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1. INTRODUCCIÓN
Sepa el lector que nos encontramos ante el oráculo más complejo y extenso que
existe después del Atepón Ifá y el Opele. En esta primera parte, que es a la que
únicamente nos referimos en este liro, nos limitaremos a exponer los nue!e
Odus ásicos del Oi Aatá, sus aspectos positi!os y ne"ati!os #Iré e Ii$ y los
dieciséis Odus %ejis de Ifá.
&or consi"uiente, esto nos da un resultado de '(( cominaciones posiles,
#producto
#producto de multiplicar
multiplicar ) x *+ *--, y a la !e *-- x ' '((/ donde ) son los
Odus del Oi Aatá, *+ son los Odus %ejis de Ifá y ' son las posiilidades de
que sea Iré o Ii.$
Sin .emar"o, un estudio más profundo, nos lle!ar0a a -+1( cominaciones
posiles, ya que si se tiran los cuatro se"mentos del Oi Aatá dos !eces, se
pueden otener los '2+ Odus ásicos de d e Ifá, #lo que
qu e multiplicado por ) y por ',
dar0a como resultado las -+1( cominaciones antes se3aladas.$
4esulta e!idente la "ran "ama de posiilidades y la !asta saidur0a que nos
arroja el ien llamado 5&r0ncipe de los Oráculos del Oi6, aunque es o!io que
para dominar tanta información y conocimientos, se requieren muc7os a3os de
intenso y dedicado estudio.
• 8uestra
8uestra experiencia
experiencia nos se3ala que el per0odo de tiempo promedio para
memoriar cada uno de los ) Odus del Oi Aatá y los *+ Odus %ejis de
Ifá, está sore las *+ semanas. Adicionalmente, para lle"ar a dominar
cada una de las *-- cominaciones u Odus deri!ados, usualmente se
requiere una semana por cada uno, o sea, que para alcanar un perfecto
dominio de esta primera parte del Oráculo del Oi Aatá, se requerir0an
unas *+1 semanas #9 a3os aproximadamente.$
En :frica, el término Oi Aatá se relaciona directamente con la nue de ;ola,
fruto t0pico de ese continente, considerado sa"rado desde la anti"<edad por
tri
trius
us y pue
puelo
los,
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cualess se ser!0
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cios,
os,
curati!os y má"icos. =a nue de ;ola #Oi Aatá$, tamién puede encontrarse en
otras latitudes donde imperan los climas cálidos, como por ejemplo, en al"unos
pa0ses del >arie y el continente americano.
Est
Este frut
ruto, el Oi
Oi Aat
atá, se com
compone
pone de cuatcuatro
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secciiones
ones muy ieien
proporcionadas y fácilmente separales, las cuales, una !e apartadas
apar tadas unas de
otras, presentan
presentan un aspecto
aspecto muy parecido.
parecido. Sin emar"o,
emar"o, si oser!amos
oser!amos ien el
interior de esos cuatro se"mentos, !eremos que dos de ellos son i"uales entre
s0, pero diferentes con respecto a los otros dos/ de a70 que los anti"uos yoruas
las 7ayan identificado como 5dos porciones masculinas y dos femeninas6.
El uso má"ico que los anti"uos puelos africanos dieron a la nue de ;ola, tu!o
su mayor si"nificación en la comunicación trascendental entre 7omres y dioses
o esp0ritus ancestrales. ?e esa práctica má"ico@esotérico@reli"iosa, sur"ió lo que
7oy conocemos "enéricamente como 5Oráculo del Oi Aatá6, una de las artes
adi!inatorias ancestrales más completas y efecti!as que el 7omre de 7oy 7a
reciido como 7erencia de sus antepasados africanos. Este oráculo,
caracter0sticos del orua Ancestral, se practica aún 7oy en d0a por los yoruas
de :frica Occidental, quienes en su mayor0a 7aitan en 8i"eria, aunque tamién
se detecta su presencia en otras onas de :frica oeste. Bamién es utiliado por
las con"re"aciones o comunidades yoruas asentadas en América,
fundamentalmente en los Estados Cnidos. A este anti"uo arte adi!inatorio se le
denomina el 5&r0ncipe de los Oráculos del Oi6 en la 4eli"ión orua Ancestral,
por su asomroso poder mántico, !isualiador y el alcance de sus !aticinios y
sentencias.
