Sei sulla pagina 1di 25

DEL DEPÓSITO Y EL SECUESTRO

DEL DEPÓSITO EN GENERAL Y DE SUS DIVERSAS ESPECIES

Art. 838.- (Noción). I. El depósito es el contrato por el cual el depositario recibe


una cosa ajena, con la obligación de guardarla, custodiarla y devolverla al
depositante.
II. En cuanto al depósito irregular, se estará a lo dispuesto por el artículo 862.

El Deposito es un contrato por el que una persona llamada depositante entrega


bienes ya sean muebles o inmuebles a otra llamada depositario, con el objeto de
que las guarde y custodie por el plazo convenido en el contrato, vencido el
mismo, el depositario deberá devolver los bienes recibidos en las mismas
condiciones que cuando las recibió.

Al respecto, encontramos en la Doctrina nacional las definiciones acerca del


contrato de depósito que sustentan la definición proporcionada.

“El depósito es un contrato principal, real, unilateral o bilateral,


gratuito u oneroso, según los casos, por virtud del cual una persona
entrega a otra una cosa para que la guarde y custodie, con la
obligación de devolverla a la primera, cuando la reclame.” 1 Carlos
Morales Guillen, Codigo Civil Concordado y Anotado con Arreglo a la Edicion Oficial,
Tomo I y II, Pag. 922

“Por su naturaleza jurídica es bilateral o multilateral, consensual,


sinalagmático a título oneroso y supeditado al requisito de forma,
mediante el que una persona llamada depositante, entrega a otra llama
depositario bienes inmuebles o muebles, para que los tenga bajo su
guarda y custodia, por el plazo que se estime en el titulo constitutivo,
vencido este, el depositario está en la obligación de devolver los
bienes que recibió en las mismas condiciones de cuando se
perfecciono, con responsabilidad para el depositario en caso de
pérdida o deterioro.” 2 Dr. Jorge Guzmán Santiesteban, Derecho Civil Tomo II De
las Obligaciones y de los Contratos en General, Pag, 280

Las motivaciones y características del contrato de depósito son: a) La tradición


del bien, b) la obligación de guardarla y custodiarla, y c) la de restituir el bien
en el plazo estipulado o cuando así lo disponga la autoridad competente.
Art. 839.- (Cosas susceptibles de depósito). Pueden ser objeto de depósito las
cosas muebles o inmuebles.

Antiguamente, el contrato de depósito versaba sobre cosas muebles solamente.


En la actualidad los códigos de Argentina, México y nuestro código civil
incluyen a los inmuebles como objeto del depósito.

Art. 840.- (Retribución). I. Se presume que el depósito es gratuito.


II. Sin embargo el depositario tiene derecho a exigir retribución por el depósito,
cuando así se ha convenido o cuando ello resulte de una actividad profesional
o de las circunstancias.

Según el Art. 840 se presume que el depósito es gratuito, en el derecho romano


el deposito fue esencialmente gratuito, al respecto, en su parte pertinente la
Jurisprudencia hace referencia a la naturaleza gratuita del contrato de deposito.

Jurisprudencia
1.- "Por definición del art. 1277 (840) del c.c. este es un contrato
gratuito por su naturaleza y la ley no reconoce pago de intereses,
excepto en los casos previstos por el art. 344 del c. mtl. (870, c. com.)
cuando el depositario mercantil hubiere hecho uso de los dineros o
efectos depositados".3(G.J. Nº 1215, p. 77). Carlos Morales Guillen, Codigo
Civil Concordado y Anotado con Arreglo a la Edicion Oficial, Tomo I y II, Pag. 926

Sin embargo, el mismo código no excluye la posibilidad de que el depósito,


adquiera título oneroso. Compartimos el parecer del Dr. Jorge Guzmán
Santiesteban cuando señala que resulta ilógico entender la gratuidad del
contrato de depósito por cuanto el depositario adquiere la obligación de
conservar el bien bajo su guardia y custodia y además y de devolverlo, vencido
el plazo, en las mismas condiciones que cuando las recibió. En la actualidad,
resulta difícil entender que un tercero acepte dichas responsabilidades de
manera gratuita.

“…tal presunción resulta ilógica, habida cuenta que el depositario


adquiere una responsabilidad, para comportarse como un buen padre
de familia, precautelando, cuidando y custodiando el bien para su
posterior devolución…”4 Dr. Jorge Guzmán Santiesteban, Derecho Civil Tomo II
De las Obligaciones y de los Contratos en General, Pag, 280

Art. 841.- (Perfeccionamiento del contrato). El contrato de depósito se


perfecciona por la entrega de la cosa al depositario o, si éste ya la tiene en su
poder, por cualquier otro título si el depositante consiente en dejarle la cosa.

El perfeccionamiento del contrato tiene lugar en el momento en que el


depositante entrega el bien al depositario y este lo recibe, así lo señala la
jurisprudencia citada por el Dr. Carlos Morales Guillen al respecto del momento
en el que se perfecciona el contrato, es decir, el cumplimiento de los requisitos
para que un acto jurídico, una ley o un contrato adquiera plena vigencia y fuerza
jurídica

“El momento en que las partes suscriben el contrato y se opera la


tradición de los bienes del depositante al depositario, queda
perfeccionado legalmente el contrato.” 5 Dr. Jorge Guzmán Santiesteban,
Derecho Civil Tomo II De las Obligaciones y de los Contratos en General, Pag, 281

Jurisprudencia
"El hecho del depósito está probado con el recibo debidamente
reconocido que cursa en obrados, comprobante que reune las
condiciones de prueba escrita exigida por el art. 1283 (sin
equivalente) del c.c., para probar el depósito voluntario". (G.J. N
1358, p. 46). 6 Carlos Morales Guillen, Codigo Civil Concordado y Anotado con
Arreglo a la Edicion Oficial, Tomo I y II, Pag. 926

DEL DEPOSITO VOLUNTARIO


DISPOSICIONES GENERALES
Art. 842.- (Noción). El depósito voluntario es aquel en que la elección del
depositario está librada a la sola voluntad del depositante.

