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D E R E C H O E S P A Ñ O L

La democracia
representativa
paritaria.

PARA
ALGUNAS LA IGUALDAD
CUESTIONES EFECTIVA
EN TORNO A DE MUJERES
LA LO 3/2007, Y HOMBRES
DE 22 DE MARZO

POR DRA. MARÍA MACÍAS JARA.


Profesora de Derecho Constitucional ICADE.

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1. DEL CONTRATO SOCIAL presentes en puestos de representación


A LA DEMOCRACIA PARITARIA política y de toma de decisiones y, en ge-
neral, en cualquier centro de poder.
En la elaboración inicial de la idea de re-
presentación, la igualdad que se reivin- Así, en oposición a la idea de una de-
dicó para tomar decisiones que afectaban mocracia deficitaria que excluye a las mu-
a la nación fue la igualdad de castas o de jeres de la participación en la toma de
clases y no así, como es sabido, la igual- decisiones surgió el término democra-
dad entre hombres y mujeres. La lucha cia representativa paritaria. Se acuñó a
de las mujeres por los derechos políti- partir de la Conferencia “Mujeres al po-
cos se remonta, fundamentalmente, al der” celebrada en Atenas en 1992 en la
momento en el que fueron apartadas del que se elaboró la Declaración de Ate-
pacto de creación del Estado o la socie- nas. En aquel documento se proclamó
dad por el que la comunidad ejerce la la necesidad de la total integración, en
soberanía a través de la voluntad gene- pie de igualdad, de las mujeres en las so-
ral y del interés común 1 . Excluidas del ciedades democráticas, utilizando, para
contrato social, se negó a las mujeres no ello, las estrategias multidisciplinares que
sólo el reconocimiento de derechos si- sean necesarias. Asimismo, se pretendió
no, sobre todo, su disfrute lo que sig- una paridad real en los órganos de de-
nificó la eliminación de su participación cisión política y económica entre hom-
en todos los ámbitos públicos tradicio- bres y mujeres, sobre la base de que lo
nalmente atribuidos al género masculi- contrario supondría la exclusión, de he-
no. Entre ellos, el político. cho, de los órganos de representación
1 de más del 50% de la sociedad. Estas
Parece ser que las mujeres no se organizaron pa- De este modo, no resulta baladí la de- ideas se consolidaron en la Declaración
ra propiciar cambios y realizar reivindicaciones
en su beneficio hasta el siglo XVIII. No obstan- fensa de una reconstrucción teórica de y Plataforma de Acción de Pekín de
te, un resumen sobre la posición de la mujer en la idea de representación y de un nuevo 1995 con ocasión de la IV Conferencia
la sociedad antigua y en el cristianismo puede pacto social que cuente con las mujeres.
consultarse en VENTURA FRANCH, A., Las Mundial sobre la Mujer 4 . Este nuevo
Mujeres y la Constitución Española de 1978, Ins- La inclusión de ambos géneros vendría paradigma que emergió para definir
tituto de la Mujer, Ministerio de Trabajo y Asun- a significar un pacto distinto, uno nue- aquella democracia que incluye la re-
tos Sociales, Serie Estudios, núm. 60, Madrid,
1999, pp. 31 y ss. PATERMAN, C., El contrato
vo. No obstante, poner de manifiesto la presentación suficiente de hombres y de
sexual, Anthropos, Barcelona, 1995, pp. 70-71, evidencia de la diferencia entre el géne- mujeres en el poder y en la toma de de-
del original The Sexual Contract, California, ro masculino y el femenino y, en conse-
Stanfort University Press, 1988, a propósito de cisiones políticas se ha denominado “De-
la obra de HOBBES, T., Leviatán, Fondo de cuencia, la dualidad de la Humanidad mocracia paritaria” 5 .
Cultura Económica, México, 1987. no habría de implicar, en ningún caso,
la renuncia a la igualdad. Tampoco se- La Democracia paritaria es, pues, un
2
BLANCO CORUJO, O., Olimpia de Gouges ría incompatible con la idea de que, en principio básico, un postulado que ha
(1748-1793), Ediciones del Orto, Biblioteca de
la representación de la nación, el pue- de inspirar y fundamentar la actuación
Mujeres/Instituto de la Mujer (Ministerio de de los poderes públicos y, en general,
Trabajo y Asuntos Sociales), Madrid, 2000. blo se muestra como un todo indivisi-
ble en el que todos y todas representan todo el entramado jurídico y político pa-
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a todos y a todas. Sin embargo, hasta los ra la consecución de la igualdad de gé-
En este sentido, véase, entre otras, MARTÍNEZ
SAMPERE, E., “La legitimidad de la democra- últimos tiempos, y en contra de lo que nero. Por ello, también constituye una
cia paritaria”, Revista de Estudios Políticos, núm.
disponían el artículo tres de la Declara- garantía para la salvaguarda de la igual-
107, Madrid, 2000, pp. 136-141. Recuérdese,
en general, sobre esta cuestión, AGACINSKI, S., ción de Derechos del Hombre y del dad en la realización de los derechos so-
Política de sexos, Taurus, Madrid, 1998. Ciudadano de 1789 y también la De- ciales y políticos de las mujeres –y de los
4 claración de Derechos de la Mujer y de hombres– incluyendo el derecho al su-
Declaración de Pekín y la Plataforma para la Ac- la Ciudadana de Olimpia De Gouges de fragio pasivo. De este modo, ninguno
ción, recogidos en el Informe de la Resolución de los géneros debería monopolizar la
adoptada en la Conferencia de 17 de octubre de 1791 2 , la representación del pueblo
1995. Documento A/CONF. 177/20 de 17 de se ha materializado en un solo género representación política provocando que
octubre de 1995.
selectivo de personas: los hombres, ex- el género infrarrepresentado se quede
5 cluyendo a la otra mitad de la Humani- sin masa crítica o representación cuan-
Véase, entre otros muchos, SAAVEDRA RUIZ,
dad y dividiendo, así, la soberanía en titativa suficiente para hacer valer sus
P., (dir.) Vers une démocratie paritaire. Analyse
et revisión des lois electorales en vigueur, CELEM, dos. De esta forma, la esencia del pue- opiniones.
Palermo, 1999 y, de más reciente publicación, blo soberano se ha mostrado, principal- Así, pues, la democracia paritaria es de-
COBO BEDIA, R., “Sexo, democracia y poder
político”, en MORENO SECO, M. y RAMOS mente, masculina 3 . Pero no hay razón mocracia representativa y la democracia
FEIJOO, C., (coords.) Mujer y participación po- para que los representantes del pueblo representativa ha de ser paritaria. Por lo
lítica, Feminismo/s, Revista del Centro de Estu-
dios sobre la Mujer de la Universidad de Alicante,
no sean, también, mujeres. Sería preci- tanto, hablar en términos de Democra-
núm. 3, junio de 2004, pp. 19 y ss. so, entonces, que las mujeres estuvieran cia paritaria no significa más que enten-

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der que, en democracia, las mujeres y Finalmente, para obtener la plena igual- 6
los hombres han de formar parte de las dad entre hombres y mujeres en materia ASTELARRA, J., Las mujeres podemos: otra visión
política, Icaría, Barcelona, 1986, p. 65. SOLSO-
elites políticas para que la defensa de sus de representación política, los objetivos NA i PIÑOL, C., “Paridad democrática”, en SAA-
intereses y de sus derechos no quede en a perseguir han de basarse en conceptos VEDRA RUIZ, P. (Intro), La democracia paritaria
manos ajenas 6 . no sólo numéricos, sino, especialmente, en la construcción europea, CELEM, 2000, p. 134.
Puede consultarse en www.celem.org
cualitativos, estructurales, que establez-
En ocasiones, se ha argumentado que el 7
can un nuevo reparto de responsabili-
hecho de que las mujeres participen en VALCÁRCEL, A., La política de las mujeres, Edi-
dades y de espacios para la adopción ciones Cátedra, Madrid, 1997, p. 79. En un sen-
la política aporta otros valores a las de-
compartida de las decisiones tomadas en tido similar, y a modo de ejemplo, STUART
cisiones. Es posible. También lo es que MILL escribió que “es fácil conocer a una mujer
representación del conjunto de la so- estúpida; la estupidez es igual para todos”.
hombres y mujeres hayan desarrollado
ciedad 10. En aras de lograr este equili- STUART MILL, J., La esclavitud femenina, ob.
habilidades o competencias propias de la cit., p. 385. En cualquier caso, para una visión
brio puede ser necesaria la adopción de
asignación histórica de roles y estereoti- sobre las teorías relativas a la contribución de las
las denominadas medidas de acción po- mujeres en la vida pública, NORRIS, P., “Las
pos que, profundamente arraigados, han
sitiva que, con el fin de perseguir la mujeres políticas: ¿un nuevo estilo de liderazgo?”,
pretendido utilizar la diferencia natural en URIARTE, E., y ELIZONDO, A., Mujeres
igualdad efectiva, establezcan la posibi-
entre ambos para justificar una desi- en política, Ariel, Barcelona, 1997, pp. 77 y ss.
lidad de que hombres y mujeres com-
gualdad injustificable. Por consiguiente, 8
partan la toma de decisiones políticas.
me parece más interesante mantener VALCÁRCEL, A., La política de las mujeres, ob.
Así, pues, no ha de extraerse de estas cit., p. 79. La autora señala que “las mujeres no
la premisa de que los valores lo son de
medidas un carácter excluyente hacia el compartimos una esencia. Podemos llegar a tener
las personas, y no tanto de su género. Al enormes divergencias sociales e individuales. De
género masculino, sino, por el contra- hecho, las tenemos pero sí compartimos una posi-
respecto, Valcárcel apuntó que “ningún
rio, una vía integradora que abogue por ción genérica que no nos favorece –la de ser mu-
valor que no pueda serlo de cualquier ser jer– y, en consecuencia, compartimos la voluntad
la inclusión de ambos géneros en la par-
humano es un valor” 7 . En definitiva, de abolir sus aspectos degradantes”.
ticipación política, bien en órganos de
puede que esta discusión tenga relevan- 9
representación, bien en centros de po-
cia antropológica o social pero, desde la Es de imprescindible cita lo que afirmó con
der, con el fin de que el principio cons- mente preclara J. STUART MILL “(…) Este
perspectiva jurídica, poco importa qué
titucional y el derecho fundamental a la estado de cosas se modificará día en día, pero per-
valor aporte quién. Lo relevante es que sistirá en gran parte mientras nuestras institucio-
igualdad juegue un papel real. nes no autorizan a la mujer a desarrollar su
se deje que ellas los proyecten, fueran
originalidad tan libremente como el hombre.
cuales fueren. Sean comunes o no con Cuando este tiempo llegue, pero antes no, nos en-
los de los hombres son, al fin y al cabo, 2. LA RESERVA ELECTORAL COMO tenderemos, y, lo que es más, veremos cuánto hay
valores humanos 8 . MEDIDA DE ACCIÓN POSITIVA que aprender para conocer la naturaleza femeni-
na y saber de qué es capaz y para qué sirve. (…)
No hay medio de averiguar lo que un individuo es
En cualquier caso, incluso en el caso de El origen de la acción positiva tuvo lu- capaz de hacer sino dejándole que pruebe y el in-
que las mujeres aportaran diferentes cua- gar en el Derecho Norteamericano con dividuo no puede ser remplazado por otro indivi-
lidades a la política, tampoco se sabrá has- duo en lo que toca a resolver sobre la propia vida,
el fin de acabar con la segregación racial el propio destino y la felicidad propia. (…)”.
ta que no puedan tomar plenas decisiones y dotar de un nuevo contenido a la STUART MILL, J., La esclavitud femenina, ob.
para con la sociedad 9 . De cualquier for- Equal Protection Clause 11. En este mar- cit., pp. 387-388.
ma, sólo una razón jurídica ha de im- co comenzó a fraguarse la lucha contra 10
portar a este efecto. Las mujeres son parte la discriminación en el seno de los dere- Véase el reciente trabajo de RUIZ RODRÍ-
GUEZ, B., y RUBIO MARÍN, R., “De la pari-
de la democracia representativa por un chos civiles, dando lugar a lo que se co- dad, la igualdad y la representación en el Estado
derecho fundamental individual y pro- noce como Anti-discrimination Law 12. democrático”, REDC, núm. 81, septiembre-di-
pio: a la igualdad, en materia de repre- ciembre, 2007, pp. 142 y ss.
sentación política e, inseparable de la Así, en la década de los 80 del pasado 11
anterior, por una razón humana: por ser. siglo, el concepto de acción positiva se TUSSMAN, J. y TENBROECK, J. “The Equal
Protection of the Laws”, California Law Review,
núm. 3, September, 1949, vol. XXXVII, pp. 341
y ss. PETERS, A., Women, Quotas and Consti-
tutions. A Comparative Study of Affirmative Ac-
tion for women under American, German; EC
and International Law, The Hague-London-
Boston, Kluwer Law International, 1999, pp. 43
y ss. Entre nosotros, MARTÍN VIDA, M.A.,
“Evolución del principio de igualdad en Estados
Unidos. Nacimiento y desarrollo de las medidas
de acción afirmativa en Derecho estadouniden-
se”, Revista Española de Derecho Constitucional,
núm. 68, Mayo-Agosto, 2003, pp. 151-152.
12
REY MARTÍNEZ, F., El derecho fundamental a
no ser discriminado por razón de sexo, McGraw
Hill, Madrid, 1995, p. 57; SIERRA HERNAIZ,
E., Acción positiva y empleo de la mujer, Consejo
Económico y Social, Madrid, 1999, p. 35.

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13 trasladó a Europa conceptuándose, en lidad efectiva de que pueda producirse


Este tipo de prácticas han recibido doctrinalmen- sentido amplio, como todo hacer refle- un resultado igual. No obstante, los por-
te el calificativo de medidas de ‘discriminación po-
sitiva’ o ‘discriminación inversa’. No obstante, el jado en una medida o conjunto de me- centajes o cuotas que se barajan no son
uso de estas expresiones puede resultar poco afor- didas consistentes en una norma jurídica, en sí mismos resultados. Aunque hom-
tunado. BARRÈRE UNZUETA explica que si, en decisión judicial, política pública o prác- bres y mujeres estuviesen representados
el contexto en el que se sitúan las medidas de ac-
ción positiva, se habla de discriminación como un tica privada, destinadas a acelerar la con- en la óptima proporción del 50% en to-
concepto que, lejos de ser neutro, conlleva con- secución de la igualdad real, evitando y dos los aspectos de la vida social, profe-
notaciones peyorativas o, como mínimo, negati-
vas, parece que la fórmula ‘discriminación positiva’
eliminando obstáculos en cualquier tra- sional y personal, tal porcentaje no ha
se presenta como una contradicción en el propio mo del recorrido así como favorecien- de entenderse como un resultado, sino
término. BARRERÉ UNZUETA, M.A., Discri- do, de manera efectiva, la absoluta como un punto de partida, un mínimo
minación, Derecho antidiscriminatorio y acción po-
sitiva a favor de las mujeres, ob. cit., p. 86. La autora participación e inclusión, en este caso, para que, hombres y mujeres puedan
establece que la discriminación positiva se presen- de hombres y de mujeres en cualquier compartir las responsabilidades en to-
ta como una contradictio in terminis en el contex-
to en el que es usada. Recientemente, la autora se
aspecto de la vida pública o privada. dos los ámbitos modificar las estructu-
mantiene en esta, creo que acertada, postura y afir- ras sociales de la desigualdad heredadas
ma que la expresión discriminación inversa o dis- Sin embargo, no todas las medidas adop-
del Estado liberal. Alcanzar ese punto
criminación positiva, “no forma parte del discurso tadas para la consecución de la igualdad
originario sobre la acción positiva”. BARRERÉ no implica tanto el final de la lucha por
han conseguido una aceptación doctri-
UNZUETA, M.A., “La acción positiva: análisis del la igualdad efectiva como el principio de
concepto y propuesta de revisión”. Ponencia pre- nal pacífica. La controversia ha girado,
un camino equilibrado hacia la idea de
sentada a las Jornadas de políticas locales para la principalmente, en torno a aquel con-
igualdad entre hombres y mujeres, Palacio de Con- paridad y el consenso hacia un nuevo
tenido de acción positiva consistente
gresos Europa, Victoria-Gasteiz, 2002, p. 161. pacto social 15. La igualdad de oportuni-
en otorgar un trato preferente o en re-
14 dades entre hombres y mujeres ha de
servar un porcentaje a fin de elevar la
RUIZ MIGUEL, A., “La discriminación inversa estar presente en cualquier fase del re-
y el caso Kalanke”, DOXA núm. 19, Alicante, representación o masa crítica de las mu-
corrido y no sólo en la inicial. Resulta-
1996, p. 135. jeres en un sector o ámbito determi-
ría, pues, poco convincente que la
15 nado. Es el caso de la cuota o reserva en
igualdad sólo pueda ser promovida, pe-
BALLESTRERO, M.V., “Acciones positivas. las listas electorales 13.
Punto y aparte”, DOXA, núm. 19, Alicante, ro no realizada por lo que el objetivo de
1996, p. 100. Para autores como REY MARTÍ- Estas medidas de acción positiva han de estas prácticas o medidas no sólo reside
NEZ, un sistema de cuotas en favor de las muje- en remover los obstáculos, sino también
res, supondría igualar en el resultado (al 50%) y,
cumplir con el objetivo de aumentar la
por lo tanto, eliminar el mérito y el esfuerzo per- representación del colectivo femenino en corregir, en la práctica, las desigual-
sonal produciéndose un perjuicio correlativo al infravalorado y/o infrarrepresentado, al dades sociales existentes con el fin de
beneficio de la persona favorecida por la medida.
REY MARTÍNEZ, F., “El principio de igualdad tiempo que eliminar un posible retro- que hombres y mujeres tengan la posi-
y el derecho fundamental a no ser discriminado ceso perpetuando las oportunidades y bilidad de alcanzar un mismo resultado.
por razón de sexo”, La Ley, Año XXI, núm. permitiendo la opción a resultados en Sólo entonces comenzará realmente, a
4.984, 2000, pp. 4-5. Además, también utiliza,
como argumento accesorio, que las mujeres no términos de paridad. mi entender, la carrera hacia la corres-
están en minoría numérica y, por lo tanto, no ne- ponsabilidad, el equilibrio cualitativo y,
cesitan una protección especial. En este sentido, la promoción de la igual- en definitiva, la paridad.
16
dad de oportunidades que persigue la
SALAZAR BENÍTEZ, O., Las cuotas electorales cuota como medida de acción positiva ha En el caso de la cuota o reserva electo-
femeninas: una exigencia del principio de igual- de implicar su consecución real y efecti- ral, el criterio legitimador relevante que
dad sustancial. Contra el monopolio de los púl-
pitos, V Premio Cátedra Leonor de Guzmán.
va, es decir, la igualdad de resultado. En justifica esta medida de acción positiva
Diputación de Córdoba, Delegación de la mujer. sentido contrario, como bien ha señala- en el ámbito político es la infrarrepre-
Universidad de Córdoba, Córdoba, 2001, p. 16. do Alfonso Ruiz Miguel, ¿de qué nos sir- sentación sistemática de las mujeres en
Y profundiza sobre obstáculos de diversa índole
que la mujer encuentra para inmiscuirse en la ve la primera sin la segunda 14 ? Es decir, los lugares de decisión en contra de la
vida política, en las pp. 23-40. Sobre esto últi- ¿de qué sirve propugnar la igualdad de legitimidad del sistema de representa-
mo, en general, la obra colectiva dirigida por ción democrática.
URIARTE E., y ELIZONDO A., Mujeres en po-
oportunidades sin poder emprender me-
lítica, Ariel, Barcelona, 1997. didas que garanticen la efectividad de esa
Es sabido que lo que ha mantenido y
igualdad, eliminando las desigualdades
17 aún mantiene a la mujer alejada de la
AGACINSKI, S., Política de sexos, ob. cit., p. 82 de hecho de las que es objeto, en este es-
toma de decisiones públicas es la con-
y ss. La autora considera, creo que acertadamen- tudio, el género femenino?
te, que “el tema de la división sexual de las tareas cepción patriarcal heredada, fundamen-
en la vida privada no está resuelto. Y la sociedad De este modo, siguiendo a Ballestrero, talmente, de la sociedad liberal que
deberá encontrar los medios de reemplazar las mu-
jeres y la estructura doméstica para cuidar y edu-
la igualdad de oportunidades perse- reservó para la mujer el ámbito de lo pri-
car a los hijos. (…) es esencial que desaparezca la guida por una acción positiva como la vado excluyéndola de lo público 16. Ello
economía familiar en la que la mujer es una cria- reserva electoral significa también la po- hizo que, aún en nuestros días, la visión
da por naturaleza (…). Ello supone transformar
la oposición entre lo interior y lo exterior, es decir, sibilidad, para los miembros del género masculina sobre la división del trabajo
cambiar las formas de trabajar en general, tanto femenino, de “competir con armas pa- suponga un coste personal muy elevado
dentro como fuera, especialmente disminuyendo el
tiempo de trabajo tanto para los hombres como pa-
rejas” en las mismas condiciones que el para las mujeres 17. Pese a haberse reco-
ra las mujeres”. género masculino obteniendo la posibi- nocido el derecho al voto para las mu-

