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DIOCESANA
2019.
Presentación
Tema
Objetivo
Lema
2.- Oración
3.- #Recalculando
4.- Logotipo
I. Jueves Santo
II. Viernes Santo
III. Sábado Santo
7.- Anexos
Presentación
Con gran esperanza damos inicio a vivir la expresión de Pascua Juvenil 2019, en
cada una de las diócesis que conforman nuestra nación mexicana, considerando
que una de las acciones a priorizar, es llevar un análisis de la realidad dentro de
su propia diócesis, para saber cómo y por dónde enfocar la temática propuesta.
Un segundo elemento es revisar los desafíos urgentes para que los temas puedan
responder y dar orientaciones ante las situaciones juveniles de nuestros
ambientes, les propongo dar pasos firmes, a partir de procesos significativos, soy
consciente que los desafíos pueden ser demasiados, y que solos no podremos
afrontar las situaciones, necesitamos confiar y tomarnos de la mano de Dios,
escuchando su Palabra, dejando que sea compañero de nuestro camino, así
estaremos dispuestos a escucharnos a nosotros mismos, para ir sanando
situaciones que vamos cargando a lo largo de nuestra vida, sanando heridas que
nos han ocasionado o incluso pidiendo a Dios perdón por el daño que hemos
hecho a los demás, sanando nuestra dimensión humana, sanaremos nuestra
relación con Dios y con los demás.
Atentamente:
TEMA
Continuando con los procesos que se han llevado en los años anteriores, se ha
visto oportuno este tema: ―Nos acompañamos en el discernimiento para el
seguimiento de Cristo‖. Uno de los retos es motivar y ayudar a los adolescentes y
jóvenes a hacer una opción de vida, es decir, hacer una opción vocacional. Como
una forma de compromiso concreto con Cristo Vivo y por lo tanto con el Reino y
ver la posibilidad de hacer una opción real hacia el matrimonio, hacia la vida
consagrada, al sacerdocio, a la vida de laico comprometido en la misión.
OBJETIVO
Dicho lo anterior con referencia al tema del año, en la pasada Asamblea Nacional
de Pascua Juvenil 2018 se ha tratado de sintetizar esta idea, en el siguiente
objetivo: Generar en adolescentes y jóvenes ambientes de escucha desde su
realidad, a través del acompañamiento que, como en el camino de Emaús propicie
el encuentro con el Resucitado, para discernir y definir el propio proyecto de vida.
¿Qué realidad hoy los adolescentes y jóvenes están viviendo? La realidad de cada
joven, las experiencias de vida son muy diversas. Es provocar que vayan
descubriendo las situaciones muy personales que han o van experimentando, es
aceptar el dolor, las heridas, para ir sanando, como los discípulos de Emaús que
van de regreso a sus labores, regresan frustrados, tristes, y cómo el encuentro con
el Resucitado les provoca la alegría, un corazón que ardía, la Palabra de Dios es
un ambiente propicio para escuchar a Dios, dejarse acompañar por Él, confiar en
un acompañante Espiritual, que pueda ayudar a discernir y madurar lo que Dios
quiere para la vida del adolescente y joven. El miedo al silencio ha sido uno de los
factores, en que el joven se ha llenado de ruidos, que no le permiten contemplar,
admirar la belleza de la creación, provocando en ocasiones la sordera para captar
la voz de Dios, la voz de sus hermanos.
Con este lema, deseamos animar a los adolescentes y jóvenes de nuestra patria,
a experimentar el llamado de parte de Dios, que habla a sus corazones con fuerza
e insistencia, que escuchen la voz de Dios, se dejen acompañar, para que
obedeciendo sus mandamientos, sean los adolescentes y jóvenes el rostro de
Dios, y se decidan a salir de sí mismos, a salir de sus seguridades, de sus áreas
de confort, de sus estructuras rígidas que sofocan la fe, a salir de sus casas, e ir al
lado de los hermanos que sufren exclusión, debido a la injusticia y violencia
generalizada en nuestro México. Que sepan escuchar con los oídos bien abiertos
y un corazón sensible al dolor y sufrimiento que van experimentando los
adolescentes y jóvenes. De tal manera, que sea la juventud quien, a través de su
vivencia de encuentro con Cristo Vivo, transformen su riqueza en signos de
esperanza, especialmente para aquellos adolescentes y jóvenes alejados,
desorientados y atrapados en alguna adicción y que han perdido el sentido de su
propia vida. ¡Que el joven Evangelice al joven!
2. ORACIÓN
Señor Jesús, tu Iglesia dirige su mirada a todos los adolescentes y jóvenes del
mundo. Te pedimos para que con audacia se hagan cargo de la propia vida, vean
las cosas más hermosas y profundas y conserven siempre el corazón libre.
Acompañados por guías sapientes y generosos, ayúdalos a responder a la
llamada que Tú diriges a cada uno de ellos, para realizar el propio proyecto de
vida y alcanzar la felicidad. Mantén abiertos sus corazones a los grandes sueños y
haz que estén atentos al bien de los hermanos. Como el Discípulo amado, estén
también ellos al pie de la Cruz para acoger a tu Madre, recibiéndola de Ti como un
don. Sean testigos de la Resurrección y sepan reconocerte vivo junto a ellos
anunciando con alegría que tú eres el Señor. Amén
3. #RECALCULANDO
Dios tiene un propósito para cada uno de nosotros, Él conoce dónde estamos y a
dónde vamos, que hacemos y de qué manera nos movemos, el Salmo 32, 8 nos
dice: Yo te instruiré, te enseñaré el camino que debes seguir; con los ojos
puestos en ti, seré tu consejero.
Desde Génesis hasta Apocalipsis se encuentra incrustada la verdad tanto explícita
como implícitamente de que ¡somos ungidos, llamados, escogidos y destinados
para seguir avanzando!
Hay una expresión antigua que dice: "todos los caminos llevan a Roma". Cualquier
camino del antiguo imperio te llevaba a la capital. ¿Podemos decir lo mismo en la
actualidad? ¿Que todos los caminos te llevan por igual a Dios? ¿Son todos
parecidos, igual de buenos? ¿Cómo saber lo que de verdad me conviene?
Sigamos buscando la mejor ruta para llegar a nuestro destino, que Jesús sea
nuestro mejor compañero de camino, a ejemplo de María y los discípulos
dejándonos guiar por el Espíritu Santo.
4. LOGOTIPO
5.- CAMINO RECORRIDO DE PASCUA JUVENIL DIÓCESIS DE CD.
ALTAMIRANO.
¡¡CRISTO VIVE!!
La primera vez que se utilizó el término pre-pascua fue en 1999 y la coordino los
jóvenes de Tejupilco.
PASCUA JUVENIL:
“Comprométete y mejora
tu nación”
Conoce y defiende tu
persona
Decídete y acepta tu
misión
“Reafirma tu fe y
evangeliza”
¡¡CRISTO VIVE!! 2012 HUETAMO, MICH.
“Construye y testifica tu
paz”
“Llamados a la misión
generamos esperanza”
“Escúchalo y acompaña a
tu hermano”
¿Qué nos pide Dios como Movimiento?
Diagnóstico pastoral
FORTALEZAS OPORTUNIDADES
Poco interés de los jóvenes para vivir el Moda cultural arrastra jóvenes.
encuentro. No saber responder u orientar a las
Miedo al compromiso y falta de nuevas tendencias e ideologías
responsabilidad de Jóvenes para juveniles (tribus urbanas).
integrarse a los equipos pascua. Pérdida de valores y tradiciones.
Falta de testimonio de parte de los Postmodernidad. (cultura light)
servidores de convencer con el Permisividad.
ejemplo. Individualismo.
Falta motivación por parte de algunos Desintegración familiar.
asesores (decanales y parroquiales). Drogas, vicios.
Falta de interés en algunos decanatos Desconocimiento de la fe.
por eventos. Arrastre de lo que ofrece los Medios de
Individualismo. Comunicación Social.
Se tiende a perder la esencia del Tender hacia el hacer (forma), más que
Movimiento. al ser (contenido) dentro del
Falta de interés de algunos jóvenes por Movimiento.
seguir procesos. Indiferencia religiosa
CATEQUESIS
DE LOS
DIAS
SANTOS
JUEVES
SANTO
JUEVES SANTO DE LA CENA DEL
SEÑOR
Jesús, en la noche en que iba a ser entregado, durante su última cena, nos dio
dos signos de amor: el primero, la institución de la Eucaristía, y el segundo, el
servicio como expresión del amor, lavar los pies a sus discípulos. En ambos casos
esos gestos significan un amor que se traduce en servicio, entrega y donación
total hacia nosotros. Jesús, antes de sentarse a partir y compartir su cuerpo y su
sangre, se arrodilla a servir. Hoy se nos invita a rehacer esos dos signos: ―Hagan
esto en memoria mía‖, ―Si yo les he lavado los pies, también ustedes deben
lavarse los pies unos a otros‖. La Eucaristía es el Sacramento, el memorial de lo
que celebramos en el Triduo Pascual: la Muerte y Resurrección del Señor. En toda
Eucaristía participamos y actualizamos el sacrificio de Cristo, que se entregó por
nosotros. De igual forma hacemos memoria de la donación de Jesús por amor,
celebramos la reconciliación de todos los hombres con Dios, festejamos nuestra
salvación y liberación, expresamos la comunión de todos los creyentes en Cristo,
al participar todos de un mismo alimento y anunciamos su retorno como plenitud
de su Reino. Lo que celebramos en la Eucaristía debe corresponder con nuestra
vida ordinaria: ―ámense unos a otros como Yo los he amado‖, un amor traducido
en obras, con una actitud de caridad y de entrega servicial a los más necesitados.
En esta misma noche Jesús instituyó el Sacramento del sacerdocio, eligiendo a un
grupo para manifestar al mundo la Buena Noticia, para partir el pan y darnos el
perdón.
VER.
Hoy en día una realidad muy palpable que vivimos como juventud es que los
jóvenes vivimos al día, ya no nos preocupamos por el mañana, no nos
preocupamos que ira a pasar con nuestra vida en los años próximos. Nos
preocupamos más por nuestra apariencia, por estar a la moda, vivimos la vida al
límite sin medir las consecuencias, cayendo en los excesos en tentaciones que no
llevan nuestra vida a ningún lado y solo nos destruyen.
En este momento te quiero mostrar algo muy importante para ti, algo de lo que
deberías estar pensando realmente y no en esas cosas superficiales que el mundo
nos ofrece, esas cosas que son una trampa para la juventud y nosotros caemos
en ellas día con día. ¿Decisión? ¿Te suena? Puede que sí, puede que no, pero de
qué manera las estamos haciendo, tomándole más importancia al decidir ¿Qué
ropa comprarme? ¿Qué zapatos ponerte para cada ocasión? Entre otras cosas
más, ¿Esas son las decisiones que actualmente estamos tomando? ¿De verdad?
https://www.youtube.com/watch?v=aWi7Sczz03A
Todo el grupo hará un círculo de tal manera que todos los participantes puedan
ver el rostro de cada una de las personas que se encuentran ahí, a continuación,
se entablara una mesa redonda en la cual cada uno tendrá que responder las
siguientes preguntas:
Proyector
Computadora
Bocinas
JUZGAR
Dentro de la historia de la humanidad han pasado ciertos casos que terminan en
desgracias por llevar a cabo una toma de decisión a la ligera, y si nos vamos al
cristianismo también lo ha habido, en este momento quisiera ponerte como
ejemplo, a alguien con el que a lo mejor te sentirás identificado, tal vez no del
todo, pero puede que en ocasiones lo hallas echo.
