VIOLENCIA INTRAFAMILIAR

Etimología:
La raíz etimológica de violencia remite al concepto de “fuerza”. La violencia
implica el uso de la fuerza para producir daño, puede hablarse de violencia
política, económica, social o meteorológica en un sentido amplio. En el caso
de los seres humanos, frente a un estímulo, personas diferentes reaccionan
de modos disímiles, y aun la misma persona en circunstancias distintas
puede comportarse de maneras opuestas.
Según la real academia española, violencia es la aplicación de medios
fuera de lo natural a cosas o personas para vencer su “resistencia”.
Implícitamente los conceptos de poder y jerarquía se incluyen en los
distintos enfoques y definiciones de violencia, la que es considerada como
una forma de ejercer poder sobre alguien situado en una posición de
inferioridad o subordinación en la escala jerárquica.

Definición:
La violencia familiar o doméstica se define como la agresión física,
psicológica o sexual cometida por el conyugue o conviviente, los
ascendientes, descendientes, hermanos, parientes civiles o afines en línea
directa y colateral, los tutores, curadores o encargados de la custodia.
 La legislación peruana, a través del texto único ordenado de la ley
26260, determina que la violencia familiar es “cualquier acción u
omisión que cause daño físico o psicológico, maltrato sin lesión,
inclusive la amenaza o coacción graves y/o reiteradas, así como la
violencia sexual”

Clases de violencia:
Violencia física (abandono físico, malos tratos físicos)
Actos que atentan o agreden el cuerpo de la persona tales como
empujones, bofetadas, golpes de puño, golpes de pie, etc.
Violencia psicológica (emocional) (malos tratos psicológicos)
 Actitudes que tiene por objeto causar temor, intimidar y controlar las
conductas, sentimientos y pensamientos de las personas a quien se está
agrediendo como las descalificaciones, insultos, control, etc.
Violencia sexual (abuso sexual)
Imposición de actos de carácter sexual contra la voluntad de la otra
persona. Como por ejemplo, exposición a actividades sexuales no
deseadas o la manipulación a través de la sexualidad.
Violencia económica (abandono/negligencia) (malos tratos de tipo material
o económico)
No cubrir las necesidades básicas de la persona y ejercer control a través
de recursos económicos.

Causas de la violencia familiar:

La violencia familiar se da básicamente por tres factores:
 Falta de control de impulsos.
 Carencia afectiva.
 Falta de capacidad para resolver problemas adecuadamente.
Además en algunas personas podrían aparecer variables de abuso de alcohol y
drogas.
El agresor, frecuentemente es una persona con baja autoestima, lo que le
ocasiona frustración y consecuentemente actitudes de violencia. Los agresores
suelen venir de hogares violentos, padecer trastornos psicológicos y muchos
de ellos utilizan el alcohol y otras drogas lo que produce que se potencie su
agresividad. Tienen un perfil determinado de dependencia afectiva,
inseguridad, emocionalmente inestables, impacientes e impulsivos.

Consecuencias de la violencia familiar

La violencia Intrafamiliar puede heredarse a los hijos, a través de la repetición
de patrones, esto propicia que en un futuro sus relaciones familiares sean
violentas; también puede provocar traumas en las víctimas, trastornos físicos y
mentales, mal desempeño de las labores escolares, en el trabajo y en las
relaciones sociales en las que la víctima se desenvuelve, así como:

 Depresión o estrés.
 Divorcio o separación.
  Golpes que en ocasiones dejan incapacitada a la víctima.

Ciclo de la violencia familiar:

Según la psicóloga estadounidense Leonor Walker, la violencia familiar se ha
identificado como un ciclo que se repite; las víctimas de la violencia doméstica
o familiar no son agredidas todo el tiempo ni de la misma manera, sino que
existen fases para la agresión, que tiene variada duración y diferentes
manifestaciones.
Fase 1: aumento de la tensión.
Puede durar varios días, semanas, meses o años. En esta fase ocurren
incidentes de agresión menores: gritos, peleas pequeñas. El agredido trata
generalmente de calmar al agresor, es condescendiente, se anticipa a la
explosión de la violencia.
Fase 2: incidente agudo de agresión.
Puede durar de 2 a 24 horas. Es aquí donde se producen descargas
incontrolables de las tensiones que se han venido acumulando en la fase
anterior.
Fase 3: arrepentimiento (luna de miel).
El agresor se comporta cariñoso y arrepentido, esta es la fase de mayor
duración, aquí se produce la reconciliación de la pareja, sin embargo, este trato
cordial y cariñoso, dura por lo general poco tiempo.

Casos:
Talía de 23 años, es una joven universitaria que vive con su pareja en la ciudad
de Ayacucho, él es un joven que pertenece a la policía. Talía ha sido
maltratada y golpeada en varias ocasiones por celos de su pareja, puesto que
aquel hombre detesta verla con sus amigos o que salga a alguna fiesta, sin
embargo ella por temor no se atreve a denunciarlo, alguna vez ella lo dejó y se
fue de casa, pero al pasar de 2 o 3 días, tras pedidas de perdón y llamadas
insistentes para verla, la joven accedió a la reconciliación, no obstante los
maltratos continuaron dándose como un ciclo que nunca acaba, puesto que se
agreden, se separan y vuelven a estar juntos.
Pedro de 16 años, es un adolescente que se prepara para postular e ingresar a
la universidad, no obstante sus ganas de estudiar y ser mejor cada día se ve
afectada inevitablemente por las constantes discusiones entre sus padres, que
en varias ocasiones se dan frente a él. El manifiesta rencor hacia su padre por
los frecuentes maltratos e insultos que reciben él y su madre. En ocasiones ha
pensado irse de casa, pero tiene miedo de tener que volver, puesto que no se
siente preparado para vivir solo. Pedro manifiesta que todo comenzó cuando su
padre empezó a consumir alcohol con mayor frecuencia que antes, y es eso
por lo que su madre le reclama al padre de Pedro.
Tania de 29 años, es una joven técnica en enfermería que convive con su
pareja quien, según manifiesta la joven, le ha sido infiel en varias ocasiones,
ella le ha reclamado sus engaños y mentiras, sin embargo él aduce que seguro
ella hizo y hace lo mismo, por lo tanto la joven no tendría por qué reclamarle
nada. Cada que ella quiere separarse él cambia, le ruega y pide perdón
diciéndole que la ama y haciéndole la promesa de no volver a engañarle, pero
todo sigue de mal en peor. Frente a ello la joven manifiesta que está decidida a
separarse, pues afirma ya no sentir nada por él y no esperará a que la golpee
en un arranque de celos.