A diferencia del depósito necesario, que es el que se hace en cumplimiento de


una obligación legal o a causa de un acontecimiento imprevisto o accidente, el
deposito voluntario, es aquel en el que el depositante tiene la facultada de elegir
libremente, atendiendo aspectos relacionados con la idoneidad, personalidad,
honestidad del depositario, al depositario. Al respecto el Dr. Carlos Morales
Guillen, menciona:
“El artículo, pone de manifiesto el papel que juega la voluntad del
depositante, en la elección del depositario. Manifestación de voluntad
que ha de ser enteramente libre, ya que en ello reposa la diferencia
del depósito voluntario del necesario.” 7 Carlos Morales Guillen, Codigo Civil
Concordado y Anotado con Arreglo a la Edicion Oficial, Tomo I y II, Pag. 927

Si asumimos que la voluntad es la capacidad para decidir libremente lo que


queremos hacer y lo que no, entonces estamos en condiciones de distinguir
con propiedad la diferencia entre el deposito voluntario y el depósito
necesario en lo referente a la elección libre y voluntaria del depositario,
atendiendo la personalidad, honestidad y solvencia del depositario.

La doctrina y la legislación positiva determinan que el deposito es


voluntario, cuando la elección del depositario esta libradamente
únicamente a la voluntad del depositante, quien analizara todo lo
concerniente a la personalidad, honestidad y solvencia del
depositario. 2 Dr. Jorge Guzmán Santiesteban, Derecho Civil Tomo II De las
Obligaciones y de los Contratos en General, Pag, 280

Art. 843.- (Capacidad). I. El depósito voluntario sólo se concierta entre


personas capaces de contratar.
II. Sin embargo, la persona capaz, depositaria de los bienes de un incapaz,
contrae todas las obligaciones de este contrato.
III. El depósito hecho en una persona incapaz, sólo da acción para reivindicar
la cosa depositada existente en poder del depositario o el reembolso del valor
que ha redundado en provecho de éste, sin perjuicio de lo que corresponda en
caso de dolo.

El articulo 843 referente a la capacidad tanto del depositante como del


depositario se rige de acuerdo al principio general expresado en el artículo
483 de nuestro código civil, en sentido de que puede contratar toda persona
capaz. Sin embargo, señala también excepciones a esta regla en sus parágrafos
II y III.
El depositario capaz de una persona (depositante) incapaz contrae todas las
obligaciones del contrato.
En palabras del Dr. Morales, al no existir la manifestación de voluntad de la
persona incapaz, como requisito esencial para los contratos, en arreglo a los
principios generales, el contrato debía ser declarado nulo.

“… la manifestación de la voluntad que no ha podido existir en el


incapaz. Se cree, que hubiera sido mas conforme con los principios,
declarar nulo el contrato…” 8 Carlos Morales Guillen, Codigo Civil Concordado
y Anotado con Arreglo a la Edicion Oficial, Tomo I y II, Pag. 928

En el parágrafo III se señala que el deposito hecho a una persona incapaz solo
da acción para reivindicar la cosa depositada en poder del depositario o el
reembolso del valor que ha redundado en provecho de este. Al respecto es
importante señalar que una persona incapaz o un interdicto, podría realizar un
acto inconsciente que determinaría la imposibilidad de reivindicar y mucho
menos de conseguir el rembolso de lo que podía haberse aprovechado.

OBLIGACIONES DEL DEPOSITARIO


DILIGENCIA EN LA CUSTODIA
Art. 844.- (Diligencia en la custodia). En el depósito gratuito el depositario debe
emplear en custodia de la cosa depositada la diligencia que pone en la guarda
de las propias.

En el depósito gratuito, el depositante no tendría que esperar del depositario,


más y mejores cuidados que los que acostumbra a las propias. Si el depositante,
a pesar de ello, le entrega su confianza, tiene que conformarse con la diligencia
habitual de su depositario.

“Si el depositario tiene una responsabiliad en la diligencia del cuidado


de los bienes depositados, en nuestro criterio merece una retribución
a cambio, salvo que voluntariamente lka haya renunciado.” 9 Dr. Jorge
Guzmán Santiesteban, Derecho Civil Tomo II De las Obligaciones y de los Contratos en
General, Pag, 283

Art. 845.- (Extensión de la diligencia). El depositario empleará la diligencia de


un buen padre de familia:
1) Si se ha ofrecido espontáneamente para recibir el depósito.
2) Si el depósito se ha hecho también en su interés, sea por el uso del depósito,
sea por la retribución u otro motivo.
3) Si se ha convenido expresamente en que responderá por toda clase de culpa.

Compartimos el criterio del Dr. Jorge Guzmán Santiesteban cuando señala que
el depositario adquiere responsabilidad en el cuidado del bien y que esta
responsabilidad debería ser retribuida, esto obligaría, en alguna medida, cierto
cuidado en las diligencias de resguardo del bien depositado.

Art. 846.- (Depósito en cofre cerrado o paquete sellado). El depositario no debe


registrar las cosas depositadas, si lo han sido en cofre cerrado o paquete
sellado, salva autorización del depositante. Se presume culpa del depositario
en caso de fractura o forzamiento.

Si el depositante quiere mantener en reserva el contenido de las cosas


depositadas, debe de entregarlas al depositario en paquetes o sobres cerrados y
debidamente lacrados, el depositario debe respetar la voluntad del depositante
y no realizar actos que impliquen el registro del contendido del depósito,
pudiendo incurrir incluso en el delito de abuso de confianza

“…el depositario, debe respetar esa voluntad del deponente y


abstenerse de fisgonear. Si abriese la caja cerrada o el paquete
lacrado, cometerá, en rigor, un acto doloso e ilícito, de cuyas
consecuencias sería responsable. Puede calificarse el hecho inclusive
como delito (art. 346 del p.c.), porque el caso presentaría un
manifiesto abuso de confianza….” 10 Carlos Morales Guillen, Codigo Civil
Concordado y Anotado con Arreglo a la Edicion Oficial, Tomo I y II, Pag. 930

Sin embargo, la doctrina considera que el depositario podría hacerlo en


circunstancias extraordinarias, en el propio interés del depositante,
comunicando el hecho y su contenido a terceros. Si está autorizado por el
depositante.

Es importante destacar el criterio del Dr. Jorge Guzmán Santiesteban cuando


hace notar que el depositario con el fin de no incurrir en responsabilidad incluso
penal (caso de tenencia de sustancias controladas), debería tener conocimiento
de las cosas que se obliga a guardar y custodiar.
“…será poco menos que imposible que el depositario no tenga
conocimiento de las cosas que se le entregan, las que su simple
tenencia pueden causarle responsabilidad incluso delictiva…” 11 Dr.
Jorge Guzmán Santiesteban, Derecho Civil Tomo II De las Obligaciones y de los Contratos
en General, Pag, 284

Art. 847.- (Uso del depósito; modalidad de la custodia). I. El depositario no


puede servirse de la cosa depositada ni darla en depósito a otro sin el permiso
expreso o presunto del depositante, bajo sanción de resarcir el daño.
II. Puede el depositario, en circunstancias de urgencia, cumplir la custodia de
la cosa en forma diferente de la convenida, dando aviso inmediato al
depositante.

