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Por su parte Chaux (2012) hace una interesante

diferenciación entre los conflictos y la intimidación que a


continuación se presenta: 1. En el bullying o intimidación
existe un desequilibrio de poder entre el agresor y la víctima
quien por lo general es más vulnerable y tiene menos amigos,
mientras que los conflictos no implican desequilibrio de
poder pues los involucrados tienen posiciones similares en
sus grupos. 2. En el bullying el maltrato es constante,
sistemático y casi siempre unidireccional (de los agresores
hacia la víctima), al contrario en el conflicto puede ocurrir
con diferente persona en cada ocasión y por diversos
motivos, pueden permanecer o no en el tiempo y pueden ser
unidireccionales y bidireccionales. 3. En el bullying el agresor
no está reaccionando a una ofensa real o percibida de parte
de la víctima, es decir la víctima por lo general no ha hecho
nada que genere la agresión; mientras que los conflictos
ocurren porque quien agrede está respondiendo a lo que
considera una ofensa o provocación de la otra parte. El
bullying debe ser inaceptable y prevenible, al contrario los
conflictos pueden ser valiosos si se manejan de maneras
constructivas por lo que no es necesario prevenirlos sino
aprender a manejarlos adecuadamente. Es importante por lo
tanto al tratar casos de no entendimiento entre los
estudiantes identificar de que se trata: de conflictos
resueltos inadecuadamente, de agresiones esporádicas o de
bullying para poder realizar una intervención precisa y
adecuada en la solución de los mismos.
Teoría epistemológica del bullying:
fundamentación teórica (1a parte)
PIEDAD ACOSTA RUIZ // 30 SEP, 2014 // ~ 21 MINUTOS DE LECTURA.

Un marco teórico se va construyendo con palabras, muchas de


las cuales es necesario borrarlas; una realidad se va
construyendo con acciones humanas; las que hacen parte del
bullying, es necesario cuestionarlas, evaluarlas, analizarlas e
intervenirlas, porque dan cuenta del momento histórico que está
viviendo la comunidad que padece sus efectos, en tanto las
recrea en su cotidianidad.

Creíais que solo las hojas de los árboles se repiten una en sus
ramas, o que las células y los átomos se replican en los tejidos y
elementos a los que les dan forma; la sociedad también tiende a
replicarse y multiplicarse en las acciones de los sujetos que las
conforman, y lo hacen de forma mecánica y vertiginosa, sino
existe un patrón diferente de reprogramación; esa es la ley de la
vida, repetición y multiplicación; cuando no hay nada que cree la
necesidad de la mutación.

Tabla de contenido

 Marco conceptual
 1. Definición de términos
 2. Fundamentación epistemológica sobre el bullying
 3. Fundamentación teórica
 4. Factores que influyen en la conducta violenta. Observables
teóricos
 4.1 El bullying
 4.2 Definición de factores de riesgo
 4.3 La agresividad humana
 5. Bibliografía
Marco conceptual
En la comprensión del fenómeno del acoso escolar intervienen
múltiples factores asociados con los orígenes, contexto social y
cultural, procedencia familiar, y nivel socio económico de los
sujetos involucrados y de la institución escolar que los alberga.

Dada la complejidad del fenómeno, cualquier tipo de estudio


sobre él, requiere del conocimiento del contexto en el cual se
hace evidente, de sus actores y de los aspectos que inciden de
manera directa e indirecta en su aparición y desarrollo.

En éste sentido, varios son los aspectos que deben tenerse en


cuenta para abordar y comprender la problemática del Acoso
Escolar: la noción de violencia, los diferentes y variados
enfoques, desde los cuales se ha abordado el estudio del Acoso
Escolar que han originado diversos resultados que dan cuenta del
mismo.

Cabe indicar que una investigación que indaga por las voces de
los actores del Acoso Escolar se configura como un aporte a la
comprensión de la violencia en la escuela, de sus
manifestaciones y del sentido que los estudiantes le otorgan. Así,
la investigación se presenta como una oportunidad para la
reflexión académica e investigativa en torno a una de las
manifestaciones de violencia presentes en la escuela. Castillo
(2012).

Para abordar el presente marco conceptual, se iniciara con la


definición de los términos básicos desarrollados a lo largo del
trabajo investigativo, seguidamente se realizará la
fundamentación epistemológica, pasando luego a la
fundamentación teórica, finalizando el marco conceptual con los
observables teóricos.

Definición de términos
Veamos las categorías más importantes asociadas al acoso
escolar y que son elementos esenciales en el planteamiento del
problema y en la comprensión y desarrollo del trabajo propuesto.

Conducta agresiva

Siguiendo a Zillmann (1979), la conducta está dirigida a metas


(intencional) y la naturaleza destructiva de la respuesta de meta.
De esta manera, la agresión llega a considerarse "la conducta con
intención de hacer daño".

Otro conductual, Buss (1961) había definido el acto violento como


"una respuesta que provoca estímulos nocivos en otro
organismo". La definición de Buss destaca las consecuencias de
la acción, no la intención de quien la realiza. Según Buss, se ha
de considerar agresivo todo acto que provoque dolor o molestias
a otro ser.

En aras de la claridad se podría distinguir entre conducta agresiva


y conducta hostil (Zillmann, 1979). La conducta agresiva vendrá
definida por los criterios anteriores para daño físico: Toda
actividad mediante la cual una persona busca infligir daño
corporal o dolor físico a quien desea evitarlo.

Una definición complementaria para abarcar las formas no físicas


de daño o perjuicio, es la de conducta hostil. Toda actividad
mediante la cual una persona busca causar perjuicio, diferente del
daño corporal y dolor físico, a quien desea evitarlo.

La agresión como reacción, tal vez sea la hipótesis de la


frustración-agresión la teoría más conocida y aceptada de la
agresión como reacción, propuesta por. John Dollard y su grupo
de colaboradores de la Universidad de Yale.

Dollard, Doob, Miller, Mowrer y Sears (1939), decepcionados con


la teoría del instinto propusieron una teoría del aprendizaje sobre
la agresividad humana. Se la conoce como la hipótesis de la
frustración-agresión.

La teoría consta de dos propuestas fundamentales: primera, la


frustración (que es venirse abajo la conducta orientada a metas)
siempre produce alguna clase de agresión, y, segunda, la
agresión siempre está provocada por alguna clase de frustración.
Esta fue la primera formulación que Miller (1941) iba a modificar
pocos años después. Según Miller, la agresión es una de las
varias respuestas dadas a la frustración, pero seguían en pie que
la agresión siempre va precedida de frustración.

Con todo, la conceptualización de la agresión tiene que ser útil,


para lo cual necesita distinguir más claramente las clases de daño
o perjuicio, además del daño físico. Existen otras formas de daño,
como son la destrucción de las posesiones o los tratamientos
humillantes. También habría que incluir la coacción como criterio
para la definición de agresión.

Si se compara a los niños agresivos con los no agresivos, se


advierte que (1) se sienten más seguros de que la agresión
produce recompensas a su alcance; (2) se sienten más seguros
de que la agresión les resulta fácil y sirve para poner fin a la
conducta ajena que les resultaba perjudicial; (3) se inclinan más a
creer que la agresión mejora su autoestima y no causa daño
permanente a las víctimas; y (4) son incluso intrínsecamente
gratificantes para el agresor.

Los niños agresivos valoran la agresión en el sentido de conceder


mucha importancia a su capacidad de dominar y controlar a otros,
a las víctimas, sin preocuparles excesivamente el sufrimiento que
causan ni la posibilidad de ser rechazados por sus compañeros
(Crick y Dodge, 1996).

En términos de la teoría del aprendizaje social de Bandura (1973),


los niños agresivos han adoptado un sistema de autorrefuerzo en
el que las acciones agresivas constituyen una fuente de orgullo
personal.

Agresores y víctimas de agresiones

A medida que los niños van creciendo en edad, la mayoría se va


implicando menos en las conductas agresivas. Ahora bien, se da
una minoría de niños y adolescentes que se implican de modo
aún más frecuente en peleas y otras interacciones agresivas con
compañeros, (Loeber y Stouthamer-Loeber, 1998).

Se ha constatado que, entre los 8 y los 12 años, unos pocos


niños son los que se ven implicados en la mayoría de los
conflictos. Los que participan en acciones violentas son un
escaso número de instigadores muy agresivos, que son quienes
en plan bravucón abusan con regularidad del 10 al 15% de sus
compañeros de clase (Perry, Kusel y Perry, 1988; Olweus, 1997).

En casi todos los centros educativos se ha conocido a algún niño


al que se utiliza como blanco de repetidos actos hostiles por parte
de otros niños. Según las apreciaciones de los profesores, un
10% de la muestra de adolescentes de Olweus (1993) eran esta
clase de estudiantes maltratados o víctimas, siendo otro 10% los
maltratadores que sometían a las víctimas a acoso físico y verbal.
Las tasas de victimización son incluso más elevadas entre los
escolares más pequeños.

No es necesario que los agresores hayan sido ellos en casa


objeto de malos tratos, pero sí suelen haber observado esos
malos tratos entre sus padres. Estas experiencias en su casa les
hacen creer que la agresión vale la pena al que la realiza, al
agresor, considerando a las víctimas como objetivos fáciles que
les entregarán recursos materiales, o que los someterán sin
mucha necesidad de pelea. Así es como los agresores suelen
abusar de sus víctimas por razones materiales o personales
(Olweus, 1993). Estos acosadores practican la agresión proactiva,
o el bullying.
A las víctimas se les atribuye una baja autoestima, son
físicamente débiles y por lo general muy ansiosos. Entre estos
factores, una baja autoimagen social parece tener especial
importancia para incitar a la victimización. Se conocen jóvenes
ansiosos y débiles físicamente que no sufren victimización
crónica, porque poseen una alta autoimagen social y que
expresan de un modo asertivo que no tolerarán ser maltratados
(Egan y Perry, 1998).

Sin ser todas iguales, las víctimas crónicas comparten algunas


características. La mayoría son víctimas pasivas, estudiantes
introvertidos (varones y mujeres) que hacen poco por incitar a las
acciones hostiles de que son objeto. Son blancos fáciles para los
agresores o agresoras (Olweus, 1993).

Estas víctimas tienen a menudo padres muy exigentes y algo


distantes, sin permitirles suficiente autonomía, sino más bien
favoreciendo una conducta social pasiva y no asertiva.

