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89-105
ISSN 0214 - 9915 CODEN PSOTEG
El trastorno por déficit de atención con cio en torno a los cuatro años (Barkley,
hiperactividad (ADHD) se caracteriza por Fischer, Newby y Breen, 1988), conside-
signos de desarrollo inadecuado como fal- rando muchos profesionales que constitu-
ta de atención, impulsividad y escasa re- ye una dificultad evolutiva de carácter
gulación del nivel de actividad ante las crónico, por lo que requiere de un trata-
demandas situacionales. Surge en la pri- miento sistemático, que debe ser aplicado
mera infancia, con una edad media de ini- durante intervalos de tiempo considera-
bles (Anastopoulos, DuPaul y Barkley,
1991).
Correspondencia: Ana Miranda Casas Aproximadamente un estudiante de
Departamento de Psicología Evolutiva y
de la Educación cada clase está afectado por este proble-
Universidad de Valencia. Spain ma (Barkley, 1989), lo cual indica que se
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ductual, sino que también potencia los as- demorado de estímulos no verbales como
pectos de procesamiento cognitivo. Keith dibujos, mientras que en la memoria de
y Engineer (1991) realizaron una investi- naturaleza verbal, valorada por el recuerdo
gación con un diseño cuasi-experimental de una historia, solo se observa una ten-
de evaluación pre-post tratamiento sin dencia positiva pero sin llegar a la signifi-
grupo control en la que participaron 20 ni- cación estadística. Tampoco han encontra-
ños con ADHD, de los que un número im- do efectos positivos del metilfenidato las
portante (8) tenían trastornos del habla y investigaciones en las que se han utilizado
del lenguaje. Las variables dependientes Tests de Aprendizaje de Pares Asociados;
incluyeron tests de vigilancia y de proce- si bien hay que especificar que los sujetos
samiento auditivo y de habilidad de len- estudiados además presentaban dificulta-
guaje receptivo, encontrándose que se pro- des específicas en el aprendizaje. No pue-
ducían mejoras significativas en la ejecu- de esperarse que el metilfenidato desarro-
ción de los niños en todas las medidas es- lle las estrategias de elaboración verbal
tudiadas cuando se encontraban bajo los que exige la ejecución de un test de me-
efectos del metilfenidato. moria de pares asociados, y de las que sue-
La atención de los niños hiperactivos, len carecer los estudiantes con dificultad
también experimenta un incremento signi- en el Aprendizaje. Posiblemente esta sea
ficativo cuando se les administra metilfe- la razón fundamental que explique por qué
nidato como acredita el trabajo de Levy y Kupietz, Winsberg, Richardson, Mai-
Hubles (1988) o el de Elia, Borchending, tinsky y Mendell (1988) no encontraran
Rapoport y Keyson (1990) que aportan mejoras en el Test de Pares Asociados en
mejoras en la ejecución del test de ejecu- la evaluación realizada a las dos semanas
ción continua en un 79% de los sujetos. de administración de metilfenidato, mien-
Asímismo, Klorman, Brumaghim, Salz- tras que obtuvieron resultados significati-
man, Strauss, McBride y Loeb (1990) de- vos en la ejecución de esta misma prueba
mostraron que los psicoestimulantes pue- en la evaluación que se llevó a cabo en la
den ejercer efectos positivos sobre el pro- semana 27, después de un programa inten-
cesamiento de la información de adoles- sivo de entrenamiento en lectura.(Richard-
centes ADHD con y sin conductas agresi- son, Kupietz, Winsberg, Maitinsky y Men-
vas y oposicionistas. Comparando los re- dell, 1988).
sultados obtenidos en la fase de placebo,
el metilfenidato produjo una mayor preci- Efectos sobre el rendimiento académico
sión y velocidad en las reacciones de los
sujetos ante estímulos visuales y auditi- La investigación reciente confirma que
vos. En la misma línea, en otro trabajo los psicoestimulantes pueden producir ga-
posteriormente publicado por los mismos nancias en el rendimiento académico en
autores (Klorman, Coons y Borgstedt, niños con ADHD. Estos estudios, general-
1992) también se concluye que el metilfe- mente bien controlados, han aportado me-
nidato reduce las anomalías en la clasifi- joras en la ejecución de tareas homólogas
cación de estímulos de los adolescentes a las escolares como lectura de palabras,
ADHD. comprensión de textos y problemas de ma-
En cuanto a la memoria, los resultados temáticas en la evaluación de la fase de
no son tan prometedores. El metilfenidato, post tratamiento. Richardson et al., (1988)
de acuerdo con los resultados de Hartley señalaron que el metilfenidato provocó un
(1986), potencia el recuerdo inmediato y efecto positivo en los mecanismos de re-
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cuperación de estudiantes hiperactivos re- intensivo para niños con ADHD en los que
lacionados con el reconocimiento de pala- se incluían técnicas de manejo conductual.