El depositario, está en la obligación de no utilizar o servirse de la cosa o


depositada. Al hacerlo, el depositario incurriría en apoderamiento ilegítimo.
Salvo autorización expresa o presunta del depositante, que se entiende se refiere
a cosas que no se deterioran con el uso bajo conminatoria de resarcir los daños
que pudiran causarse en el bien producto del uso no autorizado del mismo.

“Se determina que el depositario carece de facultad o derecho alguno


para servirse de la cosa depositada, ni darla en depósito a otra
persona, imponiéndole responsabilidad, además de resarcir el
daño…) 12 Jorge Guzmán Santiesteban, Derecho Civil Tomo II De las Obligaciones y
de los Contratos en General, Pag, 284

EL articulo 847 en su parágrafo II otorga al depositario la facultad de cumplir


la custodia en forma diversa a la estipulada en el contrato en circunstancias de
urgencia y en beneficio del depositante, bajo la condición de dar aviso de forma
inmediata, lo que implica que el depositario puede darle uso a la cosa depositada
con el fin de evitar su deterioro o perdida.

El uso permitido al depositario debe ser secundario y no alterar el fin


principal de la custodia, v. gr., si se deja en depósito un caballo de
silla, para guardarlo durante la ausencia del dueño y se permite al
depositario montarlo para que el caballo no deje de hacer ejercicio.
Esto beneficia al depositante y no al depositario y no altera en
absoluto el propósito principal de custodia. 13 Carlos Morales Guillen,
Codigo Civil Concordado y Anotado con Arreglo a la Edicion Oficial, Tomo I y II, Pag. 930
Art. 848.- (Devolución del depósito; frutos, intereses, daños). El depositario
está obligado a devolver la misma cosa recibida, en el estado en que se halla
en el momento de la restitución, con más las accesiones y frutos que hubiesen
percibido; asimismo a pagar los intereses por el dinero depositado, desde que
incurrió en mora para su restitución, todo independientemente del
resarcimiento del daño, si ha lugar.

La devolución del bien depositado es uno de los rasgos característicos del


contrato de depósito. El depositario se obliga a custodiar el bien para luego de
vencido el plazo estipulado en el contrato, proceder a la restitución del bien en
el estado en que se encuentre el momento de la restitución, esto quiere decir que
la restitución del bien se deben tomar en cuenta también los frutos y accesiones,
considerando que el propietario del bien en depósito es el depositante, en
consecuencia los bienes y accesiones que haya podido tener el bien le
pertenecen al depositante.

“Al depositario corresponde hacerlo en el estado en que la cosa se


encuentre. La restitución comprende los frutos y accesiones, porque
el depositante es el dueño de la cosa y los frutos y accesiones de ésta,
le pertenecen como la cosa misma…” 14 Carlos Morales Guillen, Codigo Civil
Concordado y Anotado con Arreglo a la Edicion Oficial, Tomo I y II, Pag. 932

Respecto al dinero, no corresponde que el depositario pague intereses, salvo que


el depositario se haya constituido en mora respecto al plazo estipulado en el
contrato para la restitución del dinero, asi como también respecto de las
cantidades que haya empleado para usos propios, desde el día en que lo hizo.

“…si se trata de dinero, de acuerdo con el código se le obligaría a


pagar interés que no podría ser otro que el legal…” 15 Jorge Guzmán
Santiesteban, Derecho Civil Tomo II De las Obligaciones y de los Contratos en General,
Pag, 285

Art. 849.- (Deterioros, pérdida, aviso). I. No corren a cargo del depositario los
deterioros o pérdida de la cosa que hayan sobrevenido sin culpa.
II. Si el depositario por causa que no le es imputable se ve privado de la cosa,
queda liberado de restituirla; mas si hubiera recibido un precio o
compensación u otra cosa en su lugar, debe entregar lo recibido al depositante,
quien se sustituye en los derechos del depositario.
III. El depositario debe dar aviso inmediato al depositante acerca del hecho
que lo ha privado de la tenencia, bajo sanción de resarcimiento del daño en
caso contrario.

El depositario no es responsable de los deterioros o de la perdida que pudiera


sufrir el bien depositado si la pérdida o deterioro se hubiera producido sin culpa,
o por causas motivadas por fuerza mayor, por supuesto este aspecto debe ser
demostrado por el depositario para exonerarse de responsabilidad. Si el bien
hubiera sufrido perdida a consecuencia de causas de fuerza mayor por ejemplo
cuando el bien hubiera sido expropiado, habiendo recibido a cambio un precio
o compensación, el depositario debe entregar este precio o compensación al
depositante, con la única obligación de dar aviso inmediato al depositante.

“…La obligación de dar aviso al depositante, en los casos previstos


por el art., es elemental. Si no lo hace, carga con la responsabilidad
de resarcir los perjuicios que su negligencia haya ocasionado al
depositante…” 16 Carlos Morales Guillen, Codigo Civil Concordado y Anotado con
Arreglo a la Edicion Oficial, Tomo I y II, Pag. 933

Jurisprudencia
"Quienes deben restituir o entregar las cosas que se les ha confiado,
no están obligados a hacerlo cuando ellas se han perdido por causa
fortuita o de fuerza mayor, esto es, sin culpa".(G.J. Nº 1229, p. 9). 17
Carlos Morales Guillen, Codigo Civil Concordado y Anotado con Arreglo a la Edicion
Oficial, Tomo I y II, Pag. 933

Art. 850.- (Restitución y retiro de la cosa). I. El depositario debe restituir la


cosa al depositante, luego que éste la reclame, aun cuando el contrato fije un
término, a menos que ese término se hubiese convenido en interés del
depositario, o que éste cuente con una orden de retención o una oposición
judicial a la entrega; o bien si, tratándose de arma, crea prudentemente que el
depositante pueda ir a cometer alguna falta o delito.
II. El depositario puede pedir en cualquier tiempo que el depositante retire la
cosa depositada, a menos que se hubiese convenido un término en interés del
depositante; pero aun en este caso, el juez puede conceder a éste un plazo
prudencial para recibir la cosa.
Tanto el depositante como el depositario pueden pedir la devolución del
depósito o el retiro del mismo, en cualquier momento, aun cuando el plazo para
la restitución del depósito estipulado en el contrato no haya no haya concluido;
a menos que el termino se hubiese convenido en favor del depositario o que se
tenga una oposición u orden judicial a la entrega o cuando prudentemente
juzgue el depositario que el depositante ha de usarla en la comisión de un delito,
lo cual a nuestro juicio es absolutamente improbable