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jeres en las primeras décadas del siglo sentado, imposibilitando la capacidad


XX, no siempre han podido utilizarlo real para, en representación de su cargo
para equilibrar la presencia de hombres y del pueblo soberano, modificar es-
y mujeres en la representación política 18. tructuras sociales, económicas, cultura-
Sin embargo, se parte de la idea de que les, jurídicas o políticas.
todos y todas han de estar en las deci-
Para ello, también es preciso obtener de
siones que les conciernen. Por ello, in-
los partidos políticos un compromiso de 18
cluso iniciado el siglo XXI, la imposición
paridad y, asimismo, han resultado con- AGUILAR RIVERO, R., “Participación política
de cuotas electorales ideadas con el fin
venientes cambios normativos para ga- y copartición del poder”, cit., p. 70.
legítimo de permitir el ejercicio del de-
rantizar la participación de la mujer en 19
recho a la igualdad de las mujeres no ha
la política como ha supuesto la reciente En general, SALAZAR BENÍTEZ, O., Las cuo-
de verse limitada por meros argumen- tas electorales femeninas: una exigencia del prin-
Ley sobre igualdad 22.
tos de carácter político, sociológico, an- cipio de igualdad sustancial. Contra el monopolio
de los púlpitos, ob. cit., pp. 77 y ss.
tropológico o de cualquier otra índole De este modo, se han ido incluyendo
que empañen tal fin 19. Es un hecho que 20
sistemas de cuotas en el fuero interno
Pueden verse las cifras en www.mtas.es.
la participación de las mujeres en polí- de los partidos políticos, generalmente,
tica ha evolucionado notablemente en 21
en los de ideología más progresista. No
El profesor SALAZAR BENÍTEZ, considera
los últimos diez años 20. obstante, aunque la implantación de es- oportuno establecer una relación proporcional
ta medida ha ido surtiendo efectos po- entre la reserva porcentual y el porcentaje de
mujeres afiliadas a los partidos políticos. SALA-
No obstante, es primordial mantener y sitivos en la presencia de mujeres en ZAR BENÍTEZ, O., Las cuotas electorales feme-
acelerar la evolución y, especialmente, instituciones políticas, no ha podido re- ninas: una exigencia del principio de igualdad
no sufrir retrocesos en el aumento de la conocerse, hasta el momento, el mismo sustancial. Contra el monopolio de los púlpitos, ob.
cit., p. 172. No obstante, la STC 127/2007, de
presencia de las mujeres en los lugares avance en representación efectiva y tam- 22 de mayo, no considera necesario el requisito
en los que se adoptan decisiones políti- poco en los órganos de dirección y de de la afiliación para cumplir con las exigencias de
cas que reviertan al conjunto de la so- toma de decisiones 23. la LO 3/2007 para la igualdad efectiva de muje-
res y de hombres.
ciedad. En esta línea, parece esencial que
22
las mujeres estén visualizadas en cual- 3. LA RESERVA ELECTORAL Ley Orgánica 3/2007, de 22 de marzo, para la
quier puesto o cargo político porque co- VÍA LEGISLATIVA igualdad efectiva de mujeres y hombres. AGUI-
participar en el centro de la toma de LAR RIVERO, R., “Participación política y co-
La medida de acción positiva más efec- partición del poder”, cit., p. 73.
decisiones para con la sociedad ayudará
a cambiar la sociedad misma. Por esto, tiva para favorecer la representación 23
equilibrada de mujeres y de hombres co- SALAZAR BENÍTEZ, O., “La presencia de la
un instrumento necesario para construir mujer en los cargos públicos representativos”,
la senda hacia la igualdad y cuestionar mo corrector necesario para aumentar, cit., p. 109.
el viejo pacto reivindicando un lugar ple- siguiendo una expresión de Freixes San- 24
no en la sociedad, en tanto ciudadanas, juán, la “calidad”24 de la toma de deci- FREIXES SANJUÁN, T., “El impacto diferen-
para las mujeres (y para los hombres), siones, es la vía de la reserva electoral cial de los sistemas electorales en la representa-
ción política de las mujeres”, en SAAVEDRA
puede ser la cuota o reserva electoral. legislativa. Ello implica reservar un por- RUIZ, P., (Dir.) Hacia una democracia parita-
Entendida ésta como la reserva de un centaje al género infrarrepresentado ba- ria. Análisis y revisión de las leyes electorales vi-
jo un soporte normativo para obtener gentes, CELEM, Madrid, 1999, p. 87.
porcentaje para las mujeres o, en senti-
do neutro, el género subrrepresentado, una masa crítica o representación sufi- 25
ciente de ambos géneros que asegure la Algunos, de índole socio política y otros argu-
en las candidaturas electorales. Gene- mentos de este tipo han sido resumidos por el
ralmente, se ha optado por porcentajes paridad y, en definitiva, la calidad en la profesor SALAZAR BENÍTEZ, O., Las cuotas
entre el 25%, en las formaciones políti- toma de decisiones. electorales femeninas: una exigencia del princi-
pio de igualdad sustancial. Contra el monopolio
cas o en las disposiciones normativas más de los púlpitos, ob. cit., pp. 77 y ss. También, del
No obstante, esta opción para la conse-
pioneras, y el 40% e incluso el 50% en mismo autor, “La presencia de la mujer en los
cución de la igualdad de género en ma- cargos públicos representativos”, Cuadernos
las más modernas y comprometidas. Ta-
teria política no ha estado exenta de Constitucionales de la Cátedra Fadrique Furió
les porcentajes se suelen establecer en Ceriol, núm. 25, Valencia, 1998, pp. 118-120.
continuas y diversas polémicas. Existen
términos proporcionales al número de 26
muchos argumentos de variada natura-
mujeres y hombres que opten a la can- Como bien señala Francine Demichel, se ha de
leza en contra de la denominada “cuo-
didatura e, inicialmente, de entre las per- rechazar “una fotografía de las diversidades
ta” vía legislativa 25. sociales”. DEMICHEL, F., “À parts égales: con-
sonas afiliadas a la formación política 21. tribution au débat sur la parité”, Recueil Dalloz
Asimismo, es importante que, en tér- Así, cabe señalar, a modo de ejemplo, Sirey, núm. 12, 1996. También, sobre la con-
minos de Democracia paritaria, la cuo- el presunto conflicto entre la reserva fusión entre “representación” y “representa-
tividad”, SARTORI, G., “En defensa de la
ta cuantitativamente expresada incluya electoral y los conceptos de repre- representación política”, Claves, núm. 91, abril
un punto de vista cualitativo, de modo sentación y soberanía. Al respecto, 1999, pp. 2-6. Sobre la idea de Demichel, AGA-
CINSKI, S., Política de sexos, ob. cit., p. 169.
que lo que se pretende es que ninguno considero relevante apuntar que el MARTÍNEZ SAMPERE, E., “La legitimidad de
de los géneros permanezca infrarrepre- reconocimiento de la dualidad del ser la democracia paritaria”, cit., p. 147. Véase sobre

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humano es necesario para garantizar la titucional francés consideró contraria a


existencia de una representación mixta, la Constitución francesa la adopción de
de hombres y mujeres, que representen medidas de carácter legislativo encami-
al conjunto de la Nación. Ahora bien, nadas a incrementar la presencia de las
no se ha de confundir la representación mujeres en las listas electorales 28. Desde
del cuerpo electoral con la copia exacta 1993 se fraguó la existencia de un sec-
de la sociedad 26. De este modo, el he- tor doctrinal que propugnó una refor-
el concepto de representación la conocida obra
de PITKIN, H.F., El concepto de representación,
cho de que el ejercicio de la soberanía y ma constitucional que permitiese la
Centro de Estudios Constitucionales, Madrid, de la facultad de representar al pueblo posibilidad de adoptar medidas a favor
1985. en su conjunto sea compartido entre de las mujeres. La base de esta deman-
27 hombres y mujeres significa, preci- da radicó en que el artículo 3 de la
En conexión con la concepción de Montes- samente, que el monopolio de la so- Constitución francesa hacía referencia a
quieu, “la representación política no puede en-
tenderse como reproducción exacta de algo, sino
beranía y la representación no ha de los dos géneros para determinar la con-
como la creación de una figura que lo exprese y atribuirse a ningún ser humano en ra- dición de electores y el ejercicio del de-
represente”. AGACINSKI, S., Política de sexos, zón de su género. La representación recho de sufragio activo pero no así para
ob. cit., p. 167. MARTÍNEZ SAMPERE, E.,
“La legitimidad de la democracia paritaria”, equilibrada de hombres y de mujeres no el sufragio pasivo. Tras la reforma del
cit., p. 147. MARTÍNEZ SAMPERE, E., “La ha de sugerir la idea de reproducir las año 2000, el texto actual contempla en
legitimidad de la democracia paritaria”, cit.,
p. 146.
diversas situaciones o grupos sociales 27. el último párrafo del mismo artículo 3
Así, parece que la medida de acción po- que “La ley favorecerá el igual acceso de
28
sitiva consistente en la reserva electoral mujeres y hombres a los mandatos elec-
La medida consistió en que la Ley electoral dis-
pusiera la imposibilidad de que una lista electo- vía legislativa en favor de la inclusión de torales y a las funciones electivas”, a lo
ral no pudiera tener más del 75% de candidatos las mujeres en la representación políti- que han de contribuir, según el artícu-
del mismo sexo. Ya en 1999 se declaró incons-
titucional la paridad de sexos en las candidatu-
ca no vulnera per se la idea de la repre- lo 4 párrafo final, los partidos y las for-
ras a consejeros regionales. MOSSUZ-LAVAU sentación ni el principio de soberanía, maciones políticas 29.
J., Femmes/Hommes. Pour la parité, Ed. Presses sino que, por el contrario, perfecciona
de Sciences Po, París, 1998. GUDE FERNÁN-
DEZ, A., “El principio de igualdad: a propósi- y completa ambos conceptos al abogar De este modo, quedó resuelta la cues-
to de las discriminaciones y acciones positivas por la igualdad de género en el acceso tión posibilitando la adopción de medi-
(una visión europea)”, cit., pp. 164 y 166 (nota y en la permanencia a los cargos públi-
56).
das positivas acordes a la Constitución
cos representativos. Esta igualdad, lle- francesa. Feminizada la Constitución só-
29 vada a la máxima optimización, implica lo quedaba recomponer la ley electoral.
En versión original: “Article 3. (…) La loi favo-
rise l’égal accès des femmes et des hommes aux
la realización de un equilibrio cualitati- Así, en Francia se introdujo un sistema
mandats électoraux et fonctions électives. Article vo o paridad en la que Hombre y Mu- alternativo en la ordenación de las listas
4. Les partis et groupements politiques (…) con- jer han de participar en el poder como
tribuent à la mise en ouvre du principe énoncé
electorales con un resultado del 50% de
au dernier alinéa de l’article 3 dans les condi- representantes de un pueblo soberano representación de cada género para elec-
tions déterminées para la loi”. Sobre los prelimi- formado, esencialmente, por hombres y ciones municipales de más de 3.500 ha-
nares de la reforma constitucional, véase La
parité entre les femmes et les hommes à portée
mujeres, con independencia de su per- bitantes, senatoriales proporcionales –no
de main. Loi 6 juin 2000, Observatoire de la tenencia a cualquier otro enclave social, las uninominales– y europeas, con el fin
parité entre les femmes et les hommes. ROUS- económico, cultural o jurídico.
SEAU, D., “Los derechos de la mujer y la
de cumplir con el mandato del artículo
constitución francesa”, Mujer y Constitución en 3 de su Constitución 30 . En el caso de
España, Centro de estudios políticos y consti- 1 elecciones para senadores y senadoras y
tucionales, Madrid, 2000, p. 110.
La práctica positiva: europeas, la alternancia es obligatoria
30 la cuota electoral en Francia desde el principio hasta el fin de la lista.
Así, la Ley 493/2000 de 6 de junio tendente a Para las elecciones municipales y para la
favorecer el igual acceso de mujeres y hombres a El precedente europeo más claro y po-
los mandatos electorales y funciones electivas re- Asamblea de Córcega la paridad debe-
sitivo en la adopción de una medida de
za, literalmente, en favor de la alternancia que ría ser respetada por grupos de seis per-
“Sur chacune des listes, l’écart entre le nombre des acción positiva de reserva electoral que
sonas candidatas 31. El problema en este
candidats de chaque sexe ne peut être supérieur à se articule desde una perspectiva legis-
un. Chaque liste est composée alternativement punto, especialmente en el primer su-
d’un candidat de chaque sexe”.
lativa ha sido el caso francés.
puesto, se presentó cuando se averiguó
31 Francia ha realizado, pioneramente, múl- que los partidos no incluían mujeres en
GUDE FERNÁNDEZ, A., “El principio de tiples intentos de adoptar medidas que sus respectivas listas electorales para cum-
igualdad: a propósito de las discriminaciones
y acciones positivas (una visión europea)”, cit.,
persiguiesen la igualdad real entre hom- plir con el tenor de la ley en cuanto a
p. 167. bres y mujeres en materia política y, aun- disposición de personas candidatas. In-
32
que muchos fueron en vano y sin éxito, cluso, algunas personas llegaron a ad-
Sobre este particular es especialmente ilustrativa se consolidaron en una voluntad clara y mitir que el incremento de mujeres en
la información dada por el artículo de prensa firme en aras de la paridad. En cuanto a sus respectivas listas se produjo gracias
“Los partidos franceses no tienen mujeres para
cumplir con la ley de paridad”, en el Diario El
los intentos frustrados, se ha de men- a la suma de las esposas y de las hijas de
País, 28 de enero de 2000. cionar que ya en 1982, el Consejo Cons- los militantes 32.

27
D E R E C H O E S P A Ñ O L

No obstante, puede que fuera lógica es- alcalde en la región de Blois 36 . Pero la
ta reacción en virtud de las sanciones reforma francesa, también, ha suscitado
contenidas en la Ley sobre la financia- apoyos y, sobre todo, la voluntad de
ción, en caso de incumplimiento, de los otros de seguir la misma dinámica.
partidos políticos. Tales penalizaciones Cuanto menos, ha de reconocerse la fa-
consistieron en un 5% menos de sub- cultad de eliminar obstáculos que impe-
vención pública si la lista presentaba un dían la consecución de la igualdad,
10% más de hombres, descuento que aunque ello significase embarcarse en
podía llegar al 50% si la lista fuera ex- una reforma constitucional y electoral.
clusivamente masculina o femenina. Me Cabe esperar que se extiendan estas pre-
parece importante destacar que la Ley visiones a las listas electorales para elec-
francesa apostó, en este sentido, por una ciones generales y que los partidos
democracia representativa plena o lo que cuenten previamente con las militantes
ya se ha denominado Democracia pari- en sus listas para no recurrir a ingenio-
taria. Es decir, tan incompleta resulta, 33
sos pero poco deseables recursos que a
Por ejemplo, había un 10,9% de diputadas, un
a mi juicio, una representación que se la larga perjudiquen la estabilidad y per- 5,9% de senadoras, un 25% en las asambleas re-
califica de democrática construida sólo durabilidad de la auténtica igualdad. Un gionales y un 8,1% de alcaldesas. A partir de las
por hombres como una construida úni- elecciones municipales del año 2001, el número
dato significativo de progreso puede con- de mujeres que formaban parte de los Ayun-
camente por mujeres. Respecto a los siderarse el hecho de que, en las últimas tamientos se duplicó con un porcentaje de mu-
resultados, se ha de concluir que, en ge- elecciones a la presidencia de la Repú- jeres contundente del 47’5% de los concejales
electos en los municipios de más de 3.500 habi-
neral, fueron positivos 33. blica del pasado mes de mayo de 2007 tantes. ROUSSEAU, D., “Los derechos de la
existiera una importante oposición po- mujer y la constitución francesa”, cit., p. 103.
No obstante, en realidad, la igualdad SALAZAR BENÍTEZ, O., Las cuotas electorales
lítica del partido socialista francés lide-
real está en otra parte y la paridad numé- femeninas: una exigencia del principio de igual-
rado por una mujer, Segolène Royal. dad sustancial. Contra el monopolio de los púlpi-
rica en el caso francés no siempre ha ase- tos, ob. cit., pp. 126-127.
gurado la paridad cualitativa ya que los La solución francesa me merece una va-
34
recelos de los partidos para colocar a mu- loración completamente positiva y un Por ejemplo, tras estas míticas elecciones, sólo
jeres en sus filas se agudizaron y en las ejemplo que pone en evidencia que, en cuatro mujeres entre treinta y dos hombres al-
elecciones legislativas las grandes forma- ocasiones, la carencia de una formulación canzaron a situarse en la cabeza de ciudades con
más de 100.000 habitantes (Estrasburgo, Lille,
ciones prefirieron soportar la sanción per- seria y responsable para la previsión de Caen y Aix-en-Provence). Joaquín PRIETO,
tinente antes que poner el 50% de mujeres una reserva electoral vía legislativa que “Las mujeres gobiernan en la mitad de las con-
en sus listas 34. O, por el contrario, hubo incremente el aumento de la participa- cejalías de Francia gracias a las cuotas”, en el
Diario El País de 27 de marzo de 2001 y “Adiós
quien no quiso perder su financiación ción de las mujeres en la vida política al sueño de la paridad”, en el Diario El País de 2
cumpliendo rigurosamente con la Ley responde a una falta de voluntad políti- de junio de 2002.
francesa pese a considerar una falacia la ca. La misma falta de motivación que 35
práctica de las cuotas femeninas 35. En fin, conduce a las formaciones políticas a Los partidos se preocuparon más de calcular
cuánto les iba a costar la ilegalidad que de cómo
diversas motivaciones políticas fueron es- cumplir relajadamente o a incumplir el iban a cumplir con la paridad. Joaquín PRIETO,
grimidas para cumplir o incumplir con la paradigma de la Democracia paritaria. “Adiós al sueño de la paridad” en el Diario El
cuota pero todas ellas estuvieron alejadas Cuando la reserva electoral y la garantía País, de 2 de junio de 2002.

de los ideales de la Democracia paritaria. de la Democracia paritaria se plasman en 36


una norma, se reducen, a mi modo de Joaquín Prieto “Las mujeres gobiernan en la mi-
La iniciativa francesa despertó numero- tad de las concejalías de Francia gracias a las cuo-
ver, las decisiones arbitrarias por las que tas”, en el Diario El País, de 27 de marzo de
sas reticencias. Fundamentalmente, se
se deja a merced de las conciencias de las 2001.
criticó su rigidez ya que la Ley obligó a
formaciones políticas la consecución de 37
que no hubiese una diferencia mayor de
la igualdad real de género. En este senti- Consúltese el artículo de prensa de Anabel
un 2% entre el número de personas can- DÍEZ, “Francia aprueba una ley que exigirá la
do también se pronunció Maurice Leroy,
didatas de uno y otro género o, incluso, paridad de hombres y de mujeres en las listas
un diputado conservador francés a raíz electorales”, en el Diario El País, de 27 de ene-
obligó a la estricta paridad cuantitativa ro de 2000.
de la Ley de paridad en Francia al pro-
del 50% de manera que un partido que
clamar que “la Ley está muy bien porque 38
dispusiera para la representación políti- La sentencia ha suscitado numerosos comenta-
nos impondrá la voluntad política que
ca de ambos géneros una horquilla en- rios de la doctrina italiana. Por todos, PIZZO-
siempre nos ha faltado”37. RUSSO A., e ROSSI, E., “Le azioni positive in
tre el 60% y el 40%, recibiría un 10%
materia elettorale in Italia” en BECCALLI, B.,
menos en las ayudas públicas. Cierta- Creo que es importante trasladar este (a cura di), Donne in quota, p. 185. DE SIER-
mente, puede que tal rigidez motivase sentir al caso español para comprender VO, U., “La mano pesante della Corte sulle
‘quote’ nelle liste elettorali”, en Giurisprudenza
la necesidad de colocar mujeres en las que, en puridad, las razones que se es- Costituzionale, núm. 5, 1995, pp. 3.268 y ss.
listas de partido a toda costa provocan- grimen en contra del sistema de reserva
39
do anécdotas variadas como la reserva electoral en aras de la igualdad de gé- BALLESTRERO, M. V., “Acciones positivas.
de una plaza de concejala a la abuela del nero suelen sustentarse en razones de Punto y aparte”, cit., p. 102.