bras y que este efecto estaba mediado por Por otra parte, queda por aclarar la cues-
el cambio comportamental y era mayor en tión relativa a si los psicoestimulantes
las primeras fases del tratamiento. pueden incrementar el rendimiento escolar
Evans y Pelham (1991), valoraron la a largo plazo, es decir, si los beneficios
eficacia del metilfenidato sobre las si- observados a corto plazo se generalizan a
guientes áreas académicas: problemas de través del tiempo.
razonamiento, respuestas concretas sobre
un texto leido, resumen e ideas principales Variables moduladoras de la respuesta al
y pruebas semanales de evaluación. Ade- tratamiento con psicoestimulantes
más de potenciar la atención los resulta-
dos indicaron que el metilfenidato produjo Otro aspecto de interés se refiere a la
un incremento en el rendimiento académi- considerable variación que se denota en
co de los preadolescentes con hiperactivi- las publicaciones revisadas respecto al
dad, reflejado en los indicadores emplea- porcentaje general de sujetos que respon-
dos. Asimismo, Pelham, Vodde-Hamilton, den favorablemente al tratamiento con
Murphy, Greenstein y Vallano (1991) en- metilfenidato y que oscila entre el 50%
contraron que el metilfenidato incrementa- (Pelham y et al., 1991); 60% (Klorman et
ba significativamente la exactitud y pro- al., 1990); 66% (Evans y Pelham, 1991) y
ductividad en tareas de lectura. En mate- 69% (Elia et al., 1990). Este hecho coinci-
mática y en los deberes escolares también de con la tendencia observada en otros es-
potenciaba la productividad aunque no tudios anteriores en los que se citan en al-
mejoró significativamente la exactitud de gunos casos porcentajes de eficacia del
estos dos aspectos. 70% (Barkley, 1977) mientras que en otros
Carlson, Pelham, Swanson y Wagner se indican índices del 55% (Halliday, Ca-
(1991) evaluaron los efectos del trata- llaway y Rosenthal (1984), o incluso del
miento con psicoestimulantes sobre la eje- 50% (Swanson, Sandman, Deutsch y Ba-
cución de problemas de aritmética com- ren, 1983). Por otra parte, estas diferencias
probando el tiempo de reacción , el tiempo están justificadas posiblemente por facto-
de espaciamiento entre los problemas, el res como edad de remisión, rigurosidad de
porcentaje de aciertos y el tiempo de res- los criterios diagnósticos, instrumentos de
puesta. Los análisis realizados indicaron la medida de la respuesta al tratamiento y
que comparado con el placebo, el metilfe- tiempo en el que se ha realizado la evalua-
nidato originó tiempos de reacción signifi- ción, así como dosis de medicación admi-
cativamente más rápidos y tiempos de nistrada.