En América, producto de la imposiilidad de conse"uir nue de ;ola en al"unos
pa0ses, los practicantes de la 4eli"ión orua y en particular de este oráculo, se
7an !isto en la necesidad de sustituir este fruto y lo 7an 7ec7o utiliando cuatro
pedaos de cáscara seca de coco a las que se les incrusta en su parte interior
#la que tiene la superficie más clara o cónca!a$, un cauri #caracol$. ?e esta
manera, desde el punto de !ista má"ico@esotérico, se otienen se"mentos
sustitutorios que responden a exi"encias similares a las del sa"rado fruto
ori"inal.
?e las cuatro porciones que componen este oráculo, las dos que son
reconocidas como masculinas, a la !e son consideradas como positi!as y
amas identificadas ajo la denominación a;o meji/ las otras dos, o sea, las
femeninas, son consideradas como ne"ati!as y se les denomina ao meji. ?e
esta forma se complementa un equilirio natural en los componentes del propio
oráculo.
&ara los !ersados en al"una de las artes adi!inatorias de =a 4eli"ión orua,
queremos aclarar que los se"mentos masculinos y femeninos del Oi Aatá,
independientemente de descriir la letra al ni!el indi!idualiado se"ún el oráculo
y con toda la profundidad que cada Odu encierra en s0 mismo, tamién jue"an
un papel más o menos parecido al de los determinantes del Iré y el Oso"o, que
usualmente se utilian cuando se traaja con el %erindilo"un, el Opele y el
Atepón Ifá.
=a importancia de la definición de lo masculino y lo femenino dentro del contexto
oracular, !iene dada por el papel que amos sexos jue"an dentro de la filosof0a
tradicional de los yoruas, para los que existe un equilirio perfecto de fueras
en el uni!erso, el cual se dee a la similitud de potencialidades de los dos
extremos opuestos, reconocidos como positi!o y ne"ati!o #masculino y
femenino$. Además, la presencia de este alance es !álida para todos los
ni!eles existenciales, si"nificando al"o as0 como una ley natural de causa y
efecto, ori"en de todos los e!entos de la !ida de los 7omres.
Sin emar"o, puede que lo más importante de este oráculo radique en que a
tra!és de él se accede a la mara!illosa fuente de conocimientos contenida en
los *+ Odus %ejis de Ifá, lo cual le otor"a una si"nificati!a rele!ancia, ya que el
poemario de Ifá, en el 8ue!o %undo, 7asta a7ora 7a0a estado reser!ado
solamente a los Daalaos. Al conocer este oráculo, la persona #sea 7omre o
mujer$, entra en contacto con la saidur0a superior que encierran los Oju Odu,
en los cuales se reco"en todas las leyes y a!atares del uni!erso, as0 como todo
lo acontecido y por acontecer.
En esta primera fase del estudio, el Oi Aatá nos ofrece una serie compuesta
de '(( posiilidades diferentes de lectura de la tirada, resultante de las distintas
cominaciones que pueden asumir los cocos al caer, las cuales ser0anF *+ Odus
%ejis de Ifá multiplicados por los ) Odus propios del Oi Aatá, y a la !e
multiplicados por las ' posiilidades de Iré u Oso"o #que no es más que la
determinación de si la tirada !iene 7alando en sentido positi!o o ne"ati!o, lo
cual se lo"ra oser!ando la posición de los se"mentos sore el ;e;ereopón$.
Esto además si"nifica que de los '(( !aticinios posiles, *-- son positi!os y
*-- ne"ati!os. &or tanto, independientemente de la lectura y el le"ado propio
del Odu %eji de Ifá, los otros ) odus contienen juicios adicionales e indi!iduales
que enriquecen el re"istro. Bamién esto trae consi"o una nomenclatura propia
de los *-- Odus resultantes de tal unión, por ejemplo, si en una tirada del Oi
Aatá, nos sale A;ita como si"no propio y Odi %eji como si"no de Ifá, entonces
tenemos que el Odu que nos 7a salido es AGIBA@O?I, en este caso la palara
%eji se suprime. Beniendo siempre en cuenta que dic7o AGIBA@O?I puede !enir
por Iré o por Oso"o.
