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Medición de la creatividad en educación musical escolar

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Revista RecreArte 11
DIC09

Revista RecreArte 11 > III - Creatividad en las Artes: Expresividad Vivificadora

David de Prado Díez


MEDICIÓN DE LA CREATIVIDAD EN LA EDUCACIÓN MUSICAL ESCOLAR.

Julia Bernal Vázquez.


Miguel Ángel Gallardo Vigil.
Universidad de Granada

1. Introducción

En la actualidad el análisis de la creatividad sigue siendo tema de estudio de muchos


investigadores, aplicada a distintos ámbitos de la sociedad y el conocimiento. Sin duda ha
sido la publicidad quién más se ha centrado en esta temática, no obstante el campo educativo
no ha quedado al margen, y actualmente se está potenciando sobre todo en la formación de
profesores.

Algunos de los ámbitos en los que se trabaja la creatividad quedan reflejados en el


siguiente esquema:

Esquema 1. Disciplinas que estudian la creatividad

La creatividad aparece continuamente en los medios de comunicación como una


herramienta muy importante, sobre todo para la búsqueda del personal idóneo en las
empresas. En otros ámbitos como los artísticos, la música, incluso la ciencia, etc., también la
creatividad se convierte en un recurso indispensable para renovar la educación y cambiar el
futuro.
La importancia de la creatividad en el ámbito educativo se puede comprobar en los
nuevos Títulos de Grado de Maestro de Educación Infantil y de Educación Primaria (BOE,
2007a; 2007b) que en breve se empezarán a implantar en los estudios universitarios, donde
podemos encontrar una serie de competencias relacionadas con la creatividad en las distintas
materias que conforman los citados planes.

Artola y otros (2004) indican que los instrumentos que más se ha utilizado, para medir
la creatividad sean entre otros los test de: Guilford (1950), Wallach y Kogan (1965), Getzels-
Jackson (1962), Torrance (1966), TAEC de De la Torre (1996), CREA de Corbalan, y otros
(2003), etc. (Posiblemente los dos últimos sean los más utilizados en España).
Hay que señalar que si bien todos ellos han servido para fundamentar esta temática, en
el ámbito de la educación musical escolar no hemos encontramos un instrumento concreto
capaz de clarificar la relación creatividad – expresión musical, de ahí que el objetivo
principal de este trabajo se centre en determinar cuales son los índices o rasgos que debemos
tener en cuenta cuando queramos medir la creatividad en la experiencia escolar, con respecto
a la educación musical.

2. La Creatividad

Son muchas las definiciones que se ha dado al término, y mucho lo que se ha escrito
para su fundamentación. En un intento reunificar las diferentes teorías y centrar nuestro
análisis en la relación “creatividad - expresión musical”, hacemos referencia a: personalidad,
proceso, producto y ambiente.

 Personalidad

Las teorías de creatividad que se centran en la persona hacen referencia a dos aspectos
básicos: los cognitivos y los motivacionales.

Para Davis y Scott (1980) la personalidad creativa se identifica con:

1. El saber que pose esa creatividad


2. La originalidad
3. La independencia
4. La asunción de riesgos
5. La energía personal
6. La curiosidad.
7. El humor
8. La atracción por la novedad y la complejidad
9. El sentido artístico
10. La apertura de mente
11. La necesidad de estar solo
12. Una percepción más desarrollada.

Böhm (2002) considera creativa a la persona que aprovecha las ocasiones o


situaciones novedosas para trasformar o hacer más flexible su pensamiento; aquella que
procura buscar soluciones con una actitud indagadora, que es persistente en su hacer; admite
el error y reflexiona sobre él, lo utiliza y lo transforma. En esta línea, se es creativo cuando se
considera fundamental descubrir y crear algo nuevo, que sea completo, armonioso, hermoso,
en definitiva que tenga orden, estructura, armonía y totalidad, elementos que constituye la
acción creativa.

A modo de resumen se presenta el siguiente esquema:

Esquema 2. Componentes de la personalidad creativa

 Proceso

Son muchos los autores que tratan el proceso creativo. Para Wallas (1926) son cuatro
las fases a tener en cuenta:

1. PREPARACIÓN. Inmersión consciente o inconsciente en cuestiones de un problema.


2. INCUBACIÓN. Las ideas se agitan bajo el umbral de la consciencia.
3. ILUMINACIÓN. La solución se presenta de manera súbita e inesperadamente.
4. VERIFICACIÓN. Dos subfases:
1. Evaluación. Decidir si la idea es valiosa y merece nuestra atención.
2. Elaboración. Desarrollo y pulido de la idea.