Jurisprudencia
1.- "El depositario está obligado a restituir la misma cosa depositada".
(G.J. Nº 328, p. 3108).
2.- "Los mandatos emanados de la ley o del juez, siendo obligatorios
constituyen fuerza mayor... la entrega del depósito fue efectuada
mucho antes de ser requerido en virtud de orden del juez (lo que)
constituye fuerza mayor".
(G.J. Nº 774, p. 4).
3.- "El depósito voluntario, que implica un acto de confianza, debe
ser devuelto a petición del depositante, sin necesidad de término ni de
incurrir en mora, según el art. 1302 (850) del c.c., no siendo aplicable
al caso el art. 1258 (899) 18 Carlos Morales Guillen, Codigo Civil Concordado y
Anotado con Arreglo a la Edicion Oficial, Tomo I y II, Pag. 933

Art. 851.- (A quién se restituye el depósito). I. El depositario debe restituir el


depósito al propio depositario, o a aquel a nombre de quien se hizo el depósito
o a quien haya sido indicado para recibirlo, no pudiendo exigir para ello que
el depositante pruebe ser el propietario de la cosa depositada.
II. Sin embargo, si descubre que la cosa dada en depósito ha sido sustraída y
sabe quién es el dueño, debe denunciar el depósito a éste, pero queda liberado
si restituye la cosa al depositante transcurridos quince días de dicha denuncia
sin que se le haya notificado oposición.

El deposito debe restituirse al depositante, o a su apoderado, quien en su caso


debe presentar su mandato legal, o a la persona que en el contrato se estableció
para exigir la devolución. Así mismo, la doctrina menciona que también los
herederos del depositante pueden exigir la restitución del bien depositado en
caso del fallecimiento de este. Se recomienda la elaboración de un acta que
testimonie que la entrega se produjo a un tercero en lugar del depositante,
señalando todos los pormenores que concurrieron para dar lugar a la restitución
del depósito a un tercero.

En caso de que el depositario tuviera conocimiento de que el bien depositado


ha sido sustraído, y además conoce al dueño, tiene el deber de dar aviso al
mismo, sin embargo queda liberado si transcurridos quince días desde que fue
notificado el dueño, no manifieste su oposición a la restitución del bien al
depositante.

“La restitución debe hacerse a quien efectuó el depósito. Esa es la


regla. Si el depositante hace el depósito a su propio nombre, la
restitución debe serle hecha personalmente. Si se hizo a nombre de
otra persona, ésta es quien debe recibir el depósito, sin que en ningún
caso, el depositario pueda competir al depositante o al receptor de la
cosa, a que demuestre su carácter de propietario de la cosa
depositada.” 19 Carlos Morales Guillen, Codigo Civil Concordado y Anotado con
Arreglo a la Edicion Oficial, Tomo I y II, Pag. 936

Jurisprudencia
1.- "Según este art. el depósito no debe restituirse sino al mismo que
lo confió o a aquél a cuyo nombre se hizo, o al que haya sido indicado
para recibirlo. El depósito se hizo por el juzgado... y a su orden y no
por (el demandante) ni a nombre suyo ni fue designado para recogerlo
(por lo que carece, de personería para reclamar la cosa)". (G.J. Nº
478, p. 1008). 20 Carlos Morales Guillen, Codigo Civil Concordado y Anotado con
Arreglo a la Edicion Oficial, Tomo I y II, Pag. 936

Art. 852.- (Muerte, incapacidad o ausencia del depositante; depósito por el


administrador). I. En caso de muerte del depositante, el depósito debe ser
devuelto a su heredero o legatario.
II. En el de incapacidad o ausencia del depositante la devolución debe ser
hecha a quien tenga la administración de sus bienes.
III. El depósito hecho por el administrador será devuelto a quien el
administrador representaba cuando hizo el depósito, si ha acabado ya su
administración o gestión.
En caso de fallecimiento del depositante, la restitución debe hacerse efectiva a
los herederos del depositante legalmente declarados. Para el supuesto, de
legatarios debe demostrarse la calidad de estos en la sucesión testamentaria.

El parágrafo II del articulo 852 preceptúa que en el caso de incapacidad o


ausencia del depositante, la restitución debe ser hecha a quien se haya confiado
la administración de sus bienes. Cabe aclarar que la ausencia e incapacidad debe
ser declarada por autoridad competente.

“Para el supuesto de ausencia, el código se refiere a la declaratoria de


ausencia legalmente determinada por autoridad competente” …[ ]
“Para la devolución de un deposito efectuado por representación,
circunstancia que deberá constar en el contrato, el deposito puede
devuelto a la persona que el administrador representaba, en el
momento del perfeccionamiento del contrato. 21 Jorge Guzmán
Santiesteban, Derecho Civil Tomo II De las Obligaciones y de los Contratos en General,
Pag, 288

Jurisprudencia
"La finada fue la que depositó dichos bienes muebles y su devolución debe
hacerse al legítimo representante de la persona que hizo el depósito en
observancia del art. 1297 (852) del c.c.".
(G.J. Nº 820, p. 50). 22 Carlos Morales Guillen, Codigo Civil Concordado y Anotado con Arreglo
a la Edicion Oficial, Tomo I y II, Pag. 938

Art. 853.- (Pluralidad de depositantes o depositario). I. En el caso de ser varios


los depositantes o varios los herederos del depositante y ser la cosa indivisible
cualquiera de los primeros puede pedir la devolución del depósito, o, dando
caución, cualquier de los segundos; en caso diverso decidirá el juez.
II. Si son varios los depositarios el depositante podrá pedir la devolución a
quien detenta la cosa, y éste dará aviso a los otros depositarios.

Si en el contrato de deposito son varios los depositantes y el bien depositado es


indivisible, la norma prevé que cualquiera de los depositantes puede pedir la
devolución o restitución del bien. Por su parte, si son varios los herederos del
depositante fallecido y el bien es indivisible, cualquiera de los herederos puede
pedir la devolución otorgando caución de manera previa.

En caso de que sean varios los depositarios, el depositante podrá pedir la


restitución al depositario que tenga en su poder el bien depositado, este deberá
de dar aviso a los otros depositarios. En caso diverso el código defiere la
solución a criterio del juez, previo proceso.