28
D E R E C H O E S P A Ñ O L

índole política más que jurídica y que, Según tal afirmación, el Tribunal Cons-
en consecuencia, lo que falla es la vo- titucional italiano consideró que, en ma-
luntad política y no la adecuación jurí- teria de derechos fundamentales, toda
dico constitucional. diferenciación que se basase en razones
relativas al género sería contraria al prin-
2 cipio de igualdad y, por lo tanto, dismi-
La experiencia negativa: nuiría para unas personas, en favor de
la cuota electoral en Italia otras, el contenido de un derecho fun-
damental como es el derecho de sufra-
El hecho de que se contemple legislati- gio pasivo 42 .
vamente la reserva de personas candi- Antes de cuestionar si, efectivamente, la
datas en las listas electorales en base a la reserva de candidaturas afecta al conte-
infrarrepresentación y a la situación de nido esencial del derecho fundamental
40
desigualdad fáctica, ha suscitado polé- al sufragio pasivo, es pertinente matizar
Así lo señaló la Corte italiana respecto de la si- mica en torno a la incidencia negativa que, a diferencia de la Constitución es-
tuación de la mujer en la SCI núm. 109 de 26 que estas medidas de acción positiva pañola, el artículo 3 de la Constitución
de marzo de 1993 al afirmar que la acción posi- puedan tener en el contenido de otros
tiva supone un “diretti a colmare, o comunque italiana recoge tanto el principio de
ad attenuare un evidente squilibrio a sfavore de- derechos fundamentales. En este caso, igualdad ante la ley y el principio de no
lle donne, che, a causa di discriminazioni accu- el derecho al sufragio pasivo. discriminación por razón de sexo como
mulatesi nel corso della storia passata per il
dominio di determinati comportamenti sociali o el mandato dirigido a los poderes pú-
modelli culturali, ha portato a favorire le perso- Tal argumento surgió en Italia a raíz de blicos de remover los obstáculos para
ne di sesso maschile nell’occupazione delle posizio- la Sentencia de la Corte Costituzionale que el pleno desarrollo de la persona y
ni di imprenditore o di dirigente d’azienda”.
Véase la STJCE de 17 de octubre de 1995. Ec- núm. 422, de 6 de septiembre de 1995, la participación de todos sea efectiva en
khard Kalanke c. Freie Hansestadt Bremen. sobre el sistema de cuotas en las listas la organización política, económica y so-
Asunto 450/93. electorales 38. El juicio de inconstitucio- cial del país. (Art. 3, 2º inciso CI) 43.
nalidad se efectuó sobre las disposicio-
41 nes que preveía la ley núm. 81/1993 en En atención a este contenido, el párra-
La cursiva es mía a fin de resaltar la parte nove- torno a la reserva de personas candida- fo segundo del artículo 3 de la CI justi-
dosa del juicio emitido por la Corte Costituzio- fica los supuestos legislativos que, pese
nale. tas de cada género en, al menos, un ter-
cio de las candidaturas 39. En el artículo a estipular una diferencia de trato inicial
5.1 de la citada ley se establecía que “en por pertenecer a uno u otro sexo, pre-
42 tenden restablecer la igualdad de con-
las listas de las personas candidatas, nin-
El Alto Tribunal italiano afirmó para el derecho
de sufragio pasivo en particular que “toda di- guno de los sexos podrá estar represen- diciones, particularmente, cuando se
ferenciación por razón de sexo no puede no tado ‘por norma’ en medida superior a trata de intervenciones positivas de
parecer objetivamente discriminatoria, al dis- los poderes públicos que favorezcan a
minuir para algunos ciudadanos el contenido
dos tercios”.
concreto de un derecho fundamental a favor de determinados sujetos o sectores de la so-
otros, pertenecientes a un grupo que se considera La Corte Costituzionale determinó un ciedad que se encuentren en una situa-
desaventajado”. BALLESTRERO, M.V., “Ac-
ciones positivas. Punto y aparte”, cit., p. 103. juicio favorable en cuanto al objetivo y ción de infravaloración social 44.
También, NAVAS SANCHEZ, M.M., “Comen- al cometido, en aras de la igualdad en el
tario a la sentencia núm. 422/1995 de la Corte La Corte italiana insistió en que, en es-
punto de partida y la igual dignidad so-
Costituzionale italiana” Artículo 14. Una pers- te caso, garantizar a las candidatas un
pectiva de género, núm. 3, enero, 2000, Instituto cial, de las medidas de acción positiva en
porcentaje en las listas electorales supo-
Andaluz de la Mujer, pp. 28 y ss. el mismo sentido que lo hizo el Tribunal
ne quitar, automáticamente, dicho por-
de Justicia de las Comunidades Euro-
centaje a los candidatos que pretenden
43 peas 40 . Sin embargo, al referirse al con-
presentarse y, por ello, se vulneran los
CARMONA CUENCA, E., “El principio de tenido de tales medidas, el Alto Tribunal
igualdad material en la jurisprudencia del Tribu- derechos individuales fundamentales de
italiano añadió un nuevo argumento me-
nal Constitucional”, en Revista de Estudios Polí- estos últimos. En sentido contrario,
ticos, separata núm. 84, 1994, p. 272. diante la siguiente afirmación: “las me-
comparto con Ballestrero que la cuota
didas intencionadamente desiguales,
no disminuye el contenido del derecho
pueden ciertamente adoptarse para com-
44 de los miembros del grupo aventajado,
pensar y remover desigualdades entre los
Idem, cit., p. 273. También, recientemente, sino sólo la condición sustancial de
RUIZ RODRÍGUEZ, B., y RUBIO MARÍN, individuos (como presupuesto del pleno
R., “De la paridad, la igualdad y la representa-
ventaja que permite únicamente a los
ejercicio de los derechos fundamentales),
ción en el Estado democrático”, cit., pp. 124 pertenecientes a dicho grupo gozar ple-
y ss. no pueden, en cambio, incidir directa-
namente de su derecho 45.
mente en el contenido mismo de los de-
rechos, rigurosamente garantizados en En esta línea, la Corte italiana ha afir-
45
Así lo entiende BALLESTRERO, M.V., “Accio-
igual medida a toda la ciudadanía en mado que el principio de igualdad sus-
nes positivas. Punto y aparte”, cit., pp. 107-108. cuanto tales” 41. tancial otorga eficacia y amplitud al

29
D E R E C H O E S P A Ñ O L

principio de igualdad ante la ley, de ma- Además, el art. 51.1 CI prevé, en con-
nera que las medidas desiguales que atri- sonancia con el art. 23.2 CE, que “to-
buyen ventajas a grupos socialmente dos los ciudadanos de uno u otro sexo
infravalorados son legítimas en cuanto podrán desempeñar cargos públicos y
tiendan a asegurar la igualdad de opor- puestos electivos en condiciones de igual-
tunidades 46. dad, según los requisitos establecidos por
las leyes”. Del tenor literal de este pre-
Pero, en este caso, la Corte italiana, va- cepto y del art. 3 CI se deduce la posi-
lorando el contenido de las acciones po- bilidad de adoptar medidas tendentes a
sitivas al hilo de la sentencia citada, lograr la igualdad y a eliminar las desi-
consideró que un tratamiento diferen- gualdades fácticas a través de una ley que
cial de tipo preferencial como el que determine en qué términos concretos se
consiste en una reserva porcentual en las ha de aplicar la medida de acción positi-
candidaturas no se propone remover los va de la reserva electoral. Precisamente,
obstáculos en el punto de partida, sino si se está modulando e, incluso, delimi-
que atribuye directamente resultados 47. tando o limitando el ejercicio de un de-
En sentido contrario, y a mi juicio acer- recho fundamental se estará ante una
tadamente, Ballestrero ha afirmado que mayor seguridad jurídica frente a la po-
“la regla que reserva a los candidatos sible discrecionalidad de la persona que
de cada sexo una cuota mínima en las legisla, frente al resto de los poderes pú-
listas electorales no garantiza a ninguno blicos y de los agentes sociales si la reor-
de los géneros una cuota de los puestos de ganización que afecte al ejercicio de un
liza; los pone sólo en condiciones de parti- derecho fundamental es efectuada por
cipar en la competición electoral, recupe- ley en virtud de mandato constitucional.
46
rando una desventaja en los puntos de De este modo, quien prefiera entender Idem, cit., pp. 106-107.
partida”. Continúa exponiendo la auto- la reserva electoral como un límite al ejer-
47
ra que “garantizar el acceso a las listas cicio de un derecho fundamental ha de
Comparte una idea similar REY MARTÍNEZ,
electorales no significa más que ‘promover’ admitir que tendrá que ser recogida, so- F., “Cuotas electorales reservadas a mujeres y

iguales oportunidades de acceso a los car- bre todo o en los mínimos esenciales, por Constitución”, Aequalitas, núm. 1, 1999, p. 7.

gos electivos”. Aún se deberá esperar a que ley, con independencia de que las for- 48

la visión o perspectiva de género del par- maciones políticas puedan y quieran me- BALLESTRERO, M.V., “Acciones positivas.
Punto y aparte”, cit., p. 105. RUIZ RODRÍ-
tido político sitúe a las mujeres en pues- jorar las condiciones de aplicación de la GUEZ, B., y RUBIO MARÍN, R., “De la pari-
tos de liza con posibilidades efectivas de exigencia de paridad de género en ma- dad, la igualdad y la representación en el Estado
teria legislativa electoral 51 . democrático”, cit., p. 132.
traducirse en escaños. Si, como entien-
49
do, el resultado es parte de la oportuni- En el cumplimiento de estos objetivos RUIZ MIGUEL, A., “Paridad electoral y Cuo-
dad ¿qué tiene de inconstitucional la no parecen justificarse fácilmente los ar- tas femeninas”, Aequalitas, núm. 1, 1999, p. 5.
efectividad de la igualdad? O, como plan- gumentos empleados por la Corte Cos- Sobre la CI en este punto, CARMONA CUEN-
CA, E., “El principio de igualdad material en la
tea Ballestrero respecto del caso italiano, tituzionale sobre la inconstitucionalidad jurisprudencia del Tribunal Constitucional”, cit.,
“¿Por qué adelantar el umbral de parti- de una ley que prevé una reserva míni- pp. 272 y ss.
da de un grupo desaventajado no debe que- ma de cualquiera de los géneros, preci- 50
rer decir también intervenir con medidas samente, en garantía de las condiciones RUIZ MIGUEL, A., “Paridad electoral y Cuo-
de igualación efectiva?” 48. tas femeninas”, cit., p. 5. Para el juicio de rele-
sustanciales –no procedimentales– de vancia, me remito al conocido trabajo de
igualdad que establece el art. 51.1 CI LAPORTA SAN MIGUEL, F.J., “El principio
Por lo tanto, no se estaría vulnerando el de igualdad: Introducción a su análisis”, Sistema,
para el acceso a cargos públicos y pues-
contenido del derecho de sufragio pasi- núm. 67, 1985.
tos electivos 52.
vo, dado que la reserva electoral sólo 51
establece ciertas condiciones que confi- Aún más contradictoria puede resultar El ejercicio de los derechos, la determinación de
guran y organizan el ejercicio de este la afirmación que realizó la Corte ita- su alcance y sus límites en relación con otros de-
rechos y con su ejercicio por las demás personas
derecho, pero en nada afectan a su con- liana en el fundamento de derecho sép- serán objeto de desarrollo normativo. Así lo es-
tenido esencial en lo que se refiere al timo, párrafo tercero en el que se tablece la STC 160/1986, de 16 de diciembre
FJ 4. En su defecto, será el Tribunal Constitu-
mantenimiento de la correlación entre precisó que “es oportuno observar que cional quien deberá encontrar los criterios para
la voluntad del electorado y la procla- medidas semejantes, constitucional- el establecimiento de los límites dentro del mar-
mación de las personas candidatas 49. Asi- mente ilegítimas en cuanto impuestas gen de libertad constitucionalmente otorgado a
la persona que legisla. MUÑOZ ARNAU, J.A.,
mismo, dichas condiciones establecen, por ley, pueden, en cambio, ser valora- Los límites de los Derechos Fundamentales en el
como se ha apreciado, una diferencia de das positivamente cuando son libre- Derecho Constitucional Español, Aranzadi, Pam-
plona, 1998, pp. 101-105. Póngase en relación
trato justificada en criterios de relevan- mente adoptadas por los partidos con la naturaleza de los derechos de configura-
cia y razonabilidad 50. políticos, asociaciones o grupos que par- ción legal para lo que me remito al trabajo del

30
D E R E C H O E S P A Ñ O L

ticipan en las elecciones (…)” 53 . Para 3


dar validez a este argumento, el Tribu-
La reserva electoral en España.
nal Constitucional italiano desplazó la
Matices doctrinales
trascendencia de la “Convención sobre
sobre su constitucionalidad
los derechos políticos de las mujeres de
1953” y de la “Convención sobre la Eli- En el ordenamiento constitucional es-
minación de todas las formas de Dis- pañol la posibilidad de establecer una
criminación contra la Mujer de 1979” cuota o porcentaje a favor de la mujer en
para ensalzar la importancia de la Re- materia electoral tiene su base jurídica en
solución núm. 169 de 1988 del Parla- la propia interpretación que ha realiza-
mento Europeo. Pese a que sendas do el Tribunal Constitucional español
Convenciones establecen, conforme al sobre el principio de igualdad del artículo
Tratado de Amsterdam de 1997, el de- 14 CE. Como es sabido, el Alto Tribu-
recho de las mujeres a votar y a ser ele- nal reconoció que, si bien el principio de
gidas en condiciones de igualdad para igualdad hace referencia inicialmente a
participar de manera efectiva en el pro- la universalidad de la ley, cabe contem-
ceso de toma de decisiones, el Tribunal plar la conveniencia de que la persona
Constitucional italiano consideró más que legisle otorgue un tratamiento dis-
oportuno tomar como punto de refe- tinto a situaciones efectivamente dife-
rencia la Resolución del Parlamento rentes. Esta necesidad deviene de la
Europeo. Dicho instrumento invitaba exigencia propia de un Estado social y
a que fuesen los partidos políticos los democrático de Derecho que consagra
que incluyesen a las mujeres en las lis- como valor superior, entre otros, la igual-
profesor GARCÍA ROCA, J., Cargos públicos re-
tas electorales de manera voluntaria o dad (art. 1.1 CE). Para ello se atribuye
presentativos. Un estudio del artículo 23.2 de la mediante la reserva de cuotas o por- a los poderes públicos la consecución de
Constitución, ob. cit., pp. 151 y ss. centajes. Para la Corte italiana, el he- las condiciones precisas para que la igual-
52 cho de que se hiciese este llamamiento dad sea real y efectiva. (art. 9.2 CE) 56.
RUIZ MIGUEL, A., “Paridad electoral y Cuo- los partidos políticos y no de manera
tas femeninas”, cit., p. 5.
expresa a los Gobiernos implicó la im- En virtud de todo ello, el Tribunal Cons-
53 practicabilidad, en este campo, de so- titucional ha afirmado que la intervención
NAVAS SANCHEZ, M.M., “Comentario a la luciones legislativas 54 . Sin embargo, el
sentencia núm. 422/19995 de la Corte Costitu-
de los poderes públicos para promover y,
zionale italiana”, cit., pp. 28 y ss. hecho de que el Parlamento Europeo también, remediar la situación descrita no
54
instase a los partidos a llevar a cabo ta- es contraria al principio de igualdad aun
Idem, cit., pp. 28 y ss. les políticas puede responder a simples cuando establezca para las mujeres un tra-
cuestiones prácticas, de fácil aceptación to más favorable puesto que el objetivo
55
También consideran que se incurre en una ab-
para las formaciones políticas y a moti- es tratar de forma diferente a circunstan-
surda contradicción, RUIZ MIGUEL, A., “Pa- vos de una mayor implicación de estas cias que ya lo son desde el punto de vista
ridad electoral y Cuotas femeninas”, cit., p. 5. Y a nivel internacional. fáctico. Así se ha pronunciado el Tribu-
SALAZAR BENÍTEZ, O., Las cuotas electorales
femeninas: una exigencia del principio de igual- nal Constitucional al enunciar que la dis-
dad sustancial. Contra el monopolio de los púlpi- Así, pues, me parece que el hecho de criminación por razón de sexo constituye
tos, ob. cit., p. 158. En sentido contrario, REY
MARTÍNEZ, F., “El principio de igualdad y el
que sea admisible y legítimo que los un rasgo especialmente odioso y, en con-
derecho fundamental a no ser discriminado por partidos establezcan cuotas en favor de secuencia, ha de potenciarse la “voluntad
razón de sexo”, cit., p. 5. Del mismo autor, las mujeres en sus listas de partido, no de terminar con la histórica situación de
“Cuotas electorales reservadas a mujeres y Cons-
titución”, cit., p. 7. Y SÁNCHEZ FERRIZ, R., excluye, necesariamente, la legitimidad inferioridad social y jurídica en la que ha
“La mujeres en las Cortes Generales y en los constitucional de tal reserva vía legisla- persistido la población femenina” 57. Ello
Parlamentos de las Comunidades Autónomas”, tiva ya que no afecta, a mi juicio, al con- implicaría la posibilidad de que el artícu-
en Mujer y Constitución en España, Centro de
Estudios Políticos y Constitucionales, Madrid, tenido esencial del derecho al acceso a lo 14 CE contenga, a partir del principio
2000, p. 226. los cargos públicos representativos del de no discriminación, un mandato espe-
56 artículo 23.2 CE ni a la teoría de la re- cífico de acciones positivas. Se deduce de
Por todas, la STC 49/1982, de 14 de julio. presentación ni a la noción de sobera- estas afirmaciones que el Alto Tribunal
57 nía popular 55. Sólo será posible alcanzar parte de la legitimación constitucional de
Por todas, la STC 128/1987, de 16 de julio. una completa democracia representati- las medidas de acción positiva que pro-
58
va participativa si sus ideales coexisten muevan la igualdad de oportunidades de
Prueba de ello es la única sentencia dictada hasta con la idea de paridad. Por lo tanto, se- aquellas personas afectadas por diversas
el momento en materia de acciones positivas en ría la reserva electoral legislativa la me- formas de discriminación y desigualdad
el asunto sobre la reserva de cuotas para perso-
nas discapacitadas en la Administración canaria.
dida de acción positiva más idónea para que las sitúan en condiciones desfavora-
STC 269/1994, de 3 de octubre. caminar hacia la igualdad efectiva. bles de partida 58.

