¿Quién te llorará cuando te mueras?

El libro ¿Quién te llorará cuando te mueras? nos explica en ciento un capitulo

como debes ser tu vida para que sea mejor.

Descubre tu vocación: Todos tenemos talentos especiales que solo esperan un

propósito que valga la pena para manifestarse, todos hemos venido al mundo con
un propósito determinado.

Cada día se amable con un extraño: ayuda cuando puedas.

No pierdes la perspectiva: el tiempo que pasamos en este planeta es muy breve,

ten la sensatez de disfrutar de tu viaje y saborear el proceso.

Practica el amor duro: Siendo más estricto contigo empezarás a vivir según tú
elijas, en los términos que tú estipules, cuanto más duro eres contigo, más fácil es
la vida para ti. Las personas realizadas y eficaces no pierden su tiempo haciendo
lo más conveniente o lo más cómodo, sino lo que tienen el valor de escuchar a su
corazón y hacer lo sensato.

Lleva un registro diario: Un registro no es un diario. Un diario es un lugar en el

que se anotan sucesos, mientras que en un registro se analizan y evalúan tales
sucesos importantes que sucedieron en tu día

Desarrolla la filosofía de la honradez: Cuando no mantienes tu palabra pierdes

credibilidad y, al perder credibilidad, rompes los vínculos de la confianza.

Honra tu pasado: He aprendido que el éxito no se mide tanto por la posición que
uno ha alcanzado en la vida, si no por los obstáculos que se han tenido que
superar en el esfuerzo por triunfar.

Empieza bien el día: El modo en que empiezas el día determina el modo en que
se desarrolla el resto de la jornada.

Aprende a decir que no con elegancia: Define los principales objetivos de tu

vida y después aprende a decir que no con elegancia. Las personas más eficaces
se concentran en sus áreas de excelencia. Aprender a decir no a lo no esencial te
dejará más tiempo para dedicarlo a las cosas que tienen el poder de mejorar tu
vida y re ayudará a dejar el legado que estás destinado a dejar.

Tómate un descanso semana: Para revitalizarte y nutrir tu interior, planifica un

período semanal de tranquilidad, donde recuperes los placeres a los que quizá
renunciaste hace tiempo. Hazlo por ti, tú lo vales.

Habla contigo mismo: tarta de saber lo que te pasa a ti porque estas así, que es
lo que quieres y para dónde quieres ir.

Programa paréntesis para las preocupaciones: Concentra tu preocupación en

ciertos períodos del día y luego aprende a dejar tus problemas atrás.

Imita a los niños: Tómate tiempo para estudiar las cualidades positivas de los
niños e imita su capacidad de mantenerse llenos de energía.

Recuerda, el genio es un 99% inspiración: Hemos venido a este mundo no sólo

para ganarnos la vida, sino para capacitar al mundo a que viva más ampliamente,
lleno de esperanza y sentido, pasa tu tiempo con personas que se apasionan por
lo que hacen.

Cuida del templo: El ejercicio regular no sólo mejorará tu salud, sino que te
ayudará a sobrellevar el implacable estrés actual. El ejercicio físico añade vida a
tus años y años a tu vida. Después de cuarenta minutos de natación, cualquier
dificultad parece menos importante. El acto de cuidar mi templo físico me recuerda
que los placeres más grandes de la vida suelen ser los más sencillos.

Aprende a estar en silencio: Hay que disfrutar de la soledad para restaurar,

devolver la concentración y revitalizar el cuerpo, la mente y el espíritu.

Imagina tu vecindario ideal: Esta elección definirá la persona que quieres ser.

Levántate temprano: Levantarte pronto es un regalo que te das a ti mismo. Hay

una luz y algo especial en las primeras horas de la mañana. el tiempo parece
correr más despacio y una profunda sensación de paz recorre el.
Ve tus problemas como bendiciones: no te aferres a ellos, lucha para poder
salir de ellos.

Ríe más

Olvídate del reloj por un día

Asume más riesgos

Vive una vida: Todos recorremos caminos distintos para alcanzar nuestro destino
último, pero nadie llega al final sin tropezar con la adversidad de una u otra forma,
así que vive, siente el dolor y la verdadera felicidad. Recuerda que no hay
fracasos en la vida, solo resultados. No hay tragedias, solo lecciones. Y no hay
verdaderos problemas, únicamente oportunidades esperando a ser reconocidas
como soluciones por la persona más sabia.

Aprende de una buena película: Las películas no solo relajan, sino que sirven
también para transportar a las personas a un mundo diferente y para inspirar a
estas sobre las infinitas posibilidades que ofrece la vida.

Bendice tu dinero

Concéntrate en lo que vale la pena: Concéntrate en lo esencial, en esas pocas

actividades que realmente tengan el poder de marcar una diferencia en el modo
en que trabajas y vives, el tiempo es un artículo precioso, y sin embargo vivimos
como si tuviéramos todo el tiempo del mundo, como dijo Confucio: “el que
persigue dos conejos, no atrapa ninguno”.

