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LA FAMILIA ZABOR
CAPITULO 3
LA CARRERA
Inicia haciendo un análisis de las posibilidades de carrera que elegir, inicia por la
ingeniería pero al no encontrar una que reuniera las especialidades de ella
desistió, prosigue con las artes plásticas debido al gusto por la armonía y simetría
pero siente que esto no es suficiente para lo que puede darle la academia, más
por complacer a su padre decide estudiar Física; cerca a su residencia académica
ubicada en Gotinga vivían grandes eminencias de su especialidad, permanecía
más en otras facultades que en la propia y solo había asistido a una clase
completa “lo grotesco en la literatura y el arte”.
Algunas ramas de la física no le interesaban en absoluto y no le gustaban las
etiquetas porque quería permanecer abierto hasta la muerte; también tomo
algunas clases de derecho penal, tomo un trabajo de extra de cine .
Más adelante r tomo la física inclinándose por la física nuclear pasando por la
parte meteorológica y volvió a la física atómica.
Debia decidir sobre su carrera y decidió sentarse en un café hasta el cierre del
mismo a decidir cuál sería su destino, recordando se dio cuenta que el arte era su
amor oculto pero decidió consagrarse a la electrónica y los ordenadores, ese
mismo año decidió presentarse para el doctorado porque sentía estaba preparado,
en 1960 tuvo el examen oral en el cual una de las preguntas fue cuál era su físico
modelo y habla sobre la concepción del naturalismo desde la filosofía y el arte,
logro conseguir su aprobación y diploma (en resumen confunde y reinaras).
CAPITULO 4
PRIMERA ACTIVIDAD PROFESIONAL
CAPITULO 5
PLANES Y PROYECTOS
CAPITULO 6
EL GLOBE DE MUNICH
Zabor convence a Annabella de trasladarse de Colonia a otra ciudad, pues se
sentía en una época de cambio en su vida; Zabor con 38 años, deseaba regresar
a experimientos que le permitieran controlar naturaleza decisivamente. Le resulto
difícil encontrar un trabajo que complaciera sus deseos, pues solo encontraba
empleos no afines y respuestas negativas, en 1972, parecía casi resignado a
continuar en eleraboracion de programas de ordenador simple, pensaba en el fin
de su vida profesional y posible obsolescencia, a comparación de sus compañeros
con carreras exitosas y en ascenso,
Annabella y colegas notan el comportamiento distraído y frustrado de Zabor,
empezó a beber y a disminuir aún más el rendimiento en su trabajo, hasta el punto
de estar cerca del despido. En 1973 recibe una carta de la compañía Globe de
munich, reflejando el interés por sus servicios y deseo de participar en la
generación de nuevas tecnologías, viaja de inmediato a Munich (ciudad donde
estudio); interlocutor norteamericano, expropietario y director comercial de la filial
europea, explica a Zabor el interés de ganar dinero con la invención de tecnología
para el futuro, en Globe ofrecieron el doble de sueldo del que ganaba, acepto el
trabajo e inicio búsquesa de domicilio, consiguiendo una casa en Perlach, se
comunica con Annabella para comunicarle su alegría y nueva motivacion, quien
inicia labores de traslado a Munich.
En julio de 1973, viaja a USA para presnetarse ante la empresa Globe; en su
nuevo trabajo dedicaba las mañanas a pensar en nuevas ideas y en las tardes se
dedicaba a realizar los proyectos con estas ideas, durante dos años ideo
diferentes inventos con gran influencia, entre ellos un sistema de archivo de
literatura jurídica, métodos de abono y riegue programado y un sistema para
almacenamiento de archivos institucionales. Su invención tenia en base de
inspiración al abogado Lorenz Otter, con quien compartia diferentes encuentros.
Otter se quejaba de sus pesadas labores como abogado, por lo que Zabor le
prometio realizar inventos para mejorar esta situación, punto de partida para idear
sistemas que tuvieran relación con la literatura jurídica; en 1974 viajan Zabor y
Otter a Venecia para iniciar los trabajos relacionados con literatura jurídica, Otter
proporcionaba los datos de las diferentes necesidades del sector jurídico, luego de
dos semenas regresan a Munich para presentar el proyecto a Globe, quienes
inician conversaciones con inversionistas para la realización de lo propuesto por
Zabor.
