LA ESCATALOGÍA COMO MOTIVACIÓN PARA ORAR

INTRODUCCIÓN:

Jesucristo regresara por segunda vez, ¿Qué causa en ti y en mí saber esa grandiosa
verdad?
Mas el fin de todas las cosas se acerca; sed pues prudentes y de espíritu
sobrio para la oración. 1 Pedro 4:7

CUERPO:
1. ¿A qué se refiere Pedro, con el fin de todas las cosas?
Para Pedro, el fin de todas las cosas es el día cuando Jesucristo será revelado
(Ver 1 Pedro 1:131), es decir, la segunda venida de Jesucristo, donde el pueblo
de Dios será revindicado, donde nuestra esperanza será cumplida, y donde
nuestro peregrinaje culminará.
El apóstol nos dice algo más, nos dice que, la segunda venida de Jesucristo se
acerca. No solo habrá una segunda venida, sino que la segunda venida de
Jesucristo está cerca.
Los cristianos debemos tener muy en cuenta esta realidad: Jesucristo regresará
por segunda vez. Él lo ha prometido, y, por tanto, regresará. La primera venida
de Jesucristo, garantiza su segunda venida.
¿Realmente creemos que está cerca?
Cuando evaluó mi vida a la luz de la segunda venida, no sé si te pase lo mismo
que a mí, pero veo que, aunque afirmo y asiento la segunda venida de Cristo
como un hecho, muchas de mis decisiones, las cosas donde gasto mi energía, y
mi falta de oración, reflejan que realmente no lo estoy esperando y que no creo
que realmente la venida de Jesús este cerca.
No digo junto con Juan en Apocalipsis 22:20 – Ven, Señor Jesús – Y lo más
probable, es que, en la medida que estemos cerca de Él aquí en este mundo,
será nuestro deseo de que Él regrese, y de que ese día está cada vez más cerca.

1
poned vuestra esperanza completamente en la gracia que se os traerá en la
revelación de Jesucristo.
2. “Por tanto”, “sed”
El verso continua con dos palabras que son importantes, “sed, pues”. Empecemos
con la Palabra “Pues”. Primero veremos que la palabra pues es un conector. La
RV60 lo traduce como “pues”, pero otras versiones lo traducen como: “Así qué…” –
NVI y la NTV lo traduce: “Por consiguiente”. Esto es muy, muy importante. Porque
nos indica que el mandamiento o imperativo de “sed” prudentes y de espíritu
sobrio, no son simples mandamientos aislados, sino son una consecuencia de lo
que ha dicho anteriormente. Es decir, de no estar ese conector “pues”, solo
tendríamos el mandamiento de ser prudentes y sobrios. Y la aplicación que
daríamos a esta parte del texto sencillamente sería el llamado a ser prudentes y ser
sobrios.
Pero lo maravilloso del texto es que usa este conector, para mostrarnos que el ser
sobrios y prudentes es el resultado del peregrino que está esperando
verdaderamente la segunda venida del Señor que está cerca. No del mero esfuerzo
de ser prudentes y sobrios. Sino del cristiano consciente que sabe que la venida de
su Señor está cerca. He aquí la importancia de evaluar si realmente estamos
esperando la segunda venida del Señor.

3. ¿Qué es ser prudente y qué es ser de espíritu sobrio?

Definir las cosas siempre nos ayuda a profundizar más la Biblia. Así que
respondamos.

Prudente: persona que piensa acerca de los riesgos posibles que conllevan
ciertos acontecimientos o actividades, y adecua o modifica la conducta para no
recibir o producir perjuicios innecesarios.

Sobrio: John MacArthur dice del cristiano que es sobrio: El cristiano sobrio
tiene sus prioridades en orden y no gasta sus energías en las diversas
distracciones del mundo.

