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La Reforma Protestante
Definición
El nombre Reforma Protestante se ha dado al movimiento religioso que afectó a Europa
y gran parte del mundo a partir de 1517. En realidad la palabra “Reforma” no es la más
apropiada para describir esa etapa de la historia de la Iglesia. No fue tanto una "reforma” lo
que ocurrió, sino más bien una regeneración o una transformación.
Diferentes interpretaciones
de la Reforma Protestante
1) Introducción
La Reforma Protestante es un acontecimiento o la suma de muchos acontecimientos
que afectaron tanto la vida europea que se hace objeto de múltiples interpretaciones. Es
claro que no todos interpretan de la misma manera la Reforma.
2) La interpretación Católico-Romana
a. Interpretación tradicional
Los historiadores católicos tradicionales han atribuido la Reforma a cuestiones
puramente morales. Hay quienes han dicho que Lutero inicia la Reforma porque
simplemente se quería casar. Siguiendo la línea moralista, muchos historiadores cat6licos
tradicionales admiten que la razón de la Reforma fue la corrupción y los abusos de la Iglesia
Medieval incluyendo al clero y a las altas esferas de la jerarquía. Sin embargo, la Reforma
no fue la mejor forma de arreglar aquella situación. Si lo que se buscaba era cambiar la
conducta externa de la Iglesia hubiera sido suficiente hacerlo desde adentro.
b. Interpretación contemporánea
Los historiadores católicos contemporáneos están estudiando la Reforma con mayor
objetividad. Ahora dicen que la Reforma protestante fue un suceso que tuvo múltiples
causas y que no se puede atribuir solamente al decaimiento moral de la Iglesia. Muchos
estudian a Lutero desde una perspectiva histórica objetiva y ven en él a un gran hombre
que introdujo toda una nueva época en la historia de la Iglesia y de Europa en general.
3) La interpretación de Voltaire
Según Voltaire, racionalista francés del siglo XVIII, la Reforma no fue más que e1
producto de una disputa interna entre monjes en Alemania en vista de que agustinos y
dominicos pretendían tener la exclusividad en la venta de indulgencias en territorio alemán.
Por otro lado, dice que la Reforma en Inglaterra fue el resultado de los amoríos de Enrique
VIII. Lo dicho por Voltaire no debe excluirse totalmente de un análisis objetivo de las causas
de la Reforma, pero no puede limitarse solamente a eso.
5) La interpretación marxista
Para muchos es ya conocida la forma en que el marxismo interpreta la historia en
general. Según los marxistas ortodoxos, Lutero no fue un auténtico teólogo, sino un
agitador popular que compartía e interpretaba las aspiraciones de su gente oprimida
por los terratenientes y por el papado. Lutero supo guiarlos por el camino de la revolución
usando la Reforma religiosa como un disfraz. Fue, en definitiva, el libertador de turno. Sin
embargo, después que había alcanzado el triunfo, fue presa del sentimiento burgués y pasó
el resto de su vida cómodamente sin compartir con su pueblo. Aunque no debemos olvidar
las apelaciones económico-sociales de Lutero al pueblo alemán, hay que afirmar que no
constituyen la única razón porque aquélla se dio.
7) La interpretación protestante/evangélica
a. La interpretación protestante tradicional
Los historiadores protestantes tradicionales han interpretado la Reforma como una
serie de sucesos de orden espiritual o teológico. Es decir, la Reforma es simplemente el
despertar de la Iglesia a la “sana y verdadera doctrina”. Son pocos los que consideran
seriamente los aspectos políticos, económicos o sociales antecedentes a la Reforma,
concurrentes o consecuentes.
a. Su niñez
Martín Lutero nació el 10 de noviembre de 1483 en la
ciudad de Eisleben en la región alemana de Sajonia. Fue el
primogénito de siete hijos en la familia. Sus padres, Hans (Juan)
y Margarita eran cristianos de la época, es decir, virtuosos,
piadosos, industriosos e incluso supersticiosos.
Poco tiempo después del nacimiento de Martín, sus padres
se trasladaron a la ciudad de Mansfield debido a escasez de
trabajo para el padre. Estos primeros años fueron de pobreza
para la familia. El padre de Martín era agricultor al principio,
pero luego se dedicó a la minería. Poco a poco, la situación
económica fue cambiando porque el padre de Martín se hizo
dueño de una pequeña mina. Tiempo después Juan Lutero fue
nombrado concejal de la ciudad lo cual le dio oportunidades para
ampliar sus relaciones. De esta manera la familia entró en contacto con el clero y con la
gente educada de la ciudad.
d. Su ingreso al monasterio
Dos meses después de haber iniciado sus estudios superiores de derecho en la
universidad de Erfurt, Lutero los abandona abruptamente. Las razones de esta decisión
son dos. La primera fue la muerte repentina de un amigo suyo, lo cual impresionó tanto a
Lutero que le tomó terror a la inminencia de su propia muerte. La otra razón fue un
accidente personal cuando, al regresar de unas breves vacaciones con su familia fue
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sorprendido por una tormenta y un rayo casi lo alcanzó. Allí, en medio del camino, prometió
a Santa Ana que se haría monje. Dos semanas después de esto ingresó al monasterio
agustino de Erfurt. Todo esto sucedió a mediados del año 1505.
La mayoría de datos sobre la vida de Lutero en el monasterio provienen de él mismo
cuando años después escribió con cierta repugnancia de ese tiempo. La verdad es que su
estancia en el monasterio estuvo llena de experiencias místicas y de actividades
“espirituales” que pretendían ganar el favor de Dios. Castigaba su cuerpo, según la tradición
de los grandes monjes y acudía al confesionario con tanta frecuencia como le fuera posible.
Se puede decir que Lutero fue un monje modelo. Sin embargo, los resultados no eran
satisfactorios. Una enorme inquietud dominaba su vida.
Empero, aunque yo vivía como monje irreprochable, me sentía pecador ante Dios y estaba muy inquieto
en mi conciencia sin poder confiar en que estuviese reconciliado por mi satisfacción. No amaba, sino que
odiaba a ese Dios justo que castiga a los pecadores...