Zabor contemplo en Venecia su siguiente proyecto, sobre avances tecnológicos
en agricultura de sudamerica y africa; en 1976, viaja a Sicilia con Annabella,
donde contemplo una estructura arquitectónica como su posible futuro hogar,
luego fueron a Enna, alli recorrieron la ciudad, llegando posteriormente a una
trattoria, lugar en el que un campesino se quejaba de las malas condiciones del
campo en Sicilia, como la falta de agua y de componentes químicos necesarios
para el desarrollo de cultivos, argumento en el cual se basa Zabor para
desarrollar un invento el cual mediante ordenadores se rieguen y abonen enormes
superficies, alimentando el suelo de manera dosificada; proyecto que emprendió la
compañía Globe con el fin de venderlo a los países del tercer mundo.
Globe se contacto con ministros de países sudamericanos y africanos, para
realizar la financiación del proyecto, en Brasil en 1979 Zabor expuso su idea,
donde fue aprobada, teniendo igual acogida en otros gobiernos.
CAPITULO 7
LA EXPERIENCIA DE LA VENTANA
En los 5 años siguientes Zabor continuó haciendo más investigación y
publicaciones pequeñas de los resultados que iba consiguiendo pero aún no se
sentía satisfecho, hasta que un día lluvioso en Munich vio en una ventana, en la
que tenía pegado un afiche de una playa de Filipinas, el contraste entre un día
lluvioso y el clima cálido de una playa, esta observación le dio la idea de querer
controlar el clima puesto que pensó que el clima era la manera de controlar a la
naturaleza y que era decisivo en todos los aspectos de la vida humana “somos
marionetas que pendemos de los hilos del clima”. Al principio mantuvo en secreto
su idea de la empresa GLOBE hasta leer e instruirse lo suficiente acerca del tema.
En 1985 fue invitado a dar una conferencia en Viena, en la cual dijo que el trabajo
del hombre era dominar a la naturaleza e intentar modificarla según su beneficio,
lo que causó polémica y opiniones divididas dentro de los asistentes.
CAPITULO 8
PROBLEMAS PARTICULARES Y LA METEOROLOGIA
CAPITULO 9
TRABAJO Y FRACASOS
CAPITULO 10
LA MAQUINA METEOROLOGICA
Zabor regresaba a su agencia en el año 1990 en donde empezó a trabajar en la
fórmula del tiempo la cual le hizo recordar a la fórmula del mundo de Heisenberg.
Dicha fórmula del tiempo iba a tener todos los elementos necesarios para
manipular el mismo por lo cual trabajaba arduamente días y noches enteras.
Sus colegas no estaban seguros de que Zabor alcanzara el éxito ya que su
método era totalmente atípico al de cualquier inventor o investigador puesto que
trabajaba solo y no tenía un equipo multidisciplinario que lo ayudase. Por esta
razón Gohlke tenía que hacer grandes esfuerzos por acallar a las críticas a Zabor
por lo que se aparecía en la agencia frecuentemente a interesarse por su trabajo a
lo que él le respondía que era “el trabajo de toda una vida, con un final abierto”
motivo por el cual trabajaba encarnizadamente sin descansar para no quedar en
ridículo.
Paso el año 1990 y Zabor seguía sentado en su mesa haciendo cálculos
fantásticos. El último día del año asistió con Jessy y su hijo a una obra de arte
llamada El hacedor de la lluvia de Nash, en lo cual vio oportunidad de aprender
algo que le ayudara a su invención. Pero a decir verdad dicha obra no aporto nada
a sus trabajos en Globe lo cual lo frustro más. En cambio Jessy vio en dicha obra
la oportunidad de poder pasar tiempo de calidad así sea por una tarde.
A fines del año 1991 Zabor creía haber desarrollado una teoría que pudiera hacer
posible su proyecto, lo cual lo hizo sentir feliz pero muy inseguro y quería la
opinión crítica de otro físico pero los cercanos a él no merecían la confianza de
mostrarles dicha teoría; y los que eran confiables no estaban a su alcance. Y fue
ahí donde se lamentaba de no haber pertenecido a un instituto prestigioso porque
de seguro allí hubiese podido intercambiar ideas a su propio nivel.
Aunque llego a ciertas conclusiones sobre su trabajo dudo varias semanas antes
de comunicar todo a su empresa. Con objeto de estudiar sus notas más tarde de
forma imparcial las abandono en 1991 y se dedicó a asuntos particulares. Así que
Jessy le invito a cenar y le propuso que volvieran a su vida de pareja como antes
pero Zabor titubeo porque el ya no extrañaba nada y todo su mundo ahora giraba
en torno a su proyecto, además seguía en el la pasión por Anabella su gran amor
y por último no quería que ella volviera a abandonarlo por la falta de éxito. Pero al
final Zabor se dejó conquistar, esta reconciliación tuvo como consecuencia que
Ingmar visitara con frecuencia a su padre y fortalecieran su vínculo padre-hijo.
