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El factor de racionalización y su utilización

Racionalización

Es una operación que consiste en transformar una expresión (con denominador


irracional) en otra equivalente parcialmente racional (con denominador racional).

Factor Racionalizante (F.R) :

Es la expresión por la que hay que multiplicar a una cantidad irracional para
convertirla en racional.

Si el denominador contiene un solo término formado por una sola raíz cuadrada.
En este caso basta multiplicar numerador y denominador por la misma raíz
cuadrada.

Si el denominador de la fracción contiene dos términos en uno de los cuales o en


los dos hay una raíz cuadrada, se multiplica numerador y denominador por el
conjugado del denominador. O sea si es una suma se multiplica por la resta, y
viceversa.Si el denominador sólo tiene un término con una raíz de índice
cualquiera, n, se multiplica numerador y denominador por otra raíz de índice n
quecomplete una potencia de exponente n.

Racionalizar el denominador es el proceso en que se transforma una fracción con


radicales en el denominador a otra equivalente sin radicales.

Un procedimiento general para conseguir la racionalización del denominador es


multiplicar numerador y el denominador por un mismo factor.

El tipo de expresión que se multiplica el numerador y el denominador depende en


primer lugar del número de términos del denominador.

Primero se estudiará el caso en que el numerador es un monomio, luego el caso


en que es un binomio, para finalmente tratar el caso de trinomio con raíces
cuadradas
Violencia económica

La violencia económica es toda acción efectuada por un individuo que afecta la


supervivencia económica de otro. Se presenta a través de limitaciones, orientadas
a controlar el ingreso obtenido; así como la percepción de un salario más bajo por
igual trabajo, dentro de un mismo centro laboral.

La violencia económica está destinada a coaccionar la autonomía de una persona


del grupo familiar, que cause o pudiera originar daño económico, o evadir
obligaciones alimentarias. Al igual que las demás formas de violencia, su función
es generar dependencia y temor, que ayudan a reforzar la primacía del varón jefe
de familia, en un esquema de desigualdad de género que se prolonga gracias a la
violencia.

Este tipo de violencia se encuentra enmarcada dentro de la violencia de género y


hace referencia a la desigualdad que existe, en el acceso a los recursos
económicos que deberían ser compartidos entre el hombre y la mujer. Algunos
casos de violencia económica en el hogar se pueden dar de dos maneras:

Cuando es el hombre quien ejerce el papel de proveedor, es decir, el hombre es


quien trabaja y aporta todo el dinero para la manutención del hogar, por lo tanto
supervisa y controla todos los gastos. Puede amenazar a la mujer con dejarla en
la calle o quitarle la custodia de los hijos.

Otra forma es cuando, es el hombre quien “vive” de la mujer, es decir, la mujer es


quien trabaja para mantener a la familia o la que aporta la mayor parte de dinero.
El hombre con mucha astucia se encarga de manipularla para que le entregue el
dinero y poder administrarlo.

Elementos que se deben tener en cuenta para identificar que está siendo víctima
de violencia económica:

Cuando no tiene acceso, ni a cuentas bancarias, chequeras, tarjetas de crédito,


etc.

Tiene que dar explicaciones de todo lo que gasta; le niegan el dinero necesario
para satisfacer sus necesidades (comer, vestirse, ir a lugares de recreación, etc.)

No le permiten que estudie o trabaje; se niegan a pagar la pensión alimenticia de


los hijos.

No puede participar en las decisiones económicas del hogar.


Los efectos que originan esta clase de violencia se manifiesta en persona con
episodios de depresión, baja autoestima, muchas mujeres se convierten en
limosneras en su propia casa.

¿Qué hacer en estos casos?

Lo primero es reconocer que está siendo víctima de violencia económica y tratar


de independizarse, tener confianza en sí mismas y tratar de obtener sus propios
ingresos.

Violencia sexual

El término violencia sexual hace referencia al acto de coacción o amenaza hacia


una persona con el objetivo de que lleve a cabo una determinada conducta sexual,
por extensión, se consideran también como ejemplos de violencia sexual "los
comentarios o insinuaciones sexuales no deseados, o las acciones para
comercializar o utilizar de cualquier otro modo la sexualidad de una persona
mediante coacción por la relación de ésta con la víctima, en cualquier ámbito,
incluidos el hogar y/o el lugar de trabajo."1 La violencia sexual se manifiesta con
actos agresivos que mediante el uso de la fuerza física, psíquica o moral reducen
a una persona a condiciones de inferioridad para imponer una conducta sexual en
contra de su voluntad. Este es un acto que busca fundamentalmente someter el
cuerpo y la voluntad de las víctimas.