Se realizara un Socio drama para el mejor entendimiento de esta cita. Mateo 27,
3-10.
Entonces Judas, el que lo había entregado, viendo que era condenado, devolvió
arrepentido las treinta piezas de plata a los principales sacerdotes y a los
ancianos, diciendo: Yo he pecado entregando sangre inocente. Pero ellos dijeron:
-¿Qué nos importa a nosotros? ¡Allá tú! Entonces, arrojando las piezas de plata en
el templo, salió y fue y se ahorco. Los principales sacerdotes, tomando las piezas
de plata, dijeron: -No está permitido echarlas en el tesoro de las ofrendas, porque
es precio de sangre. Y, después de consultar, compraron con ellas el campo del
alfarero, para sepultura de los extranjeros. Por lo cual aquel campo se llama hasta
el día de hoy: ―Campo de sangre‖.
Personajes:
Judas
2 sumos sacerdotes
Materiales:
Materiales:
• Proyector
• Computadora
• Bocinas
Explicación de la dinámica:
Se le otorgara al joven dos hojas las cuales incluirán una imagen en cada una, la
primera hoja tendrá una imagen de Judas, la segunda por su parte tendrá una
imagen de un camino.
Los participantes tendrán que escribir al reverso de cada una de las hojas, en el
caso de la de Judas tendrán que escribir lo siguiente:
Escribe cada una de las cosas de las cuales te arrepientes por no haber
tomado las decisiones correctas.
Escribe todo aquello que quieras dejar en tu vida.
En la hoja del camino tendrá que escribir lo siguiente:
Escribe tus decisiones a corto plazo.
Escribe a que te comprometes contigo mismo, para cambiarle el rumbo a tu
vida.
Al finalizar la dinámica se hace un círculo con todos los participantes y cada uno
tendrá que pasar al centro a romper la hoja que tiene la imagen de Judas, la del
camino se la quedaran ellos como signo de aquel compromiso que ya hicieron.
Materiales:
Cada uno de los participantes tendrá que contestar las siguientes preguntas:
Materiales:
Música (a su consideración).
CATEQUESIS 2: ESCUCHO CON AMOR A MI AMIGO.
Objetivo.
Que el joven escuche experimente con amor la escucha a través de los gestos
que realizo Jesús con sus amigos.
Introducción.
La amistad es un valor entre los humanos uno de los dones más altos de Dios, lo
vemos con Abraham, Moisés entre otros profetas , al enviar a Cristo se mostró
Amigo de los Hombres, el ruido y la velocidad se están comiendo el dialogo entre
los hombres cada vez tenemos más conocidos menos amigos.
VER
Material:
Joven protagonista
Joven que interpreta a Jesús
Joven que sostenga la imagen de planeta
Joven que Sostenga el espejo
Joven que interprete una amistad toxica
Joven que interprete una amistad leal
Los jóvenes estarán formados en una fila, se llevara a cabo el sketch con alguna
música de fondo de recomendación instrumental.
En seguida pasara el joven que sostenga el espejo, aquí tomara una actitud de
desagrado a su misma persona agrediendo ya sea su físico o con una actividad
negativa a sus cualidades (con cuidando su salud, desconfiando de sus dones,
limitándose a realizar actividades).
Después toca la interpretación de una amistad toxica, donde se muestre
deslealtad, hipocresía, etc. El joven protagonista habla de la misma manera.
A continuación, le toca al joven protagonista pasar por el joven que interpreta una
amistad leal, el joven protagonista se comporta indiferente, donde se le olvida
agradecer y no valora la buena amistad.
Para finalizar pasa con Jesús, el amigo fiel, el amigo incondicional, pero el joven
protagonista pasa de largo, sin prestar atención
¿Escucho lo que me pide planeta? ¿Me doy cuenta en la realidad que estamos
viviendo? ¿Tomamos conciencia que el medio ambiente es el mare bella que nos
acoge en sus brazos? ¿Soy amigo del planeta? ¿Me preocupo por mí alrededor?
Amigo de mi persona.
¿Me escucho a mí mismo? ¿Me tomo el tiempo para escuchar que me está
pidiendo mi cuerpo? ¿Me doy el tiempo para escuchar las necesidades de mí ser?
¿Conozco cada parte de mí y la acepto? ¿Existe una voz en mi interior que me
pide que me ame?
¿Me cuestiono por que las personas que me hacen o me han hecho daño, se
comportan de esa manera? ¿Me pregunto si pasan por situaciones difíciles?
¿Juzgo o tengo actitud de entendimiento? ¿Los escucho a través de sus actos?
¿Cuestiono mis actitudes con las personas que no me aman?
¿Escucho a mis amigos? ¿Tengo la voluntad tiempo para hacerlo? ¿Esa amistad
gira sobre mí mismo? ¿Es una amistad para mi interés personal o nos hace crecer
personalmente? ¿Agradezco y rezo por esa amistad?
Amistad de Jesús.
Material:
Yo los llamo amigos por que les he dado a conocer todo lo que oí de mi padre. Jn
15,15.
Una vez leído el versículo, se les pediría que escriban en esa misma hoja al
reverso o en la parte delantera, un mensaje, una respuesta a Jesús después de
llamarte amigo. (Se pide guardar la respuesta por s la llegan a ocupar más
adelante)
¿Que siento al escuchar y saber que tengo un amigo? ¿Qué quiero decirle? Una
palabra basta para Jesús.
¿Soy amigo del medio ambiente? ¿Soy amigo de mi mismo? ¿Soy amigo de las
personas que no me quieren? ¿Soy un verdadero amigo para aquellos que me
aman? ¿Soy amigo de Jesús?
Cuesta guardar silencio, vivimos a prisa y detenernos es un gran reto, pero ¿Por
qué no hacerlo?
¿Tuvo Jesús miedo ante la muerte en el huerto de los olivos (Getsemaní) si, si lo
tuvo como todos nosotros lo tenemos al escucharnos a nosotros mismos, al
escuchar a Jesús, al escuchar a nuestro alrededor es algo que nos cuestiona e
inquieta y nos orilla a encontrarnos descubrir a dónde vamos.
Explicación de la lectura.
Jesús como todos nosotros tuvo medo, se encuentra con incertidumbre, pide que
lo acompañe y que velen, en cambio, sus amigos (discípulos) se quedan
dormidos.
El padre lo escucha su necesidad, y Jesús entra en ese dialogo con el señor que
permite una disponibilidad de amistad no solo con él, sino con su obra en la tierra.
Jesús, se deja escuchar y escucha, se deja amar y ama. Jesús cuando dice
―¡levántense! ¡Vamos!‖ se termina el miedo se acaba la incertidumbre, en el
dialogo con el padre, encuentra las fuerzas necesarias para darle al mundo a su
vida. Se siente escuchado, se siente amado y que dejo que lo escucharan,
permitió una disponibilidad entre nosotros y Dios
Actuar.
Se ha escuchado a cada uno de quien puedo ser amigo pero falta escuchar con
amor.
Los jóvenes llenaran el formato llamado ―práctica del amor‖. El joven anotara que
acciones sencillas, concretas, significativas y con amor desea hacer en ese
momento para cada uno de sus amigos desde la experiencia de escuchar a Jesús,
amar como el amo, para las acciones existen distintas sugerencias, hacer y lograr
uno que este en sus posibilidades y que transmita el mensaje en otra persona.
En cada práctica del amor y realizando la acción, evangelicemos con los medios
tomarse una sele haciendo la acción y subirla a las redes sociales con el
#escuchoconamoramiamigo.
Revisar.
¿Respeto y amo a cada uno de mis amigos?, volveremos a una pregunta de inicio,
después de ver y descubrir a nuestros amigos que nos rodean, ¿amigo? ¿De qué
o quién?
Celebrar.
Material.
Quiero amar a los que me quieren y a los que no, así como tú,
misericordia absoluta, que como tu pueda amar sin límites.
Amen
INTRODUCCION:
VER
Dinámica:
1.- Oído: se pondrán en una mesa, distintos utensilios y/o instrumentos musicales,
que ayuden a experimentar un sonido ruido, la persona tendrá que identificar de
que es lo que se trata, en caso de no hacerlo en 3 oportunidades se pasara al
siguiente lugar.
3.- Olfato: Se pondrán aromas fuertes, tenues, chuscos o sucios para que se
estimule este sentido motivando a identificar cada olor que se presente.
JUZGAR
ACTUAR
Una vez reflexionado y entendido la importancia de la escucha se invita a
los adolescentes a quitarse un zapato el facilitador de la actividad entrega un
zapato a cada participante cuidando no sea el par del suyo. Después se
encontrarán con el dueño de su zapato, con el cual intercambiarán las preguntas
que a continuación se señalan, al terminar esos cuestionamientos, se entregará el
zapato.
1. ¿Cómo te llamas?
2. ¿Estudias o trabajas?
3. ¿Cómo está conformada tu familia?
4. ¿Cuántos años tienes?
5. ¿Qué te ha parecido esta experiencia?
6. ¿A qué vienes?
7. ¿Llegaste solo o vienes con tus amigos?
REVISAR
CELEBRAR
Material
SANTO
VIERNES SANTO DE LA PASION DEL SEÑOR
La liturgia de este día es austera y sobria. La celebración
del primer día del Triduo pascual se centra en la
inmolación del Cordero que quita el pecado y en la señal
de su muerte gloriosa: la cruz. El centro de la liturgia del
día lo ocupa la celebración de la pasión. La acción litúrgica
debe comenzar después del mediodía, hacia las tres de la
tarde, a no ser que por razones pastorales se prefiera una
hora «más tardía». Los ornamentos sagrados que se usan
son de color rojo, el color propio de los mártires en señal
de victoria. Por eso el Viernes Santo no es un día de luto,
sino de amorosa contemplación de la muerte del Señor, fuente de nuestra
salvación. La estructura de la celebración es muy simple y muy expresiva: la
liturgia de la Palabra, la adoración de la cruz y la comunión. No hay más rito inicial
que la postración, rostro a tierra, del sacerdote y los ministros, y una oración que
pide al Señor que se acuerde de su misericordia, «pues Jesucristo instituyó el
misterio pascual por medio de su sangre en favor nuestro». Una segunda plegaria,
que se puede usar en lugar de la anterior, se inspira en 1 Cor 15,45-49, y pide
también que todos podamos alcanzar el fruto de la pasión de Cristo. La liturgia de
la Palabra se abre con el cuarto canto del Siervo de Yahveh (Is 52,13-53,12),
lectura profética aplicada a Jesús, que «entrega su vida como expiación», y que
contiene una impresionante descripción de la pasión del Señor. El salmo (Sal 30)
tiene como respuesta las palabras de Cristo en la cruz: «Padre, a tus manos
encomiendo mi espíritu» (Lc 23,46), que proceden del mismo salmo. En la
segunda lectura, el Siervo aparece como el Sumo Sacerdote que, ofreciéndose a
sí mismo como víctima, «se convirtió en causa de salvación eterna para los que le
obedecen» (Heb4,14-16; 5,7-9). Finalmente, el evangelio es el relato tradicional de
la pasión según San Juan. La liturgia ha reservado este pasaje conociendo la
intencionalidad y el punto de vista del cuarto evangelio. Para Juan, la cruz es la
suprema revelación del amor de Dios y de la completa libertad de Jesús (Jn 3,16;
13,1; 17,1).