Martín Lutero, Obras de Martín Lutero, vol. 1, pág. 337.
f. Su visita a Roma
A finales de 1510, Lutero se vio favorecido con un viaje a Roma, representando a siete
monasterios agustinos. Para Lutero, este viaje significaba la gran oportunidad de satisfacer
sus inquietudes espirituales. Roma siempre ha ejercido atracción para los devotos cristianos
y Lutero no era la excepción. El propósito del viaje era tratar asuntos administrativos de la
orden, pero Lutero llevaba un propósito personal: alcanzar la mayor cantidad posible de
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indulgencias y así satisfacer sus propias inquietudes.
Al llegar a Roma, Lutero se llevó una
gran decepción porque no encontró lo que
buscaba, sino todo lo contrario. Vio una
ciudad y una Iglesia entregada a la
corrupción, a la mundanalidad, al lujo y a
la lujuria. Hay historiadores protestantes
que dicen que fue en Roma donde Lutero
tuvo su “conversión". La verdad es que
Lutero regresó muy decepcionado y
desilusionado. A su regreso Staupitz lo
envía de nuevo a la universidad de
Wittemberg y para allá se dispuso a partir.
Entonces Dios tuvo misericordia de mí. Día y noche yo estaba meditando para comprender la conexión de
las palabras, es decir “la justicia se revela en él, como está escrito: el justo vive por la fe”. Ahí empecé a
entender la justicia de Dios como una justicia por la cual el justo vive como por un don de Dios, a saber,
por la fe. Noté que esto tenía el siguiente sentido: por el Evangelio se revela la justicia de Dios, la
justicia “pasiva”, mediante la cual el Dios misericordioso nos justifica por la fe... Ahora me sentí
totalmente renacido. Las puertas se habían abierto y yo había entrado en el paraíso. De inmediato toda
la Escritura tomó otro aspecto para mí.
Martín Lutero, Obras Completas, pág. 338.
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A raíz de su descubrimiento de la justicia divina y de la justificación por la fe “sola”,
Lutero empezó a enseñar a sus estudiantes sus descubrimientos. Lutero no tenía la
intención de provocar un cisma o hacer gran revuelo por sus descubrimientos teológicos.
Lo único que é1 pretendía era compartir con sus colegas y estudiantes el producto de sus
estudios. De esa cuenta que pasaron varios años antes de que estallara la chispa de la
Reforma. Sin embargo, la vida de profesores, estudiantes y de la universidad en general
estaba siendo afectada por los estudios y enseñanzas de Lutero.
a. La venta de indulgencias
Las indulgencias eran parte de la teología y
tradiciones católicas desde el siglo XI, pero sólo eran
consideradas como un complemento al sacramento de la
penitencia. A partir del siglo XI en Francia adquirieron un
carácter más general. Se hicieron famosas y comunes en
tiempos de las Cruzadas, y se corrompieron en tiempos del
papado en Aviñón.
Mucho se ha discutido si Lutero estaba en contra de
las indulgencias como dogma católico, o simplemente
rechazaba el abuso en la venta de tales indulgencias. Lo
cierto es que para 1517 sí había un abuso reconocido hoy
por historiadores católicos.
El aspecto específico que provoca la reacción airada
de Lutero fue la venta de unas indulgencias especiales en
territorio alemán. El arzobispo de Magdeburgo, primado
de Alemania, Alberto de Brandenburgo quería adquirir un
puesto eclesiástico adicional a los dos que ya tenía. El
papa León X accedió a la petición de Alberto previo
acuerdo en el pago que se haría. Además, el papa llegó a
un acuerdo con Alberto en el sentido de que éste sería el
representante legal en Alemania de la venta de las
indulgencias especiales que se habían emitido en Roma con el fin de construir la basílica de
San Pedro. El producto de esta venta se repartiría en partes iguales entre Alberto y el
papado. Este convenio era totalmente desconocido para el pueblo, y aparentemente Lutero
tampoco estaba enterado.
El predicador/vendedor más famoso de estas; indulgencias fue el fraile dominico Juan
Tetzel. El resultado de las predicaciones de Tetzel fue que la gente compró tales
indulgencias de manera entusiasta. El príncipe Federico el Sabio prohibió a Tetzel que se
acercara a Wittemberg a vender sus indulgencias porque él estaba empeñado en promover
la importancia de la iglesia del lugar a través, precisamente de la adquisición de reliquias
que sirvieran para atraer peregrinos que buscaran las indulgencias en el día de todos los
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santos (1 de Nov.). Lutero también se opuso a Tetzel, pero por razones diferentes ya
que él empezaba a descubrir la inutilidad salvífica de tales prácticas. En la víspera de
“todos los santos” Lutero decidió escribir algo en contra de las indulgencias en general, no
solamente en contra de las de Tetzel. Esto incluía las de su propia iglesia en Wittemberg.
b. Las 95 Tesis
Las 95 tesis son el resultado de la indignación
de Lutero debido a los abusos de la venta de
indulgencias. Sin embargo, al estudiarlas
detenidamente, se puede observar que Lutero es-
taba cuestionando todo el sistema y la doctrina
católica de las indulgencias. Las 95 tesis
solamente representan el inicio de la Reforma, ya
que con el correr de los años fueron relegadas a un
segundo plano en vista de que lo que se debatía
eran asuntos más importantes que las indulgencias
mismas.
Las 95 tesis salieron a luz el 31 de Octubre de
1517, víspera de todos los santos, fecha que
tradicionalmente se considera el inicio de la
reforma. Lutero no pretendía hacer un gran
escándalo, sino convocar a un debate académico
entre sus colegas y estudiantes en la universidad.
Por esa razón escribió las 95 tesis en latín. Sin
embargo, otras personas se encargaron de
traducirlas al alemán y hacerlas imprimir para
distribuirlas entre el pueblo. Lutero envió una copia
al arzobispo de Maguncia, Alberto, quien a su vez
las remitió al papa. Mientras tanto, las tesis eran
de conocimiento general y empezaban a producir
un sentimiento nacionalista en contra de la opresión económica que la Iglesia Católica
Romana realizaba a través de la venta de indulgencias.
21. Por consiguiente, se equivocan los predicadores de indulgencias que afirman que por las
indulgencias del papa uno puede ser librado de toda pena y salvado.
36. Todo cristiano verdaderamente arrepentido tiene derecho a la plena remisión de la pena y la
culpa, aun sin cartas de perdón.
45. Se debe enseñar a los cristianos que quien, en vez de ayudar al que está en necesidad compra
perdones, no compra indulgencias sino la indignación de Dios.