Los chicos suelen haber estado sobreprotegidos por su madre a


las que han estado estrechamente vinculados; estas relaciones
les han conducido a expresar sus temores, dudas y ansiedades,
como medio de llamar la atención. Estas prácticas detectadas en
los varones se suelen rechazar por los compañeros varones por
no pertenecer al estereotipo de género masculino.

Un pequeño número de sujetos estudiados podría describirse


como víctimas provocadoras. Son individuos que no caen bien a
sus compañeros por su modo de ser poco amigable e inquieto,
que se enzarzan en peleas aunque no suelen tener éxito. Se trata
de individuos con sesgo atributivo hostil, ese sesgo que
caracteriza a los agresores reactivos.

Las víctimas provocadoras suelen haber sufrido abusos físico o


un victimización en su hogar, pudiendo haber aprendido de esas
experiencias a ver a los demás como adversarios hostiles
(Schwatz, Dodge, Pettit y Bates, 1997).
Victimización

Hay estudios sobre victimización adolescente que se interesan


más por la agresión relacional. Esta ocurre cuando los individuos
usan las relaciones como una fuente de control y un medio con el
que infligir daño a otros (Hayward y Fletcher, 2003).

La agresión relacional puede incluir conductas o amenaza de


conductas, como las frecuentes de excluir a otra persona del
grupo de iguales, ignorarla o hacerle daño en las relaciones con
sus compañeros o compañeras a través de la maledicencia.

La aparición de la denominación de agresión relacional se


remonta a poco más de una década, con trabajos como el de
Crick (1995) o el de Crick y Grotpeter (1995).

Dado que en la adolescencia temprana se forman relaciones


inicialmente románticas que llegan a ser muy complejas, se trata
de un periodo de la vida especialmente propicio para que ocurra
agresión relacional.

Violencia

El término violencia designa una conducta que supone la


utilización de medios coercitivos para hacer daño a otros y
satisfacer los intereses propios (Ovejero, 1998; Trianes, 2000). La
distinción entre la violencia y la agresión se encuentra, como
algunos autores apuntan, en que la agresión supone una
conducta guiada por los instintos, mientras que la violencia es el
producto de la interacción entre la biología y la cultura
(Sanmartín, 2000, 2004).

No obstante, en la revisión de los trabajos publicados en los


últimos años sobre el comportamiento agresivo/violento, se
observa que autores de prestigio utilizan indistintamente ambos
términos.
En la clasificación más común sobre los tipos de conducta
violenta se distingue entre la dimensión comportamental
(violencia hostil directa para hacer daño) y la dimensión
intencional (violencia como instrumento para conseguir algo y
satisfacer los intereses propios).

Más detalladamente y siguiendo a Anderson y Bushman (2002),


la violencia hostil hace referencia a un comportamiento impulsivo,
no planificado, cargado de ira, cuyo objetivo principal es causar
daño y que surge como una reacción ante una provocación
percibida; la violencia instrumental se considera como un medio
premeditado para alcanzar los objetivos y propósitos del agresor y
no se desencadena únicamente como una reacción ante la
presencia de una provocación previa.

En el contexto escolar tienen lugar multitud de comportamientos


de carácter violento, entre los que se encuentran aquellos
dirigidos directamente hacia objetos o material escolar y aquellos
dirigidos directamente hacia personas -el profesorado y los
compañeros-. Entre los primeros se puede distinguir actos
vandálicos como la rotura de pupitres y puertas, o las pintadas o
escritos de nombres, mensajes y dibujos en las paredes del
centro educativo (Trianes, 2000).

Entre los segundos se destacan las agresiones físicas y verbales


hacia el profesor o entre compañeros, y los problemas graves de
disciplina en el aula como la desobediencia al reglamento interior
escolar (Iglesias, 2000; Moreno, 1998).

Entre todas estas conductas, las peleas son las más frecuentes,
bien entre iguales o entre pandillas. Pero sin duda alguna, si
algún tipo de comportamiento violento en la escuela está
adquiriendo un interés creciente entre la comunidad educativa y
científica, es el bullying, y esta atención se debe tanto al aumento
de su presencia en las escuelas, como a las importantes
consecuencias que supone para las víctimas.
Violencia escolar

La Organización Mundial de la Salud define a la violencia como el


uso intencional de la fuerza y el poder, sea este físico o
psicológico, para actuar contra sí mismo u otra persona, grupo o
comunidad. Lo que provoca un daño que puede ser físico,
psicológico o social.

Es un concepto mucho más amplio que "bullying". Se refiere al


uso intencional de la fuerza y el poder, sea este físico o
psicológico, para actuar contra sí mismo u otra persona. Lo que
provoca un daño que puede ser físico, psicológico o social.
Ocurre tanto en la escuela como hacia/desde la escuela y a
través de las nuevas tecnologías (vía Facebook, por ejemplo).

 Agrupa distintos comportamientos aprendidos y, por lo tanto,


modificables.
 Está asociada a otras violencias (ej. doméstica, criminal, de
género).
 No suele ser reportada por temor, vergüenza, falta de
confianza en el sistema y porque muchos piensan que es
normal.
 Siempre es prevenible y nunca es justificable.
 Cuando es prevenida, mejoran el clima escolar, las notas, la
satisfacción con la vida y, en el largo plazo, la productividad.

La violencia escolar tiene relación con todo tipo de conducta


agresiva que se produce en los centros educativos dirigida hacia
cualquier miembro de la comunidad educativa, dependencia,
objeto.

La violencia escolar se produce entre los alumnos, diferenciando


claramente lo que es un conflicto entre iguales suscitados de la
mera convivencia cotidiana en las aulas, que habrá de resolverse
de una determinada manera, de lo que es denominado acoso
escolar o bullying. Ramos, J.M. (1998).
En este sentido, se puede establecer la diferencia entre
problemas de convivencia y problemas de violencia. Cuando una
persona antepone sus intereses a los de los demás, provoca
sentimientos de malestar que pueden dar lugar a comenzar una
escalada de rencor.

Probablemente cuando la situación se repita será la parte que


perdió, la que intente ganar, utilizando para ello las mismas
estrategias (imposición, insulto, poder) que la otra persona usó
anteriormente, y difícilmente se llegue a entendimiento y a una
comprensión mutua. Cuando éste es el caso, se habla de
problemas de convivencia, es decir, problemas en las relaciones
que se resuelven unilateralmente, y sólo una parte consigue sus
intereses.

En los problemas de convivencia hay respuestas agresivas, pero


no se dan de manera repetitiva, por lo que no produce la
victimización del contrario. Por el contrario, el bullying incluye
dentro de su definición, el que sea repetitivo e intencional (Lera,
M.J. 2002).

La violencia entre iguales se entiende como un problema en las


relaciones personales, en la cual, los iguales dejan de ser
considerados precisamente iguales; una de las partes se
considera superior, ejerce prepotencia sobre las otras y es lo que
se conoce como el fenómeno Bullying o maltrato entre escolares
(Ortega y Mora-Merchán, 2000).

Violencia sociocultural

Desde inicios de la década de los 60 se desarrollan estudios


sobre la violencia en Colombia (Guzmán, Fals Borda y Umaña
Luna), sin embargo la violencia que se aborda y se explica es
sólo la de dimensiones políticas y el enfrentamiento entre el
Estado y las guerrillas de los años 60, 70 y 80.
A partir del libro Colombia: Violencia y Democracia, publicado en
1987 se reconoce la multicausalidad, multidireccionalidad y
pluralidad de las violencias en Colombia y se insinúan
posibilidades de los futuros estudios sobre otras modalidades de
violencia y otros terrenos (cultural, social, de las creencias y
representaciones) más cercanas a un país fuertemente
urbanizado y atravesado por otros factores como el narcotráfico,
la delincuencia organizada.

A pesar de ello los estudios sobre esas otras formas de violencia


(cotidiana urbana, intrafamiliar, sicarial, juvenil, «limpieza social»)
es todavía deficitario; en lo que se refiere al campo social y
cultural, el campo de las significaciones, de las maneras como se
leen y se comunican las distintas modalidades de violencia, aún
faltan ser exploradas para aportar a una mejor comprensión del
fenómeno.

En lo que atañe a la violencia juvenil los estudios y


preocupaciones de organismos estatales y no gubernamentales
han estado muy centrados en el problema del maltrato.

Pareciera ser que Colombia ha generado el mito de la


permanencia de la violencia -llegando aún a plantearse la
existencia de una «cultura de la violencia»- como dimensión que
explica todo lo que acontece. La extensión de este mito permite
que la gente esté de cierta manera mucho más disponible para
considerar que los acontecimientos violentos son asuntos
normales con los que hay que contar y frente a los que hay que
adaptarse.

Un país atravesado por múltiples violencias, donde las mismas se


entrecruzan y se retroalimentan, crea un marco de propensión a
la aceptación de la misma como algo dado, si se quiere una
especie de fatalismo colectivo que lleva a considerar los
comportamientos violentos como una característica de la
idiosincrasia ciudadana (Vargas 1993).
Cuando la sociedad no se estremece con las recurrentes
masacres y crímenes de todos los orígenes y naturaleza, cuando
sólo determinados hechos criminales, por su relevancia la
golpean transitoriamente, pero con la misma velocidad, se está
frente a situaciones que ameritan una respuesta multidimensional.

Algunos analistas de la violencia urbana (Guzmán 1994) plantean


la necesidad de concebir la violencia como «producto particular
de una relación social de conflicto». La violencia supone una
relación de comunicación conflictiva, entre las partes
involucradas, en la que por lo general, se atribuye al adversario la
responsabilidad de todos los males. Pérez, D. (1984).

Disciplina

Disciplina (su forma arcaica era discipulina) es el esfuerzo que


hace el discípulus por aprender. De ahí pasó a denominar por una
parte, el conjunto de condiciones ambientales externas para que
la actividad de aprender se pudiera desarrollar, y por otra, las
actuaciones concretas para forzar el aprendizaje. En ambos
casos, se habla de presión externa o de esfuerzo propio.

Es oportuno recordar que el verbo studere, del que proceden


estudiar y estudiante están exactamente en la misma línea de
esfuerzo. Quizá la diferencia más notable entre ambos es que
siendo en origen el sujeto tanto del estudio como de la disciplina
el propio estudiante, la disciplina ha acabado siendo algo que le
viene impuesto desde fuera.