Este día está centrado en la Cruz gloriosa del Señor. La comunidad cristiana
recuerda y proclama la Pasión del Señor y adora su Cruz como el primer acto del
Misterio Pascual. Hoy es el primer paso: la ―Pascua de la crucifixión‖. Pascua,
―paso‖, transito de Jesús a través de la muerte a la Nueva Vida. Es el paso por la
muerte. La memoria de la muerte está llena de esperanza y victoria.
VER
JUZGAR
Jn 12, 20-33
Por eso Jesús nos habla claramente que esta vida es pasajera. Lo que importa es
la otra vida. No debemos aferrarnos a ésta, sino ir viviendo para la próxima vida.
Jesús está anunciando que Él pasará por una muerte muy aterradora. Pero que
será a partir de su pasión, que luego el Padre los resucitará como al primero de
los que en Adán hemos muerto, para con Él resucitar también. Nuevamente se
escucha una voz del cielo que dice: ―lo he glorificado y lo glorificaré‖. Y todos se
preguntan que era, pero Jesús aclara que su glorificación será cuando Él sea
levantado en la cruz, y atraiga a toda la humanidad hacia Él. Juan nos insiste que
este momento la voz que se escucha ―vino del cielo‖. Son varias veces que el
Evangelista recuerda que ―la voz viene del cielo‖ (En el Bautismo, en la
Transfiguración, ahora en este pasaje…) El cielo estaba cerrado desde la
expulsión de los primeros Padres (Adán y Eva). Y se han vuelto a abrir con Jesús
para escuchar la voz del Padre, pero siempre es en referencia a su Hijo Jesús, el
Cristo, confirmando que Él es quien restaura la naturaleza caída y en Él
obtenemos la salvación. Es un texto que va anticipando la Pasión redentora de
Nuestro Señor. Por ese motivo es la centralidad de atraer a todos desde su Cruz.
Reconstruimos el texto:
Se invita a responder a las preguntas, incluso hacer otra relectura del texto, y se
genera un dialogo para reconstruir el texto.
ACTUAR
Se invita a cada uno a caminar y a detenerse ante cada cosa que hay en el
camino. (Colocar durante el camino cosas materiales)
Mientras tanto el temista u otra persona dicen: Mientras caminamos nos vamos
deteniendo y observando estas cosas que hay a nuestro paso y preguntemos: 1.-
¿Qué significa esto para mí? 2.- ¿Puedo asociarlo a algún triunfo o fracaso?
Cada uno vuelve a su lugar El temista dirá: Ahora cada uno pensará en sus
fracasos y sus triunfos pasados o actuales.
Al finalizar el temista dirá: también hoy nosotros hemos venido a buscar a Jesús,
lo hemos hecho durante nuestra vida y Jesús quiere ser claro con nosotros. Ha
llegado su hora, una hora que para los discípulos parece fracaso, tragedia, fin;
pero Jesús les dice que no es así; es la hora de glorificar al Padre, triunfando en la
cruz. Muchas veces nos pasa lo mismo; muchos se nos acercan pidiendo ver a
Jesús y si bien lo presentamos, no lo presentamos glorificado. Muchos hoy
necesitamos que, con Jesús, podamos morir para resucitar, que podamos seguirle
a Él, para honrar al Padre. Hoy en nuestro encuentro, pensemos en esto.
La idea de Jesús es clara. Con la vida sucede lo mismo que con el grano de trigo,
que tiene que morir para liberar toda su energía y producir un día fruto. Si «no
muere», se queda solo encima del terreno. Por el contrario, si «muere» vuelve a
levantarse trayendo consigo nuevos granos y nueva vida.
Jesús deja entrever que su muerte, lejos de ser un fracaso, será precisamente lo
que dará fecundidad a su vida. Pero, al mismo tiempo, invita a sus seguidores a
vivir según esta misma ley paradójica: para dar vida es necesario «morir». No se
puede engendrar vida sin dar la propia. No es posible ayudar a vivir si uno no está
dispuesto a «desvivirse» por los demás. Nadie contribuye a un mundo más justo y
humano viviendo apegado a su propio bienestar. Nadie trabaja seriamente por el
Reino de Dios y su justicia, si no está dispuesto a asumir los riesgos y rechazos, la
conflictividad y persecución que sufrió Jesús. Nos pasamos la vida tratando de
evitar sufrimientos y problemas. La cultura del bienestar nos empuja a
organizarnos de la manera más cómoda y placentera posible. Es el ideal supremo.
Sin embargo, hay sufrimientos y renuncias que es necesario asumir si queremos
que nuestra vida sea fecunda y creativa. Nos estamos acostumbrando a vivirlo
todo cerrando los ojos al sufrimiento de los demás. Parece lo más inteligente y
sensato para ser felices. Es un error seguramente, lograremos evitamos algunos
problemas y sinsabores, pero nuestro bienestar será cada vez más vacío, aburrido
y estéril, nuestra religión cada vez más triste y egoísta. Mientras tanto, los
oprimidos y afligidos quieren saber si le importa a alguien su dolor.
CELEBRAR
El temista o alguien del grupo dirá: Durante este camino nos hemos dispuesto a la
purificación y liberación de nuestra visión mercantilista del mundo y de Dios, nos
hemos abierto a su amor en Jesús, que sobrepasa nuestros esquemas y a mirar la
Cruz más allá del fracaso como nos plantea nuestra cultura, sino como una forma
de victoria. Hoy se nos invita a buscarlo, como lo hicieron los griegos. También
muchos hoy lo buscan, y nos preguntan a nosotros por Él, porque somos sus
discípulos. Se le proporciona un papel pequeño a cada asistente, en donde los
asistentes deben de escribir su compromiso, respondiendo: ¿Cómo puedo
acercarme más a Jesús? ¿Estoy dispuesto a asumir eso que llamamos fracaso,
como una oportunidad de triunfo ante la vida?
Una vez que hayan escrito sus compromisos, se les pide a los asistentes que
vayan pegando su compromiso en una cruz de madera, se recomienda usar el
canto ―Las heridas de Jesús‖ https://www.youtube.com/watch?v=h3dM7UyaGiY
El temista o alguien del grupo dirá: Es necesario morir, para vivir. La vivencia de
la vida no tiene sentido sino luego de la muerte, la victoria no tiene sentido si no se
ha experimentado el triunfo, pero nosotros estamos muy acostumbrados a vivir de
―éxitos, de triunfos, de victorias‖, nos cuesta salir de allí y experimentar lo cotidiano
de la vida, sus sinsabores, sufrimientos y malestar. Se deja un momento para que
cada uno pueda expresar lo que esta palabra le ha generado, en forma de
alabanza, agradecimiento, petición, suplica de perdón. Digamos juntos: Señor,
enséñanos a ser semillas del Reino para morir y nacer a la vida (Se repite varias
veces). El temista dice: Y ahora juntos, pedimos al Padre que se haga Su
voluntad, y nos comprometemos a hacer presente el Reino de vida y de amor, por
eso con Jesús, decimos: Padre nuestro…
CATEQUESIS 2: DESDE EL CORAZÓN DE LA MADRE DEL DISCÍPULO
AMADO PRESENTES EN EL MISTERIO DE SALVACIÓN
VER
Jn 19, 25-27.
*¿Qué crees que sintió María al ver que su hijo cargaba la cruz?
*¿Cuál crees que haya sido el sentir de María al ver a Jesús clavado en la cruz?
*¿Por qué crees de Juan haya sido elegido de entre los 12 discípulos para para
ser entregado como hijo de María?
Posterior a ello, el animador en les pedirá a los jóvenes que elijan a un integrante
del equipo para que comparta las respuestas de los jóvenes.
JUZGAR
- No, amiga, no, "saber" quizás no sea la palabra, debes... debes sentirlo y
comprenderlo en tu corazón. Puedes conocer el relato de los hechos de memoria,
y, al mismo tiempo, no comprenderlos, y si no los comprendes no te ayudan en la
salvación de tu alma, y si no te ayudan en esto, pues, de nada te sirven.
- Sí- y recuerdo las veces en las que la vida me sonreía, en las que tenía muchos
amigos, en las que recibí aplausos y todo parecía estar perfecto- sí amiga,
muchas veces sentí que la vida cortaba ramas de olivo y los ponía a mis pies.
- Y tú te creías importante por ello-la voz de María se pone muy triste, apenas si
puedo yo soportar su mirada, no está enojada, ¡Está triste! - ¿Verdad Susana?,
¿Te sentiste importante sólo porque el mundo te sonreía? ¿No pudiste reconocer
que era temporal, que con la misma rapidez con que te sonreía, te olvidaría, pues
ya habría logrado su objetivo, que era hacer brillar tu orgullo, palidecer tu
humildad, entristecer a mi Hijo?
- María, querida madre mía, me comprometo aquí y ahora a poner todo de mí para
no desaprovechar esas oportunidades, tú... tú sólo pídele a tu Hijo amado que me
dé luz suficiente como para reconocerlas.
- María querida, es cierto todo lo que dices, pues ves mi alma en toda su
dimensión y conoces que, muchas veces, mi conducta ha lastimado el corazón de
tu Hijo. ¿Qué decir? ¿Qué argumentar? Nada, pues, con sólo mirar tus ojos
entristecidos se desarman todos mis argumentos ¡Pensar que me aferré tanto a
ellos y ahora no pueden sostenerme, ahora veo que, en realidad, sus raíces se
alimentaban de mi orgullo y vanidad, sus raíces eran débiles!
- ¡Bien, hija bien! Estás comprendiendo... ¿Te das cuenta? Ese es el mensaje,
comprenderlo desde tu propia vida.
- Pues debes hacerlo, es duro, difícil, sobre todo llegar al tiempo de la muerte de
Jesús, pero debes aferrarte a su resurrección, es la única manera.
- Sigamos entonces...
Acompañemos ahora al Salvador mientras ora en el Huerto. Está triste y solo. Les
pide a sus amigos que lo esperen despierto, es sólo un momento, más ellos se
duermen. ¿Cuántas veces te encontró a ti dormida, amiga? ¿Cuántas veces
dejaste para más tarde, para más adelante, el replanteo serio de ciertas actitudes
sólo dictadas por tu orgullo y vanidad, y Jesús te encontró en medio de ellas?
Mientras Él estaba orando y necesitaba de ti, tú dormías ¡Más tarde te
despertarías, más adelante, ya tendrías tiempo...! Nunca sabes cuándo Jesús
vendrá por ti ¿Por qué dejas el cuidado de tu alma para más adelante? ¿Por qué
te duermes en el mullido colchón que te ofrece el mundo?