 Producto

Las personas creativas deben manifestar producciones creativas. Estas producciones


creativas han de cumplir una serie de aspectos:

• Novedad: la respuesta debe ser única, inusual, rara e infrecuente.


• Efectividad: debe ser verdad y útil.
• Comunicación: ha de ser evaluado por los expertos de ese ámbito.

 Ambiente

El entorno estimula y activa la aparición y desarrollo de las potencialidades del


individuo. Las variables del ambiente que intervienen en la creatividad en referencia a:

• Determinados acontecimientos de tipo económico, político y social (“Variables


externas”)
• La comunidad de personas que comparten formas de pensar y actuar, aprenden unos
de otros (“implica un cambio en la cultura”).
• Ser considerado creativo supone valorarse desde el punto de vista social.

Lo importante en el tema que nos ocupa es desarrollar el espíritu creativo recogiendo


los aspectos cognitivos y los emocionales.

3. La Creatividad Musical y la escuela

La música se compone de sonidos, y quien hace música elige determinados sonidos,


los selecciona según sus características relativas a la altura, intensidad, duración y timbre.
Conocer la música a partir de la actividad creadora significa “hacer algo con los sonidos”,
aprender a escuchar, memorizar (recordar sonidos), intentar anotarlos (escribirlos), disfrutar
con la experiencia musical etc. Tanto la memoria como la imaginación son muy importantes
para el proceso de elaboración (Bernal, 2003)

En la experiencia musical es difícil separar los significados relativos a imitación,


improvisación y creación, están muy relacionados entre sí.
Improvisación o creación musical inmediata, “sobre el terreno”, es una técnica de
composición que utilizan los compositores en su proceso de creación. La improvisación
permite imitar, reproducir, copiar, interpretar ideas musicales existentes, etc., y es creativa
cuando el proceso de exploración, búsqueda e investigación sonora culmina con la invención
y la creación musical. Este proceso puede llevarse a cabo a través de dos tipos de estímulos,
los musicales o específicos, en relación con los elementos de la música: sonido, ritmo,
melodía, armonía, forma, etc., y los extramusicales o generales. El improvisador musical
puede utilizar los materiales sonoros y musicales que extrae de su medio ambiente, o bien de
su caudal musical interiorizado.

Se crea música cuando se exterioriza un pensamiento utilizando ideas musicales que


han sido desarrolladas, transformadas, ampliadas, etc., fruto de nuestra cultura, gustos,
sentimientos, o tomadas del medio ambiente. En esta línea, la música necesita su propia
inteligencia, pero además según el aspecto al que se refiera (percepción, interpretación,
creación...) se apreciaran las otras inteligencias (cinético – corporal, interpersonal, espacial,
cinegética...).

Esquema 3. Componentes de la música

En la escuela, improvisar en música tiene un sentido mucho más amplio, significa


jugar con los sonidos, explorar la voz, los objetos sonoros, los instrumentos musicales, poner
a “trabajar” el oído, la imaginación, la memoria, para desarrollar la sensibilidad y el gusto por
la experiencia musical. Se trata de un juego, de una actividad que conduce a la persona a una
constante retroalimentación musical (feedback) (Bernal, 2006)

Seguramente cuanto más relacionados estemos con la escritura y el vocabulario


musical, mejor llegaremos a comprender la música, pero ese conocimiento no es esencial para
que la música nos impacte. El impacto lo provoca el sonido, por ello lo realmente importante
es que los niños investiguen con el sonido y su producción (sonido - silencio) y considerar
aquí el comienzo del “saber musical”.

Hacer música en la escuela es disfrutar, explorar, descubrir, expresar sentimientos,


subordinar las destrezas lecto – escritoras a la improvisación y al desarrollo de la fantasía
musical. Improvisar con la música, ha de ser entendido como un “contenido procedimental”,
una manera de desarrollar la creatividad y la sensibilización a la música (posteriormente su
comprensión), y hay que concederle la importancia que tiene, y dedicarle el tiempo suficiente
dentro de la actividad musical.

Las personas, y sobre todo los niños son inventores, improvisadores, creadores
musicales, y es necesario estimular su autoexpresión utilizando el sonido como medio de
expresión. De esta manera el profesor se convierte en una especie de “director musical” que
estimula, facilita, ayuda, aconseja y orienta el proceso (Swanwick, 1991).

La experiencia musical escolar se puede resumir en: escuchar, moverse, cantar, tocar
instrumentos y crear música, siendo la escucha la base fundamental.