31
D E R E C H O E S P A Ñ O L

Asimismo, resulta de interés mencionar propias compañeras”. Es lo que se ha


que ya en el año 1989 el Ministerio para llamado ‘efecto boomerang’ 60 .
las Administraciones Públicas elaboró un
documento para recoger la doctrina del A partir de esta cuestión, cabe pregun-
Tribunal Constitucional en un intento tarse si, como en similares términos plan-
pionero de justificar la admisión consti- tea Salazar Benítez, ¿acaso la designación
tucional de las acciones positivas, en este por cooptación ofrece mayores garan-
caso, en las administraciones públicas 59. tías objetivas para una buena actuación
en el cargo concreto que el acceso vía
No obstante, el Tribunal Constitucional cuota? 61. O, dicho de otro modo, a efec-
también advierte que el género de una tos de méritos y capacidades políticas,
persona no es, por sí mismo, un privile- ¿qué diferencia hay entre la cuota vía le-
gio, por lo que una medida de acción po- gislativa a favor de la igualdad de géne-
sitiva, aun estando encaminada a acelerar ro que, inicialmente, favorece a las
la igualdad de facto entre el hombre y la mujeres y la ‘cuota invisible’ de la que
mujer, ha de estar sometida a algunos re- ha disfrutado y aún disfruta, de facto, el
quisitos. En primer lugar, ha de consta- colectivo masculino para ocupar la cú-
tarse que la condición de ser mujer está pula política?
acompañada de una posición de inferio- En todo caso, en este momento proce- 59
ridad o desventaja en el ámbito concre- de establecer las principales razones ju- Informe sobre la constitucionalidad de la reserva
to de que se trate. En segundo lugar, la rídicas, que no políticas, que pueden de una cuota a favor de la mujer en los procesos de
desigualdad ha de ser patente para apli- promoción profesional en las Administraciones
legitimar constitucionalmente la reser- Públicas, DCS/cg/503/89, Ministerio para las
car una consecuencia correctora o una va electoral vía legislativa 62. Administraciones Públicas, Instituto Nacional de
medida de acción positiva. Ello alude al Administración Pública, 1989.
posible carácter temporal de estas medi- ■ En primer lugar, desde la doctrina del 60
das, de forma que si la medida se formula Tribunal Constitucional español se REY MARTÍNEZ, F., “El principio de igualdad
legitima la adopción de medias de ac- y el derecho fundamental a no ser discriminado
en términos muy exactos, por ejemplo, por razón de sexo”, cit., p. 4. Del mismo autor,
reservando un porcentaje del 20% en las ción positiva para la igualdad aca- “Cuotas electorales reservadas a mujeres y Cons-
listas electorales únicamente a las muje- bando con las desventajas de las que titución”, cit., p. 5. Según el autor ello supondría
aumentar el sentimiento de inferioridad respecto
res, parece proporcional y justificado que tradicionalmente parten las mujeres. del grupo dominante y provocar el resentimiento
cuando desaparezca la circunstancia que en el excluido, lo que acabaría por aumentar la di-
■ En segundo lugar, el establecimiento visión social en razón del género de las personas.
propició la adopción de esta acción po-
de diferencias normativas por la per- Y ELVIRA PERALES, A., “Representación y se-
sitiva, el objetivo para el que se creó la xo”, en http://constitucion.rediris.es/revista/dc/
sona que legisla se encuentra plena-
medida se habrá cumplido y ésta habrá uno/Elvirat.html (consultada en marzo de 2001).
mente justificado cuando existen causas Para un resumen de tales argumentos, GARCÍA
perdido su razón de ser. DE LEÓN, M.A., “El quid de las estrategias fe-
objetivas y razonables que justifican la
meninas”, Claves de razón práctica, núm. 50, 1995,
diferencia en base a la existencia de su- pp. 60-66. También, SALAZAR BENÍTEZ, O.,
De este modo, la reserva electoral, en
puestos de hecho diferentes. El hecho “La presencia de la mujer en los cargos públicos
tanto medida de acción positiva para la representativos”, cit., pp. 118-120.
de que se haya situado a las mujeres en
consecución de la igualdad, no debería 61
una situación de inferioridad a todos
considerarse, a priori y fuera del con- SALAZAR BENÍTEZ, O., Las cuotas electorales
los niveles en razón de su género ha-
texto en el que se va a aplicar, inconsti- femeninas: una exigencia del principio de igual-
ce que se produzcan situaciones de dis- dad sustancial. Contra el monopolio de los púlpi-
tucional en sí misma.
criminación social harto complejas que tos, ob. cit., p. 77 y ss.
justificarían las medidas de acción po- 62
Ahora bien, ¿está legitimada la reserva sitiva con el fin de acelerar la igualdad Parecidas conclusiones en SALAZAR BENÍTEZ,
electoral como medio para conseguir fáctica entre mujeres y hombres 63. O., Las cuotas electorales femeninas: una exigencia
el fin que, como medida de acción po- del principio de igualdad sustancial. Contra el
monopolio de los púlpitos, ob. cit., p. 171 y ss.
sitiva, pretende? En este sentido, Rey ■ En consecuencia, y en tercer lugar,
63
Martínez, entre otros, establece ar- la acción positiva consistente en la En sentido contrario, REY MARTÍNEZ entiende
gumentos en contra. Esgrimen justi- reserva de un porcentaje en las can- que “el camino de la igualdad ‘real y efectiva’ de cual-
ficaciones, sobre todo, de carácter didaturas, me parece constitucional- quier grupo social en desventaja pasa necesariamen-
te por el consenso del grupo que goza de primacía y del
socio-político, entre las que destaca el mente admisible y adecuada porque que no lo está; si se desean resultados duraderos, no se
presunto “riesgo de perpetuar estereo- tal medida persigue un fin legítimo y puede ‘imponer’ la igualdad buscando atajos. A ve-
tipos negativos por el hecho de haber ac- un mandato constitucional: la igual- ces se pretende del Derecho que imponga ahora coac-
tivamente resultados que deberán lograrse después,
cedido a un puesto de representación dad real, entendida como la igual más sólidamente, a través de la educación y la pro-
política vía cuota y no por los propios mé- opción de hombres y mujeres de com- gresiva sensibilización sobre ciertos valores”. REY
MARTÍNEZ, F., “Cuotas electorales reservadas a
ritos, lo cual supone un aislamiento so- petir y de conseguir, efectivamente, mujeres y Constitución”, cit., p. 5. también, ELVI-
cial y profesional incluso por parte de las un mismo resultado. RA PERALES, A., “Representación y sexo”, cit.

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Asimismo, como medio, la reserva da estar representado en más del 60%


electoral también está justificada por- en las listas electorales para la con-
que atiende a criterios de propor- secución de la Democracia paritaria
cionalidad puesto que ésta es la única no tiene por qué ser una medida
medida en su especie capaz de pro- temporal pues está formulada en sen-
ducir una considerable efectividad de tido neutro, a favor de cualquier gé-
la igualdad 64. Si la reserva electoral nero infrarrepresentado.
quiere entenderse desde el perjuicio
■ En quinto lugar, creo que la reserva
a otros –idea que no comparto–, pro-
electoral no vulnera la libertad de can-
bablemente, haya entonces que ad-
didatura en cuanto expresión del plu-
mitir que existan otras prácticas
ralismo político, porque la reserva
menos gravosas. Ahora bien, si estas
trata de pluralizar, mediante la inclu-
implican únicamente esperar a que
sión de géneros y no de monopolizar
se produzca un cambio natural de las
el poder por uno de ellos, a través de
estructuras internas, personales y so-
la exclusión. El control de la procla-
ciales, se ha de renunciar a la efecti-
mación de candidatos se canaliza a tra-
vidad de la igualdad real y, por lo
vés del examen de las causas de
tanto, a su ágil consecución. En nin-
inelegibilidad y de los requisitos para
64
gún caso quiero decir con esto que
ser electo. Por lo tanto, es jurídica-
Sobre el criterio de la proporcionalidad me re- tales reformas sociales no sean nece-
mente conveniente que también ha-
mito a lo establecido en el Capítulo primero de sarias, que lo son. Pero en absoluto
este estudio. ya de estar en la configuración legal
resultan incompatibles, en mi opi-
del sistema la manera de incentivar la
65 nión, con la acción para acelerar el
igualdad de género. En todo caso,
En este plano, la falta de representación sufi- camino hacia la igualdad.
ciente cuantitativa sería un criterio importante según expone el profesor Lucas Mu-
a la hora de ponderar situaciones semejantes. ■ Además, en cuarto lugar, la acción po- rillo De la Cueva, los derechos fun-
Por ejemplo, imagínense que la Administra-
ción Canaria, bajo un programa de acción po-
sitiva tiene una importante causa de damentales de los ciudadanos y de los
sitiva, reserva un porcentaje de sus plazas de justificación para su aplicación: la in- representantes individuales son un lí-
ingeniero informático a mujeres y a discapaci- frarrepresentación. Es importante com- mite que frena la hegemonía del par-
tados. Entre otorgar una última plaza vacante
a un discapacitado o a una mujer, a igual capa- prender que la infrarrepresentación tido 67. Al respecto, Agacinski también
citación, habrá que atender al criterio de la in- de las mujeres en la política y en los entiende que la organización de los
frarrepresentación numérica en el sector de
que se trate.
cargos públicos representativos se partidos no disfruta de una libertad
refiere, inicialmente, a su carencia cuan- ilimitada: debe responder a los prin-
66 titativa 65. Aunque no sólo es una cues- cipios de la democracia. Por lo tanto,
GARCÍA DE LEÓN, M.A., Élites discrimina- tión numérica. Mayor trascendencia los argumentos en contra de la pari-
das. Sobre el poder de las mujeres, ob. cit., p. 42.
La autora advierte que, de lo contrario, casi tiene la inmediata consecuencia de la dad de las candidaturas no se sostie-
siempre habrá unos que decidan sobre otras. Asi- infrarrepresentación cualitativa. Es de- nen si se asocia el objetivo de la
mismo, señala que la élite femenina está “cons-
treñida a las pequeñas porciones de poderes que las
cir, sólo se podrán producir auténticos paridad a la democracia. En este ca-
oligarquías masculinas (por ejemplo, las de los cambios reales si hombres y mujeres, so, continúa exponiendo la autora, no
partidos políticos) graciosamente les entregan y no conjuntamente, se detienen a meditar se alcanza a ver en qué una ley sobre
sin pertinaces presiones”.
lo que quieren obtener entre ambos la paridad de las candidaturas impli-
67 para que sus decisiones reviertan a la caría un atentado superior contra la
LUCAS MURILLO DE LA CUEVA, P., “Los sociedad en su conjunto 66. libertad de los partidos en compara-
problemas constitucionales de la representación
política”, Revista Jurídica del Perú, Año XLVII,
ción con otras normas jurídicas como
Eventualmente, un programa o una
núm. 11, abril-junio 1997, p. 142. la edad mínima para ser elegible, por
medida de acción positiva puede es-
ejemplo 68.
68 tar sometida a parámetros de tem-
AGACINSKI, S., Política de sexos, ob. cit., poralidad, lo que exige la elaboración Por otro lado, como es sabido, el siste-
p. 157.
de un sistema de control periódico ma electoral en el Parlamento español
69 que determine la necesidad de con- es proporcional con listas cerradas y blo-
Sobre el régimen electoral en el ordenamiento tinuar o no aplicando esa medida. queadas 69. En la última década, el nota-
español, véanse, entre otros, SANTOLAYA
MACHETI, P., Manual de procedimiento elec-
No obstante, no considero la tem- ble aumento de la presencia de la mujer
toral, 3ª ed., Ministerio de Justicia e Interior, poralidad un elemento esencial en en la vida política se ha reflejado en
Madrid, 1995. ARNALDO ALCUBILLA, E., la justificación de la acción positiva la composición interna y en la confec-
El régimen electoral de España, Colección Tex-
tos y Documentos, DE ESTEBAN, J., (Dir.), porque el carácter temporal de una ción de las listas electorales de los par-
Centro de Estudios Políticos y Constituciona- medida dependerá del tipo y de su tidos políticos, fundamentalmente, en
les/BOE, Madrid, 1999. BARAS, M. y BOTE-
LLA, J., El sistema electoral, Tecnos, Madrid,
formulación. Por ejemplo, estable- las grandes formaciones políticas y los
1996. cer que ninguno de los géneros pue- partidos de ideología más progresista.

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Hasta el presente, no ha sido posible judicial resultó el orden que siguieron te una presencia femenina del 60%. Es
afirmar que se hubiera producido el en la lista. Entre los seis primeros pues- decir el umbral del 40% se reserva a las
mismo desarrollo en términos de re- tos, sólo en el tercero figuró una mu- mujeres e, incluso, parece que, en oca-
presentación efectiva. La causa de ello jer, otras dos le siguieron en el puesto siones, se cumple con dificultad ya que
ha residido, principalmente, en la co- octavo y noveno pero no se observó en ningún caso se llega al 50%. Iz-
locación de los candidatos en el orden otra mujer hasta el puesto décimo no- quierda Unida se sitúa muy cerca,
de las listas 70. Paradójicamente, entre veno, otras tres entre los puestos vi- en el 49% y le sigue los Verdes, el Par-
mediados de los noventa y el año gésimo segundo y vigésimo cuarto y tido Popular y después el PSOE. Un
2000, los partidos que más mujeres el resto entre el trigésimo y el trigési- dato positivo es que el PSOE ha
dispusieron en los primeros puestos de mo cuarto. El resultado fue que hubo mejorado la horquilla del 40/60 en el
lista fueron aquellos que tenían atri- tres diputadas de diecisiete del Grupo tramo de los 14 primeros puestos apos-
buida una representación escasa en el Popular por Madrid en el Congreso. tando por la alternancia. Por su parte,
Parlamento español. Por el contrario, el Partido Popular continúa liderado
Por último, cabe señalar que en las
los partidos con más poder y repre- por la única Presidenta de Comunidad
elecciones a la Asamblea de Madrid de
sentación colocaron a las candidatas Autónoma, Esperaza Aguirre Gil de
2003 se reprodujo el mismo esquema
en la cola de la lista por lo que la po- Biezma. Sólo Izquierda Unida y Al-
con la salvedad de que la lista del Par-
sibilidad de que finalmente resultasen ternativa Española incluyen una mujer
tido Popular aparecía encabezada por
elegidas fue mínima o nula. en sus cabezas de lista. En el ámbito
una mujer (Esperanza Aguirre Gil de
municipal, por Madrid, se reproduce
A partir del año 2000, la situación Biedma) al igual que la lista del PSOE
la situación salvo porque sólo figura
cambió bastante. Por ejemplo, según para las elecciones locales de 2003 por
una mujer cabeza de lista en el Partido
qué formación política, en las eleccio- el Municipio de Madrid (Trinidad Ji-
Alianza Iberoamericana Europea 72.
nes generales de 2004, puede consi- ménez García-Herrera). Se ha de ad-
derarse que entre un 30% y un 40% de vertir que en el caso de los Concejales
la lista estaba compuesta por mujeres. la situación resultó un poco mejor aun-
70
Sin embargo, lo interesante es com- que también se reprodujo el patrón Ya se han mencionado otros factores. Recuér-
probar en qué puestos de la lista se las anterior en el que aparecían algunas dese que Pipa NORRIS también habló de la
situó 71. Así, pues, escudriñando el con- mujeres colocadas en puestos iniciales magnitud del distrito, esto es, el número de
escaños por distrito y la asignación de escaños
tenido de las listas presentadas por el produciéndose un vacío en puestos in- según los votos. NORRIS, P., “Procesos de
partido puede observarse, a modo de termedios con lo que el número final reclutamiento legislativo: una perspectiva
comparada”, en URIARTE, E., y ELIZON-
ejemplo, que el PSOE, por Madrid, de mujeres electas descendió a un re- DO, A., Mujeres en política, Ariel, Barcelona,
utilizó un sistema de alternancia en los sultado de entre un 5% y un 20%. Co- 1997, p. 165. Y SALAZAR BENÍTEZ, O.,
seis primeros puestos. Sin embargo, en mo último dato a destacar se ha de Las cuotas electorales femeninas: una exigencia
del principio de igualdad sustancial. Contra el
el centro de la lista, entre los puestos, mencionar que, en todos los niveles, monopolio de los púlpitos, ob. cit., p. 55. Y MA-
séptimo a décimo octavo la presencia pero especialmente en las elecciones a TLAND, R.E. “Estrategias para ampliar la
de mujeres baja al número de tres y la Asamblea de Madrid, la formación participación femenina en el Parlamento. El
proceso de selección de candidatos legislativos
vuelve a aumentar a casi la mitad a par- política de Los Verdes no sólo incluye y los sistemas electorales”,
tir del puesto décimo noveno. El re- un 49% de mujeres en sus listas, sino www.idea.int/publications/wip/
upload/chapter_03-2.pdf, p. 124.
sultado final es que de los dieciséis que utilizó un sistema de alternancia
representantes elegidos por Madrid del en las candidaturas asegurándose, así, 71
Grupo Parlamentario Socialista sólo que las mujeres también pudieran op- Información obtenida a partir de las papeletas
de voto que contienen las candidaturas pre-
cinco fueron mujeres. La mayoría de tar a constituirse en representantes. sentadas por las formaciones políticas para las
las mujeres que presentó el Grupo So- elecciones a Cortes Generales de 2004, por
En las últimas elecciones municipales Madrid. El modelo se reproduce en el Parla-
cialista estaban situadas entre el pues-
y autonómicas de 2007, el panorama mento europeo (Datos de las Listas de candi-
to décimo noveno y la cola de lista. daturas para las elecciones de 1999).
ha cambiado radicalmente como con-
El Grupo Parlamentario de Izquierda secuencia de la aplicación de la Ley 72
Unida tenía una situación parecida par- Orgánica 3/2007 para la igualdad Información obtenida a partir de las papeletas
de voto que contienen las candidaturas pre-
tiendo de un total en la lista, al igual efectiva de mujeres y hombres. A mo- sentadas por las formaciones políticas para las
que el PSOE, de quince mujeres de do de apunte, en las elecciones a la elecciones autonómicas y municipales de
treinta y cinco candidatos. Sin embar- Asamblea de Madrid, todas las forma- 2007, por Madrid.

go, Izquierda Unida colocó algo la lis- ciones políticas cumplen con el por- 73
ta disponiendo a las mujeres a lo largo centaje mínimo del 40%. No obstante, Información obtenida a partir de la página
de la misma con más equidad. La pe- cabe señalar algunas cuestiones para web del Congreso www.congreso.es. Recien-
temente, sobre el proceso de paridad electo-
or situación se la llevó el Partido Po- incidir en que la igualdad cuantitativa ral, véase MARTÍNEZ ALARCÓN, M.L.,
pular que ya partía de una cifra menor ha de ir acompañada de una auténtica Cuota electoral de mujeres y Derecho Constitu-
cional, Premio “Mujer y Parlamento Clara
en la candidatura, once mujeres de conciencia social. Así, por ejemplo, en Campoamor”, Congreso de los Diputados,
treinta y cinco. No obstante, más per- ninguna de las listas presentadas exis- Madrid, 2007, pp. 199 y ss.

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A mi juicio es importante, por lo tan- con el siguiente texto: “La candidatu- mismos términos que se expresó la Ley
to, estudiar el trasfondo de la cuestión ra en una circunscripción electoral de- francesa –incluyendo el título–, la pro-
y no conformarse con la apariencia de berá tener una presencia equilibrada puesta se plantea para el estable-
la evolución experimentada a partir de de hombres y de mujeres de forma que cimiento de forma obligatoria de la
los porcentajes generales para valorar si, su composición no supere el 60 por paridad numérica entre los hombres y
efectivamente, se está persiguiendo la ciento ni sea inferior al 40 por ciento las mujeres que figuren en las listas de
igualdad real. Por todo ello, pienso que de uno y otro sexo. Se mantendrá esa las candidaturas de los partidos políti-
una iniciativa como la LO 3/2007 evi- proporción en el conjunto de la lista y cos. Añade un punto 10 al artículo 46
ta mejor las eventuales manipulaciones en cada tramo de cada cinco nombres de la Ley Orgánica de Régimen Elec-
electoralistas de los partidos políticos de la misma, salvo para las Elecciones toral General de manera que la dife-
que colocan a las mujeres en sus listas Municipales, en municipios con un nú- rencia entre el número de candidatos
electorales con únicos fines de oportu- mero de residentes inferior a 2.000, de cada sexo en las candidaturas sus-
nismo político situándolas lejos de la de acuerdo con el artículo 187.2 de la critas por los representantes de los par-
posibilidad de acceder a reales puestos presente Ley. Si el número de miem- tidos, federaciones y coaliciones, y por
de representación política, adulterando bros de la candidatura fuese legalmente los promotores de las agrupaciones de
así la supuesta visión o perspectiva de inferior a cinco, la proporción entre electores, no sea superior a uno, lo que
género que algunos predican. hombres y mujeres, será, en todo ca- supondría la igualdad numérica prác-
so, la más cercana posible al 50%”. ticamente total o absoluta.
4. INICIATIVAS LEGISLATIVAS Representó ésta una formulación pio- El Grupo Mixto presentó el 31 de ju-
A FAVOR DE LA DEMOCRACIA nera sobre la inclusión de la igualdad lio de 2002 una Proposición de Ley
REPRESENTATIVA PARITARIA de género en materia política aunque, para la Reforma de la Ley Orgánica
EN EL ORDENAMIENTO quizás, se preocupó apresuradamente 5/1985, del Régimen Electoral Ge-
ESPAÑOL de cubrir mínimos expresados en por- neral para garantizar la igualdad entre
centajes sin establecer de forma clara hombres y mujeres en el acceso a car-
1 la disposición final de las candidaturas gos electos (Orgánica) (122/000236).
Iniciativas parlamentarias en la lista. Piénsese que, por ejemplo, Comenzó con una significativa Expo-
para la reforma de la LOREG. el 40% de mujeres en un tramo de cin- sición de motivos en la que declaró la
Los antecedentes de la paridad co candidaturas resultan ser dos de cin- necesidad de “Feminizar la sociedad.
co lo que, inicialmente, puede suponer Significaba incorporar en el ámbito
En el ordenamiento español, se han una óptima proporción. Sin embargo, público y de la decisión política el má-
realizado algunos intentos de modifi- al ser aleatoria la disposición de las ximo número de mujeres para que la
car la Ley Orgánica de Régimen Elec- candidaturas sin orden determinado anomalía democrática por la que las
toral General (en adelante, LOREG) podría darse la siguiente situación: mujeres están sistemáticamente infra-
con el fin de introducir reformas ten- [Hombre-H-H-Mujer-M] [H-H-H- rrepresentadas en los lugares de toma
dentes a garantizar la igualdad entre M-M] y, así sucesivamente. Conforme de decisiones, desaparezca”. Poste-
hombres y mujeres en el acceso a car- a esta estructura, podría ocurrir que riormente, se añadió un nuevo artículo
gos electos. Se señalan a continuación un Grupo parlamentario que dispon- 44 bis proponiendo la alternancia en
los que surgieron a partir del año ga de ocho escaños obtenga un resul- las candidaturas. Se redujo la fórmula
2001 73. tado final de seis hombres electos y de porcentual en un 30%/70% para Mu-
dos mujeres electas desvirtuándose, en nicipios y Cabildos Insulares canarios
La Proposición de Ley presentada el con un número de residentes entre
la práctica, el espíritu de la fórmula con
16 de noviembre de 2001 para la Re- 2.001 y 10.000. Menos igualdad.
porcentajes más cercanos al 25% que
forma de la Ley Orgánica 5/1985, de
al 40% sin que, en realidad, el partido
19 de junio, del Régimen Electoral El 8 de abril de 2003, se presentaron
haya incumplido el porcentaje legal
General (LOREG) (Orgánica) (122/ en el Congreso tres Proposiciones de
sobre su lista. En este sentido, me pa-
000153) presentada por el Grupo Par- Ley sobre paridad. Una, del Grupo
rece una redacción que refleja un im-
lamentario Socialista, tras una amplia Parlamentario Socialista; otra, del Gru-
portante fin numérico pero no tanto
exposición de motivos con la mención po Parlamentario de Izquierda Unida
un ideal de igualdad.
de Instrumentos internacionales, co- y otra, del Grupo Parlamentario Mix-
munitarios y nacionales para la base de Algo más atrevida se mostró la Pro- to. En los dos primeros casos las pro-
una participación equilibrada de hom- posición de Ley que presentó el Gru- puestas reprodujeron los textos
bres y de mujeres en la toma de deci- po Parlamentario de Izquierda Unida anteriormente presentados y en el ca-
siones, expone en artículo único la el 25 de enero de 2002 sobre el acceso so de Iniciativa per Catalunya-Verds
posibilidad de añadir un apartado 4 al en condiciones de igualdad de muje- (ICV) se propuso un sistema crema-
artículo 44 de la LOREG que enca- res y hombres a los mandatos electo- llera de alternancia entre hombres y
beza la Sección 2ª sobre “Presenta- rales y funciones electivas (Orgánica) mujeres y fijó un período de implanta-
ción y proclamación de candidatos”, (122/000170). Prácticamente en los ción gradual para que todos los parti-