- Ya vienen por Jesús, ya vienen por Él. Judas lo besa. Un amigo saca su espada
y mi Hijo lo detiene. Deben cumplirse las Escrituras. Él podría solicitar al Padre
"...doce legiones de ángeles" (Mt. 26,53) pero calla, Él podría eliminarlos a todos
sólo con una mirada, pero no lo hace... Jesús obedece la Voluntad del Padre,
sabiendo que le pide el mayor de los sacrificios, su propia vida… pues el alma de
Jesús era un solo grito: "¡Padre mío...no se haga mi voluntad, sino la tuya!"(Mt
26,39) ¿Cuántas veces no aceptaste la Voluntad de Dios en tu propia vida y
terminaste lastimada? Hija mía del alma, la voluntad de Dios es siempre el mejor y
más seguro de los caminos, aunque tú no lo comprendas prontamente.
- Lo sé, y ahora veo con claridad de que he tenido más caminos a mi alcance de
los que yo misma tengo conciencia…quisiera, Señora, borrar todos los pecados de
mi vida si pudiera. Si pudiera volver a nacer y hacer todo otra vez.
- Hoy quiero nacer de nuevo. Hoy quiero nacer de nuevo, Señora, por Jesús.
- La cruz ya pesa sobre sus espaldas, carga sobre sí los pecados del mundo ¡Qué
pesada le resulta! cae, bajo el peso de la cruz y un dolor que le ciega... se levanta
¿Cuántas veces, amiga, te tiró abajo el peso de tu cruz y allí te quedaste?
Gimiendo, llorando y lamentándote que Dios te había olvidado... por ello, perdiste
de tomar su mano, que la extendía desde la eternidad para sostenerte. ¡Ay, mi
buena amiga!.. Hubiese bastado con que levantaras los ojos, en lugar de mirar
solamente el lugar de tu caída. Era tan simple. Es tan simple.
Sigamos. La cruz deja huellas en la arena, una línea que se mezcla con las
huellas de sus pies y la sangre Preciosísima. Simón de Cirene le ayuda. ¿Cuántas
veces tuviste la oportunidad de ser Simón de Cirene para tu hermano, para un
Cristo cansado y agobiado que se escondía tras el desesperado rostro de tu
hermano? Recuerda, amiga, que hay oportunidades que pasan ante ti una sola
vez, que el hermano a quien no ayudaste pasó, siguió su camino, ya no tendrás
oportunidad de ayudarlo, quizás a otro, pero a ése... a ése ya no. Simón de
Cirene, amiga, recuérdalo cada vez que tu hermano te mire en silencio, cada vez
que el dolor le nuble el alma. No hace falta que se arrodille ante ti, ni que inicie un
expediente para solicitar tu ayuda, ni que espere a que tú "tengas tiempo", ni
siquiera que juzgues si "merece o no" tu ayuda. Sólo carga su cruz unos metros,
sólo unos metros, verás que, cuando él siga su camino, tu propia cruz será más
liviana.
- Hija querida, mi alma también está llena de dolor al recordar estos momentos. -
Calla, entonces, Señora. - No, amiga, mi misión es conducirte a mi Hijo.
Seguiremos, si mi dolor te da luz entonces tiene sentido. Mira, le han clavado en la
cruz. Estoy a su lado... habla... habla... - ¿Qué dice Jesús, Señora? ¿Qué dice? -
Él dice, dice, tu nombre, tu nombre y el de todos, los nombra, uno a uno, como si
nombrarlos le diera la fuerza que necesita para llegar al final. Luego, luego dice a
Juan y a mí... "Mujer, aquí tienes a tu hijo, Aquí tienes a tu madre" Jn 19,26-27)…
el resto es sólo un susurro. ‖ Todos, todos, todos‖. Él te nombró, amiga, los
nombró a todos, eso los hace hermanos, hermanos.
Te miro, tus ojos están llenos de lágrimas. tienes ojeras, eres ahora la Dolorosa.
La Dolorosa… quiero abrazarte, pero...no soy digna. Lo notas. Te me adelantas,
me abrazas, lloramos juntas largo rato, yo, por mis pecados, tú... tú por mí, por
todos...
Ojalá que todo joven, a ejemplo del discípulo amado, "acoja a María en su casa" y
le deje espacio en su vida diaria, reconociendo su misión y su vocación en el
camino de la salvación, siguiendo como ejemplo la vivencia de Juan sintiéndose
acompañado por nuestra madre María como guía en su proyecto de vida.
ACTUAR Y CELEBRAR
Técnica reflexiva:
Al término de la reflexión se les entregara una vela, papel y un pedazo de hoja
para que en ella escriban una acción o petición por el proyecto de vida de cada
uno, el cual pegarán a la vela con cinta, se trasladará al joven hacia un lugar
abierto donde se tenga la imagen de María, se realizará una pequeña oración con
la vela encendida y se pedirá la intercesión de María para que así como lo hizo
con el discípulo amado también nos acompañe en nuestra vida y sea una guía y
ejemplo para la realización en plenitud de nuestro proyecto de vida; terminada la
oración se invitará al joven que como signo externo ponga a los pies de María la
vela que se le ha entregado para depositar la petición que cada uno tenga, esto se
realizará con música de fondo con la canción de Jeséd titulada el discípulo amado.
Material:
*Velas.
*Hojas.
*Lapiceros.
VER
JUZGAR
Jn 3, 14-21
El relato nos recuerda el libro de los números en el Capítulo 21. El pueblo que
pasaba por el desierto en su purificación de los cuarenta años, en una parte
aparecieron unas serpientes que picaban a los israelitas y éstos morían. Entonces
Yahveh le ordenó a Moisés hacer una serpiente de bronce como un símbolo para
ponerla sobre un bastón o mástil y cada vez que uno de los israelitas era mordido
por una serpiente, solamente mirando la serpiente de bronce, quedaba curado.
Para un diálogo, Jesús, el maestro comienza por las cosas que las personas
conocen. Este hombre que era fariseo, y que también conocía la Ley, era fácil
entender lo que le explicaba Jesús. Por esa razón, esta parte del diálogo
comienza diciendo: ―así como Moisés en el desierto levantó la serpiente, así ha de
ser levantado el Hijo del Hombre, para que quien crea en él tenga vida eterna‖
(versículos 14 – 15).
La centralidad ahora está en la Cruz de Cristo, el que viene a salvar del maligno
enemigo. Todos los seres humanos hemos sido ―picados‖ por la ―serpiente‖ es
decir, hemos muerto por el pecado, inducidos por el enemigo de Dios, que en la
antigüedad se representaba por la serpiente (recordemos el libro del Génesis, es
la serpiente la tentadora). Ahora toda esta simbología cobra un nuevo sentido en
Jesús, quien es que será alzado en el mástil de la cruz, en el instrumento de
tortura más espantoso, para que, desde allí, todos aquellos que lo miremos con fe
podamos tener vida eterna.
Las palabras claras aquí son: Muerte y Vida eterna; no creer y Creer; Perdición y
Salvación; Tinieblas y luz. Todo con su explicación en Jesús el Cristo, el Mesías,
el Salvador, el Redentor.
Reconstruimos el texto:
Se invita a responder a las preguntas, hacer otra relectura del texto, y se genera
un dialogo para reconstruir el texto.
ACTUAR
El temista dirá: Ahora cada uno, ponga en manos de Jesús todo esto. Lo más
importante para poder cambiar, es reconocer aquello que nos impide crecer, por
allí comenzamos. Hoy reconozcámoslo ante Él, que nos ha convocado aquí para
seguir su Luz y caminar con Él. En el encuentro anterior, nos dispusimos a ser
purificados, pensemos donde hay oscuridad y cómo podemos ser luz, en medio de
esa realidad. Aquí tenemos la cruz junto al cirio, para quienes no creen, incluso
para los discípulos en su momento, ha sido señal de muerte, fracaso y
destrucción. Sin embargo, Jesús nos muestra que es un anticipo del triunfo y de la
gloria, pero ―tiene que pasar para ser glorificado‖, sin muerte no hay resurrección.
Por eso ante la cruz, iremos colocando esas palabras, situaciones o
acontecimientos que representan oscuridad, tiniebla, odio, guerra, muerte.
Una vez terminado, se sugiere usar la canción ―Una plegaria de paz‖ de Athenas,
disponible en YouTube, en el siguiente enlace:
https://www.youtube.com/watch?v=FAQS6s_Ff-0
Ahora, invoquemos al Espíritu del Padre y del Hijo para que también nosotros
vivamos como hermanos de todos y como hijos de Dios, para que nosotros
vivamos esa unidad que Jesús nos comunidad, al hacernos parte de su familia.
El temista u otro dirá: pidamos, a este Espíritu para que nos mueva, dispongamos
a escuchar su Palabra para que comprendamos lo que nos quiere decir y la
pongamos por obra, lo hacemos por medio de aquella que escucho la Palabra y la
puso por obra.
CELEBRAR
Ahora como grupo, seguimos caminando a celebrar la Pascua juntos. Hoy hay
muchos, que no han conocido este amor del Padre manifestado en Jesús. En el
encuentro pasado acordamos una acción para manifestar a otros de forma
concreta el proyecto del Reino. Hoy nos toca seguir organizando está actividad,
haciendo énfasis en como manifestar este amor, que es manifestación del Reino
de Dios.
Se deja la oportunidad para que cada uno pueda hacer una breve frase de petición
por aquellos para quienes queremos transmitirte este amor, que nunca dice basta.
Agradecidos por el amor que se nos ha manifestado, pidamos que se haga Su
voluntad de vivir el Reino del amor y juntos a todos nuestros hermanos, digamos
alrededor de Jesús: Padre Nuestro.
CATEQUESIS 4: ACOMPAÑANDO A JESÚS EN LA CRUZ
VER
JUZGAR
El expositor comentara y solicitará que los participantes cierren los ojos para
―poder imaginar‖ la vida de María que contará brevemente
Lc 1, 26-38
Lc 2, 33-35
MARÍA
―Alégrate, llena de gracia, el Señor está contigo‖, con esas palabras y esa
promesa comenzó todo, en una mañana en Nazaret, y cuando creí que mi
asombro no podía ser más, aquel ángel pronuncio aquello que me tiene hoy aquí,
―has encontrado gracia ante los ojos del Señor, concebirás en tu seno y darás a
luz a un hijo, al que pondrás por nombre Jesús‖
Mi obediencia fue plena, no cuestioné, solo acepte, ese mensajero me dijo que mi
hija seria grande, que gobernaría el pueblo de Jacob, y que su reinado no
terminaría, y aunque no entendí mucho en ese momento, esas palabras me
llenaron de alegría, pues que madre no se alegra y se regocija cuando su hijo es
grande, fue entonces, así como el Espíritu Santo descendió sobre mí y el poder
del Altísimo me cubrió con su sombra. José fue el hombre que me desposo,
cuido de mí y de mi hijo, el cual acepto como suyo, un día tuvimos que ir a Belén
para registrarnos porque un censo se llevaba a cabo, estando ahí me llego el
tiempo de dar a luz, después de tocar y tocar muchas puertas no hubo lugar para
nosotros en las posadas, solo un establo con sus animales nos recibió, y fue ahí
donde nació Jesús, lo envolví en pañales y lo recosté en un pesebre.
¡Ah! Ese hijo mío, lo arrullé muchas veces en mis brazos, le cante, lo consolé, lo
bese, fue siempre mi prioridad.