respuesta más cortos. Los sujetos resolví- El sexo no es un factor que influya en la
an los problemas de aritmética con mayor respuesta ante el tratamiento con psicoes-
rapidez y seguridad, y pasaban de un pro- timulantes de estudiantes ADHD, ya que
blema a otro en menos tiempo. el metilfenidato tiene efectos comparables
No obstante, y a pesar de la relevancia en los niños y en las niñas (Pelham, Wal-
de los resultados anteriormente comenta- ter, Sturges y Hoza, 1989). Sin embargo,
dos , es conveniente puntualizar que la de acuerdo con los datos aportados por
mayoría de estas investigaciones han sido Aman y Turbott (1991) la edad modula la
desarrolladas por el grupo de William Pel- respuesta clínica al metilfenidato de forma
ham dentro de programas de tratamiento inversa; los niños más jóvenes, de 6 ó 8
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años, tienden a mostrar una respuesta en Resulta complejo analizar los múltiples
general más positiva, probablemente por- factores que podrían explicar las diferen-
que presentan un grado superior de hipe- cias observadas en la respuesta a la medi-
ractividad. En la misma línea, Klorman et cación psicoestimulante. Recientemente,
al. (1989) afirman que la magnitud de los Arnold, Votolato, Kleykamp, Baker y
efectos positivos del metilfenidato es más Bornstein (1990) hallaron una linea base
limitada en los adolescentes con ADHD de zinc más baja en niños ADHD que en
que participaron en su estudio que la que los controles normales. Además el nivel
suele encontrarse en pacientes más jóve- superior de zinc actuaba como un buen
nes, ya que casi el 40% de los padres des- predictor de una respuesta mejor a la dex-
cribieron los resultados del tratamiento troanfetamina. En base a estos hallazgos,
como mínimos. Arnold et al. (1990) recomiendan que , an-
Una panorámica distinta nos presentan tes de iniciar un tratamiento con psicoesti-
Pelham et al. (1991). Estos autores com- mulantes se proceda a administrar un su-
pararon la acción del metilfenidato en gru- plemento de zinc, que no resulte perjudi-
pos de niños y adolescentes, obteniendo cial.
resultados equivalentes en ambos grupos: Otro número importante de los trabajos
reducción de conductas sociales negativas, revisados se han dirigido concretamente a
incremento de la tasa de obediencia y de observar la eficacia diferencial de distintas
algunos aspectos del funcionamiento aca- dosis de metilfenidato. Todos ellos son ri-
démico. Tan sólo, en conducta positiva ha- gurosos metodológicamente con diseños
cia los pares los adolescentes mejoraron de doble ciego y grupo de control con pla-
con el psicoestimulante, a diferencia del cebo. Seis publicaciones desarrollan trata-
grupo de niños, lo que indica un efecto de mientos grupales (Brown y Sexson, 1988;
interacción entre la edad y la medicación. Kupietz et al., 1988; Richardson et al.,
La disparidad de resultados, a nuestro 1988; Evans y Pelham, 1991; Tannock y
entender, se justifica por los procedimien- Schachar, 1992) y una presenta un diseño
tos de evaluación utilizados para evaluar n=1 (Kutcher, 1986).
los cambios conductuales. Los dos traba- Evans y Pelham (1991) encontraron que
jos de Pelham y cols. se basan en observa- la magnitud de los efectos con las dosis al-
ciones objetivas del comportamiento, tas (0,6 mg/kg) sobre comportamientos de
mientras que los demás autores han em- inatención, sobreactividad y oposicionis-
pleado estimaciones de padres y profeso- mo, era en general comparable al obtenido
res más sensibles a sesgos debidos a facto- con dosis bajas (0,15-0,30 mg/kg). Bar-
res como expectativas y persistencia de kley (1988) en un estudio realizado con 27
atribuciones. Este hecho se pone de mani- preescolares hiperactivos en el que se reu-
fiesto en la investigación que llevaron a nió información sobre un espectro amplio
cabo Kaplan et al. (1990), quienes infor- de conductas observadas en la interacción
maron que el metilfenidato decrementó madre-hijo cocluyó que ni la dosis alta (0,5
significativamente la agresividad de ado- mg/kg) ni la dosis baja (0,15 mg/kg) pro-
lescentes con ADHD y conducta antiso- vocaron cambios durante el juego libre.
cial, pero, aunque las puntuaciones medias Sin embargo, durante la ejecución de tare-
en la Escala de Conners para el profesor as, el grupo al que se administró la dosis
mostraban también una clara tendencia al alta de metilfenidato redujo su inatención e
decremento, las diferencias no eran esta- incrementó sus tasa de obediencia. Asímis-
dísticamente significativas. mo, Brown y Sexson (1988) en una mues-
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(Brown y Sexson, 1988), hábitos nervio- entre las autoevaluaciones de los chicos
sos y manierismos (Elia et al., 1990), efec- ADHD y sus niveles objetivos de ejecu-
tos que suelen desaparecer espontánea- ción (Millich, Licht, Murphy y Pelham,
mente con la reducción de la dosis. Estos 1989). Incluso la valoración de la dificul-
hallazgos concuerdan con los que obtuvo tad de la tarea es más realista lo que pue-
Barkley (1977) en su revisión de 110 estu- de tomarse como un indicio de que la me-
dios que incluían más de 4200 niños hipe- dicación induce a abordar con más serie-
ractivos. Igualmente, Ross y Ross (1982) dad y motivación las actividades.
