Sei sulla pagina 1di 2

Historia de la aguja

Y entonces llegamos nosotros, los Homo sapiens, y con nosotros llegó la revolución: hace 20.000 años ya
sabíamos fabricar hilos y cordajes con fibras animales y vegetales, que servían para coser piezas más pequeñas
de piel (aprovechando al máximo las de animales pequeños como conejos, zorros, hurones, etc), aumentando
la eficiencia y complejidad en diseño de la ropa. También empezamos a coser pieles para otros usos, como
bolsas, tiendas de campaña, contenedores de agua, canoas, y un etcétera muy largo.

Y claro, hacían falta agujas de buena calidad, resistentes y de puntas afiladas. Las primeras que encontramos
en los yacimientos son de hueso o asta de ciervo y en algunos casos, de marfil. Están tan bien diseñadas, que
apenas han cambiado en tantos miles de años: agujas con ojo, agujas sólo con punta, y en algunos arpones de
hueso podríamos incluso identificar la forma de las modernas agujas de ganchillo. Y por supuesto, se utilizaban
para tantas cosas como hoy en día: costura, caza-pesca, cosmética, medicina, adorno personal…

Aguja de hueso de Altamira.

Con el Neolítico (VIII Milenio antes de Cristo) se desarrolla la tecnología del hilado de fibras animales (lana) y
vegetales (lino), y su tejido posterior en telares manuales. El trabajo con la tela hace que se inventen agujas
con cabeza (alfileres) para hacer composturas previas al cosido, y al mismo tiempo, las agujas de coser se
adelgazan para trabajar con hilos de menor grosor y para permitir trabajos delicados como el bordado.
Telar manual neolítico.

La siguiente evolución de la aguja llega con la invención de los metales, que permiten el diseño de agujas curvas
para trabajos específicos y con una mayor resistencia a la rotura o la pérdida de filo, y facilitan su fabricación.
Primero en cobre, después en bronce, en hierro o en acero, actualmente encontraremos agujas diferentes para
decenas de trabajos distintos, pero basadas en aquel diseño inicial de la Prehistoria.

Agujas de hueso romanas.

Agujas metálicas actuales.

De la misma forma, la manufactura del hilo se ha basado en el peinado de las fibras, ya sea lana, lino, o algodón,
con el objetivo de enredarlas entre ellas, creando pequeños filamentos. posteriormente, estos filamentos se
estiran y enrollan entre ellos nuevamente, creando un hilo o fibra contínua y resistente. El primer torcido del hilo
se debió hacer a mano, aunque no tardamos en inventar herramientas que nos facilitaron la tarea: el huso y la
fusayola se utilizan a modo de peonza, para retorcer y girar el hilo con el mismo movimiento circular. El hilo
resultante se va enrollando alrededor del huso, formando un carrete o bobina. Posteriormente se inventaría la
rueca, que utiliza el mismo principio que el huso, mecanizándolo.

Hilado manual con huso y fusayola.

Hilado manual con rueca.

El paso del tiempo ha cambiado poco el proceso de hilado, y las novedades se han dado debido al
descubrimiento de nuevos materiales, como el algodón, la seda, o las fibras sintéticas de las últimas décadas,
buscando ante todo un aumento de la resistencia y la durabilidad de los hilos, y manteniendo el concepto original
que inventamos en el Neolítico.
Y es que, si los diseños de la aguja y el hilo siguen siendo válidos después de tantos milenios, ¿Para
qué cambiarlos?

Historia de la costura
A principios 1800 las costura se hacían a mano y aguja.ademas que la mayoría de gente no
tenia plata para comprar ropa entonces surgió la necesidad de crear la maquina de coser.1
La primera máquina de coser fue patentada en 1790 por el inventor británico Thomas
Sainnt,esta estaba diseñada para coser piel y tela, usaba un único hilo y formaba una puntada
en cadena pero esta maquina no paso del prototipo.35 años antes al ingeniero alemán
Charles Fredrick Wiesenthal, afincado en Inglaterra, se le otorga la primera patente para
una aguja de coser adaptada para una máquina.23
La primera máquina de puntada cerrada fue creada por el inventor estadounidense Walter
Hunt hacia 1834
La máquina, que utilizaba al mismo tiempo una aguja con un ojo en la punta y una lanzadera
oscilante la diferencia era que esta era de doble hilo, no se patentó en el momento de su
invención, de forma que cuando más tarde Hunt intentó obtener una patente, su petición fue
desatendida por motivos de abandono.
Ademas dejo un gran legado que es el bosquejo de su maquina de coser que se utiliza hasta
la actualidad.
la primera máquina de coser práctica en 1846 fue creada y patentada por Elias Howe,
Introdujo Significativos cambios que conducirían hacia la maquina de coser moderna.
La típica estructura de la máquina de coser se compone de una base en la cual apoya el brazo
de la máquina. En la base se encuentran los mecanismos para el arrastre de la tela y en el
brazo se encuentran los mecanismos de movimiento de la aguja. Por fuera están las poleas
que determinan la tensión del hilo. Se suelen encontrar en el cuerpo de la máquina los
controles del largo de la puntada, de la tensión del hilo superior e inferior, y de presión del
prensa telas. El cuerpo incluye también un mecanismo de bobinado del hilo inferior que sirve
para también conseguir buena estructura en todo lo que queramos coser.

Potrebbero piacerti anche