Todos los años José y yo íbamos desde Galilea hasta Jerusalén para celebrar la
Pascua, este año él nos acompañaría por primera vez, tenía ya 12 años, aunque
había crecido era todavía un niño.
Al preguntarle por qué nos hacía eso, si sabía que nos angustiábamos al no
tenerlo cerca, Él nos respondió serenamente, ―¿Y por qué me buscaban? ¿No
saben que yo debo estar donde mi Padre?; ni José ni yo entendimos su respuesta;
Él regreso con nosotros a casa, siguió creciendo en edad, en sabiduría y en gracia
ante Dios y ante los hombres.
Una madre cuida y ama siempre y sobre todas las cosas a un hijo, yo lo ame y lo
cuide con todas mis fuerzas.
Cuando Jesús era todo un hombre, Juan el hijo de Zacarías comenzó a recorrer
toda la región del río Jordán predicando bautismo y conversión para obtener el
perdón de los pecados por que el Reino de Dios estaba cerca, por este motivo fue
llamado Juan ―el bautista‖, muchos llegaron a creer que él era el Mesías tan
esperado por todos, pero Juan siempre predico ―Yo los bautizo con agua, pero
está por llegar uno con más poder que yo, y yo no soy digno de desatar las
correas de sus sandalias. Él los bautizara con el Espíritu Santo y el fuego‖, mi hijo
acudió como todos a bautizarse y mientras estaba en oración se abrieron los
cielos, el Espíritu Santo bajo, se manifestó en forma de paloma y del cielo vino una
voz que decía ―Tu eres mi hijo, y hoy te he dado la vida‖.
Después de bautizarse Jesús se retiró al desierto por cuarenta días, ahí fue
tentado por el diablo, pero mi hijo no cayó en las trampas y provocaciones de
Satanás.
Mi hijo hizo muchos milagros, ayudo a todo aquel que se le pidió, curó muchos
enfermos, dio de comer a los hambrientos, dio de beber a los sedientos, aconsejo
a los desorientados, su alegría fueron los niños y sus amigos; predicó hasta el
cansancio, siempre les sirvió a todos, nunca humillo, nunca golpeo, nunca
blasfemo, puso siempre el ejemplo de verdad, de humildad, de servicio, de
obediencia, de confianza en su padre.
A mi hijo lo siguieron muchos que confiaron en él, muchos a los que curo, muchos
que creyeron en él, mi hijo resisto todo, nunca se rindió, y siempre a pesar de
todo, perdono, acepto la voluntad de su padre sin cuestionar, y solamente lloro
cuando Lázaro su mejor amigo, murió.
Jesús fue acompañado por los 12, que eran de sus discípulos más fieles, Pedro,
Juan, Mateo, Marcos, Lucas, Tomas, Andrés, Santiago, Felipe, Bartolomé, Judas
el hermano de Santiago y Judas Iscariote; el primero lo negó y este último lo
traiciono, lo vendió por unas cuantas monedas, y mi hijo lo aguanto todo, todo.
Le clavaron tres clavos, uno en cada mano y otro más en sus pies; junto con Él
estuvieron dos ladrones, uno seguía insultándolo, pero el otro en su agonía, le
imploro misericordia a mi Jesús, y el como siempre lo consoló; porque mi hijo aun
en su agonía y en su dolor perdono a los que lo condenaron, perdono a quienes lo
humillaron, perdono a quienes lo azotaron, perdono a quienes lo abofetearon,
perdono a quienes lo juzgaron, perdonó a quienes se burlaron de él y lo
escupieron, perdonó a quien lo traicionó y a quien lo negó.
Porque mi hijo era humilde, bueno, generoso y siempre a pesar de todo perdonó;
yo vi morir a mi hijo en esa cruz, vi como hasta su último suspiro nunca se
arrepintió, y estando a los pies de esa cruz el vio mi dolor, y a mí también me
consoló, pues yo estaba perdiendo a un hijo de la peor forma y el me regalo al
mundo entero para que fueran mis hijos y yo su madre.
Yo hubiera dado mi vida con tal de que él no muriera, yo hubiera la vida por mi hijo
como cualquier madre, pero a mí no me lo permitieron, yo tuve que ser testigo de
su padecer, de su sacrificio, de su entrega, de su obediencia plena para cumplir
con la palabra y la voluntad de su padre.
Cuánta razón tenía Simeón al decirme que una espada atravesaría mi alma, pues
justo eso sentí cuando vi a mi hijo morir poco a poco en aquella cruz. Y hoy lloro
porque siento que la vida se me quedo en ese madero, se la llevo mi hijo en su
último suspiro.
Como quisiera que todo fuera mentira, que todo fuera un mal sueño, y volver a ver
su sonrisa, a escuchar esas palabras tan llenas de sabiduría, pero no, no es
mentira, él ya no está, a mi Jesús me lo mataron, a mi Jesús se lo entregue a su
padre, para que salvara a todos los pecadores ingratos.
REVISAR
CELEBRAR
Una vez escrito, procederán a tomar una foto del corazón y posteriormente harán
uso de sus redes
Sociales, haciendo un upload de su foto con el #MaríaEstamosContigo. Después
el corazón se deberá entregar durante el pésame a María
SABADO
SANTO
SANTO «Durante el Sábado Santo, la Iglesia
permanece junto al sepulcro del Señor, meditando su
pasión y muerte, y se abstiene del sacrificio de la misa,
quedando por ello desnudo el altar hasta que, después
de la solemne vigilia o expectación nocturna de la
resurrección, se inauguren los gozos de la Pascua, cuya
exuberancia inundará los cincuenta días pascuales. En
este día no se puede distribuir la sagrada comunión, a no
ser en caso de viático Y la Iglesia, junto al altar desnudo,
celebra el Oficio divino; un oficio impregnado totalmente
de reposo y de contemplación.
VER
Estos sueños de adolescencia son los que motivan al individuo a buscar la manera
de cumplirlos. Sueñan, se ilusionan, buscan motivos, impulsos, se levantan
constantemente para poder llegar a ellos. Lamentablemente estos sueños se
pueden vienen abajo por varios motivos, por mencionar algunos; carencias
económicas, carencias educativas, falta de apoyo familiar, la rutina diaria que
consume, depresión, falta de comprensión, entre otros. Todo esto pone al
adolescente en una posición en el que hace a un lado sus sueños para poder vivir
JUZGAR
Leer detenidamente el siguiente evangelio: Lucas 24, 13-35 (si se puede presentar
una representación actuada con los diálogos aprendidos del evangelio)
Al igual que los discípulos de Emaús, los adolescentes caminan solos llenos de
tristeza por las cosas que les pasan en la vida. Los discípulos analizan lo que
acaban de experimentar; una realidad que los llena de tristeza y desilusión
profunda, pues todas sus esperanzas en Jesús como el Mesías prometido, se
habían venido al suelo con su muerte.
Caminaban solos, conversando de lo que había pasado hace unos días, traían la
tristeza con ellos y dentro de ellos. Cuantos, de nosotros, al igual que ellos
caminamos con nuestros problemas y tristezas, sin compartirlos con los demás
por miedo a la crítica, al ¿qué dirán? O porque simplemente no teneos a nadie con
quien compartirlos o desahogarnos.
Al principio ellos no lo reconocen, pero aceptan que camine con ellos. Jesús les
empieza a preguntar y ellos poco a poco se comienzan a abrir con aquel
desconocido. Les empiezan a contar sus tristezas, sus decepciones, su falta de
esperanza y Jesús empieza a escucharlos.
¡Es necesario levantarnos, motivarnos, dar testimonio que nos hemos encontrado
con el resucitado, salir a la calle, escuela, familia y al igual que estos discípulos,
cambiar nuestra tristeza por alegría, nuestra soledad por acompañamiento,
nuestra oscuridad por luz, y anunciar a todo el mundo que Jesús resucito!
ACTUAR
REVISAR
Nuestra vida está hecha por cosas grandes, Dios te hizo tan bien. Resucita con él
y no pasemos por el mundo como alguien del montón. Eres hijo de un rey, no lo
olvides.
CELEBRAR
Oración de los jóvenes y adolescentes. Señor, aquí estoy otra vez ante ti Para
pedirte que me perdones Si en algo te he atendido, Olvidándome de cuanto me
quieres sin pensar que siempre me estás viendo Perdón Jesús.
Te pido por los adolescentes, que como yo A veces no sabemos valorar Cuanto
nos das sin merecerlo Te pido sabiduría y entendimiento Para poder comprender
cuál es tu voluntad
Te pido que los adolescentes de hoy sigan tu camino Como estoy tratando de
seguirlo yo, Para que mañana seamos adultos responsables Y tratando se
seguirte agradando
Ayúdame a quererte más, a creerte más, Que este amor que ahora siento por ti
No se apague jamás
Amen.
CATEQUESIS 2: HIJO, “AHÍ TIENE A TU MADRE”: MARÍA COMO MODELO
PERFECTO DE ACOMPAÑAMIENTO
PROLOGO
―María es la mujer a la que todos llamarán feliz porque creyó. Su mismo hijo la
alabó, no por su maternidad en la carne, sino por haber escuchado la palabra de
Dios y haber creído. Por eso ella es quien mejor puede acompañarnos en nuestro
camino de fe‖ (Lanús, 2010: 39-40).
VER
Ahora, una vez que el animador terminó de exponer sus vivencias, les pide a los
participantes, reunirse en equipos de 5 personas y repetir el ejercicio de compartir
4 experiencias con todos los participantes. Para un mejor desarrollo de la
dinámica, se sugiere vendar los ojos de los participantes y/o armonizar con música
de reflexión. Se le brindan 15 minutos para terminar la dinámica.
Una vez terminada la dinámica, reflexionar con base a las siguientes preguntas:
¿Qué han observado en esta dinámica? ¿Qué les ha llamado más la atención?
¿Qué vivencias de sus compañeros les han llamado la atención, por qué? ¿Qué
sentimientos fluyeron cuando experimentaron su vivencia en soledad? ¿Qué
sentimientos fluyeron cuando experimentaron su vivencia en acompañamiento?
Las respuestas se comparten entre toda la asamblea
Es la actualidad, es muy difícil que un adolescente pueda mirar al frente, a los ojos
de su semejante y al camino por el que transitan. Hoy, solo sabemos mirar a una
pantalla de 5 pulgadas y hacemos oídos sordos y ojos ciegos ante la realidad de
nuestro medio.
¿Qué pasaría si dejáramos caer esa venda que no nos permite aquello que nos
rodea, y ver aquello que realmente importa? Seguramente, veríamos aquellas
personas que siempre han estado ahí, pero no hemos querido notar. Seguramente
no volveríamos a sentirnos solos y por consecuencia, tropezaríamos menos.
Seguramente ante la caída inminente, pondríamos las manos bien al frente para
amortiguar el golpe.
JUZGAR
Jesús enfrentó la situación que le tocaría enfrentar a María: viviría bajo el peso de
la vergüenza de ser la madre de un ajusticiado por blasfemo y subversivo. Como
tantas mujeres de nuestro propio pueblo, ella no andaba mendigando nada para sí
misma. Jesús se le adelantó.
