Su función es reducir y adaptar el voltaje de entrada, que es de valores elevados y de
corriente alterna, a voltajes de valores más bajos y de corriente directa. 2. Inicialmente, el voltaje de entrada debe ser reducido a valores más manejables. Luego, por medio de un rectificador, debe ser convertido de CA a CD. Por último, se deben utilizar reguladores para asegurar la estabilidad en el voltaje de salida, ver figura. 3. En el momento de adquirir un PLC, entre los parámetros a tener en cuenta debemos incluir algunos que hacen mención a la fuente de poder. Los más importantes son los siguientes, los cuales se deben ajustar de acuerdo a las necesidades del proceso y del PLC como tal: En la mayoría de los PLCs, la fuente de alimentación está incluida dentro del mismo compartimiento donde se encuentra la CPU, figura 1. En otros casos, la fuente es configurable, permitiendo adaptar los voltajes y las capacidades de corriente, de acuerdo a la necesidad de la aplicación. 4. Aunque los nombres de los terminales y las funciones provistas difieren de un modelo a otro, en la figura podemos apreciar un bloque correspondiente a un PLC típico. A continuación, describimos la función de algunos de sus terminales de conexión. Su función es permitir que a través de un relevo, un pulsador, un interruptor u otro dispositivo similar distante del PLC, se ejecute el programa del mismo, tal como si el selector se posicionara en RUN o START. En muchos casos, los PLCs están provistos de una salida de voltaje DC para la alimentación de dispositivos externos tales como sensores, unidades de comunicaciones, etc. Esta salida tiene un límite de corriente, que no se debe exceder ya que se podrían deteriorar los circuitos internos de la fuente. Esta opción es de gran utilidad, ya que seguramente en muchas aplicaciones no será necesario adquirir una fuente de alimentación adicional. Es un terminal que pone a disposición el punto común de conexión del sistema lógico de entradas y salidas. Sirve para ahorrar cableado ya que por lo general todos los sensores usan una misma línea común. Son los terminales en los cuales se conecta el voltaje de la red. En el caso de alimentación con corriente alterna de una sola fase, se debe diferenciar la línea viva (fase) de la línea muerta (neutro). Adicionalmente, existe un terminal de conexión a tierra física, que debe ser conectada a la tierra general de la edificación donde se va a instalar el PLC, pudiéndose usar la misma tierra del sistema de computadoras del edificio. Si el PLC se alimenta con voltaje DC, los terminales de alimentación están marcados con la polaridad respectiva, es decir, positivo (+) y negativo (-). Puede ser un interruptor, un puente o un selector, encargado de permitir la selección del voltaje de alimentación. Puede diferir de una región a otra, siendo los más comunes 110 VAC y 220 VAC. 5. Debido a la importancia de un PLC dentro de un proceso automático, la alimentación de su circuitería es de suma importancia, por lo que un buen diseño debe involucrar una fuente alterna que permita entrar en funcionamiento cuando se cae el fluido eléctrico. Con esto, aseguramos que los dispositivos electrónicos internos no sufran fallas por picos de sobrevoltaje y otros efectos contraproducentes existentes en la red de distribución. 6. 7. Otra opción es mantener la fuente de los PLCs conectada a una UPS (Uninterruptible Power Supply) o fuente interrumpida de potencia, la cual suministra el voltaje adecuado, por un tiempo determinado, cuando falla el fluido eléctrico. Esto ayuda a que el PLC no tenga tantos ciclos de apagado brusco, los cuales pueden ser muy perjudiciales.