Documenti di Didattica
Documenti di Professioni
Documenti di Cultura
net/publication/326981401
CITATIONS READS
0 153
1 author:
Cristian Guerra
University of Chile
47 PUBLICATIONS 16 CITATIONS
SEE PROFILE
Some of the authors of this publication are also working on these related projects:
La institucionalización de la modernidad de la música clásica como práctica social entre 1928 y 1973 en el marco de la Universidad de Chile View project
All content following this page was uploaded by Cristian Guerra on 12 August 2018.
ISBN 978-950-99271-4-8
CDD 780.7
aamusicologia.com.ar
La Asociación Argentina de Musicología es una asociación civil sin fines de
lucro, fundada el 05/10/1985 y constituida legalmente el 19/12/1986. Obtuvo su
Personería Jurídica en abril de 1988 por Resolución 268/88 de la Inspección
General de Justicia. Su número de identificación es 360.1.09
Dirección postal: México 564. 1er Piso. (CP 1097).
Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Argentina.
E-mail: info@aamusicologia.com.ar
Himnos Evangélicos de J. R. Naghten (Buenos Aires, 1881):
Comienzos y proyecciones en la actividad musical de iglesias
metodistas en Argentina y en Chile
Cristián Leonardo Guerra Rojas
Universidad de Chile
Pontificia Universidad Católica de Chile
*
Resumen
Himnos Evangélicos (Buenos Aires: Iglesia Metodista, 1881) de J. R. Naghten es, hasta donde
sabemos, el primer himnario evangélico en castellano con música publicado en Argentina y en
el Cono Sur de Sudamérica. En esta ponencia realizo una primera aproximación al estudio de
este himnario en términos de sus contenidos, del discurso que presenta su prefacio y de su
proyección en las décadas siguientes. Para esto tomo como referencia teórica y conceptual los
estudios de autores como Cecil McConnell y David Rumsey respecto a elementos de himnodia
musical evangélica, así como hallazgos y reflexiones generados por los trabajos de investigación
que he realizado en este ámbito en los últimos años. De este modo identifico dos himnarios de
letra que fueron sus antecedentes: Himnos Sagrados (1871) de Horacio Mendizábal e Himnos
Evangélicos (1876) de Henry G. Jackson. Asimismo presento una pieza particular, "Alza tu canto
oh lengua mía", que puede ser uno de los primeros himnos evangélicos escritos en Sudamérica,
tanto su letra como su música, y que aún se conserva en algunos himnarios vigentes.
Himnos Evangélicos (Buenos Aires: Iglesia Metodista, 1881) by J. R. Naghten is, to our
knowledge, the first evangelical Spanish hymnal with tunes published in Argentina and the
Southern Cone of South America. In this paper I make a first approach to the study of this
hymnal in terms of its content, the discourse presenting his preface and its projection in the
following decades. For this I take as theoretical and conceptual reference studies from authors
like Cecil McConnell and David Rumsey regarding elements of gospel music hymnody, as well as
findings and reflections generated by the research I have done in this area in recent years. Thus I
identify two hymnals that preceded this one: Horacio Mendizabal's Himnos Sagrados (1871) and
Henry G. Jackson's Himnos Evangélicos (1876). I also present a particular piece, "Alza tu canto oh
lengua mía [Lift up your song O my tongue]" which can be one of the first evangelical hymns
written in South America, both lyrics and music, and that is still preserved in some current
hymnals.
Keywords: South American evangelical hymnals – Horacio Mendizábal – Henry Godden Jackson
– John Robert Naghten
Himnos Evangélicos de J. R. Naghten (Buenos Aires, 1881) Cristián Leonardo Guerra Rojas
de los himnarios que se han conservado de esa época solo contienen la letra de
los cantos. Pese a esto he logrado identificar relaciones relevantes entre las
1
Cristián Guerra Rojas: “La música en los inicios de los cultos cristianos no católicos en Chile. El
caso de la Union Church (Iglesia Unión) de Valparaíso, 1845-1890”, en Luis Merino Montero et
al.: Prácticas sociales de la música en Chile, 1810-1855. El advenimiento de la modernidad en la
cultura del país (Santiago: RIL, 2013), pp. 167-198.