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dos se adaptasen. Quizás, esta suerte tada favorablemente la toma en con- tucional a partir de un recurso de in-
de cláusula de adaptabilidad temporal sideración de la propuesta aunque con- constitucionalidad presentado por el Go-
sea una sensata opción para que, como virtiendo el texto en una aportación bierno del Partido Popular en el año
sucediera en el caso francés, no tengan para una ponencia en el futuro que tra- 2002 con base en las siguientes razones.
que aparecer como diputadas las abue- tase de conseguir el mayor consenso.
las de los militantes. Las tres proposi- Se han planteado si estas iniciativas res- ■ En primer lugar, se consideró una
ciones fueron rechazadas por el Partido pondían a la conciencia real de impo- violación competencial en el acce-
Popular al entender que la condición ner, mediante ley electoral, la igualdad so a los cargos públicos conforme
sexual no ha de ser motivo de inclusión de género en la toma de decisiones po- al artículo 149.1.1 CE en tanto que
o de exclusión en una lista electoral. líticas o, si, por el contrario, se reali- sólo a las Cortes les corresponde la
zaban para hacer un uso partidista de distribución de candidaturas por ra-
El 5 de abril de 2004 se presentó por la inclusión de las mujeres en política 74 zón de género ya que su aplicación
el Grupo Parlamentario de Izquierda o incluso para aprovechar la brecha y por las Comunidades Autónomas
Verde - Izquierda Unida - Iniciativa abordar otras modificaciones electo- produciría desigualdades inadmisi-
per Catalunya-Verds, la Proposición rales ajenas a la igualdad. bles constitucionalmente.
de Ley de reforma de la Ley Orgáni-
■ En segundo lugar, se consideró vio-
ca 5/1985 del Régimen Electoral Ge- 2
lada la reserva de Ley Orgánica en
neral para garantizar la igualdad entre Las iniciativas más pioneras. conexión con el motivo anterior, de
hombres y mujeres en el acceso a car- La legislación autonómica modo que se argumentó que un ex-
gos electos (Orgánica) (122/000028)
Mientras los Grupos Parlamentarios tremo tan importante para el régi-
con el objetivo de añadir un nuevo ar-
ven frustrados sus sucesivos intentos men electoral general como es la
tículo 44 bis que incluyera la alter-
de reformar la Ley Orgánica de Régi- paridad había de estimarse incluido
nancia en las listas electorales. También
men Electoral General, algunas Co- en la materia de régimen electoral
se rebajaba la representación 30%/70%
munidades Autónomas consiguieron general reservada a Ley Orgánica.
en los mismos términos que en la pro-
puesta de 2002. aprobar Leyes que les permitieron evo- ■ En tercer lugar, se refirió a la vulne-
lucionar en este campo. Por ejemplo, ración del artículo 14 CE y del ar-
El 16 de abril de 2004 se presentó por en materia electoral, se aprobó la Ley tículo 23.2 CE en relación a los
el Parlamento de Canarias la Proposi- de modificación de la Ley 8/1986, de citados argumentos por los que se
ción de Ley por la que se modifica el 26 de noviembre, electoral de la Co- consideraba fragmentado el cuerpo
apartado 3 del artículo 46 de la Ley munidad Autónoma de las Islas Ba- electoral de aceptar la democracia
Orgánica 5/1985, de 19 de junio, del leares introduciendo un apartado 4 a paritaria en identificación de las mu-
Régimen Electoral General (Orgáni- su artículo 16 en el que se previó la al- jeres con otras categorías sociales en
ca) (125/0000005) al que se le aña- ternancia de candidatos de uno y otro contra de lo que dispone el artículo
dió un apartado segundo en los sexo. Paralelamente, se aprobó, en si- 68.5 CE sobre la unidad del pueblo
siguientes términos: “Salvo casos ex- milar sentido la Ley 11/2002, de 27 español representada en la Cámara.
cepcionales, las listas propuestas res- de junio, de modificación de la Ley
petarán el principio de democracia 5/1986, de 23 de diciembre, Electo- ■ Por último, también se consideró
paritaria, de tal manera que cada uno ral de Castilla-La Mancha que añadió violado el artículo 6 CE en relación
de los géneros no sea inferior ni supe- un nuevo apartado 1 bis al artículo 23 con el derecho de asociación del
rior al cuarenta o el sesenta por cien- dentro del Capítulo II dedicado a la artículo 22.1 CE al considerar ine-
to, garantizándose dicho porcentaje “Presentación y Proclamación de can- liminable la esfera de autodetermi-
por tramos de cinco candidatos y en didatos” de la Ley autonómica. Se op- nación asociativa de los partidos
la totalidad de la lista. En el supuesto tó por introducir como modelo de políticos.
de que ello no fuera posible, junto con paridad la alternancia en las listas elec-
la candidatura se presentará escrito mo- torales hasta el punto de establecer que Ya se han tratado los últimos argu-
tivado con las razones que impiden el los puestos pares serán para los de un mentos en contra de estas leyes de cuo-
cumplimiento del citado principio”. sexo y los impares para el otro. A con- tas. Sin embargo, sobre el argumento
De esta propuesta es relevante desta- tinuación, se expuso la sanción opor- inicial de la supuesta falta de compe-
car el llamamiento inicial al principio tuna para el caso de incumplimiento, tencia de las CCAA para dictar leyes
de Democracia paritaria y la previsión estableciendo que la Junta Electoral de este tipo se explica el profesor Sa-
de la justificación pertinente en caso sólo aceptará aquellas candidaturas que lazar Benítez al afirmar que la adop-
de incumplimiento de la ley. cumplan este precepto tanto para las ción de cuotas electorales por las leyes
personas candidatas como para las per- autonómicas supondría aún menos
En todo caso, la propuesta canaria problemas que su inclusión en la LO-
sonas suplentes.
abrió de nuevo el debate en el Pleno REG al encontrar apoyo en los Esta-
del Congreso de los Diputados y las Ambas leyes fueron suspendidas de tutos de Autonomía como sucede en
Diputadas hasta el punto de salir vo- forma cautelar por el Tribunal Consti- el caso andaluz o también en el caso

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D E R E C H O E S P A Ñ O L

del Estatuto de Castilla-La Mancha cu- como se ha señalado, no se está, en nin-


yo artículo 4.3 obliga a propiciar la efec- gún caso, afectando al contenido esen-
tiva igualdad del hombre y la mujer y cial del derecho fundamental, sino
promover de un modo eficiente que las dibujando las mejores condiciones para
Cortes de la Región se integren de mo- su pleno ejercicio 76. En realidad, no es-
do paritario por personas de ambos se- tá claro que, como expone el profesor
xos. En este caso, el mandato contenido Salazar Benítez, el hecho de que las
en el Estatuto de Castilla-La Mancha no Comunidades Autónomas introduzcan
podría obviarse por la Ley electoral de preceptos con contenido de paridad pa-
esta Comunidad Autónoma. ra sus listas electorales en cumplimien-
to de las leyes orgánicas por las que se
En este sentido, los Estatutos de algu-
aprobaron sus respectivos Estatutos, es-
nas Comunidades Autónomas también
té invadiendo las competencias del Es-
suelen incluir, entre sus competencias,
tado. Según la Disposición adicional 1ª,
referencias a la posibilidad de realizar
el Título I de la LOREG no se encuen-
acciones a favor de la mujer. Así, por
tra entre los que no pueden ser, en nin-
ejemplo, el Estatuto de Autonomía de
74
gún caso, modificados ni sustituidos por
Cataluña menciona, entre las compe-
Al uso electoralista de la inclusión de mujeres en la legislación de las Comunidades Autó-
tencias exclusivas, “la promoción de la
las listas de candidatos se le ha denominado nomas 77.
‘efecto bola de nieve’. Esto es, aplicada la cuota mujer” en el artículo 9 75 . Más intere-
por un partido político, los demás se percatan de sante en este extremo se mostró la Pro- En todo caso, tanto si se defiende esto
que incluir mujeres en sus listas es positivo des-
de un punto de vista electoral. NAVARRO puesta de Reforma del Estatuto de último como si se prefiere entender que
GARZÓN, M., “Propuesta de modificación de Autonomía de Cataluña presentada en existe cierto conflicto entre el Estado y
la Ley Electoral española para introducir la de-
mocracia paritaria”, en SAAVEDRA RUIZ, P.,
septiembre de 2005. En el artículo 41 las Comunidades Autónomas en tanto
(Dir.) Hacia una Democracia Paritaria. Análi- se estableció la necesaria acción de los nos encontramos ante la configuración
sis y revisión de las leyes electorales vigentes, CE- poderes públicos para la consecución de de derechos fundamentales, creo que con
LEM, Palermo, 1999, p. 263.
la igualdad entre hombres y mujeres, ba- el objeto de que la Democracia paritaria
75 jo la rúbrica “Perspectiva de género” y representativa se realice en la misma me-
Ley Orgánica 4/1979, de 18 de diciembre del
Estatuto de Autonomía de Cataluña. BOE de 21 el artículo 56, sobre “composición y ré- dida y sea una garantía igual para todos
de diciembre de 1979. Modificada por la ley gimen electoral”, ordena en el apartado y para todas, incluso con independencia
17/2002, de 1 de julio, del régimen de cesión 3 que “la legislación electoral de Cata- del enclave territorial, y con el fin de que
de tributos del Estado a la Generalidad de Cata-
luña y de fijación del alcance y condiciones de di- luña debe establecer criterios de paridad no tenga por qué haber más mujeres en
cha cesión. BOE de 2 de julio de 2002. entre mujeres y hombres para la elabo- el Parlamento Andaluz que en el Mur-
76 ración de las listas electorales”. Asimis- ciano como, de hecho, ha sucedido, me
SALAZAR BENÍTEZ, O., Las cuotas electora- mo, el artículo 13 de la Proposición de parece que la inclusión de la reserva elec-
les femeninas: una exigencia del principio de
igualdad sustancial. Contra el monopolio de los
Ley Electoral de Cataluña, reza que “pa- toral en la LOREG ofrece más garantías
púlpitos, ob. cit., p. 161. También, en el argu- ra garantizar una representación parla- para la mayor y mejor realización de la
mento competencial se extiende SEVILLA mentaria sin discriminación de género, igualdad de género en materia política.
MERINO, J., “Mujeres y ciudadanía: la demo-
cracia paritaria”, Colecció Quaderns Feministes, la lista que presente cada partido, fede- Incluida la paridad en la LOREG, será
núm. 4, Institut Universitari d’Estudis de la ración, coalición o agrupación de elec- también de aplicación a las elecciones a
Dona, Universidad de Valencia, 2004, pp. 108-
112. En contra, ARCE JANÁRIZ, A., “Prime-
tores tendrá que contar con un máximo Asambleas Legislativas de las Comuni-
ras leyes en España sobre paridad electoral”, La del 60% y un mínimo del 40% de can- dades Autónomas como determina el
Ley, Año XXIII, núm. 5.617. didaturas pertenecientes a cada género, punto 2 de la Disposición Adicional 1ª
77 calculados para el conjunto de la lista y respecto del artículo 44 LOREG. En
SALAZAR BENÍTEZ, O., Las cuotas electorales en cada tramo de cinco candidatos”. cualquier caso, esta cuestión puede en-
femeninas: una exigencia del principio de igual-
dad sustancial. Contra el monopolio de los púlpi- tenderse resuelta por la fórmula por la
En el caso de la Ley Electoral de Casti-
tos, ob. cit., pp. 160-161. Del mismo autor, “La que opta el art. 44 bis LOREG al prever
necesaria transversalidad de la igualdad de géne- lla-La Mancha se especificaron, en co-
su aplicación en caso en el que las nor-
ro. Un análisis de las leyes autonómicas”, IVAP, nexión con las necesidades de esta
núm. 75, 2006, pp. 173-174. mas de las Comunidades Autónomas no
Comunidad Autónoma, algunas condi-
78 sean más favorables para la presencia equi-
ciones de elegibilidad así como causas
Sobre esta cuestión, BIGLINO CAMPOS, P. librada de mujeres y de hombres 78.
(Dir.), Nuevas expectativas democráticas y elec-
de incompatibilidad sin que por ello se
ciones, Iustel, Madrid, 2008, pp. 101-103. Tam- afectase al contenido básico del sufragio Asimismo, cabe mencionar que la Co-
bién SEVILLA MERINO, J., “Paridad y leyes pasivo. Así, creo acertada la afirmación munidad Autónoma Andaluza estuvo al-
electorales”, en FIGUERUELO BURRIEZA,
A., IBÁÑEZ MARTÍNEZ, M.L. y MERINO de Salazar Benítez de que cualquier nor- gún tiempo tras una reforma para alcanzar
HERNÁNDEZ, R.M., Igualdad ¿para qué? A mativa electoral autonómica podría in- la Democracia paritaria, que consiguió en
propósito de la Ley Orgánica para la igualdad
efectiva de mujeres y hombres, Ed. Comares, Gra-
cluir unos determinados requisitos en la marzo de 2005. Ya en años anteriores
nada, 2007, pp. 143 y ss. configuración de las listas puesto que, presentó una Proposición no de Ley pa-

37
D E R E C H O E S P A Ñ O L

ra instar al Gobierno de la Comunidad o agrupaciones de personas electoras para la igualdad 80. Especialmente ocu-
a presentar un Proyecto de Ley de De- estarán integradas por al menos un rrente y comprometida se muestra la
mocracia paritaria para las elecciones 50% de mujeres. Se mantendrá esta ley en el contenido de conceptos co-
andaluzas. El texto, previsto para el úl- proporción en el conjunto de la lista mo el de acción positiva.
timo trimestre del 2002 y más flexible de candidatos y candidatas y en cada
También es de interés mencionar por su
que sus homólogos, optaba por un sis- tramo de seis nombres. Las juntas elec-
carácter precursor, la Ley Valenciana
tema de incentivos económicos para los torales del territorio histórico com-
9/2003, de 2 de abril, para la igualdad
partidos que cumpliesen con el bino- petentes sólo admitirán aquellas
entre mujeres y hombres. Insiste en di-
mio 40%/60%. Pero en aquél entonces candidaturas que cumplan lo señalado
fuminar la línea marcada entre la esfera
el Gobierno autonómico hizo caso omi- en este artículo tanto para las personas
de lo público y de lo privado y de los
so de la Cámara aunque los esfuerzos candidatas como para los suplentes”.
campos reservados a las mujeres y a los
prosperaron hasta la aprobación del Ca- Aunque la fórmula empleada por la
hombres en virtud de estos parámetros.
pítulo VIII de la Ley de Medidas Fis- Ley vasca establece unas condiciones
En el Preámbulo advierte del déficit in-
cales y Administrativas que, desarrollada más flexibles en la colocación de las
explicable que mantienen las mujeres en
por el Decreto 93/2004, de 9 de mar- personas candidatas en la lista electo-
la participación política lo que se aleja
zo, dispone que deberá ser paritaria, res- ral, el resultado que se obtuvo en las
de la proporción que existe en la socie-
petando la proporción de 60%/40%, la pasadas elecciones autonómicas –cele-
dad y del sistema democrático. Conti-
composición en los órganos consulti- bradas pese al recurso de inconstitu-
núa estableciendo que “El concepto de
vos y de asesoramiento de la adminis- cionalidad presentado por diputados
democracia sólo adoptará un sentido
tración de la Junta de Andalucía 79 . y diputadas del Grupo Popular en el
real y dinámico, como corresponde a la
Finalmente, la Comunidad Andaluza Congreso–, fue de gran relevancia his-
expresión más acabada de esta forma de
aprueba la Ley 5/2005, de 8 de abril, tórica al estar, por primera vez, un par-
gobierno, cuando las orientaciones po-
por la que se modifica la Ley 1/1986, lamento autonómico, representado por
líticas sean definidas en común por mu-
de 2 de enero, Electoral de Andalucía, más mujeres que hombres (39/36).
jeres y hombres teniendo en cuenta, de
reformando el artículo 23.1. La redac-
forma equitativa, los intereses y aptitu-
ción nueva establece, en los mismos tér- Algunas Comunidades Autónomas des de todas las personas”. Para todo
minos que hicieron las leyes balear y también han llevado a cabo otro tipo ello se insta a las administraciones pú-
manchega, que “La presentación de de políticas públicas desarrolladas en blicas a impulsar los cambios necesarios
candidaturas, en las que se alternarán legislación específica sobre igualdad estructurales e institucionales desde la
hombres y mujeres, habrá de realizar- que han resultado ser un claro prece- “transversalidad de género”. La acción
se entre el decimoquinto y el vigésimo dente, por su contenido pionero y para el aumento de la participación
día posterior a la convocatoria, mediante comprometido, de la actual LO 3/ política de las mujeres se expresa en el
listas que deben incluir tantos candida- 2007 para la igualdad efectiva de mu- articulado (Capítulo II) a modo de in-
tos como escaños a elegir en cada cir- jeres y hombres. Así, por ejemplo, en centivos, estableciendo que se favore-
cunscripción y, además cuatro personas razón de un articulado completo y cerá la presencia de la mujer en las
candidatas suplentes, expresándose el comprometido para construir el cami- candidaturas presentadas a las Corts Va-
orden de colocación de todos ellos, no hacia la igualdad efectiva, cabe se-
ocupando los de un sexo los puestos ñalar la Ley Vasca 4/2005, de 18 de
impares y los del otro los pares”. La Ley febrero, para la Igualdad de Mujeres 79
andaluza también fue recurrida por el y Hombres. Resulta destacable el SEVILLA MERINO, J., “Mujeres y ciudada-
Grupo Popular en el Congreso, por los enunciado de estos ideales en la Ex- nía: la democracia paritaria”, cit., pp. 103-
argumentos anteriormente expuestos, 105. También sobre las leyes, más generales,
posición de motivos estableciendo un sobre igualdad de las Comunidades Valencia-
ante el Tribunal Constitucional. En ma- propósito de transformación de las es- na y Aragonesa.
yo de 2007, la Comunidad Andaluza tructuras sociales que siguen respon- 80
aprobó el Proyecto de Ley para la pro- diendo a una jerarquización de las Sobre estas cuestiones, SALAZAR BENÍTEZ,
moción de la Igualdad entre hombres relaciones entre hombres y mujeres, O., “La necesaria transversalidad de la igual-
dad de género. Un análisis de las leyes auto-
y mujeres en el que incluye la mínima así como la eliminación de estereotipos nómicas”, cit., pp. 174 y ss.
representación del 40%. sociales que observan a las mujeres co-
81
mo objeto de múltiples discriminacio- Es interesante destacar que el borrador del
También la Ley Vasca 4/2005 previó nes. Para combatirlo, se insta a las Anteproyecto incluye las definiciones de dis-
en la Disposición Final Cuarta la su- políticas públicas transversales que erra- criminación directa e indirecta y el uso de la
expresión acción positiva, aunque en este últi-
ma de un nuevo párrafo del artículo 5 diquen esta desigualdad en todos los mo caso no la define ni aboga por la expresión
de la Ley 5/1990, de 15 de junio, de ámbitos de actuación públicos y pri- género en lugar de la de sexo.
www.la-moncloa.es En torno al debate de la
Elecciones al Parlamento Vasco, con vados. La Ley Vasca pone especial én- LO 3/2003, véase SEVILLA MERINO, J.,
otra fórmula, que determina que “Las fasis en el necesario cambio de las “Paridad y leyes electorales”, cit., pp. 143 y ss.
candidaturas que presenten los parti- mentalidades en los hombres para 82
dos políticos, federaciones, coaliciones abordar exitosamente estas prácticas BOE núm. 71, de 23 de marzo de 2007.

