sustraído a
N. A. M. y el extraviado por P. M., sumado a la actitud elusiva frente al agente N. I. B., resultan un
indicio claro y objetivo respecto del conocimiento que tenían aquellos sobre la procedencia ilícita de
los aparatos en cuestión. Nótese que si bien S. en su descargo refirió haber encontrado los mencionados
celulares en una bolsa en un taxi y que no pudo devolverlos a sus propietarios porque no tenían carga
de batería y consecuentemente no pudo encenderlos para avisar a alguno de los contactos (cfr. fs. ...),
dicha versión debe ser desechada, pues del informe pericial elaborado por la División Apoyo
Tecnológico de la PFA -glosado a ((fs. ... )- surge que para la realización del mismo se procedieron a
encender los aparatos sin haberlos cargado con anterioridad. Puntualmente, allí se consignó: "Se
oprime el botón de encendido del equipo, dando como resultado positivo…", en ambos casos (cfr. (fs.
...) "Descripción N° 3" y "Descripción N° 4"). Igual postura debe adoptarse respeto de la versión de
M., pues en ella se advierte solo una estrategia defensista para descargar la responsabilidad en su
consorte, (...). Asimismo, ambas versiones contrastan con los dichos del agente Bogado (...). Por ello,
entendemos que se encuentran reunidos los requisitos para acreditar provisoriamente la materialidad
del suceso, dado que esta etapa juega un papel meramente preparatorio del verdadero juicio, donde se
desarrollará la confrontación probatoria con amplitud, primando el principio de inmediación con la
prueba producida. (...) el Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR los puntos I y IV del auto de (fs. ...), en
todo cuanto fuera materia de recurso, sin perjuicio de la calificación legal que mejor derecho tenga de
ser aplicada.

C.N.Crim. y Correc., Sala I, López González, Pociello Argerich. (Prosec. Cám.: Castrillón).
c. 13967/12, MATURANO, Cristian Javier y otro.
Rta.: 04/03/2015

ARCHIVO

Por imposibilidad de proceder debido a que las maniobras defraudatorias se habrían cometido fuera del
país. Teoría de la ubicuidad. Posible perjuicio económico en territorio nacional. Revocación.

Fallo: "(...) La juez de grado ordenó archivar las actuaciones en tanto entendió que las supuestas
maniobras defraudatorias, realizadas en perjuicio de M. M. A., se habrían llevado a cabo fuera del
territorio nacional.
Desde dicha hipótesis, debe tenerse en cuenta la doctrina de la Corte Suprema de Justicia de la Nación
acerca de la denominada "teoría de la ubicuidad" (1), según la cual el delito debe considerarse
cometido tanto en el lugar donde se ejecutó la acción como en donde se produjo el resultado. A partir
de tales lineamientos resulta adecuada la aplicación al caso del principio de territorialidad pues, más
allá de que los supuestos actos infieles se habrían desarrollado en territorio ajeno a la jurisdicción
nacional, cierto es que el posible resultado de aquéllos -es decir, la causación de un perjuicio
económico habría ocurrido en territorio nacional (2).
En ese sentido, ponderamos que los imputados residirían en la República Argentina, de modo que no se
descarta que las órdenes de transferencia a las que alude la querella, pudieran haber sido impartidas
desde aquí. A ello se aduna la circunstancia de que las conductas denunciadas habrían tenido por objeto

17
evadir el proceso sucesorio que tramitaba ante el Juzgado Nacional en lo Civil n° (...), todo lo cual
conduce a revocar el auto de (fs. ...) en cuanto fue materia de recurso, lo que así se RESUELVE. (...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala IV, González, González Palazzo. (Sec.: Barros).


c. 59.748/14, ACEVEDO, Matilde y otros.
Rta.: 16/04/2015

Se citó: (1) C.S.J.N. Fallo 271:396. (2) C.N.Crim. y Correc., Sala IV, c. 666/11 "Dib", rta. 2/6/11.

ARCHIVO.

Por imposibilidad de proceder. Resolución impugnada que no resulta una derivación razonada del
derecho vigente aplicable al caso. Proceso en el que existen personas imputadas. Nulidad.

Fallo. "(...) pretensa querellante, con el patrocinio letrado del Dr. Alfredo Rubén Defelipe, contra la
decisión del Sr. juez a quo que luce a (fs. ...) de archivar los actuados de acuerdo con lo dictaminado
por el Sr. agente fiscal a (fs. ...).
Que el pretenso querellante le imputa a L. D. C., A. H. O., C. A. P., y F. A. M. el hecho de haberse
expresado falazmente en el marco del expediente N° "(...) s/ despido", que tramita ante el Juzgado
Nacional del Trabajo N° 45, en ocasión de prestar su testimonio ante el magistrado que lleva adelante
tal procedimiento (fs....). La fiscalía por su parte, consideró que no se contaba de momento con un
hecho cierto sobre el cual los testigos se habrían pronunciado falsamente (...). Que el interlocutorio
objeto de recurso dispone, de conformidad al temperamento adoptado por el representante de la
vindicta pública, que la cuestión carece de consistencia, en tanto de momento, no se sustanció ante el
magistrado laboral la impugnación de las declaraciones testimoniales brindadas por los imputados, por
lo que una decisión en esta sede penal podría eventualmente contradecir la sentencia del magistrado
laboral en el litigio que tiene a su conocimiento. Es por ello que entendió que corresponde archivar las
presentes actuaciones por no poder proceder (art. 195 último párrafo del CPPN). (...), la causal de
archivo por no poder proceder bajo los argumentos expuestos por el juez de la primera instancia no es
una derivación razonada del derecho vigente. (...). Además, tiene dicho el tribunal que si hay personas
imputadas de la comisión de un delito -como es el caso de autos- no procede el archivo o reserva de la
causa, sino resolver su situación procesal conforme alguna de las hipótesis que establece la ley (...),
pues de lo contrario, se estaría reeditando el antiguo sobreseimiento provisional previsto en la anterior
legislación procesal (...), por lo que corresponde declarar su nulidad (art. 123, CPPN), a efectos de que
el Sr. juez a quo ajuste su decisión a la normativa procesal. En consecuencia, el tribunal RESUELVE:
DECLARAR LA NULIDAD de lo resuelto a (fs. ...), debiéndose dar cumplimiento a lo ordenado
precedentemente (art. 123, CPPN). (...)"

C.N.Crim. y Correc., Sala I, Bunge Campos, Rimondi. (Prosec. Cám.: Souto).


c. 19897/14, CAMPOS, Leonardo David y otros.
Rta.: 11/02/2015

ARCHIVO.

Por imposibilidad de proceder. Lesiones leves causadas por accidente de tránsito. Delito dependiente
de instancia privada. Damnificada que en sede judicial especificó que desconocía el alcance de "instar
la acción penal" y que no deseaba promoverla. Fiscalía que no ha invocado razones de seguridad o
interés público. Confirmación.

Fallo: "(…) II. La presente causa se inició en virtud del accidente de tránsito protagonizado por el
imputado y la denunciante,(…) ocasionándose así las lesiones leves constatadas a fs. (…).
Si bien resultan atendibles los agravios del representante del Ministerio Público Fiscal para desvirtuar
los fundamentos de la resolución puesta en crisis -pues no puede soslayarse que las lesiones fueron
constatadas y que no hay motivos para desacreditar la imputación que se dirige contra P.-, hallamos un
impedimento procesal insoslayable para la prosecución de la investigación. (…) en la primera
oportunidad que la damnificada asistió al juzgado, puso en conocimiento que en sede policial cuando
refirió que instaba la acción penal, desconocía los alcances que ello implicaba. Detalló que así lo hizo
debido al momento vivido y el enojo que le había provocado la actitud del conductor del colectivo,
pero que habiendo recapacitado y comprendiendo en ese momento los alcances de la pregunta que se le
formulara, no deseaba instar la acción penal contra el imputado.
No soslayamos que en los delitos dependientes de instancia privada (art. 71 inc. 1° del C.P.) la acción
no es disponible para las partes una vez que fue legalmente instada, pues su ejercicio ya queda sujeto al
régimen de persecución estatal común. (…) entendemos que no se requiere una formalidad especial
para ello, sino que basta con que se evidencie inequívocamente su voluntad de que se proceda en el
sentido indicado. A simple vista, parecería que el acta de fs. (…) cumple con tal requisito, sin embargo
las particularidades que surgen de la lectura íntegra de la causa, nos convencen acerca de la necesidad

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Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

de analizar los alcances del acta de fs.(…) , a la luz de lo manifestado expresamente por F.A.N. a fs.
(…).
(…) siempre que de fs. (…) no surge que le fueran explicados los alcances procesales de lo que
significaba instar la acción, estimamos que la afirmación formulada a fs. (…) merece ser atendida,
pues, no puede ignorarse lo que ha sido explícitamente comunicado por quien, en función de lo
previsto por el art. 72, inc. 2do del C.P., tiene la facultad de promover la acción penal.
Más aún cuando, como sucede en el caso, la fiscalía no ha invocado razones de seguridad o interés
público que ameriten evaluar la cuestión desde otra perspectiva.
Es así que, ante la ausencia de instancia por parte de la agraviada -lo que entendemos en base a los
fundamentos arriba señalados-, la solución no puede ser otra que el archivo de las actuaciones por
imposibilidad de proceder (art. 195, segundo párrafo del CPPN).
(…) se RESUELVE: Confirmar el auto de fs. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, López González, Pinto. (Prosec. Cám.: Daray).


c. 47.739/14, PISTONE, Carlos A.
Rta.: 24/04/2015

ARCHIVO.

Por imposibilidad de proceder. Hecho denunciado: Lesiones leves provocadas por la mordedura de un
perro sin el bozal reglamentario en la vía pública, no instadas por el damnificado. Fiscal que había
solicitado la declaración indagatoria del propietario por entender que el evento es de interés público en
los términos del art. 72, inciso 2° del CP. Hecho que no revistió características de entidad suficiente en
cuanto al resultado lesivo para que se proyecte a una afectación del interés público de modo que
justifique el impulso de la acción de manera oficiosa. Confirmación.

Fallo: "(…) La presente causa se inició por prevención el 19 de diciembre de 2013 a raíz de que una
persona había sido mordida por un perro en el interior del Parque Saavedra.
(…) el damnificado, E.G.R., sufrió heridas en la parte posterior de la rodilla, las cuales se encuentran
corroboradas mediante el certificado de fs. (…) y el informe elaborado por el Cuerpo Médico Forense a
fs. (…), donde se determinó que las lesiones padecidas fueron de carácter leve.
Al momento de declarar en sede policial, la víctima se reservó el derecho de instar la acción penal
(fs…) y citado que fue a ratificar sus dichos en la sede de la fiscalía, afirmó que no deseaba instar la
acción por el suceso, puesto que observó al dueño del can pasearlo con el bozal colocado y tomando
los recaudos necesarios para que el episodio que lo damnificó no se repita (fs….).
No obstante ello, el fiscal interviniente consideró que independientemente de la entidad de las lesiones,
la conducta de L. -al pasear un perro sin el bozal reglamentario-, ameritaba declarar el evento de interés
público en los términos del art. 72, inciso 2° del CP y, en consecuencia, requirió se le tome declaración
indagatoria al imputado.
En este sentido, cabe recordar que el art. 72 del código sustantivo prescribe que "son acciones
dependientes de instancia privada las que nacen de los siguientes delitos…lesiones leves, sean dolosas
o culposas…sin embargo, en los casos de este inciso se procederá de oficio cuando mediaren razones
de seguridad o interés público…". En los casos de este artículo, no se procederá a formar causa sino
por acusación o denuncia del agraviado.
La doctrina señala que el interés público es asimilado al interés jurídico del Estado, es decir que se
procura proteger las instituciones creadas por la Constitución y las leyes, que trasciende el interés
individual y ponen en riesgo concreto o comprometen un bien útil o necesario para la comunidad,
siendo ello lo que habilita al Estado a promover la acción sin consultar la voluntad de la víctima (1).
De tal manera, la excepción a la que se refiere el artículo mencionado refiere, en definitiva, a una
cuestión de política criminal, que debe ser interpretada con prudencia y superar un análisis de
razonabilidad por parte del órgano jurisdiccional.
Con base en ello, entendemos que el episodio cuya investigación es pretendida por la fiscalía, no
revistió características de entidad suficiente en cuanto al resultado lesivo para que se proyecte a una
afectación del interés público -de modo que justifique el impulso de la acción de manera oficiosa-, en
tanto no se verificó, siquiera en forma potencial, que la lesión sufrida por el damnificado hubiere
obedecido a una actitud temeraria que pusiera en riesgo la seguridad colectiva (in re, Sala V, c/n°
408/12, "Muñoz", rta. 27/4/12 y Sala VI, c/n° 58017935/12, "B.C.M", rta. 20/8/13, mutatis mutandi).
(…) ante la ausencia de instancia de la parte interesada, resulta acertada la resolución recurrida, en
tanto la solución no puede ser otra que el archivo de las actuaciones por imposibilidad de proceder
(art.195, segundo párrafo del CPPN).
(…) el tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el auto de fs. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, López González, Pinto. (Sec.: Raña).


c. 51.862/13, LENCINA, Gabriel F.
Rta.: 03/06/2015

19
ARMA.

Tenencia ilegal de arma de fuego. Sobreseimiento. Imputado procesado por robo con armas. Agravio
del fiscal: Posible limitación al eventual juicio oral. Rechazo. Superposición temporal de los tipos
penales que no hace que pierdan su autonomía. Acciones físicas y jurídicamente separables e
independientes. Confirmación. Disidencia: Superposición de acciones típicas durante el suceso. Hecho
dependiente con el robo. Concurso ideal. Revocación.

Fallo: "(…) El señor fiscal recurrió en apelación el auto extendido (…) en cuanto se dispuso el
sobreseimiento de R. G., en orden al delito de tenencia ilegal de arma de fuego de uso civil.
Los jueces Juan Esteban Cicciaro y Mariano A. Scotto dijeron: Se imputó a G. el haberse apoderado en
compañía de N. D. B. (sobreseído a fs. ..) de un automóvil marca "Chevrolet", modelo "Corsa Classic"
y de un bolso que contenía ropa, una agenda electrónica, un teléfono celular Nextel, un estetoscopio y
demás elementos personales de M. A. J. D. Para ello, se valió de un revólver del calibre .32, número X,
de color metálico, oxidado y sin cartuchos a bala en su interior.
El causante fue procesado en orden el delito de robo calificado por su comisión con un arma de fuego,
cuya aptitud para el disparo no pudo tenerse por acreditada de ningún modo (…).
El informe pericial llevado a cabo por la División Balística de la Policía Federal, dio cuenta de que el
revólver secuestrado resultó apto para producir disparos pero de funcionamiento anormal (…).
Una vez establecida la aptitud para el disparo del arma secuestrada, la señora juez de grado declaró no
punible al menor R. G. y lo sobreseyó parcialmente en orden al delito de simple tenencia de arma de
fuego de uso civil sin autorización legal (…).
Frente a ello, el representante del Ministerio Público Fiscal sostuvo que el temperamento asumido
"importaría limitar severamente el eventual juicio a que podría ser sometido… [el causante], pues de
considerar el tribunal de juicio que se estuvo en presencia de un único hecho, el sobreseimiento dictado
en la instrucción sobre una calificación legal, impediría el ulterior juzgamiento so riesgo de afectar el
principio 'ne bis in idem' "… (…).
Al respecto, en torno al concurso entre el robo calificado y la tenencia de arma de fuego, se entiende
que resulta material, ya que la figura de tenencia de arma, cuyo bien jurídico es la seguridad pública, se
trata de un delito de carácter permanente y de peligro abstracto, que se consuma con tener a su
disposición y dentro del ámbito de custodia un arma sin la autorización correspondiente para ello, con
independencia de la motivación del sujeto - aun cuando no se emplee-, lo que equivale a sostener que
tiene autonomía intelectual. Por el contario, el robo agravado por el uso de armas, que tutela la
propiedad, es de carácter instantáneo y se consuma en el momento de su comisión (1).
Es que a juzgar por el hecho inicialmente pesquisado, en el análisis de las conductas criminales no
debe confundirse el modo en que corresponde concursar los tipos penales, porque la circunstancia de
que se superpongan temporalmente durante el robo, no hace que pierdan su autonomía al resultar
acciones físicas y jurídicamente separables e independientes.
Por lo demás, en el caso del sub examen, la tenencia del arma se verificó tiempo después de acaecido el
robo, extremo que corrobora la existencia de dos hechos independientes En virtud de lo expuesto,
votamos por homologar la decisión recurrida, pues el menor G. no resulta punible en razón de lo
prescripto por el artículo 2 de la ley 22.278.
El juez Mauro A. Divito dijo: En torno al tópico vinculado con la relación concursal que media entre la
simple tenencia de arma de fuego de uso civil sin la autorización legal y el robo agravado por su
empleo en las circunstancias apuntadas, entiendo que son aplicables las reglas del concurso ideal
(artículo 54 del Código Penal), conforme al criterio que sostuve en ocasiones anteriores (2).
Ello se justifica en que en el sub examen, cuanto menos durante la ejecución del delito contra la
propiedad, se ha verificado la superposición de las acciones típicas que caracteriza a esa relación
concursal, en tanto "los tipos que convergen presentan una especial conexión -a partir de ciertos
elementos comunes que hace que funcionen como círculos secantes", mientras que en el concurso real,
se carece de esa conexión y los tipos funcionan como círculos independientes (3).
Por lo demás, cabe destacar que aunque la tenencia del revólver del calibre .32, N° X, por parte de G.
se extendió luego del delito contra la propiedad hasta el momento en que fue aprehendido, aquélla
constituye un delito permanente, de modo que -en el caso- no es posible escindir ese tramo del que se
desarrolló mientras se ejecutó el apoderamiento.
En razón de lo expuesto, estimo que el auto recurrido no ha resuelto la situación de G. en orden a un
hecho independiente de aquél por el que fue procesado, razón por la que voto para que se revoque la
resolución apelada.
En virtud del acuerdo que antecede, esta Sala del Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el auto
documentada a fs. (…), en cuanto fue materia de recurso".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Divito (en disidencia), Cicciaro, Scotto. (Sec.: Sánchez).
c. 53.301/14, G., R.
Rta.: 09/06/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correc., Sala VII, c. 29.064, "G., A. C.", rta: 17/04/2006; c. 36820, "C., W.",
rta: 24/06/2009 y c. 18.699/13, "F., M. L.", rta: 14/06/2013. (2) C.N.Crim. y Correc., Sala VII, c.

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Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

2096/12, "H., M. y H. A.", rta: 05/03/2013. (3) Nelson R. Pessoa, Concurso de delitos, Hammurabi,
2006, Bs. As., p. 131.

ARMAS.

Tenencia ilegítima de arma de guerra. Procesamiento. Imputado con credencial vencida de legítimo
usuario que tenía el arma en su domicilio. Afectación al bien jurídico protegido: seguridad pública.
Hecho típico. Confirmación. Disidencia: Atipicidad. Credencial vencida: infracción administrativa a la
Ley Nacional de Armas. Revocación. Sobreseimiento.

Fallo: "(…) Disidencia de la Jueza Mirta López González dijo: La constancia de fs. (…) da cuenta que
C. tuvo regularizada la situación registral ante el RENAR, en relación a la pistola PARA ORDANCE
calibre .45 Plg, nº QH7847, pese a que la credencial de legítimo usuario se encontraba vencida al
momento de su hallazgo en su domicilio.
Ante la situación señalada, el hecho fáctico imputado resulta ser una infracción administrativa en
términos del decreto reglamentario de la ley nacional de armas, sin que se advierta vulnerada la
seguridad pública (en este sentido, causa nº 41531, "Serna", rta: 1/07/11, Sala V, con cita de causa nº
22523, "Illanes", rta. 8/10/03, Sala V).
(…) voto por revocar el auto impugnado y disponer el sobreseimiento de F.R.C. por considerar atípica
la conducta que se le reprocha (art. 336 inc. 3 del C.P.P.N.).
El juez Ricardo Matías Pinto dijo: Considero que el agravio de la defensa, en cuanto se presenta una
infracción administrativa, debe ser rechazado. En efecto, la afectación al bien jurídico "seguridad
pública", comienza desde el momento en que la autorización de legítimo usuario feneció.
En consecuencia, las explicaciones brindadas por C. respecto a las razones por las cuáles no renovó la
autorización ante el RENAR, no resultan suficientes para descartar la tipicidad objetiva ni subjetiva de
la conducta, que se encuentra configurada por la ausencia de la licencia habilitante.
(…) me he pronunciado en anteriores intervenciones (Causa nº 1499/12, "Altarmirano", rta: 6/11/12,
Sala VI con cita de causas nros. 30.889 "Lafón Fariña, Marcos Horacio", rta.: 15/02/07 y 39.297 "B. V.
H.", rta.: 06/05/10, de la misma Sala), por lo que voto por confirmar la resolución impugnada.
El juez Mauro A. Divito dijo: (…) adhiero al voto del colega Ricardo Pinto.
La desvinculación procesal que pretende la defensa no puede disponerse debido a que la tenencia de un
arma de guerra con la respectiva autorización vencida no importa una mera infracción administrativa,
pues la ausencia de licencia habilitante constituye el específico elemento normativo que configura la
ilegitimidad requerida por el tipo penal (en este sentido, causa nº 48073/12, "Cocco", rta: 31/3/14, con
citas de causas nº 39.360, "Pereyra", rta; 27/8/2010 y causa nº 43.134/2012, "Sánchez", rta: 12/9/2013,
todas de la sala VII).
Por lo tanto, y por resultar ajustada a las reglas de la sana crítica la valoración efectuada por el Sr. Juez
de grado, voto por confirmar el procesamiento de F.R.C., en orden al delito de tenencia de arma de
guerra sin su debida autorización legal.
(…)el tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el auto de fs. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, López González, Pinto, Divito. (Sec.: de la Bandera).


c. 65.584/13, CIRELO, Flavio R.
Rta.: 19/02/2015

ARMAS.

Procesamiento. Tentativa de robo agravado por el uso de un arma, en concurso ideal con el de
resistencia a la autoridad. Utilización de una botella para sustraer el arma reglamentaria de la víctima y
posterior utilización para lograr su impunidad. Confirmación.

Fallo: "(…) II.- El Juez Julio Marcelo Lucini dijo: El agente (…) se desplazaba en bicicleta realizando
tareas de prevención cuando tres individuos cerraron su paso, lo increparon y, uno de ellos (el aquí
imputado), le pegó con una botella detrás de su oreja izquierda, lo que provocó que cayera al suelo.
Allí le propinaron patadas en su cuerpo y le sustrajeron su arma de fuego reglamentaria.
En ese instante refirió a una ocasional transeúnte que llamara al 911 y un oficial concurrió en su ayuda,
por lo que luego de ponerse de pie ambos comenzaron a perseguirlos hasta una casa ubicada en Pasaje
(…). Con el apoyo de otros funcionarios decidieron entrar, oportunidad en la que (…) los apuntó con la
pistola de aquél, mientras (…) y (…) los amenazaban con cuchillos.
Ante esta situación, el personal que acudió en su ayuda se trabó en lucha con los sujetos, pero como no
deponían sus actitudes el Cabo (…) efectuó dos disparos al piso, logrando de esta manera reducirlos
(…).
Los efectivos que intervinieron se expresaron en similares términos en cuanto a las circunstancias de
modo, tiempo y lugar (…).
Por su parte, (…) regresaba a su domicilio cuando observó que tres individuos atacaban a un policía
que, en virtud de los golpes, cayó al suelo donde continuaron agrediéndolo. Ante tal situación se
comunicó con el número de emergencia e informó lo sucedido (…).

21
(…) La defensa sostiene que la supuesta sustracción del arma de (…) sólo tiene sustento en su versión.
Pero aún así lo cierto es que al momento de las detenciones uno de los imputados la detentaba y
amenazaba a los preventores.
Por ende, dos son las hipótesis probables de lo ocurrido. Una que se la quitaron luego de agredirlo y la
otra que la obtuvieron de otra manera irregular, pero no hay duda que es más creíble la primera de
ellas.
En cuanto a la calificación legal asignada, teniendo en cuenta que (…) se halla en libertad no
corresponde su tratamiento pues sólo debe analizarse cuando incide en éste u otros institutos.
Además es absolutamente provisoria en este estadio procesal y será el Tribunal Oral que eventualmente
actúe, en virtud del principio "jura novit curia" (art. 401 del Código Procesal Penal de la Nación), el
que la definirá.
Por lo expuesto, voto por confirmar el auto recurrido.
III.- El Juez Mario Filozof dijo: Adhiero en lo sustancial al voto de mi colega preopinante y a su
solución.
Sólo me permito agregar respecto a la calificación legal asignada en la instancia anterior que en
atención a que fue utilizada una botella y luego el arma reglamentaria del agredido, por el imputado
(…) para lograr impunidad, estimo que la misma deviene correcta.
Al efecto cabe mencionar lo dicho por la doctrina: "La aptitud intimidamente que posee un arma es el
fundamento de la figura agravada que contempla el artículo 166 inciso 2º del Código Penal, con
independencia de la efectiva capacidad vulnerante que se acredite en relación a ese elemento y no
puede negarse el carácter de arma, so pretexto de una idoneidad funcional, al objeto que ha servido
para alcanzar la finalidad de la acción delictual. El sentido jurídico de la agravante está claramente
dado por la circunstancia de que el empleo de armas disminuye notoriamente la posibilidad de defensa
del sujeto pasivo, al neutralizar cualquier posible reacción" -el subrayado nos pertenece- (1).
Por lo demás, el arma reglamentaria que portaba (…) fue utilizada con posterioridad al
desapoderamiento con intención de impedir su aprehensión lo que concreta la descripción del injusto.
No es menor que al momento redactado en el párrafo precedente fueron utilizados dos cuchillos con
idéntica intención.
Así voto.
En consecuencia, el Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el punto I del auto de fs. (…), en cuanto
fuera materia de recurso. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini, Filozof. (Sec.: Gallo).


c. 60.095/14, TEVEZ, Walter Eduardo.
Rta.: 05/02/2015

Se citó: (1) David Baigún; Eugenio Raul Zaffaroni "Código Penal y normas complementarias. Análisis
doctrinal y jurisprudencial", Parte especial, Artículos: 162/171, pág. 333, Hammurabi, Buenos Aires,
2009.

ARMAS.

Tenencia y acopio de municiones. Procesamiento. Reforma de la ley 25.886 que no tipificó como
delito la tenencia. Acopio: definición. Escasa cantidad de material para considerar típico el hecho.
Revocación. Sobreseimiento.

Fallo: "(…) II.- De la lectura del decisorio cuestionado se advierte la aplicación de un artículo del
Código Penal que ha sido parcialmente derogado. El artículo 189 bis, en su anterior redacción en el
párrafo 6°, preveía como típica la conducta de tenencia y acopio de municiones y piezas de armas de
guerra, sin perjuicio de lo cual la ley 25.886 (B.O. 5/5/04) no incluyó la primera de dichas conductas,
por lo que quedó desincriminada. En cuanto a la segunda -acopio de municiones-, se mantuvo su
prohibición (artículo 189 bis, inciso 3° del Código Penal), no obstante lo cual advertimos que no se
encuentra configurada la acción típica. La doctrina tiene dicho que "La acción (...) consiste en acopiar,
lo que, para el diccionario, quiere decir juntar, reunir en cantidad alguna cosa. De ahí, entonces, que no
acopia quien tiene en su poder tres o cuatro armas, dado que esa acción no es 'reunir en cantidad', pues
este último vocablo, también para el diccionario, consiste, en un cierto número de unidades y, en la
aceptación suficiente, porción grande o abundancia de algo" (1).
"El 'acopio' se puede definir como la reunión considerable de materiales superior a lo que el uso común
o deportivo pueda justificar (Soler), y con finalidades distintas a la de colección…" (2).
La Corte Suprema de Justicia de la Nación descartó la existencia de acopio en un hecho de secuestro de
tres armas, cuarenta y cinco municiones calibre 9mm. y tres cartuchos 12mm. (3) (…) el material
secuestrado (v. fs…), consistente en 17 cartuchos de bala, no puede ser considerado como un acopio,
toda vez que no constituye la reunión de una considerable cantidad de materiales que resulte superior al
uso común, y sin tener la entidad para abastecer a otras personas que justifica la peligrosidad y
potencialidad dañosa del bien jurídico tutelado.
Por lo tanto, la conducta endilgada resulta atípica.(…) el tribunal RESUELVE: REVOCAR el auto de
fs. (…). y disponer el SOBRESEIMIENTO de F.M.B."

22
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

C.N.Crim. y Correc., Sala V, López González, Pinto. (Sec.: Poleri).


c. 59.497/13, BALLESTERO, Fabián.
Rta.: 14/05/2015

Se citó (1) : Carlos Fontán Balestra, Derecho Penal, Parte Especial, décimo sexta edición actualizada
por Guillermo A. C. Ledesma, Lexis Nexis Abeleto Perrot, año 2002, págs. 619/620. (2) D'Alessio,
Andrés José - Divito, Mauro A., Código Penal de la Nación, 2ª Ed. Actualizada y ampliada, La Ley,
2011, Tomo II, pág. 909. (3) C.S.J.N., "Torres, Cristina Beatriz y otro", rta. 1996/12/06, Fallos
323:544.

AUDIENCIA ORAL.

Reforma procesal (Ley 26.374). Procedimiento en Cámara. Letrado patrocinante que asiste sin el
querellante a la audiencia. Cuestionamiento planteado por la defensa. Informe que constituye una
actividad técnica. Validez.

Fallo: "(…), con motivo del recurso de apelación deducido por la querella contra el auto documentado
a fs. (…), en cuanto se dispuso el sobreseimiento de G. D. V. en orden al delito de lesiones leves y
amenazas coactivas en concurso real entre sí.
Liminarmente, en torno a las manifestaciones de la defensa referidas a la incomparecencia del
querellante, esta Sala ha sostenido que el letrado patrocinante de la querella se encuentra habilitado
para fundamentar el recurso de apelación en la audiencia oral ante la alzada, pues al constituir ese
informe una actividad técnica, en la que únicamente los letrados pueden tomar la palabra, la exigencia
de la mera presencia física del querellante importaría un rigorismo ritual excesivo (1).
(…) Por ello, esta Sala del Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el auto documentado a fs. (…), en
cuanto fuera materia de recurso.
Costas de alzada por su orden".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Cicciaro, Scotto. (Sec.: Besansón).


c. 8397/14, DIAZ VASALLO, Gabriel.
Rta.: 17/03/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correc., Sala VII, c. 35.757, "Lorefice, Osvaldo Daniel", rta: 24/09/2008 y c.
35.729,"S, C. J.", rta: 11/02/2009.

CALUMNIAS E INJURIAS.

Desestimación por inexistencia de delito. Agravio de la querella: Denuncia por desobediencia


desestimada. Prueba suficiente para afirmar que hubo calumnias e injurias. Rechazo. Elementos de
prueba que no indican necesariamente una falsedad en la atribución de la desobediencia. Confirmación.

Fallo: "(…) La querellante S. M. A. recurrió en apelación la resolución extendida a fs. (…), en cuanto
se desestimaron las actuaciones por inexistencia de delito.
La asistencia técnica se agravió en relación con la valoración discernida en el auto impugnado, al
entender que se encuentra acreditado que la denuncia por desobediencia que se le siguió a A. resultó
infundada y falaz, cuyo único objeto era desacreditar a su ex esposa, y que se cuenta con los elementos
esenciales para tener por configuradas las calumnias (…).
Por el contrario, el Tribunal entiende que la decisión impugnada debe ser homologada.
En tal sentido, con respecto a los delitos de injurias y calumnias invocados por la querella, es dable
señalar que la desestimación que se dictara en las actuaciones iniciadas a instancias del causante, no
supone per se la existencia de aquéllos (1).
Ello, pues el hecho de que un proceso finalice con el sobreseimiento o desestimación, en virtud de que
el juez entendiera que el episodio no era delictuoso, no determina sin más la procedencia de una
querella por calumnias, pues existiría la posibilidad de que quienes pueden recurrir a la justicia para la
averiguación de un suceso se abstengan de hacerlo ante la amenaza de tener que responder a una acción
privada.
Por ello, cuando en otro proceso se desestiman las actuaciones, al igual que frente a un sobreseimiento
o absolución, dicha decisión no tiene siempre validez como prueba de la falsedad de la imputación en
un juicio ulterior por calumnias o injurias (2).
En esa senda, se extrae del dictamen y auto relativos a la causa número 25.800/14 "A., S. M.
s/resistencia o desobediencia a funcionario público" que A. no había sido notificado de la suspensión
del régimen de visitas.
Ello permite inferir que lo denunciado en el marco de dicho legajo no se aprecia necesariamente como
una falsedad de la atribución, requisito indispensable para la configuración del delito de calumnias.
En consecuencia y siempre que no se vislumbra la existencia de los delitos previstos por los artículos
109 y 110 del Código Penal, esta Sala considera que la decisión impugnada debe ser homologada.

23
Por lo expuesto y sin motivos para apartarse del principio general de la derrota en materia de costas
(artículo 531 del Código Procesal Penal) esta Sala del Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el auto
documentado a fs. (…), en cuanto fuera materia de recurso, con costas de alzada".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Cicciaro, Scotto. (Prosec. Ad Hoc.: Sposetti).


c. 54.775/14, ALONSO, Gustavo Marcelo.
Rta.: 29/04/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correc., Sala VII, c. 37.375, "Ebert, Zulma Beatriz", rta: 21/09/2009. (2)
C.N.Crim. y Correc., Sala VII, c. 760071954/2012/1/CA3 y c. 760071954/2012/2/CA4, "Pardo, José
Luis", rta: 28/11/2014.

CALUMNIAS E INJURIAS.

Sobreseimiento, extracción de testimonios para investigar desobediencia e imposición de costas en el


orden causado. Agravio de la querella: sobreseimiento prematuro, necesidad de imponer astreintes y
revocación en la imposición de costas. Temperamento desvinculatorio correcto debido a que arribaron
a un acuerdo, homologado por el magistrado, que en el cual el imputado se retracto y se comprometió a
publicar la retractación. Validez de la extracción de testimonios debido a la no publicación de la
retractación. Confirmación parcial. Revocación e imposición de costas al querellado.

Fallo: "(…) I. La querellante sostiene que el sobreseimiento luce prematuro por cuanto B. no ha
publicado en "Facebook" su retractación, conforme fuera acordado, de modo tal que aquella no se ha
tornado efectiva.
En relación a la sanción pecuniaria solicitada, aduce que resulta necesaria a fin de lograr el
cumplimiento del mandato judicial, siendo insuficiente la remisión de testimonios al tribunal que
resulte competente para investigar la posible desobediencia en que el nombrado pudo haber incurrido.
Por último, cuestiona el modo de imposición de las costas por ser contrario a lo prescripto en el art. 425
del Código Procesal Penal, en cuanto dispone que "si el querellado por delito contra el honor se
retractare, en dicha audiencia o al contestar la querella, la causa será sobreseída y las costas quedarán a
su cargo".
III. Analizados los agravios expuestos por la parte recurrente en relación al fondo del asunto y a la
imposición de la sanción pecuniaria solicitada, debidamente rebatidos por la defensa, entendemos que
corresponde homologar los puntos I y III del resolutorio puesto en crisis, en tanto se revocará el punto
II del mismo auto, por los fundamentos que a continuación se expondrán.
Las partes arribaron a un acuerdo en la audiencia de conciliación realizada ante el tribunal (art. 425,
segundo párrafo, C.P.P.N.) en la que el querellado se retractó expresamente y la querella aceptó. En la
misma audiencia y a pedido de G. se convino la publicación en los términos acordados (art. 425, tercer
párrafo, última parte, ibídem).
La forma fue homologada por el juez de la causa, e intimado en sucesivas oportunidades a pedido de la
querella, por el incumplimiento denunciado.
En esa dirección, el sobreseimiento dispuesto y la extracción de testimonios por el posible delito de
acción pública, resultan acertados.
En este aspecto compartimos la postura de la doctrina en cuanto el incumplimiento de la orden de
publicación puede hacer incurrir al autor en el delito de desobediencia, tal como lo ordenó el juez (1).
La improcedencia de la aplicación de los astreintes fue debidamente decidido por el juez Candela y a
sus argumentos nos remitimos.
Donde no coincidimos es en las costas por el orden causado, debiendo ser soportadas por el querellado
B., en las dos instancias, por estricta aplicación de la norma citada que está en sintonía así también con
el art. 531 del mismo cuerpo procesal.
En consecuencia y por idénticos fundamentos, se le impondrán también al querellado las costas de
alzada.
(…) el tribunal RESUELVE: I. Confirmar los puntos I y III del auto de fs. (…). II. Revocar el punto II
del auto de fs. (…)e imponer las costas al querellado (artículo 425, segundo párrafo y último del
Código Procesal Penal de la Nación).

C.N.Crim. y Correc., Sala V, López González, Pinto. (Sec.: Raña).


c. 46.994/14, BONAVENA, Natalio O.
Rta.: 10/06/2015

Se citó (1) Código Penal de la Nación comentado y anotado, D´Alessio-Divito, Ed. La Ley, 2° edición
actualizada y ampliada, T° II, pag. 199, con cita de Soler, Sebastián, Derecho Penal Argentino, T° III.
Ed. Tipográfica Editora Argentina, Buenos Aires, 1992; Fontán Balestra, Carlos, Derecho Penal, Parte
Especial, actualizada por Guillermo Ledesma, Abeledo Perrot, Buenos Aires, 1995 y Núñez, Ricardo,
Manual de Derecho Penal, Parte Especial, 2° edición actualizada por Víctor Reinaldi, Editora Córdoba,
Córdoba, 1999.

24
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

CAUCIÓN.

Pedido de restitución de la caución rechazada. Imputado que fue involucrado en un nuevo proceso y
por ello le revocaron la excarcelación. Caución cancelada y restitución de la garantía (art. 327, inc 1º
del C.P.P.N.). Revocación. Restitución.

Fallo: "(…) es preciso señalar que la imposición de una caución real tiene por objeto garantizar la
comparecencia del imputado.
(…) la circunstancia de que el imputado se haya visto involucrado en un nuevo proceso y que, en
consecuencia, se haya revocado su excarcelación en la presente (fs…), acarrea la liberación del dinero
afectado a la fianza.
Ello, teniendo en cuenta que conforme surge de la letra del artículo 327, inciso 1 del código adjetivo,
en caso de que la excarcelación sea revocada, la caución se cancelará y las garantías serán restituidas.
(…) en los artículos 329 y 330 del mismo código, la ejecución del fiador sólo es posible si el imputado
no compareciere tras la citación del tribunal, circunstancia que no se da en el caso, por lo que
corresponde restituir la suma oportunamente depositada.
(…) el tribunal RESUELVE: REVOCAR el auto de fs. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, López González, Divito. (Sec.: Poleri).


c. 58.133/14/1, ALVAREZ, John F.
Rta.: 26/03/2015

CAUCIÓN.

Real. Agravio: monto fijado no acorde con las posibilidades del imputado. Depósito que al hacerse
efectivo demostró que fue proporcional a la situación. Confirmación.

Fallo: "(…) III.- De la constancia de fs. (…) surge que se ha oblado, lo que demuestra que fue
determinada de acuerdo a la situación socio-económica de (…) y a las exigencias procesales cuya
presunta afectación motivó el presente recurso.
En virtud de lo expuesto, el Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el auto de fs. (…), en cuanto ha sido
materia del recurso. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini, Filozof. (Sec.: Carande).


c. 10.328/15, BRITO, Matías Leonel.
Rta.: 18/03/2015

CAUCIÓN.

Real. Tiempo transcurrido sin satisfacerse, imposibilidad de cumplimiento. Confirmación,


modificación del monto.

Fallo: "(…) II. Teniendo en cuenta que han transcurrido veintidós días sin que hubiese sido oblada,
entendemos que debe ser modificada por resultar obvio imposible cumplimiento para el beneficiario.
Por ello, teniendo en cuenta las características del hecho que se le atribuye, como el estado de
contumacia verificado en las actuaciones que registra ante el Tribunal Oral de Tres Arroyos, Pcia de
Buenos Aires y la causa en trámite ante el Tribunal Oral (…), corresponde CONFIRMAR el auto de fs.
(…) en cuanto concede la excarcelación de (…), MODIFICANDO su monto al de (…) pesos (…), lo
que así se RESUELVE. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini, Filozof. (Sec.: Williams).


c. 23.741/15, LENCINA, Jeremías Nahuel.
Rta.: 19/05/2015

CAUCIÓN.

Real. Agravio de la defensa: sustitución y, subsidiariamente, reducción del monto. Imposición a efectos
de garantizar la sujeción al proceso. Imputado que, puesto en libertad, no compareció a las citaciones, a
pesar de estar debidamente notificado. Depósito a realizar al día hábil siguiente de la concesión.
Confirmación.

Fallo: "(…) II.-) Solicita la parte su sustitución y, subsidiariamente, la reducción de su monto.


La inconducta procesal exteriorizada por el imputado quien, tras obtener la libertad (…), fue declarado
rebelde tras no comparecer a los llamados de la Fiscalía y del Juzgado pese a estar debidamente
notificado de las citaciones cursadas (…), torna razonable el tipo y el monto de caución impuesta.
Por lo demás, el depósito de la fianza al día hábil siguiente de la concesión de la excarcelación ilustra
que no se ha violado la manda del art.320 del Código Procesal Penal.

25
En virtud de lo expuesto, el Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el auto de fs. (…), en todo cuanto
fuera materia de recurso de apelación. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini, Filozof. (Sec.: Oberlander).


c. 14.679/15, GALINDEZ, Esteban Damián.
Rta.: 22/06/2015

CIRCUNVENCIÓN DE INCAPAZ.

Procesamiento. Imputados que aprovechándose de la situación de vulnerabilidad de la víctima lo


indujeron a firmar varias hipotecas con el fin de enajenar el inmueble de su propiedad, en el cual se
domicilia. Perjuicio patrimonial. Informe pericial del C.M.F., diagnosticó:"retraso mental leve, con
detrimento en su capacidad para realizar actos de cierta complejidad y limitación en su comprensión y
discernimiento frente a actos jurídicos como los que llevara a cabo". Disposición de nuevas medidas
tendientes al esclarecimiento del hecho. Revocación. Falta de mérito.

Fallo. "(...) contra la resolución de (fs. ...) que en los puntos dispositivos I) a IV) dispuso el
procesamiento de V. S. A., A. J. R., V. R. R. M. y A. O. T. en orden al delito de circunvención de
incapaz, en calidad de coautores.
Por otro, por el Dr. Jorge O. Chueco, contra la resolución de (fs. ...) que en el punto dispositivo I)
dispuso el procesamiento de D. A. en orden al mismo delito y calidad, y mandó trabar embargo sobre
sus bienes hasta cubrir la suma de quinientos cincuenta mil pesos. (...). Conforme surge de las actas
indagatorias, a los imputados se les atribuyó que "abusándose de las necesidades de R. E. M. en virtud
de sus facultades mentales disminuidas, haberle hecho firmar varias hipotecas con la finalidad de
ejecutar la propiedad donde se domicilia, sita en calle (...). En el año 2002, M. había conseguido un
crédito hipotecario a través de una financiera (...). Ante esta situación, M. (...), refiriéndole que debía
comparecer a la escribanía "(...)" (...) firmó, sin saberlo una hipoteca por U$S 9.500 (...). Entonces, en
la misma escribanía le hicieron firmar otra hipoteca por U$S 22.750 (en favor de (...)). A partir de allí,
los imputados comenzaron a "hostigarlo" para que les entregase la propiedad en cuestión para así
saldar la hipoteca, a lo que M. se negó. No obstante, continuó pagando las cuotas hasta que en agosto
de 2008 le manifestaron que no debía hacerlo puesto que tenía que esperar una nueva renovación. En el
año 2009 volvieron a citarlo, esta vez en la escribanía "(...)" (...), donde le constituyeron una hipoteca
por U$S 37.800 (en favor de (...)). Actualmente, en el marco del expediente n° (...) de ese juzgado
civil, se encuentra en discusión un pedido de suspensión de subasta respecto del inmueble (...). (...). Por
este camino, advertimos que "si bien la Dra. Estela Noemí Taylor, del Cuerpo Médico Forense
concluyó que al momento del examen M. presenta un retraso mental leve, con detrimento en su
capacidad para realizar actos de cierta complejidad y limitación en su comprensión y discernimiento
frente a actos jurídicos como los que llevara a cabo, resultando factible que dichas características de su
personalidad sean evidenciadas por terceros", lo cierto es que no se ha evaluado en profundidad y con
relación a las fechas en que los distintos actos jurídicos fueron realizados. En este sentido, aunque no
se ignora que se menciona que el padecimiento es de nacimiento, tampoco se ha agregado constancia
médica alguna sobre su atención a lo largo de sus años. Estos extremos, conforme fuera requerido por
la defensa de Asenjo, ameritan sean evacuados. De la misma manera, parece útil escuchar a los vecinos
y al jefe o compañeros de trabajo, dado que se desempeñaría en el Correo Argentino desde hace 35
años. En este caso, deberá requerirse informes respecto del lugar de cobro de sus haberes. En cuanto a
la situación económica, también debe profundizarse la pesquisa por cuanto, es por lo menos,
sospechoso, la sucesión de los préstamos por parte de los acusados, más allá de las razones brindadas
en los descargos. (...). Estas medidas, a criterio del tribunal, se presentan como necesarias a los efectos
de determinar si la disminución de la capacidad intelectual de M. hubo de ser evidente o notoria para
terceros y, en ese caso, un aprovechamiento de los imputados al momento de suscribir los diversos
mutuos hipotecarios. (...). En mérito a lo expuesto, el tribunal RESUELVE: I. AGREGAR el legajo de
apelación debiendo corregir la foliatura a fin que sea correlativa.- II. REVOCAR los punto dispositivo
I) a IV) de la resolución de (fs. ...) y punto dispositivo I) de la resolución de (fs. ...) en cuanto fueron
materia de recurso (art. 455, CPPN). III. DECRETAR la FALTA de MÉRITO de V. S. A., A. J. R., V.
R. R. M., A. O. T. y D. A. en orden al hecho por el que fueran indagados (art. 309, CPPN). IV.
DISPONER se de cumplimiento a lo que surge de los considerandos. (...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala I, López González, Rimondi. (Sec.: Peluffo).


c. 40274/14, ROSSI, Alberto Juan y otros.
Rta.: 26/02/2015

CIRCUNVENCIÓN DE INCAPAZ.

Procesamiento. Imputados que se aprovecharon de la incapacidad mental de la damnificada para que


efectuara actos jurídicos que resultaron perjudiciales para su patrimonio. Finalidad de adueñarse de sus
bienes. Confirmación.

26
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

Fallo: "(…), convoca al Tribunal el recurso de apelación interpuesto por la defensa contra la decisión
extendida a fs. (…), puntos I, IV y VII, en cuanto se dispusieron los procesamientos de P. M. S., S. G.
S. y J. T. G. Según la intimación formulada, se atribuyó a los nombrados el haberse aprovechado de la
incapacidad mental de A. M. E. M. , de 64 años de edad, para que efectuara diferentes actos jurídicos
que resultaron perjudiciales para su patrimonio, ya que tuvieron la finalidad de adueñarse de sus bienes
(…).
Al respecto, entiende el Tribunal que los elementos reunidos permiten concluir en el juicio de reproche
discernido en la instancia anterior, siempre que se estima corroborada tanto la existencia de los
episodios denunciados como la intervención de los imputados, quienes se habrían aprovechado de la
confianza que la víctima les dispensaba y del estado de vulnerabilidad e indefensión en que se
encontraba a raíz del trastorno de personalidad y depresivo que padecía al momento de los hechos, para
perjudicarla económicamente.
En esa senda, se valoran los informes del Cuerpo Médico Forense, que establecieron que "las
facultades mentales de la causante, en el momento del examen, no encuadran dentro de los parámetros
considerados como normales…", reviste la forma clínica de trastorno depresivo y de la personalidad y
que dado el tiempo de evolución "es verosímil que en las fechas en que se produjeron los actos
obrantes en autos...no contaría con la autonomía psíquica que le permitiera la comprensión del alcance
de sus actos" (…).
Al respecto, el agravio introducido por la defensa -que no cuestiona la existencia de las operaciones
realizadas- relativo a la falta de conocimiento de la incapacidad de M. no puede prosperar, pues no
obstante lo manifestado por la doctora M. C. Z. respecto a que dicha discapacidad "puede no ser
[notoria] para terceros no entrenados" (…), lo cierto es que ello es así "siempre y cuando el estado haya
sido como el de ahora", es decir, al momento de la entrevista (…).
En esa inteligencia, se pondera el relato de M. O. O. R., quien formuló la denuncia por violencia
familiar que tramitó ante el Juzgado Nacional de Primera Instancia en lo Civil n° 7 (expediente X), en
tanto refirió que A. M. M. estaba "en un estado deplorable, sin dientes, con un estado de salud bastante
comprometido…[que] su mente estaba totalmente desquiciada….[y] a simple vista se notaba que
estaba muy deteriorada física y mentalmente…" (…).
A ello se aduna el testimonio de J. C. O., encargado del edificio de la calle G. XX en el que residía la
damnificada, quien resaltó que M. "…tenía mucho miedo de que G. se enojara…es como si le hubieran
lavado la cabeza…una mujer muy sumisa…" (…).
En igual sentido, se valora el testimonio del doctor L. A., médico psiquiatra que a pedido de S. S.
atendió a la víctima. El nombrado destacó que M. padecía un cuadro depresivo, que se trata de una
persona con mucha dependencia y que su patología podía ser advertida por terceros (…).
De ello se extrae que los encausados no podían desconocer el deterioro de la damnificada, ni su
situación de vulnerabilidad y necesidad, en función de la personalidad dependiente y el miedo a vivir
sola o ser internada, pues G. la acompañaba a sus consultas médicas y S. S. habría contactado al
médico tratante, situación que tampoco podía pasar inadvertida para el imputado P. M. S., quien vivió
con M. (…).
En esas condiciones se habrían aprovechado del estado en que se encontraba a raíz de su cuadro
depresivo, pues conforme se estableció, al tiempo de celebrarse los diversos actos jurídicos, tales como
la venta del inmueble de la calle A. y luego las donaciones, la víctima no comprendía cabalmente los
alcances de dichos negocios que a la postre resultaron perjudiciales, a raíz del trastorno de personalidad
depresivo que sufría.
El tipo penal en cuestión reprime la conducta de quien abusa de la incapacidad del sujeto pasivo para
hacerle suscribir un documento que importe cualquier efecto jurídico dañoso (1), extremos que se
encuentran acreditados en la presente, al menos en este estado de la investigación.
Finalmente, es dable destacar que no controvierte la conclusión arribada el hecho de hallarse
cuestionado si los encausados habitaron o no el inmueble de la calle A. XX, pues su venta por un
precio significativamente inferior al de mercado demuestra lo perjudicial de la operación en las
condiciones mencionadas (…).
Por lo expuesto, sin perjuicio de recabar los testimonios sugeridos por la defensa, las diversas
probanzas de cargo reunidas en la encuesta permiten avalar el temperamento previsto en el artículo 306
del digesto ritual.
Por ello, esta Sala del Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el auto documentado a fs. (…), puntos I,
IV y VII, en cuanto fuera materia de recurso".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Cicciaro, Scotto. (Prosec. Ad Hoc.: Sposetti).


c. 43.160/11, S., P. M. y otros.
Rta.: 10/04/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correc., Sala VII, c. 1362/12, "V., A.", rta: 16/10/2012 y c. 21657/13, "N., E.",
rta: 27/10/2014.

CIRCUNVENCIÓN DE INCAPAZ.

Legitimación para querellar rechazada. Sobrina de la víctima respecto de la cual no se encuentra


acreditado que haya sido instituida como heredera por disposición judicial. Confirmación.

27
Fallo: "(…), convoca a la Sala el recurso de apelación interpuesto fs. (…) por M. S. C. contra la
providencia documentada a fs. (…), en cuanto no se hizo lugar a la pretensión de querellarse.
Si bien la situación ventilada en la causa, objetivamente, se ajustaría a la doctrina plenaria fijada por
esta Cámara en el caso "G.", del 9 de abril de 1987, en el marco del tipo previsto en el art. 174, inciso
2º, del Código Penal; debe aprobarse el rechazo formulado en la instancia anterior, puesto que no se ha
acreditado que la nombrada C., quien ha manifestado ser sobrina de la presunta circunvenida, haya sido
instituida heredera por disposición judicial, con arreglo al juego de los arts. 3410, 3412 y 3414 del
Código Civil (1).
Por ello, el Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR la providencia dictada a fs. (…), en cuanto fuera
materia de recurso".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Cicciaro, Scotto. (Prosec. Cám.: Decarli).


c. 75.831/14, A., E. A. y otros.
Rta.: 24/06/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correc., Sala VII, c. 32.752, "V. G., B.", rta: 29/11/2007 y c. 39.387, "O., A.",
rta: 13/09/2013.

COMPETENCIA

Denuncia contra el Jefe y funcionarios del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires y funcionarios
nacionales. Hechos investigados vinculados al ejercicio de sus funciones. Diputados del Gobierno de la
Ciudad y de la Nación que resultaron agredidos en ocasión de ejercer sus funciones. Justicia Federal.

Fallo: "(...) Asiste razón al Fiscal General en cuanto a que en la causa n° (...) -acumulada
materialmente a la presente, conforme (fs. ...)- han sido denunciados no sólo el Jefe y demás
funcionarios del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires -M. M., G. M. y H. G.- sino también
funcionarios nacionales: la Ministra de Seguridad de la Nación, C. R., y el Secretario de Seguridad
Interna, S. A. B. (fs. ...).
Por otra parte, los hechos que se les endilgan guardan clara vinculación con el ejercicio de sus
funciones. De allí, tal como señala el Ministerio Público Fiscal, la actuación de R. y B. "es cuestionada
en términos que comprometerían el buen servicio de sus empleados [y] se ve obstruido el buen
funcionamiento de la institución" (fs. ...). En ese mismo sentido se ha pronunciado la Corte Suprema de
Justicia de la Nación (1).
Por otra parte, en razón de que en el marco de los episodios investigados habrían sido agredidos los
legisladores porteños J. C. C. y P. F. y también el diputado nacional P., quienes en principio se
encontraban en ejercicio de sus funciones, corresponde igualmente por dicha razón que sea la justicia
federal la que intervenga en este proceso.
Sobre el punto, también nuestro Máximo Tribunal tiene dicho que "Debe reconocerse a la justicia
federal el carácter excepcional y estricto, en razón del cual se exige que el funcionario autor o víctima
de un delito se encuentre cumpliendo funciones específicamente federales…. para que, de conformidad
con el art. 3° de la ley 38, se atribuya competencia a dicha magistratura" (2), situación que claramente
se verifica en el caso.
Por ello, la Sala RESUELVE: ASIGNAR COMPETENCIA para entender en esta causa al Juzgado
Criminal y Correccional Federal n° (...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala IV, González, Pociello Argerich. (Prosec. Cám.: Fuertes).
c. 51.454/14, POLICIA METROPOLITANA.
Rta.: 01/04/2015

Se citó: (1) C.S.J.N., Fallos 330:2341, 319:1672. (2) C.S.J.N., Fallos 327:3080.

COMPETENCIA

Sustracción de efectos embargados asignados en custodia y vendidos en el exterior incumpliendo las


normas aduaneras. Infracción Arts. 261 y 263 del C.P. y 864 inc. "a" del Código Aduanero. Hecho
único abarcado por dos figuras penales. Justicia en lo Penal Económico.

Fallo: "(...) Coincidimos con la jueza de grado acerca de que la hipótesis de delito pesquisada,
consistente en la presunta sustracción de efectos embargados cuya custodia le había sido asignada al
causante mediante su venta en el exterior del país, del cual habrían sido sacados sin cumplir con las
normas aduaneras que regulan la exportación de dichos objetos, constituye un hecho único con
encuadre en dos figuras penales distintas (Art. 54 del Código Penal), previstas en los artículos 261 y
263 del Código Penal y 864 inc. "a" del Código Aduanero.
En función de ello, habida cuenta la especialidad del fuero en lo Penal Económico, es allí donde deben
continuar tramitando estos obrados. Cabe recordar en este aspecto la doctrina de la Corte Suprema de

28
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

Justicia de la Nación acerca de que "Cuando existe concurrencia ideal entre un delito común y otro de
índole federal, es a éste fuero al que corresponde continuar con la investigación" (1).
Por ello corresponde homologar la resolución cuestionada, lo que así se RESUELVE. (...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala IV, Seijas, González, González Palazzo. (Sec.: Barros).
c. 63.390/13, GARFUNKEL, Matias.
Rta.: 29/04/2015

Se citó: (1) Del dictamen de la Procuración General, al que remitió la Corte Suprema; Competencia N°
1353. XLI.; Guffanti, Ana María s/ falsificación de firma; 21/02/2006, T. 329, P. 231; en similar
sentido: Competencia N° 118. XXXVIII; Ruidiaz, Gerardo y otros s/ infr. arts. 200, 201 y 210 del C.P.
y ley 22.362; 30/04/2002, T. 325, P. 902; y Competencia N° 500. XXXVII; Reinoso, Olivio Fabián s/
infr. art. 292 del C.P. incidente de incompetencia ; 17/07/2001, T. 324, P. 2093.

COMPETENCIA.

Cheque de pago diferido. Instrumento de crédito. Ausencia de la tipicidad objetiva del delito de estafa.
Justicia en lo Penal Económico.

Fallo: "(…) La representante del Ministerio Público Fiscal recurrió en apelación la decisión extendida a
fs. (…), punto VI, en cuanto no se hizo lugar a la incompetencia en favor de la justicia en lo Penal
Económico.
Al respecto, se destaca que las operaciones fueron realizadas por medio de valores de pago diferido,
circunstancia que impide, de acuerdo al criterio sustentado por esta Sala, tener por configurado el delito
previsto por el artículo 172 del Código Penal.
En efecto, cabe recordar que "los cheques de pago diferido son instrumentos de crédito y no de pago,
por lo que su entrega a cambio de una contraprestación, no implica en ningún caso simultaneidad,
elemento necesario para la configuración del delito de estafa. Si no existió simultaneidad entre las
contraprestaciones, la entrega de los valores no constituyó un ardid determinante del delito de estafa"
(1).
En consecuencia, sin perjuicio del posible conocimiento de los imputados acerca de la imposibilidad de
hacer frente a los pagos de las operaciones realizadas, la descripción fáctica del hecho investigado
impide considerar que se verifica la tipicidad objetiva del delito de estafa, esto es, el despliegue de un
ardid determinante de un error en el sujeto pasivo, que motiva una disposición patrimonial perjudicial
(2).
En virtud de lo expuesto, corresponde atribuir competencia a la justicia en lo Penal Económico
(artículo 25 de la ley 24.050).
Por ello, el Tribunal RESUELVE: REVOCAR la decisión adoptada a fs. (…), en cuanto ha sido
materia de recurso".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Cicciaro, Scotto. (Prosec. Ad Hoc.: Sposetti).


c. 62.428/14, FARCUH, Patricio N.
Rta.: 20/02/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correc., Sala VII, c. 32.587, "Mannara Juan Domingo", rta: 02/12/2007; c.
1.111/12, "Clavijo, Ramiro", rta: 21/08/2012; c. 17.290/2013, "NN. Dte. Ciampinelli", rta: 11/12/2013.
(2) C.N.Crim. y Correc., Sala VII, c. 40.560, "Alonso, Ceferino y otros", rta: 28/04/2011.

COMPETENCIA.

Falsificación de licencia de conducir expedida por municipio. Agencia Nacional de Seguridad Vial que
autoriza a los organismos competentes de cada jurisdicción a expedirlos. Justicia de Instrucción.

Fallo: "(…) Lo sostenido por la defensa de R. A. P. en punto a que la Ley Nacional de Tránsito se dictó
con alcance nacional y que la falsificación de una licencia de conducir debe ser investigada por la
justicia federal (…), no conmueve el temperamento recurrido.
Ello se entiende así al tener en cuenta que la Agencia Nacional de Seguridad Vial -creada por la ley
26.363- no posee la facultad de otorgar ni emitir tales documentos, sino que es la encargada de
autorizar a los organismos competentes de cada jurisdicción provincial, municipal y de la Ciudad
Autónoma de Buenos Aires a expedirlos de acuerdo con los estándares establecidos en dicha
normativa, certificando y homologando, en su caso, sus centros de emisión o impresión (art. 4, inciso
"e" y "f").
En consecuencia, tal como ha sostenido la Corte Suprema de Justicia de la Nación, "…no es
competente la justicia federal para conocer en la causa en la que se investiga la falsificación de una
licencia de conducir expedida por un municipio, pues no se afectan intereses nacionales o el normal
funcionamiento de alguna institución de esa naturaleza..." (1).
Por ello, esta Sala del Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR la resolución dictada a fs. (…), en cuanto
ha sido materia de recurso".

29
C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Cicciaro, Scotto. (Sec.: Sánchez).
c. 62.225/14, PESSOTO, Raúl Alfredo.
Rta.: 06/03/2015

Se citó: (1) C.S.J.N., Fallos 323:857, y C.N.Crim. y Correc., Sala VII, c. 25.778, "Baudoin, Matías
Javier", rta: 09/02/2005.

COMPETENCIA.

Obtención de servicio de señal de cable mediante conexión clandestina. Actividad por parte del
imputado que supera la resistencia opuesta por la cosa. Robo. Justicia de Instrucción.

Fallo: "(…) El juez Mauro A. Divito dijo: (…) la conducta destinada a obtener el servicio de señal de
cable mediante una conexión clandestina habría involucrado la fuerza en las cosas a la que hace alusión
el artículo 164 del Código Penal (in re, Sala VII, c/n° 39494, "L.", rta. 14/9/10).
(…) pondero lo expuesto por el apoderado de la querella en la audiencia oral, en punto a que el "TAP"
posee una traba de seguridad que sólo puede ser retirada con una herramienta específica perteneciente a
la empresa o bien, ejerciendo violencia, pues esa circunstancia requiere una actividad por parte del
imputado que supera la resistencia opuesta por la cosa.
(…) entiendo que corresponde que sea el juzgado de instrucción el que continúe interviniendo, por lo
cual me inclino por revocar el auto apelado. Así voto.
El juez Ricardo Matías Pinto dijo: Adhiero a los argumentos expuestos por mi colega preopinante y
emito mi voto en idéntico sentido.
(…) entiendo que en el caso tampoco es posible descartar que el suceso denunciado encuadre en la
figura de hurto agravado por escalamiento (art. 163, inciso 4° del Código Penal).
(…) sin perjuicio de que, en principio, podría verificarse en autos la violencia que se habría empleado
sobre el "TAP", deben ponderarse las características de la conexión clandestina que motivó el inicio de
la presente investigación (cfr. imágenes de fs. (…) e informe técnico de fs. (…), cuya señal tendría
como punto de partida el domicilio del imputado ubicado en la calle XX, de esta ciudad; como
también, la diversidad de elementos allí secuestrados, los cuales, según la opinión de técnicos
especialistas, son aptos para tender una red como la denunciada (fs. …).
(…) resulta necesario que, de momento, continúe interviniendo el juzgado con competencia más
amplia (art. 36 del C.P.P.N.). Así voto.
(…) el tribunal RESUELVE: REVOCAR el auto de fs.(…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, Pinto (por su voto), Divito (por su voto). (Sec.: Raña).
c. 30.293/13, MOLINA, Héctor L.
Rta.: 18/03/2015

COMPETENCIA.

Sustracción de libros por parte un empleado de una librería por la entrega voluntaria por parte de un
tercero. Imputado procesado por administración fraudulenta. Justicia de instrucción.

Fallo: "(…) III.- El planteo interpuesto no prosperará. Compartimos la decisión adoptada por el
magistrado de la instancia anterior en cuanto a que el accionar criminal desplegado por el imputado
puede constituir el delito de defraudación por administración fraudulenta.
Como empleado de la firma se le reprocha el haber violado el deber de fidelidad derivado de un
compromiso previo, que se debió caracterizar por el recto gobierno y custodia de la propiedad ajena
(1).
En este sentido, la circunstancia de que se hubiere apropiado de los cinco libros no como consecuencia
de un acto furtivo por él desplegado, sino por una entrega voluntaria por parte de un tercero, permite
avizorar un posible abuso de confianza (2).
(...) correspondería que tome conocimiento el Tribunal de más amplia competencia.
(…), el Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el auto de fs. (…) en cuanto fuera materia de recurso.
(…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini, Pinto. (Prosec.: Gallo).


c. 28.710/14, ANDUZE, Juan Carlos Martín.
Rta.: 27/03/2015

Se citó: (1) "Código Penal de la Nación. Comentado y anotado", D´ Alessio, Andrés José - Divito,
Mauro A.; Tomo II, Ed. La Ley, 2da. Edición actualizada y ampliada, año 2011, página: 722; (2)
C.N.Crim. y Correcc., Sala VI, c. 40.043, "García, Miguel Ángel", rta.: 9/09/10.

30
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

COMPETENCIA.

Sustracción de un bien a un paciente internado con síndrome de Guillain-Barré. Aprovechamiento del


infortunio. Hurto agravado (art. 163 inc. 2 del C.P.). Justicia de Instrucción.
Fallo: "(…) La defensa oficial recurrió en apelación el auto documentado a fs. (…), en cuanto el
magistrado correccional se declaró incompetente en razón de la materia y dispuso la remisión de las
actuaciones a la justicia de instrucción.
Se imputa a S. D. V. el haberse apoderado, entre otros objetos, de la radio que utilizaba el paciente Á.
G. V. T., quien se encontraba internado en el Hospital General de Agudos Dr. Juan A. Fernández.
Según lo manifestado por W. R. Q., propietario del elemento sustraído (…), se lo había entregado a su
amigo V. T. para que escuchara transmisiones radiales mientras se hallaba internado, en razón de
padecer el síndrome de Guillain-Barré, que "ataca el sistema nervioso, dejándolo sin movimiento".
El Tribunal comparte el criterio del señor juez de grado, por cuanto a partir del relato de Risso Quijano
no puede descartarse la aplicación de la figura prevista en el artículo 163, inciso 2° del Código Penal,
pues en principio la imputada habría aprovechado el infortunio particular de V. T., quien se encontraba
transitando una dolencia que lo tornaba particularmente vulnerable en los términos de la figura aludida.
En efecto, cumple anotar que el concepto de infortunio abarca toda situación de padecimiento físico o
moral que normalmente influye sobre el tenedor del objeto, aminorando la vigilancia que suele ejercer
sobre él (1).
En ese sentido, además, la mera posibilidad de que se verifique una figura más gravosa, torna
pertinente el conocimiento de la causa por el juez de instrucción, quien ostenta un mayor espectro
jurisdiccional. Ello, sin perjuicio de que eventualmente se reformule la descripción del hecho intimado
a la encausada.
En consecuencia, el Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR la resolución extendida a fs. (…), en cuanto
fuera materia de recurso".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Cicciaro, Scotto. (Prosec. Ad Hoc.: Sposetti).


c. 7.282/15, VAZQUEZ, Sandra Daiana.
Rta.: 21/05/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correc., Sala VII, c. 964/12, "Fontán, Marcela Viviana", rta: 31/07/2012.

COMPETENCIA.

Imputados que habrían utilizado una llave falsa y otra llave verdadera extraída de una caja fuerte sin
consentimiento de su propietario para ingresar a la habitación del damnificado para materializar la
sustracción. Figura agravada (art. 163 inc. 3º del C.P.) Justicia de Instrucción.
Fallo: "(…) II.- (…) entendemos que los agravios expuestos en la audiencia merecen ser atendidos,
motivo por el cual habremos de revocar el auto cuestionado. En el caso bajo estudio no es posible
descartar -de momento algunas hipótesis delictivas que permitirían la aplicación de la agravante de la
figura en tratamiento -artículo 163, inciso 3° del Código Penal-, por cuanto -según lo denunciado por
A.G. los autores de la sustracción habrían utilizado una llave falsa para ingresar a su habitación y otra
que no fue prestada voluntariamente por aquel para abrir la caja fuerte -dado que se encontraba
guardada dentro de otra caja de seguridad-.
En relación con este último aspecto de la maniobra denunciada, cabe señalar que debe considerarse
llave verdadera sustraída la que se encuentra escondida y es apoderada y posteriormente utilizada por
el autor, pues revela la voluntad del tenedor de permitir su uso sólo a aquellas personas que conocen
legítimamente el escondite.(…) corresponde revocar la resolución cuestionada, a fin de que continúe
entendiendo el juez con mayor competencia.(…) el tribunal RESUELVE: REVOCAR el decisorio de
fs.(…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, López González, Pinto. (Sec.: Roldán).


c. 16292/15, GRASSO, Nicolas y otros.
Rta.: 26/05/2015

COMPETENCIA.

Magistrado que se declara incompetente y remite la causa al fuero penal económico para que
investigue la figura prevista por el art. 302 del C.P. Decisión prematura. Necesidad de determinar las
circunstancias en las que se produjo el rechazo de los cheques de pago diferido y cotejar la autenticidad
de las firmas. Revocación.

Fallo: "(…) El Sr. juez de grado resolvió, mediante el punto II del auto de fs.(…), declarar su
incompetencia material y ordenó remitir la causa a conocimiento del fuero Penal Económico. El
querellante, Dr. R. R., alzó sus críticas contra dicho pronunciamiento mediante el recurso de apelación
interpuesto a fs.(...).

31
Sintéticamente, cuestiona la declaración de incompetencia decidida porque entiende que es prematura,
que aún no puede descartarse la comisión del delito de estafa y sostiene en autos, no se aplican las
previsiones del artículo 102 del Código Penal.
(…) II. (…) entendemos que la declinatoria de compentencia deviene, cuanto menos, prematura.
(…) por cuanto no se han acreditado mínimamente las causales de rechazo de los cheques de pago
diferido ni se produjo medida probatoria alguna respecto de las firmas libradoras a los fines de cotejar
si coinciden o no con las registradas por los titulares de las cuentas. De esta forma se podrá evaluar si
existe una falsificación en los documentos como pide el recurrente en la audiencia.
(…) tal como indica el fiscal a fs. (…), resulta necesario determinar fehacientemente las circunstancias
que motivaron aquellas órdenes de no pagar de cada uno de los cartulares en cuestión, es decir, si se
trató de una denuncia de extravío, hurto y/o robo, así como también, profundizar la investigación de
manera de obtener la verdad histórica del hecho denunciado y de las maniobras invocadas por al
querella para su realización.
(…) ya que por el momento no es posible descartar una subsunción típica más gravosa, el tribunal
RESUELVE: REVOCAR el auto de fs.
(…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, López González, Pinto. (Sec.: Raña).


c. 68.926/14, COLLUCCI, Marcelo G. y otros.
Rta.: 19/05/2015

COMPETENCIA.

Fiscal que plantea la incompetencia. Empleador que toma una fotografía de los glúteos de la
denunciante, colocando la cámara fotográfica por debajo de su vestido. Posible hostigamiento
contemplado en el artículo 52 del Código Contravencional de la ciudad de Buenos Aires Revocación.
Justicia Contravencional de la Ciudad de Buenos Aires.

Fallo: "(…) II.- El representante del Ministerio Público sostiene que se está ampliando la figura del
artículo 119 del Código Penal al incluir una conducta que, a su criterio, constituye un supuesto de
hostigamiento en los términos del artículo 52 del Código Contravencional de la ciudad de Buenos
Aires, por lo que se impone que ese fuero continúe con la presente causa.
III.- (…) denunció que el pasado (…) alrededor de las (…), (…), gerente financiero de la empresa en la
que trabaja la convocó a su oficina y le reprochó un presunto error. Cuando ella se inclinó hacia el
monitor de la computadora para verificarlo, aquél extendió su brazo y tomó una fotografía de sus
glúteos colocando la cámara por debajo de su vestido. Alertada de la situación por la luz del flash
forcejearon hasta que consiguió arrebatársela (…).
Conforme surge de su relato no existió de parte del imputado ningún acto de tocamiento ni
acercamiento corporal de carácter sexual, por lo que la conducta se reduce a la simple contemplación,
que como tal no constituye un supuesto de abuso sexual (1).
De este modo, el hecho podría constituir un acto no previsto en la norma antes citada y más bien si un
hostigamiento contemplado en el artículo 52 del Código Contravencional de la ciudad de Buenos
Aires, por lo que de conformidad a lo requerido por la titular de la acción pública, corresponde declinar
la competencia al fuero local para que continúe con la sustanciación de la presente.
En consecuencia, el Tribunal RESUELVE: REVOCAR el auto de fs.
(…) y remitir las actuaciones a conocimiento de la Justicia Contravencional de la Ciudad de Buenos
Aires para la prosecución de la instrucción. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini, Filozof. (Prosec.: Rosciani).


c. 12.760/15, M., F.
Rta.: 23/04/2015

Se citó: (1) D´Alessio, Andrés José - Divito, Mauro A. "Código Penal de la Nación. Comentado y
anotado", Ed. La Ley, 2° edición, 2° reimpresión, Bs. As. 2011, Tomo II, pág. 227, con citas de Fontán
Balestra, Núñez y Soler.

COMPETENCIA.

Ley de marca y designaciones (Ley 22.362). Marca no registrada en el país. Justicia de Instrucción.

Fallo: "(…) La querella apeló la resolución dictada a fs. (…), por la que se declaró la incompetencia
del juez de instrucción interviniente en favor de la justicia federal.
El artículo 4 de la Ley de Marcas y Designaciones 22.362 prevé que "la propiedad de una marca y la
exclusividad de uso se obtienen con su registro".
Como bien sostiene el recurrente, el legislador ha seguido un criterio atributivo al respecto, ello es, que
el delito previsto en el artículo 31 de esa ley sólo puede cometerse en relación con una marca
registrada, doctrina que ha sido seguida por esta misma Sala (1).

32
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

Consecuentemente, en tanto se ha puntualizado que "T. L." no ha registrado la marca en el país y con
arreglo también a la jurisprudencia citada en los escritos agregados a fs. (…), corresponde que continúe
interviniendo la justicia ordinaria.
Por ello, el Tribunal RESUELVE: REVOCAR el auto documentado a fs. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Cicciaro, Scotto. (Sec.: Besansón).


c. 71.998/14, ANKAH, Fabián A. y otra.
Rta.: 16/06/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correc., Sala VII, c. 17.735, "Salas, Héctor", rta: 17/12/2001.

CONCURSO DE DELITOS.

Robo doblemente agravado por su comisión con armas de fuego y en lugar poblado y en banda.
Concurso ideal. Procesamiento. Ausencia de motivos para que ambas agravantes se excluyan entre sí.
Confirmación. Disidencia parcial: Caso en el que debe regir el principio de especialidad. Aplicación
del tipo calificado de mayor gravedad. Robo con arma de fuego.

Fallo: "(…) La defensa recurrió en apelación el auto documentado a fs. (…), en cuanto se dispuso el
procesamiento de E. R. T. R.
Los jueces Mauro A. Divito y Mariano A. Scotto dijeron: La intervención del imputado en el hecho
ocurrido en el interior del inmueble ubicado en la calle P. X, de este medio, puede tenerse por
acreditada a partir de los dichos del policía F. O.
(…), quien fue desplazado hasta ese lugar por el Departamento Federal de Emergencias y, al llegar,
observó a tres individuos que egresaron de la vivienda con la intención de ingresar a un vehículo marca
"Renault Scenic", que se encontraba en marcha, y tras verse frustrado tal cometido emprendieron la
huida en distintas direcciones, momento en el que uno de ellos, identificado posteriormente como E. R.
T. R., arrojó en la vereda el revólver del calibre .32, marca "Pucará", número X, cargado con siete
proyectiles a bala, y llevaba en su poder una mochila con elementos sustraídos a los habitantes de la
finca.
Tal versión, sumada a las suministradas por las víctimas M. G. T. F. (…), P. D. C. P. (…), L. K. L. F.
(…), H. A. Z. T. (…), Y. Y. Z. T. (…), P. R. C. (…), J. J. A. (…) y M. E. L. F. (…), que a su vez se
complementaron con la declaración testifical de C. A. B. (…) a quien se le había sustraído el arma de
fuego utilizada en el hecho, la que según el informe luciente a fs. (…) es apta para su fin específico,
conforma un cuadro de cargo suficiente para agravar la situación del causante en los términos del
artículo 306 del Código Procesal Penal.
Frente a los cuestionamientos de la defensa, es dable destacar que las evidencias reseñadas indican que
todos los agresores habrían intervenido en la ejecución del hecho, ya sea mediante la intimidación con
el arma de fuego o bien tomando los bienes de las familias que ocupaban el inmueble.
Ello se corrobora al advertirse que J. O. B. F., vestido con una campera del color blanco, fue sindicado
como portador del revólver durante la perpetración del suceso, en tanto T. R. fue divisado por el policía
O. en el momento en el que se desprendía del revólver incautado, extremo que permite inferir, a falta
del secuestro de otra arma, una utilización indistinta del elemento.
En torno al doble agravamiento del robo, se estima que no existen motivos para que las agravantes en
cuestión se excluyan entre sí, pues la figura del robo con armas de fuego puede concurrir de forma
ideal con la del cometido en lugar poblado y en banda (1).
En ese sentido, cabe mencionar que la doctrina ha sostenido que en estos supuestos "no hay razón
alguna para que uno de los tipos calificados excluya al otro, dado que no lo encierra conceptualmente"
(2).
El juez Juan Esteban Cicciaro dijo: Comparto los argumentos desarrollados en el voto precedente, con
la excepción relativa a la doble agravación del tipo básico, pues en estos casos debe regir el principio
de especialidad y aplicarse el tipo calificado de mayor gravedad, que en el caso es el delito de robo con
arma de fuego (art. 166, in. 2°, según párrafo, del Código Penal).
Por lo expuesto, esta Sala RESUELVE: CONFIRMAR el auto extendido a fs. (…), en cuanto fuera
materia de recurso".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Divito, Cicciaro (en disidencia parcial), Scotto. (Sec.: Sánchez).
c. 24.110/15, TICERAN RUIZ. Enrique Rodolfo.
Rta.: 27/05/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correc., Sala VII, c. 36.312, "Salvatierra, Diego", rta: 26/03/2009. (2) Eugenio
Raúl Zaffaroni, Alejandro Alagia, Alejandro Slokar, Derecho Penal, Parte General, Ediar, Bs. As.,
2002, p. 869.

33
CONSERVACION DE LA FAUNA (Ley 22.421)

Procesamiento. Infracción art. 27 de la Ley 22.421 y su dec. Reglamentario nro. 666/97.


Comercialización de animales autóctonos de diferentes especies. Pruebas suficientes para acreditar el
hecho. Confirmación.

Fallo: "(...) D. M. M. expuso que el día del hecho no se encontraba vendiendo animales sino sólo jaulas
y que al salir de la "Feria los Pájaros" ubicada en la intersección de la avenida Perito Moreno y Sáenz
de esta ciudad fue detenido arbitrariamente por personal de Gendarmería Nacional y de la Dirección de
Fauna Silvestre (fs. ...).
Sin embargo, su descargo no logra enervar la convicción que surge de las actas de procedimiento e
infracción glosadas a (fs.
...), que dan cuenta de la comercialización en dicho lugar de doce cotorras verdes autóctonas de la
especie "myopsiha monachus" que se hallaban en poder del prevenido, dando cuenta de una clara
infracción a la ley de Conservación de la Fauna y su decreto reglamentario 666/97 (cfr. fs. ...).
A ello cabe añadir que las citas del imputado no han podido ser evacuadas al no brindar mayores
precisiones para dar con su supuesto empleador ni aportar los datos de los testigos a los que hiciera
referencia en su indagatoria.
Son precisamente tales circunstancias las que sustentan la decisión de mérito adoptada a su respecto y
ameritan el avance del proceso a la próxima etapa del proceso, por lo que SE RESUELVE:
CONFIRMAR el punto (...) del auto de (fs. ...) de estos testimonios. (...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala IV, González Palazzo, González. (Prosec.Cám.: Pereyra).


c. 740.053.901/11/1, MENDOZA, David.
Rta.: 11/03/2015

CONSERVACIÓN DE LA FAUNA (Ley 22.421).

Sobreseimiento. Secuestro en poder de los imputados, de especies no amenazadas, cuya tenencia y


comercialización no está prohibida. Tipo penal que exige que los objetos provengan de actos de caza
furtiva o depredación -extremo no acreditado- y que el agente actúe "a sabiendas" de que las piezas
comercializadas provienen de esa actividad ilícita. Elementos de prueba que no acreditan el tipo penal.
Atipicidad. Confirmación.

Fallo: "(…) II. A fs.(…), la Unidad Fiscal de Investigaciones en Materia Ambiental promovió denuncia
contra los imputados por "la presunta comisión del delito comprendido en el artículo 27, en función del
artículo 25, de la ley 22.421".
La hipótesis típica en cuestión exige -en el plano objetivo- que el objeto del delito provenga de la caza
furtiva o de la depredación y -en el aspecto subjetivo- que el autor obre "a sabiendas" de tal
circunstancia. Ahora bien, a fs. (…), la Directora de Infracciones Ambientales de la Secretaria de
Ambiente y Desarrollo Sustentable, M.M.D.A., sostuvo que, en este caso en particular, no se ha podido
establecer el origen de las especies que se secuestraron en poder de los imputados cuando,
supuestamente, pretendían comercializarlas. Aclaró la testigo que se trata de especies no amenazadas,
cuya tenencia y comercialización no está prohibida si se realiza con la documentación correspondiente
-guías de tránsito y certificado de origen que acredite la obtención y legítima tenencia- otorgada por la
autoridad de aplicación.
A partir de lo señalado, se desprende que, en estas condiciones, no es posible sostener que las aves
incautadas provenían de la caza furtiva o de la depredación, y menor aún que los imputados obraron
con conocimiento efectivo de su origen.
Entonces, toda vez que -como se dijo- el tipo penal en cuestión exige que los objetos provengan de
actos de caza furtiva o depredación -extremo que en modo alguno se ha acreditado- y que el agente
actúe "a sabiendas" de que las piezas comercializadas provienen de esa actividad ilícita, no es posible
sostener la imputación formulada en los términos del artículo 27 de la ley 22.421.
Tampoco es posible sostener que la conducta ventilada resulte típica de la figura culposa de
encubrimiento por receptación, prevista en el art. 277, inc. 2° del C.P. invocada en la audiencia oral, ya
que este delito también presupone que las cosas provienen de un delito previo, extremo que -tal como
se apuntó- no se ha visto mínimamente comprobado.
(…) el tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el auto de fs. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, López González, Divito. (Sec.: Raña).


c. 6.098/14, DELGADO, Rubén E. y otros.
Rta.: 28/04/2015

CONTIENDA ENTRE JUZGADO CORRECCIONAL Y JUZGADO FEDERAL.

Ingreso ilegítimo de ex pareja a la cuenta de Facebook. Equiparación de cuenta privada de Facebook a


'comunicación electrónica' o de 'dato informático de acceso restringido. Justicia federal.

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Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

Fallo: "(…) A fs. (…) a jueza correccional declinó su competencia a favor de la justicia federal por
entender que la conducta a investigar encuadraría en el delito previsto y reprimido por el art. 153 bis
del Código Penal, alcanzada por la competencia asignada al fuero de excepción en el artículo 33 inciso
1° "c" del Código Procesal Penal de la Nación.
Por su parte, la jueza federal afirmó que la declinatoria de competencia resulta desacertada, por cuanto
el caso bajo estudio se circunscribe a una mera desavenencia entre particulares, sin que se advierta
afectación de intereses federales que habiliten la competencia del fuero de excepción.
(…) entendemos que asiste razón al juez declinante, y por tanto, debe ser el magistrado del fuero de
excepción quien prosiga con la investigación.
Sobre el punto, la Corte Suprema de Justicia, por remisión a los fundamentos del Sr. Procurador Fiscal,
ha sostenido que "una cuenta privada de 'facebook' estaría dentro del concepto de 'comunicación
electrónica' o de 'dato informático de acceso restringido', en los términos del artículo 153 del Código
Penal, según la ley 26.388, por lo que estaríamos ante un hecho de violación de correspondencia... es
doctrina de V.E. que la justicia federal es competente para conocer en la presunta violación de
correspondencia" (CSJN, "Jutton, Juan Carlos s/delito de seguridad pública", rta. 20/11/2012).
(…) como hemos sostenido en anteriores oportunidades (causa n° 53662/14, "Romero", rta: 1/04/15) y
de conformidad con lo dictaminado por el fiscal general a fs. 17/vta., el tribunal RESUELVE: Asignar
competencia para conocer en este sumario al Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional Federal
nro. 1, Secretaría nro. 1 (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, López González, Pinto, Divito. (Prosec. Cám.: Daray).
c. 71.380/14, BRIZUELA, Cintia I.
Rta.: 28/04/2015

CONTIENDA ENTRE JUZGADO CORRECCIONAL Y JUZGADO FEDERAL.

Cuenta de Facebook. Violación de correspondencia. Justicia Federal.

Fallo: "(…) El primero de ellos sostuvo que los hechos denunciados encuadran en la figura prevista por
el artículo 153 del Código Penal, alcanzada por la competencia asignada al fuero de excepción en el
artículo 33 inciso 1° "c" del Código Procesal Penal de la Nación.(…) el Sr. Juez Federal afirmó que la
declinatoria de competencia resultaba prematura, toda vez que no se había materializado ninguna
medida tendiente a verificar el hecho denunciado.
(...) (...) el Sr. Juez Federal considera que al no haberse realizado medida alguna, la declinatoria
deviene prematura, criterio que consideramos desacertado por entender que de la declaración prestada
por G.R.R.l. se desprende con claridad el episodio a investigar. La Corte Suprema de Justicia, por
remisión a los fundamentos del Sr. Procurador Fiscal, ha sostenido que "una cuenta privada de
'facebook' estaría dentro del concepto de 'comunicación electrónica' o de 'dato informático de acceso
restringido', en los términos del artículo 153 del Código Penal, según la ley 26.388, por lo que
estaríamos ante un hecho de violación de correspondencia... es doctrina de V.E. que la justicia federal
es competente para conocer en la presunta violación de correspondencia" (CSJN "Jutton, Juan Carlos
s/delito de seguridad pública, rta. 20/11/2012).(…) el tribunal RESUELVE: Que debe entender en el
presente legajo el Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional Federal n° (…), Secretaría n° (…).

C.N.Crim. y Correc., Sala V, Pinto, Divito. (Prosec. Cám.: Daray).


c. 53662/14, CONTIENDA entre Juzgado Nacional en lo Correccional nro. 1,Secretaría nro. 52, y el
Juzgado Nacional
Rta.: 01/04/2015

CONTIENDA ENTRE JUZGADO CORRECCIONAL Y JUZGADO DE INSTRUCCIÓN.

Resistencia a la autoridad/Apremios ilegales. Unificación de la investigación. Imputaciones recíprocas


referidas a conductas asumidas bajo mismas circunstancias de tiempo y lugar. Justicia de Instrucción.

Fallo: "(…) Convoca la atención del Tribunal la contienda de competencia suscitada entre el Juzgado
Nacional en lo Correccional N° 9 y el Juzgado Nacional en lo Criminal de Instrucción N° 37.
La señora juez correccional se declaró incompetente, en la inteligencia de que el episodio denunciado
guardaría íntima vinculación con aquel que integra la investigación por la presunta comisión del delito
de apremios ilegales que se sustancia ante el fuero de instrucción, ya que, según entendió, lo que se
trata de resolver es un acontecimiento único con imputaciones recíprocas y el desmembramiento de los
legajos podría generar resoluciones contradictorias (…).
De adverso, la magistrada del fuero de instrucción rechazó la competencia atribuida, al sostener que
debía estarse a lo previsto por el artículo 67 del Reglamento para la Jurisdicción en lo Criminal y
Correccional que promueve la separación de las pesquisas a fin de resguardar el debido proceso y la
imparcialidad del juez natural de la causa (…).
Al respecto, en el caso del sub examen y de conformidad con lo manifestado por el señor Fiscal
General (…), esta Sala habrá de coincidir con el temperamento que postula la unificación de la

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investigación, por cuanto se advierte que las reglas de economía procesal que informan el criterio de
separación de la investigación de los apremios ilegales y la distribución de denuncias, debe ceder
cuando -como ocurre aquí- las imputaciones recíprocas se refieren a conductas asumidas bajo las
mismas circunstancias de tiempo y lugar, siempre que -de otro modo podría llegar a producirse la
adopción de soluciones contradictorias (1).
Por lo demás, y en aplicación del artículo 36 del Código Procesal Penal que impide la investigación en
sede correccional del delito más grave, el Tribunal RESUELVE: DECLARAR que en las presentes
actuaciones deberá intervenir el Juzgado Nacional en lo Criminal de Instrucción N° 37".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Divito, Cicciaro, Scotto. (Prosec. Ad Hoc.: Grisi).
c. 63.787/14, OJEDA, Horacio Javier.
Rta.: 18/02/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correc., Sala VII, c. 38.841, "León, Julio Oscar", rta: 26/05/2010.

CONTIENDA ENTRE JUZGADO DE INSTRUCCIÓN Y JUZGADO CORRECCIONAL.

Amenaza coactiva. Infracción a la ley 24.270. Expresiones que, en realidad, se dirigen a mantener la
falta de contacto entre el niño y su progenitora Justicia Correccional.

Fallo: "(...) en virtud de la contienda negativa de competencia planteada entre el Juzgado de Instrucción
n° (...) y el Juzgado Nacional en lo Correccional n° (...).
Luego de la lectura de las actas que se tienen a la vista, consideramos que asiste razón a la jueza de
instrucción, por lo que el legajo deberá continuar su trámite en el fuero en lo correccional. En ese
sentido y limitados por el modo en que ha quedado trabada la contienda, el supuesto mal futuro
amenazado ("no me va a dejar ver nunca más a los nenes"), que supuestamente determinaría la
competencia criminal, constituye el objeto procesal de la causa que tramita en sede correccional por
infracción a la ley 24.270. De este modo, la supuesta amenaza coactiva que motivaría la mayor
competencia sería en realidad una nueva conducta dirigida a mantener la falta de contacto entre el niño
y su progenitora. En consecuencia, oído el fiscal general, el Tribunal RESUELVE: I. Asignar
competencia para continuar interviniendo al Juzgado Nacional en lo Correccional n° 5, Secretaría n°
73. (...)"

C.N.Crim. y Correc., Sala I, Rimondi, López González. (Prosec. Cám.: Souto).


c. 69622/14, M., R. A.
Rta.: 26/02/2015

CONTIENDA ENTRE JUZGADO DE INSTRUCCIÓN Y JUZGADO CORRECCIONAL.

Sustracción de bicicleta apoyada en la puerta de un local sin ningún tipo de seguro o candado. Tenedor
que no resignó su vigilancia. No aplicación de la agravante. Hurto simple. Justicia Correccional.

Fallo: "(…) II.-) Los jueces Julio Marcelo Lucini y Mario Filozof dijeron: (…) denunció que el (…)
sustrajeron su bicicleta (…), que dejó apoyada en la puerta de un local de repuestos sanitarios ubicado
en (…).
El magistrado correccional atribuyó jurisdicción al fuero de instrucción por estimar que el suceso
encontraba subsunción típica en la figura prevista en el artículo 163 inciso 6º del Código Penal (…), lo
que no fue aceptado por el Dr. Zelaya que entendió que la calificación que correspondía asignar al
episodio era la de hurto simple (…).
No está en discusión que la bicicleta reviste la calidad de vehículo en los términos del artículo 163
inciso 6º del cuerpo legal citado y ésta es la postura que adoptó esta Sala en las causas N°729 "Chung
Hsiung, Lin", del 6 de julio de 2012 y N°676/12 "Pérez, Guillermo", del 25 de junio de 2012, entre
otras.
No obstante lo expuesto y de conformidad con el criterio esgrimido por el Sr. Fiscal General (…),
estimamos que en el caso debe seguir interviniendo la justicia en lo correccional pues la bicicleta no
estaba en una situación que ameritara la aplicación de la agravante.
La mayor protección prevista en el art.163 inc.6° del digesto sustantivo proviene del hecho de que se
aplica a los bienes que, por su naturaleza, el propietario se ve en la necesidad exponerlos a un riesgo
más elevado, como es la vía pública, ante la imposibilidad material de someterlos a otro resguardo (1).
Este extremo no se verifica en el legajo en tanto el damnificado la dejó apoyada sin ningún tipo de
seguro o candado y tardó pocos minutos en buscarla. Ello permite inferir que nunca estuvo en las
condiciones que tuvo en mira el legislador para configurar la calificante. Su esencia no radica en la
naturaleza del objeto en sí, sino en el particular estado que, para la víctima, provoca el lugar donde
debe dejarlo. Lo breve del alejamiento y las condiciones en que se dejó el vehículo demuestran que su
tenedor nunca resignó su vigilancia.
Así votamos.

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Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

III.-) El juez Ricardo Matías Pinto dijo: Adhiero al voto de mis colegas preopinantes en tanto, tal como
surge del legajo, la víctima no dejó la bicicleta fuera de su ámbito de custodia, por lo cual no
corresponde aplicar el agravante en cuestión.
Así voto.
En consecuencia, el Tribunal RESUELVE: Que debe seguir interviniendo el Juzgado en lo
Correccional (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini, Filozof, Pinto. (Sec.: Oberlander).


c. 72.157/14, N.N (damf. PERTIERRA, Néstor Mario Pertierra).
Rta.: 04/03/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correcc., Sala VI, c. 314/12, "Comba, Karina Beatriz s/competencia", rta.:
25/4/2012.

CONTIENDA ENTRE JUZGADO DE INSTRUCCIÓN Y JUZGADO CORRECCIONAL.

Mercadería sustraída de un depósito, no en tránsito sino guardada para ser oportunamente transportada.
Hurto simple. Justicia Correccional.

Fallo: "(…) II.-) (…) denunció que (…), el encargado del expreso (…), de nombre (…), le sustrajo dos
cajas de vino por un valor de $ (…), que estaban en el depósito de su propiedad, ubicado en (…).
III.-) El Juez de Instrucción declinó su competencia a favor del fuero en lo correccional por entender
que el ilícito se subsume en el tipo penal de hurto (art. 162 del Código Penal) dado que no se acreditó
la presencia de violencia que requiere el robo (…).
Por su parte, el magistrado correccional la rechazó en tanto consideró que el evento encuadra en la
figura de hurto agravado por ser de mercadería en tránsito (…).
IV.-) De conformidad con lo dictaminado por el Sr. Fiscal General (…), consideramos que debe
continuar con la investigación el fuero en lo correccional.
Esta Sala ha sostenido que "(…) la razón que da fundamento a la agravante radica en la especial
protección que merecen ciertas cosas que en determinadas circunstancias se encuentran libradas a una
mejor acción del ladrón, quien actúa sin interferencias o dificultades de ninguna clase. Es precisamente
por la situación particular en que se hallan esos bienes que el dueño o tenedor aminora las defensas o
custodia de los mismos (…). La agravante no existe en razón de la mercadería o cosas muebles en sí
mismas (…), sino en razón del lugar en que se hallan y al momento en que se comete el hecho ilícito,
situaciones que impiden una eficaz vigilancia privada (…)" (1).
Esta situación no se verifica en el caso pues la mercadería, al momento de su sustracción, no estaba en
tránsito sino guardada en un depósito para ser oportunamente transportada. El desapoderamiento habría
ocurrido antes del inicio del proceso de carga, lo que impide subsumir la conducta en el art.163 inc.5°
del Código Penal.En consecuencia, el Tribunal RESUELVE: Asignar competencia al Juzgado en lo
Correccional (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini, Filozof, Pinto. (Sec.: Oberlander).


c. 48.383/14, RAMON.
Rta.: 04/03/2015

Se citó: (1) comentario de Marum, Elizabeth A. al artículo 163 del C.P. en "Código Penal y normas
complementarias. Análisis doctrinal y jurisprudencia", Baigún, David y Zaffaroni, Eugenio Raúl, 1ª
edición, Buenos Aires, 2009, tomo VI, página 122.

CONTIENDA ENTRE JUZGADO DE INSTRUCCIÓN Y JUZGADO CORRECCIONAL.

Imputado que sustrae objetos de un local comercial con la copia de la llave que poseía por desarrollar
allí tareas de limpieza. Hurto simple. Justicia Correccional.

Fallo: "(…) II.-) A fs. (…) explicó que (…), el empleado que cubre el turno de la noche en la empresa
que realiza las tareas de limpieza en la feria de la Avenida (…), ingresó a su local con la copia de la
llave que posee y sustrajo un televisor LCD de 32 pulgadas y la suma aproximada (…) pesos (…).
III.-) El magistrado de Instrucción declinó la competencia a favor del fuero en lo correccional porque
entendió que el episodio podría encontrar adecuación típica en el delito de hurto simple (fs. 10/11).
Por su parte, el titular del Juzgado en lo Correccional (…) no la aceptó, argumentando, en primer lugar,
que no se corroboró si existía otro proceso que atrajera a este sumario por conexidad.
Por otro lado, sostuvo que no puede descartarse la figura prevista en el artículo 173, inciso 7° del
Código Penal (…).
IV.-) De conformidad con lo dictaminado por el Sr. Fiscal General (…), corresponde que intervenga el
fuero Correccional.
Preliminarmente corresponde señalar que el agravamiento de la figura de hurto está determinado por
"la mayor actividad -modus operandi- que debe desplegar el autor para vencer los obstáculos o
defensas que se oponen al apoderamiento". Además, en lo que respecta al tipo subjetivo "es necesario

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que el autor conozca que el elemento con el que está accionando la cerradura no es el mismo que se usa
habitualmente, o que la llave que le entregaron ha sido sustraída, encontrada o no devuelta a su tiempo"
(1).
Estos extremos, en principio, no se verifican en el caso traído a estudio, dado que (…) tuvo acceso a la
llave de manera legítima, por la tarea que desarrollaba en el lugar.
Por otro lado, tampoco puede sostenerse válidamente que en el accionar que se le imputa mediara una
administración infiel, pues tal como surge del sumario, el nombrado no tenía a su cargo el cuidado del
patrimonio ajeno, sino que su trabajo se limitaba a mantener el aseo del comercio.
En consecuencia, toda vez que la circunstancia de que eventualmente pudiera surgir conexidad con otro
sumario no resulta determinante, al menos de momento, para dirimir la cuestión de competencia, este
Tribunal RESUELVE: QUE DEBE INTERVENIR en la causa el Juzgado en lo Correccional (…)."

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini, Filozof, Pinto. (Sec.: Oberlander).


c. 67.396/14, FLORES, Daniel.
Rta.: 06/04/2015

Se citó: (1) D´Alessio, Andrés José - Divito, Mauro A.; "Código Penal de la Nación. Comentado y
anotado", Tomo II, Ed. La Ley, 2da. Edición actualizada y ampliada, año 2011, págs.: 582/583.

CONTIENDA ENTRE JUZGADO DE INSTRUCCIÓN Y JUZGADO CORRECCIONAL.

Posibilidad de que el hecho denunciado encuadre en los arts. 125 bis y 127 del C.P.N. Necesidad de
profundizar la investigación y de que sea el magistrado con mayor competencia quien siga a cargo.
Justicia de Instrucción.

Fallo. "(...) contienda negativa de competencia planteada entre el Juzgado Nacional en lo Criminal de
Instrucción N° (...) y el Juzgado Nacional en lo Correccional N° (...).
Oído el señor fiscal general a (fs. ...), consideramos que las actuaciones deben continuar en la órbita de
la justicia de instrucción, toda vez que del estado incipiente de la investigación no puede descartarse
que el hecho denunciado halle encuadre legal en los arts. 125 bis y/o 127 del Código Penal de la
Nación. Por ello, y sin una mínima medida de prueba, corresponde que, a fin de evitar posibles
nulidades futuras (art. 36, CPPN), sea el magistrado con mayor espectro jurisdiccional el que continúe
a cargo de la pesquisa. Sólo así podrá analizarse nuevamente la cuestión, de conformidad, a su vez, con
la interpretación normativa que se desprende del dictamen del PGN "Fiscal s/ av. Presuntos delitos de
acción pública", S.C. Comp. 538; L. XLV del 16/11/09 en el cual el Dr.
Righi manifestó "que la intervención de personas en la prostitución ajena -reprimida en el art. 17 de la
ley de profilaxis 12.331, (...). En consecuencia, el tribunal RESUELVE: ASIGNAR competencia para
que continúe investigando el Juzgado Nacional en lo Criminal de Instrucción (...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala I, Bunge Campos, Rimondi. (Prosec. Cám. ad-hoc.: León).
c. 75590/14, N.N. damnif: Delitos contra la salud.
Rta.: 13/04/2015

CONTIENDA ENTRE JUZGADO DE INSTRUCCIÓN Y JUZGADO CORRECCIONAL.

Sustracción de una bicicleta que estaba asegurada con candado y fue hallada al día siguiente cuando el
damnificado la reconoció y estaba siendo conducida por el imputado. Tenedor que resignó su
vigilancia. Legislador que ha agravado la figura debido a la condición de mayor vulnerabilidad.
Justicia de instrucción.

Fallo: "(…) Los jueces Julio Marcelo Lucini y Mario Filozof dijeron: I.-) (…) denunció que el (…)
dejó su bicicleta en (…), asegurada con una cadena y, al ir en su búsqueda, (…) advirtió que se la
habían sustraído (…).
Al día siguiente, el damnificado junto a un amigo caminaban por (…) cuando notaron que un joven
tripulaba la bicicleta en cuestión, lo que motivó la intervención policial y la detención de quien
resultara ser (…).
II.-) El juez en lo Correccional declinó la competencia a favor de la justicia de instrucción al entender
que la sustracción constituía el delito de robo por cuanto el autor, para conseguir su cometido, había
ejercido fuerza al romper la cadena que la sujetaba (…).
Por su parte, el Dr. Ormaechea no la aceptó porque consideró que estamos frente a la presunta
comisión de un hurto simple ya que la bicicleta no está incluida en el término "vehículo" del art.163
inc.6° del Código Penal. Además, a su criterio, no está acreditada la fuerza empleada (…).
Trabada la contienda (…), se elevó el sumario ante esta Alzada.
III.-) Coincidiendo con lo dictaminado por el Sr. Fiscal General (…), corresponde que intervenga el
Juzgado de Instrucción (…).
Esta Sala entiende que la bicicleta reviste la calidad de vehículo conforme lo previsto en la normativa
citada. Esta postura fue adoptada en las causas N°729 "Chung Hsiung, Ling", rta. 6/7/2012, N°676/12
"Pérez, Guillermo", rta: 25/6/2012 y N°72157/2014 "N.N. s/competencia", rta: 4/3/2015, entre otras.

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Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

Por otro lado, no debe soslayarse que el damnificado refirió que aquélla estaba asegurada con cadena,
la que debió ser cortada por el autor para concretar el despojo.
En esta senda, hemos señalado que "la mayor protección prevista en el art.163 inc.6° del digesto
sustantivo proviene del hecho de que se aplica a los bienes que, por su naturaleza, el propietario se ve
en la necesidad de exponerlos a un riesgo más elevado, como es la vía pública, ante la imposibilidad
material de someterlos a otro resguardo" (1).
Este extremo se verifica en el legajo en tanto (…) la dejó apoyada en la vía pública, asegurada con
candado y tardó dos horas en buscarla. Ello permite inferir que efectivamente estuvo en las condiciones
que tuvo en mira el legislador para configurar la calificante. Su esencia no radica en la naturaleza del
objeto en sí, sino en el particular estado que, para la víctima, provoca el lugar donde debe dejarlo.
Lo extenso del alejamiento y las condiciones en que se dejó el vehículo demuestran que su tenedor
resignó su vigilancia.
III.-) El juez Ricardo Matías Pinto dijo: Adhiero al voto de mis colegas preopinantes en tanto, tal como
surge del legajo, la víctima dejó la bicicleta fuera de su ámbito de custodia, por lo cual corresponde
aplicar el agravante en cuestión (ver, mutatis mutandi, la causa N°72157/2014 "N.N. s/competencia",
rta: 4/3/2015).
En consecuencia, el Tribunal RESUELVE: Que debe intervenir el Juzgado de Instrucción (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini, Filozof, Pinto. (Sec.: Oberlander).


c. 21.800/15, ROMERO, Jorge.
Rta.: 29/05/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correcc., Sala VI, c. 72157/2014 "N.N. s/competencia", ra.: 4/3/2015.

CONTIENDA ENTRE JUZGADO DE INSTRUCCIÓN Y JUZGADO CORRECCIONAL.

Lesiones culposas y daño agravado. Chofer de colectivo que arrolla a una persona y ésta produce daños
en la unidad. Daño agravado: competencia de la justicia contravencional. Lesiones culposas:
competencia del magistrado correccional. Imposibilidad de escindir las actuaciones. Estrecha
vinculación de los sucesos y comunidad probatoria que aconsejan el análisis en conjunto. Fallo de la
C.S.J.N. "Longhi". Conveniencia de que intervenga la justicia de instrucción aún cuando no tenga
establecida expresamente su competencia.

Fallo: "(…) II.-) El Sargento (…) refirió que el día (…), mientras se encontraba en un puesto ubicado
en (…), detuvo su marcha un colectivo de la línea (…) cuyo conductor fue identificado como (…). Éste
le dijo que instantes antes había arrollado a un sujeto identificado como (…) que circulaba en bicicleta
y quien, tras lo ocurrido, le rompió con el casco el espejo retrovisor izquierdo de la unidad y le rajó el
parabrisas (…).
III.-) El magistrado en lo Correccional que previno (…), declinó su competencia a favor del fuero de
Instrucción por entender que el suceso encontraba subsunción en la figura de daño agravado prevista en
el artículo 184 inciso 5° del Código Penal y en la de lesiones culposas, debiendo ser todo analizado en
conjunto en virtud de una "inescindible unidad contextual".
Sin embargo, ello no fue compartido por el juez de Instrucción en tanto consideró que un colectivo no
era un bien de uso público, por lo que carecía de la custodia y protección que los bienes del Estado
(…).
IV.-) El vehículo en cuestión es un transporte público y si bien es de propiedad privada, adquiere la
entidad requerida por el tipo penal agravado desde el momento en que se encuentra afectado a la
prestación de un servicio de uso general, traduciéndose en él la satisfacción de intereses y necesidades
comunes de quienes integran la sociedad. Por ello el resultado dañoso consistiría en la afectación de la
cosa destinada al uso público, sin importar si esos bienes son o no de propiedad privada, por lo que
merecen la protección legal prevista en el artículo 184, inciso 5° del ordenamiento legal citado (1).
En este sentido hemos sostenido que: "Configura daño agravado en los términos del inc. 5° el
producido a un colectivo, pues los vehículos particulares de transporte de pasajeros están afectados por
la autoridad pública a facilitar el traslado de un número indeterminado de usuarios y son por ello bienes
de uso público que tornan justificable la mayor protección que ha prodigado el legislador" (…).
V.-) La estrecha vinculación de los sucesos y la comunidad probatoria aconsejan analizarlos
conjuntamente. Este extremo no ha sido controvertido.
Se verifica en el legajo el supuesto en el cual el juez correccional sólo es competente para intervenir en
las lesiones culposas padecidas por (…), pero no lo es respecto del daño agravado, cuya pena máxima
supera la establecida por el artículo 27 del Código Procesal Penal. Por su parte, la justicia de
instrucción no lo es en ninguno de los dos supuestos pues este último delito fue transferido a la justicia
de la ciudad Autónoma de Buenos Aires en virtud de la Ley 26.357.
De esta manera, teniendo en consideración lo resuelto por la Corte Suprema de Justicia de la Nación en
el caso "Longhi, Viviana Graciela", del 2/6/2009 y en aras de evitar una múltiple investigación,
corresponde que intervenga la justicia de instrucción aún cuando no tenga establecida expresamente su
competencia (2).
(…), el Tribunal RESUELVE: QUE DEBE INTERVENIR el Juzgado de Instrucción (…)".

39
C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini, Filozof, Pinto. (Sec.: Oberlander).
c. 10.561/15, AGÜERO, Agustín Claudio.
Rta.: 28/05/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correcc., Sala VI, c.45.565/2013, "Leite Ruiz, Héctor s/competencia", rta.:
14/2/2014; (2)C.N.Crim. y Correcc., Sala VI, c. 1607/12, "Lanche, Marcos s/competencia", rta.:
31/10/2012.

CONTIENDA ENTRE JUZGADO DE INSTRUCCIÓN Y JUZGADO DE MENORES.

Denuncia de abuso sexual efectuada por una madre respecto de su hija menor de 8 años. Autor del
hecho que tendría 5 años. Imposibilidad de descartar la acción de algún adulto en el hecho. Justicia de
Instrucción.

Fallo: "(…) II.-) (…) denunció el (…) que su hija (…), de 8 años de edad en aquel momento, habría
sido víctima del delito de abuso sexual por parte de G. L., quien para entonces contaba con 5 años (…).
III.-) La magistrada de instrucción declinó la competencia a favor del fuero de Menores por entender
que la imputación principal estaba dirigida contra el niño (…).
Ello no fue aceptado por su colega (…), por cuanto consideró que de lo actuado surgía la posibilidad de
que los hechos fueran proyectados por órdenes de emanadas de (…), quien además habría amenazado a
(…) para que no contara nada de lo ocurrido.
Así fue trabada la contienda (…).
IV.) Coincidimos con los argumentos expuestos por el Fiscal General a fs. (…). Las características de
los eventos denunciados, la naturaleza de las amenazas proferidas contra la víctima y la edad del
supuesto autor (5 años), impiden dirigir una certera imputación y, es posible deducir que ha tomado
intervención algún adulto.
En este contexto, el Tribunal RESUELVE: DEBE CONTINUAR INTERVINIENDO el Juzgado de
Instrucción nro. (…). (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini, Filozof, Pinto. (Sec.: Oberlander).


c. 48.629/13, N/N. Damn.: Y. A. G.
Rta.: 19/03/2015

CONTIENDA ENTRE JUZGADO DE INSTRUCCIÓN Y JUZGADO FEDERAL

Investigación en la que no puede descartarse que las mujeres estén trabajando sin estar de acuerdo con
ello. Posible trata de personas. Justicia Federal.

Fallo: "(…) Analizadas las constancias de la causa, coincidimos con el Ministerio Público Fiscal en
que corresponde atribuir competencia al fuero de excepción para continuar este trámite procesal.
Así, se advierte que en estas actuaciones se denunció el funcionamiento de un prostíbulo en la finca
sita en la calle J. J. xx, x° "x", de esta ciudad.
Al tomar conocimiento de que ante el Juzgado Federal n° (…) tramitaba la causa (…) en la que se
investigaba la posible comisión de los delitos reprimidos por el art. 145 bis y ter del código sustantivo
en el interior del domicilio mencionado, la jueza de instrucción declinó su competencia en favor del
tribunal mencionado en primer término. Dicha decisión no fue compartida por su par, pues si bien
admitió la conveniencia de que ambas pesquisas tramitaran conjuntamente y ordenara su acumulación,
la conducta a investigar podría ser encuadrada a su juicio como una infracción a los arts. 125 bis, 127
del CPN y la ley 12.331.
Ahora bien, tal como surge de las actuaciones bajo estudio, la casa de tolerancia señalada en el marco
de estas actuaciones coincide con aquella que fuera denunciada anónimamente mediante la línea 145
del "Programa Nacional de Rescate", oportunidad en la que por medio de un llamado telefónico se
puso en conocimiento de las autoridades que en el sitio de referencia se explotaba sexualmente a
mujeres, algunas de ellas extranjeras, quienes le habrían referido al denunciante que no podían negarse
a alternar con los clientes durante todo el transcurso del día.
No puede soslayarse, además, que en base a las investigaciones preliminares, podría existir cierta
vinculación entre el departamento sito en la calle J. J. ya referido y el ubicado en L. xx, donde, según
describió una persona no individualizada en un foro de internet, habría visto en su interior "un desfile"
con mujeres "dormidas".
Por todo ello corresponde que conozca en el sumario la justicia federal, en virtud del artículo 33 inciso
"e" del catálogo procesal.Al respecto, y ante un supuesto de esta naturaleza, tiene dicho la Corte de
Suprema de Justicia de la Nación que "ante la existencia de alguno de los extremos inherentes al delito
de trata de personas, la justicia federal no puede declinar su incompetencia ni rechazar la que se le
pretenda atribuir sin antes realizar las medidas necesarias para establecer si se halla configurado o no
dicho ilícito" (1).
En consecuencia, el Tribunal RESUELVE: ASIGNAR competencia para entender en esta causa al
Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional Federal n° (…), para continuar la investigación. (…)".

40
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

C.N.Crim. y Correc., Sala IV, Seijas, González Palazzo, González. (Sec.: Morillo Guglielmi).
c. 43.344/14, J. J. xx x "x" .
Rta.: 18/05/2015

Se citó: (1) C.S.J.N., Competencia 1016, XLVI, in re "A., Gl. L. s/denuncia, también citado en Sala I
de la Cámara Nacional en lo Criminal y Correccional Federal, causa n° 48.426 "NN s/competencia" del
27/06/13

CONTIENDA ENTRE JUZGADO DE INSTRUCCIÓN Y JUZGADO FEDERAL

Investigación en la que no puede descartarse de plano una posible trata de personas. Acciones típicas
previstas en la ley 26.842. Justicia Federal.

Fallo: "(…) En principio, y luego de una adecuada lectura de las constancias reunidas hasta el presente
en la causa que se nos elevara, se advierte la eventualidad de ciertas acciones típicas receptadas por la
ley 26.842 que modificó la estructura del delito de trata de personas conforme lo preveía la norma
original (ley 26.364). Es así que entre los verbos de las conductas actualmente descriptas, se
encuentran el de ofrecer (hacer saber que se cuenta con cierta disponibilidad) y el de captar (conseguir,
atraer hacia sí, ganar la voluntad, atrapar, reclutar, entusiasmar a las víctimas sin importar el medio por
el cual se logra) a personas con fines de explotación (1).
Dicho esto, no puede descartarse entonces la existencia de alguno de estos supuestos, que solo serán
elucidados luego de una pertinente investigación que, por razón de la materia y expresa previsión legal,
debe ser llevada a cabo por la justicia de excepción.
En tal sentido, la Corte Suprema de Justicia de la Nación sostuvo que "ante la existencia de alguno de
los extremos inherentes al delito de trata de personas, la justicia federal no puede declinar su
competencia ni rechazar la que se le pretenda atribuir sin antes realizar las medidas necesarias para
establecer si se halla configurado o no dicho ilícito" (2). (3).
En consecuencia, y de acuerdo por lo dictaminado por el Señor Fiscal General en esta sede, el tribunal
RESUELVE: ASIGNAR competencia al Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional Federal Nro.
(…), para seguir interviniendo en las presentes actuaciones. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala IV, González Palazzo, González. (Prosec.Cám.: Pereyra).


c. 55.942/13/1, W., J.
Rta.: 23/06/2015

Se citó: (1) B., N. "La trata de personas en su tipificación actual", publicado en "Revista de Derecho
Penal", ed. Rubinzal Culzoni, Volumen 2014-2, Santa Fe, pág. 209. (2) C.S.J.N., Fallos 334:1382 - del
dictamen del Procurador General de la Nación. (3) C.N.Crim. y Correc., Sala IV, c. 32862/13, "M.",
rta. 30/5/14 y c. 43344/14 "J.J. 453 1° "B" y 18/5/15.

CONTIENDA ENTRE JUZGADO DE INSTRUCCIÓN Y JUZGADO FEDERAL.

Comercialización de un producto médico sin la autorización ni el contralor público debido. Justicia


Federal.

Fallo: "(…) II.) (…), en su carácter de asesor legal del Programa Nacional de Control de Mercado de
Medicamentos y Productos Médicos, denunció a fs. (…) que con fecha (…), se llevó a cabo una
inspección en la sede de la firma (…), con domicilio en (…). En esa oportunidad, al verificarse el
"stock" de productos, se detectaron unidades de cirugía traumatológica -tornillos de marca (…) sin su
registro médico y que habían sido comercializados y distribuidos sin la debida autorización del
A.N.M.A.T.. Para ello, se habría utilizado el nombre de la firma (…), empresa que sí se encuentra
habilitada a esos fines, para ocultar el carácter nocivo de los insumos (…).
III.) El Magistrado de Instrucción que previno, declinó la competencia a favor del fuero de excepción
al entender que el ilícito denunciado hallaba subsunción en el tipo penal del art.
201 del Código Penal y los arts. 1 y 19 de la ley 16.463, toda vez que se encontraba comprometida la
salud pública mediante la comercialización y distribución clandestina de productos dañinos para la
salud (…).
Por su parte, el Juez Federal no la aceptó por considerar que no resultan aplicables al caso las
previsiones de la ley 16.463 -Ley Nacional de Medicamentos . Ello, en virtud de que al momento de
corroborarse el hecho por parte de la A.N.M.A.T., no se tipificó la conducta como infractora de la
normativa citada y tampoco se llevó a cabo el procedimiento administrativo dispuesto en el art. 21 de
la citada normativa (…).
IV.) Este Tribunal comparte los argumentos brindados por el Sr.
Fiscal General en el dictamen de fs. (…) pues la hipótesis delictiva no sólo hallaría receptación típica
en el art. 201 del Código Penal sino también en las previsiones de la ley 16.463 pues se trata de la
comercialización de un producto médico sin la autorización ni el contralor público debido.

41
En este sentido, hemos dicho que el art. 1° de la ley 16.463 que establece su ámbito de aplicación en la
"(…) importación, exportación, producción, elaboración, fraccionamiento, comercialización o depósito
en jurisdicción nacional o con destino al comercio interprovincial, de las drogas, productos químicos,
reactivos, formas farmacéuticas, medicamentos, elementos de diagnóstico y todo otro producto de uso
y aplicación en la medicina humana y las personas de existencia visible o ideal que intervengan en
dichas actividades"(1).
En el mismo orden de ideas, la Corte Suprema ha sostenido que: "(…) al afectar la transparencia y
competitividad del mercado así como también la economía del consumidor, que pagó por un producto
cuya calidad no se condice con la que quería adquirir, la causa corresponde al fuero de excepción
debido al carácter federal de las normas en juego (…)" (2).
Por lo expuesto, el Tribunal RESUELVE: QUE DEBE INTERVENIR en la causa el Juzgado en lo
Criminal y Correccional Federal (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini, Pinto. (Sec.: Oberlander).


c. 37.797/12, CICATIELLO, Esteban José y otros.
Rta.: 20/02/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correcc., Sala VI, c. 1769/14, "Scravaglieri, Carlos", rta.: 13/2/15 y c.
25931/13, "NN s/ competencia", rta.: 16/7/14; (2) C.N.Crim. y Correcc., Sala VI, c. 25931/13, "N.N. s/
cometencia", rta.: 16/7/14.

CONTIENDA ENTRE JUZGADO DE INSTRUCCIÓN Y JUZGADO FEDERAL.

Defraudación llevada a cabo mediante la utilización del Documento Nacional de Identidad que el
damnificado había extraviado. Justicia Federal.

Fallo: "(…) II.-) (…) denunció a fs. (…) que al comunicarse con el área de atención al cliente de la
empresa "Movistar" le fue informado que poseía a su nombre los números (…) y (…), los que
registraban una deuda de (…) pesos. Así, tomó conocimiento que desconocidos, usando su identidad,
habrían obtenido el alta de las líneas telefónicas referidas.
III.-) El magistrado instructor (…) declinó la competencia a favor del fuero de excepción por cuanto la
maniobra se habría perfeccionado mediante la exhibición de un documento nacional de identidad
adulterado, decisión que no fue aceptada por su par federal (…) que la consideró prematura al no
encontrase probada la utilización de una identificación apócrifa en el evento.
IV.-) De conformidad con lo dictaminado por el Sr. Fiscal General a fs. (…) consideramos que el
sumario deberá continuar ante la justicia de excepción.
Si bien no se cuenta en el legajo con el instrumento del cual se habría valido, ni con copias certificadas
lo cierto es que la empresa "Telefónica Móviles de Argentina S.A." a fs. (…) confirmó que uno de los
requisitos para la activación de líneas es la presentación del Documento Nacional de Identidad.
De esta manera el hecho investigado puede subsumirse en el artículo 33 inciso 1° "C" del Código
Procesal Penal o bien en el 33 inciso "d" de la Ley 20.947, toda vez que no se descarta la posible
utilización del Documento Nacional de Identidad que el damnificado había extraviado (…).
En ese sentido esta Sala ya sostuvo que "(…) la adulteración de un documento nacional de identidad y
la posterior defraudación llevada a cabo mediante su utilización constituye un hecho único que no
resulta escindible, debiendo avocarse a su investigación el fuero de excepción. También hemos
indicado que para acreditar dicho extremo no resulta indispensable contar con el secuestro del
documento público adulterado pues dicha circunstancia podría ser probada por otros medios (…)" (1).
V.-) Por lo expuesto, el Tribunal RESUELVE: ASIGNAR COMPETENCIA al Juzgado Federal nro.
(…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini, Filozof, Pinto. (Sec.: Oberlander).


c. 67.596/14, NN Damn.: GRAMAJO, Alejandro Agustín.
Rta.: 02/02/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correcc., Sala VI, c. 39.643, "Villalba s/ competencia" rta.: 18/06/10.

CONTIENDA ENTRE JUZGADO DE INSTRUCCIÓN Y JUZGADO FEDERAL.

Alteración en la numeración de un arma de guerra. Justicia Federal.

Fallo: "(…) El tribunal comparte el temperamento adoptado por el magistrado declinante (…), en la
medida que a partir del examen pericial llevado a cabo por la División Huellas y Rastros de la
Gendarmería Nacional Argentina (…), se habría acreditado la existencia de una irregularidad en la
individualización del revólver calibre.38 "Special", marca "Colt", pues su numeración carece de
alineación y distribución homogénea entre las cifras que la componen y presenta acciones abrasivas
atribuibles a una lima o elemento similar, extremo que determina que la investigación sea puesta bajo
el conocimiento del fuero de excepción.

42
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

En efecto, la posible alteración en la numeración de un arma de guerra, encuadraría en el artículo 189


bis, inciso 5°, segundo párrafo, del Código Penal, ilícito que se encuentra incluido entre aquellos que
son objeto de la competencia del juez federal (artículo 33, inciso 1°, apartado "e", del código ritual).
Por lo expuesto, el Tribunal RESUELVE: DECLARAR que en las presentes actuaciones deberá
intervenir el Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional Federal N° 12".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Divito, Scotto. (Sec.: Besansón).


c. 23.494/14, TORRES ALCARAZ, Juan Alberto.
Rta.: 26/02/2015

CONTIENDA ENTRE JUZGADO DE INSTRUCCIÓN Y JUZGADO FEDERAL.

Denuncia del titular de los derechos de un film por el ofrecimiento de la película en


www.cuevana3.com.ar, sin la debida autorización. Obra protegida que nunca fue exhibida.
Imposibilidad de descartar el uso del nombre y la imagen de la marca. Infracción a la ley 22.362.
Justicia Federal.

Fallo: "(…) Asimismo, mediante acta notarial documentó el acceso a dicha página web, a los fines de
verificar si efectivamente los usuarios podían acceder a la película. De este modo, se dejó constancia
que tras hacer "click" en el recuadro "descargar", automáticamente se abrió una nueva pestaña en la
cual se solicitó que se introdujera un teléfono celular, al que posteriormente llegó un código, el cual se
insertó en la página correspondiente, para finalmente tener acceso a otra película llamada "The Man
Who Knew Too Much".
III) El juez que previno declinó su competencia a favor de la justicia de excepción por considerar que
la conducta encuadraba en las previsiones del artículo 31, inciso b de la ley 22.362.
El magistrado en lo criminal y correccional federal rechazó la competencia atribuida por entender que
el título identificaba a la obra y no al producto con respecto al fabricante. Es decir, que la obra se
encontraba protegida por la ley de propiedad intelectual y no se trataba de una afectación al derecho
marcario.
(…) el juez que previno mantuvo su postura inicial y trabó la presente contienda de competencia
negativa.
IV) (…) de conformidad con lo dictaminado por el fiscal general, corresponde asignar competencia a la
justicia de excepción.
(…) la ley sanciona el empleo de una marca sin autorización, circunstancia que, en principio, se da en
el caso, pues se habría usado el nombre "Relatos Salvajes" y su logo, que se hallaban en trámite de
registro ante el INPI, para hacerlos figurar en un anuncio de una página de Internet -ver fs.(…).
(…) coincidimos con el magistrado de instrucción, en cuanto a que, conforme surge de los dichos del
propio denunciante, la obra protegida nunca fue exhibida, más no puede descartarse el uso del nombre
y la imagen de la marca, lo que constituiría una infracción a la ley 22.362, por cuanto el presunto uso
de la marca en forma indebida puede generar confusión y diluir el poder distintivo de la marca que se
había solicitado registrar.
Por estas razones, deberá continuar con la investigación la justicia de excepción.
(…) el tribunal RESUELVE: ASIGNAR competencia al Juzgado en lo Criminal y Correccional
Federal nro. 6, Secretaría nro. 11, para seguir interviniendo en las presentes actuaciones (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, López González, Pinto, Divito. (Sec.: Poleri).


c. 48.229/14, GARCIA, Pablo F. s/ Ley 22.362.
Rta.: 19/03/2015

CONTIENDA ENTRE JUZGADO DE INSTRUCCIÓN Y JUZGADO FEDERAL.

Comercialización clandestina de fármacos, afectación a la salud pública. Hipótesis delictiva que podría
subsumirse en el artículo 201 y en las previsiones de la ley 16.463. Hechos inescindibles y uno de ellos
de competencia federal. Juzgado Federal.

Fallo: "(…) II.-) (…), integrante de la Dirección de Vigilancia de Productos para la Salud (DVS) de la
Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT), denunció que
personal de esa dependencia realizó el (…) una inspección en la sede de la (…), en la que encontraron
una serie de medicamentos que, según le había referido quien se presentó como la Directora
Administrativa de la Droguería, (…), no poseían en ese momento la documentación que avalara su
adquisición.
Agregó que con fecha (…) la Droguería indicada remitió a esa dependencia nacional, dos facturas del
tipo "A" Nros. (…).
Posteriormente, el (…) se realizó una nueva inspección en el establecimiento precitado, ocasión en la
que (…) manifestó que los productos habían sido adquiridos a la firma (…), al vendedor del cual sólo
sabían que se llamaba "Alejandro", y que las facturas habían sido canceladas en efectivo y sin recibir
comprobante alguno del pago.

43
A los pocos días de ello, inspectores se dirigieron a la sede de la firma (…), ubicada en (…),
verificando que no trabajaban hacía aproximadamente seis meses y determinaron además que la
"Dirección de Registro, Fiscalización y Sanidad de Fronteras" del Ministerio de Salud de la Nación,
mediante Disposición 1940/2012 de fecha 8 de agosto de 2012, había cancelado la habilitación de
dicho establecimiento.
III.-) El Sr. Juez de Instrucción que previno declinó su competencia por entender que los hechos
encontraban adecuación típica en el art. 201 del Código Penal y en las previsiones de la ley 16.463
(…), no siendo aceptado por su colega del fuero de excepción por prematuro (…).
IV.-) La hipótesis delictiva podría subsumirse en el artículo 201 y también, en forma coetánea, haberse
infringido la ley N° 16.463 de carácter federal, que en su artículo 1° establece su ámbito de aplicación
a la "(…) importación, exportación, producción, elaboración, fraccionamiento, comercialización o
depósito en jurisdicción nacional o con destino al comercio interprovincial, de las drogas, productos
químicos, reactivos, formas farmacéuticas, medicamentos, elementos de diagnóstico y todo otro
producto de uso y aplicación en la medicina humana y las personas de existencia visible o ideal que
intervengan en dichas actividades".
Al respecto, es criterio de esta Sala que "corresponde atribuir competencia a la justicia federal si se
investiga una posible adulteración o tráfico de medicamentos que no permite descartar la posible
infracción tanto a la ley de marcas como a la de medicamentos, ambas de competencia federal" (in re,
las causas n° 1357/2012 "Farma One S.R.L." del 11 de octubre de 2012 y n° 1712 "Sapetti, Adrián" del
21 de noviembre de 2012 y CSJN, 22/05/07 "Chiale, Carlos Alberto" citado en Navarro, Guillermo
Raúl, Asturias, Miguel Ángel, Leo, Roberto, "Delitos contra la Salud Pública y el medio ambiente",
pág. 89, ed. Hammurabi, Bs.
As., 2009).
En igual sentido, se sostuvo que "en lo atinente a la adulteración de fármacos (art. 22, le 16.463) tiene
competencia del fuero de excepción, en atención al carácter federal de las normas contenidas en dicha
ley y también porque su comercialización clandestina afecta la salud pública" (1).
"Si los hechos se adecuaran a las previsiones del artículo 22 de la ley 16.463 al afectar la transparencia
y competitividad del mercado así como también la economía del consumidor, que pagó por un
producto cuya calidad no se condice con la que creía adquirir, la causa corresponde al fuero de
excepción, debido al carácter federal de las normas en juego" (2).
En efecto, la mencionada norma tiene por objeto proteger la salud pública, la economía del consumidor
y la mayor transparencia y competencia del mercado de medicinas. Así, si los hechos encuadran en sus
previsiones es competente el fuero de excepción, tal como lo ha sostenido reiteradamente el más Alto
Tribunal (3).
En conclusión, estaríamos ante hechos inescindibles con un doble encuadramiento legal cometido
simultáneamente y uno de ellos es de competencia federal.
En cuanto a lo prematuro de la investigación, lo cierto es que cuando de la denuncia surge claramente
que órgano debe intervenir no puede pretenderse que quien tomó conocimiento por primera vez lleve a
cabo una investigación cuando, de antemano, se advierte su incompetencia (4).
Ilustrativo de ello resulta el informe de la Directora de Vigilancia de Productos para la Salud de
A.N.M.A.T. del que se desprende que "si bien se constató que las unidades peritadas son originales de
sus laboratorios, se recuerda que toda vez que se desconoce el efectivo origen de las especialidades
medicinales, no puede asegurarse que hayan mantenido las debidas condiciones de conservación, que
son fundamentales para que los productos que llegan a los pacientes conserven sus propiedades.
El almacenamiento fuera de los rangos especificados puede provocar desvíos en la actividad
terapéutica, productos de degradación que podrían ser tóxicos, reacciones químicas inducidas por los
cambios de temperatura o efectos indeseados que no están previstos para las condiciones normales. Por
lo tanto su calidad, seguridad y eficacia se encuentran comprometidas y no pueden garantizarse. Por lo
tanto, tales medicamentos resultan peligrosos para la salud de los eventuales pacientes que los
consuman" (…).
Por ello y de conformidad con lo dictaminado por el Sr. Fiscal General, el Tribunal RESUELVE:
ASIGNAR COMPETENCIA al Juzgado en lo Criminal y Correccional Federal (…), para continuar
entendiendo en la presente. (…)."

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini, Filozof. (Sec.: Oberlander).


c. 1.769/14, SCRAVAGLIERI, Carlos y otros.
Rta.: 13/02/2015

Se citó: (1) C.S.J.N., Fallos, 327: 5173; 329:2256 y del 7/06/05, "Cintioni, H"; (2) C.S.J.N., Fallos:
329:4481; (3) C.S.J.N., Fallos: 325:902; 327:719 y 5173, S.C. Comp. 173, L. XLIII; (4) C.N.Crim. y
Correcc., Sala VI, c. 37.376, "Benetton, Luciano y otros s/competencia", rta.: 10/10/2009.

CONTIENDA ENTRE JUZGADO DE INSTRUCCIÓN Y JUZGADO FEDERAL.

Apremios ilegales. Personal del Servicio Penitenciario Federal en ejercicio de función local dentro de
la Ciudad de Buenos Aires. Agentes que no cumplen funciones específicamente federales. Justicia de
Instrucción.

44
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

Fallo: "(…) Convoca la atención del Tribunal la contienda de competencia suscitada entre el Juzgado
Nacional en lo Criminal de Instrucción N° 27 y el Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional
Federal N° 8.
Se investigan en el legajo las presuntas conductas delictivas de las que habría sido víctima el interno
M. D. P., alojado en el Complejo Penitenciario Federal de esta ciudad, por parte del personal de esa
unidad carcelaria, en oportunidad de efectuarse una requisa en su celda.
La señora juez de instrucción declinó la competencia a favor de la justicia de excepción, en la
inteligencia de que, al encontrarse imputado personal del Servicio Penitenciario Federal por delitos que
habrían tenido lugar en el interior de una unidad carcelaria de esta ciudad, se tornaba aplicable lo
dispuesto en el artículo 33, inciso 1°, apartado "c" del Código Procesal Penal, en tanto podría verse
afectado el normal desenvolvimiento de la institución para la cual prestan servicios (…).
A su vez, el magistrado federal no aceptó la competencia atribuida puesto que, según sostuvo, no se
advierte que los cuestionamientos dirigidos al personal del Servicio Penitenciario Federal involucren la
actuación de funcionarios en ejercicio de atribuciones de carácter estrictamente federal, susceptibles de
corromper o afectar servicios de tal naturaleza y que la mera pertenencia de los agentes involucrados a
una repartición estatal, no alcanza para atribuir competencia a ese fuero de excepción (…).
Al respecto, y con independencia de la subordinación típica que corresponda asignar a los hechos,
entiende el Tribunal que si bien los imputados son agentes del Servicio Penitencia Federal, en el caso
ejercerían una función local dentro de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
En tal sentido, y tal como citara el Ministerio Público Fiscal en el dictamen precedente, nuestro más
Alto Tribunal ha sostenido, que "…los agentes del Servicio Penitenciario Federal que se desempeñan
en establecimientos ubicados en la Capital Federal donde se alojan detenidos a disposición de
magistrados federales, no cumplen por ello, funciones específicamente federales…" (Fallos 312:1950);
y que "el carácter excepcional y estricto que debe reconocerse a la justicia federal exige que, en el
radio de la Ciudad de Buenos Aires, el funcionario autor o víctima de un delito cumpla funciones
específicamente federales…" (Competencia n° 685, XXII "Moreno Kierman s/ denuncia de apremios
ilegales, rta. 19/10/1989); en tanto que "…no basta la sola circunstancia de que un hecho se produzca
dentro de los perímetros reservados al Estado Nacional para reputarlo sujeto a la competencia federal,
ya que para que ello ocurra es preciso que dicho evento haya afectado intereses federales o la
prestación del servicio del establecimiento nacional…" (Fallos: 308:1993, 308:2425, entre otros y, de
esta Sala, causa n° 38.169/14 "Carusso, Elizabeth Rossana y otros", del 22 de octubre de 2014.).
En consecuencia, el Tribunal RESUELVE: DECLARAR que en las presentes actuaciones deberá
continuar interviniendo el Juzgado Nacional en lo Criminal de Instrucción N° 27".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Divitop, Cicciaro. (Prosec. Cám.: Decarli).


c. 4.331/15, SERVICIO PENITENCIARIO FEDERAL.
Rta.: 10/04/2015

CONTIENDA ENTRE JUZGADO DE INSTRUCCIÓN Y JUZGADO FEDERAL.

Imputado que habría recibido con conocimiento de su origen espurio y con ánimo de lucro un revolver
cuya numeración identificatoria se encontraba suprimida. Afectación a la garantía constitucional "ne
bis in idem". Violación directa a la garantía constitucional (art. 1 C.P.P.N). Testimonios extraídos
respecto del mismo acontecimiento real que sucedió en un lugar y en un momento determinado y,
luego de ser juzgado y condenado, fue subsumido en un concepto jurídico diferente bajo una
valoración distinta a la anterior. Nulidad.

Fallo: "(...) competencia planteada entre el Juzgado Nacional de Instrucción (...) y el Juzgado Criminal
y Correccional Federal (...).
Se investiga la conducta desplegada por J. D. G. A., (...) habría recibido con conocimiento de su origen
espurio y con ánimo de lucro el revolver calibre 22 Largo (...) cuya numeración identificatoria se
encontraba suprimida mecánicamente por abrasión y desgaste, (...). Tanto la fiscal como el juez de
instrucción arribaron al entendimiento que debía ser la justicia de excepción la que debía continuar la
investigación, dado que el hecho a pesquisar es el encubrimiento de la conducta prevista en el incido 5°
del artículo 189 bis del CP y que dicho ilícito se encuentra específicamente previsto en el artículo 33
inciso 1° "e" del ritual, que fija la competencia de la Justicia Federal. (...). El fiscal general sostuvo que
el encubrimiento afecta a la administración de justicia, sumado a que la reforma introducida por la ley
n° 25.886 no deja dudas en cuanto a que la supresión de la numeración de un arma corresponde a la
jurisdicción federal. Sin perjuicio de destacar que es criterio de esta Sala que no procede "…el
reproche con respecto al encubrimiento del delito de supresión de números identificatorios, pues, si
bien la eliminación de la numeración del arma sí constituye un accionar típico de acuerdo al tipo
previsto en el inciso 3º del artículo 289 del C.P.N., no reúne los requisitos del delito precedente del
encubrimiento por favorecimiento real…" (...). De la lectura de las actuaciones surge una afectación a
la garantía constitucional ne bis in idem, sobre la que habremos de expedirnos. (...) (...). Una decisión
en contrario implicaría vulnerar el principio sentado por la Corte Suprema de Justicia de la Nación a
partir del fallo "(...)" en cuanto a la necesidad de toda persona imputada de obtener -después de un
proceso tramitado en legal forma- un pronunciamiento que ponga término, del modo más rápido
posible, a la situación de incertidumbre y restricción de la libertad que comporta el enjuiciamiento

45
penal; principio de raigambre constitucional (art. 8.1 de la CADH, art. 14.1.c), PICDP). Por otra parte,
implicaría una violación directa a la garantía constitucional, receptada en el art. 1 del Código Procesal
Penal de la Nación, pues el mismo acontecimiento real que sucedió en un lugar y en un momento
determinado, luego de ser juzgado y condenado, fue subsumido en un concepto jurídico diferente a fin
de promover una nueva persecución penal bajo una valoración distinta a la anterior. (...). En base a lo
expuesto, corresponde declarar la nulidad del decreto de (fs. ...) que dispuso la extracción de
testimonios, y de todo lo dictado en su consecuencia. En consecuencia, Tribunal RESUELVE:
DECLARAR LA NULIDAD de lo actuado desde la extracción de los testimonios ordenada a ( fs. ...)
en sede local. (...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala I, Bunge Campos, Rimondi, López González. (Prosec. Cám.: León).
c. 28.111/14, GARCIA ALONSO, José David..
Rta.: 06/05/2015

CONTIENDA ENTRE JUZGADO DE INSTRUCCIÓN Y JUZGADO FEDERAL.

Empresa particular que desconecta en forma intencional los fusibles de los buzones de Edesur,
interrumpiendo el suministro eléctrico de algunas viviendas, cobrando para reestablecer el servicio.
Justicia de Instrucción.

Fallo: "(…) II.-) Constituye su objeto que personal de la empresa "(…)" habría desconectado en forma
intencional los fusibles de los buzones de Edesur, interrumpiendo el suministro eléctrico de algunas
viviendas, para luego cobrar a los vecinos $ (…) para reestablecer el servicio.
III.-) El titular del Juzgado de Instrucción (…) entendió que la conducta de los imputados tuvo como
consecuencia la interrupción del servicio de electricidad, contemplada en el artículo 194 del Código
Penal cuya investigación corresponde a la justicia de excepción.
IV.-) El magistrado Federal no compartió el criterio sustentado (…) por considerarlo prematuro en
tanto del sumario no surgía, con claridad, el encuadre jurídico de la acción investigada.
V.-) Trabada la contienda (…), habremos de decir que compartimos los argumentos sostenidos por el
Representante del Ministerio Público Fiscal en su dictamen de fs. (…) por cuanto, en principio, la
afectación del servicio eléctrico fue de manera particular, no vislumbrándose de la maniobra un
perjuicio de interés federal.
En este sentido se ha señalado que: "Para atribuirle competencia al fuero federal, la interrupción o el
entorpecimiento del servicio (…) debe ser general, y afectar a un número indeterminado de personas,
sin que resulta elemento determinante el simple hecho de que el servicio sea público" (1) "…y debe
afectar el desarrollo del tráfico interjurisdiccional" (CCC, Sala V, causa nro. 28856 "Weingand, Matías
y otros" , rta. el 8/2/2006, citado en Villanueva, Horacio Romero, "Código Penal de la Nación y
Legislación Complementaria- Anotados de Jurisprudencia", 3era. Edición, año 2008, pág.931).
En este contexto, el Tribunal RESUELVE: Que debe continuar interviniendo en la presente el Juzgado
de Instrucción N° (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini, Filozof, Pinto. (Sec.: Oberlander).


c. 7.349/15, CHEVALIER, Ezequiel Alberto y otro.
Rta.: 14/05/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correcc., Sala V, c. 25753, "Ferrin de Serrano, Elida", rta.: 10/12/04, (2)
C.N.Crim. y Correcc., Sala V, c. 28856, "Weingand, Matías y otros" , rta.: 8/2/2006.

CONTIENDA ENTRE JUZGADO DE INSTRUCCIÓN Y JUZGADO FEDERAL.

Denuncia por ejercicio de la prostitución en un edificio. Tareas investigativas y allanamiento llevado a


cabo que determinó la existencia de varias mujeres que ejercen la prostitución. Necesidad de
profundizar la investigación para determinar si las mujeres han sido captadas, trasladadas, o privadas
de su libertad, para ser sometidas a la explotación sexual. Justicia de instrucción.

Fallo: "(…) II- Las actuaciones se iniciaron con fecha 22 de mayo de 2014, oportunidad en que
personal policial perteneciente a la Seccional 23° de la Policía Federal Argentina recibió un llamado
telefónico de una persona que se identificó como "M.", quien manifestó que en la planta baja del
edificio sito en la calle A. XX de esta ciudad, dos mujeres -que se hallarían organizadas por una tercera
persona- estarían ejerciendo la prostitución.
Frente a ello, se realizaron tareas investigativas que determinaron que en el inmueble mencionado se
ejercía la prostitución y que un hombre estaría al tanto de los movimientos de quienes ingresaban y
egresaban a la morada en cuestión.
(…) el allanamiento practicado arrojó resultado positivo, identificándose a cinco mujeres mayores de
edad que brindaban servicios sexuales en la citada finca.
III- El juez de instrucción declinó su competencia a favor de la justicia de excepción por considerar que
el hecho en cuestión podría encuadrar en algunas de las modalidades previstas en el artículo 145 bis del
CP.

46
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

Por su parte, el magistrado en lo federal rechazó la atribución de competencia, pues entendió que la
declinatoria resultaba prematura teniendo en cuenta que no se habían llevado a cabo las diligencias
necesarias para determinar si el suceso podría constituir uno de los supuestos del delito de trata de
personas.
(…) el juez que previno mantuvo su postura inicial y trabó la presente contienda de competencia
negativa.
IV- Llegado el momento de resolver, de conformidad con lo dictaminado por el fiscal general,
asignaremos competencia al Juzgado Nacional en lo Criminal de Instrucción nro. 31.
(…) la lectura de las constancias incorporadas a la presente no revela datos indicativos, al menos de
momento, de que las mujeres hayan sido captadas, trasladadas, o privadas de su libertad, para
someterlas a la explotación sexual.
En ese orden, tal como ha sido indicado por el fiscal general, a los efectos de despejar la hipótesis
delictiva del artículo 145 bis del CP, corresponde que sea la justicia ordinaria la que determine las
condiciones bajo las cuales las mujeres habían desarrollado la actividad en cuestión.
(…) el tribunal RESUELVE: ASIGNAR la competencia al Juzgado Nacional en lo Criminal de
Instrucción (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, López González, Pinto, Divito. (Sec.: Poleri).


c. 33443/14, N.N. OCUPANTES DEL INMUEBLE A. XX.
Rta.: 18/05/2015

CONTIENDA ENTRE JUZGADO DE INSTRUCCIÓN Y JUZGADO FEDERAL.

Utilización fraudulenta de una clave fiscal para incorporar empleados en los registros de la empresa
que en realidad no eran tales, ocasionando ello una deuda fiscal y su consecuente ejecución
Entorpecimiento del normal funcionamiento del sistema de la AFIP y del buen servicio de sus
empleados. Justicia federal.

Fallo: "(…) Las presentes actuaciones se iniciaron por denuncia de J.C.B., presidente de la firma
"Viajes Corporativos S.A.", quien señaló que mediante la utilización de la clave fiscal de la empresa,
en la declaración jurada de SUSS correspondiente al período 04/2010 se habrían incorporado tres
personas que él desconoce a la nómina de empleados de la firma -Á.G.G., J.C.L. y M.J.S. - de manera
retroactiva.
Explicó que dichas acciones se habrían llevado a cabo en forma conjunta el 31 de marzo de 2014 entre
las 22.53 y las 23.00 hs., mediante una rectificación de la declaración jurada del mes de diciembre de
2013 realizada por la firma, en la que se incorporó a esas personas, generando de ese modo una deuda
ante el fisco, por los aportes no materializados, con una consecuente ejecución fiscal.
A su vez, agregó que dicha maniobra habría sido perpetrada por los imputados -quienes también fueron
dados de alta en otra empresa durante el mismo período fiscal y desconocidos por éstaa efectos de
lograr la obtención de préstamos bancarios y crediticios, al figurar como empleados en relación de
dependencia La magistrada de instrucción, compartiendo los argumentos del fiscal, declinó su
competencia en favor de la justicia federal, sobre la base de que para llevar a cabo la maniobra
denunciada se habría utilizado el sistema informático de la AFIP, para inscribir empleados inexistentes
y generar una deuda contributiva falsa, entorpeciéndose de tal modo el normal funcionamiento del ente
recaudador y el buen servicio de sus empelados (fs. …).
Por su parte, el juez federal rechazó la competencia atribuida al considerar que la declinatoria devenía
prematura, toda vez que no se encuentra acreditado que se haya alterado el buen funcionamiento de la
AFIP.
II. El caso que nos convoca se presenta análogo al de la causa 42603/14, "Giménez, Ángela Gladys
s/estafa", rta. el 11/2/15, donde sostuvimos que mantener la competencia de la justicia ordinaria cuando
a primera vista se observa que es incompetente -con motivo de la utilización fraudulenta de la clave
fiscal de la víctima para incorporar asientos falsos en los registros de la AFIP, entorpeciendo el normal
funcionamiento y buen servicio que prestan sus empleados-, desnaturalizaría la regla de competencia
del art. 33 del CPPN y afectaría la garantía constitucional del juez natural (art. 18 C.N.).
En el mencionado precedente señalamos que "la Administración Federal de Ingresos Públicos -AFIP-,
es una entidad autárquica en el orden administrativo, en lo que se refiere a su organización y
funcionamiento, y actúa bajo la superintendencia general y control de legalidad que ejerce sobre ella el
Ministerio de Economía y Obras y Servicios Públicos, además es un ente de ejecución de la política
tributaria y aduanera de la Nación. Por tanto, la inserción de falsedades en sus registros -tal como los
supuestos traídos a consideración- tiene efectiva entidad para afectar su normal funcionamiento y el
buen servicio de sus empleados, presupuestos de la competencia de excepción conforme lo dispuesto
en el artículo 33 inciso 1º, apartado "c" del Código Procesal Penal de la Nación".
(…) la magistrada de instrucción a fs.(…) dispuso que la presente causa se acumulara jurídicamente a
aquella, por lo que resulta evidente que ambos procesos deben seguir la misma suerte.
(…) dispondremos la remisión de estas actuaciones a conocimiento de la justicia federal.
(…) el tribunal RESUELVE: Disponer que en estas actuaciones intervenga el Juzgado Nacional en lo
Criminal y Correccional Federal N° (…)".

47
C.N.Crim. y Correc., Sala V, López González, Pinto, Divito. (Sec.: Poleri).
c. 62948/14, GIMENEZ, Angela y otros.
Rta.: 10/06/2015

CONTIENDA ENTRE JUZGADO DE INSTRUCCIÓN Y JUZGADO FEDERAL.

Infracción a la ley 24.051 de Residuos Peligrosos. Presidente de una empresa que habría autorizado el
vertido de desechos químicos no autorizados. Justicia de instrucción. Disidencia: Legislación vigente
que no ha introducido un cambio en la atribución de la competencia. Justicia Federal. .