51. Se debe enseñar a los cristianos que sería el deseo del papa y es su deber, dar de su propio dinero a
muchos aquellos a quienes ciertos pregoneros de perdones estafan aunque para ello tuviera
que vender la iglesia de san pedro.
55. Debe ser intención del papa que si las indulgencias se celebran con una campana y una procesión,
el evangelio, que es lo más grande, sea predicado con cien campanas, un centenar de
procesiones, cien ceremonias.
86. ¿Por qué el papa, cuya riqueza es hoy mayor que la de los más ricos, no construye la iglesia de
San pedro con su propio dinero, en lugar de hacerlo con el de los pobres creyentes?
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c. La disputa de Heidelberg
En abril de 1518, es decir, 6 meses después de la promulgación de las 95 Tesis, la
orden agustina tenía sus reuniones ordinarias en la ciudad de Heidelberg. Lutero ya tenía
un cargo en la orden: era vicario de distrito. La orden tenía instrucciones papales de tratar
el asunto de Lucero, aunque no de condenar al fraile agustino. El papa deseaba acercarse a
Federico el Sabio por intereses políticos y decidió apaciguar su postura, por un tiempo.
Martín tenía miedo de asistir porque había oído rumores de que le harían daño, así que
pidió un salvoconducto al príncipe Federico. Sin embargo, la reunión estuvo llena de
cordialidad y admiración para Lutero. Sus ideas fueron aceptadas por lo jóvenes y toleradas
por los viejos. El resultado de la disputa fue que Lutero, en lugar de ser condenado fue
aclamado y apoyado por su orden. Lutero estaba empezando a convertirse en un héroe
nacional.
En esta reunión, Lutero presentó su Explicaciones de las noventa y cinco tesis en un
debate contra el teólogo conservador Leonard Baier. En esta obra, se puede ver el conflicto
interno por el que atravesaba.
... si fuese yo a discutir la intención del papa sin tener nada que ver con sus empleados mercenarios, diría
simple y brevemente que ha repensarse del papa todo lo mejor. La iglesia necesita una reforma que no ha
de ser la obra de un hombre, es decir, del papa, ni tampoco de muchos hombres, es decir, los cardenales,...
sino que es más bien obra de todo el mundo, o más bien la obra de Dios solo. Sin embargo, sólo el Dios
que ha creado el tiempo conoce el mejor tiempo para esta reforma. En el entretanto, no podemos negar
males tan manifiestos. Se abusa del poder de las llaves y se le esclaviza a la avaricia y la ambición.
Lutero, Obras, pág. 250.
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en Roma para ser juzgado por herejía. Ante este citatorio, Lutero
reaccionó solicitando la ayuda de Federico El Sabio, quien se encon-
traba en Augsburgo asistiendo a la dieta imperial. Allí también
estaba el nuncio papal para Alemania, el cardenal Tomás Vío (lla-
mado Cayetano).
La dieta tenía el propósito de de conseguir apoyo para empren-
der una cruzada contra los turcos musulmanes que amenazaban el
Imperio y la cristiandad. Aprovechando la reunión imperial, el papa
pidió al emperador Maximiliano que tratara el caso de Lutero al
mismo tiempo que autorizaba a Cayetano para que se entrevistara
con el monje agustino para que se retractara. Cayetano fracasó en su
intento de hacer cambiar de opinión a Lutero, quien había llegado a
la entrevista convencido por el propio Federico. El reformador salió
de prisa, casi huyendo de Augsburgo, para evitar ser apresado por Cayetano y ser enviado a
Roma. Cayetano exigió a Federico que entregara a Lutero, pero, éste, muy “sabiamente”, de-
cidió protegerlo porque todavía no había sido juzgado y tenía el derecho a su protección. A
partir de este momento, Federico se convertiría en el protector de Lutero.
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No gastes más dinero en los privilegios del Papa, velas, campanas, tablillas votivas, iglesias, pero di
que la vida cristiana está en la fe y en la caridad. Y deja pasar dos años más y verás lo que queda del
Papa, del obispo, del cardenal, del fraile, de la monja, de las campanas, de la torre, de la misa, de las
vigilias, de las túnicas, de las capas, de las tonsuras, de las reglas, de los estatutos y de todo el podrido
gobierno papal. Se desvanecerá como el humo.
Lutero, Discurso a la nobleza alemana
De ahí la exactitud de estas dos sentencias: “No hacen bueno y justo a un hombre las obras buenas y
justas, sino que es el hombre bueno y justo el que hace obras buenas y justas”. “Malas acciones nunca
hacen malo a un hombre, es el hombre malvado el que realiza obras malas”. Lo primero que, por tanto,
se requiere, la condición previa para las buenas obras, es que la persona sea buena y justa; después
llegarán las buenas obras que han de salir de una persona justa y buena.
Lutero, La Libertad Cristiana
La bula llegó a manos de Lutero seis meses después de su publicación porque antes
fue llevada directamente por los emisarios papales a las diferentes cortes de los
gobernantes. Cuando por fin, la bula llegó a manos de Lutero, éste reaccionó escribiendo un
panfleto en su contra y, el 10 de diciembre de 1520, en un acto público en la plaza de la
ciudad de Wittemberg la quemó en señal de desacuerdo. Este intrépido acto significó el
rompimiento de Lutero con la Iglesia Católica Romana. Se puede decir que el reformador
estaba ya afuera de la ICR, aunque, oficialmente, fue hasta el 1 de enero de 1521 que fue
excomulgado por León X.
i. La dieta de Worms
El recién electo emperador Carlos V todavía no había presentado sus planes a los
príncipes alemanes. En octubre de 1520 fue solemnemente coronado. El nuncio papal
Aleandro estuvo presente para acelerar al cumplimiento de la bula Exurge Domine. Aleandro
buscaba el apoyo del emperador y lo estaba logrando, pero Carlos V todavía tenía que
presentar sus planes ante la dieta. Mientras tanto, Federico El Sabio interponía sus mejo-
res oficios en favor de Lutero ante al emperador. De esa cuenta, Lutero fue invitado por el
emperador a presentarse ante la dieta para ser escuchado. Lutero aceptó con gusto la
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Invitación y partió para Worms al otro lado del país con un salvoconducto imperial. El viaje
hasta esa ciudad resultó ser una especie de procesión triunfal para Lutero porque el pueblo
lo aclamaba como héroe nacional.