La disciplina refiere el conjunto de normas, reglas y


procedimientos aplicables al aula con la finalidad de generar las
condiciones óptimas para la consecución de las metas de
aprendizaje. Como instrumento del proceso instruccional, su
gestión exige un conjunto de principios proposicionales derivados
del campo psicopedagógico. Desafortunadamente para la gestión
de la disciplina en el aula, el profesorado se apoya en sus
habilidades innatas y medios inmediatos, llevándola hacia un
fracaso seguro. Zamudio, R. (2010).

Manual de convivencia

El Manual de Convivencia en la institución educativa es una


herramienta normativa que contribuye a la regulación de las
relaciones de los estudiantes entre sí y con los demás miembros
de la comunidad educativa. La convivencia es un elemento
central de la formación humana integral, por ello es conveniente
comprender su naturaleza y su dinámica propia dentro de la
institución escolar.

La Ley 115 de 1994 en Colombia, concibe que la convivencia es


un efecto de las relaciones entre los integrantes de un grupo
humano. En la institución educativa esta dinámica se genera por
la influencia cultural del medio social y por las relaciones propias
entre los miembros de la institución educativa, relaciones que
adquieren sus propias especificidades por darse dentro de una
sociedad particular: la comunidad escolar.

En esta comunidad, como en cualquier otro colectivo humano se


dan relaciones de competitividad y de cooperación, muy propias
del juego de intereses particulares de las personas y de los
grupos que interactúan dentro de la vida social, académica y
laboral de la institución educativa.

En la anterior dinámica, el Manual de Convivencia es el pacto


social de los estudiantes entre sí y entre ellos, los demás
miembros de la comunidad educativa y el ordenamiento
institucional.

Desescolarización

Desescolarización es un término utilizado por los dos filósofos de


la educación y los defensores de la educación alternativa y/o
educación en el hogar, a pesar de que se refiere a cosas
diferentes en cada contexto. Fue popularizado por Ivan Illich en
su libro de 1971, "La sociedad desescolarizada".

Filosóficamente, se refiere a la creencia de que las escuelas, y


otras instituciones de enseñanza, son incapaces de proporcionar
la mejor educación posible para algunas o la mayoría de las
personas. Otros extienden este concepto más allá del individuo y
que se ponga fin a las escuelas en general.

Lo anterior se basa en la creencia de que la mayoría de las


personas aprenden mejor por sí mismos, fuera de un entorno
institucional, a un ritmo más autodeterminado. Este es el
significado del término según lo utilizado por Illich.

En un contexto práctico, se refiere al proceso mental que una


persona atraviesa después de haber sido retirado de un entorno
de educación formal, cuando la "mentalidad de la escuela" se
erosiona con el tiempo.

Desescolarización puede referirse al periodo de tiempo que les


toma a los niños retirados de la escuela para adaptarse a
aprender en un entorno no estructurado.

Muchos estudiantes, en especial los que son pobres, saben


intuitivamente qué hacen por ellos las escuelas. Los adiestran a
confundir proceso y sustancia. Una vez que estos dos términos se
hacen indistintos, se adopta una nueva lógica: cuanto más
tratamiento haya, tanto mejor serán los resultados.

Al alumno se le "escolariza" de ese modo, para confundir


enseñanza con saber, promoción al curso siguiente con
educación, diploma con competencia, y fluidez con capacidad
para decir algo nuevo.

A su imaginación se lo "escolariza" para que acepte servicio en


vez de valor. Se confunde el tratamiento médico tomándolo por
cuidado de la salud, el trabajo social por mejoramiento de la vida
comunitaria, la protección policial por tranquilidad, el equilibrio
militar por seguridad nacional, la mezquina lucha cotidiana por
trabajo productivo.

La salud, el saber, la dignidad, la independencia y el quehacer


creativo quedan definidos como poco más que el desempeño de
las instituciones, que afirman servir a estos fines, y su
mejoramiento se hace dependiente de la asignación de mayores
recursos a la administración de hospitales, escuelas y demás
organismos correspondientes.

Gilbert de Landsheere ha propuesto la idea de desescolarización,


como nueva opción pedagógica. Desde el punto de vista de
Gilbert, este concepto no significa la eliminación de la escuela.
Habla, en cambio, de permeabilizar el universo educativo más allá
de lo institucional.

Por eso se conoce esta visión educativa como "La enseñanza sin
fronteras". La importancia del mundo afectivo y del rol cooperativo
de la familia y de otros elementos extra-formativos, es crucial.

Combo o banda delincuencial

"Las pandillas son conformadas en su mayoría por grupos entre


15 y 20 jóvenes, entre los 9 y 25 años. En su mayoría, conservan
el mismo modus operandi: atracos callejeros, asaltos y peleas por
el territorio. Sin embargo, algunos de estos grupos se han
convertido en bandas de delincuencia organizada", reseñó el
Observatorio Social en 2006, situación que no ha variado hasta el
momento. Agencia de prensa IMPEC (2009).

Comunidad educativa

Es aquella conformada por estudiantes, educadores, padres de


familia, egresados, directivos docentes y administradores
escolares. Todos ellos, según su competencia, deben participar
en el diseño, ejecución y evaluación del Proyecto Educativo
Institucional y en la buena marcha del respectivo establecimiento
educativo.

Matoneo

Es un hecho generalizado: con indiferencia de los estratos socio–


económicos, en muchos (amplia mayoría) de los colegios del
país, públicos y privados, existe una práctica lamentable y a todas
luces inadmisible de matoneo. Que es como se traduce el término
inglés del bullying: "la montadera". Que en muchas ocasiones
más que simbólica es física, y siempre grupal y psicológica.

Usualmente se trata de una práctica que se emprende contra


niños con un cierto perfil: recatados, éticos, de perfil bajo,
intelectuales, reflexivos.

El matoneo se corresponde con la moral del narcotráfico y la


corrupción, de la derecha y extrema–derecha, y el dinero fácil. Su
característica primera es evidente: la prevalencia del pensamiento
de grupo (groupthink) para macartizar a quien(es) se aleja(n) del
grupo; la gallada, la pandilla, el parche.

Moral gregaria, en realidad, moral de esclavos: que siempre


quieren imponer un modo de pensar colectivo sobre los demás, y
que no acatan diferencias. El que no está conmigo está contra mí.
Exactamente como la política de guerra y belicosa, camorrera y
levantada. A todos los niveles y en todos los estratos.

El matoneo se corresponde con un pensamiento grupal que


quiere anular las diferencias y subsumir a los individuos al grupo
como tal. En donde predomina exactamente una moral que se
corresponde, punto por punto, con la ética de los corruptos, los
violentos, los acosadores de todo tipo, los guerreristas y
belicosos–belicistas. Es la moral del hacer las cosas a la fuerza y
ya y rápido antes de despacio y después.
Ya en la edad más adulta, en las universidades, o en los espacios
laborales, el matoneo sigue existiendo, pero en forma más sutil:
acoso laboral, acoso sexual, polarización de los grupos,
subsunción del individuo al colectivo.

En los espacios laborales el individuo deja de existir y su lenguaje


se torna en un: "nosotros" colectivista. (Si no es por la referencia
teórica, es exactamente el Wir y el uns de que habla Heidegger
en Ser y Tiempo, ese texto fundamental que plasma el
pensamiento del nacional–socialismo, como ha quedado dicho en
la bibliografía técnica sobre el tema).

Moral facilista e inmediatista, moral polarizadora y colectivista,


ética de debilidad hecha fortaleza, el bullying es, literalmente, el
toreo contra alguien físicamente inferior, y cuyo destino, si se
abandonan las cosas a sí mismas, será la total indefensión, la
reducción de toda auto–estima, la muerte. Física o social,
simbólica o grupal.

Uno de los grandes secretos es que el país mismo, no se atreve


ni siquiera a verbalizar aún (como el drogadicto y el alcohólico,
por ejemplo, quienes verbalizan su problema como el primer paso
para superarlo) es la alta, la altísima tasa de suicidios infantiles y
juveniles. Indiferentemente del estrato socioeconómico, con
independencia de la geografía y la cultura. Y en muchos de esos
casos, como resultado del matoneo. Alrededor de lo cual
comienza a girar la espiral absorbente de la drogadicción, y otros
problemas agudos y crónicos de orden al mismo tiempo social e
individual.

Que el matoneo sea un fenómeno contemporáneo no es un


consuelo, y por el contrario, es la expresión de un severo
"malestar en la cultura". El matoneo se corresponde con la
superficialización de la sociedad, total liquidez (Bauman) de las
relaciones humanas, el imperio del pensamiento débil (muy en la
línea de Vattimo). Pensamiento débil, autoestima mancillada,
evaporización y transvaloración de los valores más
fundamentales. Como dignidad, libertad, democracia, equidad,
igualdad, soberanía, independencia, respeto, diferencia. Valores
que no corresponden a ningún credo y que no son bandera de
ningún bando en particular.

Estrictamente, el matoneo es el embrión de la criminalidad. En la


línea de las llamadas Bandas Criminales (Bacrim, un eufemismo
para el paramilitarismo) y un ejemplo diáfano de lo cual son los
Maras, en El Salvador y en Guatemala. Y en buena parte de
Nicaragua. Desconocimiento de la ley, o promulgación y
aprovechamiento de la misma para los beneficios propios.
Maldonado, C.E., (2013).

Montador

El término bullying hace referencia a la acción cometida por el


bully o "matón", considerándose que ofrece una cobertura
semántica más globalizadora. Pese a ello "el concepto de Bullying
no abarca la exclusión social como forma agresiva de relación
pero, aun con esta limitación, proporciona las características
básicas para definir el fenómeno (…) y tiene un uso consensuado
en la literatura científica que aborda este problema" (Informe del
defensor del pueblo, 2000, pp. 27-28).

Azuzadores: Grupos de pares que preparan el enfrentamiento, lo


rodean, lo controlan, incitan para que la paliza a la víctima sea
fuerte, hacen todo lo posible para que el montador no se retire de
la pelea y la continúe en la calle, proveen armas, supervisan para
que la autoridad no tome cartas en el asunto, agreden física y
verbalmente a los docentes y compañeros que quieren rescatar a
la víctima, generalmente nunca son sancionados, usualmente
cargan celulares para colocar el acto violento en las redes
sociales y continuar incitando a la agresión, porque de ello
derivan el máximo placer.

Estrategia de paz
Nombre de la estrategia nacional contra la violencia escolar
(2013-2016), dado que tiene por visión "Escolares conviven y
aprenden felices", su plan de trabajo tiene tres objetivos: (1)
Menos violencia escolar, (2) Mejores logros de aprendizaje y (3)
Más escolares felices. Biblioteca Nacional (2014).

