Sei sulla pagina 1di 15

Que es un trastorno

Un trastorno es una perturbación o desorden que altera el funcionamiento normal


de una persona o de una situación como, por ejemplo: "Para evitar cualquier tipo
de trastorno en el viaje, se recomienda preparar las maletas con anticipación".
En psicología, los trastornos de personalidad son aquellas afecciones mentales,
comportamentales, emocionales y de pensamiento que interfieren con el
desempeño social, especialmente en el ámbito de las relaciones interpersonales.

Los trastornos mentales o psicológicos pueden ser tanto genéticos, biológicos o


por anomalías cerebrales.

Tipos
Los trastornos mentales que afectan a más personas pero, ¿cuáles son los los
trastornos más comunes? ¿Cuáles son aquellos trastornos que afectan a una
mayor cantidad de personas?
A continuación os presento una breve explicación de los trastornos mentales
más frecuentes.

1. Trastornos de Ansiedad

La ansiedad es una reacción normal de las personas ante situaciones de estrés


e incertidumbre. Ahora bien, un trastorno de ansiedad se diagnostica cuando
varios síntomas ansiosos provocan angustia o algún grado de deterioro
funcional en la vida del individuo que lo sufre. A una persona con un trastorno de
ansiedad le puede resultar difícil funcionar en distintas áreas de su vida:
relaciones sociales y familiares, el trabajo, la escuela, etc. Existen distintos tipos
de trastornos de ansiedad:

1.1. Ataque de pánico

Un ataque de pánico es la aparición intensa y repentina de temor o terror, a


menudo asociada a sentimientos de muerte inminente. Los síntomas incluyen
falta de aire, palpitaciones, dolor en el pecho y malestar.

1.2. Trastornos fóbicos

Muchas personas admiten que sienten miedo a las serpientes o las arañas, pero
pueden tolerar ese miedo. Los individuos que padecen una fobia, por el contrario,
no son capaces de tolerar ese miedo. Éstos experimentan un miedo irracional
cuando se encuentran frente a al estímulo fóbico, ya sea un objeto, un animal o
una situación, y esto suele acabar en un comportamiento de evitación.
Hay distintos estímulos fóbicos que desencadenan este miedo irracional: volar
con un avión, conducir un vehículo, los ascensores, los payasos, los dentistas,
la sangre, las tormentas, etc. Algunos de los más habituales son:
1.2.1. Fobia Social

La fobia social es un trastorno de ansiedad muy habitual, y no debe confundirse


con la timidez. Es un fuerte miedo irracional hacia situaciones de interacción
social, pues la persona que padece este trastorno siente ansiedad extrema al
ser juzgado por otros, al ser el centro de atención, por la idea de ser criticado o
humillado por otros individuos e, incluso, al hablar por teléfono con otras
personas. Por tanto, es incapaz de realizar presentaciones en público, comer en
restaurantes o delante de alguien, ir a eventos sociales, conocer gente nueva...

1.2.2. Agorafobia

La agorafobia, de manera habitual, suele definirse miedo irracional a los


espacios abiertos, como las grandes avenidas, los parques o los entornos
naturales. Pero esta definición no es del todo cierta. El estímulo fóbico no son
los parques o las grandes avenidas, sino la situación de tener un ataque de
ansiedad en estos lugares, donde puede ser difícil o vergonzoso escapar, o
donde no es posible el recibir ayuda.

1.3. Trastorno por Estrés Postraumático (TEPT)

El Trastorno por Estrés Postraumático se manifiesta cuando la persona ha sido


expuesta a una situación traumática que le ha provocado al individuo una
experiencia psicológica estresante, lo que puede ser incapacitante. Los síntomas
incluyen: pesadillas, sentimientos de ira, irritabilidad o fatiga emocional,
desapego hacia los demás, etc., cuando la persona revive el hecho traumático.
De manera frecuente, la persona intentará evitar las situaciones o actividades
que le traen recuerdos del evento que provocó el trauma.