Luego, en ese mismo momento, Jesús se dirige a su discípulo querido y le dice:
Ahí tienes a tu madre. Es como si le dijera: — en esta mujer, mi madre, siempre
vas a encontrar la acogida que encontré yo (P. Maza & S.J., 2010).
María estaba de pie, junto a la cruz, y nuestras Marías de pie, haciendo fila de
mañana en el hospital, para conseguir un turno, con el niño en brazos y el
trasnoche en el rostro, en lo que aparecen las enfermeras y los doctores. María
junto a la cruz, y nuestras Marías despertando a los hijos y alistándolos para la
escuela, con un café y un pan duro, vistiéndolos de un azul desteñido y
planchadito, ―sobrellevan dificultades, llevan pesadas cargas, pero se aferran a la
felicidad, amor y alegría. Sonríen cuando quieren gritar. Cantan cuando quieren
llorar. Lloran cuando están felices y ríen cuando están nerviosas. Pelean por lo
que creen. Se sublevan contra la injusticia. No aceptan un ―no‖ por respuesta
cuando creen que existe una solución mejor. No se compran zapatos, ni ropa
nueva, pero a sus hijos sí. Aman incondicionalmente. Lloran cuando sus hijos
sobresalen y ovacionan a sus amigos cuando triunfan. Se les rompe el corazón
cuando un amigo muere. Sufren cuando pierden a algún miembro de la familia,
pero son fuertes cuando no hay de donde más sacar fuerzas. Saben que un
abrazo y un beso pueden sanar un corazón roto. Las Marías vienen en todos los
tamaños, colores y formas. Manejan, vuelan, caminan o te mandan e-mails o
whatsapps para decirte cuánto te quieren‖ (Doren, 2013). María queriendo darle
todo al hijo en la cruz, y nuestras Marías queriendo darles, si pudieran, sus propias
vidas a sus hijos (P. Maza & S.J., 2010).
¿Quién es esa nuestra María en esta vida terrenal? Nuestra mamá, ella es nuestra
María. Y, No es acaso ella, quien siempre nos ha acompañado en nuestro andar,
esa mano que sostiene, ese abrazo que reconforta, ese calor que sana, esa
oración que nunca acaba. Así es muchachos, es ella nuestra María. Es así como
podemos comprender que ella, siempre ha estado ahí, incluso cuando no
queremos ver, ella mira de lejos, esperando que vuelvas sano y salvo a casa.
¿Qué dicha supera la de poder tener a una madre en vida y sentir el amor de su
compañía?
ACTUAR
Analizar el texto ―El don del discernimiento del documento preparatorio ―los
jóvenes y el discernimiento vocacional‖ (pág., 21-25)
Reconocer
En esta fase, la palabra de Dios reviste una gran importancia: meditarla, de hecho,
todas las experiencias del contacto con la propia interioridad, pero al mismo
tiempo ofrece una posibilidad de hacerlas emerger identificándose con los
acontecimientos que ella narra. La fase del reconocimiento sitúa en el centro la
capacidad de escuchar y la afectividad de la persona, sin eludir por temor a la
fatiga del silencio. Se trata de dar un paso fundamental en el camino de la
maduración personal, en particular para los jóvenes que experimentan con mayor
intensidad la fuerza de los deseos y pueden también permanecer asustados,
renunciando incluso a los grandes pasos, a los que sin embargo se sienten
impulsados.
Interpretar
Ellos lo leerán y van a realizar una lluvia de ideas de la cual van a obtener una
conclusión la cual van a publicar en sus redes sociales, para que de esta manera
quien obtenga más me gusta será el equipo ganador.
No hay peor ciego que el que no quiere ver. Es momento aflojar la venda de
nuestros ojos y dejar que nuestro corazón vibre de dicha. Es momento de sentir el
amor más grande que nuestro Padre nos ha regalado en esta vida, el amor de
nuestra madre. Un amor que es tangible, y que es momento de honrar con el
corazón.
Vamos a darte 15 minutos para que prepares un presente para tu mamá (Papá,
abuelo(s), tío(s), amigos(s), en caso de no contar con mamá)
Tú decides cómo. Puede ser tan simple como una llamada para decirle cuanto la
quieres y darle gracias, puede ser una carta, un cartel, un dibujo, un poema, etc.
Realízalo con toda la seriedad, responsabilidad y amor del mundo. Bajo plena
consciencia de que el obsequio llegará a las manos de ese destino.
CELEBRAR
VER
DINÁMICA:
Joven que sufre maltrato verbal por familiares y amigos Joven que es violada
sexualmente Joven con desilusión amorosa Joven que es excluido Joven que ha
caído en alguna adicción Joven que se ha integrado en un grupo delictivo Joven
que se ha involucrado en el narcotráfico
REFLEXIÓN:
Es muy fácil dar consejos o sugerencias, pero cuando topa en la propia nos
cuesta trabajo razón para tener fe.
JUZGAR
REFLEXIÓN:
ACTUAR
Nuestra vida es como esta rosa donde hay belleza y espinas. Así es nuestra vida
tejida con pétalos de alegría y espinas de sufrimiento. Pero la vida se encarga de
deshojarla.
Aunque tu vida se haya deteriorado por las tormentas, Yo Morí por ti y Resucite
para darte vida, TE AMO.
Aunque te hayan humillado, Yo Morí por ti y Resucite para darte vida, TE AMO.
Aunque hayan pisoteado tu dignidad… Yo Morí por ti y Resucite para darte vida,
TE AMO.
Aunque hayas perdido el respeto por ti mismo. Los participantes añaden: Moriste
por mí y Resucitaste para darme vida, TU ME AMAS.
Aunque te hayan quitado lo que más amabas… Moriste por mí y Resucitaste para
darme vida, TU ME AMAS.
Aunque alguien nubló tus ideales y evaporó tus sueños… Moriste por mí y
Resucitaste para darme vida, TU ME AMAS.
Aunque a veces parece que nadie cuida de ti… Moriste por mí y Resucitaste para
darme vida, TU ME AMAS.
Aunque parezca que nadie te protege ni cobija bajo sus alas… Moriste por mí y
Resucitaste para darme vida, TU ME AMAS.
Reflexión: Con esto el joven podrá darse cuenta que Jesús lo ha acompañado en
cada momento y nunca ha estado solo.
CELEBRAR
Como hizo en otros tiempos con los discípulos de Emaús, Él nos explica las
escrituras y parte para nosotros el Pan. (Plegaria Eucarística V)
En el momento del Gloria los jóvenes pueden ser revestidos de blanco (sábana
blanca o listón blanco para dar el sentido de la resurrección)
Esto lo podemos hacer mediante el lanzamiento de globos con gas y una carta
compromiso o un globo de cantoya en el cual escriban su compromiso…
Saludos: Jaculatorias
Salir en procesión con el santísimo antes se reparten unas velitas a los muchachos
El pan de vida
INTRODUCCION
Jesús ha vivido unos momentos intensos. Los discípulos quieren descansar, pero no le dejan solo.
Esta tarde nuestra iglesia, nuestros grupos eran el Cenáculo. Jesús repetía sus palabras y sus
signos... Fueron tantos y tan densos que queremos recordarlos, volver a meditarlos. Esta noche
todos nosotros somos Getsemaní. Cristo está aquí. Y nosotros también para adorar y agradecer su
entrega en el Pan y el Vino nuevos y para iniciar el misterio pascual de su muerte y resurrección.
PRIMER MOMENTO
Cuando todos te abandonan, cuando Judas te traiciona, cuando el Sanedrín prepara tu condena,
Oremos: R/nosotros queremos estar contigo.
Lo más importante no es. Que yo te busque, sino que tú me buscas en todos los caminos. Que yo te
llame por tu nombre, sino que tú tienes el mío tatuado en la palma de tus manos. Que yo te grite
cuando no tengo ni palabra, sino que tú gimes en mí con tu grito. Que yo tenga proyectos para ti,
sino que tú me invitas a caminar contigo hacia el futuro. Que yo te comprenda, sino que tú me
comprendes en mi último secreto. Que yo hable de ti con sabiduría, sino que tú vives en mí y te
expresas a tu manera. Que yo te guarde en mi caja de seguridad, sino que yo soy una esponja en el
fondo de tu océano. Que yo te ame con todo mi corazón y todas mis fuerzas, sino que tú me amas
con todo tu corazón y todas tus fuerzas. Que yo trate de animarme, de planificar, sino que tu fuego
arda dentro de mis huesos. Porque ¿cómo podría yo buscarte, llamarte, amarte... ¿Si tú no me
buscas, llamas y amas primero? El silencio agradecido es mi última palabra y mi mejor manera de
encontrarte.
SEGUNDO MOMENTO
Esta noche te pedimos ser como tú. Atentos al Padre y a los hermosos. Con esa entereza, esa
confianza. Nosotros somos débiles y muchas veces pecadores que desaparecemos ante el primer
problema, que huimos, que no tenemos fuerzas, que no nos comprometemos lo suficiente. Somos
un poco Pedro que incluso te negó. Que sepamos vivir “nuestra hora”, y la hora de cada día.
Jesús nos dice esta noche que es posible orar al Padre desde toda situación humana. En la angustia,
en la debilidad, en la enfermedad, en las persecuciones, en los terremotos. También en la fiesta, en
la alegría, cuando estamos bien. Se puede hablar con el Padre, siempre. Porque el Padre está con
Jesús, con nosotros, con todos. Silencio. Después, canto.
ORACIÓN Y MEDITACIÓN Lo más importante no es. Que yo te busque, sino que tú me buscas
en todos los caminos. Que yo te llame por tu nombre, sino que tú tienes el mío tatuado en la palma
de tus manos. Que yo te grite cuando no tengo ni palabra, sino que tú gimes en mí con tu grito.
Que yo tenga proyectos para ti, sino que tú me invitas a caminar contigo hacia el futuro. Que yo te
comprenda, sino que tú me comprendes en mi último secreto. Que yo hable de ti con sabiduría,
sino que tú vives en mí y te expresas a tu manera. Que yo te guarde en mi caja de seguridad, sino
que yo soy una esponja en el fondo de tu océano. Que yo te ame con todo mi corazón y todas mis
fuerzas, sino que tú me amas con todo tu corazón y todas tus fuerzas. Que yo trate de animarme, de
planificar, sino que tu fuego arda dentro de mis huesos. Porque ¿cómo podría yo buscarte, llamarte,
amarte... ¿Si tú no me buscas, llamas y amas primero? El silencio agradecido es mi última palabra y
mi mejor manera de encontrarte.
TERCER MOMENTO
Señor, gracias por quedarte con nosotros. No llegamos a alcanzar lo que es tu presencia en la
Eucaristía, en la Escritura, pero creemos en ti. Eres luz, fuerza, amor. Es de noche, pero nos
iluminas, te sientes débil ahora, pero sigues dando fuerza, nos pides que amemos, pero tú nos amas
primero. Gracias por tu presencia. No olvidamos que muchos se sienten solos hoy día, que están
enfermos, que sufren, que son perseguidos a causa de la justicia, que no pueden dar de comer a sus
hijos, que sufren la guerra de los poderosos. Es un buen Getsemaní muy actual y muy vivo; pero ahí
estás tú. También nosotros queremos estar unidos a todas esas personas; contigo en ellos, Señor.