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lencianes. Así, también dispone la Ley Es interesante observar cómo las Le- librada de hombres y mujeres bajo la
Valenciana que los medios de comuni- yes aprobadas antes del año 2004 tie- horquilla del 40% y el 60%. Tras las más
cación de titularidad pública, tendrán nen importantes objetivos y paquetes de 300 enmiendas presentadas y el de-
en cuenta en la disposición del tiempo de medidas que, sin embargo, no se sarrollo del proceso legislativo, se
gratuito las candidaturas con presencia especifican de forma concreta en ma- aprueba la Ley Orgánica 3/2007, de
equilibrada de mujeres y hombres. Asi- teria electoral ya que la constituciona- 22 de marzo, para la Igualdad Efecti-
mismo, las subvenciones electorales se lidad de estas medidas ha sido puesta va de Mujeres y Hombres 82 . Tras re-
incrementarán en un 10% para los esca- en tela de juicio por un gran sector so- conocer en la Exposición de Motivos
ños obtenidos por mujeres. cial y doctrinal. Aún lo es pero en me- (III) la preocupación por el alcance de
nor medida lo que se refleja, junto al la igualdad efectiva en el ámbito de
En esta época, también se aprobó la cambio de ideología política en la di- la participación política, tanto en su
Ley de Castilla y León, 1/2003, de 3 rección del gobierno, en las nuevas dis- nivel estatal como en los niveles auto-
de marzo, de Igualdad de oportuni- posiciones normativas autonómicas o nómico y local, incluye en su Disposi-
dades entre mujeres y hombres en Cas- estatales que surgen, especialmente, a ción Adicional 1ª el concepto de lo que
tilla y León. La Ley, en el Preámbulo partir del año 2005 y que encuentran se entiende por presencia o composi-
y en el artículo 1, justifica su actua- su máximo exponente en la nueva Ley ción equilibrada. Así, se enuncia que “A
ción, además de en los preceptos cons- Orgánica 3/2007 para la igualdad los efectos de esta Ley, se entenderá por
titucionales aplicables, en el mandato efectiva de mujeres y hombres. composición equilibrada la presencia de
incluido en el artículo 32.1.19ª del mujeres y hombres de forma que, en el
De nuevo me remito a la Ley Vasca pa-
Estatuto de Autonomía de Castilla y conjunto a que se refiera, las personas
ra destacar su apuesta para la Demo-
León, de promover integralmente la de cada sexo no superen el sesenta por
cracia paritaria ya que en un amplio
igualdad de la mujer mediante medi- ciento ni sean menos del cuarenta por
abanico de materias y medidas plas-
das de acción positiva. Establece co- ciento”. A continuación, la Disposición
madas en el Título Preliminar, la Ex-
mo objetivos, entre otros, promover Adicional segunda establece la modifi-
posición de motivos y el articulado,
la participación de las mujeres en los cación de la Ley Orgánica 5/1985, de
consigue elaborar un marco ejemplar.
asuntos públicos (artículo 2.8) a tra- 19 de junio, de Régimen Electoral Ge-
En él conviven el derecho a la igual-
vés de medidas de acción positiva re- neral añadiendo un nuevo artículo 44
dad, el principio de igualdad de opor-
cogidas, de manera genérica, en el bis, en el que se prevé que “Las candi-
tunidades y la acción positiva con el
artículo 17 limitándose a incentivar, daturas que se presenten para las elec-
reconocimiento del derecho a la di-
favorecer y eliminar los obstáculos pa- ciones de diputados al Congreso,
versidad y a la diferencia como la acep-
ra la participación de las mujeres en municipales y de miembros de los con-
tación de la composición dual de la
organizaciones representativas de in- sejos insulares y de los cabildos insula-
Humanidad, lo que no sólo no es óbi-
tereses públicos. Se concreta breve- res canarios en los términos previstos
ce para la consecución plena de la
mente el objetivo en el artículo 24 al en esta Ley, diputados al Parlamento
igualdad, sino que constituye un pre-
instar a los poderes públicos de la Co- Europeo y miembros de las Asambleas
supuesto para su definitiva compresión
munidad Autónoma a promover las Legislativas de las Comunidades Autó-
como un valor democrático.
medidas necesarias, incluso las de ca- nomas deberán tener una composición
rácter económico, que fueran necesa- 3 equilibrada de mujeres y hombres, de
rias para garantizar la igualdad entre forma que en el conjunto de la lista los
El resultado:
hombres y mujeres en el acceso a las candidatos de cada uno de los sexos su-
La LO 3/2007 para la Igualdad
funciones y cargos públicos. pongan como mínimo el cuarenta por
Efectiva de Mujeres y Hombres
ciento”. Ello implica el establecimien-
Por último, la Ley más antigua fue la El proceso descrito culminó en la pre- to de un mínimo de representación del
Ley Foral de Navarra 32/2002, de 28 sentación del Anteproyecto de Ley Or- 40% y, a su vez, un máximo del 60%.
de noviembre, de fomento de la igual- gánica de Igualdad entre hombres y Sigue diciendo la LO 3/2007 que
dad de oportunidades entre mujeres y mujeres aprobado por el Consejo de “Cuando el número de puestos a cu-
hombres. La Ley establece medidas Ministros el 3 de marzo de 2006 81 . Ya brir sea inferior a cinco, la proporción
genéricas de impulso de asociacionis- el Anteproyecto propuso entre sus di- de mujeres y hombres será lo más cer-
mo de mujeres para el incremento de versos objetivos para la consecución de cana posible al equilibrio numérico”,
su participación social y de promoción la igualdad de género, una composición entendiendo éste el comprendido en la
de la presencia igualitaria de hombres equilibrada de hombres y mujeres en horquilla señalada del 40-60.
y mujeres en los órganos de decisión las listas electorales. Finalmente, el Pro-
de los partidos políticos, así como en yecto de Ley Orgánica para la Igual- En el apartado final, la LO 3/2007
las candidaturas con que concurren a dad Efectiva de Mujeres y Hombres establece la posibilidad de que las Co-
las elecciones, y a aquellas fuerzas po- (121/000092) presentado el 5 de ju- munidades Autónomas puedan mejo-
líticas que aumenten la presencia fe- nio de 2006, optó por incluir en el rar esta distribución, al estilo, por
menina en las candidaturas (art. 2 c)). texto una representación política equi- ejemplo, de la Ley manchega, balear

39
D E R E C H O E S P A Ñ O L

o vasca. Así, reza: “En las elecciones aboga por la inclusión de hombres y ción de acciones positivas y otros Tex-
de miembros de las Asambleas Legis- de mujeres en todos los ámbitos y es- tos como, Directivas, Resoluciones, Re-
lativas de las Comunidades Autónomas, feras a cualquier nivel. De hecho, ya comendaciones o Planes de Igualdad.
las leyes reguladoras de sus respectivos su propio encabezado implica un cam-
regímenes electorales podrán estable- bio en la perspectiva de género al in- En razón de los motivos expuestos y te-
cer medidas que favorezcan una mayor cluir, en un mismo plano, a hombres niendo en cuenta las normas señaladas
presencia de mujeres en las candidatu- y mujeres en igualdad. De ahí, que se y las propuestas existentes en el contex-
ras que se presenten a las Elecciones de hable de igualdad de mujeres y de to europeo e internacional y valorada su
las citadas Asambleas Legislativas”. Pos- hombres y no de igualdad entre hom- posible adopción en el ordenamiento es-
teriormente, en un apartado segundo, bres y mujeres. Ello supone dar un pañol, conjugando el principio de igual-
se dispone la colocación en las listas lo paso más en la consecución de la igual- dad con la adopción de medidas de
que considero un elemento impres- dad eliminando cualquier connotación acción positiva en relación al sistema elec-
cindible para cumplir con la garantía de subordinación o de enfrentamien- toral, se aprecia que la mayor novedad
de la efectividad de la igualdad. De es- to y apoyando la idea de que la lucha de la LO 3/2007 radica, como ella
te modo, se dice que “También se por la igualdad es de todos y de todas misma enuncia, en la Exposición de Mo-
mantendrá la proporción mínima del y no de todas frente a todos 84 . tivos III, en la prevención de esas con-
cuarenta por ciento en cada tramo de ductas discriminatorias y en la previsión
Desde mi punto de vista, se echa de de políticas activas para hacer efectivo el
cinco puestos. Cuando el último tra-
menos en la Exposición de Motivos II principio de igualdad. Así, se han des-
mo de la lista no alcance los cinco pues-
una referencia al pensamiento político crito las que se prevén legislativamente,
tos, la referida proporción de mujeres
femenino en el mismo plano en el que según la LO 3/2007, para el equilibrio
y hombres en ese tramo será lo más
si se ha incluido una referencia al pen- de la representación política de hombres
cercana posible al equilibrio numérico,
samiento político masculino al enunciar y de mujeres.
aunque deberá mantenerse en cualquier
las palabras de John Stuart Mill cuan-
caso la proporción exigible respecto del
conjunto de la lista”. Finalmente, en el
do, en denuncia de la posición de infe- 4
rioridad social y jurídica de la mujer, La aplicación de la LO 3/2007.
apartado 3 se establece la misma pre-
abogó por aquella “perfecta igualdad Algunas consideraciones
visión para las listas de suplentes 83 y en
que no admitiera poder ni privilegio pa- para la Democracia paritaria
apartado 4 se señala que en el caso de
ra unos ni incapacidad para otros”. Pe-
las candidaturas para el Senado, las lis-
ro grandes argumentos defendidos por Partiendo de una valoración positiva de
tas deberán tener igualmente una com-
mujeres como Olimpia de Gouges, Lu- la Ley estudiada, quizás, pueden con-
posición equilibrada de mujeres y
crettia Mott, Elisabeth Cady Stanton, siderarse ciertos apuntes que, en rela-
hombres, de forma que la proporción
Mary Wollstonecraft, Clara Campoa- ción a algunos problemas de aplicación
de unas y otros sea lo más cercana po-
mor, Victoria Kent, en definitiva, la voz de la LO 3/2007, podrían establecer-
sible al equilibrio numérico.
de tantas mujeres, podían haber servi- se, tanto desde la perspectiva teórico-
Para el caso de las candidaturas que se do de introducción a una Ley que quie- política como desde el aspecto práctico,
presenten en los municipios con igual re garantizar su presencia en todos los en aras de un mejor modelo de De-
o menos de 3.000 habitantes y las can- ámbitos, incluido el de la política, con mocracia paritaria para la mayor efecti-
didaturas que se presenten en las islas el objetivo fundamental de mejorar la vidad de la igualdad.
con un número de residentes igual o calidad de la representación y, con ella,
En primer lugar, creo que hubiera si-
inferior a 5.000 habitantes, no será de la democracia 85.
do interesante realizar una mención
aplicable el artículo 44 bis. Asimismo,
Por consiguiente, considero positiva una expresa del principio de Democracia
en las convocatorias a elecciones mu-
Ley de este tipo que se configura como paritaria como la condición primige-
nicipales que se produzcan antes del 1
una evolución lógica del derecho a la nia para la plena ciudadanía. En este
de enero de 2011, lo previsto en el ar-
igualdad de hombres y de mujeres re- punto, el postulado de Democracia
tículo 44 bis, sólo será exigible en los
cogido en la Constitución española y del paritaria debería cumplir con la fun-
municipios con un número de resi-
desarrollo de los postulados enunciados ción de servir como principio inspira-
dentes superior a 5.000 habitantes.
en Tratados, Acuerdos o Textos y Do- dor y fundamentador del tenor de la
Finalmente, en aplicación de las com-
cumentos internacionales y comunita- norma al representar una condición
petencias que la Constitución reserva
rios. De entre ellos, merece la pena traer esencial para que el desarrollo del
al Estado, este artículo 44 bis se apli-
a colación la Convención para la Elimi- derecho de sufragio sea efectivo y
ca también a las elecciones a Asambleas
nación de todas las formas de Discrimi- su ejercicio por los ciudadanos y las
Legislativas de Comunidades Autó-
nación contra la Mujer (CEDAW) 86, la ciudadanas constituya un requisito
nomas convocadas por éstas.
Declaración y Plataforma de Acción de inescindible del Estado social y de-
Así, pues, la LO 3/2007, constituye, la IV Conferencia Mundial de la Mujer mocrático de Derecho. Ello ha de
de entrada, un hito importante en la de Pekín de 1995, así como el artículo comportar la participación equilibra-
consecución de la igualdad real que 141 del Tratado de Niza para la adop- da de hombres y mujeres en los cen-

40
D E R E C H O E S P A Ñ O L

83 tros y órganos de decisión y de repre- sino construir sobre la realidad exis-


La Instrucción 5/2007, de 12 de abril, de la Junta sentación política. tente la paridad. La cuestión de la afi-
Electoral Central interpreta que, conforme al sen-
tir y objetivo de la Ley Orgánica 3/2007, las reglas liación también ha suscitado algunos
de composición equilibrada en las candidaturas elec- No obstante, la actual LO 3/2007 no problemas de aplicación. Por ejem-
torales deben aplicarse de forma independiente a la realiza esta inclusión. Me parece que plo, la lista de personas candidatas
lista de personas candidatas y a la lista de personas
suplentes. A mi juicio, es esta una correcta inter- hubiera sido interesante que se advier- presentada por Falange Española de
pretación si se quiere atender a que la real preo- ta en la norma sobre el significado y la las JONS a las Elecciones locales de
cupación de esta norma es la opción real en la
ocupación paritaria de escaños. trascendencia del principio de Demo- mayo de 2007 en la localidad de Bru-
84
cracia paritaria que podría enunciarse nete fue excluida por incumplir el
Anuncia el profesor Octavio Salazar que el en el pórtico de la LOREG para des- artículo 44 bis LOREG al haber in-
precedente ya se encontró en la Ley Vasca. SA- pués materializarse en el articulado en cluido en la lista diez mujeres y tres
LAZAR BENÍTEZ, O., “La necesaria transver-
salidad de la igualdad de género. Un análisis de los términos en los que ha procedido la varones. La formación política expli-
las leyes autonómicas”, cit., p. 176. LO 3/2007. Así, también creo que la có que tal circunstancia se debió a que
85 mejor opción, tal y como figura en la no encontraron candidatos masculi-
Puede consultarse MACÍAS JARA, M., “Decla- norma de referencia, estriba en la mo- nos suficientes que quisieran figurar
ración de los Derechos de la Mujer y de la Ciu-
dadana de Olimpia de Gouges y Declaración de dificación del artículo 44 de la LOREG en la candidatura e incluyó en la lista
Seneca Falls. La voz de las mujeres”, en GARCÍA que, como es sabido, abre la Sección a los tres hombres que tiene afiliados
SAN MIGUEL, L. (Editor), Filosofía Política.
Las grandes obras, Dykinson, Madrid, 2006.
Segunda del Capítulo VI dedicada a la en dicha localidad. La Ley de Igual-
“Presentación y proclamación de can- dad no establece ningún requisito en
86
El artículo 7 establece: “Los Estados tomarán las me- didatos”, en lugar del artículo 46 LO- torno a la afiliación a la hora de figu-
didas apropiadas para la igualdad entre hombres y REG porque este precepto regula los rar en una lista electoral. En este su-
mujeres, eliminar la discriminación contra la mu-
jer en la vida pública del país y en particular, ga-
requisitos formales para la presentación puesto, el Tribunal Constitucional
rantizarán en igualdad de condiciones con los hombres de candidaturas, mientras que el artículo únicamente consideró que no se ofre-
el derecho a votar en todas las elecciones y referendums
públicos y ser elegibles para todos los organismos cuyos
44 LOREG recoge las condiciones ció la posibilidad de subsanar el de-
miembros sean objetos de elecciones públicas”. esenciales para que los partidos políti- fecto pero no se pronunció sobre la
87 cos, las federaciones, las coaliciones y afiliación en relación al cumplimien-
SALAZAR BENÍTEZ, O., Las cuotas electorales las agrupaciones de electores puedan to del art. 44 bis LOREG ni sobre la
femeninas: una exigencia del principio de igual- presentar listas de personas candidatas.
dad sustancial. Contra el monopolio de los púlpi- duda de constitucionalidad sobre la
tos, ob. cit., p. 160. Por lo tanto, la paridad ha de ser una LO que parece plantear la formación
88 condición esencial, sine qua non, para política al alegar argumentos sobre la
No obstante, se ha de matizar que, como ya se pu- la presentación y proclamación de listas restricción de derechos políticos en
so de manifiesto, en el caso de los parlamentos ac- de personas candidatas y no sólo un re-
tuales, la baja presencia de mujeres en los escaños no relación al artículo 6 CE y la posible
se ha debido, a la falta de afiliación a los partidos po- quisito formal o de mera confección de violación del principio de discrimina-
líticos sino a la desigualdad de género en materia po- la lista, como la mención del nombre y
lítica. Sobre la exigencia de tomar como base el criterio ción del artículo 14 CE 89. Puede de-
de población femenina afiliada o de trayectoria polí- los apellidos de las personas candidatas, ducirse que la formación política
tica, véase, SALAZAR BENÍTEZ, O., Las cuotas los símbolos del partido, etc. 87 . pretendió enmascarar la falta de afi-
electorales femeninas: una exigencia del principio de
igualdad sustancial. Contra el monopolio de los púl- liación masculina para poner en tela
pitos, ob. cit., p. 160. También, BALAGUER CA- De este modo, el artículo 44 LOREG
LLEJÓN, expresa que “no parece que un sistema de habría de recoger, a mi juicio, tres im- de juicio la constitucionalidad de
exigencia de listas paritarias se pueda imponer de una
prescindibles premisas para alcanzar el la LO 3/2007. Así parece entender-
sola vez y a todos los niveles electorales”. BALAGUER
CALLEJÓN, M.L., “Desigualdad compensatoria en objetivo de la Democracia paritaria. se posteriormente en la STC 127/
el acceso a cargos representativos en el ordenamien- 2007 90, en un supuesto similar, al ad-
to jurídico-constitucional español”, Artículo 14. Una
perspectiva de género, núm. 4, mayo 2000, p. 4. ■ En primer lugar, la medida para la vertirse por el Ministerio Fiscal que
89
igualdad de género que enuncia el no resultaba clara la imposibilidad ma-
El voto particular que realiza el Magistrado J. nuevo texto del artículo 44 de la LO- terial alegada por Falange Española
Rodríguez-Zapata se formula en base a la falta REG debería, a mi juicio, haber esta- de las JONS para completar la lista
de pronunciamiento por el Tribunal de las cues-
tiones de fondo señaladas. Alguna de las senten- blecido una cierta correlación con el con suficientes candidatos varones ya
cias que resolvió el Tribunal Constitucional en número de mujeres afiliadas a los par- que, en este caso, el resto de las can-
materia de impugnación de listas electorales tam-
bién hizo referencia a otros derechos en juego tidos políticos. De esta manera, el didaturas formadas por mujeres no se
como la libertad ideológica y la libertad de aso- porcentaje de mujeres que se incluya encontraban afiliadas a la localidad de
ciación, así como al valor de la igualdad del ar-
tículo 1.1 CE. Sobre ellos no se pronunció el
en la lista de candidatos se establece- Brunete, por lo que el dato de la afi-
Alto Tribunal. STC 105/2007, de 10 de mayo. rá en virtud del porcentaje de muje- liación no ha sido tenido en cuenta
90 res afiliadas al partido 88. Parece más por el partido para elaborar la lista.
STC 127/2007, de 22 de mayo, FJ 4. El Tribu- interesante y eficaz que la exigencia Asimismo, el Tribunal Constitucio-
nal Constitucional consideró que el incumplimiento
por el partido de la LOREG pareció tener la in-
de igualdad real, en esta materia, se nal consideró, en este punto, que “no
tención de cuestionar la constitucionalidad de tal construya sobre la misma realidad. Es es requisito necesario el de que los
norma cuando a todas luces era evidente que po-
día haber adecuado la lista electoral a la norma y
decir, a mi parecer, no conviene rein- miembros de las candidaturas hayan
no lo hizo, denegándoles, así, el amparo. ventar cualquier equidad numérica, de ser afiliados a los partidos políti-

