Sei sulla pagina 1di 6

FIEBRE

Es la elevación de la temperatura del cuerpo por encima de los limites circadianos


normales como consecuencia de una cambio ocurrido en el centro
termorregulador situado en la región anterior del hipotálamo.

Papel de los pirógenos endógenos y exógenos

Un pirógeno es cualquier agente productor de fiebre, es decir, sustancias que


actuando sobre los centros termorreguladores del hipotálamo producen un
aumento de temperatura (fiebre)

- Pirógenos exógenos: Son productos bacterianos, toxinas o sustancias


químicas actúan fundamentalmente induciendo la síntesis de pirógenos
endógenos por las células del huésped. Los más característicos son los
lipopolisacaridos o endotoxinas producidas por bacterias Gramnegativos.

- Pirogénicos endógenos: Los endógenos son producidos por el


organismo, en respuesta generalmente a estímulos iniciadores que suelen ser
desencadenados por la infección o la inflamación. Formados localmente o en todo
el organismo, penetran en la circulación y producen fiebre actuando sobre el
centro termorregulador del hipotálamo.

Los pirógenos endógenos son citoquinas que inducen fiebre e incluyen a


la interleucina-1 (IL-1), IL-6, IL-8, IL-12, IL-18, macrophage-inflammatory protein-1
(MIP-1), interferón-g (IFN-g) y el factor de necrosis tumoral (TNF). De todas las
citoquinas la más potente es la IL-1.

Fisiopatología de la fiebre

La respuesta febril se pone en marcha cuando agentes externos denominados


pirógenos exógenos son capaces de activar el sistema fagocitico-mononuclear y
éste a su vez activa la síntesis y liberación de proteínas pro inflamatorias
denominadas citoquinas (pirógenos endógenos).

A través de la circulación esto pirógenos van a llegar a los centros


termorreguladores hipotalámicos, con ayuda de la enzima ciclooxigenasa-2 éstos
inducen la producción de mediadores lipídicos que son las Prostaglandinas E-2.
Existen toxinas microbianas que directamente son capaces de estimular la
producción de PgE2, prescindiendo de la ayuda de las citoquinas.
La PgE2 a su vez estimula las células gliales para que liberen AMP-cíclico y este
interactúa con las neuronas hipotalámicas provocando la disminución de las
neuronas pre ópticas sensibles al calor y excitando las neuronas sensibles al frio,
ocasionando la estimulación de la termogénesis y regulando la temperatura
corporal a un nivel más elevado que el normal, originándose así la Fiebre.

Etapas de la fiebre

1) Fase de ascenso: Puede ocurrir en forma brusca así como de forma


insidiosa, en este período se produce la vasoconstricción, las contracciones
musculares y la piloerección.
2) Fase de mantenimiento o de fastigio: La temperatura corporal alcanza y
se mantiene a un nivel por encima de los valores normales.
3) Fase de descenso: La temperatura corporal desciende a los valores
normales y puede terminar de manera súbita con intensa sudoración, en cuyo
caso se denomina “Crisis” o de manera gradual, denominándose “Lisis”.

Tipos de fiebre

 Intermitente: es aquella en la cual la temperatura regresa a lo normal cada


día. (Infecciones piógenas, abscesos, linfomas, tubercolosis)
 Remitente: la temperatura baja cada día pero no regresa a lo normal.la
mayoría de las fiebres son de este tipo.
 Sostenida: elevaciones persistentes, sin variaciones diurnas importantes.
(fiebre tifoidea no tratada)
 Recurrente: presenta cortos periodos febriles entre uno o varios días de
temperatura normal. (paludismo, por mordedura de rata, infecciones piógenas)