“…empero si el o los bienes no son indivisibles, el código libra la


devolución al criterio del juez, desde luego previo proceso, voluntario
o contencioso…” 23 Jorge Guzmán Santiesteban, Derecho Civil Tomo II De las
Obligaciones y de los Contratos en General, Pag, 288

Art. 854.- (Lugar de la restitución y gastos). I. Salvo convenio contrario,


la restitución debe hacerse en el mismo lugar del depósito.
II. Los gastos de la restitución corren a cargo del depositante.

El código reconoce a los contratantes la facultad de designar el lugar de la


restitución de la cosa, el mismo que deberá incluirse de manera expresa en el
contrato. Con carácter supletorio, a falta de convenio expreso en el contrato, la
devolución o restitución del bien debe hacerse en el lugar donde se produjo el
depósito o en el domicilio del depositario

El parágrafo II del articulo 854 menciona que corresponde al depositante


satisfacer los gastos de la restitución que pueden implicar, inclusive, gastos de
traslado o transporte.

“El lugar será precisamente el inmueble donde se encuentren los


bienes depositados, o el domicilio del depositario, y los gastos de
traslado deberán ser pagados por el depositante, salvo acuerdo
diferente que conste en el contrato.” 24 Jorge Guzmán Santiesteban, Derecho
Civil Tomo II De las Obligaciones y de los Contratos en General, Pag, 289

Art. 855.- (Enajenación por el heredero del depositario). El heredero del


depositario que haya vendido de buena fe la cosa depositada, sólo está obligado
a restituir el precio recibido o a ceder su acción contra el comprador si no ha
recibido el precio.

Los herederos que sin conocimiento hayan vendido el bien depositado solo
deberán restituir al depositario el precio recibido, probando que ignoraban que
los bienes estuviesen en depósito con el fin de demostrar su buena fe,
confundiendo los mismos con el patrimonio del causante (depositario). Aun así,
la doctrina señala que no se liberan del daño ocasionado al depositante por los
daños causados, pues bien podría haberse perfeccionado la venta por un precio
inferior al real.
“… dice con más propiedad que el heredero haya vendido la cosa ignorando
que ella estaba en depósito, condición necesaria para apreciar la buena fe.” 25
Carlos Morales Guillen, Codigo Civil Concordado y Anotado con Arreglo a la Edicion Oficial, Tomo I y
II, Pag. 939

OBLIGACIONES DEL DEPOSITANTE

Art. 856.- (Reembolso, indemnización y pago al depositario). El depositante


está obligado a reembolsar al depositario los gastos hechos en la conservación
del depósito, a indemnizarlo por las pérdidas que éste ha ocasionado, y a
pagarle la retribución convenida o resultante.

El depositante tiene la obligación de reembolsar los gastos necesarios


destinados a la conservación del bien en deposito y, en su caso, a la
indemnización de posibles pérdidas que el bien pudiera ocasionar. Además de
cumplir con la retribución que se haya pactado en el contrato como pago por el
depósito. Así lo corrobora la jurisprudencia (G.J. Nº 1622, p. 29).

Jurisprudencia
"El art. 1305 (856) del c.c., obliga al depositante a reembolsar al
depositario los gastos que éste haya hecho para la conservación de la
cosa depositada y a indemnizar todas las pérdidas que pueda haberle
ocasionado el depósito".
(G.J. Nº 1622, p. 29).

La obligación del depositante a reembolsar al depositario por todos


los gastos y pérdidas que le ocasione la conservación y la restitución
del depósito, supone los gastos necesarios para la conservación del
(Planiol y Ripert). 26 Carlos Morales Guillen, Codigo Civil Concordado y Anotado
con Arreglo a la Edicion Oficial, Tomo I y II, Pag. 941

Art. 857.- (Derecho de retención del depositario y acción del depositante). I. El


depositario tiene derecho a retener el depósito, hasta que se le pague
íntegramente lo que se deba por razón de él.
II. Sin embargo, el depositante podrá pedir por la vía judicial la devolución
mediante garantía idónea para el pago respectivo, si no estuviesen del todo
justificados los adeudos por ese concepto.
Como garantía de pago de los gastos realizados para la conservación del bien
depositado, y de la retribución, si el depósito es a título oneroso, el depositario
tiene la facultad de retener la cosa depositada hasta que se realice dicho pago
por parte del depositante. Si los gastos deben ser previamente determinados, el
depositante, otorgando garantía suficiente, puede retirar la cosa con la
autorización judicial respectiva.

“La facultad que tiene el depositante de pedir la devolución del


depósito, mediante garantía idónea, debe entenderse, como una fianza
de resultas, hasta establecerse judicialmente y con la correspondiente
prueba los gastos efectuados por el depositario para el cumplimiento
de su obligación…”27 Jorge Guzmán Santiesteban, Derecho Civil Tomo II De las
Obligaciones y de los Contratos en General, Pag, 289

Jurisprudencia
"El depositario puede retener el depósito hasta que se le pague íntegramente lo
que se le debe por razón de él".
(G.J. Nº 1622, p. 29). Carlos Morales Guillen, Codigo Civil Concordado y Anotado con Arreglo
a la Edicion Oficial, Tomo I y II, Pag. 943

DEL DEPOSITO NECESARIO

Art. 858.- (Noción). El depósito necesario es:


1) El que se hace en cumplimiento de una obligación legal.
2) El que se hace a causa de un accidente o por cualquier otro acontecimiento
imprevisto o de fuerza mayor.

Para parte de la doctrina, el depósito necesario no es un contrato, es un acto.


Asi como el deposito Judicial o Secuestro, no tiene naturaleza contractual, el
Deposito Necesario tampoco presenta las características propias de un contrato,
ya que la voluntad de una de las partes no siempre es libre sino mas bien forzada.

En el depósito voluntario, el consentimiento se otorga con absoluta libertad no


sometida a presión para someter la voluntad de una de las partes. El depósito
necesario, es consecuencia de una obligación legal, que es inexcusable y
forzosa, o de una situación extrema de fuerza mayor como la que surge a causa
de un accidente o acontecimiento imprevisto.
“Es necesario el deposito cuando se efectúa en cumplimiento de una obligación
legal, y además cuando se realiza con ocasión de una calamidad, como incendio,
ruina, saqueo, motín u otra similar,” 28 Jorge Guzmán Santiesteban, Derecho Civil Tomo II
De las Obligaciones y de los Contratos en General, Pag, 291

Art. 859.- (Régimen y prueba del depósito necesario). I. En el caso 1 del artículo
precedente, el depósito se rige por las reglas de la ley respectiva y, en su defecto,
por las del depósito voluntario.
II. En el caso 2 se aplican igualmente las del depósito voluntario, admitiéndose
todo medio de prueba.