afirmaron que los efectos colaterales a No obstante, en el estilo de procesa-
corto plazo de los psicoestimulantes sue- miento cognitivo, que ha sido hasta ahora
len ser el insomnio y la anorexia y que, un aspecto olvidado en las investigaciones
por lo general, tienen una corta duración. sobre el tema, los psicoestimulantes pue-
Aunque un diagnóstico de síndrome de den provocar efectos indeseables. Tannock
La Tourette se encuentra entre las con- y Schachar (1992) hallaron que el metilfe-
traindicaciones que incluye el Physician´s nidato, tanto en dosis altas (1mg/kg) como
Desk Reference (Physician’s Desk Refen- bajas (0,3 mg/kg), puede reducir, al menos
ce, 1989) para la administración de metil- temporalmente, la flexibilidad cognitiva
fenidato, Sverd, Gadow y Paolicelly en niños con ADHD, a pesar de mejorar el
(1989) han demostrado que este psicoesti- comportamiento y otros aspectos del fun-
mulante puede tener efectos positivos y cionamiento cognitivo. Por otra parte, y
que no potenciaba los tics, sino que inclu- aunque los autores no hacen alusión a ello
so con dosis altas se producía un decre- en el tratamiento de niños con ADHD, es-
mento de estos síntomas. La hipótesis ex- tos fármacos pueden producir adicción.
plicativa que plantean los autores es que, Precisamente, las pautas de tratamiento
después de una fase de empeoramiento discontinuas intentan impedir que se pro-
transitorio de los tics, el metilfenidato duzca la habituación.
puede provocar una reducción en la sensi-
bilidad del receptor de la dopamina que Comparación de los psicoestimulantes
los mejora. No obstante, la generalización con otras medicaciones
de estos resultados es limitada dado el re-
ducido número de sujetos incluidos en su Zametkin, Reeves, Webster y Werry
estudio (N=4). (1986) compararon la eficacia de la pro-
Contrariamente a la opinión de que los metacina y el metilfenidato en un grupo de
psicoestimulantes pueden contribuir a de- niños con ADHD sin problemas de con-
sarrollar el locus de control externo de los ducta. La información procedente de las
niños hiperactivos, Pelham et al. (1992) en Escalas de Conners, cumplimentadas por
dos experimentos en los que analizaron las padres y profesores demostraron que el
atribuciones ante el éxito o ante el fracaso metilfenidato era mucho más efectivo. Por
en la ejecución de tareas, hallaron que los lo tanto, no parece que la prometacina re-
chicos tratados con metilfenidato explica- presente una alternativa útil del metilfeni-
ban sus éxitos refiriéndose al esfuerzo o a dato para el tratamiento de niños ADHD
su capacidad más que a la medicación. Sin menores de 6 años. Levy y Hobles (1988)
embargo en las explicaciones que daban a también han demostrado que el metilfeni-
sus fracasos aludían a factores como la dato, contrastándolo con un placebo, ejer-
medicación o los profesores. También la ce efectos positivos sobre la atención, va-
medicación aumenta la correspondencia lorada mediante el test de ejecución conti-
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bal para medir los efectos conductuales contraron mejoras significativas intragru-
del tratamiento. Con el bupropion se con- po en los resultados de los tests cogniti-
siguen resultados de mejoría notable o vos, comparando datos recogidos en las
moderada al menos en el 70% de los suje- fases de pre y de post-tratamiento con bu-
tos (Simeon et al., 1986; Wender y Reim- propion. Por último, Barrickman et al.
herr, 1990). Esta tasa es similar a la apor- (1991) constataron que se produjeron in-
tada por las investigaciones en las que se crementos significativos en el C.I. Mani-
ha administrado desipramina, concreta- pulativo y en la prueba de Impulsividad
mente 68% en Biederman et al. (1989a) y después del tratamiento con fluoxetina,
71% en Ridley et al. (1988). Menor efica- pero que se mantenía estable la puntuación
cia en el dominio conductual parece tener en el C.I. Verbal.