Manifestaciones clínicas de la fiebre


 Piel caliente: Resultado de la vasoconstricción
 Deshidratación: Resultado de la perdida de líquido, sudoración excesiva y
disminución en la ingesta de bebidas.
 Taquicardia: El aumento en el metabolismo aumenta el gasto cardiaco y
consigo la frecuencia cardiaca. La disociación esfigmo-termica (disparidad
pulso-temperatura) es una manifestación característica de algunas
enfermedades productoras de fiebre sin incremento de la frecuencia cardíaca
(bradicardia en vez de taquicardia). Ejemplo: Fiebre tifoidea, Brucelosis,
Endocarditis, Fiebre amarilla, gripe, fiebre ficticia y fiebre por medicamentos.
 Convulsiones: Se dan especialmente en niños y persona con historial de
convulsiones.
 Cefalea: Se debe a la acción algógena (creadora de dolor) de la prostaglandina
E2 a nivel de los vasos que rodean el cráneo.
 Escalofríos: Ocurren cuando existen cambios bruscos de la temperatura.
Cursan con una sensación de frio, temblores, sacudidas y castañeo de los
dientes. Algunos antipiréticos también pueden causar escalofríos por descenso
brusco de la temperatura.
 Herpes labialis: es como se llama a las ampollas de la fiebre, resulta de la
activación del virus del herpes simple por la elevación de la temperatura .

Efectos negativos de la fiebre

La fiebre tiene sus aspectos perjudiciales. La mayor velocidad de todos los


procesos metabólicos acentúa la pérdida de peso y el balance nitrogenado
negativo. El trabajo y el ritmo del corazón se aceleran. La sudación agrava la
perdida de sal y de líquidos. Puede haber incomodidad debida a la cefalalgia,
fotofobia, malestar general o sensación molesta de calor.

Fiebre por medicamentos


La fiebre inducida por fármacos representa entre 2 a 5% de las reacciones
adversas a medicamentos.

Es una reacción de carácter benigno, rápidamente reversible con la suspensión


del fármaco. La fiebre puede aparecer de 7 a 10 días después del inicio del
tratamiento y desciende entre 48ª 72 horas luego de la suspensión. Las cifras de
temperatura alcanzada son variables y dependen del tipo de fármaco utilizado y de
las características propias del paciente.

Los mecanismos fisiopatológicos invocados en la producción de esta reacción


adversa son múltiples. Las reacciones de hipersensibilidad tipo III constituyen el
mecanismo mas frecuente, los otros mecanismos son: la liberación de pirógenos
como parte de su acción farmacológica y la alteración de la termorregulación e
inmunosupresión.

Entre los fármacos que pueden desencadenar esta reacción tenemos: Antibióticos,
barbitúricos, fármacos con efectos sobre SNC, sulfamidas, laxantes, ibuprofeno,
antineoplásicos, salicilato, yoduro, anticonvulsivantes y antihipertensivos.

La fiebre puede estar acompañada de: cefalea, nauseas, mialgias, diarrea.


Papel de los antipiréticos en la fiebre
Su objetivo es la inhibición de la enzima ciclooxigenasa causante de la producción
de las prostaglandinas (PGE2) que se modifican el centro termorregulador elevado
su funcionamiento con el consiguiente aumento de la temperatura corporal. Al
mismo tiempo estos fármacos antitérmicos producen mejoría en el enfermo ya que
posee acciones antinflamatorias y analgésicas. Para su elección se intentara elegir
el más eficaz que provoque mínima toxicidad. Entre ellos encontramos:

 Ácido acetilsalicílico

Inhibe la síntesis de prostaglandinas. Es analgésico, antitérmico y


antinflamatorio. Disminuye la temperatura al cabo de 30 a 60 minutos de su
administración oral, alcanzando a las 3 horas su máxima eficacia. Está
contraindicado en niños porque su utilización ha sido asociada con el síndrome
de Reyé (enfermedad rara observada en pacientes que padecen varicela o
influenza A o B y que son tratados con este fármaco). Sin embargo, en
pediatría hay dos situaciones en las que se usa preferentemente: la
enfermedad de Kawasaki y la fiebre reumática.

