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Perla Szuchmacher
PERSONAJES:
JUGLARES
MINISTROS
EL REY
LUDOVICO, EL HERMANO MAYOR
RUMUALDO, EL HERMANO MENOR
PANCRACIA, LIDER DE LOS SORDOS
MARTÍN, HIJO DE PANCRACIA
NICOLÁS, EL CARPINTERO
HERALDO
EMBAJADOR DEL REINO VECINO
SASTRE
JOYERO
ZAPATERO
ARMERO
JUGLAR 1: ¡Ya! Vamos a comenzar. En un reino muy lejano, hace muchos, muchos años,
ocurrió esta historia. Este es el rey. Estos son sus dos hijos. Éste es Ludovico, el hermano
mayor. Éste es Romualdo, el hermano menor. La vida en el reino era muy tranquila.
Escena sin texto. La vida cotidiana en el reino. ROMUALDO y LUDOVICO
juegan al ajedrez. ROMUALDO y LUDOVICO se adiestran con el florete. El REY
rodeado de sus ministros trabaja, le traen papeles para firmar, etc.
JUGLAR 1: Pero no todo era juego y alegría en el reino. Un día, el viejo rey muere.
JUGLAR 1: Pasados los funerales, los ministros se reúnen para nombrar al nuevo rey. Se
preguntan cómo harán para elegirlo.
MINISTRO 2: Sí
MINISTRO 2: No
MINISTRO 2: Sí
MINISTRO 2: No.
Le entrega el florete
MINISTRO 2: Sí
MINISTRO 2: No
MINISTRO 1:¿Qué?
MINISTRO 2: Es sordo.
MINISTRO 2: Sí
JUGLAR 1: Los ministros no querían nombrar rey a Ludovico, porque era sordo. Y a pesar
de que tenía todos los atributos para poder gobernar, se oponían. Temían que los otros reinos
se burlaran por tener un rey sordo y aunque los habitantes sordos del reino hubieran estado
felices de tener un rey como ellos, no los tomaron en cuenta, porque eran muy pocos.
ROMUALDO bosteza durante la entrevista. Los MINISTROS traen papeles para firmar.
JUGLAR 1: Pero lo que más le gusta a Rumualdo es gastar el dinero del reino.
Entra un JOYERO, RUMUALDO se prueba los anillos y compra uno. Saca dinero
y le paga.
Entra un ARMERO con un florete recamado de joyas. Saca dinero del cofre y le
paga.
JUGLAR 1: Y así se la pasa Romualdo, gastando y gastando el dinero hasta que un día...el
dinero se termina.
HERALDO: ¡Se avisa a toda la población, que a partir de hoy, se aumentan los impuestos y
las contribuciones!
PUEBLO: ¡No!
HERALDO: ¡Sí!
Escena sin texto: desfile del pueblo llevando productos para las bodegas del
palacio. Un cerdo, un atado de espinas de trigo, una canasta con frutos.
JUGLAR 1: Pasaba el tiempo y el pueblo trabajaba y trabajaba en jornadas agotadoras, las
arcas del reino estaban llenas pero las despensas de las casas humildes vacías.
Entra NICOLÁS.
JUGLAR 1: Un día, Nicolás el carpintero, decide ir a ver a su rey, para pedirle que ya no
aumente los impuestos, para decirle que sus hijos ya no tienen que comer. Nicolás cree que
el rey va a escucharlo, confía en el poder de sus palabras. Pero ¡ay! qué desilusión, el rey
no sólo no escucha su reclamo sino que se burla diciéndole que debe trabajar más, de día y
de noche y ahorrar. Sobre todo ahorrar.
Sale NICOLÁS.
Pasa el tiempo. Desfile del pueblo llevando productos para las bodegas del
palacio. Se los debe ver cada vez más cansados y con las ropas andrajosas.
ROMUALDO: Ahora no, estoy ocupado, que vengan mañana. ¡No! mejor pasado mañana.
MINISTRO 1: Lleva meses esperándolo, anoche durmió en la puerta del palacio, para ser la
primera.
PANCRACIA: (en Lenguaje de Señas Mexicana )Soy la que hace el pan que comen en
palacio.