Desplazamiento forzado por la violencia política y social

El desplazamiento forzado en Colombia es un fenómeno histórico


ligado a los conflictos políticos y económicos que se han
desarrollado entre diferentes grupos y sectores de la sociedad
(…).

Tal vez sea la violencia política la de mayor impacto (…) agravada


por el conflicto armado interno que enfrenta al Estado con grupos
guerrilleros, y paramilitares, con la consiguiente violación de los
Derechos Humanos y las transgresiones al Derecho Internacional
Humanitario.

Además de los protagonistas que intervienen directa o


indirectamente en el conflicto armado como la fuerza pública,
guerrilla, paramilitares y autodefensas, aparecen otros factores de
violencia como el narcotráfico, la delincuencia común, la
explotación de yacimientos (sic) esmeraldíferos, y conflictos
sociales como el que genera la concentración de la tierra, que
tienen incidencia relativa en la persistencia del desplazamiento
(…), conflictos por el desempleo y la economía informal.

Como se puede concluir de la definición [de la CPDIA], se trata de


un desplazamiento distinto al de otros procesos demográficos,
como el que ocurre por efecto del movimiento natural de la
población o por efecto de desastres naturales. En este caso, se
está delante de una situación específica provocada por el uso de
la violencia (….). Corte Constitucional (2004). Sentencia T-025.
Colombia.

Fundamentación epistemológica
Resulta conveniente revisar brevemente el interaccionismo
simbólico, paradigma de corte sociológico que aporta elementos
básicos que permiten dimensionar el impacto que tiene lo social
en la vida en comunidad y los procesos que al interior de ella se
suceden.

Según Strauss, "Las relaciones sociales están regidas por unas


reglas comparables a las que organizan los cambios
lingüísticos… son las reglas las que "actúan" y "hablan" a través
de los hombres"

En este sentido, el sujeto pierde la potestad en las relaciones


humanas quedando estas controladas por las reglas que rigen a
la sociedad estableciendo así una relación asimétrica entre
sociedad e individuo, y de esta manera subordinando la acción
individual ante las estructuras de la sociedad.

Sin embargo, diversos teóricos controvierten estos postulados


asignando un papel más trascendental al sujeto en el desarrollo
de las relaciones sociales. La sociedad, como construcción social
implica el reconocimiento del sujeto como agente autónomo en la
interacción; la sociedad resulta ser "un conjunto de individuos
interactuando entre ellos" Blumer, (1969) y la interpretación que
de ella resulten y las prácticas que el individuo oriente, están
asociadas a las interacciones que los individuos establecen.

Esta interpretación de la realidad se sustenta bajo la teoría del


interaccionismo simbólico propuesto por Herbert Blumer a través
de sus obra titulada "Symbolic Interactionism: Perspective and
Method" en la cual se establece la relación entre interacción
(relaciones), significados y practicas (actuar) en la situación
social; ejes centrales del presente proyecto investigativo.

Según Blumer, el interaccionismo simbólico propone como centro


de estudio las interpretaciones que los actores que interactúan en
una cierta situación le dan a esta, a sus conductas y a las
conductas de los demás (Briones, 1996) interpretación a la cual
es posible acercarse analizando los significados que los actores
le dan a las situaciones, a los objetos materiales y a las personas
con las cuales interactúan; significados que surgen producto del
acontecer propio de la interacción.

Los significados, al surgir de las interacciones, constituyen un


producto social, de esta manera los significados son socialmente
construidos aun cuando su interpretación responde a principios
particulares determinados con relación al marco cognitivo
personal.

En este sentido cada individuo representa y construye


cognitivamente el mundo- entorno y actúa en consecuencia con la
definición que otorga a una determinada situación de tal manera
que el actuar esta mediado por el marco cognitivo producto de los
significados socialmente construidos y particularmente
interpretados.

Significados, practicas (actuar) y relaciones (interacciones) se


construyen de manera conjunta, cíclica y holística, y en su
conjunto constituyen las lógicas sociales del individuo frente a una
situación social particular propia de ser indagada a través del
análisis interpretativo de la realidad. Significados, prácticas y
relaciones son pilares fundamentales bajo los cuales se
interpretan las situaciones sociales particulares.

Para Helbert Blumer uno de los pioneros del interaccionismo


simbólico este esta cimentado en una serie de ideas básicas o
"imágenes radicales", que forman el armazón del estudio y
análisis de esta corriente:

Naturaleza de la vida en las sociedades y grupos humanos

Los grupos humanos están formados por individuos


comprometidos en la acción. Los individuos pueden actuar de
forma aislada, colectivamente o en nombre o representación de
alguna organización. La sociedad está formada por personas
involucradas en la acción, y la vida de la sociedad es un proceso
de ensamblaje de las actividades de sus miembros.

Naturaleza de la interacción social

La interacción es un proceso que forma el comportamiento


humano. Las actividades de cada miembro se producen
primordialmente en respuesta o en relación con las de los demás.

Según plantea George Herbert Mead la interacción humana


puede darse a dos niveles:

 "Conversación de gestos": una persona responde


directamente al acto de otra sin interpretarlo. Blumer lo llama
"interacción no simbólica".
 "Empleo de símbolos significativos": implica la interpretación
del acto. Blumer lo denomina "interacción simbólica".

Mead describe la interacción simbólica como una exposición de


gestos y una respuesta al significado de los mismos. Cuando el
significado es el mismo para ambas personas, se comprenden
mutuamente. El proceso consiste en formular indicaciones a los
demás sobre lo que hay que hacer, y en interpretar las que ellos
formulan a su vez. La interacción social se ejerce primordialmente
en el ámbito simbólico.

Naturaleza de los objetos

Un objeto es todo aquello que puede ser indicado, que puede


señalarse o a lo cual puede hacerse referencia. La naturaleza de
un objeto es el significado que éste encierra para la persona que
como tal lo considera.

Los objetos son creaciones sociales, resultado de un proceso de


indicaciones que emana de la interacción social.
Cada persona tiene un "mundo" de objetos físicos, sociales y
abstractos, se configura un entorno con aquellos objetos que
unos seres humanos determinados identifican y conocen, y que
encierran un significado para dichas personas. Para conocer y
comprender la vida de un grupo es necesario determinar su
mundo de objetos.

El ser humano considerado como organismo agente

Como indica Mead, la persona posee "un sí mismo". Esto quiere


decir que un individuo puede ser objeto de sus propios actos.
Este auto-objeto se forma mediante un proceso de asunción de
papeles basado en las diferentes maneras de definirlo que tienen
los demás.

Esto significa que la persona humana es capaz de establecer una


interacción consigo misma o autointeracción, que es un proceso
en el que el individuo se hace indicaciones a sí mismo, de las
cuales se sirve para orientar sus actos.

Naturaleza de la acción humana

La acción por parte del ser humano "consiste en una


consideración general de las diversas cosas que percibe y en la
elaboración de una línea de conducta basada en el modo de
interpretar los datos recibidos".

Esto concuerda con el concepto de acto de Mead: la acción


humana es un proceso de interacción del ser humano consigo
mismo. La acción es una conducta elaborada por el actor, y no
una respuesta prefigurada de su organización personal.

Esto también es válido para la acción colectiva o conjunta, en la


que intervienen una serie de individuos, y que sería el resultado
de un proceso interpretativo a través de la formulación recíproca
de indicaciones entre quienes intervienen en el mismo.
Interconexión de la acción

La acción conjunta constituye la concatenación de los actos de


los individuos que componen una colectividad. Por lo tanto, es el
resultado de un proceso de formación y utilización de significados,
y no la expresión de formas preestablecidas de acción conjunta.

En una sociedad humana, hay una gran parte de formas


reiterativas y preestablecidas de acción conjunta, que hacen
pensar en un orden de vida establecido. Sin embargo, la acción
conjunta reiterativa y estable es el resultado de un proceso
interpretativo al igual que cualquier nueva forma de acción
conjunta.

La mayoría de las situaciones en una sociedad son definidas por


las personas de idéntica forma, adquieren una definición común
de cómo actuar en cada situación; pero esto no quiere decir que
no exista proceso de interpretación.

"Es el proceso social el que crea y sustenta las normas en la vida


de grupo y no éstas las que forjan y sostienen aquella".

La sociedad está formada por instituciones y organizaciones


sociales, que son redes de acción que implican la un
encadenamiento e interdependencia de los distintos actos de
diversas personas. Pero estas redes no funcionan
automáticamente por medio de dinámicas internas o de
exigencias del sistema, sino porque las personas actúan, y esto
es producto de un proceso de interpretación de la situación.

Toda acción conjunta surge de un historial de acciones previas de


los participantes. Hay que tener en cuenta el vínculo histórico, el
vínculo con las formas precedentes de acción conjunta.

El interaccionismo simbólico atribuye una importancia primordial a


los significados sociales que las personas asignan al mundo que
las rodea. El interaccionismo simbólico reposa sobre tres
premisas básicas. La primera es que las personas actúan
respecto de las cosas e incluso respecto de las otras personas,
sobre la base de los significados que estas cosas tienen para
ellas.

De modo que las personas no responden simplemente a


estímulos o exteriorizan guiones culturales. Es el significado lo
que determina la acción. La segunda premisa dice que los
significados son productos sociales que surgen durante la
interacción. Una persona aprende de las otras personas a ver el
mundo. Y la tercera premisa fundamental del interaccionismo
simbólico es que los actores sociales asignan significados a
situaciones, a otras personas, a las cosas y a sí mismos a través
de un proceso de interpretación.

El Interaccionismo simbólico es una corriente de pensamiento


microsociológica, relacionada con la antropología y la psicología
social que basa la comprensión de la sociedad en la
comunicación y que ha influido enormemente en los estudios
sobre los medios.

El Interaccionismo simbólico se sitúa dentro del paradigma de la


transmisión de la información: emisor-mensaje-receptor, junto a
otras teorías como la Mass Communication Research y la Teoría
Crítica. En este paradigma, la comunicación se considera
instrumental, es decir, los efectos del mensaje se producen
unilateralmente sin tener en cuenta a la audiencia.