1.4. Trastorno Obsesivo-Compulsivo (TOC)

El Trastorno Obsesivo-Compulsivo (TOC) es una condición en la cual el


individuo experimenta pensamientos, ideas o imágenes intrusivas. Es un
trastorno de la ansiedad, y por lo tanto se caracteriza por estar asociado a
sensación de temor, angustia y estrés continuado de tal forma que supone un
problema para el día a día y repercute negativamente sobre la calidad de vida
de la persona.
Los pensamientos que causan malestar (obsesiones), provocan que la persona
realice ciertos rituales o acciones (compulsiones) para reducir la ansiedad y
sentirse mejor.
Las obsesiones incluyen: miedo a contaminarse, sentimientos de duda (por
ejemplo, ¿habré apagado el gas?), pensamientos de hacer daño a alguien,
pensamientos que van en contra de las creencias religiosas de la persona, entre
otros. Las compulsiones incluyen: comprobaciones, contar, lavarse, organizar
repetidamente las cosas, etcétera.
1.5. Trastorno de Ansiedad Generalizada

Preocuparse de vez en cuando es un comportamiento normal, pero cuando


preocuparse y sentir ansiedad de manera continuada afecta e interfiere en la
normalidad de la vida de un individuo es posible que esa persona sufra
el Trastorno de Ansiedad Generalizada.
Por tanto, el trastorno se caracteriza por preocupación y ansiedad crónica. Es
como si siempre hubiera algo de lo que preocuparse: problemas en los estudios,
el trabajo, o la relación de pareja, tener un accidente al salir de casa, etcétera.
Algunos de los síntomas son: náusea, fatiga, tensión muscular, problemas de
concentración, problemas de sueño, y más.

2. Trastornos del Estado de Ánimo

Existen distintos tipos de trastornos del estado de ánimo o trastornos afectivos y,


como su nombre indica, su principal característica subyacente sería una
alteración del estado de ánimo del individuo. Los más habituales son los
siguientes:

2.1. Trastorno Bipolar

El trastorno bipolar puede afectar a cómo se siente una persona, piensa y actúa.
Se caracteriza por cambios exagerados en el estado de ánimo, desde manía a
la depresión mayor. Por tanto, va más allá de los simples cambios de humor, es
decir, la inestabilidad emocional: de hecho, afecta a muchos ámbitos de la vida,
y además de ser uno de los trastornos más comunes es frecuente que se dé
junto a la obesidad. Los ciclos del trastorno bipolar duran días, semanas o
meses, y perjudican seriamente al trabajo y las relaciones sociales de la persona
que lo sufre.
El trastorno bipolar raramente puede tratarse sin medicación, pues es necesario
estabilizar el estado de ánimo del paciente. Durante los episodios de manía, la
persona puede incluso dejar su trabajo, aumentar sus deudas, y sentirse lleno
de energía a pesar de dormir solamente dos horas al día. Durante los episodios
depresivos, la misma persona puede incluso no salir de la cama. Existen distintos
tipos de trastorno bipolar, y, además, existe una versión leve de este trastorno,
llamado ciclotimia.

2.2. Trastorno Depresivo

Muchas personas se sienten deprimidas en algún momento de sus vidas. Los


sentimientos de desaliento, frustración e incluso la desesperación, son normales
ante una decepción y pueden durar varios días antes de desaparecer de manera
gradual. Ahora bien, para algunas personas, estos sentimientos pueden durar
meses y años, provocando problemas serios en su día a día.
La depresión es una psicopatología seria y debilitante, y afecta a cómo un
individuo se siente, piensa y actúa. Puede provocar síntomas tanto físicos como
psicológicos. Por ejemplo: problemas de ingesta, problemas de sueño, malestar,
fatiga, etc.
Para saber más sobre los tipos de depresión puedes visitar nuestro artículo:

 “¿Existen varios tipos de depresión?”

3. Trastornos de la Conducta Alimentaria

Existen distintos tipos de trastornos de la alimentación. Los más comunes son


los que siguen:

3.1. Anorexia Nerviosa

La anorexia se caracteriza por una obsesión por controlar la cantidad de comida


que se consume. Uno de sus síntomas más característicos es la distorsión de la
imagen corporal. Las personas que sufren anorexia restringen la ingesta de
alimentos haciendo dieta, ayuno e incluso ejercicio físico excesivo. Casi no
comen, y lo poco que ingieren les provoca un intenso sentimiento de malestar.

3.2. Bulimia Nerviosa

La bulimia es un trastorno de la conducta alimentaria que se caracteriza


por pautas de alimentación anómalas, con episodios de ingesta masiva de
alimentos seguidos por maniobras que buscan eliminar esas calorías (inducirse
al vómito, consumir laxantes, etc.). Tras estos episodios, lo habitual es que el
sujeto se sienta triste, de mal humor y tenga sentimientos de autocompasión.
La bulimia nerviosa, además de ser uno de los trastornos más comunes, está
asociado a alteraciones en el cerebro. Entre ellas se encuentra la degradación
de la materia blanca (que es por donde pasan los gruesos conjuntos de axones
neuronales) en la corona radiata, que está relacionada entre otras cosas al
procesamiento de los sabores.

