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La Resistencia Indígena Nació en 1492

Por: Neida Atencio C. | Viernes, 14/10/2016 08:07 AM | Versión


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El 12 de octubre de 1492 se conoció como el día del Descubrimiento de
América, ocultando así el más grande genocidio en la Historia de la
humanidad. Genocidio que acabó con la vida de aproximadamente 90
millones de indígenas; desapareció civilizaciones enteras; perpetró el
saqueo de las riquezas existentes y destruyó las culturas autóctonas.

Ese mismo día, el 12 de octubre de 1492 nació la Resistencia Indígena en


América. Resistencia que aún pervive ante los despojos y atropellos de los
cuales son objetos las comunidades indígenas que sobrevivieron a la
matanza de los europeos. En Chile, por ejemplo, ocurren frecuentes
atropellos contra la población indígena: la presidenta Bachelet ordenó
acciones contra los Mapuches que reclamaban sus derechos en 2011 y
hace pocos días se recrudeció el atropello y la barbarie sobre estos
indígena. El gobierno de presidente Sebastián Piñera ordenó el arresto de
una niña Mapuche en 2011. Orden que se cumplió cuando salía de su
escuela.

En Venezuela no ha cesado la resistencia indígena porque no han cesado


los atropellos. Actualmente los Yucpas mantienen una lucha desigual en
el municipio Perijá contra los ganaderos, quienes reciben el apoyo de los
organismos de seguridad y defensa del país. Vemos que luchadores
sociales que trabajan por la causa indígena al lado de los Yucpas son
descalificados al ser acusados, inclusive, de ser agentes de la CIA, como
es el caso del Prof. Lusbi Portillo. Algunos dirigentes indígenas han sido
perseguidos, entre ellos el cacique Sabino Romero, quien fue sometido a
juicio luego de estar preso arbitrariamente durante año y medio en un
fuerte militar en la ciudad de Trujillo, sin las garantías que reconoce la
constitución de la República a los indígenas, entre ellas la posibilidad de
recibir visitas de sus familiares. Fue asesinado por sicarios contratados
por, según testimonio de los familiares, ganaderos de la zona. ¿Qué
buscan los indígenas con sus luchas? Sencillamente que no se explote el
carbón ni otros minerales en la Sierra de Perijá para evitar la
contaminación de su hábitat y que se demarquen las tierras que les
corresponden para recuperar las que han sido arrebatadas por los
ganaderos.

Observamos con indignación que en varios sitios de Maracaibo son


explotados y obligados a ejercer la mendicidad algunas indígenas Yucpas,
cargando con sus hijos, durante todo el día y al final de la tarde son
retiradas en el mismo vehículo que las trajo. Los organismos a quienes
compete velar por los derechos de los pueblos indígenas son los únicos
que desconocen que esto acontece. Es decir delitos como trata de personas
y explotación de niños y mujeres no existen, ante los ojos de algunas
autoridades.

Las primeras crónicas escritas por Colón informaron a los reyes de


España que los indígenas, "indios" como los invasores los llamaban, eran
gentes tranquilas, sonreían continuamente, no se peleaban entre ellos y
con estas características sería muy sencillo dominarlos para convertirlos
en esclavos. Efectivamente los indígenas vivían felices en estas tierras, en
perfecta armonía con la naturaleza. Felicidad que terminó con la llegada
del invasor que trajo consigo entre otras calamidades enfermedades,
violaciones de las indígenas, saqueos y matanzas.

Desde las primeras cartas escritas por Colón se evidencia que la conquista
de América se hizo bajo el signo del dinero. En 1503, Colón escribía desde
Jamaica a la reina Isabel:"¡Cosa maravillosa es el oro: Quien tiene oro es
dueño y señor de cuanto apetece. Con oro hasta se hacen entrar las almas
al paraíso". Él calculaba que el Nuevo Mundo proporcionaría al reino de
España más de cien quintales de oro al año. Un quintal equivale
aproximadamente a 46 kilogramos.

El Inca Atahualpa, nació en 1500. Después de un inesperado ataque de los


españoles fue hecho prisionero por Francisco Pizarro en 1532. Su rescate le
reportó a la corona 5.720 kilos de oro y 11.000 de plata. Pero, a pesar de
pagar el rescate fue asesinado y su muerte provocó el caos. Sus
seguidores lloraban en las calles desesperados por la muerte de su
emperador.
La causa esencial de la rápida recolección y producción de metales
preciosos arrancados a los aborígenes fue el grado de adelanto minero-
metalúrgico que habían alcanzado. En fin, los indígenas americanos
proporcionaron a los conquistadores los datos para ubicar las minas,
oficiaron de técnicos, especialistas y peones, y aportaron un cierto
desarrollo de las fuerzas productivas que facilitó a los españoles la tarea
de la colonización.