Esta corriente, fundamentada al igual que las anteriores en la


filosofía fenomenológica, pone énfasis en la interacción de los
individuos y en la interpretación de estos procesos de
comunicación. El interaccionismo simbólico, no presta mucha
atención a las estructuras sociales, a los sistemas y a las
relaciones funcionales, sino al mundo de significados de los
símbolos dentro del cual actúan los sujetos.
El interaccionismo simbólico como un enfoque relativamente
definido del estudio de la vida de los grupos humanos y del
comportamiento del hombre. Parte de tres premisas básicas:

 El ser humano orienta sus actos hacia las cosas en función


de lo que éstas significan para él.
 El significado de estas cosas se deriva o surge como
consecuencia de la interacción social entre los individuos.
 Los significados se manipulan y modifican mediante un
proceso interpretativo desarrollado por la persona. La
interpretación supone un proceso de autointeracción.

Lo novedoso de este planteamiento reside en que no se limita a


contemplar factores causales, como otras corrientes psicológicas
y sociológicas, en la formación de la conducta humana, sino que
señala la existencia de un proceso interpretativo personal del
significado de las cosas, fruto de la interacción social que orienta
la conducta.

Los conceptos sociológicos sobre la sociedad humana están, por


lo general, en desacuerdo con las premisas del interaccionismo
simbólico:

 No admiten que las sociedades humanas se componen de


individuos dotados de un "sí mismo". Ven a las personas
como organismos que responden a las fuerzas que actúan
sobre ellas: fuerzas de la estructura de la sociedad, o
factores psicológicos.
 No creen que las acciones sociales sean elaboradas por los
individuos mediante un proceso de interpretación, sino que
son producto de los factores que influyen sobre y a través de
los individuos.
 La organización y las modificaciones que sufre son producto
de la actividad de las unidades de acción, y no de "fuerzas"
que las dejan relegadas a un segundo término. Pérez N.,
Ramírez S., Restrepo L.M., Rodríguez, O. A., Sánchez, V.
(2007).
La violencia desde el interaccionismo simbólico.

El interaccionismo simbólico como teoría interpretativa otorga vital


importancia a los significados sociales que las personas asignan
al mundo que las rodea. El individuo a través de la interacción
está en un constante proceso de significación e interpretación del
mundo, y su actuar está en relación a dichas interpretaciones y
significaciones. En tal sentido, Coulon al referirse a las conductas
individuales plantea:

"Para entender la conducta de un individuo, debemos conocer


como percibía la situación, los obstáculos a los que creía tener
que enfrentarse, las alternativas que se le ofrecían; solo
podremos comprender los efectos del campo de posibilidades, de
las subculturas de la delincuencia, de las normas sociales y de
otras explicaciones de comportamiento, si las consideramos
desde el punto de vista del actor"

Las conductas violentas de los individuos no pueden ser


sancionadas y juzgadas exclusivamente en relación a las normas
socialmente establecidas. El reconocimiento del individuo como
sujeto de interacción (relaciones) y de significados que orientan
sus acciones, implica que el tratamiento de dicha acción no queda
supeditado a la sanción como respuesta a la violación de la
norma.

No son las acciones violentas por si mismas las que se deben


abordar en la solución de problemáticas de violencia, sino los
motivos, significantes y fines de las relaciones o interacciones
violentas las que se deben analizar bajo la mirada pedagógica.

Las relaciones violentas como unidad de análisis interpretativos


implican acudir al individuo, a sus representaciones y significados,
a sus prácticas y motivantes, a sus interacciones y relaciones
ínter subjetivas. La contextualización de la acción es el paso
inicial para el abordaje pedagógico de una problemática
relacional. Perdomo, C.A., Cagua F. L., (2008).
La escalada que toma la violencia social que irrumpe en los
establecimientos escolares obliga a revisar algunos temas; por
ejemplo los sistemas disciplinarios escolares.

Está claro y es evidente que debe superar al viejo sistema de


amonestaciones del siglo pasado. Pero es necesario que dé
mejores respuestas que las que dan los actuales y endebles
acuerdos de convivencia institucional y grupal. Las tutorías en la
escuela secundaria y las asambleas de consejos de aula en la
escuela primaria debieran ser herramientas eficaces para abordar
los conflictos.

Estas estrategias, tutorías y consejos, deben contar con


profesionales capacitados para esa tarea específica y no limitarse
a ser figuras formales en un organigrama. Roles, jerarquías y
autoridad deberían ser los ejes para retomar estos temas.

La escuela es la última institución social intermedia que ha


quedado en pie luego de la nefasta década de los noventa. Han
desaparecido otras "instituciones" dónde se socializaban los
chicos: la calle, los vecinos, el club social y deportivo, la bicicleta
en la calle, los amigos con la pelota en la vereda, otros.

Esto se diluyó en las ciudades y está llegando lentamente a los


pequeños pueblos y comunidades del interior (en algunos lugares
se mantienen). La familia, con sus conflictos estalla directamente
en las organizaciones escolares que son las que reciben a los
chicos apenas salen del hogar para hacer su socialización
secundaria. Y al mismo tiempo la sociedad está atrapada por una
gran paradoja: las organizaciones sociales vinculadas a la
educación también son violentas. Por esa razón, hay que pensar
si la escuela es la única referencia posible para contener estas
crisis familiares. Osorio F. (2012).

Fundamentación teórica
Desde las teorías conductistas, las Teorías del condicionamiento
clásico, operante y del aprendizaje social, la conducta agresiva se
aprende por condicionamiento clásico (asociación de un estímulo
con otro que provoca la agresión intrínsecamente), por
condicionamiento operante (recompensas de la conducta
agresiva, aumentan la probabilidad de su aparición) y mediante
aprendizaje social (la conducta agresiva se aprende vicariamente
a través de la observación de modelos reales y simbólicos).
Desde esta última teoría, el comportamiento agresivo es el
resultado del aprendizaje por imitación de modelos violentos.

Según el conductismo, la violencia escolar debe ser analizada


como una conducta agresiva que se adquiere o desaparece en la
medida que existen o no refuerzos que favorecen el despliegue
de la conducta y de los castigos que apuntan a extinguirla.

Lo particular de esta conducta es que se aprende muy temprana y


fácilmente cuando el niño, al ser agresivo, recibe aprobación
social o puede desplazar otros estímulos que le resultan
desagradables (Palomero y Fernández, 2001: 23-24).

La agresión funciona a través del condicionamiento operante.


Este interroga cómo el individuo enfrenta nuevos ambientes, es
decir, cómo se vincula con los elementos que son necesarios
para su sobrevivencia y la de su especie.

Dado que se trata de la sobrevivencia, los comportamientos que


responden a los cambios del ambiente tienen más probabilidades
de desarrollarse, puesto que la sobrevivencia dependerá de ellos;
esto, en consecuencia, se transforma en un reforzador de la
conducta, por lo que tenderá a desarrollarse en condiciones
similares, en la medida que este comportamiento también esté
disminuyendo la amenaza a su sobrevivencia (Skinner, 1977).

Para Skinner, "El comportamiento agresivo puede ser innato y


desencadenarse en circunstancias específicas en las cuales es
plausible el valor de la sobrevivencia" (1977: 46-47). El
comportamiento agresivo, se moldea o mantiene por el refuerzo
que significa el daño causado al otro o porque ciertas
consecuencias no directamente relacionadas con su conducta
agresiva pueden reforzarlo (Skinner, 1977).

El condicionamiento considera que todo comportamiento tiene un


reforzador, y que se pueden condicionar los reflejos cuando se
asocian repetidamente nuevos estímulos (condicionados) con
estímulos no condicionados y llegar a provocar una respuesta que
en esencia, resulta similar a la que ocurrió por un estímulo no
condicionado.

En cuanto a la agresividad, se puede afirmar que la principal


preocupación del conductismo consiste en conocer qué
reforzadores afectan al comportamiento agresivo. Sin embargo,
es complicado reproducir situaciones de agresividad con el único
objetivo de estudiarlo, problemas éticos lo impiden, con lo que los
resultados de los experimentos que buscan enlazar el
condicionamiento reflejo con la agresividad no son concluyentes
(Renfrew, 2005).

No obstante, el condicionamiento operante descrito por Skinner


(1953) tiene mayor facilidad para el estudio de su conexión con la
agresividad, tanto en animales como en humanos. Bajo este
paraguas teórico, se realizaron numerosos experimentos para
explorar la posibilidad de agresión condicionada, como los
estudios clásicos de Milgram (1963)

"Behavioral study of obedience" y Zimbardo (1972) "Interpersonal


and dynamics in a simulated prison" extensamente citados y
analizados por muchos autores desde perspectivas distintas
(Fromm, 1975; Heller, 1980; Renfrew, 2005; Tobeña, 2001).

Cuando se trata de extinguir un comportamiento, se utiliza el


castigo. El castigo opera cuando una persona "critica, ridiculiza,
condena o físicamente ataca a otra persona" con el fin de que
modifique una conducta que se considera como indebida
(Skinner, 1982: 82).

El castigo tiene por finalidad inhibir una conducta que se define


como no apropiada. Se funda en el supuesto que una vez
castigada, la persona no desplegará el mismo comportamiento
(Skinner, 1982: 83). Sin embargo, es probable que la conducta
reaparezca cuando se termine o extinga el castigo (Skinner,
1982).

Debe considerarse, además, que el control juega un rol


importante en esta conceptualización de la agresión. Se sostiene
que el comportamiento de una persona está controlado no por
ella misma; sino por su historia genética y por su historia
ambiental. Además, el comportamiento humano en sí mismo se
constituye en una forma de control, puesto que debe controlar el
ambiente, lo que es fundamental para la sobrevivencia del
individuo y la de la especie (Skinner, 1977).

Desde esta perspectiva, "Las instancias o instituciones


organizadas, tales como gobiernos, religiones y sistemas
económicos, y en menor grado, los educadores y
psicoterapeutas, ejercen un control poderoso y, en ocasiones,
penoso.

Ese control se ejerce de maneras que refuerzan muy


efectivamente a quienes lo ejercen, e, infortunadamente, esto
significa, usualmente, prácticas que son inmediatamente
aversivas para los controlados." (Skinner, 1977: 174).

Se han planteado diversas teorías explicativas sobre la


agresividad y la violencia humanas, desde las que se intentan dar
respuesta a la violencia entre pares o bullying. Desde cada
modelo teórico se atribuyen factores etiológicos diferenciales, es
decir explican el origen de la conducta violenta desde
fundamentos muy distintos: biológicos, emocionales, cognitivos,
ambientales y sociológicas. La agresividad es una potencialidad
de todos los seres vivos, es un mecanismo de conservación y
protección frente al peligro.