ROMUALDO: ¿Qué dicen? ¿De qué están hablando? ¡Basta! ¡Dejen de hacer cosas
horribles con las manos! ¡Guardias!
Escena sin texto: ROMUALDO reúne a sus ministros y dicta un mensaje al
pueblo. Entra el HERALDO.
HERALDO: Se avisa a toda la población, que a partir de hoy, queda prohibido el lenguaje
de señas, no sólo prohibido, prohibidísimo y al que se encuentre haciéndolo, se le desterrará
del reino.
JUGLAR 1: El tiempo pasaba y las cosas en el reino iban de mal en peor. Dicen por ahí que
no hay peor sordo que el que no quiere oír. Y Romualdo no oía nada, no oía el llanto de los
niños con hambre, no oía lo suspiros de las madres al poner cada vez más agua en los
guisados, no oía los quejidos de los viejos que tenían que trabajar jornadas agotadoras. Pero
por las noches, por las noches algo estaba pasando
Escena sin texto: convocados por Nicolás un gran grupo de personas se reúne.
JUGLAR 1: Nicolás trata de convencer al pueblo de que es necesario hacer algo, de que la
situación ya no puede continuar igual, pero la gente tiene miedo. (El grupo se hace más
pequeño.) Miedo de los guardias y sus lanzas filosas. (El grupo se hace más pequeño).
Miedo a perder lo poco que tienen.
El grupo se hace más pequeño hasta que se van todos, sólo queda PANCRACIA
Y MARTÍN.
Escena sin texto: NICOLÁS, PANCRACIA Y MARTÍN son los únicos que se
quedan mientras el pueblo se va. NICOLÁS con ayuda de MARTÍN logra
comunicarse con PANCRACIA y convocar nuevamente al pueblo para reunirse.
JUGLAR 1: Y así seguía la vida en el reino, el pueblo trabajando sin descanso, los niños
cada vez más flacos y hambrientos, una bruma gris de tristeza iba cubriéndolo todo, pero
Romualdo, el rey, no se enteraba de nada, el vivía en otro mundo, sólo pensando en fiestas
y diversión.
ROMUALDO: ¡Mi corona! ¿Dónde está mi corona? ¿Qué hace toda la gente reunida? ¿Por
qué llevan antorchas? ¡¡¡¡Socorro!!!! ¡Ministros! ¡Guardias a mí! ¡Me han dejado solo,
cobardes!
JUGLAR 1: Y así fue como Romualdo dejó el reino, se escapó entre gallos y medianoche,
huyó sin despedirse de su hermano y sin volver la vista atrás. Los ministros se reunieron y
nombraron a Ludovico, el hermano sordo, como el nuevo rey.
Los MINISTROS colocan la corona a LUDOVICO.
LUDOVICO: (en Lenguaje de Señas Mexicana) Mi primera medida de gobierno será bajar
los impuestos, construir más escuelas y traer doctores de reinos vecinos.
MINISTRO: No le entiendo.
MARTÍN: ¡Viva! El rey dice que se bajarán los impuestos y se construirán escuelas.
LUDOVICO: (en Lenguaje de Señas Mexicana )Hola Martín, llegas como caído del cielo.
¿Quieres ser mi intérprete?
MINISTRO 2: No, no le digas eso. Dile que sí, que nos parece muy bien.
JUGLAR 1: Ludovico pidió a Martín que enseñara a los Ministros el lenguaje de señas, y
aunque estos al principio protestaron después les gusto aprender. Ahora podían comunicarse
con su rey y los habitantes sordos del lugar. Y esa comunicación daba sus frutos, ya que a
medida que sus manos se iban llenando de palabras, el reino prosperaba.
MINISTRO 1: Su majestad, las cosas van marchando muy bien. Las cosechas son
excelentes, los viejos ya no tienen que trabajar y los niños van a la escuela.
LUDOVICO suspira.
MINISTRO 2: No está contento.
LUDOVICO: No.
ROMUALDO: (en Lenguaje de Señas Mexicana )Por los caminos, ahora en el reino casi
todos lo hablan.
Se abrazan
LUDOVICO: (en Lenguaje de Señas Mexicana ) Sólo una partida, luego hay que ponerse a
trabajar.
La luz se cierra sobre los hermanos. Regresan los JUGLARES y se despiden.