2
Cristián Guerra Rojas: "Rostro divino ensangrentado: Teoría y praxis en la actividad musical de
iglesias protestantes en Hispanoamérica en el siglo XIX a partir del estudio de sus himnarios", en
Ana María Olivencia y otros (eds.): Hacia la superación de la disyuntiva teoría-praxis en la música.
Prácticas y (etno)estéticas musicales. Actas de la XXI Conferencia de la AAM y XVII Jornadas
Argentinas de Musicología (Buenos Aires: Asociación Argentina de Musicología e Instituto
Nacional de Musicología Carlos Vega, 2015), pp. 264-279.
3
Agradezco la gestión y colaboración del Revdo. Carlos López, Obispo de la IERE, quien me
permitió acceder a ese archivo y conocer tanto esta como otras fuentes que ameritan futuros
estudios.
repertorios que se presentan en esta fuente, en las ediciones que se hicieron del
himnario de Jackson en Chile en las décadas de 1890 y 1900, así como en la
1910.
En esta ponencia y dentro del marco del proyecto "Consolidación de la
4
Información disponible aquí [última consulta: 1/12/2016].
junto con su esposa Alice Clarke, estableciéndose en esta ciudad hasta 1878.7
Jackson ejerció como pastor de la Primera Iglesia Metodista Episcopal de
firmado por “H. M.” Esta colección aparece con dos ciudades como lugar de
impresión o edición: Nueva York y Buenos Aires. En el primer caso se especifica
5
Bajo tres condiciones: no hacer proselitismo entre los hispanohablantes nativos, congregación
exclusivamente extranjera y cultos en inglés.
6
Andrés Gattinoni: “John Dempster, primer misionero metodista en la Argentina”, en Grupo
Interdisciplinario de Estudios sobre el Pluralismo Religioso en Argentina [blog], disponible aquí
[última consulta: 1/12/2016].
7
Antecedentes biográficos en “H. G. Jackson”, hymnary.org [sitio web], disponible aquí;
“Obituary. Rev. Henry Godden Jackson”, disponible aquí; Towner Blackstock: “Lambda Chapter at
Indiana Asbury”, The Archives of Phi Gamma Delta [sitio web] (Lexington: Phi Gamma Delta
Fraternity, 2006), disponible aquí [últimas consultas: 1/12/2016].
8
Andrés Gattinoni: “Primera Iglesia Evangélica Metodista Argentina”, en Grupo Interdisciplinario
de Estudios sobre el Pluralismo Religioso en Argentina [blog], disponible aquí [última consulta:
1/12/2016].
que suponer que se imprimió en Nueva York para que se difundiera en Buenos
Aires, lo cual se confirma con la información que aparece en una nota impresa y
segunda edición de esta obra, que remitan sus aportes a tres misioneros
establecidos respectivamente en Buenos Aires, en Rosario y en Montevideo. El
sumamos que la advertencia que abre este himnario indica que se trata de un
encargo “para la iglesia evangélica de esta ciudad”, la que asimismo debe
Argentina fechado en 1913 confirma esta identidad. Sin duda se trata del
escritor y poeta afroargentino del mismo nombre, nacido en 1847 y fallecido en
1871, miembro de una familia de artistas que ya había escritos dos libros
previos con poemas de su autoría, Primeros versos (1865) y Horas de meditación
9
Agradezco a Norberto Pablo Cirio por el acceso tanto a una copia digital de este ejemplar
como a información concerniente al escritor Horacio Mendizábal.
10
Estudios importantes de himnodia protestante en castellano identifican erróneamente a “H.