Según Cerezo (2007) los componentes de la agresividad son:


factores biológicos, la edad, el nivel de activación hormonal;
mayor incidencia en varones que en mujeres, factores
personales; dimensiones de la personalidad con cierta propensión
a la violencia, factores familiares; patrones de crianza y los
modelos de interacción familiar, factores sociales; especialmente
relativos a los roles asociados a cada individuo dentro del grupo,
factores cognitivos; las experiencias de aislamiento social vividas,
experiencias tempranas de privación social; asociación entre
emocionalidad y agresividad.

Otros factores ambientales, la exposición repetida a la violencia


en los medios de comunicación y en los juegos electrónicos.
Dentro de todos estos factores, existe la probabilidad de una
mayor incidencia en el desarrollo de conductas agresivas en los
niños y niñas, las prácticas o estilos de crianza y el clima familiar.

Aunque en la actualidad la conducta se explica desde la


interacción entre variables personales y ambientales, se presenta
a continuación un breve resumen de las explicaciones parciales
que se han aportado desde cada marco teórico epistemológico.

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Dile “gracias” al autor citándole:

Piedad Acosta Ruiz, (2014). « Teoría epistemológica del bullying:


fundamentación teórica (1a parte) » [en línea]; Revista Vinculando.
URL: http://vinculando.org/psicologia_psicoterapia/teoria-
epistemologica-bullying.html
Marco Teórico. El Marco teórico de la presente investigación
se desarrolla considerando un concepto fundamental el cual
es el ACOSO ESCOLAR, calificado como pilar fundamental
para comprender la problemática que se está viviendo en
Institución Nuestra Señora de Perpetuo Socorro. A través de
esta busca identificar y establecer las características de
comportamiento que intervienen en el ambiente interno de
la institución. Tales como: comportamiento, insultos,
rumores, vejaciones, aislamiento social, motes e insultos,
agresiones físicas, amenazas y coacciones. Estos factores son
indispensables para tener una perspectiva en cuanto al
comportamiento y el modo de actuar de los estudiantes.
Atreves de lo anterior se logra evidenciar el interés de
diverso autores por enfocarse en Acoso Escolar en su
definiciones, sus características, sus elementos con el fin de
tener una percepción más clara más clara de cómo Analizar
el acoso escolar en niños de tercer grado de básica primaria
del Colegio Nuestra Señora del Perpetuo Socorro. Cartagena
de indias. Teniendo en cuenta algunos autores o referentes
en el tema del acoso escolar. Dan Olweus (1978, 1980, 1993)
quien implantó un programa anti acoso para las escuelas de
Noruega El programa Olweus contra el acoso y el
comportamiento antisocial. Ortiz (1997), señala la
perspectiva 13 También citamos a: Rutter, Giller y Hagel, en
lo que respecta al acoso escolar, y a referencia de lo que
sucede con otros temas sociales, la alarma parece justificada
por dos motivos. En primer lugar el conocimiento, a través de
los casos tristemente informados, del sufrimiento que
pueden padecer otros niños que se encuentren en la misma
circunstancia pueden citarse la infidelidad que sienten en el
colegio, las dificultades de concentración y aprendizaje,
síntomas de ansiedad, síntomas físicos como dolores de
cabeza, y estómago. Así como pesadillas. El segundo motivo,
que se desprende directamente del anterior. Es la posibilidad
de intervenir y evitar que se produzca una situación que hace
sufrir al que la padece y que, en un plazo más o menos largo,
también hará sufrir a quien la provoca. Ortiz(1997), señala la
perspectiva de derechos que debe construir un principio
orientador de las acciones de toda institución u organismo
que dentro de su misión , proclame la protección de la
infancia. El acoso escolar se ha vuelto un tópico bastante
común. Algunos niños están en más alto riesgo que otros y
las consecuencias son serias. El tema de la violencia en la
etapa educativa, ha sido el foco de atención de diferentes
áreas de estudio. Es una situación compleja, delicada y muy
seria, que tenemos que comprender en todas sus
implicaciones para poder prevenirla y atenderla.
Primeramente tendremos que definir que es el bullying, tal
como lo marca Goodman (2005) se refiere:”… al uso repetido
y deliberado de agresiones verbales, psicológicas o físicas
para lastimar y dominar a otro niño, sin que hayan sido
precedidas de provocación y en el conocimiento de que la
víctima carece de posibilidades de defenderse.” En tal caso
los participantes en dicho acción se dividen de la siguiente
manera: “agresor” (bully), “victima”, “victima-agresor” y el
“neutro” La mayor parte del acoso ocurre en la escuela, más
que en el camino a ella o de regreso de ella. Los agresores
(bullies) y las víctimas generalmente están en el mismo grado
escolar y, aunque se supone que los menores son
supervisados en la escuela, la mayor parte de los episodios
de acoso no son del conocimiento de los maestros y la
víctima habitualmente se siente incapaz de reportarlos a
éstos y a sus padres. Velasco (2001) Es muy común que los
chicos que son acosados o victimizados, presenten
frecuentemente síntomas psicosomáticos, por ejemplo: que
vomiten cuando saben que irán a la escuela, que les duela la
cabeza o el estómago, etc. Se ha visto que cuando un niño
esté presentando estos síntomas psicosomáticos, se debe
sospechar de Bullying, entre otras cosas. Para comprender
más a cerca de la reacción de este acoso diferentes teóricos
han realizado muestras para poder 14 realizar un estudio
más afondo del problema, tales como Craig y col, que en
2009 informaron que la prevalencia del acoso escolar en 40
países con muestras nacionales representativas fue de 8.6 a
45.2% en varones y 4.8 a 35.8% en mujeres. Además, fueron
identificados como agresores el 10.2%, como víctimas el 12%
y como víctima-agresor el 3%. Numerosos investigadores han
analizado las consecuencias del bullying para la salud general
de los individuos, las repercusiones en la salud mental, el
suicidio y las hospitalizaciones psiquiátricas. [Cerezo, 1997:
37] teoría sociológica de la agresión, ésta propone que la
agresión está dada como respuesta a los fenómenos sociales.
Es por ello que podríamos explicar la evidente violencia
observada hoy en día.

MARCO TEÓRICO

“BULLYING”
El acoso escolar se ha vuelto un tópico bastante común. Algunos niños están en
más alto riesgo que otros y las consecuencias son serias. El tema de la violencia en
la etapa educativa, ha sido el foco de atención de diferentes áreas de estudio. Es
una situación compleja, delicada y muy seria, que tenemos que comprender en
todas sus implicaciones para poder prevenirla y atenderla.
Primeramente tendremos que definir que es el bullying, tal como lo marca Goodman
(2005) se refiere:”… al uso repetido y deliberado de agresiones verbales,
psicológicas o físicas para lastimar y dominar a otro niño, sin que hayan sido
precedidas de provocación y en el conocimiento de que la víctima carece de
posibilidades de defenderse.” En tal caso los participantes en dicho acción se
dividen de la siguiente manera: “agresor” (bully), “victima”, “victima-agresor” y el
“neutro”
La mayor parte del acoso ocurre en la escuela, más que en el camino a ella o de
regreso de ella. Los agresores (bullies) y las víctimas generalmente están en el
mismo grado escolar y, aunque se supone que los menores son supervisados en la
escuela, la mayor parte de los episodios de acoso no son del conocimiento de los
maestros y la víctima habitualmente se siente incapaz de reportarlos a éstos y a sus
padres. Velasco (2001)
Es muy común que los chicos que son acosados o victimizados, presenten
frecuentemente síntomas psicosomáticos, por ejemplo: que vomiten cuando saben
que irán a la escuela, que les duela la cabeza o el estómago, etc. Se ha visto que
cuando un niño esté presentando estos síntomas psicosomáticos, se debe
sospechar de Bullying, entre otras cosas. Para comprender más a cerca de la
reacción de este acoso diferentes teóricos han realizado muestras para poder
realizar un estudio más afondo del problema, tales como Craig y col, que en 2009
informaron que la prevalencia del acoso escolar en 40 países con muestras
nacionales representativas fue de 8.6 a 45.2% en varones y 4.8 a35.8% en mujeres.
Además, fueron identificados como agresores el 10.2%, como víctimas el 12% y
como víctima-agresor el 3%. Numerosos investigadores han analizado las
consecuencias del bullying para la salud general de los individuos, las
repercusiones en la salud mental, el suicidio y las hospitalizaciones psiquiátricas.
Por otro lado tenemos el TDAH (Trastorno de Déficit de Atención e Hiperactividad).
El TDAH es un trastorno de conducta que aparece en la infancia, y que se suele
empezar a diagnosticar en torno a los 7 años de edad aunque en algunos casos
este diagnóstico se puede realizar de una manera más precoz. Se manifiesta como
un aumento de la actividad física, impulsividad y dificultad para mantener la atención
en una actividad durante un periodo de tiempo continuado. Además de esto hay
niños en los que se observan a su vez problemas de autoestima debidos a los
síntomas propios del TDAH y que los padres no suelen asociar a dicho trastorno. A
su vez, el TDAH se puede asociar con frecuencia a otros problemas, y sus
consecuencias se aprecian en distintos ambientes de la vida del niño, no solo el
escolar, sino que también afecta en gran medida a las relaciones interpersonales
tanto con la familia, como con otros niños y con sus educadores, siendo estas
interrelaciones clave en el desarrollo del niño. Canto (2009)
Un punto interesante a mencionar, es que, cuando se es víctima y perpetrador a la
vez (ejemplo son los chicos con TDAH),se tiene tres veces más probabilidades de
presentar ideación suicida, y hasta cuatro veces más probabilidades de que dicha
ideación continúe aún en la juventud y adultez.
No es raro que presenten también estas otras consecuencias del TDAH frente a sus
compañeros:

• Tengan roces con otros estudiantes o compañeros (agresiones por impulsividad;


no seguir las normas o reglas en los juegos).

•Terminen siendo rechazados.

• Ocupen lugares especiales en clase (donde no molesten, pero también donde más
difícil es mantener la atención en clase).

• Sean amonestados o incluso expulsados del colegio. Cervera (2009).

Como consecuencia de diferentes asociaciones de patrones de conducta que


vienen acompañado de acciones psicosomáticas tenemos este comportamiento
violento en los niños. Tal como se había mencionado antes, “El Bullying” es un
sistema de participantes. No solo es el perpetrador, sino también las víctimas, los
perpetradores-víctimas y los espectadores. Además, no solo involucra niños, sino
también maestros, abuelos, cuidadores, padres, tíos porque permiten el problema.
Existen varias formas de Bullying: Bullying físico (golpes, aventones, peleas,
etc.)Bullying verbal (groserías, apodos, cantaletas, cartas o notas intimidantes,
etc.) Bullying con gestos (miradas, sacar la lengua, hacer un ademán de mofa, de
humillación, etc.). Rodriguez (2001).