 Dipirona

Es analgésico y antipirético, con alguna actividad antinflamatoria y


antiespasmódica.

En pediatría es el único antipirético inyectable de utilidad, especialmente en


pacientes con convulsiones febriles.

Las contraindicaciones son síndromes febriles prolongados, discrasias


sanguíneas previas, porfirias hepáticas o antecedentes de alergia severa. No
debería usarse en menores de 6 meses.

 Paracetamol (Acetaminofen)
Es analgésico y antipirético, pero no antinflamatorio. El efecto antifebril es más
leve que los de la aspirina y el ibuprofeno. Está indicado para lactantes
menores de 6 meses. Inhibe la síntesis de prostaglandinas a nivel cerebral, no
siendo eficaz a nivel periférico (plaquetas, mucosa gástrica, pulmón) su efecto
inicia 30 a 60 min de administrarse y a las 3 horas hace su efecto máximo. Es
eficaz para tratamiento de la mayor parte de los casos de fiebre. No afecta la
coagulación, siendo de menor irritabilidad gástrica.
 Antiinflamatorios no esteroides (AINE), como el Ibuprofeno

Analgésico, antinflamatorio y antipirético, es el más popular de los AINE. Es


gastrolesivo. Su mecanismo de acción se basa en la inhibición de la síntesis de
prostaglandinas. Produce un descenso de la temperatura y mantiene un efecto
antitérmico más tiempo (de 6 a 8 horas). La sobredosis puede producir daño
ocular, edema, retención de líquido.

Está contraindicado en caso de úlcera gastroduodenal e insuficiencias


cardíaca, renal o hepática. No debe usarse en menores de 6 meses ni en niños
con vómitos.

En general todos los fármacos antitérmicos pueden ocasionar efectos adversos


siendo el más común la brusca disminución de la temperatura corporal con
producción de escalofríos, severa sudoración con hipotensión. Estos
inconvenientes se pueden prevenir con administración fija y regular de los
fármacos antitérmicos y la adecuada ingestión de líquidos.

Las interleucinas que intervienen en la patogénesis de la fiebre


El efecto pirógeno se realiza a través de un proceso en el cual intervienen el factor
activador de los linfocitos (LAF) y la interleucina-1 (IL-1) producida por los
monocitos y los macrófagos preferentemente, aunque también se incluyen las
células endoteliales vasculares y las células mesangiales renales. Los
polimorfonucleares no se consideran fuente significativa de IL-1 cuya producción
es estimulada por las endotoxinas, los complejos inmunes y el daño tisular. Esta
interleucina se une a los receptores específicos en el hipotálamo anterior donde
estimula la síntesis local de prostaglandinas, siendo la responsable principal de la
elevación térmica.

a. Neurotransmisores: El AMP cíclico, la norepinefrina y la serotonina actúan


como neurotransmisores que desempeñan un importante papel fisiológico
en el control de la temperatura.
b. Prostaglandinas: La interleucina-1 estimula la síntesis de prostaglandinas a
través de la activación de fosfolipasas que a su turno producen ácido
araquidónico necesario para la producción de prostaglandinas.

Beneficios inmunológicos de la fiebre

 Afecta directamente el metabolismo bacteriano, inhibiendo la síntesis de


proteínas e inactivando enzimas que son necesarias para la replicación de
los virus, tanto así que los virus detienen su replicación a temperaturas de
40 a 42°C.
 Fortalece la respuesta inmunológica del enfermo. Los glóbulos blancos
tienen una movilidad mayor a altas temperaturas.
 Una vez que estos migraron de la sangre a la infección, la temperatura
elevada favorece a su permanencia allí y sus secreciones aumentan.
 Los glóbulos blancos destruyen a los gérmenes fagocitándolos. Esta
función esta potenciada por la temperatura elevada.

Potrebbero piacerti anche