Esquema 4. Componentes de la expresión musical creativa

Como hemos indicando, la creatividad es un constructo que está formado por multitud
de aspectos o componentes que la caracterizan y que están continuamente interactuando. En el
siguiente gráfico recogemos aquellos rasgos que van a medir la creatividad en la educación
musical escolar:
Esquema 5. Componentes de la educación musical escolar

La improvisación bien guiada y estructurada puede convertirse en una estrategia muy


importante del proceso de enseñanza – aprendizaje musical, es el procedimiento para llegar a
comprender como funciona la música.

4. Elaboración de un cuestionario para medir la creatividad musical escolar

Llegados a este momento, y una vez detectados los distintos aspectos a medir en la
valoración de la creatividad, y de la creatividad musical escolar, pasamos a presentar una serie
de orientaciones que pueden servir de guía para elaborar un cuestionario que mida estas
cuestiones.
El cuestionario es el instrumento más utilizado para la obtención de datos (Rodríguez,
2005), consistente en una serie de preguntas acerca de una determinada cuestión sobre la que
se desea investigar (Del Rincón, Arnal, Latorre y Sans, 1995).
En primer lugar debemos delimitar el objetivo principal del cuestionario y
posteriormente detallar las áreas específicas que abarcan todo el contenido, por ejemplo en
nuestro caso sería la creatividad en la educación musical escolar (objetivo general) y
cuestiones relacionadas con la personalidad, el proceso, el producto y el ambiente (áreas
específicas del estudio).
En el proceso de construcción de un cuestionario se debe partir de fuentes de
información relevantes sobre el tema (documentos, entrevistas, reuniones, observaciones, etc.)
(Del Rincón y otros, 1995).
Previo a todas las preguntas sobre la creatividad, como es nuestro caso, debemos
incluir una serie de ítems referentes a los datos de identificación (clave del cuestionario,
fecha, entrevistados,…) además de preguntas sobre la clasificación de los sujetos encuestados
(sexo, edad, nivel educativo,…) siempre ajustándolas a la finalidad de la investigación o
estudio.
En referencia a las preguntas sobre nuestro objeto de estudio debemos tener en cuenta
que esta es la fase más importante en la elaboración del cuestionario. Estas preguntas pueden
ser de distintos tipos (según la respuesta y según la función de la pregunta). En los siguientes
esquemas se ejemplifica estas cuestiones:

Esquema 6. Tipo de preguntas según la modalidad (adaptado de Del Rincón y otros, 1995)
Esquema 7. Tipo de preguntas según su función (adaptado de Cabrera y Espín, 1986 y citado por Del
Rincón y otros, 1995)

Una vez que tenemos todas las preguntas de nuestro cuestionario elaboradas, se
precisa realizar una revisión de su formulación. Para ello existen muchas guías, en las que
se indican algunas de las cuestiones que tenemos que tener en cuenta con cada uno de
nuestros ítems o preguntas. Estas cuestiones hacen referencia a: el contenido de las
preguntas, la redacción de las mismas, la forma de respuesta y la ubicación de la pregunta
en la secuencia.
Además hay que tener en cuenta otra serie de aspectos, no menos importantes, en la
elaboración de un cuestionario: Diseño, redacción, distribución de preguntas, utilización
de páginas de colores para cada apartado, el tipo de respuesta (una cruz antes que tener
que redondear una respuesta precodificada), instrucciones claras y sin ambigüedades,
motivar al informante para que finalice el cuestionario (preguntas iniciales sencillas y con
alto interés y que animen a la participación, preguntas centrales más difíciles y preguntas
finales de gran interés para animar a terminar el cuestionario),… (Cohen y Manion, 2002).
En función de todo lo anteriormente expuesto podemos presentar un esbozo de cómo
podría quedar nuestro cuestionario de valoración de la creatividad en la educación
musical:

Esquema 8. Bloques de contenido para un cuestionario para medir la Creatividad en Educación


Musical

BIBLIOGRAFIA

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BOE (2007a): ORDEN ECI/3854/2007, de 27 de Diciembre, por la que se establecen los
requisitos para la verificación de los títulos universitarios oficiales que habiliten para
el ejercicio de la profesión de Maestro en Educación Infantil, Boletín Oficial del
Estado nº 312 de 29 de Septiembre de 2007 (pp.53737 -53738)
BOE (2007b): ORDEN ECI/3854/2007, de 27 de Diciembre, por la que se establecen los
requisitos para la verificación de los títulos universitarios oficiales que habiliten para
el ejercicio de la profesión de Maestro en Educación Primaria, Boletín Oficial del
Estado nº 312 de 29 de Septiembre de 2007 (pp.53747 -53750)
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Harmondsworth, U.K: Penguin (trabajo original publicado en 1926)
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