3.3. Trastorno por Atracón

El trastorno por atracón es un trastorno grave en el que el individuo que lo sufre


consume con frecuencia grandes cantidades de comida y siente que ha perdido
el control durante el atracón. Después de la sobreingesta, la angustia severa o
preocupación por el peso suele aparecer.

4. Trastornos psicóticos

Los trastornos psicóticos son psicopatologías graves en los que las personas
pierden el contacto con la realidad. Dos de los síntomas principales son delirios
y alucinaciones. Los delirios son falsas creencias, tales como la idea de que
alguien está siguiendo. Las alucinaciones son percepciones falsas, como
escuchar, ver o sentir algo que no existe.
A diferencia de los delirios, que son creencias erróneas de la realidad sobre un
hecho u objeto existente, es decir, una distorsión de un estímulo externo, las
alucinaciones son totalmente inventadas por la mente y no son producto de la
distorsión de ningún objeto presente, se percibe algo sin tener en cuenta los
estímulos externos. Por ejemplo, escuchar voces que salen de un enchufe. Los
trastornos psicóticos más comunes son:

4.1. Trastorno delirante

El trastorno delirante o paranoia es un trastorno psicótico caracterizado por una


o varias ideas delirantes. Es decir, que estas personas están totalmente
convencidas de cosas que no son ciertas. Por ejemplo, que alguien les persigue
para lastimarles.

4.2. Esquizofrenia

La esquizofrenia es otro trastorno psicótico, pero, en este caso, la persona sufre


alucinaciones y pensamientos perturbadores que le aísla de la actividad social.
La esquizofrenia es una patología muy seria, y a pesar de no existir cura, sí que
hay tratamientos efectivos para que los pacientes con esta alteración puedan
disfrutar de su vida.

5. Trastornos de personalidad

Un trastorno de personalidad es un patrón rígido y permanente en el


comportamiento de una persona que le genera malestar o dificultades en sus
relaciones y en su entorno. Los trastornos de la personalidad tienen su inicio en
la adolescencia o al principio de la vida adulta. Los más frecuentes son:

5.1. Trastorno Límite de la Personalidad (TLP)

El trastorno límite de la personalidad o borderline se caracteriza porque las


personas que lo sufren tienen una personalidad débil y cambiante, y dudan de
todo. Los momentos de calma pueden convertirse, al instante y sin previo aviso,
en momentos de ira, ansiedad o desesperación. Estos individuos viven sus
emociones al máximo, y las relaciones amorosas son intensas, pues suelen
idolatrar a la otra persona hasta el extremo.
Algunos de sus síntomas son: ira intensa e incapacidad de controlarla, esfuerzos
frenéticos por evitar el abandono, real o imaginario, alternancia entre extremos
de idealización y devaluación en las relaciones interpersonales, autoimagen
marcadamente inestable, y sentimientos crónicos de vacío.
5.2. Trastorno antisocial (TASP)

El individuo que sufre este trastorno (mal conocido con etiquetas


como psicopatía o sociopatía) se caracteriza por su tendencia a no relacionarse
en sociedad, evitando cualquier interacción. Los diferentes síntomas y conductas
que caracterizan el TASP incluyen: robos, agresividad, tendencia a la soledad,
violencia, mentiras… Además, las personas afectadas por el TASP tienden a ser
tímidas, depresivas y tienen ansiedad social. Este último punto se debe a su
temor a ser rechazadas. A pesar de ello, la terapia psicológica es muy efectiva a
la hora de manejar los inconvenientes del trastorno antisocial

¿Qué son los problemas de aprendizaje?

Los problemas de aprendizaje son trastornos que afectan la capacidad de


entender o usar el lenguaje hablado o escrito, hacer operaciones matemáticas,
coordinar los movimientos o dirigir la atención. Si bien los problemas de
aprendizaje se presentan en los niños muy pequeños, los trastornos no se suelen
reconocer hasta cuando el niño alcanza la edad escolar. Las investigaciones
demuestran que en los Estados Unidos entre el 8 y el 10 por ciento de los niños
menores de 18 años de edad tienen algún tipo de problema de aprendizaje.

¿Existe algún tratamiento?