Fallo: “(…) Se le atribuye a (…), en su calidad de presidente de la firma "M. A.", el haber contaminado
de un modo peligroso para la salud los desagües cloacales de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, el
día 18 de julio de 2014, al autorizar el vertido de desechos químicos no autorizados (cianuro total 3,4
mg/l y cianuro destructible por cloración 2,1 mg/l) desde el mencionado establecimiento, sito en C.
(…) de esta ciudad (v. fs. (…)).
La jueza de instrucción afirmó que el evento endilgado encuadraría en una de las infracciones previstas
por la ley 24.051 de Residuos Peligrosos, en la que el legislador había atribuido competencia a la
justicia de excepción y que si bien la ley 25.612 modificaba esa circunstancia (al asignarle competencia
al fuero ordinario), los injustos previstos en los artículos 51 a 54 de esa ley fueron observados por el
decreto 1343/02, por lo que nunca habían entrado en vigencia, siendo el fuero de excepción quien
debía investigar esas conductas (v. fs. (…)).
Por su parte, el juez federal rechazó la competencia atribuida. Hizo alusión al criterio sentado por la
Corte Suprema de Justicia en cuanto a que para la intervención de dicho fuero se debía acreditar la
afectación por el hecho investigado de personas o el ambiente fuera de los límites de esta ciudad.
Además, afirmó que el artículo 55 de la ley 25.612 (que establecía la competencia a la justicia
ordinaria) no había sido vetado y mantiene plena vigencia.
La jueza Mirta L. López González dijo: Conforme lo he sostenido con anterioridad (C.C.C., Sala V,
causas nro. 47/12, “Papadopoulus, Luis Alberto s/inf. Ley 24.051”, y nro. 36941 “Center Oil s/inf. Ley
25041”), la investigación debe continuar en manos del juez federal.
La ley 24.051 estableció sin limitación alguna en su artículo 58 la competencia del fuero federal en
materia de residuos peligrosos.- La ley 25.612, que sustituía a su antecesora, fue promulgada por el
decreto 1343/02 con observaciones a las normas inherentes a la responsabilidad penal (artículos 51 a
54), observación que se hizo extensiva al primer párrafo del artículo 60 por el que se derogaba in totum
dicha ley anterior.
Por ello, si las normas que componen el régimen penal no han sido modificadas, tampoco lo ha sido
aquella que explícitamente otorga competencia a la justicia de excepción, por lo que el artículo 58 de la
ley 24.051, por imperio del veto parcial señalado, mantiene plena vigencia.
El argumento al cual ha hecho referencia el juez federal y el fiscal de cámara (v. fs…), basado en la
necesidad de que los efectos nocivos sean interjurisdiccionales para que intervenga el fuero de
excepción, considero que constituye un presupuesto de punibilidad y no de competencia. Así voto.
Los jueces Ricardo Matías Pinto y Mauro A. Divito dijeron: Compartimos los argumentos esgrimidos
por el fiscal de cámara en el dictamen de fs. (…), los cuales se fundan en la doctrina sentada por la
Corte Suprema de Justicia Nacional (Fallos 323:163; 325:269 y 327:212) y en la postura mayoritaria
adoptada por la Sala VII de esta Cámara “in re” causa n° 32.256 “Central Park” del 15 de agosto de
2007.
(…) votamos por asignar competencia al Juzgado Nacional en lo Criminal de Instrucción nro. (…).
(…) el tribunal RESUELVE:I. ASIGNAR competencia al Juzgado Nacional en lo Criminal de
Instrucción N° (…). II. Librar oficio al Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional Federal N°
(…)”.

C.N.Crim. y Correc., Sala V, López González (en disidencia), Pinto, Divito. (Sec.: Raña).
c. 38.357/14, MAGTIK S. A. y otro sobre infracción Ley 24.051.
Rta.: 10/06/2015

CONTIENDA ENTRE JUZGADO DE INSTRUCCIÓN Y JUZGADO FEDERAL.

Taller que realiza instalaciones y/o reparaciones de cilindros de gas comprimido en vehículos sin
habilitación. Secuestro de obleas apócrifas y cilindros reguladores y cañerías de procedencia ilícita.
Sustancia -gas- que se encuentra comprendida en la enunciación de materiales peligrosos que contiene
el art. 189 bis en su primer párrafo -cuya mera tenencia aparece tipificada en el tercero- Distribución
que es un servicio público nacional (Ley 24.076). Obstrucción o entorpecimiento del funcionamiento
del Ente Regulador del Gas en su carácter de contralor. Justicia Federal.

Fallo: "(…)" El presente legajo se inició a raíz de la denuncia que realizó E.M. -en su carácter de
gerente del área de "Gas Natural Comprimido" del Ente Nacional Regulador del Gas (ENARGAS)-
relativa al funcionamiento de un taller -con nombre de fantasía "GNC Mataderos", ubicado en la calle
XX - que realizaba instalaciones y/o reparaciones de cilindros de gas comprimido en vehículos sin
habilitación.

48
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

En el allanamiento efectuado en el domicilio indicado se secuestró documentación relativa a la


instalación de equipos de GNC en automóviles -de dos años anteriores- y se hallaron cilindros de gas
natural comprimido cuya manipulación no se encontraba debidamente garantizada.
El juez de instrucción sostuvo que la investigación correspondía a la justicia federal, porque los hechos
encuentran adecuación en el tipo penal del art. 189 bis inciso 1°, tercer párrafo, del Código Penal.
También entendió que la utilización de obleas falsificadas y la receptación de cilindros reguladores y
cañerías de procedencia ilícita (arts. 277 inciso 3°, apartado "b", en función del inciso 1°, apartado "c"
y 296 del citado digesto) pueden obstruir el normal funcionamiento del ENARGAS en su función de
contralor -en aspectos relativos a la seguridad pública-, cuya investigación también le corresponde al
fuero de excepción.
(…) el magistrado federal rechazó la competencia, al considerar que no se encontraba comprobada en
autos una afectación dolosa en los términos previstos por el art. 189 bis, inciso 1° del CP, ya que la
actividad irregular llevada a cabo en el taller tenía en miras la obtención de ganancias.
También descartó las adecuaciones típicas de los artículos 277 y 296 por falta de pruebas y porque no
podía concluirse la existencia de entorpecimiento en el normal funcionamiento del ente Regulador del
Gas por cuanto dicho organismo no se encontraba capacitado para ingresar al inmueble para verificar el
cumplimiento de las previsiones legales.
El juez de instrucción mantuvo su postura inicial, elevando los actuados a esta alzada.
II. De conformidad con lo dictaminado por el Fiscal General a fs.(…), entendemos que no es dable
descartar las hipótesis delictivas inicialmente planteadas y a raíz de las disposiciones del art. 33 inciso
1° "c" y "e" del CPPN, que determinan la competencia federal para conocer en los delitos que
obstruyan o entorpezcan el funcionamiento del Ente Nacional Regulador del Gas, se asignará el caso a
ese fuero.
El gas natural se encuentra comprendido en la enunciación de materiales peligrosos que contiene el art.
189 bis en su primer párrafo -cuya mera tenencia aparece tipificada en el tercero-, y su distribución ha
sido definida como un servicio público nacional por la ley 24.076, que establece un marco regulatorio
estricto para la actividad, e instituye al ente Regulador del Gas como organismo encargado de velar por
su cumplimiento.
Lo expuesto, sumado a la existencia en el taller de materiales inflamables -cilindros de gas- y de
herramientas específicas para la instalación de equipos de GNC -tubos de nitrógeno, caños de venteo y
fosa (ver fs….)- dan fundamento al encuadre legal indicado.
(…) las cuestiones atinentes a la comprobación de los hechos deberán ser dilucidadas ante la justicia
federal.
(…) el tribunal RESUELVE: Disponer que en estas actuaciones intervenga el Juzgado Nacional en lo
Criminal y Correccional Federal N° (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, López González, Pinto, Divito. (Sec.: Poleri).


c. 60.590/14, N.N. s/ falsificación de documentos.
Rta.: 25/06/2015

CONTIENDA ENTRE JUZGADO DE INSTRUCCIÓN Y JUZGADO FEDERAL.

Investigación iniciada en virtud de una denuncia anónima que alertó respecto de la existencia de un
prostíbulo en donde se explotaban mujeres. Comunicación posterior de la denunciante señalando que
había sido explotada sexualmente en aquél domicilio. Informe del "Programa Nacional de Rescate y
Acompañamiento a las Personas damnificadas por el delito de trata" que da cuenta que, al momento del
allanamiento, la situación de las mujeres allí identificadas, no daría cuenta de una elección voluntaria o
actividad elegida. Justicia Federal.

Fallo: "(…) El juez de instrucción declinó su competencia en favor de la justicia de excepción en virtud
del resultado de las medidas realizadas en la causa por lo que entendió que el delito a investigar
encuadra en la figura tipificada en el art. 145 bis del Código Penal que, en virtud del art. 13 de la Ley
26.364 "Prevención y Sanción de la Trata de Personas y Asistencia a sus Víctimas" resulta de ajena
jurisdicción.
(…)el magistrado del fuero federal rechazó la competencia y adujo que resulta irrefutable que las
declarantes en la causa manifestaron ejercer la prostitución de manera voluntaria, sin estar sometidas a
explotación alguna que permitiese adecuar su situación y la conducta de las personas imputadas hasta
el momento en autos como constitutiva del delito de trata de personas con fines de explotación,
previsto en el art. 145 bis del código de fondo. Sin embargo, consideró que la actividad que
desarrollarían las imputadas podría encuadrar en la figura acuñada en el art. 125 bis del Código Penal
cuya jurisdicción corresponde al fuero ordinario (fs. ..).
El magistrado de instrucción mantuvo su postura originaria y dio por trabada la presente contienda
(fs….).
(…) consideramos que corresponde intervenir en autos, a la justicia de excepción.
Aduna esta posición, la circunstancia de que quien realizara originariamente la denuncia de manera
anónima, el 27 de noviembre de 2013, se volvió a comunicar afirmando haber sido quien realizó el
llamado anterior (fs…) y aportó su nombre y número de contacto. Dijo, entre otras cosas, que fue
explotada sexualmente en el domicilio de mención durante tres o cuatro meses y que unos días antes -

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23 de noviembre de 2013- al presentarse en el lugar para retirar sus pertenencias, observó que las
mujeres que se encontraban en situación de prostitución estaban drogadas, y que una de ellas sería
menor de edad y de nacionalidad paraguaya.
Además, no puede desconocerse que del informe efectuado por el "Programa Nacional de Rescate y
Acompañamiento a las Personas damnificadas por el delito de trata" obrante a fs. (…). se desprende
que "…la situación de prostitución en la cual se encontraban al momento del allanamiento no sería una
real elección -pese al esfuerzo de algunas de las mujeres en reafirmar que se trataba de una "actividad
elegida"-, sino que su autonomía se encontraría limitada debido a las dificultades que enfrentan a la
hora de hallar opciones laborales bien remuneradas que garanticen su subsistencia en este desfavorable
contexto, en donde los procesos de vulnerabilidad familiares, habitacionales y económicos condicionan
-y en muchos casos determinan- la incorporación de las mujeres al circuito prostituyente. La
mencionada situación de vulnerabilidad se vería profundizada por la permanencia de estas mujeres en
el ámbito prostituyente" (sic) -ver fs. (…).Tales extremos y las demás constancias de la causa, indican
que detrás de la actividad desarrollada en el lugar podría existir una organización dedicada a la trata de
personas -art. 145 bis del CP- que debe ser investigada por el fuero federal.
(…) el tribunal RESUELVE: ASIGNAR competencia al Juzgado Nacional en lo Criminal y
Correccional Federal N° (…), Secretaría N°6, para que siga interviniendo en el presente legajo."

C.N.Crim. y Correc., Sala V, López González, Pinto, Divito. (Sec.: Raña).


c. 65974/13, CASASA, Susana y otros.
Rta.: 30/06/2015

CONTIENDA ENTRE JUZGADO DE INSTRUCCIÓN Y JUZGADO PENAL ECONÓMICO.

Cheques de pago diferido puestos en circulación por un tercero luego que el titular cerrara la cuenta
corriente con el objetivo de abonar deudas preexistentes, o a modo de préstamo. Ausencia de ardid que
determinara la disposición patrimonial. Art. 302 del C.P. Justicia Penal Económica.

Fallo: "(…) II.) (…), denunció que personas no identificadas habrían puesto en circulación, sin su
conocimiento, distintos cheques de pago diferido de una chequera de la cuenta corriente n° (…) del
Banco (…) a su nombre, luego de que procediera al cierre de ella el (…).
La investigación efectuada sobre la cadena de endosos permitió llegar, en el caso de algunos de los
documentos a la individualización de los imputados, a quienes se les recibió declaración indagatoria.
III.) El magistrado de instrucción declinó la competencia a favor del fuero en lo penal económico por
entender que el suceso se subsumía en el artículo 302 del Código Penal, ya sea en las previsiones del
inciso 2° o bien del inciso 4° (…). Ello no fue aceptado por su colega por cuanto los hechos encuadran
en su art. 172.
IV.) Coincidimos con el Fiscal General en que no se vislumbra en el análisis de la causa la
configuración de este delito toda vez que al ser entregados los cartulares no habría existido una
contraprestación simultánea a cambio, sino que, en principio, fueron facilitados para abonar deudas
preexistentes, o a modo de préstamo, por lo cual no se verifica un ardid que determinara la disposición
patrimonial (1).
En consecuencia, el Tribunal RESUELVE: ASIGNAR COMPETENCIA al Juzgado en lo Penal
Económico (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini, Filozof, Pinto. (Sec.: Oberlander).


c. 22.212/12, AMOROSO, Walter y otros.
Rta.: 26/02/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correcc., Sala VI, c. 30682/2012, "Barba Merida, María Yolanda y otros, rta.:
30/4/2014.

CONTIENDA ENTRE JUZGADO DE INTRUCCIÓN Y JUZGADO FEDERAL.

Favorecimiento de la prostitución. Necesidad de profundizar a fin de determinar si los hechos


configuran el delito de trata de personas de competencia de la justicia de excepción. Justicia Federal.

Fallo: "(…) II.- El (…) la División Centro Comando y Control 911 de la Policía Federal recibió un
llamado telefónico de una persona no identificada que refirió "(…) que en el inmueble sito en
(…)habrían tres femeninos ejerciendo la prostitución, también se encontrarían menores de edad los
cuales serían hijos de los femeninos (…) también consumirían estupefacientes (…)".
Luego de efectuadas distintas diligencias, personal policial que se consignó en el lugar, se entrevistó
con un hombre que egresaba de la vivienda quien relató que había concurrido allí por conocerlo de
visitas anteriores y también por la página de Internet (…). Señaló que mantuvo relaciones sexuales con
una de las mujeres que estaba en su interior y después se retiró (…).
Tres días posteriores otro testigo se pronunció en similares términos (…).
III.- El juez de instrucción que previno entendió que debía ser el fuero de excepción el que continuara
con la pesquisa ya que el suceso podría subsumirse en las conductas previstas en los artículos 15 y 17

50
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

de la ley 12.331 o 127, 145bis y 145ter del Código Penal (…). Ello, no fue aceptado por el magistrado
federal por considerarlo prematuro (…).
IV.- Trabada así la contienda (…), este Tribunal comparte el criterio esgrimido por el Sr. Fiscal
General (…), en tanto debe ser la justicia de excepción la que continúe con la causa. En este sentido,
hemos sostenido que "(…) Si bien la última reforma introducida por la ley 26.842 sobre esta temática
no ha alterado la asignación de competencia que efectuara la ley 26.364, que sólo prevé la intervención
del fuero federal para los supuestos de trata de blancas, la delgada línea que divide las figuras aludidas
aconseja que la investigación sea llevada ante un único fuero, donde deberán practicarse las medidas
necesarias para definir cuál es la calificación legal correcta (…)" (1).
En el precedente de referencia también se citó a nuestro Máximo Tribunal que, en casos donde se
investiga la posible comisión del delito de trata de personas, ha señalado que "(…) La justicia federal
no puede declinar su competencia ni rechazar la que se le pretende atribuir sin antes realizar las
medidas necesarias para establecer si se halla configurado o no dicho ilícito (…)"(2).
Por último, señalamos que "(…) la trata de personas constituiría el paso previo a la comisión delictiva
del delito de favorecimiento de la prostitución, que vendría a configurar la consagración del objetivo
propuesto inicialmente. Es decir, en un punto se confunden ambas figuras, especialmente cuando en el
caso de los delitos contra la identidad sexual se utilizan métodos coactivos o intimidatorios (…)" -ver
resolución mencionada-.
En consecuencia, este Tribunal RESUELVE: ASIGNAR COMPETENCIA al Juzgado Federal en lo
Criminal y Correccional (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini, Filozof, Pinto. (Sec.: Oberlander).


c. 13.231/15, Propietario del Inmueble, Calle ....
Rta.: 13/05/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correcc., Sala VI, c. 23.842/2013 "E.


s/ competencia", rta.: 16/9/13; (2) C.N.Crim. y Correcc., Sala VI, c. 46.109 "L., M. I.", rta.: 7/5/13, y c.
1230, V., rta.: 19/9/12.

CONTIENDA ENTRE JUZGADO DE MENORES Y JUZGADO FEDERAL.

Conflicto entre particulares. Acceso a la cuenta personal de Facebook sin autorización. No hay
violación al servicio postal, seguridad o intereses federales. Justicia de menores.

Fallo: "(...) La causa llega a conocimiento de esta sala en virtud de la contienda negativa de
competencia suscitada entre el Juzgado Nacional de Menores Nº 7, Secretaría Nº 21, y el Juzgado
Nacional en lo Criminal y Correccional Federal Nº 6, Secretaría Nº 12.
En consonancia con lo expuesto por el fiscal general a (fs. ...), habremos de mantener la competencia
del juzgado de menores. El conflicto en cuestión se habría desarrollado entre particulares y, a criterio
del tribunal, el acceso a la cuenta personal de Facebook no autoriza la intervención del fuero de
excepción al no haberse violentado el servicio postal o afectado la seguridad o intereses federales (...).
Consecuentemente, el tribunal RESUELVE: MANTENER la competencia del Juzgado Nacional de
Menores Nº 7, Secretaría Nº 21. (...)"

C.N.Crim. y Correc., Sala I, Bunge Campos, Rimondi, López González. (Prosec. Cám.: Souto).
c. 48714/14, CONTIENDA Juzgado Nacional de Menores N°7, Secretaría N° 21, y el Juzgado
Nacional en lo Criminal y
Rta.: 06/02/2015

Se citó: (in re causa n° 26.078/2014 Sala I "Denunciante: Montenegro, Julio Leonardo". Rta.
4/08/2014)

CONTIENDA ENTRE JUZGADO DE INSTRUCCIÓN Y JUZGADO FEDERAL DE


PROVINCIA.

Llamados telefónicos de carácter extorsivo desde una unidad carcelaria de la Pcia. de Buenos Aires.
Asignación de competencia atendiendo el lugar donde se llevó a cabo el delito. Justicia Federal de la
Pcia. de Buenos Aires.

Fallo: "(…) Convoca la atención del Tribunal la contienda de competencia suscitada entre el Juzgado
Nacional en lo Criminal de Instrucción N° 29 y el Juzgado Federal en lo Criminal y Correccional N° 3
de la ciudad de Morón, provincia de Buenos Aires.
El señor juez de instrucción se declaró incompetente en el entendimiento de que al haberse establecido
que los llamados telefónicos de carácter extorsivo tuvieron lugar desde una unidad carcelaria, con
asiento en la localidad de Marcos Paz, resulta competente el juez del lugar donde los hechos
investigados se han cometido y torna aplicable lo dispuesto en el art. 33, inciso 1°, apartado "c" del

51
Código Procesal Penal, en tanto podría verse afectado el normal desenvolvimiento de una repartición
estatal (…).
A su vez, el magistrado federal no aceptó la competencia atribuida puesto que, según sostuvo, no se
advierte que el suceso a investigar comprometa intereses federales susceptibles de corromper o afectar
la prestación del servicio de una repartición estatal (…) Con independencia de la competencia material
planteada entre los juzgados contendientes, lo cierto es que se encuentra acreditado en el legajo que las
llamadas extorsivas se efectuaron desde una línea telefónica instalada en la Dirección Nacional del
Servicio Penitenciario Federal N° 2, de la localidad de Marcos Paz, provincia de Buenos Aires (…),
que amerita que la investigación continúe su trámite ante la justicia de excepción de esa jurisdicción.
Al respecto, nuestro más Alto Tribunal ha sostenido que "…En atención a que la competencia criminal
en razón del territorio se establece atendiendo al lugar donde se ha llevado a cabo el delito, y teniendo
en cuenta que los dichos del denunciante no se encuentran desvirtuados por otros elementos de la
causa, en cuanto a que las llamadas extorsivas tuvieron lugar en la unidad donde se encuentra detenido
su hermano -Ezeiza-, es en esa sede donde debe proseguir la investigación" (Fallos 329:2130); en tanto
que "…debe conocer en las actuaciones iniciadas en virtud de un llamado telefónico por cobrar desde
el interior de un instituto penitenciario, en el que se exigía la entrega de códigos de tarjeta telefónicas
para liberar al hermano de la denunciante, a quien se decía tener secuestrado, el juez del lugar del
instituto carcelario…" (Fallos: 328:2935).
Por lo expuesto, de conformidad con lo dictaminado por el señor Fiscal General (…), el Tribunal
RESUELVE: DECLARAR que en las actuaciones deberá intervenir el Juzgado Federal en lo Criminal
y Correccional N° 3 de la ciudad de Morón, provincia de Buenos Aires".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Divito, Cicciaro, Scotto. (Sec.: Besansón).


c. 43.393/14, N.N. damnif. Dorado, Angel Wilfredo.
Rta.: 19/05/2015

CONTIENDA ENTRE JUZGADO DE INSTRUCCIÓN Y JUZGADO FEDERAL DE


PROVINCIA.

Estafa. Compras desconocidas con tarjeta de crédito. Operaciones que imponen la obligación de
exhibir documento de identidad para concretarlas (art. 37 inc. B de la Ley 25.065). Compras realizadas
en comercios ubicados en extraña jurisdicción. Justicia Federal de la Provincia de Buenos Aires.

Fallo: "(…) Convoca la atención del Tribunal la contienda de competencia suscitada entre el Juzgado
Nacional en lo Criminal de Instrucción N° 35 y el Juzgado Criminal y Correccional Federal N° 1 de La
Plata, provincia de Buenos Aires.
Se investiga en los presentes actuados la denuncia realizada por B. Y. M., quien refirió poseer una
extensión de la tarjeta de crédito MasterCard de su padre, R. M., titular de la cuenta n° X del Banco
Francés, y que el 19 de agosto de 2014 recibió un llamado telefónico de su madre, quien le informó que
al ingresar al home banking de dicha cuenta, advirtió que entre el 8 y el 15 de agosto de 2014, personas
desconocidas habían realizado compras en diferentes comercios con la extensión de su tarjeta.
Respecto de la contienda planteada, cabe compartir el criterio que, de modo coincidente, trazaron el
señor juez de instrucción (…) y el señor fiscal general (…), pues puede inferirse que para concretar las
operaciones con la tarjeta de crédito denunciada (…), necesariamente debió exhibirse un Documento
Nacional de Identidad (art. 37, inc. b) de la ley 25.065).
Sobre el punto, esta Sala ha sostenido que las cuestiones probatorias que pudieran suscitarse en el
sumario no deben incidir en la asignación de competencia, por lo que la ausencia del documento falso
no puede erigirse en un factor dirimente a tales fines (1), y nada obsta a que las medidas de prueba sean
ordenadas por el juez competente en la materia.
En consecuencia, ante la mera hipótesis de una defraudación cometida mediante la falsificación,
adulteración o utilización ilegítima de un documento de identidad ajeno, corresponde declinar la
competencia a la justicia federal (artículo 33, inciso 1°, apartado "c" del Código Procesal Penal).
Por otra parte, teniendo en cuenta que los pagos espurios realizados con la tarjeta de crédito tuvieron
lugar -en la mayoría de los casos- en comercios ubicados en extraña jurisdicción territorial (…), la
investigación debe ser llevada a cabo en el ámbito bonaerense.
Ello, porque en casos como el del sub examen, donde se investigan conductas que habrían tenido lugar
en diversas jurisdicciones, la elección del juez competente debe hacerse de acuerdo a lo que resulte
más conveniente desde el punto de vista de una más eficaz investigación y mayor economía procesal
(Fallos: 332:869).
En consecuencia, el Tribunal RESUELVE: DECLARAR que en las presentes actuaciones deberá
intervenir el Juzgado Criminal y Correccional Federal N° 1 de La Plata, provincia de Buenos Aires".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Divito, Scotto. (Sec.: Sánchez).


c. 67.816/14, N.N.
Rta.: 27/02/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correc., Sala VII, c. 36.869, "Soto Salas, Javier Alejandro", rta: 12/09/2013.

52
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

CONTIENDA ENTRE JUZGADO DE INSTRUCCIÓN Y JUZGADO PENAL ECONÓMICO.

Presentación de facturas apócrifas con el objeto de ocultar relaciones laborales o documentar egresos
de dinero no justificados. Acción denunciada que no habría afectado las arcas públicas, debido a que
las obras sociales y los sindicatos se encuentran exentos del pago del impuesto al valor agregado.
Figura de evasión descartada. Hecho encuadrable en los art. 172 y 173 C.P. Justicia de Instrucción.

Fallo. "(...) contienda negativa de competencia planteada entre el Juzgado Nacional en lo Criminal de
Instrucción N° (...) y el Juzgado Nacional en lo Penal Tributario n° (...).
Oído el señor fiscal general a (fs. ...), consideramos que las actuaciones deben continuar en la órbita de
la justicia de instrucción, toda vez que en virtud del análisis de las constancias probatorias obrantes en
la presente investigación entendemos que la acción denunciada no habría afectado las arcas públicas,
debido a que tanto las obras sociales como los sindicatos se encuentran exentos del pago del impuesto
al valor agregado. En consecuencia, tal y como lo sostiene el Dr. Mauricio Agustín Viera, la conducta
de presentar facturas apócrifas con el objeto de ocultar relaciones laborales o documentar egresos de
dinero que podrían no estar justificados, podría constituir alguno de los tipos penales previstos en los
art. 172 y/o 173 del Código Penal, mas no las figuras de evasión dispuestas en la ley 24.769. (...) toda
vez que el juez a cargo del Juzgado de Instrucción n° 2, aceptó tácitamente la competencia el 28 de
agosto de 2014, el tribunal RESUELVE: ASIGNAR competencia para que continúe investigando el
Juzgado Nacional en lo Criminal de Instrucción (...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala I, Bunge Camppos, Rimondi. (Prosec. Cám. ad-hoc.: León).
c. 31016209/11, SUAREZ, Enrique Omar y otros.
Rta.: 15/04/2015

CONTIENDA ENTRE JUZGADO DE INSTRUCCIÓN Y JUZGADO PENAL ECONÓMICO.

Entrega de cheques de pago diferido: instrumento de crédito y no de pago. Art. 302 CP inc. 3°. Justicia
en lo Penal Económico.

Fallo: "(…) II.-) (…), apoderado de (…), denunció que en (…) le vendió a (…), materiales para la
construcción de una cancha donde se celebraría "El Mundial de Fútbol-Playa". Esa transacción quedó
plasmada en 25 remitos.
El imputado habría abonado la suma de (…) a través de 6 cheques del banco (…), los que fueron
rechazados al ser presentados al cobro por carecer de fondos.
En ese contexto, (…) recibió un llamado de (…), dueño de la firma (…) quien le afirmó que sería el
único que podría hacerle cobrar la deuda. Ante ello, aceptó y acordó pagarle $ (…) por sus servicios. El
(…) le entregó 6 cartulares, cada uno por la suma de $ (…) a nombre de (…), pero al intentar percibir
sus importes, volvió a sucederle lo mismo que con los librados por (…).
III.-) El magistrado instructor (…) declinó la competencia a favor del fuero en lo Penal Económico por
entender que el suceso investigado carecía de los elementos típicos de la estafa debiendo determinarse
si se subsumía en alguna de las conductas previstas en el artículo 302 del Código Penal.
Por su parte, el Juez en lo Penal Económico entendió que no se daban ninguno de los supuestos
enumerados en aquel artículo y que el temperamento adoptado era prematuro (…).
IV.-) Los Dres. Julio Marcelo Lucini y Mario Filozof dijeron: Del legajo se desprende que la
frustración del cobro habría recaído en la falta de fondos del librador y no en las particularidades de los
títulos de crédito pues, de momento, no se denunció que fueran de origen espurio o que hubieran sido
adulterados.
Entendemos que no existe en la presente un ardid o engaño que haya determinado el perjuicio
patrimonial sufrido por el girado y permita así subsumir la conducta investigada en delito de estafa (1).
Por ello, corresponde darle intervención al fuero Penal Económico.
V.-) El Dr. Ricardo Matías Pinto: No verificándose las hipótesis establecidas en los artículos 285 y 175
del código de fondo, comparto el temperamento adoptado por mis colegas preopinantes.
(…), el Tribunal RESUELVE: QUE DEBE INTERVENIR el Juzgado Nacional en lo Penal
Económico (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini, Filozof, Pinto. (Sec.: Oberlander).


c. 58.673/14, CASTRILLI, Javier y otros.
Rta.: 01/04/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correcc., Sala VI, c. 30682/12, "Barba Merida, María Yolanda y otro s/
competencia", rta.: 30/4/2014.

53
CORRUPCIÓN DE MENORES.

En calidad de partícipe necesaria en comisión por omisión de la madre por no haberlo evitado, en
concurso real con lesiones leves reiteradas agravadas por el vínculo en calidad de autora. Elementos de
prueba suficientes para agravar la situación procesal. Confirmación.

Fallo: "(…) III.-) En la audiencia celebrada en la Cámara Gesell en los términos del art.250bis. del
C.P.P.N. (…) se expidió sobre los hechos padecidos como así también respecto de la intervención de
su progenitora en los mismos.
En esta senda, relató que su padrastro desde los ocho años abusaba sexualmente de ella y su mamá "lo
sabía y me tenía amenazada con mis hermanos. Ella sabe que son mi debilidad" (sic). Agregó que su
progenitora veía lo que el imputado le hacía y le pegaba "para que yo sea buena" (sic) a la vez que le
decía que era ella quien lo provocaba "(…) que todo era mi culpa" (sic).
En cuanto a los abusos, (…) indicó que (…) la tocaba en todo el cuerpo "(…) las tetas y me tocaba
abajo" (sic), e incluso "una vez me la hizo chupar" (sic). Agregó que a veces le sacaba la ropa y a veces
la dejaba vestida. Al serle preguntada qué sentía, contestó: "miedo. Terror (…) si yo no quería hacerlo
me cagaba a palos y mi mamá una vez me amenazó con un cuchillo. Me pegaba con palos de escoba,
con todo. Mi mamá" (sic).
La Licenciada del Departamento de Psicología del Cuerpo Médico Forense concluyó que el relato de la
niña fue espontáneo, inestructurado, resultando compatible con la categoría de verosimilitud (…).
Por su parte, los informes interdisciplinarios de fs. (…) ilustran que el equipo interviniente consideró
necesario adoptar medidas de protección respecto de los niños (…), en tanto la progenitora no
contribuyó a esclarecer la situación de sus hijos ni mostró angustia o preocupación frente a los hechos
por ellos relatados.
En base a los estudios realizados por la Defensoría Zonal de la ciudad de Buenos Aires, a los menores
se les asignó un hogar para vivir y a partir de allí, se determinó que (hermana de (…)), también habría
sido víctima de los tocamientos (…).
(…) fue oída en la Cámara Gesell en los términos del art.250bis. del C.P.P.N. (…), al igual que (…) y
(…).
Todos ellos se expidieron en forma conteste en relación a los constantes golpes que su padrastro y su
madre les asestaban en todas partes del cuerpo tanto con sus manos como con cintos. Sus exposiciones
fueron consideradas compatibles con la categoría de verosimilitud.
Corrobora aún más lo expuesto que (…) aseveró haber presenciado las reiteradas agresiones físicas y
verbales a las que era sometida (…) y sus hermanos por parte de su madre, (…), quien incluso notó que
lo hacían con palos, piedras y cables. Indicó que tras tomar conocimiento de la denuncia realizada, los
imputados lo amenazaron (…).
Por otro lado, el informe médico de fs. (…) da cuenta que I. presentaba quemaduras en la zona
pectoral. Puntualmente, consignó (…).
La psicóloga (…) del Cuerpo Médico Forense dijo, en relación a (…)., que mostraba ansiedad
paranoide, marcada oralidad, reforzamientos táctiles y ciertos aspectos agresivos relacionados con la
sexualidad, como así también impulsividad y posibilidad de conducta de acción. "Parece haber
naturalizado la violencia (física y sexual), y minimizarla, por lo cual el material no presenta las
improntas traumáticas características de victimización sexual sino más bien de un psiquismo afectado
con indicadores de violencia de toda índole" (…).
"Respecto a la entidad de los hechos denunciados para desviar el normal desarrollo sexual, es posible
inferir que, de haber ocurrido en esos términos, de corroborarse los mismos; teniendo en cuenta su
edad, que la persona denunciada según sus dichos pertenecería al grupo conviviente, y la cronicidad
mencionada; los mismos tienen entidad para ello (…)" (…).
El dictamen da cuenta de indicadores de rigidez, de que vive la situación actual como si no hubiera
defensa que alcance, quedando expuesta a las presiones del medio y los episodios denunciados, de
victimización en general y que han afectado el normal desarrollo de la personalidad (…).
Respecto de (…) y (…), se informó la presencia de indicios de una fuerte afectación emocional,
apareciendo la temática de buenos y malos, transformándose el padre en figura negativa.
Concretamente y en relación a los dibujos efectuados por I.
reveló que la niña al describirlos dijo "a papá y a mamá me olvidé las manos", lo que puede dar lugar a
una doble línea interpretativa; 1.- "Haciendo hincapié en la falta de manos: se olvidó las manos como
mecanismo defensivo, porque sin manos no se puede pegar- sus manos pegaban o tomaban un cinto
para hacerlo y sin ellas no pueden hacerlo, no pueden maltratar, 2.haciendo hincapié en el olvido; su
necesidad de 'olvidar' el maltrato que su madre y su padre le pegaban, y así pues, que se conviertan en
'buenos'." (…).
En este contexto, la prueba de cargo merituada precedentemente permite demostrar, a esta altura de la
pesquisa, la intervención y responsabilidad de la procesada en los hechos objeto de estudio.
Más allá de los cuestionamientos que hace la parte respecto de la complicidad omisiva en los delitos de
propia mano, del legajo surge que la imputada las agredió físicamente cuando se mostraban reticentes y
se resistían al contacto.
Por otra parte, la presencia de (…) con más la continuidad en golpear a los menores o amenazarlos
(conforme ellos relatan) fue una actitud activa que colaboró, según puede sostenerse en este estadío, al
resultado de todos los injustos reseñados.

54
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

En relación al delito de lesiones, a diferencia de lo sostenido por la asistencia técnica, entendemos que
los contundentes relatos de los menores que describieron cómo los imputados los golpeaban de manera
reiterada, en distintas partes de su cuerpo, constituyen prueba suficiente para endilgarle a (…) su
coautoría. Por otra parte la defensa en la audiencia fue totalmente genérica con relación a sus
cuestionamientos.
La falta de acreditación del tipo de lesiones ocasionadas en cada una de las oportunidades (…), está
vinculada a la circunstancia de que los agresores según los menores no los hospitalizaban ni les
proveían de atención médica para mantener oculto el maltrato infantil al que eran sometidos (art.241
del C.P.P.N.). Por otro lado, la íntima relación de éste con los restantes impide resolver en base a
calificaciones.
En efecto, por el contexto que surge de las actas escritas debe señalarse que son contestes los cinco
menores al relatar lo ocurrido.
Precisamente, la sana crítica es lo que indica la razón y la experiencia en la conciencia de cada
magistrado y con este concepto, sin perjuicio de la calificación legal que en definitiva corresponda
adoptar y el grado de participación (artículo 401 del Código Procesal Penal de la Nación), sólo cabe
homologar la decisión de la instancia anterior en relación a los hechos que damnificaron a (…) y (…).
(…) Por los argumentos expuestos, el Tribunal RESUELVE: I.
CONFIRMAR (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Filozof, Pinto. (Sec.: Oberlander).


c. 31.666/13, M., R. y otra.
Rta.: 19/05/2015

CORRUPCIÓN DE MENORES.

Sobreseimiento. Agravio del fiscal: decisión prematura. Audiencia en cámara Gesell que fracasó
debido a que el menor no logró expresarse. Resultado que no puede ser concluyente para el cierre
definitivo de la causa. Necesidad de optimizar un contexto de confianza entre el menor y el Ministerio
Público de Menores e Incapaces para garantizar su derecho a ser oído y a participar en el proceso (art.
12 de la Convención de Derechos del Niño) Revocación. Falta de mérito para procesar o sobreseer.

Fallo: "(…) II. El breve lapso trascurrido entre la efectiva intervención del Ministerio Público de
Menores e Incapaces y la citación a la Cámara Gesell, evidencia la imposibilidad material que tuvo
aquél ministerio de generar un contexto de confianza propicio para poder oír al niño B. S. V. V., y
garantizar, por tanto, su derecho a participar del procedimiento que lo involucra, de conformidad a lo
previsto por el art. 12 de la Convención de Derechos del Niño.
Al respecto, el Comité de Derechos del Niño, ha dicho que "el niño víctima y el niño testigo de un
delito deben tener la oportunidad de ejercer plenamente su derecho a expresar libremente sus opiniones
(…) eso significa, en particular, que debe hacerse todo lo posible para que se consulte a los niños
víctimas y/o testigos de delitos sobre los asuntos pertinentes respecto de su participación en el caso que
se examine y para que puedan expresar libremente y a su manera sus opiniones y preocupaciones en
cuanto a su participación en el proceso judicial" (O.G. Nº 12, del 20 de julio de 2009, parr. 62 y 63, el
resaltado nos pertenece).
(…) es dable sostener que en el presente caso no se han dispuesto las medidas adecuadas para lograr
que el niño pueda expresarse en el proceso.
(…) el infructuoso resultado de la testimonial que se pretendió recibir mediante las prescripciones del
art. 250 bis del C.P.P.N. -fs. (…)-, no puede ser tenida, de momento, como concluyente del cierre
definitivo de la causa, donde se intenta establecer una eventual grave afectación a la integridad sexual
de un menor de edad Ante el ensimismamiento del niño, corresponde realizar las entrevistas que los
expertos del Cuerpo Médico Forense consideren necesarias, a fin de generar adecuadas condiciones
para realizar, luego, la entrevista en Cámara Gesell.
Tal como lo expuso la representante del Ministerio Público en la audiencia es necesario completar la
encuesta con las constancias de la intervención de la defensoría de menores en el asunto, y la
realización de las diligencias en el Cuerpo Médico Forense que aparezcan como razonables y útiles. A
estos fines se remitirá la grabación del audio de la audiencia.
(…) el sobreseimiento dispuesto resulta prematuro, y en consecuencia, el tribunal RESUELVE:
REVOCAR el auto de fs. (…) y en consecuencia disponer la falta de mérito para procesar o sobreseer a
S. E. C. en las presentes actuaciones (art. 309 del Código Procesal Penal de la Nación).

C.N.Crim. y Correc., Sala I, López González, Pinto. (Sec.: de la Bandera).


c. 48257/14, C., S. E.
Rta.: 19/05/2015

COSTAS PROCESALES.

Impuestas a la querella. Proceso en el que el fiscal formuló requerimiento, la cámara revocó un


sobreseimiento, se dispuso la indagatoria del imputado y luego las actuaciones fueron sobreseidas.
Querella que ha tenido razones plausibles para litigar. Revocatoria. Costas en el orden causado.

55
Fallo: "(…) El querellante M. J. G. recurrió en apelación el auto extendido a fs. (…), en cuanto se
impuso el pago de las costas a esa parte.
Según surge de las constancias de legajo, la investigación fue sustanciada por la representante del
Ministerio Público Fiscal (…), quien formuló su requerimiento (…). Seguidamente, el magistrado dictó
el temperamento liberatorio luciente a fs. (…), que fue revocado por esta Sala (…), tras los recursos
deducidos por la Fiscalía (…) y la acusadora particular (…). Luego se llamó a prestar declaración a E.
A. C. en los términos del artículo 294 del Código Procesal Penal (…) y, finalmente, se dispuso la
desvinculación definitiva de la nombrada.
En virtud de ello, con independencia del resultado que finalmente se verificó respecto de la encausada,
se estima que la querella ha tenido razones plausibles para litigar, de modo que se entiende pertinente
que cada parte afronte los gastos procesales en la medida en que los causó.
Por lo expuesto, al verificarse la excepción parcial contemplada en el artículo 531 del digesto ritual,
corresponde revocar el auto apelado.
En consecuencia, esta Sala del Tribunal RESUELVE: REVOCAR el auto documentado a fs. (…), en
cuanto fuera materia de recurso, e imponer las costas en el orden causado".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Divito, Cicciaro, Scotto. (Sec.: Besansón).


c. 20.832/14, C., E. A.
Rta.: 13/05/2015

DECLARACIÓN INDAGATORIA.

Nulidad rechazada respecto del llamado a prestar declaración indagatoria. Actuaciones originadas en la
extracción de testimonios de una causa en la cual el imputado se encuentra sometido a proceso por
robo doblemente agravado y en la cual habría inducido a varios testigos a pronunciarse falsamente y
declarar en su favor. Convocatoria que no tiene vinculación con el robo investigado. Atribución al
imputado de un injusto distinto y escindible a aquél por el que hizo el descargo. Ausencia de violación
a la garantía de que nadie puede ser obligado a declarar contra sí mismo. (art. 18 de la CN y art. 184
del CPPN). Confirmación.

Fallo: "(…) II. (…) la presente causa tuvo su origen a raíz de la extracción de testimonios de la causa
XX del Juzgado Nacional en lo Criminal de Instrucción nro. 8. En aquel legajo J.M.T. se encuentra
procesado por considerarlo prima facie coautor penalmente responsable del delito de robo doblemente
agravado por haber sido cometido mediante la utilización de armas de fuego cuya aptitud para el
disparo no puede tenerse de ningún modo por acreditada y por haber sido en lugar poblado y en banda,
el cual concursa en forma real con el delito de robo calificado por haber sido cometido mediante el
empleo de armas cuya aptitud para el disparo no puede tenerse de ningún modo por acreditada -
reiterado en 2 ocasiones- (fs…).
En aquellas actuaciones, a partir del descargo formulado por T., se convocó a prestar declaración
testimonial a A.E.F.F. , D.A.L. y J.J.R.A.. Luego de un análisis de tales elementos la representante del
Ministerio Público Fiscal, atento lo declarado por E.F.F., solicitó la extracción de testimonios a fin de
desinsacular un juzgado ante la posible comisión de un delito de acción pública (fs…).
(…)la titular de la Vindicta Pública requirió se convoque a prestar declaración en los términos del art.
294 del ordenamiento ritual a F., L. y A., por entender que se han expedido con mendacidad al
atestiguar en la causa nro.
1356/2013, y a T., quien, a su criterio, los habría determinado para actuar de aquel modo (fs. …).
(…) no se advierte vicio alguno en el curso del proceso que amerite el dictado de la resolución que se
pretende, ya que no se evidencia afectación al derecho de defensa y a la garantía de la prohibición de
autoincriminación, como lo sostiene la recurrente.
(…) la garantía contra la autoincriminación comprende más latamente la liberación de la obligación de
suministrar al adversario armas que sean empleadas contra uno mismo. El derecho a no declarar contra
sí mismo, a no autoinculparse o autoincriminarse, entronca en una de las manifestaciones más claras
del derecho a la presunción de inocencia, cual es la que sitúa en la acusación la carga de la prueba, que
no puede desplazarse hacia el imputado haciendo recaer en él la obligación de aportar evidencias que
conduzcan a desvirtuar su responsabilidad (1).
Dicha garantía no sólo se halla prevista en el art. 18 de la Constitución Nacional en cuanto prevé que
nadie puede ser obligado a declarar contra sí mismo, sino que también en el art.
8.2.g, de la Convención Americana sobre Derechos Humanos, donde se consagra el derecho a no ser
obligado a declarar contra sí mismo ni a declararse culpable y el art. 14.3 del Pacto Internacional de
Derechos Civiles y Políticos, en cuanto establece que la persona acusada de un delito goza del derecho
a no ser obligada a declarar contra sí misma ni a confesarse culpable.
Así el derecho a no declarar contra uno mismo permite al imputado, ante todo, abstenerse de declarar;
sus manifestaciones omisivas, entonces, pasan a vehiculizar un modo de ejercicio del derecho de
defensa material que puede no usar, aspecto que depende exclusivamente de su voluntad (2).
La garantía se traduce en el derecho de la persona incriminada a negarse a responder, o no hacer
comentario alguno, sin que esta actitud pueda perjudicarla ni siquiera como una presunción en su

56
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

contra. El concepto de declarar debe ser entendido como cualquier clase de manifestación susceptible
de poder ser interpretada la expresión del autor, y por ello el imputado es órgano de prueba (3).
Tiene dicho la Corte Suprema de Justicia de la Nación en el precedente "Cincotta" que el requerimiento
judicial del reconocimiento del imputado en rueda de personas no puede ser resistido con fundamento
constitucional, ya que no está comprendido en lo términos de la cláusula que veda la exigencia de
declarar contra sí mismo ni es corolario de la exención de producir otra prueba incriminatorias. Por
otro lado, dejó sentado también en el fallo "S.C.H." que lo vedado por la Constitución es compeler
física o moralmente a una persona con el fin de obtener comunicaciones o expresiones que debieran
provenir de su libre voluntad, lo que no incluye los casos en que cabe prescindir de esa voluntad, entre
los que se encuentran aquellos en que la evidencia es de índole material.
Posteriormente en el precedente "H.G.S. y otro" el máximo tribunal recordó la doctrina del precedente
"Cincotta" (Fallos: 255:18; H.91.XXIV, dictado el 4-12-95; 318:2518).
Es así que cabe señalar que la cláusula que proscribe la autoincriminación sólo protege las
comunicaciones, sean éstas verbales, escritas o gestuales, porque en esos casos la prueba está en la
mente, en la voluntad del sujeto, su obtención depende de su conciencia, de los procesos de su
razonamiento.
Cualquier tipo de coacción tendiente a obtener una comunicación está prohibida, pero sólo en los casos
en que el imputado es tratado como sujeto de prueba, lo cual impide obligarlo, entre otras cosas, a
declarar, a realizar la reconstrucción del hecho, a prestar un cuerpo de escritura o a aportar prueba
incriminante (4).
El estado entonces no puede obligar al imputado a producir prueba en su contra o condicionarlo a esos
fines y el sujeto no debe ser obligado a entregar evidencias que lo incriminen.
En base a estos presupuestos debe evaluarse la cuestión.
Del estudio de las actas escritas que tenemos a la vista, lo que se advierte es que la fiscal interviniente
en el proceso registrado bajo el nro. 1356/13, atento a lo que se desprendía del análisis de las
testimoniales recabadas a instancias de la defensa de T., solicitó la extracción de testimonios a fin de
que se investigue la posible comisión de un delito de acción pública, lo que obtuvo favorable acogida
por parte de la jueza, conforme el art. 177 inciso 1° del Código Procesal Penal de la Nación.
Tal extremo, no puede entenderse como una afectación a la garantía referida, ya que la nueva
atribución a T. constituye un suceso distinto y escindible a aquél por el cual efectuó el descargo en el
otro sumario, y más aún cuando el cuestionamiento a los testigos se relaciona con la prueba que la
magistrada tuviera en cuenta al momento del dictado del procesamiento en el hecho de robo que se
instruyera. Entonces, el planteo formulado podría limitarse en su oportunidad a cuestionar los
elementos de cargo respecto de la participación de Torrillas en la presente, lo cual resulta ajeno a la vía
intentada.
Se advierte entonces que no se ha compelido al encausado a brindar ninguna información que luego se
utilizara en su contra.
En esta línea, se ha sostenido que dicha salvaguarda constitucional, conforme a la cual nadie puede ser
obligado a declarar contra sí mismo (art. 18 de la CN y art. 184 del CPPN), debe ser entendida como
"proscripción de todo método o técnica que, antes o durante el proceso, y ante cualquier autoridad sea
administrativa o judicial , tienda a obtener por coacción física, psíquica o moral, una declaración o
confesión de un habitante de la Nación Argentina" (5)., extremos que no se evidencian en el caso traído
a estudio del Tribunal.
En cuanto a la apelación deducida contra la imposición de las costas procesales, consideramos que no
existen motivos para apartarnos del principio general de la derrota que rige en la materia, por lo que
habremos de homologar su imposición.
(…) se RESUELVE: CONFIRMAR el auto de fs. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, López González, Pinto. (Sec.: de la Bandera).


c. 6727/14, FAZZIO, Adrián Emanuel.
Rta.: 15/05/2015

Se citó: (1) Fleming, Abel y López Viñals, Pablo, "Garantías del imputado", Ed. Rubinzal-Culzoni,
2007, p.321/322, donde se citó Ferrajoli, Luigi, Derecho y razón, p.611. (2) Ibidem, p. 323 ob. cit. (3)
Jauchen, Eduardo, Derechos del imputado, Ed. Rubinzal Culzoni, p.203 y siguientes. (4) De Luca,
Javier, "Notas sobre la claúsula contra la incriminación coaccionada", en Cuadernos de Doctrina y
Jurisprudencial Penal, Año 5, Nro. 9, B.p.265 y sts.). (5) C.N.Crim. y Correc. Sala IV, causa n°
50166/11 "Pezzutti", rta. 21/03/14, donde se citó CFCP; Sala III; "Gastaldi"; causa n? 1394; rta.
23/6/98.

DECLARACIÓN INDAGATORIA.

Nulidad rechazada respecto del decreto que dispuso la citación. Medida discrecional del juez. Decisión
no objetable por vía de apelación ni incidental. Confirmación.

57
Fallo: "(…), el Tribunal se encuentra en condiciones de resolver en torno a la apelación deducida por la
defensa de M. T. R. contra el auto dictado a fs. (…), punto dispositivo I, de este incidente, en cuanto no
se hizo lugar a la nulidad articulada por esa parte.
El Tribunal entiende que la decisión apelada resulta acertada, motivo por el que debe confirmarse.
En relación con el decreto que dispuso la citación a la imputada en los términos del artículo 294 del
digesto ritual, la Sala sostuvo -en reiteradas ocasiones- que "la convocatoria del imputado para que
ejercite su primer acto personal de defensa … [se sustenta en] la existencia de sospecha suficiente,
motivación interna que indispensablemente debe estructurarse en elementos objetivos de convicción y
es una medida técnicamente discrecional para el juez" (1), de modo que no resulta objetable por vía de
apelación ni incidentalmente como se pretende, de modo oblicuo, mediante el planteo nulificatorio.
(…) En consecuencia, esta Sala del Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el punto I del auto
documentado a fs. (…), en cuanto fuera materia de recurso, con costas de alzada".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Divito, Cicciaro. (Prosec. Cám.: Decarli).


c. 52.191/14, RIZZI, María Teresa.
Rta.: 06/04/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correc., Sala VII, c. 11.156/13, "Olivares, Luis", rta: 30/04/2014.

DEFRAUDACIÓN

Retención indebida. Sobreseimiento. Persona que no restituye la bicicleta dada en comodato por el
Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires. Lugar y tiempo de entrega que estaban determinados en el
documento suscripto al recibir el vehículo. Innecesariedad de que sea constituido en mora. Revocación.

Fallo: "(...) Contrariamente a lo señalado por la instructora, el tiempo y lugar en el que Agostoni debía
restituir la bicicleta que le fuera entregada el 12 de marzo de 2014, a las 11:16, surge de los puntos 1° y
4° de la declaración jurada por él suscripta "(ver fs. ...)".
Por lo tanto, la falta de conocimiento sobre las intimaciones cursadas por el Gobierno de la Ciudad de
Buenos Aires al domicilio aportado por el propio Agostoni, carece de virtualidad sobre la imputación
que se le dirige ante la clara asunción por su parte del compromiso de devolver el bien dentro del
tiempo de uso autorizado (una hora desde su retiro) en cualquiera de las estaciones de la red. Frente a
ello, la constitución en mora que se reclama deviene innecesaria, de acuerdo a lo establecido por el
artículo 509, párrafo primero, del Código Civil (1).
Sentado ello, debe revocarse la desvinculación definitiva apelada por el acusador público.
Sin perjuicio de lo expuesto, estima la Sala que existen diversas diligencias que pueden disponerse a
los fines de determinar el paradero del encartado. Entre ellas, luce procedente la certificación de causas
en trámite que registra "(ver fs. ...)", de las que puedan surgir otros domicilios o datos de familiares de
N. G. A. con quienes pueda residir actualmente, el pedido de informes al Sistema Único de Boleto
Electrónico del Ministerio del Interior y Transporte de la Nación y a empresas de telefonía celular para
determinar si se encuentra registrado y la dirección que aportara en cada caso, entre otras que se
consideren de utilidad.
Por lo expuesto, el tribunal RESUELVE: REVOCAR el auto de "(fs. ...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala IV, Seijas, González. (Sec.: Morillo Guglielmi).


c. 42.958/14, AGOSTONI, Nicolás Gastón.
Rta.: 20/02/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correc., Sala IV, c. 69395/13, "Aibar", rta.: 4/6/14 y N° 18899, "Ruiz", rta.:
2/7/14.

DEFRAUDACIÓN

Por administración fraudulenta en concurso ideal con uso de documento privado falso en tentativa.
Procesamiento. Presentación de un certificado médico apócrifo para justificar inasistencia en el trabajo.
Confirmación.

Fallo: "(...) Se imputa a G. haber intentado, en su condición de Oficial de la Policía Metropolitana,


inducir a error a las autoridades de dicha institución, valiéndose para ello de la presentación de cuatro
certificados médicos apócrifos de fechas 30 de junio, 4 de septiembre, 6 de octubre y 27 de noviembre
de 2013, con la inscripción "I.M.A." -Instituto Médico Agüero-, cuyo contenido y firmas se pretendía
atribuir a la Dra. M. J. C. Dichos documentos fueron presentados por el encausado ante la "División
Autopista Metropolitana" para justificar sus inasistencias laborales por encontrarse, supuestamente, al
cuidado de un familiar enfermo.
La materialidad de los sucesos y la responsabilidad que cabe asignarle a G. se sustentan en los
testimonios del agente Ariel César Kaplun (fs. ...) y las médicas María José Carro (fs. ...) e Irene Rut
Wainstein (fs. ...). Asimismo, las conclusiones de la pericia caligráfica obrante a (fs. ...) no dejan dudas
acerca de la falsedad de los instrumentos cuestionados.

58
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

Si bien el prevenido adujo que los certificados le fueron entregados en cada una de las oportunidades
en que su pareja G. P. P. concurrió a la referida clínica (cfr. fs. ...), lo cierto es que tal versión se
contrapone con el informe remitido por el "I.M.A." dando cuenta de que en ese centro médico no obra
registro alguno de atención respecto de la nombrada (ver documentación que corre por cuerda). Aun
cuando técnicamente no fue posible establecer la intervención de G. o P. en la confección de los
documentos espurios (fs. ...), tampoco puede desconocerse que el primero resulta ser el beneficiario de
su uso.
En consecuencia, y al encontrarse reunidos los extremos que reclama el art. 306 del CPP, el tribunal
RESUELVE: Confirmar el auto de (fs. ...) en todo cuanto fuera materia de recurso. (...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala IV, Seijas, González Palazzo, González. (Prosec.Cám.: Pereyra).
c. 7.418/14, GOMEZ, Héctor Adrián y otro.
Rta.: 22/04/2015

DEFRAUDACIÓN

En la sustancia, calidad o cantidad de las cosas entregadas. Sobreseimiento. Imputado que ocultó, al
suscribir el contrato de alquiler del inmueble, que el bien estaba sujeto a una hipoteca. Ausencia de
ardid o engaño. Ausencia de perjuicio patrimonial. Atipicidad. Confirmación.

Fallo: "(…) M. A. V. denunció que al suscribir el contrato de locación del local sito en la calle XX de
esta ciudad, el 22 de septiembre de 2014, por el plazo de tres años, le fue ocultado por su dueño, L. E.
M., que el inmueble se encontraba sujeto a un juicio de ejecución hipotecaria. Así, el 26 de noviembre
pasado se realizó un allanamiento en el comercio por disposición del Juzgado Civil n° XX en el marco
de los autos caratulados "L., P. S. c/M., L. E. s/Ejecución hipotecaria", que generó su clausura por el
plazo de diez días, durante el cual debió permanecer cerrado (fs. …).
El Tribunal tiene dicho que "no toda entrega de una cosa diferente a la pactada puede tener andamiento
en la figura bajo análisis [artículo 173, inciso 1, del CP], por cuanto podría tan sólo conducir a un mero
incumplimiento de naturaleza civil y cuya solución debe buscarse en ese fuero. Esta especie de
defraudación exige por parte del sujeto activo maniobras positivas tendientes a inducir a error a la otra
parte, que ha actuado con la debida diligencia" (1).
Las circunstancias del presente caso exhiben que el imputado no desarrolló conductas engañosas que
hubieran llevado a error a V.
a la hora de contratar. El simple silencio del propietario acerca de dicha situación no reúne la calidad
de maniobra positiva para inducir a error a la víctima, que exige la figura.
A su vez, la existencia del gravamen no es por sí misma una condición que obste a su alquiler, y el
hecho de que la denunciante hubiera continuado la locación aun después de haber tomado
conocimiento tanto de la existencia de la hipoteca como del proceso de ejecución muestra que no los
consideró determinantes para la conclusión del convenio. Todo ello impone la homologación del
temperamento adoptado por la anterior instancia, ante la atipicidad de la conducta atribuida a M.
Por ello, la Sala RESUELVE: CONFIRMAR el pronunciamiento de (fs.…) en cuanto fue materia de
recurso. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala IV, González Palazzo, González. (Prosec.Cám.: Fuertes).


c. 72.415/14, MORETA, Luis Emilio.
Rta.: 08/05/2015

Se citó: (1) C.N. Crim. y Correc. Sala IV, c. 17711/13 "Sarros", rta. 12/8/2013, con cita de Buomprade,
Jorge Eduardo, "Estafas y otras defraudaciones", Ed. Lexis Nexis, 2005, pág. 112.

DEFRAUDACIÓN

Mediante uso no autorizado de los datos de una tarjeta de crédito. Procesamiento. Compras realizadas
por Internet desde una dirección de correo electrónico que corresponde al imputado. Elementos de
prueba suficientes. Tipicidad. Confirmación.

Fallo: "(…) No sólo la materialidad de los hechos se encuentra fuera de debate, sino que además, y en
contraposición a lo argumentado por la defensa, se han recabado en autos elementos suficientes para
tener por acreditada la intervención de J. C. C. J. en los términos del art. 306 del CPP.
En efecto, se ha probado que las diversas compras denunciadas se efectuaron vía Internet (ver
constancias remitidas por "Telefónica Móviles Argentina SA" y "Amx Argentina SA" que lucen a (fs.
… y …) desde una dirección "IP" que corresponde al imputado (cfrme. titularidad del servicio de
"Cablevisión Fibertel" de (fs. …) y listado remitido "Red Link SA" de (fs. …).
También se pudo constatar que fue el propio C. J. quien recibió en su domicilio de la Avda. Córdoba
xx el teléfono celular marca "Sony Ericsson Xperia" adquirido en una de esas operaciones, conforme se
desprende de la guía acuse de "Oca Express Pak" y el pertinente remito que corren por cuerda. Al
respeto, la experticia caligráfica de (fs. ...) es concluyente en cuanto a la intervención gráfica del
encausado en el recibo del bien.

59
Tales elementos de juicio, valorados en conjunto con la circunstancia de que el beneficiario de todas
esas operaciones resulta ser el encausado, ameritan la homologación del auto recurrido, por lo que el
tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el punto (…) de la resolución de (fs. …) en todo cuanto fuera
materia de recurso. (…).

C.N.Crim. y Correc., Sala IV, Seijas, González Palazzo. (Prosec.Cám.: Pereyra).


c. 43.550/13, CORREA JARA, Jimmy C.
Rta.: 27/05/2015

DEFRAUDACIÓN.

Por retención indebida. Procesamiento. Locación de inmueble con entrega de mobiliario que fue
detallado en el contrato. Locataria desalojada. Mobiliario ausente. No restitución. Contrato ya
finalizado. Tipicidad. Confirmación.

Fallo: "(…), con motivo del recurso de apelación deducido por la defensa oficial contra el auto pasado
a fs. (…), en tanto se decretó el procesamiento de G. M. B. en orden al delito de defraudación por
retención indebida (art. 173, inciso 2°, del Código Penal).
Según se desprende de las constancias del legajo, M. D. R. A. entregó en locación a la imputada el
inmueble de su propiedad sito en la calle A. X, piso 1°, departamento "b", de esta ciudad, detallándose
en la cláusula vigésima tercera del convenio el mobiliario incluido al otorgarse la posesión de la
vivienda (…).
Iniciada la demanda de desalojo anticipado por ante el Juzgado Nacional en lo Civil N° X (…) y
ordenado el desalojo por el juez actuante, se concretó la orden de lanzamiento, constatación e
inventario, ocasión en la que el oficial de justicia informó que tras proceder a la apertura de la puerta e
inspeccionar las dependencias constató que el departamento se "halla totalmente libre de bienes y/o
ocupantes" (…).
De tal manera, R. A. le atribuyó a la nombrada el no haber restituido los bienes muebles que entregara
con motivo del contrato de locación, en concreto, un aparador, una biblioteca, una cómoda y un espejo
de grandes dimensiones, mobiliario que debía ser devuelto al finalizar el contrato (…).
Al respecto, no existe controversia en punto a que al entregarse la vivienda, también la imputada
recibió los muebles, lo que surge del contrato de locación aludido y del hecho de que la encausada hizo
concreta alusión a la existencia de aquellos al ofrecer su descargo por escrito (…).
En ese sentido, queda claro que la denunciante entregó los bienes muebles a la imputada bajo un título
jurídico que implicaba la obligación de devolverlos, de modo que la no restitución en el marco del
proceso civil y una vez finalizado el contrato, no puede interpretarse como un mero incumplimiento de
las obligaciones contractuales.
Por lo demás, la circunstancia de que B. expresara que fue la propia damnificada quien se llevó el
mobiliario del lugar, a la par que aclaró que no reclamó una constancia porque la propietaria le
manifestó "que al final del alquiler íbamos a hacer una nota con todo" (…), no luce verosímil, de modo
que con dicha explicación no se ha logrado neutralizar la imputación.
En conclusión, al encontrarse justificado el reproche formulado en los términos del artículo 306 del
catálogo formal, esta Sala del Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el auto protocolizado a fs.
(…), en cuanto fuera materia de recurso".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Divito, Cicciaro, Scotto. (Sec.: Besansón).


c. 35.829/13, BACHS, Gladys Margarita.
Rta.: 09/02/2015

DENUNCIA.

Nulidad rechazada. Denuncia realizada por haber compulsado, la dueña de un comercio, el contenido
de un celular olvidado advirtiendo así que tenía imágenes de contenido delictivo. Violación el derecho
a la intimidad o privacidad. Revisión de buena fé del aparato con el objetivo de ubicar al titular.
Denuncia realizada dentro de las 24 hs. Intromisión por parte de un particular que no es funcionario ni
representa al estado. Validez. Confirmación.

Fallo: "(…) El juez Julio Marcelo Lucini dijo: El recurrente ha centrado sus agravios en que V. C.
compulsó los archivos digitales que tenía almacenados en la memoria del aparato, de los cuales se
desprenderían las conductas que son objeto de esta investigación, afectando así el derecho a la
privacidad contenido en los arts. 18, 19 y 33 de la Constitución Nacional, art. 12 de la Declaración
Universal de Derechos Humanos y art. 17, incs. 1 y 2 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y
Políticos en función del art. 75, inc. 22, de la Carta Magna. Fundamentó su postura en que la
Convención Interamericana de Derechos Humanos establece que "El artículo 11 de la Convención
prohíbe toda injerencia arbitraria o abusiva en la vida privada de las personas, enunciando diversos
ámbitos de la misma como la vida privada de sus familias, sus domicilios o sus correspondencias". Y
que en ese sentido el fallo de la Corte Interamericana de Derechos Humanos ha sostenido que: "el
ámbito de la privacidad se caracteriza por quedar exento o inmune a las invasiones o agresiones

60
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

abusivas o arbitrarias por parte de terceros o de la autoridad pública" (1).El artículo 18 de la


Constitución Nacional dispone la inviolabilidad de domicilio, la correspondencia epistolar y los
papeles privados. No caben dudas respecto a que dentro de esa enunciación quedan comprendidas
también las comunicaciones de cualquier tipo, sean correos electrónicos, llamados telefónicos o
mensajes de texto, entre otros. Sobre ello prácticamente no hay controversia jurisprudencial ni
doctrinaria. No obstante, en los casos "F.", "A. " y "F. P. " de la Corte Suprema de Justicia de la
Nación, y "K. " y "L. " de la Cámara Federal de Casación Penal, se advierte una postura cautelosa
tendiente a evitar una extensión de esa protección más allá de la letra de la norma.
Ante la razonabilidad de su aplicación entonces, corresponde determinar ahora en qué circunstancias
los archivos multimedia pueden ser objeto de la tutela que establece nuestra Carta Magna. Así es
evidente que la protección otorgada tiene por finalidad garantizar el respeto a la vida privada de la
persona en sus ámbitos más íntimos, por lo que resulta difícil excluir a los registros audiovisuales que
un individuo conserva en su computadora personal, sea en una memoria de almacenamiento (pendrive)
o, como en este supuesto, en un teléfono móvil. El avance de la tecnología y el desarrollo de los
medios de comunicación obligan necesariamente a extender el resguardo a todos aquéllos objetos que
se encuentran "dentro de la esfera de custodia de cada individuo" y que contengan datos de su vida
privada, reveladores de su personalidad que desea preservar.
En este sentido la Sala II del Tribunal Constitucional de España ha entendido que "si no hay duda de
que los datos personales relativos a una persona individualmente considerados (…), están dentro del
ámbito de la intimidad constitucionalmente protegido, menos aún puede haberla de que el cúmulo de la
información que se almacena por su titular en un ordenador personal, entre otros datos sobre su vida
privada y profesional (en forma de documentos, carpetas, fotografías, videos etc.) -por lo que sus
funciones podrían equipararse a los de una agenda electrónica-, no sólo forma parte del mismo ámbito,
sino que además a través de su observación por los demás pueden descubrirse aspectos de la esfera más
íntima del ser humano." (Sentencia 173/2011, del 7/11/11).
Partiendo de tal premisa, debe analizarse si la intromisión de T. V. C. en el teléfono de C. Q. resultó o
no ilegítima y si, por lo tanto, la denuncia que radicara como consecuencia del contenido de los videos
allí contenidos puede ser admitida en el proceso.A diferencia de lo sostenido por el juez de la anterior
instancia, entiendo que el imputado no renunció a su expectativa de privacidad por el solo hecho de
haber olvidado el teléfono en el comercio de la denunciante.
El Diccionario de la Real Academia Española define la renuncia como la "dimisión o dejación
voluntaria de algo que se posee, o del derecho a ello".
No caben dudas que quien olvida sus pertenencias en la vía pública no las está abandonando
voluntariamente, aunque sí las coloca en una situación de exposición frente a terceros que condiciona
su expectativa de privacidad.
En definitiva, doy por sentado que la renuncia implica un acto voluntario que no se verifica en el legajo
y que haber dejado por descuido el objeto en un lugar de acceso público relativiza el nivel de
protección que la normativa privilegia.
En este aspecto, A. C. enseña que para que el ámbito de privacidad sea digno de tutela, será necesario
por un lado que el individuo se haya comportado de manera tal de exhibir un interés en mantenerlo; al
tiempo que la expectativa de privacidad deberá ser una que el Estado esté dispuesto a reconocer como
razonable (2).Resulta difícil sostener la existencia de una invasión al ámbito privado cuando el objeto
fue dejado en un lugar de acceso público.La actitud de quien lo encuentra y lo revisa en aras de
identificar a su titular para reintegrarlo no resulta ilegítima, máxime si se tiene en cuenta que el
teléfono se hallaba en su local de comidas y, por consiguiente eventualmente bajo su égida.
En este aspecto, la jurisprudencia norteamericana ha entendido que la persona tiene una expectativa de
privacidad respecto de los bienes que tiene dentro de su domicilio (3), postura que comparto aunque
con la aclaración que el vocablo "domicilio" que allí se utiliza, debe ser entendido como la esfera de
custodia o ámbito inmediato de protección.
En el contexto en análisis un tercero accedió a la información, con la única finalidad aparente de
individualizar a su dueño, ya que una vez que ese objetivo se interrumpió por el hallazgo que lo
sorprendió, concurrió a la prevención en un lapso prudente e hizo entrega del celular.Cabe recordar que
si bien el artículo 2534 del Código Civil dispone que el que hallare una cosa perdida y no supiere la
identidad de su titular debe entregarlo al juez más cercano o a la policía del lugar, pero lo cierto es que
es usual que sea el particular quien primero intente dar con su dueño y lo restituya, para lo cual
obviamente debe previamente examinarlo.
Además, el teléfono olvidado por C. Q. carecía de un chip de una compañía prestataria de servicios, lo
que posiblemente dificultaba aún más contactar a su usuario.
Ante ese panorama es posible afirmar que el acceso a los archivos de fotos y videos se presume de
buena fe y sólo para determinar si conocía al propietario. De otra manera no lo hubiese luego puesto a
disposición de la autoridad, sino que se habría apoderado del objeto.
Resta determinar si el Estado puede utilizar la novedad que el particular puso en su conocimiento para
dar inicio a una investigación criminal.
En tal sentido debe recordarse que las reglas de exclusión de la prueba ilegalmente obtenida buscan
evitar que el Estado se beneficie, o eventualmente construya sus sentencias, como consecuencia de un
acto que los funcionarios hayan desplegado transgrediendo las normas (4).
De tal manera, no es nula la actuación de un particular que no interviene como funcionario, en tanto las
garantías constitucionales, en principio, tienen como fin proteger al imputado frente al poder estatal.

61
Por ello, la exclusión de la prueba obtenida ilegítimamente sólo procede contra actos que provengan de
órganos estatales. En ese aspecto se sostiene que "la regla de exclusión probatoria requiere que la
evidencia obtenida sea la consecuencia directa o indirecta de la violación por parte del gobierno a las
enmiendas cuarta, quinta y sexta de la Constitución" (5).En la misma línea se dijo "la Corte Suprema
norteamericana ha sostenido que la cuarta enmienda constitucional no se aplica a registros, aun cuando
sean irrazonables, que son practicados por un individuo particular que no actúa como un agente del
gobierno. De esta manera no puede presentar una afectación a las garantías constitucionales, y por ello
no puede ocurrir un caso de exclusión de la prueba, por ser el producto de un acto gubernamental
ilegal" (6).
En síntesis, la información que el Estado obtenga de un particular en situación como la aquí estudiada
no puede ser excluida como indicio válido para iniciar un proceso penal y, en consecuencia, no
advirtiéndose una violación a las garantías consagradas en nuestra Constitución Nacional, voto por
homologar la decisión recurrida.
"(…)" El juez Juan Esteban Cicciaro dijo: Con arreglo a la propuesta formulada por el juez Lucini, el
rechazo del planteo de nulidad debe confirmarse.
El caso reporta circunstancias particulares que conducen a desechar cualquier afectación a la intimidad
o privacidad (arts. 18 y 19 de la Constitución Nacional) y, de igual modo, no se ha verificado una
injerencia arbitraria o abusiva en la vida privada del imputado Á. G. C. Q. (7). Debe puntualizarse en
ese orden que el teléfono celular fue dejado -olvidado o no- en un lugar que oficia como sitio de
comidas al que accede públicamente cualquier persona "(fs. …)".
Como indica la experiencia común -uno de los sustratos de la sana crítica-, es habitual en la vida
cotidiana el hallazgo de dispositivos de tal naturaleza, sean perdidos o previamente sustraídos, como
también lo es que quien encuentra un teléfono en tales circunstancias pretenda devolverlo.
T. V. C. es quien explota el lugar y luego de que se retirara el sujeto que adquiriera comida, encontró el
teléfono. Aquélla se trata de una persona de nacionalidad peruana, de 32 años de edad y que reside en
el país desde hace tres años.
Harto improbable es que, al tiempo del hallazgo, conociera las disposiciones del art. 2534 del Código
Civil, que reza: "Si el que hallare la cosa no supiese quién era el dueño, deberá entregarla al juez más
inmediato, o a la policía del lugar, los que deberán poner avisos de treinta en treinta días"; como
tampoco podría achacársele que no examinara el teléfono de modo tal que esquivara -conocimientos
especiales mediante- cualquier dato o contenido que pudiera invadir la intimidad o privacidad de quien
lo utilizaba.
No otro móvil que el de concretar el reintegro del aparato se desprende de su conducta y una de las
maneras dirigidas a tal fin, razonablemente -el aparato carecía de chip-, consistía en comparar alguna
fotografía que pudiera contener el dispositivo con aquellas personas que en la mañana del 16 de enero
de 2014 se habían constituido en su local. Precisamente, a "(fs. ...)" dijo haber visto a una persona "en
las fotos".
Debe recordarse que ningún proceso penal se había iniciado y que evidentemente lo que ocurrió fue un
hallazgo de las imágenes involucradas, extremo éste que concita cierto parecido con la situación que
emerge de la autorización prevista en el art. 224 in fine del Código Procesal Penal en ocasión de un
registro domiciliario.
Por lo demás, el hecho de que en menos de 24 horas se constituyera en una comisaría para dar cuenta
de tal hallazgo, evidencia un prudente y razonable proceder -al cabo, paradojalmente, satisfizo aquello
que manda la norma civil aludida-, de modo que puede inferirse su buena fe, pues como lo ha sostenido
nuestra Corte Federal ya en el siglo XIX (1871), "…es también un principio de derecho que todo
hombre se reputa bueno, mientras no se le pruebe lo contrario" (7).
Como podrá verse, V. C. no se ha quedado con el teléfono ni se advierte que su conducta se hubiera
encaminado a conocer datos de la vida privada de una persona a la que, a la sazón, no conocía.
La denunciante no reviste la condición de funcionaria pública.
En torno a la prueba aportada por particulares, en base a un texto constitucional análogo, "la
jurisprudencia norteamericana ha considerado que cuando un ciudadano privado entrega pruebas de un
delito a un oficial de policía, no se entiende que la prueba esté manchada de ilegalidad, y
tradicionalmente se la ha juzgado admisible ante el Tribunal" (8).
Igual orientación ha seguido nuestra jurisprudencia al respecto, en el sentido de que las grabaciones
constituyen prueba documental, de suyo válidas, en la medida en que se trata de la documentación de
un hecho histórico acaecido, en el marco del criterio de no taxatividad de los medios de prueba (9).
A mayor abundamiento, debe apuntarse que se está en presencia de una gravosa imputación, según la
cual C. Q. habría obligado reiteradamente a un menor de seis años de edad a practicarle sexo oral
aprovechando la situación de convivencia preexistente, práctica que era filmada.
Sucesos de tales características evocan las disposiciones de la Convención sobre los Derechos del
Niño, cuya aplicación cabe a las autoridades judiciales (arts. 6, 16, 19 y concordantes) --.
Por ello y de conformidad con lo dictaminado oralmente por el Ministerio Público Fiscal en la
audiencia, debe confirmarse lo resuelto.
En consecuencia, esta Sala RESUELVE: CONFIRMAR el auto documentado a "(fs. …)" de este
incidente, en cuanto fue materia de recurso. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala A, Cicciaro, Lucini. (Prosec. Cám.: Gallo).


c. 8796/14, C. Q. , A. G.

62
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

Rta.: 15/01/2015

Se citó: (1) C.I.D.H., Corte Interamericana de Derechos Humanos, E. y otros Vs. B., rta. 6/07/2009. (2)
Garantías constitucionales en el proceso penal, ed. Hammurabi, pág. 438. (3) United States Supreme
Court, "Payton v. New York, 445 US 573, citado en Pinto, Ricardo Matías, "La investigación penal y
las garantías constitucionales, Ed. La Rocca, Buenos Aires, 2009, pág. 232. (4) C.S.J.N., Fallo 46:36,
C.H. ; C.S.J.N. Falllo 303:1938, M.L. (5) Corte Suprema de los Estados Unidos, fallos: "Weeks v.
U.S", 232 U.S. 383, 398 -1914-; "Mapp v. Ohio", 367 U.S. 643, 654 -1961-, citado en C.N.Crim. y
Correc., Sala VI, c. 1259/2012 "G. , R. N. ", rta. 3/10/2012. (6) Pinto, Ricardo Matías, "La
investigación penal y las garantías constitucionales, Ed. La Rocca, Buenos Aires, 2009, pág. 233, en la
que se citó: "United States v. M., 425 US 435. (7) Fallos: 10:338, citado en Fallos: 321:363. (8)
Corwin, E.S., La Constitución de los Estados Unidos y su significado actual, Editorial Fraterna,
Buenos Aires, 1987, p. 463. (9) C.F.C.P., Sala IV, c. 847, "W. , C. ", del 30-10-1998 y 1390, "P., D.",
del 7-9-1999; en igual sentido, C.N.Crim. y Correc., Sala VII, c. 27.283, "G., N.", 20-9-2005. (10)
C.N.Crim. y Correc., Sala VII, c. 41.024, O. C., 31-5-2011.

DESESTIMACIÓN

Por inexistencia de delito. Imputado: empleado de una empresa que al serle comunicado su cese de la
relación laboral, envió información sensible desde el mail corporativo a su casilla de correo personal.
Ausencia de perjuicio alguno. Análisis de las posibles figuras penales en las que podría encuadrar el
hecho. Atipicidad. Confirmación.

Fallo: "(…) Los representantes de "S. A. I. S. A." promovieron querella contra D. M. J. -quien se
desempeñó en dicha empresa desde el 9 de septiembre de 2003 hasta el 21 de noviembre de 2014,
cuando se le comunicó que se había decidido no mantener el vínculo laboral- por haberse apoderado de
"información confidencial" de la compañía, puntualmente archivos de "Excel" con la nómina de
empleados y los aumentos otorgados desde febrero de 2014, para lo cual habría enviado esos datos
desde su casilla de correo laboral hacia otras casillas de uso personal (fs. …).
La acusación particular planteó que la conducta de J. constituiría el delito de hurto -artículo 162, CP -,
sin perjuicio de que pudiera también reportar a otras figuras legales, como la de acceso ilegítimo a un
sistema informático -artículo 153 bis, CP- (fs. …). Por su parte, el Ministerio Público Fiscal entendió
que no puede descartarse la adecuación al tipo penal de la defraudación por administración infiel -art.
173, inc. 7, CP- o de publicación indebida de correspondencia -art. 155, CP- (fs. ...).
Acerca del tipo penal de acceso ilegítimo a un sistema informático incorporado por la Ley 26.388,
comúnmente denominado hacking, la conducta típica se basa en el acercamiento por parte del sujeto
activo, llamado usualmente hacker, a información contenida en un dispositivo automatizado para cuyo
acceso se requiere un permiso especial (1).
Los presupuestos del caso traído a estudio exhiben que no nos encontramos frente a esa figura, pues a
partir del rol que cumplía el causante en la compañía al tiempo en que se habría producido el acceso a
la información (Gerente en el área de Recursos Humanos), se deriva sin hesitación que se encontraba
autorizado a acceder a los datos relacionados con los haberes percibidos por los empleados. Ergo, el
objeto sobre el que recae la acción atribuida a J. no se adecua a las previsiones del artículo 153 bis del
Código Penal, en tanto esa información no poseía carácter restringido para el querellado.
Tampoco se adecua el hecho al tipo del hurto simple, del artículo 162 del referido ordenamiento,
caracterizado por la acción de apoderarse de un bien total o parcialmente ajeno.
Partiendo de la teoría de la ablatio, en punto a la interpretación del verbo que distingue a esta
calificación legal, se ha dicho que el hurto radica en el desplazamiento del sujeto que puede realizar
actos de disposición, hurtar sería entonces usurpar el poder sobre la cosa (2).
Aquí, los archivos en cuestión no fueron "desplazados", ya que no solo nunca salieron de la esfera de
custodia del sujeto pasivo, sino que "S. A. I. S. A." tampoco perdió poder alguno de disposición sobre
esa información, que permaneció almacenada en los dispositivos de la compañía. Su supuesto envío
por parte de J. a una casilla de correo electrónico de uso personal no importa entonces la acción de
apoderarse que distingue al tipo de hurto.
La adecuación al supuesto de defraudación por administración fraudulenta propuesta por la fiscalía no
es procedente, en tanto no ha resultado afectada la "propiedad" -bien jurídico tutelado por la figura del
art. 173, inc. 7, CP- a partir de la acción atribuida a J.
Considerando, en palabras de Ignacio Tedesco, que la administración infiel "se presenta cuando se ha
realizado una disminución del patrimonio confiado dolosamente [que] puede darse no solo al
perjudicar al sujeto pasivo, también al obligarlo abusivamente, ya que de esta forma se está
produciendo una alteración perjudicial respecto de su propiedad, [por lo que] se está en presencia de un
delito de lesión o de resultado"(3), podemos concluir que el hecho denunciado no reporta a ese tipo
penal ya que no importó en modo alguno disminución del patrimonio de la firma "S. A. I. S. A.".
Por último, resulta palmario que la conducta endilgada a J. no se adecua a la figura contemplada en el
artículo 155, CP, cuya acción es la de hacer publicar indebidamente correspondencia no destinada a la
publicidad, pues no se ha dado cuenta en la causa de que la información a la que habría accedido
hubiera sido publicada.

63
Por todo ello, la Sala RESUELVE: CONFIRMAR el pronunciamiento de (fs. …) en cuanto fue materia
de recurso. (…)"

C.N.Crim. y Correc., Sala IV, Seijas, González Palazzo, González. (Prosec.Cám.: Fuertes).
c. 76.339/14, JIMENEZ, Diego M.
Rta.: 15/05/2015

Se citó: (1) Lucero, Pablo Guillermo y Kohen, Alejandro Andrés, "Delitos Informáticos", Ed. D&D,
2010, pág. 85/86. (2) Tozzini, Carlos A., "Los Delitos de Hurto y Robo", Ed. Depalma, 1995, pág. 125
con cita de Soler, Sebastián, "Derecho Penal Argentino", pág. 174. (3) Tedesco, Ignacio,
"Administración Fraudulenta", publicado en "Delitos contra la Propiedad" dirigido por Luis Niño, Ed.
Ad hoc, 2011, pág. 528.

DESESTIMACIÓN

1) Rechazo de legitimación activa. Necesidad de analizar la viabilidad de la solicitud a la luz de la


hipótesis delictiva por la que se acciona en forma independiente a la decisión que se adopte sobre el
fondo. Pretensión que cumple con lo previsto por los arts. 82 y 83 del C.P.P.N. Revocatoria.
Legitimación activa. 2) Privación del uso y goce del automóvil de la pareja adquirido en condominio.
Conflicto que surgió a raíz de las desavenencias. Ausencia de la secuencia que requiere el tipo penal
del art. 172 del C.P. Atipicidad. Confirmación.

Fallo: "(…) I. Corresponde examinar en primer término la denegatoria del pedido de G. Ch. de ser
tenida por parte querellante ya que resulta vital para analizar luego la procedencia del recurso
articulado contra la resolución adoptada a tenor del artículo 180 in fine, del Código Procesal Penal de
la Nación (1), pues ante el dictamen fiscal que postula la desestimación (fs. …) el impulso del proceso
se encuentra reducido a la actuación en solitario de quien pretende querellar.
En el caso bajo estudio el magistrado instructor no especificó los motivos en los que sustentó el
pronunciamiento que aquí se analiza, lo que permite presumir que tuvo su razón en el entendimiento de
que la conducta denunciada no constituye delito alguno. Ese derrotero es improcedente, ya que debe
analizarse la viabilidad de la solicitud a la luz de la hipótesis delictiva por la que se acciona, con
independencia de la decisión que se adopte respecto del fondo del asunto (2).
Con ese alcance, y habida cuenta que en el expediente se encuentran cumplidos los requisitos exigidos
en los artículos 82 y 83 del ordenamiento adjetivo (ver fs. …), G. Ch. deber ser legitimada en la calidad
que invoca por no existir óbice para su pretensión.
Así las cosas, debe revocarse lo dispuesto en el punto dispositivo II de la resolución impugnada y tener
por parte querellante a la recurrente.
II. En la apelación de (fs. …) sólo se expusieron argumentos respecto de la disconformidad de lo
resuelto en relación a la conducta endilgada a R. D. C., sin mencionar agravio alguno vinculado al
accionar atribuido a M. S. M. D. Circunscripta de esa manera la competencia del Tribunal, corresponde
señalar que concordamos con las consideraciones vertidas por el Sr. agente fiscal en el dictamen de (fs.
...) y por el Sr. juez de grado a (fs. …).
La parte sostiene que el ardid ha consistido en pautar un uso compartido del vehículo, lo que llevó a la
recurrente a adquirirlo en condominio incurriendo en error, al considerar que podría hacer uso y goce
del bien, a pesar de lo cual desde hace aproximadamente seis meses se ve privada de ello. Sin embargo,
no se observa maquinación alguna para lograr el aporte monetario realizado para la compra del rodado
en cuestión. De hecho, la propia denunciante señala que los inconvenientes surgieron recién a partir y
en función de la conflictiva separación de la pareja, que tuviera lugar en el mes de diciembre de 2014,
sin que se mencionaran siquiera situaciones problemáticas vinculadas a la utilización del automotor
con anterioridad a ello.
Ch. alude a la privación del uso de un bien parcialmente propio como constitutivo del perjuicio
patrimonial exigido por la figura de estafa. No obstante, dicho detrimento no parece ocasionado por
error alguno de su parte, lo que demuestra el acierto de la decisión criticada.
Tampoco se advierte la concurrencia de los extremos típicos de la retención indebida, en tanto C. no
entró en posesión del bien por un título que genere obligación de entregar o devolver. Los reclamos
que la denunciante estime pertinentes en pos de la porción del rodado que, según afirma, le pertenece,
deberán ser viabilizados en el fuero pertinente. Del mismo modo habrán de descartarse el resto de las
calificaciones legales alternativas ensayadas por la apelante, ya que surge con nitidez que el conflicto
es inherente a la problemática finalización de la relación entre las partes y ajena al ámbito penal.
Por ello, el tribunal RESUELVE: I. REVOCAR el punto (…) del auto obrante a (fs. …) y TENER
POR PARTE QUERELLANTE A G. CH. II. CONFIRMAR el acápite dispositivo (…) de la decisión
aludida, en cuanto desestima las presentes actuaciones por no constituir delito el suceso denunciado.
(…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala IV, González Palazzo, González. (Sec.: Morillo Guglielmi).
c. 16.910/15, CAPPATO, Rubén Daniel.
Rta.: 25/06/2015

64
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correc., Sala IV, c. 28.445, "Goncalves", rta.: 21/7/06 y c. 7580/13,
"Quevedo", rta.: 7/6/13. (2) C.N.Crim. y Correc., Sala IV, c. 33.033, "Meritar S.A.", rta.: 6/5/08 y
6500/13, "Melero", rta.: 10/5/13.

DESOBEDIENCIA

En concurso real con lesiones. Procesamiento. Imputado que tenía conocimiento de la prohibición de
acercamiento emitida en sede civil y se presentó en el club donde estaba su hijo al que agredió
físicamente. Violación a la restricción. Lesiones acreditadas. Pruebas que dan sustento a la versión
brindada por el damnificado. Confirmación.

Fallo: "(…) Los argumentos de la defensa no logran rebatir la valoración de la prueba que ha efectuado
la jueza a quo respecto de la existencia del hecho y la intervención del imputado.
En efecto, los dichos de V.P. P. y lo expresado en consonancia por el propio damnificado, F. J. S. en
sede judicial (fs. ...) son avalados por las restantes constancias de la causa.
Así, G. A .A. afirmó haber estado junto al agredido en el gimnasio del Club V. S. cuando arribó el
imputado, ante lo cual aquel decidió retirarse y el segundo comenzó a seguirlo hasta la zona de los
vestuarios manifestándole que quería hablarle.
Precisó que F. J. S. le respondía que ello no era posible, pues se encontraba vigente la prohibición de
acercamiento. Agregó que luego de ello, padre e hijo continuaron dialogando, por lo que él ingresó a
los vestuarios y al salir, instantes después, los vio forcejear entre sí y procedió a separarlos.
También se corroboró la prórroga de la medida cautelar infringida, que tuvo lugar el 4 de octubre de
2013, notificándosela al encausado el 15 del mismo mes en el marco del expediente "P. V. P. c/S. C D
s/violencia familiar" (cfr. fs. …) Por otra parte, no se advierten motivos para descreer de los dichos del
testigo, ni presumir que hayan estado guiados por odio o animadversión contra el imputado, aun
cuando mantenga una preexistente relación de amistad con el hijo de éste.
Tampoco lo referido por L. A. G., profesor del mencionado gimnasio se contrapone con las restantes
versiones analizadas.
Por el contrario, éste se limitó a sostener que el damnificado estaba en el lugar cuando arribó su
progenitor y que al ver a su hijo se retiró, haciéndolo luego el menor en dirección a los vestuarios.
Finalmente, avala la imputación el informe médico de (fs. …), dando cuenta que la víctima, presentó
luego del suceso una lesión en su labio inferior, la cual también resultó visible a la instrucción.
Estas probanzas, analizadas en conjunto y se acuerdo a las reglas de la sana crítica racional, rebaten de
modo suficiente el descargo del imputado, por lo que, habremos de confirmar su procesamiento sin
perjuicio de la calificación legal que en definitiva corresponda.
Por estas razones, el tribunal RESUELVE: Confirmar el auto de (fs. …) en todo cuanto fuera materia
de recurso. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala IV, González Palazzo, González. (Sec.: Uhrlandt).


c. 44.203/13, S., C. D.
Rta.: 30/06/2015

DESOBEDIENCIA.

Procesamiento. Conocimiento por parte de la imputada de la medida cautelar de prohibición de


contacto dictada por el juzgado civil. Confirmación.
Fallo: "(…) II.- (…) refirió a fs. (…) que los días (…) su ex pareja le había enviado mensajes de texto
insultándolo y amenazándolo, incumpliendo con la prohibición dispuesta por la magistrada del Juzgado
Civil (…) el (…) que le suspendía "todo tipo de contacto con el denunciante comprensiva en contactos
telefónicos, de telefonía celular, correos electrónicos aún por terceras personas y/o cualquier otro
medio que signifique una intromisión injustificada al nombrado por el término de 90 días" (…).
Surge del sumario que (…) fue personalmente notificada de tal pronunciamiento el día (…) pero las
constancias agregadas a fs. (…) verifican que le envió diversos mensajes durante el mes de febrero de
aquel año.
En este sentido se sostuvo que "la desobediencia del incuso a la orden impuesta por el magistrado civil,
bajo apercibimiento de aplicársele la multa respectiva y extraer testimonios en aplicación del art. 239
C.P., configura el ilícito previsto por el mentado artículo, ya que este se trata de un delito instantáneo
que se consuma con el acto material de hacer caso omiso a la orden impuesta por un funcionario
público" (1).
Si bien resulta atendible que la imputada manifestara su desacuerdo con que realizara determinadas
actividades, tales como ir al Club de Tiro Federal, ella misma precisó en su descargo que la mayoría de
las comunicaciones se entablaban porque aquél no suministraba dinero para la manutención de su hijo
(…). Entendemos que para abordar tal problemática bien podría haber dado a conocer sus pormenores
en sede civil.
Por otra parte, se advierte de los mensajes aportados por (…) a fs. (…) que no sólo solicitaba el
cumplimiento de sus obligaciones, sino que su propósito era el de insultarlo, lo cual permite inferir su
intención de incumplir con la medida judicial vigente y de la que ya había sido notificada.

65
Sin perjuicio de una discusión más profunda que pueda llevarse en una eventual próxima etapa, el
Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el auto de fs. (…) en cuanto fuera materia de recurso. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini, Pociello Argerich. (Prosec.Cám.: Gallo).


c. 21.804/14, F., M. P.
Rta.: 19/02/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correc., Sala VI, c. 11590/13 "Gorostidi, Juan Pablo" rta.: 5/06/14.

DETENCIÓN DOMICILIARIA.

Rechazada. Detenido que tiene setenta años de edad. Condición necesaria pero no suficiente para el
otorgamiento del beneficio. Prerrogativa del juzgador. Otorgamiento no automático. Balance entre los
riesgos procesales y el adecuado resguardo y protección de los derechos que asisten al imputado que
impide conceder el beneficio solicitado. Condena anterior. Riesgo de fuga. Características violentas del
hecho. Domicilio aportado por el imputado donde podría residir es lindero al lugar donde se cometió el
delito. Confirmación.

Fallo: "(…) Celebrada la audiencia prevista en el artículo 454 del Código Procesal Penal y efectuada la
deliberación pertinente, analizaremos el recurso de apelación interpuesto por la defensa de J. S. P. P.
(fs. ...) contra el auto de (fs. …), que no hizo lugar a su arresto domiciliario.
La impugnación se basó, por un lado, en que no se llevaron a cabo los estudios médicos para
determinar que el imputado no puede estar en lugares contaminados, como son las unidades
penitenciarias, en razón de la patología que sufre. Por otro, que el 10 de enero último cumplió setenta
años, ello es, hace tres días, de modo que su situación configura uno de los presupuestos que habilitan
el instituto en cuestión.
La decisión adoptada por la magistrada de la instancia anterior se ajusta a derecho y a las constancias
del sumario, pues el Cuerpo Médico Forense a (fs. …), concluyó que el alojamiento de S. P. P. en un
establecimiento carcelario no le impide tratar en forma adecuada su dolencia.
Al respecto, la Lic. N. G. M. expresó que, "desde el punto de vista psicológico, puede recibir asistencia
en el ámbito carcelario donde se encuentra alojado" mientras que el Dr. C. A. B. concluyó que "Atento
a los antecedentes personales referidos y a los datos positivos del examen físico, puede cumplir la
prisión preventiva dictada en un establecimiento hospitalario intramuros y, de no contar el mismo con
la infraestructura necesaria y si V.S. lo dispone, en un establecimiento extramuros".
Respecto del restante agravio introducido por la defensa, señalamos que la ley 26.472 amplió los
supuestos bajo los cuales se aplica la detención domiciliaria, aunque mantuvo la prerrogativa del
juzgador en tal sentido, mediante la locución "podrá". Así, "el propio giro de la ley podrá conduce a
pensar necesariamente que el otorgamiento del arresto domiciliario no resulta automático" (1) y, al
propio tiempo, el instituto aquí procurado debe armonizarse con las demás disposiciones legales
aplicables al caso concreto (artículos 280 y 319 del Código Procesal Penal).
Sentado ello, cabe evaluar que al imputado se le atribuye la comisión del delito de homicidio simple,
en concurso material con el de tenencia de un arma de uso civil sin la debida autorización legal, que a
su vez lo hace idealmente con el de encubrimiento agravado (artículos 45, 54, 55, 79, 189 bis -inciso
2°- y 277 -incisos 1° "c" y 2°- del Código Penal), injusto por el que resultó procesado con prisión
preventiva el 21 de octubre pasado, temperamento confirmado por la Sala I de esta Cámara el 20 de
noviembre de 2014 y con auto de elevación a juicio dictado el 16 de diciembre de 2014 (ver fs. ... del
principal).
Tal información muestra el impedimento de que una futura sanción se enmarque en el supuesto
previsto en el artículo 26 del ordenamiento sustantivo, circunstancia que conduce a sostener un posible
riesgo de fuga pues, conocedor de la amenaza de encierro efectivo, S. P. P. bien puede procurar
incumplir la ejecución de la sentencia (2).
En igual contexto, se valora que el hecho en estudio habría sido cometido en las puertas del domicilio
donde residía junto a su esposa, el mismo que fija para el cumplimiento de la prisión domiciliaria que
peticiona, lindero al de la pareja del vecino fallecido y a otra señora con quien mantendría conflictos
(fs. ...).
Bajo la misma norma impediente citada se erigen las graves características de los episodios
reprochados. Sobre este punto, se destaca la violencia desplegada por el imputado al haberse valido de
un arma de fuego, sin autorización legal y efectuar disparos a su vecino ocasionando la muerte tras lo
cual escapó a través de su vivienda.
Si bien no se desconoce que S. P. P. cuenta con setenta años, se ha apuntado que "el límite de edad no
es más que una condición necesaria para abordar la petición del interesado, pero no suficiente para su
reconocimiento judicial. Ello porque no puede prescindirse de la exigencia previa de los informes
médicos, psicológico y social que el legislador ha expresamente contemplado (3).
En consecuencia, al no advertirse circunstancias que justifiquen conceder el arresto domiciliario
reclamado por la defensa, el Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el auto de (fs. …), en cuanto fuera
materia de recurso. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala de Feria A, Cicciaro, Lucini. (Prosec. Cám.: Daray).

66
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

c. 59.249/14, SPIKERMAN PEREZ PEREZ, José.


Rta.: 13/01/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correc., Sala VII, c. 32.095, "Mannocci, Héctor", 26/6/2007. (2) C. F. C. P.,
Sala IV, c. 10.859, "Cid, Santiago", 19/6/2009 y Sala I, c. 10.727, "Morel, Daniel", 27/2/2009 y c.
10.997, "Schlenker, William", 25/3/2009. (3) Peralta, Omar Aníbal, "Prisión domiciliaria", en La Ley,
suplemento actualidad del 23 de noviembre de 1999.

DETENCIÓN SIN ORDEN JUDICIAL

Nulidad rechazada. Acta realizada por personal policial sin la presencia de testigos de actuación.
Actuación policial válida, prudente y razonable, teniendo en cuenta la actitud asumida por el imputado.
Persecución que culminó con la detención del imputado. Validez. Confirmación.

Fallo: "(...) Si bien el artículo 117 del Código Procesal Penal de la Provincia de Buenos Aires -de
aplicación al caso, debido al lugar en que se llevó a cabo la diligencia cuestionadarequiere que las actas
confeccionadas por los oficiales o auxiliares de la policía sean refrendadas por un testigo en lo posible
extraño a la entidad a la que pertenecen, no prevé expresamente la sanción pretendida para el caso de
su incumplimiento. Por el contrario, el art. 119 del mismo cuerpo legal dispone que, ante la ausencia de
personas de dicha calidad, se analice el motivo que haya impedido la intervención de éstas, quedando
al arbitrio del órgano judicial declarar o no la nulidad del acta.
En este caso, la actuación analizada fue convalidada por el juez de garantías competente (ver fs. ... del
principal), no desprendiéndose del legajo ningún elemento que lleve a poner en duda que el hecho
descripto por los preventores haya ocurrido de un modo diferente al que dejaron asentado en el acta
obrante a (fs. ...), por lo que corresponde rechazar el planteo de invalidez (1).
En este análisis, no puede dejar de considerarse que los funcionarios se toparon en la vía pública con el
automotor cuyo abandono les había sido alertado previamente por frecuencia radial, ante lo cual dieron
señales inequívocas para que quienes lo conducían se detuvieran, lo que aparece razonable y ajustado a
derecho, conforme las circunstancias reseñadas precedentemente. Frente a ello, lejos de acatar la orden,
la persona que lo tripulaba aceleró y se dio a la fuga iniciándose así una persecución (cfr. el relato
volcado por el Capitán Ramón Cuevas y la oficial Fabiana Martínez a fs. ... y ...). Tal conducta
fundamenta adecuadamente la procedencia de la detención sin orden judicial del imputado, todo lo cual
permite homologar la decisión puesta en crisis.
En consecuencia, el tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el auto de (fs. ...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala IV, González, Pociello Argerich. (Sec.: Morillo Guglielmi).
c. 3.873/15/2, GUTIERREZ, Oscar Feliciano.
Rta.: 30/03/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correc., Sala IV, c. 2107/09, "R.", rta: 11/2/10 y c. 32.992, "P.", rta: 26/11/07.

DETENCIÓN Y REQUISA SIN ORDEN JUDICIAL.

Nulidad rechazada. Comportamiento del imputado que habilitó la interceptación policial. Estado de
sospecha razonable. Personal preventor que atiende un llamado al celular que tenía el imputado entre
sus ropas, oportunidad en la que toma conocimiento que el mismo había sido sustraído momentos
antes. Indicios vehementes de culpabilidad. Validez. Confirmación.

Fallo: "(…) Dadas las circunstancias de actuación policial en el caso de autos, corresponde afirmar la
validez del procedimiento que culminó en la detención de B. L. Ñ. S. así como en el secuestro de un
teléfono celular marca "Samsung" modelo "Core 2" IMEI ...
Se desprende del acta de (fs. …), que el 17 de marzo del corriente año, alrededor de las 18:20, el
Sargento Ariel Ávila Maguna se encontraba recorriendo la calle Riobamba cuando, a la altura del 500,
advirtió que un sujeto circulaba en bicicleta por la vereda a gran velocidad, zigzagueando entre los
transeúntes, comportamiento que en concreto ponía en riesgo su integridad física y la de las personas
que transitaban por allí.
Decidió entonces interrumpir la marcha del sujeto para hacer cesar esa situación, mas, al intentar
exhibirle su credencial, dicha persona descendió del rodado para continuar a pie, lo que logró impedir
al tomarlo del brazo.
Á. M. presumió entonces que la persona podría estar armada o por cometer algún hecho ilícito, de
modo que procedió a palparlo por sobre sus ropas, momento en el que comenzó a sonar un teléfono
celular que Ñ. S. llevaba oculto en la zona de sus genitales. En tales condiciones, de manera espontánea
admitió que el aparato no le pertenecía, pues dijo haberlo encontrado en la calle. Ante ese panorama, el
preventor tomó el teléfono y lo atendió, entablando diálogo con la Sra. G. P., quien le hizo saber que su
hija, M. C. B., había sido víctima de una sustracción por parte de dos sujetos que se movilizaban en
bicicleta, quienes la habían desapoderado del aparato celular.
Tras consultar con el magistrado de turno, se procedió en presencia de testigos a la detención de Ñ. S.,
previa lectura de sus derechos y garantías (…), secuestrándose el aludido teléfono.

67
El análisis de las constancias descriptas exhibe que la intervención del efectivo se vio motivada en
circunstancias objetivas, esto es, la conducta riesgosa que desplegó el encausado, quien circulaba a
gran velocidad por un lugar de tránsito peatonal, que intentó huir cuando el personal policial se
identificó para detener su marcha. En esos términos la interceptación del sujeto no solo era legítima
sino que constituía una obligación funcional (arts. 184 inciso 8, 284 incisos 1, 3, 4 y 285 del CPPN así
como art. 1 de la ley 23.950).
A partir de ello, la inspección mediante "cacheo" llevada a cabo sobre las ropas del aprehendido, que
permitió verificar que llevaba un teléfono celular en una zona de su cuerpo inusual para su transporte,
encuentra amparo en las previsiones del art. 230 bis del C.P.P.N.
Frente a la evaluación de tal acontecer y la activación por llamado entrante del teléfono, el accionar del
agente policial, que sólo se limitó a responderlo, aparece como razonable y no importó una intromisión
en la esfera de la privacidad del aprehendido, como lo alegara su defensa, menos aun cuando el
imputado había admitido que el celular no le pertenecía.
En definitiva, el análisis conjunto de los aspectos fácticos que han sido reseñados traducen la existencia
de pautas concretas objetivas que justificaron el procedimiento, por encontrarse amparado en las
facultades de prevención.
En consecuencia, se RESUELVE: Confirmar el auto de (fs. …) en todo cuando fuera materia de
recurso. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala IV, Seijas, González Palazzo, González. (Sec.: Uhrlandt).
c. 15.611/15/3, ÑOPO SAMAME, Bryan L.
Rta.: 19/05/2015

DETENIDOS.

Traslado. Rechazado. Detenido que solicita estar presente en el Hospital o Clínica donde va a nacer su
hijo sin individualizar el lugar y la fecha del posible parto. Posible riesgo de fuga y características
violentas del hecho. Necesidad de que se realice un amplio informe socio ambiental; que el detenido
aporte constancia de la fecha aproximada de parto, la identidad de la madre y la acreditación del
vínculo entre ellos. Confirmación.

Fallo: "(…) I.- Escuchadas las partes en la audiencia celebrada en los términos del artículo 454 del
Código Procesal de la Nación, analizaremos el recurso de apelación deducido por la defensa de C. D.
C. a (fs. …), contra el auto de (fs. …) que rechazó su solicitud de traslado al Hospital o Clínica donde
nacerá su hijo.
II.- La asistencia técnica destaca que su pedido se fundamenta en lo previsto en el artículo 168 de la ley
24.660 y que resulta imprescindible que el procesado se encuentre en aquel acto para afianzar los lazos
familiares.
III.- Del escrito obrante a (fs. …) no logra establecerse, claramente, si el recurrente apunta a estar
presente al momento del parto ó a poder reconocer legalmente a su descendiente.
Si bien el Tribunal tiene en cuenta para examinar el planteo efectuado, los parámetros internacionales
que emanan de los pactos con jerarquía constitucional incorporados a nuestra Carta Magna en su
artículo 75 inciso 22, y los nacionales, puntualmente el artículo 168 de la ley de ejecución penal, el
cual hace referencia al derecho de los detenidos a mantener sus relaciones familiares y sociales, lo
cierto es que en este caso se presentan particularidades que ameritan rechazarlo.
Con respecto a la asistencia al alumbramiento, ello no resulta viable dado que no se conoce con
exactitud cuándo y dónde ocurrirá ya que la defensa no ha aportado información alguna al respecto.
Además, no puede soslayarse el riesgo de fuga que se presenta en el sub examen que no se neutraliza ni
siquiera con una custodia especial como propone el recurrente. No debe pasarse por alto las violentas
características de los eventos investigados en la causa en la cual C. se encuentra procesado, con prisión
preventiva, como partícipe secundario del delito de robo con armas -ocasión en la que ha perdido la
vida el Sargento O. C. al intentar impedirlo-, en concurso real con el de asociación ilícita (ver punto …
del auto de fs. …). Este extremo que nos persuade que la decisión adoptada por el magistrado de grado
ha sido la correcta.
En relación al reconocimiento del hijo de su pareja como propio, aún no se ha presentado un
certificado médico que acredite la fecha aproximada del parto, se desconoce la identidad de la madre y
aún no se ha establecido el vínculo entre ellos, sin perjuicio de destacar que son varios los canales que
permitirán en su oportunidad concretarlo.
Todas estas falencias ameritan que, previo a analizar en forma definitiva la petición de la esforzada
defensa, se efectúe un amplio informe social del detenido para conocer los pormenores de lo solicitado,
como así también sean aportadas al legajo las constancias del embarazo y su fecha probable de
finalización y se acredite la relación existente con la progenitora de la persona por nacer.
Así, circunscriptos a los agravios del recurrente y con los alcances arriba señalados, el Tribunal
RESUELVE: CONFIRMAR el auto de (fs. …) en cuanto fuera materia de recurso. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala de Feria B, Pinto, Lucini. (Prosec. Cám.: Castrillón).


c. 40.610/14/4, CONTRERAS, Carlos D.
Rta.: 08/01/2015

68
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

DETENIDOS.

Sanción disciplinaria impuesta por el Servicio Penitenciario Federal. 1) Planteo de inconstitucionalidad


rechazado. Decreto 18/97 reglamentado por Ley 24.660. Infracción consistente en no haber acatado
una directiva del personal penitenciario. Legitimidad no cuestionada. Ausencia de colisión entre la
normativa que regula el procedimiento sancionador y la Constitución Nacional. Derivación legislativa
que no ha derivado en una normativa reglamentaria irrazonable. Confirmación. 2) Nulidad rechazada.
Imputado que no tuvo posibilidad de contar con el asesoramiento de un letrado. Vulneración del
derecho de defensa. Silencio o indeterminación de la asistencia letrada. Sistema penal que debe
complementar las disposiciones de la Ley 24.660. Aplicación de las reglas de procesamiento del
proceso penal. Revocatoria. Nulidad de lo actuado a partir del acta de notificación y descargo del
interno.

Fallo: "(…) Se celebró la audiencia prevista por el artículo 454 del canon ritual con motivo del recurso
de apelación deducido por la defensa oficial contra la decisión documentada a fs. (…), en cuanto se
rechazaron los planteos de inconstitucionalidad y nulidad y se confirmó la sanción disciplinaria
impuesta por las autoridades del Complejo Penitenciario Federal II al detenido F. G. Z. V..
El recurrente planteó la inconstitucionalidad del Decreto 18/97, reglamentario de la Ley 24.660, desde
que, a su criterio, vulnera el principio de legalidad formal y establece un procedimiento que atenta
contra la garantía de imparcialidad.
A su vez sostuvo, que se había afectado las garantías del debido proceso y el derecho de defensa al
privar al interno de contar con un letrado defensor que lo asista frente a la falta por la que fue intimado
(…).
Cabe recordar que la sanción disciplinaria cuestionada fue impuesta por el Director de la Unidad
Residencial I del Complejo Penitenciario Federal II, Alcalde Mayor Licenciado Á.l G. con fecha 17 de
diciembre de 2014, y consistió en tres días de permanencia en celdas cuyas condiciones no agraven
ilegítimamente la detención, por haber infringido lo normado en el artículo 17 incisos "B" y "E" del
Reglamento de Disciplina para Internos (Dto. 18/97), lo cual constituye una sanción media de acuerdo
a lo establecido en dicho estatuto.
La supuesta falta habría ocurrido el 16 de diciembre de 2014 a las 13.20 en el pabellón I de la Unidad
Residencial I de aquella unidad penitenciaria, oportunidad en que Z. V. no acató la orden impartida por
el celador, Ayudante de 4ta. V. L., de deponer su actitud hostil y negarse a permanecer en su lugar de
alojamiento a la vez que refirió "yo no quiero estar mas en este pabellón, esto es villa…hacé lo que
tengas que hacer yo acá no me quedo mas" (…).
En relación con el planteo de inconstitucionalidad, hemos sostenido que una declaración de este tipo
sólo procede excepcionalmente cuando la confrontación de la norma demuestra su incompatibilidad
con la letra y el espíritu de nuestra Constitución Nacional de manera absoluta y evidente, circunstancia
que no se vislumbra en el caso (C.N.Crim. y Correc., Sala VII, c. 2031/12 "Fraticelli, Alejandro", rta:
28/12/2012 y Sala IV, c 1959/12, "Banegas Sánchez, Matías", rta: 13/12/2012).
En todo caso, es dable recordar la doctrina de la Corte Federal, según la cual la declaración de
inconstitucionalidad es un acto de suma gravedad institucional y por ello es que deba ser considerada
como ultima ratio del orden jurídico (Fallos: 264:364; 288:325; 295:455; 306:1597, entre muchos
otros) Ello es así pues, con independencia de la problemática vinculada a las leyes penales en blanco,
de adverso a lo sostenido por el recurrente, no se advierte que la delegación legislativa cuestionada
hubiera derivado en la aplicación de una reglamentación administrativa irrazonable, pues no lo es que
un episodio de tales características dentro de un establecimiento carcelario sea pasible -eventualmente-
de sanción, extremo que no podría depender necesariamente de la calificación que, contingentemente,
haya sido formulada por la autoridad penitenciaria (C.N.Crim. y Correc., Sala VII, c. 2031/12
"Fraticelli, Alejandro", rta: 28/12/2012).
En ese entendimiento, en tanto la infracción atribuida consiste en no haber acatado una directiva del
personal penitenciario, cuya legitimidad no ha sido cuestionada, en modo alguno luce irrazonable la
aplicación de las disposiciones reglamentarias discernidas, conforme a la expresa remisión que formula
el artículo 85 de la ley 24.660 citada, sancionada por el Congreso Nacional, conforme al procedimiento
que emerge de la Carta Magna, motivo por el que no puede prosperar el planteo de inconstitucionalidad
(C.N.Crim. y Correc., Sala VII, c. 13829, "Panta Gaona, Jaime", rta: 21/08/2014).
En efecto, el legislador precisó que las infracciones disciplinarias se clasifican en leves, medias y
graves, y detalló en dicha oportunidad únicamente las conductas constitutivas de faltas graves, en tanto
se postergó la especificación de aquellas leves y medias para el momento de la reglamentación. De tal
modo, el Poder Ejecutivo, en uso de su facultad reglamentaria (art. 99, inciso 2° de la Constitución
Nacional), mediante los artículos 16 y 17 del decreto 18/97, especificó aquellas conductas, que se
estiman razonables, proporcionales y no desvirtúan los propósitos de la norma legal cuya finalidad
estriba en efectivizar los objetivos de la Ley 24.660 y completar sus pormenores para ponerla en
ejecución (en particular el capítulo IV de la Ley 24.660).
Por otra parte, tampoco se vislumbra una colisión entre la normativa que regula el procedimiento
sancionador y la carta fundamental, en tanto no se advierten preceptos en los cuales se hubiera
establecido una limitación de las garantías constitucionales aludidas por la defensa en cuanto concierne
al sistema de procedimiento de la norma en cuestión.

69
En ese orden de ideas, la normativa del decreto 18/17 establece precisas funciones sobre las
atribuciones que tienen, de un lado, el sumariante -encargado de la etapa de investigación y recolección
de prueba-, de otro, el Director -órgano sancionador-, sin que quepa confusión respecto del rol
diferenciado que cada uno de ellos debe cumplir, aun cuando ambos pertenezcan al Servicio
Penitenciario Federal, de modo que no surge la vulneración al principio de imparcialidad invocada.
Por lo demás, la posibilidad de revisión judicial posterior prevista en la ley (artículo 96) y en la norma
que lo reglamenta (artículo 47), permite neutralizar toda posible arbitrariedad del órgano administrativo
en el ejercicio de funciones jurisdiccionales, pues su decisión debe necesariamente sujetarse a control
judicial suficiente, a fin de impedir que aquellos ejerzan un poder absolutamente discrecional, que
además no se limita a la actuación -en el caso- del juez de instrucción, ya que su intervención a su vez
se halla supeditada a la revisión de esta alzada, de suerte tal que la doble instancia queda debidamente
garantizada (art. 24, inciso 1°, del Código Procesal Penal y art. 3 de la ley 24.660).
Las circunstancias reseñadas impiden afirmar que el procedimiento contravenga las disposiciones de la
Constitución Nacional, por lo que habrá de homologarse el punto dispositivo I del auto documentado a
fs. (…).
Distinta es la situación que se presenta en relación con la nulidad de la sanción planteada, pues el
agravio introducido debe ser admitido.
En ese sentido, la copia certificada del acta luciente a fs. (…) del legajo de sanción disciplinaria, es
demostrativa de que el imputado no tuvo la posibilidad de contar con el asesoramiento de un letrado,
vulnerándose así su derecho de defensa de raigambre constitucional, que debe ser garantizados aún en
los procedimientos administrativos.
Así lo entendió la Corte Suprema de Justicia, al sostener que: "Las garantías constitucionales del
debido proceso y de la defensa en juicio son de inexcusable observancia en todo tipo de actuaciones,
inclusive en los procedimientos administrativos de naturaleza disciplinaria, para lo cual resulta
indispensable que la persona en cuestión haya sido notificada de la existencia del procedimiento que se
le sigue o haya seguido, y que además se le dé la oportunidad de ser oída y de probar de algún modo
los hechos que creyere conducentes a su descargo" (Fallos: 324:3593 cfr. Sala de Feria B causa n°
13890/2013, del 18 de julio de 2013).
Entonces, en virtud del principio de judicialización, las garantías propias del proceso penal continúan
vigentes e inmutables en todas sus etapas y, por ende, dado que las sanciones disciplinarias impuestas
por el Servicio Penitenciario Federal resultan también manifestación del ordenamiento punitivo del
Estado, los principios esenciales reflejados en la Constitución adquieren especial relevancia y
operatividad (mutatis mutandi, de esta Sala causa n° 116/13 "Amarilla, Ignacio" del 7 de enero de
2013).
Frente a ello, para cumplir con el derecho constitucional de defensa en juicio, no basta que de manera
formal se garantice al interno el derecho a formular descargo, ofrecer prueba y formular los recursos
pertinentes, sino que se debe verificar que también haya recibido la posibilidad efectiva y sustancial de
ser asistido por un letrado para poder ejercer su defensa pues, en caso contrario, se estaría infringiendo
el derecho consagrado en el artículo 8.2.d) de la Convención Americana sobre Derechos Humanos.
En ese sentido, frente al silencio o indeterminación de la asistencia letrada que se refleja en el decreto-
ley n° 18/97 (artículo 40), el sistema penal debe concurrir a complementar las disposiciones de la ley
n° 24.660 (ver artículo 229), de lo que se colige, por lógica, la aplicación de las reglas procedimentales
que, al igual que en relación con el imputado en un proceso penal, emergen de los artículos 104, 107,
295, 296, 298, 299 y concordantes del Código Procesal Penal de la Nación (mutatis mutandi, de esta
Sala causa n° 116/13 "Amarilla, Ignacio" del 7 de enero de 2013).
En ese entendimiento, se ha configurado una nulidad de orden general (artículo 167, inciso 3, del
código de forma), a partir de la sanción disciplinaria informada, en tanto la asistencia técnica del
interno no fue asegurada durante la sustanciación del proceso administrativo en que se decidió la
aplicación de una sanción disciplinaria, resultando insuficiente para salvar tal exigencia la
comunicación al juez a disposición del cual cumple la detención (fs. 13/14 y 22/25 y Sala IV causa n°
1959/12 "Banegas Sánchez, Matías" del 13 de diciembre de 2012).
Por ello, en razón de que el interno Z. V. no contó asistencia letrada en el momento en que fue
impuesto de las posibles infracciones al decreto-ley 18/97, corresponde, al afectarse el derecho de
defensa, declarar la nulidad a partir de lo actuado en el acta confeccionada en los términos del artículo
40, que abarca la sanción disciplinaria impuesta.
Por lo expuesto, el Tribunal RESUELVE: I. CONFIRMAR el punto dispositivo I de la resolución
documentada a fs. (…) en cuanto rechazó el planteo de inconstitucionalidad formulado. II.
REVOCAR los puntos dispositivos II y III DECLARAR LA NULIDAD de lo actuado a partir del
"acta de notificación y descargo del interno (art. 40)" que luce a fs. 15/16 de las copias certificadas del
legajo, invalidez que incluye la sanción impuesta al detenido F. G. Z. V.".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Scotto, González. (Prosec. Ad Hoc.: Grisi).


c. 15.152/11, ZAPATA VALDEZ, Franco Gabriel.
Rta.: 24/02/2015

70
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

DETENIDOS.

Nulidad rechazada. Sanción disciplinaria impuesta por el Servicio Penitenciario Federal. Agravio:
afectación al derecho de defensa de su asistido por no haber contado el imputado con asistencia técnica
al momento de realizar su descargo. Rechazo. Ministerio Público de la Defensa que fue notificada de la
formación del incidente y de la audiencia por la sanción que se iba a llevar a cabo con dos semanas de
anticipación. Derecho de defensa en juicio garantizado. Confirmación.

Fallo. "(...). Los argumentos desarrollados por la defensa, confrontados con las actas escritas que
tenemos a la vista, no logran conmover los fundamentos de la resolución cuestionada, la que
confirmaremos. Dando respuesta concreta a lo expuesto por el recurrente en la audiencia, en cuanto a
la afectación al derecho de defensa por cuanto al momento de realizar su descargo, C. F. C. no contó
con asistencia técnica, sostenemos que, en primer término, el Ministerio Público de la Defensa no sólo
había sido notificada de la formación del incidente, sino que también el Complejo Penitenciario
Federal n° 1 -Ezeiza- solicitó con dos semanas de anticipación su presencia a fin de llevar a cabo la
audiencia de descargo (fs. ...) por lo cual la circunstancia que no haya asistido letrado al acto, no es
atribuible a la institución carcelaria. Asimismo, hace a la naturaleza propia de este tipo de sistemas que
la respuesta jerárquica ante una supuesta desobediencia deba darse con la mayor inmediatez posible,
por lo que el análisis sobre el respeto de los pasos que hacen al debido proceso debe realizarse dentro
de dicho marco (...). Finalmente, respecto a la sanción en cuestión, la defensa sostuvo que el imputado
podría haber estado bajo una situación de necesidad que se omitió consignar, sin embargo, al no alegar
ningún tipo de arbitrariedad por parte de la autoridad penitenciaria ni animosidad alguna por parte del
funcionario que denunció la infracción, el cuestionamiento excede el marco de revisión en una sanción
disciplinaria como la presente. (...).
Por lo expuesto, el tribunal RESUELVE: CONFIRMAR en punto I del auto de (fs. ...), en todo cuanto
ha sido materia de recurso (...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala I, Bunge Campos, Rimondi. (Sec.: Sosa).


c. 74343/14, CORTEZ, Carlos Fabio.
Rta.: 13/04/2015

DETENIDOS.

Sanción disciplinaria impuesta por el Servicio Penitenciario Federal. Defensa que planteó la
inconstitucionalidad del decreto PEN 18/97, la nulidad de la sanción y, en subsidio, recurrió la
imposición por considerar que la infracción no estaba acreditada. Magistrado que rechazó todos los
planteos y concedió la apelación respecto de la sanción. Magistrado que tenía competencia
jurisdiccional para resolver al recurso de apelación. Nulidad parcial.

Fallo: "(…) se advierte en el trámite de las actuaciones una nulidad de carácter general que nos levará a
invalidar la parcialmente la resolución de fs. (…)(artículo 167 inciso 2° del CPPN)II. (…)se impuso a
A.G.T. la sanción de 5 días en celda individual de alojamiento cus condiciones no agraven
ilegítimamente su detención por haber cometido una infracción "media" al régimen disciplinario (fs. ..).
Notificada la defensa del imputado de esa sanción, planteó la inconstitucionalidad de los artículos 17,
18 y 19 del decreto 18/97 por violación al principio de legalidad, la nulidad de la decisión
administrativa por ilegitimidad activa del sancionador y subsidiariamente planteó la apelación de esa
decisión, por cuanto -a su criterio- no se encontraba debidamente acreditada la supuesta infracción que
se le atribuye a su asistido (fs…).
Luego de correr vista al Ministerio Público Fiscal, la jueza de grado resolvió no hacer lugar ni al
planteo de inconstitucionalidad, ni al de nulidad (puntos 1 y 2 del auto de fs. (…)) y concedió el
recurso de apelación interpuesto de manera subsidiaria (punto 3 del auto mencionado), decisión que fue
notificada a la defensa mediante cédula electrónica el 28 de abril de 2015.
III. Ahora bien, el artículo 96 de la ley 24.660 establece que "Las sanciones serán recurribles ante el
juez de ejecución o juez competente dentro de los cinco días hábiles …".
En el caso, es la jueza de grado la competente para resolver la apelación interpuesta por la asistencia
técnica del imputado contra la sanción administrativa dictada por el Servicio Penitenciario Federal, por
cuanto a su disposición se encontraba detenido T. y, eventualmente, este tribunal podría intervenir
como órgano de revisión de la resolución adoptada por la jueza de grado a fin de garantizar un debido
control judicial de la decisión administrativa.
Si bien de la lectura de la resolución de fs. (…) se observa que en el considerando 5°, apartado "b" la
instructora realizó un análisis de las pruebas que fundamentaron la sanción, lo cierto es que finalmente
omitió adoptar una decisión concreta en la parte dispositiva, que eventualmente permitiera a la defensa
plantear los recursos que estimare conducentes.
Esta circunstancia y la defectuosa intervención de la jueza de grado determina la invalidez parcial del
resolutorio de fs. (…) y del punto 3 en cuanto concede un recurso de apelación, dado que -como se
dijo- ese recurso debió ser resuelto por la magistrada de la instancia anterior.
(…) el tribunal RESUELVE: I. DECLARAR la NULIDAD parcial del auto de fs. (…)y del punto
dispositivo 3 de ese auto. II. Dejar sin efecto la audiencia fijada a fs. (…)".

71
C.N.Crim. y Correc., Sala V, López González, Pinto. (Sec.: Roldán).
c. 74.730/14/4, TOLOSA, Alfredo G.
Rta.: 13/05/2015

EMBARGO

Rechazo. Imputado que es accionista de una sociedad y ofrece un bien del acervo societario. Bien que
no pertenece al patrimonio personal del imputado. Confirmación.

Fallo: "(...) Compartimos lo decidido por la señora jueza de grado en tanto el inmueble ofrecido a
embargo no pertenece al patrimonio personal del imputado, sino al de la empresa "E. S.A" de la cual
sería accionista (cfr. fs. ...), siendo que además este último extremo tampoco puede tenerse
debidamente por acreditado mediante la documentación que en copia simple se acompañara a (fs. ...) y
frente a lo informado por la "Dirección Provincial del Registro de la Propiedad" a (fs. ...), dando cuenta
de un titular registral distinto.
No obstante, y de corroborarse efectivamente la titularidad del bien de referencia (para lo cual debe ser
correctamente individualizada su nomenclatura catastral y número de matrícula), nada impide que las
acciones que poseería el encausado en la sociedad aludida puedan ser afectadas a embargo, en tanto se
determine si su valor satisface la medida cautelar dispuesta (1).
En consecuencia, por las consideraciones precedentemente expuestas, el Tribunal RESUELVE:
CONFIRMAR el auto de (fs. ...), en todo cuanto fuera materia de recurso. (...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala IV, Seijas, González Palazzo, González. (Prosec.Cám.: Pereyra).
c. 2.543/13/2, INC.de embargo de ALFANO, Roque C.
Rta.: 07/05/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correc., Sala IV, c. 1984/11 "Trimarco", rta. 10/2/12.

ENCUBRIMIENTO.

Procesamiento. Imputada que no denunció el abuso sexual del cual fue víctima su hija e intentó
neutralizar la averiguación de la verdad al influir sobre ella para que narrara otro mecanismo de
producción de las lesiones para lograr desvincular a su pareja. Accionar dirigido a lograr una alteración
en las pruebas del delito investigado (testimonio de la menor). Exención de responsabilidad no
aplicable (art. 277 inc. 4 del C.P.). Vínculo consanguíneo entre imputada y víctima menor de 5 años.
Protección de la Convención de los Derechos del Niño. Omisión de denunciar. Delito dependiente de
instancia privada. Reserva a las partes o representantes de la posibilidad de instar la acción penal.
Confirmación parcial. Encubrimiento en la modalidad prevista en el art. 277, inciso 1, apartado "b",
agravado por la circunstancia prevista en el inciso 3, apartado "a", del Código Penal".

Fallo: "(…) El juez Juan Esteban Cicciaro dijo: La defensa recurrió en apelación el auto documentado
a fs. (…), punto dispositivo II, en cuanto se dispuso el procesamiento de E. T. C..
Se atribuye a la nombrada el haber inducido a su hija S. M. T., de cinco años de edad, para que
manifestara ante los profesionales en psicología del Cuerpo Médico Forense que las lesiones que
presentaba en su zona vaginal habían sido provocadas a raíz de un golpe con una cama, cuando en
realidad tenía conocimiento de que la niña había sido abusada sexualmente mediante acceso carnal por
su pareja W. W. R. A.
La menor fue entrevistada en los términos del art. 250 bis del Código Procesal Penal, el día 10 de
octubre de 2014, por la licenciada en psicología D. E.Y, y posteriormente por la perito psicóloga S. C.
En ese marco, tras referirse al hecho de abuso sexual que la damnificó, en el que involucró a R. A.,
expresó: "…mi mamá me dijo que yo diga que me lastimé con la cama…" (…).
Según la imputación formulada, el accionar de E. T. C., por medio del cual instó a la niña para que
declarara falsamente ante dichos profesionales del Cuerpo Médico Forense, tuvo por finalidad evitar
que R. A. fuera identificado como el autor del hecho que damnificó a la menor. Por otro lado, se le
atribuye el haber omitido denunciar lo sucedido, pese a que tenía conocimiento de lo ocurrido.
La recurrente bregó por la nulidad de las entrevistas llevadas a cabo con la menor, en tanto no se había
notificado a la defensa, pese a su carácter irreproducible. Cuestionó además la valoración de la prueba
con la que se arribó al procesamiento de su asistida y formuló disquisiciones sobre los tipos penales
seleccionados en la instancia anterior.
En lo concerniente a la nulidad articulada, según el criterio de esta Sala, la medida ordenada respecto
de S. M. T. (art. 250 bi s ya citado) no exige la pretendida notificación, pues no constituye
estrictamente un examen pericial, sino que importa una declaración testimonial con la que "se pretende
evitar la interrogación directa del tribunal o las partes en los casos de menores que han sufrido hechos
que importen lesiones o delitos contra la integridad sexual para hacerla a través de facultativos" (1).
Aun así, cabe puntualizar que se puso en conocimiento de la defensa oficial la audiencia que debía
realizarse a través del procedimiento denominado "Cámara Gesell" (…) y que al tiempo en que se
ordenó, en rigor, la causa tramitaba bajo las previsiones del art. 196 bis del Código Procesal Penal, de

72
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

modo que más allá de las conjeturas que pudieran haberse formulado por aquel entonces, formalmente
no había un autor individualizado (…).
Consecuentemente, no es posible alegar un estado de indefensión que amerite la aplicación de la
aludida sanción procesal.
En relación con el fondo del asunto, debe ponderarse que W. W. R. A. ha sido procesado en orden al
delito de abuso sexual con acceso carnal, cometido en perjuicio de una menor de trece años de edad y
aprovechándose de la situación de convivencia preexistente, en calidad de autor (arts. 45 y 119,
párrafos tercero y cuarto, inciso "f", del Código Penal).
Se tuvo por acreditado, en efecto, que aquél había accedido carnalmente a S. M. T. cuando la niña
contaba con cinco años de edad, en una ocasión que no se ha podido precisar pero que resulta anterior
al 16 de septiembre de 2014, en el interior del domicilio en el que residían con la menor y un hijo de R.
A. y T. C., situado en la calle L. X de esta ciudad.
El procesamiento aludido no ha sido recurrido, de modo que se tienen por acreditadas las
circunstancias que llevaron a su dictado, en especial aquellas por las cuales se desechó la versión
puesta en conocimiento de las autoridades educativas y sanitarias, en el sentido de que la menor se
había caído.
Surge a su vez de la resolución por la que se ha procesado a R. A. y T. C., que ésta última no ha tenido
intervención en aquel abuso -siquiera a partir de una conducta meramente omisiva al tiempo del
suceso-, de modo que la atribución de responsabilidad recayó sobre la nombrada en función de haber
intentado favorecer a su concubino y de haber omitido denunciar el hecho, luego de su ocurrencia.
De la prueba reunida surge que, efectivamente, T. C. ha intentado neutralizar la averiguación de la
verdad de lo ocurrido con su hija.
El descargo de la nombrada en torno al propio abuso se ha visto disipado con la abundante prueba
reseñada por el señor juez de grado, a la que cabe remitir, y de otro lado se ha acreditado que desde un
primer momento y frente a los médicos del Hospital Garrahan, T. C. refirió que su hija presentaba
ardor en la vagina y dolor al orinar y que se había golpeado esa zona "jugando con una prima…ésta la
empujó cayendo sobre una madera con las piernas abiertas" (…). La ahora imputada así se condujo aun
frente a un diagnóstico presuntivo de abuso sexual (…), a partir de detectarse la existencia de un herpes
y un desgarro himeneal que resultó corroborado e informado por los médicos respectivos (…).
Según surge de las actuaciones, el hallazgo fue denunciado por el Consejo de los Derechos de Niñas,
Niños y Adolescentes del Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires el 23 de septiembre de
2014 (…) luego del ingreso de la menor al Hospital Garrahan, que tuvo lugar una semana antes (…).
El 26 de septiembre de 2014 la Fiscalía ordenó escuchar a la niña en los términos del art. 250 bis del
Código Procesal Penal, diligencia que debía llevarse a cabo el 2 de octubre siguiente (…), de lo cual T.
C. tomó acabado conocimiento previo (…). La declaración finalmente se concretó el día 12 de ese mes
y año (…).
La Fiscalía, a todo esto, había decidido instruir sumario en razón de lo previsto en el art. 72 in fine del
Código Penal (…).
De la recensión formulada surge nítidamente que T. C. estaba al corriente de que debía declarar su hija
y que la niña podría involucrar a R. A.
Es entonces absolutamente creíble la mención de la menor, en el marco en que señaló al concubino de
su madre, cuando expresó que "…mi mamá me dijo que yo diga que me lastimé con la cama…".
Al propio tiempo, antojadizo resulta aquello que surge del descargo de la imputada, al negar que
hubiera formulado esa mención a la niña y puntualizar, por el contrario, que "posiblemente S. se haya
visto forzada o presionada por los propios psicólogos o por el Juzgado a decir ciertas cosas" (….).
La intención de favorecer a R. A. surge prístina de las pruebas reseñadas en la resolución atacada,
particularmente aquellas incorporadas a partir de lo dicho por los médicos y docentes que se
aleccionaron de lo sucedido.
La opción ejercida en favor de su concubino no se limitó a tal proceder sino a torcer la realidad a través
de la propia menor, a la sazón su hija, cuyo relato se exhibe absolutamente creíble.
En efecto, la licenciada S. C. dijo que en las entrevistas mantenidas con la menor "surgieron varios
relatos: en el primero (en el que manifestó la versión de las lesiones ocasionadas por una caída en una
cama), se constató un relato estereotipado, anticipándose inclusive a las preguntas, aportando una
cantidad de detalles que no eran requeridos, constatándose imprecisiones y contradicciones. Luego, en
la segunda entrevista, S. M. fue incluyendo verbalizaciones que involucraron haber sufrido conductas
abusivas de índole sexual, indicando primeramente no saber el nombre de quién se las acusó, para
luego reseñar a su padre como el presunto ejecutor de las mismas. Asimismo, indicó a su madre como
la que operó en ella influencias para distorsionar la versión aportada en diversas instancias
investigativas sobre el origen de las lesiones sufridas. Estos cambios en sus manifestaciones
discursivas revelan máxima conflictividad en torno del origen de los sucesos investigados en la
presente causa e incidencia de los adultos significativos a los fines de que la niña niegue la ocurrencia
de los sucesos de índole sexual y escasa contención y capacidad de sostén ante las problemáticas que
enfrenta la niña" (…).
La prueba reunida al respecto, entonces, alcanza sobradamente los requerimientos que establece el art.
306 del Código Procesal Penal.
Ello superado, dos imputaciones se han tenido por acreditadas en la instancia anterior: una que remite a
un proceder positivo y que estriba en haber actuado sobre S., antes de que se obtuviera su relato en el

73
Cuerpo Médico Forense, para que narrara otro mecanismo de producción de las lesiones en aras de
desvincular a R. A.; otra en su faz negativa, que consiste en no haber denunciado el abuso sexual.
El juez ha seleccionado, así, los supuestos del art. 277, inciso 1º, apartados "b" y "d", del Código Penal,
como aplicables al caso, además de la agravante que se ordena a la especial gravedad del delito
encubierto. La defensa, por su parte, ha formulado diversos reparos sobre la calificación legal
arbitrada.
Una primera aproximación a la cuestión, desde la nuda materialidad de lo sucedido, podría sugerir la
idea de que se está en presencia del típico caso de alguien que instiga a otro para que afirme una
falsedad o niegue o calle una verdad, cuando éste tiene que comparecer a prestar un testimonio ante la
autoridad competente.
Sin embargo, varios reparos surgen frente a esta categorización, si se piensa -más allá de que la norma
del art. 250 bis del Código Procesal Penal se ubica en el capítulo de los testigosque no se trata
propiamente de un testigo, pues tal condición se reserva para quien declara sobre hechos ajenos, sino
de la víctima de un delito; que la menor carece de capacidad de culpabilidad, pues resulta inimputable
en razón de su edad; y fundamentalmente que, en rigor de verdad, S. no se ha conducido con
mendacidad, sino que, justamente, ha involucrado a R. A. y ha dicho -de modo veraz- que su madre le
encomendó que dijera una falsedad. En otras palabras, al cabo, S. no mintió; dijo que su madre la
instruyó para que lo hiciera.
Descartada cualquier incursión desde la instigación a un falso testimonio, al menos en este estado del
proceso y sin perjuicio de lo que habrá de debatirse con mayor profundidad en la etapa respectiva, el
caso sugiere aprobar la calificación ensayada en la resolución recurrida, en los términos del supuesto
legal previsto en el art 277, inciso 1º, apartado "b", del Código Penal.
El magistrado interviniente ha aludido a que el accionar de T. C. sobre su hija "estuvo dirigido a lograr
una alteración en las pruebas del delito aquí investigado, más específicamente del contenido de la
entrevista realizada en los términos del art. 250 bis del C.P.P.N." (...).
La utilización de las locuciones "alteración" y "pruebas" sugiere, en efecto, la tipicidad de aquel cuño,
que tradicionalmente ha importado la clasificación de lo que se conoce como favorecimiento real.
Un primer abordaje del tipo penal referido encontraría el reparo de que se ha actuado sobre una persona
y no sobre una cosa.
Empero, la singularidad del caso no permite escapar a la subsunción legal fijada en la instancia
anterior.
Si se examina la naturaleza de un hecho como el que concita la atención del Tribunal, podrá advertirse
que en la investigación de un suceso sin testigos donde el abusador es el concubino y la abusada la hija
de su pareja, el haber instalado en la menor que dijera algo tendiente a favorecer al autor resulta ser
mucho más eficiente e idóneo que otras acciones de las descriptas en la figura en estudio y que
ordinariamente responden a lo que se conoce como favorecimiento real.
Dicho de otro modo, a partir del valor probatorio que revisten los dichos de una menor en el
procedimiento que prescribe el art. 250 bis del Código Procesal Penal, lo que diga o no adquiere una
trascendente significación, como ha ocurrido en el caso -al señalar a la pareja de su madre- y como se
verifica en la praxis judicial.
La importancia del relato de los menores que han sido víctimas en situaciones análogas ha sido
destacada de este modo: "las características que generalmente presentan los delitos contra la integridad
sexual, de ser consumados en un ámbito privado y sin testigos presenciales y, en muchos casos, la
ausencia de evidencias o signos físicos en el cuerpo de la víctima, hacen que el relato…claro, preciso y
basado en un recuerdo no contaminado sea, en muchas ocasiones, uno de los elementos más
importantes de la investigación" (2).
Véase que antes de que se escuchara a la niña, en el Hospital Muñiz ya se estaban realizando los
estudios de laboratorio que permitirían establecer ulteriormente que S. se había contagiado un herpes,
dolencia que padecían R. A. y la ahora imputada (…).
En ese contexto, T. C. ha pretendido alterar el relato de la menor, y sólo circunstancias evidentemente
ajenas a la imputada, de suyo contingentes en razón de la edad de S., han contribuido a que no haya
logrado su objetivo, marco en el cual cabe recordar que se está en presencia de un delito de pura
actividad -como se reconoce en la apelación a fs. …-, en tanto se consuma con la alteración de la
prueba y no se exige la consecución del fin propuesto -lograr un beneficio para el autor-, como ocurrió
en la especie, frente a la sinceridad del dato aportado por la niña.
Casos como los del sub examen revelan una modificación eminente que bien puede inscribirse en la
idea de alteración, en tanto el vocablo alterar responde a las ideas de "cambiar la esencia o forma de
algo…perturbar…estropear, dañar, descomponer" (Diccionario de la Lengua Española, vigésima
segunda edición): bien distinto es que la menor diga que el concubino de la madre abusó de ella, a que
manifieste que se golpeó contra una cama.
La imputada ha actuado sobre una prueba, según el tipo escogido, y en ese sentido la prueba puede ser
de cualquier naturaleza. Si se ha reconocido la posibilidad de obrar sobre el "aspecto de personas" (3),
no parece razonable excluir el supuesto por el cual se instala en la mente de una niña de cinco años de
edad una circunstancia fáctica que no responde a la realidad y que tiende a favorecer al autor del delito
encubierto.
Efectivamente, si en este ámbito se reconoce la posibilidad de encasillar las modificaciones de los
aspectos de las personas en el tipo escogido -así se menciona incluso en la apelación a fs.