M.” con el pastor español Ángel Herreros de Mora (1815-1876). Es el caso de Sandra Myers
Brown: Historia, arte y alabanza. La música protestante en la España del siglo XIX (Madrid:
Consejo Evangélico de Madrid, 2000), pp. 91-98; así también Josué Aguiar Rodríguez: “Suenen
dulces himnos”. Orígenes de los himnarios evangélicos en España [tesis doctoral] (Las Palmas de
Gran Canaria: Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, 2016), pp. 190-192, 301-308. Creo
que la fuente de este error está en Cecil McConnell: Historia del himno en castellano (El Paso,
Texas: Casa Bautista de Publicaciones, 1963), p. 118. Espero profundizar más en esto en un
estudio futuro.
ese mismo orden de la colección Himnos para uso de las iglesias evangélicas de
Chile publicada en Valparaíso en 1869, seguramente una decisión tomada por
estudio aparte, limitándome aquí a señalar que nunca hubo, hasta donde
sabemos, una segunda edición de Himnos Sagrados. En vez de esto, H. G.
ellas fueron escritas por Jackson, algunas son traducciones, paráfrasis y otras
son realmente letras originales. Entre las piezas restantes, 24 habían aparecido
en Himnos Sagrados, y solo cuatro (N°75 “Un ancla tenemos”, N°82 “Creyente,
nada”, N°85 “Siempre hablamos del mundo dichoso”, N°93 “Cual mirra
11
Más detalles acerca de este himnario chileno en Cristián Guerra Rojas: "La música en los
inicios de los cultos cristianos no católicos en Chile: Los primeros himnarios evangélicos
publicados en Chile (1861-1895)", Neuma, 8(1) (2015), pp. 10-41.
12
McConnell: Historia del himno en castellano, pp. 128-129. Este autor desconoce la existencia
de Himnos Sagrados.
13
Entre ellas: Colección Española, Colección Mexicana, Colección Portuguesa, Estrella de Belén,
A M Hudson, “R” y “HGJ”. Esta última sigla corresponde a “Henry Godden Jackson”, mientras “R”
se refiere a los himnarios publicados por William Harris Rule para las iglesias evangélicas en
España.
temático.15
Invocación: n°1-6
Alabanza: n°7-22
Exhortación: n°23-31
Petición: n°32-51
Salvación por la fe en Cristo: n°52-75
La vida cristiana: n°76-83
Anticipación del Cielo: n°84-92
El nombre de Jesús: n°93-96
El Reino de Cristo: n°97
La ascensión: n°98
Cristo triunfante: n°99
Para concluir el servicio: n°100
Doxología: n°101
14
En el “Índice de primeras líneas” de Himnos Evangélicos a estos cuatro himnos se les atribuye
la procedencia “RH, aut., HM, trad”, la misma que aparece en Himnos Sagrados y que se repite
en las ediciones chilenas del himnario de Jackson. “HM, trad” significa “Horacio Mendizábal,
traductor”, mientras “RH, aut.” significa “Richard Holden, autor”. Este último fue un misionero
escocés que trabajó en Brasil y escribió (o posiblemente tradujo en algunos casos) varios
himnos en portugués que se publicaron en Salmos e Hinos, primer himnario evangélico
brasileño editado por primera vez en 1861 y que seguramente es la “Colección Portuguesa”
mencionada en Himnos Evangélicos. Entre ellos están estos cuatro que tradujo Mendizábal. Esto
desmiente la identificación de “RH” con Frances Ridley Havergal que se plantea en Myers:
Historia, arte y alabanza, pp. 95-98. Información acerca de Holden aparece en Henriqueta Rosa
Fernandes Braga: Música sacra evangélica no Brasil (Rio de Janeiro: Librería Kosmos, 1961), pp.
209-211, 324.
15
Lista completa de los himnos con datos de sus fuentes de procedencia y tonadas en Anexo.
compartida por Jeremy Howat en el sitio web British Settlers in Argentina and
Uruguay.16 De acuerdo a estos datos, Naghten nació en 1847, al parecer en
tanto Naghten tenía la formación y el oficio necesarios para abordar una tarea
como esta, a lo que se suma su cercanía con Jackson.
seguramente por Naghten, 101 himnos con sus respectivas melodías o tonadas
16
Jeremy Howat: British Settlers in Argentina and Uruguay [sitio web], disponible aquí [última
consulta: 1/12/2016]. Howat aquí ha compartido información encontrada en archivos
parroquiales de bautismos, matrimonios y defunciones en las iglesias anglicanas de St. John y
de St. Andrew, así como de la iglesia metodista de Buenos Aires.