EVANGELIO de San Marcos 14,39-42
CUARTO MOMENTO
Llega la hora de la traición, el momento cumbre. Jesús se entrega en servicio por todos. Parece
como si todo estuviera perdido. Las tinieblas se ríen de la luz; el odio parece triunfar sobre el amor.
La muerte parece regodearse de la vida. Y, en la oración, Jesús ha vencido la angustia, ha recobrado
las fuerzas, y sale decidido a proclamar la fuerza del amor, la belleza de la vida, la gratuidad de la
luz.
OPRACION
Señor te quedas solo; será un rato. Nosotros siempre estamos aquí contigo, esperando tu amor
definitivo Tú eres realmente, el Cristo, el que ha de venir. Tú eres el amor de Dios. Un amor que
ayuda acoge, alienta, abraza; un amor de amigo, de padre, de alguien que no nos abandona. Haznos
ser más seguidores tuyos, que podamos parecernos a ti que acojamos a todos con un corazón grande
como el tuyo. En el triduo Pascual que celebramos queremos ser como Tú, y estar más cerca de ti y
de nuestros hermanos necesitados. Silencio. Después, canto.
Quisiéramos poner ante nuestros ojos a cuantos están marcados por el dolor y la angustia, por la
soledad o el sinsentido, por la desgracia y la tortura, por la marginación y la miseria, por la
enfermedad o la cárcel, por la humillación y condena a muerte. En todas Cristo sigue su agonía.
Pedimos:
Por los agonizantes y enfermos terminales, que además de los paliativos, no les falte el ángel del
consuelo. Roguemos al Señor
Por los que viven en la miseria y el olvido, que lleguen a todos sus gritos silenciosos. Roguemos al
Señor
Por los que son víctimas del terror, de la guerra, de los secuestros y la tortura, que a todos nos
interpele su martirio. Roguemos al Señor
Por los ancianos que no son queridos y se sienten solos, que encuentren personas que los
acompañen y valoren. Roguemos al Señor
Por las mujeres maltratadas, víctimas de la violencia de género, la prostitución, que puedan
recuperar su dignidad y su libertad. Roguemos al Señor
Por los niños esclavizados, vendidos, prostituidos, militarizados, que encuentren los medios para
rehacer sus vidas. Roguemos al Señor
Por los que no tienen trabajo, por los fracasados, que no les falten nuevas oportunidades. Roguemos
al Señor
Por todos los jóvenes que están marcados por el desamparo o el vicio y las adicciones, que no
pierdan la esperanza de una liberación. Roguemos al Señor
Por los inmigrantes, que tienen que afrontar tantos riesgos y separaciones, que puedan ser
integrados socialmente y alcanzar sus proyectos. Roguemos al Señor
Oremos: Oh Jesús, que luchaste y sufriste la agonía de Getsemaní, acompaña y conforta a cuantos
se encuentran en esas noches tristes.
Conclusión
Le pedimos a Jesús que nos ayude a sentir esta noche la fuerza de su amor, y su amistad y su
ternura. Queremos pedir a Jesús que nos enseñe a amar como él y que nos capacite para amar como
él.
BENDICIÓN FINAL
VIACRUSIS
OBJETIVO: Lograr que el joven descubra el llamado de Jesús, tomando como
ejemplo algunas personas que Jesús acompaño especialmente en el momento de
la Pasión.
NARRADOR: Jesús, sabemos que la vida verdadera se alcanza por amor, y que
cuando el sufrimiento nace del amor y está unido al tuyo, nos purifica de nuestros
pecados, nos prueba, nos ayuda a crecer, y nos hace solidarios con quien sufre.
Ayúdanos a escuchar el dolor de mi hermano y amar como lo haces tú. Amén.
Tanto amaste, Jesús, al mundo, que dispuesto estuviste a cargar con esa cruz,
llevando nuestros pecados y salvando nuestro corazón.
(En este momento, desde la parte trasera, pasará una cruz por el pasillo. Todos
juntos tenemos que hacerle llegar la Cruz a Jesús).
Canto: El pretorio.
Jesús. - que caes bajo el peso de nuestras culpas y te levantas para nuestra
justificación, te rogamos que ayudes a cuantos están bajo el peso del pecado a
volverse a poner en pie y reanudar el camino. Dame la fuerza para ayudar a cada
joven que ha caído en la oscuridad y poder caminar con él.
(En una hoja de papel escribiremos a aquella persona que más apreciamos en la
vida, aquella persona que ha estado siempre con nosotros. Al término del día,
vayamos con esa persona y entreguémosle aquello que le escribimos para que
así, sepa cuán importante es para nosotros)
CIRINEO: Jesús ya no podía caminar, y tan crueles fueron con él que el recorrido
tenía que terminar. Me dijeron que lo ayudara y sus ojos me daban amor, ojos
llenos de ternura y salvación. Lo ayudé a cargar la cruz y aunque obligado fui,
después cuenta me di que no fui yo quien lo ayudo, sino que Él fue quien me
ayudo a mí y al caminar junto a él y al cargar esa pesada cruz, no podía imaginar
por cuanto tuvo que pasar. Yo cansado estaba y un gran camino llevaba, pero no
podía abandonar a aquel que su muerte estaba por llegar.
SEXTA ESTACIÓN: Verónica limpia el rostro de Jesús.
VERÓNICA: Me abrí paso entre los soldados que escoltaban a Jesús y sequé con
un velo el sudor y la sangre de su rostro. Aquel rostro quedó impreso en ese velo;
un reflejo fiel, un verdadero icono de su amor. Fue aquí donde me di cuenta que
todo acto bueno, todo gesto de verdadero amor hacia el prójimo aumenta, el rostro
de Jesús en mi corazón.
MEDITACIÓN: La tradición de las tres caídas de Jesús y del peso de la cruz hace
pensar en la caída de Adán –en nuestra condición de seres caídos– y en el
misterio de la participación de Jesús en nuestra caída. Ésta adquiere en la historia
for-mas siempre nuevas. En su primera carta, san Juan habla de tres obstáculos
para el hombre: la concupiscencia de la carne, la concupiscencia de los ojos y la
soberbia de la vida. Interpreta de este modo, desde la perspectiva de los vicios de
su tiempo, con todos sus excesos y perversiones, la caída del hombre y de la
humanidad. Pero podemos pensar también en cómo la cristiandad, en la historia
reciente, como cansándose de tener fe, ha abandonado al Señor: las grandes
ideologías y la superficialidad del hombre que ya no cree en nada y se deja llevar
simplemente por la corriente, han creado un nuevo paganismo, un paganismo
peor que, queriendo olvidar definitivamente a Dios, ha terminado por
desentenderse del hombre. El hombre, pues, está sumido en la tierra. El Señor
lleva este peso y cae y cae, para poder venir a nuestro encuentro; él nos mira para
que despierte nuestro corazón; cae para levantarnos.
NARRADOR: Es verdad que los jóvenes somos a veces frágiles, pero eso no
significa que estemos hundidos. Necesitamos encontrar en la cruz el rostro de
Jesús que nos enseña a ver el sufrimiento de tantos hermanos que caminan a
nuestro lado y por nuestra indiferencia no los vemos. Los jóvenes de hoy
buscamos un consuelo fácil. Cristo nos ofrece el verdadero consuelo que calma
nuestra sed y nos abre a la esperanza en la vida diaria al contemplar el rostro del
que tiene siempre abierto el corazón. Y mientras seguimos a Cristo en el camino
de la cruz, se despierta en nuestros corazones la compasión por su sufrimiento y
es momento de reconocer a Cristo en nuestros hermanos que sufren.
He visto que has llorado, que estás pasando por momentos difíciles, que estás
agobiado, pero mi amor por ti es más grande que todos tus problemas,
abandónate en mí, déjate enamorar, pues mira que eres único para mí y tanto es
mi amor por ti, que es lo que me lleva a morir por ti, deja de preocuparte, yo te
amo más que a nada en el mundo.
(En esta estación los jóvenes se abrazarán unos con otros, mientras pasamos a la
siguiente estación).
NARRADOR: Jesús, que por tu humillación bajo la cruz has revelado al mundo el
precio de su redención, concede a los hombres del tercer milenio la luz de la fe,
para que, reconociendo en ti al Siervo sufriente de Dios y del hombre, tengamos la
valentía de seguir el mismo camino que, a través de la cruz y el despojo, lleva a la
vida que no tendrá fin.
Los golpes de los soldados aplastan contra el madero de la cruz las manos y los
pies del condenado.
En las muñecas de las manos, los clavos penetran con fuerza. Esos clavos
sostendrán al condenado entre los indescriptibles tormentos de la agonía. Cristo
sufre lo inenarrable.
Finalmente, el Hijo Unigénito de Dios, Aquel por quien todo fue hecho, estaba en
la cruz luego de haber sido salvajemente torturado y humillado. De su boca no
salió una sola palabra de reproche, ni a su Padre quien lo había enviado a la
tierra, ni para aquellos que le escarmentaban, insultaban y constantemente se
burlaban de él.
Como un cordero al matadero era llevado. El Hijo del hombre, el Rey de Israel,
estaba sufriendo en obediencia, y pidiendo a su Padre perdón por aquellos que le
injuriaban y lastimaban; Jesús moribundo pedía misericordia por aquellos que le
colgaban de la cruz y que procuraban su muerte, por los pecados de los hombres
y por todo aquel que de él tuviese compasión y se entregara al Padre por amor.
JUAN: Un viento corre lleno de tristeza y murmura al oído ―ya no está‖, ya no está
más el dueño de mi amor. Se oprime el corazón al recordar tus palabras, cómo
olvidar tu mirada. Vuelve a llegar más el dolor y se abre la herida al saber que ya
no estás Jesús, ya no te veré más y aumenta el dolor porque ya no estás junto a
mí.
Tan solo unos días todos te proclamaban rey y ahora la vida te arrebataron, tan
solo un instante partías el pan. Tu voz era el fuego que encendía mi corazón, no
puedo olvidarme de esa mirada que descubría completa mi alma y tú me hacías
fuerte cuando yo era débil, me diste vida nueva para ir contigo hasta el final, pero
ya no estás. Todo lo que he vivido contigo parece haber terminado en esa cruz y
ahora no hay nada más, sino temor y desaliento ¿dónde estás maestro? Yo sé
que estoy despierto, quiero seguir amando, no me abandones ¿a dónde has ido?
Yo no me resigno a vivir si ya no estás, si tú no estás. Contra todo lo que siento
esperaré a que pase la noche y vuelva a amanecer.
María recibes en tus manos los pecados pagados de la humanidad entera, recibe
tu corazón abrumado la prueba de amor más grande, recibe en tus brazos la
entrega profunda y leal de tu hijo por nuestros sufrimientos.