Lutero tenía que presentarse ante la dieta
al día siguiente Cuando se presentó le fueron
hechas dos preguntas solamente: En la
primera le preguntaron si eran suyos los
libros que se señalaban, en la segunda se le
preguntaba si se retractaba de lo escrito allí.
Lutero no esperaba esto así que tímidamente
pidió permiso para pensar bien su respuesta y
contestar al día siguiente. El permiso le fue
concedido.
Al día siguiente, 1 de abril de 1521,
Lutero se presentó de nuevo ante el
Worms
emperador. Esta vez se había cambiado el
lugar de la audiencia porque el anterior resultaba pequeño ante la gran cantidad de gente
que quería presenciar el juicio. Al igual que en el día anterior, se le hicieron las mismas
preguntas, pero esta vez Lutero iba preparado con un discurso que le permitiría hablar y
presentar sus ideas. A la primera pregunta Lutero respondió clasificando sus escritos. Dijo
que había escritos que son de carácter espiritual y se refieren a la fe y a la vida cristiana.
Esos libros son reconocidos aun por los mismos enemigos de Lutero. Por tanto, no podía
negar lo escrito allí. Otros libros son denuncias de la mala vida y enseñanza de los papistas
que tanto mal han causado a las naciones. Aquí se refería a los abusos de poder y
económicos de la Iglesia y sus líderes. Tampoco podía negar lo escrito allí porque estaría
negando una realidad reconocida por todos; aun por los propios enemigos de Lutero. Entre
estos se contaban los nacionalistas alemanes y varios príncipes imperiales que aunque no
estaban de acuerdo con Lutero también rechazaban los abusos de la Iglesia. Por último,
Lutero se refiera a los libros que escribió en contra de algunos individuos, es decir, aquellos
libros polémicos y controversiales. El admite que se ha extralimitado un poco allí, pero
tampoco se retracta.
A todo esto, los príncipes y el emperador estaban desesperados porque Lutero no se
retracta, así que nuevamente le exigen que lo haga. Por fin Lutero declara sus famosas
palabras
A menos que se me convenza con las Escrituras o por razones evidentes –puesto que no creo en el papa ni
en los concilios sólo, ya que está claro que se han equivocado con frecuencia y se han contradicho entre
ellos mismos– estoy encadenado por los textos escriturísticos que he citado y mi conciencia es una cautiva
de la palabra de Dios. No puedo ni quiero retractarme en nada, porque no es seguro ni honesto actuar
contra la propia conciencia. Aquí estoy. Que Dios me ayude. Amén.
Lutero, Discurso ante la Dieta de Worms.
Al terminar la audiencia, el ambiente era tenso. Por un lado Lutero y sus seguidores
se sentían victoriosos, pero temerosos da las futuras acciones del emperador. Por otro lado,
los príncipes y el emperador, se sentían frustrados y con los brazos amarrados porque el
pueblo apoyaba a Lutero y tenían miedo de provocar una insurrección. A todo esto, el
emperador quería dialogar con Lutero por medio de una comisión encargada de hacerlo
cambiar pero, Lutero no cambió. Cuando Lutero salió de Worms ya había sido emitido el
decreto imperial que lo condenaba como hereje.
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j. En el castillo de Wartburgo
Lutero salió de Worms bajo la protección del salvoconducto imperial que lo protegía
hasta su regreso a Wittemberg, pero co-
mo ya había sido emitido el edicto en el
cual se condenaba a Lutero y se le podía
perseguir, la protección pronto quedaría
sin efecto.
Por tal razón, cuando Lutero
regresaba a Wittemberg, fue
“secuestrado” y llevado a un castillo
cerca de Eisenach. Muchos historiadores
concuerdan que fue Federico el Sabio
quien ordenó aquel secuestro para
protegerlo y mantenerlo aislado de las
persecuciones imperiales. El lugar donde
Lutero fue recluido era un castillo alejado
conocido como Wartburgo.
La desaparición de Lutero causó conmoción entre el pueblo alemán, pero pronto se
fueron calmando los ánimos. Mientras tanto, Lutero se dedicaba a una fructífera labor
literaria. Se dedicó a escribir obras de todo tipo: polémicas, pastorales, devocionales,
sermones, etc. Pero la principal fue ha traducción del Nuevo Testamento al alemán. Esta
obra es una de las más grandes contribuciones de Lutero, no solo para la Reforma, sino a la
nación alemana.
Existían otras versiones alemanas del NT, pero todas eran traducidas del latín de la
Vulgata. Lutero empleó los originales griegos, para ello utilizó el Nuevo Testamento griego
publicado por Erasmo unos cuantos años antes. El idioma alemán recibió muchos
beneficios de la traducción de Lutero.
Diez meses después del inicio de su reclusión, Lutero salió de Wartburgo para regresar
a Wittemberg porque la situación allí imperante lo demandaba.
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Iglesia en el campo socioeconómico. Quiérase o no, las ideas de Lutero proveyeron una
especie de justificación bíblica para las reivindicaciones campesinas.
Los reformadores radicales que habían estado en Wittemberg mientras Lutero
permanecía en Wartburgo contribuyeron a provocar la insurrección campesina. Entre los
predicadores más influyentes estaba Tomás Munzer.
La pobre gente necesitada se ve engañada de mala manera. Con todas sus palabras y todos sus actos, los
doctores actúan de tal manera que el hombre pobre, preocupado por la necesidad de alimentarse, no pueda
aprender a leer, y tienen la desvergüenza de predicar que tiene que dejarse despellejar y desplumar por los
tiranos...
Tomás Münzer, Escritos teológicos y políticos.
Por todo ello, vosotros, los señores, deponed la rigidez de vuestras exigencias... aliviad un poco vuestra
tiranía, de forma que la gente pobre pueda disfrutar de aire y espacios vitales.
Lutero, Exhortación a la paz.
Los campesinos se han acarreado el enojo de Dios y de los hombres al mismo tiempo... en estas
circunstancias, un príncipe tiene que considerarse como agente de Dios. Es la hora de la espada y de la
cólera, y no la hora de la gracia... Por eso, queridos señores... que quien pueda, ¡pinche, raje, golpee,
estrangule! Bienaventurado tú si en la empresa tienes que perder la vida; jamás alcanzarás muerte más
dichosa.