17
Agnes Jane (10/11/1875-7/2/1877), Maud Dottie (23/6/1877), Adela Elizabeth (13/8/1880),
Mary (ca9/1881-26/1/1882), Minnie (24/9/1882), William Charles (14/10/1883), Frederick Murray
(12/1884-11/1/1885).
18
Tonadas hímnicas (hymn-tunes), piezas musicales escritas frecuentemente a cuatro voces en
textura homofónica, con la melodía principal en la voz de soprano y que cumplen dos rasgos en
relación con la letra: Cada una tiene un nombre propio y una estructura métrica, y cada una
puede asociarse con distintas letras según la correspondencia métrica.
19
Thomas B. Wood llegó a Argentina en 1870 y se radicó en Rosario, donde inició servicios en
castellano en abril de 1871. Su esposa Ellen Dow (1840-1926) era músico. Ejerció como cónsul
de Estados Unidos en Rosario y como catedrático de física y astronomía en el Colegio Nacional.
En 1877 se trasladó a Montevideo y después asumió la superintendencia de la misión en
reemplazo de Jackson, desde 1878 hasta 1887. Entabló amistad con Domingo Faustino
Sarmiento y se involucró con la educación en Argentina, Uruguay y posteriormente Perú y
Ecuador, donde contribuyó al establecimiento de las escuelas normales. Información sobre
Wood en Wade Crawford Barclay: History of Methodist Missions, vol. 3 (Nueva York: The Board of
Missions of the Methodist Church, 1957), pp. 769-787. Agradezco a Andrés Gattinoni por la
sugerencia de esta fuente.
modelos.
- Referente: El “canto popular” en inglés o alemán, en especial himnos religiosos
al formato de la góspel song o góspel hymn, un tipo de canto religioso que fue
popularizado en Estados Unidos y otros países de habla inglesa dentro del
20
David Rumsey: “The Three Doctrines of the 1933 Methodist Hymn Book”, en Arvind Sharma
(ed.): The Sum of Our Choices: Essays in Honour of Eric J. Sharpe (Atlanta: Scholars Press, 1996),
disponible aquí [última consulta: 1/12/2016].
cambiados entre sí, dando un gran número de nuevas combinaciones. Así el primer
himno podrá cantarse con la melodía del N°3, 30, 31 o 74 y cualquiera de estas
melodías podrá cantarse con la letra de cualquiera de los himnos correspondientes.
Para facilitar esto se ha hecho un Índice Métrico de los Versos, en el cual se verá
fácilmente todos los cantos que tienen la misma medida rítmica, y cuya letra y música
admite el entrecambio referido.
todos de un mérito probado. Algunos han estado en uso popular por siglos.
Otros son más modernos pero ya han sido el deleite de millones”.
21
Para ello ha sido de gran utilidad la información y herramientas de búsqueda en el sitio
www.hymnary.org. Allí se puede hacer el rastreo del origen y fuentes de varias tonadas, para
después ubicar la copia digital de varias de esas fuentes en sitios como www.archive.org.
22
Solo aquí he hallado tonadas como aquellas de los himnos N°10 (“Al santo nombre de Jesús”),
N°66 (“No hay otro mediador”) y N°98 (“Jesús bendito, ya no más”).
23
Solo aquí he hallado tonadas como aquellas de los himnos N°11 (“Con los ojos de la fe”) y
N°12 (“Cantad alegres al Señor”).
24
Solo aquí he hallado la tonada del himno N°38 (“Por la vía terrenal”).
25
Solo aquí he hallado la tonada del himno N°14 (“Todos juntos levantemos”).
26
Solo aquí he hallado la tonada del himno N°30 (“Tenebroso mar undoso”). Esta fuente se halla
en el archivo de la catedral de la IERE en Madrid.