En cuanto a los medios de prueba, en el caso 1, es decir el que tiene lugar en


cumplimiento de una Obligación Legal, se rige por la ley que lo establezca,
supletoriamente por las disposiciones del depósito voluntario.

En el caso No. 2, es decir, el que tiene su causa en un accidente o cualquier otro


acontecimiento imprevisto o de fuerza mayor, también se rigen las
disposiciones del depósito voluntario.

“Se admiten todos los medios de prueba que admite el Codigo


Procesal Civil.” 29 Jorge Guzmán Santiesteban, Derecho Civil Tomo II De las
Obligaciones y de los Contratos en General, Pag, 289

Art. 860.- (Obligaciones de recibir el depósito necesario). El depósito


necesario ocasionado por accidente u otro acontecimiento imprevisto debe ser
admitido por toda persona, a menos que tenga impedimento físico u otra
justificación atendible, sin perjuicio de que aun en este caso deba cumplir con
los primeros cuidados sobre la cosa depositada o, siendo imposible,
consignarla ante un juez.

Toda persona está obligada por la Ley, a en su caso, constituirse en depositaria


de los bienes de las personas afectadas, por algún accidente u otra causa
imprevista o de fuerza mayor, sin que exista la posibilidad de renunciar a esta
obligación, salvo que exista algún impedimento físico; aun así, debe cumplir
con los primeros de esos bienes hasta que una decisión judicial determine otro
depositario.

“…la ley obliga a toda persona estante o habitante en el país, a recibir


en deposito los bienes de las personas afectadas, sin que pueda existir
renunciamiento a esa obligación, excepto en los casos de
impedimento físico…”30 Jorge Guzmán Santiesteban, Derecho Civil Tomo II De las
Obligaciones y de los Contratos en General, Pag, 292

CESACION DEL DEPÓSITO

Art. 861.- (Casos en que cesa el depósito). El depósito cesa:


1) Por restitución de la cosa depositada.
2) Por pérdida de la cosa, sin culpa del depositario.
3) Por enajenación de la cosa por parte del depositante.
4) Por resultar que la cosa depositada es propia del depositario.
5) Por remoción o muerte del depositario.

El contrato de depósito cesa, 1) por la restitución del bien; es decir, cuando el


depositario devuelve el bien depositado 2) Si el bien llegase a perecer (perdida)
sin culpa del depositario, 3) Si el depositante dispone del bien por enajenación,
es decir lo vende; 4) Por una confusión por la que el bien depositado resulta ser
de propiedad del depositario, algo improbable pero posible 5) Por remoción o
muerte del depositario.

Es importante destacar la opinión del Dr. Jorge Guzmán Santiesteban, cuando


enuncia otros casos por los que cesa el depósito, a) por renuncia del depositario,
b) por muerte del depositario y por la determinación que adopte el depositante
para poner fin al contrato incluso antes del vencimiento del plazo.

OTRAS VARIEDADES DEL DEPÓSITO

DEL DEPÓSITO IRREGULAR

Art. 862.- (Noción y régimen). I. En el depósito de dinero u otras cosas


fungibles, con facultad concedida para usar de lo depositado, el depositario
adquiere la propiedad del depósito y queda obligado a restituir otro tanto, en
género, calidad y cantidad iguales.
II. Se presume en el caso presente la facultad del depositario para usar del
depósito, si no consta lo contrario.
III. El depósito irregular se rige por las reglas del mutuo en cuanto sean
aplicables.
En lo referido a otras variedades que adopta el contrato de depósito, es irregular
el depósito de dinero o cosas fungibles, e impone al depositario la obligación
de devolver, la misma calidad, calidad, especie, medida, o moneda. Según el
Doctor Carlos Morales Guillen, En realidad, es más bien un préstamo, pues el
depositario adquiere el dominio de la cosa y sólo está obligado a devolver una
cantidad igual de la misma calidad.

Tiene aplicación práctica, en las diversas variedades del depósito bancario que
corresponde al dominio de aplicación de las leyes mercantiles (v. las
disposiciones consignadas en la concordancia).

En el depósito regular, el depositario es deudor de un bien cierto, determinado;


mientras que, en el irregular, lo es de género. En el depósito regular, el
depositario es un simple detentador precario, es decir solo tiene el dominio, le
falta el animus, mientras que en el segundo adquiere la propiedad de las cosas
que se le han entregado. Para el Dr. Jorge Guzmán Santiesteban, seria mas
propio hablar de libre disposición, no de propiedad del depósito, pues como esta
redactado el articulo 862 confunde el contrato de deposito con el de compra
venta.

“Este Art. confunde el contrato de depósito con el de compra venta,


cuando explica que el depositario adquiere el derecho de propiedad
de los bienes, si estos son fungibles o se trate de dinero en efectivo…”
31 Jorge Guzmán Santiesteban, Derecho Civil Tomo II De las Obligaciones y de los
Contratos en General, Pag, 293

Lo importante es tener en cuenta que en el contrato de depósito irregular, el


depósito versa sobre dinero en efectivo o cosas fungibles, donde el depositario
adquiere la libre disposición sobre dichos bienes y esta obligado a restituir otro
tanto, en genero, cantidad y calidad iguales.

Las normas que le son aplicables son las del mutuo o préstamo, por mandato
explícito de la regla (párrafo III).
DEL DEPÓSITO EN HOTELES Y POSADAS O TAMBOS

Art. 863.- (Responsabilidad por las cosas entregadas). Los hoteleros y


posaderos son responsables como depositarios por las cosas, efectos u otros
valores que se les entregan, o a sus dependientes autorizados o encargados de
recibirlos, por los huéspedes en sus establecimientos.

Los Hoteleros posaderos son civilmente responsables como depositarios por las
cosas, bienes, efectos personales, u otros valores, entregados en la
administración de dichos establecimientos para su guarda o custodia. No
importa si son recibidos personalmente por ellos o por su personal dependiente
encargados de recibirlos. Un aspecto importante es reclamar la constancia
correspondiente, para ofrecerlos como prueba.

Este tipo de contratos, dice Jorge Guzmán Santiesteban en su comentario


respecto del presente artículo, puede ser admitido como un contrato de
adhesión. Los contratos de adhesión son contratos redactados por una de las
partes involucradas de manera que la otra parte solo tiene dos opciones, puede
aceptar o rechazar el tenor del contrato.