Hay personas que tiran el Oi Aatá sore un tapete lanco al que denominan
até, o sore un plato llano lanco/ sin emar"o, amos procedimientos son
impro!isaciones. =a aplicación idónea y más efecti!a de este oráculo se realia
sore el ;e;ereopón, el cual simolia el uni!erso con sus fueras, elementos y
puntos cardinales, incluyendo además en s0 la representación del esp0ritu, el
nacimiento o renacimiento, la !ida y la muerte respecti!amente, lo cual está en
plena correspondencia con la filosof0a yorua de la !ida material y espiritual, que
responde a un ciclo perfectamente reflejado en dic7o talero.
Se"ún esta filosof0a, el Esp0ritu desciende de 8orte a Sur #del >ielo a la Bierra,
pero léase >ielo como otra dimensión, no como el cielo aul f0sicamente
reconocido por los 7umanos$, de la Bierra #Sur$ !a 7acia el Este #donde se
desarrolla la !ida$, de aqu0 !a al Oeste #donde muere nuestro cuerpo material$, y
de a70 !a nue!amente 7acia el 8orte, para cerrar el ciclo que !uel!e a
comenar, es decir, el esp0ritu 5!iaja6 del >ielo a la Bierra, donde es encarnado,
desarrolla la ida, y %uere materialmente, !ol!iendo nue!amente al >ielo #lo
que quiere decir que se separa de su cuerpo f0sico, pero reinicia el ciclo
existencial una y otra !e 7asta cumplir el per0odo de desarrollo y
perfeccionamiento estipulado por las deidades u orisas$.
En otras palaras, de 8orte a Sur se produce el proceso pre!io a la
reencarnación/ de Sur a Este, el nacimiento como ente material/ de Este a
Oeste, el desarrollo de la !ida material/ y de Oeste a 8orte, la muerte f0sica y la
lieración del esp0ritu. Este ciclo existencial se considera aplicale a cualquier
ser !i!o de la Bierra, no sólo a las personas. Si "ráficamente lo traáramos
dentro del ;e;ereopón, quedar0a como una cru dia"onal, de lados i"uales,
cuyos extremos tocan cuatro partes equidistantes de dic7o talero. Al utiliar el
Oi Aatá, siempre deemos tener en cuenta el c0rculo ima"inario del uni!erso
representado en el talero. ?e esta forma, dependiendo de la posición de los
Oi al caer con relación a este espacio circular, desarrollarán las diferentes
lecturas.
Si detallamos dic7o espacio tenemos queF
El extremo superior equi!ale al 8orte, se relaciona con el polo positi!o, lo
masculino, el >ielo #Orun$ y el Aire, además con el Esp0ritu. En la adi!inación
nos indicará el 5más allá6, el sitio donde 7aitan los orisas y esp0ritus. Bamién
de cara al consultante si"nificará lejan0a. En la len"ua yorua es llamado Ori@
opón.
El extremo inferior equi!ale al Sur, se relaciona con el polo ne"ati!o, lo
femenino, y la Bierra #Ayé$, además con el 8acimiento. En la adi!inación nos
indicará el sitio donde 7aitamos, la sociedad en "eneral, nuestro planeta. En
len"ua yorua es llamado Ese@opón.
El extremo derec7o equi!ale al Este, se relaciona con el Jue"o, además con la
ida. En la adi!inación nos indicará el entorno más próximo al consultante, su
familia. En len"ua yorua es llamado Otun@opón.
El extremo iquierdo equi!ale al Oeste, se relaciona con el A"ua, además con la
%uerte. En la adi!inación nos indicará asuntos que no tienen que !er con la
familia directa del consultante, relacionados con personas de su entorno
exterior. En len"ua yorua es llamado Osi@opón.
