Documenti di Didattica
Documenti di Professioni
Documenti di Cultura
Se castigan las personas que induzcan al suicidio o que cooperen para que se
lleve a cabo, por lo que el acto de una persona que se suicida sin causar más
daños sería legítimo, por lo que se castiga la influencia que se ejerza sobre ella, la
decisión del suicidio debe ser personal, propia, y no tomada por la fuerza que
ejerzan otras personas para que lo realice. Según el Art. 143, Código Penal, se
castigará con la pena de prisión de cuatro a ocho años al que induzca al suicidio.
Se regula junto al asesinato y el homicidio, ya que, son los delitos que castigan
dichos actos contrarios a la vida. El Art. 143, Código Penal también determina que,
se castigará al que coopere con actos necesarios al suicidio de una persona con
pena de prisión de dos a cinco años. En el caso de que el suicidio acabe con la
muerte de la persona, se castigará con la pena de prisión de seis a diez años. Se
prevé por último en el apartado 4 el auxilio ejecutivo, el caso de la cooperación
activa con actos para el suicidio de personas, es decir, la eutanasia, la cual se
castiga con la pena de la cooperación necesaria o la de la consecución del suicidio
efectivamente, inferior en uno o dos grados.
En realidad, uno no puede saber si una persona quiere acudir a la eutanasia con
absoluta corroboración, lo que sí se puede saber es que hay dos métodos de
eutanasia:
Activa: Consiste en provocar una muerte indolora a petición del afectado; el caso
más frecuentemente mostrado es el cáncer, pero pueden ser también
enfermedades incurables como el sida. Se recurre, como se comprende, a
sustancias especiales mortíferas o a sobredosis de morfina. Pasiva: Se deja de
tratar una complicación, por ejemplo una bronconeumonía, o de alimentar por vía
parenteral u otra al enfermo, con lo cual se precipita el término de la vida; es una
muerte por omisión. De acuerdo con Pérez Varela “la eutanasia pasiva puede
revestir dos formas: la abstención terapéutica y la suspensión terapéutica. En el
primer caso no se inicia el tratamiento y en el segundo se suspende el ya iniciado
ya que se considera que más que prolongar el vivir, prolonga el morir”. Debe
resaltarse que en este tipo de eutanasia no se abandona en ningún momento al
enfermo.