Estas tres formas son Bullying Directo, y existe otro tipo que se
llama Bullying Indirecto, y es cuando a la víctima se le aísla, se le saca de un
grupo o no se le permite la integración a algún grupo. Se habla rumores de la
víctima, etc. Este tipo de Bullying es muy común entre mujeres.
Las problemáticas de la niñez, la infancia, la adolescencia y la juventud se
convierten en asuntos realmente importantes para algunas disciplinas científicas y
para Organizaciones Gubernamentales y No Gubernamentales cuando se empieza
a asumir la perspectiva de derechos, la cual se fundamenta en la Convención
Internacional de los Derechos del Niño y que postula como eje principal para el
abordaje para estas problemáticas el reconocimiento, garantía y restablecimiento
de los derechos de los niños, las niñas y los adolescentes. Hurtado (2007
La preocupación por la presencia de dicho fenómeno no se limita únicamente a sus
consecuencias sino a su impacto en los procesos de educación. Benítez y Justicia
(2006).

ANTECEDENTED DEL BULLYING


1. Origen del bullyngAntecedentes delbullyngEl bullying ha existido desdelos
orígenes del hombre, perodonde se dio a conocer y se dioa la luz este
verdaderoproblema fue en EstadosUnidos, donde se le llamoviolencia o intimidación
escolar“bullying”.
2. Algunos antecedentes históricos del Bullyingo Suicidios en la década delos 80o
del Prof. Dan Olweus deNoruega (1978 a 1993) y lacampaña nacional anti-bullying
3. Dominio y jerarquía:
 El estrés de la vida, provocado por la intimidación de los compañeros de la
escuela.
 la falta de tiempo de los padres (muchos de ellos separados) para dedicarse
a sus hijos
 las continuas imágenes de brutal violencia gratuita en los videojuegos y en la
televisión; el mal ejemplo que se da, a niños y jóvenes
 El consumo precoz de alcohol y drogas
4. VIOLENCIA EN CASAViolencia intrafamiliar A través de la familia se adquieren
los primeros modelos de comportamiento, que tienen una gran influencia en el resto
de relaciones que se establecen con el entorno. Desde la familia se originan los
siguientes problemas:
• Maltrato infantil
• Maltrato conyugal
• Maltrato a los ancianos
El bullying surge desde la antigüedad desde el primer momento en el que la gente
en un momento u otro se desmoralizo unos segundos alvidó sus valores y decidió
que sería buena idea hacer sufrir a un ser inocente por su causa; la única diferencia
es que hoy en día se ha vuelto un tema de suma importancia por el hecho de que
se ha estado creando el "ciber bullying", este es la manera en que las personas
molestan a otras a través de la gran tecnología que tenemos, subiendo videos
molestos a You tube , atacándolos con insultos en las páginas sociales como
facebook, twitter, etc.
Es un problema muy grave ya que hace que las personas se deshumanicen al tratar
a los demás como si no valieran.
El bullying puede tener consecuencias a largo plazo tanto académico, físico como
emocional en los bullies, sus agredidos y en testigos. La incidencia del bullying en
las escuelas tiene un impacto negativo en la oportunidad de los estudiantes de
aprender en un ambiente seguro y donde ellos sean tratados con respeto. (Sheillard
and Turner, 2004;Lumsden, 2002)

Las víctimas a menudo tienen dificultades de concentración en sus labores


escolares, y pueden experimentar una disminución en el desempeño académico.
Presentan un ausentismo mayor de lo usual, así como de deserción escolar y
pueden mostrar signos de soledad. Presentan dificultades haciendo ajustes sociales
y emocionales, dificultad para hacer amigos, y pobres relaciones con los
compañeros de clases.
A menudo sufren de humillación, inseguridad, disminución de autoestima y pueden
desarrollar temor de asistir a la escuela. El impacto del bullying frecuente puede
acompañar a las agredidos durante la adultez donde aparecen como un mayor
riesgo de depresión y otros problemas en salud mental (Shellard 2002, Office of J
and D 2001)

Con frecuencia la violencia en la escuela se asocia a situaciones como indisciplina,


burlas, peleas y destrucción del material y de la infraestructura de las instituciones
educativas. El acoso escolar es un tipo de violencia que se manifiesta por
agresiones sicológicas, físicas o sociales, repetidas, que sufre un niño en el entorno
escolar por sus compañeros. Para distinguir el acoso escolar de otras acciones
violentas, como por ejemplo, una pelea entre compañeros, es necesario reconocer
dos características que identifican el acoso escolar. La primera es la existencia
intrínseca de una relación de poder (dominio-sumisión) que tiene uno o varios
agresores sobre otro que es el agredido o acosado. La segunda es que, en el acoso,
las situaciones de agresión se presentan en forma reiterada.
Un niño acosado puede presentar depresión, temor, baja autoestima, aislamiento y
sentimientos de rechazo. Estas y otras características del niño acosado afectan su
vida diaria, su desarrollo personal y, en general, todas sus actividades.
Cuando hablamos de Bulliyng, debemos tener en claro que se puede manifestar de
muchas maneras.
Algunas pueden ser:

Físicas: dar patadas, empujar, llevar o dañar objetos personales de otros.

Verbales: burlas, insultos, amenazas, mentiras, rumores personales y/o familiares.

Emocionales: humillación, victimización, exclusión, ridiculización. Son difíciles de


detectar porque son formas de amenaza que se hacen a espaldas.

Cyber bullying: envió de mensajes negativos por teléfonos celulares o correo


electrónico, insultos en Chat o Foros

Variables grupales implicadas


Al pensar la vida emotiva en el aula, es necesario tener en cuenta su entramado de
relaciones socio-afectivas marcadas por la popularidad de cada uno de sus
miembros. Según las elecciones o los rechazos que los demás hagan de un sujeto
podemos distinguir en cada grupo tres tipos sociométricos diferentes:
a) El alumno popular. Puede serlo por prestigio exterior o por destrezas
personales; por ser al que sigue gran parte del grupo, en ocasiones aun no
aceptándolo, por temor; o bien, por encarnar el ideal del grupo, en cuyo caso será
el líder del grupo.
b) El alumno aislado. Aquél a quien nadie, o casi nadie, elige. Está desatendido y
pasa desapercibido.
c) El alumno rechazado o impopular. Al que la mayoría señalan como indeseable.
Las consecuencias son bien dispares, la popularidad tiene efectos muy positivos
para el sujeto, mientras que su carencia fomenta sentimientos negativos, ante lo
cual, hay quienes tratarán de reforzar su autoestima a través de actividades
compensatorias; otros acrecientan su agresividad, fanfarronean y mienten; y otros,
en fin, incrementan los sentimientos de incapacidad e inferioridad. La conducta que
los niños adaptados mantienen con sus compañeros, se caracteriza por un alto nivel
de participación y por una frecuencia elevada con que se dirigen a ellos
amistosamente. Los rechazados, por el contrario, mantienen contactos agresivos
con una frecuencia muy superior, manifestan expresiones de desacuerdo y
demandas de atención sobre sí mismo y carecen de refuerzos positivos de los
demás.
La cohesión en cada grupo tiene dos fuentes principales: la atracción que
representan las actividades escolares para cada uno de sus miembros y la atracción
que experimentan los alumnos entre sí. En las edades escolares una de las
manifestaciones claras de integración y adaptación al grupo de iguales es la
imitación y la uniformidad. Los niños tratan de imitar la forma de vestir, de
expresarse, y especialmente las normas de comportamiento social de sus
compañeros. Dos factores tienden a reforzar esta conducta: por un lado, la
necesidad de conformar la pertenencia al grupo y de otra parte la necesidad de
competencia, el resultado es que, todo individuo quiere ser como los demás, pero,
a ser posible, un poco mejor. Los alumnos de estatus elevado y popular ejercen un
efecto especial como agentes de cambio de conducta en el grupo. La cantidad y
calidad de la comunicación dentro del grupo acrecienta la cohesión, el buen
ambiente y el interés de todos sus miembros por el grupo.
Por lo general, los grupos donde las conductas de agresión y victimización se
exhiben de manera habitual presentan un índice de cohesión muy bajo, a lo sumo
aparecen pequeños subgrupos inconexos entre sí, lo que facilita la formación de
bandos enfrentados y sujetos aislados.

Este tipo de violencia escolar se caracteriza, por tanto, por una reiteración
encaminada a conseguir la intimidación de la víctima, implicando un abuso de poder
en tanto que es ejercida por un agresor más fuerte (ya sea esta fortaleza real o
percibida subjetivamente) que aquella. El sujeto maltratado queda, así, expuesto
física y emocionalmente ante el sujeto maltratador, generándose como
consecuencia una serie de secuelas psicológicas (aunque estas no formen parte
del diagnostico); es común que el acosado viva aterrorizado con la idea de asistir a
la escuela y que se muestre muy nervioso, triste y solitario en su vida cotidiana. En
algunos casos, la dureza de la situación puede acarrear pensamientos sobre el
suicidio e incluso su materialización, consecuencias propias del hostigamiento hacia
las personas sin limitación de edad.

Son muchos los factores que inciden en que un niño llegue a tener conductas
agresivas, por eso es importante tener en cuenta lo siguiente:

El acoso escolar puede ser físico.

El acoso escolar (también conocido como hostigamiento escolar, matonaje escolar


o por su término inglés bullying) es cualquier forma de maltrato psicológico, verbal
o físico producido entre escolaresde forma reiterada a lo largo de un tiempo
determinado. Estadísticamente, el tipo de violencia dominante es el emocional y se
da mayoritariamente en el aula y patio de los centros escolares. Los protagonistas
de los casos de acoso escolar suelen ser niños y niñas en proceso de entrada en la
adolecencia (12-13 años), siendo ligeramente mayor el porcentaje de niñas en el
perfil de víctimas.
El acoso escolar es una forma característica y extrema de violencia escolarEl acoso
escolar es una especie de tortura, metódica y sistemática, en la que el agresor sume
a la víctima, a menudo con el silencio, la indiferencia o la complicidad de otros
compañeros.