El 8orte del ;e;ereopón se corresponde con el Odu de Ifá denominado Iori/ el
Sur con el Odu denominado Odi/ el Este con el Odu denominado Ore y el
Oeste con el Odu denominado Oye;u. Estos son los cuatro Odus principales
dentro de los *+ Odus mayores del sistema de adi!inación de Ifá.
&or otra parte, como 7emos dic7o antes, el Oi Aatá está compuesto por
cuatro cascarones de coco los cuales lle!an incrustados en su parte cónca!a los
cauris citados, pero dos de éstos ex7iirán la aertura natural del cauri #parte
femenina$, y otros dos la parte trasera de dic7o caracol #parte masculina$, la
cual estará aierta de manera artificial #mediante un corte trans!ersal efectuado
al caracol$, tal y como se 7ace con el %erindilo"un. ?e esta manera, el equilirio
entre amas fueras de la naturalea queda perfectamente estalecido, dos a
dos, al tener cada una de ellas i"uales posiilidades de aparecer en el talero.
>omo complemento a lo expuesto 7asta aqu0, tamién se deerán tener en
cuenta los si"uientes detalles, relacionados con los se"mentos del Oi AatáF
a. =lamamos 5punta6 o 5caea6 de un se"mento, a la parte puntia"uda o
más fina del extremo del cauri incrustado en el cascarón de coco.
b. Se identificará como 5espalda6 de un se"mento, al extremo más
redondeado del cauri incrustado en el cascarón de coco. O sea, a la parte
opuesta a la anterior.
c. Al lado cónca!o del cascarón de coco que tiene incrustado el cauri se le
reconoce como 5principio de lu6 o 5se"mento aierto6.
d. Al lado con!exo opuesto al anterior, el que ex7ie su lado ru"oso y
oscuro, se le reconoce como 5principio de oscuridad6, 5se"mento aierto6.
2. PASOS PREVIOS A LA TIRADA DEL OBI ABATÁ
Hasta aqu0 7emos !isto cómo el Oi Aatá expresa sus juicios y mensajes
particulares de acuerdo con los nue!e Odus propios que marcan los cocos al
caer sore el talero, y cómo se complementa la lectura de estos si"nos, de
acuerdo con la posición relati!a de los mismos dentro del ;e;ereopón.
En lo adelante, entraremos en la materia propia de Ifá correspondiente a esta
primera fase del aprendiaje, donde identificaremos los Odu %eji #sus dieciséis
si"nos mejis$.
Supon"amos que tenemos una l0nea recta ima"inaria en nuestro ;e;ereopón
que !a de 8orte a Sur del mismo. >ada !e que los cuatro se"mentos del Oi
Aatá son lanados sore el talero, éstos asumen ló"icamente múltiples
posiciones. >entraremos nuestra atención, oser!ando cuidadosamente #sin
tocarlos$, el orden que 7an adoptado !erticalmente, a lo lar"o de dic7a l0nea
ima"inaria anteriormente mencionada. ?e acuerdo con esta disposición
tenemos que pueden formarse *+ cominaciones u Odus diferentes, para cuya
lectura sólo tendremos en cuenta los principios de lu y oscuridad de los
se"mentos, descartando sus caracter0sticas masculinas o femeninas.
A continuación, para representar un se"mento aierto emplearemos el s0molo
5 I 5 y para uno cerrado el 5 II 5.
=a interpretación de Ifá se realiará de la si"uiente maneraF
Cna !e oser!ados todos los detalles de los se"mentos #sus posiciones
relati!as, sexo y Odu propio del Oi Aatá$, procederemos a colocar los mismos
en l0nea recta, de 8orte a Sur, a fin de identificar el Odu de Ifá que corresponde.
Este ordenamiento !ertical nos ofrecerá una de las *+ cominaciones u Odus
%ejis que !eremos a continuación #partiendo de la ase de que los se"mentos
serán tirados una sola !e$. #En este sentido deemos aclarar que un Odu es
%eji cuando se repite dos !eces, cosa que sucede en una sola tirada del Opele,
pero no en una tirada del Oi Aatá, por tanto nos referiremos a ellos como
Odus %ejis, aunque en este caso aparecan los si"nos sencillos y no doles.$
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