Lutero, Contra las asesinas y ladronas hordas de los campesinos
Los ejércitos de los príncipes, mejor entrenados y más organizados, pronto derrotaron
a los campesinos. Algunos cuentan que murieron entre 100,000 y 150,000 campesinos.
Las consecuencias de esta guerra fueron desastrosas para Lutero, para la Reforma y
para Alemania:
Ø Lutero perdió mucha popularidad, sobre todo entre los campesinos.
Ø La Reforma Luterana fue casi imposible en el sur de Alemania.
Ø Los católicos y los luteranos se radicalizaron aun más.
Ø El movimiento se escapó del control de Lutero.
Ø Ya no se podía confiar en que la recién organizada iglesia quedara en manos del pueblo. De esta
manera, la Iglesia alemana quedó bajo la tutela de los príncipes de esa nación.
Pues tenemos aquí el texto claro y las palabras explícitas de Cristo: “Tomad, comed... haced esto en
memoria mía”. Es sobre estas palabras que basamos nuestra posición. Son tan claras y sencillas que
hasta ellos, nuestros adversarios, deben confesar que se les hace difícil interpretarlas de otro modo. Y sin
embargo, dejan a un lado estas palabras claras y siguen sus propios pensamientos, creándose tinieblas
en medio de la luz clara”.
Lutero, El sacramento y la sangre de Cristo
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La eucaristía no es más que la acción de gracias y el regocijo común de quienes afirman la muerte de
Cristo... no es porque se le coma, sino porque se le mata, que Jesucristo es para nosotros medio de
salvación.
Zuinglio, De la verdadera y falsa religión
El resultado del coloquio fue un acuerdo en todos los puntos discutidos excepto en el
de la eucaristía. De hecho, al final de la reunión, Lutero afirmó que él y Zuinglio “no podían
ser del mismo espíritu”. Al final de cuentas este desacuerdo marca la separación definitiva
entre la reforma alemana y la suiza.
Firmas de los
participantes en el
Coloquio de
Marburgo. Se pueden
reconocer las firmas
de Lutero (la primera),
Melanchton, Olander,
Ecolampadio,
Zuinglio y Bucero.
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Ilustrísimo, poderosísimo e invencible Emperador, clementísimo señor: Hace poco tiempo Vuestra
Majestad Imperial se dignó a convocar aquí mismo, en Augsburgo, una dieta general, especificando
expresamente las cuestiones referentes al turco... También deliberaría sobre el modo de tratar las
diferencias en la santa fe y en la religión cristiana... Se esforzaría en conciliar las opiniones y reducirlas
a una sola verdad cristiana, eliminando todo aquello que, de una u otra parte, hubiera sido interpretado o
tratado incorrectamente, para obligar a adoptar y observar por todos nosotros una sola y verdadera
religión...
Se enseña que no podemos lograr el perdón del pecado y la justicia delante de Dios mediante nuestro
mérito, obra o satisfacción, sino que obtenemos el perdón de los pecados y llegamos a ser justos delante
de Dios por gracia, por causa de Cristo mediante la fe, si creemos que Cristo padeció por nosotros y que
por su causa se nos perdona el pecado y se nos conceden la justicia y la vida eterna.
Confesión de Fe de Augsburgo. Introducción y Artículo IV.
5. La liga de Esmalcalda. Esta era una alianza militar entre luteranos y demás
protestantes alemanes como resultado inmediato de la Dieta de Augsburgo. EI propósito de
la alianza era defenderse de los ataques del emperador. El poder militar de esta liga llegó
a ser tanto que, por unos años. (1934-1541) el emperador no tuvo la suficiente fuerza
militar para atacarla. Esto dio oportunidad para que el protestantismo alemán y el suizo
avanzaran sin mayores contratiempos.
1. Bigamia de Felipe de Hesse. Felipe de Hesse era el líder indiscutible de la Liga Es-
malcáldica. Por tanto, cualquier asunto que lo afectara a él, afectaría también a la liga.
Felipe había tenido problemas conyugales con su esposa y era culpable de adulterio. Se
sentía culpable al grado de que no participaba de los sacramentos desde hacia años. Con la
esperanza de lograr una dispensa para poder casarse con otra mujer sin divorciarse de su
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primera esposa, consultó con Martín Lutero, Martín Bucero y Felipe Melanchton. Juntos,
estos tres líderes espirituales otorgaron a Felipe la dispensa solicitada, toda vez que no se
hiciera público el asunto. Pero, el asunto se divulgó y produjo una conmoción en todos los
niveles.
Los príncipes luteranos de la liga se sintieron desilusionados y abandonaron a Felipe
quien perdió el liderazgo de la liga. Además, Carlos V se aprovechó de la ocasión para
dividir a la liga pidiéndole a Felipe que lo ayudara en una batalla militar. De esa manera
Felipe abandonó la liga y asestó un duro golpe a su poderío militar.
3. Guerra
esmalcáldica.
Poco tiempo después de la muerte de
Lutero, estalló la guerra. La liga estaba dividida y
desanimada. El emperador aprovechó una
disputa interna entre dos miembros de la liga
para convencer a uno de ellos, Mauricio, elector
de la Sajonia albertina, para que lo apoyara. Las
tropas Imperiales apoyadas por las de Mauricio,
lograron derrotar a los luteranos en 1547 en
Mühlberg, a orillas del río Elba. Así, Carlos
sometió no sólo a Alemania, sino también otros
territorios como Bohemia.
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de Augsburgo” y la libertad de culto en toda Alemania hasta la próxima dieta. A todo esto,
el emperador Carlos V abandonó sus intentos de reunificar Alemania y perdió toda
esperanza de derrotar a los luteranos. Así que dejó en manos de su hermano Fernando los
asuntos alemanes. Fernando tuvo que hacer grandes concesiones a los luteranos entre las
que figuraban cuestiones políticas y religiosas
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5) La Teología de Lutero
Lutero no fue un innovador en todas las ramas de la teología. Mucho de lo que él
enseñaba era ya una creencia de siglos en la Iglesia Sin embargo, hay temas que él sí
revolucionó. Algunos de estos temas se convirtieron en los puntos principales de la teología
de la Reforma.
a. Bibliología
Muchas de las doctrinas de la Iglesia ya estaban plenamente formuladas para el
tiempo de la Reforma. Pero en el caso de la doctrina de las Sagradas Escrituras no había
tenido lugar ninguna controversia que obligara a la Iglesia a formularla clara y
completamente. Fue precisamente Lutero quien empezó la controversia que impulsaría un
estudio más serio y profundo de la doctrina. Tres son los aspectos sobresalientes en esta
doctrina y que estuvieron bajo discusión en tiempos de Lutero: La revelación, La
inspiración, y la autoridad de la Biblia.
