ALGERTO Bhce PAUL GRENET QUE ES EL CONOCIMIENTO ‘Traduesiin de Gustavo A, Plemonte 80 COLECCION [Esk ESQUEMASPAUL ORENET oto oo tie Ging de ad. rice on Beg Phen Hn poate) Rare ‘Pein de: Charice inp mal at (iy Le? ies & Fetish deter Stuer de Pm ar Tr bit dew hw tall ol acn «oe de Ie exeiogs ‘mis dail eTocs de TH, cae oes wy «mee Fheo"por piensa mot ono gre Ea Pieri, eh attr iets dese, parendo de fe epee Slayer ctf fee ede 7 fee ls formulsiin do una wots explcatva, © dam fio. sob Sv 9 alee. fected ei, ne mda +l Hn Inclenes dcdem, se hala pala -por resrencion under y rec, Hl lene lve rode Ceenet ape expen oe ‘pune ey tesco! indapesble™consoye, por 2, Pe tegen de INDICE, Inrnopucerés: I, Deseaireibs net reéaexo vet cowoce aaENTo, vivipo PoR #L sn¥F1b0 cOMON AL Los hecho: emo los expres el seid camén B. La formulecién de los datos del problema en tGeminos flséieos, anterior a toda tora TL, La eramonsctéx onapwas. oF USA pocTRE A. Primera fase: los antguos flsofos griegos B. Segunda fase: Aries C._ Tercera fase: Sto, Toms de Aquino Coisatio A. EI problems B. La solucién C. Envefancis de ena large induct D. Especifcaciones finales de le grandes comen- E. Concusin IML, La nevoruciéw camresiana ¥ sus conse: A. Primera espa: el relismo indreso de Des Phe. 10 10 B 24 25 28 35 a “a 8 58 60 64 65 65BB. Segunda etapa: el ieatim empirco de Ber ley a ©. Tercera tapas el iealismo taseendemal de Kant n D. Carts etspa: el realmo radial de Bergion 76 E. Quinta etapa: Jean-Paul Sate... 80 Baraxoe rmar 85 [Notas del tradacoe 90 Adverenci del raductrs Las nto com ‘char tgin pet dia seid 9 unalone Aches qu che loony, on suse y appeal fa dal (bse: Li nt dl uve von cow ete’ 7 al ie dee a ee ie red indipenibles pan IMPRESO EN LA ARGENTINA "oleh et depts que peo Te key mimes 11728. ‘Canwishtby Cole S.ALC.ELLLP.A, Buenr A, 1987 INTRODUCCION Quien jintente hacer critica del conocimiento, es de- cir juzgarlo desde el punto de vista de su valor, de- be tener antes, imprescindiblemente, una idea apro- piada de qué es el conocimiento, ya que para estar en condiciones de pronunciase sobre una persona 0 una cosa, hay que saber exactamente de quién o de qué se esti hablando, Nos cuidaremos bien de comenzar nucs tra tareaconsultando a los filsofos —que en la presente cuestién estin lejos de entenderse—, y no les concede- remos la palabra hasta no. haber deseubierto algunos puntos de orientacidn absolutamente indiscuibles, que nos serin proporcionados por el sentido comin. Pues ais en el tema del conocimiento que en cualquier otro, no existe afizmacién tan absurda que no haya encon: trado un filsofo para defendera; tales absurdos rec ‘man la intervencién puriicadora del sentido comin, Una ver que hayamos preguntado al senido comin cusl es la idea que espontincamente se forma del “co- nocer”, nos volveremos hacia la filosofia, y advert: mos entonces en ella —especialmente en lo relativo al conocimiento— dos tendencias muy distnts. La pri mera es propia de aquellos pensadotes que quieren “re- lucie” todo, y encontrar en eada uno de los fendeenes, por diferentes que sean entre sf, marifestaciones diversas 7