Fue tan feroz la resistencia indígena en Venezuela, según cuenta Eduardo


Arcila Farías en su libro "Economía Colonial de Venezuela", que mientras
los virreinatos de Nueva España, del Perú y Nueva Granada eran ya
dominios florecientes a los que España debía buena parte de su grandeza,
en nuestra patria los colonizadores no habían podido pasar de la costa,
pues varias tribus continuaban guerreando en su empeño por sacar de
sus territorios a los invasores

A la acción de los ejércitos españoles, se unió la participación de la Iglesia


Católica. A través de los misioneros, pusieron en marcha un brutal
proceso de adoctrinamiento por la fuerza practicando la abolición de sus
dioses y sus creencias milenarias. Para fortalecer estas prácticas la Iglesia
da inicio a las "apariciones" de las Vírgenes, quienes por supuestos,
premiaron a los caciques sumisos con el milagro de su aparición. ¿Por qué
la Virgen no se le "apareció" a Guaicaipuro, quien luchó defendiendo a su
tribu y, lo hizo a Coromoto, quien se rindió y entregó su gente al invasor?
Porque las apariciones fueron planeadas. Fueron de carácter ideológico.
España luchó con dos tipos armas: las convencionales y la Santa Cruz

Fray Bartolomé de las Casas denunció la brutalidad de los conquistadores


hacia los indígenas para arrebatarles el oro, la plata y su libertad, al narrar
en su "Brevísima relación de la destrucción de las Indias" los crímenes
cometidos por los invasores en la isla de La Española, en uno de sus
pasajes señala lo siguiente:

"Entraban los españoles en los poblados y no dejaban niños ni viejos ni


mujeres preñadas que no desbarrigaran e hicieran pedazos. Hacían
apuestas sobre quién, de una cuchillada abría un indio por medio o le
cortaban la cabeza de un tajo. Arrancaban las criaturas del pecho de sus
madres y las lanzaban contra las piedras. A los hombres les cortaban las
manos. A otros los amarraban con paja seca y los quemaban vivos. Y les
clavaban una estaca en la boca para que no se oyeran los gritos. Para
mantener a los perros amaestrados en matar traían muchos indios en
cadenas y los exponían a los perros que los mordían y los destrozaban.
Organizaban carnicerías públicas de carne humana. Yo soy testigo de
todo esto y de otras maneras de crueldad nunca vistas ni oídas".

Cuenta la historia que el cacique Hatuey, de Santo Domingo, logró


escapar de la carnicería huyendo a la vecina isla de Cuba donde organizó
la resistencia indígena, pero fue perseguido, hecho prisionero y
condenado a morir en la hoguera. "Atado fuertemente a un poste cuando
las llamas comenzaban a chamuscarlo, se le acercó un sacerdote para
hacerlo cristiano antes de morir. Hatuey preguntó si haciéndose cristiano
iría al cielo de los cristianos, y como el sacerdote le contestó
afirmativamente, Hatuey le dijo que prefería ir al infierno antes de volver
a ver un cristiano".

Uno de los jefes indígenas más destacados fue Guaicaipuro, orgullo del
pueblo venezolano. Fue el primer venezolano que logró una coalición
para derrotar al invasor. Junto con Terepaima, Guaicaipuro logró derrotar
en varias oportunidades a Fajardo y otros jefes españoles. Consciente del
peligro, el Gobernador decidió organizar una fuerte expedición al mando
de Diego de Losada. Guaicaipuro lo enfrentó pero después de varios
combates fue derrotado y según dice el cronista José de Oviedo y Baños,
"Losada se halló con más de diez mil indios acaudillados por el cacique
Guaicaipuro, quienes al batir de sus tambores y resonar de sus fotutos le
presentaban altiva batalla".

Desde 1492 hasta avanzado el siglo XVIII, el genocidio se desató


impunemente por todas las tierras de América provocando la muerte de
millones de aborígenes. Por ello, no es casual que el Canto Guerrero de
los Cuicas sea el poema-combate por excelencia ante la llegada de los
invasores, quienes, a sangre, fuego y cruz, impusieron su imperio, sus
símbolos religiosos y su cultura expoliadora.
Resulta absurdo cómo algunos historiadores con la complaciente actitud
de la mayoría de los gobiernos que sucedieron a la gesta independentista
que acabó con el dominio español en América, hayan ocultado tan
horrendo crimen celebrando como una feliz efemérides el 12 de octubre
como del Día de la Raza, del Idioma, de la Madre Patria, de la Religión
Católica, que no son más que la misma lengua, el mismo imperio y la
misma religión impuestos a sangre y fuego sobre millones de nuestros
aborígenes para arrasar con las riquezas y las culturas de sus
civilizaciones.

Para rescatar el verdadero y auténtico significado de esa fecha que los


pueblos del continente han rebautizado como el "Día de la Resistencia
Indígena" en justo homenaje a la nación aborigen americana que enfrentó
al invasor español y a la religión que le fue impuesta a sangre y fuego, se
han creado organizaciones y movimientos indígenas y agrarios que
buscan fortalecer la lucha contra la globalización, el neoliberalismo y sus
diferentes instrumentos y formas de dominación.

Se trata de la respuesta más oportuna que los pueblos de Nuestramérica


puedan dar a las pretensiones de los nuevos conquistadores y
colonizadores a poco más cinco siglos del 12 de octubre de 1492, fecha
que no fue la de un descubrimiento como pretendieron llamarlo durante
mucho tiempo, repito, sino el punto de partida de la Resistencia Indígena
que hoy se fortalece y agiganta con la participación de los pueblos
latinoamericanos que están dispuestos a preservar la soberanía y libertad
que conquistaron Bolívar, Sucre, San Martín, O Higgins, Morazán y otros
próceres y alcanzar la integración que les fue vedada entonces por la
traición de las oligarquías criollas y sus amos imperialistas.
neida.atencio@gmail.com

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