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natural que había formulado Tomás de Aquino la cual decía que el hombre tiene
alguna posibilidad de llegar a conocer a Dios vía la razón.
En primer lugar, (Santiago) se opone claramente a San Pablo y a todo el resto de las Escrituras al
atribuir la justificación a las obras... En segundo lugar, su propósito es instruir a los cristianos, pero en
toda su enseñanza no menciona la pasión, la resurrección o el espíritu de Cristo ni una sola vez.
Menciona a Cristo varias veces, pero nada dice acerca de él, sino que se refiere sólo a una fe general en
Dios... Otra vez, todo lo que predica a Cristo es apostólico, aun cuando lo hagan Judas, Anás, Pilato o
Herodes.
Lutero, Prefacio a la Epístola de Santiago
Aquí Pablo se coloca a sí mismo, a un ángel del cielo, a maestros de la tierra, y a cualquiera otra
persona, por debajo de las Sagradas Escrituras. Esta reina debe gobernar, y todos deben obedecerla y
estar sujetos a ella. El Papa, Lutero, Agustín, Pablo, un ángel del cielo –todos estos no han de ser
señores, jueces o árbitros, sino sólo testigos, discípulos y confesores de la Escritura.
Lutero, Conferencias sobre Gálatas
Uno de los más grandes gritos de batalla de la Reforma, fue ¡sola Scriptura! el
cual resumía magistralmente el concepto de que la autoridad suprema en materia de fe y
práctica para la Iglesia reside exclusivamente en las Sagradas Escrituras.
b. Teología Propia
En esta doctrina el propio Lutero reconoció que no había mayores divergencias con lo
que afirmaba que la lglesia Católica Romana. Los tres credos de los concilios universales de
la Iglesia primitiva fueron aceptados por Lutero y sus seguidores sin reservas: Nicea,
Constantinopla y Calcedonia. En ellos se afirma la Trinidad, la deidad de Cristo y la del
Espíritu Santo.
c. Cristología
Esta doctrina tiene dos aspectos: la persona de Cristo y la obra de Cristo. En relación
con su persona es poco lo que se puede añadir a los credos mencionados antes. Pero, en
relación con la obra de Cristo, Lutero afirmó que su sacrificio satisfizo la ira de Dios de tal
manera que él (Cristo) recibió el castigo de la ira divina en sustitución del pecador, sacrificio
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d. Soteriología
Fue sobre este punto que Lutero predicó, escribió y discutió más. También fue sobre
este punto que recibió los mayores ataques. El aspecto sobresaliente en esta doctrina y en
toda la teología de Lutero es la justificación por la fe. Se puede decir que toda su teología
gira alrededor de este concepto.
a. El pecado. Lutero era un fiel seguidor de Agustín en este punto. Decía que antes de
la caída Adán estaba inclinado solo a hacer el bien. Después de la caída, él y todos sus
descendientes quedaron sujetos al pecado.
La raza humana es ahora una masa perdionitis (masa corrupta, masa perdida). Este
concepto de pecado llevó a Lutero a afirmar que la salvación sólo puede ser obra de Dios.
También lo llevó a afirmar que el hombre mérito alguno que ofrecer para su salvación.
Es muy sabio afirmar que no somos sino pecado, para que no pensemos del pecado con la misma ligereza
con que lo hacen los teólogos del Papa, quienes definen el pecado como “cualquier cosa que se dice, hace o
se piensa contra la ley de Dios”. Debemos definir el pecado a base de este Salmo, como todo lo que nace
de padre y madre, antes de que tenga ni siquiera la edad necesaria para decir, hacer o pensar cosa alguna.
De tal raíz no puede surgir nada bueno delante de Dios.
Lutero, Comentario sobre el Salmo 51
e. Eclesiología
Este es otro de los temas importantes en la teología de Lutero debido precisamente a
sus confrontaciones con la Iglesia católica Romana.
b. La función de la Iglesia. Lutero enseñaba que la Iglesia tenía entre sus funciones
(misión de la iglesia) las siguientes: 1. Tener, predicar, confesar, y obrar la Palabra de Dios;
2. Enseñar, creer y administrar correctamente los sacramentos (bautismo y comunión); 3.
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d. Los sacramentos. Lutero eliminó cinco de los siete sacramentos reconocidos por la
Iglesia Católica Romana. Solamente dejó el bautismo y la Cena del Señor o Eucaristía. En
cuanto al bautismo, creía en el bautismo de infantes porque ese era la puerta de entrada a
la salvación. En cuanto a la eucaristía o comunión creía en la presencia corporal de Cristo
en los elementos, pero de una manera diferente a la de la Iglesia Católica. Él creía en un
misterio, es decir, el pan seguía siendo pan en su forma y en su esencia, lo mismo el vino,
pero junto con ellos también estaba "corporalmente" Cristo. A este concepto se le ha
llamado consubstanciación a diferencia de la <transubstanciación> de la Iglesia católica
Romana la cual decía que el cuerpo y la sangre de Cristo sustituyen los elementos de una
manera mágica.
de diferenciar bien las esferas de acción del Estado y de la Iglesia. Pero llegó a decir que las
estructuras seculares no pueden cristianizarse, aunque los políticos sí.
d. La pobreza
Este tema recibió alguna atención en los escritos de Lutero. Las interpretaciones que
le hizo al concepto varían según la época en que se escribió y las circunstancias que lo
rodeaban. Por ejemplo, en los primeros años, Lutero interpretaba la pobreza con un sentido
más espiritual. En los años de confrontación contra Roma, la interpretación era más
socio-económica. Después retorna a una espiritualización debido a su concepto del sufri-
miento. Por ultimo, después de la dieta de Augsburgo, Lutero retoma la interpretación
socio-económica y exhorta a los príncipes a ocuparse de los pobres y proveer para sus
necesidades.
e. El cristiano y la guerra
El tema de la guerra ha sido discutido dentro de la Iglesia desde sus Inicios Basta
recordar que los cristianos primitivos que eran soldados interpretaban que no podían seguir
siéndolo. Las Cruzadas llevaron a sacralizar la guerra. Los anabaptistas en tiempos de la
Reforma llegaron a negar y a repudiar cualquier uso de la violencia.
