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Plan de Continuidad del Negocio

La historia se repite
La protección contra incendios

Plan de Continuidad del Negocio

La historia se repite

La protección contra incendios

Protección contra Incendios

Almacenes de Deposito, un gran reto para la protección contra

incendios
El 24 de Diciembre de 2007, todas las unidades del
cuerpo de bomberos de Medellín, Envigado y demás
municipios vecinos, respondieron al llamado de
emergencia de un almacén de deposito en el que se
desarrollaba un incendio, solo para darse cuenta de que
ya no había manera de detenerlo. Muchos concentraron
sus esfuerzos en actividades de refrigeración que
impidieran que el incendio se propagara a bodegas
vecinas mientras otros solo miraban impotentes como el
fuego terminaba de consumir un par de bodegas de casi
36.000 m2 repletas de mercancía en donde ni siquiera era
posible aproximarse debido a las llamas de mas de 30 mt.

Podemos encontrar ejemplos similares en todo el país,

con un incremento preocupante de casos en los últimos
años, al parecer no solo por el hecho de que la misma
actividad de almacenamiento sea considerada como un riesgo agravado tal como lo
veremos mas adelante, sino por la tendencia en general de la industria de disponer de
grandes centros de logística y almacenamiento en espacio cada vez mas limitados debido a
la saturación de las grandes ciudades y las altas inversiones en infraestructura que se
requieren.

Solo en los Estados Unidos, se presentan un promedio de 22,600 incendios al año en

almacenes de depósito, lo que equivale a casi 62 incendios diarios. Estas estadísticas
aunque se dan en un contexto de industrialización diferente al caso Colombiano, si dan una
señal de la vulnerabilidad de estos complejos industriales sin sumarle a la ecuación el hecho
de en Colombia son escasas las empresas que cuentan con sistemas de protección contra
incendios apropiados para el riesgo que representan estos depósitos.[1]

Desde las grandes compañías de manufactura y comercio hasta las pequeñas empresas y
tiendas de barrio, requieren disponer de espacios destinados a almacenar materias primas e
insumos que alimenten su proceso productivo de manera oportuna (Almacenes de materia
prima) y espacios en los que puedan disponer también de manera organizada el resultado
de su producción. (Almacenes de Pto Terminado)

A mayor o menor escala, encontramos como un factor común en todas las empresas los
centros de almacenamiento. Estos han retomado en los últimos años mayor importancia
debido al incremento de la demanda, la apertura de los mercados y las implicaciones claves
sobre los proceso productivos y de comercialización.

Las bodegas de almacenamiento del pasado, saturadas de producto hasta el techo en

cuartos pequeños que fueron adecuados de manera parcial, están siendo reemplazados por
grandes edificios con estanterías dobles de hasta 15 mt, separadas entre sí por pequeños
espacios aprovechando al máximo el área disponible.

Este método de almacenamiento en alturas, es incentivado por las limitaciones en espacio

cada vez más típicos en nuestras ciudades, los altos costos en la adquisición de nuevos
terrenos y sus implicaciones en el transporte, las nuevas tecnologías y métodos de
manipulación que pueden casi de manera automática ubicar y descargar un producto a más
de 15 mt y la búsqueda de una mayor productividad y confiabilidad en los procesos.

Por otro lado, las protecciones contra incendio no han sufrido la misma transformación y es
así como encontramos grandes centros de almacenamiento protegidos solo por un par de
extintores.

Estas ocupaciones presentan todo un reto para la ingeniería en protección contra incendio
debido a las grandes cantidades de material combustible concentradas en áreas reducidas,
dispuestas en arreglos verticales que favorecen enormemente la rápida propagación de un
incendio. Para entender esto utilizamos un ejemplo más cercano.

Los almacenamientos actuales, tienen una gran similitud con las fogatas que
armamos por diversión en nuestros campamentos.

Normalmente buscamos ubicar algunos palos de madera alrededor de un centro en donde

ubicamos material más delgado y fácil de encender, teniendo cuidado en dejar espacio s
entre los pequeños trozos de madera para evitar ahogar el fuego y a medida que el fuego va
creciendo vamos adicionando trozos de madera en la parte superior que entran en contacto
con la llama aumentando el tamaño del fuego y por ende el calor liberado, inclusive siendo
este a veces tan intenso que debemos retirarnos algunos metros.

