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Revisemos algunos detalles que son interesantes. El estómago tiene un ambiente ácido que favorece la
liberación del cobre desde el agua y los alimentos. La absorción ocurre principalmente en el intestino
delgado, por lo que se necesita que este esté sano para que ocurra el proceso.
La cantidad de cobre absorbido depende en parte de la cantidad total contenida en la dieta y de los
componentes que lo acompañan. Por ejemplo, hay sustancias que favorecen su absorción, como las
carnes; en cambio, la leche, algunos azúcares y otros minerales (cinc) la disminuirían.
Cuando el cobre se absorbe en el intestino es llevado al hígado, donde se almacena y se entrega -de
manera muy regulada- a los distintos sistemas que lo necesitan.
El cobre que sale desde el hígado hacia los diversos tejidos va siempre unido, nunca libre, a una proteína
crucial en el metabolismo del mineral, llamada “ceruloplasmina”. El cobre que no se necesita es
eliminado a través de la bilis, devuelto hacia el intestino y se elimina a través de las deposiciones
Como es tan importante en el funcionamiento del organismo, cada paso y actividad en que está
involucrado está altamente controlada. Por ejemplo, cuando el aporte en la dieta es bajo, la absorción se
maximiza y la eliminación por la bilis disminuye.
Al revés, la absorción se minimiza y aumenta la excreción si los aportes son mayores que los necesarios.
Este proceso de controlar y regular las cantidades de cobre en el organismo, resguardando que esté
donde se le necesita, sin permitir la aparición de carencias o excesos, se llama homeostasis, y es
fundamental para el buen manejo del cobre y la salud del individuo.
A menudo se pregunta si hay riesgo para la salud de los obreros de las minas de cobre y fundiciones,
debido a la posible absorción del metal por las vías respiratorias y la piel. La evidencia muestra que la
absorción de cobre por estas vías es casi nula.
NOMBRE DEL PARAMETRO: COBRE FUENTE Los minerales principales que
sirven de fuente de obtención del cobre son los sulfuros de cobre como la calcocita,
calcopirita, bornita, covelita. También se le puede encontrar como cobre nativo. Se
encuentra tanto en yacimientos hidrotermales de baja temperatura( asociada a la pirita,
la pirrotita, la escalerita, la galena, las tetraedritas) de sulfuros ricos en cobre y pobres
de azufre, así como en yacimientos supergenicos en las zonas de enriquecimiento
secundario se sulfuro de cobre.
La Guía Canadiense de la Calidad del Agua, establece para las aguas destinadas al riego
una concentración de Cobre de 0.2 mg/l para cultivos sensibles y 1 mg/l para cultivos
tolerantes. La FAO, establece una concentración de 0.2 mg/l de Cobre para aguas
destinadas al riego. La Ley General de Aguas establece para el Cobre un valor límite de
concentración, de 0.5 mg/l para Aguas destinadas al riego de vegetales de Consumo
Crudo y bebida de animales, correspondiente a la clase III. La Norma de Calidad
Ambiental y de Descarga de Efluentes: Recurso Agua de Ecuador, establece para el
Cobre un valor de 2 mg/l como límite máximo permisible de concentración en aguas
destinadas al uso agrícola. La Norma para el Control de la Calidad de los cuerpos de
agua de Venezuela, establece para el Cobre un Valor de 0.2 mg/l como límite máximo
de concentración, en aguas destinadas al riego de hortalizas, legumbres consumidas en
crudo, cereales, y cultivos arbóreos. El manual de Evaluación y Manejo de Sustancias
Toxicas en Aguas Superficiales del CEPIS, establece el mismo valor que formula la
FAO, y guía Canadiense para el Cobre. El Anteproyecto de Norma de Calidad para la
Protección de las Aguas Continentales Superficiales de Chile, establece para el Cobre
una concentración de 0.002 mg/l para aguas destinadas al riego irrestricto. La Norma
Técnica Nacional para Agua, de Honduras, establece una concentración para el Cobre
de 2 mg/l para aguas destinadas al uso agrícola. La Norma para Prevenir la
Contaminación Ambiental de Paraguay, establece para el Cobre una concentración
máxima de 0.2 mg/l en aguas destinadas al riego de hortalizas o plantas frutícolas u
otros cultivos destinados al consumo humano.