En la doctrina jurídico penal se reconoce la existencia de un derecho
penal económico al que se ha caracterizado como los comportamientos descriptos en las leyes que lesionan la confianza en el orden económico vigente con carácter general o en alguna de sus instituciones en particular, y por tanto ponen en peligro la propia existencia y las formas de actividad de ese orden económico. (Gerscovich. C, Derecho económico, cambiario y penal, 2006, pág. 290)
El derecho penal económico, en líneas generales puede definirse como la
rama del derecho penal que desde una perspectiva normativa busca proteger el sistema o modelo económico diseñado constitucionalmente, de forma tal de permitir que los sujetos económicos puedan interactuar dentro de un esquema de libre mercado, ofertando o demandando; y que el Estado pueda cumplir adecuadamente su rol social y regulador.
Los bienes jurídicos que conforman el modelo económico, son de
naturaleza colectiva, es decir que su titularidad recae sobre todo el entramado social y no puede ser atribuido a una persona en particular; así tenemos el orden financiero, el orden monetario, el orden laboral, el orden tributario, etc.
El derecho penal económico en sentido estricto es el conjunto de normas
y principios aplicables a aquellas conductas que afectan los bienes jurídicos colectivos que conforman el ordenamiento económico, constitucionalmente definido, sin embargo, la interacción económica va más allá de los objetos de protección colectiva. El Derecho Penal Económico se trata de una especialidad del Derecho Penal que en gran medida encuentra solución en la dogmática general de éste, pero que además requiere soluciones no prevista por dicha dogmática, en función de características especiales de los delitos de esta clase. (Righi. E, Delitos económicos, 2000, pág. 41).
2. LA PROTECCION DE BIENES JURIDICOS
La Constitución bajo el modelo de democracia representativa va
regulando los principios básicos de la convivencia social, estableciendo los parámetros básicos de cada faceta del quehacer social, estructurando un verdadero modelo de sociedad, estipulando los lineamientos generales que deben ser observados por los sujetos de derechos, en ámbitos como el económico, el cultural, el laboral, el político, etc.
Este modelo u orden social consagrado en el texto constitucional debe ser
preservado a través de los diferentes mecanismos de control social con que cuenta el Estado y la sociedad en general, ya sean estos formales o informales, los mismos que deben propugnar porque las personas adecúen sus comportamientos a los lineamientos del esquema social establecido constitucionalmente, o por lo menos, que no lo trasgredan.
3. EL MODELO ECONOMICO Y SU PROTECCION A TRAVEZ DEL
DERECHO PENAL 4. LAS VELOCIDADES DEL DERECHO PENAL 5. COMPLEMENTARIEDAD ENTRE EL DERECHO PENAL Y EL DERECHO ADMINISTRATIVO CAPITULO II: EL NUEVO CODIGO PROCESAL PENAL 1. PROCESO PENAL DE LOS DELITOS INFORMATICOS 1.1 La iniciación de la investigación del delito
1.2 Órgano auxiliar
1.3 Partes procesales en la investigación delictiva 2. PROCESO PENAL DE LOS DELITOS CONTRA LOS DERECHOS INTELECTUALES 3. PROCESO PENAL DE LOS DELITOS CONTRA LA PROPIEDAD INDUSTRIAL 4. PROCESO PENAL DEL DELITO DE CONTROL DE PRECIO 5. PROCESO PENAL DEL DELITO DE USURA 6. PROCESO PENAL DE LOS DELITOS TRIBUTARIOS 7. PROCESO PENAL DE LOS DELITOS ADUANEROS 8. PROCESO PENAL DE LOS DELITOS CONTRA LA ECOLOGIA 9. PROCESO PENAL DE LOS DELITOS DE CORRUPCION BIBLIOGRAFIA Gerscovich, Carlos A. “Derecho Económico, Cambiario y Penal” pags. 290; Ed. Lexis Nexis, Buenos Aires; 2006
Righi, Esteban; “los Delitos Económicos” Ed. Ad Hoc; pags. 41; Buenos Aires; 2000