Escribe notas de agradecimiento

Lleva siempre un libro contigo

Abre una cuenta de amor: El simple acto de dar algo a los demás hace que uno
se sienta mejor. Abre una cuenta de amor, compra flores a tu pareja sin motivo
concreto. Los pequeños ingresos diarios en esa cuenta de amor te proporcionarán
mucha más felicidad que cualquier cantidad que tengas en el banco.
Ponte en la piel de los otros: Toma notas cuando alguien habla. Manifiesta
interés mientras te hablan con la actitud y con monosílabos

Haz una lista de tus problemas

Toma como hábito la acción: Cuantas más acciones emprendas, más te sentirás
con ánimo de emprender otras nuevas.

Ve a tus hijos como bendiciones: El mejor regalo que puedes hacer a tus hijos
es el de tu tiempo.

Disfruta del camino, no sólo del premio final: El verdadero valor de fijarse y
alcanzar objetivos no radica en las recompensas que obtienes, sino en la persona
en la que te conviertes como resultado de alcanzar tus objetivos.

Recuerda que la toma de conciencia precede al cambio: El primer paso para

eliminar un hábito negativo es cobrar conciencia de que existe. Cobrar conciencia
de mi debilidad es el primer paso para eliminarla. Cobrar conciencia de una
flaqueza propia también atrae más soluciones a la vida de uno mismo. Medita y
trata de averiguar cuáles son tus puntos débiles y comprométete a transformarlos
en puntos fuertes, que añadirán riqueza y energía a tu medio de vida.

Lee los martes con Morrie: En este libro la protagonista te muestra cómo evitar
una vida de pesar, el valor de la familia, la importancia del perdón y el sentido de
la muerte.

Controla tu tiempo: El tiempo es el gran nivelador de la vida. Lo que distingue a

las personas que crean grandes vidas de las personas grises es cómo usan esas
horas. Comprométete a gastar tu tiempo de una forma eficiente. Desarrolla una
aguda conciencia de lo importante que es. No dejes que otros dilapiden el más
precioso de los bienes e inviértelo solo en aquellas actividades que de verdad
cuentan.

No pierdas la serenidad: En el mundo de hoy es fácil que perdamos la calma a la

más mínima provocación, el problema cuando se empieza a perder los nervios a
diario es que se convierte en un hábito, los tiempos difíciles requieren personas
serenas que puedan mantener la calma y la serenidad, aún bajo presión.
Mantener la calma en un momento de crisis puede ahorrarte años de dolor y
angustia.

Cura tu mente de simio

No seas tímido a la hora de preguntar

Busca el sentido profundo de tu trabajo

Reúne una biblioteca de libros heroicos:

Desarrolla tus capacidades: La mayor derrota personal que puede sufrir un ser
humano está constituida por la diferencia lo que uno podía haber llegado a ser y
en lo que realmente se ha convertido.

Conecta con la naturaleza: Pasar un tiempo solo o sola, rodeado de naturaleza

me conecta con el universo que me rodea y restaura mi espíritu en esta época
apresurada.

Aprovecha el tiempo de tus desplazamientos: Muchas de las personas

instruidas y de éxito comparten un hábito.: escuchar música en el coche.

Sé serio al marcarte objetivos: Algo mágico sucede cuando pones tus metas por
escrito. Primero, porque restaura una suerte de centro en tu mundo, segundo
porque te mantiene abierto o a vierta a las oportunidades. Y tercero porque los
objetivos claramente definidos te comprometen en un curso de acción.

Recuerda la regla d los 21: Se necesitan alrededor de 21 días para desarrollar

un nuevo hábito, como seres humanos, estamos genéticamente programados
para resistir el cambio y mantener un estado de equilibrio.

Practica el perdón: Perdonar a alguien que te haya agraviado es en realidad un

acto egoísta más que un acto desinteresado, cuando quedas con un resentimiento
contra alguien es casi como si llevaras a esa persona colgada de la espalda y
puedes continuar con tu vida.
Bebe zumo de frutas recién hecho

Crea un entorno puro.

Pasea por los bosques

Búscate un mentor: que ilumine tu camino, que te anime siempre y acorte tus
años de aprendizaje. Muchas veces encuentras a tu mentor en cursos de
capacitación

Tómate unas mini vacaciones: Unas mini vacaciones empiezan cerrando la

puerta de tu oficina, no cogiendo ninguna llamada y relajándote en tu silla.

Hazte voluntario

Encuentra tus seis grados de separación: Todos los habitantes de este planeta
están separados de los demás por seis grados de separación, de manea que
puedes comprobar lo cerca que están de ti tus héroes o heroínas.

Escucha música a diario

Encuentra tres grandes amigos

Lee libros de auto ayuda y filosofía

Aprende a meditar: Sin una mente disciplinada, los pensamientos y las

preocupaciones triviales te agobiarán y nunca tendrás la capacidad de sumergirte
en propósitos más significativos. Mi vida cambió el día que aprendí a meditar.
Meditando aprenderás a ser más paciente, estarás más sereno en tu trabajo y
más feliz cuando estés solo.