El 12 de marzo de 1991 se armó de valor y presento su proyecto a Gohlke con la
aclaración de que podía manipular cualquier clase de tiempo atmosférico,
presento además los manuales de construcción y funcionamiento. Gohlke lo
felicito pero un poco perplejo ya que este asunto se volvía inquietante para él. Aun
así le asignaron a Zabor tres técnicos que le ayudarían a construir su proyecto con
hardware del Globe con los cuales se fue por dos meses al sur de Tirol, pero con
la condición de que si resultaba ser peligroso y perjudicial abandonaran el
proyecto.
Tras el retiro de Tscherms al sur de Tirol, convirtió a los doctores Rittel, Faber y
Kukuk en seguidores de la doctrina de Zabor y se dio inicio a la construcción de la
maquina la cual llevaba el nombre de “Maquina meteorológica o Maquina M.”
Casi todos los detalles de la vida y obra de Zabor podrían reconstruirse a
excepción de la maquina M. esto debido a que al final esta se destruyó al igual
que desaparecieron los planos de construcción y manuales de funcionamiento por
ende es imposible imaginar cómo era. Además los técnicos que trabajaron en su
construcción no sobrevivieron a la destrucción o algunos ya habían abandonado el
Globe.
Todos los intentos de reconstruir la maquina M fueron fallidos ninguna de las
copias logro siquiera mover una nube en el cielo. Es posible que algún día un
científico con la mentalidad de Zabor pudiese realizar una maquina igual, ya que lo
que el construyo sigue siendo un enigma para la sociedad. El hecho de que Zabor
y sus colaboradores se negaran a hacer públicos los detalles físicos y demás de la
maquina M se debe a la ambición de su inventor y los temores del Globe de ser
aventajados por la competencia.
De Gohlke que sobrevivió al desastre de 1994 tampoco se puede saber nada
debido a que en plena catástrofe fue internado en una clínica psiquiátrica por ser
víctima de una grave confusión mental, además no recuerda nada y en sus pocos
momentos de lucidez sus palabras y conductas no son fácilmente interpretables.
Lo único que se sabe es que Zabor dio por finalizada la construcción de la
Maquina M. el 1 de mayo de 1991, misma fecha en la cual le escribió a Jessy una
carta con el motivo de felicitarlo por su gran invención ya que era algo fuera de lo
corriente, ya que al dominar el tiempo podría ayudar en gran medida a la tierra y a
sus habitantes adaptando el clima a sus condiciones y necesidades lo cual permite
construir y progresar, aclaraba Zabor en su carta.
Zabor estaba de tan buen humor que decidió darse unas vacaciones y fue a
reunirse con Jessy en Viena y de paso iría a ver a su hijo tocar como solista en el
concierto de violín Kabalevsky. En ese momento Zabor y Jessy sintieron como si
nunca hubiesen estado separados y fueron a celebrar con su hijo y el director del
concierto a un café por tres motivos: La música, la reconciliación y “la máquina
infernal”. En ese momento Zabor ignoro un telegrama que le dejo Gohlke y
simultaneo a este suceso el doctor Rittel, informo sobre el Globe y la finalización
de la Maquina M. a la central neoyorquina esto en parte por orgullo y por otro lado
con el fin de hacer carrera.
En ese instante ya estaban tres inspectores americanos queriendo revisar el
artefacto, motivo por el cual Zabor tuvo que viajar de inmediato primero para
explicar su obra y segundo con el fin de tratar de persuadir a la delegación de
inspectores de que había convencido a Gohlke de transportar la maquina M. a
estados unidos con o sin Zabor para ser probada en un instituto universitario.
A su regreso Zabor tuvo que enfrentar varias discusiones sobre el derecho de
propiedad de dicha máquina, ya que los delegados manifestaron que el proyecto
fue financiado por el Globe pudiendo la empresa decidir sobre su futuro. Zabor sin
embargo insistía sobre su derecho de propiedad de la maquina M. a lo que la
delegación le respondió que dejarían de aportar dinero y materiales. En ese
momento Zabor se fue enfadado y Gohlke corrió tras el con el fin de calmarlo y
brindarle una alternativa la cual Zabor siguiera trabajando hasta fin de año fecha
en la cual la maquina M. se enviaría a estados unidos, tiempo prudente para que
Zabor puede hacer que su máquina funcione y así poder negarse a las exigencias
americanas; a lo que Zabor cedió de mala gana y con miedo a fracasar de nuevo.