74
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

…-, no se aprecia congruente desechar aquellos cambios que operan sobre la psiquis de una niña a
partir de lo que le dice su madre para que se beneficie el autor, en ambos casos, a partir del medio de
prueba correspondiente. Como se ha sostenido al analizar la locución pruebas, quedan abarcadas
aquellas "de cualquier naturaleza que fueren (cosas, documentos, etc.), incluidas las personas (p.ej., un
testigo, sin perjuicio de los delitos que contra su persona se puedan perpetrar, contra la libertad o contra
la vida" (4).
Al cabo, en las ideas del favorecimiento -en sus formas llamadas en la academia y la doctrina bajo los
títulos personal y realla idea central sigue radicando en lo mismo: "defender la administración de
justicia contra cualquier maliciosa intromisión tendiente a frustrar la acción de aquélla" (5).
El supuesto de hecho que aquí convoca se ajusta entonces al enunciado típico previsto en el art. 277,
inciso 1º, apartado "b", del Código Penal, sin repercusión alguna en la prohibición de la analogía, pues
la debida comprensión de tal proscripción implica mantener "la finalidad de limitar la extensión
arbitraria del tipo penal por parte de los jueces pero [reconociendo] que, propiamente hablando, esto es,
dentro de la lógica jurídica, resulta imposible que la aplicación de los tipos penales se desenvuelva con
prescindencia de operaciones técnicamente analógicas", puesto que "el tipo, como instrumento de
expresión del comportamiento penalmente relevante, supone siempre una consideración basada en
semejanzas y proporciones entre la referencia normativa del enunciado típico y la significación de los
hechos analizados" (6).
En el caso, lo expuesto importa superar cualquier clasificación dogmática -predicar que el enunciado
típico reconduce exclusivamente a cosas y por eso se lo denomina tradicionalmente favorecimiento
real- cuando en rigor las menciones relativas a la alteración y la prueba bien pueden corresponderse
con el hecho de instalar sobre la mente de una menor de corta edad una versión tergiversada de lo
ocurrido para que la transmita a la profesional que la entrevista.
Como se ha sostenido en la doctrina, en este enunciado legal "se traba o desvía la investigación
modificando el estado de cosas" (7), noción superadora de aquella encapsulada generalmente en la idea
del favorecimiento real, alusiva exclusivamente al estado de las cosas. Como puede verse y
adscribiéndose al sentido valorativo del derecho penal, se trata de interpretar, valorar y hasta completar
el sentido de los términos seleccionados por el legislador (8), extremo que en el caso luce alejado de la
veda que sobre la materia ha asumido la Corte Federal, en punto a evitar "la ampliación por vía
interpretativa de los bienes jurídicos comprometidos" (Fallos: 312:1920, considerando 11, y 318:207,
considerando 10).
Ello superado, el juez ha descartado en el caso la exención de responsabilidad penal que trae el art.
277, inciso 4º, del Código Penal, criterio que en la especie sustancialmente se comparte.
Cuando se intenta identificar los motivos que llevaran al legislador a concebir este tipo de eximentes,
"se trata de descubrir las razones de política criminal que sostienen la exclusión de pena, y, con ello,
definir el fundamento sistemático que permitirá explicar sus consecuencias. En esta línea, la doctrina y
jurisprudencia mayoritarias coinciden en la siguiente premisa general: el legislador ha preferido, en
lugar del castigo de algunos de sus integrantes, preservar el núcleo familiar de estrecha comunidad"
(9).
Cierto es que al dar un primer vistazo de la cuestión puede pensarse que, por su condición de
concubino, R. A. reunía la condición -al tiempo del favorecimiento- de "amigo íntimo" a que alude la
normativa, bien entendido que tanto R. A. como T. C. han dicho que la menor no es hija de aquél (…),
y que por ello la exención tendría lugar.
Sin embargo, debe concluirse en que la eximente no se verifica en el caso pues, contrariamente, no
podría predicársela en un supuesto donde existe algún vínculo entre el autor y el encubridor, por un
lado, y entre la víctima del delito encubierto y tal encubridor, por el otro, en la medida en que -al
menos implícitamente- la exención, como excepción que es, no resulta aplicable si el último de los
vínculos no sólo es consanguíneo y de primer grado, sino que se trata de una niña de cinco años de
edad.
La cohesión familiar es la que encuentra razón -abstractamente-en esta disposición, de suerte tal que, al
menos en el caso, ya no podría recurrirse al lazo que mantenían los adultos cuando la víctima se trata
de la propia hija de la imputada.
El hecho investigado dista de aquellas "formas de encubrimiento [que] consolidan el vínculo de
parentesco por lo que la ley renuncia a su punición en detrimento de unos deberes de solidaridad social
relativos a la cooperación con la Justicia en la lucha contra el crimen", de manera que "es en definitiva
una pugna entre dos formas de solidaridad, la debida con el poder público o la debida con el allegado",
como el caso del "padre que oculta el puñal que delata a su hijo" (10). Si la cuestión se la examina
desde la perspectiva de una causa personal de exclusión de la pena, harto difícil será que T. C. se
encuentre amparada por consideraciones de política criminal.
En todo caso, la aplicación de la exención en el sub lite no contemplaría que, según la Convención
sobre los Derechos del Niño, "ningún niño será objeto de injerencias arbitrarias o ilegales en su vida
privada…El niño tiene derecho a la protección de la ley contra esas injerencias o ataques" (art. 16). De
igual modo, se prescribe la adopción de medidas apropiadas "para proteger al niño contra toda forma
de perjuicio o abuso físico o mental, descuido o trato negligente, malos tratos o explotación, incluido el
abuso sexual, mientras el niño se encuentre bajo la custodia de los padres, de un representante legal o
de cualquier otra persona que lo tenga a su cargo" (art. 19.1), entre cuyas medidas de protección,
justamente, se enumeran la "investigación" e "intervención judicial" (art. 19.2). Tal directriz,

75
lógicamente, no parece limitarse a los autores y partícipes, sino a los encubridores de los delitos que
perjudican a los niños.
Finalmente y en orden a una visión sistemática -no inconsecuente- del ordenamiento jurídico, cabe
traer aquí las disposiciones de los arts. 178 (prohibición de denunciar) y 242 (prohibición de declarar),
que exceptúan de tales limitaciones la situación en la que -como en el caso- la ligazón con la víctima es
más próxima -y de sangre- que la existente con el autor.
En cuanto a la imputación por no haber formulado la denuncia de lo sucedido, cabe destacar que la
obligación de denunciar a que alude el art. 277, inciso 1º, apartado "d", del Código Penal, debe
encontrar origen en la ley, a punto tal que los progenitores pueden no instar la acción penal, sin
perjuicio de que el Ministerio Público Fiscal actúe de oficio según lo prescripto en el art. 72 in fine del
Código Penal, como ha ocurrido en el caso.
De ahí que la situación de T. C. no se ajuste a la del sujeto que deba "promover la persecución penal de
un delito de esa índole", según lo prescripto por el cuño legal. Ello, claro está, más allá de la discusión
en torno a si el tipo aludido sólo abarca a los funcionarios públicos.
En cualquier caso, el bien jurídico aquí protegido ya ha sido vulnerado con el proceder de aquélla, en
tanto encomendó a la niña que proporcionara un relato distinto a la realidad.
Voto entonces por confirmar lo resuelto, aunque desechando la modalidad omisiva atribuida.El juez
Mariano A. Scotto dijo: En cuanto a la nulidad articulada contra las entrevistas realizadas a la menor S.
M. T. en los términos del art. 250 bis del Código Procesal Penal de la Nación, coincido con mi colega
preopinante en que no se advierte vicio alguno que afecte su validez, en tanto el acto no se trata de un
examen pericial que requiera la notificación previa establecida en el art. 258 del ordenamiento
procesal.
Es que a través de la "Cámara Gesell" se pretende interrogar a menores víctimas por medio de
especialistas, tales como psicólogos o eventualmente psiquiatras, de modo de evitar la revictimización
del niño o niña. Se ha sostenido con acierto que "El precepto, entonces, aparece como una correcta
opción para evitar no solo la revictimización y los temores que la situación en sí puede generar en el
niño [o niña], sino también el riesgo que significa que actos como los regulados puedan quedar en
manos de personas inexpertas, o que carezcan del manejo propio de un versado en la materia" (11).
No obstante, en el caso, igual se advierte que la defensa oficial fue notificada de la realización de la
entrevista especial (…), lo que despeja cualquier duda que pudiera abrigarse respecto de una afectación
al derecho de defensa, más aún si se repara que en oportunidad de ordenarse el acto, la causa tramitaba
bajo el procedimiento establecido en el art. 196 bis del ritual pues no contaba con un autor
individualizado.
Respecto a la materialidad del hecho investigado, también concuerdo con el juez Cicciaro en que las
pruebas incorporadas al legajo -a cuya valoración me remito en honor a la brevedad permiten tener por
acreditado, con el grado de certeza propio de esta etapa (art. 306 del código adjetivo), que E. T. C. ha
actuado sobre su hija, la menor S. M. T. de cinco años de edad, para que ésta, al participar en la
"Cámara Gesell", diera una explicación distinta sobre el origen de la lesión genital que presentaba y del
herpes diagnosticado, y así evitar que el abuso sexual con acceso carnal del que fuera víctima la niña le
sea atribuido a su concubino, W. R. A. con quien convivían.
En tal sentido cabe señalar que R. A. fue finalmente procesado -auto que a la fecha se encuentra firme-
a título de autor por el delito de abuso sexual con acceso carnal, cometido en perjuicio de una menor de
trece años de edad y aprovechándose de la situación de convivencia preexistente (arts. 45 y 119,
párrafos tercero y cuarto, inciso "f" del Código Penal).
También se descartó que la imputada hubiere intervenido en el mismo, y fue procesada por haber
inducido a su hija para favorecer a su concubino, y por haber omitido denunciar el hecho luego de su
ocurrencia, considerando el juez de la instancia anterior que el suceso era constitutivo del delito de
encubrimiento (art. 277 inc. 1º, apartado "b" y "d" en función del inciso 3º, apartado "a" por tratarse el
hecho precedente de un delito especialmente grave).
Con relación a la omisión de denunciar, independientemente de las distintas posturas doctrinales
existentes en derredor al alcance del tipo penal con relación a la autoría, coincido en que debe
descartarse su aplicación en tanto no existe obligación legal de denunciar.
Es que, por un lado, no surge de la Sección Segunda, Título 3 sobre patria potestad del Código Civil ni
de otra norma, un imperativo legal que obligue a los progenitores a denunciar en estos supuestos; y por
otro, en el caso especial de los delitos previstos en el art. 119 del Código Penal, el artículo 72, inciso 1º
del mismo texto, se reserva a las partes o sus representantes la posibilidad de instar la acción penal al
considerarlo un delito dependiente de instancia privada, lo que denota aún mas el carácter facultativo
frente a este tipo de hechos.
Así entonces, subyace como hecho imputado que T. C. actuó sobre su hija para que esta refiriera que la
lesión himeneal que presentaba se produjo mientras jugaba con una prima que la empujó, cayendo
sobre una madera con las piernas abiertas, y no por la acción del coprocesado.
Descarto desde ya que el hecho pueda encontrar adecuación típica en la instigación al falso testimonio.
En este sentido comparto con el voto que me precede, que la menor Tola no es propiamente una
testigo, pues se ha expresado sobre un hecho que la tuvo como damnificada y no sobre algo ajeno.
Tampoco es posible soslayar que la "Cámara Gesell", si bien desde un punto de vista técnico es el
medio idóneo para escuchar al menor que torna efectivo el cumplimiento del art. 3° de la Convención
sobre los Derechos del Niño, en realidad "se trata de una prueba sui generis, autónoma, compleja y
específica, que participa de algunos caracteres de la prueba testimonial y de otros de la prueba pericial,

76
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

pero que no alcanzan para categorizarla como sólo una de ellas" (12), lo que impide considerarlo como
presupuesto de un falso testimonio o su instigación.
Desde esa perspectiva además, es posible concebir que el acto implementado para entrevistar a la
víctima sea entendido como una de las "pruebas" a las que alude el artículo 277 inc. 1º, apartado "b"
del código de fondo. Sostiene la doctrina que "Los objetos a que se refieren estas finalidades son…las
pruebas, de cualquier naturaleza que fueren (cosas, documentos, etc.), incluidas las personas (p.ej., un
testigo, sin perjuicio de los delitos que contra su persona se puedan perpetrar…)" (13).
En este aspecto también se ha sostenido que "Las pruebas son las que van en pos de la demostración
del hecho o de la responsabilidad del autor o partícipe y pueden revestir una amplia gama de
posibilidades engarzada con la moderna tendencia de los códigos procesales, que en su mayoría siguen
el sistema de la sana crítica, adscriptos al régimen de la libertad probatoria. Prueba, en síntesis, abarca
todos los medios y no está limitada a cosas o documentos" (14).
Se ha indicado en similar sentido que "Nuñez, por su parte sostiene que los rastros del delito son
vestigios dejados por él (sangre derramada de la herida) mientras que las pruebas del delito son todos
los medios que pueden comprobar la existencia del hecho o la responsabilidad del autor o partícipe
(testimonios, documentos o indicios)" (15).
Dejada de lado la clasificación teórica entre favorecimiento real y personal, ya que si bien permite
ordenar genéricamente distintas situaciones por clases no abarca todos los escenarios posibles, es el
bien jurídico tutelado por la figura del encubrimiento el que permite incluir al acto incriminado a T. C.
bajo su postulado, pues "las conductas que están abarcadas…atentan contra el correcto funcionamiento
de la administración de justicia al constituir un obstáculo a su funcionamiento, ya que dificulta el
descubrimiento de los delitos y su persecución." (16).
Por otra parte, en mi opinión, también se verifica en el sub examen la existencia de la alteración que
proclama el tipo penal en estudio. Como ya señalé, el carácter especial de la declaración de la menor -
que demandó varias entrevistas- y la modalidad de interpretación de la misma a través de expertos en
psicología y psiquiatría ponen de manifiesto la afectación del acto mas allá del resultado.
Ello se pone de manifiesto en los distintos informes incorporados a la causa. Así, la licenciada en
psicología del Cuerpo Médico Forense D. E. Y. hizo saber en un primer momento que "En función de
lo expresado en el presente informe, y teniendo en cuenta que la niña no ha relatado, al tiempo que ha
negado de manera explícita, haber vivenciado acciones eventualmente abusivas de índole alguna, no es
posible aplicar los criterios de contenidos y parámetros relativos a la Entrevista de Psicología del
Testimonio, para determinar la verosimilitud de sus dichos…no es posible al momento de la presente
Declaración, afirmar o negar de manera fehaciente, que la niña hubiera atravesado situaciones de
índole displacentera" (…).
Posteriormente, la psicóloga S. G. C. del mismo cuerpo pericial indicó respecto de S. M. T. (…) que
"De sus verbalizaciones en torno de los sucesos investigados en la presente causa surgieron varios
relatos: en el primero (en el que manifestó la versión de las lesiones ocasionadas por una caída en una
cama), se constató un relato estereotipado, anticipándose inclusive a las preguntas, aportando una
cantidad de detalles que no eran requeridos, constatándose imprecisiones y contradicciones.
Luego, en la segunda entrevista, S. M. fue incluyendo verbalizaciones que involucran haber sufrido
conductas abusivas de índole sexual, indicando primeramente no saber el nombre de quien las causó,
para luego reseñar a su padre como el presunto ejecutor de las mismas. Asimismo indicó a su madre
como la que operó en ella influencias para distorsionar la versión aportada en diversas instancias
investigativas sobre el origen de las lesiones sufridas. Estos cambios en sus manifestaciones
discursivas revelan máxima conflictividad en torno del origen de los sucesos investigados en la
presente causa e incidencia de los adultos significativos a los fines de que la niña niegue la ocurrencia
de sucesos de índole sexual…" (…).
Las conclusiones del estudio citado, en cuanto a que "se constató en esta instancia…una multiplicidad
de versiones contrapuestas. Asimismo surgieron signos que su relato puede ser objeto de inducción de
parte de terceros.", demuestran que el accionar de la imputada afectó, de manera singular, el relato de
la menor.
De allí que pueda sostenerse que la alteración de la prueba se produjo, pues alterar es también
"…Perturbar, trastornar, alborotar. Conmover…causar inquietud" (17).
Y si bien comparto que esta modalidad de encubrimiento se trata de "un delito de pura actividad, de
peligro concreto e instantáneo, que se consuma con la realización de las acciones típicas descriptas, sin
que se requiera ningún resultado, como podría ser la frustración de la investigación." (18), entiendo que
por los efectos que la intervención de la procesada ha producido en el relato y vivencias de la menor,
en el sub lite también se alcanzó el grado de consumación necesario que exigen aquellos autores para
quienes se trata de un delito de resultado (19).
Por último, en cuanto a la exención de responsabilidad que establece art. 277, inciso 4º del Código
Penal, se debe recordar "…que estamos frente a una excusa absolutoria…se trata de situaciones en que
el legislador considera más útil tolerar el delito que castigarlo, aun conociendo que existe una
infracción y que hay personas que pudieran responder. Es por esto que nada tiene que ver el presente
instituto con las causas de justificación, ya que se está en presencia de un hecho punible…que el
Estado por cuestiones de política criminal decide eximir de pena a su autor." (20).
A poco de explorar en las razones de la misma, se encuentra que "Los vínculos de la sangre, el
matrimonio, el parentesco en general, el efecto derivado de la amistad y los nacidos en gratitud, han
determinado constantemente que se exceptuan del deber de denunciar los delitos y del de abstenerse de

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ayudar a los delincuentes bajo cualquiera de las modalidades del favorecimiento…contra la
persecución de la autoridad…" (21).
Si se tiene en cuenta que prima facie se constata la tipicidad y antijuridicidad de la conducta
reprochada a T. C., la determinación del alcance de esta eximente de responsabilidad debe ceñirse al
estado por el que transita este proceso, es decir la instrucción.
Para ello se debe tener presente que "Los límites entre interpretación admisible y analogía prohibida
son, con frecuencia, en vista de sus transiciones fluidas, de difícil determinación…La interpretación
tiene por objetivo la aclaración del sentido legal y, dado el caso, la adaptación de la ley a las exigencias
y criterios nuevos del presente. En cambio, el objetivo de la analogía consiste en llenar lagunas de la
ley ampliando y desarrollando un principio jurídico (nueva creación del derecho)." (22).
Al encontrarse incluidos en el inciso 4º distintos tipos de relaciones, lo que se debe desentrañar por
medio de la interpretación es si la misma procede cuando el encubridor tiene un vínculo consanguíneo
de primer grado con la victima frente a la amistad íntima -concubino- que lo une con el autor
encubierto.
Al respecto, entiendo que la misma no resulta de aplicación, y adhiero así a los fundamentos
desarrollados por el vocal preopinante y a los instrumentos internacionales invocados, en tanto que si
lo que se procura es mantener la cohesión familiar, cuando la víctima es la hija de la imputada no
puede afirmarse que se cumpla tal objetivo.
Por ello, voto por confirmar la resolución recurrida con los alcances señalados.
En consecuencia, esta Sala del Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el auto documentado a fs. (…),
punto dispositivo II, modificándose la calificación legal del hecho atribuido a E. T. C., pues constituye
el delito de encubrimiento en la modalidad prevista en el art. 277, inciso 1, apartado "b", agravado por
la circunstancia prevista en el inciso 3, apartado "a", del Código Penal".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Cicciaro, Scotto. (Prosec. Ad Hoc.: Sposetti).


c. 57.176/14, T. C., E.
Rta.: 25/03/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correc., Sala VII, c. 36.736, "Chaparro, Amado", rta: 27/03/2009. (2) Guía de
buenas prácticas para el abordaje de niños/as, adolescentes víctimas o testigos de abuso sexual y otros
delitos", JUFEJUS, Asociación por los Derechos Civiles y UNICEF, Septiembre 2013, p. 15. (3)
Alberto S. Milán, El delito de encubrimiento, Abeledo-Perrot, Bs. As., 1970, p. 143. (4) Carlos Creus y
Jorge Buompadre, Derecho Penal, Parte Especial, 7ma. Ed. actualizada y ampliada, Astrea, Bs. As.,
2007, t. 2, p. 377. (5) Sebastián Soler, Derecho Penal Argentino, TEA, Bs. As., 1978, t. 5, p. 263. (6)
Guillermo Yacobucci, El sentido de los principios penales, B de F, Montevideo-Buenos Aires, 2014, p.
431-432. (7) Alfredo J. Molinario, Los delitos, texto preparado y actualizado por Eduardo Aguirre
Obarrio, TEA, Bs. As., 1999, t. III, p. 433. (8) Guillermo Yacobucci, ob. cit., p. 442. (9) David Baigún,
David y Eugenio R. Zaffaroni, Código Penal y normas complementarias, Hammurabi, Bs. As., 2009,
comentario de Ricardo Carlos María Álvarez, t. 7, p. 893. (10) Miguel Bajo Fernández, El parentesco
en el Derecho Penal, Bosch, Barcelona, 1973, p. 220. (11) Guillermo R. Navarro y Roberto Raúl
Daray, Código Procesal Penal de la Nación, Análisis doctrinal y jurisprudencial, t. 2, 5ta. ed.
actualizada y ampliada, Hammurabi, Bs. As., 2013, p. 361/362. (12) Guillermo R. Navarro y Roberto
R. Daray, ob. cit., p. 361. (13) Carlos Creus, ob. cit., p. 355. (14) Edgardo Alberto Donna, Derecho
Penal, Parte Especial, t. III, Rubinzal-Culzoni, Bs. As., 2001, p. 490. (15) Andrés J. D'Alessio y Mauro
A. Divito, Código Penal de la Nación, Comentado y Anotado, Parte Especial, t. 2, Bs. As., 2011, p.
1395. (16) Edgardo A. Donna, ob. cit., p. 469. (17) Manuel Osorio, Diccionario de Ciencias Jurídicas,
Políticas y Sociales, Heliasta, Bs. As., 1990, p. 51. (18) Andrés J. D'Alessio y Mauro A. Divito, ob.
cit., p. 1396. (19) Edgardo A. Donna, ob. cit., p. 488. (20) Edgardo A. Donna, ob. cit., p. 520. (21)
Alberto S. Milán, El delito de encubrimiento, Abeledo Perrot, Bs. As., 1970, p. 199. (22) Johannes
Wessels, Derecho Penal, Parte General, Depalma, Bs. As., 1980, p. 16.

ENCUBRIMIENTO.

Agravado por el ánimo de lucro. Imputado a bordo de motocicleta sustraída, sin documentación
relativa a la titularidad y con patente sustituida por una correspondiente a otro rodado. Receptación o
adquisición de la moto bajo el conocimiento que provenía de un delito. Ánimo de lucro: posibilidad de
uso o cambio de los objetos receptados satisface el fin lucrativo exigido. Confirmación. Disidencia
parcial: tenencia que no basta para sostener que fue recibido con un propósito lucrativo. Figura no
agravada. Encubrimiento simple.

Fallo: "(…), convoca a la Sala el recurso de apelación interpuesto por la defensa oficial contra del auto
documentado a fs. (…), punto I, en cuanto se decretó el procesamiento de J. C. F. V..
El juez Mariano A. Scotto dijo: Se le atribuye al nombrado el haber adquirido y/o recibido a sabiendas
de su procedencia ilícita y con ánimo de lucro la motocicleta marca "Zanella", modelo ZR125, dominio
X, de propiedad de P. A. Á. (…), quien relató que el 11 de enero de 2014, aproximadamente a las
18:15, la dejó estacionada en la intersección de la avenida R. y la calle R. I. de esta ciudad y, al
regresar al lugar unos minutos más tarde, notó que se la habían sustraído (…).

78
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

De adverso a los cuestionamientos esbozados por la defensa, los elementos probatorios agregados al
legajo justifican el reproche dirigido contra el encausado, al menos, con el convencimiento que exige
esta etapa del proceso (art. 306 del Código Procesal Penal), en orden a homologar el auto apelado.
Ello, por cuanto F. V., según se desprende de los dichos juramentados del gendarme C. G. que lo
detuvo (…), fue hallado usando la motocicleta que había sido sustraída varios meses antes, sin la
documentación relativa a su titularidad y con la patente sustituida por una correspondiente a otro
motovehículo, sobre el que, a diferencia de aquélla, no pesaba ningún pedido de secuestro (…).
En el contexto probatorio reseñado, el descargo que realizara el encausado en su declaración
indagatoria -al que se remitió en sus respectivas ampliaciones- en cuanto a que la moto la habría
recibido de un amigo, del que sólo aportó su nombre de pila, más sin la respectiva documentación; no
logra enervar la imputación que se le dirige.
En consecuencia, puede inferirse que el procesado habría adquirido o receptado la motocicleta bajo el
conocimiento de que provenía de un delito, y que ello habría sido con ánimo de lucro, porque la
posibilidad de uso o de cambio de los objetos receptados satisface el fin lucrativo exigido en el art.
277, inciso 1°, apartado "c" e inciso 3°, apartado "b", del Código Penal (1).
El juez Mauro A. Divito dijo: Aunque adhiero a las consideraciones efectuadas por el juez preopinante
acerca de la acreditada intervención en el hecho de J. C. F. V., entiendo que lleva razón la defensa al
criticar el encuadre legal seleccionado en la instancia anterior.
Ello, porque respecto a la calificante del artículo 277, inciso 3°, apartado "b", entiendo que la mera
tenencia de un bien de origen ilícito no basta para sostener que fue recibido con un propósito lucrativo,
es decir, con el fin de obtener una ganancia apreciable en dinero.
Es que, tal como sostuve en otras ocasiones, en "el delito de encubrimiento, el mentado ánimo de lucro
-otrora exigido en la figura básica- constituye un elemento subjetivo del tipo calificado (CP, art. 277,
inc. 3° "b"), similar al previsto en otras disposiciones legales -CP, arts. 22 bis, 126 y 268 (1)que supone
una ultraintención orientada al logro de un beneficio económico y que -por ende- no debe reputarse
satisfecho -simplemente- con la realización de la acción típica de la figura básica" (2).
En conclusión, como en el caso la adquisición o recepción de la motocicleta hurtada no aparece guiada
por una finalidad comercial que implique el ánimo de lucro típico, a falta de probanzas que acrediten
este último, el accionar del imputado debe ser encuadrado en la figura básica del art. 277, inc. 1°,
apartado "c", del Código Penal.
Así voto.
El juez Juan Esteban Cicciaro dijo: Tras haber escuchado la grabación de la audiencia y sin preguntas
que formular, adhiero al voto del juez Scotto.
Por ello, esta Sala del Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR la resolución documentada a fs. (…), en
cuanto fuera materia de recurso".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Divito (en disidencia parcial), Cicciaro, Scotto. (Sec.: Besansón).
c. 56.188/14, FLORES VILLEGAS, Juan Carlos.
Rta.: 10/04/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correc., Sala VII, c. 450/11, "Páez, Hugo Javier", rta: 21/09/2011 y c.
14432/13, "Müller, Leonardo Daniel", rta: 03/05/2013. (2) C.N.Crim. y Correc., Sala VII, c. 39.991
"Yorio, Marcelo", rta: 29/11/2010 y c. 14432/13 "Müller, Leonardo Daniel", rta: 03/05/2013.

ENCUBRIMIENTO.

Procesamiento. Imputados que fueron condenados por ser miembros de una asociación ilícita.
Ausencia de afectación al principio ne bis in idem. Actual procesamiento por hechos que habrían
cometido en el marco de la asociación criminal. Asociación ilícita: delito autónomo de los delitos que a
través de ella cometan sus integrantes. Confirmación. Disidencia parcial: Afectación del ne bis in idem
respecto de dos hechos que efectivamente importaron concreción del específico objetivo perseguido
por la organización criminal. Exclusión. Confirmación parcial.

Fallo: "(…) La defensa de Á. F. T. interpuso recurso de apelación contra la decisión extendida a fs.
(…), puntos I y III, en cuanto se dispuso el procesamiento del nombrado en orden al delito de
encubrimiento reiterado -hechos 1 y 2- y se trabó embargo por la suma de $ 20.069,67.
La asistencia técnica de M. A. S. impugnó el auto documentado a fs. (…), puntos IV y VI, en cuanto se
dispuso el procesamiento de su pupilo procesal en orden al delito de asociación ilícita, en calidad de
miembro y se trabó embargo por la suma de $ 240.069,67.
Por su parte, la defensa de E. A. V. R. recurrió el punto VII de la resolución referida, que dispuso el
procesamiento del nombrado en orden al delito de encubrimiento reiterado -hechos 4, 5, 6, 7 y 8-.
En cuanto al recurso de apelación interpuesto por la defensa de M. A. S., corresponde declararlo
desierto pues la letrada no concurrió a la audiencia oral (artículo 454, segundo párrafo del Código
Procesal Penal).
Luego de celebrarse la audiencia oral, el Tribunal se encuentra en condiciones de resolver.
Los jueces Juan Esteban Cicciaro y Mariano A. Scotto dijeron: I. Se le atribuyeron a A. F. T. los
siguientes hechos: Haber receptado, conociendo su procedencia ilícita, un disco rígido externo, en una
fecha aun no determinada pero comprendida dentro del período que va desde el mes de agosto de 2011

79
-momento aproximado en que se produjo la sustracción a su propietario, F. P.- y el día 29 de mayo de
2012 (hecho identificado como "1").
Haber receptado, conociendo su procedencia ilícita, un disco rígido portátil marca "Samsung", en una
fecha aún no determinada pero comprendida dentro del período que va desde el día 9 de abril de 2012 -
momento en que se produjo la sustracción a R. O. M.- y el 29 de mayo de 2012 (hecho identificado
como "2").
II. A E. A. V. se le endilgaron los siguientes sucesos: Haber receptado conociendo su procedencia
ilícita, la netbook marca "HP" Mini 110-1020LA, de color negra, de propiedad de M. L. S., en una
fecha aún no determinada pero comprendida dentro del período que va desde las 13:30 del 28 de marzo
de 2012 -momento aproximado en que se produjo la sustracción a M. L. S.- y el 29 de mayo del mismo
año (hecho identificado como "4").
Haber receptado, conociendo su procedencia ilícita, el disco extraíble marca "Samsung",
P/N:HXMU025DC/GB, de color negro, propiedad de J. L. G., en una fecha aún no determinada pero
comprendida dentro del período que va desde las 13:30 del 26 de abril de 2012 -momento aproximado
en que se produjo la sustracción a J. L. G.- y el 29 de mayo de 2012 (hecho identificado como "5").
Haber receptado, conociendo su procedencia ilícita, el teléfono celular marca "Samsung", color negro,
con número de IMEI 25/9568 de propiedad de O. H. C., en una fecha aún no determinada pero
comprendida dentro del período que va desde el mediodía del 26 de abril de 2012 -momento
aproximado en que se produjo la sustracción a O. H. C.- y el 29 de mayo de 2012 (hecho identificado
como "6").
Haber receptado, conociendo su procedencia ilícita, el teléfono celular marca "LG", color negro, con
número de IMEI 353545-04-953592-2 propiedad de A. E. P., en una fecha aún no determinada pero
comprendida dentro del período que va desde el 5 de abril de 2012 -momento aproximado en que se
produjo la sustracción a A. E. P.- y el 29 de mayo de 2012 (hecho identificado como "7").
Haber receptado, conociendo su procedencia ilícita, el teléfono celular marca "LG", color negro, con
número de IMEI 353545-04-357431-5 propiedad de M. S. H., en una fecha aun no determinada pero
comprendida desde el 26 de junio de 2011 -momento aproximado en que se produjo la sustracción a M.
S. H.y el 29 de mayo de 2012 (hecho identificado como "8").
III. Tanto al recurrir como en el marco de la audiencia oral, las defensas de T. y V. R. sostuvieron que
en el caso del sub examen se violó el principio constitucional del ne bis in idem, pues a su entender los
hechos por los cuales fueran indagados y procesados sus defendidos en esta causa no resultan distintos
de aquellos por los cuales ya se los condenó.
Al respecto, mediante sentencia del 27 de febrero de 2014, el Tribunal Oral en lo Criminal N° 10, en el
marco de la causa N° 3953/3954/4129/4184, condenó a E. A. V. R. como penalmente responsable del
delito de asociación ilícita, en su calidad de miembro, en concurso real con hurto, en calidad de
coautor, a la pena de tres años y tres meses de prisión (…).
En el mismo fallo Á. F. T. fue condenado a la pena de tres años de prisión por considerarlo penalmente
responsable del delito de asociación ilícita, en calidad de miembro (punto VII de la decisión
mencionada).
En estas actuaciones, T. y V. R. fueron procesados en orden al delito de encubrimiento reiterado, el
primero por dos hechos -I y II- y el segundo por cinco episodios -IV, V, VI, VII y VIII (artículo 277,
inciso 1°, apartado "c" del Código Penal).
Sobre la garantía invocada, se sostuvo que "para que la regla funcione y produzca su efecto impediente
característico la imputación tiene que ser idéntica, la imputación es idéntica cuando tiene por objeto el
mismo comportamiento atribuido a la misma persona (identidad de objeto = eadem res). Se trata de
impedir que la imputación concreta, como atribución de un comportamiento determinado
históricamente, se repita, cualquiera que sea el significado jurídico que se le ha otorgado, en una y otra
ocasión, el nomen iuris empleado para calificar la imputación o designar el hecho" (1).
En esa inteligencia, se entiende que no existe afectación alguna al principio del ne bis in idem, pues en
la causa que tramitó ante el Tribunal Oral en lo Criminal N° 10 los encausados fueron condenados por
ser miembros de una asociación ilícita, mientras que aquí se investigan los hechos que habrían
cometido los imputados en el marco de dicha asociación criminal.
Al respecto, cumple anotar que la asociación ilícita está tipificada como un delito autónomo o
independiente de los delitos que a través de ella cometan sus integrantes.
En ese sentido, se ha sostenido que "la pena que corresponde a esta figura se aplica con independencia
de la que pueda corresponder al autor por los delitos cometidos como miembro de la banda; por los
cometidos por él, sea como autor o como partícipe; pero no por todos los cometidos por la
agrupación…Dicho en pocas palabras, la asociación ilícita es un delito autónomo" (2).
Por lo expuesto, corresponde homologar el auto puesto en crisis.
IV. En lo tocante al monto justipreciado a título de embargo por la señora juez de grado respecto del
imputado T., la suma cuestionada resulta adecuada para cubrir las exigencias previstas en el artículo
518 del Código Procesal Penal, esto es la indemnización civil y las costas procesales, incluyendo estas
últimas el pago de la tasa de justicia, los honorarios de la abogada defensora como también los demás
gastos que se hubieren originado por la tramitación de la causa (artículo 533 ibidem).
El juez Mauro A. Divito dijo: Frente al planteo formulado por las defensas, en cuanto alegan una
violación al principio ne bis in idem, debo recordar que en ocasiones anteriores he sostenido que, bajo
ciertos presupuestos, el delito cometido por un miembro de una asociación ilícita no debe ser calificado
como un hecho independiente de ésta, en los términos del art. 55 del Código Penal (3).

80
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

Ese criterio, según entiendo, es aplicable -en particular- en los casos en los que el delito respectivo
importa la concreción del específico objetivo que persigue la organización criminal, de modo tal que si
aquél contribuye a mantener el estado de antijuridicidad que caracteriza a ésta, resultaría dable sostener
la existencia de un concurso ideal entre las figuras (4).
Desde esa perspectiva, destaco que del fallo dictado por el Tribunal Oral en lo Criminal nro. 10 se
extrae que ambos imputados fueron allí condenados como miembros de una asociación ilícita que
funcionó, cuanto menos, desde el 31 de julio de 2011 y hasta comienzos del mes de mayo de 2012,
"con la finalidad de perpetrar robos en viviendas particulares y aprovechando la ausencia de sus
moradores…", en la que el aporte de T. "consistía en la comercialización de los objetos ilícitamente
obtenidos…", mientras que V. R. participó manteniendo comunicaciones tanto con los "responsables
de proveeer a la banda medios de transporte" como con las personas a las que "ofrecía objetos para
vender que la organización criminal obtenía de su proceder ilícito…" (cfr. la descripción del hecho IV
realizada en la sentencia).
Las circunstancias reseñadas impiden identificar los fines de dicha asociación (como se dijo: perpetrar
robos en viviendas particulares) con los sucesos de receptación que aquí se atribuyen a T., que -como
se reconstruyó en la resolución apelada (…)- han importado, concretamente, actos de encubrimiento
respecto de sendas sustracciones, cometidas por autores ignorados, en la vía pública, de elementos que
pertenecían a los conductores de dos automóviles que se detuvieron a cambiar un neumático -hechos 1
(damnificado F. P.) y 2 (damnificado R. M.)Idénticas consideraciones proceden en torno de los hechos
5 (damnificado J. L. G.), 6 (damnificado O. C.) y 7 (damnificado A. P.) que se atribuyeron a V. R. (cfr.
fs. 2544 y vta.).
No sucede lo mismo, en mi opinión, con los hechos 4 (damnificada M. S.) y 8 (damnificada M. H.),
toda vez que tanto sus características como las fechas en que habrían acaecido los respectivos
apoderamientos conducen razonablemente a inferir, más allá de que no se conocen sus autores, que la
posterior receptación de los bienes sustraídos habría respondido a la actividad que V. cumpliera como
miembro de la organización criminal, por la que ya ha sido juzgado y condenado.
En función de lo expuesto, me inclino en definitiva por homologar el procesamiento de los imputados,
excepto en lo que concierne a los hechos atribuidos a V. bajo los nros. 4 y 8, ya que por las
consideraciones efectuadas entiendo que su inclusión en el objeto procesal importaría una afectación al
principio "ne bis in idem".
Con la aclaración, entonces, de que corresponde excluir esos dos hechos de la imputación formulada a
V., adhiero a la solución propuesta por los jueces Cicciaro y Scotto.
Por ello, y sin perjuicio de lo que se resuelva en el incidente de prescripción respecto de Á. F. T. que
corre por cuerda, esta Sala del Tribunal RESUELVE: I. DECLARAR DESIERTO el recurso de
apelación interpuesto por la defensa de M. A. S. contra el auto documentado a fs. (…), puntos IV y VI.
II. CONFIRMAR el auto documentado a fs. (…), puntos I, III y VII, en cuanto fuera materia de
recurso".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Divito (en disidencia parcial), Cicciaro, Scotto. (Prosec.: Larcher).
c. 34.922/11, TADEY, Angel Fernando y otro.
Rta.: 16/06/2015

Se citó: (1) Julio B. J. Maier, Derecho Procesal Penal I, Fundamentos, 2da. ed., 2da. reimpresión,
Editores del Puerto, Bs. As., 2002, p. 606; C.N.Crim. y Correc., Sala VII, c. 51.724/2013, "R. S., K.
M.", rta: 16/12/2013. (2) Carlos Fontan Balestra, y Guillermo A. Ledesma, Tratado de Derecho Penal.
Parte Especial, t. III, La Ley, Bs. As., 2013, p. 624. (3) C.N.Crim. y Correc., Sala VII, c. 1271/12,
"Quinteros, Teresita del Carmen y otros", rta: 17/10/2012. (4) Patricia S. Ziffer, El delito de asociación
ilícita, Ad-hoc, Bs. As., 2005, ps. 114 y ss.

ENTREGA DE RODADO.

Rechazada. Bien pasible de decomiso. Titular registral del vehículo que no reviste la calidad de
imputado (art. 23 del C.P.). Revocación. Procedencia en el mismo carácter que lo detentaba con
anterioridad.

Fallo: "(…) II. Disentimos con los argumentos expuestos por el juez de grado en el auto cuestionado,
motivo por el cual habremos de revocar la resolución impugnada.
Conforme a las constancias escritas que tenemos a la vista, el titular registral del vehículo cuya
devolución se reclama, es G. Ch. (ver título de automotor), a quien no se le asigna vinculación alguna
con el hecho que se investiga (ver requerimiento fiscal de fs. (…) y auto de incompetencia de fs. (…).
Al respecto, la doctrina establece que el decomiso previsto en el artículo 23 del CP procede "salvo la
hipótesis de su pertenencia a un tercero no responsable [… dado que debe su imposición respetar el
principio de identidad entre el autor del delito y el condenado evitando comprometer en el castigo la
inocente situación de terceros ajenos al hecho, hipótesis que importaría una violación de la garantía
consagrada por el art. 18 de la CN]…" (1).
Y que "…la pena no procedía en el caso de que los instrumentos o efectos pertenecieran a terceros no
responsables… Si el decomiso actúa como un castigo impuesto en su patrimonio a quien ha delinquido,
debe recaer en cosas que le pertenezcan y, además, a cuyo respecto terceros inocentes no posean

81
derechos legítimos, ya que lo contrario importa el quebrantamiento liso y llano de la personalidad de la
pena. Ésta en manera alguna puede alcanzar directamente el patrimonio de terceros no
implicados…"(2).
(….) teniéndose en cuenta que Ch. no reviste la calidad de imputado y que es el titular del bien
reclamado, su restitución definitiva es procedente.
(…) el tribunal RESUELVE: REVOCAR el auto de fs. (…) y disponer la restitución del automóvil
(…) a G.M.CH. en el mismo carácter que lo detentaba con anterioridad".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, Pinto, Divito. (Sec.: Raña).


c. 58.613/14, JAICO, Elin A. y otros.
Rta.: 04/03/2015

Se citó: (1) Navarro, Guillermo Rafael - Daray, Roberto Raúl "Código Procesal Penal de la Nación.
Análisis doctrinal y jurisprudencial". Ed. Hammurabi, José Luis Depalma Editor, Bs. As., 2004, Tomo
2, pág. 1298 y ss. (2) Álvero, Marcelo, "Reformas Penales Actualizadas. Hasta la ley 26.087", Editorial
Rubinzal - Culzoni, 1° edición, Santa Fe, 2006, pág. 81 y 82; en donde se citó a Carrera, Daniel "El
decomiso del artículo 23 del Código Penal y el derecho de terceros inocentes. En la doctrina de la
Corte Suprema de Justicia", en J. A. Doctrina 1972-290/2).

ESTAFA

En concurso real con uso de documento privado falso. Procesamiento. Vendedor de un local de
telefonía que utilizaba los datos personales de los clientes para simular ventas y así obtener ganancias
en su beneficio. Perjuicio patrimonial para la empresa. Elementos de prueba suficientes. Confirmación.

Fallo: "(...) I Se imputa a A. G. E. T. haber perjudicado patrimonialmente a la empresa "T. P.".


Puntualmente, se le atribuye haber gestionado ilícitamente la adquisición de líneas telefónicas y la
prestación del servicio de "modem" inalámbrico utilizando datos referentes a clientes que concurrían al
local "L.G.L. C. S.A.", ubicado en el interior del "Shopping D." de esta ciudad, donde se desempeñaba
como vendedor.
II El impugnante cuestiona el temperamento adoptado en la instancia anterior por entender que las
constancias del sumario impiden atribuirle responsabilidad a su pupilo.
En este sentido, destacó que A. B., F. G. G., L. P. D. L., H. S., M. D. Á. T. C., C. A. P. y M. V. C.
adujeron en sus respectivas declaraciones "(fs. ...)" no estar en condiciones de reconocer al vendedor
que los atendiera en el comercio donde se produjeron las maniobras mediante la utilización de sus
referencias personales y documentos de identidad. Tal extremo, sin embargo, no puede merecer la
relevancia que intenta dársele.
En primer lugar, el desconocimiento de los clientes acerca del contenido de las solicitudes de servicios
confeccionadas a su nombre, así como de las rúbricas allí insertas, encuentra categórico sustento en las
experticias caligráficas de "(fs. ...)".
En esta línea, obran también en autos las copias de las declaraciones juradas por el reclamo en la
contratación de una línea desconocida, efectuadas por los nombrados B. y S. y remitidas por la empresa
damnificada "(ver fs. ...)".
Sentado ello, cobra particular relevancia lo expresado por C. T., apoderado de la agencia oficial para la
cual trabajaba T. al momento de las "altas" de los servicios cuestionados, por cuanto hizo saber que en
todas las operaciones apócrifas intervino por el comercio el imputado "(ver fs. ...)".
Así, la ajenidad en el hecho proclamada se ve desvirtuada por los elementos antes mencionados,
resultando posible concluir que el encausado perjudicó patrimonialmente a la compañía "Telecom
Personal" para, de este modo, obtener un beneficio pecuniario por ventas inexistentes, mediante el
modus operandi ya descripto.
En cuanto al argumento volcado por la defensa durante el desarrollo de la audiencia, aduciendo que su
pupilo sólo se limitó a entregar los "chips" correspondientes a las líneas telefónicas y los aparatos tipo
"modem" a los clientes sin ningún tipo de respaldo documental, no habrá de ser admitido ya que no
puede concebirse tal informalidad en una empresa de la magnitud que reviste la damnificada.
En consecuencia, el tribunal RESUELVE: Confirmar el auto de "(fs. ...)" en todo cuanto fuera materia
de recurso. (...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala IV, Seijas, González. (Prosec.Cám.: Pereyra).


c. 26.362/12, TELO, Alan G. E.
Rta.: 19/02/2015

ESTAFA

1) Procesamiento. Estafas reiteradas (10 hechos). Imputación dirigida a cuatro personas. Turistas que
no pudieron ingresar a un estadio de fútbol pese haber pagado por el servicio a una imputada,
representante de una empresa de turismo. Elementos de prueba suficientes para sostener que actuaron
en el hecho tres de los imputados. Despliegue engañoso. Perjuicio patrimonial. Confirmación. 2)

82
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

Imputada representante técnica de la empresa: Necesidad de profundizar la investigación para


determinar si intervino en los hechos. Revocatoria. Falta de mérito.

Fallo: "(...) La imputación que pesa sobre Y. I. encuentra sustento en las versiones de los damnificados,
quienes además de indicar que ella coordinaba el contingente de turistas que no pudo ingresar al
estadio del Club Atlético Boca Juniors pese haber pagado por el servicio a la empresa que
representaba, también sostuvieron que habría sido la encargada de percibir parte de dichos importes y
de ofrecerles el servicio en los días previos al evento.
Lo expuesto, adunado a que la firma denominada Sonido Urbano no se encuentra reconocida como
vendedor autorizado de entradas del club (cfr. fs. ...), y a que los importes abonados no les habrían sido
reintegrados a los damnificados ni siquiera a los que saldaron en el lugar la diferencia que se les
requirió para acceder a pases de mejor categoría , persuaden al tribunal acerca de la concurrencia de un
despliegue engañoso que determinó el desplazamiento patrimonial perjudicial de los denunciantes en
los términos que se le atribuyen a la nombrada.
De otra parte, A. C. P. S. y su esposa expusieron que mientras aguardaban junto a los restantes
damnificados frente al estadio, I. comenzó a hablar con G. C., a quien se dirigía como su jefe, y poco
después abordaron juntos una camioneta en la que ella le hizo un "pasamano de dinero", circunstancia
que condice con el hecho de que no se secuestró suma alguna en su poder, según precisó el oficial que
la detuvo ese día (cfr. fs. ...). Lo expuesto rebate la supuesta ajenidad argüida por C. al ofrecer su
descargo.
Por lo demás, más allá de destacar que M. B. V. es la titular registral de la empresa (cfr. fs. ...), cierto
es que ella misma reconoció desempeñarse laboralmente allí (si bien describiéndose como una mera
empleada de I.), y que en algunas ocasiones había llenado los cupones que se otorgaban a los clientes
que contrataban el servicio de pases a espectáculos deportivos, circunstancia que, al menos con la
provisoriedad que caracteriza esta etapa del proceso, autoriza a la homologación de su procesamiento
para habilitar la realización del debate oral donde habrá de discutirse ampliamente su concreto aporte
en los hechos.
Distinta habrá de ser la solución respecto de M. V. M., pues si bien se encuentra registrada como
representante técnica de la empresa involucrada, hasta el momento no ha sido establecida su
intervención en ninguno de los negocios cuestionados, así como tampoco que hubiera estado presente
cuando sus consortes de causa los llevaban a cabo, circunstancia que impone profundizar la encuesta
en este aspecto.
En consecuencia, el tribunal RESUELVE: I. Confirmar parcialmente el auto de (fs. ...) en cuanto
dispuso el procesamiento de Y. I., M. B. V. y G. J. C. II. Revocar parcialmente el decisorio recurrido y
disponer la falta de mérito para procesar o sobreseer a M. V. M. respecto de los hechos por los que
fuera indagado (Art. 309 del C.P.P.N.). (...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala IV, Seijas, González Palazzo, González. (Sec.: Uhrlandt).
c. 41.990/11, MOYANO, Maria y otros.
Rta.: 14/04/2015

ESTAFA

En concurso real con amenazas coactivas. Procesamiento. Imputados que engañaron a la víctima
logrando que ésta les entregara sumas de dinero a cambio de interceder para lograr que obtuviera la
ciudadanía italiana. Elementos de prueba suficientes. Expresiones vertidas con posterioridad aptas para
amedrentar. Tipicidad. Confirmación.

Fallo: "(...) I. La materialidad del suceso y la participación de los encartados se encuentra acreditada,
con la convicción que la instancia requiere, mediante las declaraciones de la damnificada, M. G. A. G.
(fs. ... y ratificación de fs. ...) quien brindó un pormenorizado relato respecto de la maniobra
desplegada por Ll. y M. que, mediante ardid y engaños, la indujeron a error, producto de lo cual sufrió
un importante perjuicio patrimonial.
En efecto, alegando falsos títulos y contactos (entre ellos, que M. era "cónsul ante las Naciones
Unidas"), le aseguraron que podían lograr que el trámite que originariamente había efectuado G. con el
objeto de obtener la ciudadanía italiana, se "reencausara" asegurándole el éxito de la gestión. A raíz de
ello, en diversas oportunidades, la damnificada abonó sumas de dinero a Ll. que, si bien no fueron
documentadas mediante la entrega de un recibo (por la relación de confianza que se había generado), se
encuentran acreditadas a partir del "e mail" remitido por la encartada (ver detalle de los costos por el
"trámite" de fs. ... y datos de la cuenta bancaria de fs. ...) y la respuesta de (fs. ...) a ese respecto.
Por lo demás, de la lectura íntegra de todo el intercambio escrito se advierte sin hesitación que la
pretensión dineraria había sido satisfecha, tal como afirmara G.
Entre los artilugios que desplegaron los imputados, debidamente detallados por la jueza de grado, se
encuentra una carta cuya confección Ll. atribuyó al Papa Francisco (ver impresión de fs. ... de donde
surge "…al legitimo Cittadinanza Italiana per la Famiglia G.") mediante la cual el sumo pontífice,
según el e mail de (fs. ...) que le exhibiera la encartada, recomendaba que se le diera acogida favorable
a la petición de ciudadanía.

83
Los dichos de la damnificada encuentran respaldo en la documental que aportó (cfr. fs. ...) que consiste
en la impresión del frondoso intercambio de correos electrónicos entre las partes, así como también de
instrumentos relativos a la presunta obtención de la ciudadanía italiana en beneficio de G. y sus
familiares directos (ver fs. ...), y de los poderes que otorgaron a nombre de M. (fs. ... donde se advierte
que el prevenido se atribuye la calidad de "Licenciado"). El carácter fidedigno de la prueba brindada
por la denunciante está fuera de duda desde que se corresponde con la colectada a raíz del allanamiento
realizado en el domicilio particular de los imputados (acta de fs. ... y constancias impresas de fs. ...).
Frente a las evasivas que comenzaron a evidenciar los encausados ante los requerimientos de G., atento
al tiempo transcurrido sin que obtuviera la prometida ciudadanía y los problemas que ello podría
acarrearle a sus hijos, que se hallaban viviendo en el continente europeo, Ll. intentó convencerla de que
no "averiguara" nada por su cuenta ni intentara llevar a cabo alguna gestión pues "todo se va a quedar
congelado y existe riesgo de que presuman que hay fraude" ("e mail" remitido por la prevenida, cfr. fs.
...).
Por otro lado, con relación a las amenazas coactivas proferidas por el causante ("no sabés con quién te
metiste, mi hermano es el juez penal de San Martín"), al ponderar el cúmulo de probanzas colectadas,
analizadas en forma global, no cabe dudar de su versión (art. 241 del CPPN) y resultan suficientes,
prima facie, para tenerlas por acreditadas. En este orden, si bien de forma indiciaria, el "e mail"
remitido por M. (ver fs. ...), que da cuenta de haber mantenido una conversación con G. que no
concluyó en buenos términos, sustenta la denuncia con relación a las frases intimidantes.
Por lo aquí expuesto y los restantes argumentos desarrollados por la magistrada en el auto impugnado,
los que compartimos, corresponde homologar la decisión recurrida.
(…) Por consiguiente, como surge de las consideraciones precedentes, el Tribunal RESUELVE:
Confirmar el auto de (fs. ...) en todo cuanto fue materia de recurso. (...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala IV, Seijas, González Palazzo, González. (Sec.: Bloj).
c. 3.770/14, LLANOS, Maria Claudia y otro.
Rta.: 20/04/2015

ESTAFA.

Desestimación por inexistencia de delito. Compraventa en un comercio a la calle, con adelanto del total
del importe, sin entrega del bien comprado. Comercio que cerró al poco tiempo. Titular del comercio
mencionado en la factura entregada fallecido. Imposibilidad de descartar una posible estafa. Necesidad
de profundizar la investigación. Revocación.

Fallo: "(...) S.V.B. refirió que el 19 de febrero de 2014 adquirió en el comercio "M. S.", sito en la
avenida C. xx, local (...), de esta ciudad, una controladora marca (...) por la suma de (...) pesos ($ ...).
Dijo también que a pedido de quien allí la atendió, A. H., realizó el pago por adelantado y en efectivo,
pese a que el equipo no le fue entregado, en tanto debían previamente abonarse ciertos aranceles en la
Aduana dado que procedía del exterior.
Tras haber efectuado varios reclamos desde entonces a H., en el mes de junio de ese año encontró el
local vacío y cerrado, y nadie respondió a los llamados que hizo al número telefónico que le había sido
aportado. A su vez, averiguó que N. I. M. -cuyo nombre figura en el encabezado de la factura que le
fue emitida por la operación- ya se encontraba fallecida para entonces "(fs. ...)".
A partir de tal descripción, no puede descartarse en este estado embrionario del proceso y sin la
pertinente investigación, que el evento sufrido por B. pudiera reportar a la figura de estafa, prevista en
el artículo 172 del Código Penal.
El hecho de que la operación se haya llevado a cabo en un comercio de venta al público, no traduce
necesariamente que deba reputarse como un mero incumplimiento contractual.
Las circunstancias apuntadas por B., esto es, que el negocio cerrara al poco tiempo de entregada la
suma de dinero que se le requirió, y que quien lo atendía era una persona distinta de aquella que figura
en la factura, la que a su vez se encontraba fallecida, impiden descartar que el imputado se hubiera
valido de dicho comercio para obtener un rédito económico bajo promesa de entrega de mercadería, a
sabiendas de que no podría cumplir.
Por tanto, deben investigarse los extremos denunciados, puntualmente, con la obtención del testimonio
del propietario del local n° (...), para establecer su vínculo con A. H. y N. I. M.
En razón de lo expuesto, se RESUELVE: REVOCAR el auto de "(fs. ...)", punto "(...)", en cuanto fue
materia de recurso. (...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala IV, Seijas, González Palazzo. (Prosec.Cám.: Fuertes).


c. 35.551/14, MENDEZ, Nora I.
Rta.: 05/03/2015

ESTAFA.

Sobreseimiento. Compra formalizada en "Mercadolibre" por clientes que sabían que no estaban
autorizados a ingresar a un espectáculo y que pagaron un precio superior al oficial por los tickets que
resultaron ser apócrifos. Hecho típico. Revocación.

84
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

Fallo: "(…) El representante del Ministerio Público Fiscal recurrió en apelación los puntos I y II del
auto luciente a fs. (…) por los que se dispuso el sobreseimiento de G. G. S. y W. G. R. (…), la
circunstancia de que el sitio de Internet "Mercadolibre" no permita la venta de entradas a espectáculos
a quienes no se encuentran autorizados para ello, no torna ilegal la compra formalizada por los clientes
que pactaron el pago de un precio superior al oficial, en el entendimiento de que los tickets eran
originales.
Al respecto, cabe evocar que en su caso "la existencia de un propósito inmoral y antijurídico en la
víctima (comprar una máquina de hacer moneda) no destruye la existencia de la estafa con todos sus
elementos" (1).
Asimismo, se sostuvo que sea por la concepción del patrimonio como conjunto de valores económicos
jurídicamente reconocidos o por vía de la teoría del concepto personal del patrimonio, se ha entendido
que el hecho de que el perjudicado y víctima de la defraudación pretendiera con el acto de disposición
patrimonial realizar un acto ilícito, ello no impide, a título de estafa, atribuirlo a quien puso en marcha
el engaño idóneo (2).
Por lo demás, la oferta de entradas del sub examen tampoco se encontraba tipificada en el artículo 91
del Código Contravencional de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires a la fecha de los hechos y la
prohibición de su comercio surge a partir de lo establecido por las normas organizativas de entes de
carácter privado.
En consecuencia, corresponde revocar la decisión asumida en la instancia anterior, sin perjuicio de que
con arreglo a lo argumentado por la Fiscalía General, se formule el requerimiento de instrucción que
prevé el artículo 188 del Código Procesal Penal, en orden al hecho que habría damnificado a C. M.
Por ello, el Tribunal RESUELVE: REVOCAR el auto documentado a fs. (…), en todo cuanto ha sido
materia de recurso".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Cicciaro, Scotto. (Sec.: Sánchez).


c. 38.949/14, SOTELO, Gonzalo Gastón.
Rta.: 27/03/2015

Se citó: (1) Sebastián Soler, Derecho Penal Argentino, TEA, Bs, As,, 1978, t. V, ps. 310/311;
C.N.Crim. y Correc., Sala VII, c. 32.714, "Ramírez, M. Marcelo", rta: 14/12/2007. (2) Gladys Romero,
Los elementos del tipo de estafa, Lerner, Bs. As., 1985, p. 294.

ESTAFA.

Tentativa inidonea. Procesamiento. Imputado que, en el marco de un proceso concursal, utilizó un


documento para presionar y lograr un acuerdo económico, no logrando su cometido pero en virtud de
lo resuelto luego por el magistrado. Documento que analizado ex ante aparentaba idoneidad, pero ex
post, con el procedimiento concursal finalizado, hubiera resultado inútil para logar el fin esperado
debido a que no cumplía con el estatuto social. Ausencia de idoneidad que no excluye la punibilidad.
Confirmación.

Fallo: "(…) A fs. (…) -punto dispositivo I- el juez decretó el procesamiento de (…), por considerarlo
"prima facie" autor penalmente responsable de tentativa inidónea del delito de estafa (artículos 44,
último párrafo, 45 y 172 del Código Penal).(…) II. (…) corresponde confirmar el procesamiento del
imputado, pero por otros argumentos.En la última intervención de esta Sala (con una conformación
parcialmente distinta) se ordenó que la investigación continuara en lo relativo a la ocultación de la
cédula de notificación (cuestión que no será tratada al haberla descartado el juez a quo y no existir
recurso del acusador), así como también respecto a la idoneidad del documento y, en su caso, la
tentativa de delito imposible (artículo 44, último párrafo, del Código Penal).Se acreditó que S.P.C.
presentó el acuerdo de pago que luce a fs. (…) en el fuero comercial, interviniendo el Juzgado en lo
Comercial nro. 5, Secretaría nro. 10, conforme se desprende de las copias que lucen a fs.(…).Dicha
presentación estuvo vinculada con la petición de quiebra que realizó C. respecto a la Obra Social de la
Unión Obrera Metalúrgica de la República Argentina (O.S.U.O.M.R.A.), con fundamento en el
incumplimiento del acuerdo de pago suscripto entre él y el secretario general de dicha entidad, A.C. De
dicho pedido se corrió traslado a la entidad mencionada mediante cédula de notificación, sin perjuicio
de lo cual posteriormente -al tomar conocimiento accidentalmente del pedido falencial- representantes
de O.S.U.O.M.R.A. plantearon la nulidad y/o ineficacia de la notificación, por cuanto nunca habría
llegado al Departamento Jurídico, atribuyéndole dicha "desaparición" a Córdoba (v. fs…).(…) se
materializó una audiencia de conciliación peticionada por el propio C., conforme surge de su
declaración indagatoria (v. fs. …).
En dicho expediente comercial, la sindicatura emitió su opinión considerando que no se habían
cumplido con los extremos del artículo 83 de la ley 24.522.Finalmente, el titular del Juzgado en lo
Comercial nro. 5, Secretaría nro. 10, resolvió no hacer lugar al pedido de quiebra presentado por el
aquí imputado. Para llegar a dicha conclusión, sostuvo que el crédito reclamado había sido
cuestionado, que los propios dichos de C. "podrían calificarse de confusas en cuanto al carácter de los
créditos", y que las firmas insertas no se encontraban certificadas.

85
Además, evaluó el Magistrado que se pretendía el cobro individual de un crédito cuando esa no era la
finalidad de los procesos concursales y el supuesto "Acuerdo de Pago" no había sido suscripto
cumpliendo el estatuto de la entidad. Del mismo modo, descartaba la aplicación de la teoría de la
"buena fe", por cuanto C. se había desempeñado durante "largos años como abogado de la concursada
por lo que no podría desconocer el régimen de representación plural para asumir obligaciones en
representación de aquélla" (v. fs…).Dicho decisorio fue confirmado por la Sala "D" de la Cámara
Nacional en lo Comercial. Los hechos que han sido probados permiten analizar la conducta endilgada a
S.P.C. como un supuesto de tentativa de delito imposible, por cuanto la falta de idoneidad del medio
empleado no excluye la punibilidad (artículo 44, último párrafo, del Código Penal).Si bien se habría
descartado la hipótesis delictiva vinculada con que el "Acuerdo de Pago" en tanto podía lograr la
quiebra de O.S.U.O.M.R.A., se encuentra probado que la intención de C. era utilizar dicho instrumento
para presionar a la empresa y de esta forma lograr un acuerdo económico. Por dicha razón, al imputado
le interesaba lograr la audiencia de conciliación. A estos fines, presentó el documento en tanto era el
medio para forzar la negociación -el pedido falencial-, pero que no tenía idoneidad suficiente para
lograr el resultado lesivo ante el tenor de lo resuelto por la justicia comercial.(…) el documento
analizado ex ante aparentaba idoneidad. Era un instrumento en el cual se reconocía una deuda por
honorarios profesionales y había sido suscripto por el representante de la O.S.U.O.M.R.A. (A.C.),
conforme el peritaje de fs. (…).
(…) analizado ex post, con el procedimiento concursal ya finalizado (donde O.S.U.O.M.R.A.
desconoció ese acuerdo de pago, se comprobó que el estatuto exigía otras firmas, etc.), advertimos que
no podría haber logrado el fin esperado, por cuanto si el documento era inidóneo para decretar la
quiebra, también lo sería para presionar a dicha entidad a pactar un arreglo económico.(…) el tribunal
RESUELVE: Confirmar la resolución de fs.(…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, López González, Pinto. (Sec.: Raña).


c. 17204/10, CORDOBA, Segundo Pantaleón.
Rta.: 16/06/2015

ESTAFA PROCESAL.

Desestimación por inexistencia de delito. Presentación en un juicio comercial de documentación


auténtica para hacerla valer con otro sentido. Ausencia de la secuencia que requiere el tipo penal del
art. 172. Conducta ardidosa del demandado no dirigida a obtener disposición patrimonial alguna.
Atipicidad. Confirmación.

Fallo: "(…) El juez Mauro A. Divito dijo: (…) el recurrente no aparece como el directamente ofendido
por las supuestas maniobras denunciadas y aportó únicamente un poder general que le otorgó la
supuesta damnificada el pronunciamiento traído a consideración debe ser confirmado.
(…) Conforme se desprende del escrito de fs. (..) el pretenso querellante denunció a J.J.L. por haber
presentado en el juicio comercial iniciado por G.L. por incumplimiento de contrato, cobro de sumas de
dinero y daños y perjuicios- documentación auténtica que su hija le habría entregado a aquél pero
otorgándole un sentido diferente al real.
Concretamente explicó que los documentos que presentó L. correspondían a pedidos de mercadería que
se encargó durante el término en que L. -hija- explotaba el fondo de comercio del local ubicado en A.
XX de CABA y a los pagos realizados en ese lapso. Sin embargo, en sede comercial L. intenta hacerlos
valer como recibos de pagos que él efectuara. El recurrente también señaló que L. siguió operando con
la registradora fiscal con tickets donde figura L. -hija- como titular, por lo que los empleados
despedidos le reclamaron a ella y no al imputado.
(…) más allá de que la documentación aportada por el imputado, (…) es auténtica, entiendo que el
hecho no puede configurar el delito de estafa procesal ya que, en el caso no se ha verificado la
secuencia que requiere el tipo penal del artículo 172 del ordenamiento de fondo, pues la pretendida
conducta ardidosa del demandado, en tanto no fue dirigida a obtener disposición patrimonial alguna, no
puede ser encuadrada como una estafa procesal (1).
Tampoco encuadra en una figura penal la circunstancia de que con posterioridad a la venta del fondo
de comercio, L. siguiera operando con la clave fiscal de la antigua propietaria, pues ésta cuenta con las
vías legales pertinentes para hacer valer sus derechos y no es en este ámbito donde debe discutirse la
cuestión. Así voto.
El juez Ricardo A. Pinto dijo: Comparto en un todo los fundamentos brindados por el colega
preopinante y adhiero a la solución que propicia.
Tal como lo he sostenido en otras oportunidades, a mi juicio, no incurre en el delito de estafa procesal
el sujeto demandado que presentó documentación auténtica -otorgándole un sentido diferente al real-
ya que utilizó mecanismos propios de la defensa para resguardar sus derechos, sin incluir sustentos
engañosos e invencibles que pudieran conducir a error al magistrado.
Tengo dicho que "…si el deudor demandado usa documentación falsa o falsificada para evitar una
ejecución sobre sus bienes, no puede ser autor del delito de estafa procesal puesto que jamás podrá
lograr una disposición patrimonial distinta a la originaria; la deuda anteriormente contraída -derivada
de un incumpliendo contractual y el daño consecuente, por cierto- no puede ser equiparado a la entrega
voluntaria que, producto del engaño, reclama la figura" (2).

86
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

(…) el tribunal RESUELVE: CONFIRMAR la resolución de fs. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, Pinto, Divito. (Sec.: Roldán).


c. 65.457/14, LAMBOGLIA, Hernán C. y otros.
Rta.: 16/04/2015

Se citó: (1) C.N.Crim.y Correc., Sala V, c. n° 36546, "Schwarzfeld, Enrique", Sala VII, rta.: 2-06-
2009. (2) C.N.Crim. y Correc., Sala VI, c. n° 43905/12, "Testamante Romero, Emma Sara", rta.
20/9/13.

ESTUPRO.

Procesamiento. Agravio: Error de prohibición. Rechazo. Invalidez del consentimiento prestado por el
menor de 13 años. Figura que tipifica el aprovechamiento de la inexperiencia e inmadurez sexual del
pasivo. Confirmación.

Fallo: "(…) denunció a fs. (…) que el (…) tomó conocimiento a través de su hijo (…), de 13 años de
edad, que ese día había tenido relaciones sexuales por primera vez con el imputado, en el inmueble de
la calle (…). Agregó que se habrían conocido mediante la red social "Facebook" hacía quince días
antes del hecho.
En ese mismo sentido se expidió la madre del menor (…), y la médica encargada del sector de guardia
de la Clínica (…), donde ingresó el damnificado junto con sus padres para hacerse atender con motivo
de lo ocurrido, dado que no se había utilizado ningún tipo de protección contra enfermedades de
transmisión sexual.
(…) se encuentran agregadas las entrevistas que tuvo (…) ante el programa "Las Víctimas contra las
Violencias" del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos, y en Cámara Gesell, de donde se
desprende que éste habría conocido a (…) a través de la red social "Facebook", medio por el cual que
comenzaron a dialogar durante un par de semanas y mantuvieron también una video-llamada por
medio de "Skype", hasta que finalmente lo invitó a su casa "para conocernos y para que pasara eso -
mantener relaciones sexuales-". A su vez especificó puntualmente que sabía la edad que tenía el
imputado, al igual que él la suya.
Por otro lado, a fs. (…) el Cuerpo Médico Forense de la Corte Suprema de Justicia de la Nación
categorizó como verosímil su relato.
La minoridad del damnificado se encuentra acreditada mediante (…).
Señalamos que (…) tenía pleno conocimiento de ello, toda vez que en el marco de una conversación
que mantuvieron, (…) le refirió específicamente la que tenía (…).
En ese sentido la doctrina tiene dicho que: "el dolo del autor consiste en querer acceder sexualmente a
la víctima, sabiendo la edad y agregando un elemento subjetivo del tipo consistente en hacerlo
mediante seducción o, tal como dice la letra de la ley, el aprovechamiento de la inexperiencia del sujeto
pasivo" (1), circunstancias que se advierten en su totalidad en el caso traído a estudio.
Por otra parte, a la luz de las pruebas reunidas en el sumario, es posible considerar que el imputado
llevó a cabo un juego de seducción a lo largo de un par de semanas a través del contacto por páginas de
internet, por medio de conversaciones primero escritas e incluso luego también a través de video-
llamadas, mediante las cuales tenía en miras concretar el encuentro sexual (…).
A su vez, el "aprovechamiento de su inmadurez" al que refiere el artículo 120 del Código Penal se
vislumbra no sólo a raíz de la edad de la víctima, que según las licenciadas (…) y (…) "colaboró para
que el mayor se aprovechara de ello y pudiera llevar a cabo la serie de los hechos acontecidos" y de la
particular característica de que nunca antes había tenido relaciones sexuales, sino que también surge
del propio relato del menor que fue su padre quien le explicó la desigualdad que existía entre ambos y
que sólo luego de hablar con él pudo registrar los riesgos ante los cuales se expuso (…).
Al respecto se sostuvo que "la madurez sexual a la que, en forma negativa, alude el tipo penal (…)
involucra el más amplio ámbito de la sana e íntegra conformación de la personalidad en el área sexual,
en base a la cual puede el adolescente discernir el verdadero sentido y naturaleza de su conducta, para
prestar un consentimiento libre y consciente sobre aquellas acciones que puedan afectar dicha esfera
vital" (2).
Lo expuesto demuestra sin hesitación en este estadio a todas luces que los requisitos exigidos por dicho
injusto para su tipificación se encuentran satisfechos en el caso traído a estudio.
Finalmente, no encuentra asidero en muestra de la justificación ensayada por el imputado a fs. (…),
donde refirió desconocer que lo que sucedió era un delito, debido al consentimiento prestado por (…).
Ello se contradice con el principio "error iuris nocet".
Lo que hace sea reprimible la conducta sospechada es la minoría de edad de la víctima, su consiguiente
inmadurez mental y emocional. De esta manera, su presunto asentimiento no puede justificar el
comportamiento del agresor ya que, justamente, sabiendo que el damnificado contaba con trece años -
con la inocencia y falta de madurez propia de la edad-, no es siquiera posible pensar que su
"consentimiento" podía ser válido.
Por ello, el error de prohibición que alega la defensa no puede ser atendido, advirtiéndose el descargo
de (…). como un mero intento por mejorar su comprometida situación procesal.

87
(…), el Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el auto de fs. (…), en cuanto fuera materia de recurso.
(…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini, Filozof. (Sec.: Gallo).


c. 16.662/14, M., C. D..
Rta.: 05/03/2015

Se citó: (1) Edgardo Alberto Donna, "Derecho Penal, Parte Especial", cuarta edición actualizada y
reestructurada, Rubinzal - Culzoni, tomo I, página 630, Buenos Aires, 2011; (2) Baigún Zaffaroni,
"Código Penal y normas complementarias. Análisis doctrinal y jurisprudencial", Hammurabi, tomo 4,
página 584.

EVASIÓN.

Culposa (Art. 281, 2° párrafo, C.P.). Procesamiento. Detenido que escapó de una comisaría por la
terraza, previo traspaso de la reja en cuestión que permitía el acceso a la escalera. Omisión atribuida al
policía de guardia, de colocar el candado en la reja de la celda. Omisión que posibilitó el acceso a la
terraza y la vía de escape. Confirmación.

Fallo: "(…) entendemos que el auto en crisis debe ser homologado. (…) no se encuentra controvertido
que, al momento del hecho, J.C.R. revestía la calidad de Sargento de Guardia, a cargo del ingreso de
detenidos a la seccional 36 de la P.F.A. y de su custodia (fs…) como así tampoco que, finalizados
ciertos trámites de rigor respecto al único sujeto ingresado ese día a la dependencia, el imputado se
dirigió al vestuario de hombres a cuyo fin traspasó la puerta de reja ubicada entre el patio interno de la
seccional y la zona de celdas (ver plano de fs…, dejándola sin llave y permaneciendo allí por el lapso
aproximado de veinte minutos (fs…).
(…) la defensa arguye que mediante la inspección ocular llevada a cabo a fs. (…) no pudo
determinarse fehacientemente la vía de escape de P.B., por cuanto la seccional carece de cámaras de
seguridad tanto en su interior como en su exterior, de modo tal que no puede aseverarse que la omisión
endilgada a D.l.R. pudiera tener incidencia en la fuga de aquel.
(…) lo cierto es que en el informe se precisó que la primer vía de escape posible, por su facilidad, pudo
haber sido la terraza, previo traspaso de la reja en cuestión que permitía el acceso a la escalera. Ello,
por cuanto cualquier otro intento hubiese significado pasar por las oficinas internas de la dependencia,
que en ese momento estaban ocupadas por personal del lugar (cfr. fs…).
Esta hipótesis coincide con aquella propuesta por los testigos G.P.-Subcomisario- y L.R. -Oficial
ayudante- , quien incluso agregó que tras tomar conocimiento de lo ocurrido, le preguntó al público
que se encontraba en la entrada de la seccional si habían visto salir a P.B. -a cuyo fin les exhibió una
fotografía que le habían tomado al registrarlo-, obteniendo respuesta negativa (cfr. fs…).
(…) la nombrada R. afirmó que vecinos del lugar le manifestaron que escucharon ruidos en los techos
de sus viviendas (cfr. fs. …).
(…) resta determinar si la omisión que se atribuye a J.C.d.l.R. constituyó una violación respecto de los
deberes de cuidado establecidos en el Reglamento General de Procedimientos con detenidos
(R.G.P.F.A. 3) O.D.I. nro. 20 del 28/01/77, glosado a fs. (…) y, en caso afirmativo, si existe conexión
de antijuridicidad entre ese riesgo creado y el resultado.
En cuanto a la primera cuestión, de la prueba colectada surge que el nombrado incumplió con la manda
establecida en el art. 58 de la normativa mencionada, en cuanto dispone que "El suboficial a cargo de la
guardia interna o personal que lo reemplace, de tiempo en tiempo, tanto de día como de noche, y el
oficial jefe de servicio, que es el directo responsable, está obligado a ejercer una constante fiscalización
sobre la situación de los mismos y en la tarea que cumplan sus custodios…".
(…) sin perjuicio de la inicial negligencia de su consorte H.R. al no colocar el candado de la celda en la
que se alojaba P.B. -por la que fue procesado en el punto I del auto bajo estudio, dispositivo que se
encuentra firme-, lo cierto es que D.l.R., previo a dirigirse al vestuario y considerando el prolongado
lapso que ello le demandó (veinte minutos aproximadamente) omitió, en primer lugar, instruir a su
subalterno para que llevara adelante una vigilancia permanente del detenido durante su ausencia y, en
segundo término, cerrar con candado la reja que divide el patio interno de la zona de celdas.
En esta inteligencia el Subcomisario W.B. sostuvo que "hay una reja que separa los calabozos del
patio, que al momento del hecho estaba abierta, circunstancia que no debió suceder ya que era una
medida de seguridad extra por si fallaban las puertas de las celdas" (cfr. fs. …), a lo cual agregó que, en
cualquier caso, alguno de los imputados debía estar presente en el lugar.
En consecuencia, el descargo del imputado en cuanto a que se trata de una puerta de paso para uso
exclusivo del personal, no resulta atendible.
Respecto a la incidencia de este riesgo en el resultado final cabe destacar que también se encuentra
acreditada, con el grado de probabilidad exigido en esta etapa preparatoria, por cuanto de haberse
encontrado cerrada con llave la puerta en cuestión (conducta alternativa conforme a derecho), P-B. no
habría podido acceder a la terraza, vía de escape que de momento se vislumbra como la más probable
en atención a las inspecciones oculares realizadas y los testimonios recabados, a los que se hizo
referencia precedentemente.
el tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el punto dispositivo V del auto de fs. (…)".

88
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

C.N.Crim. y Correc., Sala V, López González, Pinto. (Sec.: de la Bandera).


c. 2.695/14, DE LOS RÍOS, Julio C. y otro.
Rta.: 30/04/2015

EXACCIONES ILEGALES.

Procesamiento. Funcionarios policiales que abusándose de sus cargos en marco de un procedimiento,


exigen dinero a cambio de no secuestrar el vehiculo. Confirmación.

Fallo. "(...) contra los puntos I y II del auto de (fs. ...) por los que se procesó a los nombrados por ser
considerados coautores penalmente responsables del delito de exacciones ilegales (...).
Se atribuye a los imputados, en ocasión de desempeñar su labor como funcionarios policiales y
abusando de tales cargos, haber solicitado dinero ilegítimamente a N. H. S., como condición para no
retenerle el automóvil que tripulaba, (...). En tales circunstancias, mientras los imputados tripulaban un
patrullero de la Comisaría 11a. de la Policía Federal Argentina, ordenaron que se detuviera la marcha
del rodado que manejaba S. (...), a quien le requirieron luego la documentación del rodado. Una vez
que éste cumplió con lo requerido, los preventores le dijeron que iban a retener o secuestrar el
automóvil, dado que circulaba con pasajeros y no poseía puertas laterales, lo que a su vez le restaría
puntos en el scoring. Ante ello, S., sorprendido, solicitó para que lo instruyeran acerca de los pasos a
seguir, a lo que el personal policial le respondió "dame plata", por lo que S. les entregó a los
incriminados la suma de cien pesos ($ 100), instante en el cual le fue devuelta la documentación del
vehículo, mientras que B. y P. se retiraron del lugar sin labrar infracción alguna. (...). (...). Si bien los
testigos que lo acompañaban no observaron el momento preciso en el cual S. debió entregar la suma de
dinero al personal policial para que no le secuestraran su vehículo -recuérdese que permanecieron
dentro del vehículo por un lapso considerable-, fue la propia testigo, A. B. quien, luego de haber
tomado intervención ésta sala -con distinta integración-, confirmó la secuencia del hecho (cfr. fs. ...).
Por lo tanto, la hipótesis de que se le haya exigido dinero al denunciante, en las circunstancias que éste
describió, no luce inverosímil. Es más, la respuesta negativa fluye por si sola si se piensa que una
acción como la investigada en autos se concreta ante testigos directos. Tampoco se advierte motivo o
razón alguna por parte del denunciante para perjudicar a los imputados. Por otro lado, resulta dable
destacar que las modulaciones de la Comisaría 11a. de la Policía Federal Argentina, cuyas
transcripciones lucen a (fs. …), dan cuenta de que no existió ninguna consulta efectuada respecto al
rodado con dominio XXX-XXX, pese a que la intervención policial habría existido-, conforme lo
manifestaran los testigos. (...) En consecuencia, el tribunal RESUELVE: CONFIRMAR los puntos I y
II del auto de (fs. ...), en cuanto fueran materia de recurso (art. 455 del CPPN). (...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala I, López González, Pociello Argerich. (Prosec. Cám.: Castrillón).
c. 45212/13, BIANCHI, Edgardo Matías Jorge y otro.
Rta.: 04/03/2015

EXCARCELACIÓN

Rechazada. Penalidad del delito imputado que autoriza a conceder la excarcelación. Ausencia de
antecedentes condenatorios y de riesgo de entorpecimiento de la investigación. Revocación.
Procedencia. Concesión bajo caución real más la obligación de comparecer quincenalmente ante el
tribunal. Disidencia: Existencia de peligros procesales: Riesgo de fuga y entorpecimiento de la
investigación. Imputada extranjera con situación migratoria no regularizada. Falta de arraigo. Tiempo
proporcionado de detención. Confirmación.

Fallo: "(...) Disidencia de el juez Carlos Alberto González dijo: En primer lugar, cabe señalar que
anteriormente he considerado que la postura del Ministerio Público Fiscal no es vinculante para el juez,
lo cual queda evidenciado con la posibilidad que tiene de recurrir tanto la decisión que concede como
aquella que deniega la libertad, tal como lo dispone el artículo 332 del Código Procesal Penal de la
Nación (1).
Ahora bien, en el caso concreto la fiscalía fue notificada de la denegatoria decidida (ver fs. ...) y no
dedujo recurso de apelación, a la vez que se le comunicó de la audiencia dispuesta ante esta Alzada en
razón de la impugnación interpuesta por la defensa, sin que tampoco compareciera, por lo cual es dable
entender que consintió la resolución adoptada.
Sentado ello, pondero que si bien la penalidad de los delitos por los que fue procesada B. a (fs. ...) de
los autos principales (hurto en grado de tentativa -dos hechos-), permite adecuar su situación a la
primera hipótesis del artículo 316, segundo párrafo, al que remite el 317, inciso 1, ambos del código
adjetivo, se verifican riesgos procesales que impiden acceder a la excarcelación solicitada.
Cabe señalar que uno de los sucesos que se investigan en la presenta causa ocurrió cuando se
encontraba en período de prueba en razón de la probation otorgada por el Tribunal Oral en lo Criminal
nº (...) el pasado 1 de marzo del 2013, por el término de dos años (ver certificación que antecede).

89
A ello se suma que, luego de la soltura acordada en este expediente mudó su lugar de residencia sin
informar tal circunstancia a la justicia, brindando su nuevo domicilio recién al prestar declaración
indagatoria tras la comisión del segundo de los hechos por los que se dictó auto de mérito (ver fs. ...).
A su vez, no puede soslayarse que la causante registra otro proceso en trámite, en el marco del cual el 2
de marzo de 2011 se la declaró contumaz y se ordenó su captura (fs. ...), circunstancia que demuestra
su falta de sujeción a los compromisos procesales.
No es un dato menor que en los varios procesos seguidos en su contra se ha dado a conocer con trece
nombres distintos (fs. ...), siendo ésta otra pauta objetiva que sustenta un riesgo de elusión.
Concretamente, sobre ello se ha sostenido que "La modificación de un dato tan sensible como el de la
identidad de la persona, no solo es un elemento objetivo de presunción de fuga, sino también de
entorpecimiento de la investigación….Ello demuestra su voluntad de eludir el accionar de la justicia"
(2).
Además corresponde destacar que, siendo extranjera, la imputada se halla hace aproximadamente siete
años en el país en irregular situación migratoria, lo cual da cuenta de su falta de arraigo y, por ende,
sustenta la posibilidad de que intente eludir la acción de la justicia en caso de recuperar la libertad.
Finalmente, debe destacarse que el tiempo que lleva detenida no luce desproporcionado a la luz de los
hechos que se le atribuyen y el estado del proceso, el cual permite sostener que será juzgada a la
brevedad, de conformidad con las garantías que en ese sentido la asisten.
Por lo demás, conforme lo resuelto por esta Cámara en el expediente de Superintendencia N°
19.445/09, el 27 de noviembre de 2009, deberá librarse oficio, junto con un correspondiente juego de
fichas dactilares de J. R. B., al Departamento de Extranjeros Judicializados de la Dirección Nacional de
Migraciones, a efectos de solicitarle se informe sobre su actual situación de residencia en el país; de
igual forma deberá oficiarse al Consulado de la República del Perú, para que se constate su identidad.
"(...) El juez Rodolfo Pociello Argerich dijo: La penalidad asignada a los delitos por los cuales se dictó
el procesamiento de la imputada autoriza su excarcelación, por encuadrar la situación en la hipótesis
liberatoria contemplada en el artículo 316, segundo párrafo, primera alternativa, y 317 del Código
Procesal Penal de la Nación.
A su vez, no registra antecedentes condenatorios por lo cual, en caso de ser condenada en esta causa, el
cumplimiento de la sanción podrá ser dejada en suspenso (artículo 26, C.P.).
En este contexto, no puede soslayarse la escasa complejidad de los sucesos que se le imputan, respecto
de los cuales la prueba ha sido recabada, extremo que diluye el riesgo de entorpecimiento de la
investigación.
En consecuencia, estimo procedente la libertad pretendida. Sin embargo, teniendo en cuenta que uno de
los hechos ocurrió cuando B. se encontraba en período de prueba y que fue declarada rebelde en otro
proceso en trámite, deviene necesario asegurar su futura comparecencia con la imposición de una
caución real cuyo monto se fijará en la suma de $ (...) conforme lo dispuesto en el artículo 320 del
CPPN, adunándole la obligación de presentarse quincenalmente ante el juzgado de origen.
"(...) El juez Luis María Bunge Campos: Me toca intervenir ante la disidencia planteada entre mis dos
colegas González y Pociello Argerich ante el recurso interpuesto por la defensa contra el auto que
denegó la excarcelación de la imputada bajo cualquier tipo de caución.
Luego de escuchar el audio y sin tener preguntas que formular, adhiero a los argumentos esgrimidos
por el juez Pociello Argerich.
En consecuencia, por mayoría, el tribunal RESUELVE: REVOCAR el auto de (fs. ...) y CONCEDER
LA EXCARCELACIÓN de J. B. bajo caución real de mil pesos ($ 1.000), con la obligación de
presentarse quincenalmente ante el juzgado (artículos 310, 316, 317 inciso 1, 320 y 324 del CPPN).
(...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala IV, González (en disidencia), Pociello Argerich, Bunge Campos.
(Prosec.Cám.: Godnjavec)
c. 37.330/14/1, BELLEZA, Jazmin.
Rta.: 30/03/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correc., Sala IV, c. 5.070/13/7 "Peralta", rta. 12/12/2013. (2) C.N.C.P., Sala
II, Reg. 14.694 "Rolón Aquino, Gustavo Antonio", rta. 18/6/2009, del voto del Dr. Gustavo Mitchell.

EXCARCELACIÓN

Rechazada. Existencia de riesgos procesales. Posibilidad que se entorpezca la investigación.


Valoración de las características violentas del hecho, excesiva violencia ejercida contra la víctima.
Tiempo proporcionado de detención. Confirmación.

Fallo: "(…) Si bien el mínimo de la escala penal prevista para el delito por el que se encuentra
procesado M. R., evaluado en conjunto con la carencia de antecedentes condenatorios, permitiría
encuadrar su situación en la segunda alternativa del artículo 316, segundo párrafo, al que remite el 317,
inciso 1 del código adjetivo, lo cierto es que se verifican en el caso riesgos procesales que obstan a la
libertad que se pretende (artículo 319 del CPPN).
No pueden soslayarse las graves características del suceso por el que soporta reproche penal, en cuyo
desarrollo habría atacado junto a otros tres sujetos a una persona de 80 años cuando ésta se dirigía a su

90
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

trabajo, a quien empujaron contra una pared, provocando que cayera al suelo y se golpeara el hombro y
muslo derecho, para luego desapoderarla de sus pertenencias, siendo que por tales lesiones debió ser
atendida en un primer momento por el "SAME" y luego ser trasladada hasta el "Hospital Pirovano"
(cfr. fs. ...).
Cabe destacar que el encausado reside por la zona donde se domicilia su víctima C. A. P. R.,
circunstancia ésta que habilita a sostener que de encontrarse en libertad podría intimidarlo cuando deba
declarar durante la etapa de juicio (1).
Por otro lado, se encuentra pendiente la individualización de otro partícipe del evento y en tal orden la
libertad del imputado podría frustrar tal cometido (2).
Finalmente, cabe destacar que el tiempo menor al mes que el prevenido lleva en detención no se exhibe
irrazonable si se tiene en cuenta la pena en expectativa prevista para el delito de robo agravado por su
comisión en poblado y en banda que se le endilga (3).
En consecuencia, se RESUELVE: CONFIRMAR el auto de (fs. …) en cuanto fuera materia de recurso.
(…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala IV, Seijas, González, González Palazzo. (Prosec.Cám.: Pereyra).
c. 27.238/15/3, INC. DE EXC. de MOILINA RODRIGUEZ, Gabriel.
Rta.: 04/06/2015

Se citó: (1) C.I.D.H., Informe 2/97, punto 35 "Riesgo de presión sobre los testigos" al que remiten
expresamente en sus votos los jueces Eduardo R. Riggi, Gustavo M. Hornos y Guillermo J. Tragant en
el fallo plenario n° 13 "Díaz Bessone" de la Cámara Federal de Casación Penal; C.N.Crim. y Correc.,
Sala IV, c.16.813/13 "Álvarez", rta. 23/6/2014 y c. 7.908/15 "Cejas", rta. 11/3/15. (2) C.N.Crim. y
Correc., Sala IV, c. 1.759/10 "Acuña", rta. 17/11/10; c. 237/11 "Vilte", rta. 16/3/11; c. 437/12
"Domínguez" rta. 25/4/12 y c. 1.613/12 "Cane", rta. 17/10/12. (3) C.N.Crim. y Correc., Sala IV, c.
7.671/15 "Fuque", rta. 22/4/15, reg. 20/2015 de la Cámara Nacional de Casación en lo Criminal y
Correccional, Sala 2.

EXCARCELACIÓN

Rechazada. Procesamiento firme por robo agravado por su comisión en poblado y en banda y con la
intervención de menores de edad. Inexistencia de peligros procesales. Imputado en situación de calle
que aportó el teléfono celular de su hermana. Precarias condiciones de vida que le impedirían eludir
con éxito la persecución penal o entorpecer esta investigación. Domicilio procesal en la Defensoría
Oficial. Investigación en la que ya se ha recabado la prueba por lo que no hay riesgo de
entorpecimiento. Revocación. Imposición de caución más la obligación de comparecer ante en el
juzgado mensualmente. Disidencia: Imputación que impide la aplicación de alguna de las hipótesis
previstas en los artículos 316 y 317, inciso 1°, C.P.P.N. Máximo de la escala penal prevista para los
delitos imputados y antecedentes condenatorios que impedirían la aplicación de una pena en suspenso.
Riesgo de peligro de fuga debido al precario arraigo y a que se encuentra identificado con diversos
nombres ante el Registro Nacional de Reincidencia. Confirmación.

Fallo: "(…) II. La jueza Mirta López González dijo: I-La situación procesal de E. A. se encuentra
regularizada en estas actuaciones mediante el auto de procesamiento dictado en el principal el pasado 2
de junio, oportunidad en la que fue procesado en orden al delito de robo agravado por su comisión en
poblado y en banda y con la intervención de menores de edad (arts. 41 quater y 167, inc. 2° del CPN;
ver fs. …), pronunciamiento que a la fecha se encuentra firme.
Más allá de la penalidad prevista para el delito por el cual fue procesado, lo cierto es que la mera
posibilidad de un futuro encierro -derivada, en el caso, de la escala penal establecida para la conducta
prima facie atribuida y los antecedentes condenatorios (vencidos) informados a fs. (…) del principal-,
no permite, por sí sola, convalidar su encierro cautelar, conforme la doctrina emanada del plenario
"Díaz Bessone" de la Cámara Nacional de Casación Penal.
(…) valoro que el hecho atribuido no exhibe aristas que conduzcan a inferir peligros procesales.
En cuanto al peligro procesal de fuga, el imputado se identificó correctamente (ver fs….), no registró
rebeldías en procesos anteriores y si bien informó un domicilio en el que se constató que, en la
actualidad, no reside (cfr. fs…), al ser indagado explicó que se halla en situación de calle junto con su
grupo familiar conviviente y aportó el teléfono celular de su hermana (L. A.), extremo que lejos de
importar un dato que indique su voluntad elusiva, no hace más que ilustrar sobre sus precarias
condiciones de vida, que en modo alguno le facilitarían eludir con éxito la persecución penal o
entorpecer esta investigación. (…) al momento de prestar declaración indagatoria, constituyó domicilio
procesal en la sede de la Defensoría Oficial, donde podrán cursársele las notificaciones del proceso
(fs…). (…) las pruebas del hecho han sido recabadas, por lo que no se percibe un riesgo de
entorpecimiento de la investigación.
(…)al no contar con pautas objetivas suficientes que me permitan resolver de modo contrario a lo hasta
aquí sostenido, entiendo que debe concederse el derecho solicitado.
(…) en atención a que la pena que pueda surgir de este asunto será de cumplimiento efectivo,
corresponde garantizar su sujeción al proceso mediante la imposición de una caución de tipo real de

91
ochocientos pesos ($800), a la que deberá agregarse la obligación de comparecer ante el juzgado de
origen una vez por mes, en la oportunidad que determine el magistrado de instrucción.
II-Tras advertir que se encuentran incorporadas a la presente, las fotografías de los menores A. S. E. y
E. G. (fs. …), ordénese al magistrado de la instancia de origen su desglose y reserva en Secretaría.
El juez Ricardo Pinto dijo: La situación del imputado A., procesado con prisión preventiva en orden al
delito de robo agravado por su comisión en poblado y en banda y con la intervención de menores de
edad (arts. 41 quater y 167, inc. 2° del CPN; ver fs. …), no encuadra en ninguna de las hipótesis
previstas en los artículos 316 y 317, inciso 1°, del Código Procesal Penal, ya que el máximo de la
escala aplicable excede de los ocho años de prisión y para el caso de una eventual condena, no
resultarían de aplicación las disposiciones del artículo 26 del Código Penal en atención a que el
mínimo supera los tres años de prisión y, además, obstarían a ello los antecedentes condenatorios
informados (fs. …).
Tales extremos, sumados al precario arraigo que posee (fs….) y los diversos nombres con los que
aparece inscripto en el Registro Nacional de Reincidencia (fs. …), corroboran la existencia de un
riesgo de fuga suficiente en los términos del artículo 319 del Código Procesal Penal para mantener su
encierro cautelar.
(…) siempre que el lapso que viene cumpliendo en detención no puede reputarse desproporcionado en
relación con la pena en expectativa y lo normado por el art. 207 del CPPN, voto por confirmar el auto
que denegó la excarcelación a E.A.
El juez Mauro A. Divito dijo: (…) ponderando en particular que el hecho atribuido no exhibe aristas
que conduzcan a inferir peligros procesales y que incluso la calificación legal discernida podría -en
definitiva- resultar modificada por otra menos gravosa, comparto los fundamentos brindados por la
jueza López González y voto en idéntico sentido.
(…) el tribunal RESUELVE: Revocar el auto de fs. (..) de este incidente y conceder la excarcelación a
E. A., cuyas restantes condiciones personales surgen de autos, bajo caución real de ochocientos pesos
($800) y la obligación de comparecer al tribunal una vez por mes, en la oportunidad que determine el
magistrado de instrucción (arts. 310 y 324 CPPN)".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, López González, Pinto. (Sec.: Roldán).


c. 30568/15, A., E.
Rta.: 16/07/2015

EXCARCELACIÓN.

Rechazada. Imputado que por su penalidad máxima permitiría la concesión del beneficio. Existencia de
riesgo de elusión debido al incumplimiento del compromiso asumido al serle concedida anteriormente
la excarcelación. Revocación. Concesión bajo caución real más la obligación de presentarse
mensualmente ante el tribunal.

Fallo. "(…) contra el auto de (fs. …), por el que resolvió denegar la excarcelación al nombrado, bajo
ningún tipo de caución (art. 319 del Código Procesal de la Nación).
En efecto, teniendo en cuenta la escala penal con la que se reprime el delito enrostrado al imputado
(hurto en grado de tentativa) estimamos que la condena que eventualmente pudiere recaer en autos
aunque necesariamente será de cumplimiento efectivo (art. 27, CP), podría no superar los 6 meses de
prisión y, en consecuencia, ser sustituida por la realización de trabajos comunitarios. (…). Por ello, a
efectos de evitar que sufra un mal mayor que el que representa la propia sanción penal sustantiva,
atento el principio de inocencia del que goza en esta etapa del proceso, estimamos que corresponde
revocar el auto recurrido, concediendo la excarcelación a G. En cuanto a la caución a imponer, en
atención al riesgo de elusión que concurre al caso, dado a la última inconducta procesal demostrada al
no cumplir con la obligación impuesta por esta sala al concederle la anterior excarcelación el pasado 23
de octubre de 2014, consideramos que corresponde fijar una caución de tipo real.
(…), manteniéndose la obligación accesoria de presentarse una vez al mes en la sede del tribunal de
origen en las fechas y horario que se determinen en esa dependencia, con el fin de demostrar su
voluntad a someterse al proceso, bajo apercibimiento de revocarse la libertad concedida y ordenarse su
inmediata captura. En consecuencia, el tribunal resuelve: REVOCAR el auto de (fs. …). y
CONCEDER LA EXCARCELACION a N. F. G., de las demás condiciones personales obrantes en
autos, bajo caución real de $ 200 y la obligación accesoria descripta en los considerandos (arts. 310,
316, 317, 321 y 455 a contrario sensu, CPPN). (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala I, López González, Pociello Argerich. (Sec.: Peluffo).


c. 59329/14, GALEANO, Nestor Fabian.
Rta.: 12/03/2015

EXCARCELACIÓN.

Rechazada. Imputado procesado por lesiones graves a su pareja. Hecho de violencia doméstica.
Violencia desproporcionada en el hecho. Causas actuales en trámite y reanudación de juicio por la
probation obtenida en una causa anterior. Riesgo de entorpecimiento en la investigación. Obligación

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Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

del Estado de proteger y garantizar la integridad física y psíquica de las mujeres sometidas a
situaciones de violencia ("Convención de Belén Do Para", Leyes n° 12.569 y 26.485 y la Declaración
sobre la eliminación de la violencia contra la mujer). Confirmación. Disidencia: Situación procesal
incluida en los términos del artículo 316, párrafo segundo, en función del artículo 317, inciso 1°,
C.P.P.N. Imputado que no registra condenas anteriores ni rebeldías. Prueba recabada que neutraliza el
riesgo de entorpecimiento en la investigación. Revocación. Procedencia. Imposición de caución
personal, prohibición de acercamiento y comparecencia en el tribunal.

Fallo: "(…) II. La jueza Mirta L. López González dijo: B. se encuentra procesado, con prisión
preventiva, como autor del delito de lesiones agravadas -art. 92 del Código Penal- (fs. …).
Si bien la escala punitiva se encuentra dentro de los parámetros establecidos en el artículo 317 en
función del 316 del Código Procesal Penal de la Nación, ello no es determinante para decidir sobre su
libertad.
Valoro en forma negativa las particulares características del suceso (…) en el que se aprecia una
desproporcionada violencia -al cortar con una hoja de afeitar el cuello de la damnificada, así como
también su espalda a la altura de los riñones con un elemento contundente, mientras le profería frases
intimidatorias-.
(…) la seriedad del reproche pone en evidencia su intención de entorpecer la investigación al tomar
contacto con la víctima, quien es su pareja hace un año aproximadamente.
(…) no se advierte otra forma menos gravosa de neutralizar los riesgos procesales verificados que el
encarcelamiento preventivo. La Fiscalía se ha opuesto al pedido de libertad, y se advierte como
indispensable la medida cuestionada.
(…) su conducta previa permite inferir que de recuperar la libertad podrá amedrentar a la víctima o
influir en la testigo a quien conoce personalmente y, de esta manera, obstaculizar la investigación.
(…) el Estado argentino se obligó internacionalmente a proteger y garantizar la integridad física y
psíquica de las mujeres sometidas a situaciones de violencia, lo que exige extremar los recaudos para
cumplir con tal imposición (ver Convención Interamericana para prevenir, sancionar y erradicar la
violencia contra la mujer. "Convención de Belén Do Para", en especial, los apartados a, b, c y d, las
leyes de violencia contra la mujer n° 12.569 y 26.485 y la Declaración sobre la eliminación de la
violencia contra la mujer -Asamblea General de las Naciones Unidas A/RES 48/104 del 20/12/94).
(…) pondero que a menos de dos meses que obtuvo su libertad por haber sido excarcelado en el marco
de la causa que registra en trámite ante el Juzgado Nacional en lo Criminal de Instrucción nro. 13 se
vio involucrado en el suceso que aquí se investiga.
(…) lleva en detención desde el 25 de marzo del corriente año, tiempo que no se exhibe
desproporcionado a la luz de lo dispuesto en el art. 207 del catálogo procesal (ver además informe 2/97
de la C.I.D.H. y "Jorge y José Peirano Basso c/ República Oriental del Uruguay", del 6 de agosto de
2009, párrafos nro. 77, 88, 90, 100, 106, 109 y sus citas).
Disidencia del juez Mauro A. Divito dijo: B. se encuentra procesado, con prisión preventiva, como
autor del delito de lesiones agravadas -art. 92 del Código Penal-, cuya gravedad no se ha establecido,
aunque puede estimarse que serían leves (fs. …), pronunciamiento que adquirió firmeza.
(…) permitiría encuadrar su situación en los términos del artículo 316, párrafo segundo -ambos
supuestos-, en función del artículo 317, inciso 1°, del ordenamiento de forma (auto de fs. …), ya que -
por lo demás- no registra condenas anteriores.
(…) pondero que al momento de su detención se identificó correctamente, su domicilio fue constatado
y, aunque ha tenido otras causas, no registra rebeldías (fs…).
(…) no puede soslayarse que la prueba en el sumario ya ha sido recabada, habiéndose regularizado su
situación procesal a fs. (…), extremo que diluye el riesgo de entorpecimiento de la investigación.
(…) en función del principio de proporcionalidad que rige en materia de medidas cautelares,
corresponde hacer lugar al derecho solicitado al no ser, en este caso, la prisión preventiva indispensable
para asegurar los fines del proceso.
(…) la circunstancia de haber sido recientemente excarcelado en la causa en trámite ante el Juzgado
Nacional en lo Criminal de Instrucción nro. 13 y la suspensión del juicio a prueba que registra ante el
Tribunal Oral en lo Criminal nro. 3, revelan la necesidad de sujetar su sometimiento al proceso bajo
una caución personal de tres mil pesos, atento a sus condiciones personales, a lo que se adunará la
obligación de presentarse en la sede del Juzgado de instrucción una vez al mes en la oportunidad que el
Sr. juez designe.
(…) estimo apropiado disponer la prohibición de acercamiento del imputado respecto de Y.M.R. por
un radio de quinientos metros (500 metros), evitando cualquier tipo de contacto físico, telefónico o por
cualquier medio, hasta tanto se resuelva definitivamente este sumario, lo cual deberá ser puesto en
noticia de Benítez al momento de hacerse efectiva su libertad, bajo apercibimiento de revocarle su
derecho en caso de incumplimiento.
El juez Ricardo Matías Pinto dijo: (…) adhiero al voto de la jueza Mirta L. López González, ya que
comparto en su totalidad los fundamentos allí expuestos.
(…) estimo que las graves características del suceso atribuido permite apreciar un riesgo claro de
entorpecimiento del proceso (art. 319 del CPPN) por presión y amedrentamiento a la víctima en una
situación de violencia de género en la cual otros medios alternativos no lucen efectivos, por lo cual la
restricción de su libertad surge como el único mecanismo necesario e indispensable para evitar que el
imputado amenace a la damnificada y entorpezca el proceso.

93
(…) no puede soslayarse que la medida restrictiva de la libertad no luce desproporcionada, si se tiene
en cuenta que el eventual juicio en este legajo abarcaría aquél que registra en trámite en el Juzgado
Nacional en lo Criminal de Instrucción nro. 13 por el delito de robo con armas tentado, por lo cual una
eventual sanción sería grave y podría no ser en suspenso. Además, se reanudaría el juicio en el proceso
en cual obtuvo la suspensión del juicio a prueba.
(…) sin perjuicio de que aún no se ha constatado la gravedad de las lesiones la coerción personal
dispuesta luce razonable, necesaria y proporcional, para neutralizar el riesgo de entorpecimiento y
fuga, ante el escaso tiempo que lleva en detención (desde el 25 de marzo del año en curso), voto por
homologar el auto recurrido.
(…) el tribunal RESUELVE: Confirmar el auto de fs. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, López González, Pinto, Divito (en disidencia). (Prosec. Cám.: Daray)
c. 17.083/15/1, BENÍTEZ, Jorge A.
Rta.: 10/04/2015

EXCARCELACIÓN.

Rechazada. Imputada procesada con prisión preventiva por lesiones leves agravadas por el vínculo, tres
hechos en concurso real entre sí. Inexistencia de peligros procesales. Ausencia de antecedentes.
Domicilio constatado. Revocación. Concesión bajo caución real más la obligación de presentarse ante
el tribunal.

Fallo. "(…) el tribunal arriba a la conclusión que la decisión en revisión debe ser revocada. Ello así por
cuanto en primer lugar se destaca que conforme surge del sistema Lex 100, V. ha sido procesada, con
prisión preventiva, en orden al delito de lesiones leves agravadas por el vínculo, tres hechos en
concurso real entre sí, los que a su vez concurren en forma real con el delito de lesiones leves
agravadas por el vínculo en relación al hecho por el cual fuera procesada a (fs. …) del ppl. Así las
cosas, frente a la carencia de antecedentes, de resultar condena la pena a imponer podría ser dejada en
suspenso. (…). (…), se advierte que la imputada ha comparecido a distintas convocatorias del juzgado,
o justificado sus inasistencias a través de la defensoría oficial, como así también cumplido con las
requisitorias efectuadas (…) constatado debidamente su domicilio, e identificada correctamente en
autos. En torno al riesgo de entorpecimiento de la instrucción, el asunto se encuentra avanzado en tanto
se ha dictado un auto de mérito a su respecto, sin que se observen medidas de prueba pendientes de
producción. Por lo demás, las niñas, conforme fuera informado en el marco de la audiencia por la Dra.
Kodern Molina, acompañada por la abuela materna L. S. M., se encuentran a la fecha conviviendo con
otros familiares. (…), corresponde señalar que no se dan peligros procesales que no puedan ser
morigerados mediante una caución adecuada. Así, por ser la libertad la regla durante el trámite del
proceso corresponde hacer lugar a la excarcelación de J. M. V. En cuanto a la caución, entendemos que
una de tipo real (…), el tribunal RESUELVE: REVOCAR la decisión obrante a fs. 4/5, en cuanto fuera
materia de recurso, art. 455 del CPPN; y CONCEDER la excarcelación de J. M. V., bajo caución real
de tres mil pesos ($3000), más las obligaciones que surgen de los considerandos.- (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala I, López González, Pociello Argerich. (Sec.: Biuso).


c. 20561/13, V., J. M.
Rta.: 18/03/2015

EXCARCELACION.

Rechazada. Imputado procesado por encubrimiento agravado con ánimo de lucro. Probabilidad de no
acceder a una sanción de cumplimiento suspensivo, en caso de ser condenado. Domicilio constatado.
Ausencia de rebeldías. Revocación. Concesión con la imposición de una caución real y comparecencia
periódica en el juzgado. Necesidad de dar intervención a la Dirección Nacional de Migraciones por su
condición de extranjero. Disidencia: Pena que no podrá ser fijada en su mínimo y será efectiva, en caso
de recaer condena. Arraigo que no se encuentra claramente demostrado. Aporte de datos personales no
certeros. Confirmar.

Fallo: "(...) La jueza Mirta L. López González dijo: (…) no advierto razones que justifiquen mantener
el encarcelamiento cautelar de V.O. (…) su situación encuadra en la primera de las hipótesis previstas
por el artículo 316, segundo párrafo, del C.P.P.N, al que remite el art. 317, inc. 1°, de dicho
ordenamiento, pues se encuentra procesado en orden al delito de encubrimiento agravado por el ánimo
de lucro, pronunciamiento firme.
(…) si bien el imputado no podría acceder a una sanción de cumplimiento suspensivo, en función de
los antecedentes condenatorios que registra, estimo que existen medios menos lesivos para asegurar la
sujeción del imputado al proceso (fs. …).
(…)debe ponderarse que el nombrado dio su domicilio real que resultara constatado (fs. …) y que no
registra rebeldías en procesos anteriores.
(…) el estado avanzado que presenta el trámite de la causa, (…) indica que no es posible que
entorpezca la investigación.

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Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

(…) corresponde hacer lugar a la solicitud de la defensa, toda vez que el riesgo que cabe presumir a
partir de los antecedentes condenatorios que registra puede ser morigerado mediante una caución real
de cinco mil pesos ($5.000), cuyo monto se estima a partir de la información social recabada en la
causa, junto con la obligación de comparecer en forma quincenal ante el juez de la causa, conforme a
las condiciones que éste estime convenientes.
(…) atento la condición de extranjero del encausado, deberá darse intervención a la Dirección Nacional
de Migraciones y, conforme lo dispone la circular n° 56/95 de la Corte Suprema de Justicia de la
Nación, comunicar su situación procesal a la Dirección Nacional de Asuntos Jurídicos del Ministerio
de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto. Así voto.
Disidencia del juez Ricardo Matías Pinto dijo: O.V. se encuentra procesado con prisión preventiva en
orden al delito de encubrimiento agravado por el ánimo de lucro, penalidad que en principio le
permitiría acceder al derecho peticionado en los términos del artículo 316, en función del artículo 317,
inciso 1° del cuerpo legal citado (auto de fs….).
(…) destaco que el 9 de noviembre de 2011 el Tribunal Oral en lo Criminal n° 6, lo condenó a la pena
de cinco meses de prisión en suspenso y costas en orden al delito de robo, así como también de la de
tres años y dos meses de prisión impuesta el 10 de diciembre de 2012 por el Tribunal Oral en lo
Criminal n° 2 del departamento Judicial de la Matanza, provincia de Buenos Aires, todas ellas por
delitos contra la propiedad (ver fs…) Asimismo, cabe destacar que el 28 de febrero de 2014 recuperó
su libertad en el marco de la segunda condena mencionada.
Tales circunstancias, demuestran que una eventual sanción en estas actuaciones no podrá ser dejada en
suspenso, por lo cual podría ser declarado reincidente, de forma tal que no podrá gozar de la libertad
condicional (art. 14 del C.P.).
A lo expuesto, se suman los distintos nombres con que se encuentra registrado, y que al ser detenido se
identificó en forma diferente (fs….).
(…) aportó un domicilio para luego indicar otro, siendo que su hermano informó que se domiciliaba
con este. Es así, que no ha demostrado en forma clara su arraigo.
(…) la medida cautelar resulta indispensable para asegurar el cumplimiento de la ley.
(…) el tiempo que lleva en detención (desde el 23 de marzo de 2015) no luce desproporcionado en los
términos del art. 207 del código de rito e informe 2/97 de la C.I.D.H., dado el estado del legajo en el
cual se dispuso la notificación prevista en el art.
349 del código de procedimiento y, al considerarse la expectativa de pena establecida para el delito que
se le atribuye al procesado, en tanto los antecedentes condenatorios que registra el encausado permiten
inferir que la eventual condena a aplicar no podrá ser fijada en su mínimo y será efectiva. (…) voto por
convalidar el decisorio apelado.
El juez Mauro A. Divito dijo: (…)adhiero al voto de la jueza López González, cuyos argumentos
comparto en su totalidad y emito el mío en idéntico sentido.
(…) el tribunal RESUELVE: I. REVOCAR el auto de fs. (…) CONCEDER la excarcelación a J.O.V.
(…). II. DISPONER que se de cumplimiento en la instancia de origen la intervención a la Dirección
Nacional de Migraciones y, comunicar su situación procesal a la Dirección Nacional de Asuntos
Jurídicos del Ministerio de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, López González, Pinto (en disidencia), Divito. (Sec.: Poleri).
c. 16.977/15/1, OLAYA VÁZQUEZ, Jimmy.
Rta.: 11/05/2015

EXCARCELACIÓN.

Rechazada. Imputado procesado por robo en grado de tentativa. Fiscal que no se opuso a la concesión
del beneficio. Revocación. Concesión bajo caución real y la obligación de comparecer mensualmente.

Fallo: "(…) II (…) la escala penal prevista para el delito por el que el encausado fue procesado (cfr.
fs….) permite encuadrar la situación del nombrado en la hipótesis prevista en el artículo 316, párrafo
segundo, primer supuesto, en función del 317, inciso primero, del C.P.P.N., extremo al que debe
adunarse que a fs. (…) el Ministerio Público Fiscal, en su calidad de titular de la acción penal incoada
contra D., dictaminó a favor de su excarcelación.
(…) si bien el Tribunal Oral en lo Criminal N° 7, (…) le concedió la suspensión de juicio a prueba,
(…) no puede ser (….) un dato que obste a su excarcelación, por cuanto tal resolución data del 15 de
septiembre de 2014 (cfr. fs. …)de la causa principal), mientras que el hecho que aquí se investiga
habría sido cometido el 29 de marzo de ese año, es decir, con anterioridad.
(…)valoramos positivamente el hecho de que (…) carece de antecedentes condenatorios (cfr. fs. …),
(…)la eventual condena (…)podría ser dejada en suspenso (art. 26, párrafo primero, C.P.).
(…) la medida de coerción no resulta indispensable por lo cual corresponderá revocar la resolución
impugnada.
(…) atento a las dudas suscitadas en torno al arraigo del nombrado (cfr. fs…) que motivaron su
declaración de rebeldía (cfr. fs. …), y atendiendo a que -según refirió la defensacuenta con un grupo
familiar (fs…), su libertad será otorgada con una caución real, la que se fijará en la suma de quinientos
pesos ($500), más la obligación accesoria de comparecer ante el tribunal de origen una vez al mes (arts.
310, 320 y 324, C.P.P.N.).

95
(…) el tribunal RESUELVE: Revocar el auto de fs. (…) y excarcelar a M.A.D. (…) bajo una caución
real de quinientos pesos -$500-, con la obligación de comparecer al tribunal de origen una vez al mes
(artículos 317, inciso 1° en función del 316, 310, 320 y 324 del CPPN)".
.

C.N.Crim. y Correc., Sala V, Pinto, Divito. (Sec.: Raña).


c. 18.911/14, DECIMA, Marcelo A.
Rta.: 18/02/2015

EXCARCELACIÓN.

Rechazada. Robo doblemente agravado en poblado y en banda con armas de fuego. Proceso en trámite.
Antecedentes condenatorios. Dudas acerca del arraigo. Registra ante la Dirección nacional de
Migraciones una condición de ingreso "irregular". Peligro de fuga. Confirmación.

Fallo: "(...). Los argumentos brindados por la defensa en la audiencia, confrontados con las actas
escritas que tenemos a la vista, no logran conmover los fundamentos de la resolución apelada a los que
adherimos por lo que habrá de ser confirmada.
Ello en tanto se evidencia, al contrario de lo sostenido por la defensa, la existencia del peligro de fuga
que amerita la medida restrictiva de libertad que viene recurrida, en función de los elementos objetivos
que seguidamente se detallan. Así, el imputado registra la causa n° (...), en trámite por ante el Juzgado
de Instrucción n° 17, en orden al delito de robo cometido en lugar poblado y en banda, al que se le dió
trámite del art. 353 bis el pasado 28 de agosto de 2014, recuperando su libertad, y solo cinco meses
después ha sido detenido en flagrancia durante la comisión del hecho delictivo que aquí se le atribuye.
En este sentido, debemos destacar que en esa causa fue declarado rebelde con fecha 19 de noviembre
de 2014 (cfr. fs. ...); el propio C. M. en ocasión de prestar declaración indagatoria, señaló que
abandonó el país con fecha 7 de noviembre de 2014, regresando el 7 de enero de 2015, es decir, nueve
días antes del segundo hecho. Esto, a nuestro juicio, configura el peligro de fuga al que hace alusión.
Por otro lado, persisten dudas acerca de su arraigo ya que existen contradicciones entre las dos
diligencias de constatación efectuadas (cfr. fs. ...). Además, debe tenerse en cuenta que registra, ante la
Dirección Nacional de Migraciones una condición de ingreso irregular (ver fs. ..), y que, en cuanto a su
nacionalidad (peruana) y a sus restantes condiciones personales, solo contamos con sus dichos y ni
siquiera es dable afirmar, con certeza, que carezca de antecedentes condenatorios, ya que la
información con la que contamos se limita a lo registrado en nuestro país, por lo que entendemos que el
riesgo procesal de fuga no puede ser neutralizado con una medida menos gravosa. Asimismo, en
cuanto a la seriedad de la imputación, y lo avanzado del proceso, es de señalar que el imputado E. M.
C. M., ha sido procesado, con prisión preventiva, por haber sido encontrado prima facie coautor
penalmente responsable del delito de robo doblemente agravado por haber sido cometido en poblado y
en banda y con armas de fuego cuya aptitud para el disparo no logró tenerse por acreditada, en grado
de tentativa (arts. 42, 45, 166, inc. 2°, último párrafo, y 167 inc. 2°, del Código Penal), (...). Por lo
expuesto, el tribunal RESUELVE: CONFIRMAR la resolución de (fs. ...), en todo cuanto ha sido
materia de recurso (art. 455 del Código Procesal Penal de la Nación). (...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala I, Bunge Campos, Rimondi. (Sec.: Biuso).


c. 3176/15, CANO MENA, Eddy Marcos.
Rta.: 10/02/2015

EXCARCELACIÓN.

Rechazada. Imputado procesado por robo en tentativa, que registra una suspensión de juicio a prueba y
es extranjero no documentado con situación migratoria irregular y arraigo incierto. Confirmación.

Fallo: "(…) El nombrado está procesado con prisión preventiva en orden al delito de robo en tentativa,
cuya escala penal y la ausencia de antecedentes condenatorios permite encuadrar su situación en los
supuestos del artículo 316, segundo párrafo, al que se remite el artículo 317 inciso 1° del Código
Procesal Penal.
No obstante, se valora negativamente que pese a que el (…) el Tribunal Oral en lo Criminal nro. (…)
suspendió el juicio a prueba que se le siguiera en la causa (…), a los pocos meses se vio involucrado en
otro episodio delictivo, aspecto que demuestra su no adecuación a las reglas de convivencia.
A ello se suma su condición de extranjero indocumentado, su situación migratoria irregular y lo
incierto de su arraigo (…), todo lo cual evidencia el peligro de fuga que establece el artículo 319 del
Código Procesal Penal y aconseja convalidar la decisión en examen.
(…), el Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el auto de fs. (…), en cuanto fue materia de recurso.
(…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini, Filozof. (Sec.: Gallo).


c. 3.656/15, CABRERA DEIS, Argenis Gabriel.
Rta.: 05/02/2015

96
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

EXCARCELACIÓN.

Rechazada. Robo agravado en poblado y en banda y con arma de fuego en concurso real con hurto
agravado por escalamiento. Situación migratoria irregular en el país, visa de turista vencida. Arraigo
dudoso. Causa en trámite acumulada a la investigación. Confirmación.

Fallo: "(…) II.- En el expediente principal se decretó su procesamiento, con prisión preventiva, en
orden a los delitos de robo agravado por haber sido cometido en robo en poblado y en banda y con un
arma de fuego cuya aptitud para el disparo no pudo tenerse por acreditada, en concurso real con el de
tentativa de hurto agravado por escalamiento (…).
Si bien la escala punitiva prevista para el delito atribuido no supera los topes previstos en el artículo
317, en función del 316 del Código Procesal Penal de la Nación, se verifican pautas objetivas que
ameritan confirmar el resolutorio impugnado.
Una pauta para denegar el derecho es su situación migratoria irregular en el país, pues de la declaración
de fs. (…) surge que le habrían otorgado la visa de turista, es decir por noventa días, plazo que a la
fecha se encuentra vencido. Además refirió que había perdido su pasaporte hace dos meses
aproximadamente.
Se suma que su arraigo es cuanto menos dudoso, pues si bien se constató que residía en el lugar
indicado al momento de su detención (…), lo cierto es que alquila una habitación del hotel en el cual
no reside de forma permanente ya que tras ser aprehendido el (…) por la participación en otro episodio
delictivo, en un principio no aportó ningún domicilio pero luego se verificó que vivía en un hospedaje
de la calle (…). De modo que en pocos meses ocupó distintas viviendas, lo que refuerza la hipótesis
expuesta en cuanto que no registra alguna donde pueda ser localizado sino de manera más que
dificultosa (…).
Además, a estas actuaciones se acumuló la causa (…), iniciada el (…) ante el Juzgado de Instrucción
(…) a la que se le otorgó el trámite previsto por el artículo 353 bis del código adjetivo, lo que fue
dejado sin efecto el (…) del corriente año como consecuencia de la detención en este expediente.
En tal ocasión (…). Lo expuesto constituyen pautas objetivas que evidencian los riesgos que impedirán
continuar regularmente el proceso en el supuesto que se acceda al derecho peticionado.
(…), el Tribunal RESUELVE: I.- CONFIRMAR el auto de fs. (…) en cuanto fuera materia de recurso.
(…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini, Filozof. (Sec.: Williams).


c. 7.507/15, CASTILBLANCO FLOREZ, José Antonio.
Rta.: 03/03/2015

EXCARCELACIÓN.

Rechazada. Imputado procesado con prisión preventiva por robo agravado por el uso de armas.
Registro de causa en trámite con averiguación de paradero para recibirle declaración indagatoria.
Actitud temeraria adoptada durante la persecución policial. Medidas pendientes para identificar a los
restantes intervinientes. Confirmación.

Fallo: "(…) II.-) En el principal se decretó su procesamiento, con prisión preventiva, en orden al delito
de robo agravado por su comisión con armas (art.166 inc.2° del Código Penal).
La escala punitiva prevista para tal figura excede los topes indicados en el art.317 del código de rito y,
en este sentido, no debe soslayarse el criterio de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos en
el informe N°2/97, donde en el parágrafo 28 se dijo, al tratar el peligro de fuga, que: "la seriedad del
delito y la eventual severidad de la pena son dos factores que deben tenerse en cuenta para evaluar la
posibilidad de que el encausado intente fugarse para eludir la acción de la justicia" (1).
También registra en trámite la causa (…), ante el Juzgado de Instrucción (…) en la que se dispuso su
averiguación de paradero para concretar la declaración indagatoria, medida que estaba vigente al
originarse este sumario.
Asimismo se pondera negativamente la actitud temeraria adoptada durante la persecución policial en la
que se efectuaron disparos con el arma sustraída para lograr su impunidad.
En este contexto, existiendo aún medidas pendientes para identificar a los restantes intervinientes,
consideramos que la decisión adoptada resulta ajustada a derecho por verificarse en el caso los riesgos
procesales a los que hace alusión el artículo 319 del Código Procesal Penal de la Nación.
(…), , el Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el auto de fs. (…) en cuanto fuera materia de recurso.
(…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini, Filozof. (Sec.: Oberlander).


c. 6.750/15, GÓMEZ, Sergio Ricardo.
Rta.: 02/03/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correcc., Sala VI, c. 62.046/2014, "Sosa Leandro Alberto s/excarcelación",
rta.: 18/11/2014.

97
EXCARCELACIÓN.

Rechazada. Imputado procesado por robo simple en grado de tentativa. Antecedente condenatorio. No
registra rebeldías. Domicilio constatado. Revocación. Concesión bajo caución real más la obligación de
comparecer al tribunal cada treinta días.

Fallo. "(...). Los argumentos brindados por la Dra. Gilda Belloqui en la audiencia, confrontados con las
actas escritas que tenemos a la vista, merecen ser atendidos. Ello así por cuanto si bien como adelantó
el juez de grado en virtud de las condenas que registra, en caso de recaer igual suerte en este sumario la
pena a imponer sería de efectivo cumplimiento, lo cierto es que de tener en cuenta el tiempo de
detención que lleva en estas actuaciones -26 días- y el indicado por el Tribunal Oral en lo Criminal nro.
8, estaría en condiciones de obtener la libertad condicional en los términos previstos en el art. 13 del
CP. Véase que había sido excarcelado por dicho tribunal en el mes de noviembre de 2014, con
anterioridad a la pena única impuesta de tres años de prisión de efectivo cumplimiento por aplicación
del art. 317 inc. 5 del CPPN. La nueva imputación que pesa sobre el nombrado bajo el delito de robo
simple en tentativa no parecería modificar aquella posibilidad, de tener presente que ha sido privado de
la libertad según lo informado en las actuaciones por el tribunal oral por un año y 23 días.(...). En ese
sentido, ha sostenido la Corte IDH que: "El Estado debe evitar (...)). Sentado ello, se observa que posee
un domicilio constatado y se encuentra individualizado en esta causa, no registrando rebeldías a su
respecto. Por todo ello, entendemos que corresponde conceder su excarcelación. En cuanto al tipo de
caución, no habría actualizado en principio su domicilio ante el tribunal oral que lo requiere y habiendo
brindado uno diverso en el acta de detención, es que entendemos corresponde una caución real que en
atención a las condiciones personales informadas en la causa por la suma de quinientos pesos ($500.-)
más la obligación de comparecencia de una vez por mes en los días y horarios que se indiquen en el
acta compromisoria. Por todo lo expuesto, el tribunal RESUELVE: I-REVOCAR la decisión obrante a
(fs. ...) en cuanto fuera materia de recurso, art. 455 del CPPN; II CONCEDER la excarcelación de W.
D. B. bajo caución real de quinientos pesos ($500.-), más la obligación accesoria que surge de los
considerandos, (...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala I, Rimondi, López González. (Sec.: Biuso).


c. 5471/15, BRAVO, Walter Damian.
Rta.: 23/02/2015

EXCARCELACIÓN.

Rechazada. Homicidio en grado de tentativa. Improcedencia de la soltura desde la perspectiva de lo


dispuesto en el art. 317 inc 1º del C.P.P.N. Registro de condena anterior. Imposibilidad de que en caso
de recaer nueva sanción sea de ficto cumplimiento. Indicador de riesgo de elusión: Imputado registrado
con diferentes filiaciones. Damnificado que a raíz de la agresión sufrida fue internado en terapia
intensiva, coma farmacológico, riesgo corrido. Riesgo de entorpecimiento de la investigación:
imputado que vive en casa lindera a los padres de la víctima. Confirmación.

Fallo: "(…), convoca a la Sala el recurso de apelación interpuesto por la defensa, contra el auto
documentado a fs. (…), que rechazó la excarcelación de E. G. F.
Los jueces Juan Esteban Cicciaro y Mariano A Scotto dijeron: El nombrado fue procesado en orden al
delito de homicidio simple en grado de tentativa (artículos 42 y 79 del Código Procesal Penal).
Así, la soltura luce improcedente desde la perspectiva de lo dispuesto en el artículo 317, inciso 1º del
Código Procesal Penal, en función del artículo 316, segundo párrafo -ambos supuestos- del mismo
texto legal, en la medida en que se ve superado el tope de ocho años de pena privativa de libertad y
porque la condena anterior que se informa a fs. (…) del principal impide que en el caso de recaer una
nueva sanción sea de ficto cumplimiento (artículo 26 del ceremonial).
Sobre este último punto, cabe destacar que F. fue condenado el 12 de septiembre de 2007 a la pena
única de tres años y seis meses de prisión por el Tribunal Oral en lo Criminal Nº 2, decisión que
comprendió la pena también única de tres años de prisión de cumplimiento efectivo impartida por el
Tribunal Oral en lo Criminal N° 29, trámite en el que además se revocó la condicionalidad de la
sanción de nueve meses de prisión en suspenso dictada por el Tribunal Oral en lo Criminal Nº 10 (…).
Tal antecedente importa un serio indicador del riesgo de elusión, pues puede inferirse válidamente que
el nombrado se encuentra desinteresado de la severa admonición jurídico penal que importa un
pronunciamiento de esa naturaleza y revela su desprecio a la condena como expresión de la última ratio
del ordenamiento jurídico, en tanto se ha visto involucrado en un nuevo episodio delictivo.
Además de lo indicado, se desprenden de la causa otras pautas negativas que en los términos del art.
319 del ritual obstaculizan la libertad del encausado.
Así, como en el Registro Nacional de Reincidencia se encuentra anotado con diferentes filiaciones
(…), se entiende que el ocultamiento de la verdadera identidad importa un serio indicador sobre la
existencia del riesgo de alusión.
Asimismo, se erige como pauta negativa que el suceso reprochado ocurrió en la vía pública, ocasión en
la que habría agredido con un cuchillo a la víctima, provocando un corte en su cuello que lo llevó a su

98
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

internación en terapia intensiva y un coma farmacológico, situación de por sí demostrativa del riesgo
corrido por aquélla.
Finalmente, no escapa al análisis el riesgo de entorpecimiento de la investigación existente, ya que el
encausado reside en la casa vecina de los padres del damnificado y fue en ese marco de cercanía que lo
lesionó.
En esas condiciones, que permiten presumir que quien así se comporta no habrá de sujetarse a las
normas que rigen el proceso, y dado que el tiempo cumplido en detención no se revela irrazonable en
virtud del estado del proceso y la pena en expectativa, habremos de compartir la decisión recurrida, en
consonancia con lo dictaminado por la Fiscalía interviniente (…) y lo argumentado por la Fiscalía
General en la audiencia oral.
Así votamos.
El juez Mauro A. Divito dijo: La escala penal aplicable al hecho que se le reprocha al imputado
Edgardo Gabriel Fernández impide encuadrar su situación en las previsiones de los artículos 316,
segundo párrafo y 317, inciso 1°, del Código Procesal Penal.
Como a ello se añaden la condena que registra, la gravedad de la concreta imputación formulada y las
múltiples identidades con las que aparece anotado (…), estimo que se ha configurado el peligro de
elusión que autoriza a mantener su encierro cautelar (art. 319 CPPN).
Además, es dable vislumbrar el riesgo de entorpecimiento de la investigación que se desprende del
hecho de que el encausado reside en una casa lindera a la de los padres de la víctima.
Por ello y puesto que el tiempo que F. lleva en detención no puede reputarse excesivo, adhiero a la
solución propuesta por los jueces Cicciaro y Scotto.
Así voto.
En mérito al acuerdo que antecede, esta Sala del Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR la resolución
extendida a fs. (…), en cuanto fuera materia de recurso".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Divito (por sus fundamentos), Cicciaro, Scotto. (Sec.: Besansón).
c. 3.649/15, FERNANDEZ, Edgardo G.
Rta.: 20/02/2015

EXCARCELACIÓN.

Caución real. Fiscalía que solicita se revoque. Defensa recurrió el rechazo a la sustitución de la caución
económica por una juratoria. Delito imputado que posee una pena menor a 8 años. Cumplimiento en
detención del mínimo que podría corresponderle por el delito. Imputado que no registra antecedentes
condenatorios. Eventual sanción a imponer de ejecución condicional. Ausencia de peligros procesales.
Imputado con situación económica que, a pesar de una eventual reducción de la caución, no podría
afrontarla. Sustitución. Confirmación. Modificación por Caución Juratoria más la obligación de
comparecer quincenalmente. Disidencia: condiciones impedientes a título de riesgo de elusión.
Rebeldía. Imputado que se tomó a golpes de puño con una persona y es docente en disciplina de
taekwondo. Víctima que resultó lesionada. Revocación.

Fallo: "(…) El representante del Ministerio Público Fiscal dedujo recurso de apelación contra la
resolución documentada a fs. (…) de esta incidencia, en cuanto se concedió la excarcelación a A. M. C.
Á., bajo caución real de mil pesos ($ 1000), solicitando que se la revoque.
También recurrió la defensa oficial, en el caso, contra el auto luciente a fs. (…) por el cual se dispuso
no hacer lugar a la sustitución de la caución económica indicada por otra de carácter juratorio.
Los jueces Mauro A. Divito y Mariano A. Scotto dijeron: Los agravios expuestos por la fiscalía
recurrente no alcanzan para revocar la decisión por la que se entendió viable la libertad de C. Á.
En efecto, su situación encuadra en las dos hipótesis que contemplan los artículos 316, segundo
párrafo, y 317, inciso 1º del digesto ritual, pues la pena prevista para el delito de robo en grado de
tentativa (arts. 42, 45 y 164 del Código Penal) que se le atribuye, resulta ser menor a los ocho años de
prisión aludidos en el artículo 316 citado y la ausencia de antecedentes condenatorios (…) permite
estimar que una eventual sanción será de ejecución condicional.
Asimismo, cabe destacar que el nombrado cumplió el mínimo que podría corresponderle por el delito
de mención, dado que está detenido desde el 20 de enero pasado, y que el hecho atribuido no exhibe
aristas que conduzcan a inferir peligros procesales.
Por otra parte, se pondera que al tiempo de su detención se identificó correctamente (…) y en el
Registro Nacional de Reincidencia se encuentra anotado con su verdadero nombre y apellido (…).
En tales condiciones, la rebeldía dispuesta en estas actuaciones a partir de no haber sido localizado en
el domicilio que brindó al momento de su detención (…) y la causa que actualmente tramita en su
contra en jurisdicción provincial (…), son circunstancias demostrativas de que la caución económica
impuesta resulta, en principio, adecuada en los términos del artículo 324 del Código Procesal Penal.
Sin perjuicio de ello, habrá de ponderarse que el tiempo transcurrido -aunque no excesivo- desde que
se acordó la libertad el 22 de enero pasado, se aprecia como una primera pauta de la imposibilidad de
satisfacer la caución tanto por el imputado como por sus allegados.
Además, la situación económica personal que se informara (…) lleva a concluir en que aun en el
supuesto de realizarse una sustancial reducción del monto que se le fijó para asegurar su
comparecencia, ello escaparía a las posibilidades económicas del imputado.

99
De tal manera, en el particular caso del sub examen, como una garantía de índole real infringe la
prohibición contemplada en el artículo 320 in fine del ceremonial, su compromiso juramentado se erige
como el único modo de caución aplicable a fin de no frustrar el instituto impetrado, que debe ser
acompañado con la obligación de comparecer quincenalmente ante el juzgado de primera instancia o el
tribunal que intervenga con ulterioridad.
Así votamos.
El juez Juan Esteban Cicciaro dijo: La significación jurídica provisoria de la conducta reprochada a A.
M. C. Á., esto es, robo simple en grado de tentativa (arts. 42, 45 y 164 del Código Penal) y la
circunstancia de que no registra condenas anteriores (…), tornarían viable su soltura en los términos de
los arts. 316, segundo párrafo -ambas hipótesis- y 317, inciso 1°, del Código Procesal Penal.
Sin embargo, considero que se dan las condiciones impedientes que trae el art. 319 del código
procedimental a título de riesgo de elusión.
Desde este punto de vista, no obstante el conocimiento que el causante tenía sobre la existencia del
proceso y las obligaciones asumidas al disponerse su libertad (…), cuando fue citado se estableció que
no vivía en el lugar (…), situación que condujo a la declaración de rebeldía (…).
Asimismo, al rendir declaración indagatoria aportó un nuevo domicilio en la localidad bonaerense de
Quilmes -provincia de Buenos Aires-, de lo que se concluye que se desinteresó de la causa y que no
cumplió con la carga de informar su nueva vivienda al magistrado interviniente.
Además, permaneció en situación de contumacia por un lapso aproximado de nueve meses y su
presencia en el tribunal de grado recién fue posible con motivo de la detención dispuesta por el
Juzgado de Garantías N° 4 de San Isidro, provincia de Buenos Aires (…), actuaciones que según lo
informado por el Fiscal General Joaquín Gaset en la audiencia oral, en las que se le atribuyó el delito
de robo con armas, han pasado a la instancia oral.
Por otro lado, habrá de ponderarse que según la imputación formulada, se tomó a golpes de puño con
una persona (…), dato no menor en función de que es docente en la disciplina de taekwondo (…). En el
transcurso del hecho la víctima resultó lesionada (…).
Estas razones llevan a concluir en que su conducta debe ser estimada en el marco del riesgo de elusión
procesal, de modo que asiste razón al Ministerio Público Fiscal en cuanto solicita la revocación del
auto recurrido, máxime cuando se considera que la simpleza de la colecta probatoria y el hecho de que
el procesamiento se encuentra firme permitirán el avance de la investigación a la siguiente etapa del
proceso, extremo este que augura una pronta definición del caso, en función de su calidad de detenido.
Así voto.
En consecuencia, el Tribunal RESUELVE: MODIFICAR el auto documentado a fs. (…) de este
incidente y, en consecuencia, CONCEDER la excarcelación a A. M. C. Á. bajo caución juratoria, junto
con la obligación de comparecer el primer día hábil de cada mes ante el juez de la causa".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Divito, Cicciaro, Scotto (en disidencia). (Sec.: Besansón).
c. 12.058/14, CASSINO ALVAREZ, Andrés Marcelo.
Rta.: 20/02/2015

EXCARCELACIÓN.

Rechazada. Registro de condenas y causa en trámite. Eventual condena que no podrá ser dejada en
suspenso. Posible sustracción al accionar de la justicia. Imputado involucrado en varios procesos
penales. Declaración de rebeldía en causas anteriores. Aportación de domicilio y nombre falsos.
Confirmación.

Fallo. "(...) Luego del análisis de la cuestión traída a estudio se considera que los agravios vertidos por
la defensa del encausado R. S. S., confrontados con las actas escritas que tenemos a la vista, (...) se
encuentra procesado con prisión preventiva en orden al delito de robo agravado por el empleo de un
arma y por la intervención de un menor de edad en concurso real con abuso sexual simple agravado por
el empleo de un arma, por los que deberá responder en calidad de coautor y autor respectivamente
(arts. 41 quarter, 55,166 inc 2°, primer párrafo y 119 último párrafo del CP) en concurso real con el de
robo agravado por su comisión mediante el empleo de un arma, por el que deberá responder en calidad
de autor ( art. 166 inc 2° primer párrafo del CP) pronunciamiento que en la fecha se encuentra firme.
(...). En ese sentido tenemos que el imputado registra antecedentes condenatorios: del registro del
Tribunal Oral de Menores (...). También el Tribunal Oral en lo Criminal (...). Finalmente, el Tribunal
Oral en lo Criminal n° 24, (...) lo declaró reincidente. Las sanciones enumeradas implican que, en caso
de recaer condena en estas actuaciones, no podrá acceder al derecho a la libertad condicional (art. 14
CP), como así tampoco la pena que eventualmente se imponga podrá ser de ejecución condicional (arts.
26, a contrario sensu, 27 C.P.). Se suma a ello que, en virtud de no ser hallado en el domicilio aportado,
el 10 de octubre de 2014, se declaró la rebeldía de S.
y se ordenó su captura, (...). Por otro lado, si bien al momento de su detención brindó su verdadero
nombre, no escapa al tribunal que ha sido registrado con más de una identidad (G. A. C. C., R. S. S.).
Finalmente, el tiempo que lleva en detención en esta causa (desde el 13 de enero de 2015, 12 días al
momento de la audiencia) no resulta desproporcionado atendiendo a las pautas establecidas por el art.
207 del código de forma, ni del Informe (...) de la C.I.D.H, como tampoco irrazonable frente a la pena
en expectativa establecida para el concurso de delitos que se le atribuye y los antecedentes que registra,

100
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

pues la condena que eventualmente se imponga será de efectivo cumplimiento y, en principio, se puede
inferir que no será fijada en el mínimo legal. En consecuencia, lo mencionado precedentemente nos
lleva a concluir que nos encontrarnos frente a una situación de excepción que admite la restricción de
su libertad a fin de asegurar el normal desarrollo del proceso (art. 280, a contrario sensu, y 319, CPPN).
En mérito a lo expuesto, el tribunal RESUELVE: CONFIRMAR la resolución cuestionada obrante a
(fs. ...) en cuanto fue materia de recurso. (...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala I, Bunge Campos, Rimondi. (Sec.: Sosa).


c. 45388/14, S., R. S.
Rta.: 03/02/2015

EXCARCELACIÓN.

Rechazada. Imputación que permitiría la concesión del beneficio solicitado. Imposibilidad de,
eventualmente, dejar en suspenso la condena a dictar por registrar varias condenas. Existencia de
riesgo de entorpecimiento. Imputado que amedrentó a la víctima. Tiempo en detención que no se
advierte desproporcionado ante la eventual forma de cumplimiento de sanción. Confirmación.

Fallo: "(…) El juez Ricardo Matías Pinto dijo: C. se encuentra procesado como autor del delito de robo
en grado de tentativa (fs….), decisión que no se halla firme.
(…) su situación encuadra en la 1ª de las hipótesis contempladas en el artículo 316, por remisión del
artículo 317, inciso 1° del Código Procesal Penal de la Nación.
Sin embargo, registra una pluralidad de condenas.
(…) Estas condenas indican que de recaer una sanción en esta causa, no pueda ser dejada en suspenso
(artículo 26, a contrario sensu, del Código Penal) y que deberá cumplir en forma integra la sanción al
haber sido declarado reincidente previamente.
Además, esas condenas marcan su desconocimiento del ordenamiento jurídico y constituyen pauta
objetiva de un concreto riesgo de fuga, que no puede ser neutralizado a través de una medida menos
gravosa que la detención.
En igual sentido valoro la pluralidad de nombres informados por el Registro Nacional de Reincidencia
(fs….), por ser indicadores de su pretensión de dificultar su identificación.
(…) debe ponderarse como pauta de riesgo de entorpecimiento al proceso el hecho de haber
amedrentado a la víctima una vez que fue aprehendido por el personal policial. Art. 319 del Código
Procesal.
(…) el tiempo que lleva en detención no se advierte como desproporcionado ante la eventual forma de
cumplimiento de la sanción y el tiempo que lleva en detención a la luz del art. 207 del C.P.P.N. (…)
corresponde confirmar la resolución impugnada. (artículo 280, a contrario sensu, del Código Procesal
Penal de la Nación).
Así voto.
El juez Mauro A. Divito dijo: Teniendo en cuenta que la pluralidad de condenas que registra el
imputado impediría que una eventual sanción en la presente fuera dejada en suspenso, que la última de
aquéllas quedó cumplida pocos días antes del hecho aquí investigado (fs. 36/37) y, principalmente, que
Chabría formulado manifestaciones intimidatorias contra el damnificado, a quien previamente habría
golpeado (fs. 7/8), extremos que conduce a presumir un peligro de entorpecimiento de la investigación,
adhiero a la solución propuesta por el juez Pinto.
(…) el tribunal RESUELVE: Confirmar el auto de fs. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, Pinto, Divito. (Sec.: Herrera).


c. 11.346/15/3, CASTILLO, Jonathan L.
Rta.: 19/03/2015

EXCARCELACIÓN.

Rechazada. Registro de causas en trámite en etapa de debate. Riesgo de elusión. Imputado que al ser
detenido fue mendaz al proporcionar sus datos personales e indicó ser menor de edad. Ocultamiento de
la verdadera identidad: serio indicador sobre la existencia de riesgo de elusión. Extranjero
indocumentado. Voto del Dr. Scotto: Antecedentes ante la justicia de menores que no deben ser
valoradas por su condición de menor al momento de la comisión de esos sucesos. Existencia de
indicadores de riesgo de elusión que impiden igualmente conceder el beneficio. Confirmación.

Fallo: "(…), concita la atención de la Sala el recurso de apelación interpuesto contra el auto
documentado a fs. (…) de este incidente, que no hizo lugar a la excarcelación de M. D. G. M.
El juez Juan Esteban Cicciaro dijo: El nombrado se encuentra procesado en orden al delito de robo
agravado por su comisión en lugar poblado y en banda (artículos 45 y 167, inciso 2° del Código Penal).
En consideración a la escala penal prevista para el delito reprochado y a la ausencia de antecedentes
condenatorios de G. M. (…), su soltura sólo sería procedente desde la perspectiva de lo dispuesto en el
art. 317, inciso 1° del Código Procesal Penal, en función del art. 316, segundo párrafo, segundo
supuesto, pues se ve superado el tope máximo de ocho años de pena prevista en la hipótesis restante.

101
Sin embargo, en el caso sub examen se verifican las condiciones impedientes a que alude el art. 319 del
ordenamiento adjetivo, a título de riesgo de elusión.
Ello, si se pondera el hecho de que no obstante registrar otras causas en trámite en la etapa de debate -
en las que también se lo vincula, al menos según lo informado en una de ellas, con delitos contra la
propiedad-, nuevamente se involucró en un episodio delictivo.
En concreto, ante el Tribunal Oral de Menores N° 2 se le siguen las causas números X y X (…).
Los extremos aludidos ponen de manifiesto la probabilidad de que el imputado no observe las pautas
jurisdiccionales que suponen el normal desarrollo de un proceso penal y concretan la existencia del
riesgo de elusión que justifica la vigencia de su encierro preventivo.
Se adiciona a ello que las referencias dadas para establecer su domicilio, concretadas al establecerse
que era mayor de edad (...) y en ocasión de ser oído por el juez (…), no permiten establecer un
concreto lugar de residencia e imposibilitan su efectiva constatación.
Además, en oportunidad de ser detenido fue mendaz al proporcionar sus datos personales, pues brindó
un nombre falso e indicó ser menor de edad -dijo llamarse "E. G.", de 17 años de edad y ser argentino-,
situación sobre la que se sinceró cuando fue remitido al centro de admisión y derivación de menores de
edad (…). El ocultamiento de la verdadera identidad importa un serio indicador sobre la existencia del
riesgo de elusión.
Frente a tales extremos, a lo que se suma su condición de extranjero indocumentado, se entiende que
existe la posibilidad cierta de abandonar el país, circunstancia que ha sido computada en el marco de
evaluación que aquí ocupa (1) y que merece una negativa valoración, porque en el supuesto de ser
excarcelado, ninguna de las cauciones a las que alude el artículo 320 del ritual serían suficientes para
asegurar su estadía en el país (2).
En consecuencia y siempre que el tiempo que G. M. viene cumpliendo en detención no se exhibe
irrazonable en atención a la penalidad máxima prevista para el delito enrostrado y que, en tanto la
investigación no se exhibe compleja se ve facilitado el avance del proceso a la siguiente etapa, lo que
augura una pronta definición de su situación, la decisión puesta en crisis debe ser homologada, de
acuerdo con el criterio esbozado por el fiscal de grado.
Así voto.
El juez Mariano A. Scotto dijo: Sin perjuicio de que considero que no deben ser valoradas las causas
que registra en trámite ante la justicia de menores en calidad de tal (…), ya que aquellos sumarios se
rigen por las reglas de la ley 22.278, habida cuenta que al momento de la comisión de los hechos allí
investigados el imputado era menor de edad (3), las demás circunstancias señaladas por el juez
Cicciaro en su voto, me persuaden de que, para el caso de que el imputado M. D. G. M., obtenga su
libertad, este intentará eludir la acción de la justicia, verificándose el riesgo de elusión que contempla
el artículo 319 del digesto ritual, por lo que voto por confirmar la resolución recurrida.
En consecuencia, el Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el auto obrante a fs. (…) de este incidente,
en cuanto fuera materia recursiva".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Cicciaro, Scotto. (Sec.: Besansón).


c. 8.574/15, GAMARRA MOREL, Marcos Daniel.
Rta.: 05/03/2015

Se citó: (1) C.F.C.P., Sala II, c. 11.316, "Aliandre, Marcelo", rta: 16/09/2009. (2) C.F.C.P., Sala III, c.
11.721, "Rivarola Gómez, Andrés Ramón s/recurso de casación", rta: 09/12/2009. (3) C.N.Crim. y
Correc., Sala VII, c. 13.417/2013/1, "Nieva, Miguel Á.", rta: 24/04/2013.

EXCARCELACIÓN.

Rechazada. Imputado procesado con prisión preventiva por robo en poblado y en banda tentado, en
concurso real con el de alteración de la numeración de un objeto registrado de acuerdo con la ley.
Calificación que lo habilitaría a transitar el proceso en libertad. Exceso de violencia en la ejecución de
hecho. Indicadores de riesgo de elusión: Irregular situación migratoria y dudoso arraigo. Confirmación.

Fallo: "(…) El Juez Julio Marcelo Lucini dijo: (…) fue procesado, con prisión preventiva, por la
comisión de delitos de robo en poblado y en banda tentado, en concurso real con el de alteración de la
numeración de un objeto registrado de acuerdo con la ley (arts.167 inc.2° y 289 inc.3° del Código
Penal).
Si bien el mínimo punitivo previsto para esa calificación lo habilitaría a transitar el proceso en libertad,
se verifican pautas objetivas que ameritan confirmar la decisión impugnada en los términos del artículo
319 del Código Procesal Penal de la Nación.
En el caso gravitan de manera negativa las circunstancias del hecho, en el cual el nombrado junto a sus
consortes de causa habrían asestado golpes de puño al damnificado en su rostro tras romper la
ventanilla del vehículo que conducía y luego huyeron en dos motos, originando una prolongada
persecución policial hasta que se concretó su detención.
Ello demuestra la actitud elusiva y temeraria asumida por (…) en el suceso analizado.
Además ponderamos su arraigo dudoso, por cuanto no vive en el domicilio que aportara su pareja (…),
y el que fuera por él brindado (…) aún no fue constatado, no obstante lo cual se trataría de un hotel de
pasajeros.

102
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

Se suma que su situación migratoria es irregular (…), y que en los cuatro meses de residencia en el país
se vio involucrado en dos eventos ilícitos. En el presente y en el que se investiga en la causa (…) ante
el Juzgado de Instrucción (…).
Lo expuesto demuestra que en el caso se verifican los riesgos a los que hace alusión la norma referida y
que la medida de coerción es indispensable para asegurar su sujeción, sin que se vislumbre, por el
momento, otra menos gravosa para asegurar los fines del proceso, máxime cuando no puede
descartarse que la sanción sea de efectivo cumplimiento si los sumarios son eventualmente juzgados en
forma conjunta.
(…) Así voto.
El juez Mario Filozof dijo: Se verifica en el suceso atribuido un exceso de violencia en su ejecución y
también se constató una irregular situación migratoria.
Tales elementos de ponderación, relevantes para analizar el asunto, no fueron contemplados en el
dictamen fiscal de fs. (…) y ello impone apartarme de la opinión vertida por el Ministerio Público.
Por ello, compartiendo en lo sustancial el voto del Dr. Julio Marcelo Lucini, me adhiero a sus
fundamentos.
En consecuencia, el Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el auto de fs.
(…) en cuanto fuera materia de recurso. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini, Filozof. (Sec.: Oberlander).


c. 11.400/15, DIAZ CURREA, José Ricardo.
Rta.: 16/03/2015

EXCARCELACIÓN.

Rechazada. Elementos que permiten presumir que el imputado puede fugarse. Imputado que registra
antecedentes condenatorios y ha sido declarado reincidente. Dudoso arraigo. Confirmación.

Fallo. "(...). Los agravios de la defensa no logran conmover los fundamentos de la resolución apelada,
por lo que corresponde confirmarla. En consonancia con lo expuesto por el juez de instrucción,
advertimos que hay serios indicios que denotan la existencia de un peligro de fuga tal que no puede ser
neutralizado mediante la imposición de una medida menos lesiva que la restricción de la libertad de G.
R. A. (art. 280 del CPPN). En primer lugar se destaca la importante entidad de las pruebas de cargo
reunidas, que ha ameritado el dictado de su procesamiento con prisión preventiva (...). Por otro lado, en
virtud del tiempo transcurrido desde la última condena que registra en su haber (dictada el 14/3/2012
por el Juzgado Correccional Nº 2 de Quilmes en la causa n° 2704/2011 a dos meses de prisión de
cumplimiento efectivo por ser coautor del delito de robo simple en grado de tentativa y se lo declaró
reincidente, nos remitimos al detalle de la resolución en crisis), el cumplimiento de la pena a imponer
en esta causa no podría ser dejado en suspenso y se mantendría su declaración de reincidencia (...).
Además, su arraigo es dudoso ya que si bien informó el domicilio de su madre, dijo que vivía en la
calle (cfr. fs. ...). Por último, el tiempo que lleva en detención no luce desproporcionado frente a la
expectativa de pena de efectivo cumplimiento que podría corresponderle y al avanzado estado del
proceso (art. 207 del código de forma); (...). En conclusión, el tribunal RESUELVE: CONFIRMAR la
resolución de (fs. ...). en todo cuanto ha sido materia de apelación (art. 455 del CPPN). (...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala I, Bunge Campos, Rimondi. (Sec.: Sosa).


c. 15625/15, ALMADA, Guillermo Ramón.
Rta.: 13/04/2015

EXCARCELACIÓN.

Rechazada. Hurto. Posible riesgo de fuga. Registro de condenas, falta de arraigo, identificado con
diferentes nombres lo que torna confusa su identidad. Declarado rebelde en tres oportunidades.
Imputado habido por haber sido aprehendido ante la presunta comisión de un delito. Confirmación.

Fallo: "(…) III.- El juez Julio Marcelo Lucini dijo: Surge del legajo que el (…) el Tribunal Oral en lo
Criminal (…), en la causa nro. (…), lo condenó a la pena única de un año de prisión en suspenso por el
delito de robo reiterado en tres oportunidades, comprensiva de la impuesta el (…) por el Juzgado
Correccional (…) del Departamento Judicial de Zárate, Campana, provincia de Buenos Aires, en la
nro. (…) y de la de cuatro meses de prisión condicional recaída el (…) en la nro. (…) del Juzgado
Correccional (…) del Departamento Judicial de San Isidro, provincia de Buenos Aires (…).
Ello determina que la eventual sanción a aplicar en estas actuaciones no podría ser dejada en suspenso
(artículos 26 a contrario sensu y 27 del Código Penal).
Además posee cuatro alias (…) y en este expediente aportó dos nombres distintos lo que torna confusa
su identidad (…). A ello se suma que carece de arraigo (…).
Tampoco puede dejar de mencionarse que durante el trámite de las dos últimas causas reseñadas fue
declarado rebelde, al igual que en la presente (…) y en la nro. (…), acumulada jurídicamente a ésta e
instruida por el delito de tentativa de robo agravado por su comisión en poblado y en banda (…), pese a

103
estar notificado de su existencia y haber sido citado formalmente (…). Además, no está a derecho por
propia voluntad sino por haber sido aprehendido por la presunta comisión de un delito.
Todo lo cual es demostrativo de lo indispensable de la cautela dispuesta ante el posible riesgo de fuga.
Además, los procesos en trámite que registra darían lugar a la eventual aplicación de las reglas de los
artículos 55 y 58 del Código Penal lo que permite inferir que la sanción a recaer se alejaría del mínimo
legal previsto para el delito en análisis, lo que evidencia también que la medida no es
desproporcionada.
Así, al verificarse los riesgos procesales a los que alude el artículo 319 del ordenamiento ritual, voto
por homologar la decisión apelada.
El juez Mario Filozof dijo: Poniendo énfasis en la razonabilidad de la prisión preventiva, conforme los
Tratados Internacionales de rango constitucional deseo señalar que (…) se encuentra detenido desde el
(…), por ende, no se ha superado el umbral previsto en el artículo 207 del ceremonial (ver el voto del
Juez Luis M. García en CNCP, Sala 3era, Reg. 11/2015 del 10 de abril de 2015 con adhesión de los
jueces Pablo Jantus y Carlos A. Mahiques y del juez Pablo Jantus en la misma Sala con aquiescencia
de los jueces Horacio L. Días y Carlos A. Mahiques, Reg. 45/2015 del 28 de abril de 2015).
Con ello presto mi adhesión al voto precedente.
En consecuencia, el Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el auto de fs. (…) en todo cuanto fuera
materia de recurso de apelación. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini, Filozof. (Prosec.: Gallo).


c. 39.220/14, VILLA, Alejandro Gabriel.
Rta.: 14/05/2015

EXCARCELACIÓN.

Rechazada. Imputado procesado por (artículos 45 y 164 del Código Penal). Existencia de riesgos
procesales: intento de darse a la fuga; registro de antecedentes condenatorios que implicarían, ante la
eventualidad de una condena, su imposición de efectivo. Empleo de violencia en el hecho.
Confirmación.

Fallo: "(…) Ponderamos que las medidas de prueba realizadas permitirían establecer la existencia de
una organización (la que integraría el aquí imputado) dedicada a cometer hechos ilícitos similares al
investigado, en donde incluso, como lo señalara el fiscal de la instancia anterior, podría tener algún tipo
de participación personal policial de la P.F.A. (v. fs…).
(…) advertimos que luego de que el Magistrado librara la orden detención, el imputado fue
identificado por personal policial en la vía pública e intentó darse a la fuga (fs…).
(…) valoramos la modalidad y las particulares circunstancias del hecho, en tanto ilustran acerca de la
violencia ejercida para cumplir su cometido al abordar por detrás al damnificado y tomarlo del cuello,
para luego forcejear y sustraerle de un fuerte tirón de su mano el reloj, las que constituyen elementos
objetivos de juicio que permiten concluir que, en este caso, se verifica la situación de excepción
prevista en el artículo 319 del Código Procesal Penal de la Nación.(…) consideramos la existencia de
riesgos procesales que permiten justificar la detención provisoria de S.E.L. (…) el tiempo que lleva en
detención (desde el 21 de abril de 2015) no luce desproporcionado en los términos del artículo 207 del
código de rito e informe 2/97 de la C.I.D.H, y al considerarse la expectativa de pena establecida para el
delito que se le atribuye al procesado, valorando que el imputado registra antecedentes condenatorios
(v. fs. 277 y 310 del principal), lo que permite inferir que una eventual sanción a recaer en los
presentes actuados será de efectivo cumplimiento (artículo 26, a contrario sensu, del Código Penal).-
(…) entendemos que la medida cautelar resulta indispensable para asegurar los fines del proceso
(artículo 280 "contrario sensu" del código adjetivo).
(…) el tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el auto de fs. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, López González, Pinto. (Sec.: Poleri).


c. 897/15/1, LAREZ, Sergio E.
Rta.: 11/05/2015

EXCARCELACIÓN.

Rechazada. Imputado procesado por robo agravado por su comisión mediante escalamiento, en grado
de tentativa, en concurso real con hurto agravado por su comisión con escalamiento, en grado de
conato. Ausencia de condenas anteriores, de peligros procesales y de entorpecimiento en la
investigación. Anuencia del fiscal respecto la postura liberatoria. Revocación. Procedencia bajo
caución juratoria y comparecencia mensual en el juzgado.

Fallo: "(…) Atento a la penalidad prevista para esas conductas, su situación encuadra en la 2ª de las
hipótesis que describe el artículo 316, por remisión del artículo 317, inciso 1°, del CPPN, por cuanto
no registra condenas (cfr. fs….), de modo que una eventual sanción en la presente podría ser dejada en
suspenso.

104
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

(…) no surgen datos indicativos de peligros procesales que impongan mantener su encierro cautelar,
apreciación que en el caso concreto ha sido compartida por la representante del ministerio público
fiscal, quien expresó su anuencia a la liberación del imputado, con la imposición de una regla de
presentación periódica (ver fs…).
La instrucción no es compleja y se halla prácticamente terminada, con lo que no es posible que la
entorpezca.
Tampoco existen pautas de un peligro de elusión. De aplicársele pena en estas actuaciones, podrá
eventualmente -como se dijo- dejársela en suspenso. Por otra parte, el nombrado se identificó
correctamente (fs….); brindó su domicilio real, que fue constatado (fs…); aportó un teléfono para
facilitar su ubicación (fs…); no ha registrado rebeldías (…) y ha cumplido en detención cuarenta y
cinco días en estas actuaciones y su acumulada.
(…) también cabe destacar que a la audiencia oral concurrieron la madre y la pareja del imputado.
(…) lo excarcelaremos bajo una juratoria, y le impondremos la obligación de comparecer al tribunal
una vez al mes, en la oportunidad que el magistrado determine.
(…) el tribunal RESUELVE: Revocar el auto de fs. (…)y excarcelar a (…) (…)bajo caución juratoria y
la obligación de comparecer una vez al mes al tribunal, en la oportunidad que el magistrado determine
(artículos 310, 317, inciso 1°, y cc. del CPPN)".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, López González, Divito. (Sec.: Herrera).


c. 17.033/15/1, TARITOLAY, Daniel A.
Rta.: 06/05/2015

EXCARCELACIÓN.

