A N Á L I S I S C A P I TA L
LUIS ALFONSO CARRERA
PRIMERA IMPRESIÓN
La importancia de determinar el momento adecuado de llevar un MVP al mercado.
E n una cita amorosa o una entrevista
de trabajo, la primera impresión que
causas con tu apariencia, comentarios y
lenguaje corporal son muy importantes y
dejan una marca o percepción que luego
será muy difícil de cambiar.
Al igual que en los campos profesional
y sentimental, la primera impresión mar-
cará mucho del destino de una app, un
producto o un servicio digital. En tal sen-
tido, para una empresa que busca transfor-
mar digitalmente sus productos y empezar
a trabajar con agilidad, es crucial entender
y manejar adecuadamente el concepto de
MVP (Minimum Viable Product).
Bajo este concepto se promueve inte-
ractuar permanentemente con los usua-
rios o consumidores en la etapa de diseño
de un producto y llevarlo rápidamente al
mercado, sin esperar a que tenga todas
las funcionalidades y especificaciones
finales, pero que sí incorpore algunas
características mínimas que puedan tem-
pranamente generar valor a los usuarios.
Por ejemplo, un MVP que busca
solucionar un problema de transporte a
una persona sería el de diseñar y llevar
rápidamente al mercado una bicicleta o
un scooter eléctrico, para luego sacar una
moto como versión posterior y, finalmen-
te, un auto como versión final.
De esta forma, se le puede entregar al
Tr i b e Le a d e r B a n c a M ayo r i st a d e l B C P
consumidor en pocos días o semanas algo
que lo ayude en su necesidad y le genere
valor rápidamente en vez de esperar meses
o años hasta poder ofrecerle un auto.
De manera inversa, no es un MVP
diseñar y entregarle al mismo usuario
el motor o el parabrisas del auto, pues
por sí solos no ofrecen ningún uso ni
utilidad.
Otro ejemplo de MVP es cualquier
app bancaria que se lanza al mercado con
dos o tres funcionalidades básicas pero
muy usadas como transferencias y pago de
servicios y, luego, en posteriores versiones,
se van incorporando nuevas funciones co-
mo transferencias interbancarias, pago de
servicios favoritos, estados de cuenta, uso
de la huella digital, etc.
Cuando se trabaja bajo los conceptos
de agilidad y MVP, es crucial poder de-
terminar el momento adecuado en el que
un producto o servicio debe lanzarse al
mercado.
Ofrecerlo de manera muy temprana
podría no tener ningún valor para los
clientes, o generar problemas de funcio-
namiento, seguridad o experiencia, con
lo cual el daño podría ser irreparable.
Por otro lado, si esperamos a tener
todos y cada uno de los atributos del
producto, es muy probable que otro lo
lleve antes al mercado y perdamos para
siempre la oportunidad.
Manejar ese timing es quizá el reto
más importante en toda organización
embarcada en agilidad e innovación. No
olvidemos que, en cuanto a generar una
primera impresión, nunca se tiene una
segunda oportunidad.