Después de esto la delegación se fue y siguieron los trabajos en marcha.
Zabor empezó a cuestionarse sobre muchos aspectos del clima y obtuvo muy
pocas respuestas, tenía dudas como que ¿a quien pertenecía el tiempo de Múnich
o el tiempo en general? o ¿contra qué derechos se atenta al cambiar
drásticamente el tiempo? Y demás preguntas de ese tipo hicieron que Gohlke y el
Globe se sintieran inseguros sobre qué implicaciones legales tendría esta máquina
a tal punto de hacer desistir a Zabor de su trabajo. Pero fue el mismo Zabor quien
poco se dejó afectar de la inseguridad legal de su trabajo ya que eso no era
asunto suyo más sin embargo se documentó bien si llegase a existir un conflicto
de estado por su invención.
Por ahora lo único que lo preocupaba eran las dificultades técnicas de la máquina
y cuando era el momento más indicado de intentar cambiar el tiempo por primera
vez, mientras que los técnicos y demás integrantes a cargo de la maquina daban
aval de que estaba lista para funcionar.
Zabor reviso la maquina M todos los días hasta el otoño de 1991 buscando algún
defecto o algún faltante en su construcción, por lo cual Jessy le reprochaba sus
llegadas tarde a casa optando por dormir en la agencia. Cada vez más Zabor se
volvió más ansioso por tan esperado momento, pos si llegase o no a funcionar,
ansioso sobre lo que pensaran los trabajadores de la empresa o el público en
general y eso no le permitía ejecutar y poner en marcha la maquina M. Un día
invito a Gohlke a tomar para así poder saber que pensaban de el en el Globe pero
de nada sirvió. Otro día intento entrar de noche a la empresa sin que nadie supiera
con el fin de intentarlo pero de nuevo la lucha con el pensamiento de los demás y
del mismo sobre su proyecto no le permitió hacer eso.
Este miedo constante lo impulso el 15 de octubre de 1991 a comunicar al Globe
que rescindía de su contrato laboral dejando el papel sobre la mesa para que
Gohlke lo encontrara la mañana siguiente. Se desconocen las razones para que
Zabor tomara esa decisión y más en el momento que el Globe esperaba el gran
acontecimiento, por esta razón Gohlke lo llama haciéndole entrar en razón y
manifestándole lo importante que es él y todo el potencial que él tiene como
inventor, lo que logro convencerlo y hacerle perder el miedo al fracaso y
entendiendo de que la desgracia para el Globe es que nunca tuviera el valor de
poner en funcionamiento la maquina M. llevo a Gohlke a su casa, Jessy les
preparo la cena y el primer intento se ejecutó el 1 de noviembre de 1991. Como
Gohlke se dio cuenta que Jessy era la clave de todo lo que concierne a Zabor, fue
muy amable con ella y la cito a escondidas para la tarde del día siguiente.
CAPITULO 11
LOS EXPERIMENTOS DE MUNICH
CAPITULO 12
AGOSTO EN NOVIEMBRE
Al inicio del invierno, en noviembre de 1992, Zabor decidió cambiar el clima frío y
las nubes de esa temporada, por el clima caluroso y soleado de agosto. La poca
confianza de Globe lo ponía impaciente, por lo que estaba nervioso frente al
fracaso.
Pero, al probar la máquina M, vio que funcionó instantáneamente, desapareciendo
las nubes y mostrando el sol. En un día logró subir la temperatura a 24 grados, por
lo que la gente decidió salir de casa y disfrutar el día. Zabor indicó a sus
colaboradores que la máquina debía dejarse encendida 72 horas, luego deberían
dejar la atmósfera al tiempo natural.
Viendo que la máquina fue un éxito, todos celebraron y se preguntaron si convenía
comentar eso a la opinión pública. Gohlke, mientras tanto, les informaba a los
jefes de Nueva York el logro obtenido. Globe publicó en Estados Unidos que
sabían cambiar el clima y sus acciones subieron de valor en un 40%.
Luego de todo esto, Zabor se preguntó qué debería hacer a partir de ahora, ya
que quería evitar que su invento cayera en las manos de otros. Decidió ir quitando
sensacionalismo a su invento, para que se perdiera ese interés obsesivo que tanto
lo asustaba, pero Globe hizo todo lo contrario. Los diarios hicieron de esto, todo un
show mediático. Él intentó reprochar a Gohlke por el actuar de la compañía, pero
ya era tarde para eso.