“Este tipo de contratos podemos admitirlo como contrato de


adhesión, habida cuenta que la cámara nacional de hoteleros, y las
autoridades de migración ny turismo, han acordado y aprobado
reglamentos a los que tienen la obligación de someterse hoteleros y
pasajeros …” 32 Jorge Guzmán Santiesteban, Derecho Civil Tomo II De las
Obligaciones y de los Contratos en General, Pag, 294

Art. 864.- (Responsabilidad por las cosas llevadas al establecimiento). I.


Responden asimismo en caso de pérdida o deterioro, y hasta en monto máximo
equivalente a tres meses de hospedaje, por todas las cosas que los huéspedes
llevan corrientemente a esos establecimientos, aun cuando no las hubiesen
entregado.
II. La responsabilidad rige aun en el caso que el daño o pérdida haya sido
causada por extraños al establecimiento.

La responsabilidad de los propietarios de hoteles, alojamientos, posadas,


residenciales, etc. es mayor en caso de perdida o deterioro de bienes o
pertenencias de los huéspedes al interior del establecimiento, así no los hayan
depositado. Se deberá probar, sin embargo, que dicha perdida y/o deterioro fue
causada por personas extrañas al establecimiento. El limite de la indemnización,
es el equivalente a tres meses de hospedaje.

“…la responsabilidad emergente en estos casos, es de estricta


responsabilidad de los hoteleros, mucho mas si se considera que el
daño es emergente de terceras personas…” 33 Jorge Guzmán Santiesteban,
Derecho Civil Tomo II De las Obligaciones y de los Contratos en General, Pag, 295

Art. 865.- (Extensión de la responsabilidad). I. Los hoteleros y posaderos


responden, sin limitación alguna, si resulta culpa grave de ellos o sus
dependientes o si se han negado a recibir las cosas o efectos en custodia, sin
justo motivo.
II. Sin embargo, quedan libres de responsabilidad si el daño o pérdida se debe
a los acompañantes o visitantes del huésped, a culpa grave de éste, a hechos de
fuerza mayor o al vicio o naturaleza de la cosa.

La responsabilidad de los hoteleros y posaderos, se hace ilimitada cuando el


daño se genera por falta de previsión o producto de una mala administración del
establecimiento, o sin justificación alguna, personal encargado del
establecimiento, se habría negado a recibir los bienes de los huéspedes en
calidad de custodia. Sin embargo, quedan liberados de responsabilidad si el
daño o perdida es atribuible a culpa de los acompañantes de los huéspedes, por
culpa del mismo huésped o visitante o a hechos de fuerza mayor.

Art. 866.- (Exclusión de responsabilidad). I. Es nulo todo convenio o aviso por


el cual el hotelero o posadero excluya se responsabilidad, impuesta por los
artículos precedentes.
II. Pero si el cliente no da aviso al hotelero o posadero tan pronto como ha
descubierto el daño o pérdida, excluye la responsabilidad de éstos.

Es común advertir anuncios en los hoteles, alojamientos, etc., dando aviso de la


no responsabilidad del Establecimiento por la perdida y/o deterioro de todo bien
o efecto personal que no haya sido declarado a tiempo del registro de los
pasajeros, huéspedes o visitantes. El articulo 866 expresa de forma clara que es
nulo todo convenio o aviso que excluya la responsabilidad de los hoteleros o
posaderos impuesta por la ley. Sin embargo, de no darse aviso en forma
inmediata, una vez descubierto el daño o perdida se libera la responsabilidad de
los hoteleros o posaderos.
Art. 867.- (Aplicación por extensión). Las disposiciones precedentes serán
también aplicables a los casos de establecimientos o locales de clientela en que
se reciben efectos de los huéspedes y se los pone bajo el cuidado de los
dependientes.

La responsabilidad de los propietarios de otros establecimientos (discotecas,


restaurantes, clubes y otros establecimientos o locales donde concurra clientela,
en los que los clientes o visitantes puedan dejar prendas de valor, es la misma
que la responsabilidad de los hoteleros y posaderos.

DEPÓSITO EN ALMACENES GENERALES


Art. 868.- (Reglas aplicables). El depósito de cosas en almacenes generales
autorizados legalmente para ese efecto, se rige por las reglas del Código de
Comercio y leyes especiales y, en su defecto, por las reglas del depósito
voluntario.

El rubro comercial era el usuario común de este tipo de almacenes, personas


jurídicas o naturales dedicadas a este tipo de actividad comercial depositaban
para su custodia temporal (en tránsito) importantes stocks de productos de toda
naturaleza. Incluso parte del negocio de estos establecimientos era la garantía
que ofrecían estos almacenes para financiar el pago a plazos la misma
mercadería. (letras de cambio, pagares, etc.). Por ello las reglas del código de
comercio son las que rigen las

“Como su finalidad es de carácter lucrativo, mercantil, es natural, que su


reglamentación sea atribuida al dominio de aplicación de las leyes de
comercio...” Carlos Morales Guillen, Codigo Civil Concordado y Anotado con Arreglo a la Edicion
Oficial, Tomo I y II, Pag. 945
DEL SECUESTRO

Art. 869.- (Noción y clases de secuestro). I. El secuestro es el depósito de una


cosa litigiosa en poder de un tercero, hasta que se decida el litigio sobre la
cosa, para entregarla a quien corresponda.
II. Es convencional cuando todas las partes interesadas convienen en el
depósito; judicial, cuando lo ordena el juez.

El secuestro es el depósito de un bien mueble o inmueble litigioso, el mismo


que se deja en poder de un tercero, quien la guarda y custodia, hasta la decisión
del litigio, para restituirla a quien corresponda según la decisión del juez. Puede
ser convencional y judicial: convencional cuando tenga su origen en el acuerdo
de los litigantes y, judicial, en las decisiones del juez.

La diferencia única, con el depósito regular, es que éste cesa a requerimiento


del depositario. En cambio, el secuestro sólo puede extinguirse, cuando termina
la controversia judicial que lo motivó.