la fluoxetina, aportando el único trabajo
que puede citarse al respecto un porcenta- Efectos sobre el área personal y académica
je de mejoría clínica, solo en el 58% de los
sujetos. Como última puntualización que Los escasos trabajos que se han pro-
merece la pena destacar es que los porcen- puesto como objetivos valorar la acción de
tajes de mejoría clínica que se consiguen los antidepresivos sobre aspectos persona-
con los antidepresivos, valorada mediante les y afectivos han aportado resultados po-
la Escala Clínica de Impresión Global, es sitivos. Tanto el bupropion (Simeon et al.
similar a la que se refleja en las estimacio- 1986), como la desipramina (Biederman et
nes de padres y profesores. al., 1989a) y la fluoxetina (Barrickman et
al., 1991) reducen significativamente la
Efectos cognitivos ansiedad y la depresión. En relación con el
rendimiento escolar, solamente dispone-
Respecto a la eficacia de los antidepre- mos de un informe sobre un caso de Wi-
sivos sobre el procesamiento cognitivo, lens et al. (1992). Estos autores señalan
los resultados son ambiguos debido al re- que se producían mejoras relevantes en la
ducido número de trabajos que han valora- ejecución académica después de seis me-
do este dominio y a la diversidad de crite- ses de tratamiento con clomipramina.
rios utilizados en la evaluación. Algunos
autores, como Trott et al. (1992) han ob- Efectos de la dosis
servado un incremento general de la con-
centración y amplitud del periodo atencio- Ninguno de los estudios aporta eviden-
nal, basándose en datos porcentuales no en cia sobre si la dosis bajas de antidepresi-
pruebas de significación estadística y sin vos son superiores a las dosis altas. Los
tener como punto de referencia la compa- trabajos sobre bupropion ofrecen al res-
ración con un grupo control lo que resta pecto datos poco específicos, indicando
validez a este hallazgo. como dosis máxima 150 mg/día (Simeon
Por el contrario, Biederman et al. et al., 1986). En el caso de los antidepresi-
(1989a) aplicando las pruebas clásicas de vos tricíclicos las dosis se ofrecen en
aprendizaje de pares asociados y el test de mg/kg/día. En términos generales tanto
ejecución continua, hallaron que el rendi- con dosis bajas, menores de 1 mg/kg/día
miento no cambiaba significativamente ni (Barrickman et al., 1991) como en dosis
en el grupo con desipramina ni en el gru- altas de 4-5 mg/kg/día los efectos parecen
po placebo en la evaluación de post-trata- ser equiparables. Finalmente, puesto que
miento. Tampoco Simeon et al. (1986) en- ningún estudio hasta el momento, ha com-
sión o ansiedad responden de manera más démico que suelen presentar los escolares
positiva a la politerapia que a una sola me- ADHD, puede requerir que además se lle-
dicación o si estos síntomas predicen una ven a cabo programas de apoyo psicope-
respuesta diferencial a los fármacos. dagógico específicos. Curiosamente, entre
Una limitación importante que sigue un 80% y un 90% de los niños hiperacti-
afectando a la investigación sobre el trata- vos americanos reciben psicoestimulantes
miento farmacológico en general del en algún momento de su infancia, pero so-
ADHD es la ausencia de datos sobre su lamente un número reducido de ellos son
eficacia a largo plazo o sobre el manteni- tratados con modificación de conducta o
miento de los efectos una vez que se haya reciben servicios psicoeducativos especia-
retirado el tratamiento. Probablemente, les (Lambert y Sandoval, 1980).
como apunta Gadow (1988) el éxito final Por último, los profesionales deben ser
en este caso dependa de la implementa- conscientes de que los niños y los adoles-
ción de intervenciones psicológicas alter- centes con hiperactividad plantean deman-
nativas. Síntomas como la inquietud y la das excesivas a los padres para su cuidado
inatención pueden disminuir significativa- y educación. Esta desmedida exigencia
mente con los psicoestimulantes. Los pro- puede provocar estrés en el ejercicio de la
blemas relacionados con el control de im- paternidad e incrementar el riesgo de de-
pulsos y la escasa competencia social pue- presión y discordia marital, obstaculizan-
den manejarse también con una medica- do finalmente los resultados de cualquier
ción y estrategias conductuales y cogniti- tratamiento que no tenga en cuenta el ma-
vas. Finalmente, el bajo rendimiento aca- nejo de estos aspectos.
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