Características y víctimas más frecuentes

Los casos más frecuentes de violencia sexual son ejercidos sobre niños (la
pedofilia y el abuso sexual intrafamiliar) y la violación de mujeres.

El delincuente sexual lo puede ser en exclusiva (sobre todo en el caso de los


pedófilos), pero también puede ir acompañado de otros perfiles delictivos, tal es el
caso de robos, agresiones, maltrato físico, etc.

El agresor sexual no es necesariamente un desconocido para la víctima; en


ocasiones es, precisamente, su cercanía cotidiana a la misma la que le ha
facilitado un determinado grado de confianza que ha derivado en la imposición de
una determinada relación.
Violencia psicológica

La Violencia psicológica no resulta fácil de definir o reconocer, pero en términos


generales se designa como el uso deliberado del abuso psicológico, incluyendo el
maltrato verbal, acoso, aislamiento y privación de los recursos físicos, financieros
y personales, para controlar y manipular a la pareja o al ambiente más cercano.
Hay violencia cuando se ataca la integridad emocional o espiritual de una persona
y no sólo es violencia el abuso físico, los golpes, o las heridas; más terrible es la
violencia psicológica por el trauma que causa porque todo el mundo no la puede
ver. Los insultos incesantes y la tiranía que constituyen el maltrato emocional y
psicológico socavan eficazmente la seguridad y la confianza de la víctima en sí
misma.

Precedentes

La violencia psicológica precede a la violencia física durante, a veces, años. La


violencia psicológica es, despreciar a la persona maltratada, insultarla de tal
manera, que llega un momento en que esa persona maltratada psicológicamente,
ya cree que se merece el maltrato.

Hay maltratados psicológicamente que se avergüenzan por lo que les sucede y


que hasta se creen merecedores de los abusos. Por eso prefieren mantenerlos en
secreto y así esa situación puede prolongarse durante años. Los que maltratan
psicológicamente a sus víctimas lo hacen de acuerdo a un patrón de abuso.

Manifestaciones de violencia psicológica

Abuso verbal: Rebajar, insultar, ridiculizar, humillar, utilizar juegos mentales e


ironías para confundir, etc.

Intimidación: Asustar con miradas, gestos o gritos. Arrojar objetos o destrozar la


propiedad.

Amenazas: De herir, matar, suicidarse, llevarse a los niños.

Abuso económico: Control abusivo de finanzas, recompensas o castigos


monetarios, impedirle trabajar aunque sea necesario para el sostén de la familia,
etc.

Abuso sexual: Imposición del uso de anticonceptivos, presiones para abortar,


menosprecio sexual, imposición de relaciones sexuales contra la propia voluntad o
contrarias a la naturaleza.
Aislamiento: Control abusivo de la vida del otro, mediante vigilancia de sus actos y
movimientos, escucha de sus conversaciones, impedimento de cultivar amistades,
etc. Se le hace el vacío a la víctima, ni le hablan, ni la miran y entonces se va
creyendo que se merece ese trato.

Desprecio: Tratar al otro como inferior, tomar las decisiones importantes sin
consultar al otro.

Víctimas

Este tipo de violencia puede ocurrir de hombres a mujeres, de mujeres a hombres,


de padres a hijos, de maestros a alumnos.

Violencia religiosa

Violencia religiosa es un concepto que cubre todos los fenómenos en los cuales la
religión, en cualquiera de sus formas es sujeto u objeto de comportamiento
violento1 e incluye violencia motivada por preceptos religiosos, textos o doctrinas,
lo que incluye violencia motivada por los aspectos religiosos del objetivo de la
violencia.

La violencia religiosa tiende a poner el énfasis sobre el aspecto simbólico del acto
y su actor puede ser individual o colectivo. Maurice Bloch destaca como la religión
y la política son dos caras de la misma moneda

Es un problema porque la religión está siendo utilizada por esas fuerzas, grupos y
naciones que buscan el poder y la dominación, usando la religión como una
justificación, como una causa, como un propósito.

Pero esto no puede ser, ya ves, porque Dios inició todas las religiones del mundo,
porque Dios sabe que no todo el mundo puede seguir una única enseñanza o un
único maestro.

Por tanto, castigar a los no creyentes es un crimen contra Dios. Acusar a aquellos
que no pueden responder a tu religión representa confusión, arrogancia y un
crimen contra Dios.

Dios sabe que no todo el mundo puede seguir una enseñanza o un maestro, y es
por eso que en diferentes momentos críticos de la historia Dios ha iniciado nuevas
Enseñanzas y ha enviado Mensajeros al mundo desde la Asamblea Angélica.
Todas ellas añaden algo muy importante para la construcción de la civilización
humana. Cada una pretende ser un contrapeso de las otras, que se vuelven
extremas y se distorsionan en manos del liderazgo human

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