Rechazada. Encubrimiento agravado por haberse cometido con ánimo de lucro. Imputado que, en caso
de recaer condena, debería ser de cumplimiento efectivo porque registra tres condenas y una causa en
trámite en la etapa de juicio. Identificado con diferentes nombres. Arraigo dudoso. Confirmación.

Fallo: "(…) Del legajo se desprende que registra tres condenas (…); la última impuesta el (…) por el
Tribunal Oral en lo Criminal (…), en las causas (…), a la pena de tres años de prisión de efectivo
cumplimiento, en orden al delito de robo en poblado y en banda, en concurso real con el de robo y a la
única de cinco años de prisión, comprensiva de la anterior y de la pena única de tres años de prisión
fijada el (…), por el Tribunal Oral en lo Criminal (…).
Por ende, de recaer igual temperamento en estas actuaciones la sanción sería de efectivo cumplimiento
y cabría la posibilidad de que fuera declarado reincidente (artículo 26 "a contrario senus" y 50 del
código de fondo).
También gravita negativamente un proceso en la etapa de juicio del Juzgado en lo Correccional (…),
por el delito de lesiones y los diferentes nombres con los que está inscripto (…).
(…) al ser aprehendido indicó que vivía en (…), lo que mantuvo al prestar declaración indagatoria y al
confeccionarse el informe socio-ambiental, pero al presentarse personal policial en dos oportunidades
se estableció a través de su abuela que no residía allí (…). Por lo tanto, este nuevo domicilio que
introduce la defensa, de momento, no logra modificar el dudoso arraigo que se vislumbra de lo
reseñado anteriormente.
En consecuencia, estimamos que en el caso se verifican los riesgos a los que hace alusión el artículo
319 del ceremonial y que la medida de coerción es indispensable para asegurar su sujeción al proceso,
sin que se vislumbre por el momento, otra menos gravosa, máxime teniendo en cuenta lo avanzado del
proceso (…).
(…), el Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el auto de fs. (…), en cuanto fuera materia de recurso.
(…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini, Filozof. (Sec.: Carande).


c. 11.010/15, VÁZQUEZ, José María.
Rta.: 20/05/2015

EXCARCELACIÓN.

Rechazada. Robo con fractura de puerta de un lugar habitado. Imputado con antecedente condenatorio
y que mintió al aportar los datos de su identidad. Forma en que se dio a la fuga con su consorte de
causa (conduciendo un rodado a gran velocidad y en sentido contrario a la circulación vehicular) que
muestran un desapego a las normas básicas de convivencia. Irregular situación migratoria.
Confirmación.

Fallo: "(…) II.- Se encuentra procesado en orden al delito de robo con fractura de puerta de un lugar
habitado (…). El mínimo de su escala punitiva se encuentra dentro de los parámetros del artículo 317
inciso 1° en función del 316 del Código Procesal Penal.
No obstante, el antecedente condenatorio que registra impide que de recaer sentencia en esta causa la
pena pueda ser dejada en suspenso, lo que opera como un primer indicador del riesgo de elusión que
marca su artículo 319.

105
Se agrega que al ser detenido mintió al aportar los datos de su identidad, refiriendo llamarse (…) y ser
indocumentado, lo que luego rectificó al momento de ser indagado (…).
A su vez, si bien el hecho no exhibe ribetes de gravedad que excedan la violencia típica de la figura en
examen, lo cierto es que la forma en que junto a su consorte de causa se dieron a la fuga, conduciendo
un rodado a gran velocidad y en sentido contrario a la circulación vehicular, permite advertir su
desapego a las normas más básicas de convivencia por el consecuente riesgo que implicó su accionar.
Ello demuestra una voluntad contraria al sometimiento a proceso que aconseja mantener su
encarcelamiento preventivo, pues no se advierte un modo menos gravoso de neutralizar el riesgo de
fuga que se ha verificado en el sumario. Máxime si se atiende a su irregular situación migratoria, que
conforme lo sostuvo la defensa en la audiencia se verifica desde hace varios años.
(…), el Tribunal RESUELVE: I.- CONFIRMAR el auto de fs. (…), en cuanto fue materia de recurso.
(…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini, Filozof. (Prosec.: Gallo).


c. 25.076/15, CASTILLO ZALAZAR, Javier.
Rta.: 29/05/2015

EXCEPCIÓN DE FALTA DE ACCIÓN.

Rechazada. Querellante que no contesta la vista concedida a los fines del art. 346 del C.P.P.N. Omisión
que no implica desistimiento. Conservación de las facultades para proseguir actuando en el eventual
debate. Confirmación.

Fallo: "(…) II.- Resulta de aplicación en este caso lo expuesto con anterioridad por esta Sala, en cuanto
a que nada impide que el querellante que no contestó la vista concedida, pueda seguir ejerciendo los
derechos procesales que el ordenamiento vigente le adjudica (1).
La Cámara Federal de Casación Penal ha sostenido que "La limitación o veda consecuente de la
omisión de respuesta a la vista conferida en los términos del artículo 346 del ordenamiento formal, no
acarrea, necesariamente impedimento alguna para que la parte pueda ejecutar distintas funciones, tales
como el control de producción de prueba y, eventualmente, la articulación de recursos adhesivos al
Ministerio Público Fiscal" (2).
En consecuencia, el acusador privado conserva facultades para proseguir actuando como tal en el
eventual debate. Su silencio o invalidación de la requisitoria no conllevan su separación, sólo le veda el
ejercicio de los actos dependientes del requerimiento de elevación a juicio. No obstante persiste su
actuación ya que la omisión o falencia de su presentación no implica el desistimiento de querellar, que
debe ser expreso (3).
Por los argumentos expuestos, el Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el auto de fs. (…), en cuanto
fue materia de recurso. (…)."

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini, Pociello Argerich. (Prosec.Cám.: Gallo).


c. 30.421/12, MEDINA, Arnaldo Oscar.
Rta.: 19/02/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correcc., Sala VI, c. 49/12, "Personal Policial de la Seccional 1° de la P.F.A.",
rta.: 13/3/12; c. 32550, "Pérez, Jorge", rta.: 17/07/2007 y c. 40818, "Mazzeo, Esteban Ariel Hugo", rta.:
2/02/2011; (2) C.N.C.P., Sala I, reg. 12.074.1, "Bulcourt, Jorge Patricio s/recurso de casación", rta.:
03/06/2008; (3) C.N.Crim. y Correcc., Sala IV, c. 558/104, "Incidente de nulidad", rta.: 12/05/2010.

EXCEPCIÓN DE FALTA DE ACCIÓN.

Rechazada. Planteo anterior rechazado. Preclusión de la posibilidad de las partes de replantear la


cuestión sin variación de las circunstancias fácticas o jurídicas. Confirmación.

Fallo: "(…) La defensa recurrió en apelación el auto documentado a fs. (…), por el que se rechazó la
excepción de falta de acción promovida a fs. (…).
Los cuestionamientos relativos a la atipicidad del hecho en la querella instaurada por E. E. ya fueron
tratados por esta alzada el 14 de marzo de 2014 (…), puntualmente en los párrafos quinto y sexto de la
decisión extendida a fs. (…), oportunidad en la que se sostuvo la imposibilidad de descartar, sin un
avance del proceso, la subsunción típica de las publicaciones reputadas como injuriosas.
Esta nueva presentación introduce la misma excepción pero con otros argumentos, sobre la base de
escindir cada hecho como si se tratara de conductas independientes. Así, en la medida en que el
artículo 339, último párrafo, del Código Procesal Penal establece que las excepciones deberán
interponerse en forma conjunta, la pretensión de la defensa no tendrá acogida favorable.
Al respecto, ha señalado la doctrina "que una vez rechazada la excepción, es improcedente su nueva
sustanciación aunque varíen los argumentos (1). La razón del impedimento viene dada por el efecto
que produce la cosa juzgada formal. Sólo admite modificación en tanto varíe el estado de cosas
evaluado al decidir…dando así por precluida la posibilidad de las partes de replantear la cuestión sin

106
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

variación de las circunstancias fácticas o jurídicas" (Guillermo R. Navarro y Roberto R. Daray, Código
Procesal Penal de la Nación, Análisis doctrinal y jurisprudencial, t. II, 5ta. ed. actualizada y ampliada,
Hammurabi, Bs. As., 2013, p. 670).
Por ello, en tanto el planteo reedita debates zanjados, corresponde homologar el rechazo asumido en la
anterior instancia, con imposición de costas por no advertirse razones que justifiquen el planteo (art.
531 del Código Procesal Penal).
En consecuencia, el Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el auto obrante a fs. (…), en cuanto fuera
materia del recurso, con costas".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Scotto, González. (Sec.: Sánchez).


c. 8.828/13, CORNIDE, Osvaldo.
Rta.: 06/03/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correc., Sala I, c. 8040, "Slavutzky, S.", rta: 03/11/1959.

EXCEPCIÓN DE FALTA DE ACCIÓN.

Rechazada. Investigación en la cual el fiscal ha solicitado que se convoque al imputado a prestar


declaración indagatoria. Planteo improcedente. Confirmación.

Fallo: "(…) II.- La parte sostiene que no existe elemento de prueba alguno que permita acreditar el
resultado lesivo exigido por el tipo penal reprochado.
III.- Entendemos que para que el planteo sea procedente el suceso debe carecer inequívocamente de
tipicidad objetiva, o debe mediar respecto del excepcionante una excusa absolutoria (1), supuestos que
no se verifican en el caso a estudio.
El episodio por el cual el Ministerio Público Fiscal requirió la convocatoria del imputado a prestar
declaración indagatoria constituye una hipótesis cuya relevancia típica no puede descartarse, mas allá
de lo que resulte de la prueba a colectar y valorar.
En consecuencia, el Tribunal RESUELVE: Confirmar el punto I del auto de fs. (…) en todo cuanto fue
materia de recurso. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini, Filozof. (Sec.: Carande).


c. 72.234/13, MAMANI URIMO, Norberto Andrés.
Rta.: 13/05/2015

Se citó: (1) Guillermo Rafael Navarro-Roberto Raúl Daray, "Código Procesal Penal de la Nación.
Análisis doctrinal y jurisprudencial", 1° ed., Buenos Aires, Hammurabi, 2004, Tomo II, pag. 929.

EXCEPCIÓN DE FALTA DE ACCIÓN.

Rechazada. Pretensión de apartar a la empresa querellante de su rol con el argumento de que con
posterioridad a la legitimación, la parte transfirió en forma onerosa el crédito a un tercero. Acción que
sólo se tiene por renunciada en caso de convenio entre el imputado y el damnificado. Confirmación.

Fallo: "(…), concita la atención de esta Sala el recurso de apelación interpuesto por la defensa contra el
auto documentado a fs. (…) -punto I- de este incidente, en cuanto no se hizo lugar a la excepción de
falta de acción promovida para que el denominado "G. R." sea apartado del rol de querellante.
El agravio se basa en que cuando se le admitió el rol activo en el proceso, la conducta imputada a A. P.
M. consistía en haber ocasionado un perjuicio económico al "G. R.", porque se habría impedido el
cobro de un crédito insinuado contra la firma "X SA" en el marco del concurso preventivo de
acreedores que se le seguía.
Sin embargo, el "G. R." transfirió dicho crédito a la empresa "N. F. SA", y al tratarse de un convenio
oneroso sobre el pago del supuesto daño, debe entenderse que renunció a la acción criminal, de
acuerdo con cuanto establece el art. 1097 del Código Civil.
La Sala comparte con el señor magistrado a quo en torno a que no procede el desplazamiento de la
parte querellante -el "G. R."por la transferencia onerosa del crédito que mantenía con "X SA" a un
tercero.
Así, no cabe otorgarle al artículo 1097 del Código Civil el alcance atribuido por la defensa, al menos
en lo que pudiere ser concerniente al caso.
Ello, porque si se pondera que el último párrafo del texto normativo establece que "si renunciaron a la
acción civil o hicieron convenio sobre el pago del daño, se tendrá por renunciada la acción criminal",
es claro que se trata de hipótesis en las que el "convenio" tiene lugar entre el particular damnificado por
el delito y quien resulta imputado en función del perjuicio irrogado -con la salvedad que luego se
formulará- y, en consecuencia, descarta los supuestos en los que el pacto se celebra con terceros ajenos
al conflicto, como ocurre en el sub examen.
De acuerdo con lo expuesto y la cita de jurisprudencia efectuada por la querella, "el convenio sobre la
reparación del daño al que alude el artículo 1097 del Código Civil requiere para ser considerado tal,

107
que sea el imputado el que repare el daño causado -por el delito que se le atribuye- al particular
damnificado" (1).
Como se adelantó, claro está que el acuerdo podrá ser concretado entre el querellante y la compañía
aseguradora con quien el imputado hubo de celebrar un contrato de seguro, situación que escapa a la
del sub examen y es la que ha reportado la defensa a fs. (…) al invocar en su favor los
pronunciamientos dictados por esta Sala en los casos "Bosnjak" y "Chiummiento". Menos aún resulta
aplicable el precedente "Tangir", pues allí el convenio contemplaba el expreso desistimiento del
querellante en la causa penal, lo que no se verifica en este proceso.
La diferencia es sencilla, pues en el caso planteado, no hay acuerdo entre las partes, que es aquello -
justamente- que con independencia de los criterios que existen respecto de la materia permitiría
considerar renunciado -al menos tácitamente el ejercicio de la acción en sede penal.
Ello, con independencia de lo dispuesto en el artículo 842 del Código Civil, mencionado por la querella
y la resolución atacada, pues "cuanto ha querido expresarse por el codificador en el art. 842 del Cód.
Civil es que la acción penal que surge del delito (de acción pública) no puede ser objeto de transacción
alguna ni por el Ministerio Público Fiscal ni por la víctima, visto ello desde la imposibilidad jurídica de
que de tal modo pueda cercenarse o resultar afectado el ius puniendi estatal, expresado así en un
contexto temporal en el que era necesario prefijar reglas que en la actualidad parecen obvias" (2), en
tanto no luce relevante para el caso tratado.
De otro lado, los acuerdos a los que remite la defensa -cuyos textos se tienen a la vista y que se
adosaron al incidente luego de la audiencia oral celebrada, a fs. (…)- no contienen una concreta
referencia al daño que hubiere causado el delito aquí investigado ni a la intención del "G. R." de no
reclamar el posible perjuicio económico al imputado (3).
En efecto, se alude a que el cedente coloca a la cesionaria en la misma "posesión [posición] procesal
que le corresponde en los procesos mencionados" (cláusula segunda, fs. x), sin que surja
precedentemente alusión alguna a este sumario.
Además, surge del testimonio de la actuación notarial respectiva -escritura número doscientos
cincuenta y tres-, que el pago de la cesión de crédito ha sido acordado a plazo y la última cuota vencerá
el 24 de octubre de 2017 (cláusula cuarta, fs. x), por lo que no puede concluirse en que no subsiste el
invocado perjuicio económico para el "G. R.", pues los pagos comprometidos son a futuro.
A ello se suma que en la cláusula quinta del mismo instrumento se establece que el cedente -"G. R."-
"mientras se mantenga vigente la cesión, se obligará…a efectuar todos los reclamos y acciones
necesarias para la debida protección de los derechos derivados de esta cesión" (...), lo que lleva a
estimar que el compromiso contractual incluye el hecho de no renunciar a la condición de querellante
que ostenta el "G. R.".
Entonces, siquiera podrá considerarse que hubo una renuncia tácita al derecho de querellar, con
independencia de que los convenios firmados no se celebraron entre el particular ofendido y el
imputado, sin que el caso responda al supuesto singular del contrato de seguro.
Las costas habrán de imponerse en el orden causado, en función de que la cuestión jurídica suscitada
pudo dar lugar, plausiblemente, al planteo formulado, y de ahí que se advierta procedente la exención
parcial que, de modo excepcional, contempla el artículo 531 del Código Procesal Penal.
Por lo expuesto, esta Sala RESUELVE: CONFIRMAR el auto documentado a fs. (…) -punto I- de este
incidente, en cuanto fuera materia de recurso. Costas por su orden".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Cicciaro, Pociello Argerich. (Sec.: Besansón).


c. 26.056/07, MORINI, Alberto Pedro.
Rta.: 21/05/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correc., Sala V, c. 27.970, "Kaufer Barbe, Pablo H. s/falta de acción", rta:
04/11/2005. (2) Guillermo Navarro y Roberto Daray, La Querella, 3ra. Ed., Hammurabi, Bs. As., 2008,
p. 132. (3) C.N.Crim. y Correc., Sala VII, c. 34.865, "Maggio, Francisco", rta: 19/09/2008.

EXENCIÓN DE PRISIÓN.

Rechazada. Imputado procesado por robo con armas. Circunstancias que no han variado desde el
momento en que fue anteriormente rechazado el pedido de excarcelación. Existencia de riesgos
procesales. Confirmación.

Fallo: "(…) el nombrado con fecha 27 de enero de este año, recuperó su libertad en virtud del
sobreseimiento adoptado a fs.
(…) por el magistrado de grado, que fue revocado por esta Sala a fs. (…), en razón de la apelación
presentada por el representante del Ministerio Público Fiscal. Atento a lo resuelto, la jueza a quo
ordenó la detención de R. y el allanamiento de su morada, lugar en el que no fue habido (ver nota de
fs….).
En ese marco corresponde destacar que no han variado sustancialmente las circunstancias que analizó
la Sala de Feria en el mes de enero de este año cuando confirmó la denegatoria de su excarcelación (ver
fs….).

108
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

(…) la situación del imputado no encuadra en ninguna de las hipótesis previstas en el artículo 316, 2°
párrafo en función del artículo 317, inciso 1°, del Código Procesal Penal, y a ello se añade la existencia
de riesgos procesales que ameritan homologar el auto apelado.
(…) es dable ponderar la modalidad y las particulares características del hecho investigado, en el cual
el imputado junto a sus consortes habría ingresado al domicilio de las víctimas, a quienes habrían
amenazado con elementos que aparentaban ser armas de fuego y cuchillos, extremos que corroboran
que, en este caso, se verifica la situación de excepción prevista en el artículo 319 del código adjetivo.
Por otro lado, tampoco puede pasarse por alto que registra un antecedente condenatorio a la pena de
tres años de prisión en suspenso, cuya condicionalidad debería revocarse, unificando ambas sanciones -
si fuera condenado en la presente- (ver fs. …).
Los extremos señalados, ponderados en conjunto, justifican su encierro preventivo para garantizar el
cumplimiento de los fines del proceso (arts. 280 y 319 del C.P.P.N.).
(…) cabe señalar que si bien posee domicilio constatado, toda vez que -en un principio- fue detenido
durante un allanamiento efectuado en su vivienda (ver fs. …), lo cierto es que este extremo no logra
neutralizar los riesgos procesales reseñados.
(…) el tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el auto de fs.(…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, López González, Divito. (Sec.: Raña).


c. 18.321/14/9, RICCI, Cristian G.
Rta.: 08/05/2015

EXENCIÓN DE PRISIÓN.

Rechazada. Peligros procesales advertidos en la anterior intervención de la Cámara que han perdido
virtualidad. Imputada que pese a encontrarse en conocimiento de la imputación que se le efectuara, no
se hizo presente a prestar declaración indagatoria. Revocatoria. Concesión bajo caución real.

Fallo. "(...) actuaciones a nuestro conocimiento en virtud del pedido de exención de prisión efectuado
por la defensa de M. G. M. Ahora bien, más allá de la negativa fundada por el Sr. fiscal de grado en su
presentación de (fs. ...), entendemos que, en vista a lo resuelto por el Tribunal Oral en lo Criminal n°
12, conforme surge de la certificación actuarial agregada a (fs.
...) de los autos principales que, en testimonios tenemos a la vista, las condenas impuestas a los
restantes consortes de causa, no han superado el tope de los tres años de prisión y, salvo I. C. -que
poseía condenas previas- todos han sido puestos en libertad, ya sea por haberse dispuesto la
condicionalidad de la condena, o bien al serles concedida la suspensión del proceso a prueba (cfr. fs.
...). Así las cosas, los peligros procesales que se fundaran en nuestra anterior intervención, han perdido
virtualidad (cfr. fs. ...), por lo que habremos de conceder la exención de prisión de M. G. M.. En cuanto
a la caución a imponer, atento a lo informado por la Sra. defensora en la audiencia y toda vez que,
desde que el fiscal requiriera su indagatoria en septiembre de 2014 (cfr. fs. ...), pese a encontrarse en
conocimiento de la imputación que se le efectuara, no se hizo presente a los fines dispuestos en el art.
294 del C.P.P.N., (...). Por todo lo expuesto, se RESUELVE: REVOCAR el auto de (fs. ...), y
CONCEDER LA EXENCIÓN DE PRISIÓN a MERCEDES GABRIELA MIGUEL, bajo CAUCION
REAL de CINCUENTA MIL PESOS ($ 50.000), (...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala I, Bunge Campos, Rimondi. (Prosec. Cám.: León).


c. 28825/14, MIGUEL, Mercedes Gabriela.
Rta.: 29/06/2015

EXPLOTACION DEL EJERCICIO DE LA PROSTITUCIÓN.

Procesamiento. Imputados que se aprovechaban de las ganancias que surgían del ejercicio de la
prostitución de un grupo de mujeres, en inmuebles regenteados por varias personas. Explotación
económica. Elementos de prueba suficientes. Confirmación.

Fallo: I. "(...) Coincidimos con la Jueza de grado en que las pruebas colectadas poseen la entidad
convictiva que exige el artículo 306 del ordenamiento ritual, pues conducen a descartar la ajenidad
alegada por las respectivas defensas (que pretenden que se otorgue a sus asistidos la mera calidad de
locador y locataria, respectivamente) y a colegir que tanto W. E. D. como D. M. B. R. se aprovechaban
de las ganancias que surgían del ejercicio de la prostitución de otras mujeres, obteniendo réditos de
naturaleza económica.
En tal sentido, son varios los elementos que merecen ponerse de resalto, en tanto revelan con claridad
el rol que ocupaba cada uno de los encausados en la organización del negocio de rufianería que entre
ambos explotaban.
Ponderamos en primer término la declaración de la Cabo 1° Daniela Nancy Ramírez "(fs. ...)", quien
concurrió al domicilio de la calle L. N° xx sin dar cuenta de su condición policial y mantuvo un
diálogo con una mujer que se identificó como "S.".
Ésta le refirió que las "señoritas" que allí trabajan cobran 300 pesos los "pases" y que "se llevarían el
40% de la comisión".

109
Valoramos también el testimonio ofrecido por el Oficial de Prefectura Naval Argentina Hernán
Emmanuel Minetti "(fs. ...)", quien analizó las escuchas telefónicas efectuadas en autos haciendo
particular referencia a una de ellas, en la que se aprecia al imputado D. dando la orden de que al "x°x"
no subiera nadie excepto clientes conocidos.
Deben destacarse además los extremos que emergen de las manifestaciones del Prefecto Principal y
Jefe del Departamento Investigaciones de Trata de Personas, Guillermo José Giménez Pérez, en
particular, la referencia que hizo a un llamado telefónico de D. por el cual solicitaba hablar con B. R.
"porque tenía muchos quilombos". Señaló aquél que en virtud de la pesquisa practicada aconsejó
prorrogar las intervenciones a la línea de D. M. B. R. "que es donde W. se comunica y pregunta por las
chicas" "(fs. ...)". Por su parte, al declarar a "(fs. ...)" agregó: "objetivamente puedo decir que W. D.
administraba, regenteaba los inmuebles investigados en donde funcionaban privados y había señoritas
ejerciendo la prostitución y compartían la recaudación con W. D.".
En otro orden, del informe de "(fs. ...)" se desprende una comunicación en la cual D. refiere que debía
retirar el dinero recaudado "del fin de semana… al 4° y del 1° de L.", y otra en la que B. R. le pide a
aquél "que pase a retirar su plata". Se dejó allí plasmado que D. utilizaría las páginas
"www.xxxcom.ar" y "www.xxx" para promocionar la oferta de servicios sexuales, y que existió una
conversación entre ambos encartados en la cual la imputada menciona que resultaba necesario
"cambiar a las chicas" y contratar otra telefonista para atraer más clientes.
Debe subrayarse a su vez el informe de "(fs. ...)", confeccionado a partir de los allanamientos
practicados en autos, donde se especificó que una de las mujeres que allí se encontraba indicó que le
entregaba a "la Sra. D." el 50% del dinero de sus "pases", aunque el resto de ellas se mostraron
reticentes a dar información al respecto. En cuanto a esto último, se explicó que es dable inferir que la
modalidad de "autogestión" a la que hicieron referencia la mayoría de las consultadas podría dar cuenta
de un discurso aleccionado "que sería funcional a quienes gestionarían en verdad los departamentos
'privados'".
De las transcripciones incorporadas al legajo merece recalcarse la conversación que luce a "(fs. ...)"
entre "B." (nombre de fantasía de la imputada, cfr. fs. ...) y D. Allí, éste dice: "hay que tomar chicas o
cambiar algo hay que hacer porque con seis siete pases no te sirve a vos ni a mi ni a las chicas… vos
como señorita te llevarías más plata que trabajando de esta manera… y con la responsabilidad del
teléfono, de la llave de abrir de hacer todo, y si 200 o 300 pesos por día no es plata para lo que uno
arriesga… están ganando más las chicas que vos...", a lo cual B. R. contestó "hay que conseguir una
buena chica y una buena recepcionista…".
Para finalizar, tenemos en cuenta la constancia de "(fs. ...)", donde el Inspector Carlos Rafael Arriola
de la Policía Metropolitana analizó lo actuado y concluyó: "Se puede decir que en algunos de los sitios
se ejercía la prostitución siendo regenteada por "W."… podría decirse que estas personas, ya sea W. y
"B." montaron una estructura de prostíbulos…".
Así las cosas, en razón de los extremos que surgen de lo hasta aquí reseñado y demás argumentos
plasmados en el auto puesto en crisis, a los cuales remitimos, corresponde convalidar el temperamento
adoptado.
II. Toda vez que no se hizo referencia alguna en la audiencia oral en torno a la anotación de litis, cabe
tener por desistido el recurso de apelación contra el auto que la dispuso.
En virtud de ello, se RESUELVE: I. Confirmar el auto de "(fs. ...)" que dictó el procesamiento de W.
E. D. y D. M. B. R., en todo cuanto fuera materia de recurso. (...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala IV, Seijas, González Palazzo, González. (Sec.: Bloj).
c. 4.955/13, W. E. D. y otros.
Rta.: 12/02/2015

EXTORSIÓN.

Sobreseimiento. Análisis del tipo penal. Magistrado civil que ha ordenado que el querellante restituya
una suma de dinero. Deuda que se intenta cobrar que resulta ser legítima. Ausencia de exigencia
indebida. Hecho denunciado que no constituye un delito de acción pública pero que podría configurar
un delito contra el honor cuya acción debe ser ejercida de conformidad con lo dispuesto por el artículo
7 del C.P.P.N. Revocatoria. Archivo.

Fallo: "(…) , convocan al Tribunal los recursos de apelación interpuestos por el representante del
Ministerio Público Fiscal y el querellante contra la decisión extendida a fs. (…), puntos I, en cuanto se
dispuso el sobreseimiento de C. A. F. (artículo 336, inciso 3° ibídem).
Por su parte, el acusador privado se agravió también en torno a la imposición de las costas procesales -
punto II de la mencionada resolución-.
M. B. Ad. denunció a C. A. F. por el delito de extorsión, bajo la modalidad prevista en el artículo 169
del Código Penal, ya que según dijo con la única finalidad de cobrarle una deuda, lo difamaría a través
de Internet, ocasionándole un grave perjuicio en su profesión de martillero público.
En primer lugar, cabe recordar que "el delito de extorsión presupone un ataque contra la propiedad del
sujeto pasivo, derivado de una afectación de su libertad, provocada por quien persigue un beneficio al
que no tiene derecho. Para ello, el autor se vale de los medios comisivos previstos por la ley…para
actuar sobre la víctima, en pos de ver satisfecha una exigencia patrimonial injusta" (1).

110
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

Al respecto, cumple mencionar que el 9 de noviembre de 2012, la titular a cargo del Juzgado Nacional
de Primera Instancia en lo Civil N° 65, en el marco del expediente N° 108.705/09, caratulado "F., C. A.
contra A., M. B. sobre resolución de contrato", resolvió hacer lugar parcialmente a la demanda
entablada por C. A. F. contra M. B. A. y condenó al demandado a restituirle a F. la suma de tres mil
dólares estadounidenses -U$S 3.000-, promoviéndose el 8 de septiembre de 2014 la ejecución de dicha
sentencia ante el incumplimiento del demandado (…).
En esa senda, tal como lo sostuvo el señor juez de la instancia anterior, no se aprecia la ilegitimidad a
la que alude el tipo penal bajo estudio, pues de la compulsa de las actuaciones se descarta la existencia
de una exigencia indebida, ya que la justicia civil dispuso que el aquí querellante restituyera el dinero
que oportunamente le entregó a F., en el marco de una operación inmobiliaria, por lo cual, la deuda que
se intenta cobrar resulta ser legítima.
Sin embargo, aun cuando los actos aquí denunciados no constituyen un delito de acción pública, no
puede descartarse que configuren un delito contra el honor, de modo que el ejercicio privado de dicha
acción debe provocar las consecuencias procesales del archivo de la presente causa (2).
En esa senda, corresponde revocar el sobreseimiento discernido en la instancia anterior, pues de
mantenerse dicho criterio, que haría cosa juzgada, la parte se vería imposibilitada de accionar en orden
a los delitos previstos y reprimidos por los artículos 109 ó 110 del Código Penal, por lo cual deberá
disponerse el archivo de la causa ante la imposibilidad de proceder, en la medida en que, si fuere el
caso, deberá promoverse la querella respectiva, de conformidad con lo dispuesto por el artículo 7 del
Código Procesal Penal.
Finalmente las costas procesales deben ser soportadas en el orden causado en atención a las diversas
interpretaciones que puede ofrecer la cuestión, a lo que se adiciona que el señor fiscal recurrió la
decisión liberatoria en crisis, circunstancias que permiten concluir en que la parte tuvo razones
plausibles para litigar (artículo 531 in fine del digesto ritual).
Por ello, esta Sala del Tribunal RESUELVE: I. REVOCAR el pronunciamiento documentado a fs.
(…), punto I, y ARCHIVAR las actuaciones por imposibilidad de proceder (artículo 195 del Código
Procesal Penal). II. REVOCAR el auto documentado a fs. (…), punto II e IMPONER las costas
procesales en el orden causado (artículo 531 del Código Procesal Penal)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Cicciaro, Scotto. (Prosec.: Larcher).


c. 57.916/14, FERREULO, Carlos A.
Rta.: 08/06/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correc., Sala VII, c. 392/12, "Rosetti, Víctor", rta: 23/05/2012. (2) C.N.Crim.
y Correc., Sala VII, c.
29.182, "Bayarri, Juan Carlos", rta: 05/06/2006 y c. 32.462, "Lopetegui Fernández, A. N.", rta:
18/09/2007.

EXTRADICIÓN.

Rechazada por el magistrado y solicitada por el fiscal para ser presentada en España, además de un
pedido de informe de registro de antecedentes penales. Imputado que se encuentra acusado de abuso
sexual simple reiterado en dos oportunidades y no fue formalmente notificado de la denuncia, por lo
que su salida del país no puede traducirse como una conducta elusiva. Posibilidad de convocar al
imputado en los términos del art. 294 del C.P. al domicilio que se establezca, tal como lo prevee el art.
35 del Tratado de Extradición y Asistencia Judicial en Materia Penal celebrado entre la República
Argentina y el Reino de España. Procedencia del pedido de antecedentes a los fines de establecer
eventualmente la vigencia de la acción seguida contra el imputado (art. 67 del C.P.). Confirmación del
rechazo al pedido de extradición y revocación de la negativa a solicitar antecedentes.

Fallo: "(…) II. La fiscalía se agravia al considerar que no corresponde aplicar al caso los principios que
rigen a la prisión preventiva por cuanto ello resultaría incompatible con los lineamientos del Tratado de
Extradición y Asistencia Jurídica en Materia Penal suscripto entre nuestro país y el Reino de España
(aprobado mediante las leyes 24.767 y 23.708 -arts. 1, 2, 28 inc. 1° y 32), el que entiende aplicable en
virtud del principio de especialidad normativa.
Asimismo, sostiene que, incluso, de dar similar tratamiento a ambos institutos -esto es, a la prisión
preventiva y la extradición- se constata en este supuesto el peligro de fuga requerido por el primero de
ellos, por cuanto el imputado ha salido de su país de residencia en forma posterior a tomar
conocimiento de la denuncia formulada en su contra, circunstancia que da cuenta de su voluntad de
sustraerse al proceso (art. 280, C.P.P.N.).
En cuanto al rechazo de la solicitud efectuada por la parte recurrente de requerir al referido Estado
Nacional, en la misma rogatoria, los antecedentes penales que pudiera registrar A. a los fines de
resolver el incidente de prescripción que corre por cuerda, alega que no existe impedimento alguno
para incluir en el art. 67, C.P., a los delitos cometidos en el extranjero por cuanto la normativa no hace
ningún distingo al respecto, bastando con que el delito cometido en el exterior sea de orden público y
esté tipificado en la legislación argentina. Ello máxime cuando de los dichos de la presunta
damnificada A. L. A. C. surge que el encausado habría cometido, en ese país, un delito de similares
características a los que aquí se investigan, en contra de una de sus primas.

111
III. (…) corresponde confirmar parcialmente el auto en crisis en lo que respecta a la solicitud de
extradición del imputado y revocarlo en cuanto deniega el requerimiento de informes sobre sus
antecedentes penales al Reino de España.
(…) ponderamos que D. A. M. se encuentra imputado por la presunta comisión del delito de abuso
sexual simple reiterado en dos oportunidades (art. 119, primer párrafo, C.P.), de modo tal que la
posibilidad de que en caso de recaer condena en estos actuados sea dejada en suspenso (art. 26, C.P.)
impone la citación del nombrado, en los términos del art. 294 del Código Procesal Penal de la Nación,
conforme lo estipulado por el art. 282 de ese cuerpo legal.
En efecto y si bien el encausado dejó el país luego de que se realizara la denuncia, lo cierto es que no
ha sido formalmente notificado de aquella, de tal forma que su comportamiento no puede ser valorado
como una conducta elusiva que justifique restringir su libertad (art. 280, C.P.P.N.).
Por otra parte, el Tratado de Extradición y Asistencia Judicial en Materia Penal celebrado entre la
República Argentina y el Reino de España prevé la convocatoria en cuestión en su art. 35, como una de
las diligencias de cooperación internacional.
En consecuencia, para el caso de que se establezca el domicilio de A. M., la citación se presenta, de
momento, como la vía idónea, necesaria y proporcional -por su menor intensidad respecto a la
detención requerida- a los fines del proceso.
Sentado cuanto precede e ingresando al tratamiento del restante agravio, esto es, si procede requerir al
Reino de España un informe sobre los antecedentes penales que pudiera registrar el imputado en ese
estado, teniendo en cuenta que para buena parte de la jurisprudencia y doctrina nacionales, el art. 67 de
nuestro código de fondo no distingue entre delitos cometidos en la Argentina y en el extranjero no se
vislumbra obstáculo alguno para la procedencia de la medida solicitada (1).
Al respecto, la representante del Ministerio Público Fiscal ha individualizado la época probable de
supuesta comisión, en territorio español, del hecho delictivo que la aquí damnificada atribuyó a A. M.,
al remitirse a su declaración testimonial (…).
En consecuencia, y como ya ha sostenido la Sala IV de esta alzada en el precedente "H." (causa n°
1015/10, rta. el 17/08/10), la negativa del tribunal de grado de cumplimentar la medida de prueba
solicitada por la fiscalía, le impide a esa parte expedirse sobre la vigencia de la acción seguida contra el
imputado en relación al hecho que habría damnificado a A. L. A. C., con la totalidad de los elementos
que considera indispensables. Ello, sin perjuicio de la postura que eventualmente asuma el instructor al
expedirse sobre dicho tópico, en caso de corroborarse que A. M. registra antecedentes en España y, en
su caso, en nuestro país -al actualizarse la información respectiva una vez que se cuente con sus fichas
dactiloscópicas-.(…) el tribunal RESUELVE: I. CONFIRMAR parcialmente la resolución de fs. (…)
en relación con la solicitud de extradición formulada. II. REVOCAR parcialmente la resolución de fs.
(…) en lo que respecta al pedido de informes al Reino de España sobre los antecedentes penales que
pudiera registrar en ese territorio y DISPONER que, con tal fin, el tribunal de grado libre rogatoria
internacional a ese estado".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, Pinto, Divito. (Sec.: Raña).


c. 55.271/13, A.M.D. s/abuso sexual.
Rta.: 12/03/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correc., CCC, Sala I: causas n° 27.137, "M.", rta. 17/3/2006 y n° 46.000 "S." -
voto de la mayoría rta. 20/7/2001; C.C.C.Fed., Sala I: "T.", rta. 18/3/2003 y n° 37.874 "B.", rta.
4/10/2005 y de la Sala II de ese tribunal: causas n° 19.325, "G.", rta. 29/4/2003 y n° 19.582, "G. R.",
rta. 3/6/2003. En doctrina, cfr. Calvete, Adolfo "Prescripción de la acción Penal", DIN Editora, 1989,
página 199 y Hairabedián, Maximiliano y Zurueta, Federico "La prescripción en el proceso penal",
Editorial Mediterránea, 2006, página 133).

FALSIFICACIÓN DE DOCUMENTO.

Publico y uso. Procesamiento. Presentación de un certificado médico para justificar una inasistencia
laboral. Documento que poseía irregularidades en su redacción y la firma del médico adulterada.
Afectación al patrimonio del organismo para el cual presta funciones el imputado toda vez que percibió
su salario a pesar de no haber concurrido a cumplir su tarea. Confirmación.

Fallo: "(…) II La Oficial (…)de la Policía Metropolitana de la Ciudad de Buenos Aires refirió que (…),
en su carácter de oficial de aquella fuerza, el (…), se presentó ante la Dirección de Vigilancia
Preventiva ubicada en (…) y entregó un certificado de salud apócrifo para justificar su inasistencia del
día (…).
Conforme surge del documento el nombrado habría acompañado a su padre, (…), al Hospital Zonal
Regional (…) debido a un episodio de salud cardíaco (…).
(…), empleado de la oficina de administración de aquél organismo, advirtió que el instrumento
aportado por el imputado poseía irregularidades en su redacción y no se encontraba plasmado el lugar
donde se había expedido (…).
Por su parte (…), médico de esa institución, refirió que llamó su atención la utilización del término
"pre-infarto" en lugar de, por ejemplo, "cardiopatía isquémica". Además entendió que la escritura no
era la habitual de un profesional (…).

112
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

El galeno que habría firmado el certificado negó la atención del supuesto paciente así como la
confección del documento (…).
Además el cuerpo de Calígrafos Oficiales de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, luego de
examinarlo, lo cotejó con la escritura inserta a fs. (…) y determinó que las firmas y sellos que lucen en
el instrumento no se corresponden con la rúbrica del Dr. (…).
La prueba reseñada acredita, al menos para esta etapa, la materialidad del evento y la intervención de
(…) y desvirtúa su descargo (…). Se demostró que su padre no fue atendido en el Hospital Zonal
Regional (…), tal como surge del informe de fs.
(…) remitido por su Director en el que se da cuenta que no existían constancias médicas que indiquen
que (…) haya concurrido el (…).
Con lo expuesto quedó comprobada la falsedad de la firma del profesional que presta funciones en el
citado hospital y, como tal, reviste la calidad de funcionario público. Por lo que la calificación jurídica
asignada por el magistrado de instrucción resulta ajustada en la medida en que documentos públicos no
sólo son los enumerados en el artículo 979 del Código Civil, sino también aquellos que son refrendados
u otorgados por funcionarios o que desempeñen "oficios público" dentro de las esferas de su
competencia, cumpliendo las formalidades legales o reglamentarias (1).
Por otra parte, entendemos que el perjuicio se verifica, toda vez que en principio habría percibido su
remuneración. De este modo, su accionar habría afectado el patrimonio del organismo para el cual
presta funciones.
No puede sostenerse la atipicidad de la conducta pues si bien los empleados que recibieron el
certificado advirtieron la falsedad, lo cierto es que ésta no puede estimarse manifiesta, burda y, por
ende, inidónea. Fue necesario determinarlo a través del peritaje realizado por el Cuerpo de Calígrafos
Oficiales de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, del cual se desprende que "(…)De los estudios
confrontativos efectuados a simple vista, y con auxilio de instrumental óptico en aumento no se han
establecido semejanzas que por su tipo, cantidad y calidad, determine puntos de contacto gráfico entre
las producciones escriturales del cuerpo de escritura y la firma y textos cuestionados en común dubi-
dubitados (…)".(…), el Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el punto I del auto de fs.
(…) en todo cuanto fuera materia de recurso. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini, Filozof. (Sec.: Williams).


c. 71.997/13, TEJEDA, Ricardo José.
Rta.: 17/03/2015

Se citó: (1) "Código Penal de la Nación", Andrés José D´Alessio-Mauro A. Divito, Parte Especial,
Tomo II, La Ley, Buenos Aires 2011, pág 1489 y ss.

FALSIFICACIÓN DE DOCUMENTO.

Público. Procesamiento. Licencia de conducir exhibida por el imputado a un funcionario del G.C.B.A.
en control vehicular. Apariencia de lo verdadero. Documento idóneo para inducir a error.
Confirmación

Fallo. "(...) recurso de apelación interpuesto por la defensa oficial de E. E. T. A. contra el punto
dispositivo I del auto glosado a (fs. ...), que dispuso su procesamiento en orden al delito de falsificación
de documento público, en calidad de partícipe necesario. (...).
En este sentido, cabe señalar que tras observar la licencia de conducir exhibida por el imputado
(reservada en Secretaría), entendemos que la misma no se trata de una imitación burda, y que si bien la
irregularidad fue advertida por el funcionario de tránsito del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires,
ello se debió a su experiencia y perica en el cotejo de tales documentos, pero ello de ningún modo
afecta la ilicitud de la conducta atribuida a T. A. De este modo, entendemos que dado que se advirtió la
falsedad de la licencia de conducir debido a la ausencia de medidas de seguridad, la misma resultaba
idónea para afectar el bien jurídico que tutela el tipo penal del art. 292 del CPN, por lo que se ha
logrado colmar el estándar que requiere el art. 306 del ordenamiento ritual, pues los indicios de
participación del procesado en el suceso ventilado tienen la suficiente contundencia como para
sustentar la hipótesis acusatoria en este estadio del proceso. En virtud de ello, el Tribunal RESUELVE:
CONFIRMAR el punto I del auto de (fs. ...), en todo cuanto fuera materia de recurso. (...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala I, Bunge Campos, Rimondi. (Sec.: Biuso).


c. 55576/14, TORALAVA ALBERTO, Efrian Eloy.
Rta.: 21/04/2015

FALSO TESTIMONIO

Procesamiento. Demandado en expediente laboral que fue citado a absolver posiciones y luego fue
propuesto como testigo en el mismo proceso. Hecho típico. Conducta justificada debido a que fue
obligado a declarar contra sí mismo. Revocación. Sobreseimiento (art. 336 inc. 5º del C.P.P.N.)
Disidencia parcial: Imputado que reviste la calidad de parte interesada. Imposibilidad de ser sujeto
activo. Atipicidad. Revocación. Sobreseimiento (art. 336 inc. 3º del C.P.P.N.).

113
Fallo: "(…) II. La jueza Mirta L. López González dijo: En su carácter de presidente de una de las
firmas codemandadas en el expediente nº 10050/2012 "A., E. E. c. E. S.A y otros s/despido", R.H.R.
fue citado a absolver posiciones.
Posteriormente, en el mismo proceso, fue propuesto por la apoderada de "A. SA" como testigo.
En el marco de esa última declaración, habría incurrido en la conducta prevista en el art. 275 del C.P.,
conforme la imputación que le dirigen la querella y el Ministerio Público Fiscal (fs. …).
(…) considero que la circunstancia de haber declarado en un mismo juicio como parte demandada, en
una oportunidad absolviendo posiciones y por motivos que no me compete analizar, luego como
testigo, bajo juramento de decir verdad, colocó al aquí imputado ante una situación que afectó
abiertamente su derecho de defensa en juicio y en esa dirección, más allá de lo que ello pudiera
implicar en aquel proceso, no puede convalidarse aquí un agravamiento de su situación procesal como
el decidido en la instancia anterior.
De esta manera, si bien considero que la conducta atribuida a R.H.R. resulta típica a la luz del art. 275
del Código Penal se halla justificada, desde que nadie puede ser obligado a declarar contra sí mismo
(art. 18 CN).
(…) voto por revocar el temperamento incriminante dispuesto y sobreseer al nombrado en los términos
del art. 336 inc. 5° del Código Procesal Penal de la Nación.
El juez Mauro A. Divito dijo: Conforme se desprende del legajo nro. 10.050/2012 del Juzgado de
Trabajo nro. (…), R.H.R. reviste la calidad de presidente de una de las firmas co-demandadas (E. S.A.)
por E.E.A.. En tal carácter, absolvió posiciones (fs…).
En atención a ello, sin perjuicio de los agravios invocados por la defensa en relación con la forma en
que R. fue citado a declarar como testigo y la validez de esa declaración, por haber sido prestada luego
de absolver posiciones en el mismo asunto -cuestión ajena a este tribunal-, lo cierto es que la
circunstancia de que revista la calidad de parte interesada en el proceso impide sostener que se trate de
un tercero ajeno al pleito, y por ende, que pueda ser sujeto activo del delito previsto en el art. 275 del
Código Penal.
En este sentido, se ha dicho que no puede cometer falso testimonio quien tiene interés en la respuesta
que brinda, "si de ella puede resultar perjuicio aunque no signifique procesamiento penal o prueba que
tienda a ello…porque en realidad lo que no hay es testigo y en consecuencia el acto es atípico en
relación a la figura descripta por el artículo 275 del Código Penal" (C.F.C.P., Sala I, causa "G., M.E. y
otros", del 19/10/2001).
(…) las constancias acumuladas en la presente y particularmente en el expediente laboral que corre por
cuerda, me persuaden acerca de la atipicidad de la conducta atribuida, voto por sobreseer a R.H.R. en
los términos del art. 336, inciso 3° del Código Procesal Penal.
El juez Ricardo Matías Pinto dijo: (…) con apoyo en la doctrina sentada por la Corte Suprema de
Justicia en el caso "Mendoza" (Fallos I:350) y el criterio que he asumido en los precedentes
"Monzalve, Fabiana" (c.nro. 42.668) del 30 de noviembre de 2011 y "Lynch, María" (c.nro. 30.389)
resuelto el 30 de septiembre de 2014, ambos de la Sala VI de este Tribunal, adhiero al voto de la Dra.
Mirta López González.
III. (…) se RESUELVE: I. Revocar los puntos I y II de la resolución de fs. (…) y disponer el
sobreseimiento de R.H.R. (…) (artículo 336, inciso 5to. y última parte del Código Procesal Penal de la
Nación)".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, López González, Pinto, divito (en disidencia). (Sec.: de la Bandera).
c. 23200/14, REGGIANI, Ricardo Horacio.
Rta.: 21/05/2015

FALSO TESTIMONIO.

Sobreseimiento. Perito que fue imputado por el denunciante de falso testimonio por haber presentado
un informe en un expediente civil que, a su criterio, sería falso. Pruebas incorporadas que dan cuenta
que el informe fue llevado a cabo conforme las normas y técnicas que rigen su profesión.
Confirmación.

Fallo: "(…) II.- Como bien se asentó en el legajo "El objeto de este proceso es determinar si el perito
(…) cometió el delito de falso testimonio al presentar su informe en la causa (…) del Juzgado Civil
(…) respecto a si las firmas allí cuestionadas pertenecían -o no- al actor".
Desde el inicio del expediente el acusador privado denunció que (…) habría presentado un informe
pericial afirmando una falsedad respecto de ciertas firmas insertas en recibos incorporados en el
proceso civil.
III. Teniendo en cuenta ello y con las pruebas incorporadas en el sumario se encomendó a fs. (…) que
el Cuerpo de Peritos Calígrafos de la Corte Suprema realizara un informe detallado para establecer si el
peritaje efectuado por el imputado cumplía con las formalidades y técnicas propias de su profesión, si
la conclusión estaba debidamente fundamentada y si era una consecuencia directa y válida de las
técnicas aplicadas junto a las observaciones del especialista o se podía llegar a una solución adversa.
Los licenciados (…) de la referida dependencia y (…), perito propuesto por el recurrente, entendieron
tras analizar el material y las constancias de autos, que (…) "(…) ha desarrollado su labor (…)

114
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

respetando y desarrollándolo de acuerdo a las normas técnicas de la profesión (…)", que "(…) ha
realizado sus estudios más allá de los tenidos a la vista en el expediente, cuerpo de escritura, realizando
diligencia a Policía Federal y Registros de las Personas, ampliando su campo de observación del
historial gráfico del Sr. (…) (…)" y que tal informe fue "(…) analizado con el instrumental óptimo y
lumínico adecuado (…)" (textual).
A su vez los especialistas concluyeron que (…) efectuó un razonamiento y desarrollo en su pericia que
sostiene técnicamente la conclusión arribada (…).
Sentado ello, entendemos que la conducta que se le reprocha al nombrado no encuadra en el delito de
falso testimonio (artículo 275 del Código Penal) pues se acreditó que (…) no falseó deliberadamente su
informe para perjudicar los intereses del apelante.
Al respecto la doctrina ha sostenido que afirmar una falsedad es "… asentir, confirmar, asegurar, una
situación, un hecho o una circunstancia como verdadera, cuando se sabe o se conoce que es falsa. En
estos casos, el autor afirma como verdad algo que se sabe que es mentira…" (1). Extremo que no se
verifica en estas actuaciones, en tanto se estableció que se desempeñó conforme las normas y técnicas
que rigen su profesión.
Por otro lado y como bien apuntó el magistrado de la instancia anterior, la realización de un nuevo
peritaje que reproduzca la experticia llevada a cabo en sede civil, como pretende la parte, no resulta
dirimente para determinar si el perito se pronunció falsamente. Por el contrario, se advierte que
únicamente pretende reeditar una medida que ya fue producida en aquélla sede.
Los argumentos de la instancia anterior se compadecen con el dictamen de fs. (…) lo que no puede ser
ignorado.
En definitiva, no logrando la parte conmover el pronunciamiento impugnado, corresponde su
homologación.
IV.- Finalmente debemos señalar que, al no existir el grado de sospecha suficiente, el imputado no fue
convocado a declarar en indagatoria (artículo 294 del código adjetivo) y que el representante del
Ministerio Público Fiscal al analizar el legajo, entendió que correspondía dictar su sobreseimiento (…),
lo que permite sostener que no existen motivos para apartarse del principio general establecido en el
artículo 531 del ceremonial, por lo cual se convalidará también el punto que dispuso la imposición de
las costas al vencido.
Por todo lo expuesto, el Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR los puntos I y II del auto de fs. (…), en
todo cuanto fuera materia de recurso de apelación. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini, Filozof. (Sec.: Carande).


c. 26754/10, MONTAÑO, Brian Sebastián.
Rta.: 11/02/2015

Se citó: (1) Baigún, David y Zaffaroni, Eugenio Raúl, Código Penal y normas complementarias.
Análisis doctrinal y jurisprudencial, 1ª ed., Buenos Aires, Hammurabi, 2011, tomo 11, pág.72.

FALSO TESTIMONIO.

Sobreseimiento. Expediente civil en donde se habrían volcado los testimonios falsos en trámite.
Investigación que igualmente puede llevarse adelante. Posibilidad de llevar a cabo medidas.
Revocación. Falta de mérito.

Fallo: "(…) La representante del Ministerio Público Fiscal recurrió en apelación el auto extendido a fs.
(…), en cuanto se dictó el sobreseimiento de S. C., G. N. P. G. y C. A. G. Entendemos que el
sobreseimiento dictado, que se fundó en que el magistrado de la justicia en lo penal no puede erigirse
en una suerte de órgano controlador de la prueba incorporada en el marco de un expediente en lo civil,
debe ser revocado.
En primer lugar, conforme lo hemos sostenido en oportunidades anteriores, entendemos que el estado
de trámite en el que se encuentra el proceso civil no resulta dirimente para que en sede penal se
profundice la investigación y oportunamente se emita un pronunciamiento en relación con los hechos
denunciados, supuestamente constitutivos del delito de falso testimonio.
Dicho criterio -que ha sido sostenido por la Cámara Federal de Casación Penal (1)-, no importa avanzar
sobre las atribuciones del magistrado civil sino reconocer que el trámite del juicio en ese fuero no
impide realizar la pesquisa pertinente en éste, cuya paralización -no autorizada por la ley- acarrearía
una demora incompatible con el derecho de todo imputado a ser juzgado tan rápidamente como sea
posible.
Por lo demás, en atención a lo manifestado por la denunciante en torno a que los imputados y el
demandado en sede civil resultarían amigos y mantendrían un vínculo anterior al evento que motivó la
demanda, resultaría de interés que se profundice la encuesta en torno de tales extremos.
Por lo expuesto, y a efectos de que se practiquen las demás medidas que pudieran resultar de utilidad
para esclarecer si los aquí imputados efectivamente presenciaron el evento por el que se promovió el
juicio civil, corresponde revocar el auto de sobreseimiento recurrido y aplicar las disposiciones del
artículo 309 del Código Procesal Penal en relación con los imputados.

115
En consecuencia, este Tribunal RESUELVE: REVOCAR el auto documentado a fs. (…) en cuanto
fuera materia de recurso y DECLARAR que no existe mérito para procesar ni sobreseer a los
imputados S. C., G. N. P. G. y C. A. G. (art. 309 del Código Procesal Penal)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Divito, Scotto. (Sec.: Besansón).


c. 52.252/14, CONTE, Sebastián y otros.
Rta.: 25/02/2015

Se citó: (1) C.N.C.P. Sala III, "S., M.B." s/rec. de casación", rta: 06/02/2007, LL. 2007 - D. 495.

FALSO TESTIMONIO.

Sobreseimiento. Imputado que habría mentido al responder sobre las generales de la ley. Preguntas que
tienen como fin individualizar a la persona y no forman parte de la declaración. Atipicidad.
Confirmación.

Fallo: "(…) II.- Sostiene que el imputado ocultó información esencial relativa a su relación con el actor
en sede laboral, extremo que no se investigó pese a que ello es facultad y obligación de quien lleva
adelante la instrucción y que negó circunstancias que conocía en función de su trabajo. (…).
III.- Los representantes de (…), denunciaron que (…) se desempeñó en la firma bajo la supervisión de
(…) y fue mendaz al declarar como testigo en el expediente (…) del Juzgado Nacional de Primera
Instancia del Trabajo (…).
Puntualmente alegaron que el (…) sostuvo que no lo comprendían las generales de la ley respecto al
demandante, omitiendo decir que los unía una relación de amistad y desmintió que la empresa realizara
"evaluaciones de desempeño", lo cual habría permitido incrementar el monto de la indemnización
reclamada (…).
Tras la lectura de la declaración prestada en aquella sede (…), compartimos el temperamento
desincriminante propiciado por el titular de la acción pública adoptado por el Sr. Juez de grado.
En primer lugar destacamos que el imputado luego de aportar sus datos de filiación aseguró conocer al
actor desde el año 1999 por haber trabajado juntos en la empresa. A partir de ese dato objetivo
admitido por el testigo cualquier sospecha de parcialidad pudo haber sido despejada si se ahondaba en
el tipo de relación que los unía, respecto del cual, ningún elemento ha acercado la parte que permita
aseverar un interés en el resultado del pleito.
Es que más allá de las suposiciones de la querella fundadas en la existencia de un vínculo social y de
amistad que no ha sido demostrado, aún cuando (…) hubiera omitido profundizar en ello, se ha
sostenido que mentir sobre las generales de la ley no constituye el delito de falso testimonio. Esas
preguntas tienen como fin individualizar a la persona y no forman parte de su declaración (1), ya que
no se trata de un verdadero y propio testimonio (2).
En el mismo sentido se sostiene que las falsedades u omisiones referidas a esas cuestiones no
configuran el delito en análisis porque esas preguntas tienen por fin individualizar a la persona y no
constituyen parte de la deposición sobre los hechos (…).
Sentado ello, analizaremos el segundo punto sobre el que descansa la imputación del acusador privado.
Del cuestionado testimonio se advierte con meridiana claridad que (…) no negó las denominadas
evaluaciones de desempeño, sino que se refirió a su vinculación en la estipulación del bono anual del
actor laboral. En concreto sostuvo que "los factores tenidos en cuenta para el cálculo del bono anual,
eran objetivos financieros, regionales, o sea, para el rendimiento global de (…), básicamente, América
Latina, dichos objetivos estaban ligados a las ganancias de la cía (…) y caja de la cía. Que el
desempeño del funcionario no incidía en el pago de los bonos, porque eran regionales (…) que el
cumplimiento del bono se evaluaba con el registro contable del año fiscal, una vez que estaba la
información contable del cierre del año de la cía (…)".
De ello se colige que su testimonio ocurrió en el marco de las explicaciones sobre el modo de calcular
la bonificación anual de los funcionarios de la sociedad, lo cual descarta asimismo el encuadre de la
conducta en el tipo que la parte pretende.
Por otra parte, la querellante contó en el fuero correspondiente con los mecanismos que la ley prevé
para salvaguardar sus derechos e incluso impugnó el testimonio de (…), no obstante lo cual, radicó la
presente denuncia a más de un año de aquella declaración, lo que enerva la posición que intenta
defender.
(…), el Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR los puntos I y II del auto de fs. (…) en todo cuanto
fueran materia de recurso.(...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini, Pinto. (Prosec.: Rosciani).


c. 69.119/13, MARTÍNEZ, Juan Carlos.
Rta.: 23/04/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correcc., Sala VI, c. 35.547, "Olivier Mazzanti, Alberto", rta.: 26/8/2008 y c.
40.846, Ieraci, María Jimena" rta.: 17/02/2011; Sala I, c. 39.196, "Tejada, Eduardo Nicolás", rta.:
6/12/2010; (2) Molinario-Aguirre Obarrio, "Los Delitos", Tomo III, pág.419.

116
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

FALSO TESTIMONIO.

Desestimación por inexistencia de delito. Tipo penal. Manifestación falsa vertida al ser preguntado por
las generales de la ley. Declaración que no tuvo incidencia en el resultado del proceso pero ha tenido la
potencialidad de generar en el juzgador un error acerca de mérito de tal exposición. Hecho típico.
Revocación. Disidencia: Ausencia de perjuicio por no haber influido en el resultado. Atipicidad.
Confirmación.
Fallo: "(...) El juez Carlos Alberto González dijo: He sostenido con anterioridad que resulta
improcedente supeditar la investigación en orden a la presunta comisión del delito de falso testimonio
al resultado de un juicio laboral en el cual se presta la declaración presuntamente mendaz (1), porque
se trata de un delito de pura actividad y de peligro abstracto, de modo que no requiere la producción de
daño efectivo alguno, ni a las partes del juicio ni a la administración de justicia (2).
Ello así, pues amén de que tal solución, al no haber sido receptada por las normas que regulan el
proceso penal, no sería la adecuada en tanto nos enfrentamos a objetos procesales diferentes. El bien
jurídico protegido por la figura típica prevista en el artículo 275 del Código Penal se ve vulnerado en el
momento en que se aporta al expediente judicial una declaración falaz, con independencia de lo que
pudiera decidirse en el contexto procesal donde fue vertida (3).
Al respecto, reconocida doctrina sostiene que "El falso testimonio, que es un delito formal, se consuma
al rendirse la deposición, el informe, la traducción o la interpretación por lo que… no resulta necesario
que la autoridad del proceso donde se prestó el testimonio yerre en su decisión como consecuencia de
las manifestaciones falaces, tratándose…de un delito de peligro" (4).
La defensa ha mencionado en la audiencia que la declaración que se reputa falsa no se prestó bajo
juramento, por lo que no podría tenerse por configurado el delito. Tampoco este argumento habrá de
prosperar, pues dicho extremo no constituye un elemento típico en la actual redacción del artículo 275
del catálogo sustantivo. En efecto, sostiene la doctrina que "En nuestro Derecho, el perjurio no está
comprendido en los diferentes tipos de falso testimonio. Tanto es esto así que el art. 275 en vigencia, a
diferencia del texto derogado, no contempla al juramento o promesa de decir verdad como elemento
del tipo objetivo" por lo que su ausencia "en el acto de la declaración testimonial no implicará
obstáculo alguno para la tipificación del delito del art. 275." (5). Por lo demás, en el caso bajo estudio
el juramento ausente condiciona la validez de lo testificado en esas condiciones, ya que la omisión no
está sancionada con nulidad (conf. artículo 240 del Código Procesal Civil y Comercial de la Nación),
lo que también lleva a descartar la atipicidad de la conducta.
Asimismo, es mi criterio que la mendacidad vinculada con las circunstancias denominadas "generales
de la ley" se traduce en falso testimonio cuando la declaración viciada tenga la potencialidad de
generar en el juzgador un error acerca del mérito de tal exposición (6). En el supuesto bajo análisis, lo
narrado falsamente por el imputado en sede laboral, permite concluir que su testificación poseería
dichas características.
Frente a ello, la desestimación dispuesta por el juez de grado pierde su sustento, razón por la que
postulo la revocatoria del auto materia de recurso.
Así lo voto.
"(...) Disidencia de el juez Mariano González Palazzo dijo: Disiento con la solución propiciada por mi
distinguido colega, pues entiendo que la deposición falaz debe incidir sobre algo sustancial, que pueda
desviar o turbar el curso de la actividad judicial (7).
En tal sentido, se ha sostenido que si el testimonio falso no influye de manera alguna en la decisión del
proceso, falta el elemento del perjuicio (8). Tal es precisamente la situación verificada en autos.
En igual línea, Carlos Fontán Balestra ha dicho "que no toda falsedad es apta para configurar el falso
testimonio, sino sólo la que, de algún modo, se vincula con la actitud mental del juez en el momento de
decidir" (9).
Conforme se desprende de las copias certificadas del proceso laboral caratulado "R. A. L. c/ B. S.A. s/
Despido" del Juzgado Nacional del Trabajo n° 5, que corre por cuerda, la sentencia recaída fue a favor
de la demandada.
De tal modo, los dichos del imputado no fueron ni habrán de ser analizados por el juez laboral para
emitir una decisión final sobre el asunto. Ergo, tal declaración no ha causado perjuicio, y por tanto no
configura el delito contemplado en el artículo 275 del Código Penal.
En consecuencia, entiendo que el auto recurrido debe ser confirmado. Así lo voto.
"(...) El juez Rodolfo Pociello Argerich dijo: Luego de haber escuchado la grabación de la audiencia y
participado de la deliberación, sin preguntas que formular a las partes, adhiero a la solución que
propone el juez Carlos Alberto González, a cuyos argumentos me remito (10).
Conforme surge del acuerdo que antecede, el tribunal RESUELVE: REVOCAR el auto de (fs. ...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala IV, González Palazzo (en disidencia), González, Pociello Argerich. (Sec.:
Morillo Guglielmi)
c. 42.891/14, ARCE, Facundo Norberto.
Rta.: 30/04/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correc., Sala IV, c. 1366/10, "González Ortiz", rta. 21/09/10 y c. 1530/09,
"Naranjo", rta. 21710/09 (2) Baigún, David - Zaffaroni, Eugenio Raúl (dir) Terragni, Marco A. (coord),

117
"Código Penal y normas complementarias, tomo 11, pág. 93. (3) C.N.Crim. y Correc., Sala IV, c.
1698/11, "Berneman", rta. 13/2/12. (4) D'Alessio, Andrés José (dir.) - Divito, Mauro A. (coord.),
"Código Penal Comentado y Anotado", 2ª edición actualizada y ampliada, tomo II, parte especial, La
Ley, Buenos Aires, 2009, p. 1378. (5) Baigún, David - Zaffaroni, Eugenio Raúl (dir.), Terragni, Marco
A. (coord.), ob. cit., tomo 11, ps. 72/73 y 88/89. (6) C.N.Crim. y Correc., Sala IV, c. 48610/12,
"Alonso", rta.: 20/8/14 y las citas allí expuestas. (7) C.N.Crim. y Correc., Sala IV, c. 26056, "Aval",
rta.: 24/5/05. (8) Levene, Ricardo (h), "El delito de falso testimonio", Ed. Depalma, Buenos Aires,
1978, p. 67 y ss. (9) cnf. "Derecho Penal. Parte Especial", Ed. Lexis Nexis, decimosexta Edición, 2002,
Buenos Aires, p. 901. (10) C.N.Crim. y Correc., sala IV, c. 48.610, citada más arriba y c. 24.139/13,
"Sinato", rta.: 12/3/15.

HABEAS CORPUS

Rechazado. Orden de detención emanada de juez competente. Juzgado Federal de Nueva York que
solicita la detención del imputado a los fines de la extradición. Juzgado federal de esta ciudad que ha
librado orden de detención con fines de extradición. No configuración de alguno de los supuestos
previstos en la ley 23.098. Confirmación.

Fallo: "(…) Los Dres. J. E. A. y J. E. A. (h) promovieron la presente acción de hábeas corpus en favor
de H.V.J. en la estimación de que podría pesar sobre aquel una orden de detención que no habría
emanado de autoridad competente (fs. ...).
Sin embargo, la información proporcionada por el Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto del
Poder Ejecutivo Nacional revela que en horas de la tarde del 27 de mayo pasado se recibió un pedido
de detención preventiva con fines de extradición de H. V. J. por parte del Juzgado Federal de Primera
Instancia para el Distrito Este de Nueva York, Estados Unidos de Norteamérica, el que generó el inicio
de la causa n° (…) por ante el Juzgado Criminal y Correccional Federal n° (…), a cargo del Dr.
Marcelo Martínez de Giorgi (fs. …).
A su vez, de la certificación actuarial de (fs. ...) surge que en el día de ayer, 28 de mayo, el magistrado
federal libró órdenes de detención con fines de extradición en razón de la mencionada solicitud tanto
respecto de J. como de otros dos sujetos también requeridos por la justicia estadounidense -M. J. y A.
B.-, y que en la misma fecha fueron solicitadas ante ese Tribunal sus exenciones de prisión, a las que se
les estaba dando trámite.
De lo expuesto se deduce que la situación denunciada no es compatible con el supuesto de procedencia
de la acción de hábeas corpus preventivo, previsto en el artículo 3, inciso 1, de la ley 23.098, en tanto
la orden de detención que pesa sobre J. fue dispuesta en el marco del proceso que se le sigue por
extradición ante la justicia federal, y en pleno ejercicio de las facultades que la ley 24.721 acuerda al
magistrado actuante (puntualmente artículos 26 y cdtes. de esa norma). Ergo, la solución adoptada
resulta procedente y ajustada a derecho y a las resultas de lo actuado.
Es por ello que la Sala RESUELVE: CONFIRMAR el pronunciamiento de (fs. …), punto (…) en
cuanto fue materia de consulta. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala IV, Seijas, González. (Prosec.Cám.: Fuertes).


c. 30.885/15, JINKIS, Hugo V.
Rta.: 29/05/2015

HABEAS CORPUS.

Rechazado. Ciudadano que ve restringida su libertad debido a que personas de civil se presentaron en
varias oportunidades en su domicilio y preguntaron por él. Inexistencia de órdenes de restricción.
Improcedencia de la acción. Confirmación.
Fallo. "(...) Que la abogada Carolina Laura Lazetera interpone la presente en favor del Sr. D. O. C. B.,
DNI nro. XX, al tomar conocimiento que en el domicilio de su representado desde hace dos semanas a
la fecha concurrían en distintos horarios personas de civil que lo requerían, a veces se presentaban
como personal policial sin identificarse, por lo que por temer por su libertad e integridad física,
interponía esta acción. Tras requerir el juez de grado a las distintas fuerzas de seguridad informen
acerca de la existencia de orden de restricción de la libertad personal del nombrado, éstas informaron
en sentido negativo (cfr. fs. ...). Así las cosas, no verificándose ninguno de los requisitos exigidos por
la ley 23098 para la procedencia de la presente acción, es que el Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR
la decisión obrante a (fs. ...), en cuanto fuera materia de consulta. (...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala I, López González, Pociello Argerich. (Sec.: Biuso).


c. 10998/15, C. B., D. O.
Rta.: 27/03/2015

HABEAS CORPUS.

Rechazado. Imputado que al cumplir la mayoría de edad fue trasladado desde el Centro de Régimen
Cerrado Manuel Belgrano al Complejo de Jóvenes Adultos de Marcos Paz. Agravio: Agravamiento de

118
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

las condiciones de detención porque el traslado ha sido en desmedro de los estudios que venía
cursando, de la asistencia psicológica que recibía y de las visitas de sus familiares. Imputado que posee
una condena no firme por un hecho cometido cuando era menor de edad que impone tomar en
consideración la Convención sobre los Derechos del Niño, en tanto prevé un trato específico y
diferenciado para tales supuestos que, sobre todo, han de procurar evitar que la pena privativa de la
libertad tenga efectos negativos para la reintegración social del condenado. Revocación. Hacer lugar a
la acción y ordenar el inmediato traslado.

Fallo: "(…)I. A. fs. (…) el juez rechazó la acción de habeas corpus formulada por el Dr. Damián R.
Muñoz, a cargo de la Defensoría Pública Oficial nº 2 ante los Tribunales Orales de Menores, a favor de
J. M. B. Fundó su decisión, principalmente, en que no subsisten actualmente los agravios que
motivaron la primera presentación de la defensa en este mismo sentido, y afirmó que el lugar donde
actualmente se está ejecutando la privación de la libertad, resulta ser más beneficioso para el nombrado
B. En ese sentido, ponderó que luego de la interposición de la presente acción, B. fue trasladado al
Pabellón "F" del Programa de Metodología Pedagógica Socializadora de la Unidad Residencial 1 del
Complejo para Jóvenes Adultos de Marcos Paz, donde aseguró no tener problemas de convivencia con
el resto de la población. Por otra parte, si bien difiere con lo manifestado por B., destacó lo informado
por el Servicio Penitenciario a fs. (…), en punto a que el nombrado recibe asistencia del área de Salud
Mental, participa de los espacios individuales y grupales que le han ofrecido, concurre a actividades
deportivas y recreativas, y se encuentra inscripto y cursando 1? año del C.E.N.S. nº 451.
A ello se suma que ha sido incorporado al Régimen de Ejecución Anticipada Voluntaria a partir del 11
de febrero pasado y obtuvo como calificación "9" por su conducta ejemplar. Por lo tanto, consideró que
resultaría contraproducente hacer lugar a lo solicitado por la defensa, pues implicaría un retroceso en
los períodos de progresión previstos por la ley 24.660.
Finalmente, señaló que en atención a que el imputado ha adquirido la mayoría de edad, cesaron de
pleno derecho las facultades tuitivas del tribunal, de modo que el lugar correcto para el alojamiento de
las personas privadas de la libertad es una Unidad Carcelaria y no un Instituto. Mas aún si se tiene en
cuenta que, en caso contrario, podría resultar perjudicial para el resto de las personas menores de edad
alojadas allí estar junto a otras que ya son mayores y que han recibido sanción.
II. Los Dres. Damián R. Muñoz Nicolás Laino, en representación del imputado, alzaron sus críticas
contra el pronunciamiento en cuestión mediante el recurso de apelación deducido a fs. (…).
Sustancialmente, se agraviaron por cuanto el a quo omitió valorar las manifestaciones realizadas por B.
en el marco de la audiencia del art. 14 de la ley 23.098, en punto a las notorias diferencias entre el
tratamiento que recibía en el Instituto Manuel Belgrano y el que actualmente recibe en la Unidad
Penitenciaria, de modo que las afirmaciones que expone en el decisorio apelado devienen infundadas y
carentes de sustento objetivo.
En efecto, las explicaciones ofrecidas por B. en relación con las condiciones actuales de su detención,
las cuales no se condicen con las informadas por el Servicio Penitenciario Federal, no hacen más que
dejar en evidencia que el traslado a una Unidad Penitenciaria -el cual fue dispuesto por el Tribunal Oral
de Menores nº 1 en el marco de la sentencia no firme del 5/9/14, mediante la que se lo condenó a la
pena de 10 años de prisión-, implicó un claro agravamiento en las condiciones de detención. Por lo
tanto, solicitaron que se revoque el auto apelado, se haga lugar a la acción de habeas corpus y se ordene
el inmediato traslado de B. al instituto antes mencionado.
Finalmente, destacaron que se omitió analizar el caso desde la perspectiva de la normativa específica
que rige en materia de infancia y adolescencia que prevé un trato diferenciado para estos supuestos.
(…) IV. En primer término, corresponde señalar que la Sala I de la Cámara Federal de Casación Penal
resolvió, por voto de la mayoría, anular la decisión oportunamente adoptada por este tribunal -con otra
integración- mediante la que se confirmara la desestimación de la acción, y reenviar la presente al juez
de menores para que celebre la audiencia prevista en el art. 14 de la ley 23.098 (fs…).
(…) es dable entender que el ad quem ya ha resuelto que en el caso no obsta al examen de la cuestión
sometida a estudio en el marco de este planteo de habeas corpus, la circunstancia de que la decisión
cuestionada por los recurrentes haya sido adoptada por el tribunal que dictó sentencia en el juicio
seguido contra B., la que se encuentra a estudio de la Cámara Federal de Casación Penal.
(…) entendemos que el planteo de la defensa merece ser atendido.
(…) compartimos lo argumentado por los defensores oficiales en la audiencia, en punto a que la
decisión adoptada por el juez de menores no se adecua al mandato emanado por el Superior sobre la
necesidad de analizar en profundidad las condiciones de detención de B., con especial atención a las
manifestaciones que éste realizara al respecto, ni observa la obligación de adecuar decisiones como las
del caso a la normativa vigente en materia de derecho penal juvenil.
(…) en el marco de la audiencia realizada, B. fue contundente al señalar que actualmente no está
asistiendo a la escuela (…).
En cuanto a la asistencia psicológica que presuntamente estaría recibiendo B., fue categórico al afirmar
que sólo es atendido unos minutos en forma quincenal por una profesional con la que no logra generar
un vínculo de confianza(…).
(…) deben ponderarse las dificultades que manifestó enfrentar para mantener el vínculo con su familia
a raíz de la lejanía de la Unidad Penitenciaria respecto de su domicilio (…).
Tales circunstancias no fueron valoradas adecuadamente por el a quo al momento de resolver, extremo
que resiente la fundamentación del fallo recurrido.

119
Sobre la base de las consideraciones expuestas precedentemente, entendemos que las referencias
efectuadas por B. en la audiencia celebrada oportunamente, avaladas -como se dijo- por las constancias
reseñadas, denotan un severo agravamiento en las condiciones de su detención desde que fue
trasladado del Centro de Régimen Cerrado Manuel Belgrano al Complejo de Jóvenes Adultos de
Marcos Paz, toda vez que ello ha sido en desmedro de los estudios que venía cursando, de la asistencia
psicológica que recibía, y de las visitas de sus familiares.
El apuntado menoscabo de los derechos de B. no puede ser avalado por el tribunal sobre la base de los
restantes informes remitidos por el Servicio Penitenciario Federal, en tanto resulta evidente que -tal
como se ha ejecutado- el traslado en modo alguno contribuyó a los fines resocializadores que el
ordenamiento jurídico asigna a la pena, sino que -antes biensurtió precisamente el efecto contrario.
Ello resulta particularmente inadmisible por tratarse de una persona que ha sido condenada, por
sentencia no firme, por hechos presuntamente cometidos antes de alcanzar los 18 años de edad,
extremo que, como alegó la defensa, impone tomar en consideración la Convención sobre los Derechos
del Niño, en tanto prevé un trato específico y diferenciado para tales supuestos que, sobre todo, han de
procurar evitar que la pena privativa de la libertad tenga efectos negativos para la reintegración social
del condenado (cfr. C.S.J.N, Fallo 328:4343, "Maldonado", considerando 35° del voto de la mayoría).
(…) el Tribunal RESUELVE: I. REVOCAR el auto de fs. (…) y, en consecuencia, HACER LUGAR a
la acción de habeas corpus a favor de J.M.B. II. ORDENAR EL INMEDIATO TRASLADO de J.M.B.
al Centro de Régimen Cerrado Manuel Belgrano".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, López González, Divito. (Sec.: Poleri).


c. 58.272/14, BARROZO, Juan M.
Rta.: 26/03/2015

HABEAS CORPUS.

Rechazado. Detenido que alega agravamiento de las condiciones de detención debido a que a pesar de
haber solicitado ser incorporado al régimen laboral para poder dar sustento económico de sus hijos, no
logró su cometido. Acción que no se advierte como agravante de las condiciones de detención en los
términos previstos por la norma. Confirmación.

Fallo: "(…): Interviene la sala en consulta en la presente acción de habeas corpus promovida por G. H.
B. El nombrado afirmó que consideraba agravadas sus condiciones de detención en el Complejo
Penitenciario de la Ciudad de Buenos Aires, donde está alojado desde el mes de febrero ppdo., porque,
pese a sus reiteradas solicitudes, no ha sido incorporado al régimen laboral. Explicó que ello le resulta
indispensable para proporcionar asistencia económica a la hija que tiene con una pareja anterior, a su
pareja actual y a los tres hijos de ésta.
Las constancias sumariales permitieron determinar que el nombrado ha realizado diversas peticiones en
ese sentido por ante el tribunal a cuya disposición se encuentra detenido (fs…), las que fueron
reenviadas al mencionado Complejo. A su vez, a través del informe requerido a la División Técnico
Administrativa de esa unidad se tomó conocimiento de la modalidad del régimen laboral, del sistema
de asignación de plazas, de las prioridades previstas y de que recientemente -entre marzo y el 7 de abril
ppdo.- se otorgaron 77 plazas laborales, correspondientes a la lista de espera de los meses
septiembre/octubre de 2014 (fs…).
Bajo este contexto, no se advierte acción alguna deliberadamente encaminada al agravamiento de las
condiciones de detención del accionante en los términos de la ley 23.098, para cuyo cese se deba
intervenir, por cuanto resulta que la demora en la incorporación al régimen laboral del nombrado
proviene de una modalidad preestablecida y de la circunstancia de que existe un desfasaje entre el
listado de incorporaciones y las disponibilidades laborales existentes.
(…) corresponderá confirmar el rechazo de la acción, la decisión de comunicar lo resuelto al Tribunal
Oral N°25 y, así también, el libramiento de un oficio al Director de la unidad respectiva para que tenga
en cuenta la particular situación en que se encontraría la familia de B.
(…) el tribunal RESUELVE: Confirmar los puntos I y III del auto de fs. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, Pinto, Divito. (Sec.: Herrera).


c. 19.132/15, BENÍTEZ, Gabriel H.
Rta.: 08/04/2015

HOMICIDIO

Culposo. Procesamiento. Imputado: Encargado de la inspección mensual del ascensor de un edificio.


Menor de edad que cayó por el hueco del ascensor al abrir sin ninguna dificultad la puerta. Violación al
deber de cuidado al no detectar unos días antes del hecho el defecto, que resultaba evidente y que
podría haber advertido de haber revisado en esa ocasión las puertas de todos los pisos del edificio,
infringiendo así la ordenanza n° 49.308 del 22 de junio de 1995, en su artículo 8.10.3.2. Confirmación.

Fallo: "(...) Las pruebas reunidas en la encuesta permiten convenir, con el grado de probabilidad
requerido para esta etapa por el artículo 306 del código adjetivo, que C. M. A. habría sido negligente

120
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

en el cumplimiento de su actividad como encargado de la inspección del ascensor n° 1 ubicado en el


edificio sito en la avenida L. H. xx de esta ciudad, el 2 de enero de 2014, tarea que se le encomendara
debido a su condición de empleado de la firma "Ch. A.", a cargo del mantenimiento de dicho aparato,
lo que generó que no advirtiera la falla en el sistema de cierre de las puertas.
La infracción al deber de cuidado inherente a A. en función de su rol, generó que el 7 de febrero de
2014, alrededor de las 18:30, P. E. S. -de 5 años de edad-, quien acababa de egresar junto a su madre y
hermana del consultorio odontológico situado en el piso x departamento "x" de ese inmueble, abriera la
puerta de rellano del ascensor n° 1 situada en ese mismo piso, pese a que la cabina no se encontraba
allí, y cayera al hueco, produciéndose su inmediato deceso como consecuencia de los politraumatismos
y hemorragia sufridos.
El informe elaborado por la División Siniestros de Superintendencia Federal de Bomberos muestra con
claridad la falla en el sistema de cierre de las puertas. Así, ante las pruebas mecánicas, se advirtió que
las cerraduras de las puertas de rellano de todos los pisos dieron resultado satisfactorio, a excepción de
las correspondientes al 4°, 5° y 8°, "que se abrieron no resistiendo el esfuerzo a que fueron sometidas".
En esa misma oportunidad se realizó una evaluación eléctrica de las cerraduras de dichas puertas, con
la máquina en funcionamiento, que dio cuenta de que en los pisos 14°, 12°, 11°, 9°, 8°, 6°, 5°, 4°, 3°,
2° y 1° "la cabina inició su desplazamiento no habiendo ingresado ninguna cresta, solamente habiendo
entrado la punta del gancho, el contacto eléctrico habilitó el arranque del elevador".
Se concluyó entonces que "al momento de la inspección se constató un mal funcionamiento en todas
las cerraduras electromecánicas de las puertas de rellano correspondientes al elevador n° 1… Estas
fallas permitían que las puertas pudiesen abrirse cuando la cabina no se encontrase nivelada en el nivel
donde se intentaba abrir, quedando por ende el hueco expuesto con el consecuente peligro", a lo que se
añadió que "La falla que dio origen al siniestro, estaba ocasionada por un excesivo y desparejo
desgaste en la cerradura electromecánica del nivel planta baja" "(fs. ...)".
El mencionado dictamen pericial, al que se suman los dichos de quien lo realizó, G. E. L., que fue
categórico al afirmar en relación con la puerta de rellano del ascensor n° 1 ubicada en el piso 8°, que
"se abría cuando no debía hacerlo" "(fs. ...)", exhiben la existencia de una falla evidente en el sistema
de cierre de esa puerta, que fue la que ocasionó que el niño pudiera abrirla, cayendo al hueco ante la
ausencia del elevador en esa planta.
Acreditan de igual modo esa patente deficiencia los testimonios de la madre del niño, A. D., y de la
odontóloga S. A. C. B., quienes refirieron que al tirar de la puerta de rellano del piso …..°, lograron
abrirla, pese a que el montacargas no se encontraba allí. En el caso de D., agregó que el menor pudo
abrir la puerta "sin ninguna dificultad" "(fs. ...)".
Por otra parte, la ordenanza n° 49.308 del 22 de junio de 1995, en su artículo 8.10.3.2 prevé, entre
demás obligaciones del conservador de ascensores, que "Una vez por mes como mínimo" debe
"Verificar el correcto funcionamiento de los contactos eléctricos en general y muy especialmente de
cerradura de puertas.." como también "Controlar que las cerraduras de las puertas exteriores, operando
en el primer gancho de seguridad, no permitan la apertura de la misma, no hallándose la cabina en el
piso y que no cierren el circuito eléctrico, que el segundo gancho de seguridad no permita la apertura
de la puerta no hallándose la cabina en el piso y que no se abra el circuito eléctrico" "(fs. ...)".
La verificación de la falla en la puerta de rellano del piso x° del ascensor n° 1, al igual que en otras
puertas dispuestas en distintos pisos del mismo edificio, al tiempo en que se produjo el hecho, denota la
violación al deber de cuidado por parte de A., quien en la inspección que realizó el 2 de enero de 2014
no detectó aquel defecto, que resultaba evidente, y que podría haber advertido de haber revisado en esa
ocasión las puertas de todos los pisos del edificio.
Tanto la defensa en la audiencia como el imputado en su indagatoria pretendieron desligar
responsabilidad en el entendimiento de que la falla estaba oculta o no era determinable a través de la
tarea habitual de mantenimiento que debía realizar mensualmente. Tal argumento no se compadece con
el resultado del peritaje y las demás constancias de la causa que indican que la deficiencia era
apreciable, y que por lo demás no se circunscribía al piso x°, sino que también se detectó en otros dos,
el 4° y el 5°.
Sobre este punto, la manifestación de A. acerca de que el cumplimiento de su labor comprendía
"examinar las puertas de los ascensores… comenzando la revisión desde el piso 14 hacia abajo" "(fs.
...)", da de bruces con la declaración del encargado de portería del turno mañana J. C. J., quien no dio
cuenta de que el imputado visitara piso por piso. En cambio dijo que "Una vez que el técnico llegaba al
edificio, lo atendía, le daba las llaves de la sala de máquinas que está en el piso 15°… él subía sólo,
luego bajaba, firmaba el libro de inspección … le decía que estaba todo bien y se iba", actividad que
distinguió con claridad de la que efectúa el actual inspector, quien "además de ir a la sala de máquinas,
pasa piso por piso para controlar el funcionamiento de las puertas" "(fs. ...)".
Por último, el tiempo de entre diez y quince minutos que, conforme los dichos coincidentes en ese
aspecto de A. y de J., le insumía al causante la visita, no se condice con el que debiera emplear la
inspección de la sala de máquinas y la recorrida de quince pisos con la correspondiente realización de
pruebas tendientes a verificar el estado de cierre de las puertas.
Es en razón de lo hasta aquí expuesto que la Sala RESUELVE: CONFIRMAR el pronunciamiento de
"(fs. ...)" punto "(...)" en cuanto fue materia de recurso. (...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala IV, Seijas, González Palazzo. (Prosec.Cám.: Fuertes).


c. 25.761/14/6, AZCUETA, Carlos Manuel.

121
Rta.: 05/03/2015

HOMICIDIO

Culposo. Sobreseimiento. Médicos tratantes que omitieron los cuidados necesarios para resguardar la
vida de un paciente internado por quemaduras en su cuerpo, generando ello una infección en las
heridas. Desatención y abandono que provocaron su muerte. Posición de garante del Coordinador del
Área de Pediatría y de la Pediatra. Revocación. Procesamiento por abandono de persona seguido de
muerte.

Fallo: "(...) I. Del hecho investigado: Conforme surge de las intimaciones cursadas a (fs. ... y ...) de los
autos principales, se reprocha a K. M. y O. E. D´O. no haber proporcionado la debida atención médica
al menor H. V. E. I. mientras estuvo internado desde el 15 al 18 de agosto de 2002 en la "Clínica x de
D.", sita en la calle F. x de esta ciudad, a raíz de las quemaduras de tipo "A B" (intermedia) que
sufriera en su domicilio como consecuencia del derramamiento accidental de agua caliente en su torso,
brazo y muslo derecho que afectaron un 11% de su superficie corporal.
En tal sentido, "la muerte se habría producido por congestión y edema agudo de pulmón debido a una
falla hemodinámica aguda por el proceso de la quemadura sufrida, no siendo posible descartar un
proceso infeccioso intra hospitalario como enfermedad contraída en el interior de esa institución", lo
cual evidenciaba "que no se habría proporcionado al niño la atención debida, en especial, una sala de
aislamiento para tener un mínimo contacto con situaciones que pudieran provocar infección de sus
heridas. Que tampoco se le habrían suministrado antibióticos hasta el día 18 de agosto, ni
proporcionado un cuidado regular en especial ante los vómitos y fiebre y los reclamos de atención por
parte de los familiares".
II. De las críticas desarrolladas por el representante del Ministerio Público Fiscal: Sostiene el apelante
que los encausados deben responder por el delito de abandono de persona seguido de muerte en tanto
ha quedado suficientemente acreditada su responsabilidad en el fallecimiento del menor E. I.
En ese orden, señala la fiscalía que las pruebas recabadas demuestran que M. abandonó a su suerte al
paciente pues no sólo no siguió las indicaciones que le fueran cursadas por el "Instituto del Quemado"
para tratar el cuadro clínico que aquél presentaba, sino que además, pese a tomar conocimiento de los
claros síntomas de deshidratación e infección que exhibía el paciente, nada hizo para remediar esa
situación.
Respecto a D´O. destacó que algunas de estas manifestaciones, como los vómitos y la diarrea, se
presentaron durante las primeras horas de la noche, siendo que en tales momentos no había médicos
para atender al paciente, lo que agudizó su estado de abandono y desamparo.
En definitiva, entiende el Ministerio Público que debe agravarse la situación procesal de los encartados
por la falta de control al que estaban obligados ante la presencia de un proceso séptico y de
deshidratación, no instrumentando los cuidados que eran indispensables para su supervivencia del niño
cuando ambos se encontraban en posición de garante a su respecto.
III. De los sobreseimientos dispuestos: Sentado lo anterior, y a la luz de los lineamientos trazados por
la Cámara Federal de Casación Penal, habremos de revocar la decisión desvinculante escogida por la
jueza de grado en tanto las constancias incorporadas al legajo aparecen suficientes para sustentar la
responsabilidad que cabe atribuirle a los imputados en el suceso.
En tal sentido, no sólo obran los pormenorizados testimonios de los familiares de la víctima dando
cuenta de su deficiente atención médica, sino además que tal extremo encuentra correlato con el
resultado de la última experticia practicada por los especialistas del Cuerpo Médico Forense en
conjunto con los peritos propuestos por las partes (cfr. fs. ...), cuyo contenido es eminentemente técnico
y a la vez clarificador, por lo que se impone la transcripción textual de ciertos pasajes que apuntalan el
temperamento incriminante a adoptar.
En primer lugar, se consigna que "la combinación de fiebre, vómitos, diarrea -primeras horas del
18/08/02, pudieron corresponder a una expresión clínica del cuadro infeccioso invasivo originado en la
superficie quemada. Estas infecciones severas a menudo disparan una robusta respuesta
proinflamatoria ('tormenta de citokinas') que resulta en fiebre, náuseas, vómitos, con o sin diarrea. Es
decir, el cuadro descripto no habría sido la causa de infección, sino signos que retrospectivamente
valoramos como manifestación clínica inespecífica asociada a la infección, por ende, demostrativo de
un empeoramiento de la situación clínica".
También señala que "La pérdida de peso -como expresión de deshidratación , resulta consecuencia por
una parte de la falta de aportes adecuados ante la intolerancia digestiva y por otra, del aumento de
pérdidas insensibles (fiebre) y digestivas (vómitos y deposiciones diarreicas)".
Finalmente se sostiene que el deceso de H. V. E. I. se debió "a una complicación infecciosa invasiva de
la quemadura sufrida, probablemente vinculada con flora endógena (del paciente)".
En ese orden, y tal como se apunta en la decisión casatoria, cabe remarcar que dos de los síntomas de
esta posible infección (fiebre y vómitos) se presentaron en el niño desde las primeras horas del 17 de
agosto y le fueron debidamente informados a la pediatra K. M., no obstante lo cual ésta decidió
suspender el amplio plan de hidratación parenteral que aquél tenía indicado.
Sostuvo el tribunal ad quem que a un paciente de este tipo debe dispensársele una serie de cuidados
especiales cuyo cumplimiento resulta vital, tal como garantizar su hidratación y, fundamentalmente,
realizarle un correcto seguimiento sobre el estado de salud a fin de evaluar la necesidad de adoptar

122
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

medidas que resulten adecuadas a su evolución. Cabe deducir entonces que si un internado de alto
riesgo presenta una desmejoría alarmante, tal como sucedió en el caso y que fue inmediatamente
advertida por su círculo familiar y trasmitida a quienes se encontraban a cargo de su cuidado, resulta
lógico que se proceda conforme lo imponía el cuadro clínico y que se realizaran todas las medidas
tendientes a revertirlo, lo cual fue inobservado por los responsables médicos.
La pérdida de peso que sufriera el paciente (ver historia clínica) fue otro de los signos desatendidos por
los encausados, en tanto se vinculaban con un claro síntoma de deshidratación, conforme lo destacaron
los peritos médicos. Es así que el plan de hidratación indicado por el Instituto del Quemado, de cuyo
cumplimiento, entre otras medidas, dependía la vida de aquél (cfr. fs. ...), recién fue retomado por la
pediatra J.G.A. en la mañana del 18 de agosto.
Aun cuando ambos imputados aleguen que actuaron de manera correcta y de acuerdo a la buena
práctica médica, descartando un nexo causal entre su accionar y el resultado dañoso acaecido (cfr. fs.
...), sus descargos se contraponen abiertamente con las pruebas reseñadas que, conforme lo señalara la
Cámara Federal de Casación Penal, corroboran la existencia de una manifiesta desatención y
consecuente abandono del infante afectado.
Tal desaprensión, además, queda en evidencia ante los contundentes dichos de la referida A., quien
brindó un minucioso relato sobre el real estado de salud del enfermo y la grave descompensación
clínica que presentaba en horas de la mañana del 18 de agosto, cuando se hiciera presente en la clínica
(cfr. fs. ...).
Al respecto, refirió que las guardias de pediatría se cumplían en la franja de 8 a 20 horas, motivo por el
cual recién al ingresar al nosocomio tomó conocimiento por parte del personal de limpieza que en el
cuarto piso había un menor en estado delicado. Que rápidamente se dirigió hasta la habitación n° x y
observó que el paciente estaba en "shock, sin pulsos periféricos, mal perfundido…febril: treinta y
nueve grados de temperatura o más, cianosis peribucal y estaba reticulado", por lo que indicó a las
enfermeras el suministro urgente de solución fisiológica y antitérmicos, tras lo cual se comunicó con el
Coordinador del Área de Pediatría, O. E. D´O., a fin de comentarle sobre el estado del enfermo y las
medidas que había adoptado. Que al recibir el resultado del estudio de sangre que había ordenado
previamente, advirtió que el niño tenía baja la glucemia, los glóbulos blancos, el bicarbonato y el
potasio, siendo que para ese entonces ya había sido trasladado a una habitación equipada con un
respirador y un monitor cardíaco.
Finalmente adujo que, pese al tratamiento brindado, H. V. E. I. "entró en paro" y falleció alrededor de
las 14:30. La doctrina y jurisprudencia son acordes con la posición de garante que asume quien ejerce
la medicina, pues está sometido a una mayor exigencia de responsabilidad, desde el momento en que
tiene bajo su guarda la salud y la vida de las personas (1).
Así, "el profesional deberá demostrar que ha agotado los deberes de información exigibles para el caso
y que lo ocurrido ha sido algo imprevisible, carente de signos conforme con los estudios practicados"
(2); en concordancia, esta misma sala se ha pronunciado en cuanto "…la posición de garante que recae
sobre los profesionales de la salud, exige de éstos que frente a la situación de peligro concreten las
medidas a su alcance para neutralizar la afectación del bien jurídico" (3). Esta obligación profesional
no ha sido observada por los sindicados, circunstancia que los compromete directamente con el
resultado letal que se verificara e impone decretar sus procesamientos en orden al delito de abandono
de persona seguido de muerte (artículos 45 y 106, tercer párrafo, del CP y 306 del CPP), tal como lo
indicara el Superior en su decisión obrante a (fs. ...) y lo sostuviera el representante del Ministerio
Público Fiscal en la audiencia.
En este marco, y toda vez que la etapa de juicio es, por sus características de contradicción,
inmediación y oralidad, el ámbito más propicio para que las partes puedan discutir y valorar con
amplitud los hechos y su pertinente prueba, que en esta instancia previa revisten carácter provisorio (4),
es que la jueza de grado deberá arbitrar los medios necesarios para que, una vez devuelto el legajo a su
origen, se confiera vista al representante del Ministerio Público Fiscal y a la querella para que se
expidan en los términos del art. 346 del código adjetivo con la mayor premura, para preservar la
vigencia de la acción penal que asiste a quienes la vienen ejerciendo y de acuerdo a los pautas
asentadas por la CFCP (cfrme. fs. ... y ... de este legajo).
En consecuencia, y sin perjuicio de la calificación legal que en definitiva corresponda asignarle a las
conductas reprochadas (art. 401 del código adjetivo), SE RESUELVE: Revocar parcialmente el auto de
(fs. ...) del principal en cuanto dispuso los sobreseimientos de O. E. D'O. y K.M., y decretar sus
procesamientos en orden al delito de abandono de persona seguido de muerte (arts. 45 y 106, tercer
párrafo del Código Penal y 306 del Código Procesal Penal), debiendo la jueza de grado expedirse sobre
las medidas cautelares pertinentes. (...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala IV, Seijas, González. (Prosec.Cám.: Pereyra).


c. 60.604/02/6, D O., O. E. y otros.
Rta.: 18/03/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correc., Sala IV, c. 1568/11 "J.", rta. 10/11/11. (2) Yacobucci, Guillermo J.,
"Algunos aspectos de la responsabilidad penal de médico en la responsabilidad médica para el tercer
milenio", Femi, Montevideo, 2000, pág. 143. (3) C.N.Crim. y Correc., Sala IV, c. 30585 "R.", rta. el
30/4/07 y cn° 345/10 "L.", rta. el 8/4/10. (4) C.N.Crim. y Correc., Sala IV, c. 600/12 "T.S.", rta.

123
28/5/12; n° 955/12 "G. V.", rta. 10/8/12; n° 48/13 "S., D. G.", rta. 27/2/13 y n° 8260 "S. J. M.", rta.
14/2/14.

HOMICIDIO

Culposo. Procesamiento. Menor internado en un establecimiento bajo tratamiento por abuso de drogas
que se quitó la vida en su habitación. Imputados: directores administrativos, médicos y psicólogos
tratantes del establecimiento que no habrían advertido la situación de riesgo en que se encontraba la
víctima. Inexistencia de conductas previas de auto puesta en peligro por parte del menor. Recaída
propia del trastorno por drogadicción que padecía. Ausencia de accionar negligente por parte de los
profesionales de la institución. Revocación. Sobreseimiento.

Fallo: "(…) L. F. O. de B. R. ingresó en el "C. J. E.", sito en la calle H. I. xx de esta ciudad, el 19 de


marzo de 2009, con 15 años de edad, para recibir tratamiento especializado por su diagnóstico de
"abuso de sustancias psicoactivas".
En dicha institución, cuyos Directores Administrativo y Médico eran J. R. G. y M. R. M.
respectivamente, O. de B. R. atravesó distintas etapas, hasta avanzar a la de "reinserción social" el 1 de
marzo de 2010, caracterizada por su concurrencia diaria a ese centro bajo la modalidad "hospital de
día".
El 12 de abril de 2010 el menor le habría comunicado a una de las terapeutas tratantes, licenciada A B.
A., que en los días previos había sufrido una recaída en el consumo de estupefacientes, circunstancia
que también le hizo saber a su madre, P. A. R. C. (fs. …).
Se decidió entonces mantener una entrevista con el paciente y con su progenitora, la que en fecha 13 de
abril concretó la licenciada R. B. -a cargo de la terapia familiar de los internados-, quien, después de
realizarla, le hizo saber a la querellante que el equipo interdisciplinario de la institución había dispuesto
el realojamiento del menor en ese lugar.
En esas condiciones, al día siguiente de su reingreso, el 14 de abril de 2010, en horas de la tarde, L F.
O. de B. R. se quitó la vida ahorcándose con un cable existente en una de las habitaciones. Después de
producido el siniestro, los terapistas R. H. O. y C. A. G. -que fueron anoticiados por otros
internosdieron aviso de lo ocurrido a personal policial (fs. ...).
En el auto recurrido se consideró en principio responsables por el resultado fatal verificado -la muerte
del menor- a los Directores Administrativo y Médico, J. R. G. y M. R. M., y a los psicólogos tratantes
de la víctima en dicha institución, A. B. A. y L. M. G., y se desvinculó en cambio a la licenciada R. B.
y a los terapistas L. P. R., R. H. O. y C. A. G. La jueza de grado fincó su decisión en que se habrían
verificado distintas omisiones y violaciones a deberes de cuidado no especificados con claridad que, a
su juicio, habrían incidido en la producción del resultado.
Dicho todo esto, debe en primer término distinguirse que la estructura bajo la cual corresponde analizar
el hecho por el que soportan reproche penal los causantes es la del tipo omisivo culposo. Desde esa
óptica, las hipótesis a demostrar serían: 1) la existencia de una situación previa al resultado luctuoso
generadora del deber de actuar por parte de quienes gozaban de poder de hecho para evitar su
producción, y 2) la eventual falta de apreciación por los imputados de dicha situación; verbigracia, no
haber advertido el estado de riesgo en que se encontraba la víctima, que lo llevó a tomar la decisión de
quitarse la vida al día siguiente de ser reinternado en el "C. J. E.".
Así planteada la cuestión, las constancias registradas en la historia clínica el 12 de abril de 2010 por la
licenciada A. B. A. y el 13 de abril de 2010 -día del realojamiento de O. de A. R. - por parte de la
licenciada R. B. -quien fuera sobreseída-, no permiten vislumbrar en modo alguno en ese entonces la
posibilidad siquiera remota de un intento de suicidio por parte del menor.
Véase que su grupo familiar no denunció conductas previas de auto puesta en peligro por parte de la
víctima (declaración de la madre de fs. …). A su vez, la "recaída" en el consumo de sustancias
estupefacientes resultaría una característica propia del trastorno por abuso de drogas (conforme
dictámenes médicos y declaraciones de los profesionales tratantes del menor incorporados a las
actuaciones). Y fue dicho trastorno y no otra patología la que generó desde el comienzo el tratamiento
que O. de B. R. realizaba en dicho establecimiento.
Esas consideraciones llevan a descartar que se hubieran verificado entonces indicadores de que el
menor habría de auto dañarse. La ausencia de esas señales obsta consecuentemente a estimar que pudo
haber una apreciación negligente de la situación por parte de los profesionales de la institución al
tiempo de su reinternación.
Por lo demás, las conclusiones de los informes elaborados por el Cuerpo Médico Forense avalan el
tratamiento profesional que se le dispensaba al menor en el "C. J. E.". Así, la Dra. M. C. Z. sostuvo que
era el adecuado para el trastorno que presentaba la víctima (fs. …). Por su parte, las licenciadas M. I. L.
y S. G. C. expresaron que no surgía que el menor hubiera presentado cambios significativos que
hubieran generado la necesidad de implementar medidas distintas de las que se venían llevando a cabo
conforme la etapa de tratamiento que transitaba y la problemática de adición que había motivado su
internación en la comunidad terapéutica (fs. …).
En otro orden, la lejanía temporal de la anotación efectuada por A. y G. el 25 de enero de 2010 acerca
de la "idea pasiva de muerte" que habría tenido O. de B. R., obsta a que pueda conectársela con el
resultado verificado tres meses más tarde, y en consecuencia no puede ser entendida como una
negligente apreciación de una situación que hubiera generado el deber de actuar.

124
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

A ello se suma que dicha frase parece haber sido una referencia por parte del paciente a un estado
anímico atravesado cuando contaba con 8 o 9 años de edad, de allí su falta de actualidad incluso al
tiempo en que se la expresó. Y cabe también añadir que la noción de "idea pasiva de muerte" no se
traduce en el caso en la decisión irrevocable de poner fin a la vida, ante la ausencia de antecedentes
concretos de intentos de suicidio.
En razón de las conclusiones que se derivan del análisis hasta aquí esbozado, la solución que se impone
es la desvinculación de los imputados, a tenor del artículo 336, inciso 3, del Código Procesal Penal de
la Nación, en razón de la atipicidad del hecho que les fue atribuido.
Es por ello que la Sala RESUELVE: REVOCAR el pronunciamiento de (fs. …) punto (…) en cuanto
fue materia de recurso y SOBRESEER a J. R. G., M. R. M., A. B. A. y L. M. G. en orden al hecho por
el que fueron indagados, con la expresa constancia de que la formación de estas actuaciones no afectan
el buen nombre y honor de que hubieran gozado (artículo 336, inciso 3, CPPN). (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala IV, González Palazzo, González. (Prosec.Cám.: Fuertes).


c. 19.242/10/0, GONZALEZ, Jose R. y otros.
Rta.: 26/06/2015

HOMICIDIO.

Culposo. Procesamiento. Imputado: encargado del taller mecánico que intempestivamente y sin
cerciorarse de que el trabajo de reparación habría finalizado, ascendió a la unidad y movió la dirección
provocando que se movieran los criquets y cayera el vehículo arriba de la cabeza de uno de los
mecánicos, provocándole la muerte. Actividad no reglada pero que genera ciertos riesgos que implican
que quienes cumplen allí tareas deban extremar los cuidados. Imputado que tuvo una conducta
negligente que provocó el deceso de la víctima. Infracción al deber objetivo de cuidado. Confirmación.

Fallo: "(...) A partir del testimonio de J. E. D. (fs. ...) y la declaración de la ayudante P. N. (fs. ...), que
se constituyó en el lugar, se ha acreditado que al momento de la ocurrencia del hecho el ómnibus de la
línea n° "(...)" se encontraba en el interior del taller de la empresa sito en (...) de esta ciudad, con tres
criquets colocados en la parte frontal que permitían mantener la unidad elevada y dos mecánicos, D. y
C. D. Z., a cargo del desarrollo de tareas de reparación en las ruedas delanteras, que para ello habían
sido giradas completamente hacia la izquierda.
Se determinó también que encontrándose el vehículo en las condiciones descriptas, S., encargado
general del lugar y la persona que controlaba que las reparaciones se hubieran realizado, ascendió al
ómnibus y giró la dirección de las ruedas hacia la derecha, aplastando con dicha maniobra el cráneo de
Z., quien en ese momento estaba revisando la zona en cuclillas y con su cabeza inclinada entre la rueda
y el "pasa ruedas", según pudo observar D., quien al percibir lo que ocurría comenzó a gritarle a S. para
alertarlo de la presencia de Z. en el lugar donde ocurriera el accidente.
Resulta forzoso destacar que la actividad que se desarrollaba en el taller entrañaba un riesgo cierto y,
en consecuencia, exigía extremar los cuidados por parte de quienes allí cumplían tareas para evitar en
el mayor grado posible la concreción de resultados lesivos. No se trata en el caso de una actividad
reglada, con normas cuyo respeto puedan ser evaluados rígidamente, sino de un deber de cuidado
ligado a la actuación prudente en el marco de la actividad riesgosa aludida.
La diligencia, en el caso, exigía esperar la culminación de los trabajos de reparación para iniciar
cualquier movimiento del vehículo que pudiera poner en peligro la vida de quienes estaban haciendo
arreglos en el tren delantero.
En ese contexto, el ascenso intempestivo de S. a la unidad cuando aún se encontraban colocados
elementos de elevación de gran porte -ver descripción de (fs. ...)-, que ponían de relieve que las tareas
de reparación no habían finalizado completamente y, sin cerciorarse de la concreta posición en que se
encontraban los operarios, permiten vincular su actuar descuidado con el resultado luctuoso.
Carece de relevancia lo mencionado por la defensa acerca de que los mecánicos habrían comunicado a
S. que los arreglos dispuestos estaban hechos, ya que, aún de haber existido ese aviso la prudencia del
caso tornaba imperioso, previo a realizar la maniobra, asegurarse de que aquéllos ya no se encontraban
desarrollando sus actividades con relación a esa unidad.
En consecuencia, por compartir los argumentos del a quo, se RESUELVE: CONFIRMAR el auto de
"(fs. ...)" en cuanto fue materia de recurso. (...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala IV, Seijas, González Palazzo, González. (Prosec.Cám.: Godnjavec).
c. 4.388/14, STINCO, Clauidio.
Rta.: 10/02/2015

HOMICIDIO.

Culposo por la conducción imprudente de un vehículo. Procesamiento. Violación al deber objetivo de


cuidado al no haber respetado la prioridad de paso que le correspondía a la víctima por su condición de
peatón cuando estaba cruzando la avenida. Confirmación.

125
Fallo. "(...) contra la resolución de (fs. ...), por cuanto allí se decretó el procesamiento de su defendido
J. D. por ser considerado autor penalmente responsable del delito de homicidio culposo agravado por
haber sido ocasionado por la conducción imprudente, negligente, inexperta o antirreglamentaria de un
vehículo automotor (arts. 45 y 84, 1er y 2do párrafo del CP y 306 del CPPN). (...).
Conforme surge del auto recurrido obrante a (fs. ...) se le atribuye a J. D.: "(…) haber causado la
muerte de A. D. L. (de 87 años de edad), (...) a consecuencia de politraumatismo y hemorragia interna,
tras embestirla mientras caminaba por la vía pública con el vehiculo "Ford Falcón", dominio (...), que
conducía de modo antirreglamentario, por no haber respetado la prioridad de paso que le correspondía
a la víctima por su condición de peatón, (...). (...). En ese sentido, la prueba reunida permite sostener el
reproche que se le dirige al imputado, al me nos con la provisionalidad que caracteriza a este tramo del
proceso (art. 306 del C.P.P.N.). Así, concordamos con lo expuesto por el a quo, en cuanto a que se
verifica la existencia de una conducta violatoria del deber cuidado exigible en la ocasión (ceder el paso
a la víctima cuando ella se encontraba cruzando a pie por la avenida (...), que produjo directamente el
resultado típico verificado en las presentes actuaciones. Sobre ello, la doctrina ha sostenido que "como
requisito básico se exige en el delito imprudente (...)". En el caso a estudio, el reproche que pesa sobre
el imputado encuentra sustento probatorio, en primer lugar, en los circunstanciados dichos del cabo
Néstor Ibáñez a (fs. ...), quien se constituyó en el lugar del hecho, a fin de realizar el correspondiente
procedimiento policial, observó a A. D. L. tendida sobre la vía pública y conversó con ella, ocasión en
la que le expresó que instantes antes mientras se hallaba cruzando la avenida mencionada, de forma
imprevista fue arrollada por el rodado que se encontraba allí. Ello, también encuentra asidero en los
planos ilustrativos confeccionados (cfr. fs. ...), el inventario del automotor (cfr. fs. ...) y el peritaje de la
División Ingeniería Vial Forense de la PFA (cfr. fs. ...), que aportan sustento a la conducta endilgada al
investigado. Así, contrariamente a lo expuesto por la defensa en la audiencia, entendemos que de la
versión ofrecida por el encausado en su declaración indagatoria surge la infracción al deber de cuidado,
ya que afirmó que no vio a la víctima que cruzó delante de su automóvil de izquierda a derecha y la
impactó con el sector derecho de su vehículo, de modo tal que cruzó frente a él sin ser advertida, lo que
pone en evidencia una conducción imprudente del rodado. (...). En definitiva, y más allá de la ausencia
de testigos presenciales y de las conclusiones del informe pericial, consideramos que "la influencia de
unos indicios sobre otros elimin(a) la posibilidad de duda, según las reglas de la sana crítica racional"
(...). Por tales motivos, el tribunal RESUELVE: CONFIRMAR la resolución de (fs. ...), en cuanto ha
sido materia de recurso (art. 455, C.P.P.N.). (...)"

C.N.Crim. y Correc., Sala I, Bunge Campos, Rimondi. (Sec.: Peluffo).


c. 42744/14, DIB, Juan.
Rta.: 06/02/2015

HOMICIDIO.

I-Reiterado en dos oportunidades, en concurso real entre sí, con lesiones leves cometido en dos
ocasiones, todo ello agravado por el uso de un arma de fuego de uso civil condicional, en concurso real
con su portación ilegítima (arts. 41 bis, 55, 79, 89, 189 bis inc. 2° -párrafo cuarto, C.P. y art. 306,
C.P.P.N.).Procesamiento. Triángulo delictivo originado por un enfrentamiento de bandas contrarias.
Agravio de una de las defensas: legítima defensa de un tercero. Imputado que adujo que disparó el
arma de fuego a la espalda de un sujeto porque éste con un arma blanca, perseguía a un menor -tercero
defendido-. Versión que no encuentra apoyatura en otros elementos de prueba. Arma disparada seis
veces. Irracionalidad del medio usado que descarta la eximente del art. 34, inciso 6°, ap. b) del Código
Penal. II-Deceso una mujer que permaneció en la línea de fuego, junto a varias personas.
Representación del accionar doloso. Aplicación de la agravante genérica del art. 41 bis del C.P. III-
Nulidad parcial rechazada. Investigación que puede avanzar a pesar de que dos damnificados por
lesiones leves no instaron la acción. Validez. IV- Modificación del concurso real aplicado entre la
figura prevista en el art. 189 bis inc. 2° -párrafo cuarto- y los restantes delitos. Concurso ideal (art. 54,
C.P.). Fundamentación. Confirmación. Modificación de la calificación legal por la de homicidio
reiterado en dos oportunidades, en concurso real entre sí, los que a su vez concursan de modo material
con lesiones leves cometido en dos ocasiones, todo ello agravado por el uso de un arma de fuego, en
concurso ideal con portación ilegítima de un arma de guerra.

Fallo: "(…) analizaremos en primer término aquellos vinculados al episodio que tuvo como
damnificado a M.A.M. (…) si bien se encuentra suficientemente acreditada la inminencia de una
agresión por parte de la víctima contra D.F., y más allá de que la utilización de un arma blanca por
parte del damnificado no se encuentra cabalmente acreditada en autos, lo cierto es que el empleo de un
arma de fuego por parte de M., del modo en el que lo hizo, no resulta racional en los términos del art.
34, inciso 6°, ap. b) del Código Penal.
(…) se destacan los dichos de R.G.L., quien sostuvo que luego de que M., en representación del grupo
al que pertenecía, mantuvo una pelea con D.F., integrante de la banda contraria, cuando éste pretendió
huir, lo persiguió corriendo (cfr. fs….).
Si bien a fs. (…)M .L.Ch.C. adujo que el occiso corrió al menor con un cuchillo que le habían
facilitado y que, ante esa situación, el imputado intervino efectuando disparos de arma de fuego -relato

126
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

que coincide con los dichos de M.R.S. -, lo cierto es que al declarar a fs. (…) no hizo alusión alguna
respecto a que M. portara un cuchillo. Del mismo modo, la versión de C.R.
-que también sustentaría esta hipótesis- debe ser valorada con los cuidados del caso habida cuenta que
declaró en los términos del art. 294 del código de forma, es decir, sin obligación de pronunciarse con la
verdad, sin perjuicio de que a fs. (…)fue sobreseído.
Frente a este panorama se alzan las declaraciones del mencionado R.G.L. y de V.R.B., quienes
omitieron cualquier referencia al uso de un arma blanca por parte del damnificado (cfr. fs…), como así
también, las tareas de investigación practicadas a fs.(…), a raíz de las cuales se recabaron los
testimonios de vecinos de la zona, que tampoco dieron cuenta de la utilización de un cuchillo en el
conflicto que derivó en la muerte de M.A.M.
(…) no se secuestró ningún elemento de estas características en las inmediaciones del lugar, una vez
arribado el personal policial.
(…) cabe destacar que la intervención del imputado supuestamente orientada a defender a F. mediante
la ejecución de, al menos, seis disparos de arma de fuego, en las circunstancias en las que se produjo -
esto es, cuando D.F. ya había logrado zafarse de las manos de M.A.M., extremo en el que coinciden la
totalidad de los testigos presenciales que dieron cuenta de lo ocurrido (cfr. fs…), aparece como un
modo groseramente desproporcionado de conjurar la situación y, por ende, no es racional, máxime
cuando el imputado debió correrlo algunos metros para dispararle.
Además, tal como valoró el Sr. Juez los disparos los dirigió a la espalda. (…) corresponde descartar la
legítima defensa de un tercero por parte de J.J.M., que aduce la defensa.
(…) tampoco tendrá acogida favorable el planteo subsidiario del recurrente, pues no puede haber
exceso si en modo alguno ha mediado justificación toda vez que solamente quien ha estado en el
ámbito del precepto permisivo puede exceder sus límites en los términos del art. 35 del Código Penal
(1).
(…).si bien la calificación legal en esta etapa es provisoria (art. 401, C.P.P.N.), estimamos que la
aplicación al caso de la agravante genérica del art. 41 bis del Código Penal resulta ajustada a derecho
habida cuenta que el legislador la ha previsto para ser integrada a todos los tipos penales que contengan
conductas que puedan ser cometidas mediante la utilización de un arma de fuego y que, claro está, no
la incluyan en su texto.
Desde esa perspectiva, no se aprecian razones convincentes para interpretar que la figura del art. 79 del
Código Penal queda exceptuada de la aplicación de la agravante, máxime cuando el art. 80 del Código
Penal prevé, en su inciso 5°, una pena superior para el homicidio cometido con un medio idóneo para
crear un peligro común, extremo que corrobora que nada obsta a que ciertas circunstancias, vinculadas
con los elementos empleados para matar, sean tenidos en cuenta para incrementar la escala penal.
La agravante prevista en la norma es de carácter genérico, y puede aplicarse al delito de homicidio al
resultar un medio que permite la comisión del delito con un mayor poder vulnerante que ha merecido
en la ley un mayor desvalor en el injusto que se reprocha.
(…) ingresando al análisis del hecho que tuvo como damnificada a M.T.A., cabe precisar que si bien
ocurrió durante la medianoche -extremo que permitiría sostener que la visibilidad a larga o mediana
distancia que el encausado tuvo, pudo encontrarse reducida-, lo cierto es que se aglomeraron en el
lugar gran cantidad de personas (ver fs….). (…) permite sostener, al menos con la provisoriedad que
esta etapa demanda-, que M. hubo de representarse la seria posibilidad de causar la muerte de cualquier
otra persona que se hallara en la línea de fuego, y la aceptó, sobre todo al efectuar semejante cantidad
de disparos.
Estos indicadores acreditan un accionar doloso (2). En este sentido, "Se debe partir de que la voluntad
de realización se puede extender a todas las consecuencias y modalidades del obrar, si el autor cuenta
con la posibilidad de su existencia o de su producción" (3).
(…) a fin de no cercenar al Ministerio Público Fiscal la posibilidad de optar entre las distintas
calificaciones posibles al requerir la elevación a juicio de los actuados, corresponde descartar el
agravio invocado por la defensa con relación a este aspecto.
(…) en cuanto a la nulidad parcial del auto apelado requerida por el recurrente, entendemos que el juez
de la anterior instancia fundó adecuadamente la existencia de razones de seguridad que justifican el
avance de la pesquisa en relación con los dos sucesos calificados como lesiones leves, cuya comisión
se atribuye al imputado y por los que los damnificados no instaron la acción penal correspondiente (art.
72, inc. 2°, C.P.).
Ello, por cuanto aquellos tuvieron lugar en el marco de un episodio de extrema gravedad en atención a
los resultados lesivos derivados del presunto enfrentamiento entre dos bandas de la villa 20 y que
motivó que varios de los vecinos de la zona temieran por eventuales represalias en caso de declarar
ante la justicia (cfr. fs…), extremo que incluso puede haber incidido en la libertad que toda víctima
debe tener al decidir sobre el impulso de la acción penal en los delitos dependientes de instancia
privada.
Respecto al agravio vinculado con la regla aplicada al concurso existente entre la portación de arma de
fuego de uso civil condicional y los restantes delitos atribuidos a J.J.M., asiste razón a la defensa en
cuanto a que debe ser modificada.
(…) advertimos que las conductas que afectaron la vida y la integridad física de los damnificados se
superponen con la apuntada portación ilegítima, particularmente al ponderar que del auto de
sobreseimiento dictado respecto de C.R. se desprende que el imputado habría tomado el arma instantes

127
antes de ser utilizada (cfr. fs…), sin que exista indicio alguno que permita afirmar que, finalizado el
hecho, la mantuviera en su poder.
(…) parece claro que la figura prevista en el art. 189 bis inc.
2° -párrafo cuarto- del Código Penal, contempla un delito que, en tanto supone llevar, en condiciones
inmediatas de uso y sin permiso, un arma de fuego, coincide parcialmente con la prohibición contenida
dentro del tipo penal de homicidio agravado por el art. 41 bis de ese cuerpo legal.
(…) se modificará el concurso real aplicado entre la figura prevista en el art. 189 bis inc. 2° -párrafo
cuarto- y los restantes delitos, ya que se estima que media un concurso ideal (art. 54, C.P.).
(…) corresponde homologar el auto en crisis, modificando la calificación legal del hecho por la de
homicidio reiterado en dos oportunidades, en concurso real entre sí, que a su vez concursan de modo
material con el delito de lesiones leves cometido en dos ocasiones, todo ello agravado por el uso de un
arma de fuego, en concurso ideal con la portación ilegítima de un arma de guerra (arts. 41 bis, 54, 55,
79, 89, 189 bis inc. 2° -párrafo cuarto, C.P. y art. 306, C.P.P.N.).
(…) se RESUELVE: Confirmar el auto de fs. (…)en cuanto fuera materia de recurso, modificando la
calificación legal por la de homicidio reiterado en dos oportunidades, en concurso real entre sí, los que
a su vez concursan de modo material con el delito de lesiones leves cometido en dos ocasiones, todo
ello agravado por el uso de un arma de fuego, en concurso ideal con la portación ilegítima de un arma
de guerra (arts. 41 bis, 54, 55, 79, 89, 189 bis inc. 2° -párrafo 4°, C.P. y art. 306, C.P.P.N.)".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, Pinto, Divito. (Prosec.Cám.: Daray).


c. 51.290/12, MONTAÑO, Jorge J.
Rta.: 11/03/2015

Se citó : (1) Zaffaroni, Eugenio Raúl; Alagia, Alejandro y Slokar Alejandro, Derecho Penal. Parte
General, Ediar, 2002, pag. 645. (2) Hassemer Winfried, Los elementos característicos del dolo, en
Anuarios de Derecho Penal y Ciencias Penales, 1990, p. 928. (3) Armin Kaufmann, El dolo eventual en
la estructura del delito, trad. De Suárez Montes, en ADPCP, 1960, p. 193, citado en Donna, Edgardo,
Derecho Penal. Parte General. T II, Ed. Rubinzal-Culzoni, Bs. As., 2008, p. 609.

HOMICIDIO.

Culposo. Procesamiento. Médicos que se demoraron en la realización de estudios, en el diagnostico y


en el tratamiento adecuado, circunstancias que hubieran que aumentado las posibilidades de sobrevida.
Confirmación.

Fallo: "(…) Se les atribuye que el (…) habrían incumplido los deberes como médicos del Hospital
(…), donde (…) fue internado como consecuencia de las lesiones que sufriera a causa de un accidente
de tránsito, creando así un riesgo por encima del permitido al demorar la realización de estudios,
diagnóstico y tratamiento, lo que culminó con el fallecimiento del nombrado luego de diez días.
(…), tía del occiso, expuso que en el Hospital los profesionales le dijeron que su sobrino presentaba
una "fractura de pelvis".
Ante los dolores en el estómago solicitó que le realizaran una ecografía, a lo que le respondieron que
ya la habían efectuado.
Luego constató que eso no era así, por lo que formuló diversas protestas en el lugar. Finalmente
detectaron que presentaba peritonitis aguda, siendo intervenido de urgencia el (…), falleciendo al día
siguiente (…).
En la autopsia se determinó que la muerte había ocurrido por politraumatismo y peritonitis.
Con la historia clínica y los estudios practicados el Cuerpo Médico Forense elevó su informe a fs. (…)
conjuntamente con la perito de parte, (…) -en disidencia parcial-.
(…) En su declaración de fs. (…), el Dr. (…) explicó que a "…partir de la alerta manifestada por los
Dres. (…) y (…)…se supo que el paciente presentaba una manifestación de algún proceso abdominal
que se evidenció con un estado de nauseas, vómitos, abdomen distendido en forma generalizada,
doloroso a la palpación en el hipocondrio derecho, en este momento se solicitó hepatograma, ecografía
abdominal, control evolutivo y reposo digestivo…" y que pese a esto "...entre los días (…) y (…) no
fue evaluado por ningún cirujano, así como tampoco se cuenta con la ecografía que se debía realizar el
(…)…". Reiteró lo que había señalado en la experticia y agregó que en este caso se habían apartado de
la buena práctica médica, no solo los traumatólogos sino también los cirujanos ya que los profesionales
debían examinar al paciente en su totalidad y no sólo respecto a la patología de su especialidad.
Agregó que si bien la lesión pudo no ser advertida el día del accidente en la tomografía ni en las
radiografías, lo cierto es que a partir del (…) el paciente comenzó a manifestar sintomatología
abdominal que ameritaba un control mucho más estricto en el contexto de un politraumatizado. Es
decir que no se le prestó la debida atención, ni se emplearon los medios adecuados en tiempo y forma
para arribar a un diagnóstico certero que permita actuar en consecuencia.
El Cuerpo Medico Forense afirmó que no puede sostenerse con certeza que de haberse realizado el
diagnóstico de perforación de vísceras que presentaba (…) en forma precoz y el tratamiento quirúrgico,
se hubiera salvado la vida del paciente pero que su demora aumento considerablemente el riesgo, ya
que frente a un cuadro de peritonitis la pronta atención resulta de vital importancia y la tardanza trae
aparejadas complicaciones que pueden provocar la muerte, tal como ha ocurrido.

128
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

En consecuencia, ante el deterioro de la salud del paciente no se efectuaron las debidos controles y
estudios solicitados por el Dr. (…), ya que luego de haber sido examinado por el residente de cirugía
Dr. (…) el mismo día de su ingreso al nosocomio no volvió a recibir atención por tal especialidad entre
el (…) y el (…), pese a que se había indicado "control estricto" (…), ni se había practicado la ecografía
que debía realizarse el (…), lo que evidencia que no cumplieron con la conducta debida a su cargo y
aumentaron el riesgo de vida de (…).
Respecto a la posibilidad efectiva de que ello hubiera evitado el desenlace fatal la jurisprudencia
postula que "en el delito imprudente, concretamente derivado de la praxis médica, la omisión o
violación al deber específico de cuidado no se vincula con dogmáticas certezas sino con la potencial
capacidad de evitación del resultado o cuanto menos con la disminución del riesgo de que tal resultado
se produzca (1).
También se sostuvo, en sentido similar, que "no cabe decidir con absoluta seguridad si la acción
omitida hubiera o no impedido el resultado, pues se trata de un juicio hipotético o sometido
inevitablemente a un margen de error, siendo que la doctrina dominante se contenta con la
demostración de que la realización de la conducta debida hubiese evitado el resultado con una
probabilidad rayana en la seguridad, mientras que otro sector considera necesario y suficiente que la
interposición de la acción esperada hubiera supuesto con seguridad un aumento de las posibilidades de
evitación del resultado, entendido como segura disminución del riesgo" (2).
Bajo tales lineamientos, en esta etapa resulta suficiente -a los fines previstos en el artículo 306 del
Código Procesal Penal de la Nación- la estimación de que (…), violaran los deberes a su cargo al
omitir realizar en tiempo oportuno el control correspondiente.
(…), el tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el punto I del auto de fs. (…), en todo cuanto fueron
materia de recurso. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini, Filozof. (Sec.: Williams).


c. 17.059/11, BAK, Débora Ianina y otros.
Rta.: 14/04/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correcc., Sala VI, c. 36912m, "Nicoletti, Guillermo", rta.: 31/10/14; (2)
CFCP, Sala III, c. 4766, registro 253.04-03 "M., C.".

HOMICIDIO.

Culposo. Procesamiento. Médica que omitió el debido deber de cuidado al no realizar estudios médicos
previos y extender varias recetas de comprimidos con el objetivo que la paciente baje de peso,
provocando su conducta un repentino descenso de peso, efectos adversos y cambios en el
comportamiento que determinaron a la persona a tomar la decisión que quitarse la vida. Elementos de
prueba suficientes que demuestran el nexo causal entre la omisión y el resultado típico. Confirmación.

Fallo. "(...) decretó el procesamiento de M. A. B. por considerarla autora del delito de homicidio
culposo y trabó embargo sobre sus bienes y/o dineros hasta cubrir la suma de $ 1.500.000. (...).
Se le imputó a M. A. B. "El haber causado, mediante imprudencia, negligencia, impericia en su
profesión o violando los deberes objetivos de cuidado, en su condición de médica, la muerte de J. P. C.
En efecto, la imputada atendió a la víctima en el consultorio que funciona en la calle (...) de esta
ciudad, que la consultó para bajar de peso, el 19 de diciembre de 2012.
Entonces, sin realizarle estudios médicos previos (psicológicos, neurológicos, análisis de sangre o
revisación médica), le indicó un tratamiento a base de comprimidos que contenían ácido fólico,
tripicolinato de cromo, vitamina E, cafeína, diazepam y mazindol, a sabiendas que el diazepam podía
causar 'intranquilidad, agitación, agresividad, delirio, ataques de ira, pesadillas, alucinaciones, (...)'. El
suministro de la medicación era a través de recetas magistrales, que confeccionaba la compareciente,
incumpliendo con la normativa establecida por ANMAT, (...) C. sufrió una sobre dosificación de las
sustancias mencionadas, cuya ingesta en las cantidades que le indicó y en forma conjunta, esta
contraindicada. Es así que todo ello le provocó a J. P. C. un repentino descenso de peso y efectos
adversos comos los descriptos, experimentando cambios en su comportamiento y determinándola a
tomar la decisión que quitarse la vida. (...).
Analizadas las actas escritas que componen el expediente, estimamos que surge prístina la
responsabilidad que le cupo a B. en el delito imprudente que se le atribuye. En ese sentido corresponde
destacar que la nombrada es de profesión médica y se dedica concretamente a brindar a sus pacientes
tratamientos contra la obesidad, por lo tanto, se deduce que conocía los efectos nocivos que podía
generar la ingesta conjunta de los comprimidos prescriptos a C. En definitiva, teniendo en cuenta esos
conocimientos que detentaba B. al momento del hecho, estrechamente vinculados al ejercicio de su
profesión, es posible sostener que con su conducta creó un riesgo jurídicamente desaprobado. (...). En
definitiva, entendemos que el obrar riesgoso que se endilga a B. es el que, de acuerdo a las probanzas
acumuladas al legajo, se concretó directamente en el infausto resultado lesivo verificado en autos.
Según surge de las testimoniales de los familiares y amigos de la víctima, su actitud previa al deceso e
incluso el modo en que acaeció la muerte misma de C., se corresponden en un todo con aquellos
efectos adversos que podían causar los componentes de los comprimidos recetados para su tratamiento
médico. Además, el argumento ensayado por la defensa en la audiencia, vinculado a que la

129
damnificada no habría ingerido las pastillas, se desvanece a poco que se verifica la presencia de cafeína
en sangre y diazepan en las vísceras. (...). En virtud de lo expuesto el tribunal RESUELVE:
CONFIRMAR el auto de (fs. ...), en cuanto ha sido materia de recurso (art. 455 del CPPN). (...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala I, Rimondi, Bunge Campos. (Sec.: Sosa).


c. 13076/13, BERCUR, María Alejandra.
Rta.: 09/04/2015

HOMICIDIO.

Culposo. Sobreseimiento. Detención imprudente del rodado sobre una avenida sin colocar las balizas
reglamentarias. Fallecimiento de un motociclista debido a las lesiones sufridas cuando se cayó por una
maniobra de desvío al esquivar el rodado que circulaba inmediatamente detrás del vehículo de la
imputada. Infracción art. 59, de la Ley de Tránsito que determinó el resultado fatal. Revocación.
Procesamiento por homicidio culposo agravado por haber sido ocasionado por la conducción
negligente, imprudente y antirreglamentaria de un vehículo automotor en calidad de autora.

Fallo: "(…) II. Se imputa a M.I.C. (…) en haber causado por imprudencia la muerte de M.E.T. al haber
detenido la marcha del vehículo que conducía -marca Ford Modelo "Fiesta", dominio XX como
consecuencia de la pinchadura de la rueda delantera izquierda sobre el costado derecho de la Avenida
General Paz a la altura de la calle Ricardo Gutiérrez de esta ciudad, sentido Riachuelo, sin colocar
además las balizas reglamentarias con el fin de advertir lo que sucedía a los distintos usuarios que en
ese momento circulaban por la vía pública.
Esta situación, provocó que frente a la escasa banquina allí existente el rodado conducido por A.B.,
quien circulaba por detrás, realizara una maniobra brusca hacia la izquierda para esquivarlo, lo cual
provocó que la camioneta que manejaba -marca Peugeot, modelo Partner, dominio XX-, embistiera a la
motocicleta marca Yamaha, modelo YRB 125, dominio XX, que era conducida por la víctima, quien
producto del golpe cayó al asfalto y sufrió un fuerte traumatismo encéfalo craneano que motivó su
derivación al Hospital Pirovano, donde el 18 de agosto de 2013, falleció como consecuencia de las
graves lesiones que le provocó el siniestro.
(…) revocaremos el auto impugnado y, en consecuencia, decretaremos el procesamiento de la
imputada C., pues se han reunidos elementos suficientes para tener por acreditada, con la provisoriedad
de esta etapa procesal, la materialidad del hecho y la responsabilidad de C. Desde nuestra intervención
de fs. (…), se agregó a la causa las constancias obrantes a fs. (…) y la ampliación de la declaración
indagatoria de C. en la que se le atribuyó la violación de la conducta exigida por el artículo 59 de la ley
24.449.
(…) quedó demostrado que C. omitió colocar las balizas reglamentarias tal como lo requiere el art. 59
de la ley de tránsito que debe ser interpretada a la luz del art. 40 que dispone que se lleve en el rodado
balizas portátiles normalizadas.
Esa omisión no puede, al menos en esta instancia del proceso, ser considerada una aporte inocuo en
términos del resultado, pues en la hipótesis de la defensa si C. s no pudo evitar estacionar en un lugar
prohibido- conforme lo establece el artículo 48 de la ley 24.449- debió cumplir con las medidas de
seguridad necesarias y obligatorias, de manera tal que los vehículos que venían detrás de ella pudieran
esquivarla con la suficiente anticipación.
Dentro de ese marco, aludió la defensa a la imposibilidad de colocarlas por el riesgo que implicaba el
lugar en el cual estaba el rodado, y además que la imputada solicitó la asistencia mecánica.
De esta manera si bien se encuentra comprobado que realizó los llamados de auxilio (confrontar con
fs…), lo cierto es que de momento no puede descartarse en forma absoluta su responsabilidad
sustentada en la hipótesis de un estado de necesidad que le hubiese impedido actuar conforme lo
requería la normativa.
En esta inteligencia, el lugar en el que detuvo el rodado sin proseguir la marcha, no permite considerar
que estuviera imposibilitada de cumplir con la prudencia del caso señalando con las balizas
reglamentarias su detención. Por lo cual, toda vez que en principio no se comprobó la presencia de un
supuesto de riesgo de tal entidad que le hubiese resultado inexorable y que le hubiera impedido ajustar
su actuación conforme a la ley, la omisión en la que incurrió no puede ser aceptada.
Y si bien en principio parecería que el grado del injusto derivado de la conducta de M.I.C. sería menor
al que derivó de la imprudencia de A:B., a fin de procurar un análisis integral del caso y se determine si
la infracción al deber objetivo de cuidado en el que incurrió la imputada fue determinante en el
resultado fatal, debe quedar sujeta al proceso. Ello sin perjuicio de destacar que las objeciones
señaladas por la defensa en el marco de la audiencia merecen un tratamiento sobre la base de la
oralidad, inmediación, contradicción y publicidad que no son propias de esta etapa procesal. (…)
habremos de decretar el procesamiento de M.I.C. (artículo 306 del CPPN).
IV. En cuanto a la significación jurídica del comportamiento descripto, resulta constitutivo del delito
de homicidio culposo agravado por haber sido ocasionado por la conducción negligente, imprudente y
antirreglamentaria de un vehículo automotor, por el que M.I.C., deberá responder en calidad de autora
(arts. 45 y 84, segundo párrafo, del Código Penal).

130
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

V. En atención a lo dispuesto precedentemente, deberá el juez de grado expedirse sobre las cautelares
personales y reales a aplicar conforme los artículo 312 y 518 del CPPN, a fin de no privar de recurso al
imputado y su defensa, en caso de disentir con la solución escogida.
(…)el tribunal RESUELVE: REVOCAR el auto decisorio de fs. (…)y decretar el procesamiento de
M.I.C. (…) por considerarla, en principio, autora penalmente responsable del delito de homicidio
culposo agravado por haber sido ocasionado por la conducción negligente, imprudente y
antirreglamentaria de un vehículo automotor en calidad de autora (arts. 45 y 84, segundo párrafo, del
Código Penal y 306 del Código Procesal Penal de la Nación), debiendo del juez de grado resolver
sobre las medidas cautelares personal y real aplicables al caso (artículos 312 y 518 del CPPN)".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, López González, Pinto. (Sec.: Roldán).


c. 43.139/13, CÁCERES, Miriam I. y otro.
Rta.: 26/06/2015

HONORARIOS.

Letrados que ejercen la defensa en forma conjunta. Magistrado que reguló un monto a cada uno por
separado. Improcedencia. Forma de disponer la regulación: fijación de honorarios como si fuera una
sola representación (Ley 24.432). Nulidad.

Fallo: "(…) Intervenimos en virtud del recurso de apelación interpuesto por el Dr. (…), apoderado de
la querella (…), contra el auto de fs. (…) que reguló los honorarios del Dr. (…) en (…) pesos ($...).
II. Del legajo surge que el letrado (…) ejerció la defensa de (…) en forma conjunta con el Dr. (…), por
lo tanto de esta manera debería haberse estimado su retribución.
El artículo 10 de la ley 21.839 modificada por la ley 24.432 establece que: "Cuando actuaren
conjuntamente varios abogados o procuradores por la misma parte, a fin de regular honorarios se
considerará que ha existido un solo patrocinio o una sola representación, según fuera el caso" (sic),
circunstancia que no se tuvo en consideración pues se fijaron por separado.
En consecuencia, al no haberse procedido conforme lo indica la norma, corresponde declarar la nulidad
del pronunciamiento de fs. (…), conforme lo dispuesto en los artículos 242 y ss del Código Procesal
Civil y Comercial de la Nación, lo que así se RESUELVE. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini, Filozof, Pinto. (Sec.: Oberlander).


c. 53.940/08, ROMERO VILLANUEVA, Horacio Jaime.
Rta.: 27/02/2015

HONORARIOS.

Letrado defensor que cuestiona el importe estipulado por ser bajo debido a la devaluación de moneda y
el proceso inflacionario. Actualización monetaria: no prevista en la normativa legal. Confirmación.

Fallo: "(…) El interlocutorio obrante a fs. (…), que regula en la suma de doce mil pesos ($ 12.000) los
honorarios profesionales del doctor A. L. B., por su labor como abogado defensor de J. P. A., fue
recurrido en apelación por el letrado aludido, quien los consideró bajos (…).
Al evaluarse la labor del profesional, tal como fuera detallada por el juez de la instancia anterior, con la
apreciación de la complejidad del asunto debatido, la gravitación y mérito que tuvo su patrocinio, el
resultado favorable a esa parte (…) y la calidad, eficacia y extensión del trabajo realizado, se considera
que el monto discernido por el magistrado a quo resulta acertado, desde que luce consecuente con los
parámetros fijados por el artículo 6 de la Ley 21.839 y su modificatoria por Ley 24.432, por manera
que, en el caso, se entiende que los estipendios regulados deben ser homologados.
En esa inteligencia, respecto al agravio introducido en relación con la "devaluación de la moneda y el
ingente proceso inflacionario al que se encuentra sometida nuestra economía" (fs. 205 vta. in fine), no
obstante lo dispuesto en el artículo 22 de la ley de aranceles y honorarios, debe destacarse que el
artículo 10 de la Ley 23.928, modificada por Ley 25.561, ha vedado el cómputo de la actualización
monetaria a partir del 1 de abril de 1991, razón por la cual la aludida depreciación económica, no
constituye una pauta a tener en cuenta en la estimación de los estipendios profesionales (Fallos
319:1111).
Por otra parte y de adverso a lo alegado por el recurrente, el monto estipulado provisoriamente para
cubrir sus honorarios se fijó en la suma de dos mil pesos ($2.000), en tanto los ocho mil pesos ($8.000)
que indica en el escrito de apelación (…) corresponden a la medida cautelar oportunamente dispuesta
(artículo 518 del Código Procesal Penal) que comprendía además la pena pecuniaria, la indemnización
y las costas causídicas (...).
Finalmente, el agravio del recurrente relacionado con la falta de valoración de la injerencia de su
actuación en el resultado obtenido, no tendrá acogida favorable, en tanto atañe a su labor ante esta
alzada y más allá de haberse mencionado en el auto recurrido las presentaciones que motivaron la
intervención del Tribunal (…), la regulación de honorarios recurrida no puede considerarse
comprensiva de su actividad profesional en esta instancia.

131
En consecuencia, esta Sala del Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el auto documentado a fs. (…),
en cuanto fuera materia de recurso".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Divito, Cicciaro, Scotto. (Prosec. Ad Hoc.: Sposetti).
c. 73.081.678/12, ALEGRE, José Pedro.
Rta.: 10/03/2015

HONORARIOS.

Letrado que pretende elevarlos y querella que solicita que se reduzcan. Elementos que deben ser
tenidos en cuenta para su fijación. Elevación del monto.

Fallo: "(…) El interlocutorio obrante a fs. (…), que regula en la suma de cuatro mil pesos ($ 4.000) los
honorarios profesionales del doctor R. D. H., por su labor en la anterior instancia como abogado
defensor de M. C. R. L., fue recurrido en apelación tanto por el letrado aludido, quien los consideró
bajos (…) como por la parte querellante, al estimarlos elevados (…).
En cuanto al agravio de la defensa relativo a que debe atenderse como base regulatoria al monto
reclamado, el Tribunal entiende que aun cuando el asunto o proceso fuera susceptible de apreciación
pecuniaria, que, conforme a lo dispuesto en el inciso "a" del artículo 6 de la ley 21.839, es una de las
pautas a tener en cuenta en la regulación de honorarios, por la propia naturaleza de la materia penal,
debe considerarse que el monto del juicio resulta indeterminado, más allá de que se haya podido
establecer la suma a la que ascendía la maniobra denunciada, puesto que tal baremo ya se encuentra
incluido en el inciso "f" del artículo citado, cuando reza "La trascendencia ... económica que tuviere el
asunto o proceso..." (1).
Tal es el criterio sostenido en el plenario "De la Fuente" de esta Cámara, cuya doctrina resulta conteste
con el criterio fijado por la Corte Suprema de Justicia de la Nación, en tanto entendió que la posibilidad
de determinar un monto "[…] no puede utilizarse como sustento para atribuir carácter económico a un
proceso penal, en el que el querellante y el Fiscal persiguen la aplicación de una pena [...]" (Fallos:
314:303).
Al evaluarse la labor del profesional, tal como fuera detallada por la señora juez de la instancia
anterior, con la apreciación de la complejidad del asunto debatido, la gravitación y el mérito que tuvo
su patrocinio, el resultado favorable a esa parte (…) y la calidad, eficacia y extensión del trabajo
realizado, permite considerar que el monto discernido por la magistrada a quo -según las pautas
establecidas en el artículo 6 de la ley N 21.839- debe ser elevado a la suma de diez mil pesos ($
10.000).
Finalmente, en torno a la solicitud formulada a fs. (…), se pondera que el letrado no ha tenido
intervención en esta Alzada, por lo que no corresponde regular estipendios en relación con esa etapa.
En consecuencia, esta Sala del Tribunal RESUELVE: ELEVAR el monto de los honorarios regulados a
fs. (…), al Dr. R. D. H. por su actuación en la anterior instancia, a la suma de diez mil pesos ($
10.000)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Divito, Cicciaro. (Prosec. Ad Hoc.: Sposetti).


c. 3.130/08, REY LOPEZ, María Cristina.
Rta.: 07/04/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correc., Sala VII, c. 30.624, "Vorobiof, Marcelo H.", rta: 18/12/2006; c.
41.030, "Gonzalo, Juan Ramón", rta: 04/08/2011 y c. 916/2000-10, "Presta, Diego", rta: 04/04/2014.

HURTO

Procesamiento. Sustracción de energía eléctrica mediante conexiones clandestinas. Elementos de


prueba suficiente para agravar la situación procesal. Confirmación.

Fallo: "(...) A juicio del Tribunal, los elementos de prueba incorporados a la encuesta alcanzan a
conformar la convicción que reclama el artículo 306 del código adjetivo.
No se encuentra discutida la materialidad del hecho atribuido a M. En efecto, a partir del testimonio de
E. A. W., del acta labrada por escribano público el 14 de noviembre de 2012 y del resultado del
allanamiento practicado en el edificio emplazado en la calle B. xx de esta ciudad, se encuentra
acreditado que en dicho inmueble habrían existido varias conexiones eléctricas clandestinas, con el
objeto de apropiarse en forma indebida del fluido eléctrico, como también que carecía de medidores, y
por tanto la empresa "Edesur" no podía calcular el consumo de energía de cada departamento (fs. ...).
A su vez, consideramos que el material probatorio colectado en autos demuestra suficientemente la
intervención culpable del causante en la conducta atribuida, en tanto su actuación hacia el año 2008 no
se limitó a resolver las cuestiones administrativas que le fueran encomendadas por la firma "C. C.
S.R.L.", como sostiene la defensa.
En primer lugar, el 16 de abril de 2008 se instaló en la edificación un medidor de consumo de
electricidad (retirado casi un año después) a nombre de M. -también procesado por hechos similares en

132
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

la causa nº 610050363/11-, quien tenía a su cargo el proyecto, pliego de especificaciones y cronograma


de realización de la obra (fs. ...).
A ello se agrega que fue el causante quien efectuó, en forma personal o a través de otras personas
autorizadas por él, las solicitudes de suministro eléctrico definitivo para el inmueble, a las que fueron
adjuntadas certificados de instalaciones eléctricas falsos, como surge de las actas de (fs. ...).
Por otra parte, no puede soslayarse que la firma "Edesur" realizó varios cortes de suministro de energía
en el edificio a partir del año 2008 al detectar la existencia de conexiones clandestinas, tal como refleja
la documentación obrante a (fs. ...).
También, una vez que fuera retirado el medidor de obra, el edificio continuó recibiendo la prestación a
través de conexiones clandestinas. Frente a ello, no puede aceptarse el desconocimiento de esa
circunstancia por parte de M., quien era apoderado de la empresa "C. C. S.R.L.", y en calidad de tal
habría entregado la posesión de algunas unidades funcionales a sus adquirentes, y fue facultado a
gestionar el certificado "APSE" para la instalación del servicio de electricidad (ver fs. ...).
En razón de las consideraciones expuestas, y sin perjuicio de la responsabilidad que pudiera caberle a
terceras personas en los hechos, el Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el auto de (fs. ...), punto I, en
cuanto fue materia de recurso. (...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala IV, González, Pociello Argerich. (Prosec.Cám.: Fuertes).


c. 610.053.083/12, MONTALTO, Claudio J.
Rta.: 13/04/2015

HURTO

Procesamiento. Imputados: Arquitecta y constructor que se apoderaron de bienes muebles para


cobrarse lo adeudado luego que finalizara la locación de obra y se entregara el bien. Bienes que estaban
en poder del propietario del inmueble y ya no les pertenecía. Hecho típico. Confirmación.

Fallo: "(...) Conforme lo obrado en la encuesta, la controversia radica en determinar si la obra


encomendada a los imputados (en su carácter de arquitecta y constructor respectivamente, fs. ...), a la
fecha del episodio que se les endilga, había sido ya entregada a O. B. V.
Ello así, pues aun cuando los muebles que se reputan sustraídos hubieran sido aportados por los
causantes, tal como alegaron en sus descargos (fs. ...), lo dirimente aquí es que antes del 22 de
diciembre de 2014 el trabajo ya había sido entregado a su dueño. En efecto, a tenor de los arts. 1623 y
ss. del Código Civil, es posible afirmar que los bienes que integraban la labor encomendada ya no les
pertenecían y mal podían, entonces, disponer de ellos del modo en que lo hicieron.
Al respecto, cabe precisar que en el marco de un contrato de locación de obra, si los elementos fueron
aportados por quien la ejecuta, éstos le pertenecen "hasta el momento de la entrega", en cuyo caso es el
dueño de la obra (o comitente) quien adquiere la propiedad de los bienes (1).
En la especie, la circunstancia señalada tuvo lugar el 20 de diciembre de 2014, oportunidad en la que se
llevó a cabo la inauguración del local de comidas (ver fotografías a fs. ...).
Véase que en este punto ninguna controversia existe e incluso de la presentación de A. M. a (fs. ...)
surge que para ese entonces "el restaurant estaba terminado"; "la inauguración se llevó a cabo sin
ningún inconveniente y asistieron aproximadamente 50 personas" y que transcurridas 24 horas "se hizo
presente P. C. en el lugar… y procedió a llevarse… los muebles que pudo identificar como los que
habíamos comprado en Sodimac con nuestro dinero" (ver en particular fs. ...).
Por su parte, aun de haber subsistido a la fecha del suceso una deuda del denunciante en favor de C. y
M., de ningún modo ello los habilitaba a ingresar al establecimiento a fin de apoderarse de los objetos
en cuestión (incluso teniendo todavía en su poder las llaves del inmueble) puesto que, conforme lo ut
supra expuesto, aquél ya había pasado a manos de V.
Por consiguiente, el Tribunal RESUELVE: Confirmar el pronunciamiento puesto en crisis en todo
cuanto fuera materia de recurso. (...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala IV, Seijas, González Palazzo, González. (Sec.: Bloj).
c. 78.874/14, CELATTI, Pablo y otros.
Rta.: 30/04/2015

Se citó: (1) Borda, Guillermo A., "Manual de Contratos", 7ª edición, Edit. Abeledo Perrot, Bs. As.,
§816 y §856, en págs. 522 y 537.

