Reseña de ‘Currículo y modernización’ de Alberto Martínez Boom
La instrucción entonces se convierte en el eje. La formación se concibe como el proceso en el que las personas se van a ver cualificadas para el trabajo por el desarrollo económico de las naciones. La instrumentalización de la enseñanza se va a evidenciar por fuera de las escuelas, es decir, en instituciones como el SENA y la ACPO. En el año de 1956 va a surgir el Plan Quinquenal de Educación que dará paso a una serie de factores que inciden en la transformación de las prácticas pedagógicas. Entra en escena entonces lo que se conoció como la Misión Pedagógica Alemana que va a empezar a consolidar la enseñanza como un proceso en el que influyen de manera eficaz los logros, los objetivos de enseñanza-aprendizaje. Antes en Colombia se concebía a la educación como un proceso de higienización de los escolares ya que así se concebía que la nación podía progresar, mientras que después se pasó a una curricularización. Boom nos menciona que en la historia de las escuelas no se ha profundizado mucho en la teoría curricular, que más se profundizado en ideas como las corrientes basadas en el pensamiento de Piaget. El currículo sirve entonces para la normalización y la homogeneización de las sociedades. De Skinner y de Gagne serán los autores primordiales en los que se basarán las teorías del currículo para la hegemonización de la educación sobre el que giren las apuestas del desarrollo de la sociedad colombiana, que gracias, por ejemplo el decreto 1710 se verá que le educación hasta quinto de primaria será obligatoria en todas las escuelas del país. La educación es entendida entonces como el factor más importante para el incremento del capital en las sociedades, el subdesarrollo entonces va a verse evidenciado en realidades como la ignorancia, la miseria, el autor nos dice que el ahorro no alcanza para que se siga produciendo capital, por ello es que países como los latinoamericanos se van a ver en un continuo estancamiento económico. Es entonces cuando la instrucción se convierte en pionera para la eficiencia y eficacia del trabajador dentro de sus propios ámbitos de producción. En la segunda mitad del siglo XX se va a empezar a generar una serie de transformaciones en la educación colombiana, es decir, se va a considerar al proceso educativo como el que permite el autosostenimiento de las sociedades. Surge entonces en Colombia el Plan Quinquenal de Educació, ya que en Colombia se detecta que más de la mitad de los niños no se encuentran matriculados en los colegios, así como también las cifras de analfabetos es alarmante, por ello Colombia entra en la escena mundial que propende por mejorar los sustentos económicos de una realidad tan importante como es la educación. Se concibe al desarrollo como el ideal social mediante el cual las sociedades pueden vivir en un mejor nivel de vida y adquirir así bienes y servicios de una manera más igualitaria gracias a los procesos educativos que germinen en la sociedad. La educación va a ser fundamental para evitar la marginalidad. Durante los años sesenta se presenta lo que se conoció como la crisis mundial de la educación en la que intervienen diferentes sectores a nivel mundial, y a nivel colombiano se estructura lo que es entonces los INEM, que se basan en la escuela comprensiva norteamericana. Entra en auge el concepto de tecnología instruccional que define objetivos específicos basados en investigaciones sobre la comunicación humana para poder hacer eficiente la enseñanza y el aprendizaje en el sistema educativo. La instrucción en Colombia se define partir de una serie de parámetros que hacen que la educación se más dinámica que estática.