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EL PRINCIPE DEL PUEBLO

Autor: Patricio Martínez Peiret

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INDICE

1.- El principe dl pueblo……………………………………… Pág. 1-10

2.-Valientes soldados chilenos……………………………… Pág. 11-15

3.- No llores tristeza…………………………………………. Pág. 16-20

4.- Pacto de silencio………………………………………… Pág. 21-27

5.- Una voz que nunca fue escuchada……………………… Pág. 28-34

6.- Paren la guerra…………………………………………… Pág. 35-39

7.- Jamás bajaré la guardia………………………………….. Pág. 40-48

8.- El resto de mi vida………………………………………. Pág. 49-54

9.- Amándonos solos contra el mundo…………………….. Pág. 55-58

10.- Chileno de corazón……………………………………. Pág. 59-63

11.- Toro bravo…………………………………………….. Pág. 64-67

12.- Un momento de mi vida………………………………. Pág. 68-86

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EL PRINCIPE DEL PUEBLO

Esta es una historia

Como de antes, de ayer

O de hoy o después

Una historia como

Las de siempre

Existía en un lejano lugar

Un lejano reino

Con un poderoso rey

Que un día decidió

Mandar al destierro

Al final del mundo

Uno de sus ilegítimos hijos

De sus ilegitimas andanzas

Sin Dios ni Cristo

De correrías y andanzas

Correspondiente a su irresponsables
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Actos de lujuria y perversión

Con el delito permitido

Por ser el rey de una nación

Que se hizo cómplice

De esta falta de amor

Y él podría crecer

Y desarrollarse sin

Enterarse de esta oculta verdad

Que escondía las faltas

De su majestad

Que entristecía al reino

Lleno de valores y bondad

Y oculto en la marginalidad

Creció impregnado del pueblo

Que el rey tanto despreciaba

Un pueblo de una nación extraña

Escondida entre mar y montaña

En territorio austral

Donde no llegaba la cultura

Ni existía la dignidad

Ni los hombres tenían derecho

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A manifestar su desigualdad

Hasta que un día llego

A esta nación austral

Aires de libertad

Y se inició una revolución

Que clamaba justicia y dignidad

Derechos a ser humanos

Y contar con la verdad

De ser hijos de Dios

Hechos a su imagen y semejanza

Y ser dueños de esta potestad

Y comenzó una lucha

En todos los frentes del

Quehacer nacional

Contra los poderosos

Que intentaban aplastar

Los aires de libertad

Para este pueblo que quería

Poner fin al yugo de su maldad

Y la clase trabajadora
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Por siempre explotada

Se tomaron las fábricas

Y comenzaron a auto-administrarla

Se creó la reforma agraria

Donde la tierra era

Para el que la trabaja

Y se acortaban distancias

Entre ricos y pobres

Y se respetaba a la clase

Trabajadora la mujer sencilla

La dueña de casa

Y los estudiantes con valentía

Se tomaban las calles

Recalcando que esta lucha

Recién comenzaba

Los niños iban a las escuelas

Se regalaban los materiales

Libros cuadernos lápices

Para que estudiaran

Y surgieran en sus mentes

Más ideas libertarias

Y trabajaran por construir

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Una nación igualitaria

Hermanada por la razón

De tan justa causa

Y en este lejano estado

Alejado de las grandes capitales

Del orbe mundial se

Puso en una tensa pugna

De diferencias irreconciliables

Entre quienes no querían cambios

Si no seguir explotando

A los pobres y que crecieran

Sus desigualdades y nunca

Jamás los rotos volvieran a alzarse

Y entonces los poderosos

De estas tierras australes

Con la ayuda de los otros

Poderosos de todas partes

Incluso aquel malvado Rey

Que su propio hijo desterrase

Para ocultar su propia falta

A la moral y las buenas costumbres

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Y usaron pagando al

Brazo armado que

Custodiaba sus intereses fatuos

Que permanecerían intactas

Sus granjerías y privilegios

Aplastaron la revolución

Popular que clamaba

Por justicia e igualdad

Y creció la represión

Institucionalizada en una cruel

Dictadura que torturó flageló

Instaurando la muerte y la desaparición

Que causo daño sufrimiento y dolor

Contra quienes luchaban

Por su reivindicación social

En este lejano país austral

Y se hizo de la injusticia

Pan de cada día

Se transgredieron todos
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Los derechos constitucionales

E internacionales

Y el mundo fue testigo

De este ultraje la maldad

Hizo su nido junto

A muchos inocentes y

Su sangre lleno las calles

Y sus ríos llenos de muerte

Ni siquiera se respetaba

La inmunidad diplomática

Y se pasaron las leyes por la “raja”

Y se esclavizó una vez más

A la clase trabajadora

Y se acallaron las voces

Defensoras y desde

Todos los sectores de

Los países del orbe mundial

Se repudió estas prácticas brutales

Que usaban para intimidar

Cualquier atisbo de rebelión

Contra la represión cruel y brutal

Mientras la elite de las fuerzas

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Armadas se enriquecían

Apropiándose del erario nacional

Y el príncipe desterrado

Que vivió creciendo en esta realidad

Tomó parte en esta lucha

Contra los abusadores

Y en favor de los abusados

Y fue también marcado y perseguido

Por los torturadores asesinos

E irresponsables que les importaba poco

La corona de su padre

Y fue una pugna de poderes

En que el poderoso rey

Del reino poderoso decidió

Al fin protegerlo

De las manos asesinas

Del desenfreno

Y uso sus contactos en todo el mundo

Poco les importaba

A los miembros inmundos

De la dictadura infame
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Que pusieron precio a su cabeza

Para el que quisiera matarle

Y lo persiguieron en su casa

En las calles subiendo cerros

Por diferentes ciudades

Y nació el mito la leyenda

Irrevocable de quienes le protegían

Y traban de cuidarle

Entonces los dictadores

Que sentían todo poderoso