Ante la realidad de la cercanía de la segunda venida de Jesucristo, si realmente

estamos atesorando esa realidad, no cabe duda, que una consecuente
respuesta es:
a) Cambiar nuestra manera de vivir para no recibir perjuicios
innecesarios. Innecesarios en el sentido de que los creyentes
también seremos recompensados en la eternidad por cómo
vivimos en este mundo. PRUDENCIA.
b) Tener nuestras prioridades en orden y gastar nuestras
energías, no en las cosas que este mundo ofrece, sino en las
cosas que tienen que ver con Dios y el avance de su reino.
4. ¿Cuál es el propósito de ser prudentes y ser sobrios?

La palabra “para” que tenemos en la mayoría de versiones, nos indica el

propósito por el cual debemos ser prudentes y sobrios. ¿Cuál es el propósito?
La oración. La oración es el propósito por el cual debemos ser prudentes y
sobrios. Es decir, si una definición negativa de ser sobrio es no gastar nuestra
energía en las diversas distracciones del mundo. Una definición positiva sería:
Gastar nuestra energía en la oración. Pero lo que sucede muchas veces con
nosotros, es que destinamos muy poco tiempo o muy poca energía para la
oración. No actuamos con sobriedad si no estamos orando. Y si no actuamos
con sobriedad es porque no somos sensibles ante la inminente segunda venida
de Jesucristo. Y solo seremos sensibles a la segunda venida del Señor en la
medida que estemos cerca de Él cada día.

5. Peregrinos, “mas” ¿Qué tiene que ver el fin de los tiempos con la oración?
La primera epístola del apóstol Pedro trata sobre la vida del peregrino. Al
menos así lo han catalogado muchos comentaristas. Si estamos en Cristo, cada
uno de nosotros somos peregrinos, es decir, solo estamos de paso por esta
tierra y este mundo. No somos de este mundo, no pertenecemos aquí. Y en
nuestro caminar o peregrinaje encontramos sufrimiento, dolor, persecución.
Esto era lo que estaban pasando los creyentes a los cuales se dirige Pedro.
La única palabra que no hemos examinado es la palabra “mas”. Es una palabra
de contraste. Como cuando decimos: He comido mucho, pero, no estoy lleno. Y
esta palabra es importante también por lo que está diciendo en los versículos
anteriores:

Por tanto, puesto que Cristo ha padecido en la carne, armaos también

vosotros con el mismo propósito, pues quien ha padecido en la carne ha
terminado con el pecado, para vivir el tiempo que le queda en la carne, no ya
para las pasiones humanas, sino para la voluntad de Dios. Porque el tiempo ya
pasado os es suficiente para haber hecho lo que agrada a los gentiles, habiendo
andado en sensualidad, lujurias, borracheras, orgías, embriagueces y
abominables idolatrías. Y en todo esto, se sorprenden de que no corráis
con ellos en el mismo desenfreno de disolución, y os ultrajan; pero ellos darán
cuenta a aquel que está preparado para juzgar a los vivos y a los muertos.
Porque con este fin fue predicado el evangelio aun a los muertos, para que
aunque sean juzgados en la carne como hombres, vivan en el espíritu conforme
a la voluntad de Dios.
1 Pedro 4:1-6
Ante la persecución, que trae dolor y sufrimiento, ante la búsqueda de la santidad, que
también muchas veces traer persecución y sufrimiento, recuerda que el Señor
Jesucristo regresará por segunda vez. La vida del peregrino no es fácil, muchas veces es
un infierno, pero está bien, porque eso nos recuerda que no estamos en el cielo, nos
recuerda que Jesucristo vendrá pronto, que su venida está cerca, y esa preciosa verdad
nos hace vivir para la eternidad, gastando nuestras fuerzas y energías para orar, pues
la oración es la mejor y creo que la única forma de esperar a Jesucristo.

CONCLUSIÓN

 La vida del peregrino no es sencilla, pero Jesucristo regresará pronto.

 El peregrino debe estar consciente del inminente regreso de Jesucristo, para que, de
esa forma, lo espere con sobria y prudente oración.