El tratamiento más usual para los problemas de aprendizaje es la educación


especial. Educadores con capacitación especial pueden realizar una evaluación
educacional diagnóstica para valorar el potencial académico e intelectual del
niño y su nivel de desempeño académico. Una vez que la evaluación está
completa, el abordaje básico es enseñar las destrezas del aprendizaje sobre la
base de las capacidades y fortalezas del niño a la vez que se corrigen y
compensan las discapacidades y debilidades. También pueden participar otros
profesionales como los terapeutas del habla y el lenguaje. Algunos
medicamentos pueden ser eficaces y ayudar al niño a aprender a mejorar su
atención y concentración. También se pueden emplear psicoterapias.

¿Cuál es el pronóstico?

Los problemas de aprendizaje pueden durar toda la vida. En algunas personas


se pueden detectar varios problemas de aprendizaje superpuestos. Otras
personas pueden tener un problema de aprendizaje aislado que tenga poco
impacto en su vida.

¿Cuáles son algunos de los tipos más frecuentes de trastornos del aprendizaje?
Los trastornos del aprendizaje son trastornos que afectan la capacidad de las
personas de adquirir y de aplicar habilidades académicas, como leer y calcular.
Los trastornos del aprendizaje no son lo mismo que las discapacidades físicas o
mentales, y no reflejan la inteligencia de los niños. Por el contrario, los trastornos
del aprendizaje afectan la capacidad de los niños de completar tareas o de
aplicar ciertas competencias, en particular, en la escuela.
Los trastornos del aprendizaje más frecuentes comprenden los siguientes:
 Dislexia. La dislexia es un trastorno del aprendizaje que se caracteriza por la
dificultad para leer, deletrear y recordar palabras conocidas.
 Discalculia. La discalculia es un trastorno del aprendizaje relacionado con los
conceptos matemáticos. Los signos incluyen dificultad para resolver
problemas matemáticos, incluso sencillos, o para determinar la secuencia de
la información o de los hechos.
 Problemas de aprendizaje no verbal. Este trastorno del aprendizaje se
caracteriza por la dificultad con las señales no verbales, como la coordinación
y el lenguaje corporal.
 Disgrafia. La disgrafia es un trastorno del aprendizaje que se caracteriza por
la dificultad para escribir, deletrear, y pensar y escribir al mismo tiempo.
Algunos niños pueden tener más de un trastorno del aprendizaje.

¿Qué causa los trastornos del aprendizaje?


Entre los factores que pueden influir en la aparición de un trastorno del
aprendizaje, se encuentran los siguientes:

 Genética. Algunos trastornos del aprendizaje, como las dificultades para la


lectura y las matemáticas, son hereditarios.
 Afecciones. Algunos factores de riesgo que se han asociado a los trastorno
del aprendizaje son el crecimiento inadecuado en el útero (restricción del
crecimiento intrauterino grave), la exposición al alcohol o a las drogas en el
vientre materno y un muy bajo peso al nacer. Otro factor que podría influir en
la aparición de un trastorno del aprendizaje son las lesiones en la cabeza.
 Exposición ambiental. La exposición a altos niveles de plomo se ha asociado
con un mayor riesgo de padecer trastornos del aprendizaje.
¿Cuáles son los signos de los trastornos del aprendizaje?
Identificar un trastorno del aprendizaje puede ser difícil. Tu hijo podría tener un
trastorno del aprendizaje si presenta lo siguiente:

 Tiene dificultades para comprender y seguir instrucciones


 Le resulta difícil recordar lo que alguien le acaba de decir
 Carece de coordinación para caminar, hacer deportes o habilidades como
sostener un lápiz
 Pierde la tarea, los libros escolares u otros elementos con facilidad o los
coloca en lugares incorrectos
 Le resulta difícil comprender el concepto del tiempo
 Se resiste a hacer tareas o actividades que conlleven leer, escribir o hacer
cálculos matemáticos, o no puede terminar sus tareas de la escuela sin ayuda
significativa de forma constante
 Se porta mal, se muestra rebelde u hostil o tiene reacciones emocionales
excesivas en la escuela o al hacer actividades académicas, como tareas o
lecturas
Buscar ayuda para los trastornos del aprendizaje
La intervención temprana es fundamental, ya que los trastornos del aprendizaje
pueden agravarse. Por ejemplo, un niño que no aprende a sumar en la escuela
primaria no podrá resolver problemas de álgebra en la escuela secundaria. Los
niños que tienen trastornos del aprendizaje pueden experimentar ansiedad del
desempeño, depresión y baja autoestima, y perder motivación. Algunos niños
pueden comportarse mal en un esfuerzo por distraer la atención del problema
real.
Si tú o el profesor de tu hijo piensan que el niño podría tener un trastorno del
aprendizaje, considera que lo evalúe un psicólogo infantil o un neuropsicólogo.
Muchas escuelas ofrecen pruebas para identificar trastornos del aprendizaje.
Primero, es probable que sometan a tu hijo a pruebas para descartar problemas
de visión o audición u otras enfermedades. A continuación, un psicólogo o
especialista del aprendizaje usará pruebas, hablará contigo y con tu hijo y
revisará sus antecedentes escolares para determinar si el niño tiene un trastorno
del aprendizaje. En muchos casos, serán necesarias más evaluaciones para
hacer un diagnóstico.
Ten presente que algunos niños aprenden más lento por naturaleza y pueden
necesitar tiempo para desarrollar habilidades de lectura, escritura y matemática.
Sin embargo, otros tienen trastornos que afectan su capacidad de aprender.