Bullying marco-teorico
1. 1. BULLYING
2. 2. Que es Bullying? El bullying es el maltrato físico y/o psicológico deliberado y
continuado que recibe un niño por parte de otro u otros, que se comportan con él
cruelmente con el objetivo de someterlo y asustarlo, con vistas a obtener algún
resultado favorable para los acosadores o simplemente a satisfacer la necesidad de
agredir y destruir que éstos suelen presentar. El bullying implica una repetición
continuada de las burlas o las agresiones y puede provocar la exclusión social de la
víctima.
3. 3. Características del Bullying  Tiende a originar problemas que se repiten y
prolongan durante cierto tiempo.  Suele estar provocado por un alumno, apoyado por
un grupo, contra una víctima que se encuentra indefensa.  Suele incluir conductas de
diversa naturaleza (burlas, amenazas, agresiones físicas, aislamiento sistemático, etc).
 Se mantiene debido a la ignorancia o pasividad de las personas que rodean a los
agresores y a las víctimas sin intervenir directamente.
4. 4. Características del Bullying  Disminuye la capacidad de comprensión moral y de
empatía del agresor, mientras que se produce un refuerzo de un estilo violento de
interacción.  En las personas que observan la violencia sin hacer nada para evitarla,
se produce falta de sensibilidad, apatía e insolidaridad.  La víctima desarrolla miedo
y rechazo al contexto en el que sufre la violencia; pérdida de confianza en sí mismo y
en los demás, junto a disminución del rendimiento escolar.  Se reduce la calidad de
vida del entorno en el que se produce: dificultad para lograr objetivos y aumento de los
problemas y tensiones.
5. 5. Tipos de Bullying. Podemos hablar de varios tipos de acoso escolar que, a menudo,
aparecen de forma simultánea:  - Físico: empujones, patadas, agresiones con
objetos, etc. Se da con más frecuencia en Básica que en Media.  - Verbal: insultos,
menosprecios en público, resaltar defectos físicos, etc. Es el más habitual.  -
Psicológico: aminoran la autoestima del individuo y fomentan su sensación de temor.
 - Social: pretende aislar al joven del resto del grupo y compañeros.
6. 6. Tipos de Bullying.  el Bullying Cibernético consiste en utilizar medios electrónicos
como el pc y el celularpara acosar, intimidar y agredir psicológicamente a las víctimas,
en estos medios el acosador no da la cara por lo que en el anonimato se siente seguro
y protegido insultando y dañando al acosado, en este tipo de Bullying la actitud de la
víctima no varía, al igual que en el acoso escolar, el niño o muchacho no se atreve a
denunciaro informar a maestros y/o padres acerca de su situación por miedo y
vergüenza, ya que en ocasiones las agresiones van más allá de los insultos
difundiendo porinternet información, correos, videos o fotografías que atentan contra la
intimidad del agredido, y el celulares utilizado para agredir e intimidar constantemente
al acosado enviándole mensajes de texto intimidatorios.
7. 7. Causas del Bullying. Las causas de este fenómeno de bullying o acoso escolar son
múltiples y complejas. Existen, en nuestra sociedad, ciertos factores de riesgo de
violencia, como la exclusión social o la exposición a la violencia a través de los medios
de comunicación. Sin embargo, carecemos de ciertas condiciones protectoras que
podrían mitigar los efectos de dichos factores, como modelos sociales positivos y
solidarios, contextos de ocio y grupos de pertenencia constructivos o adultos
disponibles y atentos para ayudar.
8. 8. La Familia  A través de la familia se adquieren los primeros modelos de
comportamiento, que tienen una gran influencia en el resto de relaciones que se
establecen con el entorno.  Cuando los niños están expuestos a la violencia familiar,
pueden aprender a ver el mundo como si sólo existieran dos papeles: agresor y
agredido. Por ello, pueden ver la violencia como la única alternativa a verse convertido
en víctima.  Una situación de maltrato del niño por parte de los padres contribuye a
deteriorar la interacción familiar y el comportamiento del niño en otros entornos: 
Disminuye la posibilidad de establecer relaciones positivas.
9. 9.  Se repite crónicamente, haciéndose más grave.  Se extiende a las diversas
relaciones que los miembros de la familia mantienen.  Un importante factor de riesgo
de violencia familiar son las condiciones de pobreza y dificultades que de ella se
derivan, ya que esto aumenta el estrés de los padres, que muchas veces es superior a
su capacidad para afrontarlo. Por eso, son necesarias acciones encaminadas a
mejorar las condiciones de vida de familias en graves dificultades económicas. La
Familia
10. 10. Medios de comunicación y bullying  Los medios de comunicación, sobre todo la
televisión, nos exponen continuamente a la violencia, tanto real (Noticias) como ficticia
(películas), y por eso son considerados como una de las principales causas que
originan la violencia en los niños y jóvenes.  Los comportamientos que los niños
observan en televisión, influyen en el comportamiento que manifiestan inmediatamente
después, por lo que es necesario proteger a los niños de la violencia a la que les
expone la televisión e incluso debería plantearse la posibilidad de utilizar la televisión
de forma educativa para prevenir la violencia.
11. 11. Medios de comunicación y Bullying  - La influencia de la televisión a largo plazo
depende del resto de relaciones que el niño establece, ya que interpreta todo lo que le
rodea a partir de dichas relaciones. Por eso la violencia no se desarrolla en todos los
niños, aunque estén expuestos por igual a la violencia televisiva.  - La repetida
exposición a la violencia puede producir cierta habituación, con el riesgo de
considerarla como algo normal, inevitable y de reducirse la empatía con las víctimas.
Es importante promover en los niños la reflexión respecto a la violencia que nos rodea.
 - La incorporación de la tecnología audiovisual al aula podría ser de gran utilidad
como elemento educativo en la prevención de la violencia.
12. 12. Como identificar el Bullying en mi curso  Cambio de comportamiento en nuestros
compañeros retraimiento y desgano al ir al colegio.  Baja Autoestima.  Observar
sentimientos de tristeza.  Conversar con nuestros compañeros, buscar las instancias
para solidificar los vínculos.  Respetar y empatizar con ellos cuando relatan
situaciones importantes, aunque para usted no sea así.
13. 13. Marco Legal Bullying.  Reglamento interno de los colegios: establecen normas de
convivencia y sanciones a las infracciones. Sin embargo, no todos los
establecimientos mencionan este tipo de situaciones.  Recurso de protección: para
asegurar en la práctica los derechos que están en la Constitución, como la integridad
física y síquica. Se interpone en la Corte de Apelaciones.  Medida de protección:
para proteger al menor. La pueden interponer los padres, profesores o directores del
colegio ante un tribunal de familia.  Acciones criminales: hay conductas asociadas al
bullying que constituyen delito como lesiones físicas, hurtos y abusos sexuales. En
este caso los mayores de 14 años son responsables, cualquiera puede hacer la
denuncia ante la policía, el Ministerio Público y los tribunales, los profesores y
directores tienen la obligación de hacerlo. De hecho, recientemente un fallo del
Undécimo Juzgado de Garantía de Santiago declaró con discernimiento a menor
implicado en caso de bullying.  - Acciones civiles: estas demandas apuntan a que se
indemnice por incumplimiento de las obligaciones de cuidado y protección que tiene un
colegio con sus alumnos. Pueden interponerlas los padres contra el agresor y/o contra
el colegio ante un juzgado civil.
14. 14. Estudio Unicef.  Discriminación: ser rechazado, mirado en menos, excluido,
ridiculizado, etc.  Un 31% de los alumnos (niños, niñas y jóvenes entre 12 y 18 años)
se han sentido discriminados “a veces o siempre” en su escuela.  De estos, se
sienten más discriminados los hombres y, los niños y niñas de 12 y 13 años.  Un
85% de los alumnos que se sienten discriminados, dice que quienes los rechazan,
miran en menos, etc., son sus propios compañeros.  Quienes sufren más de las
bromas y descalificaciones son: los que tienen un problema o defecto físico, los que
poseen rasgos indígenas, los que tienen menos recursos económicos, los que les va
mal en el colegio, los que piensan diferente de la mayoría y los que vienen de otros
países.  Violencia: ser maltratado, agredido, amenazado, abusado, etc.  Un 18% de
los alumnos (niños, niñas y jóvenes entre 12 y 18 años) dice haber sido víctima de
maltrato, abuso o amenaza por parte de sus compañeros(as), a veces (14%) y
frecuentemente(2%).  Los que más han sufrido este tipo de violencia son los niños y
niñas de 12 y 13 años.  Las razones más habituales por las cuales un compañero
maltrata o abuso de otro son: por ser más débil, por ser molestoso, por provocación,
por ser diferente.
15. 15. Consecuencias de la intimidación yConsecuencias de la intimidación y maltrato
entre alumnosmaltrato entre alumnos  Víctimas: afecta gravemente el desarrollo de
su personalidad. Daño físico, psicológico y moral. Disminución de autoestima,
sentimientos de miedo, vergüenza y debilidad. Baja el rendimiento académico. 
Agresor: les hace creer que gozan de impunidad ante hechos injustificables y destruye
sus posibilidades de integración social. Existe relación con conductas delictuales en la
vida adulta.  El resto de los escolares: como espectadores conviven en un clima de
temor e injusticia y terminan creyendo en la “ley del más fuerte” .  Profesorado:
dificulta la labor educativa, genera problemas de indisciplina y produce desánimo e
impotencia entre los docentes cuando no se cuenta con herramientas para enfrentar el
problema.  Comunidad Educativa: daña la convivencia escolar. Define normas de
convivencia no escritas fundadas en la ley del más fuerte.
16. 16. Comportamientos de Acoso Escolar 1- Colocarsobrenombres . 2- No hablarle. 3-
Reírse de él cuando se equivoca. 4- Insultarle. 5- Acusarle de cosas que no ha dicho o
no ha hecho. 6- Contarmentiras sobre él. 7- Meterse con él porsu forma de ser. 8-
Burlarse de su apariencia física 9- Ponerle en ridículo ante los demás. 10-
Hacergestos de burla o desprecio. 11- Gritarle. 12- Criticarportodo lo que hace. 13-
Imitarlo para burlarse. 14- Odiarlo sin razón. 15- Cambiarel significado de lo que dice.
16- Agresión Física. 17- No dejarlo hablar. 18- Escondersus cosas. 19- No dejarlo
jugarcon el grupo. 20- Meterse con él para hacerle llorar. 21- Decira otros que no estén
con él o que no le hablen. 22- Molestarporsu forma de hablar. 23-
Molestarporserdiferente. 24- Robary destruirsus cosas.

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