HURTO

Agravado por el uso de llave igual o ganzúa. Sobreseimiento. Sustracción de elementos del interior de
la habitación de un hotel en la que habría ingresado el imputado. Testimonio del encargado del hotel
que permite dar por cierta la versión del damnificado. Estado de sospecha requerido para convocarlo a
prestar declaración indagatoria. Revocación.

Fallo: "(...) La solución liberatoria adoptada no va a ser compartida, en tanto la imputación que Ch. P.
R. le dirige a C. R. L. aparece, en principio, respaldada por el testimonio del encargado del hotel L. J.

133
S., quien habría permitido el ingreso del encausado a la habitación donde se encontraban los elementos
sustraídos, momentos después de que el damnificado se retirara de allí (cfr. fs. ...).
En este contexto, coincidimos con el acusador público en que tales extremos permiten alcanzar el
estado de sospecha que exige el artículo 294 del Código Procesal Penal de la Nación para convocar a
L. a prestar declaración indagatoria. En consecuencia, SE RESUELVE: Revocar el auto de (fs. ...) con
el alcance dado en la presente. (...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala IV, Seijas, González Palazzo, González. (Prosec.Cám.: Pereyra).
c. 16.842/15, LIMA, Carlos R.
Rta.: 07/05/2015

HURTO.

En grado de tentativa. Procesamiento. Defensa que alega la atipicidad del hecho por aplicación del
principio de insignificancia y el estado de necesidad justificante que llevó al imputado a cometer el
hecho. Bien jurídico protegido, derecho a la propiedad, vulnerado. Estado de necesidad: ausencia de las
condiciones para su aplicación. Confirmación.

Fallo: "(…) Luego de celebrarse la audiencia oral prevista por el artículo 454 del Código Procesal
Penal convoca al Tribunal el recurso de apelación interpuesto por la defensa contra el auto pasado a fs.
(…), en cuanto se dispuso el procesamiento de L. M. F.
Se atribuyó al nombrado el haber intentado apoderarse ilegítimamente de dos cajas de bombones "Bon
o Bon", una de chocolate blanco que estaba abierta e incompleta y la otra de chocolate negro -que se
encontraba cerrada- y de dos cajas de alfajores "Cachafaz", (una abierta e incompleta y la otra cerrada),
del quiosco denominado "365", sito en la intersección de las calles L. y J., de esta ciudad, hecho
ocurrido el 11 de noviembre de 2014 a las 00:15 aproximadamente (…).
Mediante el escrito agregado a fs. (…) la defensa no cuestionó la existencia del hecho, sino que
sostuvo su atipicidad, sobre la base de que la conducta atribuida resultaba insignificante.
Argumentó además, que el imputado se hallaba en un estado de necesidad justificante que lo llevó a
cometer el hecho.
Los jueces Juan Esteban Cicciaro y Mariano A. Scotto dijeron: En relación con el primer planteo, en
oportunidades anteriores hemos sostenido que el principio invocado por la defensa no se encuentra
legislado, y que, además, el bien jurídico tutelado en el caso es el derecho de propiedad, entendido en
el sentido amplio que le asigna la Constitución Nacional. De manera que la insignificancia sólo puede
incidir cuando es tal que lleva a despojar a la cosa de ese carácter, independientemente de su mayor o
menor valor, aspecto que es relevante sólo a los fines de graduar la pena.
En efecto, la Corte Suprema de Justicia de la Nación, en el caso "Adami" (Fallos: 308:1796), ha dicho
que "de la manera como se encuentra legislado el hurto, cualquiera que sea la magnitud de la
afectación del bien tutelado que resulte como consecuencia del apoderamiento ilegítimo, en tanto no se
prevén grados ni límites, hace que la conducta quede comprendida en el referido art. 162 [del Código
Penal]".
A mayor abundamiento, la propia Corte Federal ha fijado la doctrina según la cual "los jueces, al
tiempo de dictar sus sentencias, deben ponderar las consecuencias posibles de sus decisiones…pues
atender a las consecuencias que normalmente derivan de sus fallos constituye uno de los índices más
seguros para verificar la razonabilidad de su interpretación y su congruencia con el todo del
ordenamiento jurídico" (Fallos: 313:532; 315:158; 315:992 y 326:417, ente otros), criterio que en el
caso cobra relevancia frente a la generalización de conductas análogas que pudiere operar en el
supuesto de que prospere el reclamo defensista, en el marco de una legislación que, a la sazón, no
recepta el expediente procurado (1).
Por lo demás, es dable mencionar que el valor de las cosas cuyo apoderamiento intentó F. asciende a
doscientos pesos (…), de manera que la afirmación introducida por la asistencia técnica, en el sentido
de que no se ha afectado el bien jurídico, no resulta concluyente.
Por otra parte, respecto del estado de necesidad justificante argüido, se aprecia que el imputado
Fuentecilla refirió en su descargo que se encontraba "en una situación económica muy mala y que
hurtó para comer porque tenía hambre" (…).
Sin embargo, la causal de justificación aludida sólo surge de aquella declaración, pues del testimonio
de J. M. M., empleado del quiosco, se desprende que el propio imputado llevaba unas empanadas que
entregó al damnificado para calentar, extremo que resulta incompatible con la justificación ensayada .
A ello se añade el informe social luciente a fs. (…) del legajo de personalidad, del que surge que el
causante se domicilia junto a su abuela en un departamento de propiedad de aquélla en esta ciudad y
respecto de quien refirió que percibe ingresos.
Lo expuesto da cuenta de que no se han verificado entonces las condiciones reclamadas por el art. 34,
inciso 3º, del Código Penal, conforme al cual el mal que se pretende evitar debe ser inminente.
Cabe apuntar finalmente que F. ha sido condenado varias veces por delitos contra la propiedad -incluso
fue declarado reincidente- y que actualmente se encuentra en libertad.
Por ello, votamos en orden a que se confirme el procesamiento dictado.
El juez Mauro A. Divito dijo: Adhiero a la solución propuesta por los colegas preopinantes, en tanto
entiendo que la conducta atribuida a L. M. F. exhibe particularidades que impiden aplicar en el caso el

134
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

denominado principio de insignificancia, cuya procedencia he sostenido en distintas ocasiones (2),


pues en el sub examen la afectación al bien jurídico respectivo no puede, a mi juicio, considerarse
mínima o carente de importancia.
En efecto, del relato de J. M. M. se extrae que el causante pretendió sustraer del kiosco de aquél dos
cajas de alfajores -una abierta y una cerrada- y dos cajas de bombones -una abierta y una cerrada- (…),
elementos cuyo valor alcanzaría, como mínimo, la suma de doscientos pesos -…-, extremo que no
permite predicar que la acción importó, desde el punto de vista jurídico penal, un perjuicio nimio para
el derecho de propiedad de su titular.
En función de lo expuesto, y dado que comparto -por lo demáslos argumentos vertidos por los jueces
Cicciaro y Scotto para descartar el alegado estado de necesidad justificante, me inclino por confirmar
la resolución apelada. Así voto.
En virtud de lo expuesto, esta Sala del Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el auto documentado a fs.
(…), en cuanto fuera materia de recurso".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Divito, Cicciaro, Scotto. (Sec.: Besansón).


c. 68.324/14, FUENTECILLA, Leandro Marcelo.
Rta.: 11/02/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correc., Sala VII, c. 2.015/12, "Ruiz, J.", rta: 26/12/12. (2) C.N.Cri. y Correc.,
Sala VII, c. 36.185, "Gerban, Alfredo Javier", rta: 31/03/2009.

HURTO.

En tentativa. Sobreseimiento. Imputado que sustrajo alimentos básicos de un supermercado aduciendo


tener hambre. Imputado en situación de calle. Acción justificada en la necesidad alimentaria
apremiante para su salud (artículo 34, inciso 3° del C.P.). Confirmación. Modificación de la causal (art.
336 inc. 5º del C.P.P.N.)

Fallo: "(…) II. La decisión recurrida se fundó esencialmente en la insignificancia de los bienes que se
pretendieron sustraer sin el ejercicio de fuerza ni de violencia. El representante del ministerio público
fiscal solicitó su revocación y el dictado del procesamiento de G., en pos de lo cual argumentó sobre la
irrelevancia del valor del bien objeto del delito para definir la tipicidad de la conducta.
La sala estima que, con independencia de ello, la prueba adquirida en la instrucción no permite
desechar la justificación que el imputado invocó bajo los siguientes términos: "…le expliqué que sólo
tenía hambre…".
(…) las reglas del onus probandi no ponen en cabeza del imputado la obligación de probar la eximente,
ya que es el Estado quien, en todo caso, ha de acreditar que corresponde desecharla (1).
(…) el principio de inocencia impone que este tribunal se avoque a la consideración de la justificación
invocada por el encausado, aun cuando su defensa no concurrió a la audiencia y el acusador público no
se refirió específicamente a ella (2).
(…) del cotejo de las constancias sumariales surge, en primer lugar, que el imputado reviste una
particular vulnerabilidad social, por cuanto se encuentra en "situación de calle" (fs....), manifestó que
concurre diariamente al parador sito en Gendarmería Nacional 522 y él mismo calificó su condición de
vida como "mala, ya que ocasionalmente cartonea" (ver fs…)-. En segundo término, se ha determinado
que aquello de lo que procuró apoderarse fue, exclusivamente, de alimentos básicos, en un
supermercado.
De tal modo, bajo las particularidades del presente caso, entendemos que la acción desplegada por G.
estuvo justificada en su necesidad alimentaria apremiante para su salud (artículo 34, inciso 3°), razón
por la cual confirmaremos el sobreseimiento dictado, modificando la causal del artículo 336 por la del
inciso 5°.
(…) el tribunal RESUELVE: Confirmar el sobreseimiento de G.R.G. (fs. …) artículo 336, inciso 5° del
CPPN".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, Pinto, Divito.(Sec.: Herrera).


c. 75.742/14, GONZÁLEZ, Germán R.
Rta.: 25/03/2015

Se citó (1) CSJN, Fallos: 324:4039, "Abraham Jonte, Ronaldo F.". (2) Antonio Cuerda Riezu, "La
prueba de las eximentes en el proceso penal: obligación de la defensa o de la acusación?, en Revista de
Derecho Penal. Delitos contra la libertad -I, Rubinzal Culzoni, año 2015, pág. 392 y ss

HURTO.

En tentativa. Procesamiento. Sustracción de tester de perfume en un comercio. Objeto destinado a


promocionar el producto, sin valor comercial. No afectación al bien jurídico protegido. Atipicidad.
Revocación. Sobreseimiento.

135
Fallo: "(…) II. Conforme surge de las constancias reunidas en autos, el elemento sustraído se trató de
una botella de perfume, marca "BVLGARI", que poseía una etiqueta que rezaba "tester not for sale" y
en cuya parte posterior se hallaba colocada una etiqueta que indicaba un valor exhibido de "$ .00"
(fs…).
En base a ello no puede sostenerse que haya existido una afectación al bien jurídico protegido por la
norma cuando el objeto en cuestión carece de valor comercial, por lo que a la luz del principio
constitucional de lesividad la conducta resulta atípica.
(…) el tribunal RESUELVE: Revocar el auto de fs. (…) y disponer el sobreseimiento a favor de (…)
cuyos datos personales obran en la causa, con expresa mención de que la formación del presente
sumario, no afecta el bueno nombre y honor del que hubiera gozado (artículo 336, inciso 3°, in fine del
CPPN)".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, López González, Pinto. (Prosec. Cám.: Daray).


c. 41.479/14, TORRES, Federico G.
Rta.: 27/04/2015

HURTO.

I-En tentativa. Arrebato de teléfono móvil. Procesamiento. II-Declinación de competencia al


magistrado correccional. Fiscal que recurre la calificación legal y, en consecuencia, la incompetencia
dispuesta. Existencia de violencia o fuerza en el acto de arrebatar. Confirmación del procesamiento con
modificación de la calificación legal por robo en tentativa. Revocación de la incompetencia.
Disidencia: Ausencia de violencia en el arrebato. Confirmación.

Fallo: "(…) II.- Disidencia de la jueza Mirta L. López González dijo: Coincido con la asignación
jurídica otorgada al hecho por el magistrado de grado, y por ende, con la declinatoria de competencia a
favor de la justicia correccional.
En efecto, tal como he sostenido en diversas, (…) considero que la acción que se le atribuye al
imputado, consistente en haber arrebatado el teléfono celular que la damnificada llevaba en sus manos,
configura el delito de hurto, en grado de tentativa (artículos 42 y 162 del CP), dado que de los
elementos probatorios reunidos no surge que C. haya ejercido la violencia física en las personas que
caracteriza al tipo penal previsto en el artículo 164 del código sustantivo(1).
(…) voto por confirmar el auto apelado.
El juez Ricardo M. Pinto dijo: He sostenido en numerosos precedentes que a la modalidad que
constituye objeto de investigación en estas actuaciones, comúnmente llamada "arrebato", el
Diccionario de la Real Academia Española la define como una acción consistente en "quitar (una cosa)
con violencia o fuerza" (Sala VI de esta Cámara, causa nro. 687/2012, "Ravello Benítez, Bernard
Steven", rta. 25/6/2012, entre otras).
Por otro lado, la doctrina sostiene que "La violencia es el despliegue de energía física para vencer
materialmente la resistencia que el sujeto pasivo o un tercero opone o puede oponer al apoderamiento
(vis absoluta); no importa la intensidad de la energía ni es necesario que medie contacto físico entre el
agente y la víctima…" (1) Además, la figura de robo no distingue entre distintos grados de violencia
que, de existir, en definitiva serán merituados al momento de imponer la pena.
(…) voto por modificar la calificación escogida por el juez de grado por la de robo en grado de
tentativa, debiendo continuar la investigación a cargo de la justicia de instrucción.
El juez Mauro A. Divito dijo: (…) adhiero a los fundamentos del juez Pinto y emito mi voto en
idéntico sentido.
(…) el Tribunal RESUELVE: I. Confirmar el punto I del auto de fs. (…), modificando la calificación
legal asignada, por la de robo en grado de tentativa (artículos 42, 45 y 164 del Código Penal). II.
Revocar el punto II del auto de fs. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, López González (en disidencia), Pinto, Divito. (Prosec. Cám.: Daray)
c. 22.050/15, CUADRADO, Damián A.
Rta.: 12/05/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correc., c. nro. 40.553, "Salinas, Edgardo Javier s/robo", ra. 15/02/2011.
(2)D´Alessio, Andrés José - Divito, Mauro A., "Código Penal de la Nación", Tomo II, Parte Especial,
Ed. La Ley, Buenos Aires, 2009, pág. 592.

HURTO.

Agravado por haber sido cometido por personal policial. Damnificado que denunció que nunca
recupero una de las computadoras que le habían sustraído de su comercio. Fotos y filmaciones de las
cámaras de seguridad aportadas que dan cuenta del hecho cometido por el funcionario. Confirmación.

Fallo. "(...) apelación interpuesto por el Dr. Walter Francisco Fidalgo contra el punto dispositivo I del
auto de (fs. ...) en cuanto se procesó a su asistido M. A. R. por ser considerado autor del delito de hurto
agravado por haber sido cometido por personal policial (...).

136
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

Luego de analizar el asunto y repasar las pruebas de la causa, especialmente las filmaciones de las
cámaras de seguridad del lavadero "(...)", concluimos que los agravios de la defensa no logran
conmover la resolución apelada. (...). El damnificado M. G. P. denunció que nunca recuperó una de las
dos computadoras "all in one" que le habían sido sustraídas de su comercio -la restante, imputada a A.
N. M., lo cual le atribuyó a "uno de los policías que seguramente no advirtió el largo alcance de la
cámara de seguridad nro. 1" (fs. ...). Aportó dos fotos para ilustrar la ubicación de las dos máquinas en
cuestión dentro del local (fs. ...). Efectivamente, las filmaciones de las cámaras de seguridad
corroboran dicha afirmación. El video cuyo archivo se identifica como "03:06:42" de la "Camera 8"
muestra que quien presuntamente se trataría del nombrado M. tomó la computadora del mostrador
(señalada en la foto de fs. ...); y que, luego de intentar sin éxito llevarse un televisor empotrado
(también marcado en esa imagen), arrebató la computadora de la barra de uso de clientes (destacada en
la foto de fs. ...). (...). (...).
Estas evidencias desvirtúan el descargo del imputado y avalan la hipótesis de cargo, que,
consecuentemente, luce más que razonable, por lo que corresponde homologar la decisión en crisis y,
de este modo, habilitar el avance del caso a instancias ulteriores del proceso. Por lo expuesto el tribunal
RESUELVE: CONFIRMAR el punto dispositivo I del auto de (fs. ...) en cuanto fue materia de
apelación (art. 455 del CPPN). (...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala I, Bunge Campos, Rimondi. (Sec. Cám.: Peluffo).


c. 56.701/14, Rodríguez, Marcos Alberto.
Rta.: 15/05/2015

HURTO.

En grado de tentativa. Procesamiento. Agravio de la defensa: estado de necesidad justificante y, de


manera subsidiaria, principio de insignificancia. Estado de necesidad justificante: Presupuestos para
considerarlo. Rechazo. Principio de insignificancia: Afectación al bien jurídico protegido “propiedad”
más allá del valor económico que la cosa en sí posea. Rechazo. Confirmación.

Fallo: “(…) II.-) La parte señala que las nombradas han actuado en un estado de necesidad justificante
en función de la crisis económica que atravesaban. Hizo hincapié en que se vieron compelidas a
lesionar un interés jurídico ajeno para conjurar el mal grave e inminente que las amenazaba. De manera
subsidiaria, peticiona se resuelva el asunto conforme la teoría de la insignificancia, a la luz del
principio de lesividad. III.-) No está en discusión que las imputadas se apoderaron ilegítimamente de
un pollo marca (…), una bandeja de asado de tira selección de (…) y un paquete de salchichas (…), de
las góndolas del supermercado (…).
El estado de necesidad está marcado por la urgencia de sacrificar bienes dignos de protección en pro de
un interés social. “El bien protegido debe hallarse objetivamente en peligro” y la acción típica debe
constituir el único medio de preservarlo. Toda posibilidad de justificación fracasa cuando aquél es
sacrificado y el sujeto actuante ha dispuesto de otras medidas de menor intensidad (1). La pobreza y la
dificultad de obtener un trabajo genuino no constituyen pautas suficientes para justificar el hecho ilícito
endilgado en tanto no permiten afirmar que actuar de esta manera haya sido la única forma de conjurar
el peligro alegado, que tampoco ha sido probado, máxime cuando han podido costear productos que no
eran de primera necesidad, tal como la bebida energizante “Speed” que abonaron el línea de cajas (…).
En este sentido, la doctrina ha señalado que “(…) si en lugar de la acción dañosa es posible, en el caso
concreto y desde el punto de vista del sujeto, otras acción inofensiva, o si el mal era remoto, eventual o
meramente posible y no inmediato y seguro, no habrá estado de necesidad. También la jurisprudencia
ha entendido que la falta de verificación de este requisito elimina el estado de necesidad justificante”,
ya que “La justificación del delito por estado de necesidad demanda que el mal que se pretende evitar
además de grave sea inminente, requiriendo que su ocurrencia se prevea en un lapso suficientemente
breve como para que el sujeto actúe en forma inmediata, de modo que la simple previsión de un mal
grave futuro, pero no inminente, aleja la justificante, 1989/03/02 La Ley, 1989-D, 468” (2). Estas
circunstancias no se verifican en el caso.
En cuanto a la pretendida aplicación del principio de insignificancia, entendemos que tampoco tendrá
acogida favorable puesto que el delito de hurto no distingue graduación alguna en lo que respecta a la
lesión del bien jurídico tutelado.
La protección al derecho de propiedad es tan amplia que se verá afectado más allá del valor económico
que la cosa en sí posea (3).
En esta senda, la Corte Suprema de Justicia de la Nación en el precedente “Adami, Leonardo Esteban”
sostuvo que “De la manera como se encuentra legislado el hurto, cualquiera que sea la magnitud de la
afectación del bien tutelado que resulte como consecuencia del apoderamiento ilegítimo, en tanto no se
prevén grados ni límites, hace que la conducta quede comprendida en el artículo 162 del Código Penal”
(Fallos: 308:1796).
Sentado lo expuesto, entendemos que los argumentos de la defensa no logran conmover la decisión
adoptada.
Por ello, el Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el punto I del auto de fs. (…) en todo cuanto fue
materia de recurso. (…)”.

137
C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini, Filozof. (Sec.: Oberlander).
c. 20.418/13, SAYAL, Carolina y otra.
Rta.: 22/06/2015

Se citó: (1) Maurach-Zipf, Derecho Penal, Parte General, Tomo 1, Editorial Astrea, págs.468/470,
Buenos Aires, 1994; (2) Código Penal de la Nación Comentado y Anotado”, D’Alessio Andrés José y
Divito Mauro A.”, 2da. Edición actualizada y ampliada, Ed. La Ley, Tomo I, pág.480; (3) C.N.Crim. y
Correcc., Sala VI, c. 59948/2014/CA2, “González García, Juan Ramón”, rta.: 4/11/2014.

IMPUTABILIDAD.

Procesamiento. Agravio: alteración de las facultades producto de la ingesta de estupefacientes.


Imputado con comportamiento normal al identificarse con el personal policial y que desarrolló varias
actividades: conducción de motocicleta, intento de arrebato y forcejeo que impiden suponer una
perturbación de la conciencia. Confirmación.

Fallo: "(…) Apela la defensa el punto I del auto documentado a fs. (…), por el que se decretó el
procesamiento de J. R. L.
En cuanto al agravio vinculado a la inimputabilidad del nombrado por alteración de sus facultades
producto de la ingesta de estupefacientes -hecho "a"-, lo cierto es que según surge del informe
documentado a fs. (…, el mismo día del hecho, L. se encontraba en "estado emocional normal, lúcido y
coherente, orientado y ubicado en tiempo y espacio", situación que aparentemente se verificaba
también al tiempo de identificarse frente al personal preventor (..).
Además, las víctimas K. D. P. y K. Y. C. relataron que el imputado desarrolló diversas actividades,
esto es, condujo una motocicleta en la que viajaba otro individuo, descendió del vehículo e intentó
arrebatarle el portafolio a C., momento en el que comenzó un forcejeo con todas las personas que
acompañaban a los damnificados (…).
Por tanto, aún cuando L. haya referido estar "haciendo un tratamiento en el I. C. G. por el paco" (…),
las aludidas circunstancias permiten concluir en que el encausado no transitaba por un estado de
perturbación de la conciencia que le hubiera impedido, en el momento del hecho, comprender la
criminalidad del acto o dirigir sus acciones conforme a dicha comprensión (artículo 34, inciso 1°, del
Código Penal).
(…)En suma, compartiéndose los argumentos desarrollados por el señor juez de grado, esta Sala del
Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el auto documentado a fs. (…), en cuanto fuera materia de
recurso".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Cicciaro, Scotto. (Prosec. Ad Hoc.: Sposetti).


c. 57.199/14, LUNA, Juan R.
Rta.: 06/03/2015

IMPUTACIÓN ALTERNATIVA.

Procesamiento por robo y, alternativamente, por encubrimiento. Agravio: Sobreseimiento por robo.
Imposibilidad de adoptar resoluciones de mérito sobre ambas hipótesis delictivas. Objeto procesal
único. Relación de alternatividad ente las figuras y, por consiguiente, de exclusión. Confirmación.

Fallo: "(…) Apela la defensa el punto I del auto documentado a fs. (…), por el que se decretó el
procesamiento de J. R. L. (…) En cuanto al suceso identificado como "hecho b", el juez de instrucción
dictó auto de procesamiento por la imputación alternativa consistente en haber recibido u adquirido con
conocimiento de su origen ilícito y con ánimo de lucro una motocicleta que le fuera sustraída a F. F. el
30 de agosto de 2014, en concurso ideal con el delito de sustitución de chapas patentes.
Frente al planteo de la defensa en la audiencia oral, vinculado a que L. debió ser sobreseído en relación
con el delito de robo, cabe señalar que en otras oportunidades esta Sala ha declarado la nulidad de
distintos pronunciamientos que adoptaron resoluciones de mérito sobre ambas hipótesis delictivas -
robo y encubrimiento-, cuando recaen sobre un mismo objeto procesal, pues dichas figuras tienen una
relación de alternatividad y, por consiguiente, de exclusión.
En esa dirección, este Tribunal ya ha sostenido que "En tales supuestos se trata en definitiva, de
calificaciones legales alternativas que corresponde asignar a un único suceso. Por lo tanto, no pueden
adoptarse resoluciones de mérito sobre ambas hipótesis delictivas, que recaen sobre un mismo objeto
procesal en base a los diferentes encuadres típicos asignables…" (1).
Así lo entendió el Máximo Tribunal al sostener que "el fundamento de la institución de la acusación
alternativa o subsidiaria, basada en el hecho diverso, debe buscarse en la razón práctica consistente en
evitar que el proceso vuelva a una etapa anterior para que se reformule la requisitoria fiscal y, tal vez,
el auto de elevación a juicio, en violación, justamente, de los principios de preclusión y progresividad y
de la garantía del non bis in ídem" (2).
En cuanto al fondo de la cuestión, las circunstancias de encontrarse el imputado conduciendo un
rodado cuya tenencia fue consecuencia de la ocurrencia de un delito acaecido diecinueve días antes, sin
contar con la documentación correspondiente (…), con múltiples modificaciones en su carrocería

138
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

original (...) y con una chapa patente que no se corresponde con el pertinente registro dominial para
ocultar el origen delictivo del rodado (…), constituyen elementos de juicio que permiten suponer que
hubo de recibirlo con conocimiento de su origen espurio.
Por lo demás, se estima que el bien jurídico -fe pública- se ha visto afectado en el caso, siempre que
abarca la confianza generalizada en que la chapa patente que lleva puesta un vehículo se corresponde
con el dominio asignado oficialmente a ese rodado por el Registro Nacional de la Propiedad
Automotor.
También se considera acertada la calificación jurídica discernida, pues la posibilidad de uso o cambio
del vehículo secuestrado satisface el propósito lucrativo que requiere el apartado "c" del inciso 3° del
artículo 277 del Código Penal (3).
En suma, compartiéndose los argumentos desarrollados por el señor juez de grado, esta Sala del
Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el auto documentado a fs. (…), en cuanto fuera materia de
recurso".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Cicciaro, Scotto. (Prosec. Ad Hoc.: Sposetti).


c. 57.199/14, LUNA, Juan R.
Rta.: 06/03/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correc., Sala VII, c. 39.374, "Vera Vera, Nelson", rta: 19/08/2010 y
"Campodónico, Esteban L.", rta: 22/08/2014. (2) C.S.J.N., Fallos: 325:3118 y C.N.Crim. y Correc.,
Sala VII, c. 50684/2013, "Monsalvo, Damián E.", rta: 17/07/2014. (3) C.N.Crim. y Correc., Sala VII, c.
30.299/10, "Abed, A.", rta: 02/07/2013.

INJURIAS

Inadmisibilidad. Escrito promotor del que se desprenden las frases que serían injuriosas, el momento y
el lugar en que se exteriorizaron, como también quién las habría proferido. Suceso debidamente
descripto. Defensa en juicio garantizada. Revocación.

Fallo: "(...) El Sr. juez de grado declaró la inadmisibilidad de la querella al entender que en la
presentación de "(fs. ...)" no se efectuó una relación precisa y circunstanciada de los dichos de S. que
motivaran la querella intentada. No obstante, tal como señala la recurrente, en el escrito de inicio se
hizo referencia específica a que tales manifestaciones se efectuaron por escrito en el telegrama remitido
el 15 de agosto de 2014 al interventor de la empresa "Y. C. R. T.", lugar en el que, al menos hasta esa
fecha, ambas partes trabajaban.
Puntualmente, la pretensa acusadora particular refirió haber sido convocada por el interventor de dicha
firma, quien le comunicó que había recibido una intimación laboral de un empleado en la que
aseguraba, entre otras cuestiones, que había sido víctima de abuso de autoridad, maltrato, persecución
sindical y de un accionar discriminatorio e injurioso de su parte. La descripción efectuada por P.
respecto de las circunstancias relativas al hecho fue ratificada ante el juzgado, oportunidad en la que
aportó copia del documento donde se plasmaron aquellas manifestaciones "(fs. ...)".
A la luz de lo hasta aquí expuesto y toda vez que de la lectura del libelo inicial se desprenden las frases
que a criterio de M. N. P. serían injuriosas, el momento y el lugar en que se exteriorizaron, como
también quién las habría proferido, aparece debidamente descripto el suceso imputado, garantizado así
el derecho de defensa en juicio que asiste al querellado y cuya tutela es el fundamento de los requisitos
que prevé la norma procesal (1).
Por las razones hasta aquí expuestas, el Tribunal RESUELVE: REVOCAR el auto de "(fs. ...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala IV, Seijas, González Palazzo, González. (Sec.: Morillo Guglielmi).
c. 65.902/14, SOTO, José Alberto.
Rta.: 05/03/2015

Se citó: (1) Navarro, Guillermo Rafael y Daray, Roberto Raúl, "Código Procesal Penal de la Nación.
Análisis Doctrinal y jurisprudencial", tomo 2, Ed. Hammurabi, Buenos Aires, 2010, pág. 250.

INSTIGACIÓN AL SUICIDIO.

Sobreseimiento. Elementos de prueba que no permiten afirmar que el proceder de quien podría ser el
sujeto activo estuvo dirigido a convencer al otro de que cumpla acabadamente con la acción. Imputado
que, al tomar conocimiento de lo sucedido, adoptó las medidas necesarias para permitir mantener con
vida a la persona. Confirmación. Modificación de la causal de sobreseimiento (inc. 3 del art. 336 del
C.P.P.N.).

Fallo: "(…), convoca a la Sala el recurso de apelación interpuesto por el Ministerio Público Fiscal
contra el auto documentado a fs. (…), por el que se dispuso el sobreseimiento parcial de R. A. O.
Al respecto, se comparte el temperamento asumido, pues no obstante las consideraciones efectuadas
por la doctora L. L., médica psiquiatra que atendió a N. d. C. A. S. (…), la conducta investigada no
puede ser considerada penalmente relevante, por lo que corresponde homologar la decisión, con la

139
salvedad de que se dispone en orden a la causal prevista en el inciso 3, del artículo 336 del Código
Procesal Penal.
En ese sentido, es dable destacar que la instigación al suicidio, desde la faz subjetiva, sólo admite el
dolo directo, pues requiere la voluntad de incitar, inducir o determinar a que la persona se suicide o
contribuir a ello mediante ayuda; es decir, que el querer del sujeto activo debe estar dirigido a
convencer al otro de que cumpla acabadamente la acción.
Quedan por lo tanto fuera del tipo, los actos negligentes o imprudentes y aquellos en que el autor haya
perseguido una finalidad distinta aunque haya aceptado con indiferencia la posibilidad de dicho
resultado (1) En esa inteligencia, se destaca que aun cuando la conflictiva de la pareja y el estado
psicológico de A. S. (…), hubieran gravitado en su decisión, lo cierto es que no se advierte que el
proceder de O. estuviera destinado a persuadirla de quitarse la vida.
Repárese en que según lo sostenido por A. S. a fs. (…), quiso llamar la atención de su esposo, quien
estaba por regresar al domicilio.
A su vez, se evalúa que la nombrada relató que quería darle una "sorpresa" a O. (…) y que él le dijo
que no cometiera "ninguna locura" preguntándole acerca de dónde estaban las pastillas que ella
tomaba.
Por lo demás, se destaca que luego de retornar con su hija y encontrar a su esposa descompuesta, el
imputado raudamente adoptó las medidas que permitieron mantenerla con vida, extremo que permite
concluir que mas allá de las agresiones verbales proferidas a la mujer, su muerte no le era indiferente y,
por ello, es que no puede sostenerse que su intención era aprovecharse del estado psicológico de su
cónyuge para determinarla a quitarse la vida.
En consecuencia, por aplicación del artículo 336, inciso 3° del Código Procesal Penal, esta Sala del
Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el auto documentado a fs. (…), en cuanto fue materia de
recurso".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Cicciaro, Scotto. (Sec.: Sánchez).


c. 53.244/13, O., R. A.
Rta.: 21/03/2015

Se citó: (1) Andrés José D' Alessio, Mauro A. Divito, Código Penal de la Nación Comentado y
Anotado, 2da. ed. actualizada y ampliada, L.L., Bs. As., 2009, t. II, p. 46.

INSTRUCCIÓN DELEGADA (art. 196 del C.P.P.N.).

Fiscal que devuelve las actuaciones pidiendo el archivo de las actuaciones respecto de las lesiones por
las cuales la damnificada no instara la acción y que el magistrado se declare incompetente para
entender en las amenazas simples. Magistrado que no esta de acuerdo. Titular de la acción penal que ha
emitido su opinión de forma favorable. Revocación. Declinar la competencia en favor de la Justicia
Penal, Contravencional y de faltas de esta ciudad.

Fallo: "(...) recurso de apelación interpuesto por el representante del Ministerio Público Fiscal contra la
resolución de (fs. ...) por la que se declara competente para continuar entendiendo en la causa. (...).
La causa se inicia por la denuncia que efectuó F. O. V. en la OVD, por las agresiones físicas y verbales
por parte de su pareja que habrían sido dirigidas cuando convivían en la vivienda de la manzana XX,
casa XX del barrio XX. En cuanto a las lesiones leves que se acreditaron en su cuerpo (cfr. fs. ...),
decidió no instar la acción penal (cfr. fs. ...), por lo que la fiscalía, al no encontrar razones de seguridad
o de interés público que la habiliten a actuar de oficio, postuló el archivo de las actuaciones en los
términos del art. 72, inc. 1°, CP, por lo que la cuestión a solucionar es la que se circunscribe a las frases
amenazantes que habría recibido por parte de P. G. En esa línea, el agente fiscal -quien reviste el
carácter de acusador público y se encontraba a cargo de la pesquisa, en los términos del art. 196,
CPPN-, en su dictamen de (fs. ...) circunscribió la hipótesis delictiva a la figura de amenazas simples
(art. 149 bis, párrafo primero, CP), ya que la única intención que pudo detectar en la conducta del
imputado es la de amedrentar a la víctima. Así planteado el asunto, entendemos que le asiste razón al
planteo efectuado al recurrir, en tanto como único titular de la acción penal, ha demostrado su
intención de impulsar el proceso pero solamente respecto a las frases intimidatorias, las que a su
criterio no tenían otro fin más que el señalado. Entonces, dado que en la audiencia celebrada en esta
alzada se encontraba la defensa oficial, quien compartió los fundamentos de la fiscalía y no se opuso a
su pretensión, luego de haber cotejado las actas escritas que tenemos a la vista, entendemos que
corresponde revocar la decisión de (fs. ...) y remitir las actuaciones a la justicia contravencional y de
faltas de la ciudad, para que intervenga en este asunto, por cuanto el dictamen fiscal resulta razonable.
En consecuencia, el tribunal RESUELVE: REVOCAR la resolución de (fs. ...) en todo cuanto ha sido
materia de recurso y DECLINAR la competencia a favor de la justicia penal, contravencional y de
faltas de esta ciudad (art. 455, a contrario sensu, CPPN). (...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala I, Bunge Campos, Rimondi. (Sec.: Sosa).


c. 50500/14, P. G., W. M.
Rta.: 26/05/2015

140
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

INSTRUCCIÓN DELEGADA (Art. 196 del C.P.P.N.).

Fiscal que pidió sobreseimiento. Magistrada que sobreseyó con el argumento que, ante el pedido de
desvinculación, sólo podía realizar un control de legalidad y expedirse. Querella que recurre.
Magistrada habilitada a reasumir la investigación debido al impulso inicial llevado a cabo por el fiscal.
Actuaciones en las que igualmente corresponde confirmar el temperamento adoptado.
Fallo: "(…) a. En primer lugar, la magistrada de grado sostuvo que ante el pedido de sobreseimiento
del representante del Ministerio Público Fiscal, el tribunal no podría actuar de oficio prosiguiendo el
trámite de la causa, pues afectaría la autonomía de ese ministerio y la defensa en juicio del inculpado.
Por ello, se limitó a realizar con control de razonabilidad del dictamen de fs. (…).
La presente causa tramitó bajo las reglas del art. 196 del C.P.P.N., por lo que la dirección del proceso
estuvo a cargo del agente fiscal, quien demostró inicialmente su voluntad promotora, efectuando
diligencias instructorias.
Sentado ello, nada impide que el juez de instrucción, al no compartir el pedido de sobreseimiento
efectuado por el representante del Ministerio Público reasuma la investigación.
En esta dirección, las normas procesales no excluyen a aquél de su condición de titular de la potestad
jurisdiccional (1).
(…) el juez se encuentra facultado para realizar, con la debida participación que la ley procesal otorga
a las partes, aquellas diligencias probatorias que considere pertinentes para cumplir los fines previstos
por el art. 193 del CPP. En caso que la investigación avance, al momento de la vista contemplada por
el artículo 346 del C.P.P.N. - en el cual se exige un nuevo impulso de la acción para el pase del
sumario a plenario- el fiscal, tendrá la oportunidad de evaluar nuevamente su postura y, ante las nuevas
probanzas producidas, mantener el criterio desvinculante, o bien, requerir la elevación a juicio de los
actuados. b. Sin perjuicio de lo expuesto precedentemente, corresponde confirmar el sobreseimiento
dispuesto".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, López González, Pinto. (Sec.: Poleri).


c. 36.973/14/5, CURTIS, Andrew J.
Rta.: 26/05/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correc. causa 34.492 "NN denuncia. Chague, Pablo Martín s/ nulidad", Sala
V, rta: 29/5/2008, y nº 29652/2012 "Chávez", Sala VI rta: 22/4/2013 voto del Dr. Pinto.

INSTRUCCIÓN DELEGADA (Art. 196 del C.P.P.N.).

Recurso de apelación contra el auto que dispuso delegar la investigación. Fiscal que señala que el
magistrado ha ordenado y recibido una declaración testimonial. Inexistencia de agravio. Acto
discrecional del magistrado. Mal Concedido.

Fallo. "(...) recurso de apelación interpuesto por la fiscalía a (fs. ...) contra la delegación dispuesta por
la jueza a quo a (fs ...).
La Sra. fiscal expuso que la declaración testimonial ordenada y recibida por la magistrada implicó la
asunción de la investigación y, en consecuencia, la pérdida de la oportunidad de delegar la
investigación en la fiscalía. Asimismo, agrega, que a ello debe sumarse el largo tiempo transcurrido
entre la recepción del sumario en el juzgado y el momento de la delegación, que supera el plazo
previsto en el art. 180, segundo párrafo, del C.P.P.N. (...), entendemos que la delegación de la
investigación motivo de apelación no provoca un gravamen concreto e irreparable al Ministerio
Público Fiscal en los términos del artículo 449 del C.P.P.N., ya que resulta un acto discrecional del
juez de la causa, y por lo tanto, no contempla la posibilidad que se cuestione. Además, lo decidido
resulta acorde a las previsiones de los artículos 1, 5 y 25 de la ley 24.946 que establecen que ese
ministerio es el titular de la acción penal, y puede efectuarlo en cualquier estadio del proceso, (...). Por
ello, el tribunal RESUELVE: Declarar erróneamente concedido el recurso de apelación interpuesto por
la fiscalía a (fs. ...), contra la delegación dispuesta por la jueza a quo a (fs. ...) (...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala I, Bunge Campos, Rimondi. (Sec.: Peluffo).


c. 7864/15, L., J.
Rta.: 30/03/2015

INSTRUCCIÓN SUMARIA. FLAGRANCIA (Art. 353 bis del C.P.P.N.)

Fiscal que recurre la resolución por la cual el magistrado no hizo lugar a su pedido de que se declare
rebelde al imputado en virtud de las incomparencias a las citaciones cursadas y, una vez habido, se le
reciba indagatoria y continúe el trámite del sumario según las normas comunes. Trámite que acredita
que, pese a estar notificado personalmente, no se presentó en la fiscalía. Magistrado que debe proceder
de acuerdo a lo normado por el art. 289 del C.P.P.N. Revocación.

Fallo. "(...), contra el auto de (fs. ...) mediante el cual se resolvió no hacer lugar a lo solicitado a (fs. ...)
por el representante del Ministerio Público, esto es, que el Sr. juez de grado revoque el trámite previsto

141
por el art. 353 bis del CPPN y se dicte la rebeldía y captura del imputado, para proceder a recibirle
declaración indagatoria y continuar con la instrucción del sumario según las normas comunes. (...).
El Sr. fiscal, devolvió las actuaciones al Sr. juez de grado solicitando que se revoque el trámite previsto
(...). Para ello argumentó que el imputado fue notificado personalmente de las audiencias
oportunamente previstas, tanto en su domicilio real como así también en el constituido (ver fs. ...) y
pese a ello no compareció. Contrariamente a ello, el juez de instrucción señaló que a diferencia del
criterio argumentado, el trámite previsto no es una excepción sino un derecho que tiene todo imputado
y que, como claro ejemplo de que así lo consideró el legislador, nadie más que aquél tiene la
posibilidad de elegir cambiar al "ordinario" desde un primer momento. Indicó que en la medida que se
considere que -ante la hipótesis de un eventual procesamiento- "prima facie" no procediere la prisión
preventiva, se deberán tomar todos los recaudos y realizar todas las medidas necesarias que estén al
alcance del instructor para que, por un lado, se cumplan con las distintas etapas que componen un
proceso y a su vez lo orientan a su etapa conclusiva; y, por el otro, garantizándose -como lo indica la
regla constitucional- (...). (...). En efecto, el art. 288 del CPPN establece que: "Será declarado rebelde el
imputado que sin grave y legítimo impedimento no compareciere a la citación judicial…" De las
constancias obrantes en autos se advierte que el imputado fue notificado personalmente de las
audiencias oportunamente previstas, tanto en su domicilio real como en el constituido (ver fs. ...). Sin
embargo, no compareció a la sede de la fiscalía. De modo tal que, más allá de las discusiones que
tuvieran lugar sobre el trámite impreso al legajo, el Sr. juez de grado deberá actuar en consecuencia y
de esta forma proceder de acuerdo a lo normado por el art. 289 del CPPN. Por todo lo expuesto, el
tribunal RESUELVE: REVOCAR el auto de (fs. ...), en cuanto fuera materia de recurso (art. 454 "a
contrario sensu" del CPPN), debiendo el Sr. juez de grado proceder de acuerdo a lo normado por el art.
289 del CPPN. (...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala I, Bunge Campos. (Prosec. Cám.: Castillón).


c. 3.852/15, MAURICIO MARCOS ALEJANDRO.
Rta.: 05/05/2015

INSTRUCCIÓN SUMARIA. FLAGRANCIA (art. 353 del C.P.P.N).

Nulidad rechazada respecto de las audiencias recibidas en los terminos del art. 353bis C.P.P.N.
Agravio: violación al derecho de defensa por haberse presentado a la audiencias sin asistencia letrada.
Rechazo. Defensora e imputados que estaban debidamente anoticiados tanto por escrito como
personalmente de la posibilidad de presentarse con asistencia letrada o si ella. Confirmación.

Fallo. "(...), en razón de la concesión del recurso de apelación interpuesto por la defensa oficial de S. F.
O. M. y L. A. C., contra el auto de (fs. ...), en cuanto no hizo lugar al planteo de nulidad de las
audiencias recibidas en los términos del art. 353 bis, CPPN. (...).
El recurrente se agravió por entender que se ha violado el derecho de defensa de sus asistidos pues a las
audiencias celebradas en los términos del art. 353 bis del CPPN comparecieron sin asistencia letrada
previa, lo que se encuentra vedado, tal como sucede para una audiencia indagatoria. (...) en el acta de
soltura de (fs. ...) los imputados fueron anoticiados de su comparecencia a la sede de la fiscalía
interviniente, a la cual asistió O. M., (...); en tanto que C. concurrió el 19 de diciembre pasado. En
ambos actos se le hizo saber acerca del derecho de "presentarse en la Fiscalía con su asistencia técnica
letrada tanto por escrito como personalmente, (...)…". A su vez, aparece relevante destacar que el 17 de
diciembre (...).
Cumplido ello, el Sr. agente fiscal formuló requerimiento de elevación a juicio -el 9 de febrero de este
año- y, notificada la defensa conforme el art. 349, CPPN, planteó la nulidad cuyo rechazo motiva esta
intervención. Frente a lo expuesto, no se advierte de qué manera se pudo ocasionar un menoscabo al
derecho de defensa en juicio de los imputados, dado que no sólo se informó a éstos la posibilidad de
contar con asistencia letrada sino que también así fue informada la defensora; (...). Por ello, acceder a
la pretensión de la defensa llevaría a la declaración de la nulidad por la nulidad misma, (...). Por lo
expuesto, el tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el auto de (fs. ...) en cuanto fue materia de apelación
(art. 455, CPPN). (...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala I, López González, Bunge Campos. (Sec.: Peluffo).


c. 74601/14, OCAMPO MAÑARIN, Sergio Fabian.
Rta.: 10/04/2015

LESIONES

Culposas. Leves. Procesamiento. Colectivero que atropella a un peatón y causa lesiones a una pasajera
al frenar. Instancia de la acción por parte de una sóla de las damnificadas. Hecho único e inescindible.
Imputación de acciones múltiples. Lesiones acreditadas. Violación al deber objetivo de cuidado.
Confirmación.

142
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

Fallo: "(...) I. En forma previa, corresponde analizar el agravio de la defensa en cuanto a la ausencia de
instancia de acción penal por parte de las damnificadas atento a que, conforme surge del auto
impugnado, el Sr. Juez de grado encuadró las lesiones que aquéllas presentaron como "leves".
En este sentido, debemos mencionar que aun cuando M. D. V. H. expresó que no deseaba instar la
acción (fs. ...) no puede soslayarse que G. G. J. R., mediante la presentación de (fs. ...), solicitó ser
tenida por parte querellante por lo que ninguna duda existe respecto a su voluntad de poner en marcha
la jurisdicción. Ello, sin perjuicio de lo que surge del informe del Cuerpo Médico Forense en cuanto al
tiempo de incapacidad laboral (fs. ..., "Conclusiones") que las lesiones provocaron en la última de las
nombradas.
Frente a lo expuesto, no puede apartarse de la pesquisa, como parece pretenderlo la parte, la situación
de D. V. H. pues al tratarse de un hecho único e inescindible, instada la acción por una de las víctimas,
la investigación debe abarcar la totalidad de los resultados lesivos producidos.
Es que, tal como hemos sostenido en análoga situación, "estamos en presencia de una única conducta
en cuyo contexto se produce una pluralidad de resultados…" por lo que "tratándose de un hecho único,
la instancia de la acción por una de las víctimas satisface el requisito de procedibilidad del art. 72 del
Código Penal" (1).
II. Sentado cuanto precede y llegado el momento de resolver la cuestión de fondo, es dable señalar que
los elementos colectados satisfacen los extremos exigidos por el art. 306 del CPPN.
En efecto, se encuentra acreditado que L. B. a cargo de la conducción del colectivo de la línea 109,
interno 35, violó el deber objetivo de cuidado al no respetar la prioridad de paso de los peatones pues al
doblar por la Avenida J. B. J., en su intersección con la calle M., de esta ciudad, embistió a G. G. J. R,
quien se hallaba trasponiendo la primera de las arterias sobre la senda peatonal. Producto del accionar
del encartado, sufrió las lesiones descriptas por la perito oficial (fs. ...).
Asimismo, a raíz de la brusca frenada que efectuó el imputado, una de las pasajeras, M. D. V. H., se
abalanzó hacia adelante, golpeándose el brazo izquierdo y la cabeza contra el caño del pasamanos (fs.
...).
Al efectuar su descargo, B. manifestó que otro colectivo circulaba delante suyo y que, probablemente,
R. intentó cruzar entre el vehículo por él comandado y el que le precedía en la circulación, por fuera de
la senda peatonal, razón por la cual no pudo evitar el impacto (fs. ...).
Empero, su versión se ve desvirtuada por los dichos de J. L. Á. quien se hallaba sentado en el medio
del transporte y afirmó que en virtud de los pocos pasajeros que viajaban, podía divisar claramente
hacia adelante. Así, explicó que advirtió que la damnificada cruzaba la avenida por la senda peatonal y
que el colectivero, justo antes de ingresar al carril de circulación exclusivo, aceleró la marcha y
"atropelló" a R. (fs. ...).
El cuadro de cargo se integra también con las declaraciones de otros pasajeros que dieron cuenta de la
intempestiva maniobra realizada por el encartado (fs. ...), la historia clínica de J. R. (a fs. ...), informes
del Cuerpo Médico Forense (fs. ...) y la inspección técnica del colectivo que da cuenta de los daños que
presentaba en la "zona izquierda baja del parabrisas izquierdo" (fs. ...), acaecidos por el impacto del
rodado contra J. R.
Así las cosas, tenemos por acreditado, con la convicción que esta instancia requiere, que los resultados
fueron producto de la violación al deber objetivo de cuidado, previsto en el art. 41, inciso e) de la ley
24.449 (que establece que tienen prioridad de paso "Los peatones que cruzan lícitamente la calzada por
la senda peatonal o en zona peligrosa señalizada como tal, debiendo el conductor detener el vehículo si
pone en peligro al peatón") y en el artículo 9.2.3 del código de tránsito de la Ciudad de Buenos Aires
(ley 2148) (donde se encuentra previsto que los conductores de colectivos tienen la obligación de
"velar permanentemente por la seguridad de los pasajeros" (inciso f) y "Tienen prohibido realizar
aceleraciones o frenadas bruscas" (inciso c)).
Por lo aquí expuesto, entonces, el Tribunal RESUELVE: Confirmar el auto de (fs. ...) en cuanto
decretó el procesamiento de L. B. en orden al delito de lesiones leves, sin perjuicio de la calificación
legal que en definitiva corresponda. (...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala IV, Seijas, González Palazzo, González. (Sec.: Bloj).
c. 56.510/14, BENZI, Luis.
Rta.: 18/03/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correc., Sala IV, c. 30.463, "Cortínez", rta. 7/12/2006.

LESIONES

Culposas graves y leves en concurso ideal. Procesamiento. Paciente que se sometió a una cirugía
estética. Accionar negligente por parte del médico que provoco en la paciente graves daños corporales.
Confirmación.

Fallo: "(...) La compulsa del expediente revela el acierto de la decisión adoptada pues, con la
convicción que la instancia requiere, la hipótesis acusatoria de la querellante se encuentra
suficientemente acreditada.
Así, la damnificada relató que el 26 de septiembre de 2012, fue intervenida quirúrgicamente por el
prevenido, quien en el mismo acto le realizó varios procedimientos con fines estéticos en diversas

143
zonas del cuerpo (dermolipectomía, implantes mamarios y abdominoplastía, (cfr. fs. ... y ratificación de
fs. ...) mas que a raíz de la negligente o imperita actuación del encausado, debió someterse, con
posterioridad y ya con otros profesionales a nuevas operaciones correctivas. En definitiva, el
defectuoso desempeño médico de B. le habría ocasionado daños físicos de gravedad.
En forma objetiva y con fundamento en el estudio agregado a (fs. ...) (linfocentellografía), puede
advertirse "la ausencia de visualización de estructuras nodales en la raíz de ambos miembros
superiores…", es decir, no puede controvertirse que durante la cirugía llevada a cabo por el imputado,
éste extirpó los ganglios de la querellante, práctica que, como se verá, era inadecuada.
Aun cuando al efectuar su descargo, el encausado negó el hecho y afirmó que la táctica y técnica que
empleara fue la adecuada (fs. ...), lo cierto es que el informe practicado por el perito oficial contraría su
versión.
Sin perjuicio de remitir en su totalidad al contenido de las respuestas a los puntos de pericia ordenados
(fs. ...) importa destacar, en particular, que el experto no dejó margen de duda en cuanto a la actuación
del facultativo al expedirse en los siguientes términos: "…la megaareola con cicatrices distendidas
aunada a la protosis mamaria bilateral es un franco defecto de técnica, así como la lesión linfática
axilar y braquial" (con resaltado en el original, ver respuesta).
Por otro lado, afirmó que el "edema que deja Godet en mano y antebrazo… fue consecuencia de la
intervención practicada" y que ello obedeció "a la extirpación o lesión indebida del paquete ganglionar
axilar de la paciente, por lo que pudo y debió ser evitada" (cfr. fs. ..., el subrayado nos pertenece).
Además, ilustró en cuanto a que las lesiones linfáticas fueron producidas por la "incorrecta extirpación
del paquete ganglionar axilar. Dicha lesión no tiene curación…" (fs. ...).
Frente a los elementos de cargo colectados, mediante los cuales se evidencia una actuación culposa por
el prevenido, que guarda estrecho nexo causal con el resultado que se verificara científicamente, se
tiene por acreditada la materialidad del suceso y la responsabilidad que le cupo al encausado, conforme
lo exige el art. 306 del ritual, por lo que el Tribunal RESUELVE: Confirmar el auto de (fs. ...) en
cuanto fue materia de recurso. (...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala IV, González, Pociello Argerich. (Sec.: Bloj).


c. 34.567/13, BRADICHANSKY, Armando M.
Rta.: 07/04/2015

LESIONES

Leves. Procesamiento. Imputada que habría agredido a la víctima golpeándola en la cara con un
elemento contundente. Versión brindada por el damnificado y pruebas que dan sustento. Lesiones
acreditadas. Confirmación.

Fallo: "(...) Las pruebas colectadas en el legajo resultan suficientes para dictar el procesamiento de M.
A. J. Ello así, pues la denuncia efectuada por la víctima ante la Seccional 19ª de la Policía Federal
Argentina (fs. ...), oportunidad en que brindó los detalles de lo ocurrido, encuentra sustento en los
informes médicos de (fs. ...), y en las constancias agregadas a (fs. ...) del Hospital Rivadavia, que
corroboran las lesiones sufridas por el damnificado -cuyas características y tiempo de producción
resultan compatibles con el suceso denunciado-.
Tal versión se ve sustentada por los dichos de T. P. L. e n tanto señaló que tras escuchar gritos desde el
pasillo, salió al palier, donde observó a la encausada junto a un hombre mientras golpeaba en la cara a
P. con un elemento contundente (fs. ...).
Sobre este testimonio, es importante resaltar que, aún cuando P. de L. mantiene una relación de
amistad y convive con el denunciante, no surgen de las actuaciones motivos que que autoricen a
restarle veracidad, tal como lo pretende la defensa.
A ello se aduna el relato brindado por el encargado del edificio, G. O. R., quien manifestó haber visto a
la víctima con el rostro lesionado y que esta le comentó haber sido golpeada por la prevenida algunos
días atrás (fs. ...).
Por otro lado, si bien la causante negó la imputación, es del caso que admitió la existencia de un
altercado con su vecino, lo que refuerza aun más los dichos de este último (fs. ...).
Por lo expuesto, el Tribunal RESUELVE: Confirmar el auto de (fs. ...) en cuanto fue materia de
recurso. (...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala IV, Seijas, González, González Palazzo. (Sec.: Barros).
c. 29.660/13, J., M. A.
Rta.: 23/04/2015

LESIONES.

Culposas. Procesamiento. Conductor de motocicleta que circulaba indebidamente por el carril


exclusivo del "Metrobus" y realiza una maniobra imprudente que determinó que colisionara con la
parte posterior de un ómnibus provocando que su acompañante cayera y sufriera lesiones graves.
Proceder que aumentó imprudentemente el riesgo propio de la conducción. Encausado con posición de
garante respecto de su acompañante. Confirmación.

144
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

Fallo: "(...) Los dichos de W. A. "(fs. ...)", M. L. G. "(fs. ...)", M. D. V. V. "(fs. ...)" y M. A. C. "(fs.
...)", dan cuenta de que el imputado no sólo circuló indebidamente por el carril exclusivo del
"Metrobus", sino que además habría realizado una conducta imprudente al no detener su marcha e
intentar incluso adelantarse, por el lado derecho, al colectivo de la línea "(...)" cuando éste se hallaba
próximo a detenerse en la parada ubicada en la intersección de la Avda. J. B. J. y B. Tal maniobra
determinó que su rodado colisionara contra la parte posterior derecha del ómnibus, provocando que su
acompañante C. cayera de la motocicleta y resultara lesionada gravemente "(cfr. informe médico de fs.
...)".
Aun cuando el conductor del transporte público de pasajeros hubiese actuado desaprensivamente, como
lo sostiene la defensa, tal comportamiento no mengua la responsabilidad de su pupilo, pues conforme
lo descripto, ha sido su maniobra la que aumentó imprudentemente el riesgo propio de la conducción al
incursionar por carriles de uso exclusivo del transporte público, zona a la que le estaba vedado
ingresar, realizando además allí y próximo a un vehículo de gran porte, un intento de sobrepaso que
contraría las normas que regulan el tránsito y que pudo sorprender al conductor de este último rodado.
De otro lado, es de resaltar que el encausado asumió la posición de garante de la persona que lo
acompañaba y resultó herida como consecuencia del accidente, desde el momento en que la
transportaba.
En punto a la teoría del incremento del riesgo se ha dicho que "...en el caso de que la conducta
infractora de la norma de cuidado, en comparación con la conducta alternativa adecuada, aumenta el
riesgo, esta elevación del riesgo no es compatible con la finalidad de la norma. En consecuencia, el
resultado producido tiene que ser imputado, cuando, posiblemente con la conducta alternativa se
produciría un menor riesgo. En otras palabras, para la teoría del riesgo habrá imputación cuando la
conducta imprudente, en relación con la cuidadosa, haya producido un aumento del peligro para el
objeto de la acción" (1).
En este contexto, SE RESUELVE: Confirmar el auto de "(fs. ...)", en todo cuanto fuera materia de
recurso.

C.N.Crim. y Correc., Sala IV, Seijas, González. (Prosec.Cám.: Pereyra).


c. 44.262/14, FLORES, Carlos A.
Rta.: 18/02/2015

Se citó: (1) Corcoy Bidasolo, Mirentxu, "El delito imprudente", Ed. IB de F, 2005, págs. 493/494).

LESIONES.

Culposas. Graves. Procesamiento. Desempeño negligente de parte de los médicos cirujanos que
operaron a la paciente aparatándose de las reglas del buen arte de curar. Confirmación.

Fallo: "(...) La acusadora particular relató que, en virtud de un accidente que había sufrido décadas
atrás, fue intervenida quirúrgicamente en la pierna derecha en varias oportunidades, una de ellas, por
una "artrodesis de tobillo", procedimiento que implicó la colocación de tres tornillos "(fs. ...)". Durante
2012 se determinó que uno de los implantes se había roto, por lo que debía ser reemplazado.
El 5 de junio de 2013, en el "Sanatorio S. C." -sito en la Avenida D. xx- de esta ciudad los imputados,
médicos cirujanos especialistas en ortopedia y traumatología, la operaron nuevamente mas la
intervención la practicaron erróneamente sobre el tobillo izquierdo.
La controversia radica entonces en determinar si el procedimiento fue efectuado en el miembro que
correspondía.
Sin perjuicio de los descargos que ambos profesionales brindaron en sus respectivas declaraciones
indagatorias "(fs. ...)", los elementos colectados conforman un cuadro de cargo en los términos del art.
306 del código adjetivo, con el grado de convicción que esta etapa requiere.
En efecto, la historia clínica de la paciente "(fs. ...)" aunada al informe del Cuerpo Médico Forense "(fs.
...)" y al centellograma aportado por la querella "(fs. ...)", echan por tierra la posibilidad de que la
paciente hubiera presentado afecciones en la zona corporal sobre la que actuaron los imputados.
Particular relevancia, por su claridad, adquiere el testimonio prestado por el perito oficial, Dr.
Reynaldo Aldo Ludueña, pues explicó que "respecto a este hecho… hay tres elementos a considerar…
que el tobillo que debía operarse era uno que ya tenía intervención previa por lo cual debía tener
cicatrices, que se hallaba inflamado y que poseía un tornillo partido. Estos tres datos no existían en el
tobillo operado por los imputados…" "(fs. ...)".
De otro lado, cabe destacar que el mismo día, tras la intervención, debió ser asistida por el servicio de
psicología del nosocomio por encontrarse "en estado de intensa angustia debido a la reciente
intervención quirúrgica en su pie sano… (conforme surge de la historia clínica, fs. ...).
En el mismo sentido, tras la evaluación realizada por otro profesional, al día siguiente, se consignó que
la querellante "transita un cuadro compatible con PSTD (Estrés post traumático)" y se indica "evitar
contacto con el cirujano del conflicto, por presunto error médico" "(ver fs. ...)".
Del peritaje obrante a "(fs. ...)" se extrae que "…se le practicó… la fijación de las articulaciones
subastragalinas del tobillo izquierdo cuando de las constancias analizadas tendría que haberse
intervenido el tobillo derecho…" así como también la conclusión en cuanto a que la paciente había
consultado "por edema en tobillo derecho… el 5/6/13 se efectuó la cirugía… pero en el tobillo

145
izquierdo, no surgiendo de autos que la denunciante presentase patología en dicha articulación" "(fs.
...)".
Por las consideraciones precedentes debe, a su vez, rechazarse el argumento defensista con relación a
P. pues no es posible considerar, al menos en este estadio procesal, que actuó como un mero ayudante
de M., es decir, que carecía de capacidad de decisión. Es que los signos externos destacados por el
perito respecto de la fisonomía que debía presentar el miembro inferior de la paciente eran asequibles a
simple vista y el imputado, en su condición de cirujano, no podía desconocerlos, máxime cuando toda
la historia clínica de la paciente, como ya fue mencionado, gira en torno al tobillo derecho.
Así las cosas, presentándose en el caso una actuación imperita o bien negligente por parte de los
facultativos y en base a las consideraciones precedentes y restantes argumentos desarrollados por el Sr.
Juez de grado, el Tribunal Resuelve: Confirmar el auto de "(fs. ...)" en cuanto fue materia de recurso.
(...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala IV, Seijas, González Palazzo, González. (Sec.: Bloj).c.
33.561/13,IRAGLIOTTA, Maximiliano.
Rta.: 25/02/2015

LESIONES.

Procesamiento (art. 89, en función de los arts. 92 y 80, inc. 9, del C.P.). Agente policial que lanzó gas
pimienta a pasajeros a bordo de un tren, en ocasión de una pelea suscitada en el interior del vagón.
Ausencia de agresión ilegítima. Reacción posterior de los pasajeros al lanzamiento del agente químico.
Confirmación.

Fallo: "(…) II. La recurrente, en lo sustancial, argumentó que su asistido actuó justificadamente
(artículo 34 inciso 6° del Código Penal). En esa dirección indicó que actuó en defensa propia frente a la
agresión ilegítima provocada por los numerosos pasajeros que se hallaban enardecidos por la demora
del servicio con motivo de la previa detención de dos pasajeros que se estaban peleando.
Los argumentos expuestos por la parte recurrente no logran conmover los fundamentos del auto
recurrido.
(…) concluimos que el accionar de G. no puede calificarse como un acto de legítima defensa. Ello así
pues las pruebas incorporadas a la causa permiten desechar la existencia del primer requisito del
instituto previsto en el inciso 6° del artículo 34 del Código Penal, esto es, una agresión ilegítima actual
o inminente por parte de los pasajeros del tren.
(…) cabe señalar que la testigo C.S.R., relató que, cuando el tren en que se trasladaba llegó a la
estación "Flores", bajaron unas personas que se estaban peleando y también había en el lugar personal
policial. Luego de ello, el tren cerró las puertas y retomó la marcha, pero a los pocos metros frenó
nuevamente dado que había una sustancia en el aire "que no podía describir". Indicó que varias
personas bajaron y se encontraban descompuestas y luego varios pasajeros se abalanzaron sobre el
personal policial, a quienes los acusaban de haber arrojado "una especie de químico" (fs…).
(…) se pondera lo expuesto por Y.C.S., quien indicó que una vez que el personal policial intervino para
detener a dos personas que se estaban peleando en el interior del vagón, se cerraron nuevamente las
puertas para continuar el recorrido y dado que había gente que insultaba a los policías, uno de estos sin
motivo alguno comenzó a rociar con gas pimienta hacia el interior del vagón (fs…).
(…) Los testimonios reseñados permiten inferir que cuando el imputado decidió utilizar el gas
pimienta, el tren ya había cerrado sus puertas e iniciado su marcha, de manera tal que aún cuando
hubieran existido insultos verbales, no había forma de que quienes estaban en el interior del vagón lo
agredieran.
Este escenario torna evidente la ausencia de un peligro o agresión actual que ameritase la utilización
del gas. Y en este punto, cabe destacar que, conforme indicaron los testigos mencionados, la gente que
se encontraba en el vagón recién pretendió agredir a G. luego de que arrojara esa sustancia química.
(…) la acción concretada por G. contra quienes se encontraban en el interior del vagón, no puede
calificarse como un acto de legítima defensa.
(…) de acuerdo con las apreciaciones realizadas por el Ministerio Público Fiscal a fs. (…), se pondera
que las lesiones leves sufridas por los damnificados, quienes instaron la acción a fs. (…), se encuentran
acreditadas mediante las fotografías de fs. (…), las constancias de atención médica de fs. (…) y el
dictamen del Cuerpo Médico Forense de fs.(…) en el cual se determinó que eran compatibles con la
acción de agentes químicos.
(…) entendemos que los elementos colectados hasta el momento resultan suficientes para agravar la
situación procesal del imputado, por lo que se RESUELVE: CONFIRMAR el punto I del auto de
fs.(…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, Pinto, Divito. (Sec.: Roldán).


c.710.074.3/12, GALLO, Dardo R.
Rta.: 25/03/2015

146
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

LESIONES.

Culposas. Sobreseimiento. Complicaciones surgidas a raíz de intervención quirúrgica de cataratas.


Pérdida total de la visión de un ojo. Imposibilidad de garantizar el éxito terapéutico. Actuación según
lex artis. Paciente informado de los peligros que podrían sobrevenir con motivo de la intervención y
aceptación. Ausencia de violación al deber objetivo de cuidado. Confirmación.

Fallo: "(…), con motivo del recurso de apelación deducido por la querella contra el auto documentado
a fs. (…), en cuanto se dispuso el sobreseimiento de G. D. V. en orden al delito de lesiones leves y
amenazas coactivas en concurso real entre sí.
Liminarmente, en torno a las manifestaciones de la defensa referidas a la incomparecencia del
querellante, esta Sala ha sostenido que el letrado patrocinante de la querella se encuentra habilitado
para fundamentar el recurso de apelación en la audiencia oral ante la alzada, pues al constituir ese
informe una actividad técnica, en la que únicamente los letrados pueden tomar la palabra, la exigencia
de la mera presencia física del querellante importaría un rigorismo ritual excesivo (causas nº 35.757,
"Lorefice, Osvaldo Daniel", del 24 de septiembre de 2008 y 35.729,"S, C. J.", del 11 de febrero de
2009, entre muchas otras).
Ello superado y en torno a la cuestión de fondo, la parte recurrente planteó en el escrito recursivo que
el imputado actuó con negligencia al no advertir las complicaciones que pudieran surgir de la
intervención quirúrgica -cataratas- a la que fue sometido A. A. R., y como consecuencia de ello, la
pérdida total de la visión de su ojo derecho (…).
De los dichos de R. surge que fue intervenido quirúrgicamente por el imputado en dos oportunidades.
La primera operación de cataratas tuvo lugar el 7 de mayo de 2013 en la Clínica S. P., ocasión en la
que D. V. le implantó una lente intraocular en el ojo derecho, tras lo cual el denunciante comenzó a
sentir unas molestias en razón de que -como fue informado posteriormente- el ojo había rechazado la
lente implantada.
El denunciante agregó que D. V. le recomendó colocarse unas gotas, en tanto las previamente recetadas
-"Panopsis"- le provocaban dolor, continuando con los controles médicos cada quince días, hasta que
finalmente se produjo un desprendimiento de retina y perdió totalmente la visión del ojo derecho, lo
que motivó una cirugía reparadora el 10 de septiembre de 2013.
En dicha oportunidad, D. V. le retiró la lente intraocular previamente colocada y parte de la retina
remanente que se encontraba dañada, indicándole que realizara unos ejercicios para la fijación de la
retina (…).
El profesional del Cuerpo Médico Forense Dr. N. D. A. valoró la información oftalmológica que obra
en el expediente, el historial clínico y el consentimiento informado, y concluyó en que, en el caso, "La
intervención indicada para solucionar la catarata del ojo derecho de R. fue la correcta…en dicho acto
surge como complicación la ruptura de la cápsula posterior…La ruptura de la cápsula posterior es una
complicación independiente de la conducta quirúrgica, (aunque se encuentra vinculada a ella) seguida
por el cirujano, que aunque conocida dicha complicación, por el mismo, no es posible evitar su
aparición, en todos los casos…de autos no surge que haya habido complicaciones en el pos operatorio
en los controles con fechas 15; 16; 20; 24; y 29 de mayo y 05 y 17 de junio y 08 y 22 de julio de
2013…Pueden presentarse complicaciones en la intervención quirúrgica de catarata o a posteriori de la
misma...entre el 1 y 3 por ciento de los pacientes que se someten a cirugía de catarata sufren después
un desprendimiento de retina, aún en el caso de que no haya ruptura de la cápsula posterior del
cristalino".
Además, especificó que "en la medicina no es posible garantizar el éxito terapéutico…el médico debe
poner todos los medios idóneos a la realización del objetivo que se propone y razonablemente, sin
poder garantizar absolutamente el resultado, en este caso, a nuestro criterio médico legal se ha actuado
según lex artis y lex artis ad hoc….la actuación del inculpado es acorde con las reglas de actuación que
rigen en la profesión médica oftalmológica, según el grueso de los conocimientos médicos que a la
actualidad se tienen sobre la cirugía de catarata, sus complicaciones y el desprendimiento de retina"
(…).
Por otro lado, el paciente fue informado de los peligros que podrían sobrevenir con motivo de la
intervención médica e igualmente los aceptó (…), por lo que no se verifica la existencia de una
violación al deber objetivo de cuidado que haya creado o aumentado un riesgo jurídicamente
desaprobado y que tenga una relación directa con el resultado -pérdida de visión del ojo derecho de R.-.
Tampoco cabe atender el agravio que se expuso en el marco de la audiencia oral, referido a que la
operación no era viable porque en una anterior intervención R. habría sufrido complicaciones en el otro
ojo. Es que, como replicó la defensa, se trata de una hipótesis novedosa que no se la incluyó en el
escrito recursivo (artículo 445, primer párrafo, del Código Procesal Penal).
Así, corresponde confirmar el sobreseimiento dispuesto en orden al delito de lesiones culposas.
De otro lado, más allá de que corresponda homologar el auto liberatorio, la actividad investigativa
desarrollada en la instancia de instrucción lleva a concluir en que hubo razones plausibles para recurrir
y de ahí que se advierta procedente que las costas de alzada sean soportadas en el orden causado
(artículo 531 del Código Procesal Penal), criterio análogo al arbitrado en la instancia anterior.
Por ello, esta Sala del Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el auto documentado a fs. (…), en cuanto
fuera materia de recurso. Costas de alzada por su orden".

147
C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Cicciaro, Scotto. (Sec.: Besansón).
c. 8.397/14, DIAZ VASALLO, Gabriel.
Rta.: 17/03/2015

LESIONES.

Culposas. Procesamiento. Imputado que no respeta la prioridad de paso peatonal de la victima y su hijo
y los embiste provocándoles lesiones. Elementos de prueba suficientes para gravar la situación
procesal. Confirmación.

Fallo: "(…) II.- (…) sostuvo que el (…) caminaba por la calle (…) con su hijo de un año y dos meses
en sus brazos y al cruzar por la senda peatonal la avenida (…), "(…) sintió un fuerte golpe en la
espalda, cayendo con su hijo al pavimento, sintiendo que un rodado pasa con una de sus ruedas
delanteras, por sobre el pie derecho, y su hijo resultó con golpes al caer al pavimento (…)".
El Ayudante (…) al arribar al sitio observó a (…) sentada en el asfalto con un niño en brazos apoyada
sobre el rodado del imputado que estaba detenido en la intersección de las calles citadas y tras
comprender lo ocurrido solicitó la presencia del SAME.
De los informes agregados a la causa surge que (…) y el niño presentaron lesiones de carácter leve.
(…).
Frente a ello el imputado reconoció haber doblado por la calle (…) hacia la avenida (…) con su
vehículo y haber embestido a la víctima, pero descargando su responsabilidad en ella (…), indicando
que su actitud de volver sobre sus pasos determinó que retomara la marcha y se provocara el accidente.
Los argumentos de la apelante no conmueven lo decidido por el juez de la instancia anterior ya que de
la filmación exhibida durante la audiencia surge de manera clara que (…) era la única persona que
cruzaba la avenida (…), que lo hacía por la senda peatonal y con su hijo en brazos cuando el vehículo
de (…) giró a velocidad desde la calle (…), deteniéndose, recién, tras el impacto. Además no se
observa que hubiera retomado su marcha en momento alguno (…).
(…) Ponderamos que la reglamentación de tránsito nacional y del Gobierno de esta capital son claras
en su redacción en cuanto establecen que "Todo conductor debe ceder siempre el paso en las
encrucijadas al que cruza desde su derecha. Esta prioridad del que viene por la derecha es absoluta, y
sólo se pierde ante:...e) Los peatones que cruzan lícitamente la calzada por la senda peatonal o en zona
peligrosa señalizada como tal; debiendo el conductor detener el vehículo si se pone en peligro al
peatón;..." (artículo 41 inciso e de la ley 24.449); que "Todo conductor está obligado en cualquier
circunstancia a ceder el paso: a) A peatones (…)" y que "Toda maniobra vehicular que se desarrolle en
la vía pública debe ser previsible y no significar riesgo para peatones u otros vehículos, debiendo
realizarse de acuerdo a las pautas establecidas en el presente código…" (arts. 1° del Capítulo 6.1 y 1°
inciso a) del Capítulo 6.7, ambos del Código de Tránsito y Transporte de la Ciudad Autónoma de
Buenos Aire, ley 2148).
De ese modo, se acredita al menos en este estadio procesal que (…) el día indicado violó los deberes de
cuidado a su cargo contraviniendo las normas de tránsito al girar con su automóvil sobre la avenida
(…) sin respetar la prioridad de paso peatonal, embistiendo a (…), lo que provocó que su hijo y ella
cayeran sobre el pavimento y se lesionaran.
El presunto desistimiento de cruzar de (…) no surge de lo actuado y debe ponderarse al efecto que de
haber existido "la concurrencia de culpa de la víctima carece de relevancia para determinar la
responsabilidad penal del procesado, porque en el ámbito penal no se admite la compensación de
culpas […] El cruce inoportuno o imprudente de la víctima no excluye la responsabilidad del conductor
del vehículo que la atropelló, quien debe probar que adoptó las precauciones necesarias para prevenir y
evitar el accidente, por lo que procede confirmar el procesamiento [...]" (1).
(…), el Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR los puntos I y II del auto de fs. (…), en cuanto ha sido
materia de recurso. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini, Filozof. (Sec.: Williams).


c. 51.043/14, MINETTI, Pablo Andrés.
Rta.: 27/03/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correcc., Sala VI, c. 40011, "Montanelli, Roberto Pedro", rta.: 13/9/2010.

LESIONES.

Culposas. Procesamiento. Ambulancia que circulaba con sirena y balizas y embistió a una persona al
trasponer un semáforo en rojo. Vehículo que no tenía una emergencia asignada. Violación al deber
objetivo de cuidado. Confirmación.

Fallo: "(…), convoca a la Sala el recurso de apelación interpuesto por la defensa contra el auto
documentado a fs. (…) en cuanto se dispuso el procesamiento de L. D. P.
La versión brindada por A. V., ceñida a que fue embestido por una ambulancia que colisionó con un
automóvil en la intersección de las calles H. Y. y V. C. (…) se encuentra corroborada con la
declaración del camillero A. A. L., quien viajaba con el imputado, en punto que "en un momento dado

148
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

el chofer encendió las sirenas y [b]alizas" y "que… al llegar a una intersección el [testigo] visualiz[ó]
un vehículo particular el cual det[uvo] su marcha [y] luego continu[ó], ante tal circunstancia el
deponente le refi[rió] al chofer que tenga cuidado dado que el vehículo no se detuvo, que para ello el
chofer no alcan[zó] a frenar la unidad, siguiendo su recorrido…" (…).
En punto a la circunstancia de que la ambulancia circulaba con la sirena y las balizas encendidas, no
puede soslayarse que el artículo 61 de la ley 24.449 establece que "Los vehículos de los servicios de
emergencia pueden, excepcionalmente y en cumplimiento estricto de su misión específica, no respetar
las normas referentes a la circulación, velocidad y estacionamiento, si ello les fuera absolutamente
imprescindible en la ocasión [de] que se trate siempre y cuando no ocasionen un mal mayor que aquel
que intenten resolver".
En tal sentido, del relato de E. G. S. se desprende que la unidad no tenía asignado ningún apoyo, sino
que circulaba sin objetivo asignado, a la espera de instrucciones de la mesa operativa y sin que se
hubiese ordenado ningún desplazamiento de esa ambulancia (…).
Al encontrarse prima facie acreditado que el causante no se hallaba en una emergencia que lo
autorizara a inobservar las normas de tránsito, cabe concluir en que el resultado lesivo investigado
habría sido determinado por la violación al deber objetivo de cuidado que tenía a su cargo P., al no
haber detenido su marcha, pese a que la señal lumínica le indicaba hacerlo.
No obstante lo expuesto se exhibe de utilidad para la encuesta que, acorde a las medidas propiciadas
por la defensa, se recabe la grabación que habría solicitado asistencia médica en la localidad de
Quilmes -a la que se le habría otorgado el carácter de "código rojo"- y en caso de haber existido esa
llamada, se establezca a qué móvil fue asignada la emergencia.
Por ello, al haberse verificado elementos suficientes para conformar el marco previsto en el artículo
306 del Código de rito, el Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el auto extendido a fs. (…), en cuanto
fuera materia de recurso".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Cicciaro, Pociello Argerich. (Prosec. Ad Hoc.: Sposetti).
c. 38.854/13, PERALTA, Leandro Daniel.
Rta.: 08/04/2015

LESIONES.

Culposas. Procesamiento. Docente auxiliar de una sala maternal que omitió el deber de cuidado al no
prestar la debida asistencia a un niño de dos años y medio cuando se encontraba en el baño ya que tenía
dificultad en el control de esfínteres, provocando su omisión que éste se accidentara y sufriera heridas
graves en su cara. Lesiones acreditadas. Cuaderno de comunicaciones en el cual la madre había
informado en reiteradas oportunidades el problema específico del control de esfinteres. Verificación
del nexo causal entre la omisión y el resultado típico. Posición de garante. Confirmación.

Fallo: "(...) Los elementos probatorios reunidos en la encuesta resultan suficientes para acreditar, con el
grado de probabilidad requerido para esta etapa, la responsabilidad que le cupo a E. M. R. en las
lesiones verificadas en el niño I. D´ A. (cfr. fotografías de fs. ... e informe del Cuerpo Médico Forense
de fs. ...).
Es que, pese a las advertencias efectuadas por la madre del menor, P. A. D., en torno al proceso de
aprendizaje de su hijo para evacuar sus esfínteres en los sanitarios y las necesidades de atención que
ello presentaba, especialmente el ser sostenido a dichos efectos por una persona mayor (ver declaración
testimonial de fs. ... y las notas del "cuaderno de comunicaciones" del 13 y 26 de marzo de 2013) y al
haberse comprometido en particular la imputada R., en su calidad de auxiliar docente, a efectuar un
seguimiento personalizado del niño, así como de los intereses, aptitudes y dificultades propios de su
corta edad y también en general a estar atenta a la seguridad de los infantes a su cuidado cuando éstos
se hallaran fuera del espacio propio del aula habitual, empero sea contiguo, no parece haber observado
en el caso dichos deberes (cnfr. punto 6 y 18 del Reglamento Institucional de la Asociación Civil
Educando Valores Esenciales suscripto por la imputada e incorporado a su legajo personal). Tal
omisión se traduce en no haber empleado el debido cuidado cuando la referida criatura se dirigió el día
del suceso al baño ubicado en el interior de la sala, lugar donde se cayó desde un inodoro y golpeó su
rostro contra un portarrollos de cerámica partiéndolo y sufriendo graves cortes en su frente y mejilla
izquierda, aun cuando en la ocasión la encausada se encontrara próxima al lugar del accidente.
No enerva este juicio de valor lo aludido por la sindicada en torno a que mientras la víctima se
encontraba ya dentro del baño y ella se hallaba en el umbral de la puerta de acceso, prestó atención al
llamado de otro niño, oyendo en ese momento el llanto del que tenía en ese momento bajo su vigilancia
y advirtiendo que se encontraba lastimado en el piso (cfr. declaración indagatoria de fs. ...), pues las
circunstancias le exigían extremar su cuidado.
No obstante que intenta ampararse en una supuesta autonomía que el damnificado tendría para
desempeñarse por su cuenta en tales menesteres por haber sido adoctrinado durante la época en que
asistía allí a una colonia de verano, su descargo no alcanza a eximirla de responsabilidad, tomando en
cuenta la edad del menor bajo su custodia (dos años y siete meses) y las reiteradas notas con que su
madre alertaba a la maestras acerca de la forma en que realizaba sus necesidades fisiológicas,
generalmente parado sobre el inodoro, aunque comenzaba también a sentarse alternativamente para ese
propósito (ver las insertas el 6, 12, 13, 18 y 26 de marzo de 2013 en las páginas 4, 7/8, 11, 20 vta. y 16

149
del "cuaderno de comunicaciones" reservado entre la documentación de la causa). Tampoco la lectura
de este documento permite inferir que el perjudicado ya hubiera superado la etapa de aprendizaje para
dichas necesidades, tal como lo alega la defensa, pues, a su vez, las respuestas de las docentes
consignadas en el mismo instrumento, por ejemplo las que rezan:, "…hoy se hizo pis encima…"
(página 18); "Hoy I. hizo pis parado" (página 22 vta.) o "…cuando estábamos en el patio I. quiso hacer
caca, pero no aguanto y cuando llegó al baño ya se había hecho un poco…" (página 34), esta última
asentada pocos días antes del episodio, dan cuenta de que el infante no tenía aún el suficiente control ni
la experiencia necesaria y debía por ende ser asistido de cerca por un adulto, dada su inestabilidad.
Por otra parte, las fotografías obtenidas en el lugar del infortunio y obrantes en un legajo anexo,
ilustran acabadamente acerca de la disposición de los artefactos sanitarios donde aquél aconteciera, el
portarrollos de loza quebrado por golpe, su original ubicación antes de ser reemplazado, a la izquierda
del inodoro, lo cual indica, tomando como referencia las vistas referentes al rostro de la víctima luego
del impacto y el estado que presentaría en la actualidad (ver contenido del sobre glosado a fs. ... y las
que obran a fs. ... de este sumario, así como las conclusiones del examen físico llevado a cabo por el
Cuerpo Médico Forense a fs. ...), que sólo puede haber acontecido por una violenta caída,
presuntamente por encontrarse el niño parado sobre el sanitario y no sentado de perfil opuesto. Ello,
pues aun admitiendo que éste le expresara a su maestra que "…tenía ganas de hacer caca" (conf. fs. ...)
lo cual implicaría imaginarlo acomodado en la lógica postura para defecar, las anteriores observaciones
indican que si no lo estaba desde un inicio, tiene que haber procedido a subirse al inodoro, como
alternativamente lo venía haciendo en su casa, pero ayudado por un adulto, por no haber internalizado
todavía las enseñanzas que al respecto le impartían tanto su madre como las guardadoras.
Además, reparando en las imágenes obrantes a (fs. ...) del legajo mencionado anteriormente, se
evidencia que la prevenida se hallaba ubicada, tal como lo reconociera, en el umbral de la pequeña
puerta allí retratada y no cercana al cuerpo del niño para auxiliarlo directamente y evitar cualquier
contingencia.
También, y en este contexto descriptivo, cabe destacar que dentro del aula se encontraba otra maestra
para atender al resto de los infantes, por lo que la encausada debió dedicarse por completo a asistir al
accidentado, dado que las circunstancias referidas así lo imponían y se encontraba claramente en
posición de garante, lo que la convierte en sujeto activo del delito de omisión impropia, pues tenía la
responsabilidad jurídica de hacer lo posible para evitar la consecuencia lesiva (1).
El análisis del caso permite entonces afirmar que obró negligentemente o bien con impericia
profesional en la emergencia y dentro de la esfera de su actividad contractual, evidenciando un defecto
de la atención y una actuación inexperta o inidónea en una tarea que requiere especial destreza (2), por
lo que su conducta culposa guarda un directo nexo causal con el resultado lesivo que fuera verificado
en autos.
En este marco, el auto que agravó su situación procesal en los términos del artículo 306 del Código
Procesal Penal de la Nación habrá de ser homologado.
Finalmente, atendiendo a la impugnación del monto del embargo fijado en la anterior instancia, éste no
aparece excesivo, evaluado a la luz de la eventual indemnización civil derivada del delito enrostrado y
las costas del proceso, en las que deben contemplarse no sólo los honorarios del letrado de la querella
sino también los de la defensa.
En consecuencia, el tribunal RESUELVE: CONFIRMAR los puntos (...) y del auto de (fs. ...) en todo
cuanto fueron materia de recurso. (...)"

C.N.Crim. y Correc., Sala IV, González, Pociello Argerich. (Prosec.Cám.: Pereyra).


c. 23.330/13, R., E. M.
Rta.: 21/04/2015

Se citó: (1) Terragni, Marco Antonio "El delito culposo", Ed. Rubinzal Culzoni, Sta. Fé, 2004, pág.
115. (2) C.N.Crim. y Correc., Sala IV, c. 19.832 "S", 21/3/03.

LESIONES.

Sobreseimiento. Hecho que se inicia por prevención policial. Menor de edad que resulta lesionada
cuando cae por un techo de fibra de vidrio que cedió en un salón de fiestas donde se festejaba un
cumpleaños. Fiscal que recurre porque entiende que deben llevarse a cabo medidas de prueba.
Revocación.

Fallo. "(...) apelación del fiscal Edgardo J. M. Orfila, interinamente a cargo de la Fiscalía Nacional en
lo Correccional n° 12, contra el auto de (fs. ...), por el que se sobreseyó a G. G. y a A. M. Y., por
considerar que el hecho investigado no encuadra en una figura legal (art. 336, incido 3° del CPPN).
(...).
La presente se inició a raíz de la prevención efectuada el 26 de octubre de 2014, por personal de la
seccional Nro. 37 de la Policía Federal Argentina en la calle C. XX de esta Ciudad, donde se emplaza
un salón de fiestas por una menor lesionada, oportunidad en que manifestó el preventor Gonzalo
Delcasse, que al arribar al lugar se entrevisto con A. M. R., quien le dijo que se encontraba en el lugar
festejando el cumpleaños de su hijo. Que en un momento dado, un grupo de menores subió al primer

150
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

piso y una niña pisó un techo de fibra de vidrio, cayendo a la planta baja, mas precisamente en el sector
de cocina.
(...). (...), el carácter conclusivo del sobreseimiento exige un estado de certeza corroborante sobre la
existencia de la causal en que se fundamente y procede cuando no quedan dudas acerca de la extinción
de la pretensión penal, de la falta de responsabilidad de los imputados o de que debe ser exento de
pena, extremos que no concurren a estos actuados. Por ello, consideramos que previo a definirse la
situación procesal de los encausados, deberá cumplirse con las medidas probatorias requeridas por la
fiscalía en la audiencia, las cuales lucen útiles, necesarias y pertinentes a fin de dilucidar lo ocurrido el
día de los hechos. En efecto, corresponde se cite a prestar declaración testimonial al personal del salón
en cuestión, cuyas identidades y demás datos personales obran a (fs. ...), (...).
También deberá requerirse al Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires que informe si el salón se
encontraba habilitado para la época de los hechos, y en su caso, con qué tipo de permiso contaba. (...).
En mérito a lo expuesto, el tribunal RESUELVE: I. REVOCAR la resolución de (fs. ...), en cuanto fue
materia de recurso (art. 455 a contrario sensu del CPPN). II. DISPONER que el Sr. juez de grado de
cumplimiento con lo ordenado en los considerandos. (...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala I, Bunge Campos, Rimondi. (Sec.: Sosa).


c. 73112/14, G., G. y otro.
Rta.: 26/05/2015

LESIONES.

Culposas graves. Procesamiento de cirujanos y asistentes. Responsabilidad médica de los cirujanos.


Intervención quirúrgica a paciente en el hombro derecho cuando el destinado era el izquierdo.
Ausencia de supervisión de los estudios previos. Perjuicio en la funcionalidad del hombro. Negligencia
e imprudencia. Prueba suficiente. Asistente que no tenía el deber de controlar los antecedentes del
paciente sino que cumplió el rol de asistir y ejecutar las órdenes del cirujano. Principio de confianza.
Confirmación respecto de los cirujanos y revocación y sobreseimiento respecto del asistente.

Fallo: I-"(…) II. a) Se legitimó pasivamente a M.A.K. -en calidad de cirujano a cargo- y a E.S.C. -en
carácter de primer ayudante- por haber omitido los deberes a su cargo -descriptos en la imputación-
durante la intervención quirúrgica practicada al paciente D.B., oportunidad en la que le colocaron
suturas con anclajes biodegradables en el hombro derecho, sin atender a los estudios previos que
indicaban que la intervención se había programado para el hombro izquierdo, causándole como
consecuencia de ello lesiones de entidad grave. El hecho habría ocurrido el 6 de octubre de 2010, a las
8.30 horas en el Sanatorio Mater Dei de esta Ciudad.
(…) se imputó a C.W.M., por haber omitido realizar -o al menos supervisar- la intervención quirúrgica
que el paciente D.B. le había encomendado, pues se habría retirado del quirófano sin atender a su
responsabilidad, lo cual generó las consecuencias antes descriptas.
Los tres imputados (fs…)coincidieron en explicar que si bien el paciente ingresó para ser operado en su
hombro izquierdo, una vez anestesiado, M. procedió a examinar la zona a intervenir y la comparó con
el hombro opuesto, ya que el paciente, bajo anestesia general, no opone defensa. Así fue como se
detectó inestabilidad en el hombro derecho, y por tal razón aquél decidió resolver la patología en forma
bilateral.
(…) de las constancias de la historia clínica y sus asientos cronológicos -la del Mater Dei, y las
elaboradas por M. en su consultorio- se desprende una realidad distinta: la artroscopía del hombro
derecho la realizó el Dr. K. a las 8 horas y la intervención de ese hombro no estaba indicada ni
informada al paciente, según éste manifestó. En segundo término, se realizó la artroscopía del hombro
izquierdo a las 10.10 horas.
Al respecto, la única referencia al hombro derecho data del año 2008, cuando M. consignó que observó
laxitud (fs….). Sin embargo, todo el tratamiento posterior se centró en el hombro opuesto e incluso la
orden de internación se emitió exclusivamente por el hombro izquierdo (conf. fs….).
Sobre este aspecto, el perito L. señaló que el paciente ingresó para una cirugía programada de hombro
izquierdo, y que de las historias clínicas previas a la intervención no surgía la necesidad de realizar una
artroscopía en el hombro derecho.
Explicó que es muy común que una vez suministrada la anestesia el médico interviniente realice una
exploración en las otras partes del cuerpo, pero salvo urgencia, de acuerdo a la buena práctica médica
se debe realizar la operación ya programada, y, en su caso, diferir la segunda operación a fin de
informar al paciente para que pueda prestar su consentimiento (ver peritaje de fs. … y declaración de
fs. …).
A similares conclusiones arribaron los profesionales de la junta médica realizada a fs. (…), quienes
señalaron que si bien la laxitud articular puede detectarse mediante un correcto examen semiológico,
requiere de exámenes complementarios que no habrían sido realizados en el presente caso (ver punto
3), más allá de que el Dr. N.M.-perito por la defensa de K. - explicó que la resonancia no es definitiva
como diagnóstico.
(…) no desconocemos que a fs. (…) de la historia clínica obra el consentimiento informado otorgado
por D.B. a W.M., y que en ese documento se consignó que la autorización del paciente era para ser
sometido a una "artroscopía de hombro bilateral por inestabilidad". Sin embargo, dicha pieza no puede

151
ser leída aisladamente del resto de la prueba documental que indica que la cirugía estaba destinada a
practicarse en el hombro izquierdo.
Nótese el asiento realizado en la historia clínica, el mismo día de la intervención a las 7.30 horas,
donde se consignó que el paciente "ingresa por dolor crónico (de) hombro izquierdo con inestabilidad"
(fs…), también la orden de internación fue motivada por el hombro izquierdo (fs. …).
(…) la voluntad del paciente manifestada en la ficha de consentimiento informado sólo pudo tener
eficacia respecto a la intervención del hombro izquierdo, que es el que había sometido a tratamiento
durante dos años, por lo que únicamente respecto de esa articulación tenía adecuada información sobre
el estado de salud.
Recordamos que el consentimiento, para ser prestado, debe serlo en forma libre e informada; y "está
sujeto a que la víctima tenga capacidad para comprender la situación en la que consiente, y que actúe
voluntariamente, sin haber sido víctima de error, engaño o intimidación. De no ser así no presentaría el
elemento volitivo". Además, "el consentimiento presunto es excepcional, y por eso cuando el médico
puede recabar la autorización del paciente debe proceder de esta manera" (1) (…) los profesionales no
estuvieron amparados para intervenir el hombro derecho por el consentimiento prestado por B. De ser
cierto que durante el curso de la cirugía, detectaron la necesidad de operarlo, concluimos que tampoco
contaban con un consentimiento presunto para afectar esa parte del cuerpo, porque no había situación
de urgencia que impidiera recabar previamente la autorización del paciente.
b) Los recurrentes insistieron en afirmar que la intervención cuestionada reparó una lesión existente, lo
que en términos dogmáticos implicaría la atipicidad de la conducta por ausencia de resultado lesivo.
Sobre este punto, coincidimos con la valoración efectuada por el juez de grado, en cuanto a que,
corroborada, en principio, la hipótesis acusatoria acerca de que la operación del hombro derecho era
innecesaria, el paciente ha sufrido una disminución en la función del hombro en cuestión, conforme las
conclusiones del Cuerpo Médico Forense (fs. …).
Además, en el informe mencionado se explicó que "operar ambos hombros en un mismo acto
quirúrgico, implica que con las inmovilizaciones que se efectúen (al paciente) no puede movilizar sus
miembros superiores, con las dificultades propias de alimentarse, higienizarse, vestirse, etc., no
existiendo una urgencia que indicase realizar esta intervención inmediatamente" a lo que se añadió que
"hubiese sido adecuado tras la rehabilitación del hombro izquierdo, completar los estudios del hombro
derecho y allí considerar el tratamiento a seguir"(fs…).
(…) consideramos que los elementos reunidos en la causa permiten sostener, (…)se habría incurrido en
una conducta contraria a los deberes que emergen del arte de curar.
c) En un primer momento de este proceso, las partes recurrentes cuestionaron la veracidad de la
historia clínica que da cuenta de quien fue el médico interviniente. Afirmaron que, pese a que en la
primera intervención figura K. como el cirujano a cargo, en realidad fue M quién realizó ambas
cirugías. Explicaron que la diferencia obedecería a un error administrativo, o bien, a una costumbre en
el ámbito de la salud consistente en señalar los nombres de los profesionales que sí son autorizados por
la empresa de medicina prepaga.
Sin embargo, no parece razonable lo expuesto por cuanto en la primera operación se consignó al Dr.
K., y en la segunda al Dr. M., por lo que el supuesto "impedimento administrativo" habría sido
erradicado posteriormente.
Pero más importante aún es que las constancias de la historia clínica según las disposiciones legales
deben consignar registros fidedignos, claros y precisos (ley 26.529, capítulo IV).
En este orden, de las fs. (…) de la historia clínica se desprende que fue el Dr. K. quien realizó la
artroscopía del hombro derecho (a las 8 horas), y de fs. (…)del mismo instrumento, surge que el Dr. M.
realizó la artroscopía del hombro izquierdo -a las 10.15hs-.
Además, no solo la prueba documental da cuenta de esta circunstancia, sino que otros profesionales
que estuvieron presentes colocaron a K. en el rol de cirujano a cargo -conforme los dichos de M.I.G. y
J.M.T. fs. (…)-.
Si bien, respecto de M., aún no pudo determinarse si llegó más tarde (fs. …) o se retiró posteriormente
(fs…), G. y T. coincidieron en afirmar que, estando presente, no tuvo intervención material en la
realización de las operaciones.
Incluso, en el marco de la audiencia ante esta instancia, el Dr. O.M.M. dijo que K. actuó por
delegación, en virtud de la autorización que B. le otorgó a M. y a su equipo mediante el consentimiento
informado. (…) se estima que tanto M. -en calidad de cirujano tratante del paciente, a cargo de
supervisar la práctica- como K. -en calidad de cirujano interviniente, que ejecutó los actos quirúrgicos-,
habrían obrado de manera negligente e imprudente, pues tenían la obligación de conocer qué hombro
correspondía operar.
Como quedó dicho en el apartado anterior, en caso de considerar necesario también realizar la
artroscopía del hombro opuesto, debieron diferir dicha práctica para otro momento, de modo de contar
con estudios complementarios que corroboren el diagnóstico, y estar en condiciones de cumplir con su
deber de informar al paciente de la novedad, de modo que éste prestara su consentimiento de modo
eficaz.
II-d) Distinta es la situación procesal de E.S.C., a quien en su rol de asistente, le incumbía ejecutar las
órdenes del cirujano a cargo, por lo que no estaba facultado para tomar decisión alguna respecto de la
intervención que correspondía practicar.
Los forenses aclararon a fs. (…) y (…) que los ayudantes colaboran con el cirujano en el acto
quirúrgico de acuerdo a sus requerimientos, y si bien el primer ayudante tiene un rol más activo que el

152
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

segundo, es el cirujano quien toma las decisiones, y específicamente, ejercita sus criterios ante
situaciones imprevistas.
(…) En este sentido, de los elementos reunidos en la causa no se extrae que S.C. tuviera el deber de
controlar los antecedentes clínicos previos a la intervención, ni que él influyera en la decisión de
realizar la operación -considerada innecesaria- en el hombro derecho de B.
La imputación que a él se dirigió se formuló a partir de que "debía conocer la operación
perfectamente". Sin embargo, en función del rol que cumplía en el equipo, corresponde acudir al
denominado principio de confianza, pues se trató de un trabajo mancomunado con otros profesionales
de la salud, con una clara división de tareas, marco en el que no le incumbía a S.C. decidir qué hombro
del paciente debía ser operado.
De esta forma, no tuvo una participación el hecho imputado, en tanto no formó parte del actuar
negligente, ya que su deber de actuación posible y exigible en el caso en concreto no estaba alcanzado
por la conformación del criterio médico que correspondía seguir.
(…) habremos de disponer el sobreseimiento de E.S.C., en los términos previstos por el art. 336 inc. 4
del C.P.P.N.
e) Finalmente, ante el recurso presentado por la defensa de K. contra el monto del embargo,
corresponde señalar que en el marco de la audiencia no se expusieron agravios en este sentido, por lo
que corresponde declarar desistida la impugnación a su respecto.
(…) expuestos el tribunal RESUELVE: I. CONFIRMAR parcialmente el auto de fs. (…) , en cuanto
decretó el procesamiento de M.A.K. y C.W.M. en orden al delito de lesiones culposas graves. II.
REVOCAR parcialmente el auto de fs. (…) -punto dispositivo 4-, y disponer el sobreseimiento de
E.S.C. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, Pinto, Divito. (Sec.: Poleri).


c. 730.078.357/11, KHOURY, Miguel A. otros
Rta.: 05/06/2015

Se citó: (1) Donna, Derecho Penal - Parte Especial, Rubinzal-Culzoni, Santa Fe, 1999, pag. 140 y
Maurach y Zip, Derecho Penal - Parte General, Astrea, Buenos Aires, 1994, pag. 495; citados en "El
delito de lesiones en el Código Penal", en Revista de Derecho Penal, Delitos contra las personas II,
Rubinzal - Culzoni, Santa Fe 2004, pag. 293 y 297 respectivamente.

MALVERSACIÓN DE CAUDALES PÚBLICOS.

Procesamiento por malversación de caudales públicos por equiparación. Imputada que en calidad de
depositaria judicial, no restituyó los objetos embargados, pese a la intimación cursada por parte del
juez comercial. Informe del oficial de justicia que corrobora lo sucedido. Elementos de prueba
suficientes. Confirmación.

Fallo: "(…) Interviene la Sala con motivo del recurso de apelación deducido por la defensa oficial
contra el auto de (fs. ...) que decretó el procesamiento de S. I. L. por considerarla autora del delito de
malversación de caudales equiparables a públicos. (...).
Se imputa a L. "haber substraído los siguientes bienes embargados, a saber: (...); sobre los que había
sido designada depositaria judicial (...), imponiéndosele las responsabilidades de la Ley, en el marco de
los autos N° (...). (...), con fecha 13 de marzo de 2014 concurrió el oficial de justicia al domicilio
mencionado, corroborando a través de un vecino que S. I. L. se había mudado junto con las
pertenencias descriptas".
(...). Entendemos que el plexo probatorio reunido en autos luce suficiente a fin de acreditar tanto la
materialidad del hecho endilgado como la intervención criminal que en ella le cupo a la imputada (art.
306 del CPPN). En ese sentido, se debe valorar la declaración brindada por la acusadora particular a
(fs. ...), quien manifestó que le inició un juicio ejecutivo a L.; que los bienes finalmente embargados
fueron entregados a la nombrada en calidad de depositaria judicial; que sin perjuicio de ello, cuando el
tribunal interviniente en ese proceso intentó diligenciar el correspondiente secuestro, no encontraron
nada en el domicilio (...). Finalmente afirmó que pese a las intimaciones que le cursara el juez
comercial, L. no restituyó los objetos embargados. Esa versión de lo ocurrido se ve ampliamente
corroborada con lo que surge del informe efectuado por el oficial de justicia que participara de aquella
medida y que se incorporara al expediente en cuestión, (...). Además, y a diferencia de lo manifestado
por L. en indagatoria, los propietarios del sitio que locara fueron contentes en afirmar que
efectivamente se llevó de allí todas sus pertenencias y que incluso ellos desconocían que L. fuera a
retirarse del lugar.
(...). De tal modo, estimamos que se ha arribado al estado de certeza positiva que requiere el
ordenamiento procesal a fin de habilitar el pase del asunto a instancias ulteriores, en las que podrán
debatirse en un ámbito de mayor amplitud las cuestiones articuladas por las partes. (...). En virtud de lo
expuesto el tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el auto de (fs. ...), en cuanto fue materia de recurso
(art. 455 del CPPN). (...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala I, Rimondi, Bunge Campos. (Sec.: Sosa).

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c. 47483/14, LOPEZ, Sandra Isabel.
Rta.: 05/05/2015

MEDIDAS CAUTELARES.

Inhabilitación provisoria para conducir todo tipo de automotores por el término de un año. Prudente y
razonable restricción para quien, en principio, ha sido imprudente en el uso del automotor y se
comporta sin tener en cuenta los valores salud y vida. Medida de carácter preventivo ante el resultado
luctuoso. Confirmación.

Fallo: "(…) III.- El Juez Julio Marcelo Lucini dijo: Es criterio del Tribunal que la restricción
cuestionada no implica una afectación a la garantía invocada por la parte ni a ninguna otra de rango
constitucional.
Si bien es cierto que no es necesaria para alcanzar los objetivos del proceso - averiguar la verdad y
neutralizar los riesgos procesales -, sí es aconsejable para asegurar un interés superior.
"La inhabilitación constituye una prudente restricción del derecho del imputado a conducir vehículos
automotores y no una pena anticipada. Se la debe tomar como una medida semejante a la del embargo
o a la prisión preventiva, que restringen anticipadamente derechos reconocidos pero que pueden ser
limitados en virtud de un interés superior. Se trata en definitiva de una prudente y razonable restricción
para quien, en principio, ha sido imprudente en el uso del automotor" (1).
Entonces, toda vez que guarda estricta vinculación con la conducta reprochada, corresponde convalidar
el auto de fs. (…) en todo cuanto fuera materia de recurso.
El Juez Mario Filozof dijo: La parte introdujo en audiencia la cuestión de razonabilidad por el tiempo
transcurrido entre el hecho y el dictado de la cautelar.
Ello, no había sido planteado en el recurso de apelación interpuesto (…), por lo que excedería a las
previsiones del artículo 454 del ritual.
Sin embargo, me permito agregar y, más allá del argumento del tiempo que puede generar una válida
crítica a la primera instancia, que la intención del legislador con la sanción del artículo 311 bis del
Código Procesal Penal de la Nación, fue la de prevenir los riesgos que pueda ocasionar quien se
comporta displicentemente con sus conciudadanos sin tener en cuenta los valores de salud y vida.
En el caso, no es menor el resultado luctuoso atribuido a (…) y la forma en la que sucedió el evento,
por lo que resulta lógico aplicar una medida de carácter preventivo cuyo fin es sin más, de acuerdo al
espíritu de la ley, la procura y el cuidado de la ciudadanía toda frente a quien, según este estadio
procesal, hubo de comportarse con imprudencia en el uso de su automotor en la vía pública.
En consecuencia, el Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el punto I del auto de fs. (…) en cuanto fue
materia de recurso de apelación. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini, Filozof. (Prosec.: Gallo).


c. 14.162/13, PALUMBO, Fabricio Leonel.
Rta.: 09/03/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correcc., Sala VI, c. 20435/2012, "Marín Godoy, Wilder Vicente", rta.:
8/10/2013.

MEDIDAS CAUTELARES.

Defensa que apela la inhibición general de bienes dispuesta. Imputado respecto del cual se ha dispuesto
su paradero y posterior comparendo hace un año y medio. Posible perjuicio o daño inminente que
transformará en tardío el eventual reconocimiento del derecho invocado como fundamento de la
pretensión. Medida que puede ser impuesta antes del procesamiento. Imputado que fue convocado en
indagatoria. Confirmación.

Fallo: "(…) Ya hemos sostenido en distintas ocasiones que el presupuesto básico para la procedencia
de la medidas cautelares es la convocatoria en los términos del artículo 294 del Código Procesal Penal.
En este sentido se dijo: "Excepcionalmente, y aún de oficio, el embargo puede ordenarse con
anterioridad al procesamiento, según autoriza el párrafo tercero. Mas no puede preceder, aún pese a la
ausencia de límites, a la convocatoria a indagatoria, porque se trata de un supuesto de excepción que,
como tal, exige cuanto menos que se den los presupuestos a que se refiere el art. 294 [CCC, Sala IV,
JPBA, 118-108-270; CCC, Sala V, LL, 2000-E-820; CCC, Sala VII, JA, 2002-IV, índice, 173], esto es
que el juez considere al embargado como sospechoso de haber participado en la comisión de un delito,
porque si los elementos de convicción no alcanzan para así estimarlo, quedará inexplicada la adopción
de una medida cautelar en contra de su patrimonio, que carecerá consecuentemente de justificación
lógica y jurídica" (1), lo que en este caso se ha visto satisfecho con el decreto de fs. (…).
La falta de materialización de tal acto de defensa está dada por la imposibilidad de dar con su paradero,
pese a que fue citado a todos los domicilios que constaban en el legajo.
Por otro lado, la circunstancia de que el decreto de citación en esos términos no fundamente la
convocatoria, de manera alguna impide la adopción de una medida como la cuestionada, pues ello
surge de las constancias agregadas al expediente y lo dictaminado por el Fiscal de Instrucción y por el

154
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

General de la Procuraduría de Criminalidad Económica y Lavado de Activos (PROCELAC) al requerir


la indagatoria.
En definitiva, la inhibición general de bienes decretada de forma previa al auto de procesamiento es
una facultad que otorga el artículo 518 al Juez, incluso de oficio, pues cualquiera sea la denominación
que se le otorgue responde a las facultades conferidas por el artículo 232 del Código Procesal Civil y
Comercial.
En estos casos sólo debe demostrarse la urgencia de las medidas cautelares se presenta cuando se da el
"periculum in mora", es decir cuando existe la posibilidad de que, en caso de no adoptarse, sobrevenga
un perjuicio o daño inminente que transformará en tardío el eventual reconocimiento del derecho
invocado como fundamento de la pretensión (2).
La tutela tiene lugar cuando pueden afectarse intereses particulares para comprobar la extensión del
posible daño causado (art. 193 inciso 5° del Código Procesal Penal).
De la lectura del sumario surge que (…) habría administrado desde su cuenta corriente nro. (…) del
Banco (…), destinada al cobro de sus haberes mensuales por su trabajo en relación de dependencia a
favor de "(…), dinero proveniente de desvíos efectuado por los integrantes de la sociedad y que
alcanzarían los $ (…).
Ahora bien, teniendo en cuenta que el proceso se encuentra reservado desde hace un año y medio (…),
debido a la imposibilidad de dar con el paradero del imputado y lograr su comparecencia al proceso,
entendemos que a los fines previstos por los artículos 23 y 305 del Código Penal, la medida cautelar
dispuesta luce acertada.
En consecuencia, el Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el auto de fs.
(…), en cuanto fue materia de recurso. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini, Filozof, Pinto. (Prosec.: Gallo).


c. 26.801/13, COOK, Alejandro M.
Rta.: 27/03/2015

Se citó: (1) Navarro-Daray, Código Procesal Penal de la Nación, tomo 2, pág. 1368, 2ª edición,
Hammurabi, 2006; C.N.Crim. y Correcc., Sala VI, c. 37.227, "Velázquez Rodríguez, F.", rta.:
11/6/2009; (2) Palacio, Lino Enrique, "Manual de Derecho Procesal Civil", Abeledo-Perrot, cuarta
edición, tomo II, pág.
273.

MEDIDAS CAUTELARES.

Anotación de litis. Imputadas que ya han sido indagadas. Momento procesal oportuno. Verosimilitud
del derecho pretendido por la querella y el peligro en la demora acreditado. Confirmación.

Fallo: "(…) II.-) Atento a que las imputadas han sido indagadas en los términos del art. 294 del Código
Procesal Penal (…), resulta acertado el momento procesal de anotación de litis, a efectos de dar a
publicidad el estado de litigio, en tato se verificó, cuanto menos, un grado de sospecha suficiente y no
la mera calidad de imputadas (1).
La herramienta procesal ordenada se sustenta en la necesidad de evitar que un pronunciamiento judicial
posterior, reconociendo el derecho de los interesados, llegue demasiado tarde (2).
En función de ello y por haberse acreditado la verosimilitud del derecho pretendido por la querella y el
peligro en la demora (ver fs. 2146), el Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el auto de fs. (…), en
cuanto ha sido materia de recurso. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini, Filozof, Pinto. (Sec.: Oberlander).


c. 49.842/10, MAIDANA, Graciela y otros.
Rta.: 14/05/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correcc., Sala VI, c. 759/2014, "Pequeño, José, rta.: 30/04/2015; (2) Arazi-
Rojas, Código Procesal Civil y Comercial de la Nación, Rubinzal-Culzoni, 2003, pág. 257.

MEDIDAS CAUTELARES.

Inhabilitación provisoria para conducir impuesta junto con el procesamiento por homicidio culposo.
Planteo de Inconstitucionalidad. Análisis que sólo debe ser abordado si corresponde aplicar la
imposición. Situación en la que no es necesario limitar el derecho a conducir.Revocación.

Fallo: "(...) IV. Del procesamiento: (...) V. De la inhabilitación: El juez Mauro A. Divito dijo: En
atención a la gravedad que, por regla, reviste una declaración de inconstitucionalidad respecto de una
norma sancionada por el Congreso de la Nación en el caso, el art.311 bis del ritual , considero que el
tratamiento de la cuestión sólo ha de abordarse si previamente se verifica que la imposición de la
medida inhabilitación preventiva resulta adecuada a la previsión legal atacada.
(...) cabe recordar que dicho precepto faculta al juez instructor a decretar tal interdicción pero no
impone su dictado, de modo que en definitiva aquélla sólo procederá si encuentra suficiente

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justificación a partir de las singularidades del caso, fundamentalmente porque importa una severa
restricción para los derechos del imputado que, por imperio de lo establecido en el artículo 2° del
código adjetivo, debe ser interpretada con criterio restrictivo.
(...) tratándose de una medida cautelar, el llamado principio de excepcionalidad conduce a la
interpretación restrictiva del precepto previsto en el artículo 311 bis del ritual, acotando sus alcances a
los supuestos en que las circunstancias concretas de la causa tornan indispensable acudir a la
interdicción, de modo que ésta se encuentre justificada por razones cautelares y no aparezca como un
adelanto de la sanción que eventualmente podría corresponder, lo que la pondría en contradicción con
el invocado principio de inocencia (art.18 C.N.).
Efectuada esta aclaración y teniendo particularmente en consideración que L. trabaja como conductor
de colectivos, de modo que la medida afectaría también su derecho a trabajar, y que el suceso
investigado ocurrió en julio de 2014, sin que se hubieran incorporado constancias referidas a alguna
inconducta posterior del imputado, estimo que en la actualidad no media necesidad alguna de disponer
la inhabilitación discernida.
En síntesis, si conforme lo establecido por el artículo 84 del Código Penal para el aquí inculpado la
pena de inhabilitación especial constituye una hipótesis de futuro en torno de la cual obviamente
ninguna certeza puede predicarse ahora, a falta de razones que demuestren la necesidad de limitar a
estas alturas el derecho de conducir del que aún goza, no procede su aplicación preventiva.
(...) considero que corresponde revocar la inhabilitación provisoria impuesta en la instancia anterior al
procesado y que, consecuentemente, se ha tornado abstracto el planteo de inconstitucionalidad del
artículo 311 bis del CPPN introducido.
Así voto.
La jueza Mirta López González dijo: En relación al planteo de inconstitucionalidad de la inhabilitación
temporaria dispuesta por el juez de la instancia anterior, si bien en ocasiones anteriores he sostenido
que era legítimo que el legislador restrinja provisoriamente el derecho de un ciudadano a conducir un
vehículo cuando los intereses superiores así lo justifiquen (ver en este sentido, C.C.C., Sala V, causa
N°36.918 "Stampone, Mauricio Ariel", rta.27/5/09), en este caso en particular considero que la
situación resulta diferente.
Ello es así por cuanto coincido con mi colega preopinante con respecto a que, desde que ha ocurrido el
suceso en el mes de julio de 2014 y hasta la disposición de la medida cautelar aquí impugnada (en el
mes de febrero del corriente año), no se han agregado constancias referidas a alguna inconducta
posterior del imputado, por lo que en la actualidad no resulta necesaria la imposición de la
inhabilitación atacada.
(...) adhiero a la solución propuesta por mi colega preopinante.
Así voto.
(...) el tribunal RESUELVE: I. CONFIRMAR el punto I del auto de fs. (...), en cuanto fuera materia de
recurso. II. REVOCAR el punto IV de esa decisión en cuanto dispuso la inhabilitación provisoria del
procesado".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, López González, Divito. (Sec.: Raña).


c. 43474/14, LOCIO, Adolfo Antonio.
Rta.: 15/05/2015

MEDIDAS CAUTELARES.

Imposición, en el auto de procesamiento, de abstenerse a ejecutar funciones en la P.F.A. con el empleo


o portación de armas. Normativa que resulta ser facultativa (art. 310 del C.P.P.N.). Necesidad de
aplicarla en forma restrictiva. Caso en el que no se justifica su aplicación. Revocación.

Fallo: "(…) II.- Respecto de la impugnación dirigida hacia la medida cautelar consistente en la
abstención del desarrollo de actividades funcionales en la Policía Federal Argentina que conlleven el
empleo de armas de fuego y la prohibición de portar armas a título personal en lugar público o de
acceso público y en condiciones de inmediato uso, cabe recordar que el artículo 310 del CPPN faculta
al juez a decretar este tipo de inhabilitaciones, mas no impone su dictado. Por ello, éstas sólo proceden
si encuentran suficiente justificación a partir de las singularidades del caso, fundamentalmente porque
importan una severa restricción para los derechos del imputado que, de conformidad con el artículo 2°
del código ceremonial, deben ser interpretadas con criterio restrictivo.
Al tratarse de una medida cautelar, el principio de excepcionalidad acota sus alcances a los supuestos
en que las circunstancias concretas de la causa tornan indispensable acudir a la interdicción, de modo
que ésta no aparezca como un adelanto de la sanción que -eventualmente- podría corresponder, lo que
la pondría en contradicción con el principio de inocencia (art. 18 CN).
(…) teniendo en cuenta que O. y C. prestan servicios como policías, circunstancia que evidencia que la
medida cuestionada afectaría también su derecho a trabajar, y que el suceso investigado ocurrió en
mayo de 2014, sin que se hubieran incorporado constancias referidas a inconductas posteriores de los
imputados, entendemos que -en la actualidad- no media necesidad de disponer las inhabilitaciones
adoptadas por el juez.
(…) como para los encausados la pena de inhabilitación especial constituye una hipótesis de futuro en
torno de la cual no puede predicarse certeza en esta instancia, al no vislumbrarse fundamentos que

156
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

demuestren la necesidad de limitar el derecho a desarrollar sus actividades laborales en la Policía


Federal Argentina, no procede su aplicación preventiva.
(…) la autoridad administrativa -la P.F.A.- puede restringir y/o prohibir la autorización para el uso de
armas en su actividad funcional. Por ello, tampoco se advierte que resulte necesaria la medida
dispuesta.
En tal sentido, corresponde revocar la medida cautelar impuesta en la instancia anterior a los
procesados.
IV.- Finalmente, en cuanto a los embargos ordenados, no consideramos que sean excesivos. Antes
bien, la cuantía dispuesta -$35.000- resulta adecuada a los fines de satisfacer las hipótesis previstas en
el artículo 518 del código de forma, tal como lo detalló el juzgador.
(…) el Tribunal RESUELVE: (…) REVOCAR el auto de fs. (…), puntos II y V, sólo en cuanto fue
materia de recurso".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, Pinto, Divito. (Sec.: Poleri).


c. 26.191/14, OSTAN, Marcelo A. y otro.
Rta.: 05/06/2015

MEDIDAS DE PRUEBA.

Magistrado que delegó en la querella la inspección de archivos de correo electrónico del imputado para
determinar si tenían determinados vocablos. Correo electrónico equiparable al epistolar.
Correspondencia privada. Tarea que incumbe sólo al juez. Vulneración al derecho de intimidad del
imputado y al secreto de las comunicaciones. Nulidad.

Fallo: "(…) La defensa recurrió en apelación la providencia documentada a fs. (…), segundo párrafo,
del principal (…), en cuanto se autorizó a la parte querellante a la compulsa de los correos electrónicos
que cuenten con los vocablos "B.", "F.", "F.", "P. N.", "L.", "L." y "T. H.".
Liminarmente, debe rechazarse la pretensión de la querella desarrollada en la audiencia oral, en el
sentido de que debía declararse la inadmisibilidad del recurso, con invocación de lo estatuido en el
artículo 199 del Código Procesal Penal, siempre que el agravio de la defensa ha fincado centralmente
en la violación de garantías constitucionales.
El señor juez de grado argumentó que dichos mails necesariamente resultarán de interés para la
investigación, previa aclaración, en el primer párrafo del mismo decreto, de que había suspendido la
tarea de lectura de los 17.543 archivos de correo electrónico que fueran extraídos del CPU secuestrado
en autos, debido a "que el Tribunal no dispone de personal que pueda abocarse exclusivamente a la
misma".
Cabe recordar que durante el año 2010 se practicó el registro de la residencia del imputado Jorge Rey
Iraola, ocasión en la que se incautó su computadora personal (CPU, …), respecto de la que se ordenó
posteriormente la realización de un peritaje "a fin de evaluar la existencia de intercambio de correo
electrónico que pueda resultar de interés para este sumario" (…), objeto que más adelante se amplió en
punto a la recolección de "todos aquellos archivos (que no sean correo privado…), que arrojen un
resultado de búsqueda favorable a los parámetros precisados a fs. …" (…).
La medida se realizó por intermedio del Cabo 1° S. J. A., de la División Apoyo Tecnológico Judicial
de la Policía Federal, juntamente con los peritos de parte, G. D. P. y D. A. P., por la querella y la
defensa, respectivamente; quienes asentaron en su informe técnico que realizaron un filtrado de
archivos de correo electrónico, que resguardaron en un disco óptico (…), a cuya apertura procedió
posteriormente el juez de grado -con la colaboración del perito de oficio y en presencia del señor
secretario-, ocasión en la que se determinó que la información contenida en el disco consta de 17.543
archivos de correo electrónico (…).
Si bien de acuerdo con la constancia luciente a fs. (…), el señor juez dio comienzo a la tarea de lectura
de los correos -a fs. (…) aclaró que ello se haría en los días sucesivos-, para la cual limitó aún más los
parámetros de búsqueda del modo que fuera propuesto por la querella -previa conversión de los
archivos, a tal efecto, al programa "Microsoft Outlook", conf. Fs. (…)-, finalmente la suspendió por el
motivo reseñado al comienzo, mas sin determinar cuántos son los mails que, concretamente, contienen
las voces elegidas -al menos, no surge ese dato del expediente-.
Cabe señalar que "el correo electrónico, en tanto se trata de un medio que amplía la gama de
posibilidades que brindaba el correo tradicional, resulta equiparable al epistolar. De ahí que se haya
entendido que el correo electrónico es correspondencia privada que protege la Constitución Nacional y
los tratados sobre derechos humanos incorporados a ella. En ese sentido y a partir de sus características
propias, goza de una privacidad más acentuada que la clásica vía postal, desde que para su
funcionamiento y utilización se requiere indispensablemente de un prestador del servicio, el nombre de
usuario y clave de acceso destinados, sin duda alguna, a impedir que terceros extraños se entrometan
en los datos y contenidos que se emiten y reciben" (1).
En ese mismo orden también se ha puntualizado que "la libertad de comunicación es puesta en peligro
no sólo cuando se interfiere o vigila la comunicación misma [momento de la recolección de datos…],
sino también cuando estos datos obtenidos son utilizados para algún fin [momento de la utilización], y
también cuando estos datos se conservan u organizan para algún uso futuro [momento de la
conservación, almacenamiento o tratamiento de datos]…" (2).

157
Así y en tanto correspondencia, adversamente al discernimiento alcanzado en la providencia apelada, la
inspección del contenido de los correos electrónicos interceptados constituye una tarea que, conforme a
la literalidad de la manda contenida en el artículo 235 del Código Procesal Penal, incumbe sólo al juez
(3).
En la misma línea, en un caso en que la defensa de los imputados cuestionó que la prevención, sin
orden judicial y en extralimitación de sus funciones (artículos 182 y 185 del canon ritual), obtuvo parte
del contenido del correo privado de aquellos, del que había tomado conocimiento y utilizado para dar
inicio a un proceso penal, la Sala I de esta Cámara resolvió hacer lugar al planteo de nulidad,
argumentando, entre otras cuestiones, que "los mismos principios que han hecho del domicilio un lugar
inviolable para los poderes públicos y que son una de las bases del sistema republicano rigen para la
correspondencia, [y] también para el correo electrónico. La exigencia de orden judicial para su
intervención sólo tendría un límite en los casos de urgencia en donde se podría intervenir la
comunicación, pero debería su contenido ser analizado por el juez de la causa (…) Además este tema
tiene su regulación en el propio Código Procesal Penal arts. 235 y 236 (…) La razón de esta exigencia
ya fue vista por los procesalistas y tiende a evitar que se conozca el contenido del correo con otros
fines que no sean la investigación sobre hechos delictivos" (4).
Con esos parámetros, este Tribunal valora que en el caso del sub examen, el requisito de judicialidad
de la inspección epistolar no puede ser válidamente zanjado, sin vulnerar el derecho a la intimidad del
imputado y al secreto de las comunicaciones, mediante el acceso de la querella -aun con la limitación
apuntada- a aquellos mails que contengan los vocablos que el magistrado ha estimado relacionados con
el proceso.
Ello, en rigor, constituye una preselección -para la que correctamente puede acudirse a la herramienta
informática de utilización de parámetros de búsqueda- del material íntegramente obtenido con el
peritaje, mas no suple el examen del contenido que, mediante su lectura, debe hacer primero el juez, de
modo de garantizar la conservación del secreto de la correspondencia privada si no hubiese relación
entre ésta y los hechos investigados.
Lo expuesto encuentra parangón en lo resuelto por el propio señor juez a quo al declarar, en la
resolución extendida a fs. (…) del principal, la nulidad del proceso de copiado de la información, que
fuera ordenado por el señor fiscal, que obraba en el interior del CPU secuestrado, por vulnerar el
debido proceso y el derecho de defensa en juicio.
En consecuencia, resulta procedente la nulidad invocada por la parte recurrente (artículos 18 de la
Constitución Nacional y 166, 167, inciso 2°, 172 y 235 del Código Procesal Penal).
Por ello, esta Sala RESUELVE: DECLARAR la nulidad de la providencia documentada a fs. (…),
segundo párrafo, del principal, en cuanto se autorizó a la parte querellante a la compulsa de los correos
electrónicos que cuenten con los vocablos que allí se detallaron, sin inspección judicial previa de su
contenido".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Divito, Cicciaro, Scotto. (Prosec. Ad Hoc.: Sposetti).
c. 31.152/10, REY IRAOLA, Jorge.
Rta.: 09/06/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correc., Sala VII, c. 33.649, "Falik, Flavia Débora", rta: 07/04/2008. (2)
C.N.Crim. y Correc., Sala VII, c. 35.369, "Abreu, Carlos Alejandro", rta: 09/10/2008; Luis García, La
vigilancia de las telecomunicaciones y otras comunicaciones interpersonales según la jurisprudencia
elaborada en torno al Código Procesal Penal de la Nación, Garantías constitucionales en la
investigación penal. Un estudio crítico de la jurisprudencia, Florencia Plazas y Luciano Hazan,
compiladores, Editores del Puerto, Bs. As., 2006, p. 310. (3) Francisco J. D'Albora, Código Procesal
Penal de la Nación. Anotado, Comentado, Concordado, Abeledo Perrot, Bs. As., 2009, p. 417; C.F. La
Plata, Sala II, ED 131-168, f. 41.235, rta: 04/10/1988 y C.F. Capital, Sala II, ED 131-177, f. 41.237,
rta: 06/10/1988. (4) C.N.Crim. y Correc., Sala I, c. 20.009, "Yelma, Martín y otros", rta: 22/04/2003.

MEDIDAS DE PRUEBA

Nulidad rechazada. Obtención de fotografías al imputado luego de recibirle declaración indagatoria


pese a su oposición. Imputado que es objeto de prueba. Ausencia de violación al derecho de defensa en
juicio y a la garantía constitucional que prohíbe la autoincriminación compulsiva. Validez.
Confirmación.

Fallo: "(…) Se plantea la nulidad de la obtención de vistas fotográficas del imputado tras recibirle
declaración indagatoria, por cuanto existió oposición expresa para ello, afectándose así el ejercicio del
derecho de defensa. Ahora bien, tal diligencia se concretó a pedido de la fiscalía, con la intervención de
la División Fotografía de la Policía Federal Argentina, a efectos de cotejar la apariencia de S. con la del
sujeto que había sido filmado por las cámaras de seguridad ubicadas en el interior de la sucursal nº …
del Banco Francés, donde se llevó a cabo la extracción ilícita de dinero.
La medida se ha producido, entonces, en el marco del proceso en curso y persiguiendo el fin de
averiguación de la verdad, dentro de los límites constitucionales. En punto a ello, es dable remarcar que
la diligencia es de aquellas en las que el imputado resulta objeto de prueba, siendo su oposición
irrelevante.

158
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

En ese aspecto, la doctrina ha señalado que "La producción de la prueba, como la pericial que pueda
decretar el órgano jurisdiccional, no puede ser eludida por el imputado, que está obligado a someterse a
su realización (deber de tolerancia), porque en tal caso su actuación no será en calidad de sujeto de la
relación procesal sino como objeto de prueba en el proceso, dado que "no es únicamente sujeto del
proceso, esto es interviniente en el procedimiento con derechos procesales autónomos… sino, también,
medio de prueba…" (1).
Si éste ha sido el entendimiento del Tribunal frente a la extracción compulsiva de muestras hemáticas
al imputado, medida que, dada su naturaleza invasiva, exige además debida fundamentación (2), más
aún se impone dicho criterio en el caso que nos ocupa que refiere únicamente a una placa fotográfica.
En línea con lo anterior, se descarta alguna infracción a la garantía que prohíbe la autoincriminación
forzada, ya que no se ha compelido al encausado a brindar ninguna información que luego se utilizara
en su contra. En esta línea, se ha sostenido que dicha salvaguarda constitucional, conforme a la cual
nadie puede ser obligado a declarar contra sí mismo (art. 18 de la CN y art. 184 del CPPN), debe ser
entendida como "proscripción de todo método o técnica que, antes o durante el proceso, y ante
cualquier autoridad -sea administrativa o judicial-, tienda a obtener por coacción física, psíquica o
moral, una declaración o confesión de un habitante de la Nación Argentina" (3), extremos que no se
evidencian en el caso traído a estudio del Tribunal.
Cabe recordar que la nulidad es de carácter excepcional, debiendo primar los principios de
conservación y trascendencia de los actos procesales, de manera que su dictado sólo resulta procedente
de advertirse algún vicio sustancial o la afectación de garantías constitucionales (4), siendo que
ninguno de tales extremos, por los motivos desarrollados precedentemente, concurren en la especie.
En consecuencia, esta Sala RESUELVE: CONFIRMAR la resolución de (fs. …), en cuanto fue materia
de recurso. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala IV, Seijas, González Palazzo, González. (Prosec.Cám.: Godnjavec).
c. 17.101/14/2, SCARCELLA, Gabiel A.
Rta.: 15/05/2015

Se citó: (1) Navarro, Guillermo Rafael y Daray, Roberto Raúl, Código Procesal Penal de la Nación,
editorial Hammurabi, edición Buenos Aires, año 2004, pág. 540. (2) C.N.Crim. y Correc., Sala IV, c.
30.386 "Chalom", rta. 30/3/07. (3) C.F.C.P.; Sala III; "Gastaldi"; c. 1394; rta. 23/6/98; C.N.Crim. y
Correc., Sala IV, c. 31.597 "Vigo López", rta. 22/5/07 y c. 50.166/11/3 "Pezzutti" rta. 21/3/14. 4)
C.N.Crim. y Correc., Sala IV, c. 1739/11, "Zurita", rta. 22/11/11; c. 699/11, "Pascual", rta. 2/06/11 y
1348/10 "Sánchez", rta. 15/10/10.

MEDIDAS DE PRUEBA.

Nulidad rechazada. Reconocimiento fotográfico efectuado durante la declaración del damnificado.


Reconocimiento impropio. Manifestación informal de conocimiento. Confirmación.

Fallo: “(…) II.- (…) relató que a partir de la patente de la moto que intervino en el hecho averiguó los
datos de su titular y lo buscó en la página de Internet “Facebook”, reconociendo así a su agresor en el
sujeto que luce en las fotografías del perfil de (…).
Ello determinó que el fiscal le reciba un nuevo testimonio, acto en el cual accedió a esa página y
obtuvo las imágenes del imputado (…).
“Tanto la jurisprudencia como la doctrina han considerado válidos los reconocimientos “impropios”
integrativos de las declaraciones testimoniales oportunamente brindadas ya que ellos resultan actos
informativos encaminados a consolidar el presupuesto y a valorar la credibilidad de aquel elemento de
prueba (…) El reconocimiento impropio a través del cual se invita a la víctima para que indique si se
encuentra o no la persona por ella mencionada no debe confundirse con la prueba de reconocimiento ya
que se trata de una simple manifestación informal de conocimiento” (1).
Por eso la medida se diferencia de la prevista en el artículo 274 del Código Procesal Penal de la
Nación. Es una simple manifestación informal de conocimiento y, en consecuencia, no se aplican las
reglas contenidas en su artículo 270 y siguientes (1).
Por lo expuesto, no advierte ninguna afectación a las garantías constitucionales del imputado.
Por otra parte, que el juez haya dejado sin efecto el reconocimiento en rueda de personas, ordenado por
el fiscal, en modo alguno afecta la validez del acto atacado ni los derechos de Arrambide, sino que
refiere a planteos de neto corte probatorio que serán tratados en la impugnación deducida en el
principal.
En consecuencia, el Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el decisorio de fs. (…), en cuanto ha sido
materia de recurso, CON COSTAS (artículos 530 y 531 del ceremonial). (…)”.

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini, Filozof. (Sec.: Williams).


c. 520.062.850/12, ARRAMBIDE, Facundo.
Rta.: 02/06/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correcc., Sala VI, c. 43086, “Bermudez, Damián Esteban”, rta.: 15/02/12.

159
MENOR

Externación rechazada. Constancias incorporadas al expediente que desaconsejan la internación ya que


el menor cuenta con un proyecto de vida y un círculo familiar que le brindará contención (Ley 26.061 y
artículo 3.1 de la Convención sobre los Derechos del Niño). Revocación. Externación.

Fallo: "(...) El tribunal considera que las constancias incorporadas al expediente tutelar con
posterioridad al temperamento provisorio adoptado por la a quo desaconsejan la actual internación del
menor H. M. L. M., motivo por el cual el auto traído a estudio será revocado.
Si bien no deben perderse de vista las graves características del hecho que se le reprocha, en orden al
cual ya se ha requerido la elevación a juicio y decretado la clausura de instrucción (fs. ... y ... del
principal), cierto es que el niño se halla alojado en el Centro de Régimen Cerrado San Martín desde el
2 de febrero, siendo ésta su primer internación en un instituto, y a la fecha ya se ha realizado un
exhaustivo seguimiento por parte de las asistentes tutelares y de los profesionales del lugar,
aconsejando éstos su externación.
Así, surge de los diversos informes de la causa que previo a verse involucrado en este suceso el joven
L. se encontraba trabajando en un local de comidas, se domiciliaba en una finca junto a su padre, la
pareja de éste, sus medio hermanos, su compañera L. C. y la hija de ambos. Con éstas compartía una
habitación y colaboraba en el cuidado y manutención de la niña.
Se desprende también que el nombrado finalizó sus estudios primarios en diciembre de 2014 (fs. ...) y
que junto a su pareja estaban gestionando el ingreso a un secundario para continuar ambos sus estudios.
Tampoco puede soslayarse que desde el inicio de estos actuados tanto su progenitor como la señorita
C. se presentaron en varias oportunidades ante la defensoría y el juzgado, lo visitan en el instituto y se
han comprometido a contener a L. y procurar que cumpla con las pautas fijadas por el tribunal, en caso
de que recupere su libertad.
Por otra parte, valoramos la opinión de los profesionales encargados de su seguimiento. Así, del
informe de situación de (fs. ...) efectuado por el equipo de intervención del centro donde se aloja, surge
que el padre y la pareja del joven "demuestran actitudes de afecto, preocupación y gran compromiso
para acompañar al joven en su retorno al hogar familiar" y se sugirió "el egreso de M. bajo la
responsabilidad del Sr. L. con la indicación de residir en el domicilio familiar, retomar la escolaridad
del ciclo lectivo (…) y asistir a la fundación J. junto con su pareja e hija".
Por su lado, la asistente tutelar del Juzgado interviniente, Licenciada Rosario Truchuelo, si bien en un
principio sostuvo que el progenitor intentó "minimizar la problemática" cierto es que también señaló
que con sólo una entrevista no se podía evaluar la capacidad del Sr. L. para hacer valer su autoridad.
Posteriormente, la misma profesional a (fs. ...) concluyó que el niño "cuenta con un medio familiar que
le brindará cierta contención" a la vez que manifestó, entre otras cosas, que su adaptación en el centro
era buena, que participaba de talleres y actividades, respetaba normas, tenía buena relación con los
adultos y que acepta límites.
Cabe recordar que la Ley n° 26.061 autoriza, teniendo en cuenta las características especiales de cada
caso, a mantener la internación de un menor siempre y cuando dicha medida tenga como finalidad
preservar y restituir sus derechos y el fortalecimiento de sus vínculos familiares. Tal supuesto no se
verifica en el caso que nos ocupa, pues las constancias antes señaladas permiten concluir que L. M.
cuenta con un proyecto de vida y un círculo familiar que le brindará contención, por lo que su egreso
luce adecuado a los fines de garantizar el cumplimiento efectivo de sus derechos, en miras al "Interés
Superior del Niño" (artículo 3.1 de la Convención sobre los Derechos del Niño) Por ello, habremos de
revocar el auto en crisis y disponer la externación de L. M. bajo el compromiso de cumplir con las
pautas indicadas por los profesionales del Centro de Régimen Cerrado "San Martín" señaladas
precedentemente.
Así, se RESUELVE: Revocar la resolución de (fs. ...), y disponer la externación de H. M. L. M., bajo
responsabilidad de su progenitor, cuyo seguimiento estará a cargo de las delegadas inspectoras, bajo
compromiso de residir en el domicilio familiar, retomar la escolaridad y asistir a la Fundación J. junto a
su pareja e hija, debiendo la juez de grado librar oficio al D.I.N.A.I. a los fines explicitados a fs. 48, sin
perjuicio de cualquier otra medida que estime corresponder.
(...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala IV, González, Pociello ARgerich. (Sec.: Uhrlandt).


c. 5.730/15, L. M., H. M.
Rta.: 25/03/2015

MENOR.

Víctima que denuncia en solitario un hecho de violencia familiar en la comisaría, pero luego no
concurre a la Oficina de Violencia Doméstica y a la fiscalía. Magistrado que omitió dar intervención a
la Defensora de Menores e Incapaces (Infracción al Art. 54 de la Ley Orgánica del Ministerio Público).
Notificación posterior al sobreseimiento de los imputados. Violación a las previsiones de los artículos
24 y 27 de la ley 26.061 y 17 de la ley 114 de la Ciudad de Buenos Aires. Nulidad del procedimiento

160
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

desde que el magistrado recibió la causa y no dio oportuna intervención a la Defensoría de Menores e
Incapaces.

Fallo: "(…) II. Conforme lo dispone expresamente el art. 337 del CPPN, el sobreseimiento puede ser
recurrido por el Ministerio Público Fiscal y la parte querellante. Cuando no se hubiere observado el
orden que establece el art. 336 del mismo ordenamiento o se imponga una medida de seguridad,
también podrá serlo por el imputado y su defensa.
En función de ello, el recurso deducido por la Defensora Pública de Menores e Incapaces -que, en el
caso, no se ha constituido como parte querellante-, no puede prosperar.
Ello, claro está, sin perjuicio de la legitimación que en virtud de lo establecido por el art. 59 del Código
Civil cabría reconocerle a efectos de impugnar otro tipo de resoluciones judiciales que afecten los
intereses del menor que representa y le ocasionen gravamen irreparable en los términos del art. 449 del
CPPN (1). siempre que sean ajenas a la pretensión punitiva.
III. (…) se advierte que no se ha dado debida intervención a la recurrente en el trámite del expediente
principal que corre por cuerda, desatendiendo lo normado por el art. 54 de la Ley Orgánica del
Ministerio Público (ley 24.946), que establece que los Defensores Públicos de Menores e Incapaces
deben intervenir "en todo asunto judicial o extrajudicial que afecte la persona o bienes de los menores
o incapaces" (2) (…) de las constancias del principal se desprende que recién se notificó a ese órgano,
una vez dictado el auto de sobreseimiento de los imputados (cfr. fs….).
(…) estamos frente a un supuesto donde una niña de dieciséis años se presentó ante la Seccional 46° y
denunció un hecho del que habría sido víctima por parte de familiares que vivían con ella, pero cuando
la Oficina de Violencia Doméstica y la fiscalía procuraron tomar contacto con ella, ésta manifestó que
no tenía intención de concurrir, de modo que sólo pudieron comunicarse vía telefónica. Además,
corresponde aclarar que a partir del inicio de estas actuaciones, ella se trasladó al hogar "N. V." -ver fs.
(…)-.
(…) se advierte que no se le dio a la defensoría de menores oportunidad de entrevistarse con la niña
para evaluar su situación; circunstancia que afectó su defensa en juicio, sin garantizarse su acceso a una
tutela efectiva.
(…) estimamos que la omisión de dar intervención del Defensor de Menores e Incapaces en el asunto
en tiempo oportuno, en detrimento del derecho de la niña a ser oída, reconocido en los artículos 24 y 27
de la ley nacional 26.061 y 17 de la ley 114 de la Ciudad de Buenos Aires, acarrea, indefectiblemente,
la nulidad del procedimiento a partir de fs. (…), cuando recibió la causa el juez y decidió delegarla en
los términos del artículo 196 CPPN y todo lo actuado en consecuencia.
Cabe destacar la postura de nuestro máximo Tribunal en Fallos 333:1152, donde declaró la nulidad de
las resoluciones dictadas en la causa sin la participación previa del Ministerio Pupilar.
Ello, en atención a que "Conforme lo dispuesto en los artículos 59, 493, 494 y 54 de la Ley Orgánica
del Ministerio Público 24.946, el Defensor de Menores es parte esencial y legítima en todo asunto
judicial o extrajudicial en el que intervenga un menor de edad, e incluso puede deducir las acciones y
adoptar las medidas que sean necesarias para su mejor defensa en juicio, bajo pena de nulidad de todo
acto que hubiere lugar sin su participación".
el tribunal RESUELVE: Declarar la nulidad de fs. (…) del expediente principal y todo lo actuado en
consecuencia (art. 168 del CPPN)".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, López González, Pinto. (Sec.: Roldán).


c. 26687/14, L., M. y otro.
Rta.: 26/05/2015

Se citó: (1) C.N.C.C, Sala IV, c.n° 2026, "M.", del 9/02/09 (2) (en este sentido, C.N.C.P., c.n° 14.373,
"F.", del 8/11/11.

MENOR.

Externación rechazada. Agravio de la defensa: Menor que no se encuentra en situación de desamparo


con contención materna. No registro de intervenciones institucionales previas ni antecedentes penales.
Núcleo familiar de contención. Escolarización regular y acreditación de práctica deportiva. Inexistencia
de situación de vulnerabilidad que imponga la necesidad de su internación en salvaguarda de su interés
superior (arts. 3 y 37 de la Convención sobre los Derechos del Niño). Revocación. Egreso. Disposición
de que se le brinde un tratamiento para evitar el consumo de sustancias psicoactivas, con la
colaboración del equipo interdisciplinario del juzgado interviniente.

Fallo: "(…) IV. Entendemos que la decisión en cuestión debe ser revocada.
En primer lugar, advertimos que el nombrado no registra intervenciones institucionales previas, ni
conflicto alguno con la ley penal juvenil (ver informes de fs….) (…) su madre ha concurrido en varias
oportunidades tanto a la sede del juzgado, como al instituto donde el menor se halla alojado e inclusive
ha solicitado que retorne a su hogar, habida cuenta que su hijo padece de "asma" (ver fs…),
acompañando un certificado médico que comprueba lo expuesto (ver fs…). (…) cuenta con un núcleo
familiar de contención, ya que residiría junto a su madre y padrastro en una vivienda situada en el
barrio de San Cristóbal (…).

161
(…) se encuentra agregada una copia de la constancia de alumno regular, que daría cuenta que el niño
cursa tercer año en la escuela "Joaquín V. González" y a fs. (…) luce una nota que acredita que es
integrante del Equipo de Lucha Olímpica del Club Atlético Boca Juniors desde el año 2008.
Resulta relevante el informe de situación elaborado por el Centro de Admisión y Derivación del
instituto "Úrsula Llona de Inchausti", en el cual se destacó que el joven hizo referencia al consumo de
sustancias psicoactivas, vinculado a la pertenencia a un grupo barrial con sus pares. No se hizo
referencia a la necesidad de algún tipo de tratamiento en algún instituto de régimen cerrado, como el
sitio en donde se halla actualmente G.M. y se consideró apropiado que fuera derivado al dispositivo de
Supervisión y Monitoreo de Jóvenes en el ámbito socio-comunitario (ver fs. …).
Nótese también que la Licenciada Ana María Laico refirió a fs.(…) que se trata de un joven tranquilo,
respetuoso, que reflexiona sobre su situación judicial actual y manifiesta su disposición para estudiar y
realizar un tratamiento psicológico al egreso del instituto.
Por lo tanto, se advierte que el nombrado no se encuentra en una situación de vulnerabilidad que
imponga la necesidad de su internación en salvaguarda de su interés superior (arts. 3 y 37 de la
Convención sobre los Derechos del Niño), razón por la que se dispondrá el egreso del "Instituto
Manuel Rocca" en el que se encuentra alojado.
(…) luce pertinente que se le brinde un adecuado tratamiento con respecto a su adicción a las
sustancias psicoactivas, con la colaboración del equipo interdisciplinario del juzgado interviniente.
(…) el tribunal RESUELVE: I. REVOCAR el auto de fs. (…) y disponer el egreso de (…)".
II. Dar cumplimiento a lo dispuesto en el punto V de los considerandos".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, López González, Pinto (en disidencia), Divito. (Prosec. Cám.: Daray)
c. 30.568/15/1, A., E.
Rta.: 10/06/2015

MUERTE POR CAUSA DUDOSA

Archivo. Querella que recurre. Resolución prematura. Necesidad de ordenar una pericia médica
tendiente a determinar si el tratamiento posterior al acto quirúrgico fue o no el adecuado. Revocación.

Fallo: "(...) La impugnante cuestionó la decisión adoptada argumentando que resulta prematura en
tanto los puntos de pericia conforme a los cuales se expidieron los facultativos del Cuerpo Médico
Forense resultarían insuficientes. En ese sentido, fundamentó las razones por las que entendía necesaria
su ampliación y propuso seis nuevos interrogantes, basándose para ello en el informe presentado por el
Dr. M. F., perito designado por esa parte (ver fs. ...).
Compulsadas las constancias de la causa, entendemos que la medida propuesta resulta conducente para
agotar la pesquisa, por cuanto si bien la querella no cuestiona el acto quirúrgico en sí, objeta aspectos
relativos al tratamiento posterior de C. A.
G. que estima debe evaluarse a la luz de sus patologías preexistentes y la apnea severa obstructiva que
motivó su intervención, extremos sobre los que no fueron preguntados concretamente los expertos.
En esa línea, señalan que debe esclarecerse si un control y monitoreo permanente con aparatología
específica, sea en la Unidad de Terapia Intensiva o Intermedia, hubiera permitido detectar y en su caso
tratar el cuadro de congestión y edema pulmonar que derivó en la dilatación cardíaca que finalmente
produjo su muerte (ver conclusiones de la autopsia de fs. ... y del peritaje de fs. ...).
Por ello, hasta tanto se realice la diligencia referida, el tribunal RESUELVE: Revocar el auto de fs. de
fs. (...), con los alcances que surgen de la presente. (...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala IV, Seijas, González Palazzo. (Sec.: Uhrlandt).


c. 27.696/13, N.N. Den. LAGISNESTRA, Maria del Carmen.
Rta.: 04/03/2015

NOTIFICACIONES ELECTRÓNICAS.

Planteo de inconstitucionalidad rechazado por parte del querellante respecto de la Acordada de la


CSJN nro. 38/13. Legitimación a la CSJN a reglamentar el uso de comunicaciones y domicilios
electrónicos (ley 26.685). Cuestionamiento que no señala el perjuicio concreto y actual. Confirmación.

Fallo: "(…) II. A contrario de lo sostenido por el recurrente, la Acordada nº 38/13 (y sus vinculadas
31/11, 3/12, 29/12, 14/13 y 15/13) fueron dictadas de conformidad con las facultades que le otorga la
Constitución Nacional a la Corte Suprema de Justicia de la Nación, con el fin de afianzar la justicia.
En esta dirección, mediante la ley 26.685 el poder legislativo facultó a la CSJN -conjuntamente con el
Consejo de la Magistratura de la Nación- a reglamentar la utilización de las comunicaciones
electrónicas y domicilios electrónicos constituidos en todos los procesos judiciales, con idéntica
eficacia jurídica que sus equivalentes convencionales.
Por otra parte, y en concordancia con lo señalado por la jueza de la instancia anterior, el Dr. T. no ha
señalado cuál es el perjuicio concreto y actual que le ocasionan las disposiciones que se desprenden de
la Acordada en cuestión.
(…) el tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el auto de fs. (…)".

162
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

C.N.Crim. y Correc., Sala V, Pinto, Divito. (Sec.: Poleri).


c. 21.862/13/4, TORRE, Hugo M.
Rta.: 13/04/2015

NULIDAD

Rechazada de la clausura de la instrucción y de la elevación a juicio. Posible violación a la garantía del


proceso. Defensa que había planteado la incapacidad sobreviniente (art. 77 del C.P.P.N.) del imputado.
Informe médico que da cuenta que las facultades mentales del imputado no encuadran dentro de la
normalidad. Necesidad de que el magistrado se expida. Revocación. Nulidad.