Opciones de tratamiento
Si tu hijo tiene un trastorno del aprendizaje, es posible que su médico o su
escuela te recomienden lo siguiente:

 Ayuda adicional. Un especialista en lectura, un tutor de matemáticas u otro


profesional capacitado le pueden enseñar a tu hijo técnicas para mejorar sus
habilidades académicas. Los tutores también le pueden enseñar a los niños
habilidades de estudio y organización.
 Programa individualizado de educación. La escuela de tu hijo puede elaborar
un programa individualizado de educación para crear un plan acerca de cómo
puede aprender mejor en la escuela. Averigua si tu estado tiene leyes con
respecto a los programas individualizados de educación.
 Terapia. De acuerdo con el trastorno del aprendizaje, para algunos niños
puede ser útil la terapia. Por ejemplo, la terapia del lenguaje puede ayudar a
los niños que tienen dificultades en el lenguaje. La terapia ocupacional puede
ayudar a mejorar las habilidades motrices de un niño que tiene problemas
para escribir.
 Medicamentos. El médico de tu hijo puede recomendarle medicamentos para
disminuir la carga del trastorno del aprendizaje. Si tu hijo tiene depresión o
ansiedad grave, determinados medicamentos pueden ayudarlo. Habla con el
médico de tu hijo sobre los riesgos y los beneficios.
 Medicina complementaria y alternativa. De acuerdo con algunas
investigaciones, los tratamientos complementarios y alternativos, como la
musicoterapia, pueden ayudar a niños con trastornos del aprendizaje. Sin
embargo, se necesita más investigación.
Antes de que comience el tratamiento, tú, el médico de tu hijo, sus maestros o
sus terapeutas establecerán los objetivos para tu hijo. Si, con el tiempo, se
observa poca evolución, es posible que haya que volver a considerar el
diagnóstico o los planes de tratamiento de tu hijo.
Si bien los trastornos del aprendizaje pueden provocar problemas a largo plazo,
hay esperanza. La intervención y el tratamiento tempranos pueden remediar por
completo algunos trastornos del aprendizaje. La familia y los maestros también
pueden ayudar a los niños que tienen dificultades constantes a tener éxito en la
escuela, así como también en otras áreas de la vida.
Como detectar un problema de aprendizaje

Los problemas de aprendizaje afectan a 1 de cada 10 niños en edad escolar.


Estos problemas pueden ser detectados en los niños a partir de los 5 años de
edad y constituyen una gran preocupación para muchos padres, ya que afectan
al rendimiento escolar y a las relaciones interpersonales de sus hijos. Un niño
con problemas de aprendizaje suele tener un nivel normal de inteligencia, de
agudeza visual y auditiva.

Es un niño que se esfuerza en seguir las instrucciones, en concentrarse y


portarse bien en su casa y en la escuela. Su dificultad está en captar, procesar
y dominar las tareas e informaciones, y luego en desarrollarlas posteriormente.
El niño con ese problema simplemente no puede hacer lo mismo que los demás,
aunque su nivel de inteligencia sea el mismo.

8 pistas para detectar problemas de aprendizaje en los niños

El niño con problemas de aprendizaje específicos presenta patrones poco


usuales, a la hora de percibir las cosas en el ambiente externo. Sus patrones
neurológicos son distintos a los de otros niños de su misma edad. Sin embargo,
tienen en común algún tipo de fracaso en la escuela o en su comunidad.