Lutero también expresó sus propios puntos de vista. No hay que olvidar el contexto en
el cual vivió y escribió. Por un lado, estaban los turcos amenazando a la “cristiandad”, y por
el otro, el emperador y sus ejércitos amenazaban a los estados luteranos. Lutero llegó a
aprobar la guerra cuando era en contra de los turcos o cuando se amenazaban a los estados
luteranos. En otras palabras, hay guerras “justas” y necesarias”.
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b. Situación político-social
La Confederación de cantones estaba compuesta por personas de diferentes culturas.
La parte norte, colindante con Alemania, y al noreste, colindante con Austria era de origen
alemán y con idioma alemán. La parte suroeste tenía más vínculos con Francia, por lo que
el idioma era el francés. Además, la forma de organización política era diferente a la de los
demás países europeos de la época. Por ejemplo, no tenían monarquía propia y cada cantón
era autónomo, gozando de libertad de elegir a sus propias autoridades. Por razones
militares, los cantones optaron por unirse en una Confederación. En la actualidad, Suiza es
una confederación de 23 cantones, de los que tres están divididos en semicantones con
fines administrativos. Los cantones y semicantones son los siguientes: Aargau, Appenzell
Ausser-Rhoden (semicantón), Appenzell Inner-Rhoden (semicantón), Basel-Land
(semicantón), Basel-Stadt (semicantón), Berna, Friburgo, Ginebra, Glarus, Graubünden
(Grisones), Jura, Lucerna (Luzern), Neuchâtel, Nidwalden (semicantón), Obwalden
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C. Situación religiosa-moral
Como en casi todas partes, en esta época la situación religiosa de Suiza era
deprimente. La Iglesia Católica Romana mantenía sometido al pueblo a sus doctrinas. Las
indulgencias también era parte de la vida cotidiana del pueblo suizo. La inmoralidad del
clero estaba a la orden del día al grado que uno de los reformadores suizos era hijo ilegítimo
de un sacerdote.
d. Su ministerio en Zurich
(1519-1531)
Las autoridades eclesiásticas
decidieron trasladar de Nuevo a Zuinglio.
Esta vez el propósito era acallarlo,
dándole un ministerio absorbente que
ocupara mucho de su tiempo y no le
dejara tiempo para seguir estudiando.
Además, el apoyo popular lo hacían
destacar como un importante líder en la
iglesia suiza. El traslado fue a la ciudad
de habla alemana más importante del
país: Zurich.
Sin embargo, el sacerdote se sintió
en libertad de echar a andar sus ideas
reformadoras en la ciudad.
Muy pronto, Zuinglio atrajo importantes audiencias a la catedral para escuchar su
explicación de las Sagradas Escrituras a partir de los textos originales hebreo y griego,
análisis que él realizaba libro a libro, capítulo por capítulo, partiendo del Evangelio según
san Mateo. Esta versión oral de las Escrituras chocaba de modo rotundo con la tradición
eclesiástica, ya que los sacerdotes habían basado sus sermones en las interpretaciones de la
Vulgata y en los escritos de los Padres de la Iglesia. En 1519, un seguidor suyo puso a su
disposición una imprenta, lo que permitió que sus ideas se difundieran más allá.
Ese mismo año Zuinglio conoció y estudió los escritos de Martín Lutero. Animado por
la actitud de éste frente a la jerarquía eclesiástica alemana, convenció al Consejo de Zurich
para que prohibiera toda enseñanza religiosa que no estuviera basada en las Escrituras.
Entre estas enseñanzas se encontraba la prohibición de la Iglesia de comer carne durante la
Cuaresma. Un grupo de seguidores de Zuinglio incumplió con intención ese precepto en
1522, hecho que originó su detención. No obstante, Zuinglio los defendió con energía, por lo
que tan sólo se les impuso un castigo simbólico.
Al igual que en Glarus, Zuinglio se volvió a oponer al envío de soldados mercenarios
para el Papa. Además, siguió predicando en contra de los abusos, la corrupción y las
doctrinas erradas de la Iglesia Católica Romana. También empezó a atacar directamente
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al papa y a su autoridad. Poco a poco, recibió más apoyo del pueblo. Debido a las
condiciones políticas propias de Suiza, la ciudad tenia cierta libertad para decidir sobre la
permanencia o no de Zuinglio como sacerdote. Debido a esta situación, él empezó a
proponer que la ciudad decidiera si aceptaba sus ideas reformadoras o no.
3) La Reforma en la
Suiza alemana
a. Los sesenta y siete
artículos (1522)
Para presentar sus ideas a la
ciudad, Zuinglio preparó una lista de
sus principales afirmaciones en un
documento que se llamó “67
artículos”, el cual dio inicio a la
Paisaje de los Alpes suizos. El territorio montañoso y alejado de las Reforma en Suiza. En estos artículos,
grandes urbes hizo que la Reforma fuera más fácil en este país. Zuinglio enfatizaba la salvación por
la fe, la autoridad de la Biblia,
Cristo como autoridad de la Iglesia.
b. La Reforma en Basilea
Basilea era un importante centro del humanismo Allí
vivió sus últimos años el famoso humanista Erasmo de
Rotterdam. Allí fue publicado el Nuevo Testamento griego de
Erasmo. Además, muchos de los libros y folletos de Lutero
fueron publicados también en Basilea. Por lo tanto, el
ambiente pro-reforma era propicio. Sin embargo, llevó varios
años de esfuerzo y trabajo antes de implantar la Reforma allí.
El personaje responsable de la reforma en Basilea fue
Juan Ecolampadio, amigo personal de Zuinglio y
colaborador suyo desde 1522. Por fin, en 1529, la reforma
fue oficialmente establecida en Basilea con la abolición de la
misa como punto culminante.
c. La Reforma en
Estrasburgo
Aunque Estrasburgo no pertenecía a Suiza, sino a
Alemania, la Reforma, al estilo de Zuinglio llegó hasta allá. Es
interesante notar que esta ciudad libre no optó por la reforma
luterana, sino por la de Zuinglio. El personaje más importante
de la Reforma en Estrasburgo fue Martín Bucero, monje
dominico que había estado presente en Heidelberg cuando
Martín Lutero fue apoyado por la orden agustina al inicio de la
reforma luterana.
