Sei sulla pagina 1di 3

¿Quieres probar mi

poder?
21/11/2016 18:15 Lectura: 3 min (765 palabras)

La ex jueza Lorena Collantes hizo un gran favor


a la opinión pública: desnudó de cuerpo entero
la descomposición del correísmo, un proyecto
hoy comprometido con mafias políticas,
salpicado de corrupción y podrido en sus
entrañas

La ex jueza Lorena Matilde Collantes Loor hizo un favor a


la política. Después de su impresentable escándalo en el
que amenazó de muerte a los policías que la aprendieron,
salió libre sin mayores obstáculos.

Casi inmediatamente el Consejo Nacional de la Judicatura


divulgó un comunicado. En el texto el organismo estatal
responde a los “comentarios que están circulando en la
redes sociales” y calificó como “altercado” a las agresiones
sufridas por los policías que cumplían su trabajo. Si
realmente hubiera sido un “altercado” se trataría de una
simple disputa o discusión. Pero no fue nada de esto.

El Consejo Nacional de la Judicatura es un órgano de


control disciplinario y en tal función agregó que Collantes
fue destituida por negligencia en octubre de este año. Al
calificar como “altercado” intenta suavizar las agresiones
de una ex jueza, que ganó, según el correísmo, con justicia
y méritos sus concursos de selección de jueces, e intenta
disimular las amenazas de muerte y las confesiones que
haría Collantes sobre sus vínculos con redes mafiosas al
interior de la función judicial y de la política.

En las redes sociales de la internet se encuentra decenas


de fotos en las que la ex jueza Collantes participa de actos
proselitistas, acompaña de altas dirigentes de la política
nacional que ahora rechazan cualquier vinculación de
amistad o de otro tipo con una ex funcionaria caída en
desgracia. Marcela Aguiñaga, vicepresidenta de la
Asamblea Nacional y aspirante a la reelección, llegó a
decir que aceptó tomarse una foto con ella porque es “una
ciudadana más”. ¿Una ciudadana más? (!)

El presidente Correa tiene una larga lista de olvidos por su


alzhéimer político. En la lista se cuenta a Alex Bravo,
Carlos Pareja Yanuzzelli, Pedro Delgado, Fabricio Correa
entre otros, a los cuales tuvo que reconocerlos después en
sus pillerías para luego calificarlos de traidores y más
apelativos. ¿El alzhéimer político será una enfermedad
propia de los correístas? ¿Cuáles son los vínculos entre
Aguiñaga y Collantes? ¿De qué forma se explican las redes
mafiosas a las que se refiere Collantes en sus
declaraciones videográficas?

En las redes sociales de la internet se


encuentra decenas de fotos en las que
la ex jueza Collantes participa de actos
proselitistas

Pero eso no es lo que le preocupa al poder. En lugar de


investigar al ex marido mafioso de Collantes, de revelar
sus vínculos con redes de sicariato y extorsión, de explicar
cómo llegó una persona como ésta a ocupar un cargo de
jueza a través de los concursos convocados por el
correísmo, de aclarar sobre su fortuna a la que hace
referencia en uno de los audios filtrados, a los altos
funcionarios del correísmo lo que les interesa es desvelar
quién hizo el video que circula en las redes sociales.
Patético.
Se entiende que quien grabó las declaraciones de
Collantes fue un policía que intentó dejar registradas las
amenazas de una alta funcionaria correísta que ostentó tal
nivel de influencia política como para asesinar a los
oficiales que procedieron a su aprensión. ¿Cómo pueden
investigar, y luego seguro perseguir, a quien estaba
cumpliendo con sus funciones de protección a la
ciudadanía, pero además tratando de cuidar de su propia
vida?

¿Esta es la jueza del Ecuador que ya cambió? ¿Están


seguros que eligieron a los mejores jueces y juezas? ¿En
lugar de investigar las declaraciones sobre el marido
mafioso, sobre sus vínculos con redes de venganza y
persecución judicial, el gobierno declara su interés en
encontrar a quien hizo el video? ¿A qué le temen?

La aclaración del Consejo de la Judicatura está dirigida a


los comentarios de una ciudadanía indignada.
Lamentable. Cualquier aclaración, y la disculpa que
todavía debe el correísmo, deberían estar dirigidas a la
Policía como institución y a los policías que tuvieron que
soportar los insultos de esta presuntuosa, convertida en
jueza por sus supuestos privilegios políticos como por sus
vínculos con mafiosos de la política. Las disculpas
deberían estar dirigidas también a la ciudadanía que ve
con decepción la prepotencia, agresividad y grosería de
una ex funcionaria correísta, cuyos vínculos son públicos,
y que superó los filtros de una supuesta probidad sin
ningún reparo, antes de convertirse en jueza de la
revolución ciudadana.

La ex jueza Lorena Collantes, hoy caída en desgracia para


sus camaradas correístas, le hizo un gran favor a la
opinión pública: desnudó de cuerpo entero la
descomposición del correísmo, un proyecto hoy
comprometido con mafias políticas, salpicado de
corrupción y podrido en sus entrañas.

¿Esta es la jueza del Ecuador que ya


cambió? ¿Están seguros que eligieron
a los mejores jueces y juezas?

Potrebbero piacerti anche