Cuando un niño tiene problemas para procesar la información que recibe, le


delata su comportamiento. Los padres deben estar atentos y observar las
señales más frecuentes que indican la presencia de un problema de aprendizaje:

- Dificultad para entender y seguir tareas e instrucciones.

- Problemas para recordar lo que alguien le acaba de decir.

- Dificultad para dominar las destrezas básicas de lectura, deletreo, escritura y/o
matemática, por lo que fracasa en el trabajo escolar.

- Dificultad para distinguir entre la derecha y la izquierda, para identificar las


palabras, etc. Puede presentar tendencia a escribir las letras, las palabras o los
números al revés.
- Falta de coordinación al caminar, hacer deporte o llevar a cabo actividades
sencillas como sujetar un lápiz o atarse el cordón del zapato.

- Facilidad para perder o extraviar su material escolar, libros y otros artículos.

- Dificultad para entender el concepto de tiempo, confundiéndo el 'ayer', con el


'hoy' y/o 'mañana'.

- Tendencia a la irritación o a manifestar excitación con facilidad.

Características de los problemas de aprendizaje

Los niños que tienen problemas del aprendizaje con frecuencia presentan, según
la lista obtenida de When Learning is a Problem/LDA(Learning Disabilities
Association of America), características y/o deficiencias en:

Lectura (visión) El niño se acerca mucho al libro; dice palabras en voz alta;
señala, sustituye, omite e invierte las palabras; ve doble, salta y lee la misma
línea dos veces; no lee con fluidez; tiene poca comprensión en la lectura oral;
omite consonantes finales en lectura oral; pestañea en exceso; se pone bizco al
leer; tiende a frotarse los ojos y quejarse de que le pican; presenta problemas de
limitación visual, deletreo pobre, entre otras.

Escritura Invierte y varía el alto de las letras; no deja espacio entre palabras y no
escribe encima de las líneas; coge el lápiz con torpeza y no tiene definido si es
diestro o zurdo; mueve y coloca el papel de manera incorrecta; trata de escribir
con el dedo; tiene un pensamiento poco organizado y una postura pobre.

Auditivo y verbal El niño presenta apatía, resfriado, alergia y/o asma con
frecuencia; pronuncia mal las palabras; respira por la boca; se queja
de problemas del oído; se siente mareado; se queda en blanco cuando se le
habla; habla alto; depende de otros visualmente y observa al maestro de cerca;
no puede seguir más de una instrucción a la vez; pone la tele y la radio con
volumen muy alto.

Matemáticas El alumno invierte los números; tiene dificultad para saber la hora;
pobre comprensión y memoria de los números; no responde a datos
matemáticos.
Que son retardos

El retardo mental está formado por una serie de trastornos de


naturaleza psicológica, biológica o social, que determinan una carencia de las
habilidades necesarias para la vida cotidiana.
Por lo general, se considera que una persona sufre retardo mental cuando su
funcionamiento intelectual es inferior al coeficiente intelectual de 70-75 y cuando
presenta limitaciones significativas en dos o más áreas de las habilidades
adaptativas.
Los médicos apenas logran detectar la razón específica del retardo en el 25% de
los casos. Cabe destacar que estos trastornos afectan a una porción de la
población mundial que representa entre el 1 y el 3%.
Es posible establecer distintos grados de deterioro a partir del retraso mental,
desde el retardo leve o limítrofe hasta el retardo con profundo deterioro. Sin
embargo, los especialistas prefieren no centrarse en el grado de retardo y
trabajar en la intervención y cuidados para mejorar la calidad de vida del sujeto.
La disminución de la capacidad de aprendizaje, la falta de curiosidad, la
incapacidad para responder en la escuela y la persistencia del comportamiento
infantil son algunos síntomas del retardo mental.
Entre los factores de riesgo vinculados a la aparición de retardo mental aparecen
las anomalías cromosómicas, genéticas o metabólicas, las infecciones (como
la toxoplasmosis congénita, la encefalitis o la meningitis), la desnutrición, los
traumatismos y la exposición intrauterina a las anfetaminas, cocaína u otras
drogas.