41
D E R E C H O E S P A Ñ O L

cos” y continúa señalando que “no la falta de representación femenina su-


estar empadronados en una localidad ficiente. Dicho de otro modo, el par-
no constituye un obstáculo para pre- tido puede cumplir con el porcentaje
sentarse a las elecciones locales en di- requerido y estar contribuyendo, al
cha circunscripción por lo que del tiempo, a una desigualdad soterrada
mismo modo que optó por incluir a si no coloca a sus candidatas en pues-
10 mujeres pudo también cumplir tos de liza. Algunas propuestas de re-
con las exigencia de la LOREG, in- forma que han apostado por establecer
cluyendo el número de varones opor- porcentajes mínimos y máximos para
tunos fueran afiliados de otras zonas la representación paritaria de ambos
o personalidades independientes” 91. géneros, como la que hiciera el PSOE
y la que se ha aprobado en la LO 3/
■ En segundo lugar, se considera más
2007 (60%/40%), matizan, creo que
apropiado para la efectividad de la
acertadamente, que tal proporción –en
igualdad un texto similar al estableci-
caso de preferir expresarla en porcen-
do en la Ley francesa o en Ley auto-
tajes– ha de mantenerse en todos los
nómica manchega por el que se prevé
tramos de la lista.
un sistema de alternancia de uno y
otro sexo para cumplir con la igual-
dad de género y el equilibrio cualita- ■ Este es otro de los requisitos que, a
tivo en la toma de decisiones políticas. mi entender, habría de incluirse en la
De esta formulación me parece im- redacción de la reforma del art. 44
portante extraer algunas considera- LOREG. Preferiblemente mediante
ciones. Creo que resulta fundamental un sistema de alternancia o, en su de-
91
para abogar por la inclusión de ambos fecto, a través de porcentajes, la igual-
Idem, FJ 3.
géneros en la representación política dad de género ha de estar presente en
92
que no exista ninguna mención ex- todo el recorrido, en toda la lista de En el caso del Senado, la situación reflejada ha
presa o acción de favorecimiento a un candidaturas presentada por el parti- resultado más igualada. Generalmente, la mayo-

sexo concreto, mujer u hombre, tal y do. Si ello no fuera así, se retorna a la ría de las formaciones políticas con tres candida-
tos, han incluido una mujer; en el caso de cuatro
como contempla la LO 3/2007, ya arbitrariedad de las formaciones po- candidatos, se ha optado por el 50% de hombres
que este tipo de formulación implica- líticas sobre la decisión de que las y de mujeres y en el caso de un candidato, hay
mujeres ostenten o no puestos de formaciones que han apostado por la figura mas-
ría observar una necesaria temporali- culina y otras por la femenina.
dad de la medida y un cierto control representación y responsabilidad
93
de su cumplimiento. No obstante, se política. No obstante, aun dando En las Elecciones Generales de 9 de marzo de 2008,
trataría de un control excesivamente cumplimiento a la LO 3/2007, la por ejemplo, Los verdes Comunidad de Madrid-
verdadera paridad, la que genera Los Verdes de Europa (LVCM-LVE), Partido Unio-
preocupado por el objetivo numérico nista Estado de España (PUEDE), EuskoAlkartasuna
concreto de esta medida de acción po- igualdad real de calidad en la toma de (EA), Nabai y Unión, Progreso y Democracia
sitiva, esto es, favorecer a las mujeres, decisiones, ha de ir más allá del mero (UPD) encabezaron la lista con una mujer y la can-
didatura presentada por Alternativa en Blanco
dejando, sin embargo, a un lado el fin mantenimiento del porcentaje esta- (ABLA) incluyó dos mujeres en los puestos de liza.
último de la igualdad real de género. blecido y actuar con auténtica con-
94
ciencia democrática. En este aspecto, SSTC 96/2007, de 8 de mayo; 97/2007, de 8 de
Creo que la misma sensación de cum- cabría dudar de esta conciencia si las mayo; 98/2007, de 8 de mayo; 99/2007, de 9 de
plir objetivos cuantitativos en lugar mujeres aparecen sistemáticamente en mayo; 100/2007, de 9 de mayo; 101/2007, de 9
de mayo; 102/2007, de 9 de mayo; 103/2007, de
de cualitativos surgiría si se opta por una lista de personas candidatas entre 9 de mayo; 104/2007, de 9 de mayo; 105/2007,
un texto basado únicamente en por- los puestos 4 y 5 del tramo de cinco de 10 de mayo; 106/2007, de 10 de mayo;
centajes de mínimos y máximos en el que se ha de aplicar la horquilla 107/2007, de 10 de mayo; 111/2007, de 10 de
mayo; 113/2007, de 10 de mayo; 114/2007, de
(30/70; 40/60; etc.). En este caso, del 40%/60%. Así, por ejemplo, para 10 de mayo y 115/2007, de 10 de mayo.
no quedaría solucionado el impor- las recientes Elecciones Generales de 95
tante inconveniente del orden de las 9 de marzo de 2008, el Grupo Po- Véase la reciente obra de BIGLINO CAMPOS,
candidaturas y su colocación en las lis- pular ha presentado, en el caso del P. (Dir.), Nuevas expectativas democráticas y elec-
ciones, op. cit., pp. 75 y ss.
tas de candidatos, dejando de nuevo Congreso de los Diputados 92, una lis-
abierta la posibilidad de que las mu- ta de personas candidatas con la si- 96
Por todas, STC 104/2007, de 9 de mayo.
jeres continúen relegadas a puestos de tuación descrita entre los puestos 6 y
cola y, por lo tanto, a la imposibilidad 25. Únicamente entre los puestos 3 97
BOE núm. 95, de 20 de abril de 2007. Instruc-
de resultar elegidas. Es difícil, en este y 5 ha aparecido la alternancia de gé- ción incluida en prácticamente la totalidad de las
supuesto, establecer una relación real neros. El Grupo Socialista ha cum- Sentencias del TC en este asunto.
entre el cumplimiento del porcentaje plido el porcentaje señalado en la Ley 98
por el partido –por ejemplo, 30%– y en cada tramo de cinco puestos in- Por todas, STC 97/2007, de 8 de mayo, FJ 4.

42
D E R E C H O E S P A Ñ O L

cluyendo dos mujeres por cada tres Finalmente, hubiera sido importante, por lo que las Juntas Electorales han de
hombres hasta el puesto 20 de la lis- a efectos interpretativos, que el texto dar la oportunidad de que se haga. De
ta. Sólo entre los puestos 4 a 6, 9 a de la LOREG hubiera recogido la san- este modo, considera el Alto Tribunal
11 y 29 a 31 se ha dado la alter- ción en caso de incumplimiento del que una irregularidad de las valoradas
nancia de géneros. El caso de Iz- principio y de la garantía de Demo- en estos supuestos “no puede tener la
quierda Unida ha sido similar cracia paritaria. En este punto, la LO trascendencia fatal para el derecho fun-
aunque existe mayor constancia en 3/2007 no impone ningún tipo de damental a acceder en condiciones de
la alternancia entre los puestos 4 a sanción expresa. Se ha de entender que igualdad a las funciones y cargos pú-
9. Ninguna de las formaciones men- las listas podrán ser impugnadas por blicos (art. 23.2 CE) pues tal defecto
cionadas ha colocado a una mujer incumplimiento del art. 44 de la LO- es subsanable”. El Tribunal Constitu-
entre los puestos 1 y 2 de la lista. REG siguiendo el procedimiento le- cional se ha apoyado en todos estos
gislativo establecido. La inclusión en asuntos en lo señalado por la Junta
Así, pues, el orden de las personas can-
la LOREG de un sistema de sanción Electoral Central (JEC) al pronunciar-
didatas en las listas continúa estando en
más específico en relación a la subsa- se en su Instrucción 8/2007, de 19 de
manos de las formaciones políticas que,
nación de listas por contraindicar la abril, para interpretar lo que había de
aun cumpliendo con el principio de re-
democracia paritaria, podría haber evi- ser adecuado en materia de trámite de
presentación equilibrada de género que
tado las numerosas dudas de interpre- subsanación de irregularidades. Así, la
propone la Ley de Igualdad –tanto
tación aplicativa que ha suscitado en JEC, había establecido que “cuando la
para el conjunto de la lista como para
este punto la ley y sobre la que versan causa de las irregularidades advertidas,
cada tramo de cinco puestos–, no siem-
las sentencias del Tribunal Constitu- sea el incumplimiento de lo dispuesto
pre puede verse materializado en la re-
cional sobre esta materia 94. En casi to- en el artículo 44 bis de la LOREG o
presentación equilibrada real al verse
dos los supuestos las listas cuestionadas en la legislación autonómica aplicable
traducidos en escaños en función del
fueron impugnadas por carecer de la sobre candidaturas paritarias, podrá
orden que hayan ocupado hombres y
representación equilibrada de hombres modificarse el orden de las personas
mujeres en la lista. Por este motivo, se
y mujeres exigida por la Ley ya que, candidatas, o incluir o excluir alguna
considera que el mejor sistema para la
en general, se contó con un número persona candidata, siempre que con ello
igualdad efectiva es la alternancia de gé-
menor de mujeres que el requerido, lo se trate estrictamente de subsanar la
neros o sistema cremallera en los todos
que tuvo como resultado la anulación irregularidad apreciada, de conformi-
los puestos posibles y, fundamental-
de la candidatura presentada 95. En es- dad con lo dispuesto en el último inci-
mente, en los que presumiblemente van
te aspecto, en los casos presentados no so del art. 48.1 de la LOREG”97. Si la
a ser traducidos en escaños. Aún así,
se solicitó al Tribunal Constitucional Ley 3/2007 hubiera previsto siquiera
queda de nuevo en la conciencia para
que se pronunciase sobre la constitu- una remisión al trámite de subsanación
la igualdad de las formaciones políticas
cionalidad de la medida de represen- general previsto en la LOREG, quizás,
incluir en la cabeza de lista, depositan-
tación equilibrada entre géneros que hubiera ayudado a establecer una pau-
do su confianza, a una mujer 93.
establece la Ley de Igualdad, sino so- ta más exacta en orden al cumplimien-
Ahora bien, para mantener la coheren- bre la posibilidad, no ofrecida por la to de la representación equilibrada por
cia con la primera premisa señalada, Administración Electoral pertinente, las formaciones políticas. En todo ca-
podría haber resultado más completo de subsanar la lista de personas candi- so, el Tribunal Constitucional señaló
contemplar alguna fórmula para aque- datas presentada. Algunas formacio- que el “hecho notorio de que la Ley no
llos partidos que, por problemas re- nes políticas, incluso, alegaron cierto prevea dicho trámite de subsanación,
lacionados con la insuficiencia de cumplimiento de la diligencia oportu- sino con carácter previo a la proclama-
población femenina o, en su caso, mas- na ya que, cuando tuvieron cono- ción de candidaturas, no puede en mo-
culina, afiliada al partido, no puedan cimiento de la irregularidad cometida, do alguno llevar a la conclusión de que
cumplir con los criterios de paridad exi- intentaron la subsanación pero la Ad- los defectos, en su día, subsanables de-
gidos en todos los tramos de la lista. Por ministración Electoral no les otorgó vengan definitivos e irreparables tan so-
ejemplo, se puede prever que, eventual- plazo y modo para hacerlo 96. En casi lo por el irregular funcionamiento de
mente, bajo previa y sólida justificación, la totalidad de los casos referidos, se la Administración Electoral (…)” 98. Así,
los partidos con este problema sean exi- procedió a otorgar el amparo solicita- establece que la interpretación de la le-
midos de mantener la paridad numérica do por entender que no se dio el ade- galidad aplicable del modo más favora-
en toda la lista pero no así en el tramo cuado cauce de subsanación. ble al derecho fundamental garantizado
inicial de la misma. Podría considerarse por el art. 23.2 CE exigía que el órga-
tramo inicial el que discurre entre los pri- En este punto, la doctrina del Tribunal no judicial, una vez apreciado el in-
meros tres, seis o nueve puestos de la lis- Constitucional ha establecido que, en cumplimiento de lo dispuesto en el art.
ta. O, en su defecto, en aquellos puestos materia de subsanación de irregulari- 44 bis LOREG, tendría que, en aras de
que la formación política pertinente es- dades sufridas en la presentación de can- preservar el derecho de sufragio pasi-
time que, en previsiones normales, van didaturas, los errores cometidos en la vo, modular los efectos de aquella de-
a ser traducidos en escaños. presentación de éstas son subsanables, claración de nulidad, requiriendo a la

43
D E R E C H O E S P A Ñ O L

referida Junta Electoral para que otorga- Icod de los Vinos denegó la proclama-
se un plazo de subsanación prevista en el ción de la candidatura presentada por el
art. 47.2 LOREG a fin de adecuar la pro- Partido Popular para el citado munici-
porción de personas candidatas exigida pio por no adaptarse a las exigencias del
por el art. 44 bis LOREG 99. art. 44 bis LOREG. La resolución, que
fue objeto de un recurso contencioso-
Con el fin de solucionar el incum- electoral, provocó que se plantease por
plimiento de la representación equilibrada la persona que juzga una cuestión de
de hombres y mujeres, algunas leyes en constitucionalidad en relación a la cons-
otros países han optado por imponer un titucionalidad del art. 44 bis LOREG.
sistema de sanciones o bonificaciones en Los argumentos esgrimidos por la per-
la financiación de los partidos políticos. sona que juzga en contra de la medida
Sin embargo, tal y como explica Micae- recogida en el precepto de referencia no
la Navarro Garzón, estos sistemas no pa- ofrecieron nada nuevo. En resumen, se
recen del todo efectivos 100. En mi opinión, refirieron a la posible vulneración del
las sanciones o bonificaciones en el sis- art. 14 CE que impide que la persona
tema de financiación hacen tambalear la que legisla realice diferencias de trato
efectividad de la reserva electoral como que no sean objetivas y razonables, a
instrumento para la paridad dejando, de que el artículo 23.2 CE reconoce el
nuevo, en manos de las formaciones po- derecho de los ciudadanos a acceder a
líticas poderosas la decisión de cumplir o los cargos públicos en condiciones de
no con la igualdad. igualdad o a que es una medida que
En conclusión, la infracción del princi- pretendiendo beneficiar a las mujeres las
pio de Democracia paritaria debe de- perjudica. Asimismo, la persona que
sencadenar la misma respuesta que el juzga apeló a los ya conocidos argu-
99
incumplimiento de algún requisito o de mentos empleados por la Corte italiana Por todas, STC 98/2007, de 8 de mayo, FJ 6.
alguna causa de inelegibilidad del artículo y el Consejo Constitucional francés en
100
6 de la LOREG 101. La fórmula de sanción relación a la vulneración del contenido
NAVARRO GARZÓN, M., “Propuesta de mo-
que se considera acorde al sistema legal esencial del derecho al sufragio pasivo y dificación de la Ley Electoral española para in-

debe atender a la idea de no dar curso a también consideró que el precepto cues- troducir la democracia paritaria”, cit., p. 261. En
el mismo texto, se expresa, igualmente, Cristina
la lista que incumpla el requisito exigido tionado infringe la libertad de los parti- Alberdi. Véase la p. 275.
por la Ley. Bien sea una lista que inclu- dos políticos a la hora de escoger a sus
101
ya personas menores de edad o diputa- personas candidatas para incorporarlas En sentido parecido, BALAGUER CALLEJÓN,
dos y diputadas incursos en alguna causa a las listas electorales eliminando la va- M.L., “Desigualdad compensatoria en el acceso
lía personal. Entre los argumentos que a cargos representativos en el ordenamiento ju-
de inelegibilidad o que excluya a la mi- rídico-constitucional español”, cit., p. 4.
tad del cuerpo electoral y del pueblo so- señaló el Abogado del Estado –algunos,
102
berano: mujeres o, en su caso, hombres, recogidos en este trabajo–, a favor de la
A esta conclusión se llega en la obra colectiva di-
por serlo. Se incide en la idea de que las constitucionalidad del precepto cues- rigida por SAAVEDRA RUIZ, P., (Dir.) Hacia

mujeres no son una categoría social. tionado, me merece la pena destacar la una Democracia Paritaria. Análisis y revisión de
las leyes electorales vigentes, CELEM, Palermo,
Tampoco los hombres. La existencia del afirmación de que las mujeres no cons- 1999, p. 277.
género humano: hombre o mujer, está tituyen una categoría entre otras por lo
103
por encima y fuera de la Constitución. que su representación en el Parlamento Sobre el juicio constitucional de proporcionali-
La reglamentación de cuotas, en conse- no atiende a una mera representación dad de las leyes de paridad electoral, véase el in-
de intereses femeninos, sino que res- teresante trabajo de MARTÍNEZ ALARCÓN,
cuencia, no abre una vía para cualquier M.L., Cuota electoral de mujeres y Derecho Cons-
parcelación del sufragio universal ya que ponde al objetivo de universalizar el titucional, Premio “Mujer y Parlamento Clara
las mujeres, como los hombres, son uno contenido de la política. Esta medida de Campoamor”, Congreso de los Diputados, Ma-
drid, 2007, pp. 199 y ss.
de los componentes del cuerpo social y acción positiva contribuye a eliminar de
forma proporcional las diferencias 104
no una categoría entre otras 102. STC 12/2008, de 29 de enero.
injustificadas en este ámbito entre los
En otro orden, tuvo lugar un caso sexos salvaguardando, bajo la presencia 105
equilibrada de hombres y de mujeres en Se pronunció el Magistrado Rodríguez-Zapata en
polémico que resultó ser objeto de un un voto particular en el sentido de las demandas
recurso ante la Jurisdicción Contencio- la representación política, la unidad del interpuestas, considerando que “la imposición por
so-Administrativa. Se trató de la lista pueblo como titular de la soberanía. ley de la paridad o de cuotas vulnera el principio
de unidad de la representación política, la libertad
electoral que presentó el Partido Popu- ideológica, la autoorganización de los partidos po-
lar en Garachico (Santa Cruz de Tene- Paralelamente, el 21 de junio de 2007, líticos y el derecho de sufragio pasivo de los candi-
datos excluidos de participar en el proceso electoral
rife), compuesta exclusivamente por el Grupo Popular del Congreso de los como consecuencia de la aplicación de la norma en
mujeres. La Junta Electoral de Zona de Diputados interpuso recurso de incons- cuestión”.