Estrasburgo llegó a ser una de las ciudades reformadas
más importantes porque sirvió de refugio para los protestantes
perseguidos tanto de Francia, como de Alemania y de Suiza.
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6) La Teología de Zuinglio
Zuinglio no tuvo suficiente tiempo para elaborar un sistema teológico como Lutero.
Sin embargo, sí hizo contribuciones importantes para la teología reformada. En muchos
aspectos Zuinglio compartía los mismos puntos que Lutero. Pero daba énfasis a unos de
manera diferente.
a. Bibliología
Por sus estudios humanísticos, Zuinglio apreció mucho las Escrituras. Es más, la
reforma suiza empez6 por sus estudios en el idioma griego del Nuevo Testamento. Poco a
poco, fue dando forma al concepto de autoridad de las Escrituras de una manera un tanto
diferente de la de Lutero.
Zuinglio llegó a decir que debía descartarse cualquier asunto que la Iglesia practicara
o tuviera, si no estaba explícitamente apoyado por la Biblia.
En su Palabra nunca hemos de perder el camino. Nunca podremos ser confundidos, engañados o
destruidos en Su Palabra. Si creéis que no hay certeza ni fortaleza para el alma, escuchad la certeza de la
Palabra de Dios.
Zuinglio, De la certeza y claridad de la Palabra de Dios
De esa cuenta, en Zurich y en los otros cantones suizos reformados pronto se empezó
a rechazar las imágenes, las reliquias y los instrumentos musicales. Además, el punto
culminante de la Reforma suiza, la abolición de la misa, estuvo basado en el hecho de que la
Biblia no autorizaba tal ceremonia en el sentido que lo celebraba tanto la Iglesia Católica
Romana, como la luterana.
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b. Eclesiología
En esta doctrina fue en la que Zuinglio hizo sus mayores aportes.
1. Los sacramentos. Zuinglio rechazó cinco de los siete sacramentos que se incluían
en la eclesiología católica. Solamente dejó dos: el bautismo y la eucaristía. En cuanto al
bautismo, continuó con la práctica de bautizar infantes, pero sin la doctrina católica de la
regeneración bautismal. En cuanto a la eucaristía sí hubo marcada diferencia tanto con la
doctrina católica, como con la luterana.
2. la eucaristía. En la Edad Media surgió la idea de la transubstanciaci6n en la
doctrina católica, la cual fue oficializada y convertida en dogma en el IV concilio de Letrán.
Lutero había interpretado de una manera ligeramente diferente la presencia de Cristo en los
elementos (pan y vino), afirmando que Cristo estaba presente “juntamente” con los
elementos. Este pensamiento fue llamado consubstanciación.
Ahora bien, Zuinglio rechazaba las dos interpretaciones. Él llegó a decir que las
palabras de Cristo: “esto es mi cuerpo... esto es mi sangre” deberían interpretarse
figuradamente, no literalmente cono lo hacían la ICR y Lutero. En el coloquio de Marburgo,
Zuinglio defendió su postura frente a Lutero, lo cual marcó la definitiva separación entre las
dos corrientes reformadas.
Iglesia Católica Martín Lutero Ulrico Zuinglio
CRISTO ESTÁ PRESENTE Porque los elementos se Porque, de manera misteriosa,
transforman en su cuerpo y su los elementos se convertían en Sólo de manera simbólica.
sangre vehículos de Su presencia.
INTERPRETACIÓN DE Literal Literal, pero rechaza la Figuradamente
“ESTO ES MI CUERPO” conversión de los elementos
VALOR DEL ACTO Salvífico. Comunica gracia. Señales de la promesa del Señales de la fe de la iglesia
Sacrificio misterioso de Cristo evangelio
NOMBRE DE LA TRANSUBSTANCIACIÓN “CONSUBSTANCIACIÓN” INTERPRETACIÓN
POSTURA TEOLÓGICA SIMBÓLICA
Creemos también que hay una iglesia santa y católica, es decir, universal, y que esta iglesia es tanto
visible como invisible... la... invisible es... la que conoce y acepta a Dios mediante la iluminación del
Espíritu Santo... la visible no es el pontífice romano ni todos los que llevan la mitra, sino todos los que
hacen profesión de fe en Cristo en toda la tierra, entre ellos quienes se llaman falsamente cristianos,
puesto que no tienen fe interna. Dentro de la iglesia visible, por tanto, hay algunos que no son miembros
de la iglesia electa invisible.
Zuinglio, Una exposición de la fe
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b. Su ministerio en Zurich
A la muerte de Zuinglio, Bullinger fue llamado
para ocupar su puesto siendo un joven sacerdote de 27
años. Aunque había estado al lado de Zuinglio en el
desarrollo de la reforma en Zurich y en otros cantones,
prácticamente llegó como un novato a tomar el puesto
del líder indiscutido de la reforma suiza.
Desde 1531 hasta su muerte en 1575, Bullinger Heinrich Bullinger, hábil administrador,
estuvo en Zurich dirigiendo la reforma. Su sucesor de Zuinglio al frente de la
contribución a la causa protestante es valiosa sobre Reforma en la Suiza alemana
todo porque logró la unificación de los protestantes
suizos. Era un hábil administrador y buen
diplomático. Llegó a entrevistarse con Felipe Melanchton, sucesor de Lutero en Alemania y
con Juan Calvino, líder de la reforma en Ginebra.
El resultado de sus gestiones produjo la unificación de los protestantes suizos en la
llamada “Iglesia Reformada Suiza”. También contribuyó con la redacción de la “Confesión
Helvética”, primera confesión de fe de los reformados suizos, la cual se firmó en 1562.
Además, Bullinger escribió una Historia de la Reforma en la cual hay datos muy
interesantes acerca del origen, desarrollo de la reforma, sobre todo en Suiza.
Otra de sus contribuciones fue una serie de sermones llamada Las Décadas en los
cuales expone la doctrina cristiana desde el punto de vista reformado. Sirvió como una
especie de manual de teología para los protestantes suizos alemanes.
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