MONICIÓN INICIAL (antes que las imágenes salgan): Nos hemos reunido para
manifestar nuestra fe en Cristo Jesús y confesar su grande amor más fuerte que el
pecado y que la muerte. Y también para manifestar nuestro apoyo a la causa por
la cual murió nuestro Salvador, es decir, al plan de salvación de Dios, a su
proyecto de vida, sabiendo que la vida triunfa donde hay justicia, amor, verdad y
paz. Jesús sigue sufriendo en millones de hermanos nuestros hambrientos,
marginados, despreciados, enfermos, atormentados, perseguidos, golpeados,
condenados injustamente; nuestra adhesión a Cristo debe convertirse en servicio
a ellos. Nuestras calles han sido escenario de pleitos, escándalos, vicios y
superficialidad; ahora queremos que sean santificadas por nuestro testimonio de
fe y nuestro silencio de oración unánime. Nos vamos acomodando por la calle,
esperando la salida de las imágenes del Señor del Santo Entierro y de Nuestra
Señora de la de la Soledad, para iniciar nuestra marcha. INICIO
Para cargar las imágenes, irán alternando los equipos de quienes viven la Pascua
de los adolescentes, jóvenes y voluntarios que desean hacerlo por penitencia,
intercesión o cumplimiento de promesa. En cada estación anunciaremos el tipo de
personas que solicitamos para cargar tanto a la Dolorosa como el Cristo muerto.
―El ángel dijo: les anuncio una gran alegría para todo el pueblo: les ha nacido un
salvador; lo encontrarán envuelto en un pañal y recostado en un sepulcro‖ (Lc 2,
11-12). Dice el Salmo: ―los que sembraban con lágrimas, cosechan entre cantares;
al ir iban llorando sembrando la semilla; al regresar, vuelven cantando, trayendo
sus gavilla‖ (125/126, 5-6).
Invitamos a personas que hayan perdido un ser querido en este año que pasen a
cargar la imagen del Cristo muerto. La Dolorosa la carga un equipo de pascuas.
―María guardaba todas estas cosas, y las conservaba en su corazón‖ (Lc 2, 19).
Dice el Salmo: ―¿Qué ganas con mi muerte, con que yo baje a la fosa?‖ (30,10).
Dice Jesús: ―Yo soy el buen pastor; el buen pastor de la vida por sus ovejas; el
asalariado, en cambio, ve venir al lobo y huye, y el lobo las arrebata y las
dispersa‖ (Jn 10,11-12).
(Se escucha la estación 13: Jesús es desclavado de la cruz y puesto en los brazos
de su Madre: ―Mi Jesús tiene sueño…‖).
Invitamos a mamás que quieran encomendar al Señor a algún hijo que pasen a
cargar la imagen de la Dolorosa en esta estación y el Cristo muerto en la
siguiente. El Cristo muerto en esta estación lo carga un equipo de pascuas.
Motivación: Quienes nos vea en esta marcha del silencio, debe entender que
nosotros estamos con Cristo y por Cristo, a favor de la paz.
Dice Jesús: ―Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, tome su
cruz de cada día y sígame‖ (Lc 9,23). Dijo el hijo: ―Me levantaré, volveré a mi
Padre y le diré: Padre, he pecado contra el cielo y contra ti‖. Y el Padre dijo: ―Este
es mi hijo estaba muerto y ha vuelto a la vida, estaba perdido y los hemos
encontrado‖ (Lc 15, 21.32)
Invitamos a mamás que desean encomendar a sus hijos que pasen a cargar la
imagen del Cristo muerto. La Dolorosa la carga un equipo de pascuas.
Motivación: Para que las palabras hablen, deben surgir del profundo silencio. Sólo
en el silencio se oyen las cadenas, los quejidos, los sollozos, las voces
enronquecidas y los azotes recibidos.
―El mundo está crucificado para mí, y yo para el mundo‖ (Col 6,14). Dios dijo:
―Golpearás la roca, y brotará de ella el agua para que beba el pueblo‖ (Ex 17,6).
Dice el Salmo: ―Mi alma tiene sed de ti, como tierra agostada, reseca, sin agua‖
(62/63,1). Dios sacó para ti agua de la roca del pedernal en el desiert0‖ (Dt 8,15).
(Se escucha la estación 11: Jesús es clavado en la Cruz: ―Eres la roca de la luz
con entrañas de agua nueva…‖).
Invitamos a personas que deban una manda que no pueden cumplir y quisieran
cambiarla que pasen a cargar la imagen de la Dolorosa; el Cristo muerto será
cargado por un equipo de Pascuas.
Motivación: Hay ocasiones en que no tenemos palabras para expresar las grandes
vivencias, y entonces habla el silencio.
Dice Jesús: ―El hijo del hombre no tiene donde reclinar la cabeza‖ (Mt 8,20). Dijo
Adán: ―Tuve miedo y me escondí, porque estoy desnudo ― (Gn 3,10). Dijo el
Señor:‖Amigo ¿cómo entraste aquí sin el vestido de fiesta?‖ (Mt 22, 12). (Se
escucha la estación 10: Jesús es desnudado y abrevado con hiel y vinagre: ―Así
desnudo, Dios Mío…‖). Madre llena de dolor, haz que cuando expiremos. R,
Nuestras almas entreguemos por tus manos al Señor. Invitamos a personas que
deseen conmutar una manda debida que pasen a cargar la imagen del Cristo
muerto. La Dolorosa, un equipo de Pascuas. Aclamaciones: R: Cristo ha muerto.
1. Nuestros pecados merecían condenación, y para salvarnos: 2. Por querer
cambiar nuestra forma de pensar y nuestro modo de vivir: 3. Por atreverse a violar
muchas costumbres y leyes de su tiempo que oprimían al hombre: 4. Por no
callarse y decir siempre la verdad que nos duele y molesta: 5. Porque buscó
siempre agradar a su Padre Dios con su forma de ser y actuar, aunque
desagradara a los demás: 6. Porque no le importó el qué dirán los demás: 7. Por
ser un hombre sincero, de convicciones que cuestionaban su ambiente y la vida
de muchos de arriba: 8. Porque su amor es tan grande que se hizo humano como
nosotros, para enseñarnos a vivir como hijos de Dios: 9. Por enseñarnos a vivir y
actuar siempre con la verdad 10. Porque quiso dar su vida por nosotros para
enseñarnos a dar la vida por los demás:
Dijo Pedro a Jesús: ―Señor, tú lo sabes todo, tú bien sabes que te amo‖ (Jn 21,17).
Jesús dijo: ―Joven, yo te lo mando, levántate y camina‖ (Lc7,14)
(Se escucha la estación 9: Jesús cae por tercera vez: ―Triplicaste tu caída entre
sollozos y lágrimas…‖).
Madre llena de dolor, haz que cuando expiremos. R. Nuestras almas entreguemos
por tus manos al Señor.
(Se escucha la estación 8: Jesús consuela a las mujeres piadosas: ―No quiero
llorar por tí…‖).
(Se escucha la estación 7: Jesús cae por segunda vez: ―¿Quién tiró el pan de los
hijos…?‖).
Invitamos a personas que desean superar un vicio o arreglar una situación crítica
que pasen a cargar la imagen de la Dolorosa; el Cristo muerto será cargado por un
equipo de Pascuas.
Frases a repetir:
―Llevo en mi cuerpo marcadas las huellas de la Pasión de Cristo‖ (Ga 6,17). ―Oigo
en mi corazón: Busquen mi rostro. Tu rostro buscaré, Señor; no me escondas tu
rostro‖ (Sal 27/26,8). (Se escucha la estación 6: La Verónica enjuaga el rostro de
Jesús: ―Así quiero que me pintes sobre mi pecho tu rostro…‖). Madre llena de
dolor, haz que cuando expiremos. R. Nuestras almas entreguemos por tus manos
al Señor. Invitamos a personas que desean superar un vicio o situación crítica que
pasen a cargar la imagen del Cristo muerto. La Dolorosa, un equipo de Pascuas.
Proclamas:
―Ayúdense mutuamente a llevar la cruz unos a otros‖ (Ga 6,2). ―Mi amado es para
mí, y yo para mi amado‖ (Ct 2,16). ―Tomaron a un hombre llamado Simón y lo
obligaron a cargar la cruz‖ (Mt 27,32).
(Se escucha la estación 5: El cireneo ayuda a Jesús a llevar la cruz: ―Yo seré tu
cirineo…‖).
Frases a repetir:
―Ustedes que pasan por el camino: vean si hay dolor semejante a mi dolor‖ (Lm
1,12).
(Se escucha la estación 4: Jesús se encuentra con su madre: ―Cristo, niño mío,
¿para dónde vas?...‖).
Invitamos a personas que desean encomendar una amistad que pasen a cargar la
imagen del Cristo muerto. La Dolorosa la carga un equipo de Pascuas.
―Cansado del camino, Jesús se dejó caer junto al pozo de Jacob‖ (Jn 4,6).
(Se escucha la estación 3: Bajo el peso de la cruz Jesús cae con su boca en tierra:
―Decidme quién me besó…‖).
―Jesús, cargando su cruz, salió hacia el Lugar de la Calavera‖ (Jn 19, 17).
Invitamos a personas que ejercen autoridad que pasen a cargar la imagen del
Cristo muerto, la Dolorosa la carga un equipo de Pascuas.
Proclamas:
―Pero Jesús no respondió ni una sola palabra, de modo que Pilato estaba
sorprendido‖ (Mt 27,14). ―Entonces Pilato se lo entregó para que lo crucificaran‖
(Jn 19, 16).
Jesús dijo a su madre: ―Mujer, ahí tienes a tu hijo‖. Luego, dijo al discípulo: ―Ahí
tienes a tu Madre‖ (Jn 19,29).
Acción de gracias:
Madre, hemos recorrido contigo este camino de recuerdos. Ruega por nosotros,
para que tengamos los mismos sentimientos de tu Hijo Jesús, y así nos animemos
a vivir una vida nueva, personal y comunitaria. Que nuestra vida no sea un camino
de muerte, sino de vida. Que el año de la Eucaristía sea la ocasión de un mayor
compromiso por construir una comunidad viva y dinámica, conquistada con la
sangre de tu Hijo Jesús, nuestro hermano y Salvador, que vive y reina por los
siglos de siglos. Amén.
INTEGRANTES DE LA COMISIÓN:
Pbro. José García Cruz (Seminario Mayor “La Anunciación” Cd. Altamirano. Gro.)
Hna. Sor Luz Adriana Chía. Hija de la Cruz. Parroquia “San Lucas Evangelista”
San Lucas, Michoacán.
APOYO DE EQUIPO
Luis Alberto Abarca Hernández. Parroquia de “San Pedro Apostol”, Tejupilco
Méx.)
José Rolando Osorio Martínez. Parroquia. “San Martín Obispo”. Luvianos, Méx.
REPRESENTATES DE FORANIAS
José Ángel Mendoza – Parroquia de “Asunción de María”, Cutzamala de Pinzón,
Gro. (Forania de San Juan Bautista)
Leobardo Mondragón Zavaleta - Parroquia de “Inmaculada Concepción de María”,
Ajuchitlan del Progreso, Gro. (Forania de San José)
Esteban Cruz Avellaneda – Parroquia de “San Juan Bautista”, Tlalchapa, Gro.
(Forania de San Pablo)
José Rolando Osorio Martínez - Parroquia. “San Martin Obispo”. Luvianos,
Méx.(Forania de San Juan Diego)
Efraín Pineda Gonzales – Parroquia de “San Nicolás Tolentino” Zirandaro, Gro.
(Forania de San Nicolas)
Alondra Yarith López – Parroquia de “San José”, Bejucos, Méx. (Forania de San
Juan María Vianey)