Causas de retraso mental

Las causas genéticas incluyen el síndrome de down, que es consecuencia de


poseer un cromosoma 21 adicional, y el síndrome de X frágil, resultado de tener
un cromosoma X anómalo. Las enfermedades metabólicas son problemas de la
degradación o eliminación de algunas sustancias químicas del cuerpo. Por
ejemplo, la fenilcetonuria que es una enfermedad metabólica que origina lesión
cerebral y retraso mental a menos que se modifique la dieta para limitar el
consumo de una sustancia que se llama fenilalanina.
Durante el embarazo las infecciones aumentan el riesgo de dar a luz a un bebe
con R.M. El virus de la rubéola provoca dicho retraso. El consumo de alcohol
puede ser causa de trastorno de espectro de alcoholismo fetal, presentando una
serie de problemas físicos y retraso mental. El consumo de drogas también es
causa de retraso mental. Otras causas de retraso mental son lesiones en el
cerebro después del nacimiento, falta de oxígeno al cerebro, traumatismo físico,
desnutrición, etc.

Tipos de retraso mental

Retraso mental leve

En esta categoría están las personas que poseen un CI entre 50 a 70. Su


pensamiento es muy concreto al nivel de un niño entre 3 y 7 años
aproximadamente, pero son capaces de desarrollar cierta autonomía en la
medida que pueden hacer trabajos muy concretos. Lo padece el 10%,
generalmente estudian hasta el 6º de primaria, pertenecen la mayoría a un nivel
socio económico bajo y fallecen entre 50 a 60 años. Son capaces de manejarse
con mucha independencia en la edad adulta, realizar su trabajo y conformar una
familia.

Retraso mental moderado

Son personas que están entre los 35 a 50 de C.I. Estas personas desarrollan un
lenguaje mas adaptado pero no logran comprender lo que leen. Lo presenta el
7% de la población. Cursan estudios hasta el 2º de primaria, pertenecen al nivel
socio económico bajo y viven hasta los 55 años aproximadamente.

Retraso mental grave

Personas que poseen un CI entre 20 a 35. Tienen importantes trastornos de


lenguaje, el vocabulario es muy limitado y usan las llamadas palabras frases
(dicen agua cuando tienen sed). No llegan a adquirir la escritura. Lo padece el
3% de la población, pertenecen al nivel económico muy bajo, no cursan ningún
grado de estudios primarios y viven hasta los 45 años como promedio.

Retraso mental profundo

Lo poseen personas que tienen un CI 20 o menos de 20. Son personas que no


llegan a adquirir el lenguaje, e incluso tienen dificultades para lograr ciertas
conductas elementales (como vestirse, comer solos; por lo general, este nivel de
retraso aparece junto a otras perturbaciones físicas (trastornos cardiacos por
ejemplo) que llevan a que estas personas no leguen a vivir muchos años. Lo
padece el 1% de la población, no cursan estudios primarios, y viven hasta los 20
años aproximadamente.

Conceptos básicos

Síndrome de X frágil
El Síndrome del Cromosoma X frágil, llamado también Síndrome de Martin y Bell,
es la primera causa de retraso mental hereditario en el sexo masculino, Y la
segunda causa de retraso mental en general después del Síndrome de Down.
Las estadísticas de la afectación de varones con la mutación completa son
variables dependiendo de la población estudiada, oscilan entre uno por cada
1500 ó 4000 varones de la población general.

La frecuencia de mujeres afectadas de la mutación completa es de


aproximadamente una de 8000. Esto puede no parecer muy alarmante, sin
embargo si lo es, si se estima que el número de portadoras es de una de cada
700 mujeres. En la última década, el síndrome de X frágil ha surgido como una
de las causas de discapacidad hereditaria. Es responsable de aproximadamente
el 30% de todas las formas de deterioro cognoscitivo, y se cree que 1/259
mujeres lleva el gen en esas condiciones (Sherman, 1996). Aunque
normalmente afecta más severamente a los varones, pueden afectar varones y
mujeres con una variedad de problemas en el desarrollo y discapacidades en el
aprendizaje, incluido retraso mental severo, también se manifiestan problemas
de atención, hiperactividad y conductas autistas. No hay ninguna cura en la
actualidad para el síndrome X frágil. El síndrome es causado por un solo gen en
el cromosoma X, 1 de cada 2000 varones y 1 de cada 4000 mujeres pueden
estar afectadas incluso aunque la mayoría de los portadores desconocen esta
enfermedad.

Síndrome de Down

Es un grave trastorno genético que ocasiona retraso mental al igual que ciertas
deformidades físicas. En este síndrome, la cara tiene algunos rasgos semejantes
a los grupos mongoloides, de ahí que en el pasado se les llamara,
incorrectamente mongolismo. El retraso mental puede variar entre leve y
moderado. Cerca de la tercera parte de quienes nacen con síndrome de Down,
tienen graves defectos cardiacos, lo que ocasiona la muerte de muchos.