Celebra tu funeral en vida: Celebrar tu funeral en vida te volverá a poner en

contacto con el hecho de que el tiempo es un artículo de valor incalculable, y de
que el mejor momento para perseguir una vida más rica, sabia y satisfactoria es
ahora.

Deja de quejarte y empieza a vivir: Deja de quejarte de que no tienes tiempo

para ti y levántate una hora antes, nunca ha habido una época en la que vivir haya
sido más estimulante que ésta, y tú tienes la oportunidad de aprovechar las
infinitas posibilidades que se nos ofrecen.

Aumenta tu valor: La compensación que recibas por tu esfuerzo no vendrá

determinada por lo mucho que trabajes, sino por el valor que aportas al mundo
que te rodea.

Sé mejor padre o madre: Desarrolla el oficio de padre o madre excelente. Para

ello asiste a seminarios, lee libros de expertos en la materia. Sube a tu hijo a
caballito. Habla con él.

Sé poco ortodoxo: Deja de someterte a las exigencias de la presión social a

costa de tu carácter único a las personas más grandes de la historia nunca les
importó lo que los demás pensaran de ellas.

Sé algo más que tus estados de ánimo: Nosotros no somos nuestros

pensamientos, sino sus creadores. Debemos centrarnos en los positivos,
inspiradores e instructivos

Disfruta de las cosas sencillas

Deja de condenar

Mira tu vida como si fuera tu vida entera

Crea una alianza de cerebros: La alianza de cerebros es una coordinación de

conocimiento y esfuerzo, en un espíritu de armonía, entre dos o más personas,
para la consecución de un propósito definido.

Elabora un código de conducta cotidiana: Para crear una gran vida, tienes que
vivir con propósito, determinación y pasión, tienes que vivir según tus propias
reglas en lugar de regirte por lo que otros marquen. Sigue tu código
constantemente.

Imagina una realidad más espléndida

Conviértete en el comandante de tu vida

Sé humilde
No termines todos los libros que empiezas

No seas tan duro contigo mismo

Haz un voto de silencio: El silencio ejercita la voluntad y el auto control porque

se fuerza a la voluntad no cediendo al impulso de hablar.

No cojas el teléfono siempre

Recuerda que el esparcimiento debe incluir renovación

Reserva tiempo para dar una comida familiar

Conviértete en un impostor: Actúa como si estuvieras radiante de felicidad, para

que con el tiempo esa actitud sea un hábito.

Toma un curso de oratoria: Cuando tome un curso de oratoria, el mundo entero

se abrió para mí.

Deja de abrigar pensamientos mezquinos: Lo que te impide tener todo lo que

de deseas es lo que sucede en tu mundo interior.

No te preocupes por cosas que no puedes cambiar: Sólo un porcentaje muy

pequeño de problemas pueden ser solucionados por una persona. Atiende ese
porcentaje con celo.

Aprende a pasear: Sal a pasear sin un propósito especial, para admirar la belleza
circundante y descansar. Mira, huele el mundo. Siente el asombro que sentías
cundo eras niño al contemplarlo.

Reescribe la historia de tu vida: No importa el tiempo que hayas despilfarrado

en el pasado, la hora que viene será perfecta, inmaculada, y podrás sacar el mejor
partido de ella.

Planta un árbol: En especial, plantar un árbol para cada niño de tu familia es un

extraordinario acto de amor, que tus hijos recordarán en los actos venideros.

Búscate un rincón de paz

Toma más fotografías

Sé aventurero: Comprométete a recuperar el espíritu de aventura que conociste
de niño. Haz una lista de doce objetivos que podrían aportar pasión a tu rutina
normal e intenta alcanzar uno durante cada mes del próximo año.

Descompresiónate antes de llegar a casa: Tu familia te necesita y puedes

realizar muchas actividades divertidas e interesantes con ella.

Respeta tu intuición: Para escuchar la satisfacción y la abundancia que buscas

debes escuchar esas corazonadas y sensaciones que se presentan cuando más
las necesitas.

Colecciona citas que te inspiren: Pega citas por distintos puntos de la casa: el
frigorífico, el cuarto de baño, el salpicadero del coche o la oficina. Esta sencilla
disciplina te mantendrá centrado en tus sueños.

Ama tu trabajo: Uno de los grandes secretos de la vida es amar el trabajo que
hacemos. Si amas tu profesión, descubrirás que no tendrás que trabajar en tu
vida.

Sirve desinteresadamente: No hay religión más encumbrada que el servicio a la

humanidad, el éxito es una consecuencia de servir a otros y aportar valores al
mundo.

Reflexión

Esta lectura a mí me dejo el ser mejor persona, como puedo yo ser mejor persona
cuales son mis objetivos que tengo que llevar en esta vida, estar con quien va
estar conmigo siempre y es mi familia, dar lo mejor día a día por mi hijo, salir a
delante sin perjudicar a otros, brillar por mí misma, ayudar a quien no tiene o si es
posible al que tiene también.