27
El único caso de una tonada usada “por siglos” es Luther’s Hymn (N°40, “Ten compasión de
mí, Señor”) atribuida a Lutero.
difusión de este repertorio. En este tenor resulta interesante notar que los
cuatro himnos conservados de Himnos Sagrados que fueron traducidos del
esos himnos con las tonadas que consignó en 1881, o bien a Naghten no le
satisficieron las tonadas de Musica sacra… y optó por buscar otras para su
compilación.
En cuanto a las seis tonadas sin antecedentes en otros himnarios
canto, oh lengua mía” es el único himno de esos seis que no aparece ni en este
ni en ningún otro himnario anterior publicado en España a cuyos ejemplares o
28
Aguiar: “Suenen dulces himnos”…, pp. 348-351.
29
En Himnos Evangélicos este verso se lee “Llénese el alma con alegría”.
30
Esta estrofa está omitida tanto en Himnos Evangélicos como en otros himnarios posteriores. Y
en verdad esta estrofa es algo enigmática en su redacción, especialmente los últimos dos
versos, ¿será que este poema no fue concebido originalmente como himno religioso, sino como
un poema de consolación por algún despecho amoroso? Espero aclarar esto en el futuro.
otras ediciones en los años sucesivos, todas de letra, de las cuales he tenido
acceso a aquellas de 1895, 1898 y 1912. En las ediciones de 1898 y de 1912 se
sugieren otras opciones (N°1, 3, 5, 7, 8, 9, 14, 16, 19, 20, 22, 31, 45, 46, 47, 49, 55,
58, 71, 73, 75, 83, 84, 94, 98) y en diecisiete se indica directamente una o más
tonadas diferentes (N°6, 10, 11, 12, 13, 21, 30, 32, 37, 39, 41, 42, 48, 57, 63, 68,
99). Para el caso del himno N°91 “Alza tu canto, oh lengua mía” se respeta la
31
Más detalles acerca de las ediciones chilenas del himnario de Jackson en Guerra: "La música
en los inicios…”, pp. 10-41.
“Cual mirra fragante” y “Alza tu canto oh lengua mía”, himnos que, no obstante,
se han conservado en otros himnarios evangélicos actualmente vigentes,
aunque asociados con tonadas diferentes. Respecto a las tonadas del himnario
de 1881, Hoover mantuvo en general aquellas conservadas por la colección de
letra de 1895, desechó otras (N°18, 56, 59) y recuperó otras (N°10, 30, 48). Pocos
años después Hoover fue una figura clave en el cisma de las iglesias metodistas
la base de los principales himnarios pentecostales, de tal modo que por medio
de la transmisión escrita pero especialmente de la tradición oral, buena parte de
formar parte de las prácticas musicales en las iglesias pentecostales hasta hoy.32
5. Tareas pendientes
En primer lugar, queda pendiente la investigación acerca de las
32
Más detalles acerca de este trabajo de Hoover en Cristián Guerra Rojas: La música en el
movimiento pentecostal de Chile (1909-1936): El aporte de Willis Collins Hoover y de Genaro Ríos
Campos (Santiago de Chile: Corporación Sendas, 2009), disponible aquí [última consulta
1/12/2016].
Quizás Naghten pudo haber compuesto otras tonadas entre ellas, o bien las
arregló, pero se debiera averiguar cuáles fueron sus fuentes.
podrían haberse usado para cantar estos himnos y por qué la mayor parte de
estos fue descartada del himnario de Jackson de 1876 y, en consecuencia, de su
Cristián L. Guerra Rojas es musicólogo, Doctor en Filosofía con mención en Estética y Teoría
del Arte, Universidad de Chile (2008), Magíster en Artes mención Musicología, U. de Chile
(2002), Licenciado en Música, U. de Chile (1990) y Profesor Especializado en Historia de la
Música y Análisis, U. de Chile (1994). Es académico del Departamento de Música y Sonología de
la U. de Chile desde 1993 y además se desempeña como docente en el Instituto de Música de la
Pontificia Universidad Católica de Chile desde 2015. Como investigador ha participado en
proyectos FONDECYT, CONICYT y Fondo de la Música, y ha publicado diversos escritos en
revistas nacionales e internacionales. Actualmente es Subdirector de la Revista Musical Chilena.