44
D E R E C H O E S P A Ñ O L

titucionalidad contra la Disposición en representación el 60% o sea inferior damentales y satisface exigencias cons-
Adicional Segunda de la LO 3/2007, al 40%, lo que implica que el efecto de titucionales. Además, la posible limita-
de 22 de marzo, para la igualdad efec- la norma en cuestión es bidireccional ción en la libertad de presentar can-
tiva de mujeres y hombres, por enten- para uno y otro sexo (FJ 3). didaturas no se les impone a los parti-
der que la medida recogida vulneraba dos políticos en razón a su naturaleza
el art. 23 CE al alterar el sistema elec- El Alto Tribunal no entendió que exis- de asociación, sino específicamente por
toral español, así como el derecho fun- tiera vulneración del derecho de su- ser partidos políticos. En conexión con
damental del artículo 14. Del mismo fragio pasivo en tanto que el contenido esto, la proporción recogida en la LO-
modo, entendieron que la protección esencial de este derecho reside en la REG para la presencia equilibrada de
de la mujer no es por sí sola razón su- correlación entre la persona candida- hombres y mujeres en la representa-
ficiente para justificar la diferenciación, ta que se presenta y la que salga elegi- ción política, no implica la exigencia de
siendo, además, una medida despro- da representante en garantía de la que las formaciones políticas participen
porcional e, incluso, perjudicial para el voluntad del cuerpo electoral. Del mis- de los valores sobre los que se susten-
colectivo al que se pretende beneficiar 103. mo modo, la regla que se cuestiona se ta la Democracia paritaria pero tam-
Asimismo, alegaron la vulneración por impone a partidos, federaciones y co- poco pueden aquéllas sustraerse al
la LO 3/2007 del art. 6 CE en rela- aliciones de partidos y agrupaciones mandato constitucional de la igualdad
ción con el art. 22.1 CE en tanto la de personas electoras, por lo que el Tri- ni a las pautas establecidas por la per-
medida cuestionada supone una res- bunal Constitucional consideró que el sona que legisla (FJ 6).
tricción de la libre actividad de los par- fondo de la cuestión residió en deter-
Posteriormente, el Tribunal Constitu-
tidos políticos en la formación de minar la legitimidad constitucional de
cional señaló algún matiz sobre las
candidaturas, aludiendo al caso de Ga- la imposición a los partidos políticos
agrupaciones de personas electoras.
rachico. En el sentido en el que se pro- de presentar candidaturas con la com-
Respecto a los límites que impone la
nunció la persona que juzga al plantear posición equilibrada de hombres y mu-
norma respecto de los municipios y las
la cuestión de inconstitucionalidad jeres que prevé el art. 44 bis LOREG.
islas y de la posibilidad de que las
mencionada, entre los argumentos En ese punto, el Tribunal Constitu-
CCAA puedan ampliar el margen ofre-
presentados en el recurso, también se cional afirmó con, a mi juicio, sólidos
cido por la norma para ampliar la par-
consideró limitado por la medida im- argumentos, que los partidos políti-
ticipación de ambos géneros a cuotas
pugnada el derecho de sufragio pasivo cos, en tanto asociaciones cualificadas
cercanas al 50%, el Alto Tribunal con-
y la fragmentación del cuerpo electo- por sus funciones constitucionales, son
sideró que no hay nada que reprochar
ral, así como la libertad ideológica de un cauce válido para el logro de la sus-
al respecto en virtud del mandato del
pensamiento de los partidos y las per- tantivación de la igualdad (FJ 5). Por
art. 9.2 CE. Por todas estas cuestio-
sonas que los integran. lo tanto, continuó argumentando el
nes el Tribunal Constitucional deses-
Alto Tribunal, el que coadyuven por
timó tanto la cuestión como el recurso
A la luz de la coincidencia de argu- imperativo legal a la realización de un
de inconstitucionalidad 105.
mentos y de la temporalidad de las de- objetivo previsto en el artículo 9.2 CE
mandas que suscitaron esta cuestión y no es cuestión que pueda suscitar pro- Así, pues, aunque creo que podrían ha-
este recurso de inconstitucionalidad, blemas de legitimidad constitucional. berse matizado o completado las fór-
el Tribunal Constitucional les ha da- Su configuración como instrumentos mulas por las que ha optado la LO 3/
do una solución conjunta, resolvien- para la formación de la participación 2007 para la mejor y mayor efectivi-
do el recurso acumulado a la cuestión política y medio de expresión del plu- dad de la igualdad, incluye medidas
analizada 104. La Sentencia, que se re- ralismo como sujetos que concurren a sensatas y realistas y, en consecuencia
suelve favorablemente –no sin polé- la formación y manifestación de la vo- merece, a mi juicio, una valoración
mica interna de la que resultó un voto luntad popular, les diferencia de otras positiva apoyada en el elevado com-
particular–, se centra en cuestionar asociaciones y les sujeta a las delimita- promiso que supone y que exige la ac-
la oportunidad política de la Ley ciones que la persona que legisla con- tuación de los poderes públicos, los
controvertida y los problemas de su sidere para definir el ejercicio de tales organismos públicos o privados y los
constitucionalidad. El Tribunal Cons- funciones, también, en cumplimiento agentes sociales para la consecución de
titucional, tras establecer que el obje- de la igualdad real y efectiva tal y co- la igualdad real. De hecho, los efectos
tivo de la ley responde a la consecución mo enuncia el art. 9.2 CE. Asimismo, de la LO 3/2007 se comienzan a vis-
de la igualdad material, señaló que la la libertad para confeccionar las candi- lumbrar. Los Consejos de Administra-
medida que introdujo la LO 3/2007 daturas no es ilimitada en virtud de las ción están descubriendo la cantidad de
no establece una medida de favore- exigencias de elegibilidad por lo que mujeres capacitadas que había en su
cimiento de un sexo sobre otro, sino tampoco lo ha de ser en cuanto a exi- entorno y las formaciones políticas
una fórmula de equilibrio entre sexos gencias de composición equilibrada en cuentan con sus candidatas para con-
que tampoco impone una total igual- razón del género, ya que ésta constituye formar sus listas electorales. Algunos
dad entre hombres y mujeres, sino una una constricción instrumentada, no datos ya se han aportado a partir de las
barrera para que ningún género supere lesiva para el ejercicio de derechos fun- pasadas elecciones autonómicas y mu-

45
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nicipales de 2007 106. Por otro lado, tam- . Finalmente, también las Comunidades 106
bién se han dejado entrever los proble- Autónomas han de implicarse en esta re- Por ejemplo, en las elecciones municipales el
PSOE cuenta con 591 mujeres entre los 1.310
mas de aplicación que ha suscitado la forma disponiendo en sus Leyes electo- candidatos. La cifra, sin embargo, se reduce en
norma. Parece que el compromiso y la rales el principio de Democracia paritaria las candidatas a Alcaldía. El PSOE cuenta con 20
en cumplimiento de sus respectivos Es- y el PP con 18. Entre otros datos, IU, en las lis-
sensibilización por la Democracia pari- tas autonómicas por Extremadura, presenta, en
taria de las formaciones políticas no siem- tatutos 110. Cáceres, un 53% de mujeres y, en Badajoz, un
pre son auténticos 107. Algunas listas han Pero, sin duda, la reforma más impor-
49%. www.ideal.es/almeria/prensa.
sido impugnadas evidenciándose, así, tante y definitiva será aquella que sea ca- 107
que, en algunos casos, los partidos no paz de modificar las estructuras y los Denunciado por Coalición Canaria, parece que
habían contado previamente con sus mu- parámetros sociales para transformar el los Cabildos de Tenerife y La Gomera no cum-
jeres afiliadas y, en otros casos, se pone viejo modelo social en uno nuevo basa-
plen con la Ley. www.canarias7.es.
de nuevo de manifiesto el rechazo de las do en compartir todas las responsabili- 108
mismas mujeres que, ante la forma de dades por los hombres y por las mujeres Algunos estudios de la década de los ochenta tra-
hacer política, aún basada en patrones en todos los ámbitos, públicos o priva- tan de mostrar exposiciones sobre el perfil de las
masculinos de ejercer el poder con in- dos, y a cualquier nivel 111. En la creencia
mujeres que mayor interés demuestran por la po-
lítica. Parece que aquellas mujeres que tienen
tensas jornadas de trabajo, junto a la fal- de que esta transformación social está mayor formación, viven en núcleos urbanos y
ta de la conciliación de la vida familiar y por llegar, tengo la convicción de que la son económicamente independientes o trabajan
laboral de hombres y de mujeres, re- fuera de casa, así como las solteras, divorciadas o
paridad numérica no constituye, en sí separadas, tendrían mayor afinidad con la mate-
nuncian al puesto ofrecido o no perma- misma, ningún resultado, sino tan sólo ria política. Véase, DOWSE, R.E. y HUGUES,
necen en él 108. un punto de partida, en igualdad, para
J.A., Sociología Política, Alianza Ed., Madrid,
1975, p. 369. También, INSTITUTO IDES,
iniciar la carrera hacia otro modelo de Las españolas ante la política, Serie “Estudios”,
Establecidos estos presupuestos, consi- Democracia, hacia otro pacto. núm. 21, Instituto de la Mujer/Ministerio de
dero que esta reforma ha de verse acom- Asuntos Sociales, Madrid, 1988, p. 51. Y ASTE-
LARRA J., (comp.) Participación política de las
pañada de otras. Por ejemplo, en la
propia LOREG, me parecería acertado
5. CONCLUSIONES. mujeres, Centro de Investigaciones Sociológicas,
Colección “Monografías” núm. 109, Madrid,
el uso de una terminología de inclusión EL NUEVO PACTO SOCIAL 1990, pp. 7 y ss. Sobre el papel de las mujeres
ante la política y las causas de su baja participa-
como ‘candidatas y candidatos’ o, pre- De acuerdo con la última conclusión ex- ción a lo largo de las décadas anteriores, existe
feriblemente, candidaturas cuando se ha- puesta, se ha de entender que, por lo una vasta bibliografía. Entre otros muchos,
URIARTE, E., “Las mujeres en las élites políti-
ble con carácter general. Más importante tanto, la reforma que se ha producido cas“ en URIARTE, E. y ELIZONDO, A., Mu-
considero que sería incluir las referencias de la LOREG a través de la LO 3/2007 jeres en política, Ariel, Barcelona, 1997, pp. 67 y
a ‘las ciudadanas’ junto a las de los ciu- ss; SANI, G. y CASTILLO VERA, P., “El rol
para la Igualdad Efectiva de Mujeres y político de las mujeres en la España actual: con-
dadanos, por ejemplo, en la Exposición de Hombres, aunque de gran trascen- tinuidad y cambio“, Revista de Derecho Político,
de Motivos. Asimismo, entiendo que una dencia en el marco jurídico y social con- núm. 17, 1983, pp. 203 y ss; ORTIZ CORU-
LLA, C., La participación política de las mujeres
reforma completa ha de hacerse desde la temporáneo, no es, en el fondo, más que en democracia (1977-1986), Instituto de la Mu-
transversalidad y afectación del conjun- una importante estrategia para la con- jer, Ministerio de Cultura, Madrid, 1987; MAR-
to de normas sobre esa materia. Por lo TÍNEZ TEN, C., “La participación política de
secución de un fin último, de mayor en- la mujer en España“, en ASTELARRA J.,
tanto, de mayor calado, pero en todo ca- vergadura, que no es otro que la paridad (comp.) Participación política de las mujeres,
so necesaria, podría considerarse una re- cualitativa o lo que se ha definido como Centro de Investigaciones Sociológicas, Colec-
ción “Monografías” núm. 109, Madrid, 1990,
forma en la Ley de Partidos Políticos que principio de Democracia paritaria. pp. 64-65; GARCÍA DE LEÓN, M.A., Élites
incluyese el principio de Democracia pa- discriminadas. Sobre el poder de las mujeres,
En la actualidad, la igualdad efectiva en- Anthropos, Madrid, 1994. Algunas diputadas
ritaria en torno a los artículos 6 ó 7.1 en
tre hombres y mujeres aún está cons- comentan que hasta las formas, las maneras o la
los que se regula la democracia, la orga- estética en política son masculinas y la manera de
truida sobre pilares poco sólidos, más
nización y el funcionamiento interno de entrar en política, seas un hombre o una mujer,
cercanos a la idea de igualdad ficticia que ha de ser masculina. Así lo manifiestan las auto-
los partidos políticos. Puesto que no es
a la de igualdad real. Precisamente, en ras en relación con los partidos políticos en
compatible un funcionamiento demo- GASPARD, F., SERVAN-SCHREIBER, C. y
el momento actual, con el fin de que no
crático con la exclusión de la ciudadanía LE GALL, A., Au pouvoir citoyennes, liberté,
se perpetúen falsos sentimientos de nor- égalité, parité, ed. Seuil, París, 1992, p. 154. SE-
de las mujeres –o de los hombres–, tam- VILLA MERINO, J., Mujeres y ciudadanía: la
malidad, de neutralidad y de falsa igual-
bién debería figurar la exigencia de pari- democracia paritaria, Colecció “Quaderns Fe-
dad, es muy importante actuar en ministes”, núm. 4, Institut Universitari d’Estu-
dad para las formaciones políticas. En
positivo y decidir la adopción de accio- dis de la Dona, Universidad de Valencia, 2004,
este sentido, Navarro Méndez afirma que p. 82.
nes positivas que traten de situar a los
“la situación de marginación femenina
hombres y a las mujeres en igualdad de
es incompatible con la exigencia de de- 109
armas para la competición, tal y como NAVARRO MENDEZ, J.I., Partidos políticos y
mocracia interna pues constituye un aten-
ha pretendido recoger la reciente Ley “democracia interna”, Centro de Estudios Polí-
tado contra el principio de igualdad de ticos y Constitucionales, Madrid, 1999, p. 405.
de Igualdad.
todos los afiliados en sus relaciones con el También, SALAZAR BENÍTEZ, O., Las cuotas
electorales femeninas: una exigencia del principio
partido en que se integran, que veta cual- Más allá de la acción positiva e, incluso, de igualdad sustancial. Contra el monopolio de los
quier género de discriminación sexual” 109 de la igualdad real se encuentra la autén- púlpitos, ob. cit., pp. 161 y ss.

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D E R E C H O E S P A Ñ O L

110 tica capacidad de los hombres y de las positiva que en ella se proponen consti-
Recuérdese que, aunque se prefiere la reforma mujeres que comparten el poder políti- tuyen un gran avance en la consecución
principalmente de la LOREG, se comparte la
opinión del profesor Salazar Benítez en la que co de modificar las estructuras para la de la igualdad efectiva de hombres y de
considera que la adopción de cuotas por las leyes creación de un nuevo modelo de repre- mujeres. Es posible que uno de los lo-
electorales autonómicas no plantea problemas ya sentación democrática 112. gros de la Ley sea la visualización de las
que las Comunidades Autónomas disponen de
competencia para establecer en sus normativas mujeres en diversos ámbitos en los que
electorales requisitos para la configuración de las Este ideal viene representado por la no- permanecían ocultas o infrarrepresenta-
listas. Asimismo, un apoyo adicional lo cons- ción de Democracia paritaria, de modo das. Pero se ha de seguir trabajando en
tituyen las referencias a la igualdad en sus res- que sólo se podrá hablar de él cuando
pectivos Estatutos de Autonomía. SALAZAR los orígenes de la desigualdad y en las
BENÍTEZ, O., Las cuotas electorales femeninas: la igualdad se considere por todos los estructuras que las pasadas revoluciones
una exigencia del principio de igualdad sustan- poderes públicos, los agentes sociales y no supieron erradicar perpetuando, así,
cial. Contra el monopolio de los púlpitos, ob. cit.,
p. 160.
los ciudadanos y ciudadanas no sólo un unos cimientos ya viciados sobre los que
valor jurídico sino, también, un valor se construyó el constitucionalismo mo-
111
En la misma línea, SOLSONA I PIÑOL, C.,
democrático y, como señaló Aguilar Ri- derno y el Estado social. Se ha de tener
“Propuesta de modificación de la Ley Electoral vero, “un valor social” 113. muy presente que la desigualdad entre
española para introducir la democracia paritaria”,
en SAAVEDRA RUIZ, P., (Dir.) Hacia una De- Como es sabido, la inclusión de las mu- hombres y mujeres no se produce des-
mocracia Paritaria. Análisis y revisión de las leyes
jeres en el pacto social se viene reivindi- de la legalidad, sino desde las estructu-
electorales vigentes, CELEM, Palermo, 1999, p.
267. Apunta que cualquier propuesta ha de ir cando desde hace siglos, (tómese de ras de las instituciones y desde el poder.
unida al nuevo contrato social de corresponsabi- referencia la conocida imagen de Olim- La presencia de las mujeres en el ámbi-
lidades en todo de todas y de todos “sin que los to público ha evolucionado notable-
roles de género determinen espacios o funciones”. pia De Gouges) y aún se sigue recla-
mando en nuestros días. A mi juicio, es mente pero la lucha sigue en pie. Se
112
la propia presencia equilibrada de ambos corre el peligro de haber cambiado la
En consecución de esta finalidad última me
parece oportuno el uso de acciones positivas co- géneros en todos los ámbitos y niveles, dependencia del padre, el marido y los
mo las cuotas por plantear la mejor oportunidad
con independencia de los valores que hijos por la dependencia del Estado y de
para el fin real de la paridad. Por el mismo moti-
vo, en aras de preservar un objetivo más sólido, asuman y que manifiesten, lo que gene- los poderes públicos en la pugna por la
Ruth Rubio y Blanca Rodríguez prefieren consi- rará justicia social 114. plena igualdad 117. La paridad no debería
derar las cuotas inadecuadas por ser insuficientes ser parte del discurso político de una
y por los posibles efectos negativos. RUIZ RO-
DRÍGUEZ, B., y RUBIO MARÍN, R., “De la
Por eso, la igualdad está en otra parte, campaña electoral, sino un presupuesto
paridad, la igualdad y la representación en el Es- en otro pacto. Equiparación aquí no sig- esencial de ciudadanía y de existencia.
tado democrático”, cit., p. 157. nifica identidad. Equiparación significa La mera presencia de las mujeres no se-
113 paridad, es decir, la idea del reparto igua- rá más que un cambio de superficie si se
AGUILAR RIVERO, R., “Participación política litario de las responsabilidades en el ám- les continúa impidiendo penetrar en las
y copartición del poder”, cit., p. 74.
bito público y privado, incluido el poder estructuras del poder del Estado para
114 político 115. modificarlas desde dentro. En sentido
En sentido similar, NAVARRO GARZÓN, M.,
“Propuesta de modificación de la Ley Electoral contrario, no se está ante el total reco-
Por lo tanto, la paridad supone llevar al
española para introducir la democracia paritaria”, nocimiento de pertenencia a la sociedad
cit., p. 261. máximo extremo la igualdad jurídica y
de las mujeres como un sujeto igual de
115
real para acabar con la jerarquía de gé-
hecho y de derecho, seres humanos y
MARTÍNEZ SAMPERE, E., “La legitimidad de nero, a mi juicio, una de las grandes la-
ciudadanas independientes con plenos
la democracia paritaria“, cit., pp.142-143. La De- gunas de la configuración actual de la
claración de París del año 1999 realiza en el sen- derechos y capacidad para dirigir, deci-
democracia representativa. Como apun-
tido expuesto un llamamiento a mujeres y hombres dir y gestionar la política de la sociedad.
para que se comprometan a favor de un nuevo tó Alberdi, “la paridad en la participa-
pacto, muestra de una sociedad solidaria, de una ción política de hombres y mujeres es una
economía dinámica y de una ambición europea.
condición de la democracia, ligada a la Por lo tanto, una nueva forma de enten-
116 ciudadanía. El derecho a participar ac- der el Estado constitucional, social y de-
ALBERDI ALONSO, C., “Propuesta de modi-
tivamente como electoras y elegidas en la mocrático de Derecho y la representación
ficación de la Ley Electoral española para
introducir la democracia paritaria“, en SAAVE- proporción equivalente a nuestra presen- política implica un nuevo pacto social:
DRA RUIZ, P., (Dir.) Hacia una Democracia cia en la sociedad es una cuestión de jus- aquél que abogue por la inclusión de las
Paritaria. Análisis y revisión de las leyes electora-
ticia y enriquece la propia democracia. mujeres, de los dos géneros, en la toma
les vigentes, CELEM, Palermo, 1999, pp. 269 y
277. Igualmente, AGACINSKI, S., Política de Una democracia sin la participación en de decisiones y de responsabilidades.
sexos, ob. cit., pp. 155 y ss. y TESORO AMATE,
equidad de las mujeres es deficitaria, no También, las políticas. A partir del mo-
M., “Participación política y copartición del po- mento de la inclusión definitiva de las mu-
der“, cit., p. 67. es una democracia completa” 116. En defi-
nitiva, creo que no es democracia. jeres en el pacto, éste devendrá otro pacto
117
mejor, una completa visión de la demo-
Sobre estas ideas, RUBIO CASTRO, A., “Glo-
balización y ciudadanía para las mujeres“, Ponencia En este sentido, la reciente Ley de cracia y, por consiguiente, un contrato
presentada al Symposium “Mujeres y derecho: Lu- Igualdad puede considerarse un hito social acabado basado en la esencia de ser
ces y sombras en el ordenamiento jurídico”, marzo
de 2007, Asociación de Estudios Históricos so-
histórico de una magnífica relevancia so- representante y representado: hombre o
bre la Mujer, Universidad de Málaga. cial y jurídica. Las medidas de acción mujer, pueblo soberano, en definitiva.

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