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Junio, 2018
PRÓLOGO
Remembranzas.
El presente proyecto fue estructurado originalmente en el año 2017, como parte del plan de
trabajo del ministerio de Relaciones de la sociedad femenil “Luminares de Cristo”, de la
INPMAR “Cristo Viene”, ubicada en la colonia Miguel Alemán, de la ciudad de Comitán, con la
visión de llevar un poco más allá los lazos fraternales entre las socias, y alcanzar con el sentir
de armonía y unidad a las demás sociedades dentro de la ciudad. Por lo que se propuso
convocar a las demás sociedades, congregaciones y misiones a ser parte del primer Encuentro
Femenil de la zona, celebrado el 14 de octubre del año 2017 en la INPMAR “Cristo Viene”, con
el tema general “Mujeres Relevantes”.
Por gracia de Dios se tuvo una buena respuesta, celebrando un segundo encuentro el 27 de
enero del año 2018 en la congregación “Monte Horeb” y un tercero el 2 de junio en la INPMAR
“Puerta del Cielo”, y antes del cuarto encuentro, ya se cuenta con el proyecto completo para
organizar un Área de Concentraciones de Sociedades Femeniles, con el mismo nombre.
Es un alcance que sólo se anhelaba en los primeros planes, pero Dios ha dado el crecimiento
y lo hace posible, por lo que se dedica este proyecto en su totalidad para la gloria de Dios,
reconociendo que de Él proceden todas las cosas, y nosotros sólo somos instrumentos en sus
Manos.
A Dios sea la gloria siempre.
IDEA CENTRAL Y JUSTIFICACIÓN DEL PROYECTO:
Lo dicho por Ruth a su suegra Noemí: “A dondequiera que tú fueres, iré yo…” (Ruth 1:16), es
de las expresiones con más convicción que podemos encontrar en la biblia, y es que describe
la total disposición de una mujer con un origen errante y un futuro aparentemente incierto; es
una expresión que no deja lugar a las dudas o argumentos que la hagan vacilar, al punto en
que la Palabra de Dios dice: “viendo Noemí que estaba tan resuelta a ir con ella, no dijo más.”
(Ruth 1.18).
Así como Dios se hizo real en Ruth a través de la esperanza, amor y convicción que aprendió
de su suegra Noemí, y se aferró a acompañarla siempre hasta ser sepultada donde esta
muriere, asimismo es como se espera que los hijos de Dios nos aferremos a sus caminos y
busquemos con ansias la dirección que nos da en su Palabra para trabajar con pasión, con
total lealtad y amor a la Obra del Señor, convencidos de que en nuestro trabajo el Señor se
glorifica
Ya lo dice el salmo 90:17 “Sea la luz de Jehová nuestro Dios sobre nosotros, y la obra de
nuestras manos confirma sobre nosotros; sí, la obra de nuestras manos confirma.” Y lo
confirma el lema de las Sociedades Femeniles “Ardientes en Espíritu, sirviendo al Señor”.
Así, con esa convicción se inicia el proyecto de organización del Área de Sociedades
Femeniles “MUJERES RELEVANTES”, centrado en el deseo de reunir a todas las mujeres
presbiterianas de la ciudad de Comitán de Domínguez y sus alrededores en una sola estructura
administrativa y de jurisprudencia, según los lineamientos de nuestra amada INMPAR, ya que
en esta zona geográficamente próxima, existen sociedades femeniles con amplia historia, y
mujeres de Dios con vasta experiencia en el trabajo femenil dentro de la Obra de Cristo,
quienes hasta hoy han carecido de un respaldo eclesiástico más allá de su Honorable
Consistorio local, limitando en cierta medida los mayores alcances que el trabajo femenil puede
tener en esta zona y por lo tanto, condicionando en ocasiones el crecimiento espiritual que
puede tenerse al asumir mayores retos en el trabajo de la expansión del reino de Cristo
mediante la proclamación de la Palabra al mundo, y mediante el fortalecimiento de los lazos
fraternales con otras sociedades.
Dicho lo anterior, podemos resumir cuatro grandes beneficios que se obtendrán en la Obra de
Cristo a través de esta forma de trabajo y organización:
1. Proximidad geográfica. En un radio no mayor a 10 kilómetros podemos encontrar al
menos a 6 sociedades femeniles organizadas y a unas 6 misiones o congregaciones
donde hay hermanas deseosas de trabajar en la Obra del Señor. Esta proximidad en
distancia, significa una mayor disponibilidad de las hermanas para las actividades a
realizarse, y un mayor alcance en toda la zona.
2. La experiencia. La mayoría de las sociedades de esta zona cuentan con una larga y
bendecida historia, y con hermanas que tienen vasta experiencia en el trabajo de la
sociedad femenil, lo cual aporta a este proyecto solidez, madurez y compromiso. A
demás, encontramos a 5 pastores, 2 misioneras, 4 ministros de música, y 4 Honorables
Consistorios debidamente organizados quienes, unidos bajo el mismo propósito, se
puede encaminar un gran proyecto para la gloria de Dios.
3. Respaldo eclesiástico, que se obtendrá por parte de la Unión Presbiterial de Sociedades
Femeniles del Honorable Presbiterio Camino de Santidad, así como del mismo
presbiterio, al cumplir con los requisitos básicos como Área de concentraciones.
PROPÓSITO CENTRAL:
Fortalecer los lazos fraternales entre las sociedades femeniles de la zona Comitán y sus
alrededores, mediante el servicio y apoyo mutuo, para llevar a las mujeres presbiterianas a un
crecimiento espiritual cada vez mayor que se verá reflejado en su iglesia local y en su
testimonio al mundo; proclamando con ello la relevancia del rol femenil en la creación.
La visión:
El Área de Concentraciones de Sociedades Femeniles “Mujeres Relevantes” exaltará siempre
a Cristo mediante el trabajo esforzado de las mujeres presbiterianas, y contribuirá en el
crecimiento integral de la iglesia presbiteriana en la zona Comitán y sus alrededores, y
enfatizará en todo tiempo la relevancia del rol femenil en la creación y anunciando al mundo la
gracia de Dios derramada en la mujer.
La misión:
El Área de Concentraciones de Sociedades Femeniles “Mujeres Relevantes” velará siempre
que sus actividades y planes de trabajo promuevan entre las mujeres presbiterianas una
hermandad activa, incluyente y anunciante, proclamando en todo tiempo que en la unidad y
armonía se crece y se glorifica a Dios.
La identidad en un emblema:
ASUMIENDO EL RETO:
La Palabra de Dios comienza hablando de un jardín y concluye hablando de una ciudad
celestial; lo que denota una invitación a un caminar constante en busca del crecimiento que
glorifique a Dios mediante el trabajo esforzado que nos acerque más a Él.
Aquí hay un nuevo reto no propuesto por pensamiento humano sino por el Espíritu Santo de
Dios el cual produce en nosotros el querer como el hacer (Fil. 2.13).
Si asumimos el reto, lo siguiente es asumir el compromiso mediante la organización y
nombramiento de un equipo directivo según lo marcan los lineamientos de orden y gobierno
de la INPMAR, iniciando con ello el proceso para oficializar las decisiones siguientes a tomarse,
de las cuales sobresalen por su relevancia:
1. Acuerdos sobre tiempo y forma en que se realizará la integración del Área a la Unión
Presbiterial de Sociedades Femeniles.
2. Acuerdos sobre la frecuencia y periodicidad de los encuentros femeniles.
3. Estructuración del primer plan de trabajo.