Oración en Acción de Gracias Padre,

me abandono a Ti.
Virgen Milagrosa, mírame delante de ti, Haz de mí lo que quieras.
lleno de alegría, para darte gracias por el
Lo que hagas de mí te lo agradezco,
favor que me has concedido.
estoy dispuesto a todo,
He reconocido por experiencia que lo acepto todo.
siempre escuchas las peticiones Con tal que Tu voluntad se haga en mí
que te hacemos y que tu Medalla es y en todas tus criaturas,
prenda de protección y paz.
no deseo nada más, Dios mío.
Continúa, Virgen Milagrosa, otorgándonos
Pongo mi vida en Tus manos.
favores y acercándonos cada día más al Señor.
Te la doy, Dios mío,
con todo el amor de mi corazón,
porque te amo,
y porque para mí amarte es darme,
entregarme en Tus manos sin medida,
con infinita confianza,
porque Tu eres mi Padre.

Oración por los Sacerdotes

Oh Jesús Sacerdote Eterno Oh Señora mía, oh Madre mía, yo me ofrezco
guarda a tus sacerdotes bajo la enteramente a ti y en prueba de mi filial afecto
protección de tu Sagrado Corazón te consagro en este día: mis ojos, mis oídos,
donde nada pueda mancillarlos
mi lengua, mi corazón, en una palabra todo mi ser,
guarda inmaculadas sus manos ungidas,
ya que soy todo tuyo; oh Madre de bondad
que tocan cada día tu sagrado Cuerpo
guarda inmaculados sus labios, diariamente guárdame y defiéndeme como cosa y posesión tuya
teñidos con tu preciosa sangre
guarda puros y despojados de todo afecto
terrenal su corazón que tú has
sellado con tu sublime marca del sacerdocio.
Que tu santo amor los rodee y los
preserve del contagio del mundo.
Inmaculada Madre de Dios y Madre mía
Bendice sus tareas apostólicas
que al entregarnos tu Medalla
con abundante fruto y haz que
las almas confiadas a su celo y te has mostrado dispensadora de todas las gracias
dirección sean su alegría acá en del cielo. Reconozco mi indignidad para merecer tu
la tierra y formen en el cielo su protección, pero miro tu imagen con los brazos
hermosa e inmarcesible corona. abiertos y recurro a Ti para que me concedas de tu
Te lo pedimos por nuestra Hijo, la gracia que te pido ….
Inmaculada, a ti que vives y reinas Madre por
los siglos de los siglos. Oh María sin pecado concebida, ruega por nosotros
Amén. que recurrimos a Ti. (3Veces)
 Ofrecimiento de Vida
Mi amable Jesús, delante de las personas de la
Santísima Trinidad, delante de nuestra Madre del
cielo y toda la corte celestial, ofrezco según las
intenciones de tu Corazón Eucarístico y las del
Inmaculado Corazón de María Santísima toda mi
vida, todas mis santas Misas, Comuniones, buenas
obras, sacrificios y sufrimientos, uniéndolos a los
méritos de tu Santísima Sangre y tu muerte de cruz:
para adorar a la gloriosa Santísima Trinidad, para
ofrecerle reparación por nuestras ofensas, por la
unión de nuestra santa madre Iglesia, por nuestros
sacerdotes, por las buenas vocaciones sacerdotales y
por todas las almas hasta el fin del mundo.
Recibe Jesús mío, mi ofrecimiento de vida y
concédeme gracias para perseverar en el fielmente
hasta el fin de mi vida.
Padre Bendito, en el Nombre de tu amadísimo
Hijo nuestro Señor Jesucristo, invocamos el poder
del Espíritu Santo sobre nuestras hijas para que ellas
alcancen la gracia de la verdadera conversión.
Señor Bendito, a ti te las confiamos que tu amorosa
bendición descienda sobre ellas protegiéndolas y
preservándolas de todo mal.
RENUNCIO A MI MISMO Y ME CONSAGRO A TI,
QUERIDA MADRE MÍA.
Declaro tu Victoria
En esta situación que estoy viviendo
en esta tempestad que estoy pasando.
Declaro tu victoria.
Tu sangre vencedora tu gran poder
yo quiero ver Señor.
A ti confío mi causa.
Tu eres mi esperanza pues por tu amor
soy más que vencedor
sobre enfermedad y dolor
declaro tu victoria,
sobre tristeza y soledad
declaro tu victoria.
Manojito de imposibles a la Santísima Virgen de
Guadalupe
¡Oh Madre de Guadalupe, que para
Ti no hay imposibles! Problemas insolubles,
dificultades insuperables, penas sin humano
remedio que me torturan espantosamente, aquí
están Madre mía, para que Tu hagas el imposible de
que se remedien .....Muestra la grandeza de tu
amor y tu poder superando esos imposibles
.Los traigo a tus plantas , en la confianza, con la
plena seguridad de que los remediaras, porque por
tu propia dignación y por el compromiso que tu
Corazón quiso contraer en favor nuestro, esos
imposibles dejaran de serlo al influjo irresistible de tu
bondad.
Por Nuestro Señor Jesucristo. Amen.
 Santísima Madre de Guadalupe
Santísima Madre de Guadalupe cubre con tu manto
a todos los bebés que han sido concebidos y están
por nacer.
Da a sus papás y a sus mamás la gracia de recibirlos
con inmenso amor. Y, a cada uno de nosotros
concédenos siempre hacer cuanto esté a nuestro
alcance para protegerlos de todo peligro. Te lo
pedimos por Jesús tu Hijo amado fruto bendito de tu
vientre. Amén.
Consagración de mis hijos a María
Madre de amor y misericordia. Hoy vengo con el
corazón abierto a la esperanza a consagrarte a tu
Corazón Inmaculado a mis hijas (….)
Te consagro su alma con sus pensamientos, deseos,
lengua, sus manos, sus pies, su corazón.
En una palabra todo su ser. Ya que son tuyos oh
Madre de bondad… guárdalos, defiéndelos y,
utilízalos como instrumento y posesión tuyos.
Te los consagro Madre para que permanezcan
siempre unidos a Dios y bajo tu maternal protección;
y ahora que son todos tuyos, no permitas que se
desvíen del sendero del bien, quita las espinas del
camino de su vida y siembra en ellas las flores de la
alegría, la paz, la fe y el amor.
 Consagración al Espíritu Santo
Recibe ¡Oh Espíritu de amor! la consagración
perfecta y absoluta de todo mi ser que te hago en
este día, para que te dignes ser en cada uno de los
instantes de mi vida y en cada una de mis acciones:
mi Director, mi Luz, mi Guía, mi Fuerza y todo el amor
de mi corazón.
Me abandono sin reservas a tus santas operaciones
y quiero ser siempre dócil a tus inspiraciones divinas.
Oh Santo Espíritu dígnate formarme con
María y en María según Jesús nuestro modelo divino.
Gloria al Padre Creador.
Gloria al Hijo Redentor.
Gloria al Espíritu Santo Santificador.
Oración de la Señora de todos los Pueblos
Señor Jesucristo,
Hijo del Padre manda ahora tu Espíritu
sobre la tierra.
Haz que el Espíritu Santo habite en el
corazón de todos los pueblos,
para que sean preservados de la
corrupción, de las calamidades
y de la guerra.
Que la Señora de todos los Pueblos
que un día era María sea nuestra Abogada. Amén