observado en más de un siglo de la temperatura del sistema climático de la Tierra y los efectos de aquel aumento. Múltiples líneas de pruebas científicas demuestran que el sistema climático se está calentando 3. Disminución del rendimiento de los cultivos Existen comunidades rurales en delegaciones como Xochimilco y Milpa Alta, pero las tierras de cultivo que existen en el interior de la ciudad ya enfrentan escasez de agua, por lo que el cambio climático afectará a las tierras de propiedad común y a las comunidades que llevan a cabo actividades. La caída de la capa freática es fácilmente verificable en el hundimiento de varias áreas como el centro de la ciudad. 4. Más olas de calor Habrá ondas de calor más frecuentes. Esto podría provocar tasas de mortalidad más altas, sobre todo entre personas de la tercera edad, bebés y personas de bajos recursos. Este aumento afecta particularmente a las zonas más desprotegidas de la urbe. 5. Más mosquitos Muchos científicos esperan que las temperaturas mínimas en la ciudad sean más altas durante todo el año, lo que implica que habrá cada vez menos días fríos y olas de calor cada vez más intensas. Los mosquitos y otras plagas son más difíciles de combatir. Esto podría afectar el sistema de salud de la CDMX. 6. Mala calidad del aire Los días de calor intenso con pocos vientos pueden incrementar el nivel de ozono en la atmósfera y el total de partículas en suspensión, lo que también provoca enfermedades respiratorias en sectores vulnerables. Estas condiciones también dañan la vegetación y causan estrés en los ecosistemas, alterando la fauna y la flora. 7. Afectaciones a la salud Algo evidente en alcaldías como Iztapalapa, también hay otros efectos directos, como un aumento en los accidentes cerebrovasculares, lesiones y muertes en general. Algunas enfermedades, cuya presencia podría convertirse en un problema para el sistema de salud, son la diarrea, asma y neumonía, episodios cardiovasculares e incluso un aumento en la incidencia de enfermedades mentales. Aumento de los gases de efecto invernadero. ... Quema de combustibles fósiles. ... Deforestación de selvas y bosques. ... Excesivo uso de fertilizantes. ... Alta producción de residuos. 1. Potenciar las energías renovables. Una de las formas de reducir las emisiones procedentes de la quema de combustibles fósiles (carbón, petróleo y gas natural) que liberan CO2 es la utilización de fuentes de energía limpias como la solar, la eólica, la mareomotriz (que utiliza la fuerza de las olas), la térmica, etc. 2. Disminuir el uso del automóvil. Hay muchas ocasiones en las que podemos desplazarnos sin utilizar el coche. Caminar, ir en bici, o utilizar el transporte públicoson alternativas que ayudan a eliminar el uso de combustibles fósiles y reducir el calentamiento global. En los casos en los que el coche sea totalmente necesario, una solución es compartir coche con compañeros, amigos o familiares. Los nuevos vehículos eléctricos, que no utilizan motor de combustión ni necesitan gasolina, se presentan como la alternativa más respetuosa con el medio ambiente. 3. Plantar árboles. Potenciar la reforestación a nivel mundial de zonas arrasadas por la tala es otra solución. Los árboles absorben CO2 y producen oxígeno. A lo largo de un año, una hectárea de árboles elimina la misma cantidad de dióxido de carbono que producen cuatro familias en ese mismo tiempo. Plantar árboles en las ciudades y crear más parques en entornos urbanos ayuda a disminuir el efecto invernadero. 4. Reciclar. Un pequeño porcentaje del dióxido de carbono que existe actualmente proviene de la descomposición de los diversos productos orgánicos y desperdicios que se arrojan en los vertederos 1. Transporte. Reducir el individual y promocionar los medios colectivos. 2. Energía doméstica. Disminuir su gasto con electrodomésticos de etiqueta energética o apagando los aparatos completamente (y no en modo Sandy). 3. Residuos. Favorecer la separación de basuras y el reciclaje. 4. Materiales. Reutilizarlos siempre que se pueda (papel, juguetes, herramientas, muebles…) y evitar usar bolsas, cajas y embalajes. 5. Agua. Reducir su consumo colocando, por ejemplo, botellas en las cisternas. 6. Riego. Minimizar el riego de jardines y promocionar el sistema por goteo. 7. Urbanizar. Sólo donde se sepa que habrá agua suficiente a largo plazo. En muchas ocasiones se otorgan licencias donde no hay agua. 8. Naturaleza. Respetar los espacios protegidos y minimizar el impacto en zonas naturales. 9. Casas. Construirlas con buenos materiales aislantes térmicos para que la inversión en calefacción y el aire acondicionado sea menor 10. Rendijas. Mejorar los aislantes en ventanas y puertas porque entre un 5% y un 10% del calor del hogar se escapa por ellas. 11. Paneles solares fotovoltaicos conectados a la red eléctrica. 12. Energías alternativas. Darles más valor y estar dispuestos a financiarlas. Si todos las apoyamos, serán rentables, aunque sean más caras. 13. Impuestos. Permitir que se asignen para la conservación de recursos.