Jurisprudencia
1.- "El secuestro judicial de cosas muebles cuya propiedad o posesión
se litiga, teniendo por objeto consultar la seguridad de éstas,
separando a los interesados de su manejo y administración, debe
confiarse a un tercero en quien las partes han convenido, o que el juez
designa de oficio".
(G.J. Nº 298, p. 1966).
2.- "La retención judicial, legalizada en toda forma, produce los
efectos del secuestro convencional y constituye un verdadero
depósito, con las obligaciones impuestas al depositario".
(G.J. Nº 606, p. 9). Carlos Morales Guillen, Codigo Civil Concordado y Anotado con
Arreglo a la Edicion Oficial, Tomo I y II, Pag. 949

“…el secuestro constituye también una forma de depósito, con la


diferencia de que se trata de una cosa litigiosa, que se pone en
deposito cumpliendo una orden judicial en favor de una persona
abonada, solvente y con domicilio conocido, para que la entrega y
devuelva también por orden judicial, en el momento en que se decida
el litigio…” Jorge Guzmán Santiesteban, Derecho Civil Tomo II De las Obligaciones y
de los Contratos en General, Pag, 297
Art. 870.- (Derecho a retribución). I. El secuestro es remunerado, salvo
convenio en contrario.
II. El depositario tiene derecho por vía de compensación, en defecto de
retribución convenida, al cuatro por ciento, por una vez, si el depósito consiste
en dinero o alhajas; pero si fuera en fundo rústico o urbano, al cuatro por
ciento al año sobre su renta.

En consideración a la responsabilidad que asume el depositario en cuanto a la


guarda, custodia e incluso, en su caso, mantenimiento y conservación del bien
mueble o inmueble en depósito, el secuestro, al igual que el deposito voluntario
o necesario debe ser remunerado. La norma indica que, salvo pacto en contrario,
podría no serlo. Consideramos que en la actualidad es ilógico asumir este tipo
de responsabilidades sin retribución alguna.

El parágrafo II habla de que el depositario tiene derecho a compensación cuando


no se ha pactado una retribución en el contrato, esta compensación es del 4%,
por una sola vez, en caso de que los bienes confiados al depositario constituyan
joyas o dinero. Si el objeto del deposito fuera de un bien inmueble, la norma
señala que el depositario tendrá derecho a cobrar el 4% de la renta presunta
anual que puedan generar dichos inmuebles.

Al respecto, el Dr. Jorge Guzmán Santiesteban, hace notar que no siempre los
inmuebles producen algún tipo de renta, ya sea por arrendamiento u otro
concepto, conduciendo este aspecto a conflictuar la decisión del juez cuando
tiene que decidir sobre el monto que se tiene que compensar al depositario por
la custodia del bien inmueble. El propone que sería justo calcular el porcentaje
fijado por la ley (4% anual) tomando en cuenta el valor comercial del bien
inmueble para determinar el valor de la compensación al depositario en lugar
de tomar como base de cálculo la renta presunta que podría generar el bien o el
valor catastral del mismo que muchas se toma en cuenta en este tipo de causas.

“… en muchas oportunidades los inmuebles no producen renta


situación que aparece cuando el juez que conoce la causa tiene que
señalar el monto compensatorio” (…) “tal vez lo justo seria
reconocerles la compensación establecida en idéntico porcentaje,
tomando como base el precio real o sea el que rige en el mercado…”
Jorge Guzmán Santiesteban, Derecho Civil Tomo II De las Obligaciones y de los Contratos
en General, Pag, 298
Jurisprudencia
"Por mandato del art. 1319 (870) del c.c. el depositario tiene derecho
a la remuneración convenida por las partes en el acto del secuestro y
no habiendo dicho acuerdo, el 4% anual de la producción del
inmueble rústico objeto del secuestro".
(G.J. Nº 1232, p. 36) Carlos Morales Guillen, Codigo Civil Concordado y Anotado
con Arreglo a la Edicion Oficial, Tomo I y II, Pag. 950

Art. 871.- (Obligaciones del depositario). I. El secuestro convencional se rige


en lo demás por las disposiciones del depósito voluntario; pero el depositario
sólo puede restituir la cosa depositada una vez terminado el litigio, salvo caso
diverso por acuerdo de todas las partes o por motivo legítimo.
II. Puede también el depositario, si hay peligro inminente de deteriorarse la
cosa, adoptar las medidas que considere más aconsejables.

De acuerdo al artículo 871, En el secuestro convencional, las obligaciones del


depositario se rigen por lo dispuesto en las disposiciones del deposito
voluntario, con la excepción de que el depositario solo puede entregar el bien
con orden judicial una vez terminado el litigio.

Cuando hubiere peligro inminente de que el bien, objeto del secuestro, pueda
deteriorarse, el depositario esta facultado para adoptar las medidas que
considere aconsejables. Sin embargo, esta permisión concedida por la ley al
depositario no es específica los límites de esta facultad.

“…Como no se especifica claramente cuales podrían ser las medidas


mas aconsejables, podemos mencionar que incluso tendría la
posibilidad de vender lo depositado, siendo imposible que lo haga si
se trata de propiedad inmobiliaria (…) situación que podría ser
conflictiva en un supuesto de desastre u otro acontecimiento
semejante” Jorge Guzmán Santiesteban, Derecho Civil Tomo II De las Obligaciones y
de los Contratos en General, Pag, 299

Art. 872.- (Régimen del secuestro judicial). I. La autoridad judicial, puede


ordenar el secuestro de bienes en litigio, pero sólo en los casos previstos en el
Código de Procedimiento Civil.
II. El depositario es designado por el juez, excepto si los interesados convienen
en una persona, mas en ambos casos sujeta ésta a las reglas del secuestro
convencional.

El secuestro judicial solo puede ordenarse por el juez y solo en los casos que el
código procesal civil prevé. El depositario es designado por el juez, pero otorga
la facultad a los interesados a designar a una persona en consenso. Ambos casos
Se regirán por las normas del secuestro convencional.

“El régimen del secuestro será regido por las normas del secuestro
convencional.” Jorge Guzmán Santiesteban, Derecho Civil Tomo II De las
Obligaciones y de los Contratos en General, Pag, 299

Art. 873.- (Remoción del depositario). El depositario puede ser removido por
el juez, de oficio o a petición de parte, siempre que falte a alguno de los deberes
que, como tal, está obligado a cumplir.

Así como el juez tiene la facultad de elegir al depositario, también puede


disponer su remoción cuando el depositario falta a sus deberes, obligaciones y
responsabilidades. Sin embargo, se deberá justificar la remoción con prueba
licita y pertinente

“…si bien todo depositario puede ser removido por el juez oficio o a
petición de parte, cuando falta a sus deberes, esta facultad no es
discrecional y está sujeta a la prueba de los cargos que contra él se
formularen…) Carlos Morales Guillen, Codigo Civil Concordado y Anotado con
Arreglo a la Edicion Oficial, Tomo I y II, Pag. 952

Potrebbero piacerti anche