Esta misma configuración a una mayor escala es la que encontramos en los centros de
almacenamiento. (fogatas de hasta 15 mt de altura) Tenemos grandes arreglos verticales en
donde almacenamos mercancía sobre estanterías con espacio de aire entre estibas o cajas
para facilitar su manipulación. Adicionalmente aunque algunas de las mercancías son de
difícil ignición, las envolvemos en bolsas plásticas o cajas de cartón ubicadas en estibas de
madera, en general producto de fácil ignición. El comportamiento del fuego en estas
condiciones es bastante contundente.

http://www.sura.com/RiesgoAlSeguro/Sections/ProteccionIncendio.aspx 18/01/2014
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Un fuego inicialmente incipiente alcanza la parte superior de la estantería en cuestión de

segundos ya que encuentra material combustible en su recorrido natural (vertical),
comprometiendo ya gran parte de la mercancía. Se ha demostrado mediante experimentos a
escala real, que un incendio en un almacén de deposito, tiene un crecimiento a la tercera
potencia del tiempo. Es decir que en pocos segundos, un incendio pasa de ser un simple
conato a un incendio de grandes magnitudes.

Esto explica él porque fracasan con tanta frecuencia los intentos iniciales de los ocupantes
por suprimir manualmente los incendios, durante el tiempo que les toma darse cuenta del
incendio y su ubicación, el incendio ha alcanzado ya una dimensión que no permite que este
pueda ser extinguido por extintores portátiles o por una única manguera de bajo caudal. [1]
Debido a la proximidad entre estanterías el fuego se propaga a las estanterías vecinas
inicialmente por la radiación generada por las altas temperaturas y luego porque la misma
estantería encendida se desmorona rápidamente y su material encendido entra en contacto
con la mercancía vecina.
Las cubiertas (techos) también metálicas ceden fácilmente ya que pierden su capacidad
portante cayendo sobre la misma estantería, aumentando el caos.

A diferencia de las fogatas a campo abierto, los centros de deposito tienen el agravante de
que se encuentran en un reciento cerrado, que aunque tiene suministro ilimitado de oxigeno
no pueden evacuar de manera efectiva el humo lo que inhabilita rápidamente el edificio,
haciéndolo inhabitable y por ende imposibilitando el ataque o control manual de las brigadas
de bomberos. El mismo humo es el que causa normalmente la mayor cantidad de perdidas
de vidas humanas.

Intentar apagar o controlar un incendio de esta magnitud solo con medios de extinción
manuales, sería similar a intenta apagar la misma fogata solo con una pequeña jeringa
cargada de agua, en donde el agua se evapora inclusive antes de entrar en contacto con la
fuente del incendio.

Organizaciones internacionales como la NFPA (National Fire Protection Association),

destinan normas específicas al estudio y protección de ocupaciones de almacenamientos.

Estos códigos recopilan una serie de enseñazas de miles de incendios en todo el mundo y
pruebas de laboratorio que buscan orientar a las empresas en la implementación de las
protecciones adecuadas para reducir el impacto de los incendios

El éxito de un almacén general de deposito debiera ser medido no solo por su capacidad de
almacenamiento y respuesta sino también por la efectividad de su sistema de protección que
finalmente es quien garantiza su permanencia en el tiempo. Esconderse detrás de la cortina
del típico discurso de que esto no sucede sino a otros o pensar que con un par de extintores
y un suministro de agua convencional estamos protegidos no disminuye la probabilidad de
ocurrencia.

El primer paso debería ser reconocer las virtudes y falencias de los sistemas de
protección ya instalados y crear un plan de trabajo a mediano plazo que permita dotar
las instalaciones de sistemas diseñados y probados para dichas ocupaciones.

Por:Andrés F. Rave
Ingeniero de riesgos
CEPI ( Certificado Especialista en protección contra incendios)

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http://www.sura.com/RiesgoAlSeguro/Sections/ProteccionIncendio.aspx 18/01/2014