Fallo: "(…) II. La Dra. S. M., mediante la presentación de "(fs. …)" planteó la nulidad de "(fs. …)" del
expediente principal que decretó la clausura de la instrucción y su consecuente elevación a juicio por
cuanto se han visto conculcados los derechos a los que alude el inc. 3 del art. 167 del Código Procesal
Penal.
Consideró que se vió afectada la intervención del imputado en el proceso ya que no pudo controlar los
actos que lo integran.
Indicó que el Sr. juez de grado clausuró la instrucción, pese a que se había solicitado, en virtud de las
conclusiones a las que llegara el Dr. L. en el informe médico de "(fs. …)", la suspensión del trámite de
la causa en los términos del art. 77 del Código Procesal Penal, lo que implicaría la imposibilidad de
llevar a cabo medidas probatorias y, por lo tanto, la capacidad de ejercer su derecho de defensa se
encuentra seriamente disminuida por haberse ordenado la remisión de las actuaciones a Tribunal Oral
con un imputado sin capacidad psíquica para estar en juicio.
Contrariamente a lo esbozado por la recurrente, el Sr. juez de grado indicó que la norma invocada
impedirá determinados actos para los cuales es indispensable la presencia de aquel, principalmente la
declaración indagatoria o su comparecencia al juicio, según el momento que se ordene.
Y justamente, es el debate lo que se vería impedido de concretar si C. A. M. continúa incapacitado.
Por otro lado, señaló que tampoco se vislumbra en el legajo que se haya visto conculcado el derecho de
defensa de M. y que desde el inicio de las actuaciones aquel contó con la asistencia técnica de la Dra.
S. M. que ha intervenido en todas las etapas de la investigación.
Por ello, no se vislumbra acto procesal que haya vulnerado norma alguna del ordenamiento adjetivo, ni
incurrido en los supuestos de nulidad expresamente establecidos por éste; Ergo no existió el agravio
invocado por la parte.
Análisis del caso: Del sumario se desprende que al notificar a la defensa del imputado sobre las
conclusiones del requerimiento de elevación a juicio en los términos del art. 349 del Código Procesal
Penal de la Nación "(cfr. fs. …), el Sr. juez de grado ya contaba con el informe médico remitido por el
Cuerpo Médico Forense de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, del cual se desprendía que las
facultades mentales de C. A. V., no encuadraban dentro de la normalidad, por lo que no contaba con
capacidad mental actual para ser sometido a proceso judicial "(cfr. fs. …)".
Entonces, puede concluirse que la posibilidad de ejercer el derecho de defensa del imputado se
encuentra limitado.
Concretamente, la circunstancia dada en el caso -incapacidad mental-, le impide comunicarse en forma
eficaz con su defensa y comprender el contenido del proceso, y eventualmente participar activamente.
Máxime si se tiene en cuenta que las garantías no solo deben resguardarse ante una declaración
indagatoria o en el juicio, sino a lo largo del procedimiento (art. 167, inc. 3 del CPPN).
En la etapa intermedia de la investigación, en donde la defensa puede oponerse, o deducir excepciones
-art. 349 del ritual- el imputado debe encontrarse en condiciones psíquicas de actuar adecuadamente.
Su afección médica se lo impide por lo cual no puede aceptarse la postura del Sr. Juez.
Mas allá de ello, el art. 77 del Código Procesal Penal de la Nación refiere que deberá suspenderse el
trámite de la causa cuando sobreviniera la incapacidad mental del imputado, y nada se ha expresado
sobre el asunto pese a que los médicos así lo dejaran plasmado el 16 de octubre de 2014 "(cfr. fs. …)".
El Sr. juez tampoco se expidió pese a que la sala V de ésta Excma. Cámara, así lo ordenara el 29 de
diciembre de 2014 "(ver fs. … del incidente de reposición de la causa 31121-13-3-2 que corre por
cuerda).
Por lo tanto, habremos de declarar la nulidad del auto que dispone la clausura del sumario, su elevación
a juicio dispuesta el 13 de noviembre de 2014, debiendo el Sr. juez de instrucción pronunciarse sobre el
pedido la defensa.
Por todo lo expuesto el tribunal RESUELVE: DECLARAR LA NULIDAD del auto que dispone la
clausura del sumario y la elevación a juicio de las actuaciones dispuesta el 13 de noviembre de 2014,
debiendo el Sr. juez de instrucción expedirse sobre el pedido de suspensión del proceso requerido por
la defensa. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala de Feria B, Pinto, Lucini. (Prosec. Cám.: Castrillón).


c. 54.971/14/4, MARQUEZ, Cristian A.
Rta.: 08/01/2015

163
NULIDAD.

Rechazada. Contra el requerimiento de elevación a juicio por haberse omitido el pedido por parte del
imputado de ser oído en declaración indagatoria. Afectación a la intervención del imputado en el
proceso (art. 167 inciso 3°, C.P.P.N.). Revocación. Nulidad.

Fallo: "(…) habrá de revocarse el auto de fs. (…) y, en consecuencia, se declarará la nulidad del
requerimiento de elevación a juicio glosado a fs. (…). (…) tal como ha expresado el recurrente, el
tribunal de grado no dio respuesta alguna al petitorio de fs. (…), impidiéndole de ese modo al imputado
y a su letrado cuestionar su decisorio mediante la vía recursiva pertinente, en detrimento del debido
proceso legal y del derecho de defensa en juicio, en virtud de los cuales todos los planteos que la parte
formule deben obtener una respuesta jurisdiccional.
(…) asiste razón al apelante en torno a que, del escrito en cuestión, efectivamente se colige la voluntad
del encausado de declarar en los términos del art. 294 del código de rito, por cuanto, para sustentar su
petitorio, la defensa citó el art. 353 bis, 5° párrafo, de ese cuerpo legal, que así lo exige. (…) más allá
de que el dictamen de fs. (…) cumple con los requisitos formales previstos en el art. 347, C.P.P.N., se
encuentra viciado con una nulidad de orden general, por encontrarse afectada la intervención del
imputado en el proceso (art. 167 inciso 3°, C.P.P.N.), al habérsele impedido declarar ante el juez de la
causa.
(…) se decretará la nulidad del requerimiento de elevación a juicio obrante a fs. (…), debiendo el
tribunal de origen, previo a facultar el avance de la pesquisa a la siguiente etapa, dar una respuesta al
petitorio formulado por la defensa a fs. (…).
(…) el tribunal RESUELVE: I. DECLARAR LA NULIDAD del requerimiento de elevación a juicio
glosado a fs. (…). II.
DISPONER que el tribunal de grado resuelva el planteo deducido por la defensa a fs. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, López González, Pinto. (Prosec. Cám.: Daray).


c. 38.013/14, FERNÁNDEZ, Roberto R.
Rta.: 09/02/2015

NULIDAD.

Rechazada. Registro domiciliario. Orden de registro correctamente diligenciada. Imputada intentado


ocultar o deshacerse de papeles en otra vivienda, colaborando su morador para que el personal policial
ingrese. Validez del procedimiento, en los términos del artículo 184, inciso 5º, del Código Procesal
Penal, máxime teniendo en cuenta la orden de registro. Confirmación.

Fallo: "(…) La defensa de P. K. P. dedujo apelación contra el auto documentado (…), en cuanto se
rechazó el planteo de nulidad articulado respecto de la diligencia de registro llevada a cabo en el
domicilio de la calle R. X, de este medio y se impusieron las costas a esa parte.
La pretensión se basó en que en oportunidad de practicarse la diligencia, se advirtió que en el inmueble
existían dos viviendas, ubicadas respectivamente en las plantas baja y alta, y que "ambas…son
independientes, y sólo cuentan con una pequeña entrada en común al lote del terreno… sin
comunicación interna entre los departamentos"(...).
Se refirió que pese a que no se había individualizado en cuál de los departamentos debía practicarse la
medida, el personal de policía decidió registrar la planta baja, sin que ello estuviese especificado en la
orden.
A juicio del Tribunal, la resolución recurrida debe convalidarse, pues la medida llevada a cabo no se
encuentra afectada por deficiencias que la tornen inválida (art. 224 del Código Procesal Penal).
La orden de registro no fue erróneamente diligenciada, sino que se materializó en el domicilio que
efectivamente se pretendía registrar, tal como se desprende de las tareas de inteligencia previas
dirigidas a determinar si K. P. P. se domiciliaba en R.
X, de esta ciudad (…).
En efecto, las contingencias que tuvieron lugar al tiempo de la diligencia ilustran claramente que la
fuerza de seguridad interviniente se dirigió a la finca que debía registrarse y a partir de la actitud
asumida por su moradora, que se describe en el acta respectiva (…), y de la colaboración prestada por
el habitante del restante domicilio, al cabo, pudo ingresarse a la buscada unidad de entre las dos
viviendas que respondían a la numeración "X".
Aun cuando no se está en presencia de un yerro, a todo evento se ha dicho que "se tolera el error si se
evidencia como tal y existen elementos que permitan dar certeza al lugar que se pretendía registrar…
La exigencia cede cuando fuere imposible la exactitud que pretende el dispositivo e igualmente se
logre el propósito identificador por otras vías" (1).
Además, en la emergencia y previo al ingreso, los preventores observaron que la imputada P. K. P.
corría y tomaba varios papeles y los trasladaba a otro sector de la vivienda, extremo que permite
presumir razonablemente que intentaba deshacerse de aquéllos u ocultarlos, circunstancia que, en el
caso, habilitaba la intervención del personal policial en los términos del artículo 184, inciso 5º, del
Código Procesal Penal, con mayor cuando ya se contaba con una orden de registro.

164
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

Frente a las fundadas razones proporcionadas por la señora juez de la instancia anterior y lo expuesto,
cabe concluir en la validez del procedimiento cumplido.
En torno a las costas, al no exhibirse motivos para apartarse del principio general de la derrota, debe
homologarse lo decidido en la instancia anterior y extenderse su aplicación a las de alzada (art. 531 del
Código Procesal Penal).
Por ello y en consonancia con lo argumentado por la Fiscalía General en la audiencia oral, esta Sala del
Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR, con costas de alzada, la decisión documentada a fs. (…), en
cuanto fuera materia de recurso".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Cicciaro, Scotto. (Sec.: Sánchez).


c. 45.120/11, PODRECCA, Paola Karina.
Rta.: 10/03/2015

Se citó: (1) Guillermo R. Navarro y Roberto R. Daray, Código Procesal Penal de la Nación, 4ta. ed.,
Hammurabi, Bs. As., 2010, t. 2, pp. 229-230.

NULIDAD.

Rechazada contra la resolución que no hizo lugar al pedido de la Defensa oficial de que se notifique
personalmente al imputado que su abogado de confianza esta inhabilitada y que tiene derecho a
designar otro defensor. Notificación que no fue cumplida con los recaudos del artículo 149 del
C.P.P.N. Perjuicio concreto. Afectación del derecho de defensa en juicio: posibilidad de designar
letrado defensor de confianza. Nulidad.

Fallo: "(…) Convoca a la Sala el recurso de apelación interpuesto por la defensa oficial contra la
decisión documentada a fs. (…), en cuanto no se hizo lugar a la solicitud de notificar personalmente al
nombrado M. de lo dispuesto a fs.
(…), que ordenaba hacerle saber de la inhabilitación de la doctora N. C. y del derecho a designar a otro
abogado de la matrícula.
Para sostener que J. M. no ha sido notificado personalmente de la inhabilitación de su anterior letrada
defensora -doctora N. C.- y del derecho a designar un letrado de su confianza (…), la defensa oficial
reclamó la nulidad de la cédula de notificación obrante a fs. (…, pues "se fijó en la puerta de acceso de
la vivienda de M. sin la presencia de los testigos que exige la norma" (...).
Cabe recordar en tal sentido que el derecho de contar con la asistencia de un letrado de confianza en el
proceso penal, si bien carece de formulación autónoma en el texto de la Constitución Nacional, es una
derivación del principio de la inviolabilidad de la defensa (art. 18). Ello, sin perjuicio de que ha
encontrado recepción expresa en la Convención Americana sobre Derechos Humanos, cuando se alude
al "derecho del inculpado…de ser asistido por un defensor de su elección" (art. 8.1.d), que resulta
prioritario frente a la posible designación de un defensor de oficio, como bien lo destaca la Dra. A. S.
V. a fs. 854, con arreglo a la ubicación de los apartados "d" y "e" del inciso 2, art. 8, de la Convención
Americana sobre Derechos Humanos.
En el caso, debe convenirse en que la atestación de la cédula de notificación aludida inobservó las
alternativas indicadas en el artículo 149 del Código Procesal Penal, pues se omitió dejar constancia de
la existencia o no de mayores de edad, sean parientes, empleados o dependientes y subsidiariamente
algún vecino, con preferencia el más cercano, antes de la fijación en "la puerta de acceso" del domicilio
real de M.
En esa dirección, la actuación del oficial notificador se evidencia como una omisión del procedimiento
formal que ha deparado un perjuicio concreto, en el entendimiento de que se ha visto afectado el
derecho de defensa en juicio, en particular la posibilidad de designar un letrado defensor de su
confianza, con arreglo a lo dispuesto en el artículo 167, inciso 3°, del código ritual (1).
Por otra parte, la cédula de notificación dirigida al domicilio constituido (…), en el particular caso del
sub examen, no puede suplir a la que se cursó al domicilio real, en virtud de que es el domicilio de la
doctora C., quien se encontraba inhabilitada y con su matrícula suspendida, más allá de que el propio
examen del instrumento no revela siquiera el documento nacional de identidad de la persona que allí
aparece como quien oficiara de testigo -F. R.- , para su correcta individualización.
En consecuencia, corresponde declarar la nulidad de la cédula obrante a fs. (…) y de lo actuado en
consecuencia y revocar el pronunciamiento apelado en cuanto no se hizo lugar a la solicitud de
notificar personalmente al nombrado Medina de lo dispuesto a fs. (…).
Por ello, el Tribunal RESUELVE: DECLARAR la nulidad de la cédula obrante a fs. (…) y de lo
actuado en consecuencia y REVOCAR la decisión documentada a fs. (…) en cuanto no se hizo lugar a
la solicitud de notificar personalmente al nombrado M. de lo dispuesto a fs. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Cicciaro, Scotto. (Prosec. Ad Hoc.: Sposetti).


c. 40.319/09, MEDINA, Julio.
Rta.: 26/03/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correc., Sala VII, c. 36.981, "Marque S.C.A. y otros", rta: 19/08/2009.

165
NULIDAD.

Rechazada. Respecto del decreto que corrió vista al fiscal para que se expida a los fines del art. 346 y
del requerimiento de elevación a juicio formulado en ése sentido. Actos procesales que tuvieron lugar
cuando el procesamiento no estaba firme y fue revisado por la Cámara. Invalidez. Revocatoria. Nulidad
del decreto y del requerimiento de elevación a juicio. Disidencia: Ausencia de lesión a la garantía de
defensa en juicio. Proceder que no se encuentra sancionado con la nulidad. Confirmación.

Fallo: “(…) Se celebró la audiencia oral prevista por el artículo 454 del Código Procesal Penal con
motivo del recurso de apelación deducido por la defensa de E. C. C., J. M. d. A. y R. E. contra el auto
documentado a fs. (…), mediante el cual se rechazó la nulidad deducida respecto del decreto
documentado a fs. (…) y el requerimiento de elevación a juicio de fs. (…) e impuso las costas al
incidentista.
Los jueces Juan Esteban Cicciaro y Mariano A. Scotto dijeron: Al respecto, se advierte que con motivo
de la vista corrida mediante el decreto del 1 de septiembre de 2014 (…), el representante del Ministerio
Público Fiscal ha requerido la elevación a juicio de este proceso (…), acto procesal que ocurrió en
forma previa a la revisión del auto de procesamiento de E. C. C., J. M. d. A. y R. E. –cuya defensa
tachó de nulidad los actos mencionados- y de A. M. O., V. C. M., C. E. S., H. N. P., O. H. R., H. F. y
R. D. L., respecto de quienes también se requirió la elevación a juicio en tales condiciones.
En efecto, la intempestividad del pedido de elevación a juicio formulado por la acusación pública, visto
que el procesamiento de los nombrados fue a la postre apelado (…), configura una nulidad virtual o
tácita en función de que aquella requisitoria supone cuanto menos la homologación del auto de mérito
por la alzada o el vencimiento del plazo para recurrirlo, extremo sin el cual la instrucción, en modo
alguno, puede estimarse completa -artículos 346 y 347 del Código Procesal Penal- (1).
En esa inteligencia, se considera que el requerimiento de elevación a juicio concretado no resulta
válido cuando se encuentra pendiente de decisión la apelación deducida contra el procesamiento, al
carecer de la firmeza y estabilidad necesaria que brinda la confirmación por parte de la alzada.
En ese sentido, ha sostenido la doctrina que "Es condición para [la] procedencia [de la vista] que medie
auto de procesamiento firme…" (2).
Con base en las circunstancias mencionadas precedentemente y descartada la aplicación a este supuesto
de la manda del artículo 353 del canon ritual, pues no alude a una eventual apelación sino a los
recursos pendientes ante la Cámara Federal de Casación Penal, la Cámara Nacional de Casación en lo
Criminal y Correccional de la Capital Federal, o la Corte Suprema de Justicia de la Nación, habrá de
revocarse la decisión obrante a fs. (…) y declararse la nulidad del decreto que ordenó la vista
contemplada en el artículo 346 y el dictamen de fs. (…), que es su consecuencia (3).
Ello, sin perjuicio de no estar expresamente prevista tal sanción para este supuesto (artículos 166, 167
y 168 del ritual), pues la situación podría gravitar sobre el instituto de la prescripción en perjuicio del
imputado, tal como sostuvo la Dra. G. B. en la audiencia oral.
La intempestividad de la vista y del requerimiento de elevación a juicio, por lo demás, queda a las
claras cuando el procesamiento es revocado, tal como ocurre en el caso con la situación procesal de los
imputados V. C. M., O. H. R. y A. M. O.
Finalmente, y de acuerdo con el modo en que se resuelve, debe revocarse la imposición de costas al
incidentista.
Así votamos.
El Juez Ricardo Matías Pinto dijo: Vencida la cuestión, solo cabe señalar en anteriores oportunidades
me expedí en el sentido contrario al planteo por cuanto el artículo 311 del Código Procesal Penal
establece que tanto el auto procesamiento como el de falta de mérito pueden ser revocados y
reformados en cualquier etapa de la instrucción y sólo procede contra ellos el recurso de apelación sin
efecto suspensivo.
Se colige de ello que sus consecuencias no se interrumpen ante la presentación de una impugnación,
razón por la que el sumario continúa su curso en virtud de los principios de progresividad y
trascendencia de los actos.
Por ello el pronunciamiento que dispone la vista al fiscal –artículo 346 del ordenamiento adjetivo–,
cuando el procesamiento no había adquirido firmeza, no causa lesión al derecho de defensa en juicio
del imputado.
Además no existe normativa que establezca esa distinción y que sancione tal proceder con la nulidad.
Por lo cual no resulta un requisito de validez un procesamiento firme preexistente (4).
En este sentido se sostuvo que: “(…) Teniendo en cuenta el principio de oficialidad que aún se
mantiene vigente y pone en cabeza del Juez la dirección del proceso, como así también, le impone al
magistrado el deber insoslayable de aportarle al proceso la debida celeridad, a fin de evitar que la
pretensión punitiva y los derechos de las víctimas no se vean perjudicados con el transcurso del tiempo,
es que considero que no es necesario que el auto de procesamiento se encuentre firme para que el juez
corra vista a las partes en los términos del artículo 346 del C.P.P.N.” (5).
La situación que afectaría el derecho de defensa sería el caso en el que el juez instructor, cuando se
encontrase pendiente de resolución el recurso presentado por la defensa contra el procesamiento, la
notificara en los términos del artículo 349 del ritual, pues tendría que defenderse simultáneamente de
dos momentos procesales distintos.

166
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

En consecuencia no se advierte que el derecho de defensa del imputado fuera vulnerado en modo
alguno (6).
Por otra parte, la Corte Suprema de Justicia de la Nación sostuvo que: “Es doctrina reiterada de este
Tribunal que en materia de nulidades procesales prima un criterio de interpretación restrictiva y sólo
cabe anular las actuaciones cuando el vicio afecte un derecho o interés legítimo y causa un perjuicio
irreparable, sin admitirlas cuando no existe una finalidad práctica, que es razón ineludible de su
procedencia. En efecto, la nulidad por vicios formales carece de existencia autónoma dado el carácter
accesorio e instrumental del derecho procesal; exige, como presupuesto esencial, que el acto
impugnado tenga trascendencia sobre la garantía de la defensa en juicio o se traduzca en la restricción
de algún otro derecho. De otro modo, la sanción de nulidad aparecería respondiendo a un formalismo
vacío, en desmedro de la idea de justicia y de la pronta solución de las causas, en lo que también está
interesado el orden público (...)” (7).
Por lo demás, corresponde destacar que al analizarse la situación procesal de los encausados
conjuntamente con este y los restantes planteos, en caso de modificarse, el expediente se retrotraería a
aquél momento quedando sin efecto todo lo actuado con posterioridad. Esta circunstancia no hace más
que confirmar la inexistencia de un perjuicio concreto y actual para la parte.
En consecuencia, voto por confirmar la decisión obrante a fs. (…) en cuanto rechazó la nulidad del
decreto de fs. (…) y del requerimiento de elevación a juicio que es su derivación (…).
Finalmente, no obstante mi postura, en lo tocante a la imposición de costas adhiero a la mayoría.
Por tanto, en mérito del acuerdo que antecede, el Tribunal RESUELVE: I. REVOCAR el auto
documentado a fs. (…) en cuanto rechazó la nulidad planteada e impuso las costas al incidentista. II.
DECLARAR LA NULIDAD del decreto obrante a fs. (…) y del requerimiento de elevación a juicio
que es su consecuencia (…)”.

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Cicciaro, Scotto, Pinto (en disidencia). (Prosec. Ad Hoc.: Sposetti).
c. 21.666/1996/35, CROTTO, Enrique Claudio y otros
Rta.: 26/06/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correc., Sala VII, c. 39.916, "Stortini, Carlos", rta: 30/11/2010. (2) Guillermo
Navarro y Roberto Daray, Código Procesal Penal de la Nación, 4ta. ed., Hammurabi, Bs. As., 2010, t.2,
p. 651, citado en c. N° 6.061/10, “Moyano Ojea, Rodolfo”, rta: 28/05/2014. (3) C.N.Crim. y Correc.,
Sala VII, c. 39.311, "Ochoa, Marcelo", rta: 22/09/2012. (4) C.N.Crim. y Correc., Sala VI, c.
29.99/2012 “Sucalesca, Javier”, rta: 22/09/2014. (5) C.N.Crim. y Correc., Sala VII, c. 30.419, “Cramer,
Albert Kaspar”, rta: 30/03/2007. (6) C.N.Crim. y Correc., Sala VII, c. 39.311, "Ochoa, Marcelo", rta:
22/09/2012. (7) C.S.J.N., B. 66. XXXIV. “Bianchi, Guillermo Oscar s/defraudación, rta: 27/06/2002.

NULIDAD.

Rechazada. 1) Requisa de rodado. Actuación prudente y razonable de los preventores en ejercicio de


funciones específicas. Detención efectuada con posterioridad a la comunicación con el Juzgado
interviniente. 2) Manifestación espontánea de los detenidos. Simple diálogo del prevenido con el
preventor no implica recibirle declaración. 3) Actas de detención y notificación de derechos.
Cumplimiento de los requisitos legales establecidos. Confirmación.

Fallo: "(…), convoca la atención de esta Alzada el recurso de apelación interpuesto por la defensa
contra la resolución documentada a fs. (…) de este incidente, en cuanto no se hizo lugar a los planteos
de nulidad impetrados.
Al abordar la inspección de la diligencia que dio origen a las actuaciones se extrae que
aproximadamente a las 16:30 del 7 de julio de 2014, con fines identificatorios se detuvo la marcha de
una camioneta en la que se estaban cargando cajas y que en ese momento dos personas bajaron la
persiana metálica del comercio junto al cual se encontraba detenido el vehículo, en el que también se
observaron diversas cajas (…), extremo que fue consignado expresamente en el acta de procedimiento
manuscrita obrante a fs. (…), en la que se asentó "Que al advertir… la presencia policial… dos
masculinos inmediatamente sin mediar palabra alguna bajan la persiana…" (…).
A partir de lo expuesto, desde la experiencia común puede calificarse como inusual la actitud de
quienes "inmediatamente" bajaron la persiana del comercio al advertir que los sujetos que se
desplazaba en la camioneta que egresaba de allí procedían a ser identificados por el personal de policía,
lo que en el caso podía ser razonablemente interpretado como una conducta de ocultamiento frente al
accionar policial.
A criterio de esta Sala, la situación descripta justificó la requisa del rodado en el marco de una
actuación prudente y razonable de los preventores en el ejercicio de sus funciones específicas, que no
se exhibe arbitraria, además de que -en rigor- la formal detención de los imputados se hizo efectiva
luego de la comunicación entablada con el Juzgado Nacional en lo Criminal de Instrucción N° X, cuyo
secretario posteriormente se hizo presente en el lugar, donde también se encontraba el subcomisario M.
-2do. Jefe de la División Sustracción de Automotores de la Policía Federal Argentina- (...).
De otro lado, más allá de las habituales tareas de prevención que pudo haber efectuado el personal de la
división aludida, no existen constancias que acrediten la versión de la defensa relativa a que se

167
realizaron tareas indebidas de inteligencia que pudieron haberse iniciado meses antes de la detención,
sin noticia de la autoridad judicial correspondiente.
Desde la misma perspectiva, cabe señalar que sólo surge de la versión del recurrente que sus
defendidos fueron interrogados bajo coacción por más de dos horas, y la manifestación espontánea que
habrían realizado en cuanto a que "el lugar era una distribuidora de autopartes" no difiere de la
argumentación que desarrolló el letrado en la audiencia oral, oportunidad en la que mantuvo esa
versión, lo que también podría desprenderse de la documentación aportada por los causantes, razón por
lo que tal dato no se exhibe autoincriminante.
A mayor abundamiento y a todo evento, cabe señalar que "el simple diálogo del prevenido con el
preventor no implica recibirle declaración [CNCP, Sala II, 15-3-1995, causa 32/95, 'Cardozo, L']" (1),
y conforme la doctrina fijada por la Corte Federal, la mera comunicación de un dato, en la medida en
que no sea producto de coacción, no es un indicio que deba desecharse de la investigación criminal (2).
En todo caso, no se ha recibido declaración a un imputado en los términos del art. 184, inciso 10º, del
Código Procesal Penal, sino que se ha entablado un diálogo con un sospechoso, a título de "noticias e
indicaciones sumarias sobre circunstancias relevantes para orientar la inmediata continuación de las
investigaciones" (art. 184, inciso 9º).
Finalmente, las actas de detención y notificación de derechos documentadas a fs. (…) se encuentran
suscriptas por los testigos L. M. B. y de G. J. V. (…) y cumplen con los requisitos que bajo pena de
nulidad establece el artículo 140 del Código Procesal Penal, mientras que las actas de notificación de
derechos y garantías han sido firmadas por los imputados, por lo que no se advierte la presencia de un
vicio generador de la máxima sanción procesal y resulta de aplicación la doctrina de la Corte Federal
en lo atingente a que "En materia de nulidades procesales prima un criterio de interpretación restrictiva
y sólo cabe anular las actuaciones cuando el vicio afecte un derecho o interés legítimo y causa un
perjuicio irreparable… De otro modo, la sanción de nulidad aparecería respondiendo a un formalismo
vacío, en desmedro de la idea de justicia y de la pronta solución de las causas, en lo que también está
interesado el orden público..." (Fallos: 325:1404).
Por lo expuesto, con costas de alzada en virtud del principio general de la derrota (artículo 531 del
Código Procesal Penal), el Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR la resolución dictada a fs. (…), en
cuanto no hace lugar a los planteos de nulidad impetrados a fs. (…), con costas de alzada".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Cicciaro, Pociello Argerich. (Prosec. Ad Hoc.: Sposetti).
c. 40.828/14, ROSSI, Rubén O. y otros.
Rta.: 13/04/2015

Se citó: (1) Guillermo Navarro y Roberto Daray, Código Procesal Penal de la Nación, Hammurabi, Bs.
As., 2004, t. 1, p. 473. (2) Fallos: 315:2505, 317:956 y 317:241, con cita de la causa C.9.XXIV,
"Cabral, Agustín s/contrabando", rta: 14/10/1992.

NULIDAD.

Rechazada. Pericia psicológica llevada a cabo sobre el imputado con notificación cursada el mismo día
de su realización. Violación al derecho de defensa en juicio y a la garantía constitucional que prohíbe
la autoincriminación compulsiva. Discrecionalidad jurisdiccional que tiene límite en el derecho
constitucional que proscribe la autoincriminación. Revocación. Nulidad.

Fallo "(…) A fs. (…) la jueza de grado rechazó el planteo de nulidad articulado por la asistencia
técnica de N. H. P. contra el peritaje psicológico realizado respecto del imputado.
II. La medida cuya validez se discute fue ordenada el 10 de febrero del corriente año (ver fs. …), y
notificada a la defensa al día siguiente, es decir, el mismo día de su realización (ver fs… ).
A fs.(…) de los autos principales, luce un escrito de la defensa en el que manifestó su oposición al
punto 3) de la experticia encomendada al Cuerpo Médico Forense, y de forma subsidiaria, solicitó que
se le permitiera asistir al imputado en forma previa a su comparecencia al mentado cuerpo de galenos.
La Sra.
Jueza de grado denegó el primero de los pedidos por entender que la producción o no de medidas de
prueba queda sujeta a la exclusiva discrecionalidad del órgano jurisdiccional, cuya decisión es
irrecurrible.
El planteo subsidiario -asistencia técnica previa- fue denegado por la a quo, en primer lugar porque, al
momento del planteo, el peritaje ya había sido elaborado y, por otro lado, porque su realización en
modo alguno habría afectado la garantía constitucional invocada (ver fs…).
III. Planteada la cuestión en estos términos, y habiéndose verificado que el informe ha sido ponderado -
atento a su contenido- como un elemento de cargo para decretar el procesamiento de P., entendemos
que los reclamos de la defensa merecen ser atendidos por cuanto la realización del peritaje en esas
condiciones afectó la garantía constitucional que prohíbe la autoincriminación compulsiva.
Nótese, al respecto, que el hecho de que el decreto que ordenó la producción de la medida (fs…) fuera
notificado el mismo día que ésta se llevó a cabo (fs. …) imposibilitó materialmente una oportuna
oposición de la defensa a su realización, impidió que se ofrecieran peritos de parte e, inclusive, cercenó
la posibilidad de que el imputado recibiera asistencia técnica en forma previa a ella para que tuviera la

168
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

posibilidad de evaluar las implicancias de la diligencia, que -claro está- requería su activa intervención,
respondiendo preguntas y brindando los datos que se le requirieran.
Ello resulta relevante por cuanto la participación del imputado en un peritaje como el dispuesto en
autos implica considerarlo como un sujeto de la prueba, ya que ésta supone su activa participación en
el aporte de información sobre su privacidad.
De ello se deriva que no sólo se encuentra en juego la garantía constitucional que proscribe la
autoincriminación forzada, sino también la privacidad del afectado. Adviértase que en modo alguno
puede predicarse que la voluntad del imputado resultaba irrelevante, como se entiende en los casos de
extracción de una muestra para realizar un estudio de ADN o una muestra de sangre o la participación
en una rueda de reconocimiento, supuestos en los que aquél es considerado un objeto de la prueba. Sin
embargo, en casos como el analizado es un sujeto de la labor pericial que no puede realizarse sin su
colaboración activa, y por ende no es admisible que, sea compelido a participar en la diligencia sin
afectarse los derechos y garantías constitucionales mencionadas. En este aspecto el tribunal al disponer
el estudio debió haber considerado que su discrecionalidad tiene límite en el derecho constitucional
referido en tanto el imputado no se encuentra obligado a tolerar esta diligencia.
Consecuentemente, en función de la coacción moral que entraña la realización del peritaje sobre el
imputado, habiéndose vedado la posibilidad de ofrecer un perito de parte, oponerse o de ser asesorado
por su defensora, se ha verificado una afectación a la garantía que proscribe la autoincriminación
forzada que torna inválida la medida (arts. 18 de la Constitución Nacional y 166 del CPPN).
(...) el tribunal RESUELVE: REVOCAR el auto de fs.(…) y declarar la nulidad del peritaje agregado a
fs. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, Pinto, Divito. (Sec.: de la Bandera).


c. 6.380/15/2, P., N. H.
Rta.: 15/04/2015

NULIDAD.

Rechazada. 1) Defensa que alega que el auto de clausura de la instrucción tiene como única prueba
declaraciones testimoniales viciadas de nulidad por las que se encuentra pendiente resolución de
recurso de queja ante la C.S.J.N. Alzada que efectuó control de legalidad de la prueba al confirmar el
procesamiento y homologar rechazo de nulidad respecto de las declaraciones testimoniales. La
existencia de recursos pendientes ante la C.S.J.N. no impide la elevación a juicio de las actuaciones.
Confirmación. 2) Costas. Letrados pertenecientes al Departamento de Práctica Profesional de la
Facultad de Derecho de la U.B.A. Equiparación a miembros del Ministerio Público de la Defensa.
Exceptuados del pago de la costas. Revocatoria.

Fallo: "(…) Celebrada la audiencia prevista en el artículo 454 del Código Procesal Penal, convoca a la
Sala el recurso de apelación interpuesto por la defensa de P. J. G. R. contra la resolución obrante a fs.
(…) que no hizo lugar a la nulidad del auto de clausura de la instrucción documentado a fs. (…) del
expediente principal. El agravio formulado por la asistencia técnica se centró en que "la clausura de la
instrucción de los autos principales tiene como única prueba las testimoniales viciadas de nulidad y por
las cuales aún a la fecha se encuentra pendiente de resolución [el] Recurso de Queja por ante la Corte
Suprema de Justicia de la Nación. No desprendiéndose de aquel decisorio ningún otro medio
probatorio que permita acreditar los hechos con el grado de certeza necesaria para esta etapa procesal.
Que por los motivos indicados resulta ilógico y violatorio de la regla de la sana crítica racional el
considerar clausurada una etapa procesal cuando aún nos encontramos cuestionando la validez de los
medios probatorios utilizados a tal fin" (…).
Al respecto, cabe recordar que este Tribunal ya ha efectuado un control de legalidad de la prueba sobre
la que el juez de la instancia anterior basó el auto de clausura que diera origen al planteo en análisis,
ello tanto en ocasión de confirmar el procesamiento de G. R. (…) como al homologar el rechazo de la
nulidad interpuesta por la defensa del nombrado respecto de las declaraciones testimoniales extendidas
a fs. (…), en la medida en que no se advirtió una afectación en el derecho de defensa del imputado
(…).
Por lo demás, contrariamente al argumento expuesto por la parte recurrente, el artículo 353, párrafo
segundo, del Código Procesal Penal prevé que la existencia de recursos pendientes de resolución ante
la Corte Suprema de Justicia de la Nación en ningún caso impedirá la elevación a juicio de las
actuaciones.
Tales consideraciones conducen a homologar el auto apelado.
De otro lado, luce admisible el reclamo de la defensa para que se exima a esa parte de la imposición de
las costas, pues los letrados que como miembros del Departamento de Práctica Profesional de la
Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires brindan asistencia jurídica gratuita al
imputado, deben ser equiparados a los miembros del Ministerio Público de la Defensa, quienes se
encuentran exceptuados del pago de las costas por el artículo 532 del Código Procesal Penal (1).
Por ello, esta Sala del Tribunal RESUELVE: I. CONFIRMAR la resolución documentada a fs. (…), en
cuanto no hizo lugar a la nulidad planteada. II. REVOCAR el mismo auto respecto a las costas
impuestas".

169
C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Divito, Cicciaro, Scotto. (Sec.: Besansón).
c. 21.952/13, GUACHALLA RAMIREZ, Paulino.
Rta.: 06/05/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correc., Sala I, c. 32.906, "Pinto, Alejandrina", rta: 15/04/2008.

NULIDAD.

Rechazada. 1) Defensa a la que se le negó el acceso al expediente que corre por cuerda por no resultar
en él imputado. Proceso que conforma una unidad común a todos los imputados. Secreto sumarial
finalizado. Violación a la garantía de defensa en juicio. Revocatoria. Nulidad. 2) Inobservancia de
principios legales en el procedimiento. Apartamiento del juez.

Fallo: "(…) I. La defensa recurrió en apelación el auto documentado a fs. (…), en cuanto se rechazó el
planteo de nulidad respecto de las providencias glosadas a fs. (…) de estas actuaciones, por las que se
denegó a esa parte la posibilidad de tomar vista de los legajos de investigación vinculados con la
pesquisa.
El señor juez de grado argumentó en su decisión que las reglas acuñadas en el artículo 204 del Código
Procesal Penal vedan el acceso de la defensa a las piezas procesales en las que su asistido no resulta ser
"parte imputada".
Las actuaciones se iniciaron el 29 de agosto de 2011, con motivo del violento fallecimiento de E. C. y a
partir de las diversas diligencias probatorias concretadas, el objeto procesal se extendió a la presunta
existencia de una asociación ilícita de personas allegadas al Club Atlético Boca Juniors (…).
El trámite relativo al homicidio de C. siguió su curso hasta la celebración del juicio oral -en la
actualidad se conservan testimonios referidos a la intervención que pudo caberle en ese hecho a D. Al.
W.-, en tanto el de la pesquisa alusiva a la supuesta asociación ilícita se sustancia en el Juzgado
Nacional en lo Criminal de Instrucción N° X, cuyo titular decidió la formación de sendos legajos
concernientes a distintas líneas investigativas.
Lo cierto es que, adversamente al discernimiento alcanzado por el señor juez y con independencia de
los múltiples objetos procesales que pudieran surgir de las diligencias probatorias encaminadas, este
proceso conforma una unidad que resulta común a todos los imputados, aun cuando se pretendiera
analizar separadamente la situación de cada uno de ellos a través de los respectivos testimonios.
Por otra parte, al tiempo de negar las vistas una vez cesado el secreto sumarial que se había impuesto,
el magistrado a quo asumió indebidamente la potestad de decidir acerca de cuál era el material
probatorio útil para los intereses de G. G., privándolo así de la posibilidad del ejercer plenamente la
defensa en juicio (art. 18 de la Constitución Nacional; 167, inciso 3°, y 168 del digesto formal), dada la
imposibilidad de conocer el acervo de evidencias respecto del que deberá soportar la imputación.
El proceder que cuestionó la defensa, con apoyatura de los representantes del Ministerio Público Fiscal
en ambas instancias, se exhibe como una forma oblicua de implantar un virtual secreto sumarial que
conmueve la garantía de la defensa en juicio y lejos está de los lineamientos de la decisión asumida por
esta Sala el 13 de octubre de 2013, al disponer la formación de legajos para que las defensas pudieran
ejercer su ministerio durante la vigencia del secreto sumarial que fue prorrogado sucesivamente con la
aparición de nuevos imputados.
De suyo, el singular modo de investigar mediante la formación de múltiples legajos derivó en la
atracción y concentración de otras causas (A.) con la consecuente distorsión de los objetos procesales y
la individualización de los imputados en cada uno de ellos. Tal proceder, que podría entorpecer el
ejercicio de la defensa, debe necesariamente encontrar un adecuado límite y en tal sentido se exhorta al
señor juez de grado a que en lo sucesivo evite este tipo de contingencias procesales.
En suma, como la prohibición del acceso a la totalidad de las actuaciones que conforman esta causa
importa por sí una afectación a la garantía de defensa en juicio, en tanto el ejercicio de la defensa debe
ser cierto y efectivo (Fallos: 332:1095), sin necesidad de la demostración del perjuicio irrogado por la
medida, resulta procedente la sanción de nulidad invocada por las partes recurrentes.
II. La decisión asumida torna operativo el pedido que se formulara en la audiencia oral en punto al
apartamiento del juez que interviene en el caso.
En ese sentido, sin perjuicio de lo apuntado en el apartado anterior, existen varias circunstancias que
revelan la pertinencia del reclamo.
Al respecto, recuérdese lo resuelto el 15 de febrero de 2013, oportunidad en la que se declaró la
nulidad de los procesamientos de M. M. y G. P. (…) en razón de las deficiencias advertidas en la
descripción del hecho intimado.
Posteriormente, el 22 de abril del mismo año, en los incidentes números 9 y 10, la Sala destacó la
necesidad de que las defensas, frente a las sucesivas renovaciones del secreto sumarial, contaran con
todas las copias necesarias para ejercer la defensa material de todas las personas presuntamente
involucradas con la muerte de E. C.
Ello propendió a garantizar la publicidad de las actuaciones en la medida en que no se pusiera en riesgo
la averiguación de la verdad.
Dichas pautas, si bien contemplaron la posibilidad de escindir líneas de investigación ajenas al hecho
principal -muerte de C.de modo alguno implicaban vedar el acceso de las partes al contenido de las

170
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

actuaciones, tal como ha procedido el juez de grado implantando un solapado secreto sumarial cuya
vigencia se sujetó a lo que él estimara como de interés para la defensa que pretendía compulsarlas.
El 21 de febrero de 2014 se declaró la nulidad de lo resuelto por el juez, al decidir sobre su propia
recusación, con imposición de costas, en franca violación a las disposiciones de los artículos 61 y 62
del Código Procesal Penal.
El 7 de noviembre último, la Sala declaró la nulidad de los llamados a prestar declaración indagatoria
de J. G. M., A. M. y R. M., los respectivos actos en los que fueron documentadas y los postreros
procesamientos decididos por el juez en el marco de la causa N° 41.000/2014, iniciada con la muerte
violenta de M. A. C. y Á. D. y remitida por conexidad con este proceso, en virtud de un oficio remitido
por el magistrado D. C. a la Fiscalía Nacional en lo Criminal de Instrucción N° X, mediante el cual se
dio cuenta de que ese suceso tendría como motivación el "acceder al control de la asociación ilícita"
que el propio juez comenzó a investigar a partir de las intervenciones telefónicas ordenadas en el
marco de la investigación del homicidio de C.
En la ocasión también se advirtió que el juez extendió el objeto procesal de la pesquisa y con
prescindencia del debido impulso del Ministerio Público Fiscal, dispuso oficiosamente recibir diversas
declaraciones indagatorias.
Tales afectaciones motivaron en su momento el apartamiento del juez en los términos del artículo 173
del digesto formal y en cuanto se relacionó con la causa remitida por conexidad.
La falencias repasadas se complementan con las listadas en este decisorio y permiten estimar que dada
la inobservancia de los principios legales que gobiernan el procedimiento, en aras de satisfacer la
garantía constitucional del debido proceso y de la defensa en juicio, corresponde acceder al pedido de
apartamiento del juez D. C. de las causas sustanciadas ante el Juzgado Nacional en lo Criminal de
Instrucción N° X, incluida la instruida con motivo de la muerte de E. C. Apartado entonces el doctor
M. d. C. del conocimiento del caso, decisión que involucra las actuaciones en las que se investiga la
presunta formación de una asociación ilícita, los diversos hechos que a cada uno de sus integrantes se
atribuye, y todas las formadas en su consecuencia o solicitadas por conexidad, deben remitirse todos
los legajos a la oficina de sorteos de esta Cámara para que se desinsacule el Juzgado de Instrucción que
habrá de intervenir (art. 173 del Código Procesal Penal).
Por ello, esta Sala del Tribunal RESUELVE: I. REVOCAR el auto documentado a fs. (…) y
DECLARAR la nulidad de las decisiones glosadas a fs. (…) de este incidente. II. APARTAR al doctor
M. d. C. del conocimiento de la causa N° 35.539/11, de las actuaciones en las que se investiga la
presunta formación de una asociación ilícita, los diversos hechos que a cada uno de los integrantes se
atribuye y de todas las formadas en su consecuencia o solicitadas por conexidad, disponiéndose que
sean remitidas a la Oficina de Sorteos de esta Cámara para que se desinsacule el nuevo juez de
instrucción que deberá entender".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Cicciaro, Pociello Argerich. (Sec.: Sánchez).


c. 35.539/11, GOMEZ, Gustavo.
Rta.: 24/04/2015

NULIDAD.

Rechazada. Defensa que plantea la nulidad respecto del estudio psicológico y psiquiátrico realizado
sobre el estado de salud mental de su asistido toda vez que fue notificada una vez que la pericia fue
llevada a cabo. Violación al derecho de defensa garantizado (art.18 de la CN). Experticia inválida en
los términos del (art. 167, inc. 3 del CPPN). Revocación. Nulidad.

Fallo. "(...) recurso de apelación deducido por la defensa oficial contra el auto de (fs. ...) que no hizo
lugar al pedido de nulidad efectuado por el defensor del imputado R. B. J. F. T. respecto del estudio
psicológico y psiquiátrico realizado sobre su estado de salud mental. (...).
La defensa se agravió tanto por la ausencia de notificación oportuna de la experticia mencionada como
por el punto de pericia de (fs. ...) del principal, en cuanto ordena determinar en relación al imputado
"…si presenta alguna alteración que resulte compatible con los hechos denunciados", notificándose a
ese Ministerio Público de la realización de la medida luego de quince días de ordenada, o sea cuando
ya se estaba materializando. Destacó la recurrente que la letra del art. 258 del CPPN y señaló que en el
caso no se da ninguno de los dos supuestos que admiten como excepción la falta de notificación, a lo
que adunó que una pericia como la realizada necesita del principio contradictorio, pues ese es su
carácter esencial.
(...). Sólo habrá de indagar en su personalidad, en violación al principio de Derecho Penal de acto, lo
que viola derechos y garantías constitucionales (arts. 18, 19 y Tratados de Derechos Humanos
incorporados al art. 75, inc. 22° del CN). Finalmente, la defensa oficial disintió con los argumentos
brindados por la fiscalía al dictaminar en esta incidencia. (...). A su criterio, en estas medidas se
requiere un quehacer efectivo del imputado y en este caso se necesitó de manifestaciones verbales en
gran parte asimilables a la indagatoria. Por tal motivo fue que luego de ser notificada tardíamente la
medida, la defensa manifestó su oposición a su realización. Esta nulidad, entonces, pretende dejar sin
efecto el acto procesal cuestionado en aras del respeto de garantías constitucionales. (...). Según surge
del expediente, ya en diciembre de 2014 se ordenó al Cuerpo Médico Forense que se practicara el
examen previsto en el art. 78 del CPPN respecto al encausado y una pericia médica para establecer el

171
estado de sus facultades mentales y si presentaba alguna alteración "compatible con los hechos
investigados" (fs. ... del principal). A tales fines se intentó convocar a F. (...). La asistencia de F. fue
notificada de su designación y de la pericia ordenada al CMF (...). (...). En este caso tenemos que no
sólo se privó a la defensa de proponer un perito que pudiera intervenir en la experticia, sino que
además el examen se practicó sin la debida notificación previa a esa parte, quien no tuvo oportunidad
de oponerse a algún punto de la medida (como sí lo hizo en forma extemporánea a fs. ...) o bien que su
asistido se sometiera al examen. En base a ello, consideramos que lo actuado implica una violación al
derecho de defensa garantizado en el art.18 de la CN, por lo que la experticia cuestionada aparece
inválida en los términos del art. 167, inc. 3 del CPPN, sin que resulte relevante en esta oportunidad que
la operación técnica resulte reproducible. (...). En virtud de lo expuesto el tribunal RESUELVE:
REVOCAR el auto de (fs. ...) y DECLARAR la NULIDAD de la pericia glosada a (fs. ...) de las
actuaciones principales (arts. 455 a contrario sensu y 167, inc. 3 del código de forma). (...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala I, Bunge Campos, Rimondi. (Sec. Cám.: Sosa).


c. 24.934/14, C. M., M. J. y otros.
Rta.: 14/05/2015

NULIDAD.

Rechazada “in limine” y recurrida por la defensa, respecto del requerimiento de elevación a juicio del
Fiscal que fuera presentado fuera de término. Termino ordenatorio para el Ministerio Público por no
poder prescindirse de su opinión. Confirmación.

Fallo: “(…) III.-) El Juez Julio Marcelo Lucini dijo: Del cotejo de las fechas en que la causa fue
recibida en la Fiscalía (…), el pedido de prórroga y su concesión (…) y el requerimiento de elevación a
juicio (…), se colige que esa pieza procesal no resulta extemporánea, tal como el impugnante lo
pretende, de conformidad a los plazos previstos en el art. 346 del ordenamiento ritual.
No obstante ello, el agravio se diluye en virtud del criterio de la Sala en cuanto a que: “para el
Ministerio Público Fiscal, el término será siempre ordenatorio pues no puede prescindirse de su
opinión. De allí la eficacia de la requisitoria presentada fuera de término” (1).
Asimismo, se ha sostenido que “los plazos perentorios a que se refiere el precepto son, como regla,
únicamente aquellos otorgados a las partes. Los que la ley concede a los órganos, también como regla,
son ordenadores (...) La razón del disímil tratamiento radica en que la actividad que debe llevarse a
cabo para el desarrollo del proceso penal es ineludible y en que, consecuentemente, por virtud de los
intereses públicos en juego, no es admisible que caduque o pierda validez por su producción tardía...”
(1).
En igual sentido ha expresado la doctrina que: “A diferencia de la acusación particular el plazo para el
Ministerio Público Fiscal es meramente ordenatorio, en razón que su incumplimiento únicamente podrá
generar sanciones y, el dictamen finalmente debe ser acompañado ya que sea requiriendo la elevación a
juicio o solicitando la producción de medidas probatorias” (2).
El orden en que se agregaron las actuaciones y su pertinente foliatura denota de manera evidente un
error que no genera ninguna duda, como pretende el recurrente ya que tienen fecha cierta que le ha sido
otorgada por el cargo que los convierte en un documento público y no fueron argüidos de falsedad por
acción civil o criminal (art. 993 Código Civil).
Vale recordar sobre el asunto que “el cargo es el acto en virtud del cual el funcionario que la ley
designa al efecto deja constancia, en todo escrito presentado o comunicación al tribunal, del día, año y
hora en que se produjo la presentación o recepción. (…) La función del cargo es la de dar certeza, a
través de la persona del funcionario receptor, del lugar en que aquéllas ocurrieron, aspecto de no menor
importancia, pues sólo es eficaz el cargo puesto en la secretaría” (3).
(…) El Juez Mario Filozof dijo: En cuanto a la invalidez planteada en la audiencia por no correrse vista
a la defensa oficial, no es posible hacerse eco de ésta.
La autodefensa es reconocida expresamente en el artículo 104 del ceremonial como derivación del
artículo 18 de la C.N. (C.S.J.N.
Fallos 199:431), robustecido ello por las previsiones del artículo 8, párrafo 2.d de la Convención
Americana de Derechos Humanos y el artículo 14 párrafo 3.d. del Pacto Internacional de Derechos
Civiles y Políticos.
Por otra parte, los argumentos que se le pidió a la defensa oficial que explicara y que podrían dar más
énfasis a la presentación de fs. (…), no difieren sustancialmente del contenido de dicho escrito por lo
que no se advierte violación alguna al derecho de defensa pues no se verifica el perjuicio que la
decisión pudo causarle.
Más aún, si se deseaba ampliar algún contenido bien pudieron plantearse a fs. (…) o en la propia
audiencia, debiendo señalarse que sus dudas no son argumento de nulificación.
En estas condiciones y compartiendo los argumentos del voto que antecede a sus conclusiones,
adhiero.
En consecuencia, el Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el punto I del auto de fs. (…) en cuanto
fueran materia de recurso, con costas de Alzada (arts. 530 y 531 del CPPN). (…)”.

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini, Filozof. (Sec.: Oberlander).

172
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

c. 5.446/11, BECERRA GONZÁLEZ, Gustavo Adolfo.


Rta.: 02/06/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correcc., Sala VI, c. 36863, “Messi, Milton Oscar”, rta.: 26/03/2009; (2)
Aporte de Caffarello, Claudio J., en Código Procesal Penal de la Nación Comentado y Anotado.
Almeyra, Miguel A., director, La Ley, Buenos Aires, 2007, tomo III, pág. 34; (3) Navarro, Guillermo
Rafael - Daray, Roberto Raúl, “Código Procesal Penal de la Nación. Análisis doctrinal y
jurisprudencial” Ed. Hammurabi, Bs. As. 2013, Tomo 1, pág. 532.

NULIDAD.

Rechazada. Agravio de la defensa: 1) Ausencia de autopsia. Omisión que no conduce a invalidar lo


actuado. 2) Falta de intervención de peritos de la defensa en diligencia. Medida ordenada cuando el
imputado aún no había sido convocado a prestar declaración indagatoria ni notificado de la existencia
de la causa. Confirmación.

Fallo: "(…) La defensa de E. B. recurrió en apelación el auto documentado a fs. (…), en cuanto se
rechazó la nulidad interpuesta por esa parte.
Al respecto, se comparten sustancialmente las razones desarrolladas por el señor juez de grado para no
hacer lugar al planteo formulado.
Ello es así, pues no se ha incurrido en un vicio generador de la máxima sanción procesal, ni tampoco se
evidencia vulnerada garantía constitucional alguna.
En tal sentido, la ausencia de una autopsia sobre el cuerpo de la víctima, más allá de que las causas de
la muerte han sido informadas en los diferentes peritajes e informes médicos (…), importa una omisión
que no conduce a invalidar lo actuado sino, en todo caso, a una discusión en torno del valor probatorio
de los otros elementos colectados.
Frente al agravio relacionado con la falta de intervención de los peritos de la defensa de B. en la
diligencia luciente a fs. (…), cabe recordar que la medida cuestionada fue ordenada cuando aquél aún
no había sido convocado a prestar declaración indagatoria ni notificado de la existencia de la presente
causa (…), de modo que no correspondía cursarle la notificación que se dice omitida (CPP, art. 258).
Cabe recordar además la doctrina de la Corte Federal, en lo atingente a que "En materia de nulidades
procesales prima un criterio de interpretación restrictiva y sólo cabe anular las actuaciones cuando el
vicio afecte un derecho o interés legítimo y cause un perjuicio irreparable. En efecto, la nulidad por
vicios formales carece de existencia autónoma dado el carácter accesorio e instrumental del derecho
procesal; exige, como presupuesto esencial, que el acto impugnado tenga trascendencia sobre la
garantía de la defensa en juicio o se traduzca en la restricción de algún otro derecho. De otro modo, la
sanción de nulidad aparecería respondiendo a un formalismo vacío, en desmedro de la idea de justicia y
de la pronta solución de las causas, en lo que también está interesado el orden público…" (Fallos:
325:1404).
Desde esa perspectiva, siempre que, tal como lo apuntó la Fiscalía General en la audiencia oral, los
cuestionamientos introducidos por la defensa remiten a su disconformidad acerca del modo en que se
valoraron los elementos de prueba, cabe homologar el auto recurrido.
En cuanto atañe a las costas causídicas, no se avizoran pautas objetivas que autoricen a apartarse del
principio general objetivo de la derrota (artículo 531 del ceremonial), por lo que habrá de confirmarse
el pronunciamiento apelado en tal sentido y también se impondrán las correspondientes al trámite
cumplido en esta instancia.
Por ello, el Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR, con costas de alzada, el auto documentado a fs. (…),
en cuanto fuera materia de recurso".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Divito, Cicciaro, Scotto. (Sec.: Besansón).


c. 16.412/11, GRECCO, Nancy A. y otro.
Rta.: 10/06/2015

PRESCRIPCIÓN DE LA ACCIÓN PENAL.

Rechazada. Defensa que alega no resulta de aplicación la figura de peculado sino de la de


administración infiel. Término de la prescripción: debe computarse la calificación legal más gravosa.
Co imputados que han ejercido la función pública. Incidencia en el curso de la prescripción.
Suspensión del plazo prescriptivo alcanza a todos los que participan del suceso mientras cualquiera se
encuentre desempeñando un cargo público. Extinción de la acción que no ha operado. Confirmación.

Fallo: “(…) Con motivo del recurso de apelación deducido contra el auto documentado a fs. (…) por el
que no se hizo lugar a la prescripción de la acción penal respecto de O. H. R., se celebró la audiencia
oral prevista en el artículo 454 del Código Procesal Penal.
El recurrente se agravió pues consideró que no resulta de aplicación la figura prevista en el artículo 261
del Código Penal, sino que debe calificarse el caso como una administración infiel (artículo 174, inciso
5to del código sustantivo). Sostuvo además que han ocurrido dilaciones indebidas en el trámite de la
causa que colisionan con el derecho a ser juzgado en un plazo razonable y que se ha menoscabado la

173
garantía del doble conforme mediante el acogimiento del criterio definido por la Sala III de la Cámara
Federal de Casación Penal.
Al respecto, debe ponderarse que de adverso a lo alegado por el recurrente, la aplicación al caso de la
figura de peculado ya ha sido tratada por el Tribunal en las distintas incidencias suscitadas (…).
En ese sentido, debe considerarse que la Sala adhiere a la doctrina según la cual para establecer el
término de la prescripción de la acción en un proceso penal, debe computarse la calificación legal más
gravosa que razonablemente pueda aplicarse, pues ha de estarse a aquélla favorable a su vigencia, ello
en relación con la certeza negativa exigida para el dictado de un temperamento liberatorio (1).
En esa inteligencia, no puede prosperar el agravio relativo a la significación jurídica a la que debe
estarse para resolver esta incidencia, pues, de acuerdo con lo argumentado por la Fiscalía, no es posible
descartar la posible tipificación de la figura del artículo 261 del código sustantivo, ya tratada por la
Sala en la intervención documentada a fs. (…) del incidente de prescripción de F. J. D. C.
Sentado cuanto precede, aun cuando pudiera considerarse que, a la fecha, habría transcurrido el
término para que opere la prescripción desde el último acto interruptivo -primer llamado a prestar
declaración indagatoria del 18 de agosto de 2004-, lo cierto es que, conforme lo sostuvo la Sala en su
anterior intervención, la circunstancia de hallarse involucrados otros imputados que han ejercido la
función pública “…podría incidir en la suspensión del curso de la prescripción…”, en tanto resulta de
aplicación al sub examen lo dispuesto en el segundo párrafo del artículo 67 del Código Penal (…).
En ese sentido, debe valorarse que dentro de la maniobra global investigada, se encuentra imputado J.
L. G. quien, conforme lo resaltó la Fiscalía General en la audiencia oral, se ha desempeñado como Jefe
del Departamento Urbanístico y Legislación dependiente de la Dirección General de Fiscalización de
Obra y Catastro del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, al menos hasta el año 2007 (…).
Por otra parte, el coimputado E. O., al momento del otorgamiento del crédito, ostentaba el cargo de
Subgerente General Adscripto del Banco de la Provincia de Buenos Aires y se desempeñó en forma
ininterrumpida como funcionario de la mencionada entidad bancaria desde 1978 y al menos hasta el
mes de diciembre del año 2011, cuando se retiró con el cargo de Gerente General (…).
En esa inteligencia, se estima que la prescripción de la acción penal permaneció suspendida cuanto
menos hasta la época antes indicada, en que habría recobrado virtualidad su curso.
Ello, sin perjuicio de que aún debe establecerse si otras de las personas imputadas por el Ministerio
Público Fiscal continúan desempeñándose como funcionarios públicos y en su caso, la fecha en que
hubieran cesado en su última función (ver fs. x, dictamen del Fiscal General J. D. L. en el incidente de
prescripción de F. J. D. C.).
En virtud de expuesto, siempre que la suspensión del plazo de prescripción (art. 67, segundo párrafo,
del Código Penal) alcanza a todos los que participan de los sucesos, mientras cualquiera de ellos se
encuentre desempeñando un cargo público, se considera que no ha operado la extinción de la acción
penal (2).
Dicha norma opera como excepción a la regla contenida en el párrafo quinto del mencionado artículo
(incorporada por ley 25.590, publicada en el B.O. 11/1/05), en cuanto establece que la prescripción se
suspende separadamente para cada uno de los delitos y para cada uno de sus partícipes.
En ese sentido, se destaca que la Corte Suprema de Justicia de la Nación, al intervenir en la causa en la
que se investiga la venta del predio ferial, revocó la decisión de la Sala III de la Cámara Federal de
Casación Penal que había declarado extinguida la acción penal, para lo cual se remitió a los
fundamentos invocados por el Fiscal General, quien sostuvo que “el inicio de la prescripción debe ser
ubicado en el momento en que todos los imputados se encontraban fuera de la función pública…” (3).
Ello, sin perjuicio de lo dictaminado por el Fiscal General J. A. D. L. en torno al tramo imputado a I.
L., que consistió en la firma de la resolución del 18 de junio de 2004 por la cual el Gobierno de la
Ciudad concedió a la Sociedad Rural Argentina permisos y autorizaciones contrarios a las leyes y que
según la Fiscalía integra la maniobra global investigada (...).
En ese entendimiento, siempre que dentro de la maniobra global se investigan hechos que, según la
requisitoria fiscal obrante a fs. 507/525 del principal, se sucedieron cuanto menos hasta el dictado de la
disposición N° 176- DGPINT del 18 de junio de 2004 por parte del encausado I. L. y habrían
continuado el 24 de noviembre de 2005, mediante la presentación efectuada por el abogado P. A. P.,
ante la Sala I de la Excma. Cámara en lo Contencioso Administrativo y Tributario de la justicia local,
en el expediente N° 13.541, caratulado “D., R. Á. y otros c/ G.C.B.A. S/ medida autosatisfactiva”, en el
que, precisamente, se promovía la nulidad de dicho acto administrativo, aun descartando por hipótesis
la aplicación al caso de la modificación introducida por la ley 25.188, el término de la prescripción
debería comenzar a computarse desde la época antes indicada, en la que también ubicó el inicio del
plazo el Fiscal General J. A. D. L. (…).
Por manera que no puede descartarse que lo mencionado forme parte de la maniobra global. Luego, el
grado de participación en cada tramo debe ser evaluado en otro momento del proceso y no en el
acotado margen de este incidente.
En torno al restante agravio relacionado con la violación del plazo razonable, es dable destacar que el
Tribunal ya se ha pronunciado sobre el tópico, al considerar que “…no puede entenderse vulnerada tal
garantía, si se repara en que no ha mediado desinterés estatal en la persecución del presunto delito…”
(…).
Conjuntamente, se valoró la aludida decisión que la Corte Suprema de Justicia de la Nación adoptó el
pasado 4 de febrero de 2014 -traída a colación por la jueza A. M. F. en su voto al resolver en el
incidente de prescripción del coimputado A. M.- mediante la cual se dejó sin efecto el fallo de la

174
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

Cámara Federal de Casación Penal que había declarado extinguida la acción penal por violación a la
garantía del plazo razonable respecto de Carlos Saúl Menem en el marco de la “causa principal” en la
que se investiga la venta del Predio Ferial por parte de funcionarios del gobierno nacional a la Sociedad
Rural Argentina (…).
Finalmente, no puede prosperar el agravio relacionado con la garantía del doble conforme, desde que,
precisamente, se ve satisfecha mediante la intervención de esta Alzada.
Consecuentemente, y con aplicación de costas por su orden en razón de que la duración del proceso
puede otorgar plausibilidad al planteo, esta Sala del Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR la
resolución dictada a fs. (…), en cuanto ha sido materia de recurso. Costas por su orden”.

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Cicciaro, Scotto, Pinto. (Prosec. Ad Hoc.: Sposetti).
c. 21.666/1996/83, RIAL, Osvaldo Hugo y otros
Rta.: 26/06/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correc., Sala VII, c. 14.450/06 “Pierini, Pablo Alejandro”, rta: 20/12/2013. (2)
C.N.Crim. y Correc., Sala VII, c. 36.196, “Distéfano, Pedro”, rta: 10/03/2009 y c. 46.224-14-16,
“Risso, Ernesto Ricardo”, rta: 18/02/2015. (3) C.S.J.N., M. 1093, XLVII, “Menem, Carlos Saúl”, rta:
04/02/2014.

PRESCRIPCIÓN DE LA ACCIÓN PENAL.

Rechazada. Defraudacion por administración fraudulenta. Concepto jurídico indivisible. Hecho único
con distintas acciones de infidelidad o abuso. Unidad de designio. Cómputo a realizar a partir de la
fecha del perjuicio patrimonial. No transcurso del máximo de la pena prevista para el delito imputado
desde la fecha de rendición en que el imputado rindiera cuentas y el primer llamado a prestar
declaración indagatoria. Confirmación.

Fallo: "(...) Es nuestro criterio que "las distintas acciones de infidelidad o abuso realizadas bajo un
mismo mandato constituyen un hecho único y global de administración fraudulenta… pues la
administración es un concepto jurídico indivisible -sin perjuicio de su divisibilidad material, espacial o
temporal- que presenta un único designio y una sola rendición de cuentas final" (1). Es decir, cada acto
infiel no implica reiteración, no convierte el delito en plural, sino que conforma una única conducta
ilícita cuyo desdoblamiento implicaría una violación al principio "non bis in ídem" (2). Esa línea
también se ha pronunciado la doctrina (3).
Por lo tanto, los actos deben estar identificados por una unidad de designio, lo cual implica una
voluntad inalterada en el tiempo para defraudar de forma sucesiva los intereses confiados.
Resulta asi imprescindible que el autor y el sujeto pasivo se identifiquen, pues sólo en tales condiciones
podrá afirmarse la existencia de una conducta continuada (4).
En correlato con ello, el art. 63 del C.P. es claro al disponer que la prescripción "comenzará a correr
desde la medianoche del día en que se cometió el delito o, si éste fuere continuo, en que cesó de
cometerse". De allí que el cómputo debe hacerse desde la fecha del perjuicio patrimonial, mas este no
necesariamente debe coincidir con la conducta infiel, ya que según las circunstancias particulares del
caso, en algunas hipótesis puede considerarse que el momento de la rendición de cuentas es el que debe
tomarse como su punto de partida. Si una sola es la gestión, cobra importancia la fecha en la cual el
sujeto activo cesó en su función de administrador y, por tanto, dejó de tener a su cuidado el manejo del
patrimonio de su mandante" (5).
Tal el caso de autos, pues aún cuando la descripción fáctica plasmada a (fs. ...) haga alusión a episodios
ocurridos con anterioridad a enero de 2008, no puede soslayarse que a partir de 2007 el causante no
habría efectuado las rendiciones de cuentas respectivas, conforme lo revelan las constancias de (fs. ...),
ni practicó una rendición final al término de su mandato.
Ponderando que ello tuvo lugar el 1 de junio de 2009 y que el llamado a indagatoria se produjo el 16 de
septiembre de 2014, acto éste que interrumpe el curso de la prescripción de la acción penal, dable es
concluir que la decisión recurrida, en tanto no hace lugar a la extinción de la acción penal por tal
motivo, resulta ajustada a derecho y debe ser confirmada.
Por ello, el tribunal RESUELVE: I. Confirmar el auto traído a estudio en cuanto fue materia de estudio.
(...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala IV, González, Pociello Argerich. (Sec.: Barros).


c. 46.464/11/1, QUINTANS, Ruben M.
Rta.: 17/04/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correc., Sala IV, c. 731/08 "López", rta. 24/2/2009 y c. 210/09 "River Plate",
rta. 13/8/09 y C.S.J.N., "Pompas", rta. 3/12/2002 publicado en La Ley 2003 D, 60. (2) C.N.Crim. y
Correc., Sala V, c. 38.108, "Carman, Carlos Alberto", rta. el 23/11/09. (3) Navarro, Guillermo Rafael,
"Fraudes", Nuevo Pensamiento Judicial, Buenos Aires, 1994, págs. 121/122) y la jurisprudencia
(C.N.C.P., Sala IV, causa n° 1.166, reg. 2454.4, "Larroude, María Graciela", rta. 3 3 00). (4) Causa n°
31.814 "Banco de Galicia y Buenos Aires", rta. el 28/05/07. (5) C.N.Crim. y Correc., Sala IV, c.

175
1588/11, "Constanzo", rta. 31/10/2011; c. 34.302, "Tarbuch", rta. 19/5/2008 y c. 34.621, "Aranovich",
rta. 3/7/2008.

PRESCRIPCIÓN DE LA ACCIÓN PENAL.

Sobreseimiento. Quiebra fraudulenta. Acto de fraude atribuido que sería posterior a la declaración de
quiebra -sustracción de un rodado perteneciente al proceso falencial y enajenación-. Regla general:
Término que debe correr desde que queda firme el auto declarativo de quiebra. Caso en el que
corresponde que el plazo comience a ser contabilizado a partir del acto de fraude. Revocación.

Fallo: "(…) el representante del Ministerio Público Fiscal realizó una adecuada confrontación del auto
impugnado y en tal sentido, consideramos que la decisión apelada debe ser revocada (…) se le atribuye
a R.L.V. -quien había sido declarado en quiebra el 15 de octubre de 1996 en el expediente n° 58.681
del Juzgado Comercial n° 9, Secretaría n° 18- haber enajenado en mayo del año 2013 el automóvil de
su propiedad Renault 11, dominio XX (…), que correspondía a la masa de acreedores, y en su
perjuicio.
Si bien es cierto, que la regla general en el delito de quiebra fraudulenta es que el término de
prescripción empieza a correr desde que queda firme el auto declarativo de la quiebra, lo cierto es que
en sucesos como el presente se da una excepción a ese principio dado que el acto de fraude que se le
atribuye al imputado habría sido cometido con posterioridad a la declaración de quiebra.
"La consumación del delito depende del momento en que se realiza el acto fraudulento, si el acto fue
posterior a la declaración de quiebra, el tipo se consuma cuando ocurre el resultado -la disminución del
patrimonio, aunque sea ficticia-" (1).
(…) entendemos que la sustracción del bien se consumó el 9 de mayo de 2013, cuando el imputado en
pleno conocimiento del proceso falencial y que los automóviles resultaban objetos de la quiebra,
enajenó el rodado en cuestión. Es entonces, a partir de dicho momento a partir del cual debe comenzar
a computarse el plazo de prescripción.
Por ello, examinado el máximo de la pena prevista para el delito atribuido a V. a la luz de la fecha de
consumación de la quiebra (9 de mayo de 2013), entendemos que no ha operado el plazo previsto en el
art. 62, inc. 2° del Código Penal.
(…) el tribunal RESUELVE: REVOCAR el auto decisorio de fs. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, López González, Pinto. (Sec.: Raña).


c. 26.395/14, VIOLA, Roberto L.
Rta.: 23/02/2015

Se citó: (1) Andrés José D'Alessio y Mauro A. Divito, "Código Penal de la Nación, Comentado y
Anotado", 2ª edición, Tomo II, Parte Especial, Buenos Aires, La Ley, 2009, pág. 802.

PRESCRIPCIÓN DE LA ACCIÓN PENAL.

Rechazada. Uso de documento privado falso en concurso ideal con estafa en tentativa, en concurso real
con falsificación de documento privado. 1) Último acto positivo ejecutado en expediente civil:
presentación de escrito con firmas falsas. Fecha desde la que no transcurrió el plazo para que opere el
instituto de la prescripción. 2) Concurso ideal de delitos. Debe estarse al que establece la pena mayor.
Único suceso. Término de la prescripción que se rige por la unidad de hecho. Tesis del paralelismo:
aplicación en supuestos de concurso material de delitos. Confirmación.

Fallo: "(…) El imputado A. recurrió la decisión pasada a fs.


(…), en cuanto se rechazó la excepción de falta de acción por prescripción de la acción penal y se le
impusieron las costas.
El hecho atribuido al encausado fue calificado provisoriamente, a los efectos de resolver esta
incidencia, como constitutivo de los delitos de uso de documento privado falso en concurso ideal con
estafa en grado de tentativa, en concurso real con falsificación de documento privado --equiparado a
público en cuanto a la pena- y estafa en grado de tentativa, ambos en concurso ideal (artículos 42, 45,
54, 55, 172, 292, primer párrafo, última parte y 296 del Código Penal).
Sentado ello, se repara en torno al evento identificado como "A.
I." que el último acto positivo ejecutado en el expediente 41.761/97, caratulado Consorcio de
propietarios P. X c/ A., M. C. s/ ejecución de expensas" del Juzgado Nacional en lo Civil Nº 68 se
remonta al 21 de marzo de 2014 y consiste en la presentación del escrito con firmas falsas de M. C. A.
y de su abogado (…), por lo que se advierte que desde esa fecha, no ha transcurrido siquiera el plazo
mínimo previsto a los fines de que opere el instituto de la prescripción penal (artículo 62, inciso 2, del
Código Penal).
De otro lado, tampoco puede verificarse la prescripción de la acción penal aun en el caso de aplicarse
la reducción de la escala penal conforme dispone el artículo 44 del Código Penal.
En lo relativo al hecho identificado como "A.II.", cabe señalar que al tratarse de un concurso ideal de
delitos, a los fines de computar el plazo de prescripción de la acción penal, debe estarse al que
establece la pena mayor, pues al conformar un único suceso, el término de la prescripción se rige por

176
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

esa unidad de hecho, sin que resulte de aplicación la tesis del paralelismo (art. 67 in fine del Código
Penal), instituto que sólo puede predicarse en los supuestos de un concurso material de delitos (1).
De tal suerte, no se ha extinguido el curso de la acción, siempre que el último acto positivo del
supuesto conato de estafa data del 27 de febrero de 2013 y el plazo a computar es de cuatro años (…),
momento que debe ser considerado a los fines del inicio de la prescripción.
Asimismo, no habiéndose mantenido en la audiencia oral el recurso interpuesto respecto a la
imposición de costas decidido en el punto 2 de la resolución impugnada, corresponde tenerlo por
desierto.
Por último, frente a la ausencia de razones que justifiquen apartarse del principio general de la derrota,
el apelante deberá soportar las costas de alzada.
En consecuencia, el Tribunal RESUELVE: I. CONFIRMAR de la resolución pasada a fs. (…), en
cuanto ha sido materia de recurso, con costas de alzada. II. Tener por desierto el recurso de apelación
interpuesto contra la imposición de costas (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Cicciaro, Scotto. (Sec.: Sánchez).


c. 73.682/14, ALITISZ, Constantino Miguel.
Rta.: 19/03/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correc., Sala VII, c. 39.377, "Orlando Patricia", rta: 26/08/2010.

PRESCRIPCIÓN DE LA ACCIÓN PENAL.

Procedencia. Co-imputado que es funcionario público. Suspensión del plazo que alcanza a todos los
que participan del suceso, mientras cualquiera se encuentre desempeñando un cargo público.
Revocatoria.

Fallo: "(…) El Ministerio Público Fiscal recurrió la decisión extendida a fs. (…) por la que se declaró
extinguida la acción penal por prescripción en relación con E. R. R. y se dictó su sobreseimiento (…).
Liminarmente, debe señalarse que en el caso a estudio, el imputado revistió la calidad de funcionario
público hasta el 1° de septiembre de 2007, al acogerse al beneficio jubilatorio.
Sin perjuicio de ello y tal como lo puntualizó el recurrente, debe valorarse que por el mismo hecho se
halla imputado J. C. B., quien continuaría revistiendo la condición de integrante del C.M.F., razón por
la que se estima que no ha operado la extinción de la acción penal, siempre que la suspensión del plazo
de prescripción (art. 67, segundo párrafo, del Código Penal) alcanza a todos los que participan del
suceso, mientras cualquiera de ellos se encuentre desempeñando un cargo público (1).
En consecuencia, esta Sala RESUELVE: REVOCAR la resolución documentada a fs. (…), en cuanto
fuera materia de recurso".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Divito, Cicciaro, Scotto. (Prosec. Ad Hoc.: Grisi).
c. 46.224/16, RISSO, Ernesto Ricardo.
Rta.: 18/02/2015

Se citó: (1) C..N.Crim. y Correc., Sala VII, c. 36.196, "Distefano, Pedro", rta: 10/03/2009.

PRESCRIPCIÓN DE LA ACCIÓN PENAL.

Procedencia. Agravio del fiscal: Aplicación de la doctrina del plenario "Prinzo". Rechazo. Postura que
dificulta la compatibilización del principio de inocencia con el derecho a ser juzgado dentro de un
plazo razonable. Rechazo por parte de la C.S.J.N. Caso en el que ha transcurrido desde el llamado a
prestar declaración indagatoria el máximo de la pena prevista para el delito imputado sin que se
produzcan actos con carácter interruptivo. Confirmación. Disidencia: Caso en particular en que sí
puede aplicarse la doctrina del plenario "Prinzo".Necesidad de aplicar un criterio de razonabilidad.
Hecho que interrumpiría que resulta ser un suceso que forma parte del objeto procesal de la causa en la
que deben resolver el recurso y no el de una investigación totalmente ajena a la aquí sustanciada.
Paralización del trámite que no importa un avasallamiento de la garantía de defensa en juicio.
Revocatoria.

Fallo: "(…), convoca al Tribunal el recurso de apelación interpuesto por la defensa contra los puntos I
y II del auto documentado a fs. (…), en cuanto se declaró extinguida la acción penal por prescripción
respecto del hecho "1", atribuido a E. R. M., a quien se le sobreseyó en consecuencia.
El juez Juan Esteban Cicciaro dijo: El Ministerio Público Fiscal ha bregado por la aplicación, en el
caso, de la doctrina plenaria emergente del fallo dictado por esta Cámara en "Prinzo" (Fallos Plenarios,
tomo VII, p. 468).
Al respecto, entiendo que debe seguirse un criterio de razonabilidad que atienda a cada situación en
particular, puesto que, de un lado, no podría desatenderse el dato cierto de la verificación próxima de
una causal de interrupción del curso de la prescripción, como la comisión de otro delito, y por otra
parte, que la paralización de un proceso a la espera de los avatares que imponga otro cuya finalización
se desconoce importaría un avasallamiento de la garantía de la defensa en juicio (art. 18 de la

177
Constitución Nacional), en la medida en que el causante no obtendría justicia en un plazo razonable
(C.N.Crim. y Correc., Sala VII, c. 38.968, "Cruz, Roberto", rta: 17/06/2010 y c. 40.470, "Krikorian,
Adriana", rta: 14/03/2011).
Con sustento en ello, estimo que el hecho acaecido el 17 de noviembre de 2013 (…), por el que se
dictó el procesamiento (…) puede operar como obstáculo para decidir la extinción de la acción penal
por prescripción respecto del episodio presuntamente cometido el 30 de mayo de 2012, pues ambos
sucesos constituyen el objeto procesal de esta causa (…) y no el de un proceso totalmente ajeno al aquí
sustanciado.
En esa dirección, se evalúa la incidencia que la investigación abierta respecto de la comisión de un
nuevo delito tendría sobre el curso prescriptivo del primer hecho y se comparten los argumentos del
señor fiscal general en el marco de la audiencia celebrada, por cuanto el caso del sub examen no resulta
abarcado por las hipótesis de excepción a la doctrina plenaria emanada del fallo Prinzo.
Ello es así, pues con prescindencia de la causa número 19.025 que se le sigue actualmente al causante
ante el Juzgado de Garantías N° 2 del Departamento Judicial de San Martín, provincia de Buenos
Aires, los hechos que se le atribuyen al causante en esta jurisdicción metropolitana no sólo están siendo
investigados de manera conjunta ante un mismo tribunal, sino que, además, no puede sostenerse que la
paralización del trámite de la prescripción importe un avasallamiento de la garantía de la defensa en
juicio (art. 18 de la Constitución Nacional), en la medida en que no se impone evaluar la incertidumbre
que ofrece el proceso ajeno a los aquí sustanciados (C.N.Crim. y Correc., Sala VII, c. 29.387, "Sivilo,
Aldo", rta: 19/12/2007; c. 34.995, "Garacciolo, Roberto", rta: 03/09/2008; c. 37.090, "Canistra, Raúl
Héctor", rta: 10/08/2009 y c. 37.285, "Felmer, Adolfo", rta: 25/09/2009).
Por ello, considero que resulta pertinente acoger la solución propiciada por el recurrente y extiendo
este voto para que se revoque la resolución recaída, con la finalidad de que la cuestión sea evaluada y
juzgada integralmente.
El juez Mauro A. Divito dijo: He sostenido en oportunidades anteriores (por caso, causas números
38.968, "Cruz, Roberto", del 17-6-2010 y 40.470, "Krikorian, Adriana", del 14-3-2011), que la doctrina
plenaria emergente de "Prinzo", además de ser difícil de compatibilizar con el principio de inocencia y
el derecho a ser juzgado dentro de un plazo razonable, ha sido rechazada por la Corte Suprema de
Justicia de la Nación (Fallos 322:717, considerando 5°, tercer párrafo).
Por tal motivo, dado que luego de haberse ordenado respecto de E. R. M. el llamado a prestar
declaración indagatoria el 2 de agosto de 2012 no se produjo otro acto con carácter interruptivo del
curso de la prescripción de la acción penal y en atención a que desde esa fecha ha transcurrido el lapso
requerido por la ley -dos años- (artículos 62, inciso 2° y 67, párrafo cuarto, inciso "b", del Código
Penal) en función de la pena prevista para el delito de resistencia a la autoridad (art. 239 del Código
Penal), debe confirmarse en todos sus términos la decisión recurrida.
Así voto.
El juez Mariano A. Scotto dijo: Tal como surge de mi voto en la causa número 209/13 "Fernández, D."
(Sala de Feria A, del 22-1-13) y siguiendo el precedente "Barlett, Daniel" (Cámara Federal de Casación
Penal, Sala IV), cabe considerar que la solución propiciada por el recurrente importa la creación
pretoriana de una causal de interrupción o de suspensión que resulta contraria a la garantía del debido
proceso legal establecida en el artículo 18 de la Constitución Nacional.
Por ello y dado que la doctrina plenaria aludida ya no resulta de aplicación obligatoria (Cámara Federal
de Casación Penal, Sala I, "Marchant Jara, Daniel", del 10-6-2002), concluyo en que la resolución
dictada debe ser confirmada, en la medida en que desde el llamado a prestar declaración indagatoria del
2 de agosto de 2012, no se han verificado otros actos interruptivos del curso de la prescripción de la
acción penal y han transcurrido los dos años de pena máxima con los que se reprime el hecho imputado
(art. 239 del Código Penal).
En consecuencia, esta Sala del Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR los puntos I y II de la decisión
adoptada a fs. (…), en cuanto fuera materia de recurso".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Divito, Cicciaro (en disidencia), Scotto. (Sec.: Sánchez).
c. 550.072.171/12, MARTINEZ, Emiliano Ramón.
Rta.: 28/04/2015

PRESCRIPCIÓN DE LA ACCIÓN PENAL

Extinción de la acción y sobreseimiento. Damnificada nacida en 1986 que alcanzó la mayoría de edad
en el 2004 y denuncia, en el año 2014, por abuso sexual, al concubino de su madre x hechos ocurridos
entre el año 1993 y 2000. Fiscalía que se agravia debido a que la acción penal no estaría prescripta ya
que corresponde contar el término a partir de que la menor alcanzó la mayoría de edad, ello de
conformidad con lo establecido por la ley 26.705. Rechazo. Imposibilidad de aplicar la normativa
aludida a sucesos ocurridos cuando la norma no se encontraba vigente. Afectación al principio de
irretroactividad de la ley penal que sólo admite excepción en el supuesto de ser la norma posterior más
benigna. Caso al que no corresponde aplicar la excepción. Confirmación.

Fallo: "(...) Estas actuaciones tuvieron inicio a partir de la denuncia formulada el 24 de febrero de 2014
por N. C. M. O. -nacida el 19/10/1986-, en razón de los hechos de abuso sexual a los que habría sido
sometida durante su infancia y que habrían sido perpetrados por el concubino de su madre, C. A. C.

178
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

Particularmente, los sucesos se habrían iniciado en el año 1993, extendiéndose hasta el 2000.
La fiscalía sostiene que la acción penal no se encontraría extinguida pues el plazo de la prescripción
habría comenzado a correr a partir de que la denunciante alcanzó la mayoría de edad, esto es, desde el
año 2004 (art. 63, segundo párrafo, del C.P.).
Ahora bien, lleva dicho la Sala que la actual redacción del artículo 63, sancionada por ley 26.705 y
publicada en el boletín oficial el 5 de octubre de 2011, no puede ser aplicada a sucesos ocurridos
cuando dicha norma no se encontraba vigente, tal como ocurre en el sub examine, pues ello importaría
afectar el principio de irretroactividad de la ley penal, que sólo admite excepción en el supuesto de ser
la norma posterior más benigna, no siendo el caso de la aquí aludida (1).
En efecto, en el precedente mencionado, con cita de (2), se sostuvo que "las leyes ex post facto que
implican empeorar las condiciones de los infractores transgrede el principio constitucional de
irretroactividad de la ley penal (art. 18 de la CN) en cuyo concepto incluye el instituto de la
prescripción".
Así las cosas, compartimos lo sostenido por el juez de grado en cuanto a que este sumario tuvo su
génesis a partir de las imputaciones formuladas en febrero de 2014, vinculadas con sucesos ocurridos
hace más de catorce años, es decir que, incluso antes de que se efectuara la respectiva denuncia, ya
había trascurrido el plazo de prescripción del delito endilgado a C. En consecuencia, aún cuando no
mediara una decisión jurisdiccional al respecto, la acción penal se encontraba extinta pues dicha
circunstancia opera de pleno derecho.
En consecuencia, el Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el punto "(...)" del auto de "(fs. ...)", en
cuanto fue materia de recurso. (...)"

C.N.Crim. y Correc., Sala IV, Seijas, González Palazzo, González. (Prosec.Cám.: Godnjavec).
c. 11.750/14, C.,C.A.
Rta.: 20/02/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correc., Sala IV, c. 23744/11 "S. A.", rta. 9/4/2013. (2) C.S.J.N. Fallos
294:68.

PRESCRIPCION DE LA ACCIÓN PENAL

Extinción de la acción y sobreseimiento. Lesiones dolosas leves en concurso ideal con amenazas
simples. Agravio del fiscal: Aplicación de la agravante por la intervención en el hecho de un menor de
edad. Rechazo. Elementos que no permiten demostrar que la imputada mayor tuvo intención de
deslindar la responsabilidad en la menor. Transcurso del plazo del artículo 62, inciso 2° del CP, sin
interrupciones. Confirmación. Disidencia: Agravante que se aplica por la sóla intervención del menor
de edad. No transcurso del máximo de la pena prevista. Revocación.

Fallo: "(…) II.- La jueza Mirta L. López González dijo: (…)la fiscal describió el hecho y solicitó al
juez que reciba declaración indagatoria a M. E. N. L.. Al contestar la vista conferida por el instructor
en razón de poder hallarse extinguida la acción por prescripción, el acusador público destacó que
operaría la agravante prevista en el artículo 92, en función del 80, respecto del 89 del Código Penal y la
prevista en el artículo 41 quater respecto de las lesiones y amenazas.
(…) el juez descartó la previsión del artículo 92 del CP, por no estar vigente la ley 26.791 al momento
del hecho, así como también, el artículo 41 quater, por no haber elementos que permitan demostrar que
la imputada tuvo intención de deslindar la responsabilidad en su hija menor de edad. (…) calificó al
suceso como lesiones dolosas leves en concurso ideal con amenazas simples y consideró extinguida la
acción penal por prescripción.
(…) comparto el temperamento adoptado por el juzgador por entender que se ajusta a un correcto
análisis de las constancias del legajo y al derecho aplicable al caso.
(…) la intención del legislador al introducir esta agravante "no fue la circunstancia objetiva de la
intervención de un menor en un hecho grupal, sino que ésta tenga la finalidad de descargar la
responsabilidad en aquél, circunstancia que en cada caso deberá ser, como lo son todas las agravantes,
de concreta acreditación en lo que hace al tipo subjetivo, por tratarse de un especial elemento subjetivo
distinto del dolo" (causa n° 37.744, "B. R.", rta: 3/9/09, Sala V, entre otras).
(…) observo que el plexo probatorio reunido no permite determinar que la encausada hubiere
pretendido descargar su responsabilidad en su hija menor.
(…) al no resultar de aplicación la agravante en estudio, coincido con los argumentos del juez en
cuanto a que aquí ha transcurrido el plazo del artículo 62, inciso 2° del CP desde la fecha del hecho -
12/10/2012- sin interrupciones y, por tanto, corresponde declarar extinguida la acción penal por
prescripción. Así, voto por confirmar el auto en crisis.
Disidencia del juez Ricardo M. Pinto dijo: Circunscripto el análisis del caso al agravio introducido por
la parte apelante respecto de la aplicación de la previsión del artículo 41 quater al concurso ideal entre
las lesiones y amenazas que se le endilga a M. E. N. L., disiento con la postura de mi distinguida
colega preopinante.
(…) el agravante en cuestión "no especifica que debe comprobarse un deslinde de responsabilidad
hacia el menor para su procedencia, sino que basta con su intervención (…) se aplica a las personas de
dieciocho años o más que cometan un ilícito con la intervención de otra que no haya cumplido esa edad

179
al momento del hecho, sin que sea necesario, a tal fin, acreditar especiales intenciones de los actores
"mayores", sobre los cuales el texto legal ninguna referencia formula" (causa n° 2804/2015, "B., E.
K.", rta. 10/2/2015, Sala V, entre otras).
(…) se advierte de la imputada conocía la edad de la menor -pues es su madre- aspecto que exige el
tipo penal (ver voto de los Ministros Lorenzetti, Maqueda y Zaffaroni, en la causa n° 125 XLVI, "N.,
M. s/ causa n° 12.183", del 24/9/2013).
(…) al igual que el representante del Ministerio Público Fiscal, no puede descartarse, de momento, que
la conducta que se le atribuye a la imputada pueda constituir razonablemente la prescripta en los
artículos 89 y 149bis del Código Penal, agravada por la aplicación del 41 quater.
(…) en cuestiones de prescripción, debe estarse a la asignación jurídica más gravosa (ver causa n°
65462 "M., D. C. s/prescripción", rta. 31/3/2014, entre otras).
Por su parte, la Sala I de la Cámara Federal de Casación Penal ha establecido que "para establecer el
término de la prescripción de la acción en un proceso penal debe estarse a la pena del delito más
severamente reprimido de los atribuidos al inculpado y a la posible calificación más gravosa que
razonablemente pueda corresponderle" (ver causa n° 13657 -registro n° 19558.1-, "L., L. A." del
17/5/2012).
(…) en virtud de la calificación legal asignada al caso, no ha operado aún el tiempo que exige el
artículo 62, inciso 2° del CP desde la fecha del hecho -12/10/2012- y, por tanto, no debe declararse
extinguida la acción penal por prescripción. Así, voto por revocar la decisión impugnada.
El juez Mauro A. Divito dijo: (…) adhiero al voto de la Dra. Mirta López González, por coincidir con
sus fundamentos y la solución propuesta, tal como me pronuncié en anteriores precedentes (causa nº
36.702, "Atencio", rta: 19/5/09, causa nº 39.382, "Carrero" rta: 27/08/10, ambas de la Sala VII, entre
otras).
(…) el tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el auto de fs. (…)"

C.N.Crim. y Correc., Sala V, López González, Pinto (en disidencia), Divito. (Sec.: Raña).
c. 39385/12, N. L., M. E.
Rta.: 10/06/2015

PRESCRIPCION DE LA ACCIÓN PENAL.

Extinción de la acción penal por prescripción y sobreseimiento del imputado. Falso testimonio. Fiscal
que recurre. Imputado que prestó declaración varias veces. Momento de consumación del falso
testimonio: Individualización. Transcurso en exceso del plazo previsto por el inc. 2 del art. 62 del C.P.
Confirmación.

Fallo: "(…) El delito imputado a P. R. C. es el de falso testimonio, previsto en el art. 275, primer
párrafo, del Código Penal, que contempla una pena máxima de cuatro años de prisión (art. 275 del CP).
De la compulsa del expediente N° (…) que tramitara ante el Juzgado Nacional en lo Civil N° (…), que
este tribunal solicitó a efectos de resolver el presente (fs. …), surge que el 17 de mayo de 2010 el
prevenido prestó declaración bajo juramento de decir verdad en el marco de dicho proceso, caratulado
"…", momento en el cual habría sido mendaz (fs. … del expte. civil).
Con posterioridad, el 13 de febrero de 2013, ratificó su anterior deposición y respondió otras preguntas
del tribunal (fs. ...).
Dado que fue convocado a prestar declaración indagatoria el 11 de agosto de 2014, el representante del
Ministerio Público Fiscal consideró que desde la última declaración prestada por C. no había
transcurrido el plazo para tener por extinguida la acción penal por prescripción y solicitó, por ende, que
se revocara el auto impugnado.
Empero, entendemos que corresponde confirmar la resolución puesta en crisis. Los fundamentos de
nuestra decisión obligan a efectuar un repaso de las constancias del expediente civil, específicamente,
de aquellas incorporadas entre la primera declaración y su segunda convocatoria.
En su deposición original, P. R. C. afirmó haber presenciado el accidente de tránsito que damnificó al
actor, A. G. A., por la maniobra riesgosa atribuida a la demandada y a raíz de la cual el accionante
habría sufrido lesiones y daños en la motocicleta que comandaba. Expresó también no conocer a A. ni
al testigo propuesto en el incidente generado en un beneficio de litigar sin gastos, P. B. A (fs. …) se
agregaron las conclusiones del perito ingeniero mecánico que, en síntesis, contrarrestaban la versión de
la parte actora sobre la dinámica del suceso, dando mayores precisiones sobre ello a (fs. …).
El 19 de marzo de 2012, por disposición de la Sra. Jueza, se consultó la red social "Facebook" con el
objeto de constatar un posible vínculo entre el actor y el testigo C. (fs. …), advirtiéndose que figuraban
mutuamente entre la "lista de amigos" de cada uno de ellos (entre otros contactos), como también en la
del referido B., constancias que fueron incorporadas a (fs. …).
Tras ello y a partir de las facultades que confiere el art. 36, inciso 4, acápites a) y b) del Código
Procesal Civil y Comercial de la Nación, se convocó a las partes a audiencia, incluyéndose en el
llamado al testigo C. (fs. …) quien entonces y ante el requerimiento del tribunal, ratificó su anterior
declaración. Es precisamente este acto el que a juicio del Ministerio Público Fiscal debe tomarse para
considerar que la acción no se encuentra prescripta por haber sido prestado el 13 de febrero de 2013.
Disentimos con ello pues la segunda convocatoria se produjo cuando ya se encontraba constatado que
el testigo no había sido sincero, tanto en lo que respecta a su vínculo con el demandante como también

180
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

al manifestarse acerca del hecho que dijo haber presenciado pues su versión se veía rebatida por el
peritaje de (fs. … y ampliación de fs. …), que ilustraba sobre la mecánica del accidente. En la
sentencia dictada (fs. ...), la magistrada expresamente detalló las dudas respecto de la veracidad con la
que se habría pronunciado el aquí imputado y que derivaban de los elementos incorporados de manera
previa a la segunda convocatoria (ver específicamente fs. …).
De tal modo, y aun cuando ya existían al menos indicios de falsedad en una declaración juramentada,
se lo compelió a C. a mantener aquella versión primigenia o, en su defecto, admitir su mendacidad, lo
que se traduciría en una autoincriminación.
En este contexto, entonces, y en virtud de lo previsto por el art. 18 de la Constitución Nacional, debe
descartarse en el análisis de esta incidencia el acta de (fs. …) del expediente N° (…) y tomar como
momento de consumación del falso testimonio la declaración prestada el 17 de mayo de 2010 (fs. … de
dicho legajo), por tratarse de un delito formal que se perfecciona al momento de rendirse la deposición.
Por las consideraciones expuestas, no cabe más que concluir en que desde esa última fecha hasta el 11
de agosto de 2014, data de la convocatoria en los términos del art. 294 del CPPN, ha transcurrido el
plazo máximo previsto por la ley (arts. 62, inciso 2, a tenor de lo previsto por el art. 275, primer
párrafo, del Código Penal).
Al no existir ninguna otra causal de las previstas por el art.
67, CP (ver informe de Reincidencia de fs. … en base a las impresiones digitales del prevenido de fs.
…), el Tribunal RESUELVE: Confirmar el auto de (fs. …) en cuanto fue materia de recurso. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala IV, Seijas, González Palazzo, González. (Sec.: Bloj).
c. 32.946/13, CORTEZ, Patricio R.
Rta.: 29/05/2015

PRISIÓN PREVENTIVA

Rechazada. Escala punitiva que no admite la excarcelación. Inexistencia de peligros procesales.


Imputado que no registra condenas ni excarcelaciones anteriores ni rebeldías. Confirmación.
Imposición de una prohibición de acercamiento respecto de la víctima y de mantener cualquier tipo de
contacto con ella.

Fallo: "(…) Juzga la sala que el planteo efectuado por el Ministerio Público Fiscal no resulta atendible.
Es que si bien la escala penal prevista para el delito por el cual se ha requerido la elevación a juicio del
sumario -abuso sexual gravemente ultrajante (por el tiempo de duración) calificado por haber sido
cometido por un ascendiente y en perjuicio de una menor de 18 años, aprovechándose de la situación
de convivencia preexistente (fs. …)- no permitiría encuadrar su situación en la hipótesis liberatoria
contemplada en el inciso 1° del artículo 317 del código ritual, en función de lo dispuesto en el artículo
316, lo cierto es que a partir de la doctrina emanada del plenario n° 13 "Díaz Bessone" de la Cámara
Nacional de Casación Penal hemos interpretado que la mera posibilidad de un futuro encierro -derivada
en el caso de la pena prevista- no es por sí pauta suficiente para ello (1).
Esa circunstancia constituye un factor relevante a tener en cuenta, pero el análisis no puede prescindir
de las condiciones contempladas en el artículo 319 del Código Procesal Penal de la Nación (2), que en
el caso particular no se presentan.
Así, el causante se encuentra identificado correctamente, su domicilio fue constatado y no registra
condenas ni excarcelaciones anteriores y tampoco ha sido declarado rebelde.
Además ha mostrado su voluntad de someterse al proceso al concurrir a la citación cursada por el
juzgado de grado (fs. … y … de los autos principales y … y … del legajo de personalidad).
Lo expuesto no obsta a la aplicación de una medida de menor intensidad, teniendo en cuenta las
características de los hechos denunciados (3), por lo que se aplicará la restricción a que faculta el
artículo 310 del Código Procesal Penal de la Nación, imponiéndole la prohibición de acercarse a menos
de trescientos metros de la víctima A. M. D. V. S. y de mantener cualquier tipo de contacto con ella.
Sobre la implementación de las previsiones de la norma mencionada, la doctrina ha señalado que
"Cuando no se den en el caso los requisitos de la prisión preventiva (Art. 312), el imputado o
continuará en libertad o la recuperará con el dictado del auto de procesamiento. Esa libertad provisoria
puede ser restringida mediante limitaciones detalladas taxativamente, aplicables conjuntamente con el
auto de procesamiento o con ulterioridad." (4).
Por ello, el Tribunal RESUELVE: I. CONFIRMAR el punto II del auto traído a estudio. II. IMPONER
a A. J. S. la prohibición de acercarse a menos de trescientos metros de la víctima A. M. D. V. S. y la de
mantener cualquier tipo de contacto con ella (art.
310 del C.P.P.N.). (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala IV, González Palazzo, González. (Prosec.Cám.: Fuertes).


c. 10.630/15/2, S., A. J.
Rta.: 15/06/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correc., Sala IV, c. 437/12 "D." rta. 25/5/12; c. 1208/11 " C.A.", rta. 30/08/11.
(2) C.N.Crim. y Correc., Sala IV, c. 847/12 "G.", rta. el 27/06/12. (3) C.N.Crim. y Correc., Sala IV, c.

181
1134/12 "A.", rta. 5/9/2012. (4) Navarro, Guillermo R. y Daray, Roberto R., Código Procesal Penal de
la Nación, Análisis doctrinal y jurisprudencial; tomo 2, 4a edición actualizada, pág. 310.

PROCEDIMIENTO POLICIAL

Nulidad rechazada. Acta que da cuenta que el accionar policial tuvo su motivo en el anoticiamiento que
diera una persona que no fuera identificada. Personal policial que debuto la marcha del vehículo
señalado para identificar a sus ocupantes y, al palparlos a uno de ellos, determinó que estaba armado.
"Notitia criminis" que habilitó el accionar policial y que se justifica teniendo en cuenta en el lugar se
estaba llevando a cabo un clásico de futbol. Confirmación.

Fallo: "(…) La defensa oficial del imputado cuestionó la validez de las actas de (fs. …) y de todo lo
actuado en consecuencia al considerar que se impulsó una intromisión lesiva para las garantías
individuales al detener y requisar a su defendido a raíz de un alerta dado por una persona no
identificada, equiparando el caso al de la denuncia anónima.
La circunstancia de que una persona, cuya identidad no pudo ser determinada en el sumario -por lo que
ha quedado anónima-, haya alertado sobre la intervención del imputado en un hecho ilícito, lo cual
sirvió como notitia criminis, resulta válida, ya que es un deber funcional y por ende obligación del
personal policial recibir ese tipo de información para iniciar o profundizar la investigación sobre
hechos delictivos.
Por otra parte, no se puede perder de vista que ante el anoticiamiento, el preventor, que hasta ese
momento se encontraba junto a quien se lo había brindado, procedió a detener la marcha del vehículo
en el que se trasladaban G. y su consorte de causa con fines identificatorios y que al palpar a este
último sobre sus ropas y advertir que efectivamente se hallaba armado, prosiguió con el procedimiento
incautando el arma de fuego y deteniendo a los encausados.
De tal modo, estimamos que en la ocasión, luego de recibir un mero anoticiamiento (término que surge
ya del precedente "Guillén Varela" -Sala II de la Cámara Nacional de Casación Penal, cn° 40, rta.:
18/11/93-, en el que se convalidó la actuación policial al considerarse que el sumario se había iniciado
por prevención y no por "denuncia anónima"), el funcionario policial se limitó a interceptar a los
imputados para identificarlos y luego, al corroborar la tenencia de un arma y verificar así la
concurrencia de los indicios vehementes de culpabilidad que lo autorizaban, a perfeccionar la
detención (art. 284, inc. 3 del CPPN).
Precisamente como la prueba debe ser valorada conforme la lógica y la experiencia, éstas indican la
imposibilidad, ante el contexto posterior al clásico de futbol, de que el preventor actuara de otro modo.
En virtud de lo expuesto y sin que se verifique en la especie la restricción o menoscabo de derechos y/o
garantías de índole constitucional que asisten a G., el Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR la
resolución de (fs. …), en cuanto ha sido materia de recurso (arts. 455 ibídem). (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala A, Bunge Campos, Filozof, Pociello Argerich. (Sec.: Sosa).
c. 70496/14, CAMEJO, Gustavo Roberto y otros.
Rta.: 20/01/2015

PROCESAMIENTO.

Coimputados por desobediencia a la autoridad y, uno de ellos, en concurso real con cohecho. I-
Desobediencia: Atipicidad. Falta de acatamiento a la orden propia de detención. Imputados que no
emplearon fuerza o intimidación contra la autoridad pública. IICohecho: Elementos de prueba
insuficientes. Revocación. Sobreseimiento (art. 336, inciso 2°, del CPPN). Disidencia parcial:
Elementos de prueba suficientes para tener por probado el cohecho. Confirmación parcial.

Fallo: "(…) II. La jueza Mirta L. López González dijo: De la situación procesal de M.H. (respecto del
hecho ocurrido el 2 de octubre de 2014): (…) corresponde adoptar un temperamento desvinculante
respecto de M.H., en función del art. 336, inciso 3°, del Código Procesal Penal de la Nación.
(…) se advierte que la fuga intentada por H., en tanto no importó de su parte ejercicio de violencia
alguna, no configura un actuar delictivo. Ello así, porque la desobediencia que radica en la falta de
acatamiento a la orden de detención es impune en la medida en que lo es toda fuga.
(…) surge de la propia declaración del Cabo L.S., quien intervino en el procedimiento, que luego de
que H. y J.J.S.G.
-quien lo acompañaba- hicieran caso omiso a las señales lumínicas y sonoras de detención logró
reducirlos utilizando la fuerza mínima e indispensable (ver fs. …).
(…) se ha sostenido que "no constituye delito de desobediencia el desatender la orden de la propia
detención" (1).
(…) al no advertirse de los elementos incorporados al sumario el empleo de fuerza o intimidación
contra la autoridad pública es que la conducta resulta atípica.
De la situación procesal de G. G. P. (hecho del 17 de diciembre de 2014): (…) entiendo que se dan en
el caso las mismas circunstancias que en el evento reprochado a H. (…) afirmó que la conducta del
nombrado no puede considerarse típica en los términos del art. 239 del C.P. Nótese, que de la lectura
de las declaraciones del Subinspector J.F. y del Cabo 1° W.V. no se desprende que tanto P. como su

182
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

consorte de causa J.J.S.G. ejercieran violencia en su contra (ver fs. …). (…) corresponde adoptar un
temperamento liberatorio respecto de P.
(…) (…) en relación al delito de cohecho atribuido, no puede dejar de ponderarse que exclusivamente
se cuenta con los dichos del personal policial vertidos en la prevención, que ni siquiera fueron
ratificados en sede judicial, no existiendo ningún otro elemento probatorio que avale tal versión.
(…) sostener en este caso el procesamiento del acusado para avanzar hacia la próxima etapa procesal
constituiría un desgaste jurisdiccional innecesario y estéril por el pronóstico de negativa certeza que,
desde el punto de vista probatorio, representa la ausencia de elementos de convicción que avalen la
denuncia y, en consecuencia, voto por revocar el auto apelado y disponer el sobreseimiento del
nombrado (art. 336, inciso 2°, del CPPN).
Disidencia parcial del juez Ricardo Matías Pinto dijo: Comparto los fundamentos expuestos por mi
colega preopinante, en lo que respecta a la atipicidad de los sucesos que fueron calificados como
desobediencia a la autoridad. (…) disiento únicamente en relación al suceso atribuido a P. que
encuentra adecuación típica en el delito de cohecho.
(…) las pruebas acumuladas fueron correctamente valoradas por el a quo, conforme las reglas de la
sana crítica (art. 241 del código adjetivo). (…) considero que las declaraciones del Subinspector J.F. y
del Cabo 1° W.V. y el secuestro en poder de P. y su consorte de causa de los celulares (fs. …)y acta de
secuestro de fs. (…), reúnen los extremos del art. 306 del ordenamiento ritual, por lo que voto por
homologar el temperamento incriminante adoptado.
El juez Mauro A. Divito dijo: Llamado a intervenir, exclusivamente a efectos de dirimir el disenso
entre los jueces que me precedieron sobre el suceso que se califica como cohecho, luego de escuchar el
audio de la audiencia y no teniendo preguntas que formular, por compartir los argumentos expuestos
por la jueza Mirta L. López González es que adhiero a su voto.
III. En mérito de lo que surge del acuerdo que antecede, y sin perjuicio de que la defensa de J.J.S.G, no
interpuso recurso de apelación contra la resolución en crisis, habida cuenta que el fundamento de la
presente no radica sobre situaciones que sólo atañen al recurrente, corresponde hacer extensiva la
decisión y resolver su situación en el mismo sentido, conforme lo estipulado en el art. 441 del CPPN.,
por lo que el tribunal RESUELVE: I. Revocar el punto dispositivo I del auto de fs. (…), en cuanto
fuera objeto de recurso y disponer el sobreseimiento de M.H., dejando expresa constancia que la
formación de la presente en nada afectó en buen nombre y honor del que hubiere gozado (arts. 334 y
336, inciso 3°, del Código Procesal Penal de la Nación).
II. Atento a lo normado por el art. 338 del CPPN, ordenar la inmediata libertad de M.H. que deberá
hacerse efectiva en caso de no mediar ningún otro impedimento legal.
III. Revocar los puntos dispositivos III y V del auto de fs. (…), en cuanto fuera objeto de recurso y
disponer el sobreseimiento de G.G.P. y de J.J.S.G., dejando expresa constancia que la formación de la
presente en nada afectó en buen nombre y honor del que hubieren gozado (arts. 334 y 336, inciso 2° y
3°, del Código Procesal Penal de la Nación)".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, López González, Pinto (en disidencia parcial), Divito. (Prosec.
Cám.: Daray)
c. 76.435/14, HIGA, Maximiliano y otros.
Rta.: 21/04/2015

Se citó: (1) In re 8836/2015, "Rodríguez Brian Ezequiel", rta. el 12/03/2015, donde se citó JPBA, T.
84, F. 9; jurisprudencia citada por Ricardo Núñez en su "Tratado de Derecho Penal", 1992, T. V, P. 27;
y la posición de Sebastián Soler en "Derecho Penal Argentino", 1992, T. V, P. 148/9.

PROCESAMIENTO.

Abuso sexual agravado por acceso carnal. Nulidad introducida como agravio de la apelación. Imputado
que manifestó en la indagatoria ser menor de edad. Necesidad de que las actuaciones tramiten ante la
Justicia de menores en razón de la especialidad. Decisión que debe extenderse al co-imputado para que
sea el magistrado competente quien valore todos los elementos reunidos y adopte las resoluciones
correspondientes. Nulidad.

Fallo: "(…) En la causa se celebró la audiencia prevista en el artículo 454 del Código Procesal Penal,
en la que informaron la defensa de A. T. C. y C. T. B. con motivo del recurso de apelación deducido a
fs. (…) contra el auto de procesamiento dictado a fs. (…), y el Ministerio Público Fiscal, que sostuvo la
nulidad introducida por la asistencia técnica respecto de la situación de T. B.
En torno de ello, inicialmente cabe mencionar que al no haberse instado la nulidad de la resolución en
los términos del artículo 170 in fine del código adjetivo, sino que fue introducida como agravio de la
apelación, no debió formarse la incidencia respectiva (…).
Sentado ello, el Tribunal coincide con la defensa oficial y la fiscalía general, en punto a que al haberse
conocido en la declaración indagatoria del imputado T. B. su condición de menor de dieciocho años al
tiempo de los hechos atribuidos (…), debió darse intervención a la justicia de menores, en razón de la
especialidad del régimen respectivo (artículo 29 del ritual).
En ese marco, es dable sostener que en función de la imputación formulada en el legajo y
concretamente, la penalidad prevista para la calificación de abuso sexual agravado por haber existido

183
acceso carnal que se asumió, el causante se encontró sujeto a una evaluación sobre la eventual
adopción de medidas en materia de coerción personal (…), extremo que, en rigor, debe ser analizado
siguiendo los lineamientos que debe fijar, en su caso, la justicia de menores.
Por lo demás, al no haber personas privadas de la libertad, no mediaban razones de urgencia que
justificaran regularizar la situación de los imputados en el ámbito de la justicia de instrucción.
En esas condiciones, el procesamiento dictado será declarado nulo (artículos 29, 36, 167, inciso 1°, y
168, primer párrafo, del ordenamiento adjetivo).
Habida cuenta de las consideraciones precedentes y sin perjuicio de que el Ministerio Público Fiscal
bregó por la validez del procesamiento dictado respecto de T. C., en opinión del Tribunal la nulidad
debe extenderse a lo resuelto a su respecto, en atención a que la valoración sobre la credibilidad de los
dichos de la niña Z. M. C. no puede formularse aisladamente, sino que ha de ser conjunta para ambas
imputaciones, circunstancia que, entonces, justifica que ese análisis quede a cargo del magistrado
competente.
Por esas razones, el Tribunal RESUELVE: DECLARAR la nulidad de la resolución dictada a fs. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Cicciaro, Scotto. (Prosec. Cám.: Decarli).


c. 30.035/13, T. C., A y T. B., C.
Rta.: 21/05/2015

PROPIEDAD INTELECTUAL (LEY 11.723).

Procesamiento. CDs secuestrados, reproducciones ilegales, con láminas apócrifas. Afectación al bien
jurídico protegido. Agravio de la defensa: error de prohibición invencible. Imputado extranjero con
pocos años de residencia que desconocía que su accionar era ilícito. Rechazo. Error vencible.
Tipicidad. Confirmación.

Fallo: "(…) III.- A contrario de lo sostenido por la asistencia técnica consideramos que existió
afectación al bien jurídico protegido. A estos fines valoramos los informes de fs. (…) que dan cuenta
que los CDs incautados son reproducciones ilegales en virtud que los soportes digitales son los
denominados comercialmente como vírgenes o grabables y las láminas que poseen son apócrifas. Es
así que lesionaron, en principio, los derechos de propiedad intelectual protegidos por esta forma de
defraudación.
La escasa entidad de la conducta por la cantidad de discos ofrecidos a la venta no incide en la tipicidad
sino, en su caso, en la posibilidad de permitir la suspensión del juicio a prueba o la mesura de la
hipotética sanción.
En cuanto al error de prohibición alegado, este no se puede evaluar como invencible. Si bien el
imputado poseía 19 años al tiempo del hecho y poco tiempo de residencia en el país, la forma en que
realizó las ventas y su edad, no permiten establecer inequívocamente en la encuesta que le resultaba
imposible conocer la antijuricidad de su conducta.
Se sostuvo que: "(…) No puede alegarse válidamente un error de prohibición, cuando menos
invencible (el único relevante en esta etapa preliminar), en tanto es de público y notorio conocimiento
que la modalidad de venta de las copias de DVD's como los secuestrados está vedada, más aun cuando
los originales siempre llevan inscripta aquella prohibición legal. Además, la importante diferencia en el
precio de los originales y los apócrifos no podría dejar de ser advertida por el imputado, debiendo
destacarse que no nos encontramos ante una persona con bajo nivel de instrucción, pues conforme
informara a fs. (…), (…) sabe leer y escribir, e incluso ha completado la escuela secundaria. De tal
modo, concluyo que el encausado tenía posibilidad de conocer la norma de modo tal de evitar el
resultado, más allá de cómo el conocimiento de ésta afecte la culpabilidad, lo que deberá ser evaluado
al momento de que, eventualmente, se imponga una pena (…)" (1).
Por su parte, la doctrina tiene dicho que: "(…) Si el error de prohibición consiste en el desconocimiento
de la existencia de una norma prohibitiva general (…) se deja subsistente el dolo y se considera la
inevitabilidad o no del error" (2).
Además que: "(…) El error será evitable si el sujeto podía superarlo, es decir podría haber conocido la
antijuricidad de su conducta. Para ello es preciso que dudara o tuviera motivos para dudar de la ilicitud
de la misma y la posibilidad de informarse adecuadamente. Tendrá razones para dudar de la ilicitud de
su conducta si ésta infringe las normas de la ética social realmente vigentes en la sociedad (…), cuando
se trate de conductas ético-socialmente irrelevantes, si causa un daño a otras personas o a la sociedad, o
se desarrolla en el marco de una actividad que el sujeto sabe o podía saber que está regulada
jurídicamente" (3).
Esta circunstancia es la que ocurre en el caso bajo análisis, pues la venta de copias de discos compactos
con las características de los incautados se encuentra vedada y esa circunstancia se encuentra plasmada
expresamente en las portadas originales de los mismos. De esta forma el yerro alegado no puede ser
aceptado.
En su caso el error era vencible, y por ello puede incidir en la sanción pero no lleva a considerar un
supuesto inculpabilidad.
En ese sentido se dijo que: "Cuando el error de prohibición es evitable sólo tiene como efecto la
disminución de la pena (…) Ello es así porque lo que falta es la conciencia del ilícito en forma actual
que, como bien dice (…), perjudica al autor debido a que la evitabilidad del error acredita en forma

184
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

potencial la conciencia del ilícito, por lo que al existir el conflicto o la tensión en sus fuerzas morales
debió haber reconocido lo ilícito de su accionar." (2).
Por lo expuesto, el Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el punto I del auto de fs. (…), en cuanto
fuera materia de recurso. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Filozof, Pinto. (Sec.: Carande).


c. 50.841/09, SOLIS LIZARME, Ángel Agusto.
Rta.: 13/05/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correcc., Sala I, c. 9593/2012, "Flores Valderrama, Roberto Carlos", rta.:
30/5/14; (2) Donna, Edgardo Alberto, Teoría del delito y de la pena. Imputación delictiva, Astrea,
1995, Tomo II, página 277; (3) Donna, Edgardo Alberto, Derecho Penal. Parte General, Rubinzal-
Culzoni, 2009, Tomo IV, pág. 329.

QUERELLANTE

Rechazo de legitimación de la Procuración Penitenciaria de la Nación. Incendio ocurrido en un


instituto de menores provocado por quien fuera sobreseído por extinción de la acción penal por
fallecimiento. Actuaciones en donde se investiga la eventual responsabilidad de los funcionarios y
empleados del Centro "Luis Agote" en relación a la muerte. Madre del menor que ha sido legitimada.
Petición que no encuentra lineamiento en lo contemplado por los artículos 82 y 82 bis del Código
Penal. No afectación a intereses que aparezcan comprendidos en el grupo de derechos de incidencia
colectiva. Confirmación.

Fallo: "(...) En esta causa se investiga la muerte de D. I. B., de 17 años de edad, ocurrida el 27 de
noviembre de 2014 en el "Centro de Régimen Cerrado Dr. Luis Agote", a consecuencia del incendio
que tuvo lugar dentro del sector "Ex Ingreso", en que se hallaba alojado. El foco ígneo habría sido
iniciado por el propio B., mediante la aplicación de fósforos, encendedor o mechas de papel encendidas
sobre el colchón de la cama, el que se propagó y generó un denso humo en el sector. B. gritó en
procura de ayuda, pero nadie acudió debido a que no había personal del establecimiento en las
proximidades, lo que determinó que el interno permaneciera por un lapso de al menos cinco minutos en
medio de las llamas. Cuando finalmente se accedió al sector, se trasladó a B. al "Instituto del
Quemado", donde falleció como consecuencia de las heridas sufridas.
D. I. B. fue sobreseído, después de declararse extinguida la acción penal en su contra en razón de su
fallecimiento (punto I del auto recurrido). No obstante, la investigación continúa en punto a la posible
responsabilidad de los funcionarios y empleados del Centro "Luis Agote" en relación con su muerte.
En ese contexto, la Procuración Penitenciaria de la Nación solicitó ser tenida por parte querellante, y
fundó su petición en las facultades conferidas a dicho organismo en las leyes 25.875 y 26.827 (fs. ...).
En punto al ámbito de actuación de dicha entidad, en el artículo 1° de la ley 25.875 se dispone que su
"objetivo fundamental … es proteger los derechos humanos de los internos comprendidos en el
Régimen Penitenciario Federal, de todas las personas privadas de su libertad por cualquier motivo en
jurisdicción federal, comprendidos comisarías, alcaldías y cualquier tipo de locales en donde se
encuentren personas privadas de libertad…".
Si bien el menor B. se encontraba dispuesto provisionalmente por el Tribunal Oral de Menores n° (...),
y la norma referida alude a "personas privadas de su libertad", las Reglas de las Naciones Unidas para
la Protección de los Menores Privados de la Libertad, incluyeron en dicha condición a quienes
estuvieran internados "en un establecimiento público o privado del que no se permita salir al menor por
su propia voluntad, por orden de cualquier autoridad judicial, administrativa y otra autoridad pública"
(artículo 11.b).
En igual línea de interpretación se han manifestado la Corte Suprema de Justicia de la Nación y la
Cámara Federal de Casación Penal (1).
Por otra parte, tanto la ley 25.875 en su artículo 18, inciso d), como la 26.827 en el artículo 36, inciso
d), prevén entre las facultades de la Procuración Penitenciaria la de promover querella o presentarse
como querellante.
Ahora bien, aun cuando las leyes mencionadas resultan de aplicación al caso en razón del ámbito de
actuación del organismo y de las aptitudes que le fueron conferidas, no ha de olvidarse que la
posibilidad de actuar como querellante en un proceso debe conjugarse con los lineamientos para
otorgar legitimación activa que contemplan los artículos 82 y 82 bis del ordenamiento procesal.
La primera de esas normas alude a la persona particularmente ofendida por el delito, su representante o
los familiares directos de quien falleció como consecuencia de aquel. En tales condiciones, el rol de
querellante en la causa fue asumido por la madre del fallecido, L. del C. B. (ver fs. ... y punto IV del
auto recurrido).
Sobre esta cuestión se ha dicho que la alusión comprende a "toda persona que de modo especial,
singular, individual y directo se presenta por el daño o peligro que el delito comporte" (2).
Ninguna de esas condiciones cabe a la Procuración Penitenciaria.
De allí que su pretensión no resulte viable conforme los parámetros del artículo 82 del mencionado
cuerpo normativo.

185
La segunda de ellas, se vincula a la posibilidad de las asociaciones y fundaciones de asumir el rol de
querellantes en procesos en los que se investiguen crímenes de lesa humanidad o graves violaciones a
los derechos humanos.
Nuestro Máximo Tribunal ha caracterizado en varios pronunciamientos qué crímenes pueden ser
considerados como de lesa humanidad (3). Conforme las directrices fijadas en esos precedentes, puede
concluirse que el hecho investigado en esta causa no puede ser calificado como delito de lesa
humanidad.
En cuanto a la mención a las "graves violaciones a los derechos humanos", entiende el Tribunal que tal
acepción tampoco resulta de aplicación al presente caso.
En orden a este punto se ha entendido que "El concepto graves violaciones no aparece definido en la
norma, ni establecidos por ende cuáles son los límites a partir de los cuales puede estimarse verificado,
lo que genera inconvenientes de interpretación y operatividad. No obstante, es evidente que no
cualquier defensa que se pretenda de un derecho humano habilitará la legitimación, ni deberá perderse
de vista, al examinársela, que constituye, la aquí prevista, una concesión legislativa de excepción, pues
la regla es la lesión directa.
Será necesario entonces, no sólo que se traten, los afectados, de intereses colectivos, sino que además,
será indispensable que esa afectación revista una entidad fuera de lo común en función del daño o
peligro provocados, vistos éstos desde la óptica de su extensión o de su intensidad, pues la gravedad
juega aquí como una medición o valoración de las consecuencias de la violación. Ello salvaguarda la
idea básica: no toda pretensión sustentada en la conculcación de un derecho humano habilitará la
legitimación activa, pues adversamente el legislador habría omitido toda alusión a su gravedad" (4).
Las circunstancias del caso no exhiben una situación de excepción. No se han afectado aquí intereses
que aparezcan comprendidos en el grupo derechos de incidencia colectiva a los que se aludió en el fallo
"Halabi", también de la Corte Suprema de Justicia, en razón del cual se acordó legitimación procesal en
el marco de una acción de amparo (5).
En suma, por lo hasta aquí expresado, fuerza concluir que la decisión del juez de grado de denegar el
pedido formulado por la Procuración Penitenciaria de la Nación de ser tenida por parte querellante,
luce ajustada a derecho y merece ser homologada, máxime cuando en el proceso existe un acusador
particular (fs. ... punto IV) y el Ministerio Público Fiscal en momento alguno propició el cierre de la
investigación.
Por ello, la Sala RESUELVE: CONFIRMAR el pronunciamiento de fs. ... punto III en cuanto fue
materia de recurso. (...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala IV, Seijas, González Palazzo. (Prosec.Cám.: Fuertes).


c. 72.547/14/1, PROCURACIÓN PENITENCIARIA .
Rta.: 18/03/2015

Se citó: (1) C.S.J.N., "L, L.A. s/causa n° 5400", L. 1157 XL, Recurso de hecho, 2007/12/18,
considerando 10, y C.N.C.P., Acuerdo Plenario 2/206, 2006/06/29, ambos citados por D´Alessio,
Andrés José y Divito, Mauro A., "Código Penal de la Nación. Comentado y Anotado", Ed. La Ley,
2010, t. III, pág. 641. (2) D´Albora, Francisco, "Código Procesal Penal de la Nación, Ed. Abeledo
Perrot, 1999, pág. 177, citado por la C.F.C.P., Sala I, c. 1321 "Ferrario", rta. 30/10/2014. (3) C.S.J.N.,
Fallos 318:2148 "P.", 332:1029, "S.", 330:3248 "Derecho" y 328.1268 "L. I.". (4) Navarro, Guillermo
Rafael y Daray, Roberto Raúl, "Código Procesal Penal de la Nación. Análisis doctrinal y
jurisprudencial", Ed. Hammurabi, 2013, t. 1, pág. 435. (5) C.N.Crim. y Correc., Sala IV, c. 247/09 "C."
del 13/4/2009 y en igual línea el voto del juez Ricardo Matías Pinto en la causa n° 3559/15 "N.", del
27/2/2015.

QUERELLANTE.

Rechazo de legitimación activa. Imputaciones recíprocas por un mismo hecho o por hechos conexos.
Incompatibilidad de roles. Improcedencia a pesar que aún no se ordenó la indagatoria de quien
pretende ser legitimado. Confirmación.

Fallo: "(…) La decisión adoptada a fs. (…), por la que se declaró la incompetencia en favor de la
justicia en lo Penal Económico -punto dispositivo I-, ha sido apelada por el querellante M. A. S. M.
(…) y la pretensa querellante A. I. T. -apoderada del Grupo A. S.A.-, quien a fs. (…) recurrió, además,
el rechazo asumido respecto del pedido de legitimación activa -resolución citada, punto dispositivo II.
En torno a esta última cuestión, consideramos que la decisión dictada debe ser homologada, ya que la
circunstancia de que el querellante S. M. ha denunciado al Grupo A. S.A. torna aplicable al caso la
doctrina por la que se entiende que no es posible que por un mismo hecho o hechos que resulten
conexos se querelle quien ya reviste la condición de imputado, pues las imputaciones recíprocas
originan incompatibilidad de roles, aun cuando no se haya ordenado su indagatoria (1).
Resuelto ello, en punto a la incompetencia apelada por el querellante S. M., cabe señalar que, siguiendo
los agravios expuestos en el recurso de apelación, el temperamento asumido resulta prematuro, en
atención a que la denuncia de extravío de los cheques entregados por su empresa habría partido de I. C.
S.A., sociedad que pese a haber comunicado la pérdida de los documentos, los habría transmitido al
Grupo A. S.A., que no los pudo cobrar.

186
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

El panorama descripto, por ahora, supera los supuestos planteados en el artículo 302 del Código Penal
y en consecuencia, el Tribunal RESUELVE: I. REVOCAR el punto dispositivo I del auto
documentado a fs. (…), en cuanto fuera materia de recurso. II. CONFIRMAR el punto dispositivo II de
esa decisión, en cuanto ha sido objeto de recurso".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Scotto, González. (Prosec. Cám.: Decarli).


c. 28.385/14, VILOUTA, Javier Angel.
Rta.: 05/03/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correc., Sala VII, c. 35.339, "Franchi, E.", rta: 03/12/2008 y Sala IV, c.
1.411/12, "Arnedo, D.", rta: 02/10/2012.

QUERELLANTE.

Rechazo de legitimación. Damnificada: persona jurídica. Acción "ut singuli": procede


excepcionalmente en casos de lesión o perjuicio directo sobre alguno de los socios. Conductas dentro
de una sociedad comercial atribuidas a su presidente con consecuencias patrimoniales que
perjudicarían al otro socio. Revocatoria. Procedencia.

Fallo: "(…) I. Se celebró en autos la audiencia que prescribe el artículo 454 del Código Procesal Penal,
con motivo del recurso de apelación formulado por el pretenso querellante, en tanto rechazó su
pretensión de legitimarse activamente (…) y se dispuso el sobreseimiento de F. G. C. (…).
II. Liminarmente, ha de abordarse el tópico relativo a la solicitud de R. V. R. C. de ser tenido por parte
querellante en su carácter de socio de la empresa "A. SA".
Al respecto, es criterio del Tribunal que, en los casos en que resulta damnificada una persona jurídica,
procede -excepcionalmente- la acción ut singuli siempre que quepa inferir la existencia de una lesión o
perjuicio directo sobre el socio que pretende ejercerla (1).
En el caso, las conductas por las que se pretende querellar han tenido lugar dentro de una sociedad
comercial, se atribuyen a quien era -por entonces- su presidente, y habrían derivado en consecuencias
patrimoniales que perjudicarían al otro socio, de modo que es dable sostener que éste se encuentra
habilitado para ejercer ut singuli la persecución penal.
Y aunque, para acreditar la condición de socio que invoca, el recurrente ha presentado las copias
simples que obran agregadas a fs. (...), posteriormente se estableció -en virtud de la imposibilidad de
aportar los originales alegada en la audiencia oral- que figura como tal, con el cincuenta por ciento de
las acciones, en el correspondiente Libro de Registro de Acciones, cuya remisión se solicitó al Juzgado
Nacional en lo Comercial nro. 22 (…).
En tales condiciones, la legitimación activa ha de ser reconocida.
(…) Por lo expuesto, (…), esta Sala RESUELVE: I. REVOCAR el auto documentado a fs. 108, en
cuanto fuera materia de recurso y tener por parte querellante a R. V. R. C., quien queda sometido a la
jurisdicción del tribunal interviniente y a las resultas de la causa. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Divito, Cicciaro, Scotto. (Sec.: Besansón).


c. 50.254/13, CARDIN, Fabio Guido.
Rta.: 05/03/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correc., Sala VII, c. 36.489, "Perazzo, Marcela y ot.", rta: 14/05/2009.

QUERELLANTE.

Rechazo de legitimación activa. Copropietario, por derecho propio, que solicita ser legitimado en la
eventual administración fraudulenta del administrador del consorcio. Caso en el que no se configura la
excepción para hacerlo sin el respaldo de los copropietarios. Confirmación.

Fallo: "(…) La jueza Mirta López González dijo: En la presente causa L.M.P. solicita su legitimación
activa -en calidad de copropietaria- en la investigación de la eventual administración fraudulenta que
imputó a L.J.A. -administrador del consorcio-.
Alegó que es damnificada por el porcentual que le corresponde a su unidad funcional.
(…) el copropietario no puede querellarse por un delito cometido contra el consorcio, ni pretender
asumir su representación, salvo que se den las especiales circunstancias que permitan el ejercicio de la
acción "ut singuli" extremo que no fue siquiera invocado por la pretensa querellante (1).
Así pues, dado que no se verifican, ni fueron alegadas, circunstancias especiales o de excepción que
habiliten a la denunciante a querellar sin contar con el respaldo del resto de los copropietarios, la
decisión que se revisa resulta ajustada a derecho.
El Juez Ricardo Matías Pinto dijo: (…) resulta acertado el criterio que entiende que salvo que se
presenten las especiales circunstancias que permitan el ejercicio de la acción ut singuli, el copropietario
no podrá querellar por el delito cometido en contra del consorcio sin decisión de los copropietarios.
(…) debe ser evaluado como particular damnificado por el daño sufrido el copropietario en los casos
en que la acusación recayera sobre los representantes de la sociedad, o sea la Asamblea de

187
copropietarios, quienes se muestren inactivos ante el delito denunciado, en cuyo supuesto debe
admitirse el rol de querellante al copropietario.
(…) el tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el auto de fs. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, López González, Pinto. (Sec.: de la Bandera).


c. 60198/14, ARCE, Luis Jencio.
Rta.: 26/05/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correc., Sala V, c. 39.476, "Montero", rta.: 17/08/2010. (2) C.N.Crim. y
Correc., Sala VII, c. 37098, "Cohelo, F." del 3/8/09.

QUERELLANTE.

Rechazo de legitimación activa. 1) Presentación que adolece de defectos formales. Ausencia de


indicación de las personas imputadas ni descripción somera del hecho. 2) Coordinador de seguridad en
espectáculos futbolísticos del Ministerio de Seguridad de la Nación. Falta de demostración de la
condición de particular ofendido. Intereses aludidos garantizados por la actuación del Ministerio
Público Fiscal. Confirmación.

Fallo: "(…) El Coordinador de Seguridad en Espectáculos Futbolísticos del Ministerio de Seguridad de


la Nación, E. A. V., recurrió en apelación lo decidido a fs. (…), en cuanto se rechazó su pretensión de
asumir el rol de querellante.
En principio, cabe mencionar que la presentación luciente a fs. (…) adolece de defectos formales que
obstan a su admisibilidad (art. 83 del Código Procesal Penal), en tanto no se ha indicado a las personas
imputadas ni se ha descripto, al menos someramente, el hecho por el que se pretende querellar, extremo
de singular relevancia en el caso, en función de que se ventila en autos más de un objeto procesal.
En orden a ello, cabe destacar que el recurrente señaló en la audiencia que pretendía querellarse
respecto del "homicidio de P.", acontecido -según aclaró- en el marco de un espectáculo deportivo, lo
que en modo alguno se condice con los hechos aquí investigados.
Se agrega al incorrecto dato que la causa número 38.047/13 y sus conexas -números 48.452/14,
59.972/13, 40.969/14 y 74.282/13-, según lo resuelto por la Secretaría Especial del Tribunal (SE N°
25.991) se encuentran radicadas en el Juzgado Nacional en lo Criminal de Instrucción N° 33.
Por lo demás y fundamentalmente, el pretenso querellante no ha demostrado que reviste la condición
de "particular ofendido" en los términos del artículo 82 del digesto formal, siquiera a título de
hipótesis, propia de la persona que, de modo especial, singular, individual y directo resulta afectada por
el daño o peligro que el delito comporte.
Tal defecto no es suplido por la invocación del artículo 28 del Decreto 1466/97, que faculta a "la
Secretaría de Seguridad Interior a promo[ver] ante la dependencia competente del Ministerio del
Interior, la presentación de querellas, denuncias, demandas y/o requerimientos por ante la justicia o los
respectivos Tribunales Administrativos de las entidades deportivas, en caso de infracciones a las
normas de seguridad deportiva o los reglamentos deportivos y disciplinarios", que de ninguna forma
importa una habilitación legal para asumir el rol de querellante. Tampoco avalan la solicitud las
previsiones generales del artículo 4 de la ley 17.516, que alude a los delitos cometidos "contra la
seguridad de la Nación, los poderes públicos y el orden constitucional, la administración pública y el
patrimonio o rentas fiscales", y por ende no resulta de aplicación al caso.
A todo evento y como se ha sostenido en doctrina, "debe quedar claro que una obligación funcional de
control no puede erigir en damnificado del delito a quien la tenga a su cargo y por esa sola
circunstancia" (1).
Por lo demás, como se ha sostenido en situaciones que pueden resultar análogas, los intereses a los que
alude el pretenso querellante se hallan suficientemente garantizados por la actuación del Ministerio
Público Fiscal -art. 120 de la Constitución Nacional- (2), de modo que la adjunción -al menos en
abstracto- de otra parte acusadora en supuestos como los del sub examen, importaría una demasía que
resiente el equilibrio entre las partes -concretamente en perjuicio del imputadocuando se comprueba
una duplicación de acusadores que provienen en definitiva del mismo Estado.
Por consiguiente, esta Sala del Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR la decisión obrante a fs. (…), en
cuanto fuera materia de recurso".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Divito, Cicciaro, Scotto. (Sec.: Sánchez).


c. 35.539/11, MARTIN, Mauro Leandro y otros.
Rta.: 15/06/2015

Se citó. (1) Guillermo Navarro y Roberto Daray, La Querella, Hammurabi, Bs. As., 2008, p. 71. (2)
C.F.C.P., Sala II, c. 7748, "Corso, Marcelo", rta: 13/08/2007; C.N.Crim. y Correc., Sala VII, c. 41358,
"Dardenne, Ernesto", rta: 18/08/2011.

188
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

QUERELLANTE.

Rechazo de legitimación. Víctima que desde el siniestro se encuentra en estado de inconciencia, coma
farmacológico, asistida por respiración mecánica, pronostico reservado y riesgo de vida. Damnificada
no declarada aún incapaz en sede civil.Imposibilidad física y mental de actuar que permite asignarle un
tratamiento similar a la incapacidad. Revocación. Legitimación a los padres.

Fallo: "(…) II.-) Aún cuando los médicos forenses no se han expedido, las constancias de la causa dan
cuenta que, desde que tuvo lugar el siniestro, la víctima se encuentra en estado de inconsciencia, en
coma farmacológico, asistida por respiración mecánica, con pronóstico reservado y riesgo de vida (…).
III.-) La situación presenta aristas particulares que merecen ser ponderadas y que ameritan apartarse de
una interpretación estrictamente literal del art.82 del Código Procesal Penal, máxime cuando el asunto
introducido no sugiere una solución explícita.
Si bien la damnificada no ha sido declarada incapaz en sede civil (arts. 54, 141, 147, 152bis. y cc. del
Código Civil), aparece razonable, conferirle un tratamiento similar en tanto se halla imposibilitada,
física y mentalmente, de actuar y valerse por sí misma.
Afirmar que podría reconocerse a la progenitora el derecho a querellar sólo si aquélla falleciera,
cuando el pronóstico médico es, por el momento incierto, no parece lógico ni guarda equidad alguna.
Surgiendo de la partida de nacimiento y por la afirmación de (…) (padre) en la audiencia que ambos
progenitores pretenden la representación de la menor en el sumario hasta tanto recupere su salud, el
tribunal atenderá el reclamo en tal inteligencia, considerando que por el momento no es necesario para
expedirse contar con la libreta de casamiento.
No hay duda que el interés en una persecución penal adecuada debe satisfacerse desde el inicio,
momento en que la recolección probatoria es prioritaria y la condición de parte acentúa su control y el
cumplimiento de nociones básicas de garantías del proceso.
En este contexto, sin perjuicio del trámite que deberá iniciarse en sede civil, a la luz de la
documentación presentada a fs. (…) que acredita el vínculo y más allá de la decisión que
eventualmente pueda adoptarse en función de la evolución del estado de salud de (…), el Tribunal
RESUELVE: REVOCAR el auto de fs. (…) y tener a (…) y (…) como parte querellante, en
representación de su hija (…), con el patrocinio letrado del Dr.
(…), por constituido el domicilio y quedando sometida a la jurisdicción del Tribunal y a las resultas del
juicio. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini, Filozof. (Sec.: Oberlander).


c. 23.665/15, S., S. E. y otro.
Rta.: 15/06/2015

QUIEBRA FRAUDULENTA

Procesamiento. Tipo penal. Ausencia de elementos para tipificar los hechos como una quiebra
fraudulenta. Conducta que debe ser calificada como insolvencia fraudulenta. Confirmación. Cambio de
calificación: Insolvencia fraudulenta.

Fallo: "(…) En primer lugar, es necesario señalar que la mera circunstancia de que los aquí imputados
hayan ocultado su condición de socios de "E. R. S.R.L." en el marco del proceso que culminó con la
declaración de quiebra de esa firma, dista de conformar una de las modalidades taxativamente
enunciadas por el artículo 176 del Código Penal, en tanto tal proceder no conlleva por sí solo la
disminución ficticia o real del patrimonio ejecutable, garantía de los acreedores. Asimismo, y en cuanto
al reclamo vinculado con el uso de la marca de la cual se ha comprobado que C. R. es titular, debe
decirse que nada obsta a que, con base en ese derecho, pretendiera una retribución económica como
contrapartida, aun cuando se trate de una sociedad que él integre y dirija.
Sin embargo, el análisis no puede prescindir de las especiales circunstancias del caso, en tanto se
presentan en un marco que señala a los inculpados como los verdaderos titulares de la sociedad y, por
tanto, sujetos a los vaivenes de su marcha comercial, de modo que el interés en el resultado del juicio
era más que elocuente, particularmente teniendo en cuenta que para la época en que se inició el proceso
contra la fallida, se encontraba en curso otro en el fuero laboral, que la tenía por demandada junto a
uno de ellos.
En punto al vínculo societario, resultan determinantes las aseveraciones del querellante (cfr. fs. …),
como de los testigos M. A. U. (cfr. fs. ...) y L. G. H. C. (cfr. fs. …), quienes describen la posición de C.
R. y U. en la empresa. Además, sus afirmaciones se ven respaldadas por las notas periodísticas
agregadas a (fs. …), que enfocan al primero como dueño del negocio; datos estos que se adunan a los
informes de la Administración Federal de Ingresos Públicos de (fs. …), en que se arriba a la misma
conclusión, con sustento en las averiguaciones practicadas por ese organismo entre los proveedores y
clientes. De hecho, tal situación derivó en que, en virtud de las irregularidades detectadas, de oficio, se
ordenara la inscripción de la sociedad integrada por ambos encausados (cfr. fs. …).
Corresponde mencionar, tal como lo hace el a quo, que a través de quienes se presentaron como
representantes de la sociedad se allanaron sin más al pedido de quiebra formulado por un tercero, que,
bien vale recordar, después ni siquiera se presentó a verificar su crédito. En ese estado es cuando C. R.

189
concurre a la quiebra, y lejos de pretender tan sólo el cobro de su supuesto crédito por el uso de la
marca, presentó también para su verificación una acreencia sustentada en una situación de dependencia
laboral previa con la fallida, evidentemente simulada dado su carácter de socio.
Sin embargo, la compulsa del expediente comercial citado, en particular la resolución obrante a (fs.
…), permite concluir que no es factible calificar el suceso como quiebra fraudulenta.
Ello, en la medida en que de los créditos presentados para su verificación, únicamente fue admitido el
relacionado con el uso de la marca "C. C.", pues los restantes fueron rechazados, encontrándose entre
estos últimos la deuda reclamada por la Administración Federal de Ingresos Públicos.
Para que un hecho encuadre en la figura tipificada en el artículo 176 del Código Penal, no sólo es
indispensable el desarrollo de algunos de los actos específicamente enunciados en esa norma, sino que
se requiere también el perjuicio a los acreedores en cuanto integrantes de la masa. Y en ese sentido se
ha sostenido, con cita de Carlos Creus, que "no puede ostentar el carácter de sujeto pasivo del delito de
quiebra fraudulenta el acreedor cuyo crédito no es verificado en aquél" (1).
Incluso, "no sería tampoco posible considerar que el acreedor cuyo crédito no está operando en el
concurso pueda prevalerse del carácter de damnificado por el delito…", lo que "obliga a concluir que si
el único acreedor que puede considerarse perjudicado es uno de los que ha sido excluido de la masa, no
podrá considerarse la existencia del delito de quiebra fraudulenta" (2).
Tal el caso de autos, en relación al crédito que obtuvo el querellante con motivo del proceso laboral
dirigido contra la fallida y el imputado U., en tanto U. U. no se presentó en momento alguno a verificar
su crédito en el proceso concursal.
Sin embargo, el caso halla encuadre en el tipo penal de insolvencia fraudulenta (Art. 179, 2da. parte,
del Código Penal). En efecto, la fecha en que se instauró la demanda iniciada por U. U. (7 de
noviembre de 2006), y aquella en que tuvo inicio el proceso de quiebra (junio de 2008), con las
características antes enunciadas acerca de la simulación maliciosa de créditos por parte de los
imputados, lleva a concluir que con ello se pretendió frustrar total o parcialmente el cumplimiento de
las obligaciones que en aquel proceso laboral pudieran establecerse. De hecho, en el año 2013, el
querellante obtuvo una sentencia favorable que ordenó a los demandados pagar la suma de $61.624,37.
En ese contexto, resulta determinante la actitud desarrollada en el proceso concursal por quienes se
presentaron allí como sus responsables, en la medida en que se allanaron al pedido de quiebra
sosteniendo tanto la carencia de bienes como de dinero para atender obligaciones.
El resultado que reclama el tipo del artículo 179 del Código Penal, es la frustración, en todo o en parte,
del cumplimiento de las correspondientes obligaciones civiles, en concreto la "posibilidad de que la
sentencia sea ejecutada con sus bienes si él -deudor- no paga lo dispuesto por ella. La frustración puede
ser total o parcial; basta que se torne imposible el cumplimiento de una parte de la deuda" (3). Tal
situación se verifica en la especie a partir de los extremos detallados, y más allá de que junto a "E. R.
S.R.L.", también U. resultara condenado en el juicio laboral.
De lo obrado no surge, ni tampoco la defensa ha hecho mención durante el transcurso de la audiencia,
que se hubiera cumplido con la sentencia citada, pagándose lo que allí se ordenara, de modo que
habremos de confirmar el auto traído a estudio, aunque modificando la calificación legal por la de
insolvencia fraudulenta, por la que deberán responder a título de coautores.
Sin perjuicio de ello, atendiendo a las fechas en que se habrían producido los hechos a estudio, el
margen punitivo previsto para el delito de insolvencia fraudulenta y el lapso transcurrido hasta el
llamado a indagatoria, corresponderá en la instancia de grado sustanciar los incidentes de prescripción
respectivos.
Por ello, el tribunal RESUELVE: Confirmar el auto de (fs. …), en cuanto dicta el procesamiento de A.
W. C. R. y A. H. U., con la aclaración de que el hecho constituye el delito de insolvencia fraudulenta,
por el cual deberán responder a título de coautores (arts. 45 y 179, segundo párrafo, del Código Penal).
(…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala IV, Seijas, González, González Palazzo. (Sec.: Barros).
c. 14.431/10, CACERES RIVAS, Alvaro y otro.
Rta.: 01/06/2015

Se citó: (1) Creus, Carlos, Código Penal, y normas complementarias, Análisis doctrinal y
jurisprudencial, dirigido por Baigún David y Zaffaroni, Eugenio, tomo 7, pág. 517, Ed. Hammurabi,
Año 2009. (2) Creus, Carlos, Código Penal, y normas complementarias, Análisis doctrinal y
jurisprudencial, dirigido por Baigún David, y Zaffaroni, Eugenio, tomo 7, pág. 517, Ed. Hammurabi,
Año 2009. (3) Código Penal, comentado y anotado, dirigido por D'Alessio, Andrés José y coordinado
por Divito, Mauro, parte especial, pág. 548, Ed. La Ley, Año 2006.

QUIEBRA FRAUDULENTA.

Sobreseimiento. Enajenación de bienes con anterioridad al período de sospecha. Imposibilidad de


descartar una conducta típica debido a que habría elementos para afirmar que el imputado tenía
conocimiento de la situación de insolvencia y, a pesar de ello, realizó la venta. Revocación.

Fallo: "(…), el Tribunal entiende que el auto documentado a fs. (…), por el que se resolvió decretar el
sobreseimiento de J. G. L., debe ser revocado.

190
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

La declaración de quiebra fue dispuesta el 10 de mayo del 2012 en base al pedido formulado por el Dr.
F. G. M., en representación del "Banco Macro SA"; se fijó como fecha real de inicio de estado de
cesación de pagos el 10 de noviembre de 2008; y en virtud del límite de retroacción previsto en el
artículo 116 de la ley 24.522 el período de sospecha se remontó al 10 de mayo de 2010, ello es, dos
años antes de la declaración de quiebra.
En tal sentido, aun cuando L. vendió un departamento el 13 de enero de 2009 a S. V. L. y donó otro
inmueble a sus hijos J. I., M. y M. T. L. (ver fs. … del expediente comercial n° 58145, "L., J. G. s/
quiebra", del Juzgado Nacional en lo Comercial n° 18, Secretaría n° 35) y tales operaciones se
realizaron antes del período de sospecha que se fijó el 10 de mayo de 2010, se estima que no es posible
descartar la existencia de una conducta penalmente relevante.
Ello es así, pues de la declaración testimonial prestada por la síndica interviniente en el referenciado
expediente, surge que "los dos inmuebles…salieron de su patrimonio con fecha anterior al período de
sospecha previsto en la ley concursal, pero con conocimiento de [la] situación de insolvencia atento a
que hay una fijación de fecha real de cesación pagos el día 10 de noviembre de 2008…la sentencia
judicial que ordena la ejecución por remate de bienes hasta cubrir la suma de $ 45.239,39 pesos más
intereses adeudados al Banco Macro por mora ocurrida el 10 de noviembre de 2008… no podía ignorar
su situación de incumplimiento a raíz de la sentencia judicial citada anteriormente" (…).
En consecuencia, en tanto "resulta indiferente que la actividad sea anterior al período de sospecha de la
ley comercial o esté incluida dentro de él, porque la ley penal no considera ese refuerzo protector.
Como la quiebra fraudulenta es delito con pluralidad de hipótesis delictivas, ellas pueden ser tan
distantes en el tiempo que unas sean muy anteriores a la declaración de quiebra y otras muy
posteriores" (1), el sobreseimiento recurrido habrá de ser revocado.
Por ello, el Tribunal RESUELVE: REVOCAR el auto documentado a fs. (…), en cuanto fuera materia
de recurso".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Cicciaro, Scotto. (Prosec. Ad Hoc.: Sposetti).


c. 28.185/14, LATORRE, Jorge G.
Rta.: 13/05/2015

Se citó: (1) Guillermo Navarro y Aníbal Rizzi, El Delito de Quiebra, Hammurabi, Bs. As., 2004, p. 85.

QUIEBRA FRAUDULENTA.

Incompetencia. Domicilio legal en esta ciudad "ficticio". Sede de los negocios y administración de los
bienes que se desarrolla desde el inicio en la Provincia de Buenos Aires. Juzgado de Garantías de la
Pcia. de Buenos Aires.

Fallo: "(…) La defensa recurrió en apelación el pronunciamiento documentado a fs. (…), en cuanto se
declinó la competencia en favor del Juzgado de Garantías en turno con jurisdicción en la localidad de
Lanús, provincia de Buenos Aires.
Con independencia de los argumentos expuestos por el recurrente respecto a que no se configura la
situación de "domicilio legal ficticio" a la que alude el señor juez a quo, lo cierto es que la sede de los
negocios y administración de los bienes de la sociedad se encuentra ubicada en ajena jurisdicción.
Ello así, por cuanto de las constancias del legajo surge que si bien se constituyó un domicilio en esta
ciudad, solamente se lo hizo a los efectos legales, ya que la sociedad nunca tuvo ninguna fábrica u
oficina en esta localidad a los fines de la administración (…).
Lo expuesto se refuerza con las averiguaciones practicadas en el marco del expediente comercial que
corre por cuerda, en el que se realizó un mandamiento de constatación en el inmueble donde
supuestamente habría funcionado la empresa, lugar donde se verificó que se emplaza una oficina que
se dedica a brindar servicios a contadores y como constitución de domicilio fiscal, y que el contador de
"N. C. S. A." había contratado con sus propietarios el lugar al solo efecto de constituir el domicilio
fiscal de la sociedad (…).
Tales antecedentes permiten concluir que la actividad comercial de la sociedad se desarrolló desde su
inicio en la provincia de Buenos Aires.
Al respecto, ha sostenido la Corte Suprema de Justicia de la Nación que "Si puede seriamente
sospecharse que el domicilio social es ficticio o ha sido elegido para eludir la competencia de
determinados tribunales, es competente para conocer en los delitos previstos en los artículos 176, 177 y
178 del Código Penal el juez de la jurisdicción donde se encontraban tanto el asiento de los negocios
como la sede de la administración de la fallida" (Fallos: 310:2124).
En ese mismo sentido, dado que el domicilio de la avenida C. X piso 4°, oficina 15 de esta ciudad, sólo
se trata del domicilio fiscal "…puede razonablemente inferirse que la sede social fijada en la Capital
por el respectivo contrato no responde a la realidad de los hechos, por lo que corresponde entender en
la causa a la justicia provincial, toda vez que tanto el asiento de los negocios como la sede de la
administración de la fallida parecen haber estado situados en esa jurisdicción" (Fallos: 306:369).
Asimismo, teniendo en cuenta que el asiento de los negocios se sitúa en jurisdicción provincial, lugar
en el que además tienen domicilio real los fallidos, razones vinculadas con el derecho de defensa en
juicio y de economía procesal aconsejan que las actuaciones sean remitidas al tribunal escogido por el

191
magistrado, en donde la inmediatez de la prueba a recabar pone de manifiesto que así se lograría una
mejor administración de justicia y asegura una mejor defensa de los imputados.
Ello también, en consonancia con lo establecido por el Máximo Tribunal, porque "si la mayoría de los
actos con relevancia típica tuvieron lugar en la ciudad donde, además, se domicilian los imputados,
razones de economía procesal y mejor defensa determinan atribuir competencia para conocer del
presunto delito de extorsión al juez de ese lugar" (Fallos: 320: 684, entre otros).
En consecuencia, el Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el auto documentado a fs. (…) en todo
cuanto fuera materia de recurso".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Divito, Cicciaro, Scotto. (Sec.: Besansón).


c. 24.160/12, NOVA CYGNUS S.A.
Rta.: 19/05/2015

REBELDÍA.