Otros sobreviven gracias a una cirugía correctiva.


En el síndrome de Down el niño nace con 3 copias de cromosoma 21 en lugar
del pare normal, de ahí que se le denomina trisomía 21. Aún se desconoce por
qué el bebé tiene este cromosoma y cómo ello perturba y distorsiona el desarrollo
de su estructura y funciones normales. Es más frecuente esta anomalía en el
óvulo que en el espermatozoide, de ahí que a partir de cierta edad (40 años hacia
delante) se recomiende a las mujeres evitar el embarazo, ya que existen
mayores posibilidades de errores de este tipo.

Síntomas principales

Cabeza anormalmente grande o deformada, ojos cara u otras partes del cuerpo
de aspecto raro, manos cortas y anchas, dedos cortos, posiblemente con una
articulación.

Características generales de los escolares retrasados mentales leves

En estos alumnos son raras las malformaciones y cuando existen son discretas,
generalmente localizadas en las orejas, el paladar, los dientes, el cráneo y la
cara. Durante la etapa escolar se evidencian las dificultades de estos individuos
y es en ella cuando se realiza habitualmente el diagnóstico. <br>La afectación
de los procesos cognoscitivos es el síntoma fundamental de ellos, pero además,
estos presentan todo un conjunto de alteraciones y limitaciones que es oportuno
explicar.

Percepciones

En cuanto a las percepciones, las observaciones de objetos, sucesos,


situaciones, la realizan de una forma insuficientemente, diferenciada, se les
dificulta la diferenciación de las características de determinados objetos, así
como establecer comparaciones y de percatarse de las relaciones que existen
entre los objetos del medio.

Sensaciones

Las sensaciones se ven afectadas, estén dañados o no los analizadores. Como


consecuencia de ellos la percepción también se afecta, resulta pobre, lenta,
estrecha y no refleja suficientemente la realidad.

Calidad de la memoria

La calidad de la memoria está disminuida de una manera considerable por la


debilidad de sus pensamientos, lo que les impide separar lo esencial de lo no
esencial, o sea, relacionar entre sí elementos aislados y eliminar las
asociaciones fortuitas y accesorias. Se les dificulta aprender y recordar con un
fin determinado ocasionando dificultades para trasladar lo aprendido a nuevas
situaciones, por lo que las actividades que se organicen con los mismos deben
tener en cuenta medios de enseñanza que propicien una mayor efectividad en la
memorización.

Lenguaje

El lenguaje de estos niños se desarrolla con demora, su vocabulario es pobre,


tienen insuficiente dominio del significado de las palabras, poca capacidad de
generalización como consecuencia de la lentitud en el desarrollo del lenguaje;
muestran dificultad en la función que regula el pensamiento y falta de juicio
crítico.

Pensamiento

El pensamiento se forma bajo las condiciones de un conocimiento sensorial


incompleto, de una falta del desarrollo del lenguaje, de una actividad práctica
limitada; por este motivo sus operaciones mentales se desarrollan lentamente y
poseen características especiales.

Esfera emotivo – volitiva

La esfera emotivo – volitiva se caracteriza por su inmadurez, la cual es


provocada por el insuficiente desarrollo de la actividad cognoscitiva, por tal
motivo, se encuentran limitados en la expresión de sus impresiones,
sentimientos y emociones. Bien pueden reaccionar intensamente ante un motivo
insignificante o bien pueden manifestarse débilmente ante sucesos serios de la
vida.

Las relaciones inadecuadas, superficiales de los sentimientos, son típicos en


ellos, al igual que la incapacidad de reprimir sus deseos, pasan de un estado de
ánimo a otro, en algunos casos, sin causas que lo motiven. Presentan elementos
de infantilismo e impulsividad, así como dificultades en las inhibiciones.

Por consiguiente, les resulta difícil concentrarse en una actividad, se muestran


intranquilos y poco motivados; cuando no se les trata correctamente, reaccionan
a las frustraciones escolares con una conducta rebelde y agresiva o con gran
retraimiento. Su desenvolvimiento fuera de la escuela o en la etapa posterior,
está determinada en gran parte por la forma en que se relacionan con su medio
y son tratadas por las personas que lo rodean.

En el caso de que encuentren comprensión, simpatía, ayuda y respeto, podrán


desenvolverse adecuadamente dentro de sus posibilidades; sin embargo,
cuando son víctimas de burlas, rechazo, intolerancia, se provocan severas
alteraciones de conducta y diversas descompensaciones.

Potrebbero piacerti anche