Julius Evola, seudónimo de Giulio Cesare Andrea Evola (Roma, 19 de mayo de 1898 – ibídem, 11 de

junio de 1974), fue un filósofo, esoterista, pintor e ideólogo italiano. Se le ha descrito como un
"intelectual fascista",12 un "tradicionalista radical",3 "anti-igualitario, anti-liberal, anti-
democrático y anti-popular",4 y como "el principal filósofo del movimiento neofascista de
Europa".4

Evola es popular en los círculos marginales, en gran parte debido a sus creencias metafísicas,
mágicas y sobrenaturales extremas (incluidas las creencias en los fantasmas, la telepatía y la
alquimia) y su tradicionalismo extremo y misoginia.5 Él mismo calificó su filosofía de "idealismo
mágico". Muchas de las teorías y escritos de Evola se centraron en su idiosincrásico misticismo,
ocultismo y estudios religiosos/esotéricos,,678 y este aspecto de su obra ha influido en ocultistas y
esotéricos. Evola también justificó la violación (entre otras formas de dominación masculina sobre
las mujeres) porque la veía "como una expresión natural del deseo masculino". Esta visión
misógina surgió de sus puntos de vista de extrema derecha sobre los roles de género, que exigían
la sumisión absoluta de las mujeres.678910

Según el académico Franco Ferraresi, "el pensamiento de Evola puede considerarse como uno de
los sistemas anti-igualitarios, anti-liberales, anti-democráticos y anti-populares más radicales y
consistentes del siglo XX. Es una singular (aunque no necesariamente original) mezcla de varias
escuelas y tradiciones, incluido el idealismo alemán, doctrinas orientales, el tradicionalismo
político y la Weltanschauung global del movimiento revolucionario conservador de entreguerras
con el que Evola tuvo una profunda participación personal".11 El historiador Aaron Gillette
describió a Evola como "uno de los racistas fascistas más influyentes en la historia italiana".12
Evola admiró al jefe de las SS, Heinrich Himmler, a quien conoció una vez.12 Evola pasó la Segunda
Guerra Mundial trabajando para el Sicherheitsdienst.8 Durante su juicio en 1951, Evola negó ser
fascista y se refirió a sí mismo como un "superfascista". Con respecto a esta afirmación, la
historiadora Elisabetta Cassina Wolff escribió que "no está claro si esto significaba que Evola se
colocara por encima o más allá del fascismo".13

Evola fue el "ideólogo principal" de la extrema derecha de Italia después de la Segunda Guerra
Mundial.14 Sigue influyendo en los movimientos tradicionalistas neofascistas contemporáneos.