Orden de captura. Agravio de la defensa: Constatación de domicilio no realizada y notificación no


cursada al domicilio informado. Imposibilidad de afirmar que el imputado se ausentó voluntariamente.
Rechazo. Imputado notificado inicialmente de los derechos y garantías, del inicio de la investigación,
el juzgado interviniente, la defensoría que lo asistiría y de la prohibición de cambiar su domicilio y
ausentarse del país sin previo aviso y la obligación de presentarse a la primera citación que recibiere.
Constatación que no se realizó debido a la presentación en el expediente de la cuñada que informó el
domicilio correcto en donde se llevó a cabo el informe socio-ambiental. Imputado habido en ocasión de
realizar trámites ante el Registro Nacional de Reincidencia, ocasión en la que aportó otro domicilio en
donde luego tampoco se lo halló. Elementos que permiten sostener que hubo voluntad de sustraerse del
accionar de la justicia. Confirmación. Disidencia parcial: Imputado notificado de la existencia de la
causa y sus derechos y obligaciones pero sin informarle cuál sería la fecha de la citación. Domicilio no
constatado. Necesidad de adoptar una medida menos gravosa. Revocación.

Fallo: "(…) II. La jueza Mirta L. López González dijo: De la rebeldía y captura: (…) voto por revocar
el auto cuestionado.
Es que, si bien el imputado fue informado de la existencia de la causa, de sus obligaciones de no
cambiar domicilio y comparecer ante la primera citación del tribunal, lo cierto es que en esos actos no
se le notificó cuál sería la fecha de la citación por la que se le impuso la rebeldía (ver fs…).
(…) conforme se desprende de la lectura de las constancias del sumario previas a la declaración de
contumacia, no se constató el domicilio en el que el imputado refirió residir junto a su hermano (cfr.
fs….).
(…) toda vez que G.L. no fue notificado personalmente de la fecha fijada para comparecer en los
términos del acta prevista en el artículo 353 bis del código de rito, la declaración de rebeldía resulta
desacertada; pues, debió adoptarse una medida menos gravosa que cumpla la misma finalidad y, recién
luego, si una vez notificado incompareciere, disponer, eventualmente, el dictado de la rebeldía. Por
ello, postulo la revocatoria del auto en crisis.
(…) El juez Mauro A. Divito dijo: De la rebeldía y captura: Los argumentos esgrimidos por la defensa,
(…) resultan a mi juicio insuficientes para modificar la decisión adoptada por el juez de grado.
Conforme se desprende de la lectura del sumario, mediante las actas de fs. (…) se notificó a G.L. los
derechos y garantías que le asisten, haciéndole saber el inicio de la investigación, el juzgado
interviniente, la defensoría que lo asistiría, entre otros datos, así como también la prohibición de
cambiar su domicilio y ausentarse del país sin previo aviso y la obligación de presentarse a la primera
citación que recibiere.
Si bien (…) al tiempo del dictado de la rebeldía en cuestión, no se habrían llevado a cabo diligencias
para constatar el domicilio que informó a fs. (…), lo cierto es que ello obedeció a la presentación
espontánea de quien dijo ser la cuñada del imputado y señaló que residía junto a él, su pareja e hijos en
un domicilio distinto al informado por él originariamente (fs…), lugar donde se materializó el informe
social agregado a fs.(…).
No obstante, al ser convocado en los términos del artículo 353 bis del código de rito, se informó que no
residía allí (ver fs.…).
Por otra parte, no puede soslayarse que al ser habido mientras realizaba trámites en el Registro de
Reincidencia, brindó un domicilio distinto a los anteriores. Y, si bien luego lo modificó -reiterando el
que informó a fs. (…)-, las tareas de constatación arrojaron resultado negativo (ver fs…).
(…) considero que si la intención de G.L. hubiera sido estar a derecho, nada le impedía presentarse
ante la defensoría o el juzgado.
(…) entiendo que las notificaciones personales que recibió de parte de la prevención, sumado a la
citación que fue cursada en el domicilio que brindó su cuñada a fs. (…), me permiten afirmar que el
imputado conociendo de la existencia de la causa seguida en su contra ha decidido no someterse a las
obligaciones del proceso en los términos del art. 288 del CPPN. Por consiguiente, debe confirmarse la
decisión apelada.
Del procesamiento: Comparto en un todo el voto de mi colega preopinante respecto del fondo del
asunto y emito el mío en idéntico sentido.

192
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

El juez Matías R. Pinto dijo: no teniendo preguntas que formular, por compartir los argumentos
expuestos el juez Divito es que adhiero a su voto.
(…) el tribunal RESUELVE: Confirmar las decisiones de fs. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, López González (en disidencia parcial), Pinto, Divito. (Prosec. Cám.:
Daray)
c. 17.710/14, GALARZA LÓPEZ, José L.
Rta.: 30/04/2015

REBELDÍA.

Declaración de contumacia realizada sin que el imputado haya tomado conocimiento, en algún
momento, de la existencia del sumario. Citación por edictos. Improcedencia. Imposibilidad de afirmar
que el imputado se ha sustraído del accionar de la justicia. Revocación.

Fallo: "(…) II- (…) luego de intentar ubicar al imputado E.J.F. mediante diversas notificaciones, la
jueza dispuso el emplazamiento por edictos al nombrado para prestar declaración indagatoria en el
término de tres días, bajo apercibimiento de ser declarado rebelde -ver fs. (…)-.
Efectuada la publicación y no habiéndose presentado el citado, el 11 de marzo del corriente, la jueza lo
declaró rebelde y ordenó comunicar al Jefe de la Policía Federal para hacerle saber del resolutorio y
encomendarle la averiguación del actual paradero del encausado y posterior comparendo, dentro del
quinto día de notificado, bajo apercibimiento de disponerse su captura -ver fs.(…) -.
(…) cabe señalar que la interpretación restrictiva que impone el artículo 2 del código de rito limita la
aplicación del instituto en estudio a casos donde la valoración objetiva de los elementos incorporados
al legajo, acredita la intención del imputado de sustraerse del accionar de la justicia y no cuando éste
desconoce la existencia del sumario y, en consecuencia, el llamado que se le efectuara en los términos
del artículo 294 del código adjetivo.
Así, frente al desconocimiento de F. del trámite de la presente causa, no es dable predicar su voluntad
de no someterse a ella.
(…) el tribunal RESUELVE: REVOCAR el auto de fs. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, Pinto, Divito. (Sec.: Poleri).


c. 32.985/14, FONTANET, Enrique J. y otros.
Rta.: 15/04/2015

REBELDÍA.

Pedido de captura. Imputado que no fue puesto en conocimiento de la nueva radicación de la causa y
de la designación de nuevo defensor. Ausencia de los requisitos habilitantes para disponer la rebeldía
(Art. 288, C.P.P.N.). Medidas alternativas menos gravosas. Revocación.

Fallo: "(…) II. No compartimos lo resuelto en el caso. Si bien el imputado tuvo conocimiento en su
momento de la formación inicial de estas actuaciones por ante la justicia contravencional (fs…), no fue
impuesto en forma personal de la nueva radicación de la causa, ni del nuevo defensor designado para
su asistencia (fs…) Tampoco obran constancias de que haya conocido de su requerimiento en el
expediente tutelar (ver fs…), ni menos aún de la intimación bajo apercibimiento que se dispuso a fs.
(…), porque ésta fue cursada únicamente a la defensoría de menores.
La declaración de rebeldía sólo cabe si el imputado no responde al llamado judicial sin mediar grave o
ilegítimo impedimento (artículo 288 del código adjetivo). Dicha situación tiene como sustrato
inexorable su conocimiento de que se lo está requiriendo para una diligencia concreta. Sólo bajo una
verificación positiva en ese sentido podría luego evaluarse la gravedad o la legitimidad del
impedimento que, eventualmente, se determinara o que adujera.
Ausente en este caso la mencionada premisa, corresponderá revocar lo decidido y encomendar a la
jueza que arbitre las medidas que estime corresponder para ubicar al nombrado y para que, en
definitiva, tome conocimiento de su convocatoria. Sea ello a través de las diligencias propuestas por la
defensa (ver fs. …) y/o mediante la comisión a la Policía Federal de la averiguación de su domicilio y
su notificación, bajo apercibimiento de disponerse su comparendo compulsivo.
(…) el tribunal RESUELVE: Revocar el auto de fs. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, López González, Pinto. (Sec.: Herrera).


c. 63.044/14, LÉPEZ VITTOR, Axel D.
Rta.: 04/06/2015

RECURSO DE APELACIÓN.

Contra el auto que procesó al imputado por incendio culposo. Argumentos vertidos por la defensa que
no son una crítica negativa válida. Afirmaciones de las que no explica sus premisas. Falta de
motivación. Art. 438, C.P.P.N. Mal concedido.

193
Fallo: "(...) Concita la intervención del tribunal la concesión del recurso de apelación deducido a (fs.
...) por el Dr. Juan José Sforza, quien asiste técnicamente a encausada M. R. G., contra la resolución
obrante a (fs. ...), en cuanto dispuso su procesamiento por considerarla, a primera vista, autora
penalmente responsable del hecho constitutivo del delito de incendio culposo, y mando a trabar
embargo sobre sus bienes hasta cubrir la suma de treinta mil pesos ($30.000) (...).
Luego de la lectura del recurso y en cuanto a su admisibilidad, consideramos que los argumentos
vertidos no constituyen una crítica negativa razonablemente válida respecto de la totalidad de las
consideraciones que surgen de la resolución de (fs. ...).
En efecto, si bien fue interpuesto en legal tiempo y forma, la restante condición tiene relación con la
motivación, que se refiere a la exposición de los motivos o razones formuladas contra la resolución
atacada. Dicha tarea implica explicar el razonamiento mediante el cual se intenta destruir las premisas
y conclusiones de ella o para demostrar su ilegalidad, a fin de evitar las impugnaciones no meditadas o
irreflexivas. En el caso, el recurrente intenta -sin lograrlo-, poner en crisis la valoración realizada en el
punto V del interlocutorio de procesamiento glosado a (fs. ...) mediante afirmaciones de las que no
explica sus premisas. (...) imposibilitados de delimitar correctamente el ámbito de conocimiento de esta
Sala, por resultar insuficiente para fijar los agravios que deberían ser objeto de análisis en la audiencia
que prescribe el art. 454 del C.P.P.N., según la ley 26.374. De ese modo, toda vez que se advierte que
no se cumple con el requisito de motivación previstos en el art. 438, C.P.P.N, pues se limita a disentir
con la decisión efectuada por el a quo, sin efectuar una crítica concreta y válida al razonamiento
plasmado a (fs. ...), corresponde que sea declarado erróneamente concedido por inadmisible. Por ello,
el tribunal RESUELVE: Declarar erróneamente concedido el recurso de apelación interpuesto por la
defensa de M. R. G. a (fs. ...), art. 438, a contrario sensu, CPPN. (...)"

C.N.Crim. y Correc., Sala I, Bunge Campos, Rimondi. (Prosec. Cám.: Souto).


c. 74053949/12, G., M. S.
Rta.: 06/02/2015

RECURSO DE APELACIÓN.

Contra el auto por el que el magistrado rechazó el planteo de nulidad introducido por la fiscalía.
Argumentos vertidos en el escrito de apelación que no indican el perjuicio que habilite la intervención
de la cámara. Mal concedido.

Fallo. "Llegan las presentes actuaciones a conocimiento del tribunal en virtud del recurso de apelación
deducido a (fs. ...) por la fiscal Graciela A. Bugeiro, contra el auto de (fs. ...) por el que el juez de grado
resuelve rechazar el planteo de nulidad introducido por la fiscalía contra la decisión de (fs. ...). Estos
testimonios se iniciaron en virtud de la contienda de competencia suscitada entre la justicia provincial y
este fuero , resuelta por el máximo tribunal a (fs. ...).
Sellado ese conflicto, el Sr. juez de grado dispuso remitir las actuaciones al tribunal de juicio que
actualmente entiende en el hecho imputado a W. R. R. B., habida cuenta la unidad de contexto,
iniciado en esta ciudad y con cese en la provincia de Buenos Aires. Contra ello, la fiscalía planteó la
nulidad cuyo rechazo motiva la intervención del tribunal. (...). En este sentido, refiere que "(…) la sola
remisión de las actuaciones al T.O.C. n° 15 sin ampliar la imputación formulada contra R. B.,
ajustando el procesamiento, incluyendo el hecho total, implica cercenar su derecho de defensa y violar
el principio de congruencia en caso de que fuera juzgado (...)". Asimismo, agrega que "(…) en la
medida en que se ha ampliado la base fáctica del mismo hecho ya elevado a juicio, corresponde
cumplir con los pasos procesales correspondientes a esa ampliación (...)". Sin embargo, el imputado ha
sido debidamente intimado por el hecho ilícito imputado, de manera tal que no se comparte el agravio
que pueda afectar el derecho de defensa del imputado que, por otro lado, no solo no contestó la vista
sino que tampoco recurrió el auto. Entonces, no se advierten ni tampoco lo ha indicado la recurrente,
los fundamentos que impiden al ministerio público ejercer su rol por cuanto no indica en que se han
visto ampliados los hechos oportunamente intimados. En efecto, si bien la Sra. fiscal alude en su
impugnación a la privación de libertad acaecida en la provincia de Buenos Aires, la simple lectura del
acta de indagatoria de R. B. (fs. ...) indica que fue concretamente intimado por dicha conducta.
Consecuentemente, acceder a su pretensión importaría el dictado de pronunciamientos en base a
calificaciones legales y no ha hechos ilícitos, cuestión que implícitamente descarta la recurrente en su
presentación. (...). Por lo expuesto, toda vez que los argumentos vertidos en el escrito de apelación no
indican el perjuicio que habilite la intervención de esta alzada, corresponde declarar mal concedido el
recurso interpuesto. En consecuencia, el tribunal RESUELVE: DECLARAR MAL CONCEDIDO el
recurso de apelación interpuesto a (fs. ...) por la fiscal Graciela A. Bugeiro. (...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala I, Bunge Campos, Rimondi. (Sec.: Peluffo).


c. 38068/12, R. B., W. R.
Rta.: 06/02/2015

194
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

RECURSO DE APELACIÓN.

Contra el procesamiento sin prisión preventiva, por lesiones leves en concurso real con coacción.
Defensa que impugna la resolución luego de cuatro horas del plazo de gracia, sin haber aducido
razones de fuerza mayor. Extemporáneo. Mal concedido.

Fallo: "(…) Llegan las actuaciones a conocimiento del Tribunal en virtud del recurso de apelación
deducido por la defensa de (…) contra el auto de fs. (…) que lo procesó, sin prisión preventiva, por
considerarlo coautor penalmente responsable del delito de lesiones leves en concurso real con
coacción.
II. ) Si bien el Magistrado de grado concedió la impugnación articulada (…), de las constancias de
autos surge que el Dr. (…) fue notificado el pasado 21 de enero de 2015 (…), e interpuso el recurso de
apelación el 5 de febrero a las 13:10 horas (…). Si bien los plazos de las notificaciones cursadas
durante la feria judicial no se contaban como hábiles, el mismo comenzaba a contarse a partir del 2 de
febrero del corriente. Ante ello, es inadmisible por extemporáneo.
Los Jueces Ricardo Matías Pinto y Julio Marcelo Lucini dijeron: Conforme surge de las constancias del
sumario la defensa impugnó la resolución de fs. (…) pasadas casi cuatro horas del plazo de gracia, sin
haber aducido razones de fuerza mayor.
Al respecto, nuestro más alto Tribunal en los precedentes "Asociación Trabajadores del Estado c/Fisco
de la Provincia de Buenos Aires s/acción declarativa", rta.: 11/02/14, A. 595 XLIX y "Cantera Timoteo
S.A. c/Mybis Sierra Chica S.A. y otros", rta.: 03/03/05, C. 1071 XXXIX" ha dicho que "(…) por
razones de seguridad jurídica fundadas en el principio de perentoriedad de los términos, esta Corte no
admite presentaciones posteriores al "plazo de gracia" previsto en el art. 124 del Código Procesal Civil
y Comercial de la Nación, ni siquiera cuando la demora es de pocos minutos (1)".
Por ello, consideramos que debe rechazarse, por extemporáneo, el recurso deducido por la defensa.
El Juez Mario Filozof dijo: Sin perjuicio de mi opinión personal, y toda vez que el reciente fallo
dictado por la Corte Suprema de Justicia de la Nación citado por mis colegas preopinantes me obliga
moralmente, adhiero a sus votos.
En consecuencia, el Tribunal RESUELVE: DECLARAR MAL CONCEDIDO a fs. (…), el recurso de
apelación interpuesto por la defensa contra el auto de fs. (…) que dictó el procesamiento sin prisión
preventiva de (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini, Filozof, Pinto. (Prosec.Cám.: ASturias).


c. 24.116/14, MAMANI, Alberto Gonzalo .
Rta.: 18/02/2015

Se citó: (1) C.S.J.N., Fallos 316:246; 319:2446 y 329:326.

RECURSO DE APELACIÓN.

Presentado sin la firma del querellante y sólo con la del letrado patrocinante. Imposibilidad de actuar
en forma autónoma por parte del patrocinante. Mal concedido.

Fallo: "(…) Toda vez que el escrito de impugnación agregado a fs. (…) no se halla suscripto por (…)
y/o (…), quienes fueran tenidos por parte querellante (…), corresponde declarar mal concedido el
recurso de apelación (artículo 444 del Código Procesal Penal de la Nación).
Tal como tenemos dicho (1) el letrado patrocinante no está facultado para realizar actos procesales por
el querellante que excedan los de mero trámite, tal como sucede en el caso analizado (2).
La doctrina sostiene que "El patrocinante no tiene asignado rol alguno en el proceso penal…salvo el de
asesor de la parte acusadora y de garante del cumplimiento de las formas que hacen…a la garantía
constitucional del debido proceso legal.
Carece, por regla, de actuación autónoma…más no es parte en el proceso ni recibe legitimación,
careciendo de permanencia en él…No puede formular peticiones ni efectuar presentaciones, cómo
interponer recursos…" (3), -el subrayado nos pertenece-.
En consecuencia, el Tribunal RESUELVE: Declarar mal concedido a fs. (…) el recurso de apelación
interpuesto a fs. (…)."

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini, Filozof, Pinto. (Prosec.: Rosciani).


c. 35.923/14, DISIERVO, María Cristina.
Rta.: 18/03/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correcc., Sala VI, c. 391/12, "Depaoli, César Alejandro", rta.: 03/05/12; (2)
C.N.Crim. y Correcc., Sala VI, c. 42090, "N.N. s/ robo -damnificado Concar Manuel Asencio", rta.:
5/8/2011; (3) Navarro, Guillermo Rafael - Daray, Roberto Raúl, "La querella", Hammurabi, 3era.
Edición, Buenos Aires, 2008, págs.186/189.

195
RECURSO DE APELACIÓN.

Respecto de decisiones adoptadas por el magistrado correccional en la etapa de juicio oral.


Competencia de la Cámara Nacional de Casación Penal. Mal concedido.

Fallo: "(…) Tenemos dicho que una vez alcanzada la etapa procesal reglada por el art. 428 del Código
Procesal Penal de la Nación, el Sr. Juez Correccional se halla investido de las facultades propias del
Tribunal Oral, lo que determina que sus decisiones no puedan ser examinadas ante esta Cámara, siendo
su superior, la Cámara Nacional de Casación Penal (1).
Por ello, el Tribunal RESUELVE: Declarar improcedente la elevación de los presentes testimonios
dispuesta a fs. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini, Filozof, Pinto. (Prosec.: Rosciani).


c. 101.015.212/12, MAIDANA, Juan Luis.
Rta.: 23/04/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correcc., Sala VI, c. 1985/12, "Sáenz Valiente, José María", rta.: 10/12/12; c.
94/12, "Canosa Viviana", rta.: 08/03/12 y c. 40.268, "Ibarra, Aníbal", rta.: 21/09/10.

RECURSO DE APELACIÓN.

Contra la resolución que rechazo " in limine" el pedido de nulidad presentado por la defensa.
Recurrente que no refuta las argumentaciones del magistrado. Falta de motivación (art.438 C.P.P.N.).
Mal concedido.

Fallo. "(...). los agravios esbozados por el recurrente no se dirigen a criticar el razonamiento del Sr.
juez de grado para llegar a la decisión de (fs. ...), sino que reitera los argumentos expuestos en su
presentación.
De este modo, la parte incumplió con los requisitos de motivación previstos en el art. 438 CPPN, (...).
(...), la recurrente desarrolla supuestas violaciones a principios constitucionales, sin lograr refutar
concretamente la fundamentación del juez de grado, que lo llevó a rechazar sin más el planteo de
nulidad introducido. En concreto, el a quo refirió específicamente que la causa se inició por prevención
policial y no por denuncia, por lo que no corresponde el requerimiento fiscal de instrucción, y que por
lo tanto la cuestión planteada por la defensa carece de la mínima motivación en relación a la realidad
histórica que refleja el proceso. Por su parte, la recurrente incurrió en el mismo error al momento de
presentar el recurso de apelación, realizando afirmaciones genéricas e invocando principios
constitucionales, sin desvirtuar los argumentos del instructor, y sin lograr demostrar de qué forma éstos
habrían sido violados en la presente causa.
Por lo tanto, nos encontramos imposibilitados de delimitar correctamente el ámbito de conocimiento de
esta sala, por resultar insuficiente para fijar los agravios que deberían ser objeto de análisis. En
consecuencia, el tribunal RESUELVE: DECLARAR MAL CONCEDIDO el recurso de apelación
deducido a (fs. ...) por la Dra. María Josefina Lopresto Wuiovich, letrada defensora de L. O. S (...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala I, Bunge Campos, Rimondi. (Sec. Cám.: Peluffo).


c. 14.933/15, Saez, Leonardo Omar.
Rta.: 15/05/2015

RECURSO DE CASACIÓN.

Contra la resolución que confirmó el rechazo al pedido de excarcelación. Equiparación a sentencia


definitiva. Perjuicio de imposible reparación ulterior. Concesión.

Fallo: "(…) la intervención de la Cámara Nacional de Casación en lo Criminal y Correccional no se


encuentra obstaculizada por la circunstancia de que el auto de la sala no esté comprendido en las
previsiones del artículo 457 del Código Procesal Penal.
(…) en casos como el aquí contemplado, donde se discute la procedencia de una excarcelación y lo
decidido implica la restricción de la libertad ambulatoria del imputado con anterioridad al fallo final de
la causa, corresponde que se equipare a sentencia definitiva, toda vez que, por sus consecuencias, la
resolución podría provocar un perjuicio de imposible reparación ulterior, por afectar un derecho que
exige tutela inmediata.
Máxime que "no puede perderse de vista que el recurso de casación es un instrumento operativo de la
garantía prevista en el inciso h del punto 2 del artículo 8 de la Convención Americana sobre Derechos
Humanos, a cuyo respecto la Comisión Interamericana ha señalado que un aspecto esencial derivado
del debido proceso es el derecho a que un tribunal superior examine o reexamine la legalidad de toda
sentencia jurisdiccional que resulte en un gravamen irreparable a una persona, o cuando ese gravamen
afecte los derechos y libertades fundamentales [del considerando 20, in re "Romero Cacharane, Hugo
Alberto s/ejecución penal", causa R.230, XXXIV, resuelta el 9 de marzo del 2004]" (Fallos: M.251 XL
"Muracciola, Santiago s/recurso extraordinario", del 8 de marzo de 2005).

196
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

De esta manera, sin perjuicio de que el planteo central del escrito recursivo está enderezado a obtener
una distinta interpretación de los motivos por los cuales se estimó que se verificaba la hipótesis
restrictiva del artículo 319 del código adjetivo, la consecuencia de denegar la vía casatoria, a juicio del
Tribunal, importaría restringir la revisión de las cuestiones de naturaleza federal planteadas, con
menoscabo de los principios de inocencia, defensa en juicio, debido proceso y el derecho a permanecer
en libertad durante el proceso, todos amparados por la Constitución Nacional.
(…) el Tribunal RESUELVE: I. Conceder el recurso de casación interpuesto en contra del auto
documentado a fs. (…). II.
Emplazar a la parte en los términos del artículo 464 del CPPN".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, López González, Pinto, Divito. (Prosec. Cám.: Daray).
c. 9.909/15/1, DÍAZ, Gastón H.
Rta.: 27/03/2015

RECURSO DE CASACIÓN.

Interpuesto por la querella contra la resolución confirmó el sobreseimiento. Concesión. Disidencia:


Doble instancia satisfecha. Discrepancias a cuestiones ya analizadas por la cámara y limitadas
exclusivamente al modo en que se valoraron los hechos y la prueba. Opinión diversa que no resulta
novedosa. Decisión jurisdiccional válida. Rechazo.

Fallo: "(…) Los jueces López González y Pinto dijeron: El recurso ha sido interpuesto en tiempo,
forma y por quien tiene derecho a hacerlo (artículo 463 del CPPN). Además, ha sido articulado contra
una resolución incluida en el decálogo del artículo 457 de ese cuerpo legal, por cuanto se trata de la
confirmación del sobreseimiento que, en la instancia anterior, se dictó a S.A.G.S., por la hipótesis de
estafa procesal en concurso ideal con emisión indebida de facturas de crédito (fs…).
En tales condiciones, y más allá de no compartir los cuestionamientos que se enunciaron bajo los
términos de una presunta arbitrariedad y de una errónea aplicación del derecho sustantivo, votamos por
conceder recurso.
Disidencia del juez Divito dijo: (…) con la intervención de esta Sala se encuentra satisfecha la doble
instancia y se ha comprobado que el recurso fue deducido en tiempo oportuno, por quien se halla
facultado para hacerlo y con interés para recurrir aquellas resoluciones que están contempladas en el
artículo 457 del código adjetivo, al hacer imposible que continúen las actuaciones (…) a este Tribunal
le compete "no sólo verificar el cumplimiento de los requisitos formales del recurso para concederlo o
denegarlo, sino que le corresponde también analizar si los motivos en que se funda son prima facie
procedentes" (1).
(…) la lectura del escrito recursivo (fs…) pone en evidencia que la pretensión del recurrente está
enderezada a una nueva inspección, en la instancia extraordinaria, de aquellas cuestiones que esta Sala
-con otra integración- ya analizó para decidir en el auto impugnado, apoyándose en la mera
discrepancia con el modo en que se valoraron los hechos y la prueba, temas que son ajenos al control
casatorio por ser de atribución propia de esta alzada, salvo supuestos de arbitrariedad o absurdo notorio
(2)., extremos que no se verifican en el sub lite.
En efecto, si bien la acusación particular alega que se valoró incorrectamente la prueba colectada, al
entenderse que no medió un ardid idóneo, y que se omitió considerar la figura prevista en el art. 298 bis
del Código Penal, sus argumentos sólo ponen en evidencia su disconformidad con lo decidido, de
modo que al tratarse de una opinión diversa que no resulta novedosa, obsta a la admisibilidad del
recurso en examen.
Las falencias indicadas no son subsanables mediante la invocación de la doctrina sobre la arbitrariedad
de sentencias, porque su aplicación requiere del impugnante la demostración de que existe un
apartamiento de la solución normativa prevista para el caso, o groseras deficiencias lógicas de
razonamiento o fundamentación, que impidan considerar que se está en presencia de una decisión
jurisdiccional válida; aspectos que la parte recurrente no pudo acreditar.
(…) voto por el rechazo del recurso de casación.
(…) el tribunal RESUELVE: I. Conceder el recurso de casación interpuesto por los Dres. R. S. y F. B.,
apoderados de la querellante "Telefónica Móviles Argentina SA", contra nuestra decisión de fs. (…)" .

C.N.Crim. y Correc., Sala V, López González, Pinto, Divito (en disidencia). (Sec.: Herrera).
c. 17.193/10, GÓMEZ SANSONE, Sergio A.
Rta.: 11/02/2015

Se citó: (1) C.N.C.P., Sala I, "Russo, Rodolfo Omar s/ recurso de casación", reg. n° 476, del 10-5-1995
y "Ramírez, Gregorio Ramón y otros s/recurso de casación", reg. n° 6.902, del 9-8-2004. (2) C.N.C.P.,
Sala II, causa nro. 5408 "Salvetto, Eduardo Marcelo s/recurso de queja", del 12 de octubre de 2004, y
sus citas.

197
RECURSO DE CASACIÓN.

Contra la resolución que rechazó la excarcelación. Resolución equiparable con una sentencia definitiva
por causar un gravamen de imposible o tardía reparación. Concesión.

Fallo: "(…) Analizada la admisibilidad del recurso, se advierte que la parte tiene legitimidad activa
para recurrir e interpuso el escrito dentro del término previsto por el artículo 463 del Código Procesal
Penal de la Nación.
Si bien la resolución atacada no se encuentra contemplada dentro de las enumeradas por el art. 457 del
código adjetivo, corresponde equipararla a sentencia definitiva. En este sentido, es reiterada la
jurisprudencia de la CSJN en cuanto a que las resoluciones que deniegan la libertad personal del
imputado con anterioridad al dictado de una condena, si bien no son definitivas en sentido estricto,
puesto que no ponen fin al juicio, resultan equiparables, ya que ocasionan un gravamen de imposible o
tardía reparación ulterior y por lo tanto requieren tutela inmediata (Fallos: 329:5460, entre otros).
(…) el recurrente impugnó errores de derecho en los que habría incurrido el auto de este tribunal, e
identificó detalladamente cuál es la solución que pretende.
Resta señalar que invocó la afectación de normas de raigambre constitucional, por lo cual conforme a
lo establecido en el precedente "Di Nunzio" (CNCP, Sala VI, causa n° 107.572, rta: 3/5/2005, mutatis
mutandi) el recurso es admisible a efectos de que la Cámara Nacional de Casación en lo Criminal y
Correccional de la Capital Federal revise los agravios de carácter federal.
(…) el tribunal resuelve: I) Hacer lugar al recurso de casación introducido a fs. (…). II) Emplazar a las
partes en los términos del artículo 464 del Código Procesal Penal de la Nación -según Ley N° 26.374-.
III) Oportunamente, remitir las presentes actuaciones a la Cámara Nacional de Casación en lo Criminal
y Correccional de la Capital Federal, ello, previa certificación del actuario y mediante oficio estilo".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, López González, Pinto, Divito. (Sec.: Raña).


c. 7.265/15, LACALLE, Cristián A.
Rta.: 16/03/2015

RECURSO DE CASACIÓN.

Contra la resolución que rechaza el planteo de nulidad de la notificación del auto de procesamiento.
Resolución que no es definitiva ni equivalente sino que implica la continuación del proceso. Rechazo.

Fallo: "(…) La resolución cuestionada por el presentante, cuya copia protocolizada se tiene a la vista,
no supera la limitación objetiva impuesta por el art. 457 del CPP, lo que torna inviable el recurso
deducido por el Dr. G. R. D..
En efecto, ha sido definido por la jurisprudencia de la Cámara Federal de Casación Penal que el
mentado artículo 457 exige que se trate de una sentencia definitiva o equivalente (1), entre las que no
se encuentran las resoluciones que rechazan el planteo de nulidad de la notificación del auto de
procesamiento, en la medida en que ello implica la continuación del proceso (2).
Por ello, el Tribunal RESUELVE: RECHAZAR el recurso de casación interpuesto por el Dr. G. R. D.".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Divito, Cicciaro, Scotto. (Prosec. Ad Hoc.: Sposetti).
c. 21.703/13, IACOBUCCI, Daniel.
Rta.: 19/02/2015

Se citó: (1) C.F.C.P., Sala III, "Bannet, Rolando Patricio", rta: 21/11/2000; Guillermo Navarro y
Roberto Daray, Código Procesal Penal de la Nación, Hammurabi, Bs. As., 2004, t. II, ps. 1209/1219.
(2) C.F.C.P., Sala I, c. 7.920, "Vrtal, Roberto", rta: 02/11/2006 y Sala IV, c. 5.706, "Cama Loutsch,
Guillermo", rta: 23/06/2006.

RECURSO DE CASACIÓN.

Contra la resolución dictada por el tribunal, en cuanto se resolvió no hacer lugar al pedido de
postergación planteado por la defensa. Planteo en cuanto a una confusa nulidad, no encuadra en la
hipótesis del art. 446 y 457 del C.P.P.N., Improcedente.

Fallo. "(...) Llega la presente cuestión a estudio del tribunal, por los recursos de reposición y casación
planteados (...) contra la resolución dictada por el tribunal el pasado 13 de marzo del corriente, en
cuanto se resolvió no hacer lugar al pedido de postergación planteado por la defensa. Ahora bien, en
cuanto al primer planteo, al que le introduce una confusa nulidad no habrá de prosperar puesto que,
además que no encuadra en la hipótesis del art. 446, C.P.P.N., no se advierte de qué modo lo decidido
debe ser invalidado (...). Por otra parte, el recurso de casación interpuesto también resulta
manifiestamente improcedente, toda vez que no se dan los requisitos del art. 457, CPPN, por lo que
corresponde su rechazo in límine. (...), el tribunal RESUELVE: RECHAZAR in límine, con costas, los
recursos de casación y de reposición interpuestos por los Dres. Juan Carlos Braguinsky y Diego
Germán Mendiola a fs. (...)".

198
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

C.N.Crim. y Correc., Sala I, López González, Pociello Argerich. (Sec.: Peluffo).


c. 38095/14, GUTMAN, Juana Dasa.
Rta.: 20/03/2015

RECURSO DE CASACIÓN.

Contra el auto que revoca la falta de mérito, dispone el procesamiento sin prisión preventiva y medida
de cautela real. Improcedencia. Carácter no definitivo del auto de procesamiento. Rechazo.

Fallo: "(…) La resolución cuestionada por el presentante, cuya copia protocolizada se tiene a la vista,
no supera la limitación objetiva impuesta por el art. 457 del Código Procesal Penal, extremo que torna
inviable este recurso.
En efecto, ha sido definido por la jurisprudencia de la Cámara Federal de Casación Penal que el
mentado artículo 457 exige que se trate de una sentencia definitiva o equivalente (1), entre las que no
se encuentran las resoluciones que, como en el caso, revocan el auto de falta de mérito, disponen el
procesamiento -sin prisión preventiva- y una medida de cautela real (2).
A mayor abundamiento, el artículo 311 del Código Procesal Penal dispone que contra dicho auto "sólo
podrá interponerse apelación sin efecto suspensivo"; sin que obste a tal conclusión el hecho de que
haya sido dictado por la cámara de apelaciones a partir del recurso de una parte acusadora, puesto que
la calidad del órgano que adopta el pronunciamiento no lo convierte en una sentencia definitiva o
equiparable a tal por sus efectos (3).
El carácter no definitivo del auto de procesamiento, aun cuando es dictado por esta Cámara, ha sido
reafirmado por la Cámara Nacional de Casación en lo Criminal y Correccional (4).De tal modo, se
concluye en que el recurso presentado debe ser rechazado, máxime si se atiende a que la defensa tuvo
la oportunidad de participar en el trámite cumplido ante esta alzada, extremo que evidencia que no
existió la invocada afectación de las garantías constitucionales que amparan a esa parte.
Por ello, el Tribunal RESUELVE: I. RECHAZAR in límine el recurso de casación interpuesto por el
Dr. E. E. Y. II. TENER PRESENTE la reserva de acudir ante la Corte Federal".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Divito, Cicciaro, Scotto. (Prosec. Cám.: Decarli).
c. 13.033/13, CROSBIE, Gonzalo.
Rta.: 04/06/2015

Se citó: (1) C.F.C.P., Sala III, "Bannet, Rolando Patricio", rta: 21/11/20000; Guillermo Navarro y
Roberto Daray, Código Procesal Penal de la Nación, Hammurabi, Bs. AS., 2004, t. II, p. 1209/1219.
(2) C.F.C.P., Sala I, J.P.B.A., 119-103-231. (3) C.N.Crim. y Correc., Sala VII, c. 25.018/10, "Cerini,
Diego", rta: 21/08/2013. (4) C.N.C.Crim. y Correc., Sala de Turno, c. 71072363/2012, registro
217/2015, "Alderete, Jorge", rta: 11/05/2015.

RECURSO DE CASACIÓN.

Rechazo al pedido de que el recurso de casación interpuesto respecto de la revocatoria de la


excarcelación dictada por la Cámara tenga efecto suspensivo. Imputado que fue inmediatamente
detenido. Caso en el que no se aplica el efecto suspensivo por estar así previsto como excepción en la
normativa procesal (art. 332 del C.P.P.N.) Existencia de riesgos procesales. Confirmación. Disidencia:
Excepción prevista en el art. 332 del C.P.P.N que sólo se aplica para los recursos de apelación.
Aplicación de una interpretación pro homine y pro libertatis. Necesidad de contar con un doble
conforme para restringir nuevamente la libertad. Revocación. Libertad del imputado.

Fallo: "(…) Disidencia de la jueza Mirta L. López González dijo: La cuestión a decidir radica en
determinar si es posible disponer la inmediata detención del imputado con motivo de la revocatoria de
la concesión de la excarcelación dispuesta por esta Sala (ver fs…) o, como alega la defensa, es
necesario dejarla en suspenso hasta tanto adquiera firmeza.
(…) entiendo que corresponde otorgarle efecto suspensivo al recurso de casación deducido por la
defensa.
El artículo 442 del Código Procesal Penal establece que "La interposición de un recurso ordinario o
extraordinario tendrá efecto suspensivo, salvo que expresamente se disponga lo contrario".
No paso por alto que el art. 332 del CPPN contempla específicamente aquellas decisiones relativas a la
exención de prisión o excarcelación, pero también dicha norma trata sobre los recursos de apelación.
En este caso el recurso casatorio, fue el deducido por la defensa.
(…) no puedo aplicar un criterio puramente formalista cuando en la especie se juegan principios de
orden constitucional.
(…) existe una normativa procesal que determina el efecto suspensivo cuando se trate de recursos
extraordinarios (art. 442 del CPPN) (…).
(…) decidir lo contrario permitiría una interpretación extensiva in malam partem. (…) las normas cuya
definición se cuestiona se refieren a la libertad del imputado durante el proceso y por lo tanto

199
regulatorias del derecho a la libertad personal (artículo 7 de la Convención Americana sobre Derechos
Humanos). (…) debe privilegiarse una interpretación pro homine y pro libertatis (…).
(…) una interpretación a favor del derecho a la libertad personal del imputado - que ya venía gozando-
en consonancia con los principios citados, impone la necesidad de contar con un doble conforme para
restringir nuevamente su libertad.
(…) corresponde otorgarle efecto suspensivo al recurso de casación interpuesto por la defensa y por
ello, voto por revocar el auto impugnado y disponer la libertad del imputado hasta tanto la decisión de
esta Sala sea revisada por la Cámara Nacional de Casación Penal.
El juez Ricardo Pinto dijo: El principio general es que los recursos sean ordinarios o extraordinarios,
tienen efecto suspensivo, salvo que se disponga lo contrario (artículo 442 del CPPN).
Sin embargo, el artículo 332 del CPPN contempla una excepción al indicar "el auto que conceda o
niegue la exención de prisión o la excarcelación será apelable por el ministerio público fiscal, el
defensor o el imputado, sin efecto suspensivo, dentro del término de 24 horas".
Si bien el citado artículo 332 hace referencia al recurso de apelación, lo cierto es que una interpretación
armónica de las normas que regulan el instituto de la excarcelación me llevan a concluir que esa
excepción debe hacerse extensiva al recurso de casación y, por lo tanto, el remedio interpuesto contra
la decisión de esta Sala no posee efecto suspensivo. (…) la decisión de denegarle a S.V. la posibilidad
de que transite el proceso en libertad adquiere inmediata vigencia hasta tanto la Cámara Nacional de
Casación Penal resuelva el recurso interpuesto (y que fuera concedido a fs….).
En efecto, si en la revocatoria de la concesión de la excarcelación dictada por esta Sala - voto
mayoritario- se afirmó la existencia actual de riesgos procesales, de continuar el imputado en libertad
hasta tanto se resuelva el recurso -con la dilación propia del trámite recursivo- inevitablemente se
estaría atentando contra los fines del proceso y contra la eventual realización de un juicio.
(…) nos encontramos frente a una decisión adoptada en el marco de una medida contracautelar, y como
tal debe ejecutarse de manera inmediata, pues de lo contrario no se estarían neutralizando los peligros
procesales que la fundamentaron.
(…) se ha sostenido que "Los recursos tienen efecto no suspensivo cuando, no obstante su
interposición, la resolución impugnada se ejecuta de inmediato. Aparte del caso de sentencia
absolutoria (…), tienen el efecto analizado los recursos interpuestos contra el auto de procesamiento y
de falta de mérito (CPPN, art. 311), los que disponen la exención de prisión o la excarcelación (id., art.
332) o el sobreseimiento (id., art. 337, párr. 2°), los que resuelven los incidentes de ejecución (id., art.
491, párr. 2°) y los que decretan el embargo o la inhibición (id., art. 518)" (confr. causa 26.583/2010
"Vitangeli, Jorge Luis" de Sala VI, resuelta el 31 de octubre de 2013, donde el voto de la mayoría citó
"Los recursos en el proceso penal", Palacio, Lino, Abeledo-Perrot, buenos Aires, 1998, pág. 26).
En igual sentido la Sala VII de esta Cámara sostuvo "Y si bien la defensa destacó que el auto que
revocó la exención de prisión de López fue recurrido en casación, lo cierto es que la interposición del
recurso no posee efecto suspensivo respecto de lo decidido en esta instancia (artículo 332 del Código
Procesal Penal) (confr. causa n° 42.399/2009 "López, Sergio Fabían", resuelta el 10 de julio de 2013).
Por su parte, la Dra. Ana María Figueroa como integrante de la Sala III de la Cámara Federal de
Casación Penal sostuvo que "… no rige el carácter suspensivo que el artículo 442 del Código Procesal
Penal de la Nación le atribuye a los recursos, referido a la imposibilidad de ejecutar la resolución en
crisis hasta tanto adquiera firmeza (….). Ello es así habida cuenta de que carecen de efecto suspensivo
los recursos deducidos en los incidentes de exención o excarcelación (artículo 332 del CPPN) confr.
CFCP, Sala III, c.n° 81810081-12 "Colotti, Camilo", resuelta el 6 de noviembre de 2014-.
(…) corresponde confirmar la decisión impugnada dado que no debe otorgarse efecto suspensivo al
recurso de casación interpuesto contra la decisión cuya copia obra glosada a fs. (…), por aplicación del
artículo 332 del CPPN, que excepciona el principio general del artículo 442 del mismo cuerpo legal.
Así voto.
El juez Mauro Divito dijo: (…) si bien en la anterior intervención de esta Sala sostuve que
correspondía confirmar la decisión de la jueza de la instancia de origen mediante la cual dispuso la
excarcelación de Librado O.S.V., vencido - por la mayoría - sobre ese punto, en esta ocasión debo
expedirme puntualmente sobre el efecto suspensivo o no, que corresponde otorgarle al recurso de
casación interpuesto por la defensa contra la revocatoria de esta Sala.
(…) como he sostenido en otros pronunciamientos (causa 42.399/2009, Sala VII, caratulada "López,
Sergio Fabián", resuelta el 10 de julio de 2013), entiendo que el recurso de casación interpuesto por la
defensa no posee efecto suspensivo respecto de lo decidido en esta instancia (artículo 332 del Código
Procesal Penal).
(…) adhiero a la solución propuesta por el Dr. Pinto.
(…) el tribunal RESUELVE: Confirmar el auto de fs. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, López González (en disidencia), Pinto, Divito. (Sec.: Roldán).
c. 78.522/14, S. V., L. O.
Rta.: 19/05/2015

RECURSO DE QUEJA.

Por denegación y retardo de justicia interpuesto por el pretenso querellante. Letrado que escoge un
procedimiento que no se ajusta a las previsiones legales. Ausencia de pedido de pronto despacho.

200
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

Inexistencia de planteo pendiente de respuesta jurisdiccional. Actuaciones que se encuentran a estudio


ante la Cámara Federal de Casación Penal en virtud de los recursos extraordinarios deducidos por el
propio incidentista. Rechazo.

Fallo: "(…) II.- Una vez más el abogado (…) reclama su legitimación activa en el proceso y escoge,
erróneamente, esta vía incidental para requerir una pronta respuesta a sus peticiones.
El artículo 127 del Código Procesal Penal de la Nación establece que "Vencido el término en que deba
dictarse una resolución, el interesado podrá pedir pronto despacho y, si dentro de tres (3) días no lo
obtuviere, podrá denunciar el retardo al tribunal que ejerza la superintendencia, el que previo informe
del denunciado, proveerá enseguida lo que corresponda (…)".
Al igual que en ocasiones anteriores, se advierte que el procedimiento seleccionado no se ajusta a las
previsiones legales.
No sólo no hubo un pedido de pronto despacho precedente que habilitara la presente en los términos de
la norma citada, sino que tampoco existe un planteo pendiente de respuesta jurisdiccional en la
instancia de grado, toda vez que las actuaciones se encuentran radicadas desde el año pasado en la Sala
I de la Cámara Federal de Casación Penal (…), en virtud de los recursos extraordinarios deducidos por
el incidentista.
Evaluados los términos del recurso y el informe producido por el juez a quo (…), no se advierte que el
estado de la causa se adecue a la hipótesis del referido artículo, por lo que la queja intentada deviene
improcedente.
En consecuencia, el Tribunal RESUELVE: RECHAZAR el recurso de queja por retardo de justicia
interpuesto a fs. (…), con costas (arts. 127 y 531 del Código Procesal Penal de la Nación). (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini, Filozof, Pinto. (Sec.: Oberlander).


c. 44.635/12, TETTAMANTI, Christian Ruben.
Rta.: 20/03/2015

RECURSO DE QUEJA.

Contra el auto que no hizo lugar al recurso de apelación interpuesto respecto de la resolución por la
cual el magistrado señaló que no había mérito para procesar o sobreseer al imputado y que debían
llevarse a cabo medidas de prueba. 1) Impugnación que no esta prevista para el imputado. Ausencia de
gravamen. Resolución que es provisoria. 2) Principio de imparcialidad no violentado. Fiscal que
evaluará, eventualmente, si en el marco de la investigación que tiene delegada, considera que son útiles
y pertinentes las medidas sugeridas por el juez. Rechazo.

Fallo: "(…) Sea que la apelación se refiera al auto por el que se dispuso la falta de mérito para procesar
o sobreseer a M. Á.
S. (…) o bien abarque la realización de las medidas probatorias propuestas por el a quo en el marco del
auto de mérito dispuesto (…), la queja interpuesta por la defensa no puede prosperar.
En el primer supuesto, cabe mencionar que el artículo 311 del Código Procesal Penal no prevé la
posibilidad de que el imputado impugne la resolución que dispone que no existe mérito para procesarlo
ni sobreseerlo, pues más allá de que el interlocutorio conlleve la prosecución del proceso, no causa
gravamen irreparable a la defensa en virtud de la provisoriedad de la medida.
En lo tocante al segundo cuestionamiento, la argumentación desarrollada a fs. (…), acápite II, no
traduce motivos que sustenten la alegada violación al principio de imparcialidad, en tanto la delegación
de la instrucción no impone al fiscal la realización de las medidas de prueba que el juez le haya
sugerido, ya que acorde a la discrecionalidad técnica que caracteriza esta etapa del proceso, el fiscal
como conductor de la investigación las llevará a cabo si las considera pertinentes y útiles (art. 212,
segundo párrafo del código de rito).
Consecuentemente, este Tribunal RESUELVE: RECHAZAR el recurso de queja deducido a fs. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Divito, Cicciaro. (Sec.: Sánchez).


c. 3.951/12, SCARFONE, Miguel Angel.
Rta.: 31/03/2015

RECURSO DE QUEJA.

Contra el auto que declaró inadmisible el recurso de apelación interpuesto respecto del llamado a
prestar indagatoria. Medida discrecional para el juez. Ausencia de gravamen. Improcedencia. Rechazo.

Fallo. "(...) deducido a (fs. ...) del presente incidente- por la Dra. Marianela Modrego Martínez, letrada
defensora de O. J.
S. A., contra el resolutorio obrante a (fs. ...) de los autos principales que corren por cuerda, en cuanto
declaró inadmisibles el recurso de apelación introducido a (fs. ...) contra el llamado a indagatoria
dispuesto a (fs. ...).
Ahora bien, tal como ha sostenido el juez a quo al denegar la vía oportunamente intentada por la
defensa, el recurso de apelación intentado resulta improcedente. En este sentido, esta sala sostiene que

201
el llamado a indagatoria en los términos del art. 294 del C.P.P.N. se trata de una decisión que es
expresamente irrecurrible, por tratarse de una medida técnicamente discrecional para la Sra. jueza de
instrucción.
Máxime, siendo que ésta no causa un gravamen irreparable a la parte recurrente (art. 449, del CPPN),
(...). En consecuencia, habrá de rechazarse la queja deducida por la defensa. Por los motivos expuestos,
el tribunal RESUELVE: RECHAZAR, con costas, la queja presentada por la Dra. Marianela Modrego
Martínez, letrada defensora de O. J. S. A., a (fs. ...) del presente incidente. (...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala I, Bunge CAmpos, Rimondi. (Prosec. Cám. Ad-Hoc.: León).
c. 59140/14, ALONSO, Osvaldo José Simón.
Rta.: 16/04/2015

RECURSO DE QUEJA.

Contra el recurso de apelación rechazado presentado respecto de la negativa al pedido formulado por el
fiscal para que se reciba declaración indagatoria a quienes fueran imputados en el marco de una
investigación cuya instrucción le fuera delegada. Ausencia de agravio. Acto discrecional del juez y no
encuadrado en los supuestos del art. 449, del C.P.P.N. Rechazo.

Fallo: "(…) Contra la decisión del 19 de diciembre de 2014 que rechazó el recurso de apelación contra
la providencia de fs. (…) por el que no se hizo lugar al pedido de indagatoria de (…), se alzó en queja
el agente fiscal.
II. A fin de resolver este incidente corresponde mencionar algunos antecedentes de interés.
Estas actuaciones tienen su génesis por la actuación policial del 2 de octubre de 2014 en virtud de la
que se determinó que el damnificado habría sido agredido por personas desconocidas. Sin embargo, al
momento en que la víctima ratificó su denuncia ante el Sr. Fiscal de la causa también contó otros
hechos en los que habría sido víctima, atribuyéndole la responsabilidad de todos ellos a (…) (fs. (…)).
El agente fiscal a fs. (…) remitió las actuaciones al Juzgado de Instrucción nro. (…) en los términos del
art. 196 quater del Código Procesal Penal de la Nación y solicitó diversas medidas probatorias y la
indagatoria del nombrado (…).
Una vez en el juzgado, se acumularon dos expedientes, en los que, en el marco de uno de ellos, el
magistrado que intervino inicialmente había corrido la vista del art. 180 del CPPN, en el otro, se
hallaba delegada la investigación en la fiscalía (cfr. fs. (…)).
A fs. (…) la jueza remitió la causa a la fiscalía para que prosiga con la investigación.
Ante ello, el Sr. Fiscal interpuso recurso de reposición y apelación en subsidio. Sendos recursos fueron
rechazados por medio del auto de fs. (…).
Contra la decisión de no hacer lugar al pedido de llamado a indagatoria a (…), el Sr. Fiscal presento
una reposición y apelación en subsidio, las que fueron rechazadas por improcedentes, dando lugar a
esta queja.
(…) Los jueces Mirta L. López González y Mauro A. Divito dijeron: La convocatoria al proceso, o
como en este caso su negativa, en los términos del artículo 294 del C.P.P.N. es un acto discrecional del
juez que no puede ser cuestionado por las partes ni revisado por este tribunal.
(…) la resolución que nos ocupa no encuadra en los supuestos del artículo 449 del C.P.P.N., en virtud
de no resultar expresamente apelable ni causar gravamen irreparable, razón por la cual entendemos que
corresponde rechazar la queja interpuesta a fs. (…).
El juez Ricardo Matías Pinto dijo: Si bien adhiero al voto realizado por mis colegas, entiendo
apropiado realizar algunas aclaraciones.
El llamado a prestar declaración indagatoria al resultar un acto discrecional del juez, que debe
sustentarse en las constancias del legajo, no resulta apelable, salvo supuestos de manifiesta
arbitrariedad cuestionable por causar un gravamen irreparable.
(…) la delegación del legajo al Sr. Fiscal no le causa agravio y constituye una decisión del juzgador
que en todo caso asegura su voz de tercero imparcial en el proceso, de forma tal que sea el Ministerio
Público Fiscal el que realice la encuesta.
(…) la decisión impugnada no amerita admitir la queja interpuesta por cuanto a partir de lo informado
por el tribunal y lo argumentado por el Sr. Fiscal no es dable advertir que la negativa a escuchar como
sospechosos a los imputados resulte arbitraria, y por ello la decisión de mantener la delegación no
resulta tampoco revisable.
(…) se RESUELVE: RECHAZAR la queja interpuesta a fs. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, López González, Pinto, Divito (en disidencia). (Prosec. Cám. ad-hoc.:
Oliviero)
c. 66904/14, STAD, Enrique.
Rta.: 08/04/2015

RECUSACIÓN.

Querella que solicita la recusación del magistrado por haber resuelto con anterioridad en las
actuaciones el sobreseimiento del imputado. Planteo que no encuentra adecuación en ninguna de las

202
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

causales previstas en el art. 55 del C.P.P.N. Opiniones vertidas dentro de las obligaciones funcionales
de los magistrados. Improcedencia. Rechazo.

Fallo: "(…) II.-) Entiende el recurrente que el magistrado no debe seguir interviniendo en la presente,
ya que tras dictar el sobreseimiento de (…), perdió su imparcialidad objetiva.
III.-) Se ha sostenido en varias oportunidades que aquella no puede interpretarse como una herramienta
para que las partes aparten a su gusto a los jueces del asunto o, en otras palabras, para instrumentar
pretorianamente un supuesto de recusación sin causa (in re: Sala VI, las causas n° 70166/2004/15
"Varela, Diego Hernán", rta.: 27/02/14, en la que se citó las n° 37.671 "Publicidad Sarmiento y otros",
rta.: 4/9/09).
La garantía aludida, exigida en todo proceso, no aparece vulnerada en el legajo pues no se emitió una
opinión innecesaria (1), sino que el magistrado se ha pronunciado dentro de las facultades que le son
propias en un proceso en trámite y su acierto o desacierto no puede ser motivo de su apartamiento.
Sus manifestaciones deben ser interpretadas dentro del contexto de la resolución en la cual fueron
realizadas y no aisladamente, de modo que es factible afirmar que la decisión cuestionada no
constituye una opinión extrajudicial sino una emitida en el marco de su actuación "(…) con capacidad
funcional para producirla en el momento en que lo fue (…)" (2).
En ese sentido, no constituye prejuzgamiento las opiniones dadas por los jueces como fundamento de
sus sentencias, en el momento procesal oportuno (in re, Sala VI, c. n° 37546 "incidente de recusación
promovido por el Dr. Davis Hamwee", rta. el 23/6/09 con cita de C.S. Fallos 318:286).
Finalmente, tanto la jurisprudencia nacional como internacional han sostenido que la garantía de
imparcialidad objetiva se encuentra comprometida en la medida en que los integrantes del Tribunal que
deben intervenir en el juicio y dictar una sentencia hayan emitido opinión sobre el mérito de los hechos
o sobre la responsabilidad del imputado durante la etapa preliminar (Reglas Mínimas de Mallorca
ONU , Tribunal Europeo de Derechos Humanos, in re entre otros "De Cubber v. Bélgica", Corte
Suprema de Justicia, in re "Llerena" rta. el 17/5/2005), lo que no se presenta en el caso examinado en
el que aún estamos en la etapa penal preparatoria.
IV.-) En mérito de lo expuesto y no habiendo razones para dudar de la imparcialidad objetiva del
magistrado titular del Juzgado de Instrucción nro. (…), este Tribunal RESUELVE: RECHAZAR la
recusación articulada a fs. (…). (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini, Filozof, Pinto. (Sec.: Oberlander).


c. 5.191/12, NELLI MAESTRI, Pablo Oscar.
Rta.: 24/04/2015

Se citó: (1) C.S.J.N., S. 51 XXVI, "Sucesión de Rosa Cosenza de Varela y otro c/ Buenos Aires
Provincia s/ daños y perjuicios", rta.: 7/3/1995; (2) C.N.Crim. y Correcc., Sala VI, c. 940/2012,
"Paredes, María Nilda Luz s/ recusación", rta.: 14/08/12.

REQUISA.

Nulidad rechazada. Imputados que al notar la presencia policial aceleraron la marcha. Interceptación
con objeto de identificación. Visualización de arma dentro del vehículo. Justificación de la detención y
requisa. Confirmación.

Fallo: "(…), convoca la atención de esta Alzada el recurso de apelación interpuesto por las defensas de
los imputados (…) contra la resolución documentada a fs. (…), en cuanto no se hizo lugar al planteo de
nulidad impetrado.
A criterio de los recurrentes, la ausencia de indicios vehementes de culpabilidad determina la ilegalidad
de la requisa practicada y de las detenciones de los causantes.
Cumple entonces abordar la inspección de la diligencia que dio origen a las actuaciones y, en ese
sentido, de las declaraciones testimoniales del personal preventor se extrae que asignados a recorrer el
sector en el que se produjo la detención observaron un automóvil particular con los vidrios tonalizados
en el que viajaban tres sujetos y que "el conductor del rodado al notar la presencia del personal policial
comienza a acelerar la marcha", que por tal razón se inició una persecución, con las sirenas encendidas,
y que pese a las reiteradas indicaciones el vehículo continuó la marcha por aproximadamente
cuatrocientos cincuenta metros hasta ser detenido, oportunidad en la que se indicó a los sujetos que
descendieran y mientras se encontraban identificándolos el personal de policía pudo observar que en el
asiento delantero derecho se hallaba una pistola semiautomática (...) A criterio de esta Sala, la situación
descripta justificó que los preventores intentaran detener la marcha del rodado, cuyo conductor no
habría acatado la orden, de modo que el proceder cumplido en la emergencia se exhibe legítimo si se
atiende al comportamiento asumido por los imputados, esto es, que al notar la presencia del personal
policial se aceleró la marcha que se prolongó por casi cinco cuadras, pues tal accionar fundó las
circunstancias que habilitaron sus interceptación con el objeto de identificarlos.
A partir de lo expuesto puede sostenerse que la actuación de los preventores no se exhibe arbitraria,
siempre que estuvo motivada en una circunstancia objetiva que en un primer momento habilitó su
intercepción mientras que -en rigor- lo que justificó la formal detención de aquéllos y la requisa del
vehículo fue la visualización de un arma de fuego dentro del rodado.

203
Desde esa perspectiva, y al valorar que la Sala de Feria A ya ponderó que "no obran elementos que
autoricen a dudar de la veracidad de los dichos de los funcionarios policiales" (...), es posible concluir
en que aquellos actuaron de manera prudente y razonable en el ejercicio de sus funciones específicas.
Finalmente, el Tribunal sostuvo que la circunstancia de que el conductor acelere la marcha ante la
presencia del móvil policial puede importar un proceder ambiguo y justifica su intercepción (1).
Por lo expuesto, el Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR la resolución dictada a fs. (…), en cuanto no
hace lugar al planteo de nulidad impetrado a fs. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Cicciaro, Scotto. (Prosec. Ad Hoc.: Sposetti).


c. 438/15, MIRANDA, Luis A. y otros.
Rta.: 02/03/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correc., Sala VII, c. 830/12, "Macías, Maximiliano Fabián", rta: 12/07/2012.

RESISTENCIA A LA AUTORIDAD.

Procesamiento. Agravio: Atipicidad porque desobedeció la orden de su propia detención y su accionar


sólo configura una infracción de tránsito. Hecho típico. Imputado que continuó su marcha y dirigió su
vehículo contra el personal policial, quien debió retroceder para no ser embestido. Confirmación sin
perjuicio de la calificación que en definitiva corresponda.

Fallo: "(…) III. Hecho B: La defensa planteó la atipicidad de la conducta atribuida a Z. bajo dos
argumentos: 1) que su accionar sólo es pasible de la infracción administrativa de tránsito que ya le
fuera impuesta; 2) que no resulta aplicable la figura prevista en el artículo 239 del Código Penal si lo
que se desobedece es la orden relativa a la propia detención mientras no se empleen medios violentos
para evitar el arresto.
Si bien, como señala la defensa, entendemos que no constituye el delito de desobediencia el desatender
la orden de la propia detención (confr. causa 8836/2015 "R., B. E. y otro s/ robo, Sala V, resuelta el
12/3/2015), en el caso concreto, no cabe admitir el planteo de atipicidad.
Ello así por cuanto a Z. no se le endilgó simplemente el haber hecho caso omiso a una orden de
detención, sino que la conducta que se le atribuyó consistió en haber continuado la marcha y dirigido la
conducción de su vehículo hacia el Escribiente O.H.S. -quien debió retroceder para no ser embestido-,
extremos que pueden encontrar adecuación típica en el artículo 239 del Código Penal y por ello el
planteo de la defensa debe ser rechazado.
(…) el tribunal RESUELVE: I. (…) II. CONFIRMAR parcialmente el auto de fs. (…) en orden al
hecho identificado en ese resolutorio como B), sin perjuicio de la calificación legal que en definitiva
corresponda. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, Pinto, Divito. (Sec.: Roldán).


c. 37.307/14, Z., S. O.
Rta.: 27/03/2015

RESISTENCIA A LA AUTORIDAD.

Procesamiento. Huída a bordo de motocicleta. Atipicidad. Falta de acatamiento de la propia orden de


detención sin ejercicio de violencia. No configuración de actuar delictivo en términos del art. 239 del
C.P. Revocatoria. Sobreseimiento.

Fallo: "(…) Las defensas de W. O. L. y G. O. R. recurrieron en apelación el auto de procesamiento


dictado a fs. (…).
Al ponderar los dichos de los agentes J. J. P. (…), E. H. (…), D. J. I. (…), A. J. T. T. (…) y L. C. P.
(…), se extrae que la huida intentada por los imputados a bordo de la motocicleta conducida por O. R.,
en tanto no conllevó el ejercicio de violencia alguna, no configura un actuar delictivo en los términos
del artículo 239 del Código Penal. Ello así, porque la mera falta de acatamiento a la orden de la propia
detención es impune.
En ese sentido, esta Sala ha sostenido en las causas números 37.466, "S., N.", del 20 de septiembre de
2009 y 485/11, "I., D.", del 21 de diciembre de 2011, que "no constituye delito de desobediencia el
desatender la orden de la propia detención…" (1).
Por lo expuesto, en la inteligencia de que resulta atípico el hecho atribuido y descartada cualquier
tipicidad por el señor juez de grado en orden al revolver de fogueo secuestrado, corresponde disponer
el sobreseimiento de los causantes en relación con el evento por el que rindieran declaración
indagatoria (artículo 336, inciso 3º, del Código Procesal Penal).
Por ello, esta Sala del Tribunal RESUELVE: REVOCAR el auto documentado a fs. (…) y DISPONER
el sobreseimiento de W. O. L. y G. O. R., con la expresa mención de que la formación del sumario no
afecta el buen nombre y honor del que gozaren (art. 336, inciso 3°, del Código Procesal Penal)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Divito, Cicciaro, Scotto. (Sec.: Sánchez).


c. 74.379/14, LOPEZ, Walter Omar y otro.

204
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

Rta.: 29/05/2015

Se citó: (1) J.P.B.A., T. 84, F. 9; Ricardo C. Núñez, Tratado de Derecho Penal, 1992, t. V, p. 27;
Sebastián Soler, Derecho Penal Argentino, 1992, t. V, p. 148/9.

RETENCIÓN INDEBIDA.

Procesamiento. Administrador que no restituyó los libros relativos al manejo del Consorcio de
Propietarios pese a los diversos reclamos. Notificación fehaciente de su remoción del cargo e
intimación de restitución de la documentación. Confirmación. Modificación del monto del embargo.

Fallo: "(…), convoca a la Sala el recurso de apelación interpuesto por la defensa contra el auto
documentado a fs. (…), en cuanto se dictó el procesamiento de C. E. D. y se trabó embargo por la suma
de cincuenta mil pesos ($ 50.000).
Se atribuyó al nombrado el no haber restituido, pese a los diversos reclamos que se le formularon en tal
sentido, los libros relativos al manejo del Consorcio de Propietarios del edificio de la calle M. N° X, de
esta ciudad, cuya administración ejerció desde el año 2007 hasta el 7 de agosto de 2014.
D. fue debidamente notificado de la Asamblea Extraordinaria que se celebró el 7 de agosto de 2014,
ocasión en la que además se le informó acerca del tratamiento de la "designación de Administrador por
período abril 2014/abril 2015" y de la documentación con la que debía concurrir (fs. 25). Si bien no
asistió porque adujo problemas de salud, M. A. F., en su carácter de nueva coadministradora, le remitió
una carta documento intimándolo "para que, en el término de 48 hs. de notificado haga entrega de la
totalidad de la documentación y libros correspondientes a este consorcio" (…).
El imputado dijo haber recibido tales misivas y mantenido comunicaciones telefónicas y en forma
personal con la denunciante (…), mas no entregó los documentos reclamados sino hasta que fueron
hallados en su poder el 3 de noviembre de 2014 en oportunidad del registro de la sede de la
"Administración D." (….).
De ello se desprende que el encausado fue impuesto fehacientemente de su remoción en el cargo y que
resultó intimado a restituir la documentación; empero, hizo caso omiso y mediante diversas maniobras
dilatorias, tales como invocar que desconocía si efectivamente la Asamblea había sido convocada en
legal forma y si F. revestía el carácter que decía ostentar, se abstuvo de reintegrar los libros que
pertenecían al consorcio.
Cabe señalar que el artículo 9, inciso "k" de la ley 3.254 de esta Ciudad Autónoma de Buenos Aires,
establece que "en caso de renuncia, cese o remoción, [el administrador] debe poner a disposición del
consorcio, dentro de los diez (10) días, los libros y documentación relativos a su administración y al
consorcio, no pudiendo ejercer en ningún caso, la retención de los mismos".
Por lo expuesto, dable es concluir en que se encuentra justificado el reproche enderezado al encausado
en los términos del artículo 306 del catálogo formal.
Finalmente, en lo tocante al monto justipreciado por el señor juez de grado a título de embargo, se
estima que la suma cuestionada debe ser reducida a veinticinco mil pesos ($ 25.000) por resultar ésta
adecuada para cubrir las exigencias previstas en el artículo 518 del Código Procesal Penal, esto es la
indemnización civil y las costas procesales, incluyendo el pago de la tasa de justicia y los honorarios
profesionales (artículo 533 ibidem).
Por ello, el Tribunal RESUELVE: I. CONFIRMAR parcialmente el auto documentado a fs. (…), en
cuanto decreta el procesamiento de C. E. D. II. MODIFICAR el monto fijado a título de embargo, que
se establece en la suma de veinticinco mil pesos ($ 25.000)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Divito, Cicciaro, Scotto. (Sec.: Sánchez).


c. 58.317/14, DANTAS, Carlos E.
Rta.: 28/05/2015

ROBO

En tentativa. Procesamiento. Agravio de una de las defensas: No participación en el hecho e


inimputabilidad debido al estado de intoxicación en el que estaba por el consumo de drogas y alcohol.
Elementos de prueba suficientes para afirmar que participó en el hecho. Coautoría. Accionar que da
cuenta que podía dirigir sus acciones. Informe médico que da cuenta que no tenía sus facultades
mentales afectadas. Confirmación. Disidencia: Necesidad de profundizar la investigación. Revocación.
Falta de mérito.

Fallo: "(…) La representación letrada de I. R., a cargo del defensor oficial R. D. L., impugnó el
pronunciamiento al considerar que no existió un aporte concreto del mencionado en el tramo ejecutivo
del desapoderamiento. Señaló, además, que las constancias de autos eran suficientes para concluir que,
al momento del hecho, careció de capacidad para comprender la criminalidad de un acto delictivo y
dirigir sus acciones, en función de que consumió bebidas alcohólicas y fármacos. En base a ello,
postuló su desvinculación.
Respecto de C., no dedujo recurso alguno.

205
(…) Celebrada la audiencia prescripta por el artículo 454 del Código Procesal Penal de la Nación, el
Tribunal se encuentra en condiciones de resolver.
(…) Disidencia de el juez Luis María Bunge Campos dijo: Previo a abordar el fondo de la cuestión,
considero que en aras de reconstruir con mayor exactitud lo ocurrido en aquella jornada en lo que
respecta al aparente aporte del recurrente, sería de utilidad ampliar los dichos de F., a fin de que detalle
con precisión la conducta del mencionado desde el momento en que ascendió al taxi hasta que fue
detenido. Deberá explicar, además, si advirtió que I. R. padeciera algún inconveniente para desplazarse
por sus propios medios, en el habla, o cualquier otra circunstancia que ilustre un estado psíquico
anormal.
A idénticos fines, también sería de interés ampliar los testimonios del personal policial que procedió a
su detención.
Entonces, toda vez que existen medidas de prueba pasibles de producción que ayudarán a conocer con
mayor detalle la actividad desplegada por I. R., y así evaluar si se trató de un aporte delictivo y afirmar
o desechar la defensa esgrimida en forma subsidiaria, adoptaré en relación al nombrado el
temperamento expectante previsto por el artículo 309 del ordenamiento procesal, y, consecuentemente,
se deberá disponer su inmediata libertad.
(…) El juez Mario Filozof dijo: Sobre la participación del imputado se trata de la intervención en un
hecho común en el que éste aportó su presencia como modo de comportamiento típico.
Subir al vehículo de alquiler con su consorte de causa y viajar hasta el destino donde se intentó sustraer
pertenencias a quien lo conducía para descender ambos pretendiendo darse a la fuga es una
exteriorización con sentido normativo.
Se descarta así un actuar en un margen socialmente aceptable, que ejerciera una conducta neutra pues
ambos actuaron ilícitamente contrariando las normas comunitarias. Es el sistema penal el que actúa
precisamente para reafirmar la vigencia de tales normas.
I. R. se movió de manera conjunta, actuó de manera grupal etendiendo el mismo objetivo ilícito.
Ninguna duda en este estadio de ponderación del vínculo de significación objetiva y subjetiva del
injusto, lo que se traduce en coautoría. Esto es, un concierto ejecutivo, cuanto menos tácito, en el hecho
común.
Respecto del problema psíquico preexistente derivado de sus adicciones, que según la defensa se
potenció ante el consumo de clonazepan y alcohol previo al episodio, y en base al cual concluyó su
falta de capacidad de culpabilidad, he sostenido con anterioridad que "a efectos de determinar la
capacidad de culpabilidad de una persona, en los términos del art. 34, inc. 1 del Código Penal, no
interesa tanto el diagnóstico médico dentro del catálogo de enfermedades mentales, sino el aporte de
las cualidades psíquicas del individuo, para que conjuntamente con el resto de las pruebas, los jueces
puedan establecer si el sujeto, en el momento de ocurrido el suceso, tenía una perturbación en su
conciencia, que le haya impedido comprender y dirigir sus acciones" (1).
La secuencia ut supra relatada, que enseña el control que junto a su consorte tuvo de la situación, y las
conclusiones médicas de que dan cuanta que no existen indicadores de los que pueda inferirse que al
momento del hecho haya poseído una afectación de sus facultades mentales que le restó aptitud para
comprender y/o dirigir sus acciones (fs. …), descartan la defensa ensayada en este aspecto.
Voto entonces por confirmar el auto apelado.
(…) El Juez Rodolfo Pociello Argerich dijo: Intervengo en la presente causa ante la disidencia de mis
colegas preopinantes, luego de escuchar el audio de la audiencia y al no tener preguntas que formular,
adhiera al voto del juez Mario Filozof.
En virtud del acuerdo que antecede, el tribunal RESUELVE: I) CONFIRMAR el punto dispositivo
"(…)" del auto decisorio de "(fs. …)" en cuanto fue materia de recurso (artículo 306 del Código
Procesal Penal de la Nación). (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala A, Bunge Campos, Filozof, Pociello Argerich. (Sec.: Poleri).
c. 73873/14, CARBAJO JONAS y otro.
Rta.: 21/01/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correc., Sala VI, c. 33524/13 y c. 46473714 "Placerano, Oscar Darío" rta.:
18/9/14 y en las que se citó la c. 43809/13 "Barreto, César", 27/2/14.

ROBO

Agravado por su comisión con armas de fuego, en concurso real con abuso de armas y tentativa de
homicidio criminis cuasae, agravado a su vez por su comisión con un arma de fuego, e idealmente con
el de aborto sin consentimiento de la mujer, que a su vez concursa realmente con el delito de tenencia
de un arma de fuego de uso civil, sin la debida autorización legal y bajo la misma regla con el de
portación ilegítima de arma de fuego de uso civil. 1) Procesamiento: Elementos de prueba suficientes
para imputar los hechos a la totalidad de los imputados. Ingreso al inmueble con fines de robo con
armas de fuego cargadas y aptas para disparar, que permite presumir que existió acuerdo entre los
imputados de usarlas para lograr la impunidad. Confirmación. 2) Prisión preventiva: Admisible y
acertadamente impuesta. Confirmación. Disidencia parcial: No apelable. Erróneamente concedida.

206
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

Fallo: "(...) Del procesamiento y embargo. Los jueces Juan Esteban Cicciaro y Julio Marcelo Lucini
dijeron: Los agravios expresados por la recurrente en cuanto a la cuestión traída a estudio no logran
conmover los fundamentos del temperamento impugnado.
Ello, por cuanto en primer lugar se estima acreditado, para esta etapa del proceso, que L. A. R. integró
el grupo que ingresó al inmueble de A. M. Q. y se apoderó de bienes mediante el uso de armas de
fuego que, incluso, fueron disparadas en reiteradas ocasiones.
Tanto la víctima, M. Q., como los testigos M. Y. P. S., P. A. Q., M. D. M. L. y V. H. M. fueron
contestes entre sí sobre este punto y en que lo reconocieron por ser vecino del barrio (fs. ...).
Asimismo, a excepción de M. D. M. L. que aclaró que no pudo observar quiénes eran los sujetos que
portaban armas de fuego, aseveraron que L. A. R. llevaba una y, tanto Q. como A. Q. e H.
M., coincidieron en que aquél efectuó al menos un disparo al aire, extremo que se condice con el
hallazgo de cuatro vainas servidas en el lugar del hecho (fs. ...) y con la circunstancia de que G. A. A.
sindicado por S. A. Q. como el sujeto que le disparó habría efectuado sólo tres detonaciones con su
arma.
En relación con el agravio invocado por la Dra. C. S.al respecto, si bien no brindó mayores razones
para dar sustento a su planteo, no se ha agregado al sumario elemento objetivo alguno que permita
presumir algún tipo de animosidad hacia el imputado por parte de Q. y de sus vecinos que declararon
en la causa. Nótese que el coimputado H. D. R. afirmó que no conoce a Q., ni a S. A. Q. y V. H. M. (fs.
...).
Sentado cuanto precede, la circunstancia de que no haya sido L. A. R. quien efectuara los disparos que
hirieron a A. Q. y acabaron con la vida de la niña por nacer de siete meses de gestación , de ningún
modo conduce a sostener la ajenidad que se pretende pues, como ya sostuvo esta Cámara en su anterior
intervención (fs. ...), se estima que al haber accedido a un inmueble con fines de robo mediante el uso
de armas de fuego cargadas y aptas para disparar, es posible presumir que existió el acuerdo de usarlas
para lograr la impunidad, por lo que no se advierte ningún exceso por parte de quien realizó las
detonaciones respecto al plan criminal.
En efecto, S. A. Q. salió de su vivienda al escuchar los gritos de auxilio de su vecina y fue sorprendida
por el grupo que integraba el imputado L. A. R. que se acercaba corriendo, momento en el que uno de
ellos, presuntamente G. A. A., efectuó hacia aquélla varios disparos "(fs. ...)".
La distancia desde la cual se efectuaron fue de menos de cincuenta metros, impactaron uno en un
pulmón y otro en una pierna y el tiempo de gestación de siete meses "(fs. ...)", como ya se destacó al
tratar el recurso interpuesto contra el procesamiento de H. D. R., impiden acceder a los reclamos de la
defensa en tanto a la falta de dolo en el accionar desplegado en ese momento, como a que la persona
que disparó pudo no haber advertido el estado de gravidez de A. Q.. Menos atendible aún resulta la
hipótesis de la parte en cuanto a que pudo haber existido una desviación del proyectil, en tanto no ha
brindado algún motivo que le dé crédito.
Finalmente, la circunstancia de que además del arma que portaba, L. A. R. hubiera concurrido al lugar
del hecho junto a un grupo que llevaba otra, sumada a que aquél no resulta ser legítimo usuario "(fs.
...)", conduce también a sostener la imputación referida a su tenencia, sin perjuicio de la relación
concursal que en definitiva pudiere corresponder.
Sobre este extremo y habida cuenta del cuestionamiento formulado, cabe resaltar que la calificación
legal en esta etapa resulta ser provisoria y que será el tribunal oral que eventualmente sea
desinsaculado el que, llegado el caso, procederá a fijarla en forma definitiva (art. 401 del Código
Procesal Penal).
En torno a la suma dispuesta en concepto de embargo, además de destacar que su dictado no es
facultativo como pretende la defensa al solicitar su sustitución por otra inhibición general de bienes ,
sino que se encuentra imperativamente previsto en el artículo 518 del código de forma, la actuación de
letrados particulares, el elevado daño causado que podría ser materia de indemnización civil y,
fundamentalmente, el luctuoso resultado habido, nos llevan a concluir que resulta adecuada a los
parámetros contemplados en el citado artículo.
(...) De la prisión preventiva. El juez Juan Esteban Cicciaro dijo: Tal como lo sostuviera anteriormente
(1), entiendo que en el ordenamiento legal existen otras vías para neutralizar la prisión preventiva,
motivo por el cual la apelación interpuesta en ese sentido debe declararse erróneamente concedida (art.
444 in fine del Código Procesal Penal).
Ello, con mayor razón en el caso, cuando se ha solicitado la excarcelación y habiéndosela denegado, no
se ha recurrido tal decisión "(ver fs. ...)".
"(...) El juez Julio Marcelo Lucini dijo: La aplicación de la medida cautelar es acertada ya que el monto
mínimo de pena previsto para el concurso de delitos que se le imputa impide que pueda acceder a una
eventual condena en suspenso (artículo 312, inciso primero, del Código Procesal Penal), sumado a que
en estas actuaciones se mantuvo prófugo durante cinco meses aproximadamente, extremo que motivó
su declaración de contumacia "(fs. ...)" y que constituye el riesgo de elusión al que refieren los artículos
280 y 319 del código de rito (2).
Ello, sin soslayar la cercanía entre la vivienda del encausado y aquellas en las que residen las víctimas,
que impiden descartar un posible entorpecimiento de la investigación.
"(...) El juez Ricardo Matías Pinto dijo: Intervengo en la presente en virtud de la disidencia suscitada
entre mis colegas y, tras escuchar el audio de la audiencia sin tener preguntas que formular, considero
que la impugnación deducida contra la prisión preventiva resulta admisible y que su aplicación en este

207
caso es acertada, por lo que adhiero al voto del juez Lucini, a cuyas consideraciones me remito para
evitar innecesarias repeticiones. Así voto.
En consecuencia, y sin perjuicio de la calificación que en definitiva pudiere corresponder (art. 401 del
Código Procesal Penal), el Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el auto documentado a "(fs. ...)", en
cuanto fuera materia de recurso. (...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala de Feria A, Cicciaro (en disidencia parcial), Lucini, Pintos. (Prosec.Cám.:
Daray)
c. 43.353/14, RIOS, Lucas Abraham.
Rta.: 13/01/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correc., Sala VII, causa nro. 38.804, "Minaya Santana D.", rta. 13/5/10. (2) C.
F. C. P., Sala II, c. 10.422, "Bustamante", del 19 3 2009 y de la Sala III, causa 9.610, "Vila", del 04 11
2009.

ROBO

En poblado y en banda. Procesamiento. Sustracción de dinero a la víctima cuando salía del banco.
Elementos de prueba suficientes que permiten tener por sí solos por probada su autoría. Imputada, a su
vez, condenada por similares hechos en los que se utilizó un similar modus operandi. Confirmación.

Fallo: "(…) Habremos de coincidir con la valoración del material probatorio realizado por el a quo,
siendo necesario destacar, como primera cuestión, que el auto de procesamiento satisface las
exigencias de los artículos 123 y 308 del Código Procesal Penal de la Nación ya que, además de
contener la descripción fáctica, la identificación de la imputada y la calificación legal asignada al
episodio que se le atribuye, exhibe la indicación de los motivos que lo sustentan, al punto que el
recurrente ha expresado agravios concretos en orden a los argumentos de esa decisión.
No puede soslayarse que la propia imputada reconoció ser quien aparece registrada en las imágenes
obtenidas en el interior de la sucursal bancaria de la cual los damnificados extrajeron el dinero, a lo que
se suma el análisis de las líneas telefónicas activadas en el lugar del suceso y que fueran utilizadas por
los ejecutantes del apoderamiento, en tanto refleja no solamente la coincidencia con el horario en que
C. egresa de la entidad bancaria para "marcar" a las víctimas que habrían de salir detrás suyo, sino
también que tales abonados se vinculan entre sí, y con otros correspondientes a domicilios relacionados
a la nombrada (cfr. fs. …).
En ese orden, también se destacan los llamados entre la línea cuya utilización se endilga a C.,
identificada con el nombre de "B." con aquella cuyo uso se atribuye a uno de los imputados, actuando
como "R.", con la particularidad de que esta última fue activada en la zona de Moreno, Provincia de
Buenos Aires, donde reside la encausada, evidenciando de este modo el vínculo entre ambos (cfr. fs.
…). Se han registrado así, contactos entre los dos teléfonos, únicamente a la hora del suceso, lo que
apoya la hipótesis de que se trasladaron juntos hasta el lugar en que habrían de perpetrarlo (cfr. fs. …).
En oportunidad de declarar, C. no aportó dato alguno que respalde su descargo, limitándose a
responder que no recordaba, los datos de la tarjeta de crédito que dijo haber ido a pagar, ni el modo de
ubicar a la persona que, según ella, le acercaría el dinero para realizar esa operación, ni el número de la
línea telefónica que utilizaba en esas circunstancias, ni a quien llamó cuando egresó de la sucursal
bancaria. Es evidente que sus expresiones no pudieron ser respaldadas por datos concretos lo cual
evidencia su mendacidad.
Por último, cabe tener presente que C. ya se ha visto involucrada en otros sucesos de similar "modus
operandi" por los cuales se requiriera incluso la elevación a juicio de las actuaciones en que se la
investiga, dato que, sin que deba tomarse como reforzando una imputación de un "delito de autor",
complementa, con los demás elementos sustraídos, la sospecha de su intervención en los actuales
sucesos.
Por ello, el tribunal RESUELVE: I. Confirmar el auto de procesamiento traído a estudio en cuanto fue
materia de recurso.
(…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala IV, Seijas, González, González Palazzo. (Sec.: Barros).
c. 72.290/13, CABANA, Lorena.
Rta.: 07/05/2015

ROBO.

Simple en grado de tentativa. Procesamiento. Defensa que alega que el imputado no comprendió la
criminalidad de sus actos debido a que se encontraba alcoholizado. Imputado que se negó a la
extracción de sangre y a la entrega de orina. Acta de detención que da cuenta del estado normal del
inculpado. Confirmación. Disidencia: Fotografías agregadas en las que se observa al imputado en una
posición que permite dudar de su estado. Informe sociambiental que da cuenta de su adicción al
alcohol. Ausencia de certeza apodíctica. Revocatoria. Sobreseimiento.

208
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

Fallo: "(…) El juez Pinto dijo: La defensa no cuestionó la materialidad del suceso sino,
exclusivamente, el juicio positivo expuesto en el auto de mérito sobre la capacidad de culpabilidad del
imputado. Adujo que, frente a la afirmación de éste de haber bebido abundante vodka y de que, en
consecuencia, no recordaba lo sucedido en la ocasión (fs…); ante su manifestación sobre que consumía
habitualmente alcohol (fs…) y a la luz de las imágenes de fs.(…), coetáneas al episodio, la eventual
duda que pudiera haber sobre su real estado al momento del hecho debía resolverse en su favor y por
tanto sobreseérselo en los términos del inciso 5° del artículo 336, CPPN. Ello, sin perjuicio del informe
médico legista de fs.(…), al que le restó valor, y a la negativa de ofrecer muestras de sangre y orina,
que el encausado puso en crisis, porque dijo no haber sido preguntado al respecto.
2. Contrariamente a lo expuesto, entiendo que la prueba que el magistrado valoró para concluir que M.
obró con capacidad de comprender la criminalidad de sus actos y de dirigir sus acciones -el informe
médico legista de fs. (…)- resulta, en principio, satisfactoria en ese sentido, sin que existan otros
elementos objetivos que la desvirtúen (ver fs…).
A ello se agrega la reconstrucción del desarrollo del hecho, realizada a través de los dichos del cabo
1ero. V.A.S. y de la víctima M.M. (fs. …). De ella surgen reiteradas manifestaciones del encausado -
"dame la guita, dame todo"- y actos concretos -vgr. la simulación de tener un arma entre la ropa, el
abalanzarse sobre el damnificado para vencer su negativa y la inmediata huida ante la presencia
policial- Por el momento, esos datos darían cuenta de su claridad sobre el designio delictivo que lo
animaba y, ante la frustración de su pretensión, de su decidido propósito de lograr su impunidad.
En estas condiciones, voto por confirmar lo resuelto. Considero que las actuaciones se hallan en
condiciones de cursar los pasos procesales subsiguientes para que, en caso de así solicitarlo el
Ministerio Público Fiscal, las actuaciones pasen a juicio. Allí podrá, eventualmente, replantearse la
cuestión y revaluársela, incluso a la luz de la prueba pendiente (las imágenes que sobre el suceso
pudiera haber registrado el domo ubicado en la intersección de las Avenidas Forest y Federico Lacroze,
ver fs…), junto con los testimonios de los testigos de actuación y del médico legista que lo examinó.
En tal sentido emito mi voto.
La jueza López González dijo: La defensa de M. invocó una incapacidad de culpabilidad y lo sostuvo
en base a lo declarado por aquél, en cuanto al consumo de alcohol el día del hecho.
(…) la duda que se me genera permite un pronunciamiento desincriminante. Veamos, si bien es cierto
que al momento de su conducta el testigo pudo reproducir la manera en que se dirigió para someterlo y
que posteriormente a su detención brindó sus datos personales, no menos cierto es que la fotografía que
lo ilustra permite dudar de la comprensión de los hechos que se le atribuyen.
Nótese que en la de fs. (…) parecería resultarle difícil estar erguido y, en la posterior, también se
advierte una inclinación que lleva a la misma conclusión. Todo, a su vez, avalado con el informe socio-
ambiental del cual surge su adicción al consumo de alcohol.
Si a ello adunamos que no fue sometido a extracción de sangre y que el informe legista es un mero
formulario más parecido a los que se expiden en trámites burocráticos que a una constatación de un
profesional de la salud, la conclusión es en el sentido que propone la defensa, por lo que voto por la
revocatoria del auto en crisis y por sobreseer al imputado, con la mención de que la formación de este
sumario no afecta el buen nombre y honor de que gozare (artículos 3 y 336, inciso 5°, del CPPN).
No habiéndose arribado a un acuerdo, interviene en el caso el juez Divito, designado como subrogante
de la vocalía nro. 10, por decisión de la Presidencia de esta Cámara del 17 de diciembre ppdo.
El juez Divito dijo: He escuchado el audio y no tengo preguntas que formular. En cuanto a la cuestión
que me toca dirimir, habiendo participado de la deliberación y en función de las constancias
ponderadas por el juez Pinto, a las que aduno que en el acta de detención se dejó constancia de que el
imputado se encontraba en aparente estado normal (fs…), adhiero a la solución que aquél propone. Así
voto.
(…) el tribunal RESUELVE: Confirmar el punto I del auto de fs. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, López González, Pinto, Divito. (Sec.: Herrera).


c. 69.150/14, MEDINA RAMOS, Miguel A.
Rta.: 23/02/2015

ROBO.

Agravado por el empleo de un arma de fuego. Procesamiento. Imputado indagado por el robo y en
forma alternativa por encubrimiento. Elementos insuficientes para considerarlo autor del robo. Prueba
suficiente para procesarlo por encubrimiento simple. Imposibilidad de imputarle la figura agravada
"ánimo de lucro" debido a que se requiere la comprobación de la finalidad lucrativa adicional al mero
propósito de uso. Confirmación pero por encubrimiento (Art. 277, inciso 2,C.P. ). Disidencia parcial:
Elementos suficientes para procesarlo por encubrimiento agravado toda vez que el uso efectivo del
bien constituye el plus configurativo del ánimo de lucro. Confirmación pero por encubrimiento
agravado por ánimo de lucro.

Fallo: "(…) La jueza López González dijo: 1. (…) la defensa trajo a consideración dos planteos. En
primer lugar, cuestionó la prueba que el juez invocó para atribuir responsabilidad a O.
en relación al desapoderamiento (…), mediante el uso de un arma de fuego, dos personas le sustrajeron
a J.D.S.S. su motocicleta Honda, dominio XX. En concreto, sostuvo que las razones expuestas

209
resultaban insuficientes al efecto y, frente al hecho objetivo de que dicha motocicleta fue secuestrada
cinco días después en poder de su asistido, propició que su conducta se subsumiera en la figura de
encubrimiento, por la que fue indagado alternativamente. Subsidiariamente, para el caso de que este
tribunal confirmara la decisión de vincularlo al suceso que afectó a S., propició la modificación -por la
figura de robo simple- de la calificación seleccionada por el magistrado, en pos de lo cual argumentó
ampliamente.
2. Entiendo que asiste razón a la defensa en cuanto a que la prueba que se ha reunido hasta el presente
no sustenta la responsabilidad que se le asignó a O. en orden a la sustracción.
(…) porque se carece de algún dato objetivo directo que lo permita. Vgr. el eventual reconocimiento
por parte del damnificado -quien ya ha dejado en claro que no está en condiciones de concretarlo
porque no recuerda las fisonomías, ver fs. (…)- y/o el registro fílmico de alguna cámara pública -
elemento con lo que no se cuenta en este caso-. Considero que tampoco puede computarse en forma
definitoria en ese sentido, menos aún en solitario, la manifestación del damnificado en cuanto a que el
arma que se le exhibió en comisaría, secuestrada el 5 de enero de 2011 a O., presentaba similares
características que aquélla con que se lo intimidó el 31 de diciembre anterior (fs. …). De la similitud
no cabe inferir, sin ningún elemento adicional, que una y otra coincidieran.
Entiendo que lo expuesto pone en crisis el sustento de la responsabilidad que se le atribuyó por el robo.
No obstante ello, a mi criterio, existen elementos suficientes para dar por acreditado, con la
provisoriedad del caso, que el imputado O. adquirió o recibió la motocicleta en cuestión en condiciones
en que podía sospechar que provenía de un delito.
Así, valoro en primer término las circunstancias de su detención y del secuestro de ese bien en su poder
cinco días después de aquel hecho, no cuestionadas por la defensa y debidamente acreditadas por los
dichos de los preventores intervinientes y de los testigos de actuación. Por otra parte, tengo
particularmente en cuenta las condiciones en que fue incautado ese vehículo -sin patente y
portapatente, sin espejos, sin luces de giro y con un cable cortado a la altura del manubrio-, por cuanto
dicho estado resulta razonablemente relacionable con una procedencia espuria.
(…) voto por confirmar el procesamiento del encausado y por modificar la calificación legal asignada a
su conducta por la de encubrimiento (artículo 277, inciso 2, del Código Penal).
Desecho la agravante por "ánimo de lucro" (artículo 277, inciso 3-b), por la que fue alternativamente
intimado (ver fs...), porque entiendo que para su configuración se requiere la comprobación de una
finalidad lucrativa, adicional al mero propósito de uso del bien procedente de un delito, cuestión no
acreditada en el caso. Así voto.
Disidencia parcial del juez Ricardo Pinto dijo: Comparto en un todo la conclusión y los argumentos de
fundamento que expresó la vocal que me precedió en el voto, en orden a que no existen elementos
válidos para vincular a S.M.O. con la sustracción que afectó a J.D.S.S. Asimismo, las circunstancias de
la detención y secuestro de la motocicleta del damnificado en poder de O. y las condiciones que
presentaba el vehículo en ese momento, detalladas en su voto, justifican en forma suficiente que se le
atribuya responsabilidad por el delito de encubrimiento.
Sin embargo, disiento en cuanto a la subsunción del caso bajo la figura simple que prevé el artículo
277, inciso 2, del Código Penal.
A mi criterio, el encuadre debe hacerse bajo la agravante del inciso 3-b, porque el uso efectivo que O.
le estaba dando al bien adquirido o recibido en tales condiciones constituye el plus configurativo del
ánimo de lucro, entendido éste como el beneficio, ventaja o utilidad que el sujeto activo trata de
obtener de las cosas sustraídas (1).
Por lo dicho, voto por la confirmación del procesamiento del encausado, por la modificación de la
subsunción legal dispuesta y por la aplicación de la figura de encubrimiento, agravada por ánimo de
lucro (artículo 277, inciso 3-b, del Código Penal).
En tal sentido emito mi voto.
No habiéndose arribado a un acuerdo, interviene en el caso el juez Mauro Divito, designado como
subrogante de la vocalía N°10 de esta sala, por resolución de la Presidencia de esta Cámara del 17 de
diciembre ppdo.
El juez Divito dijo: Mi intervención se encuentra limitada a dirimir el disenso entre los jueces que me
precedieron sobre si el uso de la cosa adquirida o recibida por el autor en condiciones tales que podía
sospechar su procedencia ilícita encuadra o no en la agravante del inciso 3-b del artículo 277 del
Código Penal, prevista para la actuación con ánimo de lucro.
Sobre el punto, concuerdo con la vocal López González en cuanto a que el mero uso de una cosa mal
habida, para el fin a la que está destinada, no puede ser asimilado con la voluntad de lucro que exige la
agravante.
El mentado ánimo de lucro constituye un elemento subjetivo del tipo calificado, similar al previsto en
otras disposiciones legales -CP, arts. 22 bis, 126 y 268 (1)-, que supone una ultraintención orientada al
logro de un beneficio económico y que -por ende- no debe reputarse satisfecho -simplemente- con la
realización de la acción típica de la figura básica. En otras palabras, adquirir o recibir un objeto robado
-con conocimiento de su procedencia ilícita o, como en el caso, en condiciones en que podía
sospechárselaconstituye un comportamiento antijurídico que no implica ni puede implicar -sin más-
que el autor haya obrado con ánimo de lucro (cfr. Sala VII, c. 1116/12, "Masías, Maximiliano Fabián",
rta. 27/8/12, entre otras). A falta de probanzas que acrediten este último, en este caso el accionar del
autor debe ser encuadrado en la figura básica del art. 277, inciso 2, tal como lo propuso la jueza López
González. Así voto.

210
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

(…) el tribunal RESUELVE: Confirmar el auto de fs. (…), en cuanto decretó el procesamiento de
S.M.O. y modificarlo en cuanto a la subsunción legal seleccionada, la que se fija en la figura de
encubrimiento (artículo 277, inciso 2, del Código Penal)".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, López González, Pinto (en disidencia parcial), Divito. (Sec.: Herrera)
c. 16.354/11, OLMEDO, Sergio M.
Rta.: 25/02/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correc., Sala VI, c. .1594, "Ragonese, Marcelo R.", rta. 25/10/12. Ver en igual
sentido: C.N.Crim. y Correc., Sala V., "Sanchez, David J.", rta.: 26-02-2015.

ROBO.

Agravado por el uso de arma. Procesamiento. Agravio de la defensa: utilización del arma no
demostrada. Dichos del damnificando que dan cuenta del empleo de un cuchillo. Informe médico que
demuestra que la víctima presentó un corte en el cuello. Confirmación.

Fallo: "(…) II. La cuestión a tratar en el presente decisorio radica en establecer si se encuentra el uso
del cuchillo por parte de los imputados en el hecho atribuido.La defensa plantea la negativa a partir de
diferentes premisas.En cuanto a que el único elemento que aisladamente acreditaría la existencia del
cuchillo serían los dichos de W.L.F., entendemos que la versión brindada por éste, además de encontrar
sustento en las restantes pruebas obrantes en autos, aparece avalada -en cuanto al empleo del arma- por
el informe que acredita la lesión que padeció.La defensa alega que la excoriación a la que se hizo
referencia en la constancia del Same (v. fs. …) no se condice con un corte efectuado por un cuchillo y
dicha circunstancia tampoco permitiría acreditar la existencia del arma.Es dable destacar que la
excoriación es "toda brecha en la piel que interesa la epidermis o capas superiores de la dermis, como
la generada por el rascado intenso o por la acción de una fuerza tangencial de cuerpos más duros que la
piel, obrando por deslizamiento" (1). (…) lo que a todas luces se ajusta al accionar descripto por el
damnificado; esto es, que uno de los imputados colocó el cuchillo en su cuello, produciéndole un corte
en esa zona.Así, el testimonio del damnificado y la constancia médica permiten tener por configurado
el empleo de un arma.(…) entendemos que la falta de secuestro del cuchillo no resulta óbice para tener
por configurada la agravante, sobre todo si tenemos en cuenta que las condiciones objetivas para
agredir se han visto acreditadas a partir de la constancia médica del Same (fs…).(…) habremos de
poner el acento en que únicamente se secuestró el GPS sustraído, no así la billetera ni el celular del
chofer del taxi, razón por la cual podemos concluir que pudieron disponer de esos bienes, de modo que
pudieron desprenderse del arma que habrían utilizado para perpetrar la sustracción.(…) el tribunal
RESUELVE: CONFIRMAR el auto de fs. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, Pinto, Divito. (Sec.: De la Bandera).


c. 9.253/15, SALDIVIO, Luciano y otro.
Rta.: 17/03/2015

Se citó: (1) BASILE, Alejandro Antonio, Tratado de Medicina Legal y ciencias afines, 1ª Edición,
Mendoza: Jurídicas Cuyo, 2011, T. I, pág. 233.

ROBO.

Agravado. Procesamiento. Bicicleta asegurada con una liga metálica en la vía pública. Víctima no
individualizada: Hecho demostrado a través de varios elementos de prueba. Confirmación. Disidencia
parcial: figura no agravada. Objeto sustraído que no es considerado vehículo. Robo simple.

Fallo: "(…) La defensa oficial dedujo recurso de apelación contra el auto extendido a fs. (…), punto
dispositivo I, en cuanto se dictó el procesamiento de F. E. P.
El juez Juan Esteban Cicciaro dijo: El plexo probatorio reunido se estima suficiente para agravar la
situación procesal del nombrado, de modo que entiendo que debe homologarse la resolución apelada.
Al respecto, del testimonio del policía C. M. (…) se extrae que debido al requerimiento de transeúntes
que alertaron sobre la comisión de un delito, emprendió la persecución, por alrededor de doscientos
metros, de un sujeto que conducía velozmente una bicicleta, a quien logró darle alcance en la
intersección de las calles L. y R., de esta ciudad (…).
Tras ello, el efectivo policial acudió al lugar donde habría estado asegurado el rodado en cuestión y
secuestró una linga metálica cubierta por un plástico de color negro, que se encontraba rota, y una barra
metálica circular (...).
La circunstancia de que la víctima del hecho pesquisado no haya sido individualizada, no obsta per se
para comprobar la existencia del quehacer atribuido, pues si bien su relato sería un elemento de
importancia para la investigación, no es condición dirimente y puede suplirse por medio de otras
probanzas (1).
De tal suerte, el anoticiamiento del hecho, la corroboración del forzamiento ejecutado para romper la
sujeción de la bicicleta y la ajenidad que respecto a ella se verifica en el causante, resultan elementos

211
de juicio que avalan el temperamento de reproche discernido por el señor juez de grado (artículo 306
del Código Procesal Penal).
En otro orden de ideas, no debe tener favorable acogida la pretendida modificación de la calificación
legal asignada en el interlocutorio recurrido.
Ello, en tanto la bicicleta es un objeto cuya sustracción encuadra en el artículo 163, inciso 6 , del
Código Penal, pues se trata de un velocípedo que el diccionario de la Real Academia Española define
como vehículo (2).
Por último, entiendo que resulta pertinente solicitar la remisión de las imágenes captadas por el "domo"
del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires y las cámaras de seguridad de los locales mencionados en
el informe realizado por el policía C. B. (…).
Así voto.
El juez Mariano A. Scotto dijo: Comparto con el juez Cicciaro los argumentos que expuso para
concluir que la responsabilidad del imputado F. E. P. se encuentra acreditada con los elementos
probatorios incorporados a la causa, pues son el resultado de la deliberación dispuesta en el artículo
455 del Código Procesal Penal.
Sin embargo, entiendo que de acuerdo al criterio que he sostenido con anterioridad -causa número
167/13 "Ramírez Salazar, Marisol", del 15 de marzo de 2013-, no puede considerarse a la bicicleta
como vehículo, en el sentido previsto en el artículo 163, inciso 6°, del Código Penal, por lo que, en el
caso, se impone descartar la agravante escogida y disponer que el procesamiento del nombrado lo sea
en orden al delito de robo simple (artículo 164 del digesto sustantivo).
Así voto.
El juez Mauro A. Divito dijo: Habiendo escuchado la grabación de la audiencia, no teniendo preguntas
que formular y limitada mi intervención al planteo formulado por la asistencia técnica en torno de la
significación jurídica del hecho por el que se dispuso el procesamiento del causante P., adhiero al voto
del juez Cicciaro.
Así voto.
En consecuencia, esta Sala del Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el punto I del auto documentado
a fs. (…), en cuanto fuera materia de recurso".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Divito, Cicciaro, Scotto (en Disidencia parcial). (Sec.: Sánchez).
c. 77.209/14, PENSA, Federico Ezequiel.
Rta.: 19/03/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correc., Sala VII, c. 40.434, "Stumps Reyes, Luciano", rta: 17/03/2011 y c.
2.039/12, "Pérez Linares, M. y otros", rta: 06/02/2013. (2) C.N.Crim. y Correc., Sala VII, c. 36.456,
"Esperón, Néstor", rta: 13/04/2009 y c. 38.352, "N.N.
Denunc. Noya, Norma Beatriz", rta: 15/03/2010.

ROBO.

En grado de tentativa en concurso real con homicidio en tentativa. Agravio de la defensa: cambio de
calificación por ausencia de dolo homicida. Rechazo. Confirmación.

Fallo: "(…) contra la resolución obrante a (fs. …) en cuanto en el punto dispositivo I) ordenó el
procesamiento de C. M. B. en orden al delito de robo en grado de tentativa en concurso real con
homicidio en tentativa. (…).
En este sentido, no se encuentra controvertido por la defensa que el imputado ascendió
imprevistamente al vehículo Renault Megane Scenic, que se hallaba estacionado en la (…), en el
instante en que G. E. C. descendió del lado del acompañante, dejando a su hijo B. B. junto a sus
hermanas L. y C. T. D.; así como las llaves colocadas. Lo que cuestiona la defensa es, por un lado, que
efectivamente haya sido B. quien arrojó al niño del automóvil en movimiento y, por otro,
subsidiariamente, que ello importe una intención de darle muerte, tal como fuera subsumido
legalmente. A los fines de dar respuesta al primer agravio, no obstante considerar inverosímil el
testimonio de C. T. D., la joven fue precisa al declarar que, en el instante en que B. abordó el vehículo
le ordenó que se bajara, o le pegaría un tiro, a lo que no accedió para ayudar a su hermano. Así fue que
emprendió la marcha a toda velocidad mientras que ella intentaba desprender el cinturón de seguridad
de la silla de su hermano y, ante los nervios del imputado, abrió la venta y la puerta trasera derecha y
"lo tiró a la calle". Respondió luego que no iba manejando en ese momento en el sentido de imprimir
velocidad, sino que continuó con el impulso. Esta situación no sólo fue advertida por el padre del niño
B., tal como lo refirió a (fs. …) -sin que de esta ratificación surja contradicción alguna con aquella
dada en sede prevencional a (fs. …), sino también por dos testigos, F. R. y J. P. S. (…). En
consecuencia, y más allá de que la velocidad pudo haber sido ésta o menor, aparece a esta altura
irrelevante pues se encuentra acreditado para esta altura del proceso y con el grado de probabilidad que
requiere el art. 306, CPPN, que fue el imputado quien arrojó al niño a la calle, lo que le provocó
lesiones de carácter leve. Sentado ello, en cuanto al restante agravio, la defensa cuestiona el dolo
homicida atribuido, incluso a título eventual. En esa dirección, hemos de señalar que, al menos hasta
aquí y con la prueba habida, resulta plausible la calificación legal escogida; ello sin perjuicio de que en
esta etapa resulta provisoria y reformable incluso de oficio. En mérito a lo expuesto, el tribunal

212
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

RESUELVE: CONFIRMAR el punto dispositivo I) de la resolución de (fs. …) en cuanto fue materia


de recurso (art. 455, CPPN). (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala I, López González, Pociello Argerich. (Sec.: Peluffo).


c. 9557/15, B., C. M.
Rta.: 19/03/2015

ROBO.

En grado de tentativa. Procesamiento. Agravio: Aplicación del principio de insignificancia. Intento de


sustracción de tres envases de shampoo de un supermercado. Hecho en el que hubo violencia que
ocasionó lesiones al vigilador del local. Acción que no resulta insignificante desde la perspectiva
jurídico penal. Confirmación.

Fallo: (…) IV. El juez Ricardo Matías Pinto dijo: (…) el delito de hurto no distingue graduación alguna
en lo que respecta a la lesión del bien jurídico tutelado. La protección al derecho de propiedad se
encuentra afectada más allá del valor económico de la cosa (1).
(…) la conducta investigada se trataría de un robo en grado de tentativa a la luz de la violencia ejercida
por el imputado para concretar el despojo. Nótese que cuando el personal de seguridad le ordenó que
mostrara lo que ocultaba entre sus ropas, primero mostró dos de los tres envases de shampoo que
escondía y, tras sacar el tercero, le propinó a H.P. un golpe en su nariz, que lo lesionó (ver su
declaración de fs…) Por lo tanto, no puede aplicarse a este caso concreto el principio citado por la
defensa. Circunscriptos a los agravios del impugnante, debe homologarse la decisión en crisis. Así
voto.
V. El juez Mauro A. Divito dijo: Si bien considero que el llamado principio de insignificancia resulta
aplicable en aquellos casos en los que la conducta atribuida no importa una afectación penalmente
relevante respecto de algún bien jurídico -criterio que he asumido en las causas números 36.185,
"Gerban, Alfredo Javier", del 31 de marzo de 2009 y 37.004, "Arana, Juan C.", del 10 de agosto de
2009, entre otras-, en la presente causa corresponde ponderar que, además del intento de
apoderamiento de tres frascos de shampoo en un supermercado, el hecho atribuido habría implicado el
despliegue de violencia física sobre la persona de H.O.P., vigilador del local, quien relató que, cuando
interceptó al imputado, éste lo golpeó (fs…), de modo que el nombrado padeció lesiones de carácter
leve (fs…).
(…) entiendo que -tal como lo sostuve en ocasiones anteriores (cfr., entre otras, Sala VII, causa nro.
38409/2013, "Agüero, Héctor", del 28 de noviembre de 2013)- los extremos apuntados impiden
afirmar que se trató de una acción insignificante desde la perspectiva jurídico penal, de modo que en
definitiva, me inclino por convalidar el auto puesto en crisis. Así voto.
(…) el tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el punto I del auto de fs.(…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, Pinto, Divito. (Sec.: Poleri).


c. 28.613/13, AMARILLA, Martín E.
Rta.: 22/04/2015

Se citó: (1) Ver en tal sentido C.S.J.N. "Adami, Leonardo Esteban" Fallos: 308:1796, y Sala VI CCC
causa N°948/12 "Rodríguez, Córdoba", rta.8/8/12 en la cual se citó del mismo Tribunal, la n°42662
"Fuente, Carlos Enrique", rta.22/11/11 y su cita.

ROBO.

Procesamiento. Imputado que fue detenido al ser reconocido por personal policial a través de una
filmación y de fotografías plasmadas en Facebook. Agravio: Elementos de prueba insuficientes.
Procedencia del agravio. Necesidad de tomar declaración a las victimas del hecho, de llevar a cabo
ruedas de reconocimiento. Revocación. Falta de mérito.

Fallo. "(...). Tras confrontar los agravios expuestos por la defensa con las actas escritas que tenemos a
la vista, a la luz de la sana crítica racional, consideramos que la posición de la defensa debe ser
atendida. Ello así por cuanto consideramos que los elementos arrimados hasta el momento no resultan
suficientes para agravar la situación procesal de G., en tanto la vinculación del imputado al hecho se
determinó a partir de lo actuado a (fs. ...) y los reconocimientos informales basados en la observación
de la filmación existente en la causa, y las fotografías del imputado en "Facebook" a la luz de la
apreciación del preventor interviniente, y el contacto directo en el marco de la declaración indagatoria
prestado por G. en esta causa. Sin embargo, se encuentra ausente, a pesar de su utilidad y pertinencia,
toda participación de quienes fueron víctimas del hecho investigado en autos en la vinculación de
análisis. Adviértase que el dueño del comercio - H. W.- sostuvo que podría -de volver a verlo-
reconocer al sujeto que perpetrara la sustracción en su negocio (cfr. fs. ...), y sin embargo no se intentó
practicar rueda de reconocimiento de persona alguna integrada por el nombrado G. para que sea
llevado ante su presencia en los términos previstos por el art.270 y concordantes del CPPN. Como
tampoco se individualizó a la totalidad de los empleados del local comercial objeto de la sustracción a

213
fin de que presten declaración acerca del hecho ocurrido (...). Por todo ello, entendemos que resulta
ineludible previo a resolver la situación procesal del imputado (quien ya se encontraba detenido a
disposición de otro tribunal), individualizar y convocar en testimonial a las personas que pudieran
aportar elementos de interés en esta investigación y que se desprenden del análisis hasta aquí
desarrollado, como así también llevar a cabo las ruedas de reconocimiento de personas en función de lo
actuado, a fin de agotar el plexo probatorio posible a la luz de la normativa vigente. En virtud de las
medidas que sugeridas y aquéllas que se pudieran presentar con el correr de la instrucción, se
RESUELVE: I-REVOCAR la decisión obrante a (fs. ...) en cuanto fuera materia de recurso, art. 455
del CPPN; II-DECRETAR la FALTA DE MÉRITO de F. G. por aplicación del art. 309 del CPPN; III-
DISPONER la inmediata libertad EN LA PRESENTE CAUSA, del imputado G.; IV-Dar
cumplimiento a lo que surge de los considerandos. (...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala I, Bunge Campos, Rimondi. (Sec.: Biuso).


c. 51807/14, G., F.
Rta.: 23/04/2015

ROBO.

Con arma. Procesamiento. 1) Alegada legítima defensa por parte de la imputada. Imputada que no
actuó en legítima defensa sino que atacó al damnificado para impedir que la detuviera utilizando una
botella. 2) Arma impropia. Utilización de botella para intentar golpear en el cuerpo al damnificado.
Mayor poder ofensivo logrado y peligro corrido por la víctima inmediatamente después de cometido el
desapoderamiento. 3) Cuestionamiento de la calificación legal. Imposibilidad de escindir el robo y la
supuesta resistencia. Violencia ejercida que forma parte de la modalidad típica del art. 164 del C.P. e
integra el desapoderamiento agravado. Confirmación.

Fallo: "(…) La defensa apeló el auto documentado a fs. (…), en cuanto se dispuso el procesamiento de
V. S. B. en orden al delito de robo agravado por su comisión con armas.
A la nombrada se le atribuye el haberse apoderado con fuerza en las cosas y violencia en las personas,
mediante el empleo de una botella de vidrio, con la colaboración de otro sujeto no individualizado, de
bienes de propiedad de J. E. B. que se hallaban en el interior del automotor de éste, marca
"Volkswagen", modelo "Gol", dominio X. El hecho tuvo lugar el 9 de abril de 2015, alrededor de las
2:40, en A. X de esta ciudad.
La asistencia técnica no cuestionó la existencia del hecho, y centró el planteo en que "no hay prueba
determinante que permita dar por cierta… la participación de mi representada en el hecho investigado
[y] tampoco … para afirmar que la utilización de aquella botella de vidrio tuvo en miras aumentar el
poder ofensivo para lograr el apoderamiento de los elementos que se encontraban en el interior del
rodado en cuestión y/o para lograr su impunidad" (...).
En la medida en que la exposición de los hechos brindada por el damnificado B. (…) se exhibe
verosímil en los términos del art.
241 del Código Procesal Penal, pues se compadece con las demás constancias reunidas y no se
advierten elementos que permitan dudar de tal relato, cabe concluir en que el auto puesto en crisis debe
ser convalidado.
Es que más allá de que aquél proporcionó detalles de cómo observó a B. junto a otro sujeto -no
individualizado- en horas de la madrugada, mientras éste se encontraba en su automóvil con la mitad
del cuerpo introducido por la ventanilla del lado del acompañante, también refirió que tras haberles
gritado para que cesaran su accionar, ambos se dieron a la fuga y que al alcanzar a los pocos metros
únicamente a la imputada, ésta trató de golpearlo con una botella de alcohol que sujetaba en su mano,
al mismo tiempo que llamaba a su consorte mientras éste huía, en tanto decía "E., E.".
Agregó B. que en el forcejeo producido durante el trayecto en que él llevó a la nombrada por la fuerza
hacia el interior del edificio, con el fin de retenerla hasta la llegada de la policía y mientras estaban en
el hall, la ahora encausada intentó agredirlo nuevamente con la botella, elemento que ésta rompió,
ocasionándose accidentalmente cortes en su mano, los que posteriormente fueron constatados mediante
el informe médico agregado a fs. (…). Por último, explicó el damnificado que el motivo por el que
condujo a la aprehendida por el ascensor hasta el octavo piso, donde se ubica su departamento,
obedeció a que, como no tenía su teléfono celular consigo, le requirió a su pareja, Paula Martínez, que
llamara al 911.
A su turno, esta última corroboró esa circunstancia al prestar declaración testimonial (…).
Completan el cuadro probatorio los dichos juramentados de los policías A. R. y M. B. (…), quienes al
arribar al lugar, alertados por el Departamento Federal de Emergencias por "robo con autores en la
calle A. X", observaron en el hall del edificio los restos de la botella de vidrio desparramados por el
suelo y al llegar al pasillo del octavo piso, conforme a las indicaciones de P. M., se entrevistaron con
B., quien les relató lo ocurrido en los términos anteriormente expuestos, por lo que formalizaron la
detención de V. S. B., quien permanecía en el ascensor y, entre otras cosas, secuestraron los vidrios
aludidos (…), cuyas vistas fotográficas lucen a fs. (…).
Tales elementos, de adverso a lo sostenido por la defensa, acreditan suficientemente tanto la
intervención de la imputada en el desapoderamiento atribuido, como el empleo de la botella, para
procurar su impunidad en el marco de la huída que intentó.

214
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

De otro lado, queda desvirtuada la hipótesis introducida por la recurrente en la apelación respecto de
una supuesta legítima defensa por parte de B., pues sin perjuicio de que esa hipótesis no guarda
correspondencia con las manifestaciones de la nombrada (…), se estima que ésta empleó el elemento
vulnerante cuando B. forcejeaba con ella para impedir que se fugara. Tal extremo indica que la
encausada no actuó en legítima defensa, sino que atacó injustificadamente al damnificado para impedir
que la detuviera.
De otro lado, como la asistencia técnica criticó la calificación legal adoptada en el auto recurrido, habrá
de abordarse el tratamiento de la cuestión, por cuanto no puede descartarse su eventual incidencia en
relación con la libertad.
Al respecto, la Sala coincide con la magistrada de la instancia anterior en que la botella, del modo
concreto en que se usó -para intentar golpear a B. en el cuerpo-, demuestra el mayor poder ofensivo
logrado por los agresores y el peligro corrido por la víctima inmediatamente después de cometido el
desapoderamiento, lo que justifica su consideración como un "arma impropia", incluida en la fórmula
típica del robo con armas previsto en el artículo 166, inciso 2°, primer párrafo, del Código Penal (1).
Sentado ello, el planteo subsidiario de la recurrente, en el sentido de que a su criterio -sin cuestionar
que el hecho fuera consumado- la encausada sólo debería responder por el delito de robo simple en
concurso real con el delito de resistencia a la autoridad (artículos 55, 164 y 239, en función del artículo
240, del Código Penal), no puede ser atendido.
En primer lugar, por cuanto la remisión del artículo 166, inciso 2°, primer párrafo, del código
sustantivo, al tipo básico del robo (artículo 164 del mismo cuerpo legal), conduce a sostener que aquél
abarca los casos en que, como el del sub examen, la violencia requerida por el tipo básico y desplegada
mediante el uso de un arma, se encamina a procurar la impunidad (violencia posterior).
Por lo demás, la sustracción y dicha violencia -con el fin, como se dijo, de lograr la impunidad- se
sucedieron en un mismo contexto y sin que medie solución de continuidad, de modo que no cabe
admitir la escisión pretendida entre el robo y la supuesta resistencia. Es que, si inmediatamente luego
de perpetrada la sustracción y en miras de lograr su propia impunidad, la imputada intentó agredir a la
víctima mientras ésta procuraba aprehenderla, la violencia ejercida forma parte de la modalidad típica
mencionada en el artículo 164 del código de fondo e integra -sin posibilidad de tratarla como un hecho
independiente- el desapoderamiento agravado de los elementos del automóvil (2).
En consecuencia, esta Sala RESUELVE: CONFIRMAR el auto documentado a fs. (…), en cuanto ha
sido materia de recurso".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Divito, Cicciaro, Scotto. (Sec.: Besansón).


c. 20.150/15, BURGUEÑO, Valeria Soledad.
Rta.: 14/05/2015

Se citó: (1) Elizabeth Marum, Código Penal y normas complementarias, análisis doctrinal y
jurisprudencial, Hammurabi, Bs. As., 2009, t. VI, p. 283, C.N.Crim. y Correc., Sala V, c. 7074/13, rta:
27/03/2013 voto del Dr. Divito y Sala VII, c. 9102/13, "Riverol, Oscar", rta: 16/04/2013. (2) C.N.Crim.
y Correc., Sala VII, c. 57091/13, "Martínez, Nicolás Ariel", rta: 04/12/2013.

ROBO.

Agravado en poblado y en banda. Procesamiento. Robo de cables de servicio telefónico y de Internet.


Elementos de prueba suficientes para agravar la situación procesal. Calificación que no requiere los
presupuestos de la asociación ilícita sino sólo una "coautoría funcional" para ser aplicada. Intervención
de tres o más personas en el codominio del hecho, división de roles y decisión previa y conjunta.
Confirmación. Disidencia parcial: Exclusión de la agravante. Concepto de banda: Necesidad de que los
intervinientes integren una asociación ilícita. Confirmación. Modificación de la calificación por la de
robo simple.

Fallo: "(…) La jueza Mirta L. López González dijo: La defensa no cuestionó la materialidad del
suceso, sino únicamente la atribución de responsabilidad que se formuló a su representado en el auto de
mérito.
(…) la decisión recurrida se encuentra ajustada a las constancias sumariales y a su análisis bajo las
reglas de la sana crítica racional.
No existen testigos directos de la operación de arranque de los cables que se pretendieron sustraer, ni
cámaras que hayan registrado el episodio. No obstante ello, instantes después haberse verificado el
resultado de dicha acción -el corte del servicio telefónico y de internet de la empresa "Administradora
de Recursos Humanos Ferroviarios SACPEM"- el imputado A. fue visto interviniendo personalmente
en el traslado de esos cables en forma conjunta con dos mujeres, ayudándose con una bicicleta.
Así lo afirmaron F.J.O. y M.A.P.F., gerente y subgerente de dicha razón social, quienes lo observaron
en forma inmediata a la suspensión del servicio desde la ventana de sus oficinas. A la postre, esta
última reconoció en el lugar de detención al imputado y a la bicicleta que se le secuestró (ver fs…).
También los preventores D.N. y G. I. afirmaron que participaba activamente en el traslado del cableado
cuando -ante la noticia de O. - salieron en busca de los autores y, en ese contexto, lo vieron junto a una
mujer, la que finalmente se dio a la fuga (fs…).

215
El desapoderamiento emprendido abarcó dos tramos de acción -el "arranque" de los cables y su
inmediato traslado-, que fueron funcionalmente distribuidos entre quienes estuvieron implicados.
Aun cuando se admitiera la afirmación defensista de que, por su incapacidad física, A. no pudo haber
trepado a los postes para habilitar el primero, lo cierto es que su intervención en el segundo muestra a
las claras su co-dominio del hecho.
En este contexto, (…) voto por confirmar lo resuelto conforme al artículo 306 del CPPN.
Considero que los cuestionamientos dirigidos a la subsunción legal seleccionada, invocados en base al
hecho de que A. se halla privado de su libertad, tampoco pueden ser admitidos.
La supuesta contradicción entre los dichos de los testigos y los de los preventores que la defensa
invocó, porque aquéllos afirmaron que A. iba acompañado por dos mujeres y éstos sólo mencionaron a
una, no es tal. Es razonable concluir que la divergencia se debe al diferente momento y tramo de
hechos que presenciaron unos y otros, sin que quepa -a partir de ellorestar valor a la versión de O. y P.
F. para acreditar la cantidad de participantes en el suceso.
Las demás razones invocadas, tendientes a la inaplicabilidad de la figura agravada cuando el hecho ha
sido ejecutado con fuerza y no con violencia, y/o cuando no se han reunido los presupuestos de la
figura de la asociación ilícita, tampoco resultan atendibles. La distinción mencionada en primer lugar
no se encuentra legalmente prevista. Respecto del segundo planteo, he sostenido - reiteradamente- que
la agravante del robo por la comisión en lugar poblado y en banda no requiere los presupuestos de la
asociación ilícita (artículo 210 del Código Penal), sino sólo una "coautoría funcional", es decir, la
intervención de tres o más personas en el codominio del suceso delictivo, a través de una división de
roles, según una decisión previa y conjunta. (1).
(…) voto por confirmar la calificación seleccionada por el juez.
Disidencia parcial del juez Mauro A. Divito dijo: Si bien coincido con mi colega en que la prueba
reunida sostiene en forma suficiente la hipótesis de responsabilidad que describe el auto de mérito en
relación al imputado A., disiento con ella en cuanto a que quepa aplicar al caso la agravante del robo
por su comisión en lugar poblado y en banda, circunstancia a cuya consideración debemos avocarnos
en tanto el imputado se encuentra detenido.
Entiendo que a los fines de tener por configurado el requisito de que un hecho sea cometido "en banda"
(previsto en los arts.
166 inc. 2°, 167 inc. 2° y 184 inc. 4°, del Código Penal) no basta con comprobar que tres personas
tomaron parte en su ejecución, sino que -además- ha de verificarse que ellas integran una asociación en
los términos del art. 210 del mismo ordenamiento legal.
Dicha interpretación me parece la más adecuada porque, además de respetar la evolución histórica que
sobre la cuestión se aprecia en la legislación penal argentina -reseñada en el voto del juez Madueño en
el plenario "Q." de este tribunal (LL 1989-E, p. 16 y ss.)-, permite acudir a la norma citada en último
término a fin de establecer el número mínimo de integrantes que cabe exigir en una "banda", cosa que -
de otro modo- resultaría de difícil determinación (cfr., en este sentido, el voto en dicho plenario del
juez Donna), y -asimismo- guarda armonía con la redacción que se ha empleado en las figuras en las
que el incremento de la escala se basa en una mera pluralidad de agentes (p. ej., el inc. "d" del art. 119).
El argumento adicional que conduce a esa misma solución se desprende del texto actualmente vigente
del Código Penal, en el que -desde el año 2003 (ley 25742)- los delitos de privación de la libertad
coactiva y secuestro extorsivo se agravan "cuando participaran en el hecho tres o más personas" (CP,
arts. 142 bis, inc. 6° y 170, inc. 6°).
Ello -a mi juicio- no hace más que avalar el criterio aquí sostenido porque, de suscribirse ahora la
opinión triunfante en el plenario "Q.", debería aceptarse que los legisladores han empleado, en un
único código y para referirse a lo mismo, dos fórmulas disímiles ("en banda" y "cuando participaran en
el hecho tres o más personas"), lo que resultaría sistemáticamente inadecuado.
Por lo expuesto, me inclino por homologar la resolución recurrida más con la modificación de la
calificación legal asignada al hecho, que debe ser encuadrado como un robo simple (CP, art. 164).
No habiéndose llegado a un acuerdo, interviene en el caso el juez Ricardo Matías Pinto, quien no
presenció la audiencia por hallarse prestando funciones en la sala VI.
El juez Pinto dijo: (…) Circunscripto a la cuestión sobre la que me toca intervenir -vgr. en relación al
alcance del concepto de "banda"- hago constar que coincido con la vocal López González en cuanto
que no debe ser equiparado al de asociación ilícita previsto en el artículo 210 del CP (3).
Por tanto, al igual que ella, voto por la confirmación de la subsunción legal seleccionada por el juez de
la instancia de origen. Así voto.
(…) el tribunal RESUELVE: Confirmar el auto de fs. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, López González, Pinto, Divito (en disidencia parcial). (Sec.: Herrera)
c. 16.601/15, ACOSTA, Fernando A.
Rta.: 06/05/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correc., Sala V, c 66112/2014, "Nieto, Julián José - Nieto, Pablo José", rta.
9/12/2014. (2) C.N.Crim. y Correc., Sala VII, c. 10860/14, "H. A., F. P.", rta. el 16/12/14. (3)
C.N.Crim. y Correc., Sala VI, c. 21665/2012, "Sánchez, Camila Isabel", rta. 8/9/2014.

216
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

ROBO.

Agravado con escalamiento. Procesamiento. Omisión de describir en la declaración indagatoria de qué


manera y sobre qué cosa se ejerció violencia para calificar el hecho como robo. Confirmación.
Modificación legal por la de hurto con escalamiento en tentativa

Fallo: "(…) I- La defensa (…) centró sus agravios en la calificación legal escogida por la jueza a quo y
el grado de realización que alcanzó el hecho atribuido.
(…) entendemos que si bien asiste razón a la defensa, en punto a que al momento de hacérsele saber a
L. la imputación en su contra, no se especificó cuál habría sido la fuerza por éste desplegada, esa
circunstancia - a fin de respetar los términos bajo los cuales fue indagado- conduce a modificar la
calificación legal por la de hurto con escalamiento, sin que se torne inválido el acto procesal ni lo
actuado en consecuencia.
Ello, pues atento a la citada modificación del encuadre típico, el acto cumple con las exigencias
formales requeridas por el código adjetivo, sin advertirse vulneración a garantía constitucional alguna
del imputado.
(…) nada obsta a que, en caso de considerarlo pertinente, se amplíe la declaración indagatoria del
nombrado en orden al delito de robo.
(…) el delito no superó el grado de conato.
Ello pues -al menos de momento- (…) conduce a entender que la inmediatez con la que se produjo la
detención del imputado, impide afirmar que tuvo la posibilidad de disponer de lo sustraído, máxime
cuando nada indica que los elementos secuestrados no sean la totalidad de los bienes de los
damnificados.
(…) los elementos reseñados nos conducen a sostener, al menos de momento, que L. no tuvo libre
disposición de los bienes sustraídos, por lo que el suceso debe tenerse por tentado.
(…) el tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el auto de fs. (…)a., en cuanto fuera materia de recurso,
modificándose la calificación legal allí consignada a la de hurto agravado con escalamiento en grado de
tentativa (arts. 42 del CPPN y 163, inc. 4°, del CP)".
C.N.Crim. y Correc., Sala V, López González, Divito. (Sec.: Raña).
c. 7.265/15/3, LACALLE, Cristian A.
Rta.: 28/04/2015

ROBO.

Simple en tentativa. Procesamiento. Imputado que abrió la ventanilla trasera de una camioneta para
intentar ejecutar un apoderamiento. Cese del accionar ante la presencia del móvil policial. Ausencia del
elemento típico "fuerza en las cosas". Confirmación. Modificación de la calificación legal por la de
hurto simple en tentativa.

Fallo: "(…)entendemos que la prueba obrante en autos no se reduce a las expresiones contrapuestas
apuntadas por la defensa.Si bien el testimonio de M.E. -de quien no existe elemento alguno en estas
actuaciones que permita dudar de su veracidadresulta ser esencial para reconstruir las circunstancias de
modo en que habría tenido lugar el hecho investigado (…).
(…) la declaración del titular de la camioneta, R.O.A., nos ilustra acerca de las condiciones en las que
había dejado dicho vehículo estacionado en la vía pública a las 01.30 del día 21 de enero de 2015.
Precisó en su testimonio que dejó "…el rodado perfectamente estacionado y cerrado…" y que al querer
retirar la camioneta "…la ventanilla del rodado se hallaba baja…" (v. fs. …).Sostiene el impugnante
que el informe obrante a fs. (…)es claro al concluir que no se observaron daños ni signos de violencia
en la ventanilla. Sin perjuicio de ello, surge del informe que la ventanilla efectivamente se hallaba
abierta, lo que se ajusta a la versión brindada por el denunciante respecto a la modalidad con la que F.
habría intentado sustraer bienes del interior de la camioneta en cuestión.(…) M.E. manifestó que el
imputado "se encontraba tratando de abrir la puerta del baúl y posterior ventanilla de una camioneta…
con la fuerza de sus brazos…" (v. fs…), lo cual no implica que necesariamente debiera haber
provocado un daño sobre la misma.Finalmente, el preventor corroboró que el rodado "presentaba la
ventana del portón trasero abierta…" (v. fs. ...).Lo expuesto, sumado al acta de detención (…), el
croquis del lugar de los hechos (…) y la declaración del subinspector (…) corrobora la imputación
formulada.De esta manera el plexo probatorio en cuestión permite tener provisoriamente por
acreditadas la materialidad del hecho y la autoría de D.O.F.
El planteo subsidiario que realiza la defensa tampoco puede tener acogida favorable con los alcances
pretendidos.
(…) la acción desplegada por el imputado excedió los meros actos preparatorios, importando su
conducta el principio de ejecución de un delito contra la propiedad.(…) se ha tenido por acreditado que
el imputado, mediante la fuerza de sus brazos, abrió la ventanilla trasera de la camioneta Nissan,
modelo Frontier, dominio EDO-293, con miras a sustraer los elementos que había en su interior.Las
acciones descriptas significaron actos concretos de comienzo de ejecución de un apoderamiento
ilegítimo, pues la apertura de la ventana aparece, razonablemente, como el acto inmediatamente
anterior a concretar aquél, y el cese del accionar delictivo tuvo lugar sólo cuando apareció el móvil
policial que circulaba por la zona.Ahora bien, dicho accionar no involucró la "fuerza en las cosas" que

217
reclama el artículo 164 del Código Penal.En efecto, esta modalidad del delito de robo supone que "la
fuerza sea destructiva y anormal. Lo primero implica que se altere dañosamente (romper, cortar,
deformar) lo que rodeaba a la cosa, como parte de ella o como reparo…" (1).
Es que "no basta el simple empleo de fuerza física para que el hecho del apoderamiento constituya un
delito de robo. Es preciso que, merced al empleo de esa fuerza, la remoción de la cosa con ánimo de
apoderamiento, tenga lugar por medios no comunes u ordinarios, para quebrantar la resistencia que la
cosa o su guarda ofrecen para la remoción. Y el efecto resultante del empleo de esos medios ha de ser
una modificación permanente del estado de la cosa o de su guarda"(2). Considerando el accionar
necesario para la apertura de la ventanilla y la circunstancia de que ésta hubiera resultado en modo
alguno dañada, se concluye que la acción no incluyó el empleo de la fuerza de carácter destructivo que
reclama el tipo del artículo 164 del Código Penal.(…) la materialidad del hecho y la participación del
encartado, el procesamiento de D.O.F. debe ser homologado, aunque modificando la calificación legal
por la de hurto simple en grado de tentativa (artículos 42 y 162 del Código Penal).(…) el tribunal
RESUELVE: Confirmar el auto de (…) modificando la calificación legal por la de hurto simple en
grado de tentativa (artículos 42 y 162 del Código Penal).

C.N.Crim. y Correc., Sala I, Pinto. Divito. (Sec.: Poleri).


c. 77226/14, F., D. O.
Rta.: 27/03/2015

Se citó (1): Creus, Carlos, Derecho Penal, Parte Especial, Tomo 1, Tercera edición actualizada, Astrea,
Buenos Aires, 2001, p. 442. (2) (Molinario, Alfredo J., texto preparado y actualizado por Aguirre
Obarrio, Eduardo, Los delitos, tomo II, TEA, Buenos Aires, 1996, pág. 260).

ROBO.

Agravado por uso de arma en tentativa (arts. 42, 166 inciso 2°, C.P.P.N.). Agravio de la defensa:
Elementos insuficientes para considerar que se utilizó un arma. Víctima que dio una descripción
detallada del elemento que se habría utilizado. Imputado que pudo descartarse del arma en el intento de
huída. Confirmación. Disidencia: Elemento no secuestrado. Testimonio de la damnificada insuficiente
para dar por cierta su existencia. Exclusión de la agravante. Confirmación parcial. Robo.

Fallo: "(…) La jueza Mirta L. López González dijo: (…) no habiéndose secuestrado en poder del
imputado el objeto punzante mencionado por L.M.L., la comprobación de su existencia ha quedado
reducida exclusivamente a sus dichos, pues no se cuenta con el testimonio del transeúnte que frustró el
intento del imputado, comenzó su persecución y dio aviso al personal policial que materializó su
detención.
(…) la damnificada no ha logrado describir con mínima precisión el tipo de elemento que habría sido
utilizado por el imputado pues solo refirió que se trataba de "un elemento punzante de
aproximadamente 5cm de color plateado" (sic) -ver fs. (…)-.
(…) no se ha verificado el extremo expuesto por la denunciante con los alcances que, en razón del
carácter de aplicación restrictiva exige toda calificante. Véase, en ese sentido, que no sólo no se ha
logrado el secuestro del objeto utilizado, sino que tampoco se logró corroborar de ninguna otra manera
lo expuesto por la denunciante en tanto no se han aportado testigos presenciales, ni se ha determinado
la existencia de filmaciones que pudieran haber registrado el suceso que se investiga.
(…) la falta de certeza sobre la existencia del elemento con el que D. presuntamente habría intimidado
a la víctima no permite la aplicación de la agravante por el uso de arma, debiéndose subsumir el hecho
en la figura simple de robo. Así voto.
El juez Ricardo Matías Pinto dijo: (…) los agravios expuestos por la defensa no logran conmover la
decisión dictada por el a quo.
(…) la víctima ha sido clara en su declaración al afirmar que fue intimidada mediante el uso de un
"elemento punzante de aproximadamente 5cm de color plateado" (sic), con el que el imputado,
inclusive, realizó ademanes "como de querer lesionarla" (sic) -ver fs. (…).- (…) el accionar policial
que culminó con la detención del imputado, sumado al reconocimiento in situ practicado por la víctima
brindan un grado de verosimilitud a su testimonio que no puede ser desechado en esta oportunidad.
(…) la falta de incautación del instrumento cortante no impide la procedencia de la agravante, puesto
que su poder ofensivo no requiere una verificación técnica particular, como sí ocurre con las armas de
fuego, sino que su simple visualización nos convence de su aptitud para causar daño.
(…) voto por confirmar la decisión en crisis.
El juez Mauro A. Divito dijo: (…) Al respecto, teniendo en cuenta la detallada descripción brindada
por la damnificada acerca del elemento punzante que se le exhibió y que el imputado pudo haberse
desprendido de aquél durante la persecución que ilustra el plano de fs. (…), adhiero al voto del Dr.
Ricardo Matías Pinto.
(…) el tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el auto de fs. (…)"

C.N.Crim. y Correc., Sala V, López González (en disidencia), Pinto, Divito. (Sec.: de la Bandera)
c. 18253/15, DELGADO, Claudio Jesús.
Rta.: 15/05/2015

218
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

SECRETO PROFESIONAL.

Procesamiento. Perito de parte que infringe su obligación de guardar secreto, al poner en conocimiento
de medios periodísticos precisiones sobre lo debatido en la deliberación y su posición científica sobre
el tema, ventilando información confidencial por televisión. Perito designado por resolución judicial o
propuestos por las partes: equiparación a funcionarios públicos con las obligaciones previstas en los
arts. (arts.262, 266 y cc. del Código Procesal Penal). Confirmación.

Fallo: "(…) II.-) No se cuestiona en la impugnación que en el marco de la entrevista televisiva emitida
por (…) el imputado habló sobre el contenido de la discusión suscitada en la junta médica llevada a
cabo en la causa (…).La crítica se erige fundamentalmente sobre tres cuestiones. La falta de calidad de
autor por no revestir la calidad de funcionario público que exige el art.157 del Código Penal; la errónea
ponderación de la prueba en tanto los periodistas ya conocían la información "secreta" suministrada
por (…) y la ausencia de dolo por cuanto en la conversación el perito sólo habría pretendido
fundamentar su postura sobre el asunto.
III.-) Los argumentos esgrimidos oportunamente (…), son plausibles y tornan razonable equiparar al
perito de parte como funcionario público en los términos del citado tipo legal.
Se ha debatido cuáles son las funciones del perito de parte: si de mero controlador de la actividad de
los designados por el juez, en cuyo caso su actuar se limitaría sólo a la de asistir a las operaciones y
deliberación que aquéllos practiquen pudiendo hacer sugerencias o bien, si además de ello, puede luego
presentarle al juez un dictamen individual con su opinión especializada sobre los puntos de análisis (1).
Compartimos la postura de este autor en tanto no debe perderse de vista cuál es la finalidad misma de
la prueba pericial. Si se acude a especialistas en cualquier rama de las ciencias o las artes, lo es para
que éstos suplan las deficiencias del juzgador con objetividad técnica siendo indiferente si el
profesional que lo hace es oficial, designado por el juez o propuesto por alguna de las partes.
En este contexto y conforme el juego armónico de los arts.260, 262, 266 y cc. del código adjetivo
puede arribarse a la conclusión de que los peritos de parte una vez designados por resolución judicial o
propuestos por las partes, se encuentran en la misma situación que los designados de oficio (2) y, por lo
tanto, pueden ser considerados como funcionarios públicos (3).
Respecto a la valoración probatoria, la circunstancia de que los periodistas hubieran tenido, o no, algún
tipo de conocimiento sobre los pormenores de lo discutido en la junta médica -en relación a lo cual no
puede descartarse incluso que hubiera provenido de una charla previa con el imputado antes de salir "al
aire"-, no elimina tipicidad de la conducta pues el perito infringió su deber de guardar secreto al poner
en conocimiento de los medios precisiones sobre lo debatido en la deliberación y su posición científica
sobre el tema. A modo ilustrativo puede avizorarse cómo (…) habló, entre otras cosas, sobre el
hallazgo de "neuronas rojas" que se vincularían con un proceso de agonía y respecto de eventuales
prácticas sexuales sado-masoquistas que justificarían las lesiones verificadas en el cuerpo de la occisa
(…).
El imputado sabía que desempeñaba el cargo de perito (…) y, por ende, de las obligaciones que
pesaban sobre él (arts.262, 266 y cc. del Código Procesal Penal) y no obstante ello infringió su
obligación de guardar secreto y ventiló información confidencial por televisión. "La obligación de
guardar reserva impuesta al perito tiene su correlación con la autorización que le confiere el art.260,
último párrafo, para revisar las actuaciones. La violación a este deber se halla castigada en el art.157
del C.P. Su razón de ser se fundamenta en el carácter secreto de la instrucción para los extraños (…)"
(4).
(…), el Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el punto I del auto de fs. (…) en cuanto fuera materia de
recurso. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini, Filozof. (Sec.: Oberlander).


c. 50.854/13, MENDEZ, Adolfo.
Rta.: 09/02/2015

Se citó: (1) Jauchen, Eduardo M., Tratado de la prueba en materia penal, págs.392 y ss, Rubinzal -
Culzoni, 2002; (2) Mugica, Gonzalo, "A propósito del consultor técnico y otras confusiones", artículo
publicado en La Ley 2005-B, 1241, cita online AR/DOC/424/2005 ; (3) Baigún, David - Zaffaroni,
Eugenio, Código Penal y normas complementarias, Tomo 5, pág.802, Hammurabi, Buenos Aires, 2008
y art.77 del C.P.; (4) Navarro, Guillermo - Daray, Roberto, Código Procesal Penal de la Nación,
pág.651, Hammurabi, Buenos Aires, 2004.

SOBRESEIMIENTO.

Lesiones leves ocasionadas a su pareja. Inexistencia de elementos de juicio. Estado de duda en la


reconstrucción histórica del hecho y falta de prueba. Confirmación.

219
Fallo: "(…) II.- Se le atribuye a R. V. M. el pasado 18 de abril siendo aproximadamente las 23 hs., en
el interior de su vivienda ubicada en la Av. Ch. XX, dpto. "3" de esta ciudad, el haber agredido
físicamente a su esposa, M. C. U., provocándole lesiones de carácter leve en su cuerpo, por las que
instó la acción.
Coincidimos con la réplica de la defensa en cuanto a que en este caso particular, no existen elementos
de juicio que nos permitan resolver en sentido contrario a lo decidido.
En esta dirección, el descargo del imputado se ve corroborado por las lesiones que se le verificaran, y
que advierten de una resolución del conflicto entre los cónyuges que no resulta la más acertada. Pero
en ese clima de peleas donde se transita un divorcio, situación admitida por ambos, las dudas generadas
en la verdadera reconstrucción histórica del hecho en trato, unida a la falta de prueba por realizar,
determinan un pronunciamiento liberatorio.
(…) el Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el auto de fs. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, Pinto, López González. (Sec.: de la Bandera).


c. 27.319/14, M., R. V.
Rta.: 03/02/2015

SOBRESEIMIENTO.

Por inimputabilidad. Legítima defensa de un tercero, por parte de personal policial (art. 34, inc. 7, en
función de los puntos a) y b) del inc.6 del C.P.). Muerte del imputado que no depuso su acción de
tomar de rehén a su ex pareja, la roció con alcohol, amenazó con darle muerte apuntándola con un
arma. Personal policial que actuó conforme el protocolo previsto para "Situación de crisis con rehenes
o atrincheramiento de personas armadas que generen situaciones de peligro contra la seguridad
pública". Exclusión de la irracionalidad del medio empleado. Confirmación.

Fallo: "(…) El análisis de las presentes actuaciones nos conduce a desechar la hipótesis denunciada,
por no encontrar asidero en prueba alguna.
(…) no se advierte que el personal policial imputado en autos haya obrado en forma antirreglamentaria.
(…) en el desempeño de sus tareas aplicaron el protocolo de actuación previsto para "Situación de
crisis con rehenes o atrincheramiento de personas armadas que generen situaciones de peligro contra la
seguridad pública" que rige en supuestos como el que está en estudio -ver fs. (…) En esta dirección,
pese a los esfuerzos llevados a cabo por los encausados para que O. deponga el accionar que
desplegaba respecto de R., surge de las pruebas del sumario donde se investigó ese hecho -n°
51.296/2014- que en el instante en que se produjo su muerte, él se hallaba detrás de su rehén y con un
arma apuntándola. Esa situación, que se trasluce de la filmación del episodio y los relatos de los
policías, da sustento a la versión de la damnificada, en cuanto a que temió por su vida hasta último
momento -ver fs. (…).
S. R. R. fue clara en cuanto a que el imputado le dijo que la mataría y después se suicidaría. Sus dichos
encuentran correlato en las diversas conductas que éste habría desarrollado, estas son, rociarla con
alcohol, llamar a sus propias hermanas y expresarles el deseo de no continuar con su vida, obligar a R.
a contactarse por teléfono con su madre, mantenerla bajo amenaza hasta el final -ver fs. (…).
Dentro de este contexto, la intención de entregarse de parte de O. que postula el querellante,
presuntamente impedido por el personal que actuó en el caso, no tiene respaldo probatorio.
Ello, más allá de lo expuesto por la víctima en cuanto a que su ex pareja no se habría expresado en tal
sentido e, independientemente que, luego de su fallecimiento, se hubiere verificado que el arma estaba
descargada -ver fs. (…).
Por otro lado, en punto al impedimento que alega el recurrente sobre los familiares de O., a quienes no
se les habría permitido tomar contacto con él, corresponde atenerse a que, pese a la negativa policial,
los propios denunciantes refirieron que se habrían llevado adelante comunicaciones con O. A su vez, S.
R. R. agregó que aquéllas no fueron favorables para el ánimo del captor. Lo expuesto, más allá de que
el propio protocolo mencionado lo desaconseja en determinados casos -ver fs. (…).
Frente a este escenario, consideramos que el temperamento propugnado por la Sra. Fiscal, con
favorable acogida de la juzgadora, se ajusta a una correcta valoración de los elementos reunidos de
conformidad con la sana crítica racional (art. 241 del C.P.P.N.). Ello, en virtud de que el proceder del
personal policial se encontraba justificado frente al pronóstico negativo que vislumbraban sobre el
accionar de O. (…) el agravio del recurrente en relación a que no debe valorarse el testimonio de R. por
tener un especial interés en incriminar a su ex pareja debe ser descartado, pues sus dichos se analizaron
en forma correcta junto a los restantes elementos del sumario y ateniendo a su calidad de damnificada.
En cuanto a la situación de peligro grave para la rehén, debe señalarse que las pruebas reunidas en el
legajo en cuestión demuestran que O. retuvo a R. durante siete horas apuntándole con un arma y un
cuchillo, bajo amenaza de muerte e, incluso, la habría rociado con alcohol. Estas circunstancias
permiten descartar la irracionalidad del medio empleado por el personal policial para evitar la muerte
de ésta, alegada por el acusador particular.
(…) cabe consignar que el medio empleado para repeler la agresión señalada no resultaba irrazonable
ante el ataque propinado por O.
Al respecto, se ha sostenido que "…la necesidad constituye una exigencia tan básica como lo es el
ataque y, por tanto, una condición de la que no se puede prescindir. Sin el requisito de ser necesaria no

220
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

puede hablarse de defensa, ni completa ni excesiva. A este respecto, Jiménez de Asúa señala, indicando
el papel que juega la necesidad en la justificación, que la necesidad es todo esto: supone oportunidad
del empleo de la defensa; imposibilidad de usar otros medios menos drásticos; inevitabilidad del
peligro por otros recursos, pero todo ello en directa relación y subordinación al peligro que nos
amenaza, a la entidad del bien jurídico amenazado y a la figura típica que surge de la reacción" (1) (…)
la forma en que se empleó el medio no lucía irrazonable ante la inminencia de la agresión en curso y
para evitar una más grave. Además no surge como desproporcionada ante los bienes jurídicos en juego
(art. 34 incisos 6° y 7° del C.P. y, en igual sentido, ver de la Sala IV de esta Cámara, la causa
N°6694/11/4 "Sequeira, Alejandro E.", rta.23/12/14).
(…) teniendo en cuenta los extremos analizados, no se advertía al momento de la agresión, la
existencia de otro mecanismo menos lesivo para proteger la vida de la víctima.
Finalmente, respecto de la conducta que se le atribuye a los Dres. G.C. y E.C., en atención a lo
expuesto por el apelante en el marco de la audiencia celebrada ante esta Sala, corresponde tenerlo por
desistido del recurso interpuesto en relación al temperamento desincriminante adoptado en torno a los
nombrados.
(…) se RESUELVE: I.- CONFIRMAR el auto de fs. (…) puntos I y II (…).
II.- TENER POR DESISTIDO al Dr. L.E.D.S., por la querella, del recurso interpuesto respecto del
punto II del auto de fs. (…).

C.N.Crim. y Correc., Sala V, López González, Pinto. (Sec.: De la Bandera).


c. 51.930/14, C. G. y Otros s/homicidio.
Rta.: 06/03/2015

Se citó: (2) D´Alessio, Andrés y Divito, Mauro A.. Código Penal comentado y anotado. 2ª edición
actualizada y ampliada, Buenos Aires, La Ley, 2011, Tomo I, pág.592, con cita de Fontán Balestra,
Carlos, Tratado de Derecho Penal, Tomo II, Ed. Abeledo Perrot, Buenos Aires, 1990, pág.215 y 225.

SOBRESEIMIENTO.

Magistrado que se limita a citar extractos del informe médico y refiere coincidir con el temperamento
liberatorio propiciado por el Ministerio Público. Resolución no fundamentada. Acto jurisdiccional
inválido. Nulidad.

Fallo: "(…) Advierte el Tribunal que la Juez de la anterior instancia en el auto de fs. (…) se limitó a
citar algunos extractos de las conclusiones a las que arribaron los profesionales del Cuerpo Médico
Forense a fs. (…) y (…), y sin explicar cómo ello incidió en su temperamento, y tras indicar que
"coincidía con el criterio del representante del Ministerio Público…", resolvió sobreseer a (…).
Por lo tanto, el pronunciamiento carece de una adecuada fundamentación, lo que impide considerarlo
un acto jurisdiccional válido, pues la motivación hace a la esencia del régimen republicano de gobierno
y su incumplimiento, sin dudas, trae aparejada la sanción de nulidad, ya que contamina a la resolución
con una cuota de arbitrariedad insalvable.
Al respecto se sostuvo que lo que se exige es que "las decisiones judiciales contengan la explicación de
cómo se llegó al juicio de valor y la razón de la aplicación de determinada o determinadas normas del
plexo penal" (1), extremo que no se aprecia en el decisorio en cuestión.
Se agrega que tampoco se detalló la conducta imputada, uno de los requisitos que también debe
contener, ni los datos personales de (…).
En tal sentido se dijo que "deberá comprender la descripción del hecho o hechos de los que resulta
continente y la individualización cierta del imputado…" (…).
En función de lo expuesto, corresponde declarar la nulidad del acta documentada de fs. (…) (artículos.
123 y 337 del Código Procesal Penal de la Nación) y como consecuencia de lo decidido, suspéndase la
audiencia fijada a fs. (…), lo que así se RESUELVE. (...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini, Filozof, Pinto. (Sec.: Carande).


c. 22.723/14, SOTOMAYOR, Emanuel.
Rta.: 02/03/2015

Se citó: (1) Navarro, Guillermo R.-Daray, Roberto Raúl, Código Procesal Penal de la Nación. Análisis
doctrinal y jurisprudencial, T. I, p.516, 4° edición, año 2010.

SOBRESEIMIENTO.

Por atipicidad (inc. 3 del art. 336. del C.P.P.N). Magistrado que advirtió que la acción estaría prescripta
pero dispuso la desvinculación por atipicidad. Decisión que no se ajustó al orden de prelación
dispuesto por el art. 337 del C.P.P.N. Causal de extinción de la acción penal: de orden público y debe
ser declarara de oficio. Transcurso del máximo de la pena prevista para el delito imputado.
Confirmación, con la salvedad de que lo será en los términos del inc.1 del art. 336. C.P.P.N. Revocar e
imponer costas en el orden causado.

221
Fallo: "(…) entendemos que corresponde convalidar el sobreseimiento dispuesto, pero por distintos
argumentos a los expuestos por la a quo.
La Sra. jueza de la instancia de origen dispuso el sobreseimiento del imputado en los términos del
inciso 3° del artículo 336 del digesto ceremonial, por entender que la conducta investigada resulta
atípica.
No obstante ello, también aclaró que la acción penal se encontraría prescripta pues, el auto que decretó
la quiebra de la firma "Nordlow SRL", había adquirido firmeza el 2 de mayo de 2008, momento a
partir del cual debe computarse el plazo prescriptivo (art. 336, inc 1° del mismo cuerpo legal).
Ahora bien, más allá de las consideraciones realizadas respecto de la tipicidad o no de la conducta
analizada -en el caso, aquella prevista por el artículo 178, en función del artículo 176 del CP- lo cierto
es que la decisión impugnada no se ajustó al orden de prelación dispuesto por el artículo 337 del
ordenamiento ritual.
En efecto, consideradas las causales del sobreseimiento en el orden establecido por el art. 336, debió
priorizarse la extinción de la acción penal y no la relacionada con el fondo del asunto pues, extinguida
aquélla, no cabe considerar las otras causales.
En tal sentido, la Sala III de la Cámara de Casación Penal sostuvo que "los codificadores al sancionar
el artículo 336 han establecido un orden de prelación de las causales de sobreseimiento privilegiando
aquella vinculada a la extinción de la acción penal por prescripción pues ella se encuentra íntimamente
ligada a una cuestión de orden público y oponible erga omnes que no puede ser soslayada y se
relaciona con el ejercicio del ius puniendi (Fallos 311:2205) […] la extinción de la acción penal es de
orden público y se produce de pleno derecho por el transcurso del plazo pertinente, de tal suerte que
debe ser declarada de oficio, por cualquier tribunal, en cualquier estado de la causa y en forma previa a
cualquier decisión sobre el fondo." (CNCP, Sala III, registro nro.
1983.09.3, causa nro. 11008, "Tissone, Pablo León s/ recurso de casación e inconstitucionalidad", del
30 de diciembre de 2009).-Además, es doctrina de nuestro máximo tribunal que: "la prescripción es de
orden público y debe ser declarada de oficio.
Agregándose luego que se produce de pleno derecho […] y que -también por examinarse la
subsistencia misma de la acción penal- ésta debe ser resuelta en forma previa a cualquier decisión
sobre el fondo" (ver causa nro. 1227 "Oliva Gerli, Carlos Atilio" del 19 de octubre de 2010 donde se
citó Fallos 207:86; 275:241; 297:215; 301:339; 310:2246; 311:1029, 2205; 312:1351; 313:1224;
323:1785, 322:300, entre otros).
Aclarado ello, corresponde adentrarse en el planteo de prescripción.
Sostiene el recurrente que la conducta que denuncia encuadra en el artículo 176 del código de fondo
(ver fs….), hipótesis que prevé una pena máxima de seis años de prisión.
En estos casos, por regla, el plazo de la prescripción de la acción penal debe computarse desde la
medianoche del día en que quedare firme el auto declarativo de la quiebra, principio general que cede
cuando existan hechos fraudulentos posteriores.
(…) cabe destacar que el estado falencial de la firma "Nordlow SRL", decretado por el Juzgado
Comercial n° 18, data del 19 de febrero de 2008. Dicha sentencia adquirió firmeza el 2 de mayo de
2008, momento en el que venció el plazo fijado en los edictos para la presentación de los acreedores de
la quiebra.
Aclarado ello, entendemos acertado realizar el cómputo a partir de la fecha en que el auto declarativo
de la quiebra adquirió firmeza, esto es, el 2 de mayo de 2008, fecha desde la cual ha transcurrido el
lapso de seis años establecido como pena máxima para la hipótesis legal que nos ocupa.
Es que en el caso en estudio no se logró determinar que con posterioridad a aquél la fallida hubiera
sustraído bienes del acervo societario en perjuicio de los acreedores.
En punto a ello, cabe poner de resalto que a fs. (…) del incidente de prescripción de G.S. luce un oficio
remitido por el juez mercantil del que se desprende que el síndico de la quiebra informó que "más allá
de los hechos denunciados originariamente en la demanda, éste síndico no amplió su denuncia respecto
a los mismos ni surgió, hasta el momento, del trámite del expediente o de la quiebra, algún hecho de
características defraudatorias que pudieran ser materia de investigación penal".
De otro lado, en punto al argumento de la querella que sostiene que el llamado a indagatoria realizado
el pasado 16 de abril de 2012 ha interrumpido el plazo prescriptivo, cabe señalar que, como bien
sostuvo la a quo, esa convocatoria no fue más que una reiteración de aquella realizada primigeniamente
por el magistrado de la provincia de La Rioja que luce a fs. (…)de los autos principales y en función a
los hechos calificados como estafa, respecto de los cuales existe, en este mismo incidente, un
pronunciamiento que declaró extinguida la acción penal que, a la fecha, se encuentra firme (ver fs…).
(…) puesto que no consta que el imputado hubiera cometido algún delito en el lapso apuntado (fs. 6)
consideramos que ha trascurrido el plazo establecido en el art. 62, inciso 2° del Código Penal y, así, ha
operado la prescripción de la acción penal, motivo por el cual el sobreseimiento dispuesto, lo será en
los términos del inciso 1° del art. 336 del CPPN.
En cambio, entendemos que los agravios invocados por la parte querellante, en relación con las costas
procesales que le fueron impuestas, merecen ser atendidos por cuanto en el caso -al declararse la
extinción de la acción por prescripción- resulta viable la excepción prevista por el artículo 531 del
Código Procesal Penal de la Nación, motivo por el cual, habrán de ser impuestas por su orden en razón
de que los acusadores particulares tuvieron razones plausibles para litigar.
(…)el tribunal RESUELVE: I. CONFIRMAR el punto I del auto de fs. (…) mediante el cual se dispuso
el sobreseimiento de H.E.D., con la salvedad de que lo será en los términos del inc. 1° del art. 336 del

222
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

C.P.P.N. II. REVOCAR el punto II del auto de fs. (…) e imponer las costas del proceso en el orden
causado (artículos 530 y 531 ibídem). III. Imponer las costas de alzada en el orden causado (artículos
530 y 531 del ordenamiento instrumental).

C.N.Crim. y Correc., Sala V, López González, Divito. (Sec.: Poleri).


c. 65.323/07/11, DOINY, Hugo E.
Rta.: 08/04/2015

SUSPENSION DE JUICIO A PRUEBA

Rechazada. Magistrado que no dió cumplimiento con la audiencia prevista en el art. 293 del C.P.P.N.
Obligatoriedad. Caso en el cual no se advierte una improcedencia manifiesta del beneficio solicitado.
Nulidad.

Fallo: "(...) Los Dres. Carlos Alberto González y Alberto Seijas dijeron: Entendemos que luego de la
formulación del requerimiento de elevación a juicio es viable la articulación del pedido de suspensión
de juicio a prueba "pues con tal acto procesal ha quedado concluida la etapa investigativa, en tanto que
un eventual incumplimiento de las pautas de conducta establecidas en el marco del instituto de la
probation, a resultas del cual se decida la reanudación del juicio, no obstaría de modo alguno a su
progreso, en la medida en que la prueba inicial en punto a la existencia del hecho y a la responsabilidad
del imputado ya fue colectada en una etapa anterior" (1).
Dicho esto, corresponde apuntar que la norma procesal antes mencionada establece que, ante un pedido
de suspensión a prueba de un proceso penal, el tribunal al que se le formuló el planteo debe convocar a
las partes a una audiencia única, en que tendrán derecho a exponer su opinión.
Las constancias de la causa muestran que no fue dispuesta la celebración de esa audiencia, y que el
juez resolvió el planteo sin requerir la opinión de las demás partes del proceso.
Sobre el tópico, "si bien se ha dicho que podría prescindirse de la celebración de la audiencia ante el
supuesto de manifiesta improcedencia del instituto (2), la doctrina emanada del fallo "Acosta,
Alejandro Esteban" dictado el 23 de abril de 2008 por la Corte Suprema de Justicia de la Nación, que
adoptó una tesis de interpretación amplia de la norma prevista en el artículo 76 bis del Código Penal,
ha venido a descartar esa posibilidad" (3).
Desde esa línea de razonamiento, la pretensión del encausado no se manifiesta ab initio improcedente,
dado que se ha formulado por quien se encuentra habilitado a hacerlo y en la oportunidad procesal
pertinente, motivo por el cual la omisión de celebrar la audiencia deriva en la invalidez del
pronunciamiento que ha sido materia de recurso, lo que así postulamos (4).
Finalmente, entendemos que no debe hacerse lugar al apartamiento que solicita la defensa respecto del
juez de grado, pues el tenor de la decisión que estimamos inválida no refleja opiniones u otras
circunstancias de gravedad que ameriten una medida de tales características. Cabe recordar que "aún en
casos en que el tribunal revisor dispusiese la nulidad de lo actuado en la primera instancia el
apartamiento no deviene imperativo (artículo 173 del CPPN)" (5).
"(...) El Dr. Mariano González Palazzo dijo: En punto a la oportunidad procesal para formular el
pedido de suspensión de juicio a prueba he sostenido tanto en este Tribunal como cuando integré la
Sala IV de la Cámara Nacional de Casación Penal que "no existe óbice para que la suspensión del
juicio a prueba sea formulada con anterioridad al requerimiento de elevación a juicio, no obstante que
éste último resulta el momento adecuado, dado el panorama acerca de la materialidad del suceso, la
responsabilidad del imputado y el encuadre legal asignado, que en la circunstancia procesal se haya
obtenido" (6).
En orden a la convocatoria a la audiencia prevista en el artículo 293 del digesto ritual, tuve oportunidad
de decir: "La audiencia que prevé el art. 293 del CPPN, no puede obviarse, en tanto constituye una
garantía para la parte y su omisión importa afectar el debido proceso (art. 18 CN)… el art. 293 del
CPPN otorga a las partes intervinientes el derecho de expresarse en el ámbito de la audiencia única tras
lo cual el órgano judicial competente podrá conceder o no el beneficio solicitado. Si existe esta especial
previsión legislativa, la realización del trámite que prevé el art. 293 del código instrumental es
necesario desde que el cumplimiento de las etapas procesales que acuerda el ordenamiento a los sujetos
intervinientes en el proceso es por naturaleza una garantía para las partes, que en el caso no puede
quedar sometida a la discrecionalidad del juzgador y cuya inobservancia afecta las garantías de clara
raigambre constitucional art. 18 y 75 de la CN y art. 8 del pacto de San José de Costa Rica… Sin
perjuicio de ello, no se descarta la posibilidad de un rechazo in limine, debidamente fundado, en el
caso de que la solicitud … resulte manifiestamente improcedente" (7), situación esta última que no se
verifica en el supuesto bajo estudio.
En consecuencia, adhiero a las conclusiones arribadas por mis colegas en el voto que lidera el acuerdo.
Por todo ello, se RESUELVE: I. DECLARAR LA NULIDAD del auto de "(fs. ...)" en cuanto fue
materia de recurso. (...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala IV, Seijas, González Palazzo, González. (Prosec.Cám.: Pereyra).
c. 22.773/13, MESSINA, Alejandro.
Rta.: 04/02/2015

223
Se citó: (1) C.N.Crim. y Correc., Sala IV, c. 2.004/10 "Sanuni", rta. 27/10/10 y c. 559/11 "Santander",
rta. 10/5/11. (2) C.N.C.P., Sala IV, JA, 2002 III, índice, 203 y 204. (3) C.N.Crim. y Correc., Sala IV, c.
49.883/13 "Noguera", rta. 15/5/14. (4) C.N.Crim. y Correc., Sala IV, c. 49883/2013/CA1 "Noguera,
Luciano Sebastián", rta. 15/5/2014. (5) C.N.Crim. y Correc., Sala IV, c. 1567/10 "Banco Galicia S.A.",
rta. 14/10/10 y c. 749/11 "Zurita", rta. 15/6/11. (6) C.N.Crim. y Correc., Sala IV, c. 21.520 "Mansilla",
rta. 20/6/03 y C.F.C.P., Sala IV, c. 10.624 "Valentini", rta. 27/5/09. (7) C.N.Crim. y Correc., Sala IV,
c. 24.869 "Pelozo", rta. 8/3/2005.

SUSPENSION DE JUICIO A PRUEBA.

Rechazada por considerar el magistrado que debe ser solicitada luego del requerimiento de elevación a
juicio. Oportunidad para solicitarla: cualquier momento del proceso a partir de la formulación de la
imputación en la declaración indagatoria. Revocación.

Fallo: "(…) El magistrado de la causa resolvió la improcedencia del instituto previsto en el artículo 76
bis del Código Penal, bajo el fundamento de que su aplicación en esta instancia no resulta admisible
sino hasta tanto se cuente con la instrucción completa, es decir, con el requerimiento de elevación a
juicio.
Contrariamente a lo dispuesto por el instructor, entendemos que la suspensión del procedimiento a
prueba puede solicitarse en cualquier momento del proceso a partir de haberse formalizado la
imputación en el acto de indagatoria (1).
En igual sentido, sostuvo la doctrina que los grupos de delitos o de casos a los que se aplica la
suspensión del proceso a prueba no se distinguen por la oportunidad de su planteo o disposición
judicial, por el contrario cualquiera de ellos puede ser dispuesto desde la etapa de instrucción (2).
(…) el tribunal RESUELVE: REVOCAR el auto de fs. (…) y en consecuencia el instructor deberá
convocar a la audiencia prevista en el art. 293 del C.P.P.N, a los fines de considerar el otorgamiento o
no de la suspensión del juicio a prueba en beneficio del recurrente (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, López González, Pinto. (Sec.: Poleri).


c. 3.086/15/1, LEIVA, Raúl S.
Rta.: 05/02/2015

Se citó: (1) Almeyra, Miguel Angel, "Código Procesal Penal de la Nación", t. II, p.489, La Ley,
Buenos Aires, 2007. (2) Vitale, Gustavo L., "Suspensión del Proceso a Prueba", p.311, segunda edición
actualizada, editores del puerto S.R.L, Buenos Aires, 2004.

SUSPENSIÓN DE JUICIO A PRUEBA.

Rechazada. Requerimiento de elevación a juicio por dos hechos, uno de los cuales, el monto de
punibilidad previsto en la calificación impediría la concesión del beneficio solicitado (Art. 76 bis, del
C.P.). Oposición fundada del fiscal. Doctrina "Góngora". Necesidad de no contrariar las obligaciones
que asumió el Estado al aprobar la "Convención de Belem Do Pará" por resultar los hechos calificados
como de violencia contra la mujer. Confirmación.

Fallo: "(…) En tal sentido, se pondera que la calificación jurídica de los hechos se encuentra discutida,
toda vez que la querella formuló requerimiento de elevación a juicio por dos delitos (abuso sexual
gravemente ultrajante, agravado por la convivencia preexistente y por estar a cargo de la guarda de la
menor, y lesiones leves agravadas por el vínculo, en concurso real, fs. 155/157vta.), uno de los cuales
tiene prevista una pena de 8 a 20 años, extremo que impediría la aplicación del instituto del artículo76
bis del Código Penal, porque el mínimo respectivo no habilitaría a dejar en suspenso el cumplimiento
de una eventual condena.
(…) aun cuando la calificación legal de los hechos que propició el Ministerio Público al solicitar la
elevación a juicio de las actuaciones (abuso sexual agravado por haber sido perpetrado en el ejercicio
de la guarda y lesiones leves en concurso real, fs.
(…), remite a un mínimo de tres años de prisión, es dable destacar que el agente fiscal se opuso
fundadamente, y la ley requiere su consentimiento para los supuestos del párrafo 4to.
de la mencionada norma.
(…) no hay razones para apartarse de la doctrina procedente del fallo "Góngora" (CSJN G 61. XLVIII.
Recurso de hecho. C. 14.092, rta. 23/4/2013), en el que, sustancialmente, se estableció que conceder la
suspensión del juicio a prueba al imputado y prescindir del debate, en hechos que prima facie han sido
calificados como de violencia contra la mujer -los allí tratados involucraban, como este caso, una
afectación a la integridad sexual- implicaría contrariar las obligaciones que asumió el Estado al aprobar
la "Convención de Belem Do Pará".
(…) el tribunal RESUELVE: Confirmar el auto de fs. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, Pinto, Divito. (Sec.: Herrera).


c. 26.891/12/5, L., F.
Rta.: 27/02/2015

224
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

SUSPENSIÓN DE JUICIO A PRUEBA.

Revocada. Agravio de la defensa: decisión perjudicial tomada sin oír argumentos y aplicando
rigorismo formal. Imputado que no se presentó en varias oportunidades a pesar de estar legalmente
notificado. Incumplimiento a las previsiones del art. 27 C.P.N. Confirmación.

Fallo. "(...) contra el punto dispositivo I de la resolución de (fs. ...) en cuanto por este se revocó la
suspensión del juicio a prueba concedida a su asistido G. A. A. (...).
Los agravios del recurrente no logran conmover los fundamentos de la decisión impugnada. (...). El
14/2/2014 el Tribunal Oral en lo Criminal 9 de esta ciudad hizo lugar a la suspensión del juicio a
prueba solicitada por G. A. A. en la causa nº (...) (en orden a los delitos de defraudación con la
utilización de una tarjeta de compra, crédito o débito adulterada en su contenido con cargas dinerarias
obtenidas ilegítimamente mediante el uso no autorizado de los datos de la cuenta de un tercero en
forma reiterada en 16 hechos consumados y cuatro en grado de tentativa, (...)). El 14/5/2014 el juzgado
de ejecución recibió un oficio del Patronato de Liberados (fechado el 5/5/2014) mediante el cual se
comunicó que, ante la incomparecencia del nombrado (...). Ante esto, el 3/7/2014 el juez de ejecución
convocó al imputado a la audiencia prevista en el art. 515 del CPPN para que justificara su
incumplimiento. Pese a haber recibido la citación personalmente en su domicilio (fs. ...), no se presentó
en el juzgado. En consecuencia, se le corrió vista a la fiscalía, que consideró que debía revocársele la
suspensión del juicio a prueba (fs. ...). Por su parte, la defensa solicitó que se le librara oficio al tribunal
de origen para que comunicara si el imputado había fijado un domicilio alternativo (fs. ...). (...). En
efecto, el juez lo citó para justificar su incumplimiento de someterse al control del Patronato de
Liberados y le cursó la notificación correspondiente al domicilio que él había fijado; éste la recibió
personalmente y no compareció. (...).
De este modo, el alegato de la defensa de que se dictó una decisión perjudicial sin oír sus argumentos y
aplicando un rigorismo formal no supera la teoría de los actos propios desde que el derecho del
imputado a acceder a esta solución alternativa conlleva, a su vez, la obligación de cumplir con ciertas
reglas, que reiterada e injustificadamente desatendió conforme las previsiones del art. 27 bis del CPN
(...). Por estas consideraciones, el tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el punto dispositivo I de la
resolución de (fs. ...) en todo cuanto ha sido materia de apelación (art. 455 del CPPN). (...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala I, Bunge Campos, Rimondi. (Prosec. Cám.: Castrillón).


c. 5122/11, ARZAGOT, Guido Antonio.
Rta.: 09/04/2015

SUSPENSIÓN DE JUICIO A PRUEBA.

Revocada. Imputado que habría incumplido las reglas de conducta fijadas por el Tribunal Oral, no
asistiendo al "Programa de Atención a Hombres Violentos", al "Patronato de Liberados", ni a las
audiencias fijadas en los términos del art. 515 C.P.P.N. a pesar de estar personalmente notificado en
varias oportunidades. Confirmación.

Fallo. "(...) apelación deducido por la defensa oficial contra la resolución obrante a (fs. ...) que revocó
la suspensión de juicio a prueba concedida a I. F. V. (...).
En este sentido, si bien asiste razón a la defensa en cuanto a que las últimas audiencias fijadas en los
términos del art. 515, CPPN habrían sido fijadas en día inhábil y/o con notificación tardía, tampoco
puede desconocerse que, definido el cumplimiento de la regla de conducta fijada en el punto 1.c) por el
Tribunal Oral en lo Criminal n° 12 -asistencia al "Programa de Atención a Hombres Violentos" (fs. ...)
y la constancia de incumplimiento conforme informara el Patronato de Liberados a (fs. ...), se dispuso
la fijación de la audiencia indicada de la que fue personalmente notificado el 20 de agosto (cfr. fs. ...) y
su madre (fs. ...) de la siguiente, a las que no compareció. Si bien surge que el 8 de septiembre pasado
se presentó en la defensoría que lo asiste e indicó que estuvo imposibilitado de concurrir porque la
recibió una hora más tarde, lo cierto es que, pese a la negativa fiscal, el juez dispuso una nueva
audiencia a la que no concurrió, justificando la defensa un estado gripal; que no acreditó. (...). En
consecuencia, lo cierto es que desde hace casi 9 meses a la fecha se está intentando la asistencia
personal de V. al juzgado, lo que no se pudo llevar adelante por su inasistencia a las audiencias, lo que
tampoco justificó debidamente. (...). En mérito a lo expuesto, el tribunal RESUELVE: CONFIRMAR
la resolución de (fs. ...) en cuanto fue materia de recurso (art. 455, CPPN). (...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala I, Bunge Campos, Rimondi. (Sec.: Peluffo).


c. 22962/08, V. I. F.
Rta.: 13/04/2015

SUSPENSIÓN DE JUICIO A PRUEBA.

Rechazo. Negativa por haber sido presentada durante la etapa de instrucción y por no tener la firma del
imputado. Actuaciones en las que se ha procesado al imputado por robo en tentativa. Ausencia de

225
norma que ponga un límite al momento procesal oportuno para solicitarla. Revocación. Necesidad de
llevar a cabo la audiencia establecida en el Art. 293, C.P.P.N.

SUSPENSIÓN DEL JUICIO A PRUEBA

Rechazada. Lesiones culposas. Fiscal que se opuso debido a que el imputado no ofreció
autoinhabilitarse. Dictamen que no supera el control de logicidad y fundamentación. Apartamiento de
la doctrina "Acosta" y "Norverto" de la C.S.J.N. Magistrado que fundó su rechazo en base a lo
dictaminado por el fiscal. Revocación.

Fallo: "(…) Ha sostenido la Sala en reiteradas oportunidades que "resulta impertinente que el
representante del Ministerio Público Fiscal se oponga a la concesión de la suspensión del proceso a
prueba al exigírsele al encausado que ofrezca su autoinhabilitación para conducir vehículos, en tanto tal
requisito desconoce la doctrina de la Corte Suprema de Justicia de la Nación sentada en los precedentes
'Acosta' y 'Norverto', resueltos el 23 de abril de 2008" (1). Cabe recordar que en el último de los fallos
citados, el Máximo Tribunal dejó sin efecto la sentencia que no había hecho lugar a la "probation",
soslayando implícitamente el obstáculo que representaba una sanción de inhabilitación.
Así las cosas, la oposición fiscal al instituto de la suspensión del procedimiento a prueba con motivo de
una pena de este tipo, previsto para el delito enrostrado o bien en la ausencia de un ofrecimiento de M.
A. de abstenerse de conducir vehículos (cfr.
fs. …) no supera, entonces, el control de logicidad y fundamentación que debe realizar el tribunal pues
no ha expresado las razones por las cuales en el caso corresponde apartarse de la doctrina asentada por
la Corte Suprema de Justicia de la Nación en los fallos aludidos (2).
En este contexto, y siendo que el magistrado correccional denegó el instituto únicamente en base a lo
dictaminado por el representante del Ministerio Público Fiscal, SE RESUELVE: Revocar el auto de
(fs. …) en todo cuanto fuera materia de recurso. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala IV, Seijas, González Palazzo, González. (Prosec.Cám.:Pereyra).


c. 22.671/12, MEDINA ARTOLA, Claudio G. y otro.
Rta.: 13/05/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correc., Sala IV, c. 885/11 "Mandrefi", rta. 4/11/11; c. 1.935/12, "Labat", rta.:
6/12/12 y c. 13.899/11 "Acevedo", rta. 28/11/13. (2) C.N.Crim. y Correc., Sala IV, c. 34.370
"Demichele", rta. 6/6/08; c. 861/11 "Cassina", rta. 4/6/11 y c. 350/12 "Mira", rta. 26/4/12; C.F.C.P.,
fallo plenario "Kosuta" del 17/8/1999.

SUSPENSIÓN DEL JUICIO A PRUEBA.

Rechazada. Violencia de género. Oposición del fiscal a la concesión. Correcta evaluación de los
lineamientos previstos por la "Convención Interamericana para Prevenir, Sancionar y Erradicar la
Violencia contra la Mujer - Convención de Belém do Pará" por parte del magistrado. Imputación de
tres hechos, desobediencia del imputado a la prohibición de acercamiento impuesta y situación
descripta por la OVD como de riesgo para la víctima. Inviabilidad del instituto. Confirmación.

Fallo: "(…) la situación de que las hipótesis delictivas atribuidas se enmarcan en un contexto de
violencia de género -que ha sido correctamente reseñado por el señor juez de grado-, es la que ha
sustentado la improcedencia de tal instituto, por lo que, contrario a lo alegado por el impugnante, se
entiende que la posición asumida por la fiscal de grado -compartida por el a quo- supera el control de
logicidad y fundamentación que debe realizar el órgano jurisdiccional.
(…) ponderando las características de los tres hechos atribuidos, la escala penal aplicable y la
oposición de la fiscalía, coincidimos con los fundamentos del a quo en cuanto a que el caso se adecua a
los lineamientos generales fijados por la CSJN en el precedente "G.", rta: 23/04/2014, oportunidad en
la que el Máximo Tribunal entendió que la adopción de "alternativas distintas a la definición del caso
en la instancia del debate oral es improcedente" (considerado 7).
(…) cabe señalar que a la luz del reciente precedente de la Cámara Nacional de Casación en lo
Criminal y Correccional de la Capital Federal , el caso encuadra también en las pautas de valoración
allí propuestas a efectos de evitar la aplicación automática del precedente "G.", ello al ponderarse los
delitos involucrados (coacción, coacción en concurso ideal con lesiones leves y desobediencia)
conjuntamente con la índole de los daños producidos (en el informe interdisciplinario de situación de
riesgo de la OVD, los profesionales intervinientes concluyeron que la situación se enmarcaba en un
"altísimo riesgo psicofísico" -fs.(…); y a fs. (…)se constataron las diversas lesiones de la denunciante.)
y la actitud asumida por el imputado al haber desobedecido la prohibición de acercamiento que le fuera
impuesta.
(…) el magistrado de la instancia de origen realizó una correcta evaluación de los lineamientos
previstos por la "Convención Interamericana para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia contra
la Mujer - Convención de Belém do Pará" para determinar que estamos ante un caso de violencia de
género en el que la suspensión de juicio a prueba no resulta viable, por lo que corresponde homologar
el decisorio que se recurre.

226
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

(…) el tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el auto de fs. (…)"

C.N.Crim. y Correc., Sala V, López González, Divito. (Sec.: Raña).


c. 61.210/13, S., H. O.
Rta.: 11/05/2015

SUSPENSIÓN DEL JUICIO A PRUEBA.

Revocación. Imputado que incumplió las obligaciones asumidas en una primera oportunidad. Defensa
que solicitó el reinicio de la supervisión y magistrado que hizo lugar a su pedido. Informe negativo
respecto del cumplimiento de lo impuesto. Fiscal que solicitó la revocación, no presentándose el
imputado a la audiencia fijada para escucharlo a pesar de haber sido notificado personalmente.
Temperamento ajustado a derecho. Confirmación.

Fallo: "(…) II. (…) es menester aclarar que la suspensión de juicio a prueba fue acordada el 1 de
octubre de 2013, por el término de un año y seis meses, con el compromiso de fijar residencia,
someterse al cuidado del Patronato de liberados y asistir al programa de "Hombres Violentos" del
Ministerio de Desarrollo Social del G.C.A.B.A. -fs. (…).
(…) el Patronato de Liberados informó al tribunal que el imputado había sido dado de baja por no
haberse presentado al cumplimiento de las medidas de supervisión -fs. (…)-. Ante ese incumplimiento,
el magistrado de grado lo convocó en los términos del art. 515 del CPPN, constatando en tal
oportunidad que el imputado no vivía en el lugar que fijara como domicilio (fs…).
Al darse intervención a la defensa, la Dra. P.G. solicita el reinicio de la supervisión alegando
problemas de salud y de horarios que habrían impedido el debido cumplimiento de las obligaciones
asumidas (ver fs…).
Con la conformidad del Sr. Fiscal, el 15 de agosto de 2014 se prorrogó el plazo de supervisión hasta
octubre de 2015. A raíz de la recomendación realizada por el Cuerpo Médico Forense a fs.
(…), se le encomendó, además, la realización de un examen psicológico por un plazo no menor a un
año.
El 26 de septiembre de 2014, el Ministerio de Desarrollo Social del G.C.A.B.A. informó que el
imputado no registra presentación ni ingreso al "Programa de Autoayuda para Hombres Violentos" (ver
fs…).
Al darse nueva intervención a la fiscalía, solicitó se cite nuevamente al imputado a fin de que brinde las
explicaciones del caso, medida que fue ordenada a fs. (…) y notificada personalmente al imputado a fs.
(…). Ante la incomparecencia del imputado y la consecuente falta de explicaciones, el fiscal solicitó se
revoque la suspensión de juicio a prueba, lo que así se resolvió a fs. (…).
III. Consideramos que la decisión cuestionada se encuentra ajustada a derecho y, como consecuencia,
procede su convalidación.
El Código Procesal Penal de la Nación prevé, en su artículo 515, que antes de resolver la revocación o
subsistencia del beneficio de la suspensión de juicio a prueba, se le otorgue al imputado la posibilidad
de ser escuchado en una audiencia, extremo cuyo cumplimiento fue satisfecho en el legajo conforme
surge de fs. (…) y (…).
Sin embargo fue la propia conducta de F. al no comparecer a pesar de haber sido notificado
personalmente (cfr. fs….) la que frustró la posibilidad de que fuera oído.
La frustración de tal audiencia obedece exclusivamente a la incomparecencia del imputado, pese a
conocer y aceptar cada una de las cargas a las que se obligó, entre las que se encontraba la
concurrencia al grupo de autoayuda al que, conforme se desprende de fs. (…), jamás concurrió.
(…) el juez de grado no revocó in limine el beneficio acordado ante el incumplimiento verificado, sino
que se intentó establecer el eventual cumplimiento de las cargas asumidas por el acusado, previo a
decidir con la continuación o no del beneficio (ver fs…).
De allí que su incumplimiento a la obligación de concurrir al grupo de autoayuda, a pesar de haberse
comprometido a ello, inclusive ante su única comparecencia al Patronato de Liberados (ver fs…), no
puede ser esgrimido, como pretende la defensa, como un impedimento válido para que el magistrado a
cargo del control disponga la revocatoria de la suspensión que le fuera otorgada.
(…) ha sido la propia conducta del nombrado la que frustró la oportunidad de ser oído, motivo por el
cual no puede afirmarse que la decisión impugnada violentó la garantía constitucional de defensa en
juicio.
(…) el tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el auto de fs.(…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, López González, Pinto. (Sec.: Poleri).


c. 20.486/12/1, FRANCO, Augusto M.
Rta.: 03/06/2015

SUSPENSIÓN DEL JUICIO A PRUEBA.

Rechazada por el magistrado por no tener la solicitud la firma del imputado. Escrito firmado por el
defensor en calidad de representante del imputado con ofrecimiento de reparación del daño y alegando
que no fue suscripta por cuestiones de salud del imputado. Revocatoria. Disidencia: petición que debe

227
formularse una vez que la instrucción se encuentre completa y después del auto o decreto de elevación
a juicio. Confirmación.

Fallo: "(…) La defensa oficial de N. A. C. dedujo recurso de apelación contra el auto extendido a fs.
(…), en cuanto se rechazó el pedido de suspensión del juicio a prueba.
Los jueces Mariano A. Scotto y Mauro A. Divito dijeron: El señor juez a quo no hizo lugar a la
solicitud de la defensa, en virtud de que la presentación formulada (…) carecía de la rúbrica del
causante, requisito que consideró indispensable para dar curso a la petición a favor de C.
De acuerdo con los agravios formulados por la recurrente, entendemos que la firma del imputado, no
resulta necesaria a los fines de solicitar la suspensión del juicio a prueba (artículo 76 bis del Código
Penal).
Ello, en razón de que se estima que tal pedido puede ser firmado por el defensor, en el marco de su
actuación como representante del imputado, máxime si se pondera que se ofreció una reparación de
quinientos pesos ($ 500) y que se aclaró que la solicitud no fue suscripta por una cuestión de salud del
interesado (…).
Teniendo en cuenta ello, se entiende que la audiencia prevista en el artículo 293 del Código Procesal
Penal resulta un ámbito propicio para evaluar los alcances de la voluntad de C. en orden a acceder al
instituto.
En consecuencia, votamos por revocar el auto apelado.
El juez Juan Esteban Cicciaro dijo: Reiteradamente he sostenido que la petición para que se suspenda
el juicio a prueba debe formularse una vez que la instrucción se encuentra completa y después del auto
o decreto de elevación a juicio previsto en el artículo 351 del ordenamiento adjetivo (1).
Lo expuesto se corrobora con las inequívocas alusiones a la suspensión de la "realización del juicio"
(tercer y cuarto párrafo), lo que no puede sino ser interpretado como concreción del debate; con el uso
reiterado de la locución "tribunal"; con la imposición de reglas de conducta del art. 27 bis del cuerpo de
normas, extremo que remite a la intervención de un órgano propio del plenario (art. 76 ter, primer
párrafo); y con las consecuencias de la inobservancia de lo dispuesto por el tribunal que la acuerda, en
el sentido de que "se llevará a cabo el juicio", tras lo cual -inmediatamente- se hace referencia a la
absolución del imputado y lo que puede deparar tal contingencia (art. 76 ter, cuarto párrafo, del Código
sustantivo).
En el caso de sub examen, la solicitud aquí tratada ha sido formulada luego del requerimiento de
elevación a juicio y si bien se declaró clausurada la instrucción y se elevaron estas actuaciones a juicio
(…), ello ocurrió tras decidirse el rechazo de la probation (…), extremo que conduce a homologar la
decisión puesta en crisis, aunque por estas razones.
Así voto.
En consecuencia, esta Sala del Tribunal RESUELVE: REVOCAR el punto II de la resolución
documentada a fs. (…), en cuanto fuera materia de recurso".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Divito, Cicciaro (en disidencia), Scotto. (Sec.: Sánchez).
c. 50.042/12, CARDOZO, Nicolás Alejandro.
Rta.: 10/06/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correc., Sala VII, c. 45120/11/2, "Alitisz, Constantino M.", rta: 23/12/2013 y
c. 40310/11, "González, Gabriel", rta: 29/08/2013.

TRÁFICO DE MEDICAMENTOS O MERCADERÍAS PELIGROSAS.

Procesamiento. Publicación de producto en revista. Circunstancia que demuestra la comercialización


para la venta y asignación de efectos terapéuticos a una sustancia sin certificación ni aprobación.
Ausencia de defectos de fundamentación. Auto debidamente motivado. No vulneración de la garantía
de defensa en juicio por no haberse ampliado la indagatoria para hacerle conocer las nuevas pruebas
incorporadas. Base fáctica que ha permanecido incólume. Confirmación.

Fallo: "(…) La resolución dictada a fs. (…), por la que se dispusieron los procesamientos de V. D. y B.
M. A. E. L., fue recurrida por sus defensores a través de los escritos agregados a fs. (…).
El argumento expuesto por la defensa de la imputada D. en torno a que no se ha configurado el delito
de tráfico de medicamentos o mercaderías peligrosas para la salud resulta contrario a las circunstancias
que se tuvieron por acreditadas y que el Tribunal comparte.
En efecto, la publicación del producto "x tratamiento natural complementario para la diabetes" en la
revista "U. m. m." da cuenta de que se ha comercializado para su venta y se le asignaron efectos
terapéuticos a una sustancia que no posee certificación ni aprobación de la ANMAT y tampoco
responde a las características de un medicamento magistral u homeopático (…).
De allí que las constancias probatorias reunidas justifiquen el temperamento adoptado, ya que, en
orden a la nulidad invocada, cabe señalar que no se advierten defectos de fundamentación en el auto de
procesamiento dictado, sino que ha sido debidamente motivado de acuerdo con lo dispuesto en el
artículo 308 del Código Procesal Penal.
Al propio tiempo, debe desestimarse la nulidad invocada en razón de no haberse ampliado la
declaración indagatoria de la imputada para comunicarle la existencia de nueva prueba, pues al no

228
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

haberse modificado la base fáctica de la imputación, no existe disposición procesal alguna que
imponga al juez instructor la obligación de ampliarla (1).
Además, la remisión de las computadoras secuestradas a la División Apoyo Tecnológico Judicial de la
Policía Federal tuvo lugar luego de que se materializaran las diligencias de registro ordenadas (…) y
antes de que se designara a un defensor particular para desempeñarse en la asistencia de D. (…).
Incluso, cabe señalar que la aceptación del cargo por el profesional designado se produjo con
posterioridad a la realización del informe por parte de la aludida división (…).
En esas condiciones, será rechazado el planteo.
Iguales consideraciones cabe formular en torno a lo expuesto por la defensa de E. L., ya que con
independencia de que la prueba incorporada resultara dirimente, no se encuentra previsto "el traslado a
la defensa" mencionado en la audiencia oral.
Asimismo, se comparte que el ofrecimiento de un producto elaborado en circunstancias que no guardan
las normas de fabricación, control e higiene necesarias y que se publica para el tratamiento de una
enfermedad, aun cuando se ofrece como una alternativa, constituye un alto riesgo sanitario (…).
Consecuentemente, al estimarse reunidos los presupuestos del artículo 306 del Código Procesal Penal
para afirmar con el convencimiento reclamado la imputación formulada, será homologada la decisión
adoptada.
Del mismo modo, en relación con el agravio expuesto por la asistencia de E. L. acerca de la suma por
la que se mandó trabar embargo, en tanto el monto de cuarenta mil pesos ($ 40.000) se muestra
adecuado a los fines previstos en el artículo 518 del Código Procesal Penal, en atención a la multa
prevista, los posibles perjuicios causados y en consecuencia las eventuales indemnizaciones, conforme
se valoró en la instancia anterior (…).
Por ello, el Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR la decisión adoptada a fs. (…), en cuanto ha sido
materia de recurso".

C.N.Crim. y Correc., Sala VII, Cicciaro, Scotto. (Prosec. Cám.: Decarli).


c. 46.327/11, D., V. y E. L., B.
Rta.: 08/06/2015

Se citó: (1) C.F.C.P., Sala I, c. 5354, "Cavalieri, Armando", rta: 25/06/2004; C.N.Crim. y Correc., Sala
VII, c. 29.147, "Megy, Gustavo", rta: 13/06/2006 y c. 42.346/09, "Lupone, José", rta: 06/10/2014.

USO DE DOCUMENTO PÚBLICO FALSO.

Procesamiento. Imputado que exhibió en un control policial una licencia de conducir apócrifa. Agravio
de la defensa: Atipicidad. Documento no idóneo para inducir a error a sujetos capacitados
especialmente para detectar la validez o invalidez. Revocación. Sobreseimiento. Disidencia: Afectación
al bien jurídico fe pública. Pericia que determinó que se intentó imitar un documento verdadero.
Confirmación.

Fallo. "(...) concesión del recurso de apelación interpuesto por la defensa de L. C. T. a (fs. ...), contra la
resolución de (fs. ...), a través de la cual se dispuso su procesamiento por ser considerado autor
penalmente responsable del delito de uso de instrumento público falsificado (art. 296 en función del
art. 292 del CP y 306 del CPPN).
(...). Conforme surge del auto recurrido obrante a (fs. ...): "Se le imputa al causante, el tener en su
poder un registro habilitante para conducir vehículos, identificado con el N° (...), instrumento que
ilustra haber sido expedido a nombre del imputado, por las autoridades de la Municipalidad de Vicente
López, (...), siendo aproximadamente las 21:00hs, cuando el Cabo Martín Sotelo, numerario (...), se
encontraba realizando un control vehicular en la Av. San Martín 7064, de esta Ciudad, detuvo la
marcha de un automóvil particular marca Chevrolet, modelo Corsa, dominio (...), el cual era conducido
por L. T., quien presentó un carnet de conducir, con número de control interno N° (...), (...). Que
posteriormente se logró establecer que el instrumento en crisis resultó ser apócrifo, y que fue obtenido
mediante un sistema de impresión de inyección de tinta." El juez Luis María Bunge Campos dijo (...),
considero que asiste razón al recurrente, debiéndose revocar el auto recurrido y en consecuencia
disponer el sobreseimiento a favor de L. C. T. (art. 336, inc. 3° del CPPN).
Ello es así pues, coincido con la defensa en cuanto a la falta de idoneidad del documento que fuera
secuestrado al encausado para burlar la fe pública (art. 292 del Código Penal). En ese sentido, tal como
lo sostuve en la causa n° (...), caratulada "(...), cierto es que el instrumento aludido se encuentra en
poder de su titular y es exhibido generalmente a las fuerzas de seguridad para los controles de rutina
que se efectúan en la vía pública. De esta manera, es dable afirmar que no son documentos que puedan
ser solicitados por cualquier sujeto, sino que son requeridos y exhibidos a sujetos idóneos, capacitados
especialmente para detectar la validez o no de éstos, tales como son los efectivos policiales que
intervinieron en el caso a estudio. Consecuentemente, considero que el estándar de medición de la
idoneidad de la adulteración, en este caso concreto, debe elevarse a las calidades especiales que reúnen
los sujetos frente a quienes son usados los documentos. (...). Así las cosas, entiendo que se está en
presencia de una adulteración grosera, con lo cual el documento cuestionado no reunía las
características básicas como para llevar a error y causar engaño a quien lo observara, razón por la cual
la conducta endilgada al encausado no tuvo capacidad de lesionar, siquiera potencialmente, al bien

229
jurídico que tutela el tipo penal de falsificación de documento (art. 292, CP). En consecuencia, voto
por revocar la decisión recurrida, debiéndose desvincular definitivamente a L. C. T. del proceso por
aplicación del inciso 3° del artículo 336, e in fine del CPPN.
El juez Jorge Luis Rimondi dijo En primer lugar, debo señalar que discrepo con la solución que
propone mi distinguido colega. En ese sentido, contrariamente a lo expuesto por la defensa en la
audiencia, quien basó su argumentación en torno al presupuesto de atipicidad, sostengo que en las
presentes actuaciones existe una afectación al bien jurídico fe pública, habida cuenta que no considero
que el documento secuestrado no haya sido idóneo para ello. Al respecto, se debe tener principalmente
en cuenta las conclusiones del peritaje realizado por la División Scopometría de la P.F.A. a fs. 24/25.
En efecto, allí se describieron las irregularidades que presentaba a la luz de mecanismos específicos
como "(…), (…)", circunstancia que aporta sustento a la idoneidad de la documentación cuestionada,
pues fue evidente que se intentó imitar rasgos de seguridad propios de este tipo de instrumentos. (...).
Por todo lo expuesto precedentemente, estimo que se ha reunido el marco de probabilidad que requiere
el art. 306 del CPPN, por lo que corresponde homologar el auto de mérito atacado.
La jueza Mirta López González dijo No habiendo arribado a una decisión unánime mis colegas
preopinantes, luego de tomar vista de las actas escritas y oído el registro de audio de la audiencia
celebrada, adhiero en lo sustancial a las consideraciones expuestas por el juez Luis María Bunge
Campos, por lo que voto por revocar el auto en crisis. Así voto. En mérito del acuerdo que antecede, el
tribunal RESUELVE: REVOCAR la resolución de (fs. ...) y DISPONER el SOBRESEIMIENTO de L.
C. T. de las condiciones personales obrantes en autos- en orden al hecho por el que fuera indagado,
dejándose constancia de que la formación del presente sumario no afecta el buen nombre y honor del
que hubiera gozado (arts. 455 a contrario sensu y 336, inc. 3º del CPPN). (...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala I, Bunge Campos, Rimondi (en disidencia), López González. (Prosec.
Cám.: Souto)
c. 46491/14, TEDESCO, Luis César.
Rta.: 09/02/2015

USURPACIÓN.

Sobreseimiento. Resolución inválida por no ser el resultado de una derivación razonada de la prueba.
Hechos que involucrarían una situación de violencia de género a través del ejercicio de violencia
económica. Nulidad.

Fallo: "(…) II. La decisión recurrida no resulta derivación razonada de la prueba obrante en autos, ni
de su análisis bajo las reglas de la sana crítica racional.
El juez obvió considerar integralmente los hechos traídos a consideración y sus circunstancias. Así,
bajo una óptica sesgada, los escindió y dispuso su investigación en diferentes sedes judiciales, a partir
de lo cual la esencia de lo denunciado quedó vacía de contenido.
Durante la audiencia, la apoderada de la querellante describió una situación de violencia de género,
protagonizada por el imputado -principalmente- a través del ejercicio de violencia económica. Explicó
que, durante el matrimonio, medió una consensuada explotación comercial común del garage que
funcionaba en un inmueble propio de V.A.I. s (ver fs. 26/31), Sin embargo, señaló que, a partir de la
separación, el encausado fue desarrollando una serie de maniobras que, a la postre, tuvieron como
resultado que la nombrada terminara excluida del libre acceso al lugar, que se le obstaculizara el
control de las cuentas del negocio, que no percibiera el 50% de las ganancias acordadas
contractualmente -con directa incidencia negativa en su manutención personal- (ver fs…). Así también,
que no pudiera recuperar el bien inmueble, pese a que por carta documento comunicó la rescisión del
mencionado Convenio (…) denunció situaciones de impedimento de acceso al lugar bajo gritos y
forcejeos, la desaparición del sistema de cámaras que le permitía controlar desde su casa el movimiento
comercial, la presunta falsificación de su firma en un formulario de la AFIP a través de la cual el
encausado habría arbitrado la inscripción a su nombre de la caja registradora respectiva, la obturación
del acceso a los registros de ingresos y egresos de la explotación, y la falta de cumplimiento en los
pagos mensuales de las ganancias.
(…) todos estos aspectos deberán ser investigados y que ello deberá tramitar en un único legajo. Recién
a partir de las situaciones que se verifiquen, se estará en condiciones resolver sustancialmente sobre los
hechos denunciados y evaluar su eventual ilicitud.
(…) la decisión tomada ostenta una fundamentación aparente que la priva de su valor como acto
jurisdiccional válido, por lo que decretaremos su nulidad (artículo 123 del CPPN).
(…) el tribunal RESUELVE: Decretar la nulidad del auto de fs. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, López González, Pinto. (Sec.: Herrera).


c. 38.416/14, M., S.D.
Rta.: 29/06/2015

230
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

VIOLENCIA DE GÉNERO.

Violencia doméstica. Privación ilegal de la libertad agravada en concurso ideal con el de lesiones leves.
Procesamiento. Hijo impide que su madre salga de su vivienda durante varios meses y la golpea.
Informe elaborado por la Oficina de Violencia Doméstica que calificó la situación como de Alto riesgo
sugiriendo la expulsión del hijo de la vivienda. Elementos para agravar la situación procesal.
Confirmación.

Fallo: "(…) II.- (…) denunció que su hijo, (…) le impidió egresar de la vivienda que compartían
ubicada en (…) durante los períodos comprendidos entre el mes de (…) y el (…) y entre el (…) y hasta
al menos el (…). Para ello, el encartado escondía las llaves de ingreso del domicilio en donde vivía con
la damnificada. Asimismo relató que diariamente le propinó patadas, cachetazos y empujones y,
concretamente, que el (…), mientras se encontraba en el patio, tras referirle "Loca de la cabeza", le
propinó alrededor de siete cachetazos en ambas mejillas, lo que provocó que cayera al suelo,
oportunidad en la cual le manifestó que la mataría. Agregó que a las (…) hs. aproximadamente de ese
mismo día, el imputado nuevamente escondió las llaves del inmueble, dejando a (…) encerrada y
alrededor de las (…) hs., tras encontrarlas, logró escapar de la vivienda. (…).
III.- Contamos con el informe médico de fs. (…) del que surge que la víctima presentaba el (…) una
extensa lesión eritematosa, de color celeste rosado, de bordes amarillentos y límites difusos, situada
sobre el maxilar superior y la mejilla derecha, siendo su mecanismo de producción golpe con objeto
duro, de superficie lisa y bordes romos de 24 a 48 horas de evolución.
La Oficina de Violencia Doméstica dependiente de la Corte Suprema de Justicia de la Nación calificó
la situación de ALTO riesgo y evaluó necesario evitar la convivencia y contacto entre la denunciante y
su hijo, aconsejando que éste se retirara de la vivienda (…).
De la evaluación psicológica desarrollada a (…) surge que "(…) se mostró orientada en tiempo y
espacio, con conciencia situacional (…) la atención y concentración se observan disminuidas. No se
detectaron indicadores de fabulación, ni propensión a la descarga imaginativa (…). Se observó un
incremento de la ansiedad paranoide, vivenciando el entorno como hostil". Si bien se asentó que su
discurso resultaba reiterativo y confuso, lo cierto es que surge que manifestó preocupación y temor por
los malos tratos padecidos y "un incremento de la ansiedad paranoide vivenciando el entorno como
hostil" (…).
(…), quien tomó contacto con la víctima el día (…), sostuvo que le llamó la atención que estaba
desabrigada y tenía una bolsa con sus documentos personales. Agregó que (…) le contó que el hijo le
había pegado, lo que motivó que diera aviso a la policía pese a su resistencia (…).
Por su parte, (…) corroboró que su hermano, con el cual no tenía trato por ser muy agresivo, había
privado de la libertad a su madre por tres meses, sacándole la batería del celular y no dejándola
comunicarse con nadie y que el día enunciado la golpeó en el pómulo derecho (…).
El Dr. (…), psiquiatra del Hospital (…), manifestó que atendía a la damnificada desde el año 1999 por
un trastorno de ansiedad reactivo a sus circunstancias sociofamiliares. Indicó que el marido la agredía
físicamente y que cuando éste falleció conoció a su hijo quien se presentó de una manera agresiva y
prepotente en su tono de voz y en sus gestos, que le solicitaba recetas para su madre en cantidades que
excedían su consumo así que limitó su extensión. Tras la última entrevista que tuvo con su madre se lo
encontró afuera del Hospital y al negarse a hacerle recetas lo escupió y el amigo con quien estaba le
dijo "acá en el hospital no, mejor lo agarramos en otro lado" (…).
Lo expuesto, valorado en su conjunto, acredita en los términos del artículo 306 del ritual la
materialidad del hecho y la responsabilidad de (…), pues lo denunciado por (…) encuentra correlato en
los testimonios de (…), (…) y de (…) y el informe médico descripto.
Todo permite avanzar en el proceso a la eventual próxima etapa en la cual se debatirán con mayor
amplitud los argumentos esgrimidos por la defensa los que no conmueven el decisorio apelado.
En consecuencia, el Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR los puntos I del decisorio de fs. (…) en
cuanto ha sido materia de recurso.
(…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini, Filozof. (Sec.: Williams).


c. 36082/12, C., S. O.
Rta.: 10/02/2015

VIOLENCIA DE GÉNERO.

Violencia domestica. Lesiones graves agravadas. Amenazas coactivas. Procesamiento. Imputado que
habría amenazado de muerte, tomado del cabello y propinado golpes de puño y patadas a su madre.
Informe médico practicado, el cual da cuenta de la existencia de lesiones compatibles con la mecánica
del suceso denunciado. Elementos de prueba suficientes. Confirmación.

Fallo. "(…) apelación interpuesto por la defensa oficial de R. A. Z. S. contra el auto de (fs. …) por
cuanto allí se decretó el procesamiento del nombrado en orden al delito de lesiones graves agravadas.
Se le reprocha a R. A. Z. S. haber proferido frases de contenido amenazante y lesionado a su madre, M.
I. S. R. (…), mientras la denunciante se encontraba en el domicilio de su ex marido, sito en P. XX piso

231
X depto. X. de esta ciudad, el imputado la habría tomado del cabello y propinado golpes de puño y
patadas, provocándole lesiones de carácter leve, como así también la habría amenazado diciéndole: "te
voy a matar, ándate que no es tu casa y te voy a matar". (…). (…) informe médico que se le practicara -
obrante a (fs. …)-, el cual da cuenta de la existencia de lesiones compatibles con la mecánica del
suceso denunciado. Ello, a su vez, descarta la versión exculpatoria del imputado en torno a la causa por
la cual se habrían producido.
Por lo demás, S. R. se mantuvo en sus dichos tanto en sede policial como en la Oficina de Violencia
Doméstica de la CSJN, no evidenciándose en su relato elementos que permitan descalificarlo. (…), es
que entendemos que existen elementos en la causa para agravar la situación procesal del imputado y
permitir el avance del sumario hacia etapas ulteriores, donde de arribar se decidirá si el caso merece o
no ser llevado a juicio.
Por todo lo expuesto, el tribunal RESUELVE: CONFIRMAR la decisión obrante a (fs. …) en cuanto
fuera materia de recurso, art. 455 del CPPN. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala I, López González. Pociello Argerich. (Sec.: Biuso).


c. 41392/14, Z. S., R. A.
Rta.: 12/03/2015

VIOLENCIA DE GÉNERO.

Violencia doméstica. Amenazas agravadas por su comisión con armas, en concurso real con lesiones
agravadas. Procesamiento. Situación de violencia familiar. Testimonios suficientes para agravar la
situación personal del imputado. Informe que refiere que la damnificada se encuentra en una situación
de "altísimo riesgo". Necesidad de tener en cuenta las pautas establecidas por las leyes 26.485
(Protección Integral de las Mujeres) y 25.417 (Protección contra la Violencia Familiar) y, la
Convención de Belem do Pará (Convención Interamericana para prevenir, sancionar y erradicar la
violencia contra la mujer). Confirmación.

Fallo: "(…) Contrariamente a lo pretendido por el recurrente, debe homologarse el procesamiento


decretado en la anterior instancia, en tanto se cuenta en autos con la firme imputación de la
damnificada A. T. A. (fs. …), quien describió las circunstancias de tiempo, modo y lugar en que se
desarrolló el episodio que la afectara, al igual que a su hijo menor de edad J. A., el pasado 26 de marzo,
en el inmueble sito en la casa x, manzana x de la Villa x-x de esta ciudad.
Dicha versión encuentra correlato en los informes médicos adunados al sumario. Así, respecto de la
mujer, se constató en la "Región parietal izquierda, lesión contusa de tipo chichón, de una dimensión
aproximada de 1,5 cm de diámetro y que reconoce como mecanismo de producción el choque o golpe
contra un elemento duro romo sobre la superficie del cuero cabelludo (…) Cara interna de muñeca
izquierda, lesión contuso cortante de una dimisión aproximada de 5 cm de longitud y que reconoce
como mecanismo de producción la presión y deslizamiento de un cuerpo dotado de filo sobre la
superficie de la piel (…) Dorso de mano izquierda, lesión contusa de tipo hematoma de una dimensión
aproximada de 3 cm de diámetro y que reconoce como mecanismo de producción el choque o golpe
con o contra un objeto duro y romo sobre la superficie de la piel". Por otra parte, en torno a J.
se dejó asentado que "se observa en la base del pulgar izquierdo una lesión cortante de una dimensión
aproximada de 7 cm de longitud con 7 puntos de sutura que fueron realizados en la guardia del
Hospital Penna. Dicha lesión reconoce como mecanismo de producción la presión y deslizamiento de
un cuerpo dotado de filo sobre la superficie de la piel, de color rojizo negruzco" (informes y vistas
fotográficas de fs. …).
No puede dejar de ponderarse que la relación conflictiva con el encausado data desde antiguo, pues ya
en 2009 la víctima realizó dos denuncias por hechos de violencia cometida contra su persona (ver fs.
…) y además el 2 de julio de 2012, el prevenido fue condenado por el Tribunal Oral en lo Criminal n°
22 a la pena de tres años de prisión por sucesos delictivos de similares características al ahora
investigado, que también la tuvieron como sujeto pasivo. Tales extremos, sin que deban tomarse como
reforzando una imputación de un "delito de autor", complementan los demás elementos de valoración
anterior (1).
A todo ello se aduna el informe incorporado a (fs. …), que califica la situación en que se encuentran la
denunciante y sus hijos menores de edad como de "altísimo riesgo", derivada de la violencia que
padecen en el entorno familiar. En lo que atañe al cuestionamiento que sobre dicho informe efectúa la
defensa cabe mencionar que, si bien es cierto que se basa esencialmente en los dichos de A. T. A., la
estimación del grado de riesgo que la pudiera afectar, se trata de una conclusión formulada por un
cuerpo interdisciplinario creado al efecto para evaluar precisamente dichos aspectos, por lo que no
debe ser desestimada como otra prueba indiciaria.
Todo lo expuesto, otorga fuerza de convicción a los dichos de A. y habilita, en principio, a tener
también por corroboradas las amenazas denunciadas. Sobre el punto, la Cámara Federal de Casación
Penal ha sostenido que las amenazas vertidas en un contexto de tales características constituyen hechos
de violencia contra la mujer, por lo que deviene aplicable la Convención Interamericana para Prevenir,
Sancionar y Erradicar la Violencia contra la Mujer -Convención Belém do Pará- (2).
También cabe destacar que el artículo 16 de la Ley 26.485 de Protección Integral a las Mujeres en su
inciso i) dispone que "los organismos del Estado deberán garantizar a las mujeres, en cualquier

232
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

procedimiento judicial o administrativo, además de todos los derechos reconocidos en la Constitución


Nacional, los Tratados Internacionales de Derechos Humanos ratificados por la Nación Argentina, la
presente ley y las leyes que en consecuencia se dicten, los siguientes derechos y garantías: A la
amplitud probatoria para acreditar los hechos denunciados, teniendo en cuenta las circunstancias
especiales en las que se desarrollan los actos de violencia y quienes son sus naturales testigos" (3).
En este contexto y sin perjuicio de que se escuche al menor J. A. en los términos del artículo 250 bis
del código adjetivo, el tribunal RESUELVE: Confirmar el auto de (fs. …) en todo cuanto fuera materia
de recurso. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala IV, Seijas, González Palazzo, González. (Prosec. Cám.: Pereyra).
c. 17.425/15, C., J.
Rta.: 14/05/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correc., Sala IV, c. 72.290/13 "C.", rta. 7/5/15. (2) Sala II, c. 16.379 "V.", rta.
16/4/13, voto del Dr. Alejandro W. Slokar. (3) C.N.Crim. y Correc., Sala IV, c.
25.926/14 "A.", rta. 20/8/14 y c. 11.225/14 "H.", rta. 5/ 11/14.

VIOLENCIA DE GÉNERO.

Violencia doméstica. Procesamiento por abuso sexual y coacción. Aplicación de las pautas establecidas
en el artículo 16 de la ley n° 26485 de Protección integral a las mujeres y de los compromisos
internacionales asumidos. Informe emitido por la O.V.D. que refiere que la damnificada se encuentra
en situación de riesgo alto. Elementos de prueba suficientes para confirmar el procesamiento.
Confirmación.

Fallo: "(…) El relato ofrecido por D. A. Q. ante la Oficina de Violencia Doméstica de la Corte
Suprema de Justicia de la Nación a (fs. …) y ante la fiscalía a (fs. …), sustenta en principio la
imputación que se le dirige a A. J. J., pues la denunciante fue coincidente en sus tres declaraciones al
referirse a las circunstancias en que el imputado la habría coaccionado, amenazado y abusado
sexualmente.
En orden a la ausencia de testigos de los sucesos denunciados por la que se agravia la defensa, debe
valorarse particularmente que dadas las características de intimidad para llevar a cabo este tipo de
hechos, en general se presenta la situación criticada. En esta línea, el artículo 16 de la Ley N° 26.485
de Protección Integral a las Mujeres, en su inciso i), dispone que los organismos del Estado deberán
garantizar a las mujeres, en cualquier procedimiento judicial o administrativo, además de todos los
derechos reconocidos en la Constitución Nacional, los Tratados Internacionales de Derechos Humanos
ratificados por la Nación Argentina, dicha ley y las leyes que en consecuencia se dicten, la amplitud
probatoria para acreditar los delitos denunciados, teniendo en cuenta las circunstancias especiales en
las que se desarrollan los actos de violencia y quienes son sus naturales testigos. En tal sentido, es
dable destacar las conclusiones del informe psicológico de (fs. …), las que señalan que el relato de Q.
aparece como verosímil y que la nombrada no tiene una personalidad fabuladora. Allí se alude a
situaciones compatibles con abuso, al resaltar la inferencia de indicadores de trauma psíquico, que no
pueden ser soslayadas por la Sala.
También se debe subrayar que el relato de la damnificada no luce tendiente a perjudicar injustamente al
encartado. Al respecto, es ilustrativo el testimonio de (fs. …) en el que indicó que J. no conocía la
restricción de acercamiento dispuesta por la justicia y que no volvió a tener conflictos con el
nombrado.
Se suma al análisis la corroboración parcial de la versión incriminante a través del informe de la
empresa "M.", que acredita la materialidad de las llamadas efectuadas por el prevenido. Asimismo,
sustenta la hipótesis de cargo el informe interdisciplinario de (fs. …), que revela una situación de alto
riesgo para la víctima.
Por todo lo expuesto, habida cuenta que se ha conformado un juicio de probabilidad suficiente en los
términos del artículo 306 del catálogo procesal en relación a los sucesos que se le achacan al imputado,
procede avalar el auto puesto en crisis a los efectos de que la causa avance hacia la etapa de debate en
la que, con auxilio de los principios de oralidad, concentración e inmediación inherentes a aquélla,
podrá arribarse a una decisión definitiva sobre el asunto.
En consecuencia, el tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el auto de (fs. …).

C.N.Crim. y Correc., Sala IV, González Palazzo, González. (Sec.: Morillo Guglielmi).
c. 42.850/14, J., A. J.
Rta.: 26/06/2015

VIOLENCIA DE GÉNERO.

Violencia doméstica. Lesiones dolosas leves agravadas por el vínculo. Procesamiento. Derecho de
corrección de los padres sobre sus hijos menores contemplado en el art.278 del Código Civil que ha
sido ejercido en forma desproporcionada provocando daños en el cuerpo o en la salud. Confirmación.

233
Fallo: "(…) En cuanto al fondo del asunto habrá de confirmarse el temperamento adoptado.
(…) tomó conocimiento de lo sucedido a través de su hija (…) e inmediatamente formuló la denuncia
ante las autoridades pertinentes (…).
(…), en la entrevista prestada en los términos del art.250 bis del código de rito contó que su papá la
despertó con un golpe en la cabeza al tomar conocimiento que, a escondidas, había abierto una cuenta
de Facebook. Señaló: "Me quiso quemar las manos (…) me acercó las manos al fuego y me siguió
pegando (…) era de madrugada" (sic). La niña hizo hincapié en que siempre la agredía físicamente
"por cualquier cosa que yo hacía (…) antes me pegaba con un cinto, una vez me pegó con un palo, en
el 2012" (…).
Los argumentos de la defensa tendientes a cuestionar la verosimilitud de su testimonio no pueden ser
admitidos. Se pondera que la Licenciada (…) del Cuerpo Médico Forense aseguró que su relato tenía
estructura coherente y buena adecuación contextual, respecto a tiempo y espacio, describiendo
interacciones y conversaciones con el imputado de manera espontánea. Concluyó que su exposición era
verosímil (…).
Su hermana menor, (…), ratificó la imputación al expedirse en similares términos respecto de
situaciones de maltrato físico, tanto en relación a (…) como hacia ella (...). En este sentido la niña
refirió: "yo estaba durmiendo, escuché gritos, y en la cocina estaba mi papá pegándole a mi hermana
(…) me pegó a mí también (…) me pegó con el cinto, en la espalda, en las piernas (…)".
Las lesiones que padeció (…) están acreditadas a través de los informes de fs. (…), que se condicen
con la mecánica del suceso denunciado.
La prueba reseñada es suficiente para acreditar la materialidad del evento, como así también la
intervención de (…) en él y las manifestaciones de las menores cobran mayor relevancia dado que las
especialistas le asignaron verosimilitud.
El imputado no adoptó un comportamiento que se adecue a los límites justos, necesarios y razonables
del derecho de corrección de los padres sobre sus hijos menores ya que esta facultad, contemplada en
el art.278 del Código Civil, debe ser ejercida con moderación, quedando excluidos los malos tratos o
castigos que provoquen un daño en el cuerpo o en la salud y se adviertan como desproporcionados (1).
(…), el Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el punto I del auto de fs.
(…) en todo cuanto fuera materia de recurso. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini, Filozof. (Sec.: Oberlander).


c. 60.938/13, O., M. A.
Rta.: 09/02/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correcc., Sala VI, c. 78039782/2012, "Oviedo, Eduvigis s/procesamiento",
rta.: 24/4/2014.

VIOLENCIA DE GÉNERO.

Violencia doméstica. Procesamiento por lesiones leves (tres hechos), amenazas (dos hechos) y
desobediencia (dos hechos) y sobreseimiento por hurto y sustracción de menores. Agravio de la
defensa: Violación al principio ne bis inidem por tratarse de un único hecho con multiplicidad de
conductas. Rechazo. No superposición de conductas de acuerdo a los tipos penales imputados.
Desobediencia: Atipicidad. Imputado que no fue notificado de la prórroga de la orden de prohibición
de acercamiento. Confirmación parcial. Procesamiento por lesiones y amenazas.

Fallo: "(…) II. A efectos de examinar los planteos introducidos conviene recordar cuáles han sido los
distintos hechos por los que B. ha sido indagado.
II. a) Hecho I (causa n° 26.458/12) Según la imputación formulada en la causa, el hecho "I" habría
ocurrido el 16 de julio de 2012, alrededor de las 3.30, cuando B. llegó al domicilio que compartía con
P.C. y comenzó una discusión, durante la cual tomó del cuello a la nombrada, la arrinconó contra la
pared, le dobló los brazos y la arrojó al suelo. (…) (…) la víctima advirtió que le faltaban trescientos
pesos en su billetera y presumió que había sido el imputado quien los había sustraído.
Finalmente, C. denunció que el imputado le expresó, en alusión al hijo en común, "…si vos me lo
quitas, yo te mato…".
Respecto de este hecho, se decretó el procesamiento de B. por lesiones leves y amenazas (punto I de la
resolución de fs. ..) y se lo sobreseyó en orden a los hechos que se calificaran como hurto y sustracción
de un menor (ídem, punto III).
II. b) Hecho II (causa n° 50.069/2012) En cuanto al hecho identificado como "II", habría ocurrido el 7
de noviembre de 2012, en horas de la mañana, ocasión en la que el imputado, pese a que existía una
prohibición de acercamiento, concurrió al domicilio de la denunciante, quien se hallaba sobre la
vereda, la insultó, le arrebató al menor L. de los brazos y, a su vez, le propinó un puntapié en la rodilla
izquierda, para finalmente tomarla del brazo y referirle "…te voy a matar…".
En relación con estos episodios, se decretó el procesamiento de B. por lesiones leves, amenazas y
desobediencia (punto I de la resolución de fs…) y se lo sobreseyó en orden al hecho que se calificó
como sustracción de un menor (ídem, punto III).
II. c) Hecho III (causa n° 210/2013) Por último, el hecho "III" habría ocurrido el 24 de noviembre de
2012, oportunidad en la que B., violando la prohibición de acercamiento que recaía sobre él, ingresó al

234
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

domicilio de C., en estado de ebriedad, para exigirle que mantenga relaciones sexuales con él. Ante la
negativa de la víctima, el imputado la sujetó del cabello y le arrojó un vaso de agua. A su vez, en un
descuido por parte del agresor, la damnificada pudo comunicarse con la línea 137 y dar aviso de lo que
estaba sucediendo. No obstante, a su regreso, B.
la golpeó en varias oportunidades con una zapatilla en la espalda y los brazos, hasta que finalmente se
hizo presente el personal policial. Sin embargo, pese a ello el acusado le pegó una cachetada a la
víctima, por lo que fue detenido en ese instante.
En torno a este suceso, B. fue procesado por lesiones leves y desobediencia (punto I de la resolución de
fs. …).
III. La afectación al principio ne bis in idem que la defensa ha predicado, en relación con los
denominados hechos "I" y "II", no puede ser admitida.
En efecto, la circunstancia de que, en relación con el hecho "I", la atribuida sustracción del menor y el
supuesto apoderamiento de dinero hubiesen acaecido en el mismo lugar en el que se concretó la
agresión física y verbal contra la denunciante e inmediatamente después de que ella fuera golpeada, no
basta para aseverar que dichas conductas conformaron un hecho único desde la perspectiva jurídico
penal.
En tal sentido, pese a la apuntada coincidencia en el tiempo y el espacio, este dato resulta insuficiente
para predicar que las distintas acciones deberían ser consideradas solamente como un hecho con
pluralidad típica (CP, art. 54), pues para ello, como bien lo apuntara la fiscalía en el marco de la
audiencia oral, se requiere la concurrencia del llamado "factor jurídico" o "factor normativo".
Así, la doctrina ha afirmado que cuando, como en este caso, media "una pluralidad de movimientos …
es necesario apelar a un factor normativo que diga cuándo una única resolución que da un sentido final
a varios movimientos puede ser relevada como una unidad por el tipo" (1).
En este sentido, se ha entendido que en los supuestos de concurso ideal "los tipos que convergen
presentan una especial conexión -a partir de ciertos elementos comunes- que hace que funcionen como
círculos secantes" (2).
Al respecto, no se advierte que los arts. 146 y 162 del C.P. contemplen circunstancias que den lugar a
una superposición entre las conductas que podrían haberse encuadrado en esas figuras -llevarse al niño;
apoderarse del dinero- y aquellas que se consideraron constitutivas de los delitos previstos en los arts.
89 y 149 bis del mismo ordenamiento -golpear y lesionar a la denunciante; proferirle amenazas-.
Y puesto que el denominado hecho "II" también se habría llevado a cabo mediante una pluralidad de
movimientos, idénticas consideraciones pueden formularse para descartar la alegada unidad entre la
sustracción del menor y la agresión física y verbal concretada contra la denunciante, pues el imputado
habría -primero- arrebatado al niño y "finalmente" golpeado a ésta, luego de lo cual le habría dicho "te
voy a matar" (ver fs…).
En conclusión, en torno de los hechos I y II, se estima -por un lado- que el sobreseimiento dictado
refiere a conductas diferentes de las que han sido encuadradas en los artículos 89 y 149 bis, primer
párrafo, del Código Penal, y -por el otro- que aunque hubieran respondido a un propósito único, los
tipos legales que, a todo evento, podrían aplicarse a las primeras, no ofrecen aspectos que se
superpongan con las figuras de lesiones y amenazas.
IV. Respecto del pedido de prescripción de la acción penal que se introdujo en el marco de la audiencia
oral en torno del hecho "I", atendiendo a que el ministerio público fiscal señaló que no es posible
descartar el eventual encuadre de ese episodio en la figura que tipifica el delito de coacciones, la Sala
entiende que, en su caso, la parte deberá plantear dicha cuestión por la correspondiente vía incidental.
V. En relación con la atribución del delito de desobediencia que se efectuara en orden a los hechos "II"
y "III", la Sala advierte que, tal como sostuvo la recurrente -con la conformidad, en la audiencia, de la
fiscalía-, el imputado B. no se encontraba fehacientemente notificado de la prórroga de la prohibición
de acercamiento al domicilio de Campos que dictara el Juzgado Nacional de Primera Instancia en lo
Civil nro. 8 (fs. …).
Consecuentemente, se estima que ese delito no se ha configurado, pues para ello resulta menester que
la orden de la autoridad competente sea efectivamente conocida por su destinatario.
Sin perjuicio de ello, de conformidad con el reclamo que efectuó la fiscalía en el marco de la audiencia,
dado que las conductas que han sido consideradas como actos de desobediencia sí exhiben coindencia
con las que se encuadraron como lesiones leves (hechos "II" y "III") y amenazas (sólo respecto del
hecho "II"), no procede el dictado de un temperamento desincriminatorio, a efectos de no incurrir en la
denominada "absolución de calificaciones", y solo corresponde modificar la calificación con estos
alcances.
VI. Finalmente, en relación con el hecho "III", los elementos probatorios incorporados conducen a
confirmar la resolución apelada, en cuanto decretó el procesamiento de B. por el delito de lesiones
leves.
(…) los dichos de la damnificada (fs…) aparecen, al menos parcialmente, avalados por la declaración
del Subinspector L.F., quien manifestó haber escuchado una discusión y luego un llanto procedente de
la denunciante, quien le refirió haber sido golpeada y presentaba un corte en el labio inferior (ver fs…).
(…) el tribunal RESUELVE: I. CONFIRMAR el punto I del auto documentado a fs. (…). en cuanto
dispuso el procesamiento de S.V.B. por los hechos "I" (…), "II" (…)y "III" (…), con la aclaración de
que los hechos "II" y "III" se califican como lesiones leves.
II. DISPONER que el juzgado de origen examine el planteo de prescripción introducido por la defensa
en la audiencia oral".

235
C.N.Crim. y Correc., Sala V, Pinto, Divito. (Sec.: Poleri).
c. 26.458/12, B., V.S.
Rta.: 16/03/2015

VIOLENCIA DE GÉNERO.

Violencia doméstica. Lesiones graves agravadas por el vínculo. Procesamiento. Conducta de la


imputada que excede el derecho de corrección que el artículo 278 del Código Civil otorga en ejercicio
de la patria potestad. Confirmación.

Fallo: "(…) describió a fs. (…) las agresiones psicológicas y físicas que sufrió por parte de su madre
(…) desde que tuvo 10 años de edad.
Específicamente refirió que entre los años (…) y (…), cada vez que salía del colegio y le comunicaba a
su progenitora sus notas escolares, aquélla "(…) la agarraba de la mano y la mordía o pellizcaba (…)"
(textual). Agregó que a mediados del año (…) y mientras estaba en el local comercial de su familia, la
imputada la tomó de sus cabellos, golpeó su cabeza contra un cajón de bebidas y le propinó un golpe
en su estómago.
En otra oportunidad le pegó una cachetada para luego tirarle agua con el balde y arrojárselo.
Finalmente cuando (…) se enteró que le había enviado una carta a su padre biológico, la tiró en la
cama, la quiso ahorcar y la echó de la casa, además de golpearle el rostro con su puño.
La médica forense (…) concluyó a fs. (…) que el relato de la víctima "(…) presenta -valorando el
conjunto de sus manifestaciones e integrando los antecedentes- indicadores de credibilidad e
impresiona verosímil. No se observan indicadores de fabulación patológica en su relato. (…) Hay
restricción en su vida de relación" (textual).
La psicóloga (…) entendió a fs. (…) que "Al momento de la presente evaluación, [la niña] no presenta
en su procesamiento psíquico desajustes de índole psicótico ni alteraciones sensoperceptivas ni
ideación fabulatoria" (textual), evidenciándose también una clara tensión emocional y angustia
asociada a las situaciones traumáticas ocurridas en el seno familiar.
La mencionada profesional también concluyó que (…) revela "(…) un rechazo a la figura materna, la
cual no aparece en sus producciones como un vínculo significativo de su trama familiar sino más bien
asociada a situaciones traumáticas" (textual).
Este diagnóstico fue corroborado por el informe confeccionado por el Dr. (…) a fs. (…).
Este mismo profesional a fs. (…), explicó que "(…) los hechos en estudio, han producido en la menor,
una perturbación emocional, de significación mayor, por cuanto han acontecido en el ámbito familiar
primario (…)" (textual).
Completa el cuadro probatorio los testimonios de (…).
La primera de las nombradas manifestó haber presenciado varias veces como la madre de (…) la
maltrataba y le propinaba golpes mientras que (…) explicó que la damnificada pasaba el mayor tiempo
del día en el kiosco de la intersección de la avenida (…) y que cuando comenzó a darle clases de inglés
observó que hasta los nueve años era una chica desamparada por la familia.
Todos estos elementos de prueba deben valorarse armónicamente y dan cuenta que debido al constante
maltrato psicológico ejercido durante varios años por la imputada contra la menor es que aquélla
desarrolló una clara perturbación emocional.
Este tipo de trauma, si bien no deja secuelas visibles como por ejemplo un hematoma o corte en el
cuerpo de la víctima, provoca un claro daño en la salud de su destinatario que repercute en diferentes
aspectos de su vida.
La doctrina sostuvo que este daño en la salud o "El debilitamiento de la salud es el estado de
disminución de la capacidad orgánico-funcional del individuo, traducida en la pérdida de vigor o de
poder de resistencia" (1).
Ahora bien, este debilitamiento de la salud o disminución de la capacidad al que se hace referencia en
la obra citada, se evidencia en forma clara en este caso ya que los informes incorporados en el legajo
constataron una turbación emocional en la menor a raíz de constantes golpes e insultos que su madre le
propinó.
Lo dicho permite desvirtuar el descargo de (…) porque su acción provocó un resultado que excede el
derecho de corrección que el artículo 278 del Código Civil otorga en ejercicio de la patria potestad (2)
La inconducta de los hijos no puede habilitar a los padres a provocarle lesiones, independientemente de
cuál sea la conflictiva familiar.
(…), el Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el punto I del auto de fs. (…), en cuanto fuera materia de
recurso de apelación. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini, Filozof. (Sec.: Carande).


c. 38.601/11/0, M. J. N.
Rta.: 25/02/2015

Se citó: (1) D'Alessio - Divito "Código Penal de la Nación. Comentado y Anotado". Tomo II, La Ley,
2da. Edición actualizada y ampliada, Buenos Aires, 2009, pág. 82; (2) C.N.Crim. y Correcc., Sala VI,
c. 78039782, "Oviedo, Eduvigis", rta.: 24/04/14.

236
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

VIOLENCIA DE GÉNERO.

Lesiones leves dolosas agravadas por haber sido cometidas contra una mujer. Procesamiento. Lesiones
producidas en el marco de un altercado por una supuesta deficiente atención de un paciente en un
control de salud. Elementos de prueba suficiente para confirmar el procesamiento. Necesidad de tratar
la calificación legal asignada al hecho en virtud de que, ante un eventual pedido de suspensión de
juicio a prueba, el beneficio podría ser denegado por aplicación de la doctrina de la C.S.J.N. Violencia
de género: concepto. Caso en el que la violencia no está motivada en la condición femenina de la
damnificada. Confirmación parcial. Lesiones.

Fallo. "(...) contra el punto I del resolutorio obrante a (fs. ...), mediante el cual el juez Carlos Manuel
Bruniard dispuso su procesamiento en orden al delito de lesiones leves dolosas agravadas por haber
sido cometidas contra una mujer mediando violencia de género (arts. 89, 92 y 80 inc. 11 del CP; y 306
del CPPN). (...).
En efecto, entendemos que la hipótesis delictiva y de responsabilidad que describe el auto de mérito
encuentra sustento en las pruebas que el magistrado mencionó y en su análisis bajo la sana crítica
racional. En definitiva, si bien la defensa cuestiona la veracidad de los dichos de la denunciante, lo
cierto es que los fundamentos en que sustenta tal tesitura no resultan atendibles. Ello así, pues, su relato
se ve corroborado por los dichos de la testigo A. S. (fs. ...), L. R. -personal de seguridad- (cfr. fs. ...), y
los informes médicos de (fs. ...). (...), la defensa expresó agravios por la agravante aplicada al delito de
lesiones reprochado. Si bien la primera parte del art. 401, CPPN, fija a la sentencia como el momento
procesal para establecer la subsunción legal que mejor derecho tiene de ser aplicada al caso,
consideramos que tenemos que pronunciarnos en este caso sobre el particular. Ello, teniendo en cuenta
la doctrina que surge del fallo "(...)" de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, en cuanto a la
imposibilidad de conceder la suspensión de juicio a prueba en asuntos en los que medie la vulneración
al bien jurídico protegido por las leyes n° 24.417 (Protección contra la Violencia Familiar") y 26.485
(Protección Integral de las Mujeres), y la Convención de Belém Do Pará (Convención Interamericana
para prevenir, sancionar y erradicar la violencia contra la mujer), ya que la calificación legal escogida
por el juez de grado podría cercenar así la posibilidad de obtener un cierre alternativo del asunto. En
dicha línea, coincidimos con la defensa en que no toda violencia contra una mujer constituye, per se,
violencia de género. La violencia debe estar motivada en la condición femenina de la víctima y
proceder de un hombre, circunstancias que no se encuentran presentes en autos. En efecto, el origen del
conflicto parece encontrarse en un lugar diverso al señalado, más precisamente en un altercado por una
supuesta deficiente atención de un paciente en un centro de salud. De ese modo, las circunstancias de
tiempo modo y lugar que surgen de la base fáctica nos convence a pensar que quedaría fuera de la
órbita del agravante del art. 80 inc. 11 del CP, por lo que modificaremos la calificación legal. Por todo
lo expuesto, se considera que la defensa cuestiona la credibilidad de los dichos de la damnificada y la
testigo S., sobre la base de los dichos del imputado en audiencia indagatoria (cfr. fs. ...), lo que no
alcanza para evitar el avance del proceso. Es precisamente ante este tipo de casos que corresponde
habilitar, eventualmente -ya que deberá opinar al respecto el agente fiscal interviniente en la etapa
crítica-, la instancia de juicio donde la defensa podrá alegar sobre su hipótesis del caso, pudiendo ser
debidamente dilucidado el asunto con plena vigencia de los principios de inmediatez, concentración y
contradicción. Por los motivos expuestos, el tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el punto I del
resolutorio obrante a (fs. ...) en todo cuanto fuera materia de recurso, modificando su calificación legal
por la de lesiones (art. 89, CP y 455, CPPN). (...).

C.N.Crim. y Correc., Sala I, Rimondi, López González. (Prosec. Cám.: Souto).


c. 27142/14, T., A. R.
Rta.: 26/02/2015

VIOLENCIA DE GÉNERO.

Violencia doméstica. Lesiones y amenazas coactivas. Procesamiento. Lesiones provocadas a ex pareja.


Informe del medico legista que acredita las lesiones. Relevancia de los dichos de la damnificada ante la
O.V.D. Confirmación.

Fallo. "(…) contra el punto dispositivo II de la resolución de (fs. …), a través del cual se dispuso su
procesamiento, en calidad de autor, en orden al delito previsto y reprimido por el art. 89 y 149 bis del
CP -hechos 1) y 2)- y 306, del CPPN.
Conforme surge del resolutorio impugnado se atribuye a F. L. D. los siguientes sucesos: "(…) 1: 'Haber
provocado lesiones de carácter leve a su esposa L. L. A., de quien se encuentra separado de hecho
desde hace 14 años. (…), en circunstancias en que la damnificada se dirigía a su domicilio particular
(…), cuando fue interceptada por L. D. quien la agarró provocándole golpes en ambos brazos, para
luego retirarse corriendo.
Finalmente, la damnificada refirió que no habría testigos de aquel acontecimiento y que el imputado se
encontraría en estado de ebriedad." 2:"Haber provocado lesiones de carácter leve y amenazado
verbalmente a la nombrada L. L. A. Dicho suceso tuvo lugar el día 19 de febrero de 2014,

237
aproximadamente a las 23:30 horas, en circunstancias en que la damnificada se dirigió al domicilio
particular de L. D., (…), a efectos de retirar a su hija que poseen en común, de nombre L. L., cuando el
imputado comenzó a insultarla para luego propinarle varios golpes de puño en su brazo izquierdo y
ambas muñecas. Luego de ello, debido que el imputado vio que la denunciante se retiraba con su hija,
este le refirió 'te voy a matar, te voy a hacer violar por mis amigos. Se deja constancia que, conforme
surge del informe médico de la OVD, se imputa haber provocado a la damnificada las siguientes
lesiones: (…). Oídos los agravios de la defensa en la audiencia y confrontados que fueran con las actas
escritas que tenemos a la vista, a la luz de sana crítica racional, concluimos que la decisión del Sr. juez
de grado debe ser homologada. En efecto, cobran especial relevancia los dichos de L. L. A., (…).
Dichas manifestaciones pudieron ser corroboradas a través del examen médico practicado a la
nombrada por una profesional de la Oficina de Violencia de Género (agregado a fs. …) y por el
informe médico legista obrante a (fs. …), en tanto dan cuenta de las lesiones que sufriera. (…). En
consecuencia, concluimos que se ha conformado el marco de probabilidad que requiere el art. 306 del
CPPN, (…). Por ello, el Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el punto II de la resolución de (fs. …),
en cuanto ha sido materia de recurso (art. 455, CPPN). (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala I, López González, Pociello Argerich. (Sec.: Biuso).


c. 13072/14, L. D., F.
Rta.: 12/03/2015

VIOLENCIA DE GÉNERO.

Violencia doméstica. Lesiones calificadas por ser la víctima ex pareja del imputado. Agravios de la
defensa: ausencia de dolo en el accionar. Imputado que adujo defenderse por la agresión recibida por el
hijo de la damnificada. Testigos presenciales que avalan la versión del imputado. Revocación.
Sobreseimiento.

Fallo. "(…) apelación interpuesto por la defensa de J. A. A. M. contra la resolución de (fs. …) en


cuanto lo procesa por considerarlo autor del delito de lesiones dolosas calificadas por tratarse de la
persona con la que mantuvo una relación de pareja (art. 92 en función del 89 que remite a las
circunstancias enumeradas en el art. 80, inc. 1°, en su actual redacción, conforme ley 26791).
Los agravios de la defensa oficial merecen ser atendidos, por lo que revocaremos la decisión apelada,
(…). De acuerdo al relato que efectuó J. R. C., el imputado habría arrojado una botella "para tirarle a
mi hijo" (C.) y ahí es "donde me cae a mi…y yo por defenderle a mi hijo, me cae a mi". Este suceso
habría ocurrido luego que mantuvieran una discusión en la puerta de la habitación que ocupan. Leída el
acta de descargo del imputado que obra a (fs. ...), se desprende que en ningún momento contradijo esa
postura; aclaró que comenzó una discusión con C., que éste le arrojó tres botellas de cervezas vacías
que no lograron impactarle, y fue en ese momento que "(…) tomó la parte de abajo de una de las
botellas y la arrojó en dirección a la puerta de ingreso a su casa donde estaba parada la damnificada C.
y detrás de ella su hijo. Aclaró que no tuvo intención de lastimarla sino solo asustar al hijo y evitar que
continúe tirando botellas (…)"; (…)"; al momento de prestar nuevamente declaración, ratificó que el
botellazo que lastimó a su mujer fue el que él arrojó (cfr. fs. ...). En ese contexto de situación,
corresponde analizar las declaraciones de los testigos L. M. V. O. (fs. 63/66) y G. D. (fs. …). Ambos,
más allá de algunas manifestaciones que se han visto desvirtuadas por las pruebas incorporadas al
legajo (en especial, la referida al estado de lucidez del imputado), han sido contestes con la versión de
descargo porque señalaron a C. como la persona que comenzara a arrojar botellas de cerveza en
dirección a la pareja de su madre. La primera testigo afirmó que (…). En cuanto a D., también (…).
Entonces, toda vez que la presencia de esa tercera persona en el lugar no ha sido controvertida por la
denunciante (ver fs. …), y que el encausado afirmó no haber tenido ningún tipo de intención de
lesionarla, sino, en todo caso, detener la agresión que recibía por parte del hijo de aquélla -secuencia
que, por otra parte, también ha sido acreditada por los dichos de los testigos- no podemos más que
concluir en la ausencia de dolo en el accionar de A. M. al arrojar el elemento contundente, más allá del
resultado lesivo acreditado en el cuerpo de J. R. C.- Debemos destacar que el suceso habría ocurrido en
un contexto confuso, y no contamos con otros datos objetivos que puedan arrojar luz sobre la pesquisa,
por lo que corresponde estar a la versión exculpatoria aportada por el imputado que sostiene la falta de
intención en su obrar. En consecuencia, de conformidad con la pretensión de la defensa, corresponde
revocar y disponer el sobreseimiento del encausado, en los términos del inciso 3°, del art. 336, CPPN,
ordenando su inmediata libertad en lo que concierne a este asunto. Así, el tribunal RESUELVE: I.
REVOCAR la resolución de (fs. …) en cuanto ha sido materia de recurso y SOBRESEER a J. A. A.
M., de las demás condiciones personales obrantes en autos, en relación al hecho por el que fue
indagado a (fs. …). II. DISPONER la INMEDIATA LIBERTAD del mencionado, en lo que respecta a
este proceso.

C.N.Crim. y Correc., Sala I, López González, Pociello Argerich. (Sec.: Biuso).


c. 8842/15, A. M., J. A.
Rta.: 17/03/2015

238
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

VIOLENCIA DE GÉNERO.

Violencia doméstica. Lesiones leves. Procesamiento. Lesiones no acreditadas. Elementos de prueba


insuficientes para agravar la situación procesal del imputado. Revocación. Sobreseimiento.

Fallo: "(…) II.- (…) manifestó que el (…), cuando estaba en la puerta de su domicilio de la avenida
(…), se desencadenó una discusión con su ex pareja y (…) la empujó provocando que cayera a la
vereda. Tras levantarse se abalanzó sobre él y cuando la tomó de los brazos, lo mordió. Finalmente,
aquél se sentó en el suelo solicitándole que lo lleve al hospital y como ella le respondió "morite ahí", se
retiró (…).
III.- Disentimos con la decisión adoptada por el magistrado de la instancia anterior toda vez que no
surgen del sumario elementos que permitan agravar la situación procesal del imputado.
Tras la anterior intervención de esta Alzada (…), no se recogieron nuevas evidencias que precisen las
lesiones que concretamente había sufrido la víctima como consecuencia del suceso, pues el Cuerpo
Médico Forense concluyó que presentaba "politraumatismos", sin mayores especificaciones.
En este sentido, se ha sostenido que "desde el punto de vista de la medicina legal, un "traumatismo" es
toda violencia ejercida sobre un organismo humano o animal", lo que no importa una lesión, ya que
esta puede producirse o no, como consecuencia de aquel (1).
Sobre esa base entendemos que al no haberse podido demostrar un daño en su cuerpo o en la salud, no
es posible concretar un reproche penal contra el indagado, por lo que corresponde poner fin a la
situación de incertidumbre que sobre él pesa.
En consecuencia, el Tribunal RESUELVE: I.- REVOCAR el auto de fs. (…) y SOBRESEER a (…)
cuyas condiciones personales obran en el decisorio citado, dejando constancia que la formación del
sumario no afecta el buen nombre y honor del que hubiere gozado con anterioridad (art. 336 inc. 3° del
Código Procesal Penal de la Nación). (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini, Filozof. (Prosec.: Gallo).


c. 101.013.539/11, L., J.
Rta.: 19/03/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correcc., Sala VII, c. 73081678/12, "A., J.P.", rta.: 28/11/13.

VIOLENCIA DE GÉNERO.

Violencia doméstica. Excarcelación rechazada. Lesiones leves agravadas por haber mantenido una
relación de pareja y mediando violencia de género, en concurso ideal con desobediencia y en concurso
real con hurto. Incumplimientos de medidas impuestas con anterioridad. Causa en trámite acumulada al
expediente. Registro de antecedentes condenatorios. Posible entorpecimiento de la investigación.
Confirmación.

Fallo. "(...). L. H. S. se encuentra procesado, con prisión preventiva, en orden al delito de lesiones leves
agravadas por haber mantenido una relación de pareja y mediando violencia de género, en concurso
ideal con desobediencia y en concurso real con hurto, resolutorio que aún no se encuentra firme (fs. ...).
Sentado ello, tal como lo valorara la magistrada, esta causa se encuentra acumulada jurídicamente a la
n° XX/14 y XX/15, en las que el pasado 20 de marzo se concedió su excarcelación con la obligación de
comparecencia periódica al tribunal y la prohibición de acercarse a L. I. C. A.; medidas que incumplió.
En este sentido, no sólo no se presentó al tribunal sino que en estos actuados se le atribuye haber
provocado lesiones a la damnificada C. A., lo que motivó que la Sra. juez de grado ordenase su
detención, materializada el 12 de mayo, a casi dos meses de haberse dispuesto ello. Esta circunstancia,
sumada a las otras causas que registra en su haber, (...), y la presunción cierta de entorpecimiento en la
investigación. (...).
Por todo lo expuesto, el tribunal RESUELVE: I. CONFIRMAR la resolución de (fs. ...) en cuanto fue
materia de recurso (art. 455, CPPN). II. DISPONER que se de cumplimiento a lo dispuesto.
(...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala I, Rimondi, Bunge Campos. (Sec.: Peluffo).


c. 27333/15, H. S., L.
Rta.: 26/05/2015

VIOLENCIA DE GÉNERO.

Violencia doméstica. Lesiones. Fiscal que solicitó la indagatoria del imputado. Actuaciones delegadas
(art. 196 del C.P.P.N.) Magistrado que rechazó la solicitud, no formó causa y dispuso su archivo. Fiscal
que apela. Imputado que golpeó a su concubina en una visita que tuviera lugar en el Complejo
Penitenciario Federal de la CABA donde se encuentra detenido. Acción que se encuentra debidamente
promovida ante las autoridades de dicho complejo penitenciario. Revocación.

239
Fallo: "(…) II.- (…) sostuvo ante las autoridades del Complejo Penitenciario Federal de la Ciudad
Autónoma de Buenos Aires el (…), que momentos antes, en la carpa de visitas su concubino, el interno
(…) "por no querer tener relaciones se puso agresivo y me pegó dos cachetazos y 3 piñas me golpeó
con la pared y me pegó con la zapatilla y golpeó a la beba también", de un mes de edad que la
acompañaba. Asimismo respondió que sí a la pregunta "si desea realizar alguna denuncia" (…).
Por ello se recibió su declaración testimonial sin ser instruida del delito de falso testimonio,
oportunidad en la cual se expidió en similares términos, dejándose asentado que "la misma quiere
realizar una denuncia penal por las lesiones que le produjera el interno (…), alojado en el Celular
segundo del Modelo Residencial V del CPFCABA", agregando que en el forcejeo "le pegó con la
zapatilla en la mano a mi bebé, que si no fuera porque me puse en el medio la hubiera golpeado mucho
más fuerte.
Una vez afuera en el patio le avisé al personal del Servicio de requisa femenina y me acompañaron a
un lugar donde me revisó el médico" (…).
Se verificó ese día que presentaba un hematoma en el ojo izquierdo y labio inferior por un golpe
contuso (…).
Se efectuó consulta a la Secretaria del Juzgado en lo Correccional (…).
La causa se delegó al fiscal en los términos del artículo 196 del Código Procesal Penal de la Nación
(…) que citó a (…) para ampliar su denuncia de manera reiterada e infructuosamente (…),
desconociéndose su actual paradero ya que su abuelo en la última notificación, informó que no vivía
más en el lugar y que la familia del padre de su beba también la estaba buscando. Aportó el domicilio
de su madre (…).
El Fiscal constató que el imputado continuaba alojado en la unidad referida a disposición del Juzgado
de Ejecución (…), dejó sin efecto la ampliación de la denuncia y solicitó al juez que convoque a (…)
en los términos del artículo 294 del ceremonial (…). El magistrado no hizo lugar, indicando que la
acción no estaba instada (…). La Fiscalía insistió y la decisión negativa motivó la presente apelación
(…).
IV.- De las actas de fs. (…) surge de forma clara que (…) radicó denuncia contra (…) ante el personal
del Servicio Penitenciario Federal, que reviste en el caso el carácter de autoridad competente (artículo
1 de la ley 20416 y 184 inciso 1° del código adjetivo), cumpliendo de manera acabada con los
requisitos de procedibilidad del artículo 72 inciso 2° del Código Penal.Al respecto sostuvimos que "la
presencia de la damnificada en la comisaría efectuando una reseña del suceso, con clara atribución de
responsabilidad respecto [del imputado], puede válidamente considerarse como el impulso de la
acción" (1).
Asimismo, estimamos que "la declaración de la denunciante (…) no tiene que estar sometida a ninguna
formalidad estricta, rigurosa o solemne, ya que basta con que (…) pueda ser claramente inferida de sus
manifestaciones" (1).
Además en el presente caso debe atenderse a los deberes del estado argentino en orden a "abstenerse de
cualquier acción o práctica de violencia contra la mujer y velar por que las autoridades, sus
funcionarios, personal y agentes e instituciones se comporten de conformidad con esta obligación" (art.
7.a de la Convención Belém do Pará) y al compromiso que asumió de "actuar con la debida diligencia
para prevenir, investigar y sancionar la violencia contra la mujer" (art. 7.b).
La Convención en su artículo 1° define la violencia de género como: "cualquier acción o conducta
basada en su género, que cause muerte, daño, o sufrimiento físico sexual o psicológico a la mujer, tanto
en el ámbito público como en el privado".
Criterio que además ha sido adoptado por la Corte Suprema de Justicia de la Nación en el Fallo "G." en
el cual refirió que "siguiendo una interpretación que vincula los objetivos mencionados con la
necesidad de establecer un procedimiento legal, justo y eficaz para la mujer" (2).
Por otra parte, en relación a las infructuosas citaciones cursadas a la víctima (…) y la omisión de
instruirla del delito de falso testimonio de fs. (…) (artículo 249 del ceremonial) no modifica la
circunstancia que la acción penal ha sido legalmente promovida.
Ello sólo afectaría la entidad probatoria de sus dichos, extremo que podría ser superado a partir de la
materialización de otras diligencias, atento a la amplitud probatoria prevista en el artículo 31 de la
citada norma y lo sostenido mutatis mutandi por nuestro Máximo Tribunal en el Fallo "G. L., J. en la
causa n° 2222" del 7 de junio de 2011 (G.1359 XLIII, recurso de hecho).
En ese sentido no puede desatenderse que (…) no vive más en el domicilio aportado (…) y lo
establecido en la Ley n° 26.485 que dispone que "el Estado debe asegurar "Un trato respetuoso de las
mujeres que padecen violencia, evitando toda conducta, acto u omisión que produzca revictimización"
(art. 3.k) y luego, en su art. 16 se reafirma "Derechos y garantías mínimas de procedimientos judiciales
y administrativos. Los organismos del Estado deberán garantizar a las mujeres, en cualquier
procedimiento judicial o administrativo, además de todos los derechos reconocidos en la Constitución
Nacional, los Tratados Internacionales de Derechos Humanos ratificados por la Nación Argentina, la
presente ley y las leyes que en consecuencia se dicten, los siguientes derechos y garantías: […] h) A
recibir un trato humanizado, evitando la revictimización".En consecuencia, el Tribunal RESUELVE:
REVOCAR los puntos I y II del auto de fs. (…).".

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini, Filozof. (Sec.: Williams).


c. 9.982/14, Z. A., R. C.

240
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

Rta.: 26/05/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correcc., Sala VI, c. 42.592 "G., A. C.", rta.: 10/11/11; (2) C.S.J.N., Fallo G.,
G. A. s/ causa n° 14.092, G.61 XL.VIII, rta.: 23/4/2013.

VIOLENCIA DE GÉNERO.

Violencia doméstica. Amenazas coactivas. Procesamiento. Elementos de prueba suficientes.


Confirmación.

Fallo: "(…) luce correcta la valoración efectuada por la señora jueza de la instancia anterior en tanto la
conducta llevada a cabo por (…) logró amedrentar a la denunciante.
(…) expuso que mantuvo una discusión con el imputado el (…), tras la cual rompió con un martillo la
computadora personal que ambos utilizaban, a la vez que le refería "esto es lo primero que te voy a
romper, lo próximo es tu celular…si no dejás de joder la próxima sos vos. Ante ello se encerró en el
baño y desde allí pidió ayuda a sus vecinos.
(…) Las impresiones de las conversaciones mantenidas vía celular entre la damnificada y (…) otorgan
verosimilitud a lo denunciado y acreditan, con el grado de provisoriedad que se requiere en este
estadio, que las frases proferidas por el imputado tuvieron la entidad de atemorizarla.
Entonces y pese al intento de la defensa de responsabilizar a la víctima por exacerbar una discusión de
pareja debido a una supuesta afección psicológica, es posible sostener que no existen elementos que
comprometan la veracidad de su relato y le resten significancia al sentimiento de temor de (…).
Tampoco pasamos por alto que el anuncio estuvo acompañado de un acto de violencia, en el caso si
bien no estuvo dirigido contra (…), es condicionante y doblegó su voluntad, lo que quedó evidenciado
en la actitud asumida por (…) al encerrarse y pedir auxilio.
Hemos sostenido al respecto que "El delito de amenazas requiere ineludiblemente causar
amedrentamiento o alarma en el sujeto pasivo en el sentido de que ciertamente produzca una
vulneración a la libertad" (1).
Lo expuesto hasta aquí resulta suficiente para tener por probada la materialidad del suceso investigado.
(…), este Tribunal RESUELVE: I.- Confirmar parcialmente el punto I del resolutorio de fs. (…) en
cuanto dispuso el procesamiento de (…) en orden al delito de amenazas coactivas (artículo 149 bis del
Código Penal). (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini, Filozof. (Sec.: Carande).


c. 61.700/14, F., R. G.
Rta.: 27/05/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correcc., Sala VI, causa n° 67.584, "E., C.", rta.: 23/9/14.

VIOLENCIA DE GÉNERO.

Violencia doméstica. Lesiones agravadas por el vínculo. Procesamiento. Denunciante que en sede
judicial precisó que no deseaba continuar con el proceso. Acción promovida en la seccional y ante la
Oficina de Violencia Domestica. Indisponibilidad de la acción para la parte (artículo 72 del Código
Penal). Descargo desvirtuado frente al cuadro de elementos reunidos. Confirmación.

Fallo: "(…) II.- La parte centra su agravio en que los elementos de prueba son insuficientes para
adoptar un temperamento incriminante, pues sólo se cuenta con la versión de la víctima.
Por otra parte, sostiene que ésta, en dos oportunidades refirió que no deseaba continuar con la
prosecución de la causa.
III.- El artículo 72 del Código Penal trata las acciones penales dependientes de instancia privada y en
principio dispone, "(…) no se puede proceder a formar causa sino por acusación o denuncia del
agraviado...o representantes legales (…)" brindada ante la autoridad competente (5° párrafo 1° parte de
la mencionada norma y artículo 6 del catálogo procesal).
En el caso, se habilitó válidamente la acción penal, en la medida en que la damnificada expresó su
deseo de instarla al denunciar los hechos en sede policial y ante la Oficina de Violencia Doméstica de
la Corte Suprema de Justicia de la Nación (…).
Por lo tanto, desde aquel momento el Estado tomó su potestad persecutoria. Se trataba ya de una acción
pública porque se cumplió una condición previa de procedibilidad.
Por eso, una vez promovida no puede ser desistida ni por la víctima ni por su representante, pues no se
permite la disponibilidad de las acciones que no se hallen expresamente enumeradas (artículo 73 y
concordantes del código de fondo).
En este sentido la doctrina sostuvo que "La instancia de la acción por parte de quien resultó
damnificado, en los delitos dependientes de acción privada, produce el efecto de devolver a la acción
su naturaleza de ejercitable y perseguible de oficio.
Si bien el fiscal no puede promover esta clase de acciones, una vez realizado el acto de instancia, la
acción asume todas las características y efectos de la acción pública. Consumado el hecho 'socialmente

241
dañino", y transformado en perseguible de oficio, la posterior renuncia o perdón del damnificado, sólo
podrá tener relevancia en el ámbito civil del resarcimiento patrimonial" (1).
Por tal motivo "es necesario que el agraviado inste su promoción, con lo cual se verá cumplida la
condición de perseguibilidad, el Estado estará obligado a proseguir el trámite como si se tratase de una
acción pública cualquiera y no podrá detenérsela por perdón, renuncia o desistimiento(…)" (2).
Es decir, excitada legalmente la acción penal la posterior manifestación de B. M. (…) no es relevante
(3), por lo que los agravios de la asistencia técnica no pueden tener acogida favorable.
Resuelto el asunto de la procedibilidad de la acción, habrá de analizarse el fondo y, en este aspecto, se
tiene en consideración que K. A. B. M. refirió que el (…), en el interior del domicilio de la calle (…) y
durante una discusión, el imputado le asestó una "cachetada", de la que intentó defenderse
empujándolo. Ante ello V. respondió con un golpe de puño en el pómulo izquierdo, logrando
esconderse en el baño para evitar que continuara agrediéndola. Para ingresar allí el encausado empujó
la puerta provocando que cayera al suelo, lastimándose su pie izquierdo. Luego la lesionó con el
duchador (…).
La prueba de cargo no sólo se sustenta en esta exposición, sino también en el informe interdisciplinario
realizado en la Oficina de Violencia Doméstica que calificó la situación como de "alto riesgo" en
función de "(…) la violencia física: con frecuencia quincenal, a través de golpes de puño, tirones del
cabello, forcejeos, cachetadas. Al momento de la entrevista se observa que presenta contusiones en el
rostro (…) Violencia verbal: insultos con frecuencia cotidiana (…) Violencia emocional:
descalificaciones con frecuencia cotidiana (…) Violencia simbólica (…) Restricción de la libertad (…)
Niña expuesta a la violencia (…) en cuanto al agresor se valoró (…) la pertenencia a la fuerzas de
seguridad (…) portación de arma de fuego (…)"(…).
Lo asentado en el dictamen de fs. (…) ilustra las lesiones que presentaba, cuyo mecanismo de
producción coincide con el relato de B. M., lo que le otorga mayor verosimilitud. Además lo evaluado
demuestra un marco de violencia familiar sostenida en el tiempo.
Hemos referido que "la víctima de un hecho llevado a cabo en solitario -sin terceros presenciales-
donde sólo el atacante y la mujer estuvieron presentes justifica que la fuente de comprobación remita a
la denunciante (…) no resulta violado el principio de razón suficiente, por el hecho de que una
sentencia se fundamente con las manifestaciones de un único testigo, si se han aplicado correctamente
las reglas de lógica y la experiencia común que con toda la rigurosidad impone el sistema de valoración
de la prueba acorde la sana crítica racional" (4).
(…), el Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el punto I del auto de fs. (…), en todo cuanto fuera
materia de recurso. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini, Filozof. (Sec.: Williams).


c. 29.190/14, V., C. A.
Rta.: 02/06/2015

Se citó: (1) Donna-Maiza, Código Procesal Penal y disposiciones complementarias, Editorial Astrea,
Páginas 17/8, edición 1994.; (2) C.N.C.P. Sala III, c. 10.088 "B., J. A.", rta.: 10/6//09; (3) C.N.C.P.
Sala I, c. 13.642 "H. G., J. C.", rta.: 9/11/11; (4) C.N.Crim. y Correcc., Sala VI, c. 43184, "G. Q., A.
s/procesamiento", rta: 25/10/13.

VIOLENCIA DE GÉNERO.

Sobreseimiento. Amenazas y lesiones no verificadas. Elementos de prueba insuficientes para avalar los
hechos denunciados. Damnificada que no concurrió a examinarse en el cuerpo médico forenses.
Relación conflictiva entre las partes ajena a la órbita del derecho penal. Confirmación.

Fallo: "(…) II.- El juez Julio Marcelo Lucini dijo: Comparto el temperamento desvinculante adoptado
por el juez de la anterior instancia.
(…) relató a fs. (…) una serie de situaciones conflictivas con su ex pareja, que incluirían frases como
"hija de puta esto no te va a salir gratis, no sabés con quién te metiste" y que le iba a "pegar tres tiros" a
su padre, así como también agresiones físicas que le habrían generado moretones en su brazo derecho.
Pero lo cierto es que no se cuenta con ningún elemento de juicio que avale su manifestación. Nótese
particularmente que nunca concurrió a examinarse en el cuerpo médico forense, impidiendo así se
verifiquen las lesiones que aseguró presentar (…).
Por otro lado en el evento que su padre habría presenciado, de acuerdo a su propia afirmación de fs.
(…), "no recibió ningún tipo de amenazas" por parte del imputado, sino que todo se habría tratado de
insultos e improperios, por lo que no se advierte la necesidad de su testimonio como reclama el
recurrente.
Finalmente, de la lectura del expediente surge una evidente relación conflictiva entre las partes ajena a
la órbita del derecho penal, teniendo en cuenta que éste, por el principio de "ultima ratio", debe ser el
recurso estatal al que se debe apelar en procura de lograr una solución a los problemas en casos
excepcionales.
De esta manera, haciendo un análisis conjunto de la totalidad las constancias del legajo, y bajo la luz de
la sana crítica, considero debe ser desvinculado definitivamente de los sucesos que se le imputan a fs.
(…).

242
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

Por ello, habiéndose reunido el estado de certeza negativo que exige el artículo 336 del Código
Procesal Penal corresponde poner fin a la situación de incertidumbre que pesa sobre (…) homologar la
solución cuestionada. Lo que así voto.
El juez Mario Filozof dijo: No se trata de descreer del testimonio único de (…) sino de las dificultades
que este presenta, generando un pronóstico de imposible certeza, por lo que adhiero al voto que abre el
acuerdo.
III.- En consecuencia, el Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el auto de fs. (…), en todo cuanto fuera
materia de recurso. (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini, Filozof. (Prosec.: Gallo).


c. 25.630/14, D. L. V., D. A.
Rta.: 28/05/2015

VIOLENCIA DE GÉNERO.

Violencia doméstica. Amenazas coactivas agravadas por el empleo de un arma. Sobreseimiento.


Acción instada inicialmente por la víctima. Desistimiento inoficioso. Delito de acción pública.
Elementos de prueba suficientes para agravar la situación procesal del imputado. Revocación.
Procesamiento. Medidas cautelares a definir en la instancia de origen. Disidencia parcial: Pautas e
imposición del monto del embargo.

Fallo: "(…) El (…), en el interior de la vivienda de la Avenida (…) y tras discutir con su pareja, (…),
el imputado le habría referido en forma amenazante: "de acá no salís porque yo te mato" (sic), a la vez
que la sujetó contra la cama y le colocó un cuchillo de unos cuarenta centímetros de largo en su cuello.
Debido a los gritos que provenían de la vivienda, se presentó personal policial que, con autorización de
la víctima, ingresó y detuvo al nombrado (…).
(…) IV.-) Como cuestión previa, máxime cuando el juez lo pondera particularmente en el auto de
mérito de fs. (…), señalamos que desde que se instó la acción se cumplió la condición de
perseguibilidad, en tanto el Estado adquirió su potestad persecutoria al transformarse la acción en
pública. La víctima no podrá desistirla, no obstante que ello eventualmente se proyecte de algún modo
en la ponderación probatoria (1).
Por lo demás, el hecho por el cual el Ministerio Público requirió oportunamente la indagatoria y pide
ahora el procesamiento configura un delito de acción pública (amenazas coactivas), por lo que ningún
desistimiento por parte de la víctima es admisible.
Hemos señalado que "la norma es clara en cuanto a que el principio de legalidad imperante en nuestro
sistema obliga al titular de la vindicta pública a impulsar la acción, si se encuentran reunidos los
presupuestos de un hecho punible. Ello, surge, entre otros, del art. 25 inc. c de la ley orgánica del
Ministerio Público (ley 24.946), que reza: "Corresponde al Ministerio Público: (...) c) Promover y
ejercer la acción pública en las causas criminales y correccionales, salvo cuando para intentarla o
proseguirla fuere necesario instancia o requerimiento de parte conforme a la leyes penales." y del art.
5 del código ritual que establece que el ejercicio de la acción pública "(...) no podrá suspenderse,
interrumpirse ni hacerse cesar, excepto en los casos expresamente previstos por la ley" (2).
V.-) De la ponderación probatoria: El juez Julio Marcelo Lucini dijo: Los elementos de juicio, reunidos
en el legajo, son suficientes para disponer el procesamiento de A. P. M.No obstante no haber testigos
presenciales que puedan brindar datos de interés respecto de lo sucedido, el firme relato de (...) habilita
el temperamento previsto en el art. 306 del Código Procesal Penal de la Nación, máxime cuando a fs.
(…) ratificó íntegramente la imputación realizada a fs. (…).
La nombrada explicó de manera circunstanciada cómo el agresor tras referirle "de acá no salís porque
yo te mato" (sic), esgrimió un cuchillo de "hoja larga" (sic), haciendo énfasis en que "no sintió temor
hasta que A. le exhibió el cuchillo" (sic).
Ello debilita el descargo del acusado (…) y corrobora lo expuesto por el preventor en cuanto al estado
en que encontró a (…).
En este sentido, el Oficial (…), concurrió al lugar y tocó la puerta varias veces. Al cabo de unos
minutos salió una mujer que, en forma desesperada, le dijo que su pareja la había amenazado con un
cuchillo. Aseguró que por presentar una fuerte crisis de nervios requirió la presencia del SAME (…).
Su pedido de auxilio, el consentimiento que brindara para que la policía ingresara a su vivienda para
detenerlo y su comparecencia posterior ante la seccional (…), ilustran que las frases fueron idóneas
para amedrentarla.
VI.-) De la calificación legal: La conducta analizada se subsume en el delito de amenazas coactivas
agravadas por el empleo de armas, por el que deberá responder en calidad de autor.
Para que se configure "se requiere ineludiblemente causar amedrentamiento o alarma en el sujeto
pasivo en el sentido de que ciertamente produzca una vulneración a la libertad" (3), circunstancia que
se verifica en el sub examine sin perjuicio de que no se haya secuestrado el cuchillo blandido en el
hecho.
VIII.) Del embargo: En lo que respecta a su monto debe estimarse en cantidad suficiente para
garantizar la pena pecuniaria, la indemnización civil y las costas.

243
Específicamente, estas últimas comprenden el pago de la tasa de justicia, los honorarios devengados
por los abogados, procuradores y peritos, y los demás gastos que se hubieran originado en la
tramitación de la causa.
Ahora bien, sobre el primer ítem no habrá de fijarse suma alguna en tanto no está prevista respecto del
delito cuya comisión se atribuye al imputado y, por el eventual reclamo que por indemnización civil
pudieran requerírsele, es posible estimarlo provisoriamente en (…) mil pesos (…).
Las costas del proceso, se fijarán en (…) mil pesos ($...) para cubrir los posibles honorarios de los
profesionales a los que se refiere el inc. 2° del art. 533 del C.P.P.N., y sesenta y nueve pesos con
sesenta y siete centavos ($ 69,67) (cf. art. 6 de la ley 23.898 y Resolución n° 498/91 de la Corte
Suprema de Justicia de la Nación).
En definitiva, habrá de fijarse el embargo en (…) pesos con (…) centavos (…).
El juez Mario Filozof dijo: Coincido con mi colega preopinante en cuanto que corresponde dictar el
procesamiento de (…) por verificarse los extremos requeridos en el art.306 del Código Procesal Penal.
No obstante ello, toda vez que el apelante no se pronunció sobre las medidas cautelares consecuencia
de la decisión propiciada, entiendo que deben ser analizadas y establecidas en la instancia de grado (ver
voto emitido en la causa N°47817/2010 "B., M. I. s/falta de mérito", rta: 24/4/2015, entre otras).
El Juez Ricardo Matías Pinto dijo: Intervengo en la presente en virtud de la disidencia suscitada entre
mis colegas preopinantes y luego de escuchar el audio, adhiero respecto del aspecto planteado al voto
del juez Filozof por cuanto resulta conveniente que el Sr. Juez se expida respecto de las medidas
cautelares.
Por lo expuesto, el Tribunal RESUELVE: (…) I.-) REVOCAR el auto de fs. (…) y DECRETAR el
PROCESAMIENTO de (…), cuyos demás datos personales obran en autos, en orden al delito de
amenazas coactivas agravadas por el empleo de un arma por el que deberá responder en carácter de
autor (arts.149ter, inc.1° y 45 del Código Penal). (…)".

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini (en disidencia parcial), Filozof, Pinto. (Sec.: Oberlander).
c. 12.001/15, M., A. P.
Rta.: 02/06/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correcc., Sala VI, c. 520061704, "R. V., J. A. s/procesamiento", rta.:
11/4/2014; (2) C.N.Crim. y Correcc., Sala VI, c. 2627/2013, "G., S. O. s/ sobreseimiento", rta.:
21/3/2013); (3) C.N.Crim. y Correcc., Sala VI, c. 58009-2013, "A., S. s/ sobreseimiento", rta.:
14/4/2014.

VIOLENCIA DE GÉNERO.

Desobediencia. Procesamiento. Incumplimiento a la prohibición de acercamiento. Padre que al ser


requerido por la autoridad policial para que se retirara de la reunión escolar debido a la prohibición de
acercamiento vigente respecto de su exmujer, se niega a hacerlo. Delito que se consuma
instantáneamente con la negativa de acatar con plena conciencia del acto, o al hacer caso omiso a la
orden dispuesta por funcionario público. Confirmación. Disidencia: Falta de dolo en la acción.
Elementos de prueba que apoyan la versión del imputado quien negó haber querido incumplir la orden
explicando que concurrió a la reunión para velar por la correcta escolaridad de su hijo. Testimonios que
dan cuenta que siempre fue el padre quien lo llevaba y traía de la escuela, concurría a las reuniones,
firmaba los cuadernos de comunicaciones. Sobreseimiento.

Fallo: “(…)II.-) El Dr. Julio Marcelo Lucini dijo: Entiendo que debe receptarse la solución propuesta
por la defensa.
Cierto es que existe una prohibición de acercamiento y que como tal debe ser respetada. Pero este caso
presenta ribetes particulares que aconsejan profundizar en los pormenores en que habría ocurrido su
incumplimiento para recién luego decidir, con solvencia, si puede traer aparejada la sanción prevista en
el artículo 239 del Código Penal.
Las constancias del legajo dan cuenta que (…) y (…) fueron convocados por autoridades de la escuela
“…” a una reunión de padres. Y que ella al advertir la presencia de su ex cónyuge en el lugar habría
exigido que opere la prohibición dispuesta por el Juzgado Civil en los autos (…). A raíz de ello (…)
solicitó a (…) que abandone el establecimiento y, al negarse, recurrió en primer lugar a personal de
seguridad privada y finalmente al policial que lo detuvo.
La primera pregunta entonces es si el imputado se acercó de manera deliberada a (…), elemento
subjetivo exigido para la configuración del delito de desobediencia.
Y todo parece sugerir que desconocía su presencia en el lugar.
No solo porque aquél afirma que no se había percatado de ello tras arribar de manera apresurada y
tardía al encuentro sino, principalmente, porque no era habitual la concurrencia de la nombrada a ellos.
(…) A fs. (…) el preventor (…) refiere que el director al pedir su intervención le comentó que un padre
que llevaba diariamente los chicos al colegio se había negado a abandonar una reunión en la que
participaba su ex mujer, a la cual no podía acercarse por orden judicial.
(…), maestra del menor (…), de manera enfática aseguró que el imputado siempre fue quien lo llevaba
y traía de la escuela, concurría a las reuniones, firmaba los cuadernos de comunicaciones y efectuaba
en él notas vinculadas con la actividad educativa. Precisó que no conocía a la madre porque nunca la

244
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

vio en el establecimiento. Incluso no pudo precisar si estaba presente el día del incidente en el que
participaron unos sesenta progenitores. Lo que no resultó extraño fue que el padre si estuviera allí (…).
Ello da cuenta que (…) concurrió a la escuela como siempre lo hizo (…) durante tres años. Y no que lo
hizo en esa ocasión con el exclusivo propósito de acercarse a (…) para hostigarla. Es muy probable que
incluso no se haya representado ni remotamente que ahí la encontraría, ya que ella no asistía a ese tipo
de eventos, tal como sostuvo también la docente. En definitiva, era él quien tenía una activa – y
prácticamente exclusivaparticipación en la educación del menor, por lo que la presencia de aquélla
podía resultarle imprevisible, extremo a tener en cuenta al merituar el dolo de su acción.
Resulta evidente que en el ámbito al cual los convocó la dirección del “…” cualquier incidente como el
que finalmente ocurrió sería inmediatamente registrado. Y el instituto educacional contaba con
garantías de seguridad suficientes para evitar todo tipo de incorrección por parte de (…), por lo que
resulta llamativo que en tal contexto tuviera la intención de incumplir con el mandato judicial que
justamente pretende resguardar la integridad física de (…).
Parece ser, en definitiva, que su único objetivo fue el de informarse sobre la situación de su hijo, lo
cual evidentemente era necesario ya que conforme lo relatado por (…) a fs. (…) “…Fue un año difícil
el 2013 para (…), que tenía conocimiento que cuando estuvo viviendo con su mamá se produjo una
baja notoria en su rendimiento escolar, por ello la deponente recuerda esa circunstancia. Y ese mismo
año (…) volvió a vivir con su papá y terminó siendo abanderado…”.
(…) enfatizó que su llegada fue espontánea, que ni había visto a la denunciante, ningún incidente había
protagonizado y simplemente pidió permanecer hasta que concluyera el encuentro, tal como lo venía
haciendo sistemáticamente para velar por la correcta escolaridad de su hijo.
Por otro lado la prueba obrante en el legajo verifica un encuentro casual en la escuela y como tal no es
posible atribuir responsabilidad penal al imputado por no querer retirarse hasta que los docentes
finalicen su avanzada exposición.La necesaria razonabilidad y prudencia estuvo ausente posiblemente
en ambos padres, ya que debieron sin duda priorizar el interés por su hijo, por quien finalmente fueron
convocados, extremo que autónomamente se privilegia en atención al derecho de los niños que no debe
tampoco dejar de analizarse.
En tal sentido esta Sala ya ha sostenido que “En una cuestión tan delicada como es la introducción del
derecho penal en el ámbito familiar, al tratarse de una familia desavenida, deben extremarse los
recaudos para no continuar afectando disvaliosamente al menor. El conflicto suscitado entre los
progenitores debe ser analizado y resuelto en sede civil, ya que dar cabida al fuero represivo sólo
complicaría la situación de la que en definitiva es víctima la hija de ambos” (1).
No es una cuestión menor tampoco que el sumario se inició el día (…) y fueron muchos las vicisitudes
posteriores en medio siempre de la situación conflictiva que atravesaban las partes y que a la audiencia
en esta Alzada no concurrió la fiscalía, ni la víctima actuó como acusadora privada.
En consecuencia, el hecho en estudio a mi entender no reviste los elementos necesarios para que
interese la órbita penal, debiendo insistirse, si se estima pertinente, en el fuero civil para la debida
solución del conflicto subyacente. Aquí corresponde revocar el auto impugnado y dictar el
sobreseimiento del imputado.
III).- El Juez Mario Filozof dijo: Si bien comprendo lo expuesto por mi colega en el sentido de que el
imputado en su rol de padre, era quien se ocupaba habitualmente de la escolaridad de su hijo, no puedo
soslayar que tanto (…) como las autoridades escolares y policiales dieron aviso a (…) de que se hallaba
vigente la prohibición de acercamiento que fuera oportunamente dictada y notificada por el juez civil,
por lo que su reacción, esta es, quedarse de todos modos en el colegio, completa la infracción al
artículo 239 del Código Penal (…).
Con ello no estoy afirmando rígidamente que el entorno o situación no deben ser estudiados sino todo
lo contrario, ya que una vez examinado el caso en todos sus ribetes, es factible inferir que se ha
configurado el delito de desobediencia por lo que hablar de hipotéticas situaciones no sanea tal
cuestión.
Es que el sistema democrático de gobierno no justifica ni permite a los ciudadanos actuar en un
esquema anárquico.
A manera preliminar deseo destacar que el accionar de (…) resulta conteste y concordante con lo que
motivó la cautelar impuesta y ya renovada.
No olvidemos que: “la aplicación de tal limitación (…) tiene una naturaleza tuitiva que persigue darle
protección adecuada a la víctima frente a los riesgos que le generaría mantener un contacto con el
imputado (…)” (2).
En esa línea de pensamiento es dable considerar que la crisis nerviosa de (…) se debió la situación
violenta de desprotección que según sostuvo enfrentó y ello fue convalidado por la justicia civil.
Tal como ya esta Sala ha sostenido: “En el caso, se verifica una clara y concreta decisión de un Juez en
lo Civil, notificada al acusado con antelación al hecho, en donde le comunicó que debía abstenerse de
mantener cualquier tipo de contacto con su ex mujer (…), pues la violencia intra familiar expone una
problemática que reviste trascendencia social y, eso justamente hace que se vea afectado el bien
jurídico protegido por la norma penal cuando se incumplen órdenes de restricción (3).
Con coherencia, una y otra vez he procurado, como magistrado y como hombre, velar por aquellos
derechos, que por motivos culturales, sociales y económicos son más susceptibles de ser violentados.
En ese sentido es la propia Constitucional Nacional la que así lo ordena específicamente en artículo 75
inciso 23 del que se desprende: "Corresponde al Congreso: Legislar y promover medidas de acción
positiva que garanticen la igualdad real de oportunidades y de trato, y el pleno goce y ejercicio de los

245
derechos reconocidos por esta Constitución y por los tratados internacionales vigentes sobre derechos
humanos, en particular respecto de los niños, las mujeres, los ancianos y las personas con
discapacidad" (subrayado me pertenece).
Asimismo amparan lo expuesto las normas internacionales que comprometieron a nuestro país entre las
que se encuentran: las Reglas de Brasilia; la Convención para la Eliminación de Todas las Formas de
Discriminación contra la Mujer, conocida como "La Carta Magna de las mujeres", adoptada por la
Asamblea General de Naciones Unidas (1979); la Declaración y Programa de Acción de la Conferencia
Mundial de Derechos Humanos, sobre los derechos humanos de las mujeres (1993); la Declaración
sobre la Eliminación de la Violencia contra la Mujer. Resolución 48/104 de la Asamblea General de
Naciones Unidas (1993); Convención Interamericana para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia
contra la Mujer, "Convención de Belem do Para" de la Organización de Estados Americanos (1994);
Programa de Acción de la Conferencia Internacional sobre Población y Desarrollo del Cairo (1994); la
Declaración y Plataforma de Acción de la VI Conferencia Mundial de la Mujer, capítulo D "La
violencia contra la mujer" (1995); el Protocolo Facultativo de la Convención sobre la Eliminación de
todas las formas de discriminación contra la mujer. Asamblea General de Naciones Unidas (1999), la
Convención del Niño sancionada el 20 de noviembre de 1989 por la Asamblea General de las Naciones
Unidas (ONU).
(…) En este sentido, (…) se expidió sobre la prohibición de acercamiento existente respecto del
imputado (…) y su negativa a abandonar la reunión escolar pese a su requerimiento. Ante esa
situación, el preventor (…) lo detuvo (…).
Por su parte, (…) agregó que enterado de la presencia del imputado en el establecimiento educativo y
con conocimiento de la restricción de acercamiento emanada por autoridad judicial fue “(…) a la
biblioteca, me acerco al Sr.(…) y le digo si podía retirarse primero de esa reunión (…). y además
porque existía una imposibilidad de que estén a tal distancia, si podíamos hablarlo en algún lugar
aparte. Él me dijo que de ninguna manera se retiraría de allí, entonces yo di aviso al policía (…)”.(sic).
Destacó que la señora estaba muy nerviosa y lloraba.
(…) Completan el cuadro probatorio las constancias de fs. (…) del expediente (…), donde consta la
resolución del (…) que dispuso la exclusión de (…) del hogar y la prohibición de reingresar y acercarse
a un radio menor de quinientos metros, como así también la prohibición de acercamiento, por igual
distancia, a cualquier lugar donde se encontrara (…), por el plazo de 60 días. Esta medida estaba
vigente al momento del hecho y respecto de la cual el imputado fue notificado personalmente (…).
Los agravios introducidos por la asistencia técnica no podrán prosperar ya que más allá de las
aclaraciones gramaticales que desarrolló respecto del verbo “acercar”, lo cierto es que (…) se hallaba a
menos de quinientos metros de distancia de (…), lo que fue advertido por personal del establecimiento
y pese a ello se negó a retirarse en varias oportunidades, por lo que hubo de dar la intervención a
personal policial.
Si bien como indicó la defensa en la audiencia, era él quien asiduamente concurría a las reuniones de
padres y que por este motivo no se representó que (…) iría, lo cierto es que, al ser anoticiado de la
presencia de aquélla en el lugar y que debido a la medida cautelar vigente debía retirarse se negó a ello
en tres oportunidades, lo que ocasionó, finalmente su detención.
Es acá donde radica mi diferencia con el voto del Juez Marcelo Lucini pues no deja de ser cierto que
encontrarse ambos en un mismo lugar pudo ser producto de no saber que su ex pareja se encontraba
presente pero ante lo que ocurrió, esto es que ella estalló en llanto, el reclamo de las autoridades del
colegio hasta su detención demuestran que debió cumplir la orden judicial y retirarse, arbitrando, si lo
estimaba, los medios legales como ser reclamar ante la justicia civil para situaciones como la vivida se
acoten o reglamenten para que no se produzcan escenarios semejantes.
Se ha sostenido que “El delito en cuestión se consuma instantáneamente con la negativa de acatar la
orden legítimamente impartida y obrando el agente con plena conciencia del acto, o al hacer caso
omiso a la orden dispuesta por un funcionario público, o cuando teniendo un plazo para su observancia,
éste ha vencido” (4).
En consecuencia, y toda vez que la prueba de cargo es suficiente para acreditar la materialidad y su
intervención en el hecho será homologado.
(…) lo decidido a este respecto debe ser confirmado.
III.-) El Dr. Ricardo Matías Pinto dijo: Escuchado el audio y sin tener preguntas que realizar adhiero en
lo sustancial al voto del Dr. Mario Filozof, en cuanto confirma la cuestión traída a estudio y fuera
materia de agravio, ya que encuentro probado provisionalmente el conocimiento y voluntad de la
desobediencia a partir de la prueba incorporada al legajo.
En virtud del acuerdo que antecede, el Tribunal RESUELVE: CONFIRMAR los puntos I y III del auto
de fs. (…) en todo cuanto fue materia de recurso. (…)”.

C.N.Crim. y Correc., Sala VI, Lucini (en disidencia), Filozof, Pinto. (Sec.: Oberlander).
c. 17.354/13, T., R. E.
Rta.: 09/06/2015

Se citó: (1) C.N.Crim. y Correcc., Sala VI, c. 39.422, “I.,V. s/sobreseimiento y medidas”, rta.:
20/05/2010, c. 38.442, “C., S. D.”, rta.: 3/12/09; (2) C.N.Crim. y Correcc., Sala VI, c. 38.399, “M., M.
s/ coacción”, rta.: 18/11/2009; (3) C.N.Crim. y Correcc., Sala VI, c. 2042/12, “A., D. A.”, rta.: 13/2/
2013 y c. 41790/2011, “H., H. s/ procesamiento”, rta.: 10/4/2014; (4) Horacio J. Romero Villanueva,

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Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

Código Penal de la Nación y Legislación Complementaria- Anotados con jurisprudencia”, Editorial


Abeledo Perrot, Tercera Edición, año 2008, pág.1000.

VIOLENCIA DE GÉNERO.

Violencia doméstica. Amenazas coactivas reiteradas -tres hechos, uno de los cuales concurre
idealmente con lesiones leves y otro con desobedienciay abuso sexual con acceso carnal en concurso
real. Procesamiento. Imputado que amenazó, agredió sexual y físicamente a su pareja y violó la
prohibición de acercamiento y contacto impuesta en la justicia civil. Hechos de violencia doméstica.
Lesiones acreditadas. Pormenorizado relato de la víctima. Informe de la O.V.D. de la C.S.J.N. que
considera la situación de la damnificada de alto riesgo. Confirmación.

Fallo: "(…) El relato ofrecido por P. Z. E. ante la Oficina de Violencia Doméstica de la Corte Suprema
de la Nación a (fs. …) y ante el tribunal a (fs. …) sustenta la imputación que se le dirige a D. A. A. La
denunciante fue coincidente en ambas oportunidades al referirse a las circunstancias en que el
imputado la habría amenazado y agredido sexual y físicamente, provocándole una lesión en una de sus
piernas.
Ese relato encuentra parcial corroboración en el informe médico de (fs. ...), que da cuenta de una
contusión tipo equimótica, de morfología redondeada y bordes difusos, de aproximadamente 9 cm. de
diámetro en el tercio medio del muslo izquierdo. Tales características, ubicación, modo de producción
y tiempo de evolución, resultan plenamente compatibles con la dinámica de uno de los hechos
denunciados.
A lo expuesto se aduna el informe interdisciplinario de (fs. ...) que revela una situación de alto riesgo
para la damnificada.
Del mismo modo, se destaca que el Juzgado Civil … dispuso la exclusión del hogar conyugal de A. y
la prohibición de acercamiento por el término de noventa días respecto de Z. E. y del domicilio en que
moraban, medida que fue notificada el 24 de agosto de 2014 (ver fs. …). A (fs. …) se agregó la
constancia de presentación espontánea de Z. E. en la sede de la dependencia policial, en la que hizo
saber que su pareja había violado la prohibición dictada y que, mediante amenazas, la instó a dejar sin
efecto las denuncias que había formulado, agregando que el imputado había vuelto a residir en el
domicilio del cual había sido excluido el mismo día en que se efectivizó la medida, lo que fue
ratificado días más tarde (ver fs. …).
Si bien el peritaje psicológico de (fs. …) señaló que no se observaron indicadores compatibles con
victimización sexual, tal extremo no opaca la credibilidad que merecen los dichos de la denunciante,
pues, amén de las consideraciones desarrolladas por el magistrado a quo, no puede olvidarse que en el
informe de riesgo se aludió a una naturalización de la violencia física, emocional, psíquica, ambiental,
sexual y social por parte de Z. E.
El agravio del recurrente, centrado en la carencia de otros elementos que acompañen los dichos de la
denunciante no puede ser atendido, toda vez que el informe médico corrobora las lesiones y el de (fs.
…) expone la situación de peligro en que se encontraba inmersa la damnificada.
En orden a la ausencia de testigos, debe tenerse particularmente en cuenta que por tratarse de delitos
contra la libertad, la integridad física y la libertad sexual sufridos por la pareja del imputado que
habrían acaecido dentro del hogar, ello representa una característica habitual en este tipo de sucesos.
En esta línea, el art. 16 de la Ley N° 26.485 de Protección Integral a las Mujeres en su inciso i) dispone
que los organismos del Estado deberán garantizar a las mujeres, en cualquier procedimiento judicial o
administrativo, además de todos los derechos reconocidos en la Constitución Nacional, los Tratados
Internacionales de Derechos Humanos ratificados por la Nación Argentina, la presente ley y las leyes
que en consecuencia se dicten, los siguientes derechos y garantías: A la amplitud probatoria para
acreditar los hechos denunciados, teniendo en cuenta las circunstancias especiales en las que se
desarrollan los actos de violencia y quienes son sus naturales testigos.
En consecuencia, el tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el auto de (fs....)".

C.N.Crim. y Correc., Sala IV, Seijas, González Palazzo, González. (Sec.: Morillo Guglielmi).
c. 45.566/14, A., D. A.
Rta.: 08/05/2015

VIOLENCIA DE GÉNERO.

Violencia doméstica. Amenazas coactivas. Procesamiento. Imputado que instó a la víctima a que
finalizara la relación con su actual pareja o de lo contrario la mataría. Frases con entidad vulnerante e
intimidante. Expresiones aptas para amedrentar. Prueba suficiente. Informe de la Oficina de Violencia
Doméstica que da cuenta que la situación de la víctima es de alto riesgo. Confirmación.

Fallo: "(...) El reproche que se dirige contra M.M. M. encuentra sustento en los dichos de N. A. R. (fs.
...), quien efectuó un pormenorizado relato del suceso ocurrido el 23 de septiembre de 2014, en horas
de la tarde, en el interior de la vivienda ubicada en la calle U. xx, dto. "x" de esta ciudad, donde el
imputado le habría proferido frases amenazantes.

247
La ausencia de testigos no puede ser óbice para continuar con la investigación, ya que conforme lo
describiera la denunciante, el hecho habría ocurrido dentro de su domicilio sin otra persona presente,
ya que su hijo y su madre se encontraban en otro ambiente de la finca. Además, la índole de los
mensajes de texto enviados más tarde por el prevenido avala la versión incriminante y refuerza la
verosimilitud del testimonio de A. R., pues en ellos se anuncia un mal inminente con la expresión "hoy
se pudre todo", haciendo elíptica referencia a alguna situación acontecida el día anterior pues la víctima
habría tenido "toda la noche para pensar". Además, se le impone a la destinataria a soportar la situación
y se la indaga acerca de su nueva pareja, con una clara connotación intimidatoria. Todo ello guarda
conexión con los extremos narrados en la denuncia, pues el prevenido le habría referido un día antes a
A. R. que la iba a perseguir y matarla, al igual que a su pareja, instándola a que finalizara esa relación
si quería que la dejara tranquila.
El cuadro de cargo relatado encuentra también sustento en las conclusiones del informe
interdisciplinario practicado en la Oficina de Violencia Doméstica de la Corte Suprema de Justicia de
la Nación (fs. ...), del que se desprende que durante la entrevista la víctima expuso un relato coherente
y dio cuenta del temor que sentía respecto de la futura conducta del imputado, concluyéndose en que se
encontraría en una situación de alto riesgo.
Cabe agregar que, aun cuando el imputado negó haber amenazado a la perjudicada, reconoció la
existencia de una discusión entre ambos, vinculada con su nueva relación sentimental. Ante tal
panorama, el plexo probatorio así conformado torna aconsejable que la causa arribe al siguiente
momento procesal, que por sus características podrá favorecer el esclarecimiento definitivo de lo
sucedido.
Por ello, el tribunal RESUELVE: CONFIRMAR el auto de (fs. ...)".

C.N.Crim. y Correc., Sala IV, González, Pociello Argerich. (Sec.: Morillo Guglielmi).
c. 57.802/14, M., M. M.
Rta.: 09/04/2015

VIOLENCIA DE GÉNERO.

Violencia doméstica. Procesamiento por lesiones leves agravadas por el vínculo en concurso ideal con
amenazas. Damnificada que no instó la acción penal respecto de las lesiones. Imposibilidad de incluir
las lesiones. Concurso ideal entre un delito de acción pública y otro de instancia privada. Excepción al
principio de la única persecución penal. Nulidad parcial del dictamen fiscal. (Arts. 166 y 168, del
C.P.P.N.), la declaración indagatoria y el auto de procesamiento en lo que respecta a la inclusión en el
objeto procesal de las lesiones. Elementos suficientes para agravar la situación procesal del imputado
por las amenazas. Confirmación parcial. Disidencia parcial: Validez. Imposibilidad de escindir la
investigación debido a la existencia de un concurso ideal entre un delito dependiente de instancia
privada y un delito de acción pública. Separación que implicaría una afectación a la garantía
constitucional que prohíbe la persecución penal múltiple. Eventual juicio de reproche que, al momento
de merituar la sanción aplicable solo podrá abarcar el delito de acción pública. Confirmación.

Fallo: "(…) El juez Mauro A. Divito dijo: I. De la falta de instancia: (…) en la denuncia prestada en la
Oficina de Violencia Doméstica de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, E. G. B. manifestó
expresamente que de momento no era su deseo instar la acción penal, sin perjuicio de lo cual, al haber
denunciado un delito de acción pública -amenazas-, se remitieron las actuaciones a la Justicia
Correccional (v. fs…), en donde se dictó el decisorio que la defensa ha cuestionado.(…) se advierte un
vicio a partir del dictamen fiscal de fs.
(…), por cuanto sin el impulso de la víctima exigido por el artículo 72, inciso 2° del Código Penal que
-eventualmentehabilitaría legalmente la persecución penal, no resultaba posible incluir ese aspecto del
hecho dentro del objeto procesal, aún cuando las lesiones leves concursaran idealmente con un delito
de acción pública -amenazas-.
(…) nada obsta a la futura investigación de las lesiones, en la hipótesis de que la denunciante deseara
instar la acción, pues ello no implicaría una afectación al "ne bis in idem".(…) se ha sostenido que
"Cuando concurren formalmente (CP, 54) dos infracciones a la ley penal, perseguibles de distinto
modo (acción privada y acción pública), y una de ellas no se puede juzgar por un obstáculo jurídico no
superado (falta de persecución de quien está legitimado para ello) o no se puede juzgar por el mismo
procedimiento (distinto procedimiento para los delitos de acción pública y los de acción privada, y
prohibición de la ley procesal de acumular estas acciones en un único procedimiento), la sentencia final
sólo puede apreciar jurídicamente el hecho atribuido de modo parcial y la limitación proviene de la
propia ley. De tal manera, el agotamiento de la pretensión punitiva emergente de un mismo hecho no se
puede realizar, como en el caso normal, en una única persecución penal, pues el tribunal que trata
alguna de estas imputaciones en una sentencia de mérito no posee la facultad, común en los demás
casos, de "examinar el objeto material del proceso desde todos los ángulos legales posibles". Se debe
reconocer, entonces, para estos casos -ya en sí excepcionales por disposición legal- una verdadera
excepción al principio de la única persecución penal y admitir que un mismo hecho funde dos -o más-
persecuciones penales separadas contra una misma persona" (1).
Ese criterio resulta plenamente aplicable al supuesto sub examen, en donde media un concurso ideal
entre un delito de acción pública y otro que depende de instancia privada.(…) corresponde declarar la

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Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional

nulidad parcial del dictamen fiscal de fs. (…) y de los actos realizados en su consecuencia -
concretamente, la declaración indagatoria y el auto de procesamiento- en lo que respecta a la inclusión
en el objeto procesal de las lesiones leves (artículos 166 y 168 del Código Procesal Penal de la
Nación).II. Del fondo: (…) me inclino por homologar parcialmente el procesamiento dispuesto
respecto de R. F. G., exclusivamente en orden al delito de amenazas simples.En efecto, la decisión que
se revisa se encuentra ajustada a las constancias de la causa, a su análisis bajo la sana crítica racional y
las pautas de las leyes nro. 24.417 -Protección contra la Violencia Familiar- y nro. 26.485 -Protección
Integral de las Mujeres- y la Convención de Belém Do Pará -Convención Interamericana para prevenir,
sancionar y erradicar la violencia contra la mujer-.
Dicha normativa ha reconocido la amplitud probatoria (…).
(…) se cuenta con los dichos de la denunciante, quien ha descripto detalladamente las circunstancias en
las que habría sido amenazada por el imputado (v. fs….).
También se ha incorporado el informe interdisciplinario de situación de riesgo, en donde los
Licenciados S.G. y J. N.
merituaron la situación de E. G. B. como de alto riesgo psicofísico (v. fs…).(…) la Licenciada S. G. C.
del Cuerpo Médico Forense, luego de entrevistar a la nombrada, indicó que presentaba "…secuelas
traumáticas inherentes a haber sufrido experiencias disruptivas de violencia en el vínculo con el Sr. G."
y precisó que "El relato de los sucesos que denuncia presenta signos de verosimilitud…" (v. fs…).Las
conclusiones de la mencionada profesional avalan la veracidad de los dichos de B., de modo que la
versión brindada por el imputado se considera de momento desacreditada frente a las restantes pruebas
de cargo.(…) voto por confirmar el procesamiento de G. en orden al delito de amenazas
simples.Disidencia parcial El juez Ricardo M. Pinto dijo: I. De la falta de instancia: Ante la
verificación de un concurso ideal entre un delito de acción pública y uno dependiente de instancia
privada, la investigación no puede escindirse y, más allá de que el segundo no haya sido instado (CP
72), debe prevalecer el primero para evitar, en caso contrario, resolver en base a calificaciones legales
y no respecto a hechos (2).
(…) "no es necesario el impulso de la acción por el agraviado cuando, el delito dependiente de
instancia privada, concurre idealmente con otro de acción pública" (3).
(…) la separación de un único hecho implicaría una afectación a la garantía constitucional que prohíbe
la persecución penal múltiple, por cuanto en el supuesto de que este proceso avanzara únicamente en
relación al delito de amenazas, el imputado quedaría sujeto a la voluntad de la víctima -al menos
durante el lapso hasta que opere la prescripción- del riesgo de ser sometido nuevamente a un proceso
por el mismo sustrato fáctico.En todo caso el juicio de reproche eventualmente al momento de merituar
la sanción aplicable solo podrá abarcar el delito de acción pública. La sentencia sólo podrá apreciar -
como elemento de reproche a la luz de los artículos 399 y 403 del Código Procesal penal de la Nación
y 40 y 41 del Código Penal- el hecho atribuido a partir del injusto de acción pública. Es así que se
protege al imputado de encontrarse ante el riesgo de una futura persecución por la misma conducta, y a
su vez el encuadre legal en relación a ilícitos no instados no puede ser merituado en su contra, por
cuanto no ha existido voluntad de la víctima.(…) no resulta necesario declarar la nulidad de actos
procesales.II. Del fondo: Respecto de este aspecto, comparto la valoración realizada por el colega, a lo
cual debe agregarse los informes médicos de fs. (…).
(…) los elementos antes descriptos permiten desechar de momento la versión del imputado y atribuirle
responsabilidad, razón por la cual voto en el sentido de que la resolución recurrida debe ser
homologada.La jueza Mirta L. López González dijo: (…) por compartir en su totalidad los argumentos
expuestos por el juez Mauro A. Divito, es que adhiero a su voto.(…) el tribunal RESUELVE: I.-
Declarar la NULIDAD PARCIAL del dictamen fiscal de fs. (…) y de los actos dictados en
consecuencia, en lo que respecta a la inclusión en el objeto procesal del delito de lesiones leves
(artículos 71, inciso 1° y 72 del Código Penal y 166 y 168 del Código Procesal Penal de la Nación).-
II.- CONFIRMAR PARCIALMENTE el punto I del auto de fs. (…), exclusivamente en relación al
delito de amenazas simples".

C.N.Crim. y Correc., Sala V, López González, Pinto (en disidencia parcial), Divito. (Sec.: de la
Bandera)
c. 46.212/14, G., R. F.
Rta.: 12/06/2015

Se citó: (1) Maier, Julio B. J., Derecho Procesal Penal. Fundamentos, editores del Puerto, 2° edición,
tomo 1, p. 628. (2) C.C.C., Sala V, causa nro. 39509/2014, rta. 30/4/2015. (3) CNCP, Sala I, causa n°
5350, registro n° 6785.1 "Bonar Guzmán, Feliz Ronald s/ recurso de casación, rta. 10/6/04) -confr.
causa 10832/2013 "Talevi, Lourdes s/ procesamiento